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Contenido Oración

Misión NET: “Con la Fuerza de Dios, lo haremos posible”

FAMILIADA

Oración NET

Misión Noviembre

Con la Fuerza de Dios, lo haremos posible

Virtud: Constancia

Misión NET: Antes de la misión

Lo que queremos lograr:

Descubrir que nuestras acciones hechas con amor son engrandecidas con la Fuerza de Dios.

Lo que haremos:

En esta misión los niños van a reconocer cómo actúa la Fuerza de Dios en nuestro interior, para desde nuestra pequeñez, lograr

grandes cosas. Para ello van a reflexionar sobre la parábola de la semilla de mostaza (Mateo 13,31-32) y emprender un proyecto

para ayudar a los niños del Teletón.

Qué preparar:

• Reflexiona sobre los conceptos clave que se presentan en el espacio: “Conceptos para reflexionar en el café de guías”,

ya que te servirán como una base para guiar la reflexión y aprendizajes de los niños durante la misión.

• Lee en qué consiste la misión; planea cual es el lugar más adecuado y la logística para realizarla.

• Consigue el material necesario para realizar la misión:

o Semilla de mostaza en un recipiente pequeño o pedazo de cartulina, para mostrarla a los niños.

o Maceta con tierra.

o Palita para sembrar.

o Hoja de rotafolio o póster de proyecto (se puede solicitar en la oficina nacional NET).

• Procuren realizar la actividad en un lugar donde haya árboles cerca.

Conceptos para reflexionar en el Café de Guías:

Lean y reflexionen la parábola de la Semilla de Mostaza: Mateo 13,31-32 ¿No es la semilla de mostaza la más pequeña de entre todas las semillas? Y aun así es el más grande de todos los arbustos. ¿Qué la hace crecer de esa manera? El campesino la cuida, le procura agua, buena tierra, y se alimenta del aire, agua y nutrientes que hay a su alrededor. ¿Aún con todos esos elementos, podría la semilla crecer por sí misma?, ¿podría el campesino intervenir en el interior de la semilla para hacerla crecer? La plantita brota de la semilla y silenciosamente, de día y de noche, duerma o esté despierto el campesino, va creciendo hasta convertirse en un gran arbusto que da un buen fruto que sirve de alimento. Lo único que se tiene que hacer para lograr ese magnifico arbusto es cultivar esa pequeña semillita hasta que crezca totalmente. Así la vida interior, en un principio es como una pequeña semilla, posteriormente, dentro de nuestro corazón, crece tanto que llena todo el corazón. Es como el amor que da verdadera felicidad, es tan pequeño al inicio que hay que irlo cultivando para que crezca y se fortalezca. Poco a poco éste se hace más fuerte hasta que se mantiene en pie por sí solo, pero sigue siendo frágil, porque cualquier “hachazo” puede derribarlo, por lo tanto, necesita un cuidado continuo. Esto es lo que hay que hacer con la vida interior, cuidarla y fortalecerla, para que los obstáculos y problemas de la vida, no nos derriben. Alimentarnos de la Palabra de Dios, de los sacramentos, la Comunión frecuente, la vivencia del amor, va fortaleciendo nuestro interior y haciendo espacio a Dios, para que pueda actuar en nosotros y como las semillas, dar buen fruto. La semilla deja actuar a Dios en su interior para poder crecer y dar fruto, así nosotros necesitamos dejar que Dios actúe libremente en nuestro interior, reconocer que por nuestras propias fuerzas no podemos, que lo necesitamos a Él, reconocernos sus pequeñas semillas para que Él nos fortalezca y actúe en nosotros para poder dar buen fruto, para poder amar y hacer el bien en nuestro mundo. “Al contemplar la vida de los santos, como la de San Francisco de Asís, vemos cómo se realiza una gran obra a través de ese "pequeño instrumento". Esto es lo que Jesús quiere decirnos: "no te preocupes si sólo eres una semilla diminuta. Siémbrate en mi Corazón y verás hasta dónde puedes".

“El Reino de Dios pide nuestra colaboración, si bien es sobre todo iniciativa y un don del Señor. Nuestra débil obra aparentemente pequeña delante de los problemas del mundo, si se inserta en la de Dios y no tiene miedo de las dificultades.” (Homilía de S.S. Francisco, 14 de junio de 2015). “Todo esto nos hace entender que es siempre Dios quien hace crecer su Reino. Por esto rezamos: 'Qué venga tu Reino'. Es él quien lo hace crecer, el hombre es su humilde colaborador, que contempla y se alegra de la acción creadora divina y espera con paciencia los frutos. La palabra de Dios hace crecer, da vida, es por eso importante estudiar el Evangelio, tener la Biblia al alcance de mano. El Evangelio pequeño en la cartera, en el bolsillo, de nutrirnos cada día con esta palabra viva de Dios. Leer cada día un párrafo del Evangelio o un párrafo de la Biblia. Por favor no se olviden nunca de esto, porque esta es la fuerza que hace germinar en nosotros la vida del Reino de Dios”. (Homilía de S.S. Francisco, 14 de junio de 2015). Alimentarnos de la Palabra de Dios, de la Eucaristía, reconocernos con humildad necesitados de Él, prepara la “tierra” para que Dios actúe, nos fortalezca y nos impulse a vivir el amor, extendiendo el Reino de Dios, permeando el bien en nuestro mundo que tanto lo necesita.

Durante la misión

Instrucciones para el guía:

1. Procuren realizar la actividad en un lugar abierto, donde haya árboles (opcional). 2. De la Biblia, lee junto con los niños la parábola de la semilla de mostaza: Mateo 13, 31-32 3. Se recomienda sentar a los niños en círculo, para que puedan ver todos y estar más atentos. 4. Para acompañar la lectura, se podrá llevar una semilla de mostaza real, ¡es muy pequeña!, es importante llevar un sobre o

bolsita también pequeña para transportarlas. También necesitarás una maceta, tierra para plantas, agua, recipiente para vaciar el agua y una pala chica para maceta.

5. Será importante además que todos los niños puedan ver una semilla real de mostaza detenidamente cuidando que no se pierda, podrías poner en un cuadrito de cartulina una de las semillas y enmicarla.

6. Es elección del guía si quiere llevar semillas y macetas para cada uno de los niños.

Actividad 1:

Con esta parábola, queremos ayudar a los niños a descubrir la fuerza misteriosa de Dios que está en cada una de sus creaturas,

especialmente en nosotros los seres humanos, que somos sus hijos, hechos a Su imagen y semejanza. El objetivo es que la lectura,

acompañada de la actividad, ponga en el corazón de cada niño el mensaje Dios; nosotros podremos guiarlos con nuestras preguntas

para que descubran que Dios nos ama, nos acompaña en todo momento, y actúa en cada uno de nosotros; si lo dejamos actuar, con

Él podemos lograr mucho más que por nuestras propias fuerzas.

Sentados todos en círculo, comenta a los niños lo siguiente:

“Jesús cuando hablaba a la gente, en muchas ocasiones les hablaba del Reino de Dios y lo decía en forma de parábolas, ¿ustedes

recuerdan lo que es una parábola? Una parábola es como un regalo, que hay que desenvolverlo para saber lo que tiene dentro.

Nosotros lo vamos a desenvolver pensando qué es lo que Jesús nos quiere decir.

¿Les gustaría escuchar esta parábola de Jesús?”

Prepara el ambiente para la lectura y lee despacio la cita bíblica de la semilla de mostaza (Mateo 13, 31-32). Mientras lees, puedes

plantar la semilla en la maceta, puedes ayudarte de alguien o hacerlo al final de la lectura. Después dirige algunas preguntas de

reflexión:

o ¿De qué nos habla Jesús?

o ¿Ustedes conocen las semillas de mostaza? (Podemos pasarles las semillas para que las vean).

o La semilla de mostaza es la más pequeña que hay, ¿en que nos dice Jesús que se convertirá esa semilla?

En este momento puedes colocar la semilla en el piso, ponerte de pie a un lado de ella, y decirles: imagínense, esta pequeña

semillita va a crecer de mi tamaño y aún más alta, como los árboles y los grandes arbustos. Si es factible, coloca la semilla en el

piso debajo de un árbol o arbusto grande para que comparen el tamaño, y hazlos reflexionar: imagínense, ¡algo tan pequeñito,

va a llegar a ser algo tan grande!

o ¿Qué es lo que ayudará a esta semilla a convertirse en un árbol?

o ¿Qué habrá adentro de la semilla que la haga crecer? (R: una fuerza)

o ¿De dónde vendrá esa fuerza para crecer?

o ¿Podremos encontrar esa fuerza en otras cosas?

o ¿Creen que podremos encontrar esa fuerza para crecer en las personas?, ¿de ser primero pequeño y luego más grande?

o ¿De quién o de dónde vendrá esa fuerza?

Si para este punto aún no han llegado a la conclusión de que esa fuerza es Dios, ayudarles a seguir reflexionando…

o ¿Qué piensan de todo esto?

¡Qué hermoso es pensar en esto, en estas palabras de Jesús, en este regalo!

Ante este descubrimiento tan hermoso en estas palabras de Jesús,

¿Alguien quisiera decir algo más?

Ayúdales a darse cuenta de que las pequeñas semillas, van creciendo de una manera silenciosa, sin que nos demos cuenta,

alimentándose de los elementos de la Creación que Dios nos regala, como el agua, el sol, el aire. Y en esa pequeña semilla actúa la

fuerza interior de Dios que la ayuda a crecer hasta convertirse en un gran árbol que da buenos frutos que nos sirven de alimento (como

la mostaza, las frutas, los granos de trigo, etc.).

Así también Dios actúa en nuestro interior, nos alimenta de la Eucaristía y de los sacramentos, de su Palabra en los evangelios, de su

Fuerza y Amor en la oración, y va fortaleciendo y alimentando nuestra alma, para que también demos frutos, ¿cuáles frutos podremos

dar? Los frutos del amor, de hacer el bien, de ayudar a los demás, de mejorar el lugar donde vivimos. De esta manera, aunque somos

pequeños y necesitados de Dios, si nos dejamos guiar por el amor, su Fuerza va a actuar en nosotros para hacer grandes cosas por

amor y para vivir en el amor.

- Fuentes: - Catequesis de el Buen Pastor, primer nivel.

- Referencia de los libros del programa NET: Semilla de mostaza, libro “Amigos de Jesús” 1º y 2º

- Ahora pregúntales si les gustaría hacer algo pequeño pero que se convertiría en un bien muy grande, con la ayuda de Dios.

Platícales la situación que viven varios niños que sufren discapacidad y han podido salir adelante con ayuda del Teletón. Puedes

presentar algunos de estos casos, u otros que tú conozcas:

o Ana Sofía Garnica: https://youtu.be/suW-iuOs9Zo

o Carlita: https://youtu.be/AT0eR3sjBTw

o Daniela: https://youtu.be/a5a62njCYf4

o Diego y Estefanía: https://youtu.be/iCrPfWAebqU

Coméntales que aún hay muchos niños que necesitan ayuda, y si cada uno de nosotros ponemos nuestras capacidades, lo que sabemos

y podemos hacer, y unimos nuestras fuerzas, ¡podemos ayudar a muchos niños más y hacerlos felices! De esta manera así como la

semilla de mostaza, siendo pequeña se convierte en algo muy grande, si unimos muchas pequeñas acciones lograremos ¡mucho bien

a quien lo necesita!

Invítalos a realizar la siguiente actividad:

Actividad 2: con la fuerza de Dios, lo haremos posible.

Referencia de los libros del programa: “Descubro las virtudes”, libro Amigos de Jesús 3º a 6º, página 24.

Objetivo: planear y realizar un evento de recaudación que beneficie a los niños del Teletón. La idea principal es que los niños se

descubran capaces de poner sus aptitudes y talentos al servicio de los demás y sobre todo, ayudar a sus hermanos del Teletón. Hacer

énfasis de lo mucho que podemos aprender de los niños que se esfuerzan por su recuperación en los CRITS.

Instrucciones para el guía:

1. Para planear la actividad de recaudación a beneficio del Teletón, podrás solicitar el poster “Nuestro proyecto” disponible en las oficinas nacionales de NET.

2. Platica con tu equipo lo que creen que podrían hacer para ayudar al teletón y con eso hacer posible la ayuda a muchas personas que lo necesitan. Traten de llegar a un acuerdo de manera organizada.

3. El diseño del proyecto consta de tres partes: a) Planeación: objetivo o meta a lograr. b) Implementación: acciones concretas, dificultades y soluciones. c) Evaluación: lo que se logró, las personas beneficiadas y evidencias.

4. Involucren a sus familiares, amigos y vecinos para alcanzar su meta.

Compartimos un catálogo de actividades que han realizado en diferentes ciudades del país y que pueden ayudar a darnos algunas

ideas:

Venta de plantas. León, Gto.

Venta de boletos para centro recreativo “Jumpster”, Monterrey, N.L.

Venta de comida en los recreos del colegio, Durango, Dgo.

Función de cine a beneficio del Teletón, Cd. Obregón.

Boteo, Monterrey, N.L.

Evento para Guías, Mérida.

Venta de kit para manualidades, Cd. De México.

Reflexión de cierre:

Reflexionen y comenten juntos a través de preguntas sobre sus principales aprendizajes de esta misión. Puedes utilizar el “dado de

virtudes” del material de “Vida de club”.

Preguntas del dado:

- Doy gracias por… - Ejemplo de cómo practicar lo que conocí… - Me siento… - Algo bueno que descubrí… - Algo positivo de mí… - Abrazo grupal…

¿Qué hemos logrado?, ¿Qué aprendimos? ¡Cuántas cosas buenas podemos lograr si nos lo proponemos! Dios, al crearnos a su

imagen y semejanza, ha sembrado dentro de nosotros la semilla del amor y del bien. Es una fuerza interior que nos ayuda a crecer en

el amor, y como la semilla de mostaza, puede llegar a ser muy grande. Pidamos a Dios la gracia de siempre dejarnos guiar por Él, para

crecer en su amor y hacer mucho bien a nuestro alrededor.

Familiada

Motiven a sus niños a realizar las Familiadas ya que son una buena oportunidad para convivir en familia, ayudar a fortalecer los lazos

familiares y a formar personalidades sanas. Pueden escoger la que más les guste para realizarla con su equipo y se la cuenten a sus

papás. No olviden enviarnos sus fotos a [email protected]