el liderazgo. presentación. maestro faustino maldonado tijerina

Profesor: Maestro Faustino Maldonado Tijerina.

Especialidad: Licenciatura en Ciencias de la

Comunicación.Turno: Sabatino (Nocturno).

Grado: IX Tetramestre

• “Es la competencia de comunicarse con un grupo de personas, influir en sus emociones, lograr su aprobación y respaldo incondicional, su aportación intelectual y física, a través de su esfuerzo personal aportando sus ideas, su tiempo, sus habilidades y capacidades para lograr las metas y objetivos del líder y del grupo social al que pertenece” (Maestro Faustino Maldonado Tijerina, 2013).

El liderazgo El contexto y su reflejo en el

perfil del líder Orígen y aplicación del

liderazgo La necesidad de líderes

El arte de delegar y el cambio en las organizaciones Los valores en el liderazgo

El líder es mucho más que un jefe. Sus instrucciones son ejecutadas por sus seguidores con la convicción de que su cumplimiento es la mejor opción para los intereses del grupo y del ente social al que pertenecen.

Cuando los seguidores saben que los líderes son fieles a sus convicciones, se comprometen a trabajar y a hacer un esfuerzo para lograr los objetivos comunes a fin de seguir el ejemplo del líder, con buena disposición.

Los líderes integran a sus seguidores a sus sueños apelando a las aspiraciones compartidas. Dan vida a las imágenes del futuro, ideales y únicas, y hacen que los demás vean cómo se pueden concretar sus propios sueños, a través de una visión común.

Los líderes también experimentan y asumen riesgos generando constantemente pequeños logros y aprendiendo de los errores. Las cosas extraordinarias no se consiguen con grandes saltos hacia adelante, se logran de un paso a la vez.

Los líderes fomentan la colaboración desarrollando confianza y facilitando las relaciones. Promueven un sentido de reciprocidad y un sentimiento de “Estamos todos juntos en esto”. Comprenden que es el respeto mutuo lo que sostiene esfuerzos extraordinarios. También fortalecen a sus seguidores aumentando la auto – determinación y desarrollando las habilidades y las capacidades.

La escalada a la cima es ardua y empinada. Las personas se agotan, se frustran y se desilusionan. Tienen la tentación de abandonar. Los líderes alientan el corazón de sus seguidores para que sigan adelante. Para mantener la esperanza y la determinación, los líderes reconocen las aportaciones demostrando la valoración de la excelencia individual. Los actos genuinos de preocupación por los demás, elevan los espíritus y fortalecen el coraje para alcanzar el éxito.

Es la capacidad de entender aquellos puntos del negocio que afectan la rentabilidad y el crecimiento de una empresa, actuar de manera adecuada desde la responsabilidad del desarrollo de las competencias del recurso humano para maximizar el éxito.

Da la posibilidad a los seguidores de crecer potenciando sus capacidades al hacerles responsables de determinadas tareas y funciones. Establece objetivos claros y asigna las correspondientes responsabilidades personales. Aprovecha la diversidad de su equipo para lograr un valor agregado al negocio complementando habilidades y competencias demostradas. Emprende acciones eficaces para mejorar el talento y las competencias de los seguidores.

Muestra capacidad para intercambiar concesiones en las relaciones de intereses, para conseguir un resultado óptimo para la parte que representa. Esta competencia capacita a las personas a alcanzar los objetivos que se persiguen buscando relaciones de futuro con el enfoque de ganar – ganar.

Son las costumbres, los rasgos afectivos y espirituales que caracterizan a un grupo social durante un período determinado.

“Es la forma característica de pensar y hacer las cosas en una empresa…por analogía es equivalente al concepto de personalidad a escala individual…” (García y Dolan, 1977).

Todo aquello que identifica a una organización y la hace diferente a las demás.

Se transmite a medida que transcurre el tiempo y se adopta paulatinamente, adaptándose de acuerdo a las influencias externas y a las presiones internas. Es un fenómeno permanente y dinámico.

Es un proceso a través del cual las personas logran concebir un método, un procedimiento, un principio, un valor, que se deriva de la información recibida y de los hechos percibidos durante una sesión informativa.

El Administrador de la empresa es el líder formal y el responsable de modelar la cultura organizacional y para ello deberá liderar con el ejemplo y otorgar recompensas.

Es el derecho de mandar, de decidir, de tomar decisiones, de negociar conflictos, de dar órdenes, que ostenta una persona respecto de otras, en el ámbito de las relaciones humanas en que se desenvuelve.

Es un elemento fáctico – normativo. Su poseedor puede dar eficacia moral a las determinaciones de su voluntad. Es una fuerza moral.

Es un elemento fáctico que tiene su orígen en la posición formal que ocupa el individuo en la organización. Es una fuerza material.

El líder genera poder a partir de las fuentes de su legitimidad.

Es la capacidad de conducir grupos humanos, con fundamento en la autoridad que emana del carisma o del conocimiento experto.

Es que es capaz de generar acción colectiva en el grupo humano que dirige, para beneficio de la sociedad a que pertenece.

Sin la autoridad y el liderazgo. Más aún en un sistema no democrático.

La fuerza moral que permite generar liderazgo en un grupo social.

Sólo se puede ejercer con autoridad la que permite incrementar el poder del líder y del grupo social que dirige.

Es el arte de dotar de la autoridad a uno o varios subordinados a fin de que puedan cumplir satisfactoriamente, con las tareas que les han sido encomendadas por el líder del grupo social.

Porque piensa que el puede hacer la tarea Está convencido que será indispensable Tiene miedo a perder el control No sabe delegar.

El líder invierte su tiempo más sabiamente Contribuye a balancear la carga de trabajo Desarrolla a su equipo Aumenta el compromiso de los subordinados Le da un valor agregado a su desempeño.

El fuego es sinérgico del calor, el combustible y el oxígeno.

La calidad de los productos, los clientes satisfechos, la productividad, el crecimiento de la empresa, son sinérgicos y tienen su orígen en un liderazgo de excelencia.

El líder asume toda la autoridad en la toma de decisiones, dirige, motiva y supervisa a sus subordinados. Espera obediencia absoluta y respaldo total de su grupo.

El líder no delega su derecho a tomar decisiones y señala directrices específicas a sus seguidores, acepta sus contribuciones siempre y cuando sean posibles y prácticas. Impulsa a sus subordinados a incrementar su capacidad de autocontrol.

Este líder favorece las decisiones de grupo, la participación activa de los miembros del equipo, en la toma de decisiones, favorece la identidad del grupo, la negociación de los conflictos dentro del equipo de trabajo.

Este líder delega a sus seguidores la toma de decisiones. Los motiva a desarrollarse y a adquirir las competencias demandadas por la empresa. Espera que sus subordinados estén dispuestos a asumir mayor responsabilidad.

Este líder no requiere de la posición otorgada por la formalidad de la empresa. Es capaz de surgir, emerger, hacerse presente muy a pesar del liderazgo formal.

Son educados por sus experiencias Aprenden a través de sus ojos y oídos Son curiosos, preguntan constantemente Desarrollan nuevas habilidades e

intereses Su sensación de autodominio crece

El semblante alegre, placentero, feliz. Su actitud optimista, positiva, animosa. Su espíritu entusiasta, esperanzado, confiado. La sabiduría le brinda una percepción de

cuán fuerte es y un sentido del humor y de la oportunidad adecuados para lidiar con ella.

No sobrerreaccionan ante las conductas negativas, las críticas ni las debilidades humanas.

Creen en la potencialidad invisible de los demás.

Se niegan a etiquetar, estereotipar, clasificar y prejuzgar a los demás.

Creer es ver.

Leen los mejores libros. Social e intelectualmente activos. Leen, miran, observan y aprenden. Disfrutan de su persona. Son francos y no manipulan a nadie.

Pueden discernir y percibir las similitudes y las diferencias en cada situación.

Reconocen los valores y luchan con valentía. No tienen adicciones, ni son fanáticos pero

siguen una dieta. El mayor fracaso es no aprender de los

errores.

Su confianza es su iniciativa. Se interesan por las demás personas. Cuando escuchan lo hacen con todos los

sentidos. Uno de sus atributos es la flexibilidad.

Trabajan inteligentemente. Son productivos, innovadores y creativos. Delegan para incrementar la sinergía. Reconocen los problemas como

oportunidades de mejora y crecimiento.

Un carácter fuerte y saludable, con una voluntad disciplinada y orientada al servicio.

En las cuatro dimensiones de la personalidad humana: física, mental, emocional y espiritual.

Peters, Thomas. Waterman, Robert. (Primera edición). En búsqueda de la excelencia. México. D. F. Editorial Calypso.

Siliceo, Alfonso. (última edición). Liderazgo para la productividad en México. México. D.F. Editorial Trillas.

Fiedler, Fred. Chemers, Martin. (última edición). Liderazgo y Administración efectiva. México. D. F. Editorial Trillas.