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29 F O R O D E D E B AT E Diferencias por género de los trastornos de la conducta alimentaria en adolescentes españoles GENDER DIFFERENCES ON SPANISH ADOLESCENT EATING DISORDERS PEDRO MANUEL RUIZ LÁZARO, MARÍA ÁNGELES PELÁEZ-FERNÁNDEZ*, DAVID CALVO MEDEL, JESÚS PÉREZ HORNERO**, ANDRÉS GÓMEZ DEL BARRIO***, MARÍA CALADO OTERO **** Hospital Clínico Universitario de Zaragoza. Universidad de Zaragoza. Instituto Aragonés de Ciencias de la Salud I+CS *Facultad de Psicología. Universidad de Málaga **Unidad TCA Hospital Conxo. Santiago de Compostela ***Hospital Universitario Marqués de Valdecilla, Santander ****Complejo Hospitalario Universitario de Vigo. Vigo. AequAlitaS 2016 (nº 39), pp. 29-36, ISSN: 1575-3379

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F O R O D E

D E B A T E

Diferencias por género de los trastornos

de la conducta alimentaria en adolescentes españoles

GENDER DIFFERENCES ON SPANISH ADOLESCENT

EATING DISORDERSPEDRO MANUEL RUIZ LÁZARO,

MARÍA ÁNGELES PELÁEZ-FERNÁNDEZ*, DAVID CALVO MEDEL, JESÚS PÉREZ HORNERO**,

ANDRÉS GÓMEZ DEL BARRIO***, MARÍA CALADO OTERO ****

Hospital Clínico Universitario de Zaragoza. Universidad de Zaragoza. Instituto Aragonés de Ciencias de la Salud I+CS*Facultad de Psicología. Universidad de Málaga

**Unidad TCA Hospital Conxo. Santiago de Compostela***Hospital Universitario Marqués de Valdecilla, Santander

****Complejo Hospitalario Universitario de Vigo. Vigo.

AequAlitaS 2016 (nº 39),

pp. 29-36, ISSN: 1575-3379

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Pedro Manuel Ruiz Lázaro, María Ángeles Peláez-Fernández, David Calvo Medel, Jesús Pérez Hornero,

Andrés Gómez Del Barrio, María Calado OteroF O R O D E D E B A T E

RESUMENEste trabajo revisa las diferencias epidemiológicas en los trastornos dela conducta alimentaria (TCA) entre adolescentes españoles con undiscurso cultural y de género (feminista). La epidemia global de los TCAy la insatisfacción corporal especialmente entre las mujeres jóvenes yadolescentes refleja las consecuencias de la cultura popular dominanteque a menudo centra su atención en las mujeres y sus cuerpos.

Palabras clave: Trastornos de la conducta alimentaria (TCA),epidemiología, género, cultura, mujeres.

ABSTRACTThis study revises the epidemiological differences on Spanishadolescent eating disorders (ED´s) with a feminist and culturaldiscourse. The global epidemic of ED´s and body dissatisfaction amongadolescent and young women reflects the consequences of a dominantpopular culture that often has focused a great deal of attention onwomen and their bodies.

Keywords: Eating disorders (ED´s), epidemiology, gender, culture,women.

trabajo y estudios con rigor meto-dológico en población general ado-lescente y juvenil.

Más que repetir estudios similares entodas las comunidades autónomas,lo más adecuado será avanzar en laszonas más oscuras: infancia, adultos,varones y en el estudio de los facto-res de riesgo. No hay muchos estu-dios españoles en dos fases que in-cluyan adolescentes tempranos y deahí nuestro interés en investigar eneste grupo de edad (Ruiz-Lázaro,2003; Ruiz-Lázaro et al, 2005).

En la Tabla 1 se resume algunos delos más recientes estudios de preva-lencia de TCA nacionales. Existedisparidad en la metodología y laedad poblacional de las diferentesinvestigaciones epidemiológicas pe-ro se puede admitir unas horquillasde prevalencia de riesgo de TCAentre el 4 y el 12% y de prevalenciade TCA entre el 1 y el 5% en muje-res y menor del 1% en hombres,con una prevalencia de sobrepeso-obesidad entre el 25 y el 30%, conclaras diferencias por género (Cal-vo, 2012).

INTRODUCCIÓNUna aproximación cultural y de géne-ro, una perspectiva feminista aportauna visión complementaria necesariaal modelo biomédico para aproximar-se a los trastornos de la conducta ali-mentaria (TCA) (Ruiz-Lázaro, 2002a, 2002 b; Calado, 2011).

La epidemia global de los TCA y lainsatisfacción corporal entre las ado-lescentes y mujeres jóvenes refleja lasconsecuencias de la cultura populardominante que a menudo centra suatención en las mujeres y sus cuerpos.

Este trabajo aborda el contexto so-ciocultural y revisa las diferencias epi-demiológicas en los trastornos de laconducta alimentaria (TCA) entreadolescentes españoles con un discur-so cultural y de género (feminista).

La lipofobia y el modelo estéticocorporal excesivamente delgadodonde la esbeltez es un valor sociala conseguir se mantiene pese al pa-so de los años. Y se generaliza porlas pantallas en un mundo globali-zado que ha hecho suyo este mitooccidental (Ruiz-Lázaro, 2002 b).Con una mayor presión hacia el gé-nero femenino. Aunque no en ex-clusiva, pues los TCA también seencuentran entre los varones ado-lescentes y jóvenes, con una signifi-cativa menor prevalencia,eso sí.

Hace ya años publicamos que laepidemiología de los TCA en Espa-ña era un área de investigación quehabía avanzado en poco tiempo delcero al infinito con avances conside-rables. De no poseer apenas datosrigurosos y fiables hemos pasado enuna década a ser probablemente lanación europea con más grupos de

TABLA 1 ESTUDIOS ESPAÑOLES DE PREVALENCIA DE TCA DEL SIGLO XXI

Nuestro primer estudio epidemioló-gico de TCA de corte o transversales ya del siglo pasado y no figura enesta tabla. En 1997 en Zaragoza enuna muestra amplia representativaestratificada representativa comu -nitaria de 4.047 adolescentes espa -ñoles de 12-18 años con métodosestandarizados (en dos fases). En-contramos una prevalencia del4,51% (IC 95% método exactoMid-P 3,7% a 5,4%) de trastornosde la conducta alimentaria (TCA)entre las mujeres estudiadas con un3,83% (IC 95% método exactoMid-P 3,1% a 4,7%) de TCA no es-pecificados o atípicos TCANE. Conun riesgo de TCA entre las muje-res del 16,32% (IC 95% métodoexacto Mid-P 14,8% a 17,9%) ydel 3,3% (IC 95% método exactoMid-P 2,6% a 4,2%) para los va-rones. (Ruiz-Lázaro, 2003; Ruiz-Lázaro et al, 2005). Y una obesi-dad entre las mujeres del 11,39%(IC 95% método exacto Mid-P10,1% a 12,8%) y del 13,48% (IC95% método exacto Mid-P 12,0%a 15,1%) para los varones. (Ruiz-Lázaro et al, 2005).

Nuestros resultados confirmaban lateoría sociocultural y de género. Lapoblación con riesgo era indiscuti-blemente superior entre el génerofemenino. Las variables psicológicasrelacionadas con los TCA determi-nadas mediante cuestionarios auto-administrados se distribuían de for-ma significativamente diferenteentre uno y otro sexo, excepto en lasubescala Bulimia del EDI. Las su-bescalas Perfeccionismo, Descon-fianza interpersonal y Miedo a laMadurez tenían una media más ele-vada en los varones, lo que puedereflejar los valores culturales que seinculcan a género masculino. Quedebe ser más competitivo, con ma-yor exigencia de logro, con la obli-gación de ocultar sus sentimientos.Y por esa presión ante las arrollado-ras demandas de la vida adulta pue-de desear regresar a la seguridad dela infancia o no abandonarla. Losvarones leían revistas deportivas ylas mujeres de “féminas”, ya desde

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adolescentes, con mensajes diferen-tes que influyen de forma distinta ycontribuyen a la construcción socialdel género (Ruiz-Lázaro, 2012 b).

El grupo ZARIMA Prevención,equipo multidisciplinar que trabajaen TCA desde 1995, ha desarrolla-do un programa de acción comuni-tario que promueve la salud mentaly realiza prevención primaria y se-cundaria (incluido en el Directoriode Proyectos en Europa, Promo-ción de Salud Mental de Adolescen-tes y Jóvenes, M.H.E. financiadopor la Comisión Europea) (Ruiz-Lázaro PM, 2001), en colaboracióncon la asociación de familiares deTCA (ARBADA) y el Consejo Na-cional Juventud Aragón (CJA), de-clarado de interés sanitario y finan-ciado por el Departamento de Saluddel Gobierno de Aragón y el Fondode Investigación Sanitaria del Insti-tuto Carlos III FIS. PI 05/2533.

Este programa se ha aplicado encentros de secundaria públicos yprivados del Norte de España enZaragoza, Santiago de Compostela,Vigo, Orense y Santander.Y en2006 en Fuerteventura se aplica asi-mismo nuestro programa ZARIMApor el Grupo multidisciplinar Sácia-te y acepta participar una muestraamplia y representativa de 798alumnos de 8 centros en Fuerteven-tura (44 aulas).

Dentro de este proyecto continua-do en el tiempo, en 2007 se realizóel estudio multicéntrico de detec-ción temprana de TCA en adoles-centes de 1º de Enseñanza Secun-daria Obligatoria (E.S.O.) delNorte de España parte de cuyos da-tos presentamos a la luz del modelode género.

Este estudio valora los diferenciasepidemiológicas por sexo/génerode nuestro programa de criba quebusca la detección temprana y pre-vención secundaria de los TCA.

■ Objetivo general: Epidemiología de TCA y sobrepesoen adolescentes tempranos varones

y mujeres (Primero de EnseñanzaSecundaria Obligatoria, E.S.O.).

■ Objetivos específicos: 1.- Evaluar la población con riesgode TCA en 1º de E.S.O. en varonesy mujeres.2.- Calcular la tasa de prevalenciapuntual de TCA (CIE-10, DSM-IVTR) y sobrepeso/obesidad en va-rones y mujeres.3.- Valorar las diferencias por géne-ro en las variables psicológicas estu-diadas mediante autocuestionarios.

■ Hipótesis de trabajo:■ La población con riesgo de TCAy los casos prevalentes encontradosde TCA, sobrepeso y obesidad en-tre los adolescentes tempranos delnorte de España (aragoneses, cánta-bros y gallegos) de nuestra muestracomunitaria no diferirán de formasignificativa de anteriores resultadosen otros trabajos de investigaciónespañoles e internacionales con di-ferencias por género con mayor pre-valencia de riesgo y de casos conTCA entre las mujeres.■ La mayoría de los casos de TCAencontrados serán TCANE, no es-pecificados o atípicos.■ Se espera encontrar diferenciasentre varones y mujeres, la pobla-ción sana, con riesgo para TCA ycon TCA con los instrumentos uti-lizados

METODOLOGÍA

Diseño: Se establece un diseño de estudiomulticéntrico de corte o prevalenciaen dos estadios o fases.

Muestra: Se determinó el tamaño muestralcon los siguientes parámetros. Se hi-zo un muestreo por conglomerados,que fueron los colegios, y se deter-minaron las aulas necesarias a priori.Con respecto a las aulas se estimó 20alumnos por clase, pero finalmentese consideró una media de 27, por-que teníamos más aulas de las nece-sarias. Los criterios de inclusión fue-

ron tener una edad entre 12 y 18años (también se cogió a alumnosque tenían 11 años) y que estuvieranmatriculados en un centro público ono (concertado) en las comunidadesautónomas de Aragón, Cantabria yGalicia en 1º de la E.S.O. en 2007 yhaber firmado consentimiento infor-mado los padres y el menor. Los cri-terios de exclusión eran no com-prender el idioma o padecerdiscapacidad mental que no permitala comprensión del estudio. La po-blación española que cursaba 1º dela ESO en España en 2007 nos la fa-cilitó el Ministerio de Educación. Lamuestra original aleatoria por con-glomerados (aulas) consiste en 1.460alumnos de centros de secundariapúblicos y privados concertados delNorte de España con al menos dosaulas de 1º E.S.O. en cada escuela.Para el cálculo del tamaño muestralqueríamos estimar la medición conuna precisión (e) de error máximodel 2% y tener una confianza del 99%(1-alfa). El tamaño poblacional es de493.597 alumnos. El efecto diseñoes 2.0 con unas pérdidas estimadasdel 10-15%. La prevalencia estimadade TCA por nuestro estudio anterioren Zaragoza es de 4,5%. El tamañomuestral necesario sería de 1.460 su-jetos. Al tener de media 20 alumnoscada aula son necesarias 73 aulas, de37 colegios públicos y no, que supo-nen una muestra de 1.460 alumnos.Y que se seleccionan de forma alea-toria con los datos del Departamen-to de Educación de cada comunidadcon un muestreo estratificado porconglomerados.

Evaluación estándar:Se emplean medidas psicológicas es-tandarizadas. Se usa un procedi-miento en doble fase para identificarcasos prevalentes de TCA con crite-rios diagnósticos CIE-10, DSMIVTR.

Se hace una criba con cuestionariosvalidados (Eating Attitudes Test,EAT-26) (Castro et al, 1991, Peláezet al, 2014) y posteriormente entre-vistas semi-estructuradas (Schedulesfor Clinical Assessment in Neurops-

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ychiatry, SCAN) (Vázquez-Barque-ro JL, 1994). Se emplea un diseñode corte en dos estadios, con criba-do y posteriores entrevistas de suje-tos positivos y negativos. En la pri-mera fase: se emplea cuestionariosautoadministrados para detectar po-blación con riesgo de TCA. Investi-gadores entrenados administran laversión española del Eating Attitu-des Test (EAT-26). También secompleta un Cuestionario de Co-nocimientos de Nutrición, el Dibu-jo de la figura humana ideal, la Es-cala de Satisfacción con el propiocuerpo (SPC) (Gismero, 1996) ydos subescalas del Eating DisorderInventory (EDI) (tendencia a adel-gazar, IA, e insatisfacción corporal,IC) (Guimerá, 1987; Calvo, 2012).En la segunda fase: se efectúa unaevaluación con entrevista semi-es-tructurada de quienes se consideracon riesgo en la primera fase y unamuestra de los negativos. Un psi-quiatra o psicólogo clínico investi-gador experto en TCA y formadoen esta entrevista administra elSCAN ciego para la condición delalumno evaluado al inicio.

Recogida de datos, Trabajo de campo:Se obtiene consentimiento infor-mado escrito del joven y su pa-dre-madre/tutor. Se obtienen lasaprobaciones institucionales éticasrelevantes del Comité Ético de In-vestigación Clínica en Aragón (CEI-CA), Cantabria y Galicia. Se sigue losprincipios de la Declaración Helsinkie Informe Belmont. Todos los cues-tionarios son anónimos, empleandoun código numérico con una tarjetacon los datos personales si el adoles-cente resulta elegido para la segundafase. Si se diagnostica un TCA en es-ta fase, se provee diagnóstico y trata-miento en nuestras unidades especia-lizadas de referencia para laComunidad de Aragón, Cantabria oGalicia. Preparamos un detalladomanual de instrucciones y estandari-zamos el procedimiento de los equi-pos que acuden a los colegios (deseptiembre a diciembre de 2006). Se

trata de unificar la información dadaen las aulas y la forma de administrarcolectivamente los cuestionarios y lamedida del peso y talla con básculasy tallímetros portátiles de alta preci-sión de forma individual para cadaalumno, separado del resto de com-pañeros. Y entrenarse en la entrevis-ta clínica individual semiestructura-da. El trabajo de campo es de eneroa abril de 2007 al ser el más apropia-do por el calendario escolar.

Análisis de datos:Calculamos las características socio-demográficas, prevalencia de TCAcon sus intervalos de confianza al95% (IC) con Confidence IntervalAnalysis (C.I.A.) disk version 2.0.0(Altman et al, 2000). Usamos elmétodo recomendado (Wilson) conmenos de 30 en cada grupo o si lasproporciones observadas están fue-ra del rango 0,1 a 0,9.

EVALUACIÓN DE RESULTADOSEn 2007 se estudia 1 846 alumnosde 1º de Enseñanza SecundariaObligatoria, con una media de edadde chicos y chicas, en centros de se-cundaria públicos y privados (73 au-las) en Zaragoza, Santander, Santia-go de Compostela, Vigo y Ourense(Spain, España).

Participan voluntariamente 1 846alumnos de 37 centros (73 aulas)en la primera fase: 897 mujeres y949 varones. Supone un 93,7% departicipación con un 6,3% pérdidas.En la Tabla 2 se detalla la distribu-ción por género.

En la primera fase 176/1.846, el9,5% de los adolescentes tempranosse clasifican con riesgo de TCA (altaspuntuaciones, por encima del puntode corte, > ó = 20 en el EAT-26) conun IC al 95% con el método reco-mendado Wilson entre 8,3 y 11,0% yun error estándar (SE) de 0,7.

Se definió el riesgo de tener un TCAcomo una puntuación mayor o iguala 20 en la escala EAT 26. Se obtuvouna prevalencia muestral del 9,5% enlos adolescentes estudiados, siendoclaramente mayor la prevalencia enlas mujeres (11,3%) frente a loshombres (7,9%).

La diferencia entre la población conriesgo de TCA entre los varones y lasmujeres es de 3,4% con un IC 95%para la diferencia entre las dos proporciones poblacionales entre0,0092 y 0,0588 que no incluye el0, el valor de la igualdad y que es portanto estadísticamente significativa.Con respecto al sexo, ya hemos vistoque la prevalencia es mayor en muje-res, y al compararlo con chi cuadra-do obtenemos que las mujeres tienenmás riesgo que los hombres.

En la Tabla 3 se detalla la prevalenciade riesgo de TCA por comunidadautónoma y género (hombres y mu-jeres). Tanto en Aragón, como enCantabria y Galicia las mujeres ado-lescentes tempranas tienen un mayorriesgo para desarrollar un TCA me-dido con el cuestionario EAT-26. Seobtiene significación estadística en lamuestra total y en Galicia. La ratiohombre/mujer es de 1,3.

En nuestra muestra de adolescentestempranos 460 de 1.702 tenían so-brepeso. La prevalencia de sobrepe-so y obesidad, incluyendo todos losadolescentes que superan el percentil85 de las curvas de crecimiento de laFundación Orbegozo es del 27%.

Nuevamente encontramos diferenciasgenéricas con una mayor prevalenciaen el caso de las mujeres, un 31,4%,frente al 22,9% de los hombres.

En la Tabla 4 se detalla la prevalenciade sobrepeso por comunidad autó-noma y género (hombres y mujeres).En todas hay diferencia por género.

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TABLA 2. DISTRIBUCIÓN POR GÉNERO

TABLA 3. PREVALENCIA DE RIESGO DE TCA

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El número de casos de TCA es de13/1.846. La prevalencia de TCAen adolescentes tempranos mujeresy varones que cursan 1º de la ESOen España es del 0,7%, diagnostica-do de forma estricta a través de en-trevista SCAN.

Las diferencias genéricas son demo-ledoras. La prevalencia de TCA enmujeres es del 1,3% y en hombresdel 0,1%. Los TCA son cosa de mu-jeres (y de algunos hombres).

La prevalencia de TCA por génerocon sus intervalos de confianza al 95%se muestra en la Tabla 5. En la Tabla5 se detalla asimismo la prevalencia deTCA por comunidad autónoma. EnAragón y Cantabria no encontramosningún caso de TCA entre los varo-nes estudiados, sí en Galicia.

Encontramos 13 casos de Trastor-nos de la Conducta Alimentaria noespecificados (TCANE), atípicos osubclínicos, entre los 1.846 alumnosestudiados tras realizar las entrevis-tas con riesgo y sin riesgo. Un hom-bre en Galicia y 12 mujeres. La pre-valencia puntual de TCA halladaentre esta muestra poblacional de adolescentes tempranos es de13/1.846, el 0,7% de TCANE, TCAatípicos o subclínicos, 13 casos quecumplen los criterios diagnósticos deun F 50.9 CIE-10, DSM-IVTR (In-tervalo de confianza CI 95% calcula-do con el método recomendadoWilson con el CIA disk versión2.00: 0,4%-1,2%). El error estándares de 0,2. La diferencia entre la po-blación con TCA entre los varones ylas mujeres es de 1,2% con un IC95% para la diferencia entre las dosproporciones poblacionales entre0,0008 y 0,0232 que no incluye el0, el valor de la igualdad y que es es-tadísticamente significativa.

TABLA 4. PREVALENCIA DE SOBREPESO

TABLA 5. PREVALENCIA DE TCA

Hay diferencias estadísticamentesignificativas en las puntuacionesentre varones y mujeres en la Esca-la de Satisfacción con el propiocuerpo (SPC) (mayor satisfacciónen varones) y dos subescalas del Ea-ting Disorder Inventory (EDI)(tendencia a adelgazar, IA, e insatis-facción corporal, IC) (mayor insa-tisfacción y tendencia a adelgazar enmujeres). Todas estas diferenciasson comunes a las tres comunida-des, salvo la SPC, que en Cantabriano obtiene significación.

DISCUSIÓNSe han llevado a cabo considerablesavances en la investigación de la epi-demiología de los TCA en España.De la revisión de estudios recientes(Tabla 1) (Calvo, 2012, Ruiz-Láza-ro et al, 2003; Ruiz-Lázaro et al,2010), pese a sus limitaciones me-todológicas (Peláez et al, 2004), sesugiere que la prevalencia de con-ductas y actitudes alimentarias anó-malas en poblaciones no clínicas es-pañolas no difiere marcadamente delo descrito en otros países desarro-llados. Nuestro estudio viene a su-marse a estos hallazgos y confirmalas diferencias genéricas encontradasen todos, que apoya la utilidad delenfoque cultural y de género paraaproximarse a los TCA.

No se han efectuado buenos estudiosepidemiológicos con poblaciones in-fantiles, adolescentes tempranas o po-blaciones masculinas. En poblaciónpreadolescente destaca el trabajo enBarcelona de Pilar Muro con un13,16% de su muestra de 1.155 par-ticipantes varones y mujeres con unaedad entre 10 y 11 años (Muro,2008; Muro y Amador, 2007). Eneste estudio como en el nuestro sólose encuentran TCANE, trastornossubclínicos o atípicos que no cum-plen todos los criterios diagnósticos(Sancho et al, 2007). Nuestro estu-dio anterior en Zaragoza (Ruiz-Láza-ro et al, 2005) y el de Pérez-Gasparen Navarra en 1997 (Pérez-Gaspar,2000), los de Rojo en Valencia (Ro-jo et al, 2003) e Imaz en Valladolid(Imaz, 2003, Imaz et al, 2008) en

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1999, el de Peláez en Madrid en2002 y el de Sancho en 2007 (San-cho et al, 2007) en Tarragona son losúnicos españoles en dos fases hasta lafecha que incluyen adolescentes tem-pranos dentro de la población estu-diada. Las cifras de prevalencia en-contradas de TCANE no difieren enexceso de nuestros resultados si setienen en cuenta las diferencias meto-dológicas para la detección de casos.

Limitaciones: se puede cuestionar elempleo del EAT-26 como cuestio-nario de criba aunque se empleeuna versión validada al español (Pe-láez et al, 2014), dada la tendenciaa la negación y al secreto de las pa-cientes con TCA, que pueden ocul-tar sus actitudes y conductas ali-mentarias anómalas en un cues-tionario autocumplimentado.

Los cuestionarios para la evaluaciónde los TCA en la práctica clínica y lainvestigación como el EAT y el EDIestán pensados para el género feme-nino y esto puede influir en los re-sultados de los varones y acentuarlas diferencias genéricas.

Dada la baja prevalencia de TCAentre los varones no es de extrañarque no hallamos encontrado casiningún caso con este tamaño mues-tral, que debería incrementarse mu-cho para aumentar la probabilidadde hallar algún varón con patologíaalimentaria (Peláez et al, 2005)

CONCLUSIONESNuestros resultados epidemiológicosconfirman de nuevo con este trabajocomunitario la teoría sociocultural yde género. La población con riesgo ycon TCA establecido es indiscutible-mente superior entre el género feme-nino en la población adolescentetemprana escolarizada estudiada en elNorte de España en este siglo XXI.

Los estudios empíricos demuestranpor tanto que la epidemia global delos TCA y la insatisfacción corporalentre las adolescentes y mujeres jó-venes refleja las consecuencias de lacultura popular dominante que amenudo centra su atención en lasmujeres y sus cuerpos.

En el trabajo hemos abordado elcontexto sociocultural y revisado lasdiferencias epidemiológicas en lostrastornos de la conducta alimenta-ria (TCA) entre adolescentes espa-ñoles con un discurso cultural y degénero (feminista).

Se ha demostrado que la lipofobia yel modelo estético corporal excesi-vamente delgado donde la esbeltezes un valor social a conseguir semantiene pese al paso de los años. Yse generaliza por las pantallas en unmundo globalizado que ha hechosuyo este mito occidental (Ruiz-Lá-zaro, 2002 b). Con una mayor pre-sión hacia el género femenino. Aun-que no en exclusiva, pues los TCAtambién se encuentran entre los va-rones adolescentes y jóvenes, conuna significativa menor prevalencia.La prevalencia de TCA en mujereses del 1,3% y en hombres del 0,1 %.Los TCA son cosa de mujeres (y dealgunos hombres).

Nuestros resultados confirmaban lateoría sociocultural y de género. Lapoblación con riesgo era indiscuti-blemente superior entre el génerofemenino. Las variables psicológi-cas relacionadas con los TCA de-terminadas mediante cuestionariosautoadministrados se distribuían deforma significativamente diferenteentre uno y otro sexo, excepto enla subescala Bulimia del EDI. Lassubescalas Perfeccionismo, Des-confianza interpersonal y Miedo ala Madurez tenían una media máselevada en los varones, lo que pue-de reflejar los valores culturales quese inculcan a género masculino.Que debe ser más competitivo, conmayor exigencia de logro, con laobligación de ocultar sus senti-mientos. Y por esa presión ante lasarrolladoras demandas de la vidaadulta puede desear regresar a laseguridad de la infancia o no aban-donarla. Los varones leían revistasdeportivas y las mujeres de “fémi-nas”, ya desde adolescentes, conmensajes diferentes que influyen deforma distinta y contribuyen a laconstrucción social del género(Ruiz-Lázaro, 2012 b).

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BIBLIOGRAFÍA

Este trabajo ha sido financiado por el Fondo de Investigación Sanitaria F.I.S. PI 05/2533Con el agradecimiento por su colaboración al Grupo ZARIMA Prevención y a los IES Miguel Catalán, Corona de Aragón, Avempace y Tiempos Modernosy los colegios Santo Domingo, María Rosa Molas, Jesuitas, La Salle Montemolín y San Valero de Zaragoza y demás centros educativos de Cantabria y Galicia.