El oeste. Una tierra grande, poderosa, peligrosa. Sólo al-gunos pueden vivir en este terreno...

¡Almenos así era antes de nosotros!

Antes del ferrocarril...

Antes de mi...

¡Harrington!

Por última vez; nadie quiere ese trén. Váyase o sufra las consecuencias.

Ya se lo dije sheriff Salomon, tengo ordenes de Washington de construir un tren que conecte a Nuevo México

con California. No importa lo que digan su gobernador o lo que piense

el pueblucho en su jurisdicción. El hombre decidió ponerle fin al oeste

¡Y eso es definitivo!

Puede que haya sido un gran capitán confederado en su época, Salomon. Pero los tiempos cambian. Es hora

de convertir esta tierra en oro. Y por favor: Deje esos cuentos y mitolo-

gías, no van con su edad.

El oeste muere cuando este quiera. Y si alguien está en contra: Cuidado, este se defenderá. Fue

advertido Harrington.

sssssssssssssssss

sssssssssssssssss

sssssssssssssssss

Esa noche, cerca a la linea principal del tran-nacional...

sssssssssssssssss

Gracias por tu ayuda, Harrington se negó a aceptar las leyes

locales, y así terminó.

El oeste morirá cuando este lo decida.

FIN