Download - Siete Reglas de oro para educar a los niños
Denle menos. Tienen demasiado, no hay dudas. El consumismo hace desaparecer el deseo y abre la puerta al aburrimiento.
Claudia Sánchez. R.
Lo que cuenta es la intensidad, no la cantidad de tiempo que pasamos con los niños. Los primeros veinte minutos cuando regresamos a casa, son
fundamentales. Lo debemos dedicar a conversar con ellos y regalonearlos. Y ciertamente, no es para
pedir las tareas y los resultados.
Claudia Sánchez. R.
Los juegos más educativos son aquellos que se dan a través de la fantasía de la
madre y las manos del padre: bastan dos trozos de madera, pero los padres,
desgraciadamente no saben inventar.
Claudia Sánchez. R.
Entre los tres y cinco años es bueno
estimular a los niños a las tareas de casa,
junto a sus padres. Es útil que sepan planchar
con una pequeña plancha o pegar un
botón.
Claudia Sánchez. R.
Deporte. Antes que todo, el niño/a tiene que desearlo. Mucho mejor si lo aprende en grupo,
así comprenderán que se requiere de esfuerzo y sacrificio y no llegar a ser sólo campeones. Genial
si son dos o tres horas a la semana. Pocas competencias, grandes beneficios físicos.
Claudia Sánchez. R.
Estimularlo a la cultura artística, habituándolo a lo bello. Teatro, música, artes visuales crean el deseo de mejorar. El dinero gastado en cultura es la mejor inversión.
Claudia Sánchez. R.
Última sugerencia: tengo una teoría y tal vez se burlarán
de mi. La llamo: la mujer de tres cuartas partes de tiempo. Las mujeres
que trabajan, la mayoría, al final del día, piensan ya en sus hijos, a los
gastos, al quehacer de la casa y rinden poco. ¿No sería mejor dejarlas salir
media hora antes del trabajo? Los hijos, regresando del colegio, los tendrían a los padres en casa menos estresados y más disponibles. Más
que de cursos, es de éste tiempo que los niños necesitan.
Claudia Sánchez. R.