aprende cómo están hechas nuestras fotos · en este caso, no logramos la deseada fotografía ni...

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Cómo están Hechas

Nuestras Fotos

10 fotos y todo lo que necesitas saber

acerca de cómo las hicimos

Cómo están Hechas Nuestras Fotos www.px4u.es 2

Contenido

Amsterdam Windows Colors 3

Zaanse Schans Green House 5

Perfect Reflection 7

Sleeping with the Stars 10

Athabasca Ice Burning 13

Man and Nature 17

Since the End of the Day 19

Red Cabins 21

Toledo City Foggy Morning 23

Unforgettable 9-11 25

Agradecimiento 28


Amsterdam Windows Colors

El encanto y colorido de la iluminación nocturna de Amsterdam son simplemente… magníficos. En la hora azul, se logra una atmósfera difícil de encontrar en otras ciudades.

52.376795, 4.898698 64

Nikon D810 f/8

Nikkor 14-24 @ 18mm 300 seg.

Con trípode LucrOit ND 6 Stops.


De dónde nació…

Eran muchas las imágenes que habíamos visto de esta localización, y en la agenda del viaje a Holanda, dejamos dos días para visitar este lugar.

Cómo se planificó…

Como comentaba, dejamos 2 días porque para capturar esta imagen correctamente, había 2 factores que desde casa y en la planificación del viaje, no podíamos controlar.

Uno de esos factores era el agua, que según el día no está siempre en calma, y aunque se realice una larga exposición, la imagen resultante no es efectiva al 100%.

El segundo y más importante, la cantidad de ventanas encendidas, esta imagen sin la luz de las ventanas, pierde potencial. Por tanto y sabiendo que la mayor parte de las luces son restaurantes, tiendas, etc…, nos decantamos por realizar las capturas en el fin de semana.

Cómo se hizo…

Esta imagen es una fusión de dos capturas:

• La primera, una captura de 1 segundo, exponiendo a las luces de lasventanas para no reventarlas.

• La segunda, es una captura utilizando un filtro LucrOit ND (DensidadNeutra) de 6 pasos, para conseguir una exposición de 5 minutos,y conseguir en lo posible, dejar el agua plano y potenciar el reflejo de losedificios.

El resultado final…

Es una imagen que representa muy bien la magia de la localización, la magia del momento de la captura, pero sobre todo, representa a la perfección los colores conseguidos en el momento de la toma.


Zaanse Schans Green House

Si hay un lugar que parece sacado de un cuento, ese lugar es Zaanse Schans. Los colores de las casas potenciados por la luz cálida del atardecer, dan como resultado una atmósfera propia de un lugar mágico.

52.473271,4.818292 64

Nikon D810 f/8

Nikkor 14-24 @ 18mm 3 seg.

Con trípode LucrOit ND 6 Stops.


De dónde nació…

Eran muchas las imágenes que habíamos visto de esta localización, y en la agenda del viaje a Holanda, dejamos un día para visitar este lugar.


Uno de los días que estábamos alojados en Amsterdam amaneció lloviendo, y la previsión decía que por la tarde escamparía, podría ser un buen momento para conseguir un cielo potente en Zaanse Schams.

Las previsiones se cumplieron y sobre las 16:00h dejó de llover; y aunque el cielo estaba muy cerrado, confiamos en que las nubes terminarían por abrirse.

Llegamos a la localización a las 17:00h, la puesta de sol no era hasta las 18:50h, teníamos tiempo suficiente para inspeccionar sobre el terreno, probar qué tipo de filtros íbamos a utilizar, y buscar más posibilidades.

Cómo se hizo…

Sobre las 18:00h las nubes empezaron a disiparse y el viento reinante era el necesario para poder jugar en la captura con el dinamismo de las nubes.

Previamente habíamos probado con diferentes filtros de densidad neutra y la elección había sido un filtro ND LucrOit de 6 Stops. La exposición resultante era de unos 3 / 5 segundos, lo suficiente para que la casa se viese reflejada en el agua estancada.

Estuvimos disparando hasta que la luz cálida del atardecer se desvaneció, fue como si apagasen un interruptor, la magia del momento…, desapareció.


Es una imagen que representa muy bien la magia de la localización, la magia del momento de la captura, pero sobre todo representa a la perfección los colores conseguidos en el momento de la toma.


Perfect Reflection

Por las noches, en las Rocosas Canadienses, es muy común que el viento se calme logrando que el agua de los lagos quede totalmente en calma. Esa madrugada en Two Jack Lake, fue la primera vez que vimos un reflejo perfecto… aunque no sería el último del viaje.

51.229775, -115.497169 3200

Nikon D810 f/2,8


Con trípode Sin filtros.


De dónde nació…

Cuando fuimos de viaje a las Rocosas Canadienses, llevábamos en mente cientos de fotos que ya habíamos visto de sus innumerables lagos y unos reflejos increíbles, y pensábamos que, o bien mucha gente estaba usando Photoshop para lograr esos reflejos perfectos, o la gente tenía mucha suerte… Pronto descubriríamos que estábamos equivocados en ambas conjeturas. Nada más llegar a Banff, el primer día de nuestra estancia en las Rocosas, visitamos Vermillion Lakes para la puesta de sol, y vimos algo que nos dejó anonadados. Por las tardes, y más o menos a la hora del atardecer, el viento se calmó y pudimos disfrutar de un atardecer inolvidable, con las aguas de estos lagos totalmente en calma, logrando un reflejo perfecto del Mount Rundle… No podíamos creer lo que estábamos viendo, los reflejos perfectos de esas fotos que llevábamos en mente, eran reales…


Two Jack Lake era uno de los puntos imprescindibles que teníamos marcados para fotografiar en la zona de Banff, así que tras disfrutar de nuestro primer atardecer en Vermillion Lakes, pusimos rumbo a este cercano lago pensando en encontrar localizaciones para hacer el amanecer a la mañana siguiente, ya que la orientación de Two Jack Lake lo hace perfecto para los amaneceres, igual que Vermillion Lakes es el lugar ideal para las puesta de Sol. Tras llegar a Two Jack Lake estuvimos dando un paseo por sus orillas, pero se nos acababa el tiempo ya que la luz estaba bajando muy rápido tras la puesta Sol y tan solo fuimos capaces de encontrar unos pocos puntos desde donde podría ser interesante hacer el amanecer, aunque la famosa isla llena de árboles no se encontraba entre esos puntos. Finalmente se hizo de noche y con cierta tristeza volvimos al hotel en Banff donde empezamos a planificar el amanecer del día siguiente. Gracias a Photopills vimos que antes del amanecer tendríamos una oportunidad magnífica para cazar la Vía Láctea justo sobre el Mount Rundle, eso sí, había que madrugar, porque la hora perfecta para poder hacer esa foto era entre las 4:00 y las 4:20 de la mañana. El problema vino cuando consultamos la previsión meteorológica y pudimos constatar que para la mañana siguiente, la previsión nos indicaba una cobertura de nubes muy alta.

Aun así, decidimos levantarnos a las 3:30 (aún teníamos el jet lag a nuestro favor para ayudarnos en esta tarea) para ir en busca de la Vía Láctea. Por desgracia, las previsiones meteorológicas no fallaron y cuando salimos del hotel, miramos al cielo y no vimos ni una sola estrella, estaba totalmente cubierto. A pesar de esta circunstancia, decidimos acercarnos a Two Jack Lake para tratar de hacer el amanecer. Nunca se sabe lo que los caprichos del clima te puede deparar, aunque en este caso, no logramos la deseada fotografía ni una luces espectaculares al amanecer, si logramos localizar la isla que en tantas fotos habíamos visto. Ya teníamos el lugar exacto para hacer la foto, pero habría que esperar al día siguiente, cuando las condiciones, si las previsiones no fallaban, serían totalmente favorables…


Cómo se hizo…

Al día siguiente, volvimos a levantarnos a las 3:30 de la mañana y a las 4, ya estábamos en el punto exacto que habíamos localizado el día anterior. Todos los factores estaban en su lugar, las estrellas, la Vía Láctea sobre Mount Rundle… Y nuevamente, el agua parecía estar totalmente en calma. Ansiosos, colocamos el equipo sobre el trípode, configuramos la cámara con los parámetros que se indican más arriba y cuando la foto se mostró en nuestras pantallas no nos lo podíamos creer. El reflejo de las estrellas y la Vía Láctea en el lago, era simplemente perfecto. Jamás habíamos visto algo así, estrellas reflejadas como puntos perfectos sobre el agua, pero era cierto… La sensación de satisfacción hizo que se dibujase una sonrisa en nuestra cara.


La foto resultante es una muestra de lo increíble que la naturaleza puede llegar a ser brindándonos unos espectáculos, que en muchas ocasiones, rozan lo irreal. Y estando allí, viendo las fotos en la pantalla de la cámara, lo tuvimos claro, ya teníamos la foto perfecta para poder preparar el video tutorial que tanta gente nos había reclamado, un procesado completo (revelado en LightRoom y procesado en Photoshop) de una fotografía nocturna que incluyese una Vía Láctea. Un mes después de volver a España, publicamos la fotografía que hicimos aquella mañana y lanzamos ese video tutorial, el primero de una serie que hemos llamado, Del RAW al Fine Art Final, donde mostramos procesados completos de distintos tipos de fotos. Por lo que, si quieres conocer todas las técnicas de revelado y procesado que se han usado para lograr esta fotografía, puedes hacerlo aquí: Del RAW al Fine Art Final – Perfect Reflection


Sleeping with the Stars

El mirador de Peyto Lake – Alberta – Canadá, es un lugar magnífico donde poder disfrutar de un paisaje único, rodeado de estrellas.

51.7183,-116.509222 800

Nikon D810 f/2,8




De dónde nació…

El lago Peyto es un lago de origen glaciar localizado en el Parque Nacional de Banff, uno de los parques nacionales de las Montañas Rocosas canadienses, en la provincia de Alberta, Canadá.

Debe su fama principalmente al color azul de sus aguas, y su forma final en forma de tridente.


Teníamos claro que queríamos hacer una sesión nocturna en este lago, por tanto planificamos una sesión con luna llena, para poder tener la luz suficiente para fotografiar todo el paisaje.

El día anterior a la sesión nocturna, durante la mañana fuimos a reconocer el terreno, en ese momento nos llevamos la primera sorpresa. La carretera de subida al mirador del lago estaba todavía cerrada por nieve y riesgo de avalanchas.

El mirador de Peyto Lake está a 2.137 metros de altura, teníamos por delante un trekking de 20 minutos, por nieve y hielo. Nos calzamos los crampones y empezamos a subir.

El camino de ascensión al lago se realiza entre un bosque plagado de árboles gigantes que apenas dejan ver el cielo, la ascensión no es dura, se realiza bastante bien, el problema eran ciertos tramos de nieve, que ésta nos llegaba hasta las rodillas.

En apenas 20 minutos llegamos al mirador, ya sabíamos cómo llegar y teníamos claro el encuadre que deseábamos.

Cómo se hizo…

Al día siguiente realizamos el atardecer en Bow Lake, porque está a 5 minutos de Peyto Lake. Recogimos, cenamos algo y esperamos al crepúsculo náutico para empezar la ascensión al mirador.

El camino de ascensión que disfrutábamos el día anterior entre el bosque y la nieve, de noche, y alumbrado sólo con los frontales, empezaba a perder su encanto…

Según subíamos al mirador comentábamos que, iba a ser otro lugar único donde poder disfrutar de la naturaleza, la noche, las estrellas y el silencio. Nada más lejos de la realidad, según llegamos al mirador nos encontramos a otro grupo de fotógrafos que habían montado un “circo”…


Habían montado una tienda de campaña, la cual habían iluminado desde su interior y utilizando sus linternas a modo de espadas, se estaban fotografiando, al más puro estilo de Luke Skywalker.

Les pedimos permiso para poder entrar, ya que la localización donde buscar el encuadre es muy pequeña, y ellos muy amablemente nos dijeron que sí.

Entre descanso y siguiente lucha, ellos desaparecían del encuadre y quedaba sólo la tienda de campaña iluminada, aprovechamos ese momento para realizar esta fotografía.


Es una imagen de la que habíamos planificado la luna para tener la luz propicia, habíamos localizado el encuadre que queríamos el día anterior, y la sorpresa nos la llevamos el día de la toma. Al final tenemos una foto con un elemento que no habíamos planeado, pero que también proporciona una pincelada de color interesante.


Athabasca Ice Burning

Una noche inolvidable explorando el Athabasca Glacier, y su cueva de hielo.

52.209649, -117.237152 6400

Nikon D810 f/2.8




De dónde nació…

Como muchas veces nos sucede cuando vamos de viaje a un lugar por primera vez, la idea surge de investigar en Internet y ver fotos de fotógrafos que tenemos como referentes de la zona que vamos a visitar. En este caso, habíamos visto la galería de Paul Zizka donde aparecen varias fotografías de esta cueva iluminada en la noche.


No conocíamos el lugar, ni sabíamos las condiciones del acceso, ya que el invierno de 2016 había sido muuuuy suave y las temperaturas habían sido bastante elevadas, por lo que decidimos acercarnos por la mañana a localizar exactamente la entrada a la cueva (y de paso grabar el track en el GPS para poder movernos por la noche sin miedo a perdernos), y ver las condiciones del acceso y de la propia cueva, sobre todo en lo referente a la seguridad. Tras un ligero trekking de 2 km y encontrar los distintos lugares para vadear varios riachuelos en la zona de acceso, llegamos a la cueva. Había muy poca nieve en los alrededores, pero la cueva, aparentemente estaba bien y el acceso era muy sencillo. Una vez equipados con crampones, accedimos al interior de la cueva y fuimos localizando los distintos encuadres y lugares desde los cuales iluminaríamos la cueva desde dentro.

Ya con todo claro en lo relativo a la localización, acceso, seguridad, etc, empezó la labor de planificación puramente dicha. Y ahí llegó nuestra sorpresa. Consultando la web del Instituto Geofísico de Alaska vimos que para esa noche, la previsión de auroras era de un KP7 con una tormenta geomagnética G1 y eso trastocaba todos nuestros planes, ya que la posibilidad de hacer la fotografía deseada, pero con un cielo repleto de auroras era la guinda del pastel.

Sabíamos por experiencia de varios días atrás, que las auroras en esta parte del mundo, siguiendo el modelo de predicción del Óvalo generado por la NOAA, empiezan a ser visibles más tarde de lo que sucede, por ejemplo, en Islandia o en Lofoten. La “fiesta”, en las Rocosas, suele empezar a partir de la 1 de la mañana, por lo que el plan era el siguiente.

Llegaríamos a la cueva antes de la puesta de sol, prevista a las 21:29 según nos marcaba la aplicación Photopills, para poder prepararlo todo con luz diurna. Éramos 8 personas y teníamos que tener claro cómo íbamos a coordinarnos en la oscuridad para realizar las fotografías y la iluminación de la cueva.

Una vez se hiciese de noche, y antes de que empezase el baile de las auroras, realizaríamos las fotografías de la cueva iluminada, algo que para nosotros resultaba, a priori, lo más complicado de esta idea, ya que no solemos iluminar nunca nuestra fotografías, por lo que nuestra experiencia en este campo era nula.


Una vez conseguida la foto de la cueva iluminada, y sin mover las cámaras de sus posiciones, esperaríamos a las auroras.

Todo el plan estaba en nuestra cabeza y los nervios, según iba avanzando el día, crecían en intensidad. Había demasiadas variables en esta ecuación que escapaban a nuestro control.

Cómo se hizo…

Teníamos muy poco margen de error. Entre las 21:29 y la 1:00 de la mañana, teníamos que lograr la fotografía de la cueva para poder centrarnos a posteriori en fotografiar las auroras y disfrutar de ese maravilloso espectáculo en un entorno inigualable.

Todo fue según el plan previsto hasta que llegamos al momento que más nos temíamos, la iluminación de la cueva de hielo. Las primeras tomas fueron un verdadero desastre. Los walkie talkies no dejaban crujir y de repartir órdenes a las distintas personas para que variasen sus respectivas iluminaciones, y aquello era una verdadera locura.

El tiempo se nos echaba encima y parecía que nuestro plan no iba a funcionar, pero poco a poco, todo fue cuadrando, hasta que por fin, y con muy poco tiempo para que empezase, en teoría, el espectáculo de las auroras, logramos la fotografía de la cueva iluminada. La fotografía soñada ya estaba en nuestras tarjetas. Ahora solo quedaba la guinda del pastel, una guinda verde y con forma de aurora boreal.

La fiesta se retrasó bastante, lo que nos hizo recordar, que los modelos de previsión no son más que eso, previsiones, y que “cazar” auroras boreales es una de las cosas más complicadas a la que nos hemos enfrentado como fotógrafos. Por fin, poco más tarde de las 2 de la mañana, el cielo empezó a brillar con luz propia, una luz verde que, poco a poco, empezó a inundarlo todo, y comenzó el baile.

Fueron 30 minutos de éxtasis. El espectáculo de las auroras boreales, por muchas veces que lo hayamos visto ya, siempre nos emociona sobremanera y hace que el vello de la piel se nos erice. Cuando acabó la fiesta, nuestras cámaras echaban humo y en las tarjetas de memoria, reinaba un color verde nada habitual.



Para lograr la imagen final ha sido necesario fusionar manualmente en Photoshop una de las tomas que hicimos de la cueva iluminada, con una de las tomas de la sesión de auroras. El resultado, una de las fotografías más complejas que hemos realizado y que mayor planificación, preparación y coordinación nos ha exigido. Todo esto hace que la sensación de satisfacción sea aún mayor de lo habitual. Esa noche, aunque pocas horas, dormimos con una gran sonrisa en la cara.


Man and Nature

Una de las localizaciones que teníamos pendientes para este último viaje a Islandia era Kvernufoss.

Esta cascada al no ser tan popular, y por tanto menos transitada, nos invita a disfrutar en solitario de las maravillas de la Naturaleza.

63.528556, -19.480780 64

Nikon D810 f/8

Nikkor 14-24 @ 14mm 1/15

Con trípode Formatt Hitech ND 3 Stops


De dónde nació…

Kvernufoss es una cascada que está cerca de Skogafoss, pero por suerte…, no es tan conocida como esta última. En este último viaje a Islandia queríamos disfrutar de ella, y la verdad, nos sorprendió gratamente.


En los últimos años las localizaciones más importantes de Islandia, se han convertido en un ir y venir de turistas, es casi imposible buscar un encuadre donde no aparezca una persona u otro fotógrafo.

Kvernufoss no tiene un acceso tan fácil como Skogafoss, y por tanto no es tan visitada. Este año nos decidimos a fotografiarla, pero con una idea en común, en lo posible, estar nosotros solos para disfrutar de la naturaleza.

Cómo se hizo…

Después de 20 minutos andando, una vez en la cascada hay que caminar entre rocas mojadas para acceder al interior de ésta, el acceso no es fácil, pero una vez que estás en el interior de Kvernufoss y sólo escuchas el estruendo del agua al caer, te das cuenta que ha merecido la pena.

El interior de la cascada no es excesivamente grande, aun así, el encuadre a 14mm quedaba muy ahogado, por tanto, decidimos realizar un panorámica vertical de 5 tomas.

Utilizamos el sistema LucrOit de 165mm con un filtro ND ( Densidad Neutra ) Formatt Hitech Firecrest de 3 Pasos, para aumentar lo suficiente la exposición de la caída del agua.


Es una toma de la que nos sentimos muy orgullosos, donde una vez más, se muestra que la grandeza de la naturaleza prevalece sobre el ser humano.


Since the End of the Day

Vestrahorn, quizás una de las montañas más icónicas de Islandia, junto con el Kirkjufell, es un lugar que por muchas veces que lo visites, siempre quieres volver, y siempre que vuelves, quedas maravillado por su imponente figura emergiendo desde el mar.

64.245883, -14.972627 400

Nikon D810 f/2.8


Con trípode Sin Filtros


De dónde nació…

Las fotografías donde se ve en el mismo encuadre las últimas luces del atardecer, las estrellas y si es posible, la Luna, siempre me han atraído. Hay distintas técnicas para realizar este tipo de fotografías, pero la idea era poderlo hacer todo de una sola toma realizada en un único momento, sin necesidad de mezclar distintas tomas que hubiesen capturado los distintos momentos que se querían mostrar, el atardecer, las estrellas y la Luna, así que, en esta fotografía, la planificación era esencial.


En los muchísimos viajes que habíamos hecho a Islandia, nunca se habían dado las condiciones necesarias, bien por la fase de la Luna o bien por las condiciones climatológicas. En esta ocasión, y gracias a la aplicación PhotoPills, sabíamos que la foto podríamos hacerla, solo necesitábamos un poquito de suerte con el clima… Y la suerte se puso de nuestro lado.

Cómo se hizo…

Llegamos a la localización bastante antes del atardecer, en una jornada con mucho viento. El proceso de encontrar el lugar perfecto para el encuadre, fue complicado ya que el viento hacía que la arena se metiese constantemente en los ojos. Había una especie de bruma en la línea del horizonte que no era ni más ni menos que arena en suspensión.

En cualquier caso, estuvimos buscando distintos lugares donde poder realizar la fotografía, y una vez lo encontramos, vimos que era imposible hacerla en una sola toma. Ni siquiera con el 14-24 disparando a 14mm, nos entraba en el encuadre todo lo que queríamos meter, así que optamos por una panorámica.

Cuando llegó el momento, tal y como sabíamos gracias a PhotoPills, todo se colocó en su sitio y pudimos hacer la foto soñada, eso si, teniendo que realizar una panorámica de 13 tomas verticales ya que el ángulo de visión que abarca la imagen final es de más de 180 grados para poder captar las luces del atardecer por la izquierda y la Luna, que acababa de salir, aunque ligeramente oculta por las nubes, por la derecha. Eso sí, gracias a la planificación, no hizo falta fusionar distintas tomas hechas en distintos momentos para conseguir el resultado que teníamos en mente.


Una fotografía donde poder disfrutar de un momento mágico en un lugar increíble y que ha requerido de muchos viajes a Islandia para poder lograrla.


Red Cabins

Imagen tomada horas previas a que nos azotase el huracán Olé (Febrero 2015).

67.948813, 13.134684 800

Nikon D810 f/7.1

Nikkor 14-24 @ 14mm 240 segundos

Con Trípode Formatt HiTech ND 10 pasos


De dónde nació…

Estábamos hospedados en la cabaña roja que se ve en el primer plano, cuando nos alertaron de que en huracán Olé, con vientos de más de 180 km/h, nos azotaría en unas horas. Aprovechando los vientos de 135 km/h nos preparamos para capturar un momento único.


La idea estaba clara, queríamos jugar con el dinamismo que aportan las nubes en movimiento y el contraste de la calma y el sosiego del agua producido por un filtro neutro. Para conseguir este efecto necesitábamos un filtro ND que nos aportara una velocidad de exposición muy larga, de ahí que decidimos usar un ND de 10 pasos.

Cómo se hizo…

Montamos el sistema LucrOit 165 y en un principio utilizamos un filtro Formatt-Hitech ND de 16 pasos para lograr imágenes de entre 300 y 600 segundos, pero a causa del fuerte viento reinante, todas las capturas salían trepidadas.

Cambiamos a un filtro LucrOit ND de 10 pasos, expandimos totalmente las patas del trípode a ras del suelo para que el centro de gravedad fuese lo más bajo posible (unos 15 centímetros), y con nuestros cuerpos, junto con las mochilas del equipo fotográfico, hicimos un parapeto para resguardar la cámara lo máximo posible de las sacudidas del aire.


El resultado final era una imagen capturada en un momento que seguro no era el más idóneo, pero esta toma nos enseñó que las imágenes únicas se consiguen en

momentos únicos.


Toledo City Foggy Morning

Las mañanas de Toledo con niebla son un espectáculo único. Ver cómo la ciudad desaparece y aparece entre la densidad de la niebla es algo simplemente maravilloso.

39.847797, -4.022203 100

Nikon D810 f/8

Nikkor 70-200 VRII @ 200mm 1/100

Con trípode Sin Filtros


De dónde nació…

Llevaba años con la idea de fotografiar la ciudad de Toledo entre la densidad de la niebla.


Durante los años 2014 y el 2015 en los meses de enero y febrero las mañanas que se levantaba la niebla intentaba realizar la foto que tenía en la cabeza, pero unas veces por exceso y otras por defecto, nunca encontraba la atmósfera que deseaba.

Cómo se hizo…

El día que elegí para hacer esta foto, la mañana estaba muy cerrada, los bancos de niebla eran muy espesos, pero me dije, vamos a intentarlo…

Llamé a mi amigo Pedro Pérez Galindo, él fue quien me enseñó esta localización y le dije, me voy a intentarlo, ¿te vienes? Esa mañana él no podía; pillé el equipo y salí corriendo hacia Toledo, en 15 minutos estaba en la localización.

Cuando llegué y vi lo que tenía delante de mis ojos, era justo lo que mi cabeza había imaginado durante años. Coloqué el 70-200 y realicé una panorámica vertical de 7 tomas.

El espectáculo de los bancos de niebla en movimiento duró apenas 30 minutos. Realicé varias panorámicas mientras pensaba… “¡¡¡la tengo, ahora sí la tengo!!!”


Una vez más la constancia y la perseverancia habían dado como fruto una captura única.


Unforgettable 9-11

Una visión única del skyline de Manhattan que únicamente puede ser disfrutada una vez al año. Realizada desde el Brooklyn Bridge Park.

40.704472, -73.990420 50

Nikon D800 f/5,6

Nikkor 14-24 @ 19mm 243 segundos

Con Trípode ND LucrOit 6 pasos


De dónde nació…

Esta foto nace a principios del 2012, cuando preparando el viaje que íbamos a realizar a Nueva York en Abril de ese mismo año, estábamos buscando localizaciones que nos gustaría visitar y entre las muchas fotos que vimos, nos llamó muchísimo la atención ver el skyline de Manhattan bajo esos dos enormes haces de luz subiendo hacia el cielo. Nuestro gozo en un pozo cuando descubrimos que esas luces son las denominadas “Memorial Lights” y solo las encienden el 11 de Septiembre en memoria de las víctimas de los atentados del 11 de Septiembre de 2001. Por lo tanto, decidimos que antes o después teníamos que volver a por la foto soñada, y dos años después, el 11 de Septiembre de 2014, cumplimos nuestro sueño.


La planificación fue sencilla debido a que conocíamos perfectamente la localización gracias a nuestro viaje previo en el 2012. Llegamos a Nueva York el 8 de Septiembre, con varios días de antelación para permitirnos volver tranquilamente a visitar las distintas localizaciones que teníamos en mente para la noche del 11 de Septiembre. Decidimos que la hora azul le daría un punto extra a la toma, y el lugar ideal era esta pequeña playa del Brokklyn Bridge Park, desde donde podríamos fotografiar el skyline de Manhattan tras el famoso Brooklyn Bridge.

Cómo se hizo…

Teníamos constancia de que cientos de fotógrafos llegados de todas partes del mundo, abarrotarían esa localización para poder realizar esa fotografía la noche del 11 de Septiembre, y nosotros queríamos coger los mejores sitios (llevábamos 2 años esperando aquella ocasión), y a pesar de que la puesta de sol estaba prevista para las 19:11, nosotros llegamos al lugar con cuatro horas de antelación, cuando aún no había nadie. Esto nos permitió elegir el mejor punto para poder incluir en el encuadre las piedras que se ven en el encuadre. Los valores de exposición ya los teníamos estudiados de los días previos cuando ya habíamos estado haciendo esta misma foto y también sabíamos que el uso de un filtro ND iba a ser imprescindible si queríamos lograr un agua sedosa en el East River. Con lo que, una vez el sol se puso, comenzó la hora azul y encendieron las “Memorial Lights”, todo estaba listo para solo preocuparnos de apretar el botón de disparo. Tantas y tantas horas de preparación se vieron recompensadas y pudimos cumplir nuestro sueño.



Siempre impresionante el skyline de Manhattan visto desde Brooklyn, pero con el añadido de las “Memorial Lights” que le dan a la fotografía un significado muy especial.


Muchas gracias

Esperamos que esta guía te sirva de utilidad y puedas hacerte una idea de cómo trabajamos cuando vamos de viaje y hacemos nuestras fotografías.

Queremos agradecerte el interés en nuestro trabajo y el tiempo que le has dedicado a leer esta guía. En caso de que tengas alguna duda, estamos a tu disposición a través del formulario de contacto de nuestra web: http://www.photoexperience4u.com/contacto/ o directamente en la dirección de email [email protected]

Un cordial saludo y seguimos en contacto.

aprende cómo están hechas nuestras fotos · en este caso, no logramos la deseada fotografía ni...

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