amor y pedagogía

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Miguel de Unamuno Amor y Pedagogía Reseña sobre la obra Amor y Pedagogía de Miguel de Unamuno, gran escritor, filósofo y poeta vasco, además de principal exponente de la Generación del 98, que nos deleitó con su sabiduría y pensamiento. IES Lluís Companys 2º de Bachillerato B Lengua y Literatura Castellana

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Reportaje sobre Miguel Unamuno

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Reseña sobre la obra Amor y Pedagogía de Miguel de Unamuno, gran escritor, filósofo y poeta vasco, además de principal exponente de la Generación del 98, que nos deleitó con su sabiduría y pensamiento.

IES Lluís Companys 2º de Bachillerato B

Lengua y Literatura Castellana

Page 2: Amor y pedagogía

2º Bachillerato B Volumen 1, nº 1

Sumario

Para definir de forma clara y breve Amor y

Pedagogía tan solo es necesario utilizar una

palabra: nivola. Este neologismo creado por el

propio autor para definir sus obras de ficción nos

resume la obra a la perfección ya que, según su

significado, se refiere a aquellas novelas donde los

personajes se ven oprimidos por pasiones que les

impiden relacionarse en el mundo con normalidad.

Justamente lo que le ocurre a Apolodoro, que es

educado con el objetivo de que absorba

conocimientos puramente científicos y así poder

llegar a ser un genio, prescindiendo de la parte

sentimental que cualquier persona normal posee. O

su madre Marina, o como generalmente la

denomina el narrador omnisciente, la Materia,

antítesis de Don Avito i que es menospreciada por

este.

En esta obra tienen bastante importancia las

corrientes ideológicas de ese momento (el

positivismo científico, el Krausismo, la teoría de

Mendel, el psicoanálisis de Freud o la eugenesia).

Miguel de Unamuno perteneció a la conocida

generación del 98, que tenía interés sobre las

causas de la decadencia española. Su ideología y

manera de ser le causaron muchos problemas a lo

largo de su vida, y si analizamos las obras escritas

a lo largo de los años, podemos apreciar sus

Sumario

2º Bachillerato B

Amor y pedagogía

fecha

Volumen 1, nº 1

Índice

Editorial………………………………………1

Leer para entender………………………....3

Unamuno al descubierto……………….....4

Los profundos y trascendentales

temas en Amor y pedagogía……………...8

Amor y Pedagogía,

espejo de una época……………………….10

Ambientes personalizados......................12

¿Fracaso de la pedagogía?.....................14

Simples títeres en manos

de su creador……………………………….16

Diálogo, dueño y señor en

Amor y Pedagogía…………………………19

Víctimas del fanatismo……………………21

El arte de criticar…………………………..23

2º Bachillerato B

Para definir de forma clara y breve Amor y

Pedagogía tan solo es necesario utilizar una

palabra: nivola. Este neologismo creado por el

propio autor para definir sus obras de ficción nos

resume la obra a la perfección ya que, según su

significado, se refiere a aquellas novelas donde los

personajes se ven oprimidos por pasiones que les

impiden relacionarse en el mundo con normalidad.

Justamente lo que le ocurre a Apolodoro, que es

educado con el objetivo de que absorba

conocimientos puramente científicos y así poder

llegar a ser un genio, prescindiendo de la parte

sentimental que cualquier persona normal posee. O

su madre Marina, o como generalmente la

denomina el narrador omnisciente, la Materia,

antítesis de Don Avito i que es menospreciada por

este.

Para definir de forma clara y breve Amor y Pedagogía tan

solo es necesario utilizar una palabra: nivola. Este

neologismo creado por el propio autor para definir sus obras

de ficción nos resume la obra a la perfección ya que, según

su significado, se refiere a aquellas novelas donde los

personajes se ven oprimidos por pasiones que les impiden

relacionarse en el mundo con normalidad. Justamente lo

que le ocurre a Apolodoro, que es educado con el objetivo

de que absorba conocimientos puramente científicos y así

poder llegar a ser un genio, prescindiendo de la parte

sentimental que cualquier persona normal posee. O su

madre Marina, o como generalmente la denomina el

narrador omnisciente, la Materia, antítesis de Don Avito i

que es menospreciada por éste.

En esta obra tienen bastante importancia las corrientes

ideológicas de ese momento (el positivismo científico, el

Krausismo, la teoría de Mendel, el psicoanálisis de Freud o

la eugenesia).

Miguel de Unamuno perteneció a la conocida generación del

98, que tenía interés sobre las causas de la decadencia

española. Su ideología y manera de ser le causaron muchos

problemas a lo largo de su vida, y si analizamos las obras

escritas a lo largo de los años, podemos apreciar sus

inquietudes, sentimientos y vivencias.

Page 3: Amor y pedagogía

Unamuno al desnudo

Editorial

Amor y

Pedagogía

es una de

las obras

más

célebres de

Unamuno,

no obstante,

resulta poco

amena y

entretenida para un lector que

busque en ella una obra literaria en

el sentido estricto. El autor no

quería que quienes leyeran la

novela pasaran el rato, si no todo lo

contrario: que reflexionasen sobre la

personalidad del hombre y la

angustia de la existencia humana, y

por tanto, remover conciencias,

propósito fundamental de la

Generación del 98.

El escritor vasco plasma en esta

obra entre el ensayo y la novela una

ciencia exagerada, absurda e

incluso tirana que intenta dominar

nuestros instintos más naturales y

dar explicaciones científicas y

racionales a nuestra parte más

emocional. Y es que este cientifismo

llevado al extremo acaba con la vida

del protagonista, Apolodoro, víctima

indiscutible de la pedagogía

científica impuesta por su padre,

que le ha predeterminado como

persona, o más bien como sujeto de

experimento para obtener un genio,

impidiéndole ser él mismo, ser feliz.

¿Cómo iba entonces a seguir

viviendo el protagonista de su obra,

individuo inseguro y desorientado

por la razón de la ciencia que había

fracasado gracias a lo deshumana y

cruel que era? La única vía de

escape era el cese de la “vida” que

le había tocado tener, una vida

vacía de amor, tan sólo con los

abrazos clandestinos de su madre.

No es hasta el suicidio de su hijo

que Carrascal se da cuenta de la

importancia del amor en la

pedagogía, y más aun en la vida.

De este modo la obra concluye con

la revelación de don Avito: el amor

no puede ser apartado ni

menospreciado ya que es la mejor

manera de crear “genios”.

En todas las obras de don Miguel

aparece la angustia por la creencia

en Dios, ese Dios que los hombres

han inventado para llenar sus

pobres e insuficientes vidas, la

manera más práctica de afrontar a

la muerte pero que Unamuno,

debido a su pensamiento científico y

único, no podía servirse, no sin

ganas, quedándose a

contracorriente entre su propia

moral y la sociedad.

Krauss fue el filósofo que desarrolló

la teoría de la pedagogía moderna.

Ésta tiene como fin influir en la

Page 4: Amor y pedagogía

sociedad a través de la escuela, una

escuela que defiende la

independencia del hombre y la

sociedad, que borra los lazos del

alumno con la religión. Miguel de

Unamuno refleja esta teoría en

Amor y Pedagogía de forma

exagerada a través de la ciencia

extrema, creyendo que ésta puede

resolver cualquier problema sin

tener en cuenta la importancia del

papel protagonista del alumno en el

sistema pero que, en realidad, sigue

sin ser eficaz ya que no se tienen en

cuenta los sentimientos y las

emociones de los estudiantes.

Todo esto tiene máxima actualidad:

la pedagogía utilizada en la

segunda República y en nuestros

días tiene una clara base krausista

ya que los alumnos son los

protagonistas indiscutibles del

sistema educativo. Es más, las

clases intentan contemplar la parte

práctica y de relación social

haciendo excursiones, prácticas en

laboratorios o talleres.

Respecto a la ciencia podemos

decir que ésta aún tiene muchas

cosas por resolver, como por

ejemplo la existencia del hombre,

los sentimientos o qué hay después

de la muerte, tema que

especialmente atormentaba a

Unamuno y que reflejaba en sus

obras. Y es que la ciencia, como la

pedagogía, no tiene las respuestas

a todas las cuestiones que el ser

humano se pueda plantear, y por

más que evolucionen siempre

quedarán preguntas sin responder

porque el hombre es insaciable y

curioso por naturaleza.

Ainhoa López

Paula Rodríguez

Page 5: Amor y pedagogía

Miguel de Unamuno

LEER PARA ENTENDER

UNA VIDA CONTRADICTORIA PLASMADA EN SUS ESCRITOS

Miguel de Unamuno es hombre con carácter y personalidad, hecho que le influye

negativamente a lo largo de su vida, una vida muy contradictoria y infeliz como

consecuencia de no poder creer en Dios.

El escritor bilbaíno Miguel de

Unamuno, uno de los principales

exponentes de la generación del 98,

fue un hombre que tuvo un pánico

absoluto a la muerte, hecho fácil de

entender al vislumbrar con seis

años cómo fallece su padre y pasa

a asumir el rol de padre de la familia

a esto se le añade el posterior

fallecimiento de sus dos hermanas

Jesusa y Mercedes, pero el suceso

cumbre será la muerte de su tercer

hijo Raimundo que le sumió en una

profunda depresión y crisis espiritual

y de valores, que será tema

obsesivo de sus mejores “nivolas”.

Por otro lado, él pensaba que para

ser feliz había que creer en Dios y

envidiaba todo aquel que creía en

Dios ya que él aunque quería no

podía, es decir, era agnóstico. Esta

lucha permanente entre querer

creer y no poder aparece en Niebla

y también en Amor y Pedagogía.

Cabe decir que Unamuno era un fiel

partidario del método científico pero

aún así criticaba a aquellos que

llevaban la ciencia al fanatismo, tal y

como podemos comprobar en una

de sus obras como Amor y

Pedagogía, donde el protagonista

quiere crear a un hijo perfecto

mediante la ciencia, experimento

que al final acaba fracasando ya

que el hijo se acaba suicidando, por

lo tanto la ciencia no proporciona la

felicidad.

Finalmente, decir que fue un

hombre con mucho carácter y

personalidad lo que le provocó

muchas destituciones en cargos,

aspecto que se ve reflejado en un

acto celebrado en la Universidad de

Salamanca cuando Unamuno y el

general de la legión José Millán

Astray tuvieron una gran discusión

tras la frase de Miguel “Venceréis,

pero no convenceréis” la respuesta

a ésta por parte de Astray fue “ Viva

la muerte y muera la inteligencia”

En conclusión, a Miguel de

Unamuno su ideología y su forma

de ser le causaron muchos

problemas, y si hacemos referencia

a sus obras podemos decir que

muchas son reflejo de sus

inquietudes, sentimientos y

vivencias.

Sara Álvarez

Esther Cobas

Page 6: Amor y pedagogía

Unamuno al descubierto

Salen a la luz todas las causas que llevaron al intelectual a escribir Amor y

Pedagogía

Anna Taché Gómez y Susana Martínez Arias

El escritor español Miguel de Unamuno publicó, entre otras novelas,

Amor y Pedagogía en 1902. En ésta, la influencia del entorno es evidente,

así como por el contexto histórico con las diversas corrientes ideológicas

del momento. El libro es el fruto de las duras críticas que el artista, sin

pelos en la lengua, lanzó siempre al mundo.

La ideología de Unamuno no sólo

difería de la del mundo en general,

como muestra en su carácter y en

su obra, sino que también de la su

familia. Ésta era una familia

tradicional católica y conservadora,

hecho que se refleja en Amor y

Pedagogía, de forma evidente,

sobre todo en el personaje de

Marina.

Además, las corrientes ideológicas

que influyeron en dicha obra fueron

básicamente el positivismo

científico, el Krausismo, las teorías

Genéticas elaboradas por Mendel,

el evolucionismo, y por último, el

Psicoanálisis, cuyo padre fue Freud;

todas ellas en boga.

El positivismo científico se basa,

como bien indica el nombre, en la

metodología científica, como la

explicación de todo, es decir,

demostrar todo lo existente a través

de la ciencia. Por tanto, rechaza la

explicación de Dios como causa de

todas las cosas. Unamuno era

agnóstico, es decir, quería creer en

Dios pero no encontraba ninguna

prueba de su existencia.

En segundo lugar, se encuentra el

Krausismo. Krause Fue un filósofo

importante que elaboró una teoría

de pedagogía, en la que, según

Friederich Krause, el alumno debía

ser el protagonista de su

aprendizaje y participar de manera

activa en

él. Este

método

fue

aplicado

por Giner

de los

Ríos

durante la

Segunda

República

y fue apoyado por los políticos, que

creían que la única manera de

regenerar un país era a través de la

educación. De esta manera la

educación se consideró como un

derecho muy importante y

necesario, en el cual el maestro

tenía un papel fundamental. Un

ejemplo de una escuela que

defendió esta ideología fue la

Institución Libre de Enseñanza

(ILE), situada en Madrid. Algunos de

Page 7: Amor y pedagogía

los alumnos fueron Garcilaso de la

Vega, Salvador Dalí…

No obstante, el objetivo de Giner de

los Ríos no se pudo llevar a cabo,

ya que a causa del Golpe de Estado

que realizó Francisco Franco la

evolución de las escuelas se

estancó. Unamuno critica esta

corriente llevada al extremo, difiere

de los krausistas más radicales que

no contemplan la parte emocional,

tan importante para este escritor

vasco.

Se añaden también las teorías

genéticas de Mendel, quien

considera

que la

genética

tiene un

importante

peso en la

creación

de un

genio.

Unamuno

critica de

ellas la

ausencia de la parte emocional, ya

que no se Sigmund Freud

valoran los sentimientos de la

persona en cuestión ni se tiene en

cuenta lo que hay después de la

muerte. Para él no tiene sentido

crear tantos genios, ya que al fin y

al cabo a todos nos depara la

muerte.

Por último, la famosa teoría del

Psicoanálisis. En ésta se encuentra

también la teoría del subconsciente,

considerado como el lugar donde

residen los miedos, las experiencias

vividas, etc. De tal manera, estos

factores se manifiestan en los

sueños, y es a partir de ellos

cuando podemos analizar nuestros

verdaderos deseos.

La famosa obra fue escrita en 1902,

al finalizar el estable período de la

Restauración (1874-1902). En éste,

el hijo de Isabel II, Alfonso XII,

instauró una monarquía borbónica

denominada Reinado de Alfonso

XII, que transcurrió desde 1875

hasta 1885.

No obstante, la prematura muerte

del rey (1885) provocó varios

cambios en el liderazgo del trono,

hasta que finalmente se aprobó la

Constitución de 1876, que reconoció

la soberanía del pueblo compartida

con la Corona. Por otro lado, la

restauración también supuso la

pérdida de territorios americanos,

como Cuba y Filipinas.

En consecuencia, surgieron en

España dos movimientos literarios

que reaccionaron contra la estética

del Realismo y Naturalismo. Uno fue

el Modernismo, que se preocupaba

por el arte y lo consideraba motor

para la transformación de la

sociedad. Otro fue la Generación

del 98, que se interesaba en

analizar las causas de la

decadencia española, además de

denunciar la situación tan

desequilibrada a la que se exponía

el país. Fue en éste último

movimiento en el que se situó

Unamuno, ya que se encontraba en

el grupo de escritores, ensayistas y

poetas españoles que opinaban que

España se encontraba en una

Page 8: Amor y pedagogía

situación de crisis, tanto política

como económica y social.

Generación del 98

Los hechos anteriores que

condujeron a esta situación

remontan en 1833, cuando después

de la muerte del rey Fernando VII

empezó el período Liberal. De este

modo, su hija Isabel II heredó la

Corona, hecho que había supuesto

grandes esfuerzos, porque

previamente Fernando VII tuvo que

eliminar la ley sálica. Ésta consistía

en considerar a la mujer como

último recurso para la sucesión del

trono.

Así Carlos, hermano de Fernando

VII, quedó excluido de la herencia

que en un principio le había

pertenecido. Se originaron así las

guerras carlistas, enfrentamiento

entre los liberales o isabelinos

contra los absolutistas o carlistas,

que finalizaron en 1876.

Miguel de Unamuno nació en 1864,

por tanto, en pleno período de

guerras carlistas. Eso provocó que

se viera rodeado de una sociedad

en guerra des de bien pequeño, lo

cual influyó posteriormente en sus

obras, como Paz en la guerra,

(1897).

Dichas guerras dieron paso a una

inestabilidad política en el país,

iniciándose entonces una revolución

burguesa que conllevó al Período

Revolucionario (1868- 1874).

Además, se aprobó la Constitución

de 1869 y se estableció una

monarquía democrática. No

obstante, los monarcas abdicaron y

se proclamó la Primera República.

Durante este período, en las

corrientes literarias se destacaban

el Naturalismo y el Realismo, junto

al Romanticismo, que siguió

presente en algunas obras. Aún así,

nada de esto repercutió en la obra

de Unamuno, ya que su literatura

fue posterior.

¡Quién iba a imaginar que después

de escribir la novela, en 1902,

empezaría un período absolutista

que trascurriría hasta 1923! Fue

reinado por Alfonso XIII, hecho que

provocó que Unamuno presentara

duras críticas reflejando su

disconformidad contra la monarquía.

En 1923 pues, se estableció la

dictadura de Primo de Rivera, que

permaneció durante siete años y fue

apoyada por Alfonso XIII. En ésta se

declaró el estado de guerra, la

suspensión de las garantías

constitucionales y la disolución de

las Cortes. Por otro lado, la alta

burguesía, gran parte de las clases

medias y el ejército consideraron

que dicha dictadura era la solución

a la situación de crisis del país.

A esta época se la reconoció como

la Edad de Plata, debido a la calidad

y el protagonismo de los

intelectuales, literatos y artistas (en

Page 9: Amor y pedagogía

los que se incluye ya el veterano

Miguel de Unamuno). Al finalizar la

dictadura, concretamente el 14 de

abril de 1931, se proclamó la

Segunda República. En ella se

encuentra, por un lado, el Bienio

Reformista (1931-1933), con un

gobierno presidido por Manuel

Azaña y formado por republicanos

de izquierda y socialistas. Por otro

lado, el Bienio Radical (1934-1936),

donde se fragmentaron los grupos

de izquierdas y adquirieron la

victoria los conservadores.

Por último, se destaca que el 12 de

Octubre de 1936, considerado ya el

día de la Hispanidad, se realizó un

acto de apertura del curso

académico en la Universidad.

En él, hubo un fuerte enfrentamiento

entre Unamuno y algunos de los

presentes, como José Millán-Astray,

militar que fundó la Legión

Española. Se destaca el discurso de

Unamuno, con su famosa frase

“Venceréis pero no convenceréis”.

Finalmente, Miguel de Unamuno

murió el 31 de Diciembre de 1936,

sin saber que tres años más tarde

se impondría la dictadura de

Francisco Franco.

Universidad de Salamanca

Page 10: Amor y pedagogía

Los profundos y trascendentales

temas en Amor y pedagogía

Los temas que más perturbaban a Unamuno extraídos de su

obra maestra para deleite de sus lectores.

En el apasionante libro Amor y pedagogía encontramos tres temas

fundamentales que destacan sobre los demás. Estos son la

contradicción entre la ciencia y la vida, hacer del amor pedagogía y

también que el fracaso de la ciencia en la pedagogía no significa el

triunfo del amor. Por otro lado, además

podemos disfrutar de diferentes subtemas que

nos dan una amplia visión del pensamiento

que Miguel de Unamuno quería transmitir al

escribir este fabuloso libro. Entre estos

variados y profundos temas secundarios

podemos descubrir las propias fantasías y

demonios del autor: el afán por permanecer en

la memoria colectiva, una crítica a lo que sería

la educación apartada del resto de la

sociedad, e incluso los conflictos de

personalidad. Además también destaca el trasfondo filosófico como

por ejemplo la duda sobre si realmente somos libres o concepciones

puramente nihilistas de la vida

“Anda por mecánica, digiere por

química y se hace cortar el traje por

geometría proyectiva” . He aquí la

peculiar forma de vida de Avito

Carrascal, que utiliza la ciencia

incluso para desarrollar acciones de

la vida cotidiana. Esta exageración y

obsesión por el cientifismo es una

constante de la obra del catedrático

y el resultado no será otro que la

aniquilación de todo vestigio de

vida. De este hecho el fabuloso

autor de la generación del 98 acaba

concluyendo que se debe llevar a

cabo una pedagogía amorosa

aunque pese a esta afirmación

tampoco se puede dar por cierto

que el amor venza a la pedagogía

porque la obra culmina con el

suicidio del personaje Apolodoro,

que se deja atrapar por el amor.

Page 11: Amor y pedagogía

El machismo y el erostratismo son

dos tópicos actuales, que también

encontramos reflejados en su obra.

Claro ejemplo de ello lo podemos

observar en el trato que reciben las

mujeres, utilizadas como meros

objetos y en el afán de Apolodoro

por pasar a la posteridad.

Una educación marginal y apartada

del resto de la sociedad marca la

vida del chico evocándole una

personalidad indecisa e insegura

condicionada por el cientifismo

paterno y el amor de su madre.

Enlazado está este conflicto con el

siguiente subtema, que es la

personalidad única que pretenden

infundir a Apolodoro, espetándole

frases con el fin de imprimirle un

carácter propio como ésta:

“Extravaga, hijo mío, extravaga.

Que no te clasifiquen. Sé único,

único e impredecible y cuando

alguien te vea que diga es él,

Apolodoro Carrascal”.

Debemos destacar un subtema que

es tratado superficialmente y desde

una concepción metafísica: el

conflicto de asegurar si existe el

libre albedrío o por el contrario

estamos destinados a vivir nuestra

vida libremente. Analizando el

pensamiento de don Fulgencio

podemos apreciar que le

atormentan sus dudas existenciales

(hecho que también se le atribuye a

la personalidad de Unamuno), que

vienen dadas porque sabe que está

destinado a morir y duda si no será

así también la vida humana.

Por último, encontramos el hecho

de comprender nuestra vida como

un sueño (concepción calderoniana

que afirma que nuestra vida es algo

ilusorio, algo así como un sueño y

que por tanto no tiene ningún valor

o relevancia) o bien con un total

nihilismo.

Luis Miguel Trasancos Marc Pérez

Iván Reynoso

Page 12: Amor y pedagogía

AMOR Y PEDAGOGÍA, ESPEJO DE

UNA ÉPOCA

Un espacio poco concreto para una obra determinada

El espacio en la novela de Miguel de Unamuno no solo sitúa a los

personajes en un escenario preciso, si no, también influye en su

personalidad. Conocemos que las acciones ocurren en la tenebrosa casa

de don Avito, la apacible alameda, el misterioso estudio de don Epifanio y

el chocante despacho de don Fulgencio.

El espacio en la obra Amor y pedagogía de Miguel de Unamuno a pesar de ser

un elemento poco descrito, es capaz de determinar el comportamiento del

protagonista y condicionar su estado anímico. Aún así, a lo largo de la obra

podemos observar que los personajes van variando su ubicación. Los

escenarios son pocos pero claves.

El tenebroso hogar de don Avito preparado para la llegada del futuro genio se

describe como: “La casa está dignamente provista para recibirlo; techos altos,

como ahora se lleva, iluminación, aeración, antisepsia. Por todas partes

barómetros, termómetros, pluviómetros, aerómetro, dinamómetros, mapas,

diagramas, telescopio, microscopio, espectroscopio, que adondequiera que

vuelva los ojos se empape en ciencia; la casa es un microcosmos racional. Y

hay en ella su altar, un rastro de culto, hay un ladrillo en que está grabada la

palabra Ciencia, y sobre él una ruedecita montada sobre su eje”. A medida que

avanzamos en la lectura podemos situar a ésta en una ciudad, que es descrita

por el protagonista, el que la ubica detrás de un río y la describe con la

presencia de unas grandes torres y chapiteles.

Para llegar a conocer la ubicación del lugar principal donde suceden gran parte

de las acciones de los personajes, la casa de don Avito, vemos cómo el

protagonista pasea por la calle hasta llegar a la agradable alameda, un lugar

tranquilo y confundido en medio de la naturaleza. Con la presencia del

protagonista, Apolodoro, en dicha alameda, muestra un cambio de estado

emocional en él. Este parece estar preocupado. Debido a esto, intenta calmar-

se y dejar de pensar en el mundo que le rodea.

Page 13: Amor y pedagogía

Otro de los lugares donde se

desarrollan las acciones es el estudio

de pintura donde nuestro protagonista

recibe clases de dibujo, allí en el

profundo estudio de don Epifanio, un

artista fracasado que ha conseguido el

cariño de Apolodoro. Todos los

consejos que éste pueda darle no son

del agrado de don Avito; todo lo

contrario a todo aquello que pueda

decirle don Fulgencio. Éste, un filósofo

amigo de la familia, el cual influye en la educación del niño. De este personaje

se conoce su despacho. Se dice que en él se encuentra un sillón de vaqueta

junto a un esqueleto de hombre el cual tiene como inscripción “Homo insipiens”

y otro esqueleto, en este caso de gorila, que contiene un escrito “Simia

sapiens”. Con ello el autor de la novela pretendía hacer de nuevo alusión al

evolucionismo de Darwin.

Finalmente se considera que esta obra en conjunto está ubicada en un lugar de

la península española debido a la presencia de nombres propios de la época,

entre otros aspectos.

Nuria Soldevila

Laia Blanco

Page 14: Amor y pedagogía

AMBIENTES PERSONALIZADOS

EN LOS ESPACIOS DE AMOR Y PEDAGOGÍA

Cuando los personajes, en la obra de Amor y Pedagogía, llevan a cabo

una acción, ésta se desarrolla en un espacio determinado que permite

crear el ambiente de la acción mediante la descripción del lugar y también

conocer la personalidad de cada personaje.

El espacio narrativo es el lugar o

lugares donde se llevan a cabo los

acontecimientos de la obra. Estos

lugares pueden ser solamente

mencionados por el narrador o por

los personajes y pueden aparecer

descritos detalladamente. Con todo

esto, el espacio nos permite

conocer el ambiente que envuelve a

los personajes y que, en ocasiones,

los puede condicionar, hasta el

punto de que el mismo personaje se

adapte a un espacio.

Normalmente el espacio suele ser

objetivo pero, en muchos casos,

puede ser descrito de forma

subjetiva. Además, el espacio

también puede reflejar la

personalidad de los personajes y,

en ocasiones, puede tener un valor

simbólico.

En la obra de Amor y pedagogía

observamos cómo el espacio tiene

mucho valor simbólico, como en el

caso del personaje de Don

Fulgencio en la obra, donde su

despacho se describe como un

lugar que irradia un ambiente

filosófico y de reflexión y, además,

se ve reflejada la personalidad del

personaje descrito, como un filósofo

creyente en la idea de Dios y en la

ciencia.

(El personaje de Don Fulgencio está relacionado con la personalidad e ideología del autor, Miguel de Unamuno. Así pues, el despacho de Don Fulgencio se ve influenciado por el ambiente filosófico del estudio del propio autor)

Page 15: Amor y pedagogía

Estudio de Miguel de Unamuno

En el caso de Avito Carrascal, su

espacio resulta ser un laboratorio,

en el que se dedica a estudiar y

llevar a cabo sus experimentos, ya

que en la obra se le define como un

personaje sumergido, por completo,

en el mundo de la ciencia. Su

laboratorio cuenta con ventilación,

unos techos muy elevados y con

numerosos aparatos científicos.

Este espacio transmite un ambiente

de concentración y trabajo, donde

el personaje puede sumergirse en

sus experimentos.

Por un lado, otro espacio que parte

con cierta similitud a los ya

mencionados, es el estudio de Don

Epifanio, ya que, igual que los

anteriores espacios, transmite un

ambiente de concentración y

reflexión. Este espacio, en concreto,

al tratarse de un estudio de dibujo,

transmite un ambiente de

inspiración e intimidad, donde el

personaje puede lograr efectuar

satisfactoriamente sus obras de

arte.

Por otro lado, está el lugar exterior a

estos espacios: las calles de la

ciudad.

En la obra de Amor y pedagogía, la

ciudad transmite, a través de

algunos personajes, un ambiente de

claustrofóbico, están encerrados y

también un lugar donde hay poca

intimidad. Por ello, el personaje de

Apolodoro se refugia en la alameda

para liberarse de esa sensación de

encierro.

Finalmente, hay un espacio que

constrasta bastante con los

anteriores: la alameda. ¿Qué

diferencia hay entre este espacio y

los anteriores?, pues en primer

lugar, se trata de un espacio

exterior, abierto, libre,

completamente opuesto a los

espacios anteriores, todos cerrados

e introvertidos. En este lugar, el sol

lo ilumina todo, hay un césped

verde que denota frescura, una gran

concentración de árboles y,

también, corre un río de aguas

cristalinas. Este espacio transmite

un ambiente de libertad y evasión,

tal y como ocurre con el personaje

de Apolodoro Carrascal, el cual se

acerca a este lugar para liberarse y

evadirse de las presiones y

encerramientos de las que él es

víctima en la ciudad.

Después de todo, un espacio puede

condicionar a los personajes, o

también puede que éste acabe

adaptándose a ellos, como se ha

podido comprobar en esta obra.

Laura Ortega

Yolanda Catalán

Page 16: Amor y pedagogía

¿Fracaso de la pedagogía?

El amor y la pedagogía no son compatibles según Miguel de Unamuno

En 1902 Miguel de Unamuno escribió uno de sus libros más famosos para

remover conciencias, Amor y pedagogía, donde además vuelca sus inquietudes

en esta: la pedagogía, la ausencia de Dios, qué papel tienen los sentimientos en

la vida… son algunos de los temas que trata el escritor bilbaíno en esta nivola.

El famoso libro de Unamuno nos

recuerda al teatro de lo absurdo y

con ello a obras como Tres

sombreros de copa de Miguel

Mihura donde encontramos escenas

irónicas incluso en muchas

ocasiones absurdas, aunque en el

fondo lo que intenta es remover

conciencias. Respecto al

argumento, podemos decir

que está relacionado con

la estructura tradicional, no

pretende innovar, sino

hacer que llegue el

mensaje en esta novela a

caballo entre la literatura y

el ensayo.

Don Avito Carrascal, un fanático de

la ciencia moderna, positivismo y

pedagogía, decide crear un genio.

Este proyecto fracasa y el “futuro

genio” acaba con un final

insospechado. Avito convencido y

entusiasta se propone busca a la

mujer ideal para engendrar dicho

genio. Leoncia es la elegida. No

obstante, el amor, sentimiento no

científico, lo traiciona y se enamora

de Marina o “materia” como la

llamará más tarde. Se acaban

casando y tienen un hijo. En el

matrimonio vemos dos

posturas diferentes: una es

la postura tradicional y

emocional de Marina, y la

otra es la científica de

Avito. Esto queda ilustrado

en el momento de elegir el nombre,

Marina quiere un nombre familiar

como es Luis y, en cambio, Avito

piensa en un nombre más científico

como Apolodoro. Estas dos

posturas se manifiestan de nuevo

cuando Apolodoro debe recibir una

educación, ya que Avito considera

Page 17: Amor y pedagogía

que el niño no va por buen camino y

pide consejo a su amigo Fulgencio.

Avito se propone educarlo en casa

ya que cree que la educación

escolar no funciona, hecho que

provoca que el niño se aísle del

mundo y sea distinto de los demás,

no tiene en cuenta que la

socialización de un niño empieza en

la escuela con sus iguales. Sin

embargo, la pedagogía que no

contempla los sentimientos fracasa

ya que Apolodoro se enamora de

Clarita (compañera de clase). Todo

el proyecto por los aires. El último

mazazo para Apolodoro, que creía

haber encontrado la felicidad, es el

abandono de Clarita por Federico.

Apolodoro hundido por el fracaso va

a visitar a Fulgencio para pedirle

consejo, éste le aconseja que tenga

hijos para perpetuar su obra. El

muchacho siguiendo las palabras

del filósofo deja embarazada a

Petra, su criada. Pero nada le

convence y ante la situación

desordenada de su vida y la presión

que recibe, decide suicidarse

haciendo que “venza el amor”.

La novela de Amor y pedagogía

presenta la estructura tradicional.

Ya lo hemos comentado, no

pretende innovar. Introducción,

nudo y desenlace integran la obra.

La introducción está formada

solamente por el primer capítulo

donde se nos presenta la acción y

los personajes principales.

En cambio, el nudo está formado

por once capítulos, es decir, del dos

al trece. En esta parte encontramos

el clímax es donde vemos como

Apolodoro deja embarazada a su

criada Petra. Finalmente este hecho

desemboca al desenlace en el que

el niño decide acabar con su vida.

Alicia Ruiz

Sandra Gómez

Page 18: Amor y pedagogía

Simples títeres en manos de su

creador

Los personajes de Unamuno enfrentados a la ciencia y la

pedagogía extrema.

En la novela de Amor y Pedagogía encontramos una serie de personajes que

desempeñan la función de soporte de una idea. En torno a estos personajes se

desarrolla la crítica en la que el autor profundizar.

En la obra se presentan

ciertos personajes de interés.

Es don Fulgencio el maestro

encargado de mover los hilos

de los títeres, ya que se

confirma en el debate íntimo

mientras sus discípulos

Apolodoro y don Avito actúan.

A través de ellos influye en

los acontecimientos, es por

eso que son los encargados

de representar la parte exterior del

drama. El filósofo está casado con

doña Edelmira, fiel retrato de la mujer

dominante que considera a su esposo

como un charlatán y desprecia sus

filosofías. Éste es un personaje

redondo, por lo tanto evoluciona a lo

largo de la obra, dónde cada vez es

más racional y menos científico como

se puede observar cuando aconseja a

Apolodoro que tenga hijos.

Don Avito, personaje redondo y de caracterización indirecta, es un monstruo de

la pedagogía y la ciencia, capaz de apartar un bebe del vinculo materno, por el

simple hecho de llevar a cabo su proyecto de crear un genio, su hijo. Para ello

habrá ido en busca de una mujer que cumpla una serie de requisitos. Al

comienzo de la obra se le presenta Leoncia Carbajosa, prototipo de mujer ideal

ya que es una muchacha hecha y derecha, de color sano, amplias caderas y

turgente y levantado pecho. Pero finalmente don Avito se siente desconcertado

Page 19: Amor y pedagogía

porque le falla la ciencia y cae en los encantos de Marina con quien crea el

“genio”. El hijo, Apolodoro, es tratado como un objeto científico por su

progenitor desde que nace, por tanto este representara con tal patetismo el

papel de víctima.

Marina es un personaje femenino por lo tanto carece de profundidad, ésta es la

antítesis de su marido. Durante el transcurso de la obra desempeña la única

función de madre tierna y esposa pasiva y resignada ante Avito, ya que éste

sólo la utiliza como molde para así crear su “genio”, por este motivo Marina

simboliza la materia y representa la emoción frustrada viviendo en un sueño

para no ver la realidad.

Otro personaje femenino es la hija del matrimonio Carrascal, Rosita. Ella es

más inteligente que su hermano, pero por el simple hecho de ser una chica su

padre no le presta la suficiente atención, es por eso que se cría con su madre

de la cual recibe todos los mimos reprimidos de Apolodoro.

Una de las razones que llevan al genio a suicidarse es el fracasado amor con

Clarita, personaje de caracterización indirecta superficial y vulgar, ya que ésta

finalmente escoge a Federico como su pretendiente porqué tiene mejor futuro

económico. Además éste contrasta con la falta de voluntad de Apolodoro.

Clarita es la hija de don Epifanio, profesor de dibujo de Apolodoro. El padre de

la niña a partir de sus intervenciones deja entrever que prefiere a Federico

como pretendiente de su hija.

Otro personaje que desempeña la función de educar a Apolodoro es Menaguti.

La carrera fracasada del genio como escritor, estimulada por Menaguti será

otra de las causantes de su suicidio. El profesor se encuentra ajeno al

desarrollo argumental durante toda la obra. Los personajes menos relevantes

pero no de menos importancia son Petra, sirvienta de la casa de don Avito la

cual mantiene relaciones con Apolodoro; Fructuoso del Valle, hermano de

Marina y Emilio hermano de Clara que actúa de forma dura con la relación

entre su hermana y Apolodoro, aunque al final la comprende.

Saida López y Laura Díaz

Page 20: Amor y pedagogía

DIÁLOGO, DUEÑO Y SEÑOR EN

AMOR Y PEDAGOGÍA

La constante interacción entre diálogo y narración, en el libro de Amor y

Pedagogía de Miguel de Unamuno publicado en 1902, sirve para hacer

más amena la lectura y Unamuno lo realiza mediante una constante

conversación de los personajes, lo cual la hace más parecida a una obra

de teatro que a una novela.

Al leer la obra de Amor y

Pedagogía te percatas del gran

uso de diálogos, tal y como se

produce en las obras de teatro.

Al saber que se trata de una

novela, uno se puede

cuestionar el porqué de este

abuso.

Hay una serie de diálogos que

se repiten constantemente a lo

largo de la obra, como en el

caso de Don Fulgencio y de

Don Avito, que comentan sus

teorías para aplicarlas a

Apolodoro, hijo de Avito. Otro

diálogo, que se produce con gran

frecuencia a lo largo de la segunda

mitad de la obra es el de Apolodoro

y Petra, donde éste resignado por

no haber podido conseguir el amor

de Clarita y siguiendo los consejos

de Menaguti, quiere tener un hijo

con Petra pero ella no le

corresponde.

Page 21: Amor y pedagogía

La combinación de diálogo y

narración es la técnica utilizada en

un gran número de libros, y un claro

ejemplo de esto es el mismo Amor y

Pedagogía de Unamuno. En

ocasiones se lleva a cabo un gran

abuso de ello.

Los lugares y personajes contienen

descripciones. Un claro ejemplo

seria el despacho de Don Fulgencio

o la casa de Don Avito. Por lo que

se refiere a los

personajes, todos los que aparecen

en la obra con una notable

frecuencia son descritos,

generalmente por el narrador.

A lo largo del transcurso de la obra

también hay una notable presencia

de monólogos, el caso más claro es

el de Marina, que realiza algún

monólogo que le permite al escritor

transmitir a los lectores que su vida

es un claro engaño y fracaso.

Las técnicas que utiliza el escritor

para informar al lector sobre el

pensamiento de los personajes, sin

la necesidad de la intervención del

narrador, son los soliloquios y los

monodiálogos interiores.

Juan Manuel Velázquez

Alberto Egea

Page 22: Amor y pedagogía

VíCTIMAS DEL

FANATISMO

Unamuno y Amor y Pedagogía

un “desahogo que le libra de

los malos humores”.

Miguel de Unamuno, escritor de

la “Generación del 98”, escribe

Amor y Pedagogía, obra que

critíca de forma irónica sus

propias ideas, combinando lo

humorístico y lo serio, es decir,

utilizando la ironía (recurso muy

cervantino).

Patricia Antón y Georgiana Budin

En Amor y Pedagogía los

personajes son víctimas del

fanatismo, ya que el estilo combina

lo humoristico y lo serio utilizando

una técnica narrativa deformadora e

hiperbólica. Además encontramos

pasajes de gran lirismo y

tecnicismos de carácter científico

con intención irónica y burlesca,

como también encontramos

recursos propios de la “Generación

del 98”, que más adelante

observaremos, entre otros.

“No le beses, no le beses así,

Marina, no le beses; esos contactos

son semillero de microbios.”

En el estilo, el autor hace cómicos y

exagerados temas que tienen un

carácter serio y no se atreve a

expresar en un ensayo, pues

prefiere expresar dichos desatinos

en esta “nivola”, por lo tanto adopta

el cómodo artificio de ponerlos en

boca de personajes grotescos y

absurdos, afirmando de una manera

burlesca lo que acaso piensa en

serio.

El protagonista de la obra,

Apolodoro, descubre el amor y la

poesía, aspectos antagónicos a la

pedagogía paterna. Mediante la

obra el autor hace burla de los

talibanes científico y pedagógicos

que no contemplan la parte

emocional del ser humano.

Los recursos que utilizaba son la

sencillez expresiva, con una clara

voluntad antirretórica y con un

predominio de un diálogo fluido ya

que lo importante es que se

entienda el contenido. Finalmente,

encontramos un juego literario de

gran originalidad a partir de los

prólogos y epílogos que nos

descubren pistas para poder

interpretar mejor la obra a pesar de

estar ajenos, en apariencia, al

desarrollo argumental de la novela.

“Caíste, y como tú caíste caerá él, y

caerán todos y estaréis cayendo sin

cesar.”

Page 23: Amor y pedagogía

En conclusión, el estilo en Amor y

Pedagogía, combina lo humorístico

y lo serio, dándole un punto de

ironía a la obra mediante la ciencia

de don Avito y la poesía de

Apolodoro, de tal forma que se

oponen el uno del otro, además del

demonio familiar, que actúa de

conciencia reprochando la conducta

delprotagonista.

Y como dijo Unamuno, para él Amor

y Pedagogía era “un desahogo, y

con haberlo escrito me vi libre y

desembarazado de malos humores,

pues no puede usted figurarse la

bilis que he tenido que digerir para

verter este amargo humorismo”.

Nada mejor para definir la obra.

Page 24: Amor y pedagogía

EL ARTE

DE CRITICAR

Cómo y por qué se escribió Amor y Pedagogía, las claves para

entender al autor.

Amor y pedagogía es un libro que recoge las principales ideas que

albergó Miguel de Unamuno. Para poder narrarnos con detalle todas sus

ideas, utiliza el narrador en tercera persona omnisciente, ello nos permite

conocer a fondo los personajes de la obra, entre los que se incluye su

alter ego, don Fulgencio, un extraño personaje que defiende la ideología

del autor.

En esta novela Unamuno recoge los

principales argumentos de sus

teorías, cuyo objetivo es remover

conciencias a los lectores. Para

conseguir sus objetivos critica varias

ideologías filosóficas y científicas

del siglo XIX y XX. Destaca

principalmente la crítica al

krausismo, la sociología positivista y

la eugenesia, aunque también

incluye sus dudas respecto a la

muerte y la necesidad de creer en

Dios cómo salvación.

La crítica al Krausismo es muy

extensa, ésta corriente filosófica de

la pedagogía que se había

propuesto un nuevo concepto de

educación es criticada

positivamente por el autor, cuyo

propósito es remarcar la

incapacidad emotiva resultado de

semejante educación, representado

a través del trágico porvenir y

pésimo final de Apolodoro.

Incluye otra gran crítica contra la

sociología positivista, corriente

filosófica y científica de la segunda

mitad del siglo XIX, cuyo punto

principal es desechar todo

conocimiento subjetivo y sólo

atender a los hechos. La ataca a

través de unos personajes simples y

esquemáticos, apreciable en la

creencia desmedida de Avito por los

hechos.

Por otro lado, critica también a

la eugenesia, corriente científica

creada por Francis Galton, cuya

argumentación defendía que el ser

humano podría acelerar su proceso

evolutivo si llevaba a cabo una

selección racional del matrimonio.

Esto queda reflejado en la obra

cuando Avito decide hacer una

selección racional de su esposa,

eligiendo primeramente a Leoncia

Garbajosa por su correcta

predisposición a la creación de un

genio, debido a sus rasgos.

Page 25: Amor y pedagogía

Además, Unamuno incluye en

su obra sus dudas acerca de la

existencia de Dios, una idea

constante en sus obras, un tema

que le mantiene angustiado ya que

él quiere creer en su existencia,

creyendo así poder salvarse de la

muerte, pero no puede porque no es

demostrable científicamente. Don

Fulgencio es el encargado de

transmitir estas dudas al lector, a

través de su extravagante

personalidad y sus alocadas teorías.

Las críticas están incluidas de en

la forma de actuar y pensar de los

personajes. Con el fin de explicar

toda la psicología de personajes,

recurre al narrador de tercera

persona omnisciente. Por ello,

conocemos los sentimientos,

sensaciones, intenciones, planes y

demás de dichos personajes.

No obstante, las descripciones

son limitadas y hay un predominio

del diálogo, siendo éste ágil y fluido,

dándole dinamismo a la obra. En

ocasiones puntuales la acción

queda interrumpida por los

monodiálogos interiores.

En personajes como Apolodoro,

de un carácter poco emotivo,

Unamuno recurre al soliloquio, es

decir, un discurrir de la conciencia

en que el persinaje piensa en voz

alta, intentando transmitir los

pensamientos del personaje al

lector.

De todo esto, concluimos que el

objetivo principal de la obra es la

crítica hacia la pedagogía racional,

sin tener en cuenta los sentimientos.

Para ello, satiriza las diversas

corrientes ideológicas a través de

personajes llevados al extremo.

Esta crítica no la habría logrado de

no ser que utilizó un narrador en

tercera persona omnisciente,

permitiendo convertir las críticas

directas en sutiles situaciones

cómicas.

Eric Escalona Víctor Martín

Sergio Cabañero