Ciudad de México, 12 de noviembre de 2018. Versión Estenográfica de la Mesa de Análisis “Aproximaciones del Desarrollo Constitucional y Legislativo del Derecho de Acceso a la Información”, en el marco de los trabajos del Foro “El Legado del Grupo Oaxaca. Tres Lustros de Evolución Normativa de la Transparencia y el Acceso a la Información Pública”, llevado a cabo en el Auditorio Alonso Lujambio del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales. Presentadora: Buenas tardes. Continuamos con la mesa de análisis “Aproximaciones del Desarrollo Constitucional y Legislativo del Derecho de Acceso a la Información”. Damos la bienvenida a Amalia García Medina, exlegisladora Está con nosotros la doctora Jacqueline Peschard Mariscal, expresidenta del IFAI. Bienvenida. Nos acompaña la exlegisladora Erika Larregui Nagel. Bienvenida. Presentamos con gusto al exmagistrado y académico, Salvador Olimpo Nava Gomar. Bienvenido. Nos acompaña también el destacado periodista Jenaro Villamil. Bienvenido. Está con nosotros el doctor Juan Francisco Escobedo Delgado, profesor investigador de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos. Bienvenido. Nos acompaña también el investigador de la Universidad de Guadalajara, el doctor Luis Ernesto Salomón Delgado. Bienvenido. También damos la bienvenida al comisionado Rosendoevgueni Monterrey Chepov. Bienvenido.

2

Cedemos ahora el uso de la voz al comisionado Rosendoevgueni Monterrey Chepov, moderador de esta mesa. Rosendoevgueni Monterrey Chepov: Muchísimas gracias. Muy buenas tardes tengan todos ustedes. Bienvenidos a ésta, su casa, para algunos todavía más casa, como la expresidenta del IFAI, casa de todos ustedes, a este encuentro que se tuvo a bien denominar “El legado del Grupo Oaxaca”, a tres lustros de los trabajos que dieron origen a lo que hoy se encuentra materializado legal y físicamente en nuestro andamiaje jurídico. Efectivamente, hace poco más de 15 años se sembró una semilla, como aquí se ha dicho en las distintas mesas, que ha rendido frutos en el campo de la gobernabilidad democrática en México, el régimen de transparencia y acceso a la información. Es un mérito de huella imperecedera que ese grupo de entusiastas bautizado por la periodista Ginger Thompson, del New York Times, como el Grupo Oaxaca, nos legaran el primer resultado efectivo de un país en transición o alternancia. En mi opinión, creo que nadie se esperaba el éxito y la evolución del derecho de acceso a la información y de los diseños institucionales responsables de garantizarlo. Por eso, mi reflexión inicial para esta mesa es destacar la importancia de un ave raris en la historia contemporánea mexicana en torno a las instituciones democráticas. No fue el llamado de los políticos, tampoco los acuerdos cupulares partidistas, ni siquiera una esfera de campaña electoral lo que proporcionó o lo que propició una nueva visión de la relación Estado-sociedad. Esa nueva idea de vincular a las instituciones públicas y a la sociedad civil tiene una raigambre eminentemente social, una legitimidad que pocas expresiones en ley han tenido. Podrá decirse que la Ley Federal de Transparencia del año 2002 fue una iniciativa del Ejecutivo Federal, sí, en términos formales, pero en el

3

fondo mantiene un anclaje social y desinteresado, sin más fin que reforzar la participación democrática en los asuntos públicos, porque democracia no es sólo sufragar, sino también preguntar y exigir las decisiones documentadas de las instituciones públicas. Ese es el legado, a mi modo de ver, del Grupo Oaxaca, aunque, por supuesto, no puede reducirse sólo a eso, ya que puede comprenderse desde diversas ópticas; por ejemplo, el activismo social de los integrantes del Grupo Oaxaca permitió poner fin en el año 2002 al largo iter del derecho a la información; no obstante, como también aquí se ha multicitado, no obstante que desde el año de 1977 se había consagrado en la Constitución. O bien, gracias a la versión de la Ley Federal de Transparencia proyectada por el Grupo, detonaron en un efecto dominó o cascada que impulsó la generación de las leyes en las distintas entidades federativas que conforman la unión, por lo cual se puede hablar de la primera generación de leyes de transparencia. Dicha generación es el primer esfuerzo por regular el acceso a la información. En fin, son muchos los legados del Grupo Oaxaca, a cuyos integrantes debemos expresar nuestra admiración, nuestro respeto, pero, y por sobre todo, nuestra gratitud. Muchísimas gracias por acompañarnos el día de hoy. Me permitiré ceder el uso de la palabra a nuestros distintos invitados, y tampoco interrumpiré, por cuestiones de tiempo y de lo nutrida que se encuentra la mesa al término de cada una de las exposiciones, sino con algún comentario final. Me permitiría presentar en primera instancia a uno de nuestros invitados, Luis Ernesto Salomón Delgado. Él es abogado, por la Universidad de Guadalajara, y especialista en derechos humanos, por la Universidad Complutense de Madrid; y doctor en derecho por esa misma Universidad. Fue miembro del Sistema Nacional de Investigadores; coordinador el posgrado de derecho, en la Universidad Panamericana de Guadalajara.

4

En el Senado de la República fue Secretario Técnico de la Comisión de Patrimonio Cultural de la Nación y asesor. Fundó la Revista Educar, de la Secretaría de Educación del gobierno de Jalisco. Fue coordinador editorial del periódico El Informador, de Guadalajara, del que actualmente es columnista; formó, como todos lo sabemos, parte del Grupo Oaxaca; fue síndico del Ayuntamiento de Guadalajara, en el periodo 2012-2015; y fue jurado del Premio Nacional de Periodismo durante los años 2001, 2002 y 2003. Bienvenido, Luis Ernesto. Muchas gracias por acompañarnos. Luis Ernesto Salomón Delgado: Muchas gracias por la presentación. Gracias al Consejero Presidente y a todos los consejeros del INAI. Considero un privilegio estar esta tarde con ustedes. No voy a abusar en el tiempo, pero quiero hacer una reflexión tratando de compartir con ustedes parte de la experiencia de lo que sucedió con el Grupo Oaxaca, con el momento que estamos viviendo actualmente en el país. En aquellos años México vivía una esperanza de transformación; recién había un presidente de un partido distinto, presidente de la alternancia. Hoy vivimos un momento parecido, hay presidente nuevo que significa otro tipo de alternancia y que significa también un parteaguas. En aquel momento la sociedad civil debatía sobre cómo ensanchar los caminos de la democracia, como pasar, como ya se dijo aquí, de la democracia representativa a la democracia participativa. Creo que hoy en el debate político, en el debate mediático y en el debate social estamos en un momento parecido, ¿cómo ensanchamos el campo de la democracia participativa?

5

En aquel momento creímos nosotros en el Grupo Oaxaca, que una iniciativa como ésta iba a ser recibida con vítores, con aplausos y que el presidente recién puesto en el poder nos iba a recibir muy amablemente y que nuestra iniciativa iba a ser potenciada. No fue así. Nuestra iniciativa fue bien recibida después, gracias a lo que significó la participación del Grupo Oaxaca y del impulso que recibió en el Poder Legislativo la iniciativa. Hoy estamos en una encrucijada parecida. ¿Qué es lo importante que podemos decir que sucedió entonces? Y que creo que es una suerte del destino que los señores consejeros del Instituto nos convocan y nos volvamos a encontrar los miembros del Grupo Oaxaca tantos años después, que ha sido tan agradable y agracemos mucho la iniciativa del Instituto. Que estamos en el mismo propósito. Creo que el punto central es cómo mantenemos el patrimonio institucional que se ha consolidado a lo largo d estos 15 años; hemos construido un patrimonio los mexicanos, un patrimonio institucional. Estamos aquí, cobijados por este patrimonio institucional. La gran cuestión es cómo ensanchamos, cómo fortalecemos ese patrimonio institucional. Lo dijo, ya hace unas horas, quien me ha antecedido en el uso de la palabra, específicamente Jorge, dijo, brillante como es él: “Las solución es más independencia al Instituto y más fuerza institucional”. Ese es el futuro. Creo, me atrevo y –pido una disculpa por tener que retirarme antes de terminar el Seminario completo, porque tengo que tomar un avión para regresar a Guadalajara– quiero decirles que quizá esa es la aportación más importante que podemos hacer ahora quienes formamos parte del Grupo Oaxaca, volver a levantar la voz para llamar la atención de lo importante que es este momento para ensanchar los caminos de la democracia y la defensa de un derecho fundamental: El Derecho a la Información. Un derecho que tiene que ver con la dignidad de la persona y no con una coyuntura política.

6

Hasta aquí dejaría yo mi intervención, agradeciendo profundamente su paciencia, la invitación y tratando de ser provocador. Muchas gracias. Rosendoevgueni Monterrey Chepov: Muchísimas gracias y comprendemos, por supuesto, los compromisos académicos y tener que retirarte, Luis Ernesto. Pero, de verdad, te agradecemos mucho a nombre de todos mis colegas, de mis compañeros, de todos quienes nos hemos acompañado toda esta jornada, todo el día de hoy; de haber hecho el esfuerzo por estar aquí, con nosotros, muchísimas gracias. Me permitiría presentar y cederle el uso de la voz a la licenciada Amalia García Medina. Ella cuenta con estudios de Sociología por la Universidad Nacional Autónoma de México y de Historia por la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla. Fue integrante del Primer Consejo del Centro de Terapia de Apoyo a Víctimas de Violación; consejera de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal; integrante del Consejo Consultivo del Programa Nacional de la Mujer. Ha participado en diversos grupos ciudadanos, entre ellos: Acuerdo por la Democracia, 20 Compromisos por la Democracia, Grupo San Ángel, Grupo de los Nueve, Grupo de la A a la Z. Entre sus cargos de elección popular está el haber sido diputada federal en la Quincuagésima Cuarta Legislativa de 1988 a 1992; diputada en la Segunda Asamblea de Representantes del Distrito Federal, de 1991 al 1994; senadora de la República en la Quincuagésima Octava Legislatura, de ’97 al ’99; diputada federal y gobernadora, por supuesto, como todos sabemos, de Zacatecas, además de Secretaria de Trabajo y Fomento al Empleo en la Ciudad de México. Bienvenida, Amalia, y es un gusto también tenerte aquí, con nosotros.

7

Amalia García Medina: Muy amable. Muchas gracias. Me siento realmente muy entusiasmada y muy honrada de estar invitada en este evento tan importante, para hacer un recuento sobre lo que se ha avanzado y en qué momento, en qué situación estamos, en el derecho de acceso a la información. Puesto que tenía esta invitación y formé parte de uno de los múltiples grupos que se han mencionado aquí, en esta presentación, rescaté uno que fue elaborado en 1994, por el Grupo 20 Compromisos por la Democracia. El año de 1994 lo vemos tan cerca y tan lejos todavía, por todo lo que ha sucedido, pero entre los compromisos que se intentaba que asumieran, no solamente los candidatos a la Presidencia, porque este documento se dio a conocer el 17 de enero de 1994, y si nos ubicamos en ese recordaríamos que fue un año impactante, impresionante, por la sacudida que hubo en el país: Entró en vigor el 1º de enero el Tratado de Libre Comercio, pero también apareció el Ejército Zapatista de Liberación Nacional, y luego el candidato del PRI, Luis Donaldo Colosio, fue asesinado. Fue un momento, una época realmente muy impactante, muy fuerte, de mucha conmoción. Pero este documento 20 Compromisos por la Democracia, que la intención que se tenía por quienes formamos parte de él era: Entregarlo a los candidatos, para que asumieran un compromiso. Decía, por ejemplo, en la parte que se refiere al fortalecimiento del Poder Legislativo, decía: “Presentar con 90 días de anticipación los Proyectos de Ley de Ingresos y del Presupuesto de Egresos de la Federación”. ¿Por qué presentar con 90 días de anticipación?

8

Bueno, no fui diputada federal en 1988, y les quiero decir que el Primer Proyecto de Presupuesto, Ley de Ingresos y Presupuesto de Egresos, nos lo presentaron en diciembre; un día se leyó en el Pleno, se turnó a Comisiones y al día siguiente se puso a votación. Es decir, no supimos qué contenía. ¿Cuál derecho a la información sobre el presupuesto de la nación, sobre la Ley de Ingresos? No había esa posibilidad. Entonces, como un sueño se hablaba de que se pudiera presentar el Presupuesto de Ley de Ingresos y de Egresos 90 días antes de su votación, para conocerlo y para discutirlo. Yo aquí diría incluso que quienes formamos parte de la oposición votábamos en contra, y claro que había una avalancha de opinión pública promovida que decía “todo lo votan en contra”. ¿Cómo íbamos a votar a favor algo que no conocíamos? Simplemente no había información. También en otro de los puntos de este documento dice “promover que el contador mayor de Hacienda de la Cámara de Diputados, responsable de revisar el ejercicio del gasto público, sea nombrado por una mayoría calificada a propuesta de la primera minoría”. Quien revisaba el recurso público, el ejercicio del gasto público era el PRI, que estaba en el gobierno, que llevaba más de 60 años en el poder y la oposición no tenía participación, es decir, se autorrevisaban, no había una revisión. Entonces la propuesta era que fuera nombrado por dos terceras partes y que a propuesta de la primera minoría fuera el contador mayor de Hacienda de la Cámara de Diputados. Bueno, ha corrido mucha agua desde entonces, ya tenemos una Auditoría Superior de la Federación, hay debate. Y luego la obligación del Ejecutivo de proporcionar la información oficial que soliciten las comisiones y los grupos parlamentarios del Congreso. No existía ese derecho.

9

El Ejecutivo Federal, es decir, el Presidente y su Gabinete no tenían obligación de rendirle cuentas absolutamente a nadie. Y aquí se planteaba que pudieran ser informadas las comisiones de Congreso que lo solicitaran por el Jefe del Ejecutivo. Y luego, en la parte final de este documento, de 20 Compromisos por la Democracia, se planteaba hacer públicas; no voy a leerlos todas, solamente unas cuantos leí y éste otro, “hacer públicas las declaraciones patrimoniales del Presidente de la República y los miembros del Gabinete”. No se hacían públicas, se presentaba la declaración patrimonial y nadie sabía qué contenía la declaración patrimonial del Presidente y su Gabinete, todo era un acertijo. Y al final de este documento decía, el número 20, “reglamentar el derecho ciudadano a la información”. Si lo vemos a la luz de lo que hoy tenemos parece muy modesto, pero en ese momento era una exigencia absoluta, porque además en la mayor parte de las naciones democráticas, de los países altamente industrializados, ya el derecho a la información existía desde mucho antes; y además en la Declaración Universal de los Derechos del Hombre desde mil setecientos y tantos, ya existía desde 1789, era un derecho y en todas las declaraciones existía como un derecho humano, el derecho humano a la información. En nuestro país, casi a finales del siglo XX, todavía estábamos tímidamente; digo tímidamente por el contenido, aunque era un enorme esfuerzo intentando que hubiera el derecho humano a tener información. Efectivamente, como se ha dicho aquí, el Grupo Oaxaca fue fundamental, porque puso en el centro que la información es un bien público. ¿Qué quiere decir esto? Que le pertenece a la sociedad, que toda la información en poder del Estado, la información pública es un derecho de los ciudadanos y las ciudadanas tener acceso a ella. Las resistencias han sido enormes, aquí se relataban las resistencias del Presidente Fox que en la campaña con el Grupo San Ángel, con el Grupo 20 Compromisos por la Democracia, hizo compromisos, pero en el momento en que llega al gobierno después de las elecciones del año 2000 empieza a actuar tímidamente.

10

Santiago Creel era el Secretario de Gobernación y había formado parte de estos grupos y empezó a plantear que había que ser prudentes, la prudencia por delante, no los derechos por delante; la prudencia. ¿Pero de qué prudencia se trataba? No había ninguna razón sustancial ni de fondo; sin embargo, era proteger la opacidad. Y el Grupo Oaxaca jugó un papel formidable, y el hecho de que en el año 2002 finalmente se haya aprobado la primera ley para que se tuviera derecho a tener información, reformando el artículo 6º Constitucional, resultó muy importante. Yo fui gobernadora elegida en el año 2004, es decir, posterior a esta ley e inmediatamente en cuanto entré, había formado parte de estos grupos. Fue tal vez uno de los primeros estados que tuvo su Ley de Acceso a la Información y tuvimos desde ese periodo a diversos sujetos obligados, no solamente el gobierno del estado, la administración pública estatal, los municipios, sino también se incluyeron a diversos sujetos que tenían que estar obligados; quien recibiera recurso público, ya fuera una universidad, ya fuera iniciativa privada, distintos actores, tenían obligación de entregar información. Y luego, a iniciativa, lo quiero decir porque estamos en el Auditorio Alonso Lujambio, a iniciativa de Alonso Lujambio, nos buscó a varios gobernadores para ver si estaríamos dispuestos a hacer cabildeo en la Cámara de Diputados para una reforma adicional al 6º Constitucional para que fueran sujetos obligados no sólo el Gobierno Federal, sino también los gobiernos estatales y los gobiernos municipales. Fue muy importante esta iniciativa que vino también desde fuera para que se hiciera esta reforma. Yo lo que puedo decir es que hoy hemos dado un paso sustancial a lo largo de años en nuestro país y con los distintos avances que existen; sin embargo, todavía existen resistencias, todavía se siguen enfrentando resistencias.

11

A pesar de las reformas sucesivas, la reforma de 2014, que fue muy importante, porque incluyó ya a diversos sujetos obligados, la obligación del Estado de dar información y, sin embargo, hay resistencias. Yo solamente, para no alargarme, haría mención de algunos de los retos que ha enfrentado el Instituto Nacional de Acceso a la Información actualmente. Bueno, esta batalla que desde fuera hemos presenciado, este esfuerzo para que la PGR pueda hacer pública la información de los documentos del caso Odebrecht ha sido formidable y esto muestra las resistencias que aún con el camino andado todavía existen, porque además el “argumento” de la PGR para entregar esta información sobre el caso Odebrecht es que, además desacatando ya la determinación del INAI, es que presentó un recurso el exdirector de Petróleos Mexicanos y que este exdirector de Petróleos Mexicanos ha sido respaldado por la justicia en la protección de sus datos personales. Y el INAI lo que señala es que no está intentando que se den a conocer datos personales, se trata de todos los documentos y toda la información que tienen que ver con recursos en un escándalo internacional por corrupción que se convierte en un asunto de interés público y la ciudadanía tiene derecho de conocer exactamente qué está sucediendo. Y creo que el INAI tiene retos formidables y que los ha estado asumiendo de una manera que a mí me parece muy interesante. Por ejemplo, esta determinación que tomó por el Movimiento de 1968, de que se abra toda la documentación, que deber ser información pública, me parece muy importante. Y luego, en el caso de algunos actores que se resisten, porque señalan que no debe considerárseles como sujetos obligados, aunque la ley ya lo diga, aunque estén las reformas avanzadas, por ejemplo, los sindicatos, y me refiero a un sindicato especialmente que a mí me genera un enorme… El dirigente digo, no el sindicato, el dirigente y algunos de sus integrantes, una enorme urticaria. Me refiero al Sindicato Ferrocarrilero, al dirigente Víctor Flores, que tiene 29 años de ser dirigente, Secretario General del Sindicato Ferrocarrilero.

12

En 1997 se creó un fideicomiso para las pensiones de jubilados por 13 mil 530 millones de pesos, desapareció el dinero y, a pesar de que éste desapareció, en 2010 se declaró una quiebra del fideicomiso y el Gobierno Federal le inyectó 21 mil millones de pesos a ese fondo. Tendría derecho la ciudadanía, no solamente los trabajadores ferrocarrileros jubilados, de conocer qué pasa con ese recurso, si hay recurso público ahí. Absolutamente sí, 21 mil millones de pesos inyectados a ese fondo. Son situaciones que aún hoy se presentan y que resultan inaceptables. Tener reformas constitucionales sucesivas, tener la Ley de Acceso a la Información y sus reformas, deben ser instrumentos respaldados y también, por supuesto, el Instituto el organismo garante del derecho de las personas y de este bien público, que es el derecho a la información; para que la información esté vinculada a la transparencia, a la rendición de cuentas, que es también un viejo anhelo que finalmente se ha venido concretando. Pero para poder ponerle un alto al atropello, al abuso, y para que no haya impunidad. Yo por eso celebro el que se haga este recuento a 15 años. Y nuevamente reconociendo al Grupo Oaxaca y al INAI actualmente, porque continúan en esta labor enfrentándose a poderes económicos y políticos muy fuertes. Pero su tarea es enfrentarlos con la Ley en la mano, formando parte de los instrumentos esenciales de un Estado de Derecho; para que tengamos una nación en la cual el acceso a la información garantice que haya una moral pública, en el sentido en que lo decía José María Luis Mora, una moral pública en la que el estado sea representante, viendo los intereses de la nación y de la gente. Muchas gracias. Rosendoevgueni Monterrey Chepov: Muchísimas gracias, Amalia. Me provoca mucho reaccionar con las intervenciones de nuestros invitados, pero me comprometí hacerlo al final y así lo haré. Me autocensuraré por el momento.

13

Me permito cederle el uso de la palabra también, por razones de tiempo, a Erika Larregui Nagel. Es licenciada en derecho; ha sido senadora de la República; diputada federal y regidora; se ha desempeñado en el área de relaciones internacionales; en el área de medio ambiente. Actualmente es directora general de Ecología y Medio Ambiente, en el municipio de Huixquilucan. Bienvenida. Erika Larregui Nagel: Muchas gracias. Para mí es un gusto enorme estar aquí. Quiero agradecer a Grupo Oaxaca todos sus esfuerzos. Como mencionó Luis Ernesto, yo estuve durante un tiempo en el Poder Legislativo, y desde ahí fue dando el impulso que necesitaban por parte de nosotros. Quiero también, como mencionó Amalia, traer aquí al ahora a una persona que para mí fue excepcional: Alonso Lujambio Irazábal, que en paz descanse. Las veces que me reuní con él siempre se juntó conmigo y casi que le agradezco el estar hoy aquí, porque no tenía que convencerme, porque yo siempre he sabido que la información es poder y era un poder que todos los mexicanos teníamos que tener, no nada más algunos. Él siempre impulsó con su explicación, con su dedicación, con su tiempo, de una manera en la que, no tengo que decir que me convenció, porque yo estaba convencida que esta información era para todos, pero agradecer el trabajo de Alonso es para mí muy importante. Muchas gracias por haberme invitado a este panel.

14

Sí siento que vamos en un momento, como mencionó ahora Luis Ernesto, que va a ser otra vez otro presidente distinto, como en ese caso fue Vicente Fox. Ahora empezaremos a transitar de una manera distinta y espero que el acceso a la información siga siempre como ha estado hasta ahora, abierto para todos nosotros; y del Poder Legislativo poder seguir impulsando reformas que lo hagan. La que yo presenté en la Cámara de Diputados, en la LX Legislatura, estaba México en un momento que se encontraba con evolución y considerándose como un régimen democrático. Queríamos que los mecanismos de control fueran eficaces y, a través de ellos, los ciudadanos pudieran exigir cuentas a los servidores públicos. Uno de estos mecanismos es la información. Muchísimas gracias al Grupo Oaxaca, por haberme invitado aquí y estoy muy contenga de estar con ustedes. Muchísimas gracias. Rosendoevgueni Monterrey Chepov: Muchísimas gracias a Erika. Corresponde presentar a Juan Francisco Escobedo Delgado; él es Doctor en Ciencia Política y Sociología, por la Universidad Complutense de Madrid; profesor de la Licenciatura y Posgrado en universidades privadas y públicas; servidor público en instituciones locales y federales; articulista en periódicos locales y nacionales. El último libro publicado “La invención de la transparencia”; representante del Grupo Oaxaca, por supuesto, en la mesa de negociación de la que emanó la Primera Ley Federal de Transparencia y Acceso a la Información y, por supuesto, es consultor profesional. Bienvenido Juan Francisco, nuevamente. Juan Francisco Escobedo Delgado: Gracias, Eugenio.

15

Buenas tardes a todos. Gracias por la invitación. Comisionados; distinguidos invitados a esta mesa. Contra mi costumbre, tengo aquí un texto escrito, que luego les dejaré por ahí, si es de interés para su difusión. En primer lugar, quisiera señalar que en la coyuntura actual, en la que nos encontramos, la mejor defensa del INAI radica, desde mi perspectiva –y coincido con Amalia–, en que el INAI y sobre todo el Pleno del INAI, siga emitiendo resoluciones independientes, autónomas; que no les tiemble la mano frente a ningún poder constituido, a ningún poder fáctico, a ningún actor político. Porque un órgano cuasi-jurisdiccional, como lo es el INAI, radica su fuerza precisamente en el comportamiento de quienes lo encabezan, y la función esencial de quienes encabezan al INAI, es: Tutelar de manera efectiva el derecho humano a saber de las personas, en relación a los asuntos públicos. Decía un viejo historiador de la época del porfiriato, Zayas Enríquez, y lo voy a parafrasear: “La única manera de impedir una revolución es encabezándola”. La única manera de impedir que los cambios arrollen al INAI y al patrimonio institucional –como lo señala Luis Ernesto– es encabezando el cambio; con prestancia, con determinación, con convicción, estableciendo un discurso y una narrativa adecuada, para comunicarla a la sociedad y esta en condiciones de defender lo que la misma sociedad se dio a sí misma, a partir de un proceso de relación, de diálogo, de cabildeo y de gestión con los actores políticos. Ese fue el origen de la Ley. La Ley no es patrimonio ni de Fox ni del gobierno de Fox y de ningún partido político.

16

La Ley fundacional es hija legítima de la sociedad mexicana; de un segmento de la sociedad mexicana que se denominó Grupo Oaxaca, que dio un paso al frente y de manera desinteresada se puso a trabajar en este tema. Decía el escritor Milan Kundera: “La lucha del hombre contra el poder es la lucha de la memoria contra el olvido”. En efecto, la sabia que le da vida a un orden político democrático, se compone de una prodigiosa mezcla de libertad de expresión, libertad de información y de deliberación pública sobre los asuntos públicos y de interés público. Cuando esta sabia escasea, se crean condiciones propicias para la alineación de las personas, para le uso privado de los bienes y de las instituciones públicas, así como para el ejercicio autoritario del poder político. En esa tesitura y aprovechando la estructura de oportunidades que se abrió con la alternancia, en el año 2000 tomó cuerpo y sentido el Grupo Oaxaca y la agenda de modernidad política, que defendió públicamente en diversos escenarios durante la etapa inicial del gobierno de Fox hasta conseguir que se aprobara la Ley Federal de Transparencia y Acceso a la Información. Se trataba de abrir el ostión del régimen cleptocrático mexicano, empezando por el eje articulador, la Presidencia de la República y la cámara del Poder Ejecutivo Federal, cuyas decisiones históricamente se caracterizaron desde los albores de la Independencia como opacas y discrecionales. En esta perspectiva diacrónica, una vez que los componentes democráticos del régimen político empezaron a predominar sobre los componentes autoritarios, no se justificaba para el régimen político ni para la sociedad seguir difiriendo la regulación en la materia a partir de lo que ya se había incorporado en diciembre de 1977, en el contexto de la reforma política impulsada por Jesús Reyes Heroles. Una combinación de sentido práctico, experiencia política, cierto conocimiento experto, ejercicio de los derechos políticos en una

17

frecuencia de alta intensidad y, sobre todo, una lectura continua y atenta del desarrollo de los acontecimientos políticos que desencadenó la alternancia en el poder, hicieron posible que la agenda y los proyectos del Grupo Oaxaca se instalaran en la esfera pública y con el tiempo arraigaran de manera acentuada en la narrativa, en las estrategias y en el imaginario de las élites políticas y de segmentos cada vez más importantes de la sociedad. Tal vez la marca indeleble del Grupo Oaxaca se explique mejor si se atiende el viejo consejo de Michel Crozier, que consideraba que la política de largo alcance y calado es la que se deriva de la política modesta que trabaja con objetivos precisos. Quienes participamos en el grupo y aportamos nuestro tiempo y nuestras ideas para impulsar esa agenda de fuerte contenido cívico, democrático y liberal, lo hicimos probono. Nadie recibió ningún pago ni obtuvo ninguna prebenda; en todo caso, tal vez fatigamos un poco; no voy a leer todo, estoy extractando, tal vez fatigamos un poco el presupuesto personal de Luis Javier Solana, que fue anfitrión espléndido de muchas sesiones en su casa. A la distancia las lecciones que podrían recogerse de las ya históricas jornadas de deliberación interna, deliberación pública, difusión de artículos, negociaciones, cabildeo y gestiones de diverso orden y en diversas arenas parlamentarias son múltiples y aleccionadoras. Durante estos años muchos amigos, alumnos y conocidos me han preguntado de distintas maneras esencialmente dos cosas: ¿Por qué no siguió incidiendo en la vida política el Grupo Oaxaca? Y, por otra parte, ¿por qué ninguno de los miembros de su Comisión Técnica fue Comisionado del IFAI y ahora del INAI? Las preguntas siguen en espera de obtener las respuestas plausibles que cada integrante del Grupo podría emitir o no. Pero más allá de esas referencias anecdóticas, pero no menos importante, me parece necesario y oportuno recuperar algunas cuestiones centrales que estuvieron presentes a la hora de formular el borrador de la ley, así como en las deliberaciones múltiples que se

18

suscitaron en torno al proyecto y que podrían servir de boceto sobre el sencillo legado del Grupo Oaxaca, que se forjó ciertamente a pocos metros del majestuoso Convento de Santo Domingo. Veamos, primero, se trataba de impulsar un proyecto que se inscribía en el discurso de los derechos humanos y no en el horizonte temático de los derechos políticos. Es una diferencia fundamental de gran calado. Segundo. El proyecto buscaba que se establecieran en una ley los procedimientos sencillos y expeditos para que las personas ejercieran su derecho a saber, además de que dispusiesen de las garantías efectivas para materializar dicho derecho. No se trataba de blindar al poder público o establecer resquicios para ocultar información, el proyecto estaba al servicio de las personas, no del poder público. Tercero. Se trató de una iniciativa genuinamente ciudadana que intentó establecer los parámetros mínimos en la materia, el mínimo minimorum. Como Grupo no representábamos la voz del gobierno ni los intereses de ningún partido político y menos aún nos arrogamos la representación de la sociedad civil mexicana. Siempre subrayamos que el Grupo Oaxaca articulaba las coincidencias de un segmento de la sociedad, pero sabíamos que la viabilidad del proyecto radicaba en la búsqueda del consenso por medio del diálogo con el gobierno y con los partidos políticos. Trabajamos, como suele repetirlo mi tocayo Francisco Acuña, trabajábamos bajo el esquema de las aproximaciones sucesivas, había que sembrar el tema y seguir impulsando su desarrollo y la ampliación de sus alcances como ha ocurrido en los últimos tres lustros. Y aquí hago un paréntesis rápido, los actores políticos suelen caer con mucha frecuencia, y usaré un término muy español, en el adanismo político, en esta idea de que con ellos empieza la historia. Esta es una historia antigua, es una historia que tiene larga data, no la empezó el Grupo Oaxaca, el Grupo Oaxaca construyó un eslabón para

19

darle continuidad a un proceso de larga duración para usar esta expresión muy querida por los historiadores de la escuela de los anales, o sea, una historia de larga duración. Y al final se consiguió abrir ese régimen cleptocrático, por eso nunca jugamos al todo o nada. Cuarto. El Grupo encontró su fundamento en lo que entonces establecía el artículo 6º Constitucional. Recordemos que la reforma a la que alude Amalia García vino después en 2007, impulsada, en efecto, por Alonso, por Ricardo Becerra, y también participamos y ayudamos en ese proceso. Pero este planteamiento constitucional vago, esas 10 palabras que introdujo Reyes Heroles en el artículo 6º Constitucional, “el derecho a la información será garantizado por el Estado”, que todos ustedes se saben de memoria, tenía que reforzarse, entonces trabajamos en una argumentación y fundamentación con base en las referencias que nos ofrecía la doctrina internacional, las convenciones suscritas por México y aprobadas por el Senado, así como los diversos enfoques teóricos de las ciencias sociales que convergían en torno a esa agenda. Quinto. Para tutelar de manera efectiva el derecho de acceso a la información era necesario asumir una perspectiva crítica respecto de la funcionalidad y alcances de los poderes públicos, en especial del Poder Judicial. Se consideró o considerábamos que este Poder, tanto en el nivel federal como en sus expresiones locales, se encontraba lastrado de ineficiencias, corrupción y burocratismo como para derivar los aspectos contenciosos del proyecto establecidos en el proyecto de ley hacia esas aguas estancadas. Por eso se formuló un nuevo diseño que implicaba la creación de un órgano garante totalmente independiente del Poder Judicial y con atribuciones suficientes para promover el ejercicio de dicho derecho con un enfoque garantista. Por eso existe el INAI; si no, esto hubiera sido muy sencillo, derívalo al Poder Judicial, trasládalo a los jueces para que se atore, se empantane,

20

se disuelva y los ciudadanos queden una vez más inermes frente al poder. Sexto. Dado que el derecho de acceso a la información es un derecho humano, se insistió en el principio de que los legisladores no podrían introducir en lo sucesivo reformas regresivas que obstaculizaran su ejercicio o que ofrecieran coartadas a los poderes públicos para limitarlo. Para decirlo a la manera de Luigi Ferrajoli: “El derecho de acceso a la información, en tanto que es un derecho humano, es indecidible en sentido regresivo”. Y esto era válido entonces, y en estos tiempos que corren es todavía más importante subrayarlo, ya que sólo se pueden realizar reformas progresivas. Y el INAI tiene que dar ese debate también, tiene que argumentar, que construir una narrativa. Todos los que trabajan en el INAI, todos los que son voceros tienen que meterse a este discurso, esto es fundamental; todo proyecto institucional, toda defensa de una institución pasa también por el debate público. Por eso ahora en un artículo que luego circula y que hace rato me citó Martí Batres, yo siempre sostuve: El Grupo Oaxaca lo que hizo fue una movilización de opinión pública, para hacer evidente un proyecto que había estado discurriendo en los ríos subterráneos de la sociedad y a veces de manera marginal; y no conseguía incorporarse a la agenda pública, no conseguía llegar con fuerza a la arena parlamentaria. Séptimo, ya casi termino, son 10 nada más. Dado que las relaciones entre las personas y los poderes públicos son asimétricas y desfavorables para las personas, éstas tienen todo el derecho de mantener una actitud de desconfianza hacia el poder público; esa es la relación natural del ciudadano y de las personas hacia el poder, tiene que estar fundada una desconfianza. ¿Por qué tenemos a priori que tener confianza en alguien que ejerce el servicio público? El que ejerce el servicio público tiene que construir las condiciones favorables para modificar la percepción de la sociedad y de los

21

ciudadanos, y entonces que ellos lleguen a la conclusión que ahora sí se desempeña de manera eficiente, es al revés. Por lo tanto, los ciudadanos no se encontraban, y aún hoy no se encuentran obligados a justificar sus solicitudes de información ni a demostrar legitimación activa. Hace rato Beatriz Paredes decía que había que enfocarse en los temas finos. No, no estoy de acuerdo; no ha leído las cosas adecuadamente; hay que actualizarse; esa no es la visión. El ciudadano puede pedir lo que quiera. ¿Para qué? Simplemente para molestar al Gobierno, para sacudir al servidor público. No tiene por qué justificarlo. Hay acercarle un lote de libros o cosas del INAI ¿no? No fue fácil establecer estos criterios en la Ley fundacional, pero al final del día los representantes del Poder Ejecutivo Federal accedieron; y hoy en día constituyen principios axiales que contribuyen a tutelar de manera efectiva el ejercicio de dicho derecho. Octavo. La creación del IFAI le dio un carácter irreversible. Este es un tema que lo dejo en la mesa para los comisionados del IFAI. Le dio un carácter reversible al proceso de transición del viejo modelo tríadico de división de poderes en tres ejes que se complementan y contrapesan hacia el modelo poliédrico en el que ha devenido la estructuración del Estado mexicano. Lean a Montesquieu, pero vayan más lejos que Montesquieu. En ningún lado ya se plantean las cosas en un esquema tríadico; el Estado moderno es otra cosa; el espíritu de las leyes se escribió en otra circunstancia. La razón de ser de los órganos constitucionales autónomos, radica en la complejidad, en el incremento de funciones del Estado, en los múltiples nexos y contrapesos que se deben dar. Ese discurso es un discurso del siglo XIX. Estamos en el siglo XXI. Trascendamos a Montesquieu, pero previa lectura de Montesquieu.

22

Las ideas, entonces, de Montesquieu, son un punto de partida para la conformación del Estado liberal; pero de ninguna manera se pueden considerar como la piedra roseta, para diseñar el Estado Constitucional liberal y democrático que se requiere en los tiempos que corren. Nueve. El proyecto se desarrolló con una perspectiva dual. El acceso a la información en posesión de los poderes públicos, debe fluir bajo el principio de máxima publicidad y, al mismo tiempo, la protección de datos personales debe tutelarse bajo el principio de máxima protección. Estos axiomas han servido de marco de referencia, para la actualización de las disposiciones normativas en la materia, que ya se localizan en corpus normativos distintos, pero que son tutelados por el mismo órgano garante. Yo veo al INAI sobresaturado, lleno de funciones, lleno de cosas y cada día hay la amenaza y el riesgo de que le sumen más cosas. Las funciones originales del INAI no estaban vinculadas a temas de corrupción. Tengan mucho cuidado. Mientras más funciones tiene una institución, la posibilidad del riesgo de la ineficiencia aumenta, crece. Para eso es la división funcional. Eso también hay que defenderlo. Hay muchos temas en los que hay que defender este capital político y capital social acumulado, producto de la inteligencia social y de diversos impulsos, a lo largo del último medio siglo en este país, como bien lo ha documentado Amalia García. 10. Al final del día se trata de un ejemplo exitoso de gestión de un programa de reformas legales e institucionales desde la arena de la sociedad civil. El Grupo Oaxaca puso sobre la mesa la agenda de la modernidad política inconclusa, que el país viene arrastrando desde el siglo XIX.

23

En ese sentido, se trató de un proyecto que combinaba la perspectiva republicana. El tema no es nuevo, es viejo; no se inventó ayer, es viejo. Publicidad. El enfoque liberal, libertades y derechos, con el horizonte de la democracia de los modernos; deliberación, libertad de información y toma de decisiones informadas. Finalmente, sin demérito de algunos libros que se han escrito, como el de Issa Luna y otros, pongo en la mesa: Trabájese en la recuperación de la memoria también; ¿cómo se llegó a este punto? ¿Qué ha pasado en estos 15 años? ¿Cuáles son los testimonios que hay? ¿Cómo ha participado la sociedad? ¿Cómo se han movilizado las personas para solicitar información? Hace falta no una historia; historias que documenten todos estos procesos. Pero también hacen falta historias documentales, para recuperar ese tipo de documentos, como los que ahora estaba exhumando Amalia, los 20 Compromisos por la Democracia. Pero esto está en los archivos personales. Hay que ponerlos en circulación; hay que ponerlos a disposición de todos. De eso se trata. La creación de la Ley Fundamental, fundacional, terminó con el monopolio de la información por parte del Estado y de los periodistas; marcó el inicio del fin del manejo discrecional y patrimonialista de la información pública e introdujo en la narrativa de la sociedad una perspectiva crítica, exigente, portadora de derechos y legítimamente desconfianza respecto de los poderes públicos y de quienes los representan. Este punto de inflexión ensambla con los nuevos tiempos de la postdemocracia mexicana, que ha entrado en una nueva etapa y cuyo curso de acción es incierto.

24

Los dispositivos legales e institucionales que se crearon hace 15 años y que se han reformado, serán decisivos para esclarecer las fases y zonas oscuras de la nueva etapa que se ha abierto a partir del pasado 1 de julio. No dejemos que se debilite el legado ni que se apaguen las fuentes de luz, exijamos siempre luz y más luz. Muchas gracias. Rosendoevgueni Monterrey Chepov: Muchísimas gracias, Juan Francisco. Salvador, le cedería yo, es turno de cederle el micrófono a Salvador Olimpo Nava Gomar. Él es doctor en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid, especialista en Derecho Constitucional y Ciencia Política por el Centro de Estudios Políticos y Constitucionales, y abogado por la Universidad Iberoamericana. Magistrado de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, director de la Escuela de Derecho de la Universidad Anáhuac, investigador del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM y miembro del Sistema Nacional de Investigadores. Se ha desempeñado como catedrático en universidades de todas las entidades federativas de la República y en 19 países, autor del libro sobre derecho constitucional electoral parlamentario, transparencia y acceso a la información. Bienvenido nuevamente, Salvador. Salvador Olimpo Nava Gomar: Muchísimas gracias, Eugenio. Muchas gracias por la invitación. Jacqui querida, un placer compartir; Amalia, Erika, Luis Ernesto, Paco y Jenaro; señores comisionados, Blanca Lilia, Oscar, muy querido Paco.

25

Venía muy temprano para acá muy contento, porque me parece un acto muy generoso que los señores comisionados del INAI recuerden lo que hicimos un grupo de profesores entonces y de periodistas para engendrar lo que antes era una entelequia y que hoy que en estas paredes, nada menos que con el nombre de Alonso Lujambio. Y me pasó una anécdota muy doméstica, la persona que nos ayuda en la casa me dijo que si no iba a dejarle algo para el sobrecito del cartero, porque hoy es el Día del Cartero y me vine pensando, en el camino me metí un poco a la historia y es preciosa, narra la verdad que las fuentes que vi o que alcancé a ver en el trayecto de la casa para acá, pues no sé si fueron serias o no, fueron a botepronto, pero cuentan que un tren en la Revolución se descarriló, un tren que llevaba oro y correspondencia militar y los encargados de la correspondencia militar prefirieron llevar la correspondencia que tomar el oro y escapar. Y después el presidente Pascual Ortiz Rubio instituyó el 12 de noviembre como el Día del Cartero. El tema es la información que va de un sitio a otro. Y me puse a pensar sobre ello y desde las primeras pinturas rupestres después de la última glaciación al Código de Hammurabi, 1750 años antes de Cristo, el inicio de la imprenta, que Lutero calificó como algo divino porque decía que quitaba a los intermediarios entre el hombre y Dios porque se podían leer los textos sagrados y cómo justamente las ideas de Lutero que se pegaron afuera de la iglesia, de la catedral del Palacio de Wittemberg, fueron a la imprenta y pudieron reproducirse, con la facilidad de poder comunicar masivamente. Después Watt, cuando perfecciona la máquina de vapor que cambia o transforma la celulosa de madera en papel y dejan de usarse papiros, arroz, lino y empieza a reproducirse el conocimiento y la información. Los primeros libros se hacían por copistas que no sabían leer y escribir para que no supieran los secretos, es decir, copiaban los signos de los distintos alfabetos para poder comunicar. Hoy ha cambiado la cosa, pero lo que queríamos nosotros, y toda proporción guardada, no crean ustedes que comparo al Grupo Oaxaca con los personajes que acabo de citar, era que nos pudiéramos comunicar, pero una comunicación que no tenía el ciudadano.

26

Contaba con un derecho que no servía absolutamente para nada, reconocido en el derecho de petición del artículo 8º Constitucional, en el cual teníamos el fabuloso derecho de pedirle a una autoridad algún dato y la autoridad tenía la terrible obligación de decir “pues no te doy nada” y con eso se daba por satisfecho el derecho y cumplida la obligación. El amparo no procedía en estas materias. El grupo de profesores que nos reunimos en Oaxaca, a pregunta de una periodista del New York Times, Ginger Thompson, que nos dijo “bueno, y ustedes de qué universidades son. –Pues de varias. –Y de qué medios de comunicación. –Pues de varios, los principales, El Informador de Guadalajara, estaba Jenaro en ese entonces por parte de La Jornada; Miguel Treviño, de Reforma; Roberto Rock, de El Universal, y se fueron sumando muchísimos. –Y qué quieren. –Para nosotros nada; para México, el derecho a saber. –Oigan, ¿y están constituidos? –No. –Y quieren participar. –No”. El principio de Seiyes, si participamos en la hechura, no podemos después ser los aplicadores, parecía un principio básico elemental de ética y de decencia. Y es el primer caso en el que una iniciativa de la sociedad civil, no nos considerábamos tal, pero que llega a ser una iniciativa. Tuvimos un peregrinar espléndido muy divertido, visitamos a doña Amalia García, entonces Presidenta del PRD; a Dulce María Sauri en el PRI; nos recibieron Beatriz Paredes, Martí Batres y Felipe Calderón, que eran los líderes parlamentarios, y conseguimos este derecho a saber. Uno es víctima de sus creaciones. Cuanto tuve el enorme privilegio de ser Magistrado de la Sala Superior, llegó un tema que tenía que ver con una solicitud de acceso a la información, que el entonces IFE, de Luis Carlos Ugalde, de mi amigo Luis Carlos, contestó a los peticionarios que no tenían el derecho de acceder, por vía de acceso a la información, para abrir los paquetes electorales y poder contar físicamente los votos, que era hacer caso al voto por voto, casilla por casilla de aquel entonces. Y les decía a mis compañeros magistrados un secreto, que espero que no salga de este cuarto, que cuando nos reunimos el Grupo Oaxaca,

27

nos fuimos con la idea del Presidente Zedillo, que consideró que la reforma electoral estaba terminada, y no vimos nada de la materia electoral. Y de hecho los partidos políticos en ese tiempo, principalmente el Gobierno Federal, nos dijo “hay temas que no van a entrar, o sea, ni siquiera los pongan en la mesa de negociación: acceso a la información de los partidos políticos, sindicatos, otros poderes y, desde luego, no se iba a hacer un órgano constitucional autónomo ni se consideraba un derecho fundamental el derecho de acceso a la información”. Eso vino después, ya como Magistrado vi una evolución fascinante de una multiplicidad de asuntos que pude resolver como ponente, y tengo jurisprudencias, perdón que hable de mí, pero hay pocas oportunidades para hacerlo, en el cual se tutelaba el derecho de los militantes y de los ciudadanos para saber información de los partidos políticos, lo que antes era impensable, cuánto gana un presidente de un partido, cuántos recursos tiene un Comité Directivo Estatal, en qué se destina, cuál es el método de una encuesta para saber cómo se designan a las autoridades de los órganos electorales locales. Todo eso ganamos con la transparencia, hoy tenemos derecho a saber. Me preocupa enormemente la ignorancia de quienes señalan que este lugar no sirve para nada porque no se ha acabado con la corrupción del país. Creo que no tienen que ver estas dos premisas, son ideas inconexas. Las miles de resoluciones que tiene este órgano cuasi jurisdiccional son un ejercicio que juzga a la autoridad, pero sobre todo que potencia los derechos de una ciudadanía libre y cada vez más informada. Y no importa si el solicitante dice que se llama Micky Mouse o Juan Pérez y para qué quiere la información, es un derecho autónomo y fundamental. Cualquier embate para ir en contra de un órgano constitucional autónomo es propio de un sistema totalitario. Desde luego que el acceso a la información es un mecanismo de control individualizado a partir del cual cualquier ciudadano, por la razón que quiera, activa el mecanismo de rendición de cuentas.

28

Los controles son incómodos, a nadie nos gusta estar controlado. Mi hijo hace mejor la tarea cuando lo estoy viendo, yo hacía lo mismo, pero parte implícita de la responsabilidad que se adquiere al ser servidor público es responder y rendir cuentas de manera permanente. Agradezco muchísimo la generosidad de este Instituto de acordarse de que unos profesores en la ciudad de Oaxaca nos reunimos, como le contestamos a la periodista del New York Times, para tratar de incidir, y que tuvimos la buena fortuna de toparnos en un momento en el que los actores políticos, principalmente de oposición, suscribieron nuestro proyecto como iniciativa y tuvimos presidentas de partidos políticos tan generosas que defendieron nuestro proyecto y nos ofrecieron ir a negociar en el seno de la Cámara de Diputados con el Congreso Federal y el resultado fue la primera Ley Federal de Transparencia, que por fortuna está tan trascendida que está ya plasmada en nuestra Constitución. Y que de ahí no la mueva nadie nunca. Muchísimas gracias por la invitación. Rosendoevgueni Monterrey Chepov: Muchísimas gracias, Salvador. Le pediría ahora Jenaro Villamil nos pudiera compartir sus reflexiones. Él es escritor y periodista, egresado de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, en la Licenciatura de Ciencias Políticas; reportero y articulista desde 1989. Actualmente es reportero de la Revisa Proceso; profesor en comunicación política y estudios de audiencia en la maestría de periodismo, en la Escuela Carlos Septién; coautor de la columna Por Mi Madre Bohemios, escrita con Carlos Monsiváis y publicada en Proceso. Autor de libros como Ruptura en Cúpula; Los Desafío de la Transición; El Poder del Raiting; De la Sociedad Política a la Sociedad Mediática; La Televisión que nos Gobierna; La Guerra Sucia del 2006; Los Medios y los Jueces. Coautor en los libros Los Amos de México y Los Intocables; integrante de la Consultoría Prospecta.

29

Muchísima gracias. Bienvenido nuevamente, Jenaro. Muchas gracias. Jenaro Villamil: Muchas gracias. Buenas tardes. Muchas gracias a los comisionados por la invitación, por organizar el Foro. Muchas gracias a ustedes por su paciencia. Es un enorme gusto estar con antiguos camaradas y compañeros de aventura; y también con la profesora Jacqueline Peschard, mi profesora en la Facultad de Ciencias Políticas, y de la que siempre uno va aprendiendo a lo largo de su trayecto público, especialmente como presidenta comisionada del IFAI. Saber es poder, reza un viejo refrán. Como mencionaba Salvador Nava, siempre el secreto o guardar el secreto es lo que hacía que los regímenes o los sistemas mantuvieran su poder. Los periodistas sabemos desde hace tiempo que no puede haber periodista cómodo o más bien, los que sean periodistas cómodos, agradables, dejan de ser periodistas, nos volvemos publicistas, propagandistas o simple y sencillamente jefes de relaciones públicas. El INAI, yo creo que no puede dejar de ser incomodo ni debe, un poco como lo plantea Juan Francisco Escobedo. Pero además, mucho más para las tareas que le vienen próximamente. Yo creo que hay sectores que integran parte del grupo López-obradorista o de los que han apoyado a López Obrador, que quizá no entiendan la función fundamental del INAI y del acceso a la información y la transparencia.

30

Pero hay otros dentro de esa misma coalición, porque no hay fuerzas monolíticas en este país afortunadamente, que están ya impulsando una segunda etapa del INAI, con mayores atribuciones o con más atribuciones de las que ya tiene. Y creo que vale la pena discutir próximamente esto. Cuando se inició el Grupo Oaxaca, y aquí tengo una cita muy breve de Juan Francisco Escobedo, que quiero recordarla, dice: “De los cuatro temas originalmente planteados en la Primera declaración de Oaxaca, tres quedaron para mejor ocasión: La regulación del secreto profesional del periodista; la creación de una Ley de Transparencia Publicitaria; y la Transformación de los medios gubernamentales en medios públicos”. De estos, justamente el tema de las tarifas publicitarias y de la distribución de las tarifas publicitarias de la relación entre los medios y el Gobierno. Se está y se va a convertir quizá en una de las nuevas atribuciones del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales, al menos de acuerdo a la iniciativa de Ley, publicidad oficial que, el primer borrador que yo tengo aquí, que en los próximos días será entregado a la Cámara de Diputados, lo van a entregar las fundaciones o las organizaciones Fundar, artículo 19; y el respaldo de los legisladores de MORENA, en la Cámara de Diputados. Bueno, nada más les digo lo que dice este borrador, que evidentemente puede ser modificado. “En el artículo 22: Atribuciones de las autoridades involucradas en la asignación, uso y gestión de la publicidad oficial, se plantea que el INAI, el Instituto Nacional de Transparencia y Acceso a la Información y Protección de Datos Personales, tenga las siguientes atribuciones: Establecer los Lineamientos que le corresponde para dar cumplimiento cabal a esta Ley; registrar e integrar el Padrón Nacional de Medios de Comunicación y otras formas de difusión y promoción, a través de la información remitida por los sujetos obligados del Estado”. Esto le quitaría todas las atribuciones a la actual Subsecretaría de Normatividad y Medios de la Secretaría de Gobernación, que significaría pasar la relación del gobierno del Estado con los medios, de una

31

relación mediada por la Secretaría de Gobernación, a una relación mediana por un Instituto. La discusión o el debate era si se creaba un nuevo Instituto para la vigilancia y la distribución de las tarifas y de los recursos publicitarios, o se le asignaba al INAI. “Recabar información de los sujetos obligados del Estado y de las Secretarías administradoras locales, para el desarrollo e integración de la Plataforma Nacional de Proveedores. Actualizar y publicar trimestralmente la Plataforma Nacional de Proveedores; evaluar el efectivo cumplimiento de los contratos aprobados, así como la distribución de la publicidad oficial contratada en medios de comunicación y otras formas de difusión y promoción. Informar a los sujetos obligados del Estado sobre incumplimientos de los actores privados, intervinientes de lo establecido en la presente Ley en Materia de Transparencia; criterios de contratación de publicidad oficial y de la efectiva emisión, distribución o publicación de la publicidad oficial contratada. Suspender las asignaciones dentro del marco de esta Ley y dando aviso a la Secretaría de la Función Pública. Aplicar, difundir, vigilar y coadyuvar el debido cumplimiento de esta Ley y demás disposiciones aplicables, y otras tres o cuatro más”, una de ellas que es para que arda la pradera. Si ustedes quieren, les puedo pasar algunos tips de cómo tratar a las televisoras. “Verificar las tarifas establecidas en los listados publicados por los medios”. Esta es una de las propuestas. La misma propuesta señala que “la publicidad oficial –en el artículo 19– el presupuesto asignado por concepto de gastos de publicidad no podrá exceder del 0.05 por ciento del Presupuesto de Egresos de la Federación”.

32

Ningún medio podrá recibir más del cinco al 10 por ciento de la publicidad oficial, tanto a nivel federal como a nivel de los estados”. Está a discusión. Evidentemente, el INAI y las funciones del INAI van estar otra vez en el debate. Pero, por si fuera poco, o por si no bastara lo que ya tienen, el INAI también está en el centro del debate de la nueva la de protección de datos personales, que tiene que ver con los medios digitales. Si la elección del 2016 en Estados Unidos planteó el gran riesgo, no sólo de las fake news o de las noticias falsas, que ha sido una cosa permanente; el escándalo de Cambridge Analítica y de otras integradoras o consultoras, que hacen de la base de datos personales, de las redes sociales, su gran mina de negocios, necesaria y obligadamente va pasar por un debate dentro del INAI, que ya ha pasado. Pero estamos ante una nueva generación de retos en materia no solamente de acceso a la información y de calidad de la información, sino también de la protección de datos personales, en una era en donde justamente el negocio principal es el uso, la comercialización y el abuso de los datos personales en las redes digitales. Y por si fuera poco, yo creo que el INAI también será un motor fundamental para esto que justamente planteamos desde el inicio del Grupo Oaxaca. No creo que le corresponda al INAI ser el responsable de esto, pero sí va a ser un motor fundamental para el debate sobre una nueva ley de medios públicos, para la configuración de verdaderos medios públicos en el país. La agenda del derecho a la información es muy amplia, por eso quizá Reyes Heroles nada más la sintetizó en 10 palabras, pero apenas avanzamos y cada vez que se avanza se abren nuevas formas y retos en materia de derecho de acceso a la información. El tema publicitario tiene que ver esencialmente con un tema de acceso a la información, de romper con la discrecionalidad de la relación entre

33

el gobierno y los concesionarios en la distribución del dinero público que va a los medios, que por lo menos durante estos últimos 18 años le ha costado al país 100 mil millones de pesos. Y en este último gobierno, el de Enrique Peña Nieto, le costó al país y al erario al menos 60 mil millones de pesos, distribuidos de manera absolutamente discrecional. Yo creo que hay que darle un premio a la peor campaña y estrategia de publicidad en este gobierno para alguien que autoriza gastar 60 mil millones de pesos para publicitar un gobierno y terminar con el 19 por ciento de aceptación, o sea, no hay lógica en este sentido. Pero creo que en este tema, sea o no el INAI finalmente la institución encargada de esto, tiene una voz muy importante que decir y creo que debe seguir siendo un instituto motor de este debate sobre el fin de la opacidad o de ir rompiendo los obstáculos y, por supuesto, también en materia de una Ley de Medios Públicos el INAI creo que será fundamental no solamente para la revisión de los presupuestos públicos de la enorme cantidad de sistemas de radio y de televisión universitarios, estatales, legislativos, que existen y que se manejan en la completa opacidad, es decir, va a seguir siendo incómodo el INAI, va a seguir siendo y dando mucha guerra y creo que por eso es indispensable recordar y replantear el origen. Y el origen era éste, justamente lo que planteaba Juan Francisco Escobedo, es decir, darle un contenido ciudadano y no un contenido gubernamental a una agenda que estaba en la democratización fundamental del país. No debe haber reversa en este sentido. Muchas gracias. Rosendoevgueni Monterrey Chepov: Muchísimas gracias, Jenaro. Para cerrar esta mesa, le pediríamos a Jacqueline Peschard nos compartiera sus reflexiones. Jacqueline, como todos ustedes saben, es licenciada en Sociología, maestra en Ciencias Políticas por la UNAM y doctora en Ciencias Sociales por el Colegio de Michoacán.

34

Ha sido profesora de la carrera en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM desde 1979, fungió como Presidenta del Primer Comité de Participación Ciudadana del Sistema Nacional Anticorrupción y además se ha desempeñado en el sector social y público, como todos sabemos consejera en el Instituto Federal Electoral y como Presidenta en el propio IFAI. Bienvenida a tu casa, Jacqui. Jacqueline Peschard Mariscal: Muchas gracias. De veras, es un gran placer estar aquí en el INAI, muchas gracias a los comisionados por esta invitación y me siento muy honrada por esta compañía de puros expertos y además de grandes fundadores del acceso a la información. Yo no quisiera parecer un poco anticlimática después de lo que ya dijo Genero sobre lo que tiene el INAI enfrente, pero eso es lo que traigo preparado y de eso voy a hablar. Sí, pero trataré en algún momento de enlazarme con lo que ha planteado, lo que ha puesto sobre la mesa tanto Juan Francisco como más ahora tú de manera muy concreta, Genaro, en términos de la iniciativa de Ley de Publicidad Oficial. Una de las cosas que quiero plantear es que el derecho de acceso a la información es uno de los derechos que en México ha tenido de manera muy clara un trayecto de manera positiva y de manera progresiva, como muy pocos otros derechos los han tenido en México, es decir, ni siquiera los derechos políticos sobre los cuales la sociedad mexicana se ha empeñado durante los últimos casi 30 años. Este derecho además se ha inscrito también, y se entiende esa progresividad, que es uno de los principios básicos de las garantías de los derechos humanos, como todos sabemos, no solamente porque esté muy claramente definido en el Sistema Interamericano de Derechos Humanos cuáles son los principios de progresividad, de universalidad, de interdependencia y algún otro, pero la progresividad es lo que a mí me interesa; es decir, este ha sido un derecho que ha ido

35

avanzando de manera progresiva porque se ha inscrito en el marco de un proceso de democratización de este país; es decir, va de la mano la progresividad. Esto hizo que el derecho de acceso a la información, a pesar de las resistencias en un principio, cuando se aprueba la primera Ley Federal de Transparencia, se aprueba por unanimidad en el Congreso; es decir, una vez que logran que se plantee la iniciativa, una vez que se logra esto, se suman todas, porque es algo que parece muy claramente conveniente a todas las fuerzas políticas y que no hay fuerza política que quiera quedar al margen de sumarse a la agenda de la transparencia y el acceso a la información. Y si vemos lo que pasó con la primera gran Ley Federal de Acceso a la Información, aunque no fuera la única, porque había habido leyes estatales previas, pero sí marcó claramente una agenda, que aunque no fue una ley que llegara de manera temprana, comparada con lo que pasó en otros países en América Latina, sí fue una ley que aprovechó lo que se había avanzado en otras leyes previas y pudo ser una ley que se basara en una plataforma de estándares internacionales muy importantes, es decir, muy reconocidos. Y a partir de este es que considero que, para explicar de qué manera se dio esta progresividad, y entiendo que estamos hablando de una progresividad en términos normativos, porque una cosa es cómo avanzan progresivamente las reformas constitucionales y legales y otra cosa es cómo se traducen en la aplicación práctica y de qué manera asumen todos los sujetos obligados el tema de la transparencia. Pero sí hay un asunto de progresividad y esa progresividad yo la entiendo basada en tres grandes pilares. Un primer gran pilar es el que tiene que ver con la activación social alrededor del tema de saber y conocer, alrededor del tema del derecho a la información; es decir, por eso es tan importante que entendamos que se da en el marco de la democratización. Si en 1977, cuando se incorpora en el artículo 6º lo de “el derecho a la información será garantizado por el Estado”, no hay eco en la sociedad,

36

tiene que ver porque la sociedad todavía no está en un proceso de democratización muy clara. Tenemos un Poder Judicial que tendrá que pasar una transformación muy importante en 94 y entonces tenemos esta activación de la sociedad que se da justamente en el contexto de la alternancia, en el contexto de la democratización. Pero además de esto, tenemos también todo lo que tiene que ver con el Sistema Interamericano. Cuando nosotros volteamos y vemos el primer gran asunto que la Corte Interamericana resolvió sobre el famoso caso de Claude Reyes versus Chile, veremos que también cumple 15 años en este momento; y es que coincide con esta activación de la sociedad en un marco democratizador con definiciones que va haciendo, no solamente la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, sino la Corte, en cuanto a de qué manera el acceso a la información es un derecho fundamental definido en estos convenios internacionales o tratados internacionales. Creo que un último elemento es el que tiene que ver con que una vez que el Poder Judicial pasa por una transformación muy importante, que es la Reforma de 1994, se convierte en una pieza que sus sentencias, sus resoluciones van y sentando precedentes, no solamente de parte del Tribunal Electoral, sino de parte de la propia Corte. Yo traigo aquí algunos de los elementos de cómo se fue sumando justamente la Corte y pasan, por ejemplo, por decirles algo, tiene que ver con cuando la Corte dice: “Cuando hay dos derechos en conflicto, por ejemplo, el derecho de acceso a la información y el derecho a la protección de los datos personales, pues el INAI, antes el IFAI, tiene la posibilidad de prima facie decidir si, efectivamente, hay una violación a un derecho humano fundamental”. Entonces en ese momento se puede abrir la información, a partir de esa sentencia de la Corte. Dice la Suprema Corte: “La definición de un derecho en sí mismo, como instrumento para el ejercicio de otros derechos”.

37

Una de las cuestiones que las resoluciones o las sentencias de la Corte establecen es que el derecho de acceso a la información, es un derecho que tiene un valor en sí mismo, pero que también es un derecho que permite otro tipo de ejercicio de derechos; y que el derecho de acceso a la información, si bien es cierto que es una garantía individual en el sentido tradicional del término, también el derecho de acceso a la información cumple una función social. Ahí es donde el derecho a la información, no solamente debe servir para satisfacer el derecho que yo tengo de saber y conocer, sino la necesidad de la función social del ejercicio de este derecho; y es lo que hace que, efectivamente, pueda tener una utilidad pública el acceso a la información y no solamente satisfacer, digamos, inquietudes de una persona. Ya hablé de la ponderación del derecho; y el derecho de información como regla del Estado Democrático frente a la protección de datos personales, que es otro de los derechos; y la necesidad de una ponderación. Cuando nosotros vemos de qué manera el propio Poder Judicial se suma a esta oleada de hacer el acceso a la información algo que no solamente debe de entenderse como un derecho de la persona a saber y conocer, sino como un derecho que tiene una función social. Aquí creo que cuando Juan Francisco nos dice: “Al INAI se le ha dado una cantidad de atribuciones y de facultades que van más allá de lo que era su propósito original, pues es el que tiene que ver con que sea una pieza fundamental del Sistema Nacional Anticorrupción”. A mí me parece que está en este espíritu que la información, no solamente es para satisfacer el derecho de una persona, saber y conocer, sino para que éste tenga una función social. Y aquí creo que una de las cuestiones importantes es de qué manera la activación de la sociedad, de la sociedad civil organizada, del periodismo de investigación, ha logrado hacer justamente del ejercicio de acceso a la información, una utilización social del mismo, a través de traducir esa información, que a veces no está accesible a toda la población y que las organizaciones de la sociedad civil, a través de su

38

trabajo, o el periodismo de investigación, a través de sistematizar solicitudes de acceso a la información, analizar algunos casos en concreto, es que nosotros podemos darle al acceso a la información una utilidad social, que creo que ya estamos de manera muy clara presentes en esta circunstancia. Cuando se da la reforma del 2017, a estos tres elementos que estaban ya activados, es decir, la parte internacional frente a la parte de la activación social y sentencias de la Corte que empiezan a partir de esta autonomía que va ganando el Poder Judicial, el INAI se convierte en una de las piezas fundamentales que va a promover la progresividad de los derechos. No solamente es el órgano garante y está en su propia naturaleza, de ser el promotor del ejercicio del derecho fundamental a saber y conocer, aunque también a la protección de los datos personales. Se convierte, entonces, el IFAI en una pieza fundamental de la progresividad de los derechos, a través de la constitucionalización en 2017, del Derecho de Acceso a la Información y posteriormente, en la reforma del 2014, que lo que viene es a cerrar todo el círculo. ¿Y por qué digo que cierra todo el círculo de la reforma anterior de 2017? Porque si en 2017 lo que quería el legislador era que se uniformaran los criterios diversos que existían en el país, siendo un mismo derecho; López Ayllón, lo decía muy claro: “Es un mismo derecho y cuando as a los estados, pues, ves distintos criterios a cómo se debe de garantizar es derecho”. Entonces 2007 trata de hacer una homogeneización de esos criterios y, sin embargo, se logra parcialmente, y no va ser sino hasta que en 2014 se tenga la idea de la construcción de un Sistema Nacional de Transparencia, con todo lo que significa elaborar un sistema con todas las partes de los órganos garantes locales, con el órgano garante nacional y además con los otros organismos, para tener un horizonte todavía más progresista, que es el horizonte de una rendición de cuentas, ¿no?

39

Uno podría decir: Bueno, la rendición de cuentas, como no es lo mismo que la transparencia; la transparencia nada más es publicitar información; pero en un esfuerzo de coordinación entre distintas autoridades, en donde el INAI juega una parte fundamental. Creo que esta idea del Sistema Nacional de Transparencia, es una idea de que si bien es de la reforma del 2014, todavía no acabamos de ver bien cómo es que va a lograr una operacionalización clara, en donde todas las partes se coordinen, que esa es la idea. Digo, y aquí se coordinan a partir de la autoridad del INAI; pero el INAI hace Lineamientos, el INAI hace una serie de elementos regulatorias. Pero lo que nosotros necesitamos es ver asuntos que claramente se vayan avanzando, en una proyección de rendición de cuentas, en donde no solamente haya información, sino haya justificación de los actos de las autoridades, frente a aquello que publicitan, y después que haya procedimientos de sanción, que obviamente no le tocan al INAI, sino solamente en lo que tiene que ver con transparencia. Pero que sí le toca ser un elemento de activación, y todavía creo que en eso estamos en un proceso, pues, digamos de definición de este Sistema Nacional de Transparencia. Pero el Sistema Nacional de Transparencia en 2014 se topa con una demanda de la sociedad, que tiene en buena medida que ver con los avances de transparencia. Sí, los avances de transparencia y de acceso a la información hacen que haya una mayor demanda de la sociedad frente al combate a la corrupción. No es que el combate a la corrupción surgiera como que la sociedad se hizo consciente de los asuntos de la corrupción, sino quien puso la corrupción justamente en el centro del debate público es justamente la transparencia; y si no, vean ustedes los distintos casos de grandes escándalos de corrupción y cómo estos grandes escándalos de corrupción salen a la luz pública a través de organizaciones o periodistas que a través de solicitudes de acceso a la información, análisis de múltiples solicitudes de acceso es que logran identificar en dónde hay una trama de actos de corrupción.

40

Entonces yo estoy convencida de que el INAI no puede quedar al margen de lo que ya ha generado en este proceso de progresividad del ejercicio de un derecho fundamental, que es justamente a saber y a que haya consecuencias de aquello que nosotros podemos identificar. Creo que efectivamente hay que hacer un alto en el camino y replantear qué es lo que le corresponde al IFAI, sobre todo a partir de ahora con esta iniciativa de fundar y de artículo 19 y de otros, otras organizaciones sociales que han estado metidas desde el año pasado en que se pidió que la Corte interviniera para que obligara al legislador a hacer una Ley General de Publicidad Oficial, que al final quedó más o menos la regulación de lo mismo, en la Ley General de Comunicación Social. Entonces hay hoy una nueva oportunidad, y con esto termino, creo que lo que hace la llegada de López Obrador con 30 millones de votos detrás de él es que cambia la ecuación de la relación entre las organizaciones de la sociedad civil, este periodismo de investigación que ha puesto sobre la mesa los casos de corrupción y que eran en buena medida la manera mediante la cual la sociedad decía “mira en qué está involucrado el poder político”; digamos que era un acto de denuncia frente a un poder político que había perdido legitimidad, que había caído en actos de corrupción. Y hoy hay un cambio en la ecuación queramos o no, a partir de la nueva legitimidad del gobierno y creo que esto es lo que nos plantea el reto para el INAI en cuanto a que tiene que hacerse cargo de que tiene que ser un contrapeso frente a un poder claramente legítimo, pero que eso no hace que pueda tenerse ningún tipo de consideración frente a un poder con muchos millones de votos detrás, pero que requiere de todas maneras de éste –como decían mis colegas Juan Francisco y Jenaro–pues requiere de un organismo incómodo, pero requiere sobre todo de un organismo que cumpla con las funciones que tiene encomendado, que independientemente que haya cambiado esa ecuación es llamar la atención sobre el poder y la necesidad de que la transparencia sea una manera de ponerle acotamientos al ejercicio del poder por más legítimo que haya sido en términos de su legitimidad de origen del poder público hoy o el futuro gobierno. Entonces creo que lo que le toca al INAI es reforzar los mecanismos que ha hecho, a pesar de que tiene muchísimas tareas, creo que hay

41

que plantear qué va a hacer, si va a seguir siendo el garante de la transparencia y al mismo tiempo de la protección de los datos personales, si no sería buen momento para diferenciar a un organismo que esté centrado, en el entendido de que va a ir avanzando el tema de la publicidad oficial; digamos, llevamos muchos años esperando que haya una regulación, que se establezcan criterios para la asignación de los recursos públicos y que se transparenten esos criterios y que no siga habiendo opacidad; entonces, aunque ahora lo veamos como una tarea que viene muy fuerte para el INAI, creo que el INAI va a tener que empezar a revisar de qué manera sale adelante y juega su papel en cuento a lo que tenga que ver con derecho a saber y conocer cómo se asignan los recursos públicos en materia de publicidad oficial. Sobre lo de los medios públicos, no sé si le toque eso al INAI, pero en todo caso lo que sí le toca es lo que tiene que ver con la transparencia de la asignación de los recursos en materia de publicidad oficial. Muchas gracias. Rosendoevgueni Monterrey Chepov: Muchísimas gracias, Jacqueline, muchísimas gracias a ti y a todos ustedes. De verdad, agradecer y reconocer la forma impecable y, de voz de los propios integrantes del Grupo Oaxaca, esta descripción de, desde la motivación, los mecanismos, los cómos, los por qué se reunieron en este Grupo o este Grupo recogió a una serie de intelectuales, académicos que convergieron en este espacio sin interés alguno, me refiero a interés político o incluso a interés personal, como ellos mismos lo han señalado. Y la importancia de impulsar el tema, insisto, nos han descrito los pasos desde hace 15 años, que se dice muy fácil, y este impulso que nos lleva a la realidad jurídica que hoy tenemos; realidad jurídica que ha sido reconocida a nivel internacional o por la cual México ha sido reconocido a nivel internacional como la vanguardia, como número uno, insisto, realidad jurídica. Necesitamos seguir trabajando para llevar esta realidad jurídica a una realidad práctica, a una realidad cotidiana.

42

Agradecer todas las reflexiones sobre el estadio en el que nos encontramos, el estado de las cosas y la perspectiva o la visión hacia dónde debemos de ir, qué debemos de hacer, desde la ciudadanía, desde la academia, desde los medios de comunicación, para no sólo proteger estos derechos y a sus instituciones, sino potenciarlos y seguirlos engrandeciendo. Quince años, hoy lo señala el título del encuentro “El legado del Grupo Oaxaca”, 15 años se dicen muy fácil, pero hace 15 años, nos relataba doña Amalia una anécdota que tenía 15 años a su vez. Siendo legisladora en 1988, ni siquiera en su carácter de legisladora tenía información o podía acceder a información de diversa índole en materia presupuestal que era enviada por el Ejecutivo Federal para su aprobación o para la aprobación del Presupuesto de Egresos, o sea, 15 años también. Quince años se dice muy fácil, pero, de verdad, jurídicamente, normativamente, institucionalmente hemos sido un ejemplo a nivel mundial. Lo han dicho distintos ponentes, Jacqueline, creo que ninguno de los derechos se ha consolidado, y mucho menos de manera tan rápida en México, como estos dos derechos de acceso a la información y de protección de datos personales. También creo que es menester reconocer, se tocó por distintas voces, en algunos de manera más profunda, otros de manera somera, reconocer la reforma, que nos olvidamos un poco, pero que acaba de ser referida, la de 2007, reconocer, creo que es un espacio que amerita el reconocimiento a doña Amalia García. Ella, como gobernadora de Zacatecas, con el gobernador de Chihuahua, Aguascalientes, si mal no recuerdo, firmaron esta Declaración de Guadalajara, con el trabajo de Alonso Lujambio, que si bien no logró lo que recién nos señalaba Jacqueline, la homologación, que era la idea, la estandarización y homologación, un piso parejo a lo largo y ancho del país para un mismo derecho, ejercido del mismo modo en cualquier lugar geográfico o político en el que nos encontrábamos dentro del territorio nacional, sí fue un detonador.

43

Quizá en su momento no tuvo el eco mediático tal vez a nivel federal, pero a nivel local fue fundamental. Jacqueline, tú lo recordarás. Quienes desde los estados estábamos en ese momento, por supuesto, fue un cambio fundamental, prácticamente, la totalidad de los órganos garantes, derivado de la Reforma del año 2007, se volvieron constitucionalmente autónomos y paradójicamente el pendiente era con el órgano federal. Si bien es cierto, quedaron muchos pendientes como en cada reforma, criterios que hubiera sido ideal que se hubieran uniformado desde entonces, pero se fueron haciendo. Me refiero al reconocimiento de esta Declaración de Guadalajara, que doña María fue parte, creo que es el momento adecuado también para señalar; y también fue una, insisto, una reforma crucial, porque además fue el intermedio de lo que en su momento, por allá en el 2004, cuya primera piedra puso el IFAI, que empezó como aquella reunión de órganos garantes llamada COMAI, aquella conferencia. Este 2007 la impulsa y fortalece este trabajo horizontal a nivel nacional que hacían o hacíamos los órganos garantes a nivel local; y lo cual desemboca, por supuesto, con la Reforma de 2014 en lo que hoy conocemos como el Sistema Nacional de Transparencia. De verdad ha sido extraordinariamente enriquecedora la mesa. Por razones de tiempo y sólo a voluntad de cada uno de nuestros participantes, sí quisieran tener una reflexión final de dos minutos, el micrófono está abierto, o alguna pregunta del público, cualquiera de las dos opciones, en razón de los tiempos. El que pida la palabra primero. Salvador Olimpo Nava Gomar: Yo sí le entro. Nada más para decir la otra parte, digamos, del flujo de información.

44

En México hay más de 100 millones de teléfonos celulares, más del 80 por ciento de la población tiene acceso a internet; el 97 por ciento del acceso a las noticias es a través de los teléfonos celulares; esto genera muchísima información que no necesariamente es cierta, así como lo que les conté del cartero, parece que es cierta, pero lo vi en el teléfono de camino para acá, por eso aclaré que no sabía qué tan seria es la fuente. El problema es que la coyuntura política va generando una cascada de información, estrategias específicas y subrepticias para generar opinión en un sentido o en otro y el ciudadano no está informado. Cada quien puede tener su punto de vista de cualquier tema, eso no importa; y tenemos derecho a ello. Pero sí importa cuando la información de que se trata puede interesarnos porque es información pública, y se necesita activar. Esa expansión del derecho del que habla Jacqueline, y ese control que tiene la institución para verificar lo que es cierto. ¿Cuál fue el método de la consulta? Por ejemplo. Claro no lo llevó del aeropuerto, no lo llevó a cabo una autoridad constituida; si hubiera sido así, me parece que es una información que tendría que ser accesible al público. Dado el hecho de que tendremos un gobierno con una mayoría parlamentaria aplastante, se tienen que activar los mecanismos de control ciudadano para poder acceder al contrapeso que sugiere la rendición de cuentas que cada uno de nosotros podemos activar y de ahí vuelvo a resaltar la importancia de esta institución fundamental. Con eso concluyo. Gracias. Rosendoevgueni Monterrey Chepov: Muchísimas gracias, Salvador. Jenaro Villamil: Tema de medios públicos y el INAI.

45

Yo creo que el INAI es un aliado fundamental –la comisionada Blanca Lilia lo sabe– en los medios públicos, es decir, para promover el derecho de acceso a la información, para generar contenidos sobre cultura de acceso a la información y protección de datos personales, porque eso no te lo van a transmitir nunca los medios concesionados, no les importa, y creo que ahí el INAI tiene que ser un motor. Sobre el tema de la publicidad, yo no estoy convencido de que tenga que ser el INAI el organismo que regule esta regulación y la asignación de publicidad. Pero lo que yo quería poner como provocación, para incomodar, es que efectivamente viene un debate sobre este tema y que efectivamente el INAI debe de estar en la Cámara de Diputados discutiendo esto con las Comisiones; es decir, es la hora de salir, no de encerrarse; es la hora de salir. También el tema de derechos digitales y de protección de datos personales, por supuesto que va ser un tema muy fuerte en los próximos años. Porque si no también el tema está ahí entre el INE, ¿sí?, y entre la nada, ¿sí? Porque también el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, discutió asuntos sobre Facebook, sobre publicidad en Facebook, publicidad digital, pero casi, casi de manera aleatoria, como lo haría mi mamá, que está consultando su Facebook todos los días, cuando ya hay toda una industria construida alrededor del algoritmo y de la publicidad. Es decir, así como avanza el Derecho también avanza la industria, la industria que se está construyendo en torno a la utilización y el aprovechamiento de los datos personales. Quizá también sería bueno –como plantea Jacqueline– este debate: Crear o separar todo el tema de datos personales del INAI, y crear una institución muy sólida sobre protección de datos personales, que esto sí es y va ser cada vez más el gran tema, ¿no?

46

Juan Francisco Escobedo Delgado: Una última cosa rápida, a la luz de lo que plantea Jacqueline y Jenaro. Quiero subrayar nuestra visión, por lo menos la mía, no es una visión nostálgica respecto del pasado y los 15 años, eh. Lo que estamos tratando de hacer, lo que yo trato de hacer es llamar la atención sobre los nuevos desafíos, a la luz del proceso que se desencadenó y encontró un punto de inflexión hace 15 años. Esto lo conecto con un tema y una reiterada invitación cordial, a quienes dirigen el INAI actualmente. Si ustedes van esperar las Iniciativas de Ley para pronunciarse, están perdidos. Tienen que empezar a trabajar, tienen que elaborar documentos de trabajo para fijar los marcos de referencia sobre todos estos temas. El debate es fundamental. Una institución como ésta –como bien lo dice Jacqueline– nació en el marco del proceso de democratización y ese proceso, aunque para algunos ya se agotó, no se ha agotado, y además esto ya ensambló con la nueva agenda de la postdemocracia, que tiene que ver con todos éstos y otros temas que aquí no hemos tocado. Cordialísimamente, si es un tema de publicidad hay que abrir discusión, hay que generar documentos de trabajo, para que hablen ustedes y hagan hablar a los especialistas, sobre estos temas. Si son medios públicos, si alguien tiene experiencia en medios públicos es blanca, y otros temas más. La buena actitud que yo le vi, hace rato a Martí Batres, que dijo: “De momento no hay cosas”, porque en eso fue muy claro. Eso no quiere decir que no vengan en el futuro. Pero tampoco nadie la ata las manos al INAI, para no generar ideas, proyectos, enfoques, cada uno o colectivamente.

47

Francisco Javier Acuña Llamas: Perdón, tocayo, desde aquí lo decimos “vamos a hacer un foro especializado sobre este punto” y por supuesto que requeriremos las dos. Amalia García Medina: Sí, lo que yo quería comentar a propósito de lo que estamos viviendo con las nuevas tecnologías y con este gran asunto que a todos, yo creo que nos espantó, nos dio mucho coraje, miedo sobre Cambridge Analytics, porque fueron –hasta donde yo tengo el dato– 87 millones de mexicanas y mexicanos cuyo Facebook fue utilizado por esta empresa que tiene su sede en Gran Bretaña para poder conocer y hacerse de toda nuestra información. Es brutal, verdaderamente insoportable. Y lo que yo leí es que ya el INAI inició una investigación de oficio que ha generado opiniones encontradas, a favor y en contra, y por eso me parece que hacer un foro es muy importante porque el debate era si tiene facultades, si no tiene facultades, si es una empresa que está fuera del país, pero es indispensable que se discuta eso. Y también sobre spyware, por ejemplo, qué ha sucedido y con la Procuraduría General de la República, es la información de millones de personas que aunque exista una normatividad sobre protección de datos personales, estamos inermes, la verdad es que es muy grave este momento que estamos viviendo. Además, por supuesto, de la normatividad, la información y el acotamiento del uso de esos inmensos recursos públicos en publicidad oficial, pero yo creo que las tecnologías de la información es un gran tema y que si ya hicieron, si ya tomaron algunas medidas, algunos pasos para iniciar de oficio una investigación, pues irse hacia adelante sería algo formidable. Rosendoevgueni Monterrey Chepov: Muchísimas gracias, Amalia. Y justamente para cerrar; bueno, primero agradecer una vez más, justamente para cerrar lo que decían mis colegas, antes de estar perdidos o preocupados estamos ocupados.

48

Si tenemos interlocución, hemos comenzado a tener interlocución y el análisis pertinente respecto de las propuestas de competencias que en algunos documentos, sea de organizaciones o sea del propio Legislativo, proponen ampliar este cúmulo de competencias del INAI respecto a la Ley de Publicidad Oficial. Estamos en ello, con independencia, por supuesto a hacer alguna mesa de análisis a la brevedad, ya en la práctica lo estamos haciendo, estamos teniendo encuentros con los interlocutores o con algunos de los interlocutores pertinentes. Pues muchísimas gracias a todos. Extraordinaria mesa y de verdad muchas gracias a todos y cada uno de ustedes. Presentadora: En este momento el Comisionado Rosendoevgueni Monterrey hace entrega de los reconocimientos a cada uno de los analistas de esta última mesa.

-----o0o-----