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EURÍPIDES HERACLES

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  • EURPIDES

    HERACLES

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    Eurpides H e r a c l e s

    HERACLES

    INTRODUCCIN

    1. Entre los aos 423-420 a. C., aproximadamente, se represent por vez primera en Atenas el Heracles.

    Eurpides haba tomado para esta obra algunos pasajes de la saga de Heracles, aunque trastoc la tradicin mtica en varios puntos y aadi temas, personajes y elementos nuevos. El argumento, a grandes rasgos, es como sigue: Lico se ha apoderado de Tebas aprovechando la disensin entre los tebanos y, tras derrocar a Creonte, pretende matar a la familia de Heracles Anfitrin, su padre; Mgara, su esposa, y sus tres hijos. Pero stos se han acogido al asilo de los altares y se mantienen a la espera de que vuelva Heracles.

    Cuando han perdido toda esperanza y Lico va a prenderles fuego, aparece el hroe, que restablece el orden en Tebas; pero enloquece repentinamente por obra de Lisa, la furiosa locura, enviada de Hera, y mata a su esposa e hijos. Cuando vuelve en s del sueo que le ha producido Atenea, tras el mltiple parricidio, y decide suicidarse, aparece Teseo que, tras un largo dilogo con l, le convence de que desista de su propsito y le acompae a Atenas.

    De todo este conjunto, slo pertenece a la tradicin mtica, tal como la representan Apolodoro y Fetcides, etc., el hecho de la muerte1 de los hijos de Heracles, que est, incluso, enraizada en el culto2, y la serie de trabajos realizados por el hroe.

    Del resto del drama, no estn relacionados con la saga de Heracles ni el personaje de Lico (es un puro pretexto para resaltar la situacin de la familia del hroe) ni el de Teseo, al menos en este momento de la vida de Heracles. S es autntico, en cambio, el rescate de Teseo por Heracles del Hades, aunque no en todas las versiones.

    Por lo dems, Eurpides cambia el orden de los acontecimientos en la secuencia muerte-trabajos. Segn la tradicin ms extendida, Heracles realiz los trabajos tras matar a sus hijos y precisamente como expiacin, impuesta por el orculo de Delfos, por este crimen. Aqu, por el contrario, la muerte de los hijos y esposa es la culminacin trgica e inesperada de la brillante carrera del hroe. Esto lleva consigo tambin la presencia de Anfitrin en Tebas como desterrado, lo que no pertenece a la tradicin mtica. Precisamente su destierro se presenta aqu como causa de los trabajos.

    Finalmente, es casi seguro que tambin la intro duccin de Lisa es obra exclusiva de Eurpides, ya veremos por qu razn.

    Veamos ms de cerca cmo se estructura el contenido.

    2. Tradicionalmente se ha dividido este drama en cuatro EPISODIOS, con sendos Estsimos3 (aparte de Prlogo y xodo).

    El PRLOGO (1-137) es formalmente ms simple, menos elaborado que en obras posteriores (ej., Ion, Troyanas, Electra). Consta de una resis de Anfitrin, en la que ste presenta brevemente la situacin desastrosa de Heracles y su familia, as como las causas y antecedentes de esta situacin, seguida de un corto dilogo entre l mismo y Mgara. En ste se profundiza en la situacin angustiosa en que se encuentran, si bien las ltimas palabras de Anfitrin dejan abierta una puerta a

    1 Aunque segn otras ramas de la tradicin:

    a) Los hijos no fueron muertos por Heracles, sino por unos extranjeros (cf. PNDARO, Nemea 3.79 y sigs. y escolio). b) Mgara consigui escapar y cas con Yolao, sobrino y acompaante de Heracles, segn APOLODORO. 2 En su honor se celebraba la fiesta Iolea de Tebas.

    3 Recientemente K. AICHELE (en W. JENS, pgs. 45 y sigs.) lo ha distribuido en cinco episodios, dividiendo el cuarto

    en dos, vv. 815-873 para el cuarto y vv. 909-1015 para el quinto. El xodo comenzara, segn l, en el v. 1042 (dilogo lrico de Anfitrin con el coro).

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    Eurpides H e r a c l e s la esperanza (la desesperacin es de hombres cobardes). Sigue el canto de entrada del coro, en que ste se muestra tambin ligeramente confiado.

    El PRIMER EPISODIO (138-347) se inicia con un agn entre Anfitrin y el tirano Lico, con dos Tesis bien elaboradas. Lico justifica la decisin de matar a los nios basado en razones de mera prudencia poltica (no quiero dejar atrs vengadores). Adems, stos no pueden basar su defensa en la nobleza y hazaas de su padre: ste era un cobarde, dado que su arma era el arco, lo que le da pie para atacar esta arma extendiendo la disputa fuera del marco mismo de la obra.

    Anfitrin le contesta con otra resis bien estructurada en que defiende a Heracles de la acusacin de cobarde y elogia las excelencias del arco, para terminar apelando a los griegos que deban venir en su defensa y lamentando su incompetencia para defenderse.

    El agn termina con la decisin de Lico de acabar con la familia de Heracles prendindoles fuego. Tras una larga y poco corriente intervencin del corifeo (que amenaza a Lico, pero acaba reconociendo tambin su impotencia), hay una resis de Mgara en que sta incita a Anfitrin a morir con honor. En este dilogo tanto uno como otro desesperan ya del regreso de Heracles, y la intervencin final de Anfitrin es un insulto a Zeus, indigno padre del hroe, en quien ya ha perdido la fe. Mientras Mgara entra con los nios en el palacio para amortajarlos favor que ha conseguido de Lico, el Coro canta el

    PRIMER ESTSIMO (348-450), que de hecho constituye un canto funerario en que se enumeran los trabajos de Heracles.

    El SEGUNDO EPISODIO (451-636) consta formalmente de dos Tesis (Mgara y Anfitrin) y dos esticomitas (Heracles-Mgara y Heracles-Anfitrin).

    Mgara sale con los nios amortajados y, en un pattico monlogo (que encubre un autntico treno), recuerda las promesas que Heracles hizo a sus hijos, as como sus esfuerzos de madre de buscarles novias entre la realeza, para terminar invocando desesperadamente la aparicin de Heracles. Sigue una resis de Anfitrin en que suplica a Zeus, sin fe ya en l, y se resigna a morir invocando los cambios de la fortuna.

    En este momento, inesperadamente, aparece Heracles. Tras un breve dilogo de saludo, entabla con Mgara un dilogo esticomtico en que sta le pone al corriente de la situacin, terminando con una resis en que Heracles pierde los estribos y amenaza con inundar con la sangre de sus enemigos los dos ros de Tebas4.

    Se inicia ahora un dilogo de Heracles con Anfitrin, seguido tambin de esticomita informativa (que introduce el tema de Teseo, preparando as su aparicin posterior) y terminando, en estricto paralelismo con lo anterior, en una Tesis de Heracles invitando a su familia a entrar en el palacio.

    Emocionado por el regreso del hroe, el coro entona a continuacin el SEGUNDO ESTSIMO (636-700), canto de aoranza a la juventud en general y en concreto a la juventud de Heracles.

    El TERCER EPISODIO (701-733) es uno de los ms cortos de la tragedia griega. Consta simplemente de un breve dilogo entre Lico y Anfitrin, en que ste incita a aqul a que entre en el palacio. Cuando Lico cree que va a matar a la familia de Heracles, recibe la muerte a manos de ste, como omos durante el

    TERCER ESTSIMO (736-814), cuya primera estrofa consiste en un epirrema en que alternan el Corifeo-Lico (gritando su pro pia muerte) y el Coro. La segunda y tercera estrofas son un canto de triunfo y de accin de gracias a Zeus, lo que constituye un golpe maestro de irona trgica, dado que de repente aparecen en el

    CUARTO EPISODIO (815-1015) Iris y Lisa van a infundir la locura en Heracles. Formalmente se presenta este episodio como un segundo prlogo con dilogo entre Iris y Lisa que explican el objeto de su presencia, seguido de un dilogo lrico en docmios entre Anfitrin y el Coro, en que comentan, entre lamentos, la futura muerte de los nios y la ruina de la casa de Heracles. La tercera escena de este episodio es una escena de Mensajero (precedido de un epirrema entre Coro y Mensa-jero), en que ste informa sobre la locura del hroe y los asesinatos de su familia.

    El CUARTO ESTSIMO (1016-1087) tiene una estructura poco comn: tras un canto de

    4 Se ha visto en esta resis un intento, por parte de Eurpides, de suavizar la introduccin brusca de la locura de Heracles;

    segn esto, aqu Heracles dara muestras de los primeros sntomas de locura.

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    Eurpides H e r a c l e s lamentacin astrfico, en que el Coro compara este crimen con los ms clebres de la Mitologa griega (el de las Danaidas, el de Procne), se inicia un dilogo lrico entre Anfitrin y el Coro, que comentan el despertar de Heracles.

    El XODO (1088-1428), el ms largo de los dramas de Eurpides, consta de tres escenas. La primera es un dilogo, esticomtico en su mayor parte, entre Heracles (que vuelve en s) y Anfitrin, en el que ste revela a aqul el crimen que ha cometido. Cuando Heracles se da plena cuenta de lo que ha hecho, decide sucidarse. En este momento entra Teseo, que entabla dilogo (primero esticomtico y luego epirremtico) con Anfitrin, quien le informa de lo sucedido.

    El meollo del xodo lo constituye el agn entre Heracles y Teseo (formalmente tres resis Heracles-Teseo-Heracles precedidas y seguidas de esticomitas), en el que aqul muestra su deseo y razones para morir y ste trata de disuadirle. Por fin vence Teseo y le lleva consigo a Atenas.

    3. sta es otra de las obras que ms juicios negativos ha cosechado por parte de los crticos de Eurpides, especialmente en lo que se refiere a su estructura. En efecto, consta de tres cuadros bien diferenciados la familia de Heracles, la locura de Heracles; Heracles y Teseo, entre los que no hay unidad aparente; la entrada de Iris y Lisa es absolutamente inesperada y la llegada de Teseo, como un autntico deus ex machina, para salvar a Heracles del suicidio es no menos inmotivada, si bien antes se haba hecho referencia a Teseo y por tanto su aparicin resulta menos inesperada que la de Lisa.

    Todo parece indicar que en esta tragedia Eurpides ignora por completo la tcnica teatral. Sin embargo, dado que es obvio que es un gran dramaturgo, como demuestran muchas de sus tragedias, es preciso buscar, una vez ms, una explicacin a esta extraa estructura. Y esta explicacin no puede ser otra cosa que la idea trgica subyacente, la cual, como es lgico, ha generado esta forma como la ms adecuada. Es probable que, una vez ms, los crticos de esta obra hayan acumulado sus reproches por no haber entendido bien lo que Eurpides quiere transmitirnos a travs de ella.

    Es evidente para todo el que conoce la mitologa de Heracles que aqu este hroe se nos muestra ms a la medida humana: muy alejado por un lado de su naturaleza de semidis, y por otro del hroe grosero infrahumano cuya caracterstica esencial es, quiz, la exageracin de sus apetitos. Es claro el intento por parte de Eurpides de rescatar a Heracles de su divinidad, humanizndolo hasta un grado sumo. De ah que a veces se ponga en dudas su origen divino (cf. versos 354-355) o que el Coro afirme con frase blasfema: l es hijo de Zeus, mas en virtud supera su noble cuna. Heracles encarna aqu la virtud de la phila por excelencia: es el padre amantsimo, el esposo fiel, el amigo leal. Frente a l las divinidades que aparecen en el transfondo de la obra Hera y Zeus son precisamente sus opuestos: encarnan el odio y la ingratitud. Es claro que la obra no se reduce slo a eso: tambin hay su dosis de nacionalismo al querer atraerse hacia Atenas a un hroe extrao (como Sfocles hizo con Edipo), etc. Pero la idea central, que por otra parte subrayan reiteradas metforas, es precisamente la del humanismo de Heracles, centrado en su phila, frente a la inhumanidad de las divinidades.

    Esta idea es, evidentemente, la que explica la estructura y el tempo de la obra. Para empezar, explica la primera parte del trptico a la que se ha considerado irrelevante, adems

    de excesivamente lenta y reiterativa. Se piensa que slo sirve para preparar la segunda y que gran parte de ella vale nicamente para marcar un comps de espera. Nada ms falso. Es obvio que esta primera parte era absolutamente necesaria para marcar la situacin de aislamiento desesperado de la familia de Heracles, objeto de su phila; para marcar la falta de lealtad de los tebanos hacia su bienhechor; para sealar la ingratitud de Zeus para con su hijo y los hijos de su hijo.

    Pero adems est muy bien construido psicolgicamente. Es un crescendo de la desesperanza de la familia de Heracles: si al principio hay una nota de esperanza en las palabras de Mgara, Anfitrin y el Coro, lentamente sta va desapareciendo hasta culminar en el canto funerario del Coro en que celebra sus hazaas porque, evidentemente, lo cree muerto.

    La idea central explica, por otra parte, la aparicin inesperada de Lisa y la locura repentina de Heracles. Es sabido que Eurpides domina la descripcin de los procesos psicolgicos. Si hubiera querido presentarnos un progresivo enloquecimiento de Heracles, poda haberlo hecho (como describe magistralmente la progresiva vuelta en s del hroe a travs del dilogo con Anfitrin).

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    Eurpides H e r a c l e s Ahora bien, como lo que quiere subrayar es el odio y la arbitrariedad de los dioses, nada mejor que introducirlos de repente enloqueciendo arbitrariamente al hroe. Se ha dicho que Sfocles nunca presenta desenlaces inesperados o desligados del desarrollo de los caracteres. Tampoco lo hace Eurpides en muchas de sus tragedias. Si Heracles enloquece en sta sin que se explique desde dentro es, precisamente, porque el autor quiere resaltar la actuacin arbitraria y desleal del elemento que acta en toda tragedia griega desde fuera y por encima: los dioses.

    Finalmente, la intervencin de Teseo. En este caso no se trata de una intervencin tan inesperada como la de Lisa, aunque resulta igualmente inmotivada desde dentro.

    He sealado antes que Teseo es como un autntico deus ex machina5. Cuando la nica solucin que se vislumbra es el suicidio de Heracles, aparece Teseo para rescatarlo de la muerte, como l haba sido antes rescatado del Hades por Heracles. Esta parte representa, con respecto a la anterior, el movimiento opuesto del pndulo: es el triunfo de la humanitas representada aqu por Teseo; de la amistad, como queda subrayado en numerosas ocasiones.

    En fin, pienso que no se trata, efectivamente, de un drama que se ajuste a los cnones de la tragedia de un Sfocles (o de otras de Eurpides), pero ello es por la sencilla razn de que es el contenido de la misma el que ha confirmado su propia forma.

    Aparte de esto, tiene valores innegables, como el dominio de la irona trgica: cuando ya desesperan de que vuelva Heracles y Anfitrin acusa a Zeus de ingrato, el hroe aparece de repente; cuando ya pareca que Zeus se haba puesto a la altura de sus deberes como padre y vuelve la felicidad al hogar de Heracles, repentinamente enloquece el hroe; cuando todo parece perdido, aparece Teseo para salvarle de la muerte.

    Por otra parte, hay caracteres que estn desarrollados con una riqueza enorme: Heracles mismo como padre, esposo y amigo; Mgara como esposa abnegada y heroica, pero tambin como una madre normal preocupada por el matrimonio de sus hijos en los tiempos de felicidad; Anfitrin como anciano temeroso, pero al tiempo arrogante y astuto. Si Lico es un carcter plano y unilateral, es porque slo sirve como contrapunto de la soledad y desvalimiento de la familia de Heracles. Luego desaparece rpidamente; su muerte ocupa el espacio mnimo del tercer estsimo, el ms corto de la tragedia griega.

    Finalmente, como valores aislados, merecen resaltarse la magnfica descripcin (a travs de un dilogo) del lento despertar de Heracles, despus de su locura, y la magistral descripcin que de sta hace el Mensajero.

    5 Autntico, porque los verdaderos deus ex machina de Eurpides raras veces resuelven ninguna situacin desesperada,

    como ha demostrado SPIRA, Untersuchungen...

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    Eurpides H e r a c l e s

    VARIANTES TEXTUALES

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    Eurpides H e r a c l e s

    ARGUMENTO

    Heracles, luego de desposar a Mgara, la hija de Creonte, tuvo hijos de ella... Dejlos en Tebas y march l mismo a Argos para realizarle los trabajos a Euristo. Como sobreviviera a todos, baj a Hades, para terminar, y como pasara all mucho tiempo, dej entre los vivos la creencia de que haba muerto. Estando los tebanos en discordia con el rey Creonte, trajeron de Eubea a Lico...

    PERSONAJES

    ANFITRIN. MGARA.

    LICO. HERACLES.

    IRIS. LISA.

    MENSAJERO. TESEO. CORO de ancianos.

    Escena: En Tebas.

    PRLOGO (1-137) ,

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    ANFITRIN. Quin de los hombres no conoce al que comparti el lecho con Zeus, al argivo Anfitrin, al que engendr Alceo, hijo de Perseo, al padre de Heracles? Soy yo, que pose esta ciudad de Tebas donde floreci la espiga terrena de los Hombres Sembrados1. 5 Ares salv un pequeo nmero de su estirpe y stos llenaron la ciudad de Tebas con los hijos de sus hijos. De ellos naci Creonte, el hijo de Meneceo, soberano de esta tierra. Y Creonte fue el padre de Mgara, 10 aqu presente, a la que un da todos los Cadmeos celebraron con cantos de esponsales, al son de la flauta, cuando el ilustre Heracles la trajo a mi casa como esposa.

    Abandonando Tebas, donde yo habito, y dejando aqu a Mgara y a sus suegros, 15 mi hijo se ha dirigido a la ciudad amurallada de Argos, a la ciudad ciclpea2 de donde yo estoy exiliado por haber matado a Electrin. Por aligerar mi infortunio y querer que yo vuelva a habitar en mi patria, est pagando a Euristeo un gran precio por mi retorno,

    1 Cf. Suplicantes, nota 23.

    2 Ciclpeo: aplicable slo a Micenas y Tirinto, cuyos muros fueron edificados por los Cclopes (PNDARO, Er. 169,

    BERCK). Pero Eurpides identifica (cf. tambin Suplicantes, v. 1130) Micenas y Argos.

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    Eurpides H e r a c l e s ,

    , ' 20

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  • 10

    Eurpides H e r a c l e s , . medias se tropiece con ella. Es la prueba ms

    inequvoca de la amistad. fo , ' 60 , . f ' ' , ' , ', / 65 ' ' , ' . ' , , , 70 ' , . ' , , , ; , ' ; ' 75 ' , . ' , , . V ' ' 80 , ; . ' ' ' ' . z' V 85 ' , V.

    60 MGARA. Anciano, t que un da arrasaste la ciudad de los tafios6 como conductor ilustre del ejrcito cadmeo, qu poco claras son para los hombres las decisiones divinas!

    Tampoco yo estuve lejos de la fortuna junto a mi padre que, por su podero, tuvo un da gran renombre: 65 detentaba una tirana por la que las largas lanzas vuelan contra los hombres afortunados por culpa de la ambicin.

    Y tena hijos: a m me entreg a tu hijo fundando con Heracles una ilustre unin. Pues bien, toda aque-lla felicidad se ha desvanecido 70 y t y yo vamos a morir, anciano. Tambin van a morir los hijos de Heracles, a quien cobijo bajo mis alas, como una ave clueca a sus cras. Ellos me hacen preguntas de uno y otro lado: Madre, dime, adnde ha marchado padre?, 75 qu hace?, cundo volver? Engaados por su corta edad buscan a su padre. Y yo los entretengo con mis palabras y les cuento historias. Se sorprenden cuando crujen las puertas y todos se ponen en pie como si fueran a abrazar las rodillas de su padre. 80 Pero qu esperanza o qu lugar de salvacin puedes buscar, anciano? En ti pongo mis ojos. No podramos cruzar ocultos las fronteras del pas porque en las salidas hay vigilantes ms fuertes que nosotros. Tampoco en los amigos tenemos ya esperanza de salvacin. Conque si tienes algn plan, 85 exponlo aqu abiertamente, no te resuelvas a morir. Demos tiempo al tiempo, ya que somos dbiles.

    88 fofo , , ' . 87

    ANFITRIN. Hija, no es tan fcil aconsejar a la ligera en una situacin como sta, corriendo y sin esforzarse.

    ; 90

    90 MGARA. Es que te falta algo por sufrir o es que amas tanto la vida?

    .

    ANFITRIN. Me place vivir y todava acaricio cierta esperanza.

    ' , .

    MGARA. Tambin a m me agrada, anciano, pero no hay que esperar lo inesperado.

    6 Cf. tambin v. 1080. Segn una antigua tradicin tebana (cf. PAUSANIAS, IX 17, 3; XIX 3), Anfitrin haba ganado

    una clebre victoria precisamente sobre la Eubea de Lico, a cuyo rey Calcodonte mat. Pero esta victoria era menos conocida del pblico ateniense que la de los Tafios.

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    Eurpides H e r a c l e s ' .

    ANFITRIN. En el aplazamiento de los males est su curacin.

    ^ ' .

    MGARA. Pero a m me lacera, pues es doloroso, el tiempo que transcurre entre medias.

    , V , 95 ' , ' ' , . f' , . 100 , ' ' . f ' ' . / ' 105 ' .

    95 ANFITRIN. Hija, todava podramos, con curso favorable, salir de estos males que nos cercan. Todava podra venir mi hijo y esposo tuyo. Vamos, ten paciencia, y ciega la fuente de lgrimas de tus hijos.

    Clmalos con tus palabras y 100 engalos con historias aunque sea un pobre engao. Tambin la afliccin de los mortales tiene un trmino y el soplo del viento no siempre es violento. Los que son felices no lo son hasta el final, pues todas las cosas se ceden el sitio mutuamente. 105 El hombre ms los noble es el que se abandona siempre a la esperanza. La desesperacin es de hombres cobardes.

    (Entra el Coro compuesto por viejos compaeros de Anfitrin.)

    ^ ', , - 110 , - , , ' '. fo , ', V - 115 , . 120 . , 125 ', / 127 126

    CORO.

    Estrofa.

    Oh palacio de techo elevado y envejecido lecho nupcial! En el bastn tengo puesto mi apoyo y vengo, como pjaro encanecido7, a cantar tristes lamentos 110 palabras slo y esperanzas oscuras de nocturnos sueos, temblorosas, s, mas, con todo, animosas. Oh nios, nios, privados de padre! Oh t, anciano, 115 y t, desgraciada madre que lamentas al esposo que est en la mansin de Hades!

    Antistrofa.

    No dejes que se canse tu pie ni tu pesada pierna, 120 como un potrillo portador de yugo se cansa de llevar el peso del carro cuesta arriba, en pedregosa pendiente8. Toma la mano, afrrate al manto de aqul 125 que deje retrasada la huella dbil de su pie. Eres viejo, acompaa a otro vie jo que en otro tiempo, cuando joven, conviva con su armadura nueva en los trabajos propios de los mozos y no era la vergenza

    7 Probablemente se refiere (cf. vv. 692 y sigs.) al cisne tradicionalmente descrito como grisceo (cf. ESQUILO,

    Prometeo, 795; ARISTFANES, Avispas 1064; EURPIDES, Bacantes 1365) y de bello canto al morir (cf. ESQUILO, Agamenn 1444; EURPIDES, Electra 151). 8 Pasaje corrupto. Seguimos la correccin de WILAMOWITZ, que cita a PETRONIO, Satiricn 134, lassus tamquam

    caballus in clivo. Plos es a menudo sencillamente sinnimo de hppos.

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    Eurpides H e r a c l e s ', 128 . , -

    ,

    ' . 135

    V - ' . ' .

    de su ilustre patria. Mirad, cun parecidos a los de su padre 130 son estos rayos que salen de sus ojos fulgurantes.

    Mala suerte no les falta desde nios, mas su gracia 135 no se ha perdido. Oh Hlade, qu grandes aliados, qu grandes, vas a perder para tu ruina!

    (Entra por la derecha el tirano Lico con su guardia.)

    Mas he aqu que veo a Lico, caudillo de esta tierra, saliendo del palacio.

    PRIMER EPISODIO (138-347) , 140 ', ', ', . V' ; ' ' ' ; ' 145 ' ; ', , ' ' , , ' . 150 , ; ' . ' ; ' ' 155 ; , ' , ' ' ' V , ' , 160 , V. f ' ' , ' . , , 165 ' . .

    140 LICO. Al padre de Heracles y a su esposa

    pregunto si es que lo preciso. (Y desde que me he constituido en tirano vuestro, necesito investigar lo que quiero): Hasta cundo pretendis alargar vuestra vida? Qu esperanza veis o qu ayuda para no morir?O es que confiis en que volver el padre de stos, 145 que ya est en el Hades? Porque estis exagerando vuestro dolor ms de lo debido, ya que tenis que morir. T te andas vanagloriando por la Grecia de que Zeus fue condueo de tu matrimonio y comn engendrador de tu hijo. 150 Y t, de que te llaman la esposa del hombre ms excelente. Qu ha conseguido de importancia tu esposo por ms que haya acabado con la Hidra de los pantanos o con la fiera de Nemea? Dice que la caz a lazo y la mat con la traba de sus brazos. 155 Son stas las hazaas en las que sustentis vuestra causa? Acaso por ellas haban de librarse de morir los hijos de Heracles? Cobr ste fama de valiente no siendo nadie en lucha con animales, pero en lo dems no fue guerrero insigne: jams abraz escudo con su mano izquierda 160 ni se arrim a las lanzas; sosteniendo su arco el arma de los cobardes siempre estuvo presto a huir. La prueba del valor de un hombre no es el arco, sino el mantenerse a pie firme y sostener la mirada frente a una puntiaguda mies de lanzas, firme en su puesto. 165 Mi actitud no es de desvergenza, anciano, sino de preocupacin. Soy consciente de que he matado a Creonte, padre de sta, y que ocupo su trono. Con que no quiero dejar detrs de m a stos para que, una vez crecidos, se venguen de m y me hagan pagar por mis actos.

    170 ' ', , '

    170 ANFITRIN. Que Zeus defienda al hijo

    de Zeus en lo que le corresponde como padre! A m toca demostrar con mis palabras el error de ste sobre tu persona, Heracles. Pues no permitir que te

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    Eurpides H e r a c l e s ' . V ' -- , -- 175 ' . ' , / ' 180 ' , , , V , ' ' , , . ' ' ' , 185 ' ' ' . ' , , ' . 190 V , , ' , 195 , , ' ' , 200 ' ' , , ' . . 205 ' ; ' ' ; ' , ' . f ' , ' , 210 ' ' , . ' V ' , , ,215 .

    insulten. Primero tengo que apartar de ti el sacrilegio con el

    testimonio de los dioses pues sacrilegio considero 175 el llamarte cobarde, Heracles. Yo apelo al rayo de Zeus y a la cuadriga en la que subido clav sus alados dardos en los costados de los Gigantes 180 y celebr un hermoso himno de victoria en compaa de los dioses9.

    Vete al monte Floe t, el ms cobarde de los reyes, y pregunta a los Centauros, insolentes cuadrpedos, a qu hombre consideraran el ms excelente si no es a mi hijo, de quien t afirmas que slo tiene la apariencia10. Pregunta 185 a Dirfis11 de los Abantes que te cri y no podra elogiarte. No es posible que encuentres ningn pas como testigo de que has realizado hazaa alguna valerosa. Y t reprochas ese invento tan sabio, la armadura del arco! Escucha mis palabras y podrs instruirte.

    190 El hoplita es hombre esclavo de sus armas. Si sus compaeros de fila no son valientes, muere con ellos por la cobarda ajena; si rompe su lanza, no puede apartar de s la muerte, pues slo tiene este medio de defensa. En cambio, 195 cuantos abrazan el arco con mano certera tienen una ventaja: lanzan miles de flechas y protegen de morir el cuerpo de otros; y al estar apostados lejos, se defienden de los enemigos hiriendo con flechas ciegas 200 a quienes pueden verlas. No ofrece su cuerpo a los enemigos, sino que se mantiene bien guarecido. Y lo ms astuto en la batalla es hacer dao al enemigo y proteger el propio cuerpo sin depender del azar.

    205 Estas razones opongo a las tuyas sobre este asunto.

    En cuanto a los nios, por qu quieres matarlos? Qu te han hecho ellos? En una cosa s te considero acertado, en temer a los hijos de los hroes siendo t un cobarde. 210 Pero con todo, sera terrible para nosotros el morir por tu cobarda, cuando eras t quien debas sufrir esto a nuestras manos pues somos superiores a ti si el pensamiento de Zeus fuera justo con nosotros.

    As que si quieres quedarte con el cetro de esta tierra, djanos salir del pas como exiliados; 215 no emplees violencia con nosotros no vaya a ser que la

    9 La imagen de Zeus lanzando rayos y Heracles con el arco era central en las representaciones de la Gigantomaquia en

    los vasos de figuras negras (cf. WILAMOWITZ, III, 48). Sobre el kmos de la victoria cf. ATENEO, I, 22, aunque la confunde como ya era normal en la poesa antigua con la Titanomaquia. 10

    Sc. del hombre ms excelente, no de hijo mo, como a veces se ha entendido incorrectamente. 11

    Dirfis es la cordillera que atraviesa Eubea como su espina dorsal.

  • 14

    Eurpides H e r a c l e s V ' ' ; / 220 ' . ' ' ', ' , ' , , 225 ' , / . ', V ', ' ' ' ', . , 230 . ' V , ' , ' . 235

    sufras cuando el soplo de dios cambie contra ti. Ay tierra de Cadmo! pues tambin a ti he

    llegado en mi reparto de reproches. Es as como defiendes a Heracles y sus hijos cuando fue aqul 220 el nico que se enfrent a los Minias e hizo que Tebas mirara con ojos libres? No puedo alabar a Grecia ni podr soportar estar callado cuando la encuentro tan ingrata con mi hijo.

    225 Deba venir presta en defensa de estas criaturas portando fuego, lanzas y escudos, como recompensa por haber t librado de fieras tanto la tierra como eI mar, en agradecimiento por lo que te has esforzado por ella. Pero en esta situacin, hijos, ni Tebas ni la Hlade vienen en vuestra ayuda y ponis los ojos en m, vuestro dbil amigo, que no vale ms que un zumbido de la lengua. Me ha abandonado el vigor que antes tuviera, 230 de viejos me tiemblan los miembros y mi fuerza es una sombra. Si an fuera joven y pudiera dominar mi cuerpo, tomara la lanza y teira de sangre los rubios bucles de ste. Tendra que huir ms all de las fronteras atlnticas 235 por temor a mi lanza.

    ' , V ;

    CORIFEO. No ves cmo los hombres nobles tienen buenos temas para sus discursos, aunque sean lentos en hablar?

    ' / , ' . ', ', 240 ' ' , ' , ' ' ' 245 ', ' . ^ , , , , , , 250 .

    LICO. S, t dirgete a mi con palabras como to-rres, que yo a cambio de ellas actuar en tu perjuicio.

    240 Vamos, marchad unos al Helicn y otros a las quebradas del Parnaso y ordenad a los leadores que corten troncos de encina. Una vez que los hayan trado a la ciudad, apilad los maderos alrededor del altar y prendedles fuego y abrasad los cuerpos de todos ellos, 245 para que sepan que no es el muerto quien domina esta tierra por el momento, sino yo. En cuanto a vosotros, ancianos que os oponis a mis planes, vais a plair no slo por los hijos de Heracles, sino tambin por el infortunio de vuestra propia gente 250 cuando algo malo les suceda. Tendris bien presente que sois esclavos de mi tirana.

    ', , , , ' 255 ',

    CORIFEO. (En actitud amenazante.) Vosotros,

    fruto de la tierra a quienes un da sembr Ares vaciando la viciosa boca del dragn, no levantaris los bastones, apoyo de vuestra diestra, 255 y teiris en sangre la maldita cabeza de este hombre que, sin ser Cadmeo y siendo advenedizo, es el peor gobernante de nuestros jvenes?

    Pero no, no sers mi dueo para tu alegra ni te

  • 15

    Eurpides H e r a c l e s ' . ' ' . ' , 260 '. . ' . , ' . 265 ' , , , , ' . ' ' 270 . . ' .

    quedars con lo que yo he trabajado con el esfuerzo de mis manos. Lrgate all de donde viniste y 260 ejerce all tu insolencia, que mientras yo viva no matars a los hijos de Heracles. No est tan oculto bajo tierra aqul despus que dej a sus hijos, puesto que t gobiernas esta tierra luego de arruinarla 265 y en cambio l, que la favoreci, no obtiene lo que merece. Entonces, ser actuar en exceso el hacer bien a mis amigos muertos cuando ms necesitan amigos?

    Ah, brazo mo derecho, cmo ansas empuar la lanza! Pero en la debilidad se diluye tu ansia, 270 pues ya te habra yo impedido que me llamaras esclavo y habramos habitado con horror esta Tebas en la que t te complaces. No est en sus cabales un pueblo corrompido por la disensin y por los malos consejos. En otro caso, jams te habran tomado por su dueo.

    , 275 ' . ' , , , . 280 , ' . ', , , 285 , . , ' ' ' , 290 , ' . ' 295 ' ' , ' 300 ' . ' ' ' ' ,

    275 MGARA. Ancianos, os elogio, pues por

    los amigos es fuerza que el amigo sienta justa ira. Pero cuidado!, no vayis a sufrir por irritaros con el tirano por nuestra causa.

    Y ahora, Anfitrin, escucha mi opinin por si te parece que digo algo de valor. 280 Yo amo a mis hijos pues cmo no voy a amar a quienes par entre dolores? y tambin considero terrible la muerte. Pero tengo por necio al mortal que se enfrenta a la 285 necesidad. Si hemos de morir, moriremos; mas no abrasados por el fuego ni para escarnio de nuestros enemigos, lo que considero peor que la muerte. Debemos dignidad a nuestra familia: t tienes brillante nombrada por tu lanza, de forma que es inaceptable mueras por cobarde; 290 mi ilustre esposo no precisa testigos de que no querra salvar a estos nios si fueran a caer en deshonor. Los nobles sufren por el deshonor de sus hijos y yo he de seguir el ejemplo de mi marido.

    295 Ahora, escucha lo que pienso sobre tus esperanzas: Crees que tu hijo volver de debajo de la tierra? Y quin de los muertos ha regresado del Hades? O crees que podramos ablandar a ste con nuestras palabras? De ninguna manera. Hay que huir del enemigo cuando es necio y ceder 300 ante los hombres sensatos y bien formados, pues en tocando al honor podras concluir fcilmente un pacto de amistad con stos. Ya se me ha ocurrido que podramos pedir el exilio para estos nios, pero tambin es triste ponerlos a salvo en medio de una

  • 16

    Eurpides H e r a c l e s 305 ' . ' , ' . ' , , . , , ' 310 .

    pobreza lamentable. 305 Pues se dice que el rostro de los que hospedan tiene slo un da la mirada agradable para sus amigos exiliados. Afronta la muerte con nosotros, ya que te espera de todas formas. Apelamos a tu nobleza, anciano; que quien trata de combatir el destino de los dioses es valiente, 310 pero su valenta es insensata. Lo que tiene que ser, nadie puede hacer que no sea.

    ' , ' ' . , . 315

    CORIFEO. Si alguien te hubiera injuriado cuando mis brazos eran robustos, fcilmente le habra yo puesto coto, Pero ahora no somos nadie. Por tanto a ti te toca, 315 Anfitrin, procurar de rechazar vuestra muerte.

    ', ' ' ' . , . 320 , , ' , ' , , . ', , 325 ' .

    ANFITRIN. No es cobarda ni deseo de vivir lo que me hace rechazar la muerte, sino el deseo de salvar a los hijos de mi hijo. Pero parece que persigo en vano lo imposible. Mira, aqu est mi cuello para que lo atravieses con tu espada, 320 para que me mates, para que me arrojes desde una roca. Seor, concdenos un solo favor, te suplicamos: mtanos a m y a esta desgraciada antes que a los nios. Que no los veamos visin impa!agonizando y llamando 325 a su madre y a su abuelo. Por lo dems, si tienes arrestos, obra a tu gusto, pues no tenemos defensa contra la muerte.

    ' , ' , -- -- 330 ' ' .

    MGARA. Tambin yo te pido que aadas un favor a ste, de forma que nos concedas doble gracia, pues somos dos: 330 abre la casa pues ahora estamos encerrados y concdeme poner a mis hijos el atavo de los muertos, para que al menos en esto les sirva de provecho la casa de su padre.

    ' . ' . , . 335

    LICO. Sea, ordeno a los esclavos abrir los

    cerrojos. Entrad y amortajaos. No envidio las mortajas. Cuando hayis ataviado vuestro cuerpo, 335 vendr para entregaros a lo ms hondo de la tierra.

    (Sale por la derecha.) ', ' , , ' ' ' . , ' ' ,

    MGARA. Hijos, acompaad el desdichado pie de vuestra madre hacia el palacio paterno, sobre cuyos bienes mandan otros, aunque de nombre sean todava vuestros. (Entra Mgara con los nios en el palacio.)

    ANFITRIN. Zeus, en vano te tuve

  • 17

    Eurpides H e r a c l e s ' 340 ' ' ' ' . . ' , , 345 . , .

    compartiendo 340 mi lecho nupcial y en vano te llamamos compadre de mi hijo. Resulta que eres peor amigo de lo que parecas.

    Yo, un mortal, te supero en valor a ti, un gran dios; pues yo no he abandonado a los hijos de Heracles. En cambio, t supiste encamarte a escondidas 345 apropindote, sin que nadie te lo diera, de un lecho ajeno, y no sabes salvar a tus amigos. O eres un dios estpido o eres injusto por naturaleza.

    (Entra en el palacio.) PRIMER ESTSIMO (348-450) ' , 350 ' , ' , ' , - 355 ' . ' .

    Estrofa 1. CORO. Ay Lino!12 tras feliz tonada,

    Febo 350 canta conduciendo su ctara de sonido hermoso con pulsador de oro. Y yo, al que de lo profundo de la tierra sube a la luz, al hijo no s si llamarlo de Zeus 355 o retoo de Anfitrin, cantar como corona de sus trabajos quiero con buen lenguaje. Que virtudes de nobles esfuerzos para los muertos son gloria.

    , 360 ' ' .

    Primero al bosque de Zeus 360 libr del len13 y echndose a la espalda la parda pelliza, cubri su rubia cabeza con las terribles fauces de la fiera.

    ' 365 , . - ' - 370 ' - , .

    Antistrofa 1.

    Luego la raza de los montaraces 365 y salvajes Centauros derrib con mortferas flechas atravesndolos con alados dardos.

    Fue testigo el Peneo de hermosas aguas y las infi-nitas tierras de la estril llanura y los paisajes del 370 Pelin y los lugares vecinos del Hmola14 donde sus manos llenas de antorchas asolaban con sus cabalgadas la tierra de los Tesalios.

    375 375 Y cuando mat a la cierva de cuernos de oro,

    12 Originariamente es un grito atino (como pen, ieleno, himeneo, lacto, probablemente bato, etc.) que luego dio

    origen, mediante una historia etiolgica, al nombre propio de Lino (hroe inventor en el terreno musical, relacionado con Apolo) y todava antes un canto (cf. HOMERO, XVIII 570) de viadores. Segn ATENEO (XIV 619 c). Aristfanes de Bizancio ya lo consideraba con razn indistintamente como himno o como trepo. De hecho este estsimo es un himno de alabanza a un hroe a quien se cree muerto celebrando los doce trabajos. 13

    En Nemea. 14

    En Tesalia. Eurpides confunde la Centauromaquia de Heracles en Arcadia (cf. v. 182) con la de Teseo y Pirtoo en Tesalia.

  • 18

    Eurpides H e r a c l e s , .

    de moteado lomo, destructora y salvaje, honr con sus despojos de la diosa15 de noe, cazadora de fieras.

    ' 380 , ' , - 385 ' , . ' 390 , - ' .

    Estrofa 2.

    380 Y mont las cuadrigas y dom con el freno las potras de Diomedes16, las cuales en sangrientos pe-sebres, sin freno devoraban con sus mandbulas ali-mentos sangrientos banquetendose maldito fes- 385 tn! con el placer de bocados humanos.

    Atraves las orillas del Hebro de corriente de plata sufriendo por causa del rey de Micenas17.

    Y en la ribera del Pelin junto a las fuentes de 390 Anauro a Cicno, matador de viajeros, con sus dardos mat, al insociable habitante de Anfaneas.

    , - 395 , ,

  • 19

    Eurpides H e r a c l e s 420 , ' ' , - ' .

    Y abras a la perra de mil cabezas, 420 a la Hidra asesina de Lerna y unt de veneno sus flechas con las que dio muerte al pastor de triple cuerpo de Eritea19.

    ' ' 425 ' , , ' , ' . ' , 430 ' ' . 435

    Antstrofa 3. 425 Otras expediciones ha terminado con xito y

    trado los trofeos. Y ahora ltimo de sus trabajos ha navegado hasta el Hades de mil lgrimas donde est llegando desdichado al trmino de su vida. Y no ha vuelto.

    430 Esta su mansin est huera de amigos y la barca de Caronte aguarda el camino sin retorno de sus hijos camino sin dioses ni justicia.

    Tu casa pone los ojos en tus manos 435 aunque no ests presente.

    ' ' , , ' 440 .

    Si yo tuviera el vigor de un mozo y blandiera mi lanza en la batalla y lo mismo los tebanos de mi edad,me pondra delante de los nios para defenderlos. 440 Mas ahora estoy lejos de mi feliz juventud.

    (Sale del palacio Mgara con los nios amortajados.)

    ' ' , , 445 , ' . , . 450

    CORIFEO. Pero estoy viendo con el atavo de los muertos a stos que fueron un da los hijos del gran 445 Heracles, a su esposa que arrastra a los nios como atados a sus pies y al anciano padre de Heracles. Desgraciado de m, que no puedo contener ya mis ojos, viejas fuentes de lgrimas! 450

    SEGUNDO EPISODIO (451-636) , ' ' . ', , . 455 ' ', ' . , ' . , 460 ' .

    MGARA. Vamos, quin es el sacerdote, quin el ejecutor de estos malhadados y el asesino de esta mi doliente vida?20. Estoy presta para conducir al Hades estas vctimas.

    Hijos, formamos una yunta nada hermosa de cadveres, 455 viejos igual que jvenes y madres.

    Oh desdichada suerte ma y de stos mis hijos a quienes veo por ltima vez! Os par y cri para que os humillaran mis enemigos, para escarnio y matanza. Ay!

    460 Mucho me han engaado las esperanzas que conceb por las palabras de vuestro padre. A ti te asign Argos tu difunto padre y eras el futuro

    19 Gerin, pastor de Eritea (quiz Cdiz), dotado de tres cuerpos, a quien mata Heracles para robar el ganado. Trabajo

    cantado ya por Estescoro en su Gerioneida (cf. J. L. Cavo, Estescoro de Hmera, Durius, II, 2, 1974). 20

    Verso condenado por PALEY como interpolado. GRGOIRE lo mantiene comparando con Andrmaca 418: nuestros hijos son nuestra vida.

  • 20

    Eurpides H e r a c l e s ' , ' , 465 , . ' , , 470 , . ' . ' , . 475 , ', ' ', ' . ' 480 ' , -- . , , . , ' ' 485 ' , ' ' ', 490 ' , ', , ', ' , ' . , 495 .

    dominador de la casa de Euristeo, detentando el poder sobre la tierra Pelasga, de abundante fruto. 465 Iba a cubrir tu cabeza con el despojo del len con que l mismo se vesta.

    T eras el soberano de Tebas, que ama los carros, el heredero de los campos de mi patria, porque sabas ganarte a tu padre. 470 En tu diestra iba a poner la cincelada maza protectora21 entrega que no va a ser cierta!. A ti prometi donarte Ecalia22, la tierra que l conquist un da con certeros dardos.

    Como rais tres, vuestro padre os estableci en tres reinos, 475 porque tena orgullo de su hombra.

    Y yo..., yo os escoga novias para trabar relacio-nes entre lo ms selecto de Atenas, Esparta y Tebas; para que, amarrados por cables de proa, llevrais una vida feliz.

    480 Todo se ha esfumado. Este revs de la fortuna os ha dado a cambio las Keres23 por novias y a m, desdichada, un bao nupcial de lgrimas para entregaros. Aqu el padre de vuestro padre prepara el banquete de bodas, ya que tiene por suegro vuestro a Hades amargo parentesco!24.

    485 Ay de m! A quin de vosotros abrazar primero y a quin en ltimo lugar?, a quin besar?, a quin voy a tomar entre mis brazos? Por qu no podr como la abeja de rubias alas reunir los lamentos de todos en uno solo y producir un llanto torrencial?

    490 Amado mo, si en Hades se puede or la voz de los mortales, esto es lo que a ti digo, Heracles: van a morir tu padre y tus hijos, voy a perecer yo, a quien los hombres llamaban feliz por tu causa.

    Ven en nuestra ayuda, aparcete a m aunque slo sea como una sombra. 495 Pues si vienes incluso como un sueo sers suficiente ayuda. Que son villanos comparados contigo los que quieren matar a tus hijos.

    , . , , ' , ' , , ' . 500 , ', . ', , ,

    ANFITRIN. Aplaca t a los poderes

    infernales, mujer, que yo voy a levantar mis brazos al cielo para suplicarte a ti, Zeus, que si ests dispuesto a ayudar a estos hijos, los defiendas, porque pronto de nada 500 servir tu auxilio. Muchas veces te he invocado; esfuerzo vano, pues segn parece es fuerza morir.

    21 En gr. alextrion. A Heracles, en sus cultos, se le daba el nombre de alexkakos.

    22 Situada en Tesalia, Mesenia o Eubea segn las ocasiones. All venci Heracles con su arco al afamado guerrero

    Eurito. De esta hazaa quedan huellas en Odisea VIII 224. 23

    Las Keres, diosas de la muerte (a veces kr es sinnimo de muerte), son hijas de Hades. 24

    La madre preparaba el bao nupcial de sus hijas antes del matrimonio. El padre de la novia ofreca el banquete, de aqu que en este caso tenga que ser el sustituto de Hades.

  • 21

    Eurpides H e r a c l e s ' , . 505 , ' . ' ' , ' ' ' . 510 ' ' ' . ' , , .

    Ancianos, pequeeces son las cosas de la vida. La recorreris hasta el final con el mayor placer, si pasis 505 sin dao del da a la noche. Que el tiempo no sabe conservar las esperanzas; realiza deprisa su trabajo y se echa a volar. Ya me veis a m que fui sealado entre los mortales por mis celebradas hazaas; la fortuna me ha arrebatado en un solo da, 510 como a un pjaro, hasta el ter.

    En cuanto a la riqueza y el honor de verdad, no conozco a nadie que los tenga seguros. Adis, compaeros, estis viendo por ltima vez a un amigo!

    (Heracles aparece por la derecha.) , '

    MGARA. Eh, anciano!, es mi bienamado a

    quien veo?, o qu debo decir que veo?

    , ' . 515

    515 ANFITRIN. No s, hija; tambin yo

    estoy sin habla. ' , ' . ' ' ' ' , . ', ', , 520 ' , ', ' ' .

    MGARA. ste es el que hemos odo que est bajo tierra, a menos que estemos viendo un sueo en pleno da. Mas qu digo?, qu sueos estoy viendo en mi congoja? ste no es otro que tu hijo, anciano. 520 Vamos, hijos, asos del vestido de vuestro padre, marchad de prisa, no os soltis, pues para vosotros en nada le va en zaga a Zeus salvador.

    , ' , ' . ' 525 , ' , ' , 530

    HERACLES. Yo os saludo, oh palacio y

    prticos de mi hogar. Con qu agrado os contemplo ahora que he vuelto a la luz! Vaya! 525 Qu es esto? Estoy viendo delante del palacio a mis hijos con cabezas coronadas de ornamentos funerarios y a mi esposa entre un tropel de hombres y a mi padre llorando no s qu infortunios. Veamos, me enterar llegndome hasta ellos.

    530 Mujer, qu nueva fatalidad se cierne sobre nuestra casa?

    ' ...

    ANFITRIN25. Oh, el ms amado de los hombres!

    Oh t, que has venido a tu padre como un rayo de luz!

    Has llegado a salvo en el momento ms oportuno para los tuyos.

    .... ,

    25 Atribuimos ambos versos a Anfitrin, como sugiere la pregunta de Heracles en el v. 533, apartndonos de la edicin

    de MURRAY.

  • 22

    Eurpides H e r a c l e s ' ,

    HERACLES. Qu dices? Qu catstrofe es

    sta a la que llego, padre? , , , ' ' 535 , ' ', ' .

    MGARA. Estamos perdidos. Anciano,

    perdona 535 que te haya arrebatado las palabras que t debas dirigirle, pues la mujer produce sin duda ms lstima que el hombre. Mis hijos iban a morir y yo estaba a punto de perecer.

    , .

    HERACLES. Por Apolo, con qu proemio das

    comienzo a tus palabras! ' .

    MGARA. Han muerto mis hermanos y mi

    anciano padre. 540

    540 HERACLES. Qu dices? En qu ataque

    o alcanzado por la lanza de quin?26. ' .

    MGARA. Los mat Lico, el nuevo soberano

    del pas.

    HERACLES. Hacindoles frente con las

    armas, o porque el pas estaba dividido? ' .

    MGARA. Por enfrentamientos internos. Y

    ahora tiene el poder de siete puertas de Cadmo. '

    HERACLES. Entonces, por qu os habis

    amedrentado t y el anciano? . 545

    545 MGARA. Iba a matarnos a tu padre, a m

    y a los nios. '

    HERACLES. Qu dices? Qu tema de la

    orfandad de mis hijos? .

    MGARA. Que vengaran algn da la muerte

    de Creonte.

    HERACLES. Y qu ornamentos son stos que

    los asemejan a cadveres? ' ' .

    MGARA. stas son las bandas de la muerte

    que ya les haba atado. ' . 550

    550 HERACLES. As que iban a morir a la

    fuerza? Msero de m!

    26 Realmente dice: agrediendo a alguien o agredido por alguien (opone drsas: activo, a dors tychn: pasivo).

  • 23

    Eurpides H e r a c l e s ' .

    MGARA. No tenamos amigos y omos que t

    habas muerto. ' ' '

    HERACLES. Y cmo os ha entrado esta

    desesperacin? .

    MGARA. Los heraldos de Euristeo nos dieron

    la noticia. ' ' '

    HERACLES. Por qu habis abandonado mi

    casa y mi hogar? , ... 555

    555 MGARA. Por la fuerza; tu padre sacado

    del lecho... '

    HERACLES. Y no tuvo respeto como para

    deshonrar a un anciano? ' .

    MGARA. El Respeto habita lejos de la diosa27

    que aqu domina. '

    HERACLES. Tan faltos estbamos de amigos

    una vez que nos ausentamos?

    MGARA. Pues qu amigos tiene un hombre

    desafortunado? 560

    560 HERACLES. Y despreciaron la lucha que tuve que sostener contra los Minias?

    , ' , .

    MGARA. Quien carece de fortuna, carece de

    amigos, te digo por segunda vez. ' , -- -- 565 , ' ' , ' 570 ' ,

    HERACLES. Es que no vais a arrojar las bandas de Hades de vuestro pelo y a levantar la vista hacia la luz, cambiando vuestra mirada desde la infernal oscuridad?

    565 Yo, por mi parte pues esto es obra de mis brazos, marchar primero a destruir de arriba abajo la casa de los nuevos tiranos. Cortar su sacrlega cabeza y la arrojar a los perros para que la arrastren. A cuantos cadmeos he sorprendido como traidores, aunque recibieron buen trato por mi parte, 570 los someter con esta mi arma victoriosa; a otros los disparar en todas direcciones con mis alados dardos y llenar de sangre de cadveres todo el smeno. Las

    27 I. e. la Violencia. Cualquier abstracto puede ser divinizado; aqu aparecen divinizados la Violencia y el Respeto (cf.

    sobre este ltimo tambin ESQUILO, Siete 409).

  • 24

    Eurpides H e r a c l e s . ' 575 . ' ', ' , ' , ' 580 ' .

    blancas aguas de Dirce28 se tornarn rojas de sangre. Pues a quin tengo que defender si no es 575 a mi esposa, hijos y anciano padre? Adis a los trabajos! Ms en vano fueron aquellos trabajos que stos. Tengo que morir en defensa suya, como ellos iban a hacerlo por su padre. Podremos decir que es hermoso dar batalla a la hidra y al len 580 por orden de Euristeo y en cambio no voy a esforzarme por alejar de mis hijos la muerte? No, entonces ya no recibir, como antes, el nombre de Heracles el Invicto29.

    , .

    CORO. Es de justicia que los padres ayuden a

    sus hijos, a su anciano padre y a su compaera de matrimonio.

    , , 585 ' ' .

    585 ANFITRIN. Hijo, bien te cuadra el ser

    amigo de tus amigos y odiar al enemigo. Pero no te precipites.

    ' ,

    HERACLES. Y qu es ms urgente o ms

    premioso que esto, padre? , , 590 ' , ' ' ' . ' , .

    ANFITRIN. El tirano tiene como aliados un sin-

    nmero de hombres pobres, aunque de palabra apa-rentan ser ricos, 590 los cuales han sembrado la disensin y perdido la ciudad por sus rapias de los bienes ajenos; los suyos propios los han dilapidado en el ocio.

    Te han visto cuando entrabas en la ciudad; y puesto que te han visto, cudate de no caer en sus manos inopinadamente si le renen tus enemigos.

    ' 595 ' ' , ' ' .

    595 HERACLES. Nada me importa que me

    haya visto la ciudad entera. Y es que al ver un ave en posicin de mal agero, me di cuenta de que una desgracia haba cado sobre nuestra casa. As que entr en el pas a ocultas de propsito.

    ' ' . 600 ' ' ' ' , . 605

    ANFITRIN. Bien. Entra y dirige tu saludo al hogar 600 y deja que la casa paterna contemple tu aspecto. Pues el rey vendr en persona para arrastrar a la muerte a tu esposa y a tus hijos y para degollarme a m. Si te quedas aqu todo est a tu favor; te beneficiars de una situacin de seguridad. 605 Pero no vayas a levantar a la ciudad antes de dejar aqu todo bien dispuesto, hijo.

    28 Los ros smeno y Dirce son los dos ros de Tebas.

    29 Es el otro (cf. antes alexkakos) epteto cultual de Heracles.

  • 25

    Eurpides H e r a c l e s ' ' . '

  • 26

    Eurpides H e r a c l e s ', , , ' . , ' ', ' ' ' 630 ' , ' . ' ' 635 , ' .

    esposa ma, recobra el nimo y deja de temblar. Suelta mis vestidos, que no tengo alas ni pienso huir de los mos.

    Ay, ay!, stos no me sueltan, si no que se aferran todava ms a mis vestidos. 630 Tan sobre el filo de la navaja habis estado? Los tendr que llevar de la mano a remolque, como una nave arrastra a unas barquillas. Pero no voy a negarme a las caricias de mis hijos. Todo es igual entre los hombres. Tanto los ms poderosos como quienes nada son aman a sus hijos. 635 Slo se distinguen por el dinero unos lo tienen y otros no, pero toda la raza humana ama a sus hijos.

    (Entran todos en palacio.) SEGUNDO ESTSIMO (636-700) , 640 . ' , 645 , , ' . - ' 650 , ' , ' ' - .

    Estrofa 1.

    CORO. La juventud siempre me ha sido grata. La vejez, en cambio, cual carga ms pesada que las rocas del Etna, 640 sobre mi cabeza pende y mis prpados con oscuro velo oculta. No, para m de asitica tirana la riqueza 645 no quiero ni mi casa llena de oro a cambio de la juventud. Hermosa es ella en la abundancia, hermosa en la miseria. La oscura y mortal vejez, por el contrario, odio. 650 Que las olas la arrastren y que jams se acerque a las casas y ciudades de los hombres! Que vuele por el ter con eternas alas!

    ' , 655 ' , ' 660 , ' , ' 665 , ' - . ' , 670 ' -

    Antistrofa 1.

    655 Si los dioses tuvieran entendimiento y ciencia a la medida humana, dos juventudes daran como marca patente de virtud a quienes la poseyeran; 660 y una vez muertos, volveran a la luz del sol como en doble carrera del estadio31. Los mal nacidos, en cambio, simple tendran la vida y 665 as se podra a los malvados distinguir de los virtuosos, como los marineros pueden contar las estrellas entre las nubes. Mas ahora no hay ninguna frontera exacta puesta por los dioses 670 entre buenos y malos, sino que el tiempo en su ciclo hace brillar slo la

    31 Este pensamiento es una variante de Suplicantes, versos 1080 y sigs., donde se expresa el deseo de tener dos vidas

    para con la segunda enmendar los errores de la primera.

  • 27

    Eurpides H e r a c l e s . riqueza.

    , . 675 ' , ' . 680 . 685 , ' .

    Estrofa 2.

    No dejar de ayuntar las Gracias con las Musas hermosa conjuncin!. No viva vo sin armona, 675 mi vida siempre entre coronas! Aunque viejo, el poeta canta a Mnemsine. Todava puedo cantar 680 el himno de victoria de Heracles junto a Bromio32 que me regala su vino, junto al canto de la lira de siete cuerdas 685 y la flauta de Libia. Jams har callar a las Musas que me han enseado la danza.

    ' 690 ' - - 695 ' . 700

    Antistrofa 2. Las doncellas de Delos el pen cantan ante las

    puertas del templo, en honor del noble hijo de Leto, 690 y hacen girar su hermoso coro. Tambin el pen, ante tu palacio, como un cisne yo, anciano cantor, de mi boca encanecida cantar. Pues hay buena materia 695 para mis himnos: l es hijo de Zeus, mas en virtud supera su noble cuna: con el esfuerzo ha fundado para el hombre una vida sin tempestades, 700 pues ha destruido las fieras que le asustaban.

    (Entran simultneamente Lico por la derecha con su guardia y Anfitrin que sale del palacio.)

    TERCER EPISODIO (701-733) . ' , ' , 705 ' ' .

    LICO. Oportunamente sales, Anfitrin, del

    palacio, pues ya es mucho el tiempo que llevis adornando vuestro cuerpo con ropas y atavos mortuorios. Vamos, 705 ordena a los hijos y a la esposa de Heracles que salgan del palacio cumpliendo vuestra promesa voluntaria de morir.

    , ' ' , , . ' , 710 ' .

    ANFITRIN. Seor, ests acosndome en mi

    infortunio y ejerciendo toda tu insolencia por la muerte de los mos, cuando debas actuar con moderacin, por ms que seas el que manda. 710 Ya que nos impones morir a la fuerza, forzoso es contentarse. Hay que hacer lo que t decidas.

    '

    LICO. Dnde est Mgara, dnde los nietos de

    Alcmena?

    32 Es el epteto cultual de Dioniso ms empleado por Eurpides.

  • 28

    Eurpides H e r a c l e s , ...

    ANFITRIN. Me parece que ella, a juzgar

    desde fuera... '

    LICO. Cmo que te parece? Qu es lo que

    conjeturas? ... 715

    715 ANFITRIN. ... se sienta como suplicante

    junto al santo altar de Hestia. ' .

    LICO. En vano suplica por su vida.

    ' .

    ANFITRIN. ... y que trata de evocar en

    vano, desde luego a su difunto esposo. ' .

    LICO. Pero l no est aqu ni ojal venga

    nunca.

    , .

    ANFITRIN. No, a menos que algn dios lo

    resucite. . 720

    720 LICO. Marcha por ella y hazla salir del

    palacio. .

    ANFITRIN. Sera cmplice del crimen si

    hago eso. , ' ' , . ' , , . 725

    LICO. Ya que tienes ese escrpulo, nosotros

    mismos, que estamos por encima de esos miedos, haremos salir a los nios con su madre.

    Vamos, siervos, seguidme, 725 para que acabemos gustosos con la dilacin de este trabajo.

    (Entra en el palacio con sus hombres.) ' ', ' ' ' . . , , ' , 730 . ', ' .

    ANFITRIN. Entonces ve t, marcha a donde

    tengas que ir, que lo dems quiz sea obra de otro. Mas espera sufrir algn dao si algn dao has hecho. Ancianos, para nuestro bien ya marcha y, cuando cree que va a matar a otros, 730 el maldito asesino quedar prendido entre los lazos de la trampa que le tendern las espadas.

    Me voy para ver cmo cae muerto; pues es agradadable la muerte de un enemigo y el que pague por sus acciones.

    (Entra en el palacio.)

    ' 735 .

    Estrofa 1. 735 CORO. Cambia de lugar la desgracia,

    nuestro antiguo gran rey ha hecho volver su vida

  • 29

    Eurpides H e r a c l e s . 740

    desde el Hades. Ay! 740 Justicia y Destino de los dioses tuercen su curso.

    TERCER ESTSIMO (736-814) , . , ' 745 , . ', , , .

    CORIFEO33. Ha llegado el momento en que pa-

    gars con tu muerte, por haberte insolentado contra quien es superior a ti.

    CORO. La alegra me ha hecho saltar las lgrimas. 745 Ha vuelto lo que nunca esper mi corazn el soberano de mi tierra.

    CORIFEO. Ancianos, vayamos a observar lo que sucede dentro del palacio, veamos si alguien recibe el trato que yo espero.

    . 750

    750 LICO. Ay de m!, ay de m!

    . .

    Antistrofa 1. CORO. ste es el preludio del canto que me

    agrada or en el palacio. La muerte no est lejos. El rey gime y grita el preludio de su muerte.

    ', .

    LICO. Oh pas de Cadmo, muero a traicin!

    ' 755 , . , , ', ' , ' . 760 . [ .]

    755 CORIFEO. Tambin t mataste as. Resgnate a pagar un precio condigno, paga la pena por lo que hiciste.

    CORO. Quin es el que ha mancillado a los dioses con su impiedad y siendo mortal ha lanzado contra los felices habitantes del cielo la insensata acusacin de que son impotentes?

    760 CORIFEO. Ancianos, el impo ya no existe. El palacio calla; volvamos a nuestra danza. Ya son felices los amigos a quienes yo amo.

    ' . , 765 . ' , , . 770 .

    Estrofa 2. CORO. Danzas, danzas y banquetes ocupan a

    los habitantes de Tebas en la sagrada ciudad. 765 Hay un cambio de lgrimas, un cambio de fortuna ha engendrado nuevos cantos. El nuevo soberano se ha ido, 770 y el antiguo domina luego de abandonar el puerto de Aqueronte. La esperanza lleg inesperada.

    . ' , 775

    Antistrofa 2. Los dioses, s, los dioses se ocupan de conocer a

    justos e impos. El oro y la fortuna 775 sacan a los mortales fuera de s arrastrando el poder de la

    33 Es un canto alternado entre Corifeo y Coro, no entre semicoros, como seala la edicin de MURRAY.

  • 30

    Eurpides H e r a c l e s . , . 780

    injusticia. Nadie se atreve a prever los reveses del tiempo34. Cuando uno rechaza la ley y entrega sus favores a la ilegalidad 780 quiebra el oscuro carro de la prosperidad35.

    ' , ' ' , ' , ' , 785 , , . 790 ' , ' , , , 795 , .

    Estrofa 1.

    Oh smeno, cbrete de coronas! Oh pulidas calles de la ciudad de siete puertas, llenaos de coros! Oh Dirce de hermosa corriente 785 y contigo las hijas de Asopo, abandonad las aguas paternas! Venid, Ninfas, para cantar conmigo el combate victorioso de Heracles.

    790 Oh rocas arboladas del dios Pitio, oh moradas de las Musas del Helicn, celebrad con vuestro alegre canto a mi ciudad, a mis muros, donde surgi la raza de los Hombres Sembrados, 795 el batalln de broncneas lanzas que transmite esta tierra a los hijos de sus hijos, sagrada luz de Tebas.

    , , 800 - , , ' , ' ' 805 . ' , 810 , ' .

    Antstrofa 3.

    Oh doble lecho conyugal, generador comn, lecho de mortal y de Zeus 800 que se introdujo en la cama de la novia nieta de Perseo36! Cun segura se ha revelado para m tu ya antigua parte de paternidad, oh Zeus! El tiempo ha mostrado el brillo de la fuerza de 805 Heracles, el cual ha salido de las entraas de la tierra abandonando el infernal palacio de Plutn.

    Como rey, has resultado superior 810 al tirano innoble37 que, a la hora de la lucha a espada, ha puesto ante nuestros ojos la evidencia de que la justicia es todava del agrado de los dioses38.

    (Aparecen Iris y Lisa sobre el palacio.)

    CUARTO EPISODIO (815-1015) 815 ' ,

    815 CORIFEO. Oh! Eh! Es que vamos a

    34 Es decir, los reveses de fortuna producidos por el tiempo.

    35 Alegora basada en una competicin de carros: el carro de la prosperidad justa es brillante como el oro; el de la injusta

    es oscuro, sin brillo, y acaba estrellndose antes de llegar a la meta (cf. Electra 954 y sigs.). 36

    Alcmena, hija de Electrin y nieta de Perseo. 37

    Lit. la vileza de un tirano. 38

    WILAMOWITZ considera corruptos estos versos por el hecho de que el coro se dirige, inesperadamente, a Heracles. No es razn suficiente para ponerles la cruz.

  • 31

    Eurpides H e r a c l e s , ' , . , 820 .

    caer, ancianos, en un nuevo ataque de terror? Qu aparicin veo sobre el palacio?

    Pon en fuga, pon en fuga tu lento pie, sal de aqu, 820 Rey Pen, aleja de m la desgracia!

    ' , , , ' ' , 825 ' . , , ' ' ' ' ' , 830 ' , ' . ' ', , , ' ' 835 , , , ' ' , 840 , ' , .

    IRIS. Ancianos, cobrad nimos; sta que vis aqu es Lisa39, hija de la Noche, y yo soy Iris, servidora de los dioses. No venimos a producir dao alguno a la ciudad. Nuestro ataque comn se dirige 825 contra la casa de un solo hombre, del hijo as dicen de Zeus y Alcmena. Pues antes de dar fin a sus duros trabajos, le protega el destino y su padre Zeus no nos permita, ni a m ni a Hera, que le hiciramos dao. 830 Mas ahora que ha terminado los trabajos que Euristeo le impuso, Hera quiere contaminarlo con sangre de su familia por la muerte de sus propios hijos. Y as lo quiero yo.

    (A Lisa.) Conque, vamos, recobra la dureza de tu corazn, hija soltera de la negra noche, 835 mueve contra este hombre la locura, confunde su mente para que mate a sus hijos, empuja sus pies a una danza desenfrenada, suelta al Asesinato de sus amarras.

    Que con sus propias manos asesine a sus hijos y los haga atravesar la corriente del Aqueronte; 840 y que compruebe cmo es el odio de Hera contra l y cmo el mo. De lo contrario, los dioses no contarn para nada y los hombres sern poderosos si ste no es castigado.

    , ' ' ' ' , 845 ' ' ' . , , ', ' . ' ' ' , ' 850 , ' .

    LISA. Soy hija de nobles padres, de la sangre

    de Urano y de Noche. 845 Mi oficio es ste, mas no me agrada ensaarme ni me complace visitar a los hombres que me son amigos. As que quiero aconsejaros a Hera y a ti, por si atendis a mis palabras, antes de veros cometer un error.

    Este hombre, contra cuya casa me enviis, no carece de nombre ni en la tierra 850 ni entre los dioses. Ha pacificado la tierra inaccesible y la mar salvaje; y l solo les ha restablecido a los dioses los honores que haban desaparecido por obra de hombres impos40 Te aconsejo que no le desees grandes males.

    ' . 855

    855 IRIS. No trates de corregir los designios

    de Hera y mos.

    39 Lisa es la personificacin de la Demencia, del Furor.

    40 WILAMOWITZ (cf. III, 185) ha postulado que falta aqu un verso que l reconstruye as: por lo que a la celosa

    esposa de Zeus y a ti....

  • 32

    Eurpides H e r a c l e s ' .

    LISA. Trato de poner tu huella en el camino mejor en vez del peor.

    ' ' .

    IRIS. La esposa de Zeus no te ha enviado aqu

    para que seas sobria.

    ' . ' ' ' ' , 860 ' ' ,

    ' , ' 865 ' , . . ' , . 870 ' . ' ', , ' ' .

    LISA. Pongo a Helios por testigo de que hago lo que no quiero hacer. Pero si es fuerza que os obedezca a Hera y a ti, 860 si necesitis que os acompaen vrtigo y ladridos como los perros al cazador, me pondr en marcha. Ni el mar ruge tan enfurecido con sus olas, ni los sesmos en tierra ni el aguijn del rayo resoplan tan dolientes como yo voy a lanzarme a la carrera contra el pecho de Heracles. Har que el palacio se resquebraje y lo dejar desplomarse sobre ellos, 865 matando primero a sus hijos. Su asesino no sabr que est matando a los hijos que engendr, antes de que se libre de mis ataques de furor. Eh, mira como ya comienza a agitar la cabeza y gira en silencio sus pupilas brillantes y desencajadas! No puede controlar la respiracin, como un toro a punto de embestir, y muge terriblemente 870 invocando a las Keres del Trtaro. En seguida le har agitarse ms y acompaar su danza con las flautas del terror. Levanta tu noble pie y marcha al Olimpo, Iris, que yo me introducir sin ser vista en el palacio de Heracles.

    , 875 , . , , ' . , 880 ' , . , 885 ' .

    875 CORO41. Ay, ay, ay, gemid! Va a ser segada la flor de tu ciudad, el hijo de Zeus. Desdichada Hlade, que a tu bienhechor vas a perder, lo vas a perder en danza enloquecida acompaada por la flautas de Lisa.

    880 Ha subido a su carro la de muchos lamentos e impulsa su aguijn contra el tronco, como para lan-zarlo a la perdicin, la Gorgona hija de la Noche con sus silbidos de cien cabezas de serpiente, Lisa cuya vista petrifica.

    885 Qu pronto ha abatido dios a quien era feliz! Qu pronto van a expirar los hijos a manos de su padre!

    .

    ANFITRIN. (Desde dentro.) Ay de m, desdichado!

    , . 890

    CORO. Ay, Zeus, pronto tu hijo se quedar

    sin hijos! Las furiosas, comedoras de crudo, injustas venganzas 890 lo harn sucumbir a golpes de desgracia.

    41 Entendemos que es innecesaria la divisin en semicoros de este sistema de docmios.

  • 33

    Eurpides H e r a c l e s .

    ANFITRIN. Ay, morada ma!

    , . . .

    CORO. Se inicia una danza sin tambores que no agrada al tirso de Bromio...

    .

    ANFITRIN. Ay, palacio mo!

    ', . 895

    CORO. ... danza que busca la sangre, no el

    zumo 895 de la uva de bquica libacin.

    , ', .

    ANFITRIN. Hijos, lanzaos a la huida!

    . ' .

    CORO. Horrible es este canto, horrible es el canto que acompaan las flautas. Prosigue la persecucin y caza de los hijos, Lisa va a lanzarse a una bacanal no sin consecuencias para la casa.

    . 900

    900 ANFITRIN. Ay de mis males!

    , . , , . 905

    CORO. Ay, ay! Cmo compadezco al anciano

    padre y a la madre cuyos hijos nacieron para nada!

    ANFITRIN42. Mira, mira, 905 una tempestad sacude el palacio, se derrumban los techos!

    , , , ' , , .

    CORO43. Eh, eh! Qu haces, hijo de Zeus, en el palacio? Una conmocin infernal, como otrora contra Enclado, envas, oh Palas, contra la casa.

    (Sale un Mensajero del palacio.) '

    MENSAJERO. Oh cuerpos encanecidos por la

    vejez!

    42 Seguimos a WILAMOWITZ al atribuir a Anfitrin los versos 904-905.

    43 MURRAY pone inexplicablemente los vv. 906-908 en boca de Heracles.

  • 34

    Eurpides H e r a c l e s 910

    910 CORO. Qu grito es ste con que me llamas?

    .

    MENSAJERO. Terrible es lo que sucede en el palacio.

    .

    CORO. No traer otro adivino44.

    .

    MENSAJERO. Han muerto los nios.

    .

    CORO. Ay, ay!

    ', .

    MENSAJERO. Lamentaos, porque es

    lamentable. , . 915

    CORO. Terrible es su muerte, 915 terribles las

    manos de su padre. Oh!

    .

    MENSAJERO. Nadie podra contarlo con

    palabras mayores que nuestro sufrimiento. , , 920

    CORO. Con qu palabras puedes contarnos la lamentable ceguera, la locura de un padre con sus hijos? Dinos de qu manera, impulsado por los dioses, se precipit este horror sobre el palacio 920 y cuenta el desdichado destino de los nios.

    ' , ' 925 ' ' , ' . , ' , . 930 ' ' ' , ' '

    MENSAJERO. Ya estaban delante del altar de Zeus las vctimas del sacrificio purificatorio del palacio, una vez que Heracles hubo matado y arrojado de este recinto al tirano del pas. 925 El hermoso coro de sus hijos, as como su padre y Mgara, estaban a su lado. Ya haba rodeado el altar la canastilla y nosotros mantenamos un silencio religioso.

    Mas cuando se dispona a llevar con su diestra el tizn para sumergirlo en el agua lustral, el hijo de Alcmena se qued sin habla. 930 Como su padre tardara, los nios le dirigieron sus miradas. Heracles ya no era el mismo: alterado en el movimiento de sus

    44 Sc. distinto de m; i. e. ya lo he adivinado yo mismo.

  • 35

    Eurpides H e r a c l e s ' . ' 935 , , ' ' , . 940 , ' .

  • 36

    Eurpides H e r a c l e s . ' ', ' . 985 ' , , ', , ' , , . ' , 990 , ', , ' . ' , ' . 995 ' , . ' ' , ' . 1000 ' , , ' , , , 1005 ' , , . ' 1010 1009 ', . ' , '. . 1015

    enfrente, le dispara contra el hgado. 980 Y al expirar ste empap boca arriba los zcalos de piedra. l lanz un grito de victoria y deca con jactancia: Este polluelo de Euristeo que acaba de morir ha cado a mis manos en pago del odio que su padre me tiene. Y ya dispona rpidamente su arco contra otro, el que se haba refugiado tembloroso creyendo esconderseen la base del altar. 985 El desdichado se arroj apresuradamente a los pies de su padre, levantando sus manos hacia la barba y cuello de ste: Querido padre le dice, no me mates. Soy tuyo, soy tu hijo; no ests matando a uno de Euristeo. 990 Pero l revolva sus ojos feroces de Gorgona y como el nio estaba demasiado cerca de su arco mortfero imitando en su rostro el gesto de un herrero, dej caer la clava sobre la rubia cabeza del nio y quebr sus huesos. Ahora que haba matado a su segundo hijo, 995 se dispona a lanzarse contra su tercera vctima con intencin de degollarlo sobre los otros dos. Mas se le adelant la desdichada madre, que lo introdujo en el palacio y cerr las puertas. Pero l, como si de los mismos muros ciclpeos se tratara, pica, apalanca los los cerrojos, arranca las puertas 1000 y derriba con una sola flecha a madre e hijo.

    Despus se lanzaba como a caballo para matar al anciano, cuando se acerc una imagen, la de Palas segn se mostr a nuestros ojos blandiendo su lanza46. Y arroj contra el pecho de Heracles una piedra 1005 que contuvo sus ansias de matar y lo ech en brazos del sueo. Cay al suelo, con la espalda extendida contra una columna que, partida en dos por el derrumbamiento del techo, yaca sobre su base. 1010 Y nosotros, librando nuestro pie de su persecucin, lo sujetamos con correas a una columna con la ayuda del anciano, para que al despertar del sueo no aadiera ninguna accin ms a las ya realizadas. Ahora duerme el desdichado un sueo nada feliz, pues ha matado a sus hijos y a su esposa. En verdad, yo 1015 no conozco a ningn mortal que sea ms infortunado. (Entra en el palacio.)

    CUARTO ESTSIMO (1016-1087) ' , - . 1020

    CORO. El crimen que la roca de Argos tiene en su memoria fue un tiempo el ms clebre e increble para Grecia, el de las hijas de Dnao47; mas ste sobrepasa, 1020 adelanta con mucho aquel horror. La muerte del desdichado y divino hijo de Procne madre una sola vez llamar puedo sacrificio a las

    46 Hay tres palabras en el verso (epi lphi kar) intraducibles por corrupcin. GRGOIRE (pg. 59) sospecha laguna.

    47 Las 50 hijas de Dnao, forzadas a casarse con sus primos, los hijos de Egipto, mataron a stos en la misma noche de

    bodas, salvo una.

  • 37

    Eurpides H e r a c l e s , , . , 1025 , , . 1030 , ' 1035 ' . ' , 1040 ' .

    Musas48. Pero t, cruel, que engendraste tres hijos, los has eliminado con muerte enloquecida. 1025 Oh, oh! Qu lamentos o gemido o funerario canto o coral de Hades repetir mi eco?

    Huy, huy! Mirad, en dos se abren las puertas de 1030 la elevada mansin. (Se abren las puertas y el encclema presenta a Heracles, atado y dormido, rodeado de cuatro cadveres.)

    Ay de m! Ved ah unos hijos desdichados tendidos ante su desdichado padre, que duerme terrible sueo por la muerte de sus hijos. 1035 Ved alrededor del cuerpo de Heracles los numerosos nudos de la cuerda que est sujeta a las columnas ptreas de palacio.

    (Sale Anfitrin.)

    CORIFEO. Mas aqu est el anciano, como ave que lamenta el dolor de sus hijos sin alas, con lento pie 1040 marcando amarga marcha.

    , - ' -

    ANFITRIN. Ancianos cadmeos, silencio,

    silencio! No dejaris que, entregado al sueo, olvide por completo su desdicha?

    , , 1045 .

    CORO. Con todas mis lgrimas te lloro,

    anciano, 1045 y a estos hijos y a esta victoriosa cabeza.

    , , , ' ' ' . 1050

    ANFITRIN. Alejos por ambos lados, no hagis ruido, no gritis, no despertis a quien 1050 profundo sueo duerme.

    . '...

    CORO. Ay de m! Qu cantidad de sangre...

    me haris morir!

    , ' .

    ANFITRIN. Ay, ay!

    CORO. ... se extiende ante mis ojos!

    48 Procne, hija del rey de Atenas, Pandin, mat a su hijo Itis para vengarse de su marido Tereo, rey de Tracia. Su

    muerte puede llamarse sacrificio a las Musas, porque Procne fue convertida en ruiseor y canta incesantemente a su hijo (cf. Troyanas 1244 y sigs.).

  • 38

    Eurpides H e r a c l e s . ', ' , 1055 , .

    ANFITRIN. No cantaris los ayes de este treno en silencio, ancianos? 1055 Cuidado, no despierte y afloje las ligaduras, no acabe con la ciudad entera y con su padre, y destruya el palacio.

    ' .

    CORO. No puedo, es superior a mis fuerzas.

    , . 1065

    1060 ANFITRIN. Silencio!, que oiga su

    respiracin; silencio!, que aplique el odo.

    CORO. Duerme?

    , ' , , - , .

    ANFITRIN. S, duerme un sueo, un sueo de muerte quien mat a su esposa, quien mat a sus hijos disparando con vibrante arco.

    CORO. Lamenta ahora... . 1065

    1065 ANFITRIN. Si, lamento.

    CORO. ... la muerte de los nios. .

    ANFITRIN. Ay de m! .

    CORO. ... y de tu propia hija. .

    ANFITRIN. Ay, ay! . . .

    CORO. Oh anciano!... , . 1070

    ANFITRIN. Calla, calla, se despierta, se da la vuelta. 1070 Voy a esconderme en el palacio.

  • 39

    Eurpides H e r a c l e s .

    CORO. nimo!, la noche cubre los prpados de tu hijo.

    ' . - , ' ' , 1075 ' .

    ANFITRIN. Ved, ved. La luz abandonar ante estos males no rehuyo, ms si me mata a m, su padre, 1075 a estos males aadir otros males y ante las Erinias tendr que responder del parricidio.

    ' , . 1080

    CORO. Entonces tenas que haber muerto,

    cuando ibas a vengar la muerte de los hermanos de tu esposa 1080 devastando la ciudad riberea de los Tafios.

    , , ' . ' . 1085

    ANFITRIN. Huid, huid, ancianos! Lejos del palacio dirigid los pasos, huid de un hombre enloquecido que se est despertando. Bien pronto va a arrojar un crimen sobre otro y 1085 atravesar en frentica danza la ciudad de los cadmeos.

    , ' ' , '

    CORIFEO. Zeus, por qu te has ensaado con

    tanto odio contra tu propio hijo? Por qu lo has arrastrado a este pilago de males?

    XODO (1088-1428) ' , ' 1090 ', , . , , 1095 , ' ' , ' ' . 1100 , ' ', .

    HERACLES. (Despertando.) Vaya! Ya

    recobro el aliento y puedo contemplar lo que deba: el aire, la tierra y este arco de Helios. 1090 He cado como en un torbellino, como en una terrible confusin de la mente, y la respiracin de mis pulmones se eleva febril, irregular. Mas... por qu como nave anclada tengo sujetos a estas correas 1095 mi joven pecho y mi brazo?...Por qu estoy tendido junto a esta piedra labrada partida por la mitad y ocupo un sitio cercano a unos cadveres? Esparcidos por el suelo estn mi veloz lanza y mi arco que, como fiel escudero, 1100 antes protega mi costado y era protegido por m.

    No habr vuelto de nuevo al Hades, habiendo re-corrido el doble estadio de Euristeo?49. Mas no, pues ni veo la roca de Ssifo, ni a Plutn ni al cetro de la hija de Demter. 1105 En verdad, estoy asombrado. Dnde estoy que me hallo tan impotente? Eh, eh! Quin de mis amigos est cerca o lejos para

    49 Verso corrupto. Seguimos la conjetura de GRGOIRE sin excesiva convlccin. La atractiva restauracin de

    WILAMOWITZ (que acepta ntolis de PIERSSON y cambia moln por dramn) es, paleogrficamente, imposible de probar; aunque es posible que la repeticin errnea de eis Hadou haya entraado la prdida irremediable de una palabra. El sentido, en todo caso, es: no habr realizado un camlno de ida y vuelta a Hades como si se tratara de una carrera en el estadio? (daulos).

  • 40

    Eurpides H e r a c l e s ' 1105 , , .

    curarme de esta mi incapacidad de reconocer las cosas? Pues no reconozco con claridad ninguna cosa familiar.

    ,

    ANFITRIN. Ancianos, me acercar a mi

    propia perdicin? , . 1110

    1110 CORIFEO. S, y yo contigo; no quiero

    abandonarte en el infortunio. , ,

    HERACLES. (Reconoce a Anfitrin.) Padre,

    por qu lloras y cubres tus ojos al acercarte a tu hijo ms querido?

    .

    ANFITRIN. Oh hijo! Pues hijo mo eres, aun

    en la desgracia. ' ,

    HERACLES. ES que me sucede algo

    lamentable y por esto lloras? , , . 1115

    1115 ANFITRIN. Algo que hasta un dios que

    lo sufriera llorara. ' , ' .

    HERACLES. Hinchado es tu lenguaje, mas de

    mi suerte an no has dicho nada. , .

    ANFITRIN. T mismo lo ests viendo, si es

    que ya ests en tu sano juicio. ', .

    HERACLES. Dmelo, si significa algo nuevo

    en mi vida. ' AEHIOUV , .

    ANFITRIN. Si ya no eres un bacante de

    Hades te lo dir. , ' . 1120

    1120 HERACLES. Ay! Sospechoso resulta

    esto que has dicho hablando de nuevo con enigmas. ' .

    ANFITRIN. Estoy comprobando si tu juicio

    es firme de verdad. .

    HERACLES. No recuerdo haber tenido la mente enloquecida.

    , ,

    ANFITRIN. (Dirigindose al Coro.)

    Ancianos, desato las ligaduras de mi hijo o qu hago?

  • 41

    Eurpides H e r a c l e s ' ' .

    HERACLES. S, y dime quin me las at, pues

    me producen vergenza. ' ' . 1125

    1125 ANFITRIN. (Desatndolo.) Tamaos

    son los males que conoces; deja el resto.

    HERACLES. Es que basta el silencio para

    saber lo que quiero? , ' '

    ANFITRIN. Zeus, t que ests sentado en tu

    trono junto a Hera, ves esto? '

    HERACLES. Pero es que he sufrido algn

    ataque desde all? .

    ANFITRIN. Deja a la diosa y atiende a tus

    males. . 1130

    1130 HERACLES. Estoy perdido; va a

    comunicarme alguna desgracia. , .

    ANFITRIN. Mira, contempla a tus hijos

    cados. '

    HERACLES. (Se levanta.) Ay msero de m!

    Qu visin es sta que contemplo? , , .

    ANFITRIN. Hijo, has declarado a tus hijos

    una guerra sin nombre.

    HERACLES. A qu guerra te refieres? Quin

    ha matado a stos? . 1135

    1135 ANFITRIN. T y tu arco y quien de los

    dioses sea culpable. ' .

    HERACLES. Qu dices? Qu he hecho? Oh

    padre, heraldo de desgracias! ' ' .

    ANFITRIN. Estabas loco. Me pides una

    aclaracin que duele. '

    HERACLES. Entonces soy yo tambin el

    asesino de mi esposa? .

    ANFITRIN. Todo esto es obra de tu solo

    brazo.

  • 42

    Eurpides H e r a c l e s . 1140

    1140 HERACLES. Ay, ay, me envuelve una nube de lamentos!

    .

    ANFITRIN. Por eso lamento tu suerte.

    ' '

    HERACLES. Acaso destruy tambin el palacio la diosa que me enloqueci?

    .

    ANFITRIN. Slo s una cosa: todo lo tuyo se

    torna en infortunio. '

    HERACLES. Y dnde me alcanz el aguijn?

    Dnde acab conmigo? ' . 1145

    1145 ANFITRIN. Cuando purificabas con

    fuego tus manos junto al altar. 1150 , ' ' ' ' . , 1155 ' . , , ' . 1160 .

    HERACLES. Ay de m! Qu me importa la vida cuando soy el asesino de mis queridos hijos? No ir a saltar desde una roca escarpada o a arrojar la espada contra mi vientre 1150 para vengar en m la muerte de mis hijos? O quemar mis carnes con el fuego50 para apartar de mi vida el deshonor que me aguarda? (Ve acercarse a Teseo por la izquierda con un grupo de seguidores.) Mas he aqu que se acerca Teseo, pariente y amigo mo, estorbando mis proyectos de muerte. 1155 Me ver y la mancha del parricidio saltar a los ojos del ms querido de mis huspedes! Ay de m! Qu har? Dnde podr hallar un lugar solitario para mis males? Ir hacia el cielo o debajo de la tierra? Vamos, voy a envolver mi cabeza en la oscuridad51, 1160 pues siento vergenza de los males que he perpetrado. Y ya que he trado hacia m la sangre culpable de esto, nios, no quiero perjudicar a quienes son inocentes.

    (Se sienta entre los cadveres acurrucndose y cubierto por el manto.)

    , ' , , , , . 1165 '

    TESEO. Anciano, he venido con estos jvenes atenienses, que montan vigilancia junto a la corriente del Asopo52, 1165 para traer a tu hijo armas aliadas. Ha llegado a la ciudad de los Erecteidas el rumor de que Lico se ha apoderado violentamente del cetro del

    50 Hay corrupcin en la palabra central de este verso (emn de los Mss. atenta contra la mtrica), pero sta no altera

    sensiblemente el sentido. 51

    Verso corrupto. Los diversos autores que han intentado enmendarlo introducen de una forma u otra la palabra man-to. I. e. ocultar mi cabeza en la oscuridad del manto, etc. 52

    El ro Asopo trazaba la frontera entre Beocia y el tica en la poca de la epopeya (cf. Ilada IX 287).

  • 43

    Eurpides H e r a c l e s . ' , , , , 1170 . ' ' 1175 , ' .

    pas y os ha declarado la guerra. 1170 Me he presentado aqu, anciano, devolviendo el favor que antes me hizo Heracles salvndome de los infiernos, por si necesitis de mi mano aliada.

    Mas por qu el suelo est cubierto de cadveres? No me habr retrasado y llegado tarde a estos males recientes?Quin ha matado a estos nios? 1175 De quin es esposa sta que aqu veo? Los nios, desde luego, no suelen afrontar el combate, conque sin duda me encuentro en presencia de una desgracia fuera de lo comn.

    . . .

    ANFITRIN. Oh soberano de la colina

    plantada de olivos!... '

    TESEO. Qu tratas de decirme dirigindote a

    m con tan triste proemio? . 1180

    1180 ANFITRIN. Hemos padecido

    sufrimientos crueles siso de parte de los dioses. , '

    TESEO. Quines son estos nios sobre los que

    viertes un torrente de lgrimas? , ' , .

    ANFITRIN. Los engendr mi desdichado

    cachorro; los engendr y los mat, cargando con la sangre del crimen.

    .

    TESEO. No pronuncies blasfemias.

    . 1185

    1185 ANFITRIN. Se lo ordenas a quien

    desea no blasfemar. .

    TESEO. Qu palabras terribles las tuyas!

    ' .

    ANFITRIN. Hemos desaparecido,

    desaparecido con alas.

    TESEO. Qu dices? Qu hizo?

    . 1190

    ANFITRIN. Extraviado por un ataque de

    locura y 1190 con las flechas teidas en la hidra de cien cabezas.

    TESEO. Esto es obra de Hera. (Descubre a

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    Eurpides H e r a c l e s ' ' ' , Heracles.) Y quin es ste que est entre los

    cadveres, anciano? , - .

    ANFITRIN. se es mi hijo, mi hijo, el de

    muchos trabajos, el que con los dioses march a la guerra contra los Gigantes armado de escudo, a la llanura de Flegra.

    1195

    1195 TESEO. Qu horror! Qu hombre naci

    tan desdichado? .

    ANFITRIN. Conocer no podras a otro mortal ms trabajado, ms asendereado.

    TESEO. Y por qu oculta su triste rostro con

    el peplo? 1200 .

    ANFITRIN. Se avergenza de tu presencia,

    1200 de tu amistad de hermano y de la sangre derramada por sus hijos.