rodolfo bohoslavsky

48
Rodolfo Bohoslavsky - Orientación Vocacional Capítulo I : El Marco de Referencia Del objeto al sujeto en orientación vocacional El error mayor de supuestos, que a veces impregnan la orientación vocacional contemporánea, consiste en entender al hombre como un objeto de observación, diagnóstico, estudio y orientación para el especialista en lugar de entenderlo como sujeto. De esta manera se verá al mismo tiempo algo que es común a los hombres y dejaremos de preocuparnos por aquello que nos hace diferentes; se percibirá en los hombres algo que, se podría llamar su capacidad de decisión, su posibilidad de elección. En este enfoque se incorpora a la tarea de orientación vocacional una dimensión ética. La ética surge del hecho de que, al considerar al hombre sujeto de elecciones, consideraremos que la elección del futuro es algo que le pertenece y que ningún profesional, por capacitado que esté tiene derecho a expropiar. Este enfoque tiene implicaciones filosóficas (supone una valoración del hombre, una concepción que va más allá de la ciencia), ideológicas (se piensa en la vida real y concreta de los seres humanos) científicas y técnicas (este planteo modifica los conceptos básicos de la orientación vocacional, para satisfacer distintos supuestos). La omisión, intencional o no, del análisis de los supuestos metafísicos (filosóficos, antropológicos e ideológicos) de toda actividad científica crea la falsa idea de que la tarea, en el campo de la orientación vocacional, es simplemente una cuestión de test, mediciones y pronósticos más o menos objetivos. Esto tiene que ver con el problema de la medición en psicología. La persona no es sino lo que busca ser Un joven que concurre a orientación vocacional demuestra estar preocupado por su persona en relación con su futuro, y ese vínculo con el futuro está comprometido a otro, el orientador. El resultante del proceso de orientación tendrá que ver con la interacción de estos tres factores. Además estará expresando relaciones directas o indirectas respecto del futuro del 1

Upload: sabrina-perez

Post on 09-Sep-2015

41 views

Category:

Documents


5 download

DESCRIPTION

LIBRO

TRANSCRIPT

Rodolfo Bohoslavsky - Orientacin Vocacional

Rodolfo Bohoslavsky - Orientacin Vocacional

Captulo I: El Marco de Referencia

Del objeto al sujeto en orientacin vocacional

El error mayor de supuestos, que a veces impregnan la orientacin vocacional contempornea, consiste en entender al hombre como un objeto de observacin, diagnstico, estudio y orientacin para el especialista en lugar de entenderlo como sujeto. De esta manera se ver al mismo tiempo algo que es comn a los hombres y dejaremos de preocuparnos por aquello que nos hace diferentes; se percibir en los hombres algo que, se podra llamar su capacidad de decisin, su posibilidad de eleccin.

En este enfoque se incorpora a la tarea de orientacin vocacional una dimensin tica. La tica surge del hecho de que, al considerar al hombre sujeto de elecciones, consideraremos que la eleccin del futuro es algo que le pertenece y que ningn profesional, por capacitado que est tiene derecho a expropiar.

Este enfoque tiene implicaciones filosficas (supone una valoracin del hombre, una concepcin que va ms all de la ciencia), ideolgicas (se piensa en la vida real y concreta de los seres humanos) cientficas y tcnicas (este planteo modifica los conceptos bsicos de la orientacin vocacional, para satisfacer distintos supuestos).

La omisin, intencional o no, del anlisis de los supuestos metafsicos (filosficos, antropolgicos e ideolgicos) de toda actividad cientfica crea la falsa idea de que la tarea, en el campo de la orientacin vocacional, es simplemente una cuestin de test, mediciones y pronsticos ms o menos objetivos. Esto tiene que ver con el problema de la medicin en psicologa.

La persona no es sino lo que busca ser

Un joven que concurre a orientacin vocacional demuestra estar preocupado por su persona en relacin con su futuro, y ese vnculo con el futuro est comprometido a otro, el orientador. El resultante del proceso de orientacin tendr que ver con la interaccin de estos tres factores. Adems estar expresando relaciones directas o indirectas respecto del futuro del consultante, como as tambin ser un emergente de un contexto social ms amplio.

El contexto social ser analizado en trminos de rdenes y esferas institucionales.

Por rdenes se entienden al conjunto de instituciones que persiguen un mismo fin. Hay cinco rdenes institucionales: religioso, poltico, militar, familiar y de la produccin. Los que ms nos interesan para la orientacin vocacional son los dos ltimos.

Esfera tiene que ver con ciertas organizaciones de productos y procesos culturales que tienen que ver con todos los rdenes institucionales (Ej. Esfera del status).

En cuanto a la institucin familiar, la persona mantiene vnculos importantes. Se encuentra en un momento particular de su vida, en el que intenta separarse de un sistema del cual es un elemento perifrico, para convertirse en el ncleo de otro sistema. En cuanto al orden institucional educacin, las personas concurren a orientacin vocacional porque les preocupa definir sus estudios futuros.

El psiclogo como profesional est ubicado tambin en el sistema productivo y mantiene vnculos con el orden institucional educacin ya que ha recibido una formacin especializada.

El futuro tiene una importancia actual-activa para el adolescente, y forma parte de su estructura de personalidad en ese momento.

Las dimensiones del problema

Con frecuencia se observa que al adolescente le gustara estudiar una carrera y trabajar en otra profesin. Advertimos aqu la disociacin en dos cosas que tendran que estar unidas, pero la ruptura existe a menudo no slo en el adolescente sino entre la universidad y la comunidad.

El mismo problema aparece al examinar la incidencia del contexto familiar. Un nivel de anlisis pedaggico y sociofamiliar resulta imprescindible para comprender la situacin de quien elige, puesto que su anlisis no se agota ni se aclara desde una perspectiva exclusivamente psicolgica.

Ser preciso analizar los vnculos con el otro, la eleccin siempre tiene que ver con los otros (reales y fantaseados), nunca se piensa en una carrera o en una facultad despersonalizadas. Habr que analizar las relaciones con aquellos otros con los cuales se establecen relaciones primarias (miembros de la familia, pares, etc.) y esos otros con los cuales se mantiene una relacin de naturaleza secundaria (profesores, psiclogos, etc.).

Qu hacer, quin ser

Para una adolescente definir el fututo no es slo definir qu hacer sino fundamentalmente definir quin ser y, al mismo tiempo, definir quin no ser.

Los verdaderos problemas de la orientacin vocacional tienen que ver con el realizarse que plantea el adolescente en la consulta. Crendose y creando en la relacin con determinados objetos de la realidad externa e interna. Es una cuestin de vnculos.

Los vnculos pueden ser actuales, pasados y potenciales. Los primeros son siempre los aspectos manifiestos y no manifiestos de la relacin con el profesional. Condensan y expresan vnculos pasados (de la historia del sujeto) y potenciales (en trminos de proyectos). El psiclogo centrado en los vnculos actuales diagnostica los vnculos pasados y opera sobre los potenciales.

La persona que elige

El que elige es un adolescente quien est en una edad de grandes cambios, est sometido a una continua crisis.

La adolescencia es un perodo de crisis, transicin, adaptacin y ajuste. En los cambios involucrados en el trnsito de la infancia a la edad adulta el individuo ha de encontrar distintos modos de adaptarse en reas y niveles diversos. Una de las reas en que ese ajuste habr de realizarse se refiere precisamente al estudio y al trabajo, entendidos como medio y forma de acceder a roles sociales adultos. Cuando se realiza ese ajuste en el plano psicolgico, decimos que el sujeto ha alcanzado su identidad ocupacional.

La identidad ocupacional ser considerada como un momento del proceso que se halla sometido a las mismas leyes y dificultades que aquel que conduce al logro de la identidad personal.

Los problemas vocacionales tendrn que entenderse como problemas de personalidad determinados por fallas, obstculos o errores de las personas en el logro de la identidad ocupacional.

La identidad ocupacional es la autopercepcin a lo largo del tiempo en trmino de roles ocupacionales. Entendemos por ocupacin al conjunto de expectativas de rol, no es algo definido desde adentro ni desde afuera sino su interaccin.

Por rol se entiende una secuencia pautada de acciones aprendidas, ejecutadas por una persona en situacin de interaccin.

La asuncin de roles puede producirse en forma consciente o inconsciente. En el primer caso el rol es ejecutado por una persona que al asumirlo manifiesta poseer una identidad ocupacional. Cuando la asuncin del rol es inconsciente, esas acciones adoptadas tienen que ver ms con las identificaciones que con la identidad del ocupante de un rol.

Hablar de identificaciones es referirse a su funcin defensiva, una forma de superar un conflicto. En cambio se habla de identidad cuando las identificaciones pierden el carcter defensivo original. Con esto anticipamos que una eleccin basada sobre identificaciones no es por fuerza mala eleccin .La identidad ocupacional se desarrolla como un aspecto de la identidad personal. Sus races genticas se asientan bsicamente sobre el esquema corporal y estn sujetas desde el nacimiento a las influencias del medio humano.

En toda profesin hay una relacin con los objetos que estn fuera del espacio propio (personas, mquinas, herramientas, etc.), pero con los cuales nos relacionamos a partir de nosotros. En estas relaciones el gesto, el movimiento y la actitud corporal incluyen componentes mgicos.

Las caractersticas o cualidades mgicas de las acciones instrumentales estn presentes en todos los adolescentes que eligen una carrera universitaria.

El sentimiento de identidad ocupacional se ha gestado sobre la base de las relaciones con los otros. En esas relaciones algunos aspectos merecen una atencin particular:

a) La gnesis del ideal del yo

As como el ideal del yo se establece sobre la base de identificaciones con adultos significativos, el ideal del yo en trminos ocupacionales se establecer en trminos de relaciones, cargadas afectivamente, con personas que ejecutan roles ocupacionales (yo quisiera ser como tal persona).

b) Identificaciones con el grupo familiar

El grupo familiar constituye el grupo de pertenencia y de referencia fundamental y es por ello que los valores de ese grupo constituyen anclajes significativos en la orientacin de la conduccin del adolescente.

Las satisfacciones o insatisfacciones de los padres y de otros familiares significativos en funcin de sus respectivos ideales del yo, y la vivencia de las mismas, juegan un papel importante en lo que concierne a las influencias que, desde chico recibe el adolescente en su hogar.

Los grupos de que forma parte el individuo pueden ser para l tanto de referencia como de pertenencia (positivos o negativos) e incidir en su conducta slo en un sentido o en ambos.

c) Identificaciones con el grupo de pares

Opera de la misma manera que el grupo familiar, pero a diferencia de l nunca es tomado como grupo de referencia negativo. Por otra parte la pertenencia al grupo de pares es algo adquirido y que debe ser defendido.

Todo adolescente que plantea una contradiccin entre los valores del grupo familiar y los valores del grupo de pares nos est hablando de una disociacin de su propia identidad, de identificaciones con los dos grupos que l no puede integrar. Pero al mismo tiempo nos est hablando de contradicciones entre la sociedad ms amplia y la sociedad adolescente, de la que aquellas identificaciones son un efecto.

d) Identificaciones sexuales

Si bien es cierto que nuestra sociedad se encamina hacia la igualdad de oportunidades ocupacionales para varones y mujeres, no es menos cierto que las ocupaciones no son consideradas como sexualmente neutras.

Los patrones culturales son internalizados a lo largo de las etapas cubiertas por la gnesis de la identidad ocupacional del adolescente y juegan un papel importante como causales de gustos , intereses, etc.

La crisis de identidad en la adolescencia

Todo adolescente es una persona en crisis en la medida en que est desestructurando y reestructurando tanto su mundo interno como sus relaciones con el mundo exterior. Del resultado de la tolerancia a esa crisis y de los mecanismos empleados para superarla surgirn formas de relacin con su mundo interno y externo, cualitativamente distintas de las relaciones mantenidas anteriormente. La tarea ms importante del orientador vocacional consistir en ser un buen continente de la crisis adolescente y no actuar la urgencia que el consultante tenga por superarla y que ha depositado en el experto.

Por personalidad se pueden entender muchas cosas distintas, lo que define fundamentalmente a la persona es el hecho de poder ser un objeto para ella misma.

Este hecho se traduce en la sensacin de que yo soy yo . Para que esto ocurra la experiencia tiene que organizarse sobre tres parmetros: tiempo espacio otros.

En cuanto al tiempo, alguien siente que l es l, por ejemplo porque tiene proyectos, tambin aparecen las expectativas propias y del mundo; sera el ideal del yo.

En cuanto al espacio, el sentimiento de yo soy yo surge fundamentalmente sobre la base del esquema corporal que discrimina entre un espacio propio (interno) y uno no propio (externo).

En relacin a los otros, la sensacin de que yo soy yo tiene que ver con mis relaciones con los dems, que se expresan fundamentalmente en un vnculo de doble carril, que son los procesos proyectivos e introyectivos.

La estructura de la personalidad se definir por el interjuego de los tres parmetros.

Consideraremos al Yo como el nombre de siete funciones bsicas de la personalidad:

1) La adaptacin a la realidad: una adecuacin de medios a fines y como una sntesis entre originalidad personal y aceptacin de pautas sociales o de soluciones preinventadas.

2) La interpretacin de la realidad: discriminacin entre yo y no yo. Una de las caractersticas ms notables en un adolescente que va a la consulta vocacional es la alteracin de esta funcin.

3) El sentido de la realidad: La realidad no tiene sentido para el adolescente cuando no puede encontrar coherencia en sus acciones ubicndolas en los tres parmetros de tiempo, espacio y otros.

4) Defensas: son mecanismos protectores de la desestructuracin de la personalidad y operan cuando el yo anticipa los conflictos mediante la percepcin de seales de alarma. En el adolescente esta funcin yoica no tiene la misma plasticidad que en la persona adulta.

5) Las relaciones de objeto: el yo establece el vnculo con los objetos, y respecto de la orientacin vocacional, interesa esta funcin en cuanto a las conductas narcisistas, a las conductas simbiticas y a las ligadas con la elaboracin de duelos.

6) Funciones autnomas: el yo no surge de un conflicto entre el ello y la realidad, ni es la defensa su nica funcin. Tiene una orientacin positiva hacia la realidad que se realiza a travs de mecanismos adaptativos como el pensamiento, el lenguaje, la voluntad, etc.

7) La sntesis: la integracin, la homeostasis, etc.

Adems de estas funciones yoicas, otra caracterstica presente en la personalidad del adolescente es la catectizacin del mundo externo favorecida por la salida de la reedicin del complejo de edipo propia de los comienzos de la adolescencia.

Para Aberastury, la dinmica de toda adolescencia tiene que ver con la elaboracin de tres duelos bsicos: el duelo por los padres de la infancia, el duelo por el cuerpo infantil y el duelo por la formas infantiles de relacin (rol e identidad).

Hay duelos quiz ms difciles de percibir, pero que se hallan ms claramente ligados con la eleccin de una carrera: los duelos por la prdida de la omnipotencia.

El adolescente est en bsqueda del logro de la identidad. La identidad se gesta sobre tres puntos: grupos, procesos de identificacin y esquema corporal.

La identidad seguramente no emerger al final de un proceso de orientacin vocacional ni posiblemente hasta que hayan transcurrido varios aos.

Todo conflicto ante la eleccin de una manera de ser a travs de algo que hacer (de una ocupacin) expresa una no integracin de identidades diversas. Todas las dudas del joven respecto de quien quiere ser obedecen a identificaciones que no han sido integradas todava. Cuando estas identificaciones se integran y pierden el carcter defensivo, el adolescente ha alcanzado su identidad ocupacional.

Elegir algo nuevo siempre implica dejar de lado, dolorosamente, todo lo dems. Quizs el problema de orientacin vocacional del adolescente est ms vinculado a todo lo que tiene que dejar, que a lo que tiene que tomar.

La identidad negativa es una interferencia en el logro de la identidad ocupacional. Es el producto de las identificaciones con los aspectos rechazados, fundamentalmente por el grupo familiar. Se llama identidad negativa porque es lo contrario de lo que el grupo familiar espera que sea el adolescente.

Desarrollo de la identidad ocupacional

La vinculacin de los individuos con las ocupaciones pasa evolutivamente por distintas etapas:

La primera es la del Crecimiento: el crecimiento de la vocacin se extiende hasta los 14 aos. En esta etapa predominan las fantasas, los intereses, las capacidades. Entre los 4 y los 10 aos, la vocacin est determinada por la fantasa. El inters pasa a primer plano entre los 11 y 12 aos y ya se habla de gustos. Los interese dejan su lugar a las capacidades entre los 13 y 14 aos.

La escuela primaria le brinda la oportunidad de probar cun hbil es en distintos tipos de tareas.

La segunda etapa es la Exploracin: se extiende entre los 15 y los 24 aos. Predomina el ejercicio de roles. Hay tres momentos, el de las tentativas (15 a 17 aos), el de transicin (entre los 18 y 21 aos) y el del ensayo (entre los 22 y 24 aos).

La tercera etapa es la del Establecimiento: se extiende entre los 25 y 44 aos y tiene dos momentos. El primero de ensayo, que supone el cambio de reas, implica todas las vicisitudes en cuanto a la eleccin de campos de trabajo dentro de una profesin. El segundo momento, de estabilizacin , es puramente creativo.

Luego vienen otras dos etapas, una de mantenimiento y otra de declinacin, en la que aparece una desaceleracin ligada a actividades menores, una preparacin para el retiro y luego un perodo final de retiro.

El explorador

El momento en el que el adolescente concurre a la consulta es el de la exploracin. El explorador tiene en cuenta qu es lo que va a explorar con qu equipo ir de exploracin. De la sntesis de estos factores surge el concepto de situacin.

La situacin designa la percepcin que tiene el adolescente de aquello que va a explorar y de aquello con que cuenta para la tarea.

Las situaciones pueden ser de cuatro tipos:

1) Predilemticas: el adolescente tiene el aspecto de alguien a quien no le pasa nada. Generalmente es trado a la consulta y ni siquiera parece darse cuenta que tiene que elegir. Son adolescentes muy inmaduros y que establecen con el psiclogo una relacin filo-paterna, lo que est indicando defensas intensas, hay confusin entre yo no yo.

2) Dilemtica: el adolescente se da cuenta que algo pasa, que hay algo importante alrededor de l . Aparecen ansiedades, conflictos ambiguos y ambivalentes.

Por lo general, los adolescentes confunden carreras con materias. Las defensas mas salientes son: la disociacin, la identificacin proyectiva masiva , la negacin.

3) Problemtica: el adolescente parece realmente preocupado. Las ansiedades son moderadas, pudiendo ser depresivas o persecutorias. Los conflictos son divalentes, hay ms discriminacin, menos confusin, pero no hay todava integracin.

Las defensas que aparecen son la proyeccin, la negacin y a veces el aislamiento.

4) Resolucin: Los conflictos que aparecen son ambivalentes y combivalentes. Ya no hay amor ni odio por el objeto que se abandona porque se ha elaborado la separacin del proyecto anterior que se dej de lado. Puede aparecer la regresin, evitacin, la omnipotencia, identificacin proyectiva como defensas.

Vocacin. Identidad vocacional. Identidad ocupacional

En el caso de la orientacin vocacional, es la identidad ocupacional, producto de algo que ha ocurrido en la persona que elige. Ese algo, determina la identidad ocupacional.

Una persona adquiri su identidad ocupacional cuando ha integrado sus distintas identificaciones y sabe qu es lo que quiere hacer, de qu manera y en qu contexto.

En cambio la identidad vocacional tiene que ver con una respuesta al para qu y por qu de la suncin de esa identidad ocupacional.

Vocacin y reparacin:

Es sugerente entender la reparacin como una variable independiente y la identidad ocupacional como una variable dependiente de ella.

En nuestro medio, Wender, postula la hiptesis de que las vocaciones expresan respuestas del yo frente a llamados internos, llamados de objetos internos daados que piden, reclaman ser reparados por el Yo.

Reparacin tiene distintos sentidos. En algunos textos se habla de reparacin como impulso, en otros como tendencias; y en otros casos se habla de conductas reparatorias

Si se habla de tendencias reparatorias entonces pensamos en manifestaciones de un instinto, posiblemente el de la vida.

Si se habla en cambio de conductas reparatorias, ya estamos hablando de una variable dependiente que a su vez debe ser aplicada.

Este concepto, desde un punto de vista descriptivo, se refiere a conductas que expresan el deseo y la capacidad del sujeto de recrear un objeto bueno, externo e interno, destruido.

Posiblemente la reparacin sea una manifestacin del instinto de vida, segn se desprende de los textos kleinianos. Y es as sobre todo porque la reparacin pone coto a la destruccin, que, explcitamente, es manifestacin del instinto de muerte.

Cuando se habla de un objeto bueno destruido hay que aclarar cmo se produce esa destruccin. Melanie Klein dice que la destruccin se produce en la fantasa, es decir, que la destruccin del objeto puede ser, o no ser, real.

Lo que destruye el objeto es el odio, es decir, un derivado del instinto de muerte.

Cuando se habla de un objeto bueno destruido debe aclararse que si el objeto bueno es objeto de destruccin eso se debe a que, adems de ser amado, es odiado. De donde surge que el vnculo es ambivalente.

Con respecto a la reparacin, hay que tener muy claro que nunca es total, ya que en la realidad tal cosa es imposible, se trata de una seudo reparacin.

Finalmente, para que estos procesos, derivados de deseos y de la capacidad de recrear, se cumplan, debe suponerse un Yo capaz de:

1. Aceptar la realidad.

2. Tolerar el dolor.

3. Hacerse responsable de su odio respecto que simultneamente era amado.

4. Realizar conductas en la fantasa y en la realidad que intenten reconstruir ese objeto daado.

Un Yo fuerte, capaz de ejecutar conductas reparatorias, y que al reparar, en la fantasa y en la realidad, se hace an ms fuerte porque restaura el objeto interno bueno, daado en la fantasa, que lo protege de objetos internos malos. Y esto es s fundamentalmente porque el xito de los intentos reparatorios muestra al Yo su capacidad de poner coto, lmites, a la omnipotencia de su odio y su destruccin.

Si el Yo no es fuerte y no tolera la ansiedad depresiva generada por la prdida, a causa de la propia agresin del objeto bueno del que depende, emplear bsicamente dos tipos de conductas defensivas, apelar a dos defensas bsicas: la disociacin y la negacin. Lo que se disocie ser la relacin entre el yo y el objeto como una manera de anular la dependencia del mismo. Se niegan dos cosas fundamentalmente: los lmites de la omnipotencia (toda omnipotencia supone una negacin) y la autonoma del objeto (puesto que se siente malo el objeto, objeto de odio y agresin, cuando no est; y una manera de defenderse de esto consistir en negar la autonoma del objeto). Cuando esto se realice se hablar de intentos de control del objeto.

Cuando el desprecio, el control y el triunfo estn presentes en los intentos reparatorios, contaminndolos, se hablar de seudo reparacin o reparaciones manacas.

Para reparar autnticamente es necesario reconocer la culpa y en una reparacin manaca la culpa es negada. Mediante el desprecio se niegan los aspectos buenos del objeto, mediante el triunfo se niega la prdida del objeto y los sentimientos de abandono por parte de ste; y mediante el control, se niega la autonoma del objeto.

Podemos entonces distinguir dos cualidades bsicas de la reparacin: reparacin autntica y reparacin manaca.

Adems, podramos agregar otras cualidades o modalidades de la reparacin, segn sus formas: una reparacin compulsiva, cuando la culpa persecutoria suscitada por la destruccin del objeto en la fantasa es tal, que impone al Yo actividades sumamente exigentes

La reparacin melanclica, implica matices autodestructivos, como si la nica manera de reparar al objeto fuera destruyndose uno mismo. Al atacarse y eventualmente destruirse el Yo, se est atacando al objeto con el que el Yo se ha identificado, en lugar de repararlo.

Podemos distinguir entre las modalidades y las formas de reparacin.

Estas tienen que ver con el con qu se repara y a la manera de quin se repara. Al decir con qu, me refiero a objetos e instrumentos. Ser cualquier objeto externo. Al decir a la manera de quin, me refiero a procesos de identificacin y sus resultantes.

Para hacer el diagnstico de la identidad ocupacional es necesario ver qu es lo que el objeto interno est reclamando, puesto que puede estar reclamando cuidado, atencin, reconstruccin, etc. Y este pedido puede ser hecho de distintas maneras: como exigencia, splica, reclamo, etc.

Las modalidades de reparacin nos sealarn el tipo de vnculo con las carreras y profesiones, en tanto que con qu instrumentos se repara, sobre qu objeto externo se realiza la reparacin y a la manera de quin ser ejecutada la reparacin, nos mostrar cul es la cualidad objetal de la carrera.

Esto es til para entender cmo el adolescente puede fantasear, proseguir carreras muy distintas, aparentemente incompatibles, pero que en un plano profundo representan para l exactamente lo mismo. Es decir, que son incompatibles desde el punto de vista de la lgica formal, pero compatibles desde el punto de vista de la lgica propia de los procesos primarios

Desde el punto de vista terico que he sugerido, el objeto con qu se trabaja, si hay posibilidad de elegirlo, siempre ser el depositario de un objeto interno que reclama reparacin.

La conducta de reparar supone un para qu y a esto lo podemos llamar impulso creador, impulso de desarrollo, bsqueda de felicidad, etc. Pero desde este punto de vista, entendiendo reparacin en un sentido amplio, podemos decir que el para qu es para reparar.

El trabajo supone un cmo, un vnculo con los objetos, y esto lo llam modalidad de reparacin, que esclarece el vnculo que el trabajador tiene con los objetos e instrumentos de trabajo.

Como conducta el trabajo supone un quin, ese quin es, en nuestro caso, el que elige. Ese quin se define en cuanto a su relacin con los dems, sobre la base de identificaciones con los otros que decantan en una identidad. Ese quin es histrico, es decir un quin que tiene un pasado respecto del cual puede tener mayor o menor autonoma y, tambin en trminos histricos, tiene un proyecto, que es el modo anticipado de llevar a cabo conductas.

De aqu que el momento de eleccin de ocupacin o de estudios es el momento en que el adolescente debe elaborar anticipadamente esta conducta. El momento de la eleccin es un momento de ensayo anticipado de esta conducta futura.

Psicodinmica de la eleccin:

POR QUE - PARA QUE

CON QUE

CUANDO - DONDE

A LA MANERA DE QUIEN

Reparacin:

A: Autntica

R. seudo reparacin:

Manaca

Melanclica

Compulsiva

Otras

Objetos

Personas, cosas, animales, naturaleza, artefactos o partes de ellos.

Instrumentos

Manuales, intelectuales, etc.

Contexto socio-cultural

(mbitos institucionales y organizadores sociales)

Tecnologa, sistemas de significacin, etc.

Identificaciones con imgenes profesionales y roles ocupacionales de adultos.

IDENTIDAD VOCACIONAL

IDENTIDAD OCUPACIONAL

Eleccin y duelo:

El que elige, por lo tanto, no est eligiendo slo una carrera. Est eligiendo con qu trabajar, est definiendo para qu hacerlo, est pensando en un sentido para su vida, est eligiendo un cmo, delimitando un cuando y dnde, es decir, est eligiendo insertarse en un rea especfica de la realidad ocupacional.

Est definiendo quin ha de ser, o sea qu est eligiendo un rol adulto, y para hacerlo no puede basarse en otra cosa que en quin es.

Ese quin es, todava confuso, es producto de mltiples identificaciones que pueden ser contradictorias, opuestas, disociadas ... Al elegir, est fijando quin deja de ser, est eligiendo dejar de ser adolescente, dejar de ser otro profesional, est optando dejar otros objetos. En la medida en que elige, deja.

Se dejan objetos y formas de ser. Por eso siempre la eleccin de carrera supone elaborar duelos.

Segn Lucy Wolf, los duelos se realizan sobre todo sobre cuatro situaciones:

1. Duelo por la escuela secundaria.

2. Duelo perdido por el paraso perdido de la niez.

3. Duelo por la imagen ideal de los padres.

4. Duelo por las fantasas omnipotentes.

El adolescente debe elaborar duelos por objetos que deja, que pierde y duelos por el self, otros proyectos, otras carreras, su omnipotencia, etc.

En duelo bien elaborado supone que se pueden tolerar los sentimientos de culpa frente al objeto y frente a s mismo, experimentados en toda separacin. Se experimenta culpa ante s mismo porque, quien deja algo, siente al Yo empobrecido por la separacin de esos objetos, puesto que sobre ellos han operado identificaciones proyectivas y separarse de esos objetos supone separarse de partes de su self.

Tambin se experimenta culpa por el objeto porque se fantasea que la separacin, es decir el abandono del objeto por parte del Yo, implicar actitudes retaliativas del parte del objeto, tal como el abandono del Yo por parte de otros objetos determin actitudes retaliativas del Yo frente a ellos (agresin).

Si las fantasas que predominan son retaliativas (de los objetos abandonados o del Yo abandonado) hablamos de culpa persecutoria. El sentimiento que predomina es el resentimiento y las actitudes ms manifiestas son: el reproche y el autorreproche.

El miedo de elegir lo que gusta por sentir que ello implica un abandono de las expectativas que sobre l han puesto los padres. Esto puede manifestarse concretamente en reproches a los padres que frenan y obstaculizan, cuando, en realidad, no ocurre tal cosa o en autorreproches por hacer lo que se quiere y no lo que quieren los otros.

Tambin puede determinar el abandono de proyectos valiosos.

Puede determinar patologas frente al xito, por ejemplo bloqueos intelectuales frente a la tarea concreta de estudiar o frente a tests. Son formas de autoboicot basadas en la culpa por crecer.

Por otro lado tenemos la culpa depresiva: el temor a la retaliacin y el miedo al ataque por parte del objeto o del self, son reemplazados por conductas reparatorias.

La reparacin, cuando la culpa es depresiva, se realiza sobre el self y sobre el objeto, una autntica reparacin debe darse previamente sobre el self; solo as habr una autntica reparacin de objetos.

En la culpa depresiva el sentimiento que predomina es la tristeza; pero el yo no se entrega a la misma sino que, por el contrario, tiene cada vez mayor deseo de vivir, de luchar, de reparar autnticamente el objeto daado.

El adolescente que elige y que acepta crecer, en cierto modo destruye, desestructura el grupo familiar, puesto que est dando el gran salto o el primer gran salto hacia la separacin del grupo familiar, lo cual supone una re-estructuracin enorme, no solo de s mismo sino de todo el grupo familiar. Esto es suficiente motivo para sentirse culpable.

Pero si bien es cierto que destruye, tambin es cierto que al elegir se convierte en depositario del rol reparatorio presente en toda estructura

Toda la familia est pendiente de la eleccin, porque inconscientemente hace cargo al adolescente de la reparacin de todo el grupo.

Todos los supuestos bsicos de los grupos estudiados por Bion pueden detectarse en la situacin familiar cuando un adolescente elige: de dependencia frente al proyecto del adolescente; de apareamiento respecto de la culpa adolescente-carrera, donde el Mesas es la decisin o el xito; ataque y fuga respecto del adolescente que tiene la posibilidad de elegir cuando los padres ya tienen su identidad ocupacional mal o bien consolidada (lo que puede originar ataques envidiosos por parte de los padres).

El adolescente se siente exigido, siempre, por dos objetos reclamantes: un objeto interno y el objeto familia, lo cual hace mucho ms confusa su situacin.

El adolescente que elige se siente siempre frente a un conflicto de dependencia-independencia. Esto es lo aparente, el escenario de su inseguridad. Pero el sentido profundo est dado por los reclamos, a los que responder con tres formas bsicas de separarse: rebelda, sumisin y competencia.

Si los sentimientos de culpa son tolerados, el duelo puede elaborarse. Esto supone que pueden discriminarse los aspectos del self ligados con objetos y situaciones perdidas.

Esto supone dos condiciones. Desde el punto de vista histrico-gentico, que haya hecho una buena elaboracin de la posicin depresiva, y desde el punto de vista funcional, que tenga capacidad para percibir la realidad y soportar la ambivalencia frente a los objetos.

Si en un adolescente se detectan estas posibilidades, el caso tiene buen pronstico. Si alguna de estas dos condiciones funcionales no est presente, entonces se tratar seguramente de un caso difcil.

En orientacin vocacional el proceso de elaboracin pasa por tres etapas que tienen signos caractersticos.

La primera etapa es el lamento, en este momento de lamentacin la acusacin se expresa como nota manifiesta (auto-acusacin y alo-acusacin).

De esta etapa se pasa a una segunda de decepcin y desesperacin. Desesperacin en el sentido de des-esperar de que nada va a ser alcanzado, de que no puede hacer nada, de que no puede resolver, etc. Este es un momento donde examina sus sistemas de valores, su ideologa, sus relaciones.

Desde el punto de vista clnico, la mayor dificultad para el psiclogo en el proceso de orientacin vocacional consiste en poder tolerar ese momento de desesperacin y desesperanza sin apurarse. Este momento reedita en el psiclogo sus propios sentimientos de desesperanza cuando eligi carrera y es probable que por ello apele a conductas aplacatorias como el consejo o la sugerencia para que crea en algo o tenga fe en algo.

Si este momento es tolerado, el tercer momento que aparece es el de separacin. La separacin de lo viejo, con lo que de s se deja. Se manifiesta con el sentimiento peculiar de que los objetos son a la vez lejanos y prximos.

Un claro ejemplo de los sentimientos que despierta la separacin, es que a veces, en las ltimas entrevistas, aparecen en los adolescentes fantasas de muerte o intensos sentimientos de soledad. Tambin sienten que no estn contentos ante la decisin tomada, sino tristes y apesadumbrados aunque, al mismo tiempo, con una alegra responsable.

a. Grinberg al referirse a los duelos por el self, menciona un sentimiento que expresa el anhelo de complementarse. Algo de esto hay en quiero realizarme, quiero encontrarme de los adolescentes. M. Klein relaciones este sentimiento con la fantasa universal del mellizo, que representa todos los aspectos no presentes en el self.

b. Este intento de reencuentro que el adolescente busca en el momento de eleccin, se realiza a veces desde un punto de vista mgico mediante la identificacin con algn otro, por ejemplo, un profesor al cual el adolescente idealiza, o un profesional a quien conoce y cuya imagen es el modelo de lo que l quisiera ser.

c. Una segunda alternativa del duelo est referida a la omnipotencia perdida. Cuando en orientacin vocacional, la omnipotencia perdida es negada, aparece la fantasa de seguir carreras monstruos. Nos llamara la atencin que de hecho se produjera en el momento de elegir carrera de un modo realista, puesto que supone la negacin de los propios lmites y manifiesta la incapacidad de ese joven de renunciar a viejos proyectos para adecuarse a la realidad.

d. El duelo tambin se realiza por el cuerpo adolescente que se pierde. Esto determina fantasas de eterna juventud que pueden llevar a la eleccin de algunas carreras.

e. El duelo tambin se realiza por las identificaciones dejadas de lado. Esto se manifiesta a veces en la definicin de elecciones en que se propone una actividad como profesin y otra cosa como hobby.

f. El proceso de duelo se expresa tambin en el manejo del tiempo. La urgencia ligada con el miedo de perder tiempo revela el miedo de perder aquello que, con el correr del tiempo, pierde de s mismo. El caso contrario de demora expresa a mi modo de ver una forma de control.

g. Tambin hay duelos ante los xitos. En parte porque los logros pueden ser vividos con culpa, pero adems porque lograr algo supone perder aquella parte del self que inclua el proyecto.

Los duelos elaborados durante un proceso de orientacin vocacional se expresan mediante sentimientos y manifestaciones clnicas; entre los primeros predominan la tristeza, soledad, ambivalencia, culpa y libertad del pasado y mayor contacto con el presente. Tambin se percibe un aspecto general de cansancio, reflexin, autonoma y ganas de hacer cosas.

Slo s la experiencia de orientacin vocacional es vivida como autorreparacin, el estudio como preparacin pura ser experimentado en s mismo como un quehacer reparatorio. De ah surge el valor psicoprofilctico de la orientacin vocacional frente a los estudios superiores. En caso contrario los estudios universitarios se vern interferidos por distintos tipos de problemas de aprendizaje que abarcan una amplia gama, desde las dificultades leves de comprensin hasta las formas ms francas de neurosis.

Momentos de eleccin.

Todo proceso de eleccin pasa por distintos momentos que incluyen todas las consideraciones esbozadas hasta aqu. Veremos dos tipos de datos: la intervencin del yo en cada momento del proceso y los trastornos tpicos que he observado en cada uno de ellos.

Momentos

Funcin yoica comprometida

Patologa ms frecuente

Seleccin

Adaptacin, interpretacin y sentido de realidad. Discriminacin. Jerarquizacin de los objetos.

No ver o no verse por confusin en el vnculo. Identificaciones proyectivas e introyectivas masivas.

Eleccin

Relacin de objetos. Tolerancia de la ambigedad y de la ambivalencia.

Rigidez y estereotipia o excesiva labilidad de cargas. Bloqueos afectivos.

Decisin

Accin sobre la realidad. Proyectos.

Trastornos en la elaboracin de duelos. Fracaso en el control de impulsos.

Eleccin madura. Eleccin ajustada:

Una eleccin madura es una eleccin que depende de la elaboracin de conflictos y no de la negacin de los mismos. Es una eleccin que se basa en que el adolescente pueda pasar de un empleo defensivo de las identificaciones a un empleo instrumental de las mismas al lograr identificarse con sus propios gustos, intereses, aspiraciones, etc. E identificar el mundo externo, las profesiones, las ocupaciones, etc.

Una eleccin madura es una eleccin que depende de la identificacin consigo mismo.

Una eleccin ajustada es una eleccin en la que el autocontrol permite al adolescente hacer coincidir sus gustos y capacidades con las oportunidades exteriores, hacer un balance o sntesis que puede ser defensivo.

La diferencia fundamental entre una eleccin ajustada y una mala eleccin es que aquella es una eleccin a-conflictiva. Los conflictos no son elaborados y resueltos sino controlados o negados. No se examina el mundo interno sino que se posterga el examen del mismo.

Una eleccin ajustada es una eleccin que se hace con conocimiento de lo que se puede y de lo que no se puede, pero sin que haya superado todava el conflicto que tal conocimiento supone.

Una eleccin ajustada es una eleccin que provee al adolescente de una profesin o de estudios en los que coinciden sus intereses con lo que la realidad de esa carrera le ofrece, al mismo tiempo que sus condiciones personales lo hacen apto.

Elegir teniendo en cuenta lo que se puede ser, es propio de una eleccin madura que es ajustada y, adems, prospectiva, personal, autnoma, responsable, independiente.

La independencia en un sujeto que ha alcanzado la suficiente madurez se caracteriza por un buen equilibrio entre su independencia ejecutiva y volicional. En situaciones ptimas ambas independencias se integran y posibilitan la toma de decisiones.

Rodolfo Bohoslavsky - Orientacin Vocacional

Captulo II: El Diagnstico en Orientacin Vocacional

Existen en el campo de la Orientacin Vocacional dos modalidades estratgicas, tcticas y tcnicas.

Analizaremos la tarea diagnstica en Orientacin Vocacional, en el contexto de la Clnica. Se define sobre la base de una estrategia, una tctica y una tcnica.

La estrategia se refiere a una sntesis interactiva entre el ver, el pensar y el actuar sobre el objeto de la consulta. El segundo momento (pensar) es el que en otros trminos podemos llamar momento diagnstico, a lo largo de todo el proceso de consulta, diferente del primer diagnstico que realiza el psiclogo, a partir del que formular las hiptesis relativas al caso y tratar de esbozar una planificacin operativa del proceso.

El primer diagnstico:

De este primer diagnstico, surgira un pronstico relativo a la orientabilidad del entrevistado, permitindole al psiclogo formularse una estrategia en cuanto a la tarea que emprendern juntos. La estrategia constituye la consigna. Y sta junto con la fijacin de horarios, honorarios y roles, el contrato de trabajo.

El primer diagnstico, no es ms que una aproximacin y una tentativa supeditada a continuas reformulaciones.

Los problemas vocacionales son un tipo especfico de problemas personales, con esto no negamos que la personalidad funciona como un todo integrado. Pero el criterio de totalidad, no implica el de la homogeneidad de las partes.

Es precisamente la heterogeneidad, la que nos permite hablar de problemas de estudio, familiares, vocacionales, etc.

La primera entrevista:

El objetivo fundamental lo constituye la elaboracin del primer diagnstico, eventualmente la formulacin del contrato de trabajo y, tambin eventualmente, la derivacin del entrevistado.

Es una entrevista, no un interrogatorio, por lo que asume un carcter abierto, impidiendo que las preguntas que el psiclogo formule impidan ver cmo configura el campo el entrevistado.

Es importante poder leer cmo el entrevistado configura una situacin nueva, en la que est implicado otro como profesional, sobre la base de una serie de decisiones (dndonos el acceso al primer diagnstico).

Es de primordial importancia el anlisis del primer planteo que realiza el entrevistado, ya que ah est condensada toda su problemtica vocacional.

La elaboracin del primer diagnstico

La misma se efecta sobre los datos recogidos en la segunda entrevista o, en casos especiales en las primeras entrevistas. Esto supone por parte del psiclogo, el suficiente entrenamiento para ir leyendo lo que le pueda estar pasando el entrevistado en el orden vocacional.

De este modo el esquema para la elaboracin del diagnstico que propongo, tiene que entenderse solo como:

a. Un intento de sistematizar mi experiencia personal.

b. Un marco de referencia amplio o encuadre interno del psiclogo ms bien que un marco terico definitivo

c. tems que sealan parmetros de interpretacin del contexto y subtexto.

La identidad vocacional es la autopercepcin, elaborada a lo largo de toda la vida, en trminos de trabajo o estudio

Abarca procesos que la psicologa haba analizado bajos los conceptos de gnesis del ideal del Yo, identificaciones con el grupo familiar, con los pares, identificaciones sexuales, nivel de aspiracin, etc. En cuanto a la mayor o menor accesibilidad a una buena eleccin era importante tener en cuenta el pasaje del sujeto de identificaciones con, a identificar-se e identificar-a. Esto supone un grado de integracin interna, al que solo se accede mediante la elaboracin o reelaboracin de relaciones objetales pasadas que d el acceso a identificarse con (sus gustos, aspiraciones, estilo personal) y al mismo tiempo identificar-a (profesionales, estudios, trabajos)

Criterios para la elaboracin del diagnostico

Manejo del tiempo:

En el caso de la problemtica vocacional resulta significativo el tipo de manejo del tiempo que hacen los adolescentes. Sus planteos pueden centrarse en el presente, el pasado (colegio secundario, aspectos infantiles, etc.) o el futuro (universidad, la responsabilidad social, la independencia familiar., etc.) , es importante detectar esto ya que todo proyecto implica una estrategia en el tiempo.

Momentos por los que pasa el adolescente:

Hay tres momentos: el de seleccin, el de eleccin y el de decisin.

El momento de seleccin pone en juego la funcin yoica de discriminacin. Si la patologa de la eleccin se da en este momento, probablemente mostrar indiferencia, confusin en las clasificaciones afectivas de las carreras y profesiones.

El momento de la eleccin implica no solo un reconocimiento selectivo, sino el establecimiento de vnculos diferenciales con los objetos. Las alteraciones se caracterizan por enamoramientos con una u otra porcin de la realidad, o con bloqueos afectivos.

El momento de decisin, compromete un proyecto de relativo largo plazo, y por lo tanto a la funcin yoica de regulacin y control de los impulsos.

Lo fundamental se caracteriza por la elaboracin de duelos: duelo por la adolescencia, por los viejos proyectos, por las elecciones fantaseadas.

Ansiedades predominantes:

Toda primera entrevista (situacin nueva), desencadena en el entrevistado ansiedades de tipo persecutorio predominantemente.

Interesa ms que el tipo de ansiedad, el monto, el objeto con el cual est ligada, la persistencia o movilidad y el tipo defensivo que desencadena.

Basndose en el objeto implicado en los vnculos persecutorios, depresivo y confusional, clasificamos las fantasas y temores segn sus clasificaciones clnicas:

-referidas a la imagen de s (impotencia, omnipotencia, etc.)

-referidas al futuro (miedo al fracaso, mediocridad, aburrimiento, etc.)

-referidas a la vida universitaria (sobreexigencia, no poder cumplir con el ingreso)

-referidas a la escuela secundaria (no poder discriminar materia-profesor, materia-facultad, etc.)

Carreras como objeto:

El hecho de no mencionar ninguna carrera, revela un mundo externo confuso, en el cual el Yo inmaduro, fracasa en sus intentos de discriminacin. La ansiedad que aparece es muy alta o muy baja.

-La mencin de una inclinacin igual por todas las carreras, nos revela un mundo exterior tan confuso como el tipo anterior, con la diferencia que ac si est catectizado. El Yo es igualmente inmaduro, pero tal vez l dficit no se de en el momento de la seleccin, sino en el de la eleccin. La ansiedad es baja (omnipotencia.

-Cuando refiere a dos carreras, el mundo externo aparece relativamente claro y diferenciado, su yo tiene suficiente grado de madurez para seleccionar y elegir. La dificultad suele presentarse en el momento de decisin.

Identificaciones predominantes:

Una buena eleccin depende de identificaciones no distorsionadas, de una confrontacin de Yo y el mundo externo de lo conocido y lo desconocido, del mundo adolescente y el mundo adulto, de los estudios secundarios y de los universitarios, etc.

Esto depende de la adaptacin a la realidad (diferenciacin figura-fondo), la interpretacin de la realidad(buena percepcin y orientacin temporoespacial), y el sentido de la realidad (Yo-no Yo).

Situaciones que atraviesa:

Toda situacin de cambio, provoca un incremento de conflictos, que se manifiesta como duda.

En los adolescentes esa duda pasa por cuatro situaciones:

-La situacin predilemtica: es aquella por la que pasa el adolescente que no se da cuenta que tiene que elegir.

Se trata de una inmadurez tal que el caso tendr que ser derivado a tratamiento psicoteraputico. La ansiedad es confusional, baja y la conducta se manifiesta de extrema dependencia. El problema de la orientacin no les preocupa.

-La situacin dilemtica: se caracteriza por la presencia de afectos confusionales en una persona que s se da cuenta que enfrenta una duda, una dificultad en un momento de cambio. La conducta exterior revela un alto monto de ansiedad.

-La situacin problemtica: se caracteriza por un grado ptimo de conflicto capaz de determinar en el adolescente una dinmica tal, que pueda superarlo. El adolescente est realmente pre-ocupado, sus funciones yoicas se encuentran al servicio de un anlisis de la situacin. El aspecto manifiesto de su conducta, nos revela un individuo disponible a pensar en su futuro.

-La situacin de resolucin: vinculada a la elaboracin normal de un duelo.

Su conducta exterior es la de una persona cansada, pero contenta cuando su duelo ha sido elaborado.

Fantasas de resolucin:

En un contexto teraputico se designa como fantasas de curacin, y corresponden a las expectativas conscientes e inconscientes ante el proceso e orientacin vocacional.

Para elegir y decidir, puede pasar por una o ms de las siguientes situaciones:

-La libertad: que necesita en su fantasa es la de los vnculos de dependencia que caracteriza el momento evolutivo que atraviesa. Es importante pesquisar cmo cree el adolescente que alcanzar su emancipacin (competencia, rebelin, etc.)

-El apoyo: puede manifestarse de modo directo (vengo para que me diga que carrera seguir) o indirecto (cree usted que soy apto para tal carrera)

-El permiso: En este caso aceptarn mejor un contrato cooperativo con el psiclogo, ya que esperan una situacin pautada socialmente en la que puedan reactualizar en una sntesis sus elecciones efectuadas en su fantasa.

En cuanto al vnculo transferencial, las modalidades que pueden detectarse son:

-Mgica: El psiclogo es investido con las caractersticas de un ser omnipotente.

-Filio-paterna: el adolescente fantasea que si l se porta bien, el psiclogo tiene que ponerse de su lado, apoyarlo, etc.

-Autoconfiada: Se caracteriza por cierta dosis de omnipotencia que le hace creer que bastan con dos o tres ideas del psiclogo, para que pueda arreglrselas solo. Es posible que abandone antes de llegar al momento de decisin.

Aspiracin: Se caracteriza por el sentido de oportunidad que el adolescente asigna al proceso. Aceptar el contrato de buen grado, el vnculo ser de cooperacin.

Deuteroeleccin:

Se define como el proceso de cmo eligi elegir el adolescente. Hemos observado a adolescentes que eligen elegir; los vnculos transferenciales, la definicin de la situacin que atraviesan, y sus expectativas en cuanto a bsquedas o rechazos, no son otra cosa que descripciones parciales de la deuteroeleccin del entrevistado.

Este tema es el meollo de la actividad clnica, pues qu es la orientacin vocacional si no la oportunidad de aprender a elegir? (papel psicoprofilctico)

El pronstico en orientacin vocacional:

La funcionalidad de un diagnstico, es la posibilidad de trazar sobre el un pronstico sobre la conducta del entrevistado.

Hay que tener en cuenta los siguientes tems:

-Estructura de personalidad: me interesa el grado de salud o enfermedad, que determinar la decisin de encarar o no un proceso de orientacin vocacional.

-Manejo de la crisis adolescente: la orientacin vocacional abarca la toma de decisiones respecto de la asuncin de roles ocupacionales adultos, el anlisis de la crisis adolescente permitir pronosticar la posibilidad que l tenga de adaptarse tanto al proceso, como al mundo adulto.

-Historia escolar: da cuenta del tipo de vnculos con las situaciones de aprendizaje, tanto en cuenta a rendimiento como a relaciones interpersonales.

-Historia familiar: permite pronosticar tanto los sistemas de valor actitud frente a las carreras derivadas de la clase social a la cual pertenece, como a los tipos de identificaciones familiares en lo que atae a la eleccin.

-Identidad vocacional y ocupacional: su descripcin y diagnstico son la va regia para trazar una estrategia, una tctica y una tcnica en el proceso de orientacin.

-Madurez para elegir: puede ser pesquisada a partir del momento que atraviesa (seleccin, eleccin, decisin); la situacin (predilemtica, dilemtica, problemtica, o resolucin); la deuteroeleccin y las fantasas de resolucin, y vnculo transferencial.

Teniendo en cuenta los seis tems, se elabora el pronstico con respecto a la orientabilidad (adecuarse al encuadre) del consultante. El pronstico permitir al psiclogo decidir cul ser la estrategia de trabajo, y adems si va a encarar la orientacin de ese adolescente. Esta decisin depende adems de otros dos factores:

-factores ambientales: incluimos los factores familiares (la familia. apoya, rechaza el proceso) y los factores institucionales (si el profesional trabaja en una institucin privada, publica, etc.)

-factores profesionales: la capacidad o experiencia del psiclogo para atender un caso especfico

Los tests en orientacin vocacional:

Los tests tienen un rol instrumental en la tarea clnica, se subordinan a los fines del psiclogo convirtindose en valiosas herramientas. Cumplen una funcin valiosa, pero nunca podrn reemplazar la funcin del psiclogo.

Le sirven al psiclogo para tener una informacin ms rica, pero no a quin consulta.

En algunos casos el test puede asumir diferentes significados para el sujeto, puede ser un objeto idealizado, por lo tanto esperado, y en el momento de su aplicacin convertirse en un objeto persecutorio que invade y roba al sujeto.

En otros sujetos las fantasas persecutorias, pueden estar acompaadas de leves sentimientos de despersonalizacin, en donde el test es considerado como una caja en donde el psiclogo guarda cosas mas. Puede visualizarse como acompaante contrafbico, segn que el objeto fobgeno sea el futuro, o el psiclogo.

Tambin para el psiclogo el test puede ser depositario de fantasas. Puede ser un acompaante contrafbico que le permite tomar distancia del adolescente, o un puente que le permite establecer un vnculo con el adolescente para poder entender.

En sntesis: la orientacin vocacional perseguir dos tipos de objetivos, uno observable que consistir en la eleccin de una carrera, y dos no observables directamente que estn referidos por un lado a la deuteroeleccin, y por el otro a la promocin de la identidad vocacional, por lo tanto a su identidad personal.

En funcin de los objetivos, la estrategia, tctica y tcnica a emplear se caracterizan por: una modalidad clnica, una intencin no directiva, objetivos fundamentalmente prospectivos y en tal medida, psicoprofilcticos.

La orientacin dinmica que gui el encuadre de la tarea diagnstica fue: que la conducta humana es funcional, debe abarcar la finalidad; que la conducta siempre implica conflicto o ambivalencia; que la conducta debe entenderse en relacin con el contexto situacional; que el ser humano orienta su conducta hacia una integracin, o una armona progresiva, donde la eleccin de la carrera no es lo ms importante.

Captulo III: Entrevista de Orientacin Vocacional

Por supuesto, el trmino investigacin aplicado a una entrevista tiene connotaciones diferentes de las que tiene cuando se lo aplica a una estrategia experimental. Cuando hablamos de investigacin en una entrevista nos referimos a una actitud bsica del entrevistador por la cual ste somete a prueba continuamente las hiptesis acerca de la conducta del entrevistado en esa situacin.

La situacin de entrevista es una situacin de investigacin conjunta en la que por una parte, el entrevistador intenta comprender y poner a prueba sus compresiones acerca del adolescente (la forma de elegir su futuro, decidir su identidad vocacional y acceder a roles ocupacionales adultos) y, por otra, el entrevistado pone a prueba y confronta con un experto sus fantasas, ansiedades, temores, etc. comprometidos en la eleccin, de modo que la situacin de entrevista se convierte en una situacin en la que el propio entrevistado ejerce la investigacin y la puesta a prueba. En cierto modo podramos decir que la situacin de entrevista se convierte en una situacin de interjuego que permitir al adolescente corregir, corroborar, modificar su auto percepcin en trminos de roles ocupacionales adultos, o sea confrontar con la realidad, en este caso de la entrevista, sus fantasas o proyectos acerca del propio futuro. Esto le permitir si es necesario, hacer correcciones a las mismas y elegir con mas realismo. La entrevista de orientacin vocacional tiene que ser entendida mas bien como un pensar con el adolescente que como un pensar por o un pensar sobre l.

Transferencia en la entrevista de orientacin vocacional:

Cabe discutir que valor teraputico tiene el empleo de la transferencia, pero est fuera de toda duda la existencia de los fenmenos transferenciales.

Fenmenos transferenciales: actualizacin de relaciones interpersonales ausentes en el campo geogrfico presente. El trmino transferencia se refiere asimismo a la externalizacin de objetos internos y vnculos con los mismos, o sea, en otras palabras, la conducta mediante la cual los objetos, acontecimientos y fenmenos de una situacin presente se convierten en depositarios de objetos internos. Los fenmenos transferenciales en si estn fuera de toda duda puesto que cualquier conducta que un individuo realiza implica no solo la actualizacin de todo su pasado y de su futuro (en trminos de proyecto de accin) sino la manifestacin o el compromiso de toda su personalidad, es decir, las relaciones con sus objetos aluden a la relacin con el otro generalizado en trminos de roles ocupacionales adultos.

Los fenmenos transferenciales son los que posibilitan operar en la entrevista y a partir de ella esperar que el adolescente obtenga beneficios.

La transferencia existe siempre, en cualquier relacin interhumana y en cualquier conducta. Desde el punto de vista de una teora de la tcnica, el verdadero problema reside en decidir si esa transferencia debe ser instrumentalizada o no y, en el primer caso, de que manera tendra que hacerlo el psiclogo.

Habitualmente se entiende que toda transferencia es una transferencia de aspectos infantiles; sin embargo, se tiende ahora a enfatizar que lo que se transfiere, lo que se deposita en la situacin de entrevista est ligado no tanto (no solo) a aspectos infantiles como a aspectos o caractersticas internas del entrevistado. En el caso de una entrevista de orientacin vocacional. Los aspectos internos son las identificaciones, conflictivas o no, contradictorias, integradas o disociadas, ambiguas, que el adolescente ha configurado hasta el momento en que es asistido en una consulta vocacional, y especialmente las identificaciones que hace de su mundo interno y del mundo externo en trminos de carreras, mundo adulto, roles ocupacionales, profesiones, etc.

Resumiendo, podemos decir que lo actualizado no es solo el pasado sino tambin el futuro del entrevistado y no solo las relaciones objetales antiguas o futuras, si no, sobre todo, sus relaciones objetales internas. En otras palabras, su personalidad. La comprensin de los fenmenos transferenciales permite al psiclogo por lo tanto comprender las caractersticas de los objetos internos, pasados y futuros incluidos en la conducta del entrevistado.

Adems, el anlisis de la transferencia permite entender las caractersticas del vnculo, es decir, el tipo de ansiedad que suscita la relacin objetal y finalmente las caractersticas de las defensas, su estereotipia o dinmica, puestas en juego por el entrevistado, en este caso el adolescente, para protegerse frente a los conflictos que la eleccin del futuro le crea.

Fenmenos contratransferenciales: La transferencia que el entrevistador, en este caso orientador vocacional, realiza de su propio pasado, futuro y mundo interno en la relacin especfica con su consultante. As como la transferencia es suscitada en virtud del aqu y ahora, o sea del campo de la entrevista, lo mismo ocurre con los fenmenos contratransferenciales. Es decir, tambin stos deben ser entendidos como un emergente de campo. Existen suficientes datos surgidos de la teora psicolgica como para admitir que cualquier conducta cristaliza en objetos reales del medio, relaciones interpersonales pasadas, el futuro en trminos de proyecto, aspiraciones o meta, es actualizado tambin en el contexto de la entrevista.

Esta actualizacin es la que permite que el psiclogo tenga acceso a la comprensin del entrevistado y que, a partir del anlisis de las conductas emergentes del aqu , ahora, conmigo, pueda inferir las conductas que en el all, entonces y con otros desarrollara o ha desarrollado el consultante. En el caso especifico de la orientacin vocacional el nfasis en el anlisis transferencial se pone fundamentalmente en un entonces futuro, en un all universidad, mundo adulto y en un con otros compaeros, profesores, otros adultos, otros profesionales, aun desconocidos. No porque el pasado no sea tambin actualizado, sino porque la entrevista de orientacin vocacional tiene fundamentalmente un carcter prospectivo o profilctico, que centra sus miradas en los proyectos referidos a situaciones, relaciones interpersonales y objetos aun no presentes en el mundo del adolescente.

La transferencia puede entenderse entonces en el contexto de una entrevista de orientacin vocacional, como la atribucin, al contexto de la entrevista, a su encuadre o al entrevistador, de roles ocupacionales adultos y los vnculos fantaseados en relacin con ellos, y de ah que su comprensin contribuya a que el psiclogo formule hiptesis acerca de la mejor manera de prevenir un acceso conflictivo a la identidad profesional madura.

Orientacin vocacional y psicoterapia:

Existen diferencias claras entre una entrevista teraputica y una entrevista de orientacin vocacional. A menos que el termino teraputico no sea definido especficamente como promocin de salud (y no remocin de enfermedades o de las causas que las han determinado), la entrevista de orientacin vocacional no puede confundirse con una entrevista teraputica.

En una entrevista de orientacin vocacional se procura que el adolescente comprenda las identificaciones habidas hasta ese momento, y la identificacin del campo en que se mueve o ejecuta su decisin y del campo futuro en que concretar su proyecto. En el caso de la orientacin vocacional la transferencia no se verbaliza ni interpreta a menos que el entrevistado tienda a romper el encuadre. Si el psiclogo no advierte claramente la diferencia entre una entrevista de orientacin vocacional y una entrevista psicoteraputica su rol estar distorsionado y por ende la operatividad de su tarea alterada.

Si su objetivo explcito es la orientacin vocacional en tanto que su objetivo implcito es la terapia, puede caer en el riesgo de actuar el rol psicoteraputico que el adolescente eventualmente proyecta sobre l, en lugar de comprenderlo e instrumentalizarlo de modo tal que le permita entender por que el adolescente necesita verlo a l como un terapeuta.

El empleo de la transferencia o la instrumentalizacin de la transferencia y la contra transferencia en una situacin de orientacin vocacional est al servicio de la psicoprofilaxis, no de la curacin.

La entrevista como situacin nueva:

Toda entrevista es una situacin nueva tanto para el entrevistado como para el entrevistador. En este sentido, toda entrevista suscita ansiedades frente al cambio, frente a lo desconocido, es decir temores de inadecuacin de las pautas de conducta tradicionales frente a esta situacin especifica. En el caso del entrevistado esto no solo es un desencadenante de ansiedades, lo que ha de ser aceptado, comprendido e instrumentalizado por parte del entrevistador, sino adems el dato mas importante que permitir inferir, suponer o predecir como tendr que manejarse frente a situaciones nuevas tales como el ingreso al mundo adulto el ingreso a la universidad, etc.

Frente e a estas situaciones nuevas, el adolescente puede apelar a conductas defensivas mas o menos frecuentes en l. Estas conductas defensivas indicarn de que modo emplear sus caractersticas para enfrentar el contacto con la universidad.

Hacer un proyecto para el futuro requiere necesariamente tolerancia a la ambigedad, ya que todo futuro es ambiguo. Operar sobre las ansiedades que despierta en el adolescente la situacin ambigua de la entrevista es un modo de crear las condiciones para que el adolescente meta aprenda a enfrentar otras situaciones nuevas, igualmente ambiguas, igualmente conflictivas.

Momentos de la entrevista:

La apertura de la entrevista seguramente dramatiza el modo como el adolescente fantasea su ingreso a la universidad. Aun cuando no tenga todava informacin acerca de como se ha de desarrollar el proceso de orientacin vocacional, concurrir a una entrevista es ya, en la fantasa, ingresar a ese mundo al cual aspira y al mismo tiempo teme, que es la universidad y el mundo adulto.

Las intervenciones del entrevistador:

El entrevistador es, como se ha afirmado insistentemente, un observador participante, es decir un individuo comprometido en el campo al igual que el entrevistado. Participa e interviene siempre: participa con una modalidad que se ha llamado disociacin instrumental. Aqu nos referimos a sus intervenciones mas manifiestas, bajo la forma de preguntas, afirmaciones y opiniones. El entrevistador, en el caso de la orientacin vocacional, interviene respondiendo a distintos fines:

a) su intervencin tiende a estimular el aporte de mas datos. La tcnica del counseling sugiere distintos recursos para estimular el aporte de datos por el entrevistado (como repetir la/s ltima/s palabra/s del entrevistado con un tono interrogativo, etc.)

b) la participacin o la intervencin mas clara del psiclogo tiene que ver con la correccin de las distorsiones que el adolescente evidencie respecto de su identidad vocacional:

Sealamientos: verbalizar algo que, sin ser inconsciente , no es explcito en el mensaje del entrevistado.

Interpretacin la verbalizacin o explicitacin de la comprensin del cundo y el cmo, el porqu, el sobre qu, el para qu, el con qu, el dnde, latentes (inconscientes) de los emergentes o conductas del entrevistado.

c) funcin de sntesis, sugirindole al entrevistado realizar juntos una sntesis de lo que ha sido esa entrevista, puede brindarle la oportunidad de discriminar que es lo que se lleva de esa entrevista.

d) suministro de informacin, en primer lugar sobre el encuadre. La informacin puede referirse a carreras, planes de estudio y oportunidades profesionales; en este caso, conviene que la entrevista sea enunciada de antemano como una entrevista que estar dedicada al suministro de informacin.

Otro tipo de datos sobre los cuales el psiclogo puede brindar informacin, son los datos acerca del diagnstico, debe ser una informacin metabolizada, modulable e incluida de un modo gradual mediante los sealamientos e interpretaciones que suministrara el psiclogo al adolescente a lo largo del proceso. Hacerlo de otro modo implica, por un lado brindar al adolescente informacin que no puede manejar o que no contribuya a modificar las dudas, ansiedades, fantasas y conflictos que lo han llevado a la consulta.

El continium interpretativo:

Con este trmino Brammer y Shostrom definen distintas tcnicas mediante las cuales el psiclogo o consultor devuelve al entrevistado la informacin sobre su conducta, tamizada por la comprensin psicolgica que ha tenido de la misma. El continuum interpretativo abarca lo que nosotros hemos sintetizado con los trminos sealamiento e interpretacin. Segn aquellos ` autores el continuum interpretativo abarca: 1) el reflejo, 2) la clarificacin, 3) la reflexin, 4) la confrontacin y 5) la interpretacin

Son tcnicas de esclarecimiento que se emplean en distintos momentos de la relacin psicolgica entre el consultante y el consultor, puede ser empleada en cualquier momento del proceso que est atravesando la entrevista.

1) el reflejo

Rogers

En la tcnica del reflejo el consultor intenta expresar con palabras nuevas no tanto el contenido expresado por el paciente si no las actitudes esenciales. El consultor hace las veces de espejo de las actitudes del paciente para que este comprenda mejor o para demostrarle que es comprendido por el consultor.

En el reflejo se tratara mas bien de devolver al entrevistado el significado que asigna a su conducta, a la situacin que esta atravesando y no el significado que su conducta tiene para nosotros.

2) la clarificacin

La clarificacin sera el trmino ms aproximado al de sealamiento. En la clarificacin el psiclogo abarca todo lo que esta implcito en el mensaje del entrevistado, no alude a contenidos inconscientes, ejemplo de clarificacin:

Entrevistado: A usted no le parece que debo elegir por y mismo y no tener en cuenta la opinin de los dems?

Entrevistador: Fjese que en este momento me esta preguntando a m si lo que usted piensa es correcto, a pesar de que opina que debe decidir por usted mismo.

3) la reflexin

En este caso el psiclogo agrega mas datos que los aportados por el entrevistado, implicara fundamentalmente la expresin verbal de lo que es vagamente conciente, expresar con palabras lo que es implcito e inconsciente para el sujeto, pero que no tiene una carga conflictiva tal que lo haya llevado a establecer frreas barreras contra ese contenido

4) la confrontacin

En la confrontacin el nivel de penetracin del psiclogo y su mensaje llega hasta lo implcito e inconsciente. En este caso se incluye la relacin de la conducta actual con datos del pasado, sealando similitudes, diferencias y contradicciones entre los datos del presente, igualmente contenidos en el relato.

5) la interpretacin

La interpretacin implica la verbalizacin de los contenidos inconscientes, pero incluye adems la mencin de las defensas, la resistencia a reconocer como propios, concientemente, tales contenidos, y aquel que se supone es el origen del conflicto.

Cundo interpretar? Se puede decir, en un sentido amplio, que se interpreta siempre, en la medida en que el entrevistador realiza continuamente evaluaciones de los mensajes del entrevistado. Sin embargo, hay disparidad de criterios en cuanto al momento en que estas comprensiones deben transformarse en palabras. Desde un punto de vista psicoanaltico, una interpretacin solo puede formularse cuando el entrevistado casi ha llegado al punto en que pueda formularla el mismo. El consultante debe ser capaz de manejar la angustia adicional, que se espera sea generada por la interpretacin, sin retroceder ni desarrollar otro sntoma.

Lo que no se debe olvidar, ni en el reflejo, ni en la confrontacin, ni en la reflexin, ni en la clarificacin, ni en la interpretacin, es la mencin de los datos del aqu y ahora, que son los referentes directos a partir de los cuales el psiclogo ha podido entender, el vinculo que el sujeto establece con su futuro, en trminos de carrera y de profesin. Una intervencin fracasa en una entrevista de orientacin vocacional cuando se omite el punto de urgencia del adolescente que es la definicin de su propio futuro y la vinculacin de su proyecto con ese futuro.

Los fracasos en las intervenciones del psiclogo:

Su fracaso deriva de uno o varios de los siguientes errores: en primer lugar de que el contenido de su mensaje no refleje exactamente la conducta del entrevistado, sea cual fuere el nivel en el que se esta operando..

El fracaso puede derivar tambin de la codificacin de su mensaje. Es posible que el cont4enido de la interpretacin - su significado- sea adecuado y correcto, pero que los significantes que han participado de la elaboracin de su mensaje no sean los ms convenientes por no pertenecer al repertorio del adolescente. La interpretacin tambin puede fallar por una deficiencia en la oportunidad. Toda intervencin del psiclogo tiene un cuando que solo su entrenamiento y pericia pueden detectar.

Finalmente una interpretacin, como lo hemos dicho, falla y es poco operativa cuando no contribuye a esclarecer el vnculo que el entrevistado establece con su proyecto vocacional.

Las respuestas a las intervenciones del psiclogo:

Toda intervencin tiene un carcter hipottico y, por lo tanto tendr que ser confrontada con la situacin antes de que pueda aseverar que su intervencin ha sido adecuada.

Las reacciones del adolescente a la intervencin del psiclogo pueden clasificarse, en trminos muy generales, en reacciones de aceptacin, rechazo o indiferencia.

La actitud del entrevistador:

La funcin del psiclogo no consiste en tranquilizar al adolescente, si no en ayudarlo a pensar. Debe alcanzar plena conciencia de que pensar es necesariamente aprender a reconocer el compromiso personal que existe en toda situacin vital. El consejo, en el sentido de una orientacin dirigida o paternalista, lejos de contribuir a la resolucin del conflicto que lleva al adolescente a la consulta, se convierte en una situacin enfermante, ya que confirma o ratifica las fantasas de omnipotencia que el adolescente deposita en el psiclogo y los instrumentos psicolgicos, como instrumentos dotados de cualidades mgicas que lo eximiran de la tarea de comprometerse en su propia vida.

Captulo V: La Identidad Profesional del Orientador Vocacional

En este captulo se intentar explicar la concepcin que el orientador vocacional tiene de su mundo interno y la influencia de ella sobre su tarea.

Examinar la identidad del orientador en funcin del juego implcito en la tarea y analizar la relacin entre la identidad del orientador y su encuadre de trabajo, sern las dos lneas de abordaje para este tema.

La eleccin que realiza un adolescente reactualiza en el orientador sus propias elecciones y sus duelos personales ligados con las mismas.

Ser psiclogo supone renunciar a cualquier otra cosa, a cualquier otra profesin. Y ser un psiclogo que se dedica al campo de orientacin vocacional supone renunciar total o parcialmente a otros campos de trabajo dentro de la psicologa.

Si bien es cierto que un buen psiclogo, que se dedica a tareas clnicas, debe identificarse necesariamente con el otro. No lo es menos que sin tomar la distancia adecuada. Esto es lo que se designa habitualmente como disociacin instrumental (Bleger).

En otro contexto, Rogers sugiere que para comprender la conducta del otro es imprescindible la identificacin. Se tratara de asumir el Cuadro de referencias interno del otro.

Disociacin instrumental y encuadre:

Para lograr el carcter instrumental de la disociacin los psiclogos estamos acostumbrados a decir que el encuadre nos ayuda, pues nos permite a la vez meternos y salir del otro.

El encuadre es un conjunto de reglas de juego, es algo arbitrario, ficticio, artificial. Conviene hablar de l como una tctica en el sentido general de arte de poner orden en las cosas.

Existe en todo buen entrevistador un arte de poner orden en la entrevista. Hay, tambin un arte en el entrevistador, el de poner un desorden personal en aquella. Y del interjuego de ambas partes surgir eventualmente claridad sobre el porqu, el para qu y el cmo de la conducta del entrevistado.

La resolucin de una situacin confusa siempre implicar confrontar el dato emergente, la conducta, con el interjuego del encuadre del psiclogo y las tcticas del entrevistado. Estas ltimas siempre son actuales pero expresan su historia pasada y se proyectan al futuro. Son hipotticamente la manifestacin de su estructura de la personalidad. Si se subraya la importancia de mantener fijo el encuadre, es porque es un requisito indispensable para poner en evidencia las reglas de juego latentes en el entrevistado: su personalidad.

Bleger entiende dos encuadre, uno el que propone y sostiene el psicoanalista aceptado concientemente por el paciente y el otro, el del mundo fantasma, el que en l proyecta el paciente.

El encuadre sera el Meta-Yo del paciente; su anlisis esclarece en el encuadre del psicoanalista la depositacin de los aspectos psicticos de la personalidad del paciente.

El encuadre deber ser considerado no slo como meta-Yo del paciente, sino tambin como meta-Yo del psiclogo.

Bleger aade que si no se analiza al encuadre sistemticamente, ste puede convertirse en una adiccin.

El encuadre asume una funcin defensiva con todo lo que el trmino implica: proteccin y al mismo tiempo riesgo de estereotipia y empobrecimiento.

El psiclogo puede adems expresar en el encuadre sus aspectos ms maduros, aquellos que le permitirn reflexionar sobre la dada proyeccin-introyeccin en el campo de la entrevista.

En la medida en que el orientador vocacional es un profesional adulto que entrevista al adolescente, es depositario de mltiples personajes, ligados con las fantasas acerca de las carreras superiores. Pero tambin ocurre lo mismo con el entrevistador respecto del entrevistado, lo que se ha de examinar sistemticamente en trminos de contratransferencia y contraidentificacin proyectiva.

La depositacin de las propias experiencias que el profesional realiza sobre el adolescente depender del modo en que asuma su rol, o sea su identidad ocupacional. Si el rol es asumido de un modo maduro podemos suponer que su actividad ser autnticamente reparatoria.

El Psiclogo y la reparacin:

Aunque muchas veces la reparacin est asociada a lo teraputico, en realidad aparece en cualquier esfera de trabajo profesional.

La reparacin no puede ser juzgada por los resultados del trabajos ya que en el fondo la reparacin comienza y termina con el objeto interno cuyo representante es el objeto externo. En orientacin vocacional el adolescente es el representante externo de objetos internos del psiclogo cuya reparacin es intentada por ste.

Toda eleccin supone una renuncia: al elegir se deja, y esto puede incluir la fantasa de que se ha infringido un dao sobre los objetos internos ligados con las carreras desechadas.

El orientador operar bien si su reparacin es depresiva y mal si se trata de una pseudorreparacin (manaca, compulsiva, etc.)

La autntica reparacin que supone siempre conductas reparatorias requiere claridad en cuanto al rol profesional y recprocamente, la autntica reparacin contribuye a definir progresivamente la identidad ocupacional del ejecutor del rol.

Los ataques a la identidad profesional:

Estos ataques estn ligados a la intolerancia y a la ambigedad del adolescente. Pero si la ambigedad que exhibe el adolescente frente al futuro le resulta intolerable al psiclogo, este absorbe, se identifica y acta lo depositado en l por el adolescente, y esto lo mueve a reactualizar su propia ambigedad cuando eligi carrera y especialidad en el pasado. Estn actuando dos sentimientos opuestos: la dada impotencia - omnipotencia.

En este contexto el Test aparece a veces como:

Un recurso mgico, a modo de una tabla de salvacin del psiclogo ante la irrupcin de su duda y su incertidumbre

Otras veces funciona de modo protector como un distanciador.

Como contrapartida cuando se niega la eficacia real de un test al decir ningn test sirve para nada, que en realidad se expresa el resentimiento por la propia impotencia de comprender lo que est confuso.

Otros ataques a la identidad profesional derivan de la temtica adolescente planteada en las entrevistas en trminos de xito-fracaso. Las dudas del psiclogo pueden deberse a su concepcin ideolgica. Toda eleccin, en definitiva, se apoya en supuestos implcitos sobre la felicidad humana y sobre las concepciones que se tiene en cada sociedad acerca de lo que debe entenderse por xito. Es por lo tanto un problema de ideologas.

Pero tambin este impacto requiere de un nivel de anlisis psicolgico. He observado que a veces la temtica del xito y fracaso era mal encarada o desvalorizada, porque reavivaba la experiencia propia frente a un acceso difcil al terreno profesional.

Una tercera forma de ataque a la identidad profesional se halla referida a lo econmico, a la culpa por cobrar, las dudas acerca de cmo fijar los honorarios. Siempre observ que estas dudas estaban ligadas con una desvalorizacin de la tarea y con las vicisitudes acerca de la asuncin de un rol profesional adulto, lo que implica vivir de su capacidad y sus conocimientos como nico capital.

Un grupo de orientacin vocacional:

Para ejemplificar las vicisitudes en la asuncin del rol profesional adulto, veamos ejemplos de un grupo de cuatro psiclogos recin recibidos que queran establecer un instituto psicopedaggico.

Fui consultado para brindar asesoramiento a un grupo de colegas. El grupo estaba integrado por tres psiclogas (a una de ellas le faltaba una materia para la licenciatura) y un psiclogo.

Los ejemplos corresponden a un momento de crisis en la vida del grupo. La crisis se manifestaba en dificultades para reunirse o realizar lo que haban planificado previamente. En una reunin alguien propone conversar sobre lo que les ocurre a ellos y la sugerencia es rechazada de plano. Deciden fijar tareas y no pensar en cmo las realiza.

Un miembro dice, Propongo que si no vamos a ver lo que nos pasa, empecemos a hablar de orientacin vocacional.

En ese lapso en ellos empiezan a hablar dando definiciones tericas, hablan del proceso tcnico y empiezo a experimentar contratransferencialmente muy pocas ganas de ensearles, muy pocas ganas de interpretarles lo que ocurre e incluso malestar por estar con ellos. La reunin es pesada y molesta y tengo la sensacin que lo que me molesta es que repiten como loros cosas que yo haba dicho en otras oportunidades, que haban ledo pero que no eran de ellos.

Sealo entonces el modo en que se conducen, como si fueran alumnos que estudian de memoria y repiten la leccin ante un profesor que debe aprobar o desaprobar.

La reunin segua en tono de lamentacin de cada integrante del grupo, de lo difcil que es promoverse como psiclogo, cuando te recibs y no sabes que hacer, tens que competir profesionalmente y sobre todo hay que salir a la calle. Pero hay una persona que tiene un secreto que obstaculiza la tarea y que operaba como un boicoteador interno del grupo, esto no fue revelado hasta la ltima reunin. Consista en que, en esa poca, yo me reun con un grupo de colegas para organizar un instituto que en parte abarcara las mismas tareas que el instituto que ellos estaba formando.

Lo que esta persona senta, pero que hay que examinar como emergente del grupo, era que yo traicionaba al grupo haciendo algo secreto, prohibido y malo contra ellos. La competencia de que hablaban, que apareca siempre que alguien se recibe, aluda a la competencia hostil conmigo, qu pasa con Rodolfo que sabe tantas cosas y no nos quiere ensear nada de lo que sabe y qu hace por otro lado con otros psiclogos?

Comprend todo esto ms tarde y por qu todas mis interpretaciones fracasaban. El grupo atacaba y desvalorizaba todo lo que yo deca y denigraba explcitamente la ayuda que la psicologa poda brindarles frente a una situacin como la que ellos enfrentaban. Recin al finalizar la reunin el grupo comprendi la situacin y le sorprendi que siendo psiclogos atacaran de tal modo a la psicologa. El vnculo envidioso cabalgaba sobre un fuerte resentimiento contra la carrera, que no haba satisfecho las fantasas omnipotentes depositadas en ella cuando iniciaron sus estudios.

Hoy estoy convencido de que cualquier estudiante de cualquier carrera, al iniciar sus estudios, y por ms eficaz que haya sido su orientacin vocacional, experimenta fantasas omnipotentes ligadas a la facultad, la vida de estudiante, los profesores, la profesin, etc.

Estas personas, que estaban comenzando a trabajar profesionalmente, no queran (no podan) abandonar su vida de estudiantes. En el grupo trataban de ser buenos alumnos y evitar la tarea profesional porque teman ser malos profesionales. El vnculo no esclarecido con el rol profesional les impeda aprender y frustraba de un modo circular su ingreso al mundo profesional.

La competencia como rtulo, aluda no slo a lo econmico, sino tambin a la competencia cientfica y profesional, que el grupo no toleraba examinar. Preferan actuar como si no supieran nada antes que percibir que no saban todo.

La dificultad en el acceso a la identidad profesional se observa en varias conductas del grupo; por ejemplo, la sede: el lugar donde haban decidido trabajar est lejos de Buenos Aires (lejos de donde haban estudiado) y es la casa de uno de los miembros del grupo (la que todava no se haba recibido). El lugar elegido era una verdadera solucin de compromiso.

Haba tambin imposibilidad de establecer contactos afuera (contratos de trabajo). Por ejemplo, iban a escuelas, ofrecan trabajo, les decan que haba posibilidades de aceptarlos y no volvan nunca ms.

No pueden formalizar contratos con lugares de trabajo porque todava no han establecido ninguno entre los cuatro, pero sobre todo porque el contrato implicara la asuncin definitiva de un rol profesional. Es decir, que en otro plano, el contrato que no pueden hacer entre ellos cuatro revela la dificultad de hacer un contrato interno entre sus aspectos de estudiantes y sus aspectos de profesionales. Hasta tanto no pudiesen examinar sus motivaciones e intereses, no les sera posible planificar el trabajo.

A esta altura ya se ve claramente que el instituto aparece como un objeto que reemplaza con urgencia a la institucin facultad y a la institucin hospital; abandonarlas haba naturalmente suscitado la aparicin de intensas ansiedades. En situaciones de esta naturaleza la observacin clnica revela alteraciones de la conducta de diversa magnitud que en trminos de identidad se expresan como prdida momentnea de claridad en cuanto a los lmites del self. Lo que se pierde con la institucin, desde el punto de vista dinmico, son aquellas defensas que la institucin protega contra las ansiedades tempranas.

El continente geogrfico del grupo era muy difcil y, adems inestable, porque siendo una casa de familia ni siquiera saban cuanto tiempo estara disponible, y la casa era de la persona que todava no se haba recibido. Simblicamente esta conducta implicaba hacer un instituto privado dentro de la facultad.

Considero que el solo relato de estos dilogos ilustra la situacin de un adolescente que elige carrera. En el primer momento la eleccin se realiza en la fantasa anotando todas las posibilidades de un modo megalomanaco, teniendo en cuenta slo los gustos, todos los gustos. En instituto es el continente de todas las fantasas reparatorias, sean cuales fueren en cuanto a su calidad. El instituto es para estos psiclogos lo que la universidad para un adolescente.

El relato de cmo se abandon la facultad y el hospital y se form el instituto es la manifestacin del deseo de recuperar el pasado para ponerlo al servicio de la elaboracin de un proyecto para el futuro

Ingreso y egreso de la universidad:

Cuando el profesional es un psiclogo y decide dedicarse a la orientacin vocacional ve reeditado su propio conflicto de eleccin en cada adolescente que consulta. La posibilidad de instrumentalizar eficazmente este emergente contratransferencial depende de cmo ha egresado de la universidad y elaborado el ingreso a la especialidad.

El consultante es un disparador de la situacin descripta. Por eso se lo aguarda ansiosamente como un salvador, pues confirma el fin del paso de la universidad a la profesin, y al mismo tiempo se lo teme.

El duelo por la facultad puede tener caractersticas melanclicas y en ese caso predominaran los sentimientos de impotencia.

Cuando predominan defensas de la naturaleza maniaca, la tarea es sobre idealizada. La fantasa es que al adolescente todo le ira bien, si elige bien.

La tercera hiptesis de este trabajo es que: En el psiclogo la dificultad de asumir el rol profesional se manifiesta en distintas formas de identificacin simbitica con el adolescente.

Esta relacin se expresa a veces bajo una forma que se podra llamar de complot. El psiclogo se une con el adolescente y juntos critican a los padres, critican a los profesores, critican a la facultad, la universidad.

Otra forma de simbiosis profesional expresa la envidia que despierta en el profesional la amplia posibilidad de eleccin del adolescente en comparacin a la suya, restringida en cierto modo por una consolidacin de su propia identidad profesional. El adolescente puede estar conflictuado, tener problemas mas o menos agudos, pero tiene la posibilidad de elegir cualquier profesin, en tanto que el psiclogo ya ha elegido y por ende renunciado. La envidia impide la aceptacin de la autonoma del otro, se expresa, por ejemplo, cuando telefonea peridicamente al adolescente, perturbando la posibilidad de que este se independice.

Cuarta hiptesis: En el orientador vocacional existe la fantasa latente de proseguir a travs de las elecciones de los adolescentes todos los estudios y carreras que ha debido abandonar al hacer sus propias elecciones.

Si en la situacin de consulta el profesional no es consciente de la implicacin de sus propios vnculos con las carreras abandonadas y con la suya asumida, har fracasar el proceso pues la fantasa enunciada en la hiptesis inducir actuaciones que simbioticen la relacin.

Hay tambin circunstancias en que se establecen distintos tipos de vnculos, a saber:

DESVALORIZADOR: el profesional deja de percibir las conductas progresivas y piensa que el adolescente se mueve en crculos al reiterar temas o fantasas, cuando en realidad repite, cada vez de un modo distinto, aproximndose a una elaboracin de sus conflictos.

IDEALIZADOR: este adolescente es genial, tan maduro, tan perfecto que se desempeara excelentemente en la carrera que desea elegir. En estos casos la carrera es depositaria de fantasas del profesional ligadas a proyectos