libreto orfeo

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TeaTro VillamarTa. TemPoraDa 2007/2008 L’Orfeo Favola in musica en un prólogo y cinco actos de CLAUDIO MONTEVERI (1562-1643) Libreto de Alessandro Striggio, basado en Las Metamorfosis de Ovidio y Las Geórgicas de Virgilio Estrenada en el Palacio Ducal de los Gonzaga en Mantua el 24 de febrero de 1607 Sábado, 1 de diciembre a las 20.00 horas

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orfeo

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  • TeaTro VillamarTa. TemPoraDa 2007/2008

    LOrfeo Favola in musica en un prlogo y cinco actos de

    CLAUDIO MONTEVERI (1562-1643)

    Libreto de Alessandro Striggio, basado en Las Metamorfosis de Ovidioy Las Gergicas de Virgilio Estrenada en el Palacio Ducal de los Gonzaga en Mantuael 24 de febrero de 1607

    Sbado, 1 de diciembre a las 20.00 horas

  • ndiceNDiCereParTo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .5

    No aBaNDoNemoS NUeSTroS CamPoS De TraCia . . . . . . . . . . . . . . . . . 11

    Jos Luis de la Rosa . Presidente de La Arcadia-Jerez

    el VillamarTa, UN ClSiCo DiFereNTe . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 13

    Rafael Navas Renedo . Director de Diario de Jerez

    orFeo aNTe la mUerTe . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 15

    Pablo J . Vayn

    arGUmeNTo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 27

    liBreTo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 29

    Personajes . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 31

    Prlogo / primer acto . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 33

    Segundo acto . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 37

    Tercer acto . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 43

    Cuarto acto . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 47

    Quinto acto . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 51

    SeleCCiN DiSCoGrFiCa . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 55

    CaTloGo De PeraS

    Y oBraS eSCNiCaS De ClaUDio moNTeVerDi . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 57

    relaCiN De PeraS iNTerPreTaDaS

    eN el TeaTro VillamarTa . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 59

    SoBre la ProDUCCiN . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 61

    CUrrCUloS . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 62

  • repartoreParToMsica/Euridice emmaNUela Galli

    Orfeo mirko GUaDaGNiNi

    Mensajera Gloria BaNDiTelli

    Proserpina CriSTiNa Calzolari

    Plutn maTTeo BelloTTo

    Esperanza JoS lo moNaCo

    Caronte SalVo ViTale

    Apollo raFFaele GiorDaNi

    Ninfa aNNamaria CalCiolari

    Pastor I GioVaNNi CaCCamo

    Pastor II, Spirito I makoko SakUraDa

    Pastor III ClaUDio CaViNa

    Pastor IV, Spirito II ToNY CorraDiNi

    Coro de ninfas y pastoresFraNCeSCa CaSSiNari, Paola reGGiaNi, YezTaBel ariaS FerNNDez, NaDia eNGheBel, GiaNlUCa zoCCaTelli, DaViDe GalaSSi, GaBriele lomBarDi, aNDrea FaVari

  • Vestuario y escenografaPaola reGGiaNi

    Asistente de escenografaGiUSePPiNa riSorSo

    IluminacinolGa GarCa

    Director musicalClaUDio CaViNa

    Director de escenaFraNCeSCo miCheli

    Flauta marCo roSa SalVa, GiamPaolo CaPUzzo

    Tiorba GaBrielle PalomBa, FUlVio GarlaSChi

    Corneto DoroN DaViD SherwiN, BrUCe DiCkeY

    Trompa lUCa marzaNa

    Trombn y trompa ermeS GiUSSaNi, maUro moriNi, CorraDo ColliarD

    Trombn FaBio CoSTa, DaViD YaCUS

    Violn SVeTlaNa FomiNa, Carlo lazzaroNi, reBeCa Ferri

    Viola eFix PUleo, oTTaVia raUSa

    Contrabajo alBerTo lo GaTTo

    Arpa marTa GrazioliNo

    rgano y clavicmbalo DaViDe Pozzi

    equipo artstico

    Componentes de la Venexiana

  • Claudio monteverdi (1567-1643)

  • no abandonemos No aBaNDoNemoS NUeSTroS CamPoS De TraCiaEs imposible datar el momento exacto del na-

    cimiento de cualquier gnero musical, dado que esto suele ser fruto de una evolucin que adquiere su estatus cuando se ha consolidado . No obstante, existen obras, compositores, situaciones, etc . que han dado carcter a las formas que se han ido afir-mando dentro de los diferentes estilos de la historia de la msica .

    Si la pera entronca parte de su origen en la co-nocida Camerata fiorentina, no es menos cierto que fue LOrfeo de Monteverdi el que consolid este arte como una amalgama conceptual de msica y pala-bra, en la que aquella no solo acompaa sino que alienta y describe el carcter que esta narra dentro del entorno dramtico .

    En febrero pasado se conmemoraba el IV cen-tenario de la creacin de LOrfeo, hecho que ha provocando que este se haya convertido en el ao europeo de la pera, en el que no solo se le ha ren-dido un valiossimo tributo a este gnero, sino que ha servido para potenciar su difusin y generar, as, mayor inters por parte de todos los pblicos .

    El Teatro Villamarta hacindose eco de esa convocatoria ha ampliado la oferta lrica de su programacin, llegando a ofrecer nueve ttulos en

    el transcurso de este ao 2007, demostrando la importancia que siempre ha tenido dentro de su programacin .

    Desde La Arcadia-Jerez hemos tratado de apo-yar desde nuestra fundacin esa magnifica iniciati-va; y ya no solo por nuestra afinidad e inters por la pera y la msica en general, sino porque sabemos el esfuerzo que se ha hecho para convertir este coli-seo en el Centro Lrico del Sur, orgullo de la Funda-cin Teatro Villamarta y de todos los jerezanos .

    Aprovechando estas lneas, queremos seguir agradeciendo los esfuerzos, patrocinios y colabora-ciones de todas las personas y entidades, pblicas y privadas, que hacen posible que este hermoso proyecto siga desarrollndose .

    Hemos construido un soberbio edificio que alberga no solo hermosos espectculos, sino que se ha convertido en la morada de nuestras ilusiones . Seamos, pues, como Orfeo y mimemos a nuestro teatro como si se tratara de nuestra propia Euridi-ce, luchando para que no se apodere de l el reino de las sombras . Nosotros, al contrario que el mtico poeta, no volveremos la vista atrs al ruido de las Furias, seguiremos mirando hacia adelante bus-cando la luz .

    JoS lUiS De la roSaPresidente de La Arcadia-Jerez

  • el villamartael VillamarTa, UN ClSiCo DiFereNTeQuienes tenemos la suerte de poder acudir

    con frecuencia a las representaciones lricas del Teatro Villamarta, podemos deleitarnos con mu chas de las mejores voces que se pueden es-cuchar hoy en todo el planeta y me atrevera a decir en casi todo el universo . Es todo un lujo encontrar a pocos metros de casa un escenario sobre el que se sitan autnticas estrellas del panorama artstico y no me cansar de repetir que el principal responsable de ello es Francisco Lpez, el director del Teatro, con la ayuda de su magnfico equipo humano y, por supuesto, el aval de la Fundacin municipal del Villamarta .

    Hasta estas pginas llegan puntualmente las voces autorizadas que opinan, analizan e ilus-tran acerca de esas preciadas voces . Gracias al buen hacer y los buenos contactos que existen en el Teatro y en la Asociacin La Arcadia-Je-rez, autora de estos libretos, y del apoyo de los patrocinadores privados, podemos leer intere-santes artculos que abundan en los aspectos tcnicos, histricos y discogrficos de los auto-res de peras y zarzuelas, y por supuesto de los intrpretes de cada momento . Tambin es un lujo contar con su colaboracin desinteresada porque, sobre todo a los nefitos como el que suscribe, ayudan a desentraar muchos de los misterios o cuestiones que nos plantea el mon-taje de cada obra .

    Los que no tenemos esos conocimientos y nos quedamos en algo mucho ms superficial como es la cuestin del (buen) gusto y del dis-frute personal, acabamos valorando una pera, a un cantante, un msico o a un director de escena por una cuestin muy simple: si nos ha gustado o no . La manifestacin artstica podr

    gustar o no, pero est ah y cada cual recoger su diferente cuota de felicidad .

    En Jerez hemos tenido tanta, tantsima suer-te en los ltimos diez aos, que podemos per-mitirnos el lujo no slo de ver y escuchar pera, sino hasta de opinar sobre ella, comparando, criticando y, en definitiva, valorando . Para que ello sea posible, antes ha de existir un trabajo, duro y difcil, por traer hasta nuestras butacas a los artistas que, con mayor o menor acierto, interpretan diferentes ttulos .

    Llega diciembre y en Jerez seguimos para bingo . La histrica programacin lrica que vive la ciudad tiene una nueva cita con un cl-sico, el Orfeo de Monteverdi, que se nos brinda en versin concierto a travs del conjunto La Venexiana . Otra forma, ya lo hemos dejado es-crito en alguna ocasin, de ver y escuchar la pera . Ni mejor, ni peor, simplemente distinta . Pero, guste o no el resultado final, lo que na-die podr poner en duda es que en esta ciudad, desde su Teatro, hay inters y ganas por seguir creciendo en la apuesta cultural de calidad para todos . As lo entendemos tambin desde Diario de Jerez y por ello apoyaremos siempre esta filosofa de trabajo desde nuestra funcin como medio de comunicacin social vinculado y comprometido con una ciudad . Pero, como dice nuestro amigo Jos Luis de la Rosa, pre-sidente de La Arcadia-Jerez, para que haya li-bretos, antes tiene que haber pera . Esta frase genial lo resume todo y el Orfeo que se presenta este 1 de diciembre viene a decirnos una vez ms, por si quedaba alguna duda, que la lrica es ya un clsico del Teatro Villamarta que nun-ca nos deja indiferentes .

    raFael NaVaS reNeDoDirector de Diario de Jerez

  • Orfeo frente a la muerteorFeo FreNTe a la mUerTepo de mnades bquicas . Pero Orfeo fue tam-

    bin el iniciador en cultos mistricos, lo que

    dio lugar al surgimiento de toda una religin,

    el orfismo . Seguramente fue esta condicin

    inicitica, asociada al poder mgico que en

    sus manos alcanzaba la msica, el principal

    atractivo que debieron de encontrar en Orfeo

    los poetas y msicos que a finales del siglo

    XVI trabajaban en el nacimiento de un gnero

    teatral nuevo, la pera .

    La polifona haba dominado el siglo XVI

    por completo, pero su futuro no pareca muy

    halageo: en las academias del centro y nor-

    te de Italia haca dcadas que los humanistas

    discutan acerca de las relaciones entre pala-

    bra y msica y el papel que sta deba jugar

    en la escena . Para algunos, la conclusin pa-

    reca clara: si se quera recuperar el espritu

    de las antiguas tragedias griegas, haba que

    abandonar la polifona y adoptar un lengua-

    je mondico, lo que servira, adems de para

    identificar a cada personaje con una voz, para

    dar al texto la claridad que garantizara su

    preeminencia . Uno de los ms activos grupos

    de intelectuales que se mova en esta lnea era

    el que se reuna en el palacio florentino del

    conde Giovanni Bardi, que era conocido como

    la Camerata Fiorentina o Camerata Bardi . Su

    figura ms destacada era la de Vincenzo Gali-

    lei, padre del famoso astrnomo y alumno de

    La figura de Orfeo form parte, acaso des-

    de poca micnica, del panten musical de la

    mitologa griega . Es muy posible que para el

    siglo XII a . C . este arquetipo del cantor hechi-

    cero fuera ya protagonista de leyendas y poe-

    mas transmitidos de forma oral . Acompaado

    por su lira, Orfeo apareca en la voz de los

    rapsodas, o en grabados y dibujos, conmo-

    viendo con su canto a seres animados e inani-

    mados e, incluso, a los dioses, pero tambin

    como compaero de Jasn en su bsqueda

    del vellocino de oro . No se han conservado,

    sin embargo, referencias tan antiguas del epi-

    sodio ms conocido de su fbula, su bajada al

    infierno para rescatar de la muerte a su joven

    esposa, Eurdice . Aunque hay alguna vaga

    alusin en textos anteriores, para encontrar

    su completo enunciado habr que esperar a

    los poetas latinos Virgilio y Ovidio, que toma-

    ron la ancdota de alguna fuente helenstica

    perdida y la desarrollaron con amplitud para

    convertirla en motivo de inspiracin artstica

    de poetas, msicos, dramaturgos, pintores,

    escultores, novelistas, dibujantes y cineastas

    hasta nuestros das .

    En origen, el mito de Orfeo era violento,

    oscuro, dionisaco, sexual, y de hecho, aun-

    que las fuentes no siempre coinciden, el final

    del hroe result ser pasional y sangriento,

    pues fue asesinado y despedazado por un gru-

  • orFeo 17

    Gioseffo Zarlino, el gran terico del contra-

    punto . En 1581, Galilei public Dilogo de la

    msica antigua y de la nueva, tratado esencial

    en la historia del arte de los sonidos, en el

    que se definan las reglas de lo que iba a ser

    el nuevo estilo, el de la monodia acompaada

    (esto es, la del canto a solo con acompaa-

    miento), que su autor consideraba ni ms ni

    menos que la recuperacin de la ms genui-

    na tradicin de la ancestral msica griega . Si

    hubiera vivido ms tiempo es muy probable

    que el propio Galilei hubiera podido llevar a

    la prctica sus ms avanzadas ideas estticas,

    pero falleci en 1591, por lo que otros msi-

    cos y poetas ocuparon su puesto de honor en

    la Camerata, en especial Jacopo Peri, Giulio

    Caccini y Ottavio Rinuccini .

    Ya en 1598 Peri haba escrito un dra-

    ma musical sobre el tema de Dafne, aunque

    la partitura no ha sobrevivido, pero la gran

    ocasin para demostrar las posibilidades del

    nuevo estilo se present en 1600 con moti-

    vo de las bodas entre Mara de Mdicis y el

    futuro Enrique IV de Francia . Los fastuosos

    festejos incluyeron una obra dramtica pues-

    ta enteramente en msica . El poema lo escri-

    bi Rinuccini y la msica Peri, con algunas

    aportaciones de Caccini . El ttulo, Euridice,

    hace innecesario comentar su motivo tem-

    tico . Entre los invitados a los esponsales se

    encontraba Vincenzo Gonzaga, duque de

    Mantua, quien qued fascinado por el nue-

    vo espectculo y no dud en buscar el modo

    de reproducirlo en su corte cuanto antes, a

    ser posible con mayor magnificencia que en

    la propia Florencia, lo que tambin era una

    forma de mostrar al mundo el poder de su

    Estado . Desconocemos si Gonzaga era plena-

    mente consciente de que para esa tarea tena

    en su propia casa a la persona idnea .

    UN mSiCo Para UN ProYeCTo NUeVo

    Se llamaba Claudio Monteverdi . Haba

    nacido en Cremona en 1567 y para princi-

    pios del siglo XVII era ya uno de los compo-

    sitores ms conocidos de toda Italia . De s-

    lida formacin, empez a escribir madrigales

    y pequeos motetes religiosos muy pronto .

    En 1590 1591 entr al servicio de la cor-

    te mantuana . All compuso su Terzo Libro de

    madrigales (publicado en Venecia, en 1592),

    que presentaba ya algunas piezas en un estilo

    bastante atrevido . Fue justamente su auda-

    cia compositiva la que lo llev a enzarzarse

    en una polmica con Giovanni Maria Artusi,

    defensor de la vieja forma polifnica . Mon-

    teverdi opona a esta prima prattica, la secon-

    da prattica, que en lnea con las teoras de

    Galilei recuperaba la monodia, conceda im-

    portancia capital a los textos y trataba de ex-

    plotar todas las posibilidades expresivas de la

    msica con el nico fin de conmover los sen-

    timientos humanos . Lo que estaba haciendo

    Monteverdi, y con l los miembros de la Ca-

    merata Bardi, no era otra cosa que recoger la

    tradicin de los intelectuales neoplatnicos

    del siglo XVI, que vean en el drama griego

    la expresin ms elevada de la armona de

    las esferas y crean poder recuperar el po-

    der mgico del canto a travs de una msica

    puesta al servicio de la palabra y no al revs .

    Cuando en 1601 Monteverdi es nombrado

    maestro de capilla del duque, gozaba ya de

    gran fama . En los aos siguientes, veran la

    luz sus libros Quarto (1603) y Quinto (1605)

    retrato de Claudio monteverdi

    pintado por Bernardo Strozzi en 1640

  • TeaTro VillamarTa 18

    de madrigales, donde estas ideas acerca del

    uso de la monodia, del estilo recitativo el

    cantar parlando, del servicio de la msica a

    la palabra aparecan an de manera embrio-

    naria . Tras LOrfeo, ya no habra vuelta atrs,

    y la seconda prattica quedara incorporada a

    su estilo de manera definitiva .

    El proyecto operstico se haba ido en cual-

    quier caso retrasando por problemas internos

    de la corte mantuana, hasta que la iniciativa

    fue asumida por el joven prncipe heredero,

    Francesco (nacido en 1590), que quera hacer

    representar su Orfeo con motivo de sus bo-

    das con Margarita de Saboya, lo que sera una

    forma estupenda de impresionar a sus futuros

    suegros . Sin embargo, el matrimonio fue tam-

    bin pospuesto en varias ocasiones y no se

    celebr hasta 1608 . Pero Francesco no pudo

    esperar tanto . Estaba bien informado de las

    actividades florentinas por su hermano me-

    nor, Ferdinando, que estudiaba en Pisa, ciu-

    dad en la que por aquel tiempo la corte medi-

    cea acostumbraba a pasar varios meses al ao

    coincidiendo con el tiempo del Carnaval, la

    poca en que podan verse ms representacio-

    nes teatrales, en las que el propio Ferdinando

    participaba . Monteverdi era el msico de la

    corte y a l sin duda se adjudicara la labor

    de escribir la msica, pero para una iniciativa

    de esas caractersticas el poeta era tan impor-

    tante como el compositor . El elegido para la

    tarea fue Alessandro Striggio, mantuano de

    nacimiento, hijo del tambin msico y poeta

    de igual nombre y de una cantante y laudista

    sienesa . Striggio iba a ofrecer a Monteverdi un

    texto de altsima calidad literaria, partiendo

    del cual el compositor iba a lograr tal grado

    de fusin entre palabra y msica que ambas

    parecen haber sido creadas gracias a un nico

    impulso gentico .

    Palazzo Ducale de mantua

  • orFeo 19

    Para enero de 1607, el pro-

    yecto alcanzaba su madu-

    rez . El da 3 de aquel mes

    Francesco envi una carta

    a su hermano Ferdinando

    informndole de sus inten-

    ciones de hacer representar

    una fbula y de la necesi-

    dad que tena de cantantes,

    especialmente de castrati

    para las voces de soprano . La

    respuesta de Ferdinando fue

    inmediata: prometa enviarle

    a un joven castrato, Giovan-

    ni Gualberto Magli, quien no

    llegara a Mantua hasta el 15

    de febrero, poco ms de una

    semana antes de la fecha pre-

    vista para la representacin .

    Esta tuvo lugar finalmente

    el da 24 en las habitaciones que fueron de

    Margarita Gonzaga, viuda de Alfonso II dEste,

    ante un auditorio formado principalmente por

    miembros de la Academia degli Invaghiti, ins-

    titucin fundada en 1562 un poco a la manera

    de la Camerata Bardi . El da antes, Francesco

    escriba otra vez a su hermano:

    Maana se har la favola cantada en nuestra

    academia ya que Gio . Gualberto se ha portado

    tan bien que el poco tiempo que ha estado aqu

    no slo ha aprendido muy bien de memoria

    todo su papel [se sabe que puso voz a la Msica

    en el Prlogo y luego a Proserpina y a otra per-

    sonaje, que pudo ser la Mensajera o la Esperan-

    za], sino que lo dice con mucho garbo y efecto,

    de lo que estoy muy satisfecho; y como hemos

    hecho imprimir la favola a fin de que cada uno

    de los espectadores pueda tener una para leerla

    mientras se cante, envo una copia a V .S .

    Del resto del elenco del estreno se sabe con

    certeza que Francesco Rasi, natural de Arezzo

    y alumno, como el propio Magli, de Caccini,

    interpret el papel de Orfeo y es posible que

    Girolamo Bacchini diera voz a Eurdice . El

    xito fue tal que el duque mand repetir la

    representacin el 2 de marzo en una estan-

    cia mayor y con la presencia de las damas de

    la corte, extremo del que Francesco inform

    puntualmente a Ferdinando . En 1609, el im-

    presor veneciano Ricciardo Amadino edit la

    partitura, con una dedicatoria del compositor

    al prncipe Francesco . Debe tenerse en cuenta

    que el sistema de produccin de la poca era

    bsicamente oportunista . Nadie pensaba que

    un espectculo teatral realizado para la corte

    fuera a perdurar en el tiempo . Es por eso que

    la publicacin de Amadino tiene que enten-

    derse como una mera forma de documentar

    las actividades organizadas por los Invaghiti .

    Sin embargo, la partitura no pas desapercibi-

    da, pues en 1615 Amadino volvi a editarla,

    lo cual hace suponer que hubo ms peticio-

    nes de las en principio previstas .

    Este doble hecho excepcional (la edicin

    del libreto para el da del estreno, de la que

    hablaba Francesco en la carta a su hermano

    parcialmente reproducida arriba, y la de la

    partitura) ha permitido la conservacin de la

    obra de Monteverdi con tal nivel de detalles

    que conocemos hasta la instrumentacin ori-

    ginal, lo cual es ciertamente inslito para la

    poca, como demuestra la prdida de tantos

    otros ttulos escnicos del compositor (in-

    cluida la famosa Ariadna, estrenada al ao

    Frontispicio de Fiori poetici,

    coleccin de obras en honor a

    monteverdi, publicada en Venecia en

    1644, un ao despus de la muerte

    del clebre compositor.

  • siguiente) . Pero a la vez ha creado polmicas

    de distinto orden, tanto en la identificacin

    de algunos instrumentos (lo que supera las

    intenciones de este trabajo) como en la exis-

    tencia de un doble final para la pera (uno en

    el libreto, otro en la partitura), sobre lo que se

    volver ms adelante .

    eSTrUCTUra Y DeSarrollo Del Drama

    Con LOrfeo, Monteverdi da autntica car-

    ta de naturaleza al nuevo gnero operstico .

    El estilo que Peri, Caccini y otros composito-

    res florentinos y romanos (Marco Da Gaglia-

    no, que present en 1608 una Dafne, o Emi-

    lio deCavalieri que haba escrito en 1600 la,

    tambin trascendental y polmica, Rappre-

    sentatione di Anima e de Corpo) haban apun-

    tado en sus obras, conoce en las manos del

    cremons un descomunal salto artstico hacia

    delante . Lo que para sus contemporneos pa-

    reca ser punto de llegada, Monteverdi lo con-

    vierte en punto de partida hacia algo nuevo .

    Se ha dicho por ejemplo que Peri ilustra el

    drama, mientras Monteverdi lo recrea . Y es

    que si el recitado de Peri se postra completa-

    mente ante el texto, al que reconoce absoluta

    superioridad en el desarrollo de la obra, con

    lo que a menudo cae en la monotona, Mon-

    teverdi logra potenciar y ensanchar el sentido

    del poema con una msica que no renuncia

    en absoluto a su protagonismo, y eso lo hace

    mediante una extraordinaria variedad de for-

    mas, en las que se funden tradicin y moder-

    nidad de manera flexible y siempre adecuada

    a la dramaturgia y al sentido de la fbula .

    En el Orfeo de Monteverdi/Striggio se

    combina el mito clsico, con todo su compo-

    nente simblico y trgico, con el idilio pas-

    toril, caracterstico del universo madrigales-

    co de la poca . La obra se estructura en un

    Prlogo y cinco actos en los que se concilian

    de forma sutil ambos universos . La Toccata

    de arranque, que se ha hecho clebre, no es

    una obertura en el sentido moderno del tr-

    mino, pero s un exordio, una invitacin a la

    escucha y, casi con toda seguridad, tena tam-

    bin algn tipo de significado poltico como

    himno de los Gonzaga, lo cual se confirma

    por su aparicin en el principio de otra de las

    grandes obras mantuanas de Monteverdi, las

    Vespro della Beata Vergine de 1610 .

    En el Prlogo se presenta un personaje

    alegrico, la Msica, que se encarga de hacer

    el elogio de la familia reinante, describe la na-

    turaleza de sus poderes, presenta la figura de

    Orfeo y anuncia el comienzo de la fbula . La

    estructura del Prlogo calca la de la obra en

    su conjunto: los cinco actos son aqu cinco es-

    trofas separadas por ritornelli instrumentales,

    piezas que cruzarn toda la pera cumplien-

    do una funcin teatral bsica, ya que enmar-

    can la accin, sirven de referencia ambiental

    y ejercen a la manera de leitmotivs . En la de-

    clamacin de la Msica, Monteverdi hace por

    primera vez uso de la monodia acompaada,

    que ilumina con figuras retricas tpicas del

    madrigal, con las que consigue potenciar de

    forma extraordinaria el sentido expresivo de

    los trminos claves .

    El primer acto se organiza simtricamente

    en torno a la primera intervencin del pro-

    tagonista principal, el arioso Rosa del ciel,

    himno dirigido a Apolo y al amor, que est

    cargado tambin de figuraciones de fuerte im-

    pronta expresiva . El canto de Orfeo queda en-

    TeaTro VillamarTa 20

    Figura tradicional de orfeo, cantando

    y tocando la lira, pintada en una

    vasija de la antigua Grecia.

  • orFeo 21

    cuadrado entre el recitado (In questo lieto),

    los coros epitalmicos (Vieni Imeneo) y el

    baile (Lasciate i monti) de los pastores, con

    breves participaciones, tambin recitadas, de

    dos personajes femeninos (la Ninfa y Eurdi-

    ce, en una de sus dos nicas intervenciones

    en toda la obra) . Es decir, en poco ms de

    quince minutos, que es lo que dura el acto,

    Monteverdi emplea el estilo recitativo, vuelve

    a usar el ritornello instrumental, introduce el

    arioso y recurre a la polifona madrigalstica

    para los coros, los dos estrechamente relacio-

    nados por su estructura y su prosodia, aun-

    que Lasciate i monti quede remarcado tanto

    por su singular impronta rtmica (no es sino

    un balleto tpico de la poca), como por la ri-

    queza del acompaamiento instrumental .

    El acto II se abre con una breve sinfona,

    relacionada armnicamente con el ritornello

    del acto anterior, y nos introduce definitiva-

    mente en el ncleo del drama, que no es sino

    el de las pasiones humanas . Orfeo entona una

    canzonetta (otro gnero tpico del primer Ba-

    rroco), a la que responden los pastores, con

    ritornelli funcionando a modo de interludios

    (algunos de los cuales estaban previstos que

    sonaran fuera de la escena) . Uno de esos ri-

    tornelli conduce a la primera aria propiamen-

    te dicha de la obra, la cancin estrfica Vi

    ricorda o boschi ombrosi, que Orfeo ataca

    acompaado por su lira, simbolizada por las

    cinco viole da braccio que incluye la instru-

    mentacin . De forma magistral, Monteverdi

    enfatiza el universo pastoril de la naturaleza

    benfica y de la danza para que el contraste

    expresivo con la entrada en escena de Silvia,

    la Mensajera, resulte impactante . La interven-

    cin de la Mensajera, que viene para anun-

    ciar la muerte de Eurdice, se constituye, en

    efecto, en el centro neurlgico del acto . A su

    llegada, el tono luminoso se desvanece como

    por ensalmo . De pronto, las flautas y los vio-

    lines callan y se impone el tono doliente de

    un rgano di legno (cuyos tubos de madera

    ofrecen una dulce y especial sonoridad) ape-

    nas punteado por el sonido melanclico de

    un chitarrone, que acompaan la pattica de-

    clamacin . El recitado de Silvia es una fusin

    prodigiosa de monodia acompaada y figura-

    ciones caractersticas del madrigal, que trazan

    una curva dramtica, en la que el modo menor

    y el uso exacerbado del cromatismo marcan

    sus puntos lgidos, coincidiendo con el relato

    del momento exacto de la muerte de Eurdice .

    La llamada a la piedad de Silvia (Piena il cor

    di pietade e di spavento) es inmediatamente

    recogida por los pastores . Se oye entonces la

    voz de Orfeo que entona el Tu se morta con

    el mismo acompaamiento (rgano, chitarro-

    ne), en el mismo tono pattico y con el mismo

    juego retrico que la Mensajera . El uso ma-

    drigalstico de la pintura musical se muestra

    en toda su eficacia cuando para las palabras

    piu profondi abissi (los ms profundos

    abismos), Monteverdi prescribe un arpegio

    descendente que llega, en efecto, hasta lo ms

    profundo del registro grave del protagonista .

    Un coro a cinco voces al estilo formal de los

    del primer acto, pero que retoma las palabras

    y el tono doliente e imprecatorio de la Mensa-

    jera (Ahi caso acerbo), antecede a un breve

    recitado de sta, lleno de disonancias . Sigue

    una sinfona disonante y cromtica que intro-

    duce la escena final: un lamento fnebre en el

    que se repite el coro y que se extingue con el

    ritornello del Prlogo, como simblica indi-

  • orFeo 23

    cacin de que Orfeo se dispone a abandonar

    ese mundo, el universo arcdico y amable de

    los pastores .

    La sinfona que abre el acto III marca a la

    perfeccin el cambio de ambiente: las flautas

    y los violines de los actos pastoriles son susti-

    tuidos aqu por los trombones, las cornetas y

    el realejo, de sonoridades oscuras y amenazan-

    tes . Estamos en el centro geomtrico del dra-

    ma, y su protagonista, ms que el mismo Orfeo

    es aqu la Msica, que despliega todo su poder

    de encantamiento en medio del escenario ms

    terrible y espantoso . Orfeo se aproxima al In-

    fierno acompaado por el segundo personaje

    alegrico de la obra, la Esperanza, que tiene

    que abandonar al hroe al encontrar a su en-

    trada la inscripcin Lasciate ogni speranza o

    voi chentrate, que es exacta a la de La Divi-

    na Comedia de Dante (Canto III del Infierno),

    lo cual nos pone en la pista de la concepcin

    que Striggio ofrece del Averno, que proviene

    no tanto de la antigedad griega como de Vir-

    gilio y del propio Dante . La exquisitez con que

    Monteverdi emplea el estilo recitativo, trufn-

    dolo de retrica madrigalstica, se aprecia por

    ejemplo en el uso de un motivo de fuga sobre

    las palabras Se fuggi tu que se resuelve en la

    alusin final al carcter de la Esperanza (dol-

    cissima speranza), dominada por la lumino-

    sidad de las consonancias mayores . Que todo

    es mera ilusin se descubre inmediatamente,

    cuando la acre sonoridad del realejo acompa-

    a el canto monoltico e inflexible de Caronte .

    Una oscura sinfona introduce inmediatamen-

    te la gran aria de Orfeo, Possente spirto, co-

    locada justo en el centro neurlgico del drama

    y con la que Monteverdi hace una autntica

    exhibicin de las posibilidades del nuevo es-

    tilo . El aria se estructura en seis estrofas, cada

    una con una instrumentacin diferente, lo que

    alcanza notable valor simblico . As, las cua-

    tro primeras estrofas se separan por ritornelli,

    estn dominadas por el cantar passaggiato (un

    tipo de canto lleno de disminuciones de alto

    virtuosismo) y trazan una especie de recorrido

    por los distintos mundos que debe atravesar

    Orfeo para alcanzar su objetivo: en la prime-

    ra, los violines significan el mundo natural en

    el que habitan los humanos; las cornetas de la

    segunda evocan la muerte y el Infierno; el arpa

    de la tercera nos remite al Paraso, justo en un

    momento en el que se exige al protagonista un

    esfuerzo casi sobrehumano, con un recorrido

    por toda la amplitud de su tesitura en valores

    breves; en la cuarta, acompaado otra vez por

    instrumentos de la familia del violn (tres viole

    da braccio imitan la lira), Orfeo hace un ejer-

    cicio introspectivo, recurriendo a pronunciar

    su nombre a modo de recurso mgico . En la

    quinta estrofa el virtuosismo cede paso a la ex-

    presin del dolor: con el solo acompaamien-

    to del bajo continuo, Orfeo introduce el cantar

    daffetto, en el que juega con los contrastes de

    registros y las disonancias, tratando de des-

    pertar los sentimientos de piedad de Caronte .

    En la sexta y ltima estrofa, de nuevo con las

    violas simulando la lira y tocando en valores

    largos, el cantor recurre a la mayor simplicidad

    de su canto, adornado con un simple trino al

    final sobre el trmino invan (en vano), como

    tomando consciencia de que ante la frialdad de

    un ser de ultratumba su causa est por com-

    pleto perdida . Pero ya que no ha podido ganar-

    se la compasin de Caronte, Orfeo busca otro

    recurso mgico en la msica: una sinfona, que

    atacan dulcemente y en piano los violines, un

  • TeaTro VillamarTa 2424TeaTro VillamarTa

    rgano y un contrabajo de viola, provoca el

    sueo del barquero, lo que el hroe aprovecha

    para cruzar furtivamente el Aqueronte . Reapa-

    rece entonces la sinfona que haba abierto el

    acto, como smbolo de que Orfeo ha recobrado

    la esperanza . Un coro de espritus infernales a

    5 voces le pone fin .

    En el acto IV tiene lugar el episodio que

    otorga su pleno sentido al mito: el fracaso de

    Orfeo a causa de la duda, que, no lo olvide-

    mos, es fundamento ltimo del conocimiento

    humano (aunque es mucho suponer que esa

    idea estuviera en la mente de Striggio; en fe-

    brero de 1607, Descartes an no haba cum-

    plido los 11 aos) . Todo empieza con una dis-

    cusin entre divinos esposos (que tanto usar

    Wagner tres siglos y medio despus), el di-

    logo entre Proserpina y Plutn . Ella se identi-

    fica con el dolor de Orfeo, y de ah su cantar

    daffetto, que no renuncia a las disonancias ni

    a los efectos expresivos ms seductores en su

    intento por apiadar al esposo (as, el recuer-

    do de su propio amor es expuesto en un tono

    claro y luminoso) . La respuesta de Plutn

    pasa de una frialdad cercana a la severidad

    mostrada por Caronte a una mayor flexibi-

    lidad y dulzura, que termina con el dictado

    de las condiciones en que permitir la vuelta

    de Eurdice al mundo de los vivos . Un coro

    a cinco voces (Pietade oggi e Amore), en

    estilo puramente homorrtmico y declamato-

    rio, antecede a la entrada de Orfeo y Eurdice

    en escena . Todo ocurre entonces con extrema

    rapidez: Orfeo canta con inconsciente y des-

    preocupada alegra una sencilla canzonetta

    (Qual honor di te fia degno) que se apoya

    en el continuo, con breves ritornelli entre las

    estrofas realizados por los violines, hasta que

    la duda (acaso tambin el deseo?) lo asal-

    ta . La msica se detiene entonces de forma

    brusca y el ambiente cambia por completo .

    La psicologa del personaje resulta perfecta-

    mente atrapada por un recitado entrecortado

    e incoherente, hasta que un ruido que pro-

    viene de fuera de la escena termina por de-

    cidirlo a darse la vuelta y mirar a la esposa .

    Un realejo y la voz dura e inexorable de un

    espritu infernal dejan entonces claro que el

    mandato divino ha sido roto y para la pareja

    de amantes vuelven a regir las leyes severas

    del Infierno . En esas circunstancias, Eurdi-

    ce toma la palabra por segunda y ltima vez,

    con una declamacin en la que Monteverdi

    vuelve a mostrar su absoluta maestra para

    contrastar afectos, pues su hermossimo re-

    citado se mueve entre el patetismo doloroso

    (que se muestra mediante disonancias y cro-

    Plano de la ciudad de mantua de la

    poca de monteverdi.

  • orFeo 25

    matismos) y el xtasis amoroso (marcado por

    las luminosas consonancias en el registro ms

    agudo) . Momento absolutamente prodigioso .

    Una sinfona y un coro infernales terminan

    expulsando a Orfeo del Hades .

    Su regreso a los campos de Tracia se hace al

    inicio del acto V con el ritornello y la instrumen-

    tacin que al principio de la obra haban que-

    dado asociados al mundo de los pastores . Cruel

    simbolismo: Orfeo regresa fracasado y encuen-

    tra el mundo tal y como lo dej . El lamento del

    cantor (Questi i campi di Tracia), acompaado

    por dos rganos di legno y dos chitarroni, es de

    extrema simplicidad, concentrndose, sin ape-

    nas ornamentos, en la expresin, que se refuerza

    con figuras retricas, aunque Monteverdi recu-

    rre tambin a un efecto muy tpico del Barroco,

    el del eco, que responde por tres veces al hroe .

    Y llegados a este punto, el libreto entregado a

    los espectadores del estreno se aparta muy sig-

    nificativamente de la partitura impresa en 1609

    (hay otras variaciones anteriores, pero de carc-

    ter relativamente menor) . En el libreto, se in-

    cluye inmediatamente una bacanal, una escena

    de bacantes, furiosas por el discurso misgino

    de Orfeo, al que daran enseguida muerte (fue-

    ra de escena), como parece confirmar la danza

    moresca del final . Escribi Monteverdi msica

    para esta escena? Puede que s, para la noche

    del estreno, como sustitucin del final que des-

    pus se impuso y por razones de incapacidad

    escnica para ofrecerlo en la sala que acogi la

    presentacin de la obra . Acaso no, y ello vendra

    a demostrar, como ha sugerido Stefano Aresi, la

    diferencia que en la poca se marcaba entre el

    drama escrito, hecho para perdurar, y la msi-

    ca, creada con intenciones efmeras y adaptada

    a las circunstancias de cada representacin . As

    que al monlogo de Orfeo sucede en la partitura

    una de las sinfonas que en el acto III se haba

    vinculado al poder mgico de la msica, y que

    ahora sirve para introducir el descenso de Apolo

    como deus ex machina (recurso con larga tradi-

    cin dramatrgica) . Se ha destacado la vincula-

    cin de Apolo con los Invaghiti para justificar su

    presencia como introductor de un lieto fine en el

    drama, aunque tratndose de una divinidad mu-

    sical esta excusa no sera ni siquiera necesaria,

    pues lo cierto es que Apolo se presenta ni ms

    ni menos que como trasunto del propio Orfeo,

    como su imagen divina: misma tesitura, mismo

    tipo de canto, primero en un sobrio recitativo, al

    final recurriendo al cantar passaggiato que Orfeo

    haba empleado en el Infierno y que aqu seala

    el ascenso a los cielos del Hijo junto al Padre,

    una referencia ms platnica que cristiana (o, si

    se quiere, cristiana por platnica) . Un coro en la

    misma forma de balletto que haba aparecido en

    el primer acto y la breve moresca que rememora

    el episodio violento de las bacantes ponen fin a

    la pera .

    El mito de Orfeo contiene numerosas

    claves, que admiten lecturas e interpretacio-

    nes muy diversas . A menudo, sobre todo en

    tiempos modernos, se ha presentado como

    una simple historia de amor y sacrificio, pero

    en realidad en Orfeo debemos ver al hombre

    que, armado de todas sus facultades intelec-

    tuales y simblicas (que aqu representa la

    msica), se enfrenta a la muerte . Todos cono-

    cemos bien el resultado de tan desigual com-

    bate, que Monteverdi recre hace ya ms de

    cuatro siglos como posiblemente nadie haya

    vuelto jams a hacerlo .

    PaBlo J. VaYN

  • PrloGo

    Tras la fanfarria, aparece la Msica y se pre-

    senta ante el auditorio para anunciar el argu-

    mento del drama y loar sus virtudes sonoras,

    tras lo cual reclama silencio para poder mani-

    festarse en todo su esplendor .

    Primer aCTo

    Nos encontramos en los Campos de Tracia,

    donde los pastores y las ninfas celebran con

    cantos jubilosos y buclicas danzas el que la

    bella Euridice haya accedido por fin a los re-

    querimientos amorosos de Orfeo . Uno de los

    pastores reclama al enamorado que al igual

    que antes cantaba sus cuitas por los desdenes

    de Euridice, ahora loe con su lira la alegra

    por su conquista .

    Orfeo expresa, entonces, toda la felicidad que

    le embarg el da que su amada correspondi

    a sus sentimientos . Euridice tambin mani-

    fiesta su alborozo por su inminente unin con

    el poeta . El acto concluye entre expresiones

    de alegra mientras todos se dirigen al templo

    donde harn sus ofrendas y los enamorados

    pronunciarn sus votos .

    SeGUNDo aCTo

    En un lugar del bosque, Orfeo, emocionado por

    haber regresado a los lugares de su juventud,

    evoca con los pastores los avatares de su amor y

    les hace partcipe de su actual felicidad . La ale-

    gra se interrumpe con la llegada de Silvia, Men-

    sajera de aciagas noticias, pues anuncia a Orfeo

    con sentidos versos la muerte de Eurdice, pro-

    vocada por la picadura de una serpiente . La nin-

    fa expir con el nombre de Orfeo en sus labios .

    La propia Mensajera se lamenta de haber pro-

    vocado la angustia del poeta y decide apartar-

    se a un lugar solitario, lejos de sus semejantes .

    Tras manifestar su dolor, Orfeo resuelve bajar

    hasta el reino de los muertos, donde pretende

    conmover a sus habitantes con su lira y as

    poder rescatar a su amada Euridice .

    TerCer aCTo

    Orfeo, acompaado por la Esperanza, llega a

    orillas de la Laguna Estigia, antesala del reino

    de los muertos, solo hasta aqu puede aquella

    acompaarle ya que se lo prohbe una severa

    ley, grabada en el umbral del reino del abismo

    Abandonad toda esperanza los que entris .

    Orfeo, cediendo al desanimo, va al encuen-

    tro de Caronte, el barquero que conduce las

    almas de los muertos a la otra orilla, se nie-

    ga a cruzar al vate enamorado por tratarse de

    un alma an con vida, este utiliza su lira y

    sus cantos para adormecerlo y luego coge su

    barca y pasa a la otra orilla penetrando en los

    Infiernos, mientras un coro de espritus infer-

    nales canta su proeza .

    argumentoarGUmeNTo

  • TeaTro VillamarTa 28

    CUarTo aCTo

    Orfeo ha vencido los obstculos y ha llegado a

    los infiernos, donde su canto emociona a Proser-

    pina . sta apela a su esposo, Plutn, aludiendo

    a su antiguo amor, que hizo que la raptara y la

    condujera a los infiernos, e intercede para que

    devuelva a Eurdice a los brazos de su amante .

    El dios admite que tambin a l le ha conmo-

    vido el canto de Orfeo y por fin acepta y per-

    mite que Eurdice regrese con l, pero con una

    condicin: Orfeo no podr volver la vista atrs

    para ver si ella le sigue, si eso ocurre, Euridice

    regresar al reino de los muertos para siempre .

    Los espritus cumplen la orden, asombrados

    del triunfo del amor en el infierno .

    Orfeo, tras expresar su alegra es asaltado por

    las dudas, pero emprende el camino de regreso

    a la tierra intuyendo que su amada va detrs .

    Cuando oye ruido, se imagina que las furias se

    niegan a cumplir el deseo del dios de que Euri-

    dice vuelva a la vida, Orfeo gira su cabeza y ve

    a su esposa, que, llena de tristeza, se da cuenta

    de que le ha perdido para siempre .

    Un espritu anuncia al poeta que ha incumpli-

    do su promesa y que por tanto no es digno del

    favor de los dioses . Empujado por una fuer-

    za desconocida a la odiada luz que ilumina

    el mundo de los vivos, Orfeo expresa toda su

    desesperacin pues no ha logrado vencer sus

    pasiones para poder recuperar a su amada .

    QUiNTo aCTo

    Orfeo ha vuelto solo a los Campos de Tracia,

    donde de nuevo canta su dolor pidiendo a los

    elementos y a la naturaleza que compartan su

    desgracia . El eco repite su trgico lamento y

    el poeta se deshace en elogios de su perdida

    esposa, renunciando a cualquier otro amor,

    pues nunca mujer alguna habr de ocupar el

    lugar de Euridice en su corazn . Apolo, su

    padre, desciende en una nube para consolarlo

    y ofrecerle la inmortalidad . Juntos ascienden

    al cielo, donde Orfeo podr contemplar la im-

    perecedera imagen de Euridice en los astros

    del firmamento .

  • libreto

  • Pie de foto, onsecte conulpu tpa-

    tio doluptat landre commolobore

    tationsectet veniam, sequamet

    adipit iriure magna faccum

    vulluptat. Ut adipsustis nullam

    nit aliquat lor si tatue mincincipit

    velendignim vel dip ea commo-

    lortis num dolummy nullummodo

    odolorem num iliqui tem qui

    eummoloreet luptate mincincilit,

    summodo lortie et lum vullandre

    mod minci tatis dolore vero enim

    Frontispicio de una edicin de orfeo.

  • orFeo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Tenorpoeta

    eUriDiCe . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Sopranoesposa de Orfeo

    la mSiCa . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Soprano

    meNSaJera . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Mezzosoprano

    la eSPeraNza . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Contratenor

    CaroNTe . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Bajobarquero de la Laguna Estigia

    ProSerPiNa . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Sopranoesposa de Plutn

    PlUTN . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Bajodios de los infiernos

    aPolo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Tenordios y padre de Orfeo

    Ninfas, pastores y espritus infernales

    La accin se desarrolla en poca mitolgica en los campos de Tracia y en el Hades .

    PerSoNaJeS

  • ProloGo / PrloGo

    aTTo Primo / Primer aCTo

    Toccata

    la mUSiCaDal mio Permesso amato voi ne vegno, incliti eroi, sangue gentil di regi,di cui narra la Fama eccelsi pregi, n giugne al ver perch troppo alto il segno .

    Io la Musica son, ch i dolci accentis far tranquillo ogni turbato core,et or di nobil ira, et or damoreposso infiammar le pi gelate menti .

    Io su cetera dor cantando sogliomortal orecchio lusingar talora,e in guisa tal de larmonia sonorade le rote del ciel pi lalme invoglio .

    Quinci a dirvi dOrfeo desio mi sprona,dOrfeo che trasse al suo cantar le feree servo felinferno asue preghiere,gloria immortal di Pindo e dElicona .

    Or mentre i canti alterno or lieti or mesti,non si mova augellin fra queste piante,n soda in queste rive onda sonante,et ogni auretta in suo camin sarresti .

    PaSToreIn questo lieto e fortunato giornochh posto fine a gli amorosi affanni del nostro Semideo, cantiam, pastori,in s soavi accentiche sian degni dOrfeo nostri concenti .Oggi fatta pietosal alma gi s sdegnosade la bella Euridice .Oggi fatt felice Orfeo nel sen di lei, per cui gi tanto per queste selve ha sospirato, e pianto .Dunque, in s lieto e fortunato giorno

    Tocata

    la mSiCaDesde mi amado Parnaso a vosotros vengo, nclitos hroes, noble sangre de reyes, de quienes la Fama narra excelsas virtudes, nunca lo suficientemente loadas como merecen .

    Yo soy la Msica, que con dulces acentoss apaciguar los turbados corazones,de noble ira y de amor puedoinflamar los espritus ms glidos .

    Al son de mi citara doradasuelo adular los mortales odosy de esta guisa su sonora armonacual celestial lira el alma estimulo .

    Ms es de Orfeo de quien deseo hablaros, de Orfeo, que hechiz las fieras con su cantoy persuadi al infierno con sus preces,gloria inmortal de Pindo y Helicn .

    Ahora, mientras alterno mis cantos alegres o tristes, no se mueva pjaro alguno en la rama,ningn rumor de ola suene en estas riberas y que detenga su soplo la brisa .

    PaSTorEn este feliz y afortunado daque ha puesto fin a los amorosos afanesde nuestro semidis, cantemos, pastores, con acentos tan suaves que sean dignas de Orfeo nuestras cadencias . Hoy se ha vuelto piadosael alma de la bella Euridiceque antes era desdeosa .Hoy es feliz Orfeo por sentirseacogido en el pecho de aquella por la que tanto gimi y suspir en estos bosques .As pues, en este feliz y afortunado da . . .

    orFeo 33

  • TeaTro VillamarTa 34

    Coro NiNFe, PaSToriVieni, Imeneo, deh, vienie la tua face ardentesia quasi un sol nascentechapporti questi amanti i d serenie lunge homai disgombrede gli affanni e del duol gli orrori e lombre .

    NiNFaMuse, honor di Parnaso, amor del cielo,gentil conforto a sconsolato core,vostre cetre sonoresquarcino dogni nubil fosco velo;e mentre oggi propizio al nostro Orfeo invochiamo Imeneo,su ben teamprate cordesia il vostro canto al nostro suon concorde .

    NiNFe, PaSToriLasciate i monti, lasciate i fonti,ninfe vezzose e liete,e in questi pratia i balli usativago il bel pi rendete . Qui miri il solevostre carolepi vaghe assai di quelle,onda la lunala notte bruna danzano in ciel le stelle .Poi, di bei fiori per voi sonori,di questi amanti il crine,chor dei martiridei lor desirigodon beati al fine .

    Primo PaSTore Ma tu, gentil cantor, satuoi lamentigi festi lagrimar queste campagne,perchora al suon de la famosa cetra non fai teco gioir le valli e i poggi?

    Coro De NiNFaS Y PaSToreSVen, Himeneo, ven,y que tu antorcha ardiente sea como un sol naciente, aporte a estos amantes das serenos y aleje para siemprelos afanes y los dolores del horror y la sombra .

    NiNFaMusas, honor del Parnaso, amor del cielo,grato alivio de un corazn desconsolado,que vuestras liras sonorasdespojen a las nubes de su oscuro veloy mientras hoy invocamos a Himeneo,para que sea propicio a nuestro Orfeo,sea vuestro canto bien timbradoacorde a nuestra armona .

    NiNFaS, PaSToreSDejad los montes, dejad las fuentes,hermosas ninfas alegres y en estos pradosa las rituales danzas ofreced vuestros hermosos pies .Que el sol contemplevuestras carolas ms placenteras que aquellas que alrededor de la luna en la noche oscuradanzan en el cielo las estrellas .Luego, con hermosas floresse adornan, para vosotras,los cabellos de estos amantes que de los martiriosde sus deseosgozan candorosos al fin .

    Primer PaSTorPero t, gentil cantor, si con tus lamentosya hiciste llorar a estos campos,por qu no haces gozar ahora a estos valles y colinas al son de tu famosa lira?

  • orFeo 35

    Sia testimon del corequalche lieta canzon che detti amore .

    orFeoRosa del ciel, vita del giorno, e degna prole di lui che luniverso affrena,sol, chel tutto circondi el tutto miri,dagli stellati giri, dimmi, vedesti mai di me pi lieto e fortunato amante?Fu ben felice il giorno,mio ben, che pria ti vidi,e pi felice lhorache per te sospirai,poi chal mio sospirar tu sospirasti .Felicissimo il puntoche la candida manopegno di pura fede me porgesti .Se tanti cori avessiquantocchil ciel eterno, e quante chiome han questi colli ameni il verde maggio,tutti colmi sarieno e traboccanti di quel piacere choggi mi f contento .

    eUriDiCeIo non dir qual sia nel tuo gioir, Orfeo, la gioia mia,ch non ho meco il core, ma teco stassi, in compagnia damore .Chiedilo dunque a lui sintender brami quanto lieta i gioisca, e quanto tami .

    NiNFe, PaSTori Lasciate i monti, lasciate i fonti,ninfe vezzose e liete, ecc

    PaSTore SeCoNDoMa sil nostro gioir dal ciel deriva,come dal ciel ci che qu gi nincontra,giust ben che divotigloffriam incensi e voti .Dunque al tempio ciascun rivolga i passi

    Mustranos tu corazncon alguna cancin alegre dictada por el amor .

    orFeoRosa del cielo, fuente de vida, digno descendiente del que rige el universo,sol que todo circundas y todo lo vesen tu sideral rotacin, dime, has visto alguna vez un amante ms alegre y afortunado que yo?Muy feliz fue el da, mi bien, que te vi por vez primeray ms feliz an la hora en que por ti suspir, porque fueron mutuos nuestros anhelos .Felicsimo el instanteen que me tendiste tu candorosa manocomo prenda de la pureza de tu fe .Si tuviese tantos corazones como ojos tiene el cielo eterno o tanta frondosidad como esas agradables colinas en el florido mayo,todos habran sido colmados y desbordados por aquel placer que an hoy me inunda .

    eUrDiCeYo no sabra expresar, Orfeo, la alegra que me produce tu felicidad, pues mi corazn me ha abandonado, para quedarse contigo en compaa del amor .Pregntale a l, pues, si quieres saber lo feliz que es y cunto te ama .

    NiNFaS, PaSToreSDejad los montes, dejad las fuentes,hermosas ninfas alegres, etc

    SeGUNDo PaSTorPero si nuestra felicidad proviene del cielo, al igual que todo lo que aqu encontramos, es bien justo que, devotos, le ofrezcamos incienso y votos .Dirijamos, pues, nuestros pasos al templo,

  • TeaTro VillamarTa 36

    a pregar lui ne la cui destra il mondo,che lungamente il nostro ben conservi .

    PaSTori Alcun non sia che disperato in preda si doni al duol, bench talor nassagliapossente s che la nostra vita inforsa .

    NiNFe, PaSToriChe, poi che nembo rio gravido il senodatra tempesta inorridito h il mondo,dispiega il sol pi chiaro i rai lucenti .

    PaSToriE dopo laspro gel del verno ignudoveste di fior la primavera i campi .

    NiNFe, PaSToriEcco Orfeo, cui pur dianzi furon cibo i sospir, bevanda il pianto,oggi felice tantoche nulla pi che da bramar gli avanzi .

    a rogar al que rige el mundo en su diestra,para que conserve nuestro bien largo tiempo .

    PaSToreSQue ninguno presa de la desesperacin se entregue al dolor, aunque a veces nos asaltepoderosamente y condicione nuestra vida .

    NiNFa, PaSToreSPues, tras una temible nube, cargada en su interior por la tempestad que aterra al mundo, surge el sol ms reluciente con luminosos rayos .

    PaSToreSY tras el spero hielo del desnudo invierno,viste la primavera los campos de flores .

    NiNFaS, PaSToreSMirad a Orfeo, para quien antes los suspiros fueron su alimento y el llantola bebida, es hoy tan felizque no existe nada que pueda desear .

  • orFeo 37

    Sinfona

    orFeoAs pues a vosotros vuelvo, queridos bosques y amadas colinasbendecidos por el solque mis noches convierte en das .

    Primer PaSTorMira como nos atrae, Orfeo, la sombra de aquellas hayas ahora que con sus abrasadores rayosnos asaetea Febo desde el cielo .

    SeGUNDo PaSTorDescansemos sobre el herbaje de esta orilla y en su diversidad que cada uno propague su voz al murmullo de las aguas .

    DoS PaSToreSEn este florido pradolas divinidades del bosque frecuentemente acuden para disfrutar de este paraje .

    A veces a Pan, dios de los pastores,aqu se le oy dolienterememorar dulcementesus desventurados amores .

    Aqu a las graciosas Napeas siempre en comitiva florida,con sus cndidas manitasrecogiendo rosas fueron vistas .

    NiNFaS, PaSToreSHaznos, pues, dignos, Orfeo,del sonido de tu lira .estos campos, donde se respiraun aire de olor sabeo .

    Sinfonia

    orFeoEcco pur ch voi ritornocare selve e piaggie amate,da quel sol fatte beateper cui sol mie notthan giorno .

    Primo PaSToreMira, ch se nallettalombra, Orfeo, de quei faggi,hor che infocati raggiFebo dal ciel saetta .

    PaSTore SeCoNDo Su quellerbose sponde posiamci, e in varii modiciascun sua voce snodial mormorio de londe .

    DUe PaSTori In questo prato adornoogni selvaggio Numesovente h per costumedi far lieto soggiorno .

    Qu Pan, Dio depastori,sud talor dolenterimembrar dolcementesuoi sventurati amori .

    Qui le Napee vezzose,schiera sempre fiorita,con le candide ditafur viste coglier rose .

    NiNFe, PaSToriDunque fadegni, Orfeo,del suon de la tua lira .questi campi, ove spiraaura dodor sabeo .

    aTTo SeCoNDo / SeGUNDo aCTo

  • TeaTro VillamarTa 38

    orFeoVi ricorda boschi ombrosi,demiei lunghi aspri tormenti,quando i sassi ai miei lamentirispondean fatti pietosi ?

    Dite, allor non vi sembraipi dogni altro sconsolato?Or fortuna h stil cangiatoed h volti in festa i guai .

    Vissi gi mesto e dolente,or gioisco e quegli affanniche sofferti ho per tantannifan pi caro il ben presente .

    Sol per te, bella Euridice,benedico il mio tormento:dopol duol vie pi contento, dopol mal vie pi felice .

    PaSToreMira, deh mira, Orfeo, che dogni intornoride il bosco e ride il prato,segui pur col plettrauratodaddolcir laria in s beato giorno .

    meSSaGGieraAhi, caso acerbo, ahi fatempio e crudele!Ahi, stelle ingiuriose, ahi, ciel avaro!

    PaSToreQual suon dolente il lieto d perturba?

    meSSaGGieraLassa, dunque debbio,mentre Orfeo con sue note il ciel consola,con parole mie passargli il cuore?

    PaSToreQuesta Silvia gentile, dolcissima compagnade la bella Euridice, quanto in vista dolorosa! Or che fia? deh sommi Dei,non torcete da noi benigno il guardo .

    orFeoRecordis, bosques sombros, mis largos y bruscos tormentos, cuando las piedras, apiadndose, respondan a mis lamentos?

    Decid, no os parec entonces, ms que ningn otro, desconsolado?Ahora la suerte ha cambiadoy ha convertido en fiesta los clamores .

    Antes viv triste y doliente,ahora disfruto y aquellos daosque padec durante aos,hacen ms querido el bien presente .

    Slo por ti bella Euridice, bendigo mi tormento,tras el dolor llega el contento, tras el mal llegan ratos felices .

    PaSTorMira y fjate Orfeo, como en el entornosonren los bosques y el prado,sigue con el plectro doradodulcificando el aire de este da dichoso

    la meNSaJeraAh, suceso funesto, sino implacable y cruel!Ah, fatales estrellas, mezquino cielo!

    PaSTorQu triste sonido perturba este alegre da?

    la meNSaJeraDesdichada de m, debo herir el coraznde Orfeo con mis palabras, mientras lreconforta al cielo con sus cnticos?

    PaSTorEs la afectuosa Silvia, dulce compaera de la bella Euridice, oh, cuan afligida se te ve! Qu sucede? Ah, dioses supremos, no apartis de nosotros vuestra protectora mirada .

  • orFeo 39

    meSSaGGieraPastor lasciate il canto,chogni nostra allegrezza in doglia volta .

    orFeoDonde vieni? Ove vai?Ninfa, che porti?

    meSSaGGieraA te vengo Orfeo, messagiera infelicedi caso pi infelice e pi funesto .La bella Euridice . . .

    orFeoOim, che odo?

    meSSaGGieraLa tua diletta sposa morta .

    orFeoOim!

    meSSaGGieraIn un fiorito pratocon altre sue compagne,giva cogliendo fiori per farne una ghirlanda le sue chiome,quando angue insidioso,chera fra lerbe ascoso,le punse un pi con velenoso dente:ed ecco immantinente scolorirsi il bel viso, e nesuoi lumi sparir quelampi, ondella al sol fea scorno .Allor, noi tutte sbigottite e mestele fummo intorno richiamar tentando gli spirti in lei smarriticon londa fresca e copossenti carmi,ma nulla valse, ahi lassa!chella i languidi lumi alquanto aprendo,e t chiamando, Orfeo,dopo un grave sospiro,spir fr queste braccia, ed io rimasipieno il cor di pietade e di spavento .

    LA meNSaJeraPastor, que cese tu canto, nuestras alegras en duelo se han tornado .

    orFeoDe dnde vienes?Adnde vas?Ninfa, qu nuevas nos traes?

    LA meNSaJeraA ti vengo, Orfeo, como infeliz mensajeradel ms desventurado y funesto suceso .Tu bella Euridice . . .

    orFeoAy de mi, qu oigo?

    LA meNSaJeraTu bienamada esposa ha muerto .

    orFeoAy de mi!

    LA meNSaJeraEn un prado florido, con sus otras compaeras, iba cogiendo florespara hacer en sus cabellos una diadema,cuando una prfida serpiente, que entre la hierba se ocultaba,le mordi el pie con sus venenosos dientes,y he aqu que al instante, palideci su hermoso rostro y de sus ojos se extingui el brillo que hasta el sol envidiaba . Entonces, nosotras, afligidas y turbadasacudimos a ella intentado devolverle la conciencia perdidacon agua fresca y efusivos conjuros,pero todo fue en vano,ay desgraciada!,pues abriendo sus lnguidos ojos y llamndote, Orfeo,tras un profundo suspiro, expir en mis brazos, y qued yocon el corazn lleno de piedad y de espanto .

  • TeaTro VillamarTa 40

    Primo PaSToreAhi, caso acerbo, ahi, fatempio e crudele,ahi, stelle ingiuriose, ahi, ciel avaro!

    PaSTore SeCoNDo A lamara novellarassembra linfelice un muto sasso,che per troppo dolor non pu dolersi .Ahi, ben avrebbe un cor di Tigre o dorsa chi non sentisse del tuo mal pietate,privo dogni tuo ben misero amante!

    orFeoTu semorta, mia vita, ed io respiro?tu sei da me partitaper mai pi non tornare, ed io rimango?No, che se i versi alcuna cosa ponno,nandr sicuro api profondi abissi,e, intenerito il cor del Re de lombre,meco trarrtti a riveder le stelle .O se ci negherammi empio destino,rimarr teco, in compagnia di morte,Addio terra, addio cielo e sole, addio .

    NiNFe, PaSToriAhi, caso acerbo, ahi fatempio e crudele,ahi, stelle ingiuriose, ahi, ciel avaro!Non si fidi uom mortaledi ben caduco e frale,che tosto fugge, e spessoa gran salita il precipizio presso .

    meSSaGGieraMa io chin questa linguah portato il coltellochha svenata dOrfeo lanima amante,odiosa i pastori et alle Ninfe,odiosa me stessa, ove mascondo?Nottola infaustail sole fuggir sempre ,e in solitario specomener vita al mio dolor conforme .

    Primer PaSTorAh, desgraciado suceso, sino impo y cruel,fatales estrellas, mezquino cielo!

    SeGUNDo PaSTorCon esta amarga noticiael infeliz parece una piedra muda, tanto es su dolor que no puede ni quejarse .Ay, tendra el corazn de tigre o de osa quien no sintiese piedad de tus penas, privado como has sido de tu bien, amante desgraciado .

    orFeoTu ests muerta, vida ma, y yo respiro?te has ido y me has dejado para no volver jams, y aqu permanezco?No . Si mis versos algo pueden, seguro descender a los ms profundos abismos para conmover el corazn del rey de las sombras, volvers conmigo a ver de nuevo las estrellas .Y si esto me negara el cruel destino, permanecer contigo en compaa de la muerte . Adis tierra, adis sol y cielo, adis .

    NiNFaS, PaSToreSAh, desgraciado suceso, sino impo y cruel,fatales estrellas, mezquino cielo!No confes hombre mortalen el bien efmero y frgilque pronto huye, pues, a menudo,junto a la alta cima est el precipicio .

    la meNSaJeraY yo, que en esta lengua he traido la daga que ha herido el amante corazn de Orfeo,odiosa ser a los pastores y a las ninfas,odiosa para m misma, dnde me oculto?Como funesta rapaz nocturna huir siempre del soly en un antro solitario,llevar una vida acorde con mi dolor .

  • orFeo 41

    PaSToreSQuien nos consolar, ay, desdichados?Quin, por ventura, concedera nuestros ojos una fuente viva,para poder llorar como convieneen este da de afliccin, antes tan alegre y ahora tan triste?Hoy un torbellino cruel las dos luminarias mayoresde nuestros bosques, Euridice y Orfeo, una, mordida por la serpiente,el otro, traspasado por el dolor,desdichadamente ha apagado .

    NiNFaS, PaSToreSAh, desgraciado suceso, sino impo y cruel,fatales estrellas, mezquino cielo!

    PaSToreSPero dnde, donde estn ahora los hermosos y glidos miembrosde la infortunada ninfa?Donde la digna moradaque la noble alma eligiy que hoy nos abandon en la flor de la vida?Vayamos, pastores, vayamos piadosamente a su encuentroy con lgrimas amargasrindamos a su cuerpo exnime,nuestro debido tributo .

    NiNFaS, PaSToreSAh, desgraciado suceso, sino impo y cruel,fatales estrellas, mezquino cielo!

    PaSToriChi ne consola, ahi lassi?O pur, chi ne concedeneglocchi un vivo fonteda poter lagrimar come conviensiin questo mesto giorno,quanto pi lieto tanthor pi mesto?Oggi turbo crudelei due lumi maggioridi queste nostre selve,Euridice e Orfeo,luna punta da langue,laltro dal duol trafitto,ah, lassi, ha spenti .

    NiNFe, PaSToriAhi caso acerbo, ahi fato empio e crudele,ah stelle ingiuriose, ah cielo avaro!

    PaSToriMa dove, ah dove hor sonode la misera ninfale belle e fredde membradove suo degno albergo quelle bellalma elessechoggi partita in sul fiorir degiorni?Andiam pastori, andiamopietosi ritrovarle,e di lagrime amareil dovuto tributoper noi si paghi, almeno al corpo esangue .

    NiNFe, PaSToriAhi caso acerbo, ahi fato empio e crudele,ah stelle ingiuriose, ah cielo avaro!

  • Caronte cruzando la Laguna

    Estigia, leo sobre tabla del

    pintor flamenco Joachim Patinir

    (hacia1480-1524). museo de

    el Prado.

  • Sinfona

    orFeoAmparado por ti, mi diosaEsperanza, nico biende los afligidos mortales,al fin he llegadoa este reino tenebroso y tristeque rayo de sol jams ilumin . Tu, mi compaera y gua,por estas extraas y desconocidas sendastutelaste mis dbiles y vacilantes pasos, por lo que hoy an esperovolver a ver sus benditos ojosque solo a los mos dan vida .

    la eSPeraNzaEsta es la laguna, he aqu el barquero que los desnudos espritus a la otra orilla porta, donde rige Plutn su vasto imperio de sombras . Tras el negro cenagal, ms all del ro,en esos campos de llanto y de dolor,el destino cruel esconde tu bien ms querido .Precisas ahora gran corazn y hermoso canto .Yo que hasta aqu te he conducido, no puedo continuar contigo, severa ley me lo prohbe .Ley grabada con hierro sobre la dura piedraen el terrible umbral del reino del abismo, que con estas palabras su fiero sentido expresa:Abandonad toda esperanza los que entris .Entonces, si ests decidido de corazn a poner el pie en la ciudad doliente,de ti me despido para volver a mi usual morada .

    orFeoAdnde, adnde vas, nico y dulce consuelo de mi corazn?Porqu cuando se avista el puerto,tras el largo camino recorrido,te vas y me abandonas, ay infeliz,en este peligroso trance?Que otro bien me resta si huyes de mi, dulcsima Esperanza?

    Sinfonia

    orFeoScorto da te, mio numeSperanza, unico bene deglafflitti mortali,omai son giuntoa questi regni tenebrosi e mesti ove raggio di sol giamai non giunse .T, mia compagna e duce,in cos strane e sconosciute viereggesti il passo debile e tremante,ondoggi ancor sperodi riveder quelle beate luciche sola gli occhi miei portano il giorno .

    SPeraNzaEcco latra palude, ecco il nocchieroche trae lignudi spirti a laltra sponda,dove h Pluton de lombre il vasto impero .Oltre quel nero stagnoltre quel fiume,in quei campi di pianto e di dolore,destin crudele ogni tuo ben tasconde .Or duopo e dun gran core e dun bel canto .Io fin qui tho condotto, or pi non liceteco venir ch amara legge il vieta .Legge scritta col ferro in duro sasso de lima reggia in su lorribil soglia,che in queste note il fiero senso esprime:Lasciate ogni speranza o voi chentrate .Dunque, se stabilito hai pur nel coredi porre il pi ne la citt dolente,da te me nfuggo e torno a lusato soggiorno .

    orFeoDove, ah dove ten vai,unico del mio cor dolce conforto?Poich non lunge omaidel mio lungo cammin si scopre il porto,perch ti parti e m abbandoni, ahi lasso,sul periglioso passo?Qual bene or pi mavanzase fuggi t, dolcissima Speranza?

    aTTo Terzo / TerCer aCTo

    43orFeo

  • TeaTro VillamarTa 44

    CaroNTeO tu chinnanzi morte a queste rivetemerato ten vieni, arresta i passi!Solcar questonde ad uom mortal non dassi,n pu comorti albergo aver chi vive .Che? Vuoi forse, nemico al mio signore,Cerbero trar de le tartaree porte?O rapir brami sua cara consortedimpudico desire acceso il core?Pon freno al follardir, chentral mio legno non accorr pi mai corporea salma,s degli antichi oltaggi ancora en lalma serbo acerba memoria e giusto sdegno .

    orFeoPossente spirto e formidabil nume,senza cui far passaggio laltra riva alma da corpo sciolta in van presume .

    Non vivo io, no, che poi di vita privamia cara sposa, il cor non pi meccoe senza cor comesser pu chio viva?

    A lei voltho il camin per laer cieco, a lInferno non gi, chovunque stassitanta bellezza, il Paradiso h seco .

    Orfeo son io, che dEuridice i passi segue per queste tenebrose arene,ove gi mai per uom mortal non vassi .

    O de le luci mie luci serenesun vostro sguardo pu tornarmi in vita, ahi, chi nega il conforto le mie pene?Sol tu, nobile Dio, puoi darmi aita,n temer dei, ch sopra unaurea cetrasol di corde soavi armo le ditacontra cui rigida alma invan simpetra .

    CaroNTeBen mi lusigna alquantodilettandomi il core,sconsolato cantore,il tuo pianto el tuo canto .

    CaroNTeO tu, que antes de morir te acercas, temerario, a estas orillas detn tus pasos!Surcar estas olas a los mortales permitidono est, ni habitar puede entre los muertosel que vive . Acaso pretendes, enemigo de miseor, a Cerbero alejar de las tartreas puertas? O los impdicos deseos de tu coraznte incitan raptar a su querida esposa?Frena tu alocada audacia, pues en mi barcajams sub ningn alma viviente, pues an conservo en el alma amarga memoriay justa clera por antiguos agravios .

    orFeoPoderoso espritu y temible divinidad,sin cuya venia pasar a la otra orillaalma liberada de su cuerpo en vano pretende .

    Yo no vivo, no, desde que privada de vidafue mi amada esposa y si mi coraznme ha abandonado como puede ser que viva?

    Hacia ella me dirig a travs de las tinieblas,y no hacia el infierno, que all donde ella estse torna paraso, pues tanta es su belleza .

    Yo soy Orfeo, que de Euridice los pasos sigue por estas tenebrosas arenasque jams ningn mortal hollara . Oh, serena luz de mis ojossi vuestra mirada puede devolverme la vida ah quien negara consuelo a mis penas?Solo tu, noble dios, puedes ayudarme,temor no tengas, pues solo con una lira doradade suaves cuerdas armo mi mano,contra la que en vano se resiste rigurosa alma .

    CaroNTeBien me agradasalegrndome el corazn,desconsolado cantor,con tu llanto y con tu canto .

  • orFeo 45

    Ma lunge, ah, lunge sia da questo petto piet, di mio valor non degno affetto .

    orFeoAhi, sventurato amante!Sperar dunque non licechodan miei prieghi i cittadin dAverno?Onde qual ombra errantedinsepolto cadavero infelice,privo sar del cielo e de lInferno?Cos vuol empia sorte, chin questi orrori di morte da te, mio cor lontano,chiami tuo nome in vano, e pregando e piangendo io mi consumi?Rendetemi il mio ben, tartarei Numi .

    Ei dorme, e la mia cetra,se piet non impetra ne lindurato core, almen il sonnofuggir al mio cantar gli occhi non ponno .S dunque a che pi tardo?Tempo ben dapprodar s laltra sponda,salcun non chil nieghi,vaglia lardir se foran vani i preghi . vago fior del tempo loccasion, chesser dee colta a tempo .Mentre versan questocchi amari fiumirendetemi il mio ben, tartarei Numi .

    SPiriTi iNFerNaliNulla impresa per uom si tenta in vano,n contra lui pi s natura armarse .Ei del instabil piano argli ondosi campi, el seme sparsedi sue fatiche, ondaurea messe accolse .Quinci perch memoriavivesse di sua gloria,La Fama dir di lui sua lingua sciolse,che pose freno al mar col fragil legno, che sprezz dAustro e dAquilon lo sdegno .

    Pero lejos, lejos est de mi pecho la piedad, de mi valor es indigno ese sentimiento .

    orFeoAy, desgraciado amante!Entonces, los que moran en el Avernoque oigan mis suplicas, esperar no puedo?Cul sombra errante de un infeliz cadver insepulto,privado ser del cielo y del infierno?Quiere as impa suerteque en este horror de muerte lejos de ti, mi bien amado, invoque tu nombre en vano y me consuma en plegarias y llantos?Devolvedme mi bienamada, tartreas deidades

    Duerme y si mi lirapiedad no despierta en el corazn endurecido, al menos mi cantoharn que sus ojos no puedan resistirse al sueo .Sea pues, A qu esperar?Tiempo es de alcanzar la otra orilla,si no hay nadie que me lo impida,valga el valor donde las plegarias fueron vanas .La ocasin es flor del tiempoque debe ser recogida en su momento . Mientras derraman estos ojos amargas lgrimasDevolvedme mi bienamada, tartreas deidades

    eSPriTUS Del iNFierNoNinguna empresa intenta el hombre en vano,la naturaleza no sabe contra l armarse .Labr l el inestable llanode los ondulados campos y esparci la semillade sus fatigas, para recoger sus doradas miesesLuego, para que memoria quedase de su gloria, la Fama hablando de l solt su lengua, que domin los mares con frgil esquife, despreciando la ira de Austro y Aquiln .

  • Orfeo y Euridice. Cuadro pintado

    en 1806 por G. kratzenstein-Stub

    (1793-1860). NY Carlsberg Glyp-

    totek, Copenhague, Dinamarca.

  • ProSerPiNaSignor, quellinfelice,che per queste di morte ampie campagne va chiamandEuridice,chudithai t pur dianzicos soavemente lamentarsi,mossho tanta piet dentral mio core chio torno unaltra volta porger prieghiperchil tuo Nume al suo pregar si pieghi .Deh, se da queste luciamorosa dolcezza unqua traestise ti piacque il seren di questa fronteche t chiami tuo cielo, onde mi giuri,di non invidiar sua sorte Giove,pregoti, per quel foco,con cui gi la grandalma Amor taccese,fa chEuridice tornia goder di quei giorniche trar solea vivendin feste e in canto,e del miserOrfeo consolal pianto .

    PlUToNeBench severo ed immutabil fatocontrasti, amata sposa, i tuoi desiri,pur nullomai si nieghia tal belt congiunta a tanti preghi .La sua cara Euridicecontra lordin fatale Orfeo ricovri .Ma pria che tragga il pi da questi abissi non mai valga ver lei gli avidi lumi,che di perdita eterna gli fia certa cagione un solo sguardo .Io cos stabilisco . Or nel mio regnofate ministri il mio voler palese,s che lintenda Orfeoe lintenda Euridicen di cangiarlo altrui sperar pi lice .

    SPiriTi iNFerNaliO, degli abitator de lombre eterne possente re, legge ne fia tuo cenno,che ricercaraltre cagioni internedi tuo voler nostri pensier non denno .

    ProSerPiNaSeor, este desdichado,que por estos vastos dominios de muertellamando va a Euridiceal que acabas de ortan dulcemente lamentarse,despert tanta piedad en mi corazn que vuelvo una vez ms para implorarteque tu deidad atienda sus plegarias . Si alguna vez estos ojoste inspiraron la dulzura del amor, si te agrada la serenidad de mi frente a la que llamas tu cielo, por la que me jurasno envidiar la suerte de Jpiter, yo te imploro, por esta llamaque antao en tu gran alma encendi Amor, haz que Euridice vuelva a gozar de aquellos dasque sola vivir entre fiestas y cantosy consuela el llanto del infeliz Orfeo

    PlUTNAunque un suceso inmutable y severo se opone, amada esposa, a tus deseos,que nada le sea negadoa tanta belleza unida a tantos ruegos .Que Orfeo, a pesar del orden fatal,recupere a su amada Euridice .Pero mientras sus pies pisen estos abismosno deber dirigir hacia ella sus vidos ojos,pues una sola mirada le condenaraa perderla para siempre . As lo dispongo Y ahora, ministros, difundid mi decisin por mi reino,para que la conozca Orfeoy para que la conozca Euridice y que nadie espere cambiarla .

    eSPriTUS Del iNFierNoOh, poderoso rey de los moradores de las sombras eternas, ley ha de ser tu mandato, pues buscar otras razones ocultasa tu deseo no debe nuestro pensamiento

    aTTo QUarTo / CUarTo aCTo

    orFeo 47

  • TeaTro VillamarTa 48

    Trarr di questorribili caverne sua sposa Orfeo, sadoprer suo ingegno,s che nol vinca giovanil desio, ne i gravi imperi suoi sparga doblio?

    ProSerPiNaQuali grazie ti rendoor che s nobil donoconcedi aprieghi miei signor cortese?Sia benedetto il d che pria ti piacqui,benedetta la preda el dolce inganno,poich per mia venturafeci acquisto di te perdendo il sole .

    PlUToNeTue soavi parole damor lantica piagarinfrescan nel mio core .Cos lalma tua non sia pi vagadi celeste diletto,si chabbandoni il marital tuo letto .

    SPiriTi iNFerNaliPietate oggi ed amoretrionfan ne lInferno .Ecco il gentil cantore,che sua sposa conduce al ciel superno .

    orFeoQual honor di te fia degno,mia cetra onnipotente,shai nel tartareo regnopiegar potuto ognindurata mente?

    Luogo avrai fra le pi belleimmagini celesti,ondal tuo suon le stelledanzeranno in giri or tardi or presti .

    Io per te felice pieno,vedr lamato volto,e nel candido senode la mia donna oggi sar raccolto .

    Rescatar Orfeo a su esposa de estas horribles cavernas? estimular su ingenio para que no le venza el deseo juvenilque le haga olvidar el implacable mandato?

    ProSerPiNaCmo podr agradecertemi noble seor, el que en respuesta a mis splicas me hayas concedido tan generoso don!Bendito sea el primer da que te agrad, Bendito sea el rapto y el dulce engao,pues para mi felicidad te gan an perdiendo el sol .

    PlUTNTus suaves palabrasreviven en mi coraznla antigua herida del amor . Que tu alma no vuelva a anhelar celestiales placeresque te hagan abandonar el lecho conyugal .

    eSPriTUS Del iNFierNoHoy, piedad y amortriunfan en el infierno .He aqu al noble cantorque a su esposa conduce al cielo supremo .

    orFeoQu honor de ti a de ser digno,mi omnipotente lira, si en el tartreo reino,has podido doblegar al ms rgido juicio?

    Luego encontrars entre las ms bellas imgenes celestes,acompasadas danzando las estrellas al ritmo de tus sones .

    Yo, gracias a ti, rebosante de gozo,ver el rostro amado y sobre el cndido regazo de mi esposa hoy ser estrechado .

  • orFeo 49

    Ma mentre io canto, ohim,chi massicura chella mi segua?Ohim, chi mi nascondede lamate pupille il dolce lume?Forse dinvidia punte le deit dAverno,perchio non sia quaggi felice pienomi tolgono il mirarvi,luci beate e liete,che sol col guardo altrui bear potete?

    Ma che temi, mio core?Ci che vieta Pluton comanda Amore .A nume pi possente,che vince uomini e dei,ben ubbidir devrei .

    (Qu si fa strepito dietro alla scena)

    Ma che odo? Ohim lasso .Sarman forse amiei dannicon tal furor le furie innamorateper rapirmi il mio ben, ed io consento?

    O dolcissimi lumi, io pur vi veggio,io pur ma qual eclissi, ohim, voscura ?

    UN SPiriTURotthai la legge, e sedi grazia indegno .

    eUriDiCeAhi, vista troppo dolce e troppo amara .Cos per troppo amor dunque mi perdi?Et io misera perdoil poter pi goderee di luce e di vita, e perdo insiemet dogni ben mio pi caro, mio consorte .

    SPiriTi iNFerNaliTorna a lombre di morteinfelice Euridice,n pi sperar di riveder le stelle chomai fa sordo aprieghi tuoi lInferno .

    Pero mientras canto, ay de mi,quien me asegura que ella me sigue? Ay de mi quin me ocultael dulce resplandor de sus amadas pupilas?Quizs, pinchados por la envidia, las divinidades del Averno,para que no sea yo pleno de dicha en esta sima me impiden contemplaros, ojos benditos y fascinantes que solo con la mirada pueden embelesar a cualquiera .

    Pero qu temes, corazn mo?Lo que prohbe Plutn lo manda Amor .A divinidad tan poderosa,que vence a hombres y dioses, obedecer debo .

    (Se oye un estrpito fuera de escena)

    Pero qu oigo? Ay msero de mi . Obran quizs contra mi con tal rabia las Furias enamoradaspara arrebatarme mi bien, y yo lo consiento?

    Oh dulcsimos ojos, ya puedo veros, pero que eclipse, ay de mi, os oscurece?

    UN eSPriTUHas vulnerado la ley y no eres digno de gracia .

    eUrDiCeAy, qu visin tan dulce y tan amarga . Me pierdes, entonces, por amarme en exceso?Y yo, desgraciada, pierdoel no poder gozar ms de la luz y de la vida y te pierdo tambin a tique eres mi bien ms querido, esposo mo .

    eSPriTUS Del iNFierNoregresa a las sombras de la muerte,desgraciada Euridice, no esperes volver a ver las estrellas,pues el infierno no escuchar ms tus plegarias .

  • TeaTro VillamarTa 50

    orFeoDnde vas, vida ma? Aqu quedo y te sigopero, Quin me lo impide, ay de mi?Sueo o deliro?Qu fuerza oculta de estos horrores, de estos amados horrores, me arrastra a mi pesar, para conducirme a la luz que tanto detesto?

    eSPriTUS Del iNFierNoEs la virtud un rayode celestial belleza, cualidad del alma donde solo ella se aprecia .

    No teme esta el ultraje del tiempo,cuanto ms aos pasan mayor es su esplendor en el hombre . Orfeo venci al infierno y vencidofue luego por sus pasiones . Digno de eterna gloriasolo sea quien sobre si victoria logra .

    orFeoDove ten vai, mia vita? Ecco io ti seguo .Ma chi mel niega, ohim?Sogno o vaneggio?Qual oculto poter da questi orrori, da questi amati orrori,mal mio grado mi tragge e mi conduce a lodiosa luce?

    SPiriTi iNFerNaliEla virtute un raggiodi celeste bellezza,fregio dellalma ondella sol sapprezza .

    Questa di tempo oltraggionon teme, anzi maggiorene luom rendono gli anni il suo splendore

    Orfeo vinse lInferno, e vinto poi f da gli affetti suoi .Degno deterna gloriafia sol colui chavr di s vittoria .

  • orFeo 51

    aTTo QUiNTo / QUiNTo aCTo

    orFeoQuesti i campi di Tracia, e questo il loco dove passommil coreper lamara novella il mio dolore .Poi che non ho pi spemedi ricovrar pregando,piangendo e sospirandoil perduto mio bene,che poss io pi, se non volgermi voi, selve soavi, un tempo,conforto amiei martir, mentral ciel piacque,per farvi per piet meco languireal mio languire?Vuoi vi doleste, o monti, e lagrimaste,voi, sassi, al dispartir del nostro sole,ed io con voi lagrimer mai sempre,e mai sempre dorrmmi, ahi doglia, ah pianto!

    eCoAhi pianto .

    orFeoCortese Eco amorosache sconsolata sei,e consolar mi vuoi nedolor miei,bench queste mie lucisien gi per lagrimar fatte due fonti,in cos grave mia fiera sventuranon ho pianto per tanto che basti .

    eCoBasti .

    orFeoSe gl occhi dArgo avessi,e spandessero tutti un mar di pianto,non fora il duol conforme a tanti guai

    eCoGuai .

    orFeoEstos son los campos de Tracia,este es el sitio donde mi corazn por la amarga nueva fue traspasado de dolor .Y puesto que ya no tengo esperanzade recobrar implorando con llantos y suspirandola prdida de mi bien amada, qu otra cosa hacer puedo sino dirigirme a vosotros, suaves bosques, en otro tiempoconsuelo de mis tormentoscuando rogu al cieloque os apiadaseis de mi desconsuelo, de mi afliccin?Habis gemido, oh montes y lloradooh piedras, cuando nuestro sol parti, y con vosotros siempre llorar,siempre me lamentar, ay dolor,ay llanto .

    el eCoAy llanto!

    orFeoGentil eco amoroso, que desconsolado ests y consolarme quieres de mi dolor, aunque mis ojosen dos fuentes se hayan convertido, en esta profunda y terrible desventura,no he llorado lo bastante .

    el eCoBastante!

    orFeoSi los ojos de Argo tuvieray llenara todos los mares de lgrimas, no fuera el dolor semejante a tanta pena

    el eCoPena!

  • TeaTro VillamarTa 52

    orFeoShai del mio mal pietadeio ti ringrazio di tua benignitate .Ma mentrio mi querelo,deh, perch mi rispondisol con glultimi accenti?Rendimi tutti integri i miei lamenti . Ma tu, anima mia, se mai ritornala tua fredombra a queste amiche piagge, prendi hor da me queste tue lodi estreme, ch hor a te sacro la mia cetra el canto .Come a te gi sopra laltar del corelo spirto acceso in sacrifizio offersi .Tu bella fusti e saggia, e in te ripose tutte le grazie sue cortese il cielo,mentre ad ogni altra de suoi don fu scarso .Dogni lingua ogni lode te conviensi chalbergasti in bel corpo alma pi bella,fastosa men, quanto dhonor pi degna .Or laltre donne son superbe e perfidever chi le adora, dispietate instabili,prive di senno e dogni pensier nobile,onde a ragion opra di lor non lodansi,quinci non fia giamai che per vil feminaAmor con aureo stral il cor trafiggami .

    Sinfonia

    aPollo(descende en una nuvola cantando)Percha lo sdegno ad al dolor in predacos ti doni, o figlio?Non consigliodi generoso pettoservir al proprio affetto .Quinci, biasmo e perigliogi sovrastarti veggio,onde movo del ciel per darti aita:or tu mascolta, e navrai lode e vita .

    orFeoPadre cortese, al maggior uopo arrivi,cha disperato finecon estremo doloremavean condotto gi sdeged amore .

    orFeoSi tienes piedad de mi sufrimiento,yo te agradezco tu bondad . Pero mientras yo me debato, por qu solo me respondescon mis ltimos fonemas?Devulveme cumplidamente mis lamentos .Pero t, alma ma, si jams retornaa estos conocidos parajes tu glida sombra recibe de m esta loa postrera, pues a ti consagro mi lira y mi trova .Como ya te ofrec en sacrificio mi esprituapasionado, sobre el altar del corazn .Sabia y bella fuiste, generosamente colmadapor todas las gracias del cielo,mientras con otras sus dones fueron escasos .Mereces que todos te prodiguen alabanzas, tu hermoso cuerpo alberg alma an ms bella,menos ostentosa cuanto de honor ms digna .Las otras mujeres son prfidas y soberbiascon quien las adora, despiadadas e inconstantes,carentes de juicio o nobles pensamientos, por lo que es justo que no se las alabe, por ello, por una vil fmina jams Amortraspasar con su dardo dorado mi corazn .

    Sinfona

    aPolo(desciende cantando en una nube)Porqu te entregas as a la clera y al dolor, hijo mi?No es propio de un corazn generososervir a su misma pasin .Cernirse veo sobre tipeligros y reproches,por ello he descendido del cielo en tu ayuda:ahora escchame y tendrs vida y honores .

    orFeoPadre generoso, en el momento oportuno llegas,pues a la desesperacinmotivada por mi dolor me haban conducido la clera y el amor .

  • orFeo 53

    Heme aqu, atento a tus consejos,padre celestial: ser como tu mandes .

    aPoloGozaste en demasade tu alegre venturay mucho ahora lloras tu suerte amarga y dura;An no sabesque aqu abajo nada bueno siempre dura?Luego, si anhelas gozar de la vida inmortalvente conmigo al cielo y all perduras .

    orFeoY no ver nunca mslos dulces rayos de mi amada Euridice?

    aPoloEn el sol y en las estrellasreconocers de su semblante la belleza .

    aPolo Y orFeo(ascienden al cielo cantando)Ascendamos al cielo cantando,donde hay virtud verdaderamerecido premio de felicidad y paz se espera .

    CoroVe Orfeo plenamente feliza gozar de los honores celestialesall donde el bien jams mengua,all donde nunca existe el dolor,mientras en los altares te ofrecemos devotosy contentos, incienso y nuestros votos .As responde quien no se arredraa la llamada de la deidad eterna,as gracia al cielo imploraquien aqu abajo conoci el infierno;quien a pesar de su dolor siembra,para recoger de su gracia el rendimiento .

    Morisca

    Fin de la pera

    Eccomi dunque attento atue ragioni,celeste padre: or ci che vuoi mimponi .

    aPolloTroppo gioistidi tua lieta venturaor troppo piagnitua sorte acerba e dura;ancor non saicome nulla qua gi diletta e dura?Dunque, se goder brami immortal vita,vientene meco al ciel, cha s