Significados de la prevención de la delincuencia que construyen los profesionales que
ejecutan programas de prevención de delincuencia juvenil en Pereira1
Means of delinquency prevention that build professionals that implement youthful
delinquency prevention programs in Pereira
Daniela Duque Rubio2
Universidad Católica de Pereira
John Alexander Ospina Muñoz3
Resumen
Este estudio busca comprender los significados de la prevención de la delincuencia juvenil que
construyen los profesionales que ejecutan estos programas de prevención. La
investigación es cualitativa con un diseño fenomenológico y se entrevistó a 8 profesionales que
ejecutan programas de prevención de la delincuencia en las principales entidades de prevención,
estas entrevistas fueron trascritas, codificadas y analizadas por medio de la unidad de análisis de
los significados, las categorías previamente establecidas y emergentes en el análisis. Se encontró
que los profesionales significan la prevención desde la prevención primaria y tienen una noción
1 Resultado del proyecto de grado para optar al título de psicología en la Universidad Católica de Pereira 2 Daniela Duque Rubio, Estudiante de psicología 3 John Alexander Ospina Muñoz, Tutor del proyecto de grado, Psicólogo de la Universidad Católica de Pereira,
Magister en psicología jurídica; Docente de la Universidad Católica de Pereira.
del joven delincuente como víctima y no victimario, además de que la familia y las instituciones
educativas son la clave para la prevención primaria de la delincuencia.
Palabras claves: Prevención primaria, Delincuencia juvenil, Significados.
Abstract
This study seeks to understand the meanings of the prevention of youthful delinquency built by
professionals that run such programs. The research is quialitative with phenomenological design,
the work unit were 8 professional tunning prevention programs crime in major prevention
agencies, semi-structured interviews were permorfed and transcribed, coded and analyzed by the
analysis unit of meaning, the categories previously established and emerging in the analysis. It was
found that professionals mean prevention from primary prevention and have a notion of the young
delinquient as a victim and not the perpetrator, and that the family and educational institutions are
key to primary prevention of crime.
Key words: Primary prevention, Youthful Delinquency, Meanings.
Introducción
Se denomina delincuencia juvenil a las conductas de los menores de 18 años de edad que se
encuentran tipificadas en la ley penal como delitos y según Trojanowicz & Morash en (Frías y
Corral, 2009) abarca conductas que son consideradas como trasgresiones a las normas sociales. El
9,8% de los delitos en Colombia son cometidos por niños y adolescentes, lo que significa que entre
60 y 70 menores de edad son detenidos cada día en el país, cifra de las más elevadas en la región
latinoamericana (Medicina Legal y Ciencias Forenses, 2015). En el periodo 2007-2016 se registran
en Colombia 226.996 casos de jovenes de 14 a 17 años aprehendidos por el Sistema de
Responsabilidad Penal para Adolescentes (SRPA) ocupando el departamento de Risaralda el sexto
lugar en casos regionales con mayores ingresos al SRPA con 9.720 casos; entre los municipios de
Risaralda, Pereira data un total de 1.263 casos en el periodo 2012-2015, mayor que en los otros
municipios, siendo los delitos de mas ocurrencia el hurto con un 31% y la violencia intrafamiliar
con un 28% (SRPA, 2016).
Estas cifras sobre la delincuencia conducen a la necesidad de una comprensión completa del
fenomeno que se oriente hacia su prevención, ya que dicha situación constituye reacciones de
estrés y tensión, creando contextos de peligro en las calles de las ciudades y generando una
dinámica comunitaria particular caracterizada por violencia, procesos de justicia por cuenta propia,
quebrantamiento de lazos sociales, cambios en las dinámicas familiares, e instauración del temor
y del silencio como defensa ante la violencia. (Suarez, Monsalvo & Martínez, 2014; Echeverri,
Meneses, Restrepo & Marín, 2013), por ello la importancia de un abordaje psicológico, pues los
comportamientos delictivos implican interacciones, pensamientos y elecciones, emociones,
recompensas, rasgos y demás (Redondo, 2007).
Específicamente la prevención en la delincuencia juvenil es realizada en Colombia desde un
enfoque de derechos, acorde con la Convención sobre los Derechos del Niño de las Naciones
Unidas de 1989, de allí que el adolescente no reciba las mismas consecuencias que un adulto, que
tienda a ser menos reconocido a nivel social en la delincuencia y que además quienes intervienen
y ejecutan los programas de prevención deban abordar este fenómeno de una manera diferente.
Desde estos programas de prevención se han observado resultados satisfactorios en la disminución
del índice de reincidencia a un 13% en Pereira (SRPA, 2016), quiere decir que se ha trabajado
notablemente en Colombia desde la prevención secundaria y terciaria (después de la comisión del
delito (Caplan, 1989)). Sin embargo en relación a la prevención primaria (antes de la comisión del
delito (Caplan, 1989)) de acuerdo a las cifras ya mencionadas, cada año ingresan jóvenes sin
antecedentes penales al SRPA, lo cual muestra que aunque desde los diversos programas del país
se trabaje la prevención, no son tan visibles los resultados en prevención primaria y dicha
prevención se puede ver como una salida a la problemática de la delincuencia juvenil.
Para Bloom (1996) la prevención primaria implica prevención, protección y promoción, y supone
actuar antes de que alguna condición de riesgo se convierta en un problema, lo que significa, antes
de que aparezca. Desde este enfoque se encuentran distintos Países que documentan óptimos
resultados en sus planes estratégicos, el trabajo de Brown (2005) en Canadá con el Programa
Razonamiento y Rehabilitación (R&R) y el Programa de Prevención de Montreal (PPM)
Tremblay, Máss, Pagani & Vitaro (1996), Reino Unido por McGuire (2001) con Defining
correccional programs y en Chile con Intervenciones Psicológicas Basadas en la Evidencia para la
Prevención de la Delincuencia Juvenil: Un programa de habilidades sociales en ambientes
educativos (Livacic, 2003). Estas estrategias de prevención tienen como principal enfoque la
enseñanza y potencialización de diversas herramientas de las cuales el joven se puede valer para
evitar el acercamiento a sistemas judiciales.
Martínez (2012) establece además la necesidad de una intervención situacional y de tener en cuenta
las subjetividades sociales, por lo que se deben evaluar todos los programas establecidos para
llevarlos a cada comunidad en específico (Laranjeria, 2007). También LeBlanc & Robert (2012)
consideran que los grupos objetivo son las personas que interactúan en la vida cotidiana de y con
los jóvenes y Aspirilla, Turizo, & Libreros (2015) afirman que es preciso trabajar de manera
intersectorial e interdisciplinaria.
No obstante, comenta Gómez (2011), el requisito obligado es reconocer la productividad de los
lazos sociales, ya que las relaciones de poder que se dan con la delincuencia estarán mediadas por
el sentido a través del cual los trabajadores perciban y juzgan este fenómeno, esto quiere decir,
que es vital la forma en la que el trabajador se posiciona, relaciona y media dichos lazos en el
proceso de prevención.
En este punto se encuentra que 1) hay estrategias cualificadas para la prevención primaria 2) que
en cada grupo en el que se encuentran los jóvenes hay una subjetividad propia, y es allí donde se
debe trabajar y 3) La forma en que quien trabaja con prevención percibe y juzga el proceso da
como resultado un proceso de prevención productivo o no.
En consecuencia, los significados de quienes se encargan de llevar a cabo el proceso de prevención
son el foco de interés de esta investigación ya que con ello se puede lograr una visión más amplia
sobre la prevención de la delincuencia pudiendo articular las tres afirmaciones anteriores en
relación al índice de delincuencia juvenil, por medio de la pregunta ¿cuál es el significado de la
prevención de la delincuencia que construyen los profesionales que ejecutan programas de
prevención de delincuencia juvenil en Pereira?
Desde la lógica anterior comprender los significados permite conocer mediante la forma en la que
las personas que ejecutan programas de prevención de la delincuencia, organizan sus experiencias
y conocimientos sobre la prevención, ya que según Bruner (1991) los significados son las
construcciones que hace el hombre como ser cultural para asimilar su realidad y se da por medio
de sus creencias y deseos, por lo que la construcción de significados tiene elementos internos y
externos, esta forma de creencias se utiliza a la hora de llevar a cabo cualquier programa de deseos
o acciones.
Por tanto específicamente se buscará 1) Identificar las experiencias y conocimientos de los
profesionales que ejecutan programas de prevención de delincuencia juvenil en Pereira sobre la
prevención de la delincuencia juvenil 2) Identificar las creencias de los profesionales que ejecutan
programas de prevención de delincuencia juvenil en Pereira sobre la prevención de la delincuencia
juvenil y 3) Interpretar los significados de acuerdo a la experiencias, conocimientos y creencias
que tienen los profesionales que ejecutan programas de prevención de delincuencia juvenil en
Pereira.
Metodología
Esta es una investigación con una metodología cualitativa, la cual se caracteriza por su sensibilidad
y flexibilidad frente a la construcción de significados en negociaciones de orden social (Bonilla &
Rodríguez, 2000), de alcance descriptivo, que emplea un método fenomenológico.
La fenomenología de acuerdo con Creswell (1998), Álvarez-Gayou (2003) y Mertens (2005) se
fundamenta en que pretende describir y entender los fenómenos desde el punto de vista de cada
participante y desde la perspectiva construida colectivamente, se basa en el análisis de discursos y
temas específicos, así como en la búsqueda de sus posibles significados y se obtiene información
de las personas que han experimentado el fenómeno que se estudia.
Unidad de trabajo. Es de saber que muchas instituciones realizan prevención primaria
inmersa en su quehacer, sin embargo en este estudio se quiere tomar a un grupo de profesionales
que al dedicarse en su labor a la prevención primaria, esta esté visible dentro de su institución, por
esta razón llevó a cabo la recolección de información con 8 profesionales que ejecutan programas
de prevención de la delincuencia juvenil en la ciudad de Pereira, esta proporción es debida al
número de las principales instituciones en Pereira que trabajan con prevención eligiendo de allí a
un participante para cada entrevista.
Los profesionales entrevistados fueron: Abogada del SISTEMA DE RESPONSABILIDAD
PENAL PARA ADOLESCENTES, Educador de la FUNDICIÓN UN NUEVO AMANECER,
Psicóloga de la SECRETARIA DE DESARROLLO SOCIAL Y POLÍTICO, director y educador
de la ASOCIACIÓN MUNDO HERMANOS, Psicóloga de la ASOCIACIÓN MUNDO
HERMANOS, psicóloga de FUTURO COLOMBIA DIRECCIÓN SECCIONAL RISARALDA,
INTITUTO DE BIENESTAR FAMILIAR
Instrumento. La información se recogió mediante una entrevista semiestructurada con el
fin de lograr la comunicación y la construcción conjunta de significados respecto al fenómeno
(Janesick, 1998) en (Hernández, Fernández, & Baptista, p.418, 2010). Se diseñó de acuerdo a
cuatro categorías principales: lo que es la prevención de la delincuencia, sus fallas, sus beneficios,
y lo que se espera de esta; entendiendo que en estas categorías podrían emerger los significados
ya que desde la estimación de beneficios y fallas se narran las posturas personales.
Estas categorías están transversalizadas por el concepto de significado, desde lo externo y lo
interno y así mismo se realiza la entrevista en dos partes: el significado desde lo externo
(conocimiento y experiencias) en el que el entrevistado se posiciona desde su organización, sus
conocimientos, documentos base y demás, y el significado desde lo interno (deseos, creencias y
valores) en el que el entrevistado muestra su posición individual frente al fenómeno.
Procedimiento. Las entrevistas se realizaron en el lugar de trabajo de cada profesional,
estas duraron entre 20 y 40 minutos, fueron grabadas y transcritas literalmente, posteriormente
codificadas individualmente por medio de unidades de significado naturales y luego agrupadas por
significados comunes, teniendo como base la bibliografía previa de la cual se establecieron las
categorías iniciales y las categorías emergentes producto del análisis.
Resultados
A partir de la información recolectada a través de las narraciones en las entrevistas, en los
siguientes apartados se exponen los análisis realizados, los cuales se encuentran clasificados por
las categorías centrales y emergentes que van ligadas a toda la experiencia investigativa y que
permitieron develar en gran parte la subjetividad en el proceso de la prevención de la delincuencia
juvenil desde quienes lo ejecutan
La experiencia como punto de partida
Se hace evidente la forma en como cada profesional piensa y ejecuta los procesos de prevención
desde su experiencia, desde sus experiencias directas algunos profesionales que vivieron bajo
circunstancias y factores de riesgo en su infancia y adolescencia, por estrato socioeconómico bajo,
consumo de sustancias psicoactivas o la experiencia personal de ser delincuente, tienen un
acercamiento muy próximo a los jóvenes con quienes laboran generando lazos afectivos y
muestran un empeño y una expectativa característica con su labor, hasta el punto de ser voluntarios
desde lo intelectual (estudiando horas extra sobre el fenómeno) y desde las acciones (trabajando
en lugares desde el voluntariado para la prevención).
Y desde sus experiencias indirectas, haciendo referencia como tal a las personas que solo han
tenido una experiencia con el fenómeno desde lo laboral en el contacto con los jóvenes en riesgo
o ya delincuentes, se encuentran unas creencias institucionalizadas “yo lo digo desde mi universo
que es esto, este es mi universo” (S7P40R3), ya que de acuerdo a las características de cada
institución el profesional asimila los objetivos y la misión de esta como suyos, sin embargo, a su
vez, esta situación permite que el profesional tenga motivos, intereses y propuestas para la
prevención de la delincuencia reconociendo al joven desde sus necesidades. Por tanto se encuentra
que desde ambas experiencias los profesionales buscan desde posibilidades y oportunidades de
colaborar con el proyecto de vida del joven.
Además de estas dos formas de experiencia encontradas, en las entrevistas los profesionales hacen
referencia al joven delincuente desde su individualidad y su subjetividad, “el trabajo se hace
grupal y generalizado, y lo que hay que hacer es adentrarse como en el mundo de ese uno por
uno, porque es que no todos vivieron lo mismo” (S6P33R5) lo cual muestra la importancia de la
experiencia de aquellas persona con quien se va a trabajar, sus creencias y su conocimiento en el
proceso de prevención.
Noción de sujeto delincuente
El profesional ha construido una noción del sujeto delincuente que da cuenta de un sujeto
víctima de las condiciones sociales, por lo cual, el profesional excusa y comprende los actos
delictivos del joven por las situaciones de riesgo que propician el delito y les lleva a ser jóvenes
delincuentes.
Puesto que afirman que “la delincuencia es el síntoma de una relación anómala al interior de la
familia, por la privación afectiva, carencia de recursos y muchas limitaciones socioeconómicas”
(S3P15R1) y que “los delincuentes son víctimas de un sistema, no son victimarios” (S4P23R17),
pues en muchos casos “es un niño con una cualidad, pero no la conoce nadie, porque no hay
mamá, porque no hay papá” (S4P25R13), “los jóvenes tienen una expectativa de vida diferente
con la delincuencia, estos tienen una desesperanza aprendida frente a su estilo de vida y las
condiciones de vida que no se han correspondido” (S1P1R17)
La institución que promueve y limita
Se encuentra que los participantes afirman sin duda que se puede prevenir el delito, sin embargo a
la hora de hablar de los alcances y las fallas de la prevención explican que no perciben que la
delincuencia en Pereira disminuya y que esto se debe en gran parte al manejo que se le da a los
presupuestos y a la desarticulación en las instituciones, solo una entrevistada considera que los
índices de delincuencia han disminuido, los demás confluyen en que “para la institucionalidad se
mide a través de las cifras, y las cifras miden que todo va bien, pero para la sociedad se mide a
través de la mirada y la mirada dice que no es así” (S4P24R18).
De acuerdo a esto, consideran que “aunque suene fatalista (…) si el modelo de intervención
institucional no cambia no vamos a disminuir el riesgo, ni mucho menos la población”
(S4P24R15) y que “no se lograrán los alcances, (…) en Pereira como tal no existe una política
de prevención de la delincuencia juvenil y las acciones que se generan son acciones aisladas y
no están articuladas” (S1P5R1) desde esta posición los entrevistados expresan que “hay mucho
celo a nivel de casa institución y cada una cree que tiene la receta” lo que no permite finalmente
la articulación de cada propuesta disminuyendo el impacto esperado con cada intervención
(S3P15R16); y en relación al presupuesto “no hay presupuesto, entonces tenemos un psicólogo
trabajando únicamente 2 meses, pero el año tiene 12 meses” (S3P16R6), afirman todos que el
presupuesto y la distribución de este se relaciona directamente con los resultados, por lo cual la
mayoría parte de la siguiente idea expresada por (S3P18R18):
“eso es lo que hace que necesiten la delincuencia, que necesiten la negligencia, que necesiten
el abandono porque si no lo hay, no hay plata, si manejan todo esto para atender esta
necesidad pues como ya la respondieron, ¿para qué plata?”
El ideal: La prevención primaria
Cuando se habla al entrevistado de la prevención de la delincuencia, este se refiere a ella desde la
prevención primaria, sin tomar los actos de tratamiento y rehabilitación como prevención, afirman
entonces que prevenir “es adelantar un proceso (…) para que no se presente la conducta”
(S4P23R15), “prevenir es educar en valores para una sana convivencia, si todos nosotros
tuviéramos esa educación en valores no tendríamos estos problemas” (S7P40R2)
Cuando se le pregunta al profesional sobre sus propuestas para hacer prevención, este explica
procesos que hacen parte de la prevención primaria, como lo son las propuestas de familia y del
sistema educativo, basados en que “la familia es un sistema social que está constituido con unas
normas primarias (…) pero muchas veces esas condiciones son disfuncionales, entonces no hay
reconocimiento de roles, normas, limites, autoridad, pautas, etc.” (S3P14R7) y en que “el sistema
educativo es uno de los que más está favoreciendo que los adolescentes ingresen a la delincuencia
y el consumo de sustancias psicoactivas, porque los está expulsando y no les están entregando
herramientas a los muchachos” (S1P5R18); “si los docentes no enganchan a los muchachos a
hacer actividades (…) téngalo claro que otros que también le están viendo las habilidades, le
puedan convertir en un muy buen delincuente” (S1P5R9).
Desde esta posición plantean que en el momento es difícil lograr disminuir el delito por todos los
factores que convergen en el fenómeno, sin embargo aseguran que todos los procesos aportan a la
prevención “Obvio, es que funciona, yo soy de los que digo, yo fui un chico muy difícil, porque yo
viví en las calles, conmigo insistieron, hasta que aquí está el resultado 21 años después”
(S2P12R10), “yo pienso que se puede prevenir, que está más que demostrado porque existen
muchos modelos exitosos de intervención” (S8P49R25), ya que estas creencias se manifiestan en
las acciones de los profesionales al momento de prevenir, se podría decir que se desempeñan en
su labor considerando que a pesar de las situaciones se puede lograr prevenir, no con el cubrimiento
poblacional que esperarían pero si obteniendo resultados, “no digamos que hayamos erradicado,
pero si hemos minimizado que nuestros niños y niñas pertenezcan a grupos al margen de la ley”
( S5P28R21)
Sin embargo estos significados van más allá de comprender el fenómeno de la situación y se
expresan mediante esperanza y deseos, “las personas soñadoras creemos que puede ser diferente
este cuento de vivir la vida, que podemos llegar a un momento donde nos respetemos, donde haya
solidaridad, hermandad” (S5P30R17), “yo pienso que esto puede llegar a un estilo Suiza o a un
estilo de esos países que ya han superado todo esto, por ahí en unos 50 años, que empecemos por
esa transición” (S7P36R20).
Finalmente para los profesionales es necesario el cumplimiento de unas condiciones específicas
para la eficacia de la prevención, lo primero será que las personas que tienen algún vínculo
(ejecutan, diseñan, patrocinan, etc.) con estos procesos tengan una mirada humana y le den la
importancia correspondiente “esa sensibilidad para ver al otro (…) la famosa alteridad”
(S4P26R10), lo cual se debería extrapolar a todas las carreras universitarias “pienso que se han
limitado mucho a la parte académica pero la parte humana la han dejado mucho de lado”
(S1P5R9).
Como segundo, tener fundamentos académicos, Trabajar desde lo académico “los resultados de
investigaciones, la consulta bibliográfica y muy poco dejarse llevar por el sentido común, porque
el sentido común a veces es engañoso” (S8P47R10), en tercer lugar la interinstucionalidad, ya
mencionada anteriormente como una de las principales fallas en la prevención, ya que la
desarticulación hace que las acciones “estén desfasadas en el objetivo, porque no responden a
ejercicios planificados” (S1P5R1), comprender que la unión de objetivos y fuerzas permitirá
resultados observables en cifras y por la sociedad conlleva a un trabajo interinstitucional.
Discusión
Existe una preocupación constante por la delincuencia juvenil en Pereira, y la posición desde la
que el profesional que ejecuta la prevención al delito se acerca al joven, es importante en la medida
en que media el proceso de prevención (Gómez, 2011), estos son quienes tienen un contacto
directo con el sujeto y el riesgo o fenómeno delincuencial, constantemente están en el campo de
acción junto al joven y por su interacción con él, tienen la oportunidad de modelar perspectivas y
expectativas de vida diferentes, y desde la psicología se entiende que la manera en que se acerque
este profesional hará depender los resultados del proceso, en esta investigación se encuentra que
los profesionales significan la prevención desde una noción del sujeto delincuente como víctima y
no victimario, lo cual tiene como fin un acercamiento humano, comprensivo y motivado a
colaborar en el proyecto de vida del joven.
Esta noción de sujeto delincuente no corresponde simplemente a la transgresión de la ley, sino
que, según este grupo de profesionales obedece a un sistema que agrede al joven desde sus
necesidades básicas, por tanto, la forma de intervenir es transversalizada por esta creencia y las
lógicas de quienes ejecutan el programa de prevención no están tan orientadas a lo que piensa el
adolescente, si no a dotarle de todo aquello que necesita en relación al ciclo vital y la restitución
de derechos, en este punto es donde todas las organizaciones intervienen según sus objetivos pero
no logran un proceso profundo y duradero por la falta de un trabajo interinstitucional. (Aspirilla,
Turizo, & Libreros, 2015), estos significados son en su mayoría compartidos solo por quienes
ejecutan dichos programas y por tanto no llegan más allá, por ejemplo, a quienes manejan el
presupuesto.
En relación al adolescente, reconocer su subjetividad, como lo decían los entrevistados “el uno por
uno”, hace que se reflexione acerca de cómo se está pensando que hay que entablar la relación con
el joven, entender que es importante comprender como significa este el delito, ya que es quien vive
las circunstancias de riesgo y el fenómeno como tal, permite que pueda aportar el mismo en
reconocer sus necesidades, ejemplo similar de esta propuesta se encuentra en las entrevistas
cuando se habla del adolescente que ha sido delincuente y toma un rol reflexivo con los otros
jóvenes desde su experiencia próxima a la situación.
Lo anterior radica en que el joven puede percibir el delito como una oportunidad de socializarse,
de desarrollar un proyecto de vida y no como una conducta negativa, y estos pueden ser discursos
no entendidos desde la mirada externa, por eso el acercamiento que tienen las personas que
ejecutan programas de prevención deben partir de comprender dichos significados y según
Martínez (2012) hacer visibles las subjetividades sociales al momento de evaluar las decisiones
sobre un proceso, y para esto es importante partir de reconocer las limitaciones que se tienen desde
lo personal, ya sea por la falta de comprensión de los discursos o por prejuicios.
En relación a los programas inicialmente el SRPA mostró con cifras como la delincuencia ha
disminuido en el 2016, sin embargo no todos lo perciben de esta manera, en relación a la
prevención de la delincuencia se encuentran procesos integrales realizados, porque hay buenos
programas de prevención (Livacic, 2003), se trabaja en y con el contexto del joven (Martínez,
2012), y los profesionales tienen un significado especifico que permite el desarrollo de los
programas, se podría decir que por ello la delincuencia no aumenta en gran magnitud, pero que
desde este estudio se encuentran otras razones de porque se sigue percibiendo en Pereira tal
fenómeno delincuencial.
Siguiendo esta línea de limitaciones, se reconoce en este estudio que en ocasiones es la institución
la que puede limitar el desarrollo de los programas de prevención de la delincuencia desde su
misión y ejecución, esto se evidencia cuando se le pregunta a los participantes acerca de las fallas
de la prevención, a lo que en su mayoría responden que es el presupuesto y el cubrimiento, es
muestra de ello los resultados obtenidos, pues en muchas ocasiones las cifras y sustentos de una
institución están por encima de la persona, “para la institucionalidad se mide a través de las cifras,
y las cifras miden que todo va bien, pero para la sociedad se mide a través de la mirada y la
mirada dice que no es así”.
Estas cifras no son las que determinan la buena convivencia o no en una ciudad, pero si son las
que se presentan ante las entidades del gobierno, además en cuanto a la institucionalidad, los
profesionales que están arraigados al modelo y son celosos con los procedimientos de la
organización para la cual trabajan, se limitan al diseño o estrategias de su entidad, no permitiendo
que dichos procesos evolucionen, lo cual radica en la efectividad de los procesos de intervención.
Otra realidad es que la mayoría de estos profesionales significan la prevención desde la familia y
la educación para evitar los factores de riesgo que llevan a un joven a la delincuencia, es decir,
desde la prevención primaria (Caplan, 1989) esto indica que los profesionales que ejecutan los
programas están dotando de importancia la intervención en dichos factores de riesgo, aún más que
la rehabilitación y la resocialización, punto de partida importante para futuros estudios de
prevención primaria, ya que la prevención primaria como se encuentra en los resultados recoge
todas las propuestas para prevenir que exponen los entrevistados.
Hablando de la prevención primaria, y teniendo en cuenta que esta es a la que todos le apunta, pero
es la que menos resultado visibiliza, se puede entender que desde los entrevistados conciben que
se permita la delincuencia por razones políticas, de tal manera que se trabaja en su mayor parte
desde la prevención secundaria y terciaria con los que son ya, por ello estos profesionales afirman
que la forma de disminuir la delincuencia es en ese trabajo específico de prevención primaria.
Finalmente junto con la significación del delito de los adolescentes y la prevención primaria, los
procesos aislados que se generan, y la falta de cubrimiento poblacional en el que se hace referencia
a aquellas personas que tienen el poder y de quienes depende la inversión, en este caso para un
futuro estudio los significados de estos actores podrían ser también la dirección que permita
develar en parte del fenómeno de la delincuencia juvenil.
Este estudio presenta limitaciones dado que no se pudo entrevistar a profesionales de otras
entidades importantes en prevención para obtener un análisis más completo para la población,
además por ser una investigación cualitativa estos resultados no pueden ser llevados directamente
a otros contextos, ya que el entorno profesional y geográfico puede ser diferente, sin embargo
ayudan a comprender y profundizar en el significado de un fenómeno, en un grupo profesional
especifico (profesionales que ejecutan programas de prevención) y en un lugar concreto (Pereira,
Colombia).
Conclusiones
Los profesionales están significando la prevención en general desde la prevención primaria,
dotando de importancia cada situación que se le presenta a la persona desde su infancia y
adolescencia como factor protector o factor de riesgo.
Por tanto tienen la creencia de que se puede prevenir, aunque lo que se hace actualmente no es
suficiente en cuanto a cobertura y presupuesto, y con ello proponen trabajar desde la prevención
primaria con las familias y las instituciones educativas.
Las principales limitaciones son de carácter institucional y presupuestal, aunque se reconoce que
el acercamiento se podría hacer desde la perspectiva del adolescente, permitiendo que este haga
parte de la toma de decisiones de su propio proceso.
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