Universidad Nacional Autónoma de MéxicoPensamiento Social y Sociedad I

Arroyo de la Fuente Miguel ArturoGrupo: 0007

Control de Lectura:¿Qué es la propiedad?

(Capítulos I, II y III)

En este texto, Pierre-Joseph Proudhon nos propone un análisis científico de la desigualdad que existe en la sociedad de sus tiempos –y que sorprendentemente se manifiesta en nuestros días-, y nos mostrará la causa de esta, que es indudablemente: La ignorancia, llevando consigo inherentemente a la propiedad; al mismo tiempo nos invita a seguir su doctrina un tanto anarquista, pero que de alguna modo viene a formular un equilibrio “justo” entre las dos clases que se oponen. La lectura comienza exponiendo el porqué, los lectores podemos estar en contra de la idea de propiedad-robo. Nos dice que el hecho de aceptar la propiedad como algo natural, es resultado de la continuidad de una doxa que llevamos con nosotros hace ya mucho tiempo. Nuestro ignorancia y poca “meditación acerca del tema nos ha hecho recibirla como algo correcto y normal en cualquier sociedad moderna. Hemos categorizado, según el autor, esta premisa de forma innata; la rutina ha logrado que concibamos a esta como un objeto inmutable, como un hilo vital dentro del progreso de la vida social. La propiedad se ha transformado simplemente en un axioma. Pero como todo pensamiento esta sujeto ha ser cambiado por su deficiencia al responder todas los cuestionamientos que sobre este surjan. Dice Proudhon, que a diferencia de los errores que pudiesen cometerse dentro del conocimiento de alguna ciencia dura, en la ciencia social cualquier error, repercute en todo el futuro de las naciones, pero “en vez de buscar la causa del mal en su inteligencia y en su corazón, el hombre la imputa a sus maestros, a sus rivales, a sus vecinos, o a el mismo”1, es decir tenemos nuestra mira desviada a circunstancias modernas, y no volteamos al pasado para encontrar las causas y soluciones. Si el hombre conociera este principio que causa todo el mal y desigualdad social, dejaría de ser codiciado. El autor deslinda de este mal a la religión, aceptando que si, esta ha sido la culpable de las peores batallas, de los mas despiadados abusos, sin embargo, al ser separada del Estado, notamos que la miseria sin la iglesia, continua en nosotros. El problema radica no radica intrínsecamente en las leyes estipuladas, porque estas no son más que las vías mediante las cuales ejercemos la visión que tenemos por justo. Esta, la justicia, es la clave de nuestro error, lo que concebimos como justo, es incorrecto, y si la justicia falla, toda la estructura social se cae. Todas las reformas realizadas en la revolución francesa, significaron un progreso, pero quedaron demasiado cortas, o iguales, para ser una revolución. La desigualdad económica se mantuvo, el poder se mantiene en las manos de uno, el despotismo sigue. Fue un movimiento inducido por el coraje, pero falto ser guiado por la razón y el método para ser exitoso, revolucionario. Jesucristo vino a armar una revolución, sus palabras y doctrinas impulsaban al hombre a rechazar todo aquello que en ese momento consideraban valioso: las propiedades, el poder, 1 Proudhon, Pierre-Joseph, “¿Qué es la propiedad?”. Pág. 36 Revolución: concebida por el mismo Proudhon como un cambio radical y beneficioso en todos los principios. Cualquier transformación parcial, es tan solo progreso.

la esclavitud y en algún momento, declara el autor. La revolución fue un hecho; pero al desviar la atención al aparecimiento de las ideas( el surgimiento de Jesús), toda las sociedad que se proponía, fue manipulada por las iglesias, y se quebrantó el espíritu de progreso; caímos de nuevo de la degeneración. Los errores de la declaración de derechos, radican en obedecer a la voluntad, y no al razonamiento del hecho2. Se supone que todos los hombres son potenciales de llegar al poder, sin embargo, importaba el pagar o no impuestos, no constituían sal soberanía los hombres más aptos para ello, sino los mas egoístas, que buscaban las riquezas que ser funcionario público otorgaba. Lo que también genera desigualdad en la fortuna. La revolución francesa erró en los puntos que consideró causales de desigualdad, y al contrario, la mantuvo. Se extendió el derecho de propiedad a todos los hombres, pero no se transformó el derecho mismo, haciendo que la posibilidad de esta igualdad( en cuanto a medios se refiere)se quedara en las mismas circunstancias. La justicia expresada en este documento(que es la base de muchas constituciones incluyendo la mexicana) es el producto absurdo de una confusión de ideas. Señala Proudhon que el ataque a la propiedad, que es la raíz de todo el mal social, inspirada por la ignorancia, es el único medio para la revolución y el bienestar general. Con una sencillez, nos explica el porque de la extinción de la propiedad y de la herencia: Así como se abolió el beneficio nobiliario, adquirido por nacimiento, para dar igualdad a todos los hombres, debemos también exterminar los privilegios económicos que la herencia produce, para que todos crezcamos parejos, en las mismas condiciones, con las mismas posibilidades. Proudhon expone como la definición del derecho de propiedad en todas las Constituciones son las que permiten que su uso sea un abuso. Ejemplifica que un dueño puede dejar pudrir los frutos de su árbol, no hay un administración equitativa de este, acaparan más de lo que necesitan alienando a los proletarios de algo que ellos si necesitan, y de aquí parte , y de aquí parte la división entre derecho en ó sobre la cosa, y tener derecho a la cosa. Todos tenemos derecho a los medios de producción, sin embargo solo algunos tienes derecho sobre el, es por esto que el autor no encuentra otra forma de equilibrar esa pertenencia, que quitarla a todos en vez de repartirla, que obviamente es mas difícil. La declaración de la propiedad como derecho es una derivación de una opinión arbitraria de fundamentaos equívocos, ya que esta premisa, rechaza la igualdad por los términos antes explicados. La posibilidad ecuánime de tener propiedad existe solamente en la esencia ya que la gran mayoría de los ciudadanos no la disfruta. Todo lo contrario con los derecho verdaderamente naturales, como la libertad, que la misma ley preserva por varios medios, mientras que con la propiedad solo un artículo lo prescribe. “!cuanta diferencia en la propiedad![...] no esta reconocida por nadie: leyes, usos, costumbres, conciencia pública y privada, todo conspira para su muerte y para su ruina”3. Los impuestos, para Proudhon, son la muestra perfecta del mal que produce la propiedad. Los ricos tienen que pagar más tributaciones que los pobres, por tener mayores propiedades, mayores riquezas, pero no es justo que se le cargue más al rico cuando los gastos del Estado son igual para los dos sectores, o incluso menos para los propietarios que para los proletarios, por eso hay que exterminarla, para eliminar estas inequidades. La codicia por la propiedad solo genera guerras entre los acaudalados y los pobres, hay que aniquilarla, dice Proudhon. La propiedad no puede ser un derecho natural estrictamente porque no puede ser para todos, esto iría en contra de su principio mismo que es la 2 Véase en la Pág.: 453 Proudhon, Pierre-Joseph, “¿Qué es la propiedad?”. Pág. 55

individualidad, el absolutismo particular sobre un objeto. Los bienes tendrían que ser sociales para su ecuánime repartición. Esta , la propiedad, va en contra de los otros tres derechos que si son social y particularmente naturales(seguridad, igualdad y libertad). Es ilógico aplicar una ley o derecho del cual no se sabe su origen, porque por ende, tampoco se conoce sus limites, sus volantes.