Download - UNIVERSIDAD CATÓLICA DE SANTIAGO DE
1
UNIVERSIDAD CATÓLICA DE SANTIAGO DE
GUAYAQUIL
FACULTAD DE CIENCIAS MÉDICAS
ESCUELA DE GRADUADOS
TESIS PREVIA A LA OBTENCIÓN DEL TÍTULO DE
ESPECIALISTA EN MEDICINA INTERNA
TEMA: “INFLUENCIA DEL TIPO DE TERAPIA ANTIRETROVIRAL DE
GRAN ACTIVIDAD (TARGA) EN LA EVOLUCIÓN DE LOS
PACIENTES CON VIH. HOSPITAL DE INFECTOLOGÍA “JOSÉ
DANIEL RODRÍGUEZ MARIDUEÑA”. GUAYAQUIL. 2009-2010’”
AUTORA:
Dra. Violeta del Rocío Vallejo Mena
DIRECTOR:
Dr. Stenio Cevallos Espinar
Guayaquil - Ecuador
2012
I
UNIVERSIDAD CATÓLICA DE SANTIAGO DE GUAYAQUIL
FACULTAD DE CIENCIAS MÉDICAS
ESCUELA DE GRADUADOS
Certificamos que el presente trabajo fue realizado en su totalidad por la Dra.
Violeta Del Rocío Vallejo Mena, como requerimiento parcial para la
obtención del Título de Especialista en Medicina Interna.
Guayaquil, a los 29 días del mes de Octubre año 2012
DIRECTOR DE LA TESIS:
Dr. Stenio Cevallos Espinar
DIRECTOR DEL PROGRAMA:
Dr. Alfredo Escala Maccaferri
REVISOR:
Dr. Xavier Landívar Varas
II
UNIVERSIDAD CATÓLICA DE SANTIAGO DE GUAYAQUIL
FACULTAD DE CIENCIAS MÉDICAS
ESCUELA DE GRADUADOS
DECLARCIÓN DE RESPONSABILIDAD
Yo, Violeta Del Rocío Vallejo Mena
DECLARO QUE:
El trabajo de Tesis “Influencia del Tipo de Terapia Antiretroviral de gran
actividad (TARGA) en la evolución de los pacientes con VIH. Hospital de
Infectología “José Daniel Rodríguez Maridueña”. Guayaquil 2009 – 2010”
previa a la obtención del Título de Especialista, ha sido desarrollado en base
a una investigación exhuastiva, respetando derechos intelectuales de
terceros conforme las citas que constan en el texto del trabajo, y cuyas
fuentes se incorporan en la bibliografía. Consecuentemente este trabajo es
de mi total autoría.
En virtud de esta declaración, me responsabilizo del contenido, veracidad y
alcance científico del Trabajo de Tesis mencionado.
Guayaquil, a los 29 días del mes de Octubre año 2012
EL AUTOR:
Violeta Del Rocío Vallejo Mena
III
UNIVERSIDAD CATÓLICA DE SANTIAGO DE GUAYAQUIL
FACULTAD DE CIENCIAS MÉDICAS
ESCUELA DE GRADUADOS
AUTORIZACIÓN
Yo, Violeta Del Rocío Vallejo Mena
Autorizo a la Universidad Católica de Santiago de Guayaquil, la publicación
en la biblioteca de la institución del trabajo de tesis de Especialización
titulado: “Influencia del Tipo de Terapia Antiretroviral de gran actividad
(TARGA) en la evolución de los pacientes con VIH. Hospital de Infectología
“José Daniel Rodríguez Maridueña”. Guayaquil 2009 – 2010”, cuyo
contenido, ideas y criterios son de mi exclusiva responsabilidad y total
autoría.
Guayaquil, a los 29 días del mes de Octubre año 2012
EL AUTOR:
Violeta Del Rocío Vallejo Mena
IV
Agradecimientos
A todos los que hicieron posible la realización de este trabajo, con
su contribución espontánea y desinteresada, en especial a mi
familia, mi Director de Tesis Dr. Stenio Cevallos y al personal
médico del Hospital de Infectología José Daniel Rodríguez
Maridueña.
Violeta Del Rocío Vallejo Mena
V
Dedicatoria
La concepción de este proyecto está dedicada a mis padres, pilares
fundamentales en mi vida. Sin ellos, jamás hubiese podido
conseguir lo que hasta ahora. Su tenacidad y lucha insaciable han
hecho de ellos el gran ejemplo a seguir y destacar, no solo para mí,
sino para mi hermana. También dedico este proyecto a mi hija
María Cristina, Mi Vida. Ella mi apoyo y aliento en todos los
momentos de decline y cansancio. A ellos este proyecto, que sin
ellos, no hubiese podido ser.
Violeta Del Rocío Vallejo Mena
VI
RESUMEN
Antecedentes: Se ha señalado que la evolución de los pacientes con VIH-
SIDA tiene relación con el tipo de tratamiento. El uso actual de TARGA se ha
relacionado con una mejor evolución de los pacientes, algunos han señalado
que algunos tipos de terapia antirretroviral tienen mejor respuesta que otros.
Sin embargo se ha cuestionado aquello, señalando que el pilar principal es el
estado inmunológico del paciente. Objetivos: Determinar la influencia del
tipo de TARGA en la evolución de los pacientes con VIH-SIDA atendidos en
el hospital de Infectología “José Daniel Rodríguez Maridueña” en la ciudad
de Guayaquil Metodología: Se realizó un estudio caso control en el que se
incluyeron pacientes que se encontraban recibiendo algún tipo de TARGA. La
muestra seleccionada fue distribuida en grupos de 65 pacientes que
evolucionaron desfavorablemente y 15 cuya evolución fue satisfactoria.
Análisis: estadístico: Para la comparación de las variables categóricas la
prueba de t de Student Fisher y para las variables númericas el Chi2 de
homogeneidad considerándose significativos valores de P < 0.05. Para
establecer el grado de asociación entre las variables numéricas se calculó el
índice R2. Resultados: Los pacientes que evolucionaron de manera
satisfactoria y aquellos que no tuvieron diferencias respecto al tipo de TARGA
empleado (P > 0.05). Los niveles de CD4 entre los pacientes del grupo control
antes del inicio de la TARGA fueron en promedio de 250 ± 135 células/mm3
vs. 31 ± 17 células/mm3 en el grupo caso (P 0,0003). El grado de asociación
entre los niveles de CD4 antes y después de la TARGA tuvo una asociación
buena (R2 0,522) Conclusión: No existe relación entre el tipo de TARGA y la
evolución. Los niveles de CD4 previo al inicio del TARGA determinan la
evolución.
Palabras clave: VIH-SIDA. Antirretrovirales. TARGA. Pronóstico.
VII
ABSTRACT
Background: It has been suggested that the evolution of patients with HIV-
AIDS is related to the type of treatment. Current use of HAART has been
associated with improved patient outcomes, some have noted that some types
are more responsive than others. However it has been questioned that, noting
that the main pillar of the patient's immune status. Objetive: To determine
the influence of type of HAART on the evolution of HIV-AIDS patients
treated at the Jose Daniel Rodriguez Hospital from Guayaqauil city
Methodology: A case control study which included patients who were
receiving some type of HAART. The sample was distributed in groups of 65
patients who progressed unfavorably and 15 whose outcome was satisfactory.
Statistics Analysis: For comparison of categorical variables the Student t
test and Fisher for the numeric variables of homogeneity Chi2 considered
significant at P <0.05. To establish the degree of association between
numeric variables R2 index was calculated. Results: Patients who
progressed satisfactorily and those who did not differ as to the type of
HAART used (P> 0.05). CD4 levels among patients in the control group
before the start of HAART were on average vs. 250 ± 135 cells/mm3. 31 ± 17
cells/mm3 in the case (P 0.0003). The degree of association between CD4
levels before and after HAART had a good association (R2 0.522)
Conclusion: There is no relationship between the type of HAART and
evolution. CD4 levels prior to initiation of HAART determine the outcome.
Keywords: HIV-AIDS. Antiretrovirals. HAART. Prognosis.
VIII
ÍNDICE DE CONTENIDOS pag.
1 INTRODUCCIÓN ......................................................................................... 1
2 EL PROBLEMA ........................................................................................... 3
2.1 Identificación, valoración y planteamiento ........................................... 3
2.2 Formulación......................................................................................... 3
3 OBJETIVOS GENERALES Y ESPECÍFICOS. .............................................. 4
3.1 General ................................................................................................. 4
3.2 Específicos. .......................................................................................... 4
4 REVISIÓN DE LITERATURA ...................................................................... 5
4.1 Marco Referencial ................................................................................. 5
4.2 Marco Teórico ..................................................................................... 11
4.2.1 El uso de TARGA como estrategia para detener el VIH –SIDA ...... 11
4.2.2 Eficacia de la TARGA..................................................................... 13
4.2.3 Inhibidores de proteasa: ................................................................ 14
4.2.4 Inhibidores de fusión: ................................................................... 15
Estos fármacos impiden la entrada del virus a la célula previniendo la
infección de células sanas entre ellos está la Enfuvirtida. ....................... 15
5 FORMULACIÓN DE LA HIPÓTESIS ......................................................... 19
6 METODO .................................................................................................. 20
6.1 Justificación de la elección del método ............................................... 20
6.2 Diseño de la investigación .................................................................. 20
6.2.1 Criterios y procedimientos de la selección de la muestra o
participantes del estudio ....................................................................... 20
6.2.2 Técnicas de análisis de la información .......................................... 23
7 PRESENTACIÓN DE RESULTADOS ........................................................ 24
8 CONCLUSIONES ....................................................................................... 31
9 VALORACIÓN CRÍTICA DE LA INVESTIGACIÓN .................................. 34
IX
ÍNDICE DE TABLAS
Tabla 6-1: Tabla de operacionalización de variables .......................... 22
X
ÍNDICE DE GRÁFICOS Gráfico 7-1: Pacientes ingresados al estudio según grupo de estudio y año de
comienzo de la TARGA ................................................................................ 24
Gráfico 7-2: Tipo de evolución de los pacientes con la TARGA ingresados en
el estudio ....................................................................................................... 25
Gráfico 7-3: Edad de los pacientes con TARGA distribuidos según tipo de
evolución ...................................................................................................... 26
Gráfico 7-4: Distribución de la muestra por sexo ......................................... 26
Gráfico 7-5: Procedencia de los integrantes del estudio según tipo de
evolución con la TARGA ............................................................................... 27
Gráfico 7-6: Tiempo del TARGA hasta la realización del control con medición
de niveles séricos de CD4 ............................................................................. 28
Gráfico 7-7: Distribución de la muestra según esquema de TARGA utilizado y
el tipo de evolución ...................................................................................... 29
Gráfico 7-8: Distribución de los niveles séricos de linfocitos CD4 antes de
iniciar el TARGA según la evolución posttratamiento. ................................. 30
Gráfico 7-9: Relación entre los niveles séricos de CD4 antes y después de la
TARGA ......................................................................................................... 30
XI
ANEXOS
Anexo 1: Base de datos ...................................................................... 42
1
1 INTRODUCCIÓN
El VIH-SIDA continua siendo un problema de Salud Pública en todo el
mundo con una connotación especial en países en vías de desarrollo como
algunos países en América Latina, donde por diversas causas2, se estima que
cerca de 1,7 millones de personas se encuentran infectadas por VIH1 con una
incidencia de aproximadamente 170,000 nuevos casos anuales3.
En Ecuador el panorama es sin embargo uno de los más
desalentadores de la región porque pese a tener actualmente un acumulado
de 19948 casos de VIH/SIDA4, en los últimos 2 años se registra una
incidencia elevada con una tasa del 0.3% al 5%5,6, es decir un promedio de
aproximadamente 800 casos nuevos/año.
Sin embargo actualmente la Terapia antirretroviral de Gran Actividad
(TARGA) ha logrado reducir o casi suprimir la replicación del VIH-1, lo que
se ha producido por la incorporación de nuevos fármacos y esquemas
terapéuticos7,8. Esto ha facilitado la reducción de las complicaciones
oportunistas (neoplasias e infecciones) en más del 50 %, con incremento
significativo de la supervivencia y de la mejoría de la calidad de vida9.
Sin embargo, no siempre se puede lograr el éxito del tratamiento de la
TARGA. Esta situación se define en 3 escenarios esenciales: a) Falta de
capacidad del tratamiento para disminuir la carga viral por debajo del límite
inferior de detección del sistema empleado, b) falta de aumento del conteo de
células CD4+ sobre el nivel basal y por encima del nivel de seguridad para
evitar infecciones oportunistas y c) fracaso en la detención de la progresión
de la enfermedad10.
El desarrollo de resistencia se considera la causa más importante de
fracaso terapéutico10,11 lo que también contribuyen la falta de adherencia a la
terapia, la intolerancia a la medicación, variaciones individuales de la
farmacocinética, interacciones medicamentosas, compartimientos llamados
2
"sitios santuarios", que por inaccesibles a la medicación sirven de reservorios
porque a ellos no llega o llega mal la mayoría de los antirretrovirales. Estos
sitios son el sistema nervioso central, testículos, próstata, retina y los
macrófagos. También contribuye al fracaso terapéutico la resistencia a la
fosforilación intracelular de los análogos de nucleósidos que solamente
actúan al ser fosforilados por las quinasas de las células en actividad12. En las
células donde no hay fosforilación (inactivas), el virus se mantiene viable10.
Esta variedad de factores intervinientes en el éxito o fracaso de la
TARGA hace que diversos informes muestren tasas diferentes de respuestas a
la terapéutica13-16, lo que de alguna manera señala el estado del tratamiento
en un región o institución, por lo que estos estudios se transforman en una
suerte de auditorías de los tratamientos empleados.
Los resultados que se presentan a continuación ayudan a establecer,
cuál es el verdadero papel del TARGA en el medio, y los aspectos que este
tiene que tener para que disminuya el riesgo de fracasos terapéuticos entre
pacientes tratados en esta casa de salud, evitando que el VIH-SIDA se
convierta en una condición crónica y manejable haciendo posible que se le
ofrezca un mejor pronóstico para el paciente y el ahorro de una importante
inversión económica. Sin embargo el tipo específico no tiene importancia
como sí el hecho de los valores de CD4 al inicio de este tipo de tratamiento.
3
2 EL PROBLEMA
2.1 Identificación, valoración y planteamiento
El hospital de Infectología ‘José Daniel Rodríguez Maridueña’ en la
ciudad de Guayaquil, es una de las instituciones de mayor importancia en la
lucha por la prevención y tratamiento del VIH-SIDA. Miles de pacientes con
esta enfermedad son atendidos anualmente en sus instalaciones mediante el
empleo de varios esquemas terapéuticos.
Lamentablemente hasta la fecha no se había realizado un informe que
muestre la respuesta de los pacientes a los diversos tipos de TARGA lo que
impide contestar el cuestionamiento respecto ¿cómo influye el tipo de
TARGA en la evolución de los pacientes con VIH-SIDA atendidos en este
centro de salud?
2.2 Formulación
¿Cuál es la TARGA que se relaciona con una mayor posibilidad de
evolución favorable entre los pacientes con VIH-SIDA atendidos en el
hospital de Infectología “José Daniel Rodríguez Maridueña” en la ciudad de
Guayaquil?
4
3 OBJETIVOS GENERALES Y ESPECÍFICOS.
3.1 General
Determinar la influencia del tipo de TARGA en la evolución de los
pacientes con VIH-SIDA atendidos en el hospital de Infectología “José Daniel
Rodríguez Maridueña” en la ciudad de Guayaquil.
3.2 Específicos.
• Caracterizar los TARGA que determinaron una evolución favorable de los
pacientes con VIH-SIDA, tratados en el hospital de Infectología ‘José
Daniel Rodríguez Maridueña’ en la ciudad de Guayaquil
• Caracterizar los TARGA que determinaron una evolución desfavorable de
los pacientes con VIH-SIDA, tratados en el hospital de Infectología ‘José
Daniel Rodríguez Maridueña’en la ciudad de Guayaquil
• Establecer el rol de los factores demográficos y clínicos en la evolución al
TARGA en pacientes con VIH-SIDA, tratados en el hospital de
Infectología “José Daniel Rodríguez Maridueña” en la ciudad de
Guayaquil
5
4 REVISIÓN DE LITERATURA
4.1 Marco Referencial
Hacia 1986 el trabajo de grupos de investigación de medio mundo ya
había conseguido una "foto" bastante clara de cómo era el VIH y cómo
conseguía reproducirse en las células que infectaba. El conocimiento
molecular de las células humanas y de los virus había avanzado
considerablemente justo en los años anteriores al SIDA, y ello permitió que
muchos científicos pioneros aplicaran su experiencia al conocimiento del VIH
y a la identificación de los posibles puntos vulnerables en su ciclo
reproductivo. Sólo así sería posible desarrollar medicamentos que, actuando
sobre tales puntos, impidieran la reproducción viral y frenaran la devastación
del sistema inmune de los pacientes 17,18.
Al igual que en otros retrovirus, la información genética del VIH está
encapsulada en tiras únicas de ARN, en lugar de tiras dobles de ADN como
sucede con la mayor parte de los seres vivos. El VIH infecta las células del
sistema inmune metiéndose en su material genético (en su ADN), pero para
ello necesita, entre otras cosas, transformar su ARN en ADN para poder
encajar con el de la célula en cuestión. Esta transformación, o trascripción, la
realiza un enzima del VIH llamado transcriptasa inversa, y la inhibición de
este enzima por medios farmacológicos se reveló como una forma de frenar la
replicación del VIH18.
El desarrollo de medicamentos contra patógenos virales era entonces
una ciencia incipiente, pero a finales de 1986 la colaboración entre los
científicos de los Institutos Nacionales del Cáncer de EE UU y de la compañía
farmacéutica Burroughs Wellcome produjo los primeros resultados positivos
de un ensayo clínico con pacientes con SIDA que recibían tratamiento con un
fármaco llamado AZT, un ‘Inhibidor de la Transcriptasa Inversa’ del VIH18.
La zidovudina, o AZT, o Retrovir según su nombre comercial, se había
6
sintetizado por primera vez en 1964 para su uso en oncología, pero no había
progresado por ese camino18,19. En pacientes con SIDA, el ensayo mencionado
reveló un total de 19 muertes en el grupo que había recibido placebo durante
seis meses, frente a un solo fallecimiento en el grupo de pacientes que había
recibido 1500mg de AZT al día durante el período del estudio. El ensayo se
interrumpió, puesto que podía ser no ético seguir proporcionando placebo a
uno de los grupos, y AZT se convirtió en marzo de 1987 –un tiempo récord–
en el primer fármaco aprobado para el tratamiento de pacientes con SIDA
por parte de la todopoderosa Agencia del Medicamento estadounidense, la
FDA 17.
Estos primeros resultados positivos impulsaron toda una serie de
estudios clínicos con AZT en distintos grupos de pacientes con infección por
VIH, incluidos aquellos que aún no estuvieran enfermos y quizá pudieran
retrasar su progresión tratándose antes de llegar a estarlo. En 1989 se dieron
a conocer los resultados del mayor ensayo clínico con AZT realizado hasta la
fecha: el ACTG 01920. Este estudio, llevado a cabo en pacientes VIH+ con
menos de 500 células CD4, encontró, tras un seguimiento de dos años
escasos, que el VIH de las personas que tomaron tratamiento con AZT de
inmediato progresaba más lentamente que el de quienes tomaron placebo18.
Aunque el ensayo no mostró beneficios de supervivencia, pronto se convocó
en EE UU un panel de expert0s que concluyó recomendando el tratamiento
con AZT «para tod0s l0s pacientes con VIH y menos de 500 linfocitos CD4»,
lo que en la práctica abrió las puertas para que el fabricante de AZT,
Burroughs Wellcome proclamara la utilidad de su fármaco para entre
100.000 y 200.000 pacientes con VIH –sólo en EE UU– y disfrutara de
enormes aumentos en el precio de sus acciones en bolsa 17, 19.
En Europa, tales recomendaciones se tomaron con bastante cautela, y
much0s a ambos lados del Atlántico cuestionaron los puntos débiles del
ACTG 019, dudando particularmente de que un seguimiento de dos años
resultara suficiente para valorar los beneficios y riesgos de una terapia como
el AZT, tan tóxica a las dosis entonces recomendadas. En 1993 y 1994, el hoy
7
histórico ensayo anglofrancés Concorde mostró, con datos preliminares y
luego completos, que el tratamiento temprano con AZT no ofrecía en
absoluto beneficios clínicos a l0s pacientes: al cabo de tres años de
seguimiento, un 18% de l0s pacientes estaba muerto o tenía SIDA, tanto si
había tomado el fármaco como si no. El problema no era AZT, sino que se
administrara solo 17.
En los últimos años de la década de los 80 y los primeros de la de los
90 la aceleración de los procedimientos de la FDA [véase caja final: ‘Una
viñeta histórica: los logros del activismo’], y el progreso de varios ensayos
sobre el tratamiento de las enfermedades oportunistas del VIH, permitió la
aprobación, o la autorización para su uso precoz, de varios fármacos
antirretrovirales contra el VIH y de otros para las enfermedades oportunistas
más amenazadoras: a finales de 1988 se aprueba el interferón para el
sarcoma de Kaposi18, y la distribución pre-aprobatoria de ganciclovir para la
infección por citomegalovirus (CMV); en junio de 1989 se aprueba la
pentamidina aerosolizada para el tratamiento de la neumonía PCP, y poco
después se autoriza el uso precoz de eritroproyetina en pacientes con anemia
por AZT; a finales de ese mismo año, la FDA autoriza el uso de un segundo
antirretroviral, la didanosina o ddI, para el tratamiento de pacientes con
SIDA que no toleraban AZT. En 1991 ddI recibe la aprobación plena de la
FDA, y el verano de este mismo año un tercer fármaco anti-VIH, zalcitabina
o ddC, recibe la suya 19.
Los tres (AZT, ddI y ddC) son de la misma familia, los inhibidores de la
transcriptasa inversa del VIH análogos de nucleósido (ITIN), pero el hecho
de que AZT no fuera ya el único fármaco disponible permitió el uso de otras
monoterapias así como de los primeros ensayos clínicos con combinaciones
de dos fármacos, que se esperaba pudieran ser menos tóxicas y más eficaces.
Los primeros resultados de ensayos clínicos con biterapias del VIH se
publicaron en 1992, y ese mismo año la FDA dio su visto bueno al uso de la
combinación de AZT y ddC para el tratamiento de personas con SIDA20.
8
La aprobación de cada uno de estos agentes traía consigo una cierta
esperanza renacida, pero lo cierto es que ninguna de las monoterapias o
biterapias probadas hasta entonces conseguía mostrar más que, en el mejor
de los casos, un limitado beneficio clínico para los pacientes. En 1993 se
celebró la IX Conferencia Internacional del SIDA en Berlín, Alemania. La
tensión entre científic0s, polític0s, compañías farmacéuticas y activistas
alcanzaba costos récord. L0s activistas criticaban la lentitud del progreso en
la investigación y del desarrollo de tratamientos realmente eficaces, y la
tibieza de los esfuerzos globales por frenar la epidemia18, 19.
L0s expert0s en salud pública describían alarmad0s la rapidez con que
el VIH continuaba expandiéndose por el mundo, particularmente entre los
países más pobres. A pesar de que durante esta conferencia se presentaron
los incipientes resultados positivos con las nuevas clases de fármacos que en
un par de años estaban destinadas a cambiar dramáticamente el panorama
terapéutico del VIH, el escepticismo y la impotencia acumulados tras años de
esperanzas frustradas era inmenso, y quienes allí estuvieron hablan de la
conferencia de Berlín como de uno de los momentos más deprimentes en la
historia de los tratamientos del VIH 17.
Tres años después del bajón de Berlín, en 1996, se celebró la
Conferencia de Vancouver, en Canadá, que posiblemente pase a la historia
del VIH como "la Conferencia del optimismo". ¿Qué había sucedido entre
tanto para justificar tanta esperanza? Al menos tres factores clave se dieron la
mano para ello en esos años cruciales 19,20.
Para empezar, en 1995 el doctor Ho presentó sus datos sobre las
dinámicas del VIH, demostrando la producción diaria desde el momento
mismo de la infección de unos 10.000 millones de nuevos virus. Las
partículas de VIH detectadas por las pruebas de carga viral no estaban
simplemente flotando en la sangre del paciente sin hacer nada, sino que
acababan de ser producidas por una célula infectada y estaban a punto de
infectar cuantas células CD4 encontraran en su camino por el torrente
9
sanguíneo. La aparición de las enfermedades oportunistas asociadas a SIDA,
por lo tanto, no era el resultado de una súbita reemergencia de un virus
"latente" durante años, sino de la destrucción progresiva del sistema inmune
por parte del VIH 17.
En segundo lugar, en el mismo año 1996 el doctor e investigador de EE
UU John Mellors dio a conocer sus extraordinarios datos de cohorte sobre el
impacto de las mediciones de carga viral en la historia natural del VIH. A
partir de entonces, las pruebas de carga viral, que hoy nos resultan tan
familiares, se convirtieron progresivamente en el método principal para
evaluar la eficacia antiviral de los tratamientos del VIH, tanto en los ensayos
clínicos como en la práctica médica rutinaria. Los efectos terapéuticos de los
fármacos ya podían medirse en semanas, incluso en días, mientras que hasta
entonces los únicos marcadores disponibles eran el declive de los CD4, que
sucedía a lo largo de meses o de años, y la progresión a SIDA o muerte18,20.
Y en tercer lugar, la aparición de los primeros informes sobre los
beneficios del uso de combinaciones de Tratamientos Antirretrovirales de
Gran Actividad, o TARGA, empezando con la introducción del Inhibidor de la
Proteasa (IP) saquinavir en 1995 y siguiendo poco después con la de los
también IP ritonavir e indinavir y la del Inhibidor de la Transcriptasa Inversa
No análogo de Nucleósido (ITINN) nevirapina18. Durante la Conferencia
sobre Retrovirus y Enfermedades Oportunistas de 1996, celebrada en
Washington, EE UU20, se presentaron los resultados del primer estudio con
una combinación triple de tratamiento que contenía el IP indinavir: las
diapositivas que mostraban el espectacular descenso y mantenimiento de una
supresión máxima de la replicación viral en pacientes con SIDA hipnotizaron
a la audiencia como un espejismo en el desierto 17.
Y a los pocos meses llegó la Conferencia de Vancouver, y se
presentaron más resultados sorprendentes de ensayos clínicos con distintas
combinaciones TARGA. El mismo David Ho dio a conocer su "hipótesis de la
erradicación" del VIH, que según sus modelos matemáticos podría ser posible
10
tras varios años de TARGA de éxito. La euforia, y también la confusión, eran
generales.19
Algunos medios de comunicación, claro está, no tardaron en
proclamar que "El Fin del SIDA" estaba próximo, y el 30 de diciembre de
1996, la revista Time nombró al doctor Ho "Hombre del Año"18. Para
entonces, much0s ya habían sido testigos de la "resurrección" de pacientes
con SIDA terminal gracias al uso de los nuevos "cócteles", y comenzaban a
aparecer los primeros informes que reflejaban una clara tendencia
descendente del número de enfermedades oportunistas, de hospitalizaciones
y de muertes asociadas al SIDA17.
En los meses que siguieron tal tendencia positiva aparecería
repetidamente confirmada por datos que mostraban hasta un 80% de
descenso en tales ocurrencias mórbidas y en las tasas de fallecimiento. La
restauración inmune facilitada por los regímenes TARGA parecía completa, y
l0s científic0s comenzaron a mostrar que era seguro interrumpir la profilaxis
contra las enfermedades oportunistas más comúnmente asociadas al SIDA.
El túnel en el que se habían dejado la vida legiones de personas VIH+ parecía
tocar a su fin 17, 19.
A ocho años vista desde la aparición de los primeros regímenes
TARGA los conocimientos sobre la mejor forma de utilizarlos, así como el
número de posibles fármacos y combinaciones posibles, han aumentado muy
considerablemente [véase artículo en página 42: ‘TARGA año 2003’] 18, y está
claro que su uso ha tenido un impacto esencialmente positivo. De hecho, y si
exceptuamos la vacuna contra la gripe tipo B, parece que TARGA sería la
intervención médica contra un agente infeccioso que ha tenido más éxito en
los últimos 30 años 17, 20.
Desde mediados de la década de los 90, las curvas de mortalidad por
SIDA en los países donde su uso es posible han descendido muy
significativamente, como lo ha hecho el número de hospitalizaciones por
11
complicaciones asociadas al SIDA y el número de nuevos diagnósticos de
SIDA en sí mismo. Estos descensos tienen que ver con la mejoría del
tratamiento y la prevención de las enfermedades oportunistas, sin duda. Sin
embargo, en estos años también se ha aprendido que TARGA no ha
conseguido los objetivos más optimistas planteados por algun0s científic0s
en su día, y menos aún los de algunos medios de comunicación. Sus límites,
entre tanto, resultan cada día más patentes 19,20.
4.2 Marco Teórico 4.2.1 El uso de TARGA como estrategia para detener el VIH –SIDA
Mientras que una verdadera cura para el VIH / SIDA sigue siendo
difícil de alcanzar, notables avances en el tratamiento del VIH se han logrado
en las últimas dos décadas. El más significativo es el desarrollo de la terapia
antirretroviral altamente activa (HAART), una combinación de fármacos
antirretrovirales que suprimen la replicación del VIH.
Sin embargo la aplicación de TARGA hoy sigue siendo deficiente. Esto
es particularmente evidente entre las personas que tienen dificultad para
acceder a este tratamiento, que a menudo tienen problemas adicionales
relacionados con la dependencia de las drogas, enfermedad mental, su escasa
educación e inestabilidad de lugar donde vivir. El Centro BC para la
Excelencia (BC-CFE) ha demostrado que el enfoque actual de la TARGA,
mediante la espera pasiva a que las personas infectadas por el VIH busque
pruebas y atención, debe ser reemplazado con el ofrecimiento activo de las
pruebas, junto con el compromiso de las iniciativas de atención con TARGA y
con el apoyo de todos los que necesitan atención médica. Este último enfoque
debería ser altamente rentable como una estrategia para controlar la
morbilidad y la mortalidad relacionada al VIH / SIDA.
La TARGA se convirtió en el estándar de atención en las naciones
desarrolladas en todo el mundo después de la Conferencia Internacional del
SIDA en Vancouver en 1996. Dentro de los meses en que se recibe TARGA, la
12
morbilidad y mortalidad se reducen significativamente en los pacientes
tratados, lo que permite mejoras en la calidad y la duración de vida de los
individuos infectados por VIH. En la Columbia Británica, en 1999, el Centro
BC para la Excelencia (BC-CFE) en VIH / SIDA documento una reducción del
85% de la mortalidad por VIH / SIDA entre los pacientes involucrados en el
tratamiento21.
Más recientemente, se han presentado pruebas de que la supresión de
la carga viral por el TARGA ha logrado un impacto significativo en la
transmisión del VIH. En concreto, en agosto de 2006, se dio la expansión de
la cobertura de TARGA a todos aquellos que lo necesitan como una estrategia
clave para reducir drásticamente la transmisión del VIH a las personas en
riesgo. Se propuso además que la expansión de la TARGA, además de
prevenir la morbilidad y la mortalidad del SIDA, lograría la disminución de
costos ya que virtualmente eliminaría la transmisión vertical del VIH, y
reduciría drásticamente la transmisión del VIH por todas las rutas22.
La capacidad poderosa y sostenida de la terapia TARGA para suprimir
la replicación viral es responsable de la disminución del riesgo de
transmisión del VIH entre las personas VIH positivas tratadas. La evidencia
que apoya esta asociación se pueden encontrar fácilmente en los estudios de
transmisión vertical, donde el uso de TARGA ha llevado a la prevención casi
total de la transmisión del VIH de la madre infectada al recién nacido.
Además, entre las parejas serodiscordantes (uno infectado y una pareja no
infectada) la transmisión es una función directa del nivel de viremia en el
miembro infectado de la pareja, y este disminuye efectivamente a niveles muy
bajos (más de un 90%) con TARGA por lo tanto reduce drásticamente el
riesgo de transmisión.
Más recientemente, se publicó el primer estudio que demuestra el
papel de la TARGA en la prevención de la transmisión en usuarios de drogas
inyectables en el Downtown Eastside de Vancouver23. A nivel poblacional, la
BC-CFE ha documentado que la utilización de TARGA se asoció con una
13
reducción aproximada del 50% en la incidencia del VIH en la Columbia
Británica entre 1996 y 1999, cuando el TARGA fue introducida por primera
vez, en aproximadamente un 10% entre 2004 y 2009, resultado de una mayor
expansión de la cobertura de TARGA. 24
La propuesta de la AC-de la CFE de la utilización de "tratamiento como
prevención" fue considerada inicialmente como controversial, sin embargo,
esta noción ha ganado el apoyo de la comunidad internacional, incluida la
Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Programa Conjunto de las
Naciones Unidas para el VIH / SIDA ( ONUSIDA). En enero de 2009, el
programa de la OMS el SIDA publicó un artículo independiente 25 . En
febrero de 2009, una cumbre internacional en Vancouver convocado por la
Sociedad Internacional del SIDA, el Banco Mundial y el Fondo Mundial, con
el apoyo de la Agencia de Salud Pública de Canadá y con la participación de la
OMS, el ONUSIDA, el PEPFAR, la Iniciativa Clinton, Médicos sin Fronteras,
el Instituto Nacional de Salud, y otras instituciones internacionales que se
dedican a la investigación farmacéutica, entre otros actores clave, trazó el
curso para una mayor expansión del TARGA en el mundo, desarrollando la
iniciativa "tratamiento como prevención".
Hoy en día, una sinergia ha surgido entre las nuevas tendencias en las
pautas de tratamiento y el papel de la TARGA en la prevención de la
transmisión del VIH26. Las nuevas directrices fomentan el tratamiento
temprano con TARGA, incluso con altos conteos de células CD4. Esto ofrece
una oportunidad única para ampliar la cobertura de TARGA para el beneficio
de cada paciente con el fin de la prevención secundaria. 27 Por lo tanto, hay
que implementar la detección temprana de personas infectadas con VIH a
través de prácticas de pruebas de detección y luego ofrecer el tratamiento con
TARGA para optimizar la prevención de la transmisión de VIH / SIDA, la
morbilidad y mortalidad.
4.2.2 Eficacia de la TARGA
14
Se conoce como TARGA a la combinación de 3 o 4 fármacos
antirretrovirales que actúan en varias etapas del ciclo vital del VIH. Estas
drogas pertenecen a 5 categorías diferentes, las cuales difieren en su
mecanismo de acción, son: (A) inhibidores de la transcriptasa reversa; (B)
inhibidores de proteasa; (C) inhibidores de fusión; (D) inhibidores de entrada
y (E) inhibidores de la integrasa 36,37.
La transcriptasa reversa o inversa
Es una enzima viral que el VIH requiere para su reproducción. La
inhibición de esta enzima impide el desarrollo de ADN viral basado en su
ARN. Existen tres clases:
• Inhibidores análogos nucleósidos, entre los que se encuentran:
Zidovudina (ZDV) un análogo de la timidina. Didanosina (DDI) análogo
de la adenosina. La Zalcitabina (DDC) análogo de pirimidina. Estavudina
(D4T) análogo de la timidina. Lamivudina (3TC) análogo de citidina.
Abacavir (ABC) análogo de guanosina. Emtricitabina (FTC) análogo de
citidina y disoproxil fumarato o tenofovir (TDF)
• Inhibidores de transcriptasa no nucleósidos: Nevirapina, Efavirenz y
Etravirina.
4.2.3 Inhibidores de proteasa:
La proteasa es una enzima requerida por el VIH para el ensamblaje
final de los viriones, su inhibición resulta en inhibición de la replicación viral.
entre estos fármacos se encuentran: Saquinavir, Ritonavir, Indinavir,
Nelfinavir, Lopinavir, darunavir y Atazanavir.
15
4.2.4 Inhibidores de fusión:
Estos fármacos inhiben la fusión del virus VIH1 a la célula evitando su
penetración y replicación. Entre ellos está la Enfuvirtida.
Inhibidores de entrada:
Son anticuerpos dirigidos contra los co-receptores CCR5, que
bloquean la unión de la GP120 al receptor de la célula y de esta forma el VIH1
no logra entrar a la célula, y esta se mantendrá intacta y continuará con sus
funciones normales. Esto ofrece una gran ventaja, pues los actuales
antirretrovirales actúan dentro de la célula cuando el VIH ya la ha infectado.
Además, pueden ser bien tolerados por el paciente con pocos o ningún efecto
secundario. Estos anticuerpos son una alternativa al tratamiento del VIH
multiresistente, con tropismo al correceptor CCR5 36,37.
Inhibidores de la integrasa:
Son medicamentos que evitan la acción de la integrasa, selectivos
únicamente al VIH-1. Son potentes antirretrovirales y se ha demostrado
cierta eficacia como monoterapia. Entre ellos se encuentra: Raltegravir y
Elvitegravir. Recientemente se han introducido preparados que contienen
varios principios activos en una sola cápsula o comprimido.
Con los actuales regímenes antirretrovirales no se puede alcanzar la
completa erradicación de la infección por el VIH. Esto se debe
principalmente a que el haz de células T CD4 infectadas latentemente se
establece durante las primeras etapas de la infección aguda por VIH, y
persiste con una larga vida media, incluso con supresión prolongada de la
viremia plasmática38-40. Por lo tanto, las principales metas que guían la
decisión de iniciar la terapia antirretroviral son: a) suprimir al máximo y
durablemente la carga viral plasmática del VIH, b) reducir la morbilidad
asociada al VIH y prolongar la supervivencia, c) mejorar la calidad de vida, d)
restaurar y preservar la función inmune, y e) prevenir la transmisión del
16
VIH41 .
La supresión del VIH con TARGA puede también disminuir la
inflamación y la activación inmune que se piensa contribuye a las más altas
tasas de co-morbilidades vasculares y de otro tipo que se reportan en
pacientes infectados con el VIH. Una supresión máxima y durable de la
viremia plasmática también retarda o previene la selección de mutaciones
que confieren resistencia, preserva el número de células T CD4, y confiere
beneficios clínicos sustanciales42. Alcanzar una supresión viral máxima con la
terapia inicial requiere el uso de regímenes de antirretrovirales con al menos
dos y preferiblemente tres drogas activas de múltiples clases. Cuando no se
alcanza inicialmente una supresión máxima o esta se pierde, se requiere
entonces cambiar a un nuevo régimen con al menos dos drogas activas. El
creciente número de drogas y clases de estas, hacen que la meta en todos los
pacientes sea la supresión viral por debajo de los límites de detección, incluso
en individuos con resistencia a las drogas, ya sea adquirida o primaria. La
reducción de la carga viral por debajo de los límites de detección en pacientes
que no han sido previamente sometidos a tratamiento, usualmente se da
dentro de las primeras 12 a 24 semanas de terapia41.
Existen varios predictores del éxito de la terapia, estos incluyen: alta
potencia del régimen antirretroviral, excelente adherencia al régimen de
tratamiento43, baja viremia de base o inicial44, conteo inicial de células CD4
mas altos (>200 cells/mm3) 45, y rápida reducción de la viremia en respuesta
al tratamiento46. Alcanzar las metas del tratamiento requiere algunas veces
balancear consideraciones que pueden ser contradictorias. Los médicos
tratantes y los pacientes deben trabajar juntos para definir estrategias
individualizadas para lograr las metas del tratamiento41.
Varios regímenes de preferencia o alternativos son recomendados.
Muchos de estos regímenes tienen una eficacia comparable pero varían en
algún grado en la frecuencia de las dosis, en el número de pastillas, la
interacción entre las drogas, y los efectos colaterales potenciales. Un régimen
17
debe adaptarse a cada paciente para aumentar la adherencia y así mejorar el
resultado de la atención. La adaptación de cada régimen se basa en
consideraciones como efectos colaterales esperados, conveniencia,
comorbilidades, interacción con medicamentos concomitantes y, cuando
están disponibles, evaluación genotípica de resistencia a las drogas antes del
tratamiento. Otro factor importante en el éxito del tratamiento es la
adherencia, pues una adherencia subóptima puede resultar en una reducida
respuesta al tratamiento. Una adherencia incompleta se puede presentar
como resultado de regímenes de medicamentos demasiado complejos,
factores asociados al paciente como abuso activo de sustancias y depresión,
problemas con los sistemas de salud; incluyendo interrupciones en el acceso
a los medicamentos e inadecuada educación sobre el tratamiento y apoyo.
Las condiciones que promueven la adherencia se deben maximizar antes y
después de la iniciación de la terapia antirretroviral41.
Un número de exámenes de laboratorio son importantes para la
evaluación inicial de un paciente infectado con el VIH. Cuando se entra a un
programa de atención, durante el seguimiento si la terapia aun no se ha
iniciado, y antes y después del comienzo de esta o el cambio de terapia para
evaluar la eficacia virológica e inmunológica de la TARGA, así como también
monitorear anormalidades de laboratorio que puedan estar asociadas con la
terapia. Rutinariamente se utilizan dos marcadores para evaluar la función
inmune y los niveles de viremia del VIH: el conteo de células CD4 y la carga
viral (RNA plasmático del VIH). Cuando está disponible, se debe usar un test
de resistencia para guiar la selección del régimen antirretroviral tanto en
pacientes que no han sido sometidos a tratamiento como en los que ya han
sido tratados.
Otros exámenes se recomiendan pero su utilidad se ve limitada por la
disponibilidad de tecnologías para su realización en lugares con escasos
recursos, estos son: ensayo de tropismo viral antes de iniciar una terapia con
antagonistas del receptor CCR5, y test de HLA-B*5701 antes de iniciar terapia
con Abacavir41.
18
La carga viral (RNA del VIH en plasma) se debe medir en todos los
pacientes como análisis de base y luego regularmente, recomendable cada 6
meses especialmente en pacientes que están en tratamiento, porque la carga
viral es el indicador más importante de respuesta a la terapia antirretroviral.
Diferentes estudios han demostrado una asociación significativa entre la
disminución de la carga viral y la mejoría en los resultados clínicos42. Por tal
motivo, la carga viral sirve como un marcador de respuesta al tratamiento y
puede ser útil en la predicción de la progresión clínica43-45. El cambio mínimo
que es considerado significativo es uno de tres veces en la carga viral (2
desviaciones estándar), o un cambio de 0.5 log10 copias/ml. Una meta clave
de la terapia es la supresión de la carga viral por debajo de los limites de
detección (debajo de 40-75 copias/ml en la mayoría de ensayos disponibles
comercialmente).
La supresión de la carga viral generalmente se logra entre 12 y 24
semanas en la mayoría de pacientes que adhieren a su régimen antirretroviral
y quienes no albergan mutaciones que confieran resistencia a las drogas
prescritas, aunque en algunos pacientes puede tomar más tiempo.
5 FORMULACIÓN DE LA HIPÓTESIS
“La TARGA con empleo de inhibidores de la transcriptasa reversa no
análogos de nucleósidos se relaciona con una mayor posibilidad de evolución
favorable de los pacientes con VIH-SIDA atendidos en el hospital de
Infectología ‘José Daniel Rodríguez Maridueña’ en la ciudad de Guayaquil”
20
6 MÉTODO
6.1 Justificación de la elección del método
Se realizó un estudio de tipo caso control, ya que las condiciones de
exposición se produjeron en todos los individuos. Se realizó a partir de una
población cerrada y una vez que se eligió la base del estudio, se procedió al
examen de los individuos. Los controles se eligieron al azar en una base de
datos y la información se recogió (como en los estudios de cohortes) antes de
la identificación de los casos.
Esto implicó el relleno del formulario y eventuales correcciones,
después de lo cual los formularios se almacenaron sin que los datos originales
se hubieran clasificado. Los resultados de pruebas de laboratorio y exámenes
clínicos complementarios se archivaron de forma similar como datos sin
procesar. Los materiales se almacenaron previamente al análisis. El
seguimiento de la evolución de la enfermedad del VIH-SIDA se llevó a cabo
como en el caso de los estudios de cohortes. Todos los casos de evolución
adversa o favorable en el estudio debieron ser identificados
6.2 Diseño de la investigación 6.2.1 Criterios y procedimientos de la selección de la muestra o
participantes del estudio
La población diana estará constituida por los pacientes con VIH-SIDA,
de cualquier sexo y edad que se encuentren con tratamiento TARGA. La
población de estudio deberá cumplir con los siguientes criterios de selección:
Grupo de casos:
• Criterios de inclusión
• Pacientes que no evolucionaron de manera favorable (carga viral mayor
a 500 copias por mililitro, Conteo de CD4 < 500 células por mililitro)
21
• Sintomático.
• Infección de VIH confirmada por examen de Western blot
• Conteo de células CD4 antes del tratamiento.
• Pacientes con régimen completo de la terapia antirretroviral
• Sin régimen de TARGA anterior
• Criterios de exclusión
• Pacientes cuyos datos clínicos no se encuentran completos.
Grupo de controles
• Criterios de inclusión:
• Pacientes que evolucionaron de manera favorable (carga viral menor a
500 copias por mililitro, Conteo de CD4 ≥ 500 células por mililitro)
• Sintomático.
• Infección de VIH confirmada por examen de Western blot
• Conteo de células CD4 antes de la TARGA
• Medición de la carga viral
• Pacientes con régimen completo de la terapia antirretroviral
• Criterios de exclusión
• Pacientes cuyos datos clínicos no se encuentran completos
• Sin régimen anterior de TARGA
La selección de la muestra se realizó por aleatorización sistemática, se
escogieron entre la población de estudio 65 pacientes que evolucionaron
desfavorablemente (Caso) y 15 pacientes que evolucionaron de manera
adecuada (Control).
22
6.2.2 Variables
Variables Dimensiones Indicadores Tipo de variables
Independiente
*Tipo de TARGA
*3TC+D4T+LPV/R
*Tipo de sustancia activa
*Cualitativa Nominal
*3TC+ABC+EFV *3TC+ABC+LPV/R *3TC+D4T+EFV *3TC+DDI+EFV *AZT+3TC+EFV *AZT+3TC+LPV/R
Dependiente
*Evolución
*No adecuado (< 500 ce/mm3) *Niveles de
CD4/mm3 *Cuantitativa continua *Adecuado (≥ 500
ce/mm3) Intervinientes
*Sexo *Masculino *Características fenotípicas
*Nominal dicotómica *Femenino
*Edad
*10-19
*años de vida *Cuantitativa continua
*20-29 *30-39 *40-49 *50-59 *60-69
Procedencia
*Guayas *Provincia de residencia habitual
*Cualitativa nominal
*Manabí *Santa Elena *Los Ríos
*Año de atención *2009 *Registro del año de atención
*Cuantitativa ordinal *2010
*Intervalo de control de evolución
*1-6 *meses transcurridos entre el inicio del tto y el control
*Cuantitativa continua
*7-12 *13-18 *9-24
*Niveles CD4 pretratamiento
*0-99
*niveles de CD4/mm3.
*Cuantitativa continua
*100-199 *200-299 *300-399 *400-499
Tabla 6-1: Tabla de operacionalización de variables
23
6.2.4 Técnicas de análisis de la información
El diseño de la base de datos se efectuó en una hoja electrónica
generada por Excel del paquete de Office 2010 para la plataforma de
Windows 7, el procesamiento de los datos se realizó empleando el software
estadístico PASW Statistics 18.
Para el análisis estadístico se emplearon los siguientes métodos y
pruebas estadísticas. Para la evaluación del tratamiento de las características
clínicas y etarias se realizó empleando medidas de estadística descriptiva
(tales como media, desviación estándar y varianza) tasas y frecuencias. Para
la comparación de las variables categóricas la prueba de t de Student Fisher y
para las variables númericas el Chi2 de homogeneidad considerándose
significativos valores de P < 0.05. Para establecer el grado de asociación entre
las variables numéricas se calculó el índice R2.
7 PRESENTACIÓN DE RESULTADOS
En el año 2009 ingresaron la mayor parte de los pacientes que
constituyeron el grupo caso, mientras que los componentes del grupo
control ingresaron en proporciones similares en 2009 y 2010 (Gráfico 7-1)
Gráfico 7-1: Pacientes ingresados al estudio según grupo de
estudio y año de comienzo de la TARGA
Fuente: Base de datos - Registro Hospitalario.
La mayor parte de los pacientes que cumplieron con los criterios de
selección tuvieron una evolución desfavorable (n= 65). Los pacientes con
evolución adecuada después de la TARGA fue una menor proporción (n=
15) (Gráfico 7-2)
82%
18%
53%
47%
0%
10%
20%
30%
40%
50%
60%
70%
80%
90%
2009 2010
caso control
25
Gráfico 7-2: Tipo de evolución de los pacientes con la TARGA
ingresados en el estudio
Fuente: Base de datos - Registro Hospitalario.
La mayoría de los pacientes incluidos en el grupo caso tenían una
edad de 20 a 29 años (n= 24), y en este grupo etario también se incluyeron
el mayor número de integrantes del grupo control (n= 9). La edad
promedio para el primer grupo fue de 33,46 ± 9,79 años, mientras que
para el grupo control fue de 30,07 ± 6,76 años. Esta diferencia no fue
estadísticamente significativa (P > 0.05) (Gráfico 7-3)
19%
81%
Adecuado No adecuado
26
Gráfico 7-3: Edad de los pacientes con TARGA distribuidos
según tipo de evolución
Fuente: Base de datos - Registro Hospitalario.
La distribución por sexo, mostró que la mayor parte de los pacientes
del grupo caso (n= 43) y del grupo control (n= 9) eran de sexo masculino,
Por lo que no se registró diferencia estadísticamente significativa (P >
0.05)
Gráfico 7-4: Distribución de la muestra por sexo
Fuente: Base de datos - Registro Hospitalario.
3%
37%32%
22%
5%2%0%
60%
33%
7%0% 0%
0%
10%
20%
30%
40%
50%
60%
70%
10-19 20-29 30-39 40-49 50-59 60-69Años
caso control
66%
34%
60%
40%
0%
10%
20%
30%
40%
50%
60%
70%
masculino femeninoGénero sexual
caso control
27
Tanto en los pacientes en los que del grupo caso como en los pacientes
del grupo control, la provincia de procedencia más frecuente fue la de Guayas
(n = 58 y n = 13 respectivamente). No existió diferencia estadísticamente
significativa. (P > 0.05) (Gráfico 7-5)
Gráfico 7-5: Procedencia de los integrantes del estudio según
tipo de evolución con la TARGA
Fuente: Base de datos - Registro Hospitalario
El tiempo de transcurrido desde el inicio de la TARGA hasta que se
realizó el control de los niveles de CD4 en la mayoría de los pacientes para
ambos grupos fue de 1 a 6 meses. Entre los pacientes del grupo control la
mayoría tenía menos de 7 meses (n = 9), mientras que en el grupo caso
generalmente tenían entre 7 y 24 meses. El promedio de meses transcurridos
para el grupo de evolución desfavorable fue de 11,1 ± 6,3 meses, mientras que
para aquellos que cuya evolución fue favorable fue de 7,3 ± 5,4 meses,
diferencia que no fue estadísticamente significativa. (P > 0.05) (Gráfico 7-6)
89%
2% 3%6%
87%
7% 7%0%
0%
10%
20%
30%
40%
50%
60%
70%
80%
90%
100%
Guayas Manabí Santa Elena Los Riós
caso control
28
Gráfico 7-6: Tiempo del TARGA hasta la realización del control
con medición de niveles séricos de CD4
Fuente: Base de datos - Registro Hospitalario.
Los pacientes que evolucionaron de manera satisfactoria y aquellos
que no lo hicieron tuvieron proporciones similares en los diferentes
esquemas de TARGA, lo cual no representó diferencia estadísticamente
significativa (P > 0.05) La combinación de zidovudina (AZT) con efavirenz
(EFV) y la lamivudina (3TC) fue la combinación más utilizada por ambos
grupos, caso (n= 42) y control (n= 12). Otro esquema que se empleó con
frecuencia fue el de 3TC junto a abacavir (ABC) y EFV (n= 9 y 2
respectivamente) (Gráfico 7-7).
37%
17%
25%22%
60%
20%
13%
7%
0%
10%
20%
30%
40%
50%
60%
70%
1-6 7-12 13-18 19-24meses
caso control
29
Gráfico 7-7: Distribución de la muestra según esquema de
TARGA utilizado y el tipo de evolución
Fuente: Base de datos - Registro Hospitalario
La medición de los niveles celulares séricos de linfocitos T CD4 entre
los pacientes que evolucionaron de forma favorable antes del inicio de la
TARGA fueron en promedio de 250 ± 135 células/mm3, mientras que el
recuento entre los pacientes que evolucionaron de manera desfavorable fue
de 31 ± 17 células/mm3. Esta diferencia fue estadísticamente significativa (P
0,0003) (Gráfico 7-8)
2%
14%
6%2%
8%
65%
5%0%
13%
0% 0% 0%
80%
7%
0%
10%
20%
30%
40%
50%
60%
70%
80%
90%
Tipo de TARGA
caso control
30
Gráfico 7-8: Distribución de los niveles séricos de linfocitos CD4
antes de iniciar el TARGA según la evolución posttratamiento.
Fuente: Base de datos - Registro Hospitalario
Las variaciones en los niveles celulares de linfocitos T CD4 antes del
tratamiento se asociaron en más del 50% (R2= 0,52) con las variaciones de
niveles de CD4 posterior a TARGA (Gráfico 7—9).
Gráfico 7-9: Relación entre los niveles séricos de CD4 antes y
después de la TARGA
Fuente: Base de datos - Registro Hospitalario
28%
38%
22%
11%2%
7%0%
7%
13%
73%
0%
10%
20%
30%
40%
50%
60%
70%
80%
0-99 100-199 200-299 300-399 400-499
caso control
R² = 0,522
0
500
1000
1500
2000
2500
0 100 200 300 400 500 600
31
8 ANÁLISIS E INTERPRETACIÓN DE RESULTADOS
Aunque estudios como el de Julg y cosl, (48) han encontrado que no es
importante los niveles de carga viral ni los niveles de CD4 para iniciar la
TARGA ya que inclusive encuentran asombroso que algunos pacientes con
señales de intensa inmunodepresión respondan de manera adecuada estos
tipos de tratamiento, la presente revisión no encontró vinculación alguna
entre el tipo de esta terapia y la evolución.
En los resultados del estudio se pudo observar que los niveles de CD4
es de importancia para establecer el momento de iniciar el tratamiento
aunque este sea un TARGA.
Por ejemplo en un estudio de cohorte efectuado por Sterne y cols, (49)
y en donde se evaluó la supervivencia en función del recuento de células CD4
al inicio del tratamiento, demostró que existía una importante ventaja de
comenzar el tratamiento cerca de las 350 células /microlitros.
Otros estudios de este mismo diesño como el de Kitahata y cols. (50),
ha demostrado que la terapia iniciada con valores de recuentos altos de CD4
se asocia con la normalización más frecuente de recuento de estas células y
una disminución de la mortalidad.
Inclusive el estudio de Lichtenstein y cols, (51) indica una menor
riesgo de enfermedades como la neuropatía periférica, anemia y la
insuficiencia renal, en comparación con el inicio de tratamiento en un
recuento de CD4 inferior a 350 células / l.
Sin embargo los estudios aun no están de acuerdo respecto al límite
para iniciar la terapia antirretroviral, incluida la TARGA. Por ejemplo en el
estudio de cohorte de Jaén y cols, (52) efectuado en 2008, se pudo observar
que el tratamiento antirretroviral se asocia con beneficios de supervivencia en
los pacientes asintomáticos con un recuento de CD4 inferior a 200 células /l
32
pero no confirma el nivel óptimo para iniciar la terapia antirretroviral en
pacientes asintomáticos con un recuento de CD4 superior a 200 células /l.
33
9 CONCLUSIONES
Se puede concluir que el tipo de TARGA no influye de manera
significativa en la evolución del paciente con SIDA ya que tanto en el grupo
de pacientes que evolucionaron de manera favorable como en el que no lo
hicieron los esquemas fueron los mismos.
Los que se asoció de manera significativa fueron los valores en los
niveles de Linfocitos T CD4 antes del tratamiento. Como se pudo observar en
el grupo de pacientes que evolucionaron mejor después de la TARGA los
valores de CD4 fueron inicialmente más altos, mientras que en los pacientes
que la evolución fue desfavorable iniciaron esta terapia antirretroviral con
valores iniciales de CD4 muy bajos. Inclusive puede observarse que las
elevaciones en los niveles celulares de CD4 posterior al tratamiento se
asocian a los niveles de estas líneas linfocíticas previo a este, así en aquellos
con mayor número de células CD4 la evolución fue mejor con aumento de
progresivo de sus niveles.
Las recomendaciones son:
• Dar énfasis al suministro y administración de TARGA de manera continua
para promover el apego al tratamiento por parte de los pacientes y
evaluación de la efectividad de las terapias sugeridas como primera línea
de tratamiento.
• Prever el uso de TARGA en pacientes con niveles elevados de CD4
generalmente con niveles de CD4 por encima de 250 o 300.
• Realizar un estudio para establecer el punto de corte más adecuado para
iniciar TARGA.
34
10 VALORACIÓN CRÍTICA DE LA INVESTIGACIÓN
El diseño retrospectivo del estudio posee información limitada sobre el
tiempo de evolución de la infección por VIH de cada uno de los pacientes,
hecho que también sustenta la disminución de la efectividad de esta terapia
farmacológica en nuestro medio.
35
REFERENCIAS BIBLIOGRAFIA
1. UNESCO. Estrategia de la UNESCO para el VIH y el SIDA en América
Latina y el Caribe. México. UNESCO. 2007
2. Cohen J. The Overlooked Epidemic. Science, 2006;313:468-9
3. ONUSIDA. Situación de la Epidemia de SIDA. Ginebra, ONUSIDA. 2006.
4. MSP. Número de casos reportados acumulados en adultos y niños de
VIH/SIDA por años 1984 – 2009. Programa Nacional de control del VIH-
SDA. Ecuador. 2010.
5. ONU (2008). Informe sobre desarrollo humano 2007/2008 y el estado
del mundo- Anuario económico geopolítico mundial
6. MSP. Información sobre VIH-SIDA. 2008-2009. Programa Nacional de
Prevención y control del VIH-SIDA. Ecuador 2009.
7. Carpenter CC, Cooper DA, Fischl MA, Gatell JM, Garzzard BG, Hammer
SM, et al. Antiretroviral therapy in adults: updated recommendations of
the International AIDS Society - USA Panel. JAMA 2000;283 (3):381-90.
8. Scherey G. The HIV Trial Guide. A guide to major studies, trials and
acronyms of HIV anti-retroviral therapy. Alphen a/d Rijn. The
Netherlands: Van Zuiden Communications BV; 2002: 3-14.
9. US Department of health and Human Services and Henry J Kaiser Family
Foundation. Guidelines for the Use of Antiretroviral Agents in HIV-
Infected Adults and Adolescents. Published at: http://www.hivatis.org/.
(actualizado Feb 4 2002; citado 10, feb 2011).
10. Erice A, Moreno S, Gatell JM. Significado clínico de la resistencia del VIH
a los antirretrovirales. En: Resistencia del VIH a los fármacos
antirretrovirales. Barcelona: Ediciones Antares; 1999: 123-31.
11. Gunthard H, Wong J, Ignacio C, Gautelli JC, Riggs NL, Havlir DV, et al.
HIV replication and genotypic resistance in blood and lymphonodes after
a year of potent antiretroviral therapy. J Virol 1998;72 (3):2422-8.
12. American Foundation for AIDS Research (amfAR). A guide to
international HIV/AIDS Research, Treatment and Clinical Trials. Salvage
Options and Goals. Summer 2002. Publisher at: www.amfar.org
36
13. Ruibal-Brunet I, Cuevas MT, Díaz-Torres H, Villahermosa ML, Noa-
Romero E, Vázquez de Parga E, et al. Genotypic resistance mutations to
antiretroviral drugs in HIV-1B and non-B subtypes from Cuba. Pam Am J
Public Health 2001;10 (39):174-9
14. Lisziewicz J, Rosenberg E, Lieberman J,Jessen H, Lopalco L, Siliciano R,
et al. Control of HIV despite the iscontinuation of antiretroviral therapy.
N engl J Med 1999;340:1683-4.
15. García F, Plana M, Ortiz GM, Bonhoeffer S, Soriano A, Vidal C, et al. The
virological and inmunological consequences of structured treatment
interruptions in chronic HIV-1 infection. AIDS 2001;15 (9):F 29-40
16. Izopet J, Massip P, Souyris C, Sandres K, Puissant B, Obadia M, et al.
Shift in HIV resistance genotype after treatment interruption and short-
term antiviral effect following a new salvage regimen. AIDS
2000;14:2247-55
17. Shernoff M. Smith R. HIV treatments: a history of scientific advance,
michael shernoff and raymond Disponible en:
www.thebody.com/bp/jul01/treatments.html
18. NIH. In their own words, nih researchers recall the early years of aids
http://aidshistory.nih.gov/home.html
19. Barlett J. HIV: Twenty years in Review
www.hopkins-aids.edu/publications/report/july01_6.html
20. Moriarty TJ. HIV viral load: a better litmus test for infection, rna-pcr
assay significantly more sensitive, tj moriarty,
http://www.chronicillnet.org/online/viral_load.html
21. Montaner et al, El caso de la ampliación del acceso a la terapia
antirretroviral de gran actividad para frenar el crecimiento de la epidemia
del VIH. Lancet 2006; 368 (9534): 531-536.
22. Lima et al, mayor acceso a terapia antirretroviral altamente activa: una
estrategia poderosa para frenar el crecimiento de la epidemia del VIH.
Journal of Infectious Diseases. 2008, Vol. 198 (1): 59-67.
23. Wood et al, British Medical Journal, 2009. Longitudinal de la comunidad
del VIH en plasma-1RNA concentraciones y la incidencia del VIH-1 entre
37
los usuarios de drogas inyectables: estudio prospectivo de cohorte. BMJ
2009; Vol 339 (b1649): doi: 10.1136.
24. Montaner et al, The Lancet, 2010. Asociación de cobertura de la terapia
antirretroviral de gran actividad, la carga viral de la población, y cada año
nuevos diagnósticos de VIH en la Columbia Británica, Canadá: un estudio
basado en la población. Lancet 2010; Vol. 376 (9740): 532-539.
25. Granich et al, The Lancet, 2009. Universal de pruebas voluntarias del VIH
con terapia antirretroviral de inmediato como una estrategia para la
eliminación de la transmisión del VIH: un modelo matemático. Lancet
2009; 373 (9657): 48-57.
26. Thompson et al. JAMA 2010. El tratamiento antirretroviral de adultos la
infección por VIH: 2010 Recomendaciones del Panel Internacional AIDS
Society EE.UU.. JAMA 2010; 304 (3): 321-333.
27. Lima et al. PLoS One 2010. La ampliación del tratamiento TARGA a todas
las personas actualmente cubiertas por la NIC-2008 EE.UU. directrices
en la Columbia Británica, Canadá. PLOS ONE. Junio de 2010; Vol. 5 (6):
e10991.
28. Ministerio de la Protección Social. Plan nacional de respuesta ante el VIH
y el SIDA. Colombia 2008-2011 Bogotá D. C. Enero de 2008.
29. Ministerio de la Protección Social. Guía para el manejo de VIH/SIDA
basada en la evidencia Colombia. 2003.
30. Joint United Nations Programme on HIV/AIDS (UNAIDS). 2008 Report
on the Global AIDS Epidemic. Geneva, Switzerland: World Health
Organization; 2008.
31. Calleja JM, Walker N, Cuchi P, et al. Status of the HIV/AIDS epidemic
and methods to monitor it in the Latin America and Caribbean region.
AIDS 2002;16(suppl ):S3–S12.
32. Vogel M, Schwarze-Zander C, Wasmuth JC, Spengler U, Sauerbruch T,
Rockstroh JK. The treatment of patients with HIV. Dtsch Arztebl Int
2010; 107(28–29): 507–16.
33. Quinn TC.HIV epidemiology and the effects of antiviral therapy on long-
term Consequences. AIDS. 2008 ; 22(Suppl 3): S7–12.
38
34. Centers for Disease Control and Prevention (CDC). AIDS surveillance –
general epidemiology (through 2005) slide set. CDC; Atlanta, GA: 2007.
35. Volberding PA, Deeks SG. Antiretroviral therapy and management of HIV
infection. Lancet. 2010 ;376(9734):49-62.
36. Ray S, Fatima Z, Saxena A. Drugs for AIDS. Mini Rev Med Chem.
2010;10(2):147-61.
37. Ghosh RK, Ghosh SM, Chawla S. Recent advances in antiretroviral drugs.
Expert Opin Pharmacother. 2010 Vol. 0, No. 0 :1-16.
38. Finzi D, Hermankova M, Pierson T, et al. Identification of a reservoir for
HIV-1 in patients on highly active antiretroviral therapy. Science.
1997;278(5341):1295-1300.
39. Finzi D, Blankson J, Siliciano JD, et al. Latent infection of CD4+ T cells
provides a mechanism for lifelong persistence of HIV-1, even in patients
on effective combination therapy. Nat Med. 1999;5(5):512-517.
40. Wong JK, Hezareh M, Gunthard HF, et al. Recovery of replication-
competent HIV despite prolonged suppression of plasma viremia.
Science. 1997;278(5341):1291-1295.
41. Panel on antiretroviral guidelines for adults and adolescents. Guidelines
for the use of antiretroviral agents in HIV-1-infected adults and
adolescents. Department of Health and Human Services. December 1,
2009; 1-161. Disponible en: Paterson
http://www.aidsinfo.nih.gov/ContentFiles/AdultandAdolescentGL.pdf.
Consultado en (Agosto 5 de 2010).
42. Murray JS, Elashoff MR, Iacono-Connors LC, et al. The use of plasma HIV
RNA as a study endpoint in efficacy trials of antiretroviral drugs. AIDS.
1999;13(7):797-804.
43. Hughes MD, Johnson VA, Hirsch MS, et al. Monitoring plasma HIV-1
RNA levels in addition to CD4+ lymphocyte count improves assessment of
antiretroviral therapeutic response. ACTG Protocol Virology Substudy
Team. Ann Intern Med. 1997;126(12):929-938.
44. Marschner IC, Collier AC, Coombs RW, et al. Use of changes in plasma
levels of human immunodeficiency virus type 1 RNA to assess the clinical
39
benefit of antiretroviral therapy. J Infect Dis. 1998;177(1):40-47.
45. Thiébaut R, Morlat P, Jacqmin-Gadda H, et al. Clinical progression of
HIV-1 infection according to the viral response during the first year of
antiretroviral treatment. Groupe d’Epidémiologie du SIDA en Aquitaine
(GECSA). AIDS. 2000; 14(8):971-978.
46. Aberg JA, Kaplan JE, Libman H, et al. Primary care guidelines for the
management of persons infected with human immunodeficiency virus:
2009 update by the HIV medicine Association of the Infectious Diseases
Society of America. Clin Infect Dis. 2009;49(5):651-681.
47. Thompson MA, Aberg JA, Cahn P et al. Antiretroviral treatment of adult
HIV Infection: 2010 Recommendations of the International AIDS Society
USA Panel. JAMA. 2010;304(3):321-333.
48. Julg B, Pereyra F, Buzon MJ, Piechocka-Trocha A, Clark MJ, et al.
Infrequent recovery of HIV from but robust exogenous infection of
activated CD4(+) T cells in HIV elite controllers. Clin Infect Dis.
2010;51:233–238
49. Sterne JA, May M, et al. When To Start Consortium. Timing of initiation
of antiretroviral therapy in AIDS-free HIV-1-infected patients: A
collaborative analysis of 18 HIV cohort studies. Lancet. 2009;373:1352–
63.
50. Kitahata MM, Gange S, Moore R., North American AIDS Cohort
Collaboration on RES and Design Initiating rather deferring HAART at a
CD4+ count >500 cells/mm3 is associated with improved survival; 16th
Conference on Retroviruses and Opportunistic Infections; Montreal.
February 8 to 11, 2009; (Abst)
51. Jaén Á, Esteve A, Miró JM, et al. Determinants of HIV progression and
assessment of the optimal time to initiate highly active antiretroviral
therapy: PISCIS Cohort (Spain) J Acquir Immune Defic Syndr.
2008;47:212–20.
52. Lichtenstein K, Armon C, Buchacz K, et al. Initiation of antiretroviral
therapy at CD4 cell counts ≥350 cells/mm3 does not increase incidence or
risk of peripheral neuropathy, anemia, or renal insufficiency. J Acquir
40
Immune Defic Syndr. 2008;47:27–35.
42
Nª
H.C
.U.
SEXO
EDA
D
ESQ
UEM
A .A
CTU
AL
PRO
VIN
CIA
FEC
HA
INIC
IO A
RV
mes
es d
esde
el i
nici
o
tipo
evol
ucio
n
CD
4 an
tes
del t
to
CD
4 a
ctua
l
1 542662 M 22 AZT+3TC+EFV GUAYAS 20/03/2009 6 m 24 25
2 48615 M 37 AZT+3TC+EFV GUAYAS 01/04/2010 5 m 35 52
3 113230 M 40 3TC+DDI+EFV GUAYAS 21/01/2010 7 m 90 116
4 98075 F 31 3TC + D4T +LPV / R GUAYAS 06/02/2009 5 m 58 116
5 104724 F 23 3TC +ABC + EFV MANABI 06/02/2009 6 m 23 117
6 113096 M 26 AZT+3TC + EFV GUAYAS 07/05/2010 6 m 100 133
7 111049 M 33 3TC+DDI+EFV GUAYAS 04/09/2009 6 m 25 138
8 120913 M 37 AZT+3TC + EFV GUAYAS 28/05/2010 3 m 28 1409 100177 M 46 3TC +ABC + EFV GUAYAS 16/01/2009 17 m 85 147
10 104782 F 25 AZT+3TC + EFV GUAYAS 09/01/2009 1 m 68 151
11 77741 M 20 AZT+3TC + EFV GUAYAS 27/03/2009 13 m 56 155
12 105016 M 25 AZT+3TC + EFV GUAYAS 27/02/2009 6 m 100 158
13 1403027 M 44 3TC +ABC + EFV GUAYAS 09/02/2009 10 m 123 166
14 104266 F 25 3TC+ABC+LPV/R GUAYAS 06/02/2009 5 m 142 167
15 105194 M 35 AZT+3TC + EFV GUAYAS 20/02/2009 21 m 120 185
16 104129 F 38 AZT+3TC + EFV GUAYAS 09/01/2009 3 m 135 19017 61555 F 40 AZT+3TC + EFV GUAYAS 03/04/2009 18 m 120 19518 59174 M 24 AZT+3TC + EFV GUAYAS 02/07/2009 16 m 165 20319 106883 M 34 3TC+ABC+LPV/R GUAYAS 27/03/2009 15 m 12 20520 94716 M 32 AZT+3TC + EFV GUAYAS 27/03/2009 20 m 200 21321 101561 M 63 3TC +ABC + EFV GUAYAS 20/02/2009 6 m 203 21322 82812 M 45 AZT+3TC + EFV SANTA ELENA 04/09/2009 5 m 200 22923 112582 F 46 3TC+DDI+EFV GUAYAS 18/09/2009 14 m 425 23424 107085 F 21 3TC +ABC + EFV GUAYAS 03/04/2009 17 m 62 23725 101154 M 24 AZT+3TC + EFV GUAYAS 09/01/2009 5 m 145 244
Anexo 1: Base de datos
43
Nª
H.C
.U.
SEXO
EDA
D
ESQ
UEM
A .A
CTU
AL
PRO
VIN
CIA
FEC
HA
INIC
IO A
RV
mes
es d
esde
el i
nici
o
tipo
evol
ucio
n
CD
4 an
tes
del t
to
CD
4 a
ctua
l
26 94629 M 41 AZT+3TC + EFV GUAYAS 06/04/2009 14 m 100 24427 79012 M 48 AZT+3TC + EFV GUAYAS 27/03/2009 12 m 210 24628 119734 F 26 AZT+3TC + EFV GUAYAS 27/08/2010 2 m 198 25829 00-945 M 33 AZT+3TC + EFV GUAYAS 20/03/2009 15 m 265 26030 100054 F 37 AZT+3TC+LPV/R GUAYAS 20/01/2009 5 m 152 26631 116838 M 27 AZT+3TC + EFV GUAYAS 09/07/2010 3 m 178 26932 112851 M 38 AZT+3TC + EFV GUAYAS 01/04/2010 3 m 123 27533 111090 M 37 3TC+DDI+EFV GUAYAS 07/08/2009 12 m 12 28134 87071 M 40 AZT+3TC + EFV GUAYAS 09/01/2009 16 m 251 28435 110751 M 51 AZT+3TC + EFV GUAYAS 05/02/2010 2 m 189 28536 90932 F 30 AZT+3TC + EFV GUAYAS 20/02/2009 20 m 178 28837 109879 M 25 3TC+D4T+EFV GUAYAS 30/10/2009 7 m 156 28838 81041 F 25 AZT+3TC + EFV GUAYAS 16/01/2009 16 m 200 29239 97661 M 33 AZT+3TC + EFV GUAYAS 03/04/2009 19 m 225 29440 76308 M 24 AZT+3TC + EFV GUAYAS 16/01/2009 16 m 125 29541 103073 F 30 AZT+3TC + EFV LOS RIOS 03/04/2009 19 m 124 30442 110916 M 27 AZT+3TC + EFV GUAYAS 05/06/2009 16 m 265 31143 107159 F 40 AZT+3TC + EFV GUAYAS 03/04/2009 19 m 300 31444 97004 M 32 AZT+3TC + EFV GUAYAS 20/03/2009 19 m 129 31445 103815 F 37 AZT+3TC + EFV GUAYAS 11/06/2010 5 m 199 31646 107392 M 53 AZT+3TC + EFV GUAYAS 03/04/2009 6 m 265 31947 105343 M 46 AZT+3TC+LPV/R GUAYAS 03/04/2009 15 m 300 32148 63525 F 23 3TC+DDI+EFV GUAYAS 05/02/2010 9 m 320 32449 110765 M 35 3TC +ABC + EFV GUAYAS 07/08/2009 13 m 314 32650 99860 M 28 AZT+3TC + EFV LOS RIOS 09/01/2009 21 m 300 327
44
Nª
H.C
.U.
SEXO
EDA
D
ESQ
UEM
A .A
CTU
AL
PRO
VIN
CIA
FEC
HA
INIC
IO A
RV
mes
es d
esde
el i
nici
o
tipo
evol
ucio
n
CD
4 an
tes
del t
to
CD
4 a
ctua
l
51 87441 F 44 AZT+3TC + EFV GUAYAS 03/04/2009 19 m 298 33052 106523 F 26 AZT+3TC + EFV GUAYAS 20/02/2009 5 m 265 33353 35008 M 44 3TC+ABC+LPV/R GUAYAS 06/03/2009 7 m 169 33554 103189 F 28 AZT+3TC+LPV/R LOS RIOS 09/01/2009 19 m 214 33955 93168 F 30 AZT+3TC + EFV GUAYAS 09/01/2009 8 m 254 34556 104652 M 34 3TC +ABC + EFV LOS RIOS 06/02/2009 19 m 326 34957 113436 M 20 AZT+3TC + EFV GUAYAS 17/03/2010 3 m 21 35358 102962 M 26 3TC +ABC + EFV SANTA ELENA 06/02/2009 19 m 25 35459 105628 M 18 AZT+3TC + EFV GUAYAS 20/02/2009 7 m 102 36860 112272 F 43 AZT+3TC + EFV GUAYAS 02/07/2010 3 m 12 37061 105834 F 24 AZT+3TC + EFV GUAYAS 03/04/2009 8 m 36 40762 46201 M 54 AZT+3TC + EFV GUAYAS 09/01/2009 22 m 42 44463 95391 M 37 AZT+3TC + EFV GUAYAS 30/03/2009 19 m 123 45064 102646 M 16 3TC+ABC+LPV/R GUAYAS 09/01/2009 8 m 120 46465 106663 M 29 3TC +ABC + EFV GUAYAS 27/03/2009 15 m 325 47966 110650 F 29 AZT+3TC+EFV GUAYAS 02/07/2009 13 b 142 51267 96316 F 33 AZT+3TC+EFV STA. ELENA 03/04/2009 19 b 298 53468 56650 F 31 3TC+ABC+EFV GUAYAS 30/04/2009 3 b 489 53569 104633 M 48 AZT+3TC+EFV GUAYAS 20/02/2009 10 b 496 53870 103437 M 29 3TC+ABC+EFV GUAYAS 02/07/2010 3 b 422 55171 111557 M 25 AZT+3TC+EFV GUAYAS 18/09/2009 6 b 489 56072 104276 M 29 AZT+3TC+EFV GUAYAS 20/02/2009 16 b 398 57873 74441 M 34 AZT+3TC+EFV GUAYAS 05/02/2010 5 b 489 58774 81708 F 23 AZT+3TC+EFV MANABI 06/02/2009 9 b 499 60975 105950 M 35 AZT+3TC+LPV/R GUAYAS 06/02/2009 11 b 497 622
45
Nª
H.C
.U.
SEXO
EDA
D
ESQ
UEM
A .A
CTU
AL
PRO
VIN
CIA
FEC
HA
INIC
IO A
RV
mes
es d
esde
el i
nici
o
tipo
evol
ucio
n
CD
4 an
tes
del t
to
CD
4 a
ctua
l
76 107600 M 36 AZT+3TC+EFV GUAYAS 10/08/2010 4 b 499 106977 124326 M 20 AZT+3TC+EFV GUAYAS 25/06/2010 2 b 488 161878 113592 F 24 AZT+3TC+EFV GUAYAS 24/09/2010 2 b 490 167979 93493 M 26 AZT+3TC+EFV GUAYAS 24/09/2010 3 b 498 183280 48679 F 29 AZT+3TC+EFV GUAYAS 24/08/2010 3 b 389 2000