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Elángeldelaventanadeoccidente,últimanoveladeMeyrink,narralafantásticahistoriadeun hombre que, tras hacerse cargo de los papeles de un primo difunto, comienza a tenerpesadillasyvisionessobresuantepasado,elenigmáticoJohnDee,célebreocultista inglésque vivió entre 1527 y 1609. Recibe entonces la visita de dos extraños personajes, elmisteriosoLipotiny laseductoraAssjaChotokalungin,que le reclaman la legendariapuntade lanzadeHoëlDhat,de laqueélnadasabe.Laacciónde lanovela,que transcurreenInglaterra,PoloniayPraga,oscilaentrelorealyloonírico,yviajadesdelosalboresdelsigloXXal reinadode Isabel I.El relatopretende ilustrar la leydelkarma,asícomoexponer losfundamentos de la verdadera alquimia: procurar al ser humano un vehículo inmortal paralograrlaresurreccióndelacarne.

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GustavMeyrink

ElángeldelaventanadeoccidenteePubr1.0

T it ivillus20.08.15

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Títulooriginal:DerEngelvomWestlichenFensterGustavMeyrink,1927Traducción:Desconocido

Editordigital:TitivillusePubbaser1.2

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ELÁNGELDELAVENTANADEOCCIDENTE

¡Quésentimientotanturbador!¡Tenerenlamano,atadoysellado,ellegadodeunmuerto!Escomositenueseinvisibleshilos,parecidosalosdelastelasdearaña,seescapasendeél,paraconducirtemuchomásallá,enunimperiodetinieblas.

El sabio cierre del paquete, el papel azul cuidadosamente plegado sobre el papel de embalaje,prueban,conunsilenciosotestimonio,laintenciónyelgestopremeditadodealguienvivoquesentíaacercarselamuerte.Reúne,clasificayenvuelve:cartas,notas,cajitasimpregnadasdesuimportanciaantiguayalavezdesudecadenciaactual,vacíasderecuerdosyahamuchodesvanecidos;alhaceresto, imaginavenir unheredero, un lejanopersonaje, casi un extraño—¡yo!—unhombrequenoconocerá su desaparición y sólo se afectará si el paquete cerrado, abandonado en el reino de losvivos,encuentraelcaminohastaél.

Está consteladode imponentes sellos rojos, losdemiprimo JohnRoger, con las armasdemimadreydesufamilia.Desdeyahacíamucholosprimosylastíasllamabanaestehijodeunhermanodemimadre:«Elúltimodesuraza»,yestaspalabras,apartedelasconsonanciasextranjerasdesunombre,resonabanenmioídocomountítulosolemne,cuando,conunorgullounpocorisible,laspronunciabanconsus labiossecosyarrugados,exhalandoenunapequeña tosel restodeunarazacasiextinguida.

El árbol genealógico —en mi imaginación por la imagen heráldica— está curiosamenteramificadoen tierraextranjera.SehaenraizadoenEscocia,haprosperadoen todaInglaterra,pasaporestaremparentadodecercaconunadelasmásimportantesfamiliasdelPaísdeGales.Vigorososbrotes se hanmultiplicado en Suecia, en América, finalmente en Estiria y en Alemania. En todaspartes se han debilitado y en Gran Bretaña el tronco se está secando. Un último renuevo resistíatodavía, aquí, en el sur deAustria:mi primo JohnRoger.Y este último renuevo, Inglaterra lo hasegado.

«Su Señoría», mi abuelo materno, todavía tenía en mucho las tradiciones y los títulos de susantepasados. ¡Y tan sólo era un simple ganadero de Estiria! JohnRoger,mi primo, había tomadootros caminos; se dedicó a las ciencias naturales y a una especie de medicina diletante de lapsicopatologíamoderna, hizograndesviajes y se instruyó conunagranperseverancia enVienayZurich,AlepyMadras,AlejandríayTurín,cercademaestrosdiplomadosono,cubiertosdelpolvodeOrienteoenarbolandolacamisaalmidonadadelosOccidentales,peroeminentesconocedoresdelosabismosdelalma.

Algunosañosantesdedeclararse laguerra se instalóen Inglaterra:debióde irpara investigarsobrelaexistenciayelorigendenuestrafamilia.Nosénadamás,sóloqueallíhabríadescubiertoalgúnraroyprofundosecreto.Fueentoncescuandolaguerralesorprendió,ycomoeraoficialdereserva austríaco, se le internó; cuando salió del campo, al cabo de cinco años, era un hombreacabado.YanocruzóelcanaldelaManchaymurióenalgúnlugardeLondres,dejandotrasélunospocos bienes sin importancia, y a partir de ahora dispersados entre los diversos miembros de lafamilia.

Metocaensuerte,ademásdealgunosrecuerdos,elpaqueterecibidohoy,enelcual,escritoporsupropiamano,hapuestominombre.¡Muertoeselárbol,excluidoelblasón!

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Pero es sólo un pensamiento vano por mi parte: ningún heraldo procede con semejanteproclamacióntansolemneysombría.

Excluidoelblasón,murmurabamientrasrompíalossellosrojos.Yanadiemáslospondrá.Sonmajestuosas,espléndidasarmasque…¿queyorompo?Extrañaimpresión:¿noescomoside

golpeyodijeraunamentira?Sí, yo rompo estas armas, pero quién sabe, ¡quizá las despierte de un largo sueño!El escudo,

bifurcadoensubase,llevaaladerechasobreuncampodeazurunaespadadeplataenpalosobreunacolina de sinople —alusión al señorío de Gladhill de nuestros antepasados en Worcester. A laizquierda,enuncampodeplata,unárbolverde;entresusraícesnaceunafuentedeplata,acausadeMortlakeenMiddlesex.Y,enlaparteverdequeseterminaenpunta,unalámparaencendidarecuerdalas lámparas de los primeros cristianos: símbolo insólito, que los heraldistas han consideradosiemprecongranasombro.

Dudoen romperelúltimosello, tanbellamentepuestoparaelplacerde losojos.¿Peroquéeseso? Debajo del escudo. ¡No es del todo una lámpara encendida! ¡Es un cristal! ¡Un dodecaedroregular, aureoladode gloriosos rayos! ¡Sí, es un carbúnculo radiante, no una humilde lámpara deaceite! y de nuevo se apodera demí una extraña turbación, una emoción que querría abrirse pasohastamiconciencia,yquehabríadormidodesde,sí,desdehacíasiglos.

Lapissacersanctificatusetpraecipuusmanifestationis[1].

Observomoviendo la cabeza esta incomprensible novedad en el viejo blasón tan familiar. ¡Unselloqueestoysegurodenohabervistojamás!OmiprimoJohnRogerlohahechocomponer,o…sí, está claro: el corte, tan limpio, esmoderno, indudablemente: JohnRoger ha hecho fabricar enLondresunnuevosello.¿Peroporqué?—¡Acausadela lámpara!—Lodescubrodeprontocomounacosaquecaeporsupropiopeso:lalámparasóloeraunacorrupcióntardíayestrambótica.Desdesiempreelblasónhallevadouncristalradiante.—¿Peroylainscripción?—Descubrounasingularcomplicidadentreestecristalymimundointerior.¡Cristalderoca!Recuerdoqueenunaleyenda,uncarbúnculoresplandecíacontodossusdestellosenelcénit,perolaheolvidado.

Una última duda.Al final rompo el último sello, deshago los nudos.Delantemío se esparcenviejas cartas, actas, archivos, extractos, amarillentos pergaminos cubiertos de caracteresrosacrucianos,diarioíntimo,imágenes,pentáculosherméticosmásomenospodridos,algunassuciasencuadernacionesconviejoscobres,unmontóndecuadernosatadosjuntosdetodaslasmaneras;ytambién pequeños cofres demarfil llenos de sorprendentes telas,monedas, fragmentos demaderaincrustados de plata y oro, amanera de reliquias; y luego, huesecillos pulidos y tallados en carascomo cristales, muestras del mejor carbón fósil de Devonshire, y buen número de objetosheteróclitos.Emergeunanota,conlaausterayacompasadaescrituradeJohnRoger:

¡Leeonoleas!¡Quemaopersevera!Añadepolvoalpolvo.Nosotros,delarazadeHoélDhat,príncipesdeGales,estamosmuertos.Mascee.

¿Me son destinadas estas frases?Me pregunto. Es probable. No comprendo nada, pero nomesientoimpelidoarompermelacabezaenella.Semejounniñoquedetodosedijera:«¡Quénecesidad

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tengo de saberlo ahora! ¡Ya lo aprenderémás tarde pormímismo!». ¿Pero, a pesar de todo, quésignificaestapalabra«Mascee»?Picamicuriosidad.Abroeldiccionarioyleo:

«Mascee=expresiónanglo-chinaquequieredecirpocomásomenos:

¡Quéimporta!UnsentidomuycercanoaldelNitchevoruso».

***

Yaeramuyentradalanochecuandoayermelevantédelamesa,despuésdeunalargameditaciónsobrelasuertedemiprimoJohnRogerysobrelafugacidaddenuestrasesperanzasydetodaslascosas,dejandoparamañanaun inventariomásdetalladodemiherencia.Mepuseen lacamaymedormírápidamente.

Aparentementelaideadelcristalenelblasónmehabíaseguidohastaenmisueño;entodocaso,nuncacreohabertenidounsueñotansingular.

Enalgunaparte,sobremí,relucíaelcarbúnculoarribaenlastinieblas.Unrayoemanadodesupalidezgolpeómifrenteytuvelanetapercepciónqueasíseestablecía,entremicabezaylapiedrapreciosa, una ligazón importante. Intentaba sustraerme de ella, pues una angustia me había asido,moviendomicabezadeunladoaotro,peroera imposibleescaparal rayo.Mientrasmeesforzabagirandoy volviendo a girar la cabeza, tuve una experiencia desconcertante: por decirlo de algunamanera, me pareció que el rayo del carbúnculo todavía permanecía clavado enmi frente cuandohundíamirostroenlaalmohada.Ytuvelaprecisasensaciónqueunnuevorostrosemoldeabadetrásdemicabeza:mecrecíaunasegundafaz.Nosentíaningúnespanto;peroeramolestonopoderyadeningunamaneraescaparalrayo.

LacabezadeJano,medecía,peroenmisueñosabíaqueesoerasimplementeunareminiscenciademishumanidadeslatinas,yaqueintentabatranquilizarme;porlotanto,noestabatranquilo.¿Jano?—No,esestúpido:¡Jano!¿Peroqué,entonces?Conunainsistenciairritante,miconcienciaoníricaseparaba en este «y entonces qué».Además no llegaba a definir «quién era yo».Después, pasó otracosa: el carbúnculo descendió de sus lejanas alturas hasta tocar la parte superior de mi cabeza.Experimentabauna sensaciónde extrañeza impensable, tanto, queno sabría formularla.Unobjeto,caído de un lejano astro, nome habría podido sorprendermás.No sé por qué cuando reflexionosobreestesueño,piensosiempreenlapalomaquedescendiódelcieloenelbautismodeJesúsporelascetaJuan.Cuantomásseacercabaelcarbúnculo,másderechocaíaelrayosobremicabeza,quierodecir,sobrelalíneaquepartíamisdoscabezas.Pocoapocoexperimentabaunasensacióndeardor,comparablealadelhielo,yestasensaciónnuevaparamí,medespertó.

Hepasadotodoeldíasiguienterumiandoestesueño.Dudoso,perezoso,unmediorecuerdoemergíadelasbrumasdemiprimerainfancia.Setratadeunafábula,deuncuento,deunaficciónodeunalectura—quizádecualquierotracosa

—dondeaparecíanuncarbúnculoyunrostro,ounaforma,quenosellamaba«Jano».Unaimagenmuyvaporosaemergíadelasprofundidadesdemimemoria:

Cuando, en mi infancia, me sentaba sobre las rodillas de mi abuelo, el que se llamaba «SuSeñoría» y que a pesar de todo no era más que un pequeño propietario estiriano, el viejo sire,mientrasyoasegurabamiposiciónahorcajadassobresusrodillas,mecontabaamediavoztodotipo

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dehistorias.Todoloqueheretenidodelaleyendasedesarrollabasobrelasrodillasdeesteabuelo,élmismo

mediolegendario.Hablabadeunsueño:«Lossueños,hijomío,sontítulosmásgrandiososquelosdelanoblezaydelosseñoríos.Noloolvides.Siteconviertesenelherederodignodeestenombre,telegaréquizáundíanuestrosueño:elsueñodeHoelDhat».Yentonces,conunavozapagada,cargadademisterio,enunsusurrosobremioreja,comosi temieraqueelairede lahabitaciónhubieradesorprender sus palabras, mientras continuaba haciéndome saltar en sus rodillas, me habló de uncarbúnculoenunpaísalqueningúnmortalpuedellegaramenosdeserintroducidoenélporquiénhavencidolamuerteyposeerunacoronadeoroyuncristalsacadodeldoblerostrode…¿de?Creorecordarquehablabadeestacriaturaambivalentedelsueñocomodeunantepasadoodeungeniotutelardenuestrafamilia.Peroahímimemoriayafalla:todoflotaenunanieblaclaroscura.

De todosmodos, nunca había soñado nada semejante hasta hoy. ¿Era el sueño de Hoel Dhat?Comentarmásnoserviríadenada.Porotrapartemeha interrumpido lavisitademiamigoSergeLipotine,elviejoanticuariodeWerrengasse.

Lipotine—apodadoen laciudad«Nitchevo»—antiguoanticuario titulardeSuMajestadelZar,siguesiendo,apesardesusvicisitudes,unpersonajenotableytípico.Antesmillonario,conocedor,expertodefamamundialenelarteasiático;hoyunpobreviejorevendedorqueesperaunamuerteciertamientrasvendebaratijasmásomenoschinas;siemprezarista,hastalaméduladeloshuesos.Deboasuolfatoinfaliblelaposesióndealgunaspiezasincomparables,y,cosacuriosa,cadavezqueme apasiono por un objeto particular, que creo difícilmente asequible, cada vez, Lipotine viene avermecasiinmediatamenteymetraeunobjetosimilar.

Hoy,comonohabíanadainteresante,lemuestroelenvíodemiprimodeLondres.Alabóunpocolasviejasedicionesylasdeclaró«rarísimas».Dosespeciesdemedallonesllamaronrápidamentesuinterés: buenRenacimiento alemándenotandomásque las cualidades del oficio.Vio finalmente elblasóndeJohnRoger,tuvounmovimientodesorpresayseperdióenreflexiones.Lepreguntéloqueleintrigaba.Alzóloshombros,encendióuncigarrilloyguardósilencio.

Unpocomástardecharlábamosdebagatelas.Pocoantesderetirarsemedijo:«¿Sabéis,queridoamigo, que nuestro buen Michel Arangelovitch Stroganof no durará mucho más que su últimopaquetedecigarrillos?Siguelanorma.¿Quépodríahipotecarenelmontedepiedad?Pocoimporta.Ésteeselfin,paranosotroslosrusos:vamosenelsentidodelsol,nacidosenelesteparanaufragareneloeste.¡Quéosvayabien!».

Lipotine se marchó, yo seguía perdido en mis pensamientos. Así Michel Stroganof, el viejobarón,unademisbuenasrelacionesdecafésepreparabaaemigraralverdereinodelosmuertos,alpaísverdedePerséfona.Desdequeleconocísólovivíadetéydecigarrillos.HabíahuidodeRusiayembarrancadoaquí,noposeíanadamásqueloquellevabaencima,asaber,mediadocenadesortijasadornadasdebrillantesyelmismonúmero,másomenos,degrandes relojesdeoro: todo loquehabíapodidometerensusbolsillosantesdecruzarlaslíneasbolcheviques.Vivíadeestasjoyas,conla insolenciay lasmanerasdeungran señor, sólo fumabacigarrillosde losmáscaros,quehacíatraer de Oriente váyase a saber por qué medio. «Transformar las cosas de la tierra en humo, legustaba decir, puede ser el único placer que podemos dar a Dios». Lo que no le impedía morirlentamente de hambre, y cuandono estaba sentado en la pequeña tienda deLipotine, helarse en subuhardilladealgúnbarriobajo.

AsíelbarónStroganof,antiguoplenipotenciariodeSuMajestadImperialenTeherán,agonizaba.

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«Pocoimporta.Sigueelorden»,comodiceLipotine.Con un suspiro pensativo, por ociosidad,me vuelvo con losmanuscritos y los libros de John

Roger.Cojoestooaquelloalazarymeabsorboensulectura.

***

Hepasadolajornadacompulsandolosdocumentosdejadospormiprimo,yheconcluidoqueerainútilesperarpoderordenarenunconjuntocoherenteestosfragmentosdeantiguosestudiosyestasviejasnotas:nadasepuedeedificardeestosescombros.«Leeoquema»,memurmurabasincesarunavozinterior.«¡Elpolvoalpolvo!».

Ensuma,¿quétengoyoqueverconestahistoriadeunciertoJohnDee,baróndeGladhill?¿Quéeraunviejoinglésinclinadoaltedioysegúntodopareceunantepasadodemimadre?

Apesardetodonopuedodecidirmeaenviarestefárragoaldiablo.Aveceslascosastienenmáspodersobrenosotrosdelquenosotros tenemossobre lascosas: tiendena losvivosunaespeciedetrampaalhacersepasarpormonstruos.No,nomedecidoainterrumpirunalecturaque,dehoraenhora,sinsaberdecirporqué,mecautivamás.Delsenodeestecaosfragmentarioemergeunaformacrepuscular,bellaytriste:ladeunespíritusuperior.Deunhombreatrozmenteextraviadoquebrillóen la mañana de su vida para ver amontonarse las nubes en su madurez: perseguido, burlado,crucificado,reconfortadoconhiélyvinagre;unhombrequerozóelinfierno,unelegidoportanto,queafindecuentasfueelevadoalasaltasesferasdelcieloyaqueeraunalmanoble,un«sapiente»audaz,unespírituardiente.

No,lahistoriadeJohnDee,descendientedeunodelosmásnobleslinajesdelaisla,delosviejospríncipesycondesdeGales,miantepasadoporsangrematerna,nohadehundirseenelolvido.

Pero no puedo escribir como querría lo que veo en ella.Me faltan casi todas las condicionesprevias: laposibilidaddeunestudiopersonalyeleminente saberdemiprimoenundominioqueunos califican de «oculto»; del que algunos creen desembarazarse poniéndole el término de«parasicología».Carezco,enestamateria,deexperienciaydecriterios.Nopuedohacernadamásque intentar, conuncuidadoescrupuloso, aportar a este embrollodevestigiosunordenyunplanracional:«Preservarytransmitir,siguiendolaspalabrasdemiprimoJohnRoger.

Ciertamente,estonoesmásquedisponerunfrágilmosaico.¿Perolosrestosdeunasruinasnosonamenudomásemocionantesqueunacasacoqueta?Enigmáticaesasonrisadeloscontornosdeunabocaquedesmientelaprofundamelancolíaligadaalanariz:enigmática,esamiradafijabajounafrenteausente;enigmáticoeserelámpagodefrescordeprontorosa,sobreunfondoqueseesteriliza.Enigmático,enigmático…

Mecostarásemanas,sinomeses,defatigosotrabajodesenmarañar,primeraetapaindispensable,estamadejayamediopodrida.Dudo:¿Debohacerlo?Situvieraunaonzadecerteza,siuninvisibleconsejero interiormesoplaseestadecisión,dejaríacon toda irreverenciaqueestebazarsehicierahumopara«darplaceralbuenDios».

CadavezseimponíamásenmíelpensamientodelbarónMichelArangelovitchStroganof,queestáapuntodemoriryyanopuedefumarsuscigarrillos,quizáporqueelbuenDiostieneescrúpulodequeunhombreletestimonietantacortesía.

***

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Hoy, otra vez, el sueño del carbúnculo. Ha sucedido como en la noche precedente, pero lasensación de frío debida al descenso del cristal hastami doble cabeza ya nome era dolorosa enabsoluto, de manera que no me he despertado. ¿Es esto debido a que el carbúnculo ha tomadoposesióndefinitivademicabeza?Nolosé.Hasidoenelinstanteenqueelrayoluminosoiluminaalavez losdos rostrosdemi cabeza, cuandohevistoque era esta criaturadedos cabezas—yporconsiguiente, otro.Me he visto, como es el caso de «Jano»,mover los dos labios de uno de losrostros,mientrasqueelotropermanecíainmóvil.Yestemudoindudablementeera«yo».El«otro»selibrabaalargosyvanosesfuerzosparaemitirunsonido,luchandoparasalirdeunprofundosueñoypronunciarunapalabra.

Finalmenteloslabiosmodelaronunalientoyexhalaronestafrasedirigidaamí:«¡No ordenes! ¡No te creas capaz! Donde la razón pone orden, provoca una inversión de las

causasprimerasypreparaladestrucción.Leeydéjateguiarporlamanoynosiembresestragos.Leeydéjateguiarpormí…»

Sentícualmartirio,enmi«otra»cabeza,elesfuerzodeestaspalabras,loque,segúnparece,medespertó.

Esextrañomiestadodeespíritu.¿Quésucederá?¿Unespectro se liberaenmí?¿Unespejismonacidoenelsueñoquieremezclarseenmivida?¿Soyobjetodeundesdoblamientodeconcienciayme volveré loco? Al contrario, me encuentro en perfecto estado de salud, lúcido, sin la menorpropensiónasentirme«doble»ymuchomenoscoaccionado,yaseaenelpensaroenelactuar.Soyabsolutamentedueñodemisemociones,demisintenciones.¡Soylibre!…

Todavía un trozo de recuerdo de mis cabalgadas sobre las rodillas de mi abuelo, viene a mimemoria;medecíaqueelgeniotutelareramudo,peroqueundíahablaría.Entoncesllegaríaelfindelosdíasdelasangre;lacoronayanosecerniríaporencimadesucabeza,sinoquereplandeceríaensuDobleFrente.

¿Jano empezaba a hablar? ¿Es el fin de los días para los de nuestra sangre? ¿Soy el últimoherederodeHoelDhat?…Noimporta,laspalabrasimpresasenmimemoriatienenunclarosentido:«¡Lee y déjate guiar pormí!».Y, «la razón provoca una inversión de las causas primeras»…Seapues, obedeceré la orden dada; pero no, no es una orden; por otra parte, me negaría a dejarmemandar,esunconsejo,sí,unconsejo,¡unsimpleconsejo!¿Yporquérazónnoloseguiría?Noloclasificaré.Transcribiréalazaraquelloquemimanoatrape.

He tomado, sinmirar, una hoja delmontón; reconozco la abrupta escritura demi primo JohnRogeryleo:

Todo ha terminado desde hace mucho. Muertos desde hace mucho tiempo están loshombresqueaparecenenestosdocumentosbiográficos, con susenvidiasypasiones: en supolvo, yo, John Roger, me atrevo a escudriñar, de la misma manera como ellos habíanactuadoen relaciónaotroshombresquehabíandesaparecidomuchoantesqueellos,comoelloshandesaparecidoparamí,hoyvioladordesuscenizas.

¿Qué es lo que está muerto? ¿Qué es lo que ha sucedido? Lo que he pensado, hecho,antaño, todavía eshoyactoypensamiento: todo loque tienepoder estávivo.Seguramente,todosnosotrosnohemosencontradoloquehabíamosbuscado;laverdaderallavedeltesorodevida,lallavemisteriosa,labúsquedadelacualbastaparamagnificarelsentidoylaobra

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detodaunavida.¿Quiénhavistoporencimasuyolacoronadelcarbúnculo?¿Nosotros,losdescubridores,quéhemosencontrado?Nadamásqueladesgraciainconcebibleylavisióndelamuerte,¡delaque,además,esdichoquedebeservencida!Perosabequelallavereposaenelabismodelasaguastumultuosas.

Quiennosesumergeensímismonolaobtiene.¿ElÚltimoDíadelaSangrenohabíasidoelobjetodeunoráculoparanuestro linaje?Ningunodeentrenosotroshavistoesteúltimodía.¿Debemosfelicitarnos?Acusarnostambién,sinduda.

Elpersonajedelasdoscabezasnosemehamostrado,apesardetodasmisevocaciones.Nohevistoelcarbúnculo.Asídebeser.Aquieneldiablonovuelvelacabezaviolentamentehacia atrás, se dirigirá irresistiblemente hacia la tierra de los muertos y no verá nuncalevantarselaluz.¿Peroaquiéndeentrenosotros,losdelasangredeJohnDee,elBaphomethahablado?

JohnRoger

Estenombre,«Baphomet»,mediocomounmartillazo.PorelamordeDios,¡elBaphomet!¡Sí,eselnombrequenoqueríavenirmealamemoria!¡EselCoronadodedoblerostro,eldiosdelsueñohereditariodemiabuelo!Sonlassílabasquememurmurabaenlaoreja,desprendiéndolasalritmode un aliento como si quisiera hundírmelas en el alma mientras que, cual pequeño caballero,cabalgabadearribaaabajoydeabajoaarribasobresufalda.

¿Baphomet?¿Baphomet?¿Pero,quéeselBaphomet?Esel símboloherméticode laantiguaOrdensecretade losCaballerosdelTemple; losingular

porexcelencia,máspróximoparaelTemplarioquetodoloqueleespróximoypermaneciendoporestamismarazón,undiosdesconocido.

¿LosbaronesdeGladhill fueronTemplarios?Mehacía lapregunta.Eraposible,almenosparaunouotro,¿quiénsabe?Loquedicenlosmanualesylosrumorespúblicosesabstruso:Baphometseríael«bajodemiurgo»,¡sutilezadeladegeneradajerarquíagnóstica!¿Peroporquédosrostros?¿Yporquéademás,soyyoquiendesarrollaensueñosestosdosrostros?Unhecho,entrelosdemás,escierto:yo,últimoretoñodeestafamiliainglesadelosDeedeGaldhill,meencuentro«enelfindelosDíasdelaSangre».

YsientoconfusamentequeestaríaprestoaobedecersielBaphometsedignaseahablar…EneseinstanteLipotineinterrumpiómisespeculaciones.MetraíanoticiasdeStroganof.Mientras

tranquilamenteseliabauncigarrillomecontabaquelashemólisisagotabaalbarónyquequizáunmédiconoseríainútil,aunquesólofueraparadulcificarsufin.

—Pero…—Lipotinehizo,conundespreocupadoencogimientodehombros,elgestodecontardinero.

Comprendí,ibaaabriruncajóndelescritorioenelcualguardolomío.Lipotinepusosumanosobremibrazo,levantósusespesascejasconunaexpresiónindefinible,

comosiquisieradecir:«Sobretodonomedécaridad»,ymordisqueósucigarrillo:—Espere, estimado señor.—Sacó de su gabán una pequeña caja atada con bramante y me la

tendiórefunfuñando:—El último bien de Michel Arangelovitch. Os pide que tengáis la bondad de aceptarlo. Os

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pertenece.Tomé el objeto dudando. Era una pequeña arca de plata maciza muy simple, provista de un

sistemadecerradurassecretasalavezquedecorativasyeficaces.Ajuzgarporlosmontantesylascerraduras,eraunmodeloejecutadoporunorfebredeTouladelaépocaremota.Unapiezaconuntrabajo interesante. Di a Lipotine una suma que creía correspondía a su valor. Arrugónegligentementelosbilletesylosmetiósincontarlosenelbolsillodesuchaleco.

—Michel Arangelovitch podrá morir decentemente. —El asunto quedó arreglado sin otrocomentario.Pocodespuésmedejó.

Poseoahorauncofredeplatamacizacerradoquenopuedoabrir.Loheintentadodurantehorassin resultado. Haría falta una sierra o al menos unos señores alicates para triunfar sobre estosmontantes,yparaestropearelbellocofre.Dejémoslotalcomoestá.

***

Dócilalaordenrecibidaenelsueño,hetomadoluegoelprimerfascículoquemehavenidoalamanoyempiezoa resumirelmanuscritode lahistoriadeJohnDee,miantepasado.Redactoenelordenexactoquelasdiversashojasmevienenalamano.

El Baphomet debe saber lo que resultará. Pero siento una gran curiosidad por ver cómo sedesarrollarán los sucesos de una vida y especialmente por encontrar de nuevo los caminos de undestino, de una existencia acabada desde hace muchos, muchos años (si la voluntad personal nointerviene y si la inteligencia no intenta «corregir la fortuna»). La primera toma de la mano«obediente»yahabríadehabermevueltodesconfiado.Hedecomenzarporlacopiadeunacartadeuninforme,elcontenidodelcual,aprimeravista,notienenadaqueverconJohnDeeysuhistoria.SerefiereaunatropadeRavenheads(«cabezasdecuervos»)queparecendesempeñarunciertopapelenlasdisensionesreligiosasde1549enInglaterra.Heaquíelcontenidoliteraldelescrito:

Informedelagentesecreto,marca)+(aS.S[2].elobispoBonner,susuperiorenLondres.ElañodeGraciade1550.VuestraSeñoría sabequédifícil esdesenmascarar, tal comome lohaordenado, total o

parcialmente, las herejías demoníacas y la apostasía galesa de un alto personaje tansospechosocomoel llamadoJohnDee.Ella tambiénsabequeSuSeñoríaelgobernadorseexponecadadíamásaestasignominiosassuposiciones,desgraciadamentemuybienfundadas.A pesar de todo me atrevo a enviar mediante un hombre seguro a Vuestra Señoría esteinforme secreto redactado en la agencia que yo asumo, a fin que Ella mida mi celo ensatisfacer sus deseos y en agrandar así mis méritos para el cielo. Vuestra Señoría me haamenazadoconSucólera,conelbancoylatortura,sinoconseguíaprenderenmisredeselolosinstigadoresdelasrecientesimpudenciasdelpopulachocontranuestrasantareligión.LeruegoencarecidamentedesvíetodavíaunpocoSusrayosdesupobreperoabnegadoservidor,al considerar los hechos que hoy le mando, los cuales evidencian la culpabilidad de dosmalvados.

Vuestra Señoría conoce muy bien la escandalosa actitud de S.S. el protector actual;tambiénsabecómo,porlanegligencia—pornodecirmás—deesteúltimo,lahidravenenosade la insubordinación, de la rebelión, de la profanación de los santos sacramentos, de las

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iglesias y de los claustros, puede, de manera alarmante, levantar cabeza una vez más enInglaterra.Asípues,afinesdeDiciembredelAñodeGracia1549bandasenterasdechusmasediciosahanaparecidoenelPaísdeGales,comosinaciesendelsuelo.Setratadebatelerosdesterrados,vagabundos,yyase lessumanalgunoscampesinosyartesanosfrenéticos.Unabandaconstituidaalazar,sindisciplinaysinobjetivo,quesehahechocomponerunpendónen el cual figura, pintado en negro, una espantosa cabeza de cuervo, análogo al símbolosecretodelosalquimistas.EsporelloporloquesellamanasímismosRavenheads.

Delante hay un feroz camorrista, de oficiomaestro carnicero enWelshpool y llamadoBartlettGreen.Secomportacomocapitányjefedelabanda,defiendeespantosospropósitoscontra Dios y el Salvador, pero especialmente profiere horribles blasfemias contra laSantísimaVirgenMaría,diciendoquenuestrasantareinadelosCielosnoesmásqueundobley una copia de laGranDiosa, omejor del ídolo e insigne demonio que él llama «Isaís laNegra».

Si este Bartlett Green no posee naturalmente el descaro y el coraje que manifiesta enpúblico, no se puede negar que su condenado ídolo e hija del infierno, Isaís, no le hayadotado;élhabríarecibidocomoregalounzapatodeplataqueloconduce,dondequiere,alavictoriayaltriunfo.HayquelamentarporDiosqueelhombreysubandaparecengozarentodaspartesdeunaproteccióntanevidentedeBeelzebuthydesussecuacesquehastaahoranimosquetes,niveneno,niemboscada,nirefriegahanconseguidocausarleelmenorarañazo.

Falta mencionar un segundo punto, aunque no quiera tenerlo todavía por cierto. Losgolpes,lasrazias, lostratosconlosseñoresmalintencionadosdelaprovincia,asícomolassalidasdelabandadelosRavenheadsnoseríandirigidosporelsiniestroyrepelenteBartlettsino por un señor oculto que dispone de toda suerte de medios eficaces, dinero, cartas yconsejossecretos,paraacelerarlosasuntoscomounverdaderovicariodeSatán.

Quizá habría de buscarse este mentor entre la gente de cualidad, entre los grandespersonajesdelreino.¡SucedejustamentequeelsusodichoJohnDeeesdeésos!

Estosúltimosdías,afindeatraeralpueblodeGalesalladodeldiablo,sehaatacadoalmás santo de los lugares de gracia y demilagro, la tumba del santo obispo deDunstan deBrederock.Lahandevastadohastasuscimientos,saqueado,handispersadoindignamentelassantas reliquias a los vientos, en una palabra, una abominable catástrofe a señalar. Esto esdebidoaqueelpueblocreíaapiesjuntillasenlainviolabilidaddelatumbadeSanDunstan.Según la tradición, la cólera y el rayo celeste debían pulverizar a cualquiera que osaseacercarseconmanosacrílega.Esfácil imaginarconquesarcasmosyburlasesteBartlettharidiculizadoellugarsantoyaliadoasucausaunbuennúmerodeinsensatos.

Aúnotranoticiaqueenestosmismosinstantesllegaamisoídos:unnómadamoscovita,un raro cómplice, conocido un poco en todas partes por diversos alborotos y rumores,después de haberse encontrado con Bartlett Green en secreto, ha tenido con él variasentrevistasquenoinspiranconfianza.

No se le llamadeotromodoqueMascee, algúnapododelque ignoroel sentido.Se leintitula:«MaestrodelZardeRusia».Esunhombresecoygrisquehasuperadoenmucholacincuentena,deunacusado tipo tártaro.Enelpaíshadebidohacersepasarporcomerciantededicado al tráfico de todo tipo de curiosidades y objetos raros rusos y chinos, hasta elpresentedíadehoysehadedicadoaestecomercio.Unbuenpájarosospechosoquenadiesabe

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dedondesale.Desgraciadamente,hastaahoranohasidoposibleapoderarsedeldichomaestroMascee,

vistoquellegayseevaporacomoelhumo.Undetalle, todavía, quepodríapermitirnos cogerlo en elmásbreve espaciode tiempo:

niños de Brederock habrían visto, poco después del drama, a esteMoscovita irse hacia lacriptaprofanadadeSanDunstan, introducirseentre las losas rotas,ysalircondosbolasyalimpias,unablancayunaroja,deunvolumenanálogoaldelaspelotasdejuegonormalesyqueparecíantorneadasenunmarfilrelucienteyprecioso.

Entonces las habría contemplado con alborozo, antes de meterlas en su bolsillo y deabandonar el lugar a toda prisa. Además de esto tengo buenas razones para creer que elmaestro habrá querido tomar él mismo las bolas a causa de su rareza y que bajo lasaparienciasdecomerciantedetalescuriosidades,intentarállevarlasrápidamenteasuhombre.Enconsecuencia,hehechoprocederaunaencuestaapremianteenloquehaceadichasbolas,apesarquenopuedosuministrarningúndatosobreelladrón.

Mequedaunúltimoescrúpulo,ynoquisieradisimularloaVuestraSeñoría,queDiosmeha designado por confesor. Hace poco tiempo me ha caído entre las manos unacorrespondencia demi superior oficial, S.S. el Gobernador. He visto en ello un signo delcielo,ysecretamentelaheconfiscado.Heencontradoenestedosierelinformedeunciertodoctor,actualpreceptordeSuGracialadyElizabeth,princesadeInglaterra,elcontenidodelcualesalmenossingular.Adjuntoenelpresenteinforme,ensuformaoriginal,untrozodepergaminoquecreohaber sustraídodelconjuntosin levantarningunasospecha.Heaquí loqueelpreceptormandaaS.S.elSeñorGobernador:

HastaelmomentodecumplirsuscatorceañostodohasidolomejorparaladyElizabeth.Luego, de manera sorprendente, la princesa ha abandonado los hábitos que eran antes lossuyosparavolversehaciaocupacionespeculiaresenunamujer.Enparticular,boxear,trepar,pellizcar o divertirse con sus sirvientas o compañeras de juego, torturar, cortar vivosratoncillosyranas,yanopuededecirsequelaprincesaseocupadelaplegariayseaplicaenelestudiodelassantasEscrituras,sediríaqueeldiabloysuséquitolaincitan.

AdemásladyEllionor,lahijadelordHuntington,dedieciséisaños,sequejadetenerenelpechomanchasverdesyazules,mientraslaprincesadesplegaardoreneljuego.EnlapasadaSantaGertrudis, ladyElizabethde Inglaterradecidióunasalidaconsuscompañeraspor laslandasdeUxbridgeyestatropadesordenada,sinningunaprotección,galopóhastamásalládela landa —como si fuera una brigada infernal— sin orden ni concierto. ¡Hasta se las hacomparadoconlascondenadasAmazonaspaganas!

LadyEllionor,yamencionada,informóelotrodíaqueladyElizabethhabíavisitadoenelbosquedeUxbridgeaunaviejabrujayhabíaordenadoaesaviejaramera,conunaarroganciabienprincipesca,informarlesobresudestino,comoyalohizoanteriormentesunobleabuelalareinaMacbeth.

LadyElizabeth,princesadeInglaterra,obtuvodelabrujanosólotodotipodesentencias,murmullos y profecías, sino también un desagradable brebaje, que haría pensar en undiabólico filtro de amor y que se habrá bebido. La bruja ha escrito sus oráculos en unpergamino;adjuntoestecorpusdelicti,delquenopuedodecirnada,sinoqueestáescritoporla bruja, pues soy incapaz de comprender una sola palabra, a mis ojos es un maldito

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galimatías.Adjuntoigualmentelafichaconcernientealpergamino.QuieraVuestraGracia Episcopal tomar buena nota de las observaciones de su siempre

solicitoaservirloyperseverante.

Firmado:)+(Agentesecreto.

El fragmento de pergamino que el agente secreto adjuntaba en 1550 en su carta a Bonner,impertinentemente apodado el «Obispo Sangriento», está redactado en los términos que acontinuaciónseleerá;miprimoJohnRogerhaañadidouncomentariocomosisetratase,segúntodoparece,deunaprofecíadelabrujadeUxbridgealaprincesaElizabeth,mástardereinadeInglaterra:

Fragmentodepergamino.HehostigadoaGaealaMadreNegra.Hedescendidoenlahendiduramásdesetentavecessietepeldaños.«¡Ánimo,reinaElizabeth!»hadicholaMadre.«¡Hasbebidotusalvación!»oígritaralaguardiana.Élsepara,élunedenuevo,mibrebaje;Élseparalamujerdelhombre.Elinteriorestásano,elexteriortodavíaestáenfermo.Eltodosubsistemientrasquelamitadperece.¡Yoprotejo—yyodispongo—yyohechizo!Allechonupcialteconduzcoelnovio.¡SedUnoenlanoche!SedUnoeneldíaquevendrá.¡Bastadedistinguirporilusioneselyoyeltú!Bastadeseparar,unoaquí,otroallá,losquetrepanlacuestareal.En fin, el sacramento demi elixir, hecho de Dos Uno, quien ve en la noche delante y

detrás,quenuncaduerme,quevelapara laeternidady losEonesparaél soncomo losquevelanundía.

¡Notemas!¡Ánimo,Elizabeth!¡Elcristalnegrohasalidodesuganga!Estáprometido.QuerestablecerálacoronadelosÁngulos,aquélla—¡Mira!—Queserompióenlosorígenes—ydespuéspermaneciórota.Unamitadparati,otraparaeldelaespadadeplataqueserecreaenlacolinaverde.Elhornodelfundidorespera,tambiénelcrisolnupcial,¡QueelorounidoaloroRestaurelaancestralobramaestraylaviejacorona!

Al fragmento de pergamino de la bruja se ha añadido el siguiente post-scriptum del agentesecreto)+(.NotificasucintamentequeelconductordelosRavenheadsdelquesehacíaalusiónenlacartaalobispoBonner,«BastlettGreen»,hasidohechopresoyencarcelado.Heloaquí:

Post-scriptum:LunesdespuésdelaresurreccióndeNuestroSeñor.La gentuza de Bartlett Green ha sido masacrada; a él se le ha capturado sin la menor

herida, cosaqueparece increíble si tenemosencuenta los terriblesgolpesqueha recibido.

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Este granuja, este salteador de caminos, este hereje se encuentra ahora cargado de buenascadenas de seguridad, vigilado noche y día, de manera que ninguno de sus demonios niincluso su Isaís la Negra, pueda sacarlo de allí. Además el exorcismo de Satán ha sidopronunciadoensusdospalmas,portresveces,reforzándolosconsignosdelacruzydeaguabendita,paraasegurarsusalvación…

El autor de esta carta pone enDios la esperanza de que la profecía de SanDunstan seconfirmará plenamente y que perseguirá, atormentará y castigará a los profanadores y losinstigadoresdelaprofanación—JohnDee,quizá—hastaquelamuertefatallesllegue.Amén.

Firmado:)+(Agentesecreto.

Ellegajo,quemiciegamanotomódespuésdelaherenciademiprimoJohnRoger,contiene—descubroinmediatamente—undiarioíntimodenuestroantepasadosirJohnDee.Trae,esevidente,laconclusióndelacartadelagentesecretoylasfechassoncasilasmismas.Elcuadernoanuncia:

Fragmentos del diario de JohnDee deGladhill, a partir del día en el que se festejó sunominacióndeMaestro.

EnlafiestadeSanAntonio,1549.

Una nominación de Maestro debe comportar una enorme fiesta ante el Señor. ¡Bien!Veremos iluminarse los rostros de los mejores espíritus de Inglaterra. ¡Pero yo quieromostrarlesbienprontoquieneselmaestroentreellos!

¡Oh! ¡Maldito día! ¡Maldita noche!—No. me engaño: ¡Oh! ¡Noche de bendición!—Miplumachirríademanera lastimera,porque,porasídecirlo,mimano todavíaestáebria, ¡sí,ebria!— Pero ¿mi espíritu? ¡Claro y diáfano! Y una vez más: ¡a la cama, cerdo! ¡Nodesciendaspordebajodetimismo!—Unhechoesmásresplandecientequeelsol:yosoyelmaestro del futuro.Veo en una continuación sin fin ¡reyes! ¡Reyes sentados en el trono deEngelland!

Micabezasetornalúcida.Perotengoelsentimientodequevaaestallar,mientraspiensoen la noche última y de lo que me ha colmado. Conviene reflexionar y proceder con uninforme exacto.De casa deGuilford Talbot donde tuvo lugar la fiesta, un sirvienteme haconducidoamicasa.Diossabecómo.AlmenosnoseríalamásaspaventadacocciónquesehayatomadodesdelafundacióndeInglaterra,yo…Bien.Bastedecirqueestabatanborracho,queNoéensuvidanopudoestarlomás.

Lanocheeratibiaylluviosa,loque,paraempezar,favorecíalaaccióndelvino.Hedebidocaermecadacuatropasoscomoloatestiguanmismanchadasvestiduras.

Cuandomeencontréenmidormitorio,enviéelsirvientealdiablo,diciendoquenoqueríaser tratado como un niño en el momento en que debía combatir los demonios del vino ydespojarmedemisvestidurasparaacostarme,aligualqueanteriormentehizoelviejoNoé.

Enunapalabra,intentédesnudarmesolo.Loconseguíymeabalancéferozmentesobreelespejo.

Entoncesvigesticularantemíelmásmiserable,elmáslastimoso,elmásabyectodelosrostros: un bribón de alta pero huidiza frente, sobre la que, además, caían algunos raros

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mechonesmorenos,comoparasubrayar la irrupcióndelosmásbajos instintosfueradeuncerebrodegenerado.Losojosazulespequeños,insolentes,queenlugardeexpresardignidad,transpirabanlosvaporesdelvino.Unabocalarga,abierta,comoladeunsuciochivo,dondehubiérase debido esperar los finos labios,moldeados por elmando, de un descendiente deRoderick; un grueso cuello, hombros caídos, en una palabra ¡una buena caricatura, unaabominacióndeDee,deGladhill!

Unarabiafríameembargó;meenderecébienrectoyaullécontraelindividuodelcristal:—¡Cerdo! ¿Quién eres?Cachivache embadurnadode arriba a abajo por el barro de los

caminos,¿notienesvergüenzadeofrecerteamisojos?Nohasoídoelprecepto:«¡Quéseandioses!».Mírame: ¿tienes elmásmínimoparecido conmigo, el descendientedeHoelDhat?¡No,especiedefantasmanocturno,malogrado,encorvadoysuciodeunjovennoble!¡Especiedeespantajodegorrióndesinchado,aliasmagisterliberarumartium[3]!¡Yanopodrásburlartedemifigurapormuchomástiempo!¡Vasacaerantemíenmilpedazosalmismotiempoqueesteespejo!

Ylevantéelbrazoparagolpear.Tambiénéllolevantó,conunairecompasivo,almenosasímeloparecióatravésdelosvaporesdelaembriaguez.

Unarepentinayprofundapiedadhaciamicompañerodelespejomeembargó,ycontinué:—John,sitodavíaasímerecesserllamado,¡puerco!¡John,teconjuroporelHoyodeSan

Patricio, vuelve en ti! ¡Debes reformarte, debes renacer en espíritu si has de conservarmiamistad!¡Levántate,condenadobergante…!

Y al instante la imagen del espejo tuvo un movimiento de orgullo, el cual, es cierto,considerándoloasangrefría,veníademí;peroenmiestadodeembriaguez, toméelpulsorepentinodelpersonajeporunadecisióndemejorarseyproseguícolmadodeemoción:

—Almenosves,miserablehermano,quenopuedescontinuarasí.Ymealegro,querido,deverteaspiraralrenacimientoenespíritu;enefecto…

Ylaslágrimasdelapiedadmásprofundasurgierondemisojos.—Enefecto,¿quéotracosapodíaesperarsedeti?Mi interlocutor del espejo también derramaba abundantes lágrimas, lo que en mi

inconcebiblelocura,afianzóenmílaideadequehabíapronunciadopalabrasfabulosamenteimportantes,yexhortabaasíamipecadorarrepentido:

—Esun favordel cielohacia ti,mihermanocaído,mehayasmostradohoy tumiseria,cara a cara.Despiértate al fin y haz todo lo que puedas, pues yo te digo, sin considerar tufuturo,yo…—Unenormehipo,seguidodenáuseas,debidoalvinodelqueestaballenohastaelcogote,meprivódelusodelavoz.

Entonces—¡ohglacialescalofrío!—mellególavozdemiinterlocutor,dulceyregular,perocomotransmitidaatravésdeunlargotubo:

—NotendréreposonidescansohastaquenohayaconquistadolascostasdeGroenlandiadetrás de las cuales luce la luz boreal, hasta que no haya puesto el pie en Groenlandia ysometido Groenlandia bajo mi poder. A quien le es dado Groenlandia en feudo, a éste leperteneceelimperiodemásalládelocéanoylacoronadeEngelland.

Luegolavozsecalló.Cómo he llegado a mi cama, con tal borrachera, no lo sé. Era presa de vertiginosos

pensamientosquenopodíaimpediryquemecruzabancasisintocarme.

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Mesumergíanysinembargoloscontrolaba.Del cristal del espejo salía un rayo, como si constituyese el hogar de todos esos

torbellinosdepensamientos,¡estrellasfugaces!Esterayometocóytocódetrásdemí,enlatrayectoriadeloquevendrá,todosmisdescendientes.¡Unacausaeraechadaalmundoporlossiglos!Conunamanotitubeante,anotabaalgunaspalabrasenmidiario.Luego,enelcursodemi sueño, fui admitido a contemplar el largo linaje de reyes salidos de mi sangre ymisteriosamenteenterradosenmí.

Hoy sé cuándo seré rey de Inglaterra, y ¿qué obstáculo me impedirá realizar estasorprendenteapoteosissobrenaturalysinembargoprometidaamiespíritu?¡Cuandoseareyde Inglaterra,mis hijos,mis nietos, los hijos demis nietos se sentarán en el trono que yohabréconquistado!¡Bien!¡Heaquímisalvación!¡PorelestandartedeSanJorge!¡Tambiényoveoelcamino,yo,JohnDee!

EnlafiestadeSanPablo,1549

Hereflexionadolargamenteenlasvíasdeaccesoalacorona.Grey,Boleynsonnombresdemiárbolgenealógico.Soydesangrereal.Eduardo,elrey,

estáenfermo.Bienprontoterminarádeescupirsuspulmones.Eltronoesherenciacompartidadedosmujeres.¡EldedodeDios!¿María?Entrelasmanosdelospapistas.Estoyamatarconlos curas, ¡desde siempre! Pero sobre todo, María tiene en su pecho el mismo gusanoenvenenado que su hermanoEduardo. Tose. ¡Puaj!Que se vaya al diablo. Tiene lasmanosfríasyhúmedas.

Asípues,asuntoconcluidoconDiosyeldestino:¡Elizabeth!Suestrellasube,apesardelastrampastendidasporelAnticristo.

¿Quéhasucedidohastaahora?Noshemosconocido.DosencuentrosenRichmond.Unoen Londres. EnRichmond, para cogerle un nenúfar he echado a perdermis zapatos ymismediasenlaciénaga.

EnLondres,apesardetodo,heatrapadounacintadesucintura,melohaagradecidoconunabofetadaenplenorostro.Suficienteparaunprimercontacto,penséyo.

HedespachadoaRichmondmensajerosseguros.Hayqueencontrarunaocasión.BuenasnoticiasreferentesalasideasydisposicionesdeladyElizabeth.Sehacansadode

losmaestrosybuscalaaventura.¡SitansólosupieradóndeencontraraMasceeelMoscovita!HoymellegadeHolandaunmapadeGroenlandiadibujadopormiamigoymaestroen

cartografía:GeorgesMércalo.

EnlafiestadeSantaDorotea.

De repente hoy, Mascee, aparece en el umbral de mi puerta. Me ha preguntado sinecesitaba algo. Tiene unas nuevas curiosas piezas de Asia. No poco ha dejado desorprenderme su visita pues bien recientemente he intentado informarme de él sin ningúnresultado.Tambiénmehajuradoquenadielehabíavistollegar.Supresenciaenmicasa,enlascircunstanciasactuales,noesningúnchiste.Puedecostarmelacabeza.ElobispoBonnertieneojosentodaspartes.

Me ha mostrado dos bolas de marfil, una roja y otra blanca constituidas por dos

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hemisferiosatornilladosunoaotro.Nohaynadaparticularenelinterior.Selashecompradotantoporimpacienciacomoparaponerlodebuenhumor.Mehaprometidohacertodoloqueleseaposible.Lehepedidounpoderosofiltromágicoqueotorgueamoryfelicidadalqueabastezca la carga encantadora. Me ha dicho que él no podía prepararlo pero que podíaconseguírmelo.Ellomees indiferente.Lavíamás corta.Rápido a lameta.En cuanto a lasbolasdemarfil,mehepuestoazurrarlasporunaespeciedecapricho.Depronto,esabsurdo,mehandadomiedoylashetiradoporlaventana.

Masceeelmaestrodel«Zar»mehapedidoparalaconfeccióndelfiltrocabellos,sangre,saliva,y…¡Puaj!Ahorayatieneloquenecesita.Asqueroso,¡perosisóloesopodíallevarmealameta!

EnlafiestadeSantaGertrudis,1549

Hoy me sucede que de ningún modo puedo apartarme de singulares pensamientosamorosospor ladyElizabeth.Estoes loquehaydenuevo.Enverdad,hastaelpresenteeratotalmente indiferente a mi corazón. Ahora debo conformarme en la profecía del espejo.Ciertamente,nohabíaningúnengañoenelinterior.Elfuegoinauditoencendidoporelsucesomedevoraelalma,tanalegrecomosumañana.

Pero hoy todos mis pensamientos dan vueltas. Por San Jorge, escribía abajo de estapágina:¡…pormiprometida!¡¡¡Elizabeth!!!

¿Qué sabe ella de mí? Casi nada. Eventualmente que me mojé los pies pescando losnenúfares,quizáqueposeounabofetadadesumano.

Nadamás.¿YquéséyodeladyElizabeth?Esunaniñaextraña.Duraytiernaalavez.Directayfranca,perocerradacomounlibro

viejo.Sueñoconsulibertaddemodales,consuscamarerasysuscompañeras.Tengounpocola impresión de encontrarme delante de un tunante vestido de muchacha que haría faltacorregir.

Perolaosadíayelpoderdesumiradameplacen.Sinomeequivocopisadebuenaganaloscuernosdeciertosmiembroseclesiásticosynomanifiestagranrespetoanadie.

Peroescapaz,cuandoquiere,demendigarcomounagata.¿Mehabría,sino,enlodadoenlamarisma?

Ylabofetadanoteníanadadebenigna,sinolaacariciadoradulzuradeunapatadegatocontodassusuñasextendidas.

Insumiría[4],comodicelalógica,¡esreal!No,noesunavilpiezalaqueacecho,yhoyestepensamientomemantieneanimado.Masceehadesaparecidodenuevo.UnhombredeconfianzameinformahoydelpaseoacaballodelaprincesaeldíadeSanta

Gertrudis.Díamilagroso también paramí. La princesa cabalgaba por el bosque deUxbridge y el

maestroMascee le ha indicado, pues ella se había perdido, el camino de la guarida de lamadreBrigitteenlalanda.

¡Elizabeth ha bebido el filtro del amor! La bendición del cielo está con nosotros. LadyEllionor de Huntington bien daría su salvación eterna para demoler el matrimonio. ¿No

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intentó,consuinconvenientearrogancia,hacercaerlacopadelamanodelaprincesa?Perofallósugolpe.

OdioestaorgullosaEllionordecorazónfrío.Por encima de todo ardo de deseos de irme a Richmond. Tan pronto estén arreglados

algunosasuntos,rotosciertoscompromisos,encontraréelpretexto.Asípues,¡hastaprontoElizabeth!

EnlafiestadelosSieteDolores.

Estoypreocupado.LosúltimosasuntosdelosRavenheadsmedesagradanensumogrado.

EnlafiestadeSanQuirico.NollegoaexplicarmelaendeblezdeS.S.elgobernadordeGales.¿Porquénohacenada

paraproteger,oalmenosreemplazaralosRavenheads?Elmovimientoevangélicotocaasufin.¿Ellordprotectortraicionaasuspartidarios?Quizá he sido un imbécil. No sirve de nada hacer causa común con la gentuza. Si no

arrasáisconunsologolpe,lainmundiciaseenganchaavuestramedias.No. No merezco ninguna censura. Las noticias que tengo del campo reformado son

seguras.Nohayningúnmedioposibleparaellosderecular.Ellordprotector—(aquílahojahasidodesgarrada)—paralaconquistadeGroenlandia.

¿Paraquémeencarnizaré enbuscarotra tropademarinoscapacesde todoyde jornalerosdespedidoscuándoseimpongaestapoderosaexpediciónalnortedeIrlanda?

¡Obedezcoamiestrella!Perderseencogitacionesinútilesnollevaanada.

EnlafiestadelJuevesSanto.

¡Esta condenada angustia! Aquí las cosas se vuelven día a día más inquietantes.Verdaderamente siunhombrepudieradesprendersede todo tipodemiedoyde inquietudessecretas que se albergan en su conciencia, creo que estaría bien a punto para ser untaumaturgo.Ytodavíasinnoticiasdel«maestrodelzar»,ninoticiasdeLondres.

LosúltimosdonativosalacajadeguerradeBartlettGreen—¡ojalánohubieraoídoesenombreenmivida!—hanagotadomisrecursosytodavíamás.¡SinunapoyodeLondresnopodrécontinuar!

HoyconozcolamásinsolenteincursiónoperadaporesteBartlettenunnidodepapistas.¡El diablo puede haberlomodelado y acorazado pero a su gente todavía no! ¡Una empresaabsurda!

Siresultavencedor,Maríalatísicanoreinará.Asípues,Elizabeth,¡vuelohaciati!

Viernessanto.

¿Elcerdodedetrásdelespejosedespertará?¿Elborrachomemiratodavíaconsusojosesparrancados?¿Dequéestásebria,almavil?

¿Deborgoña?¡No,confiésalo,lastimosoharapo,estásebriodeangustia!¡Diosmío,Diosmío!¡Teníael

presentimiento!EselfindelosRavenheads.Seleshacercenado.Elgobernador,leescupoenelrostro,leescupoentrelosdientes,SuSeñoría.

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¡Repórtate, sé un hombre! A pesar de todos, los Ravenheads obedecerán a mi puño.Ravenheads,hijosmíos,¡hurra!¡hurra!

¡Adelante,viejoJohnny,adelante!¡Adelante!

DíadePascua1549.

¿Quéharéahora…?Estatardeestabasentado,apuntodeestudiarelmapadeMercator,cuandolapuertademi

habitaciónseabrióyundesconocidoentró.Ningún signo distintivo, ninguna arma, ningún indicio me permitía identificarlo. Se

dirigióamíymedijo:—John Dee: ha llegado el momento de batirse en retirada. El país es malsano para ti.

Todos tus caminos están cerradospor tus enemigos.Tumeta te hahechoperder la cabeza.Sólotequedaabiertaunavía;pasaelmar.

Elhombresefuesinsaludar,yomequedésentado,petrificado.Finalmenteme levanté, salí al corredor, bajé la escalera: ningún signo demi tan poco

ardientevisitante.Preguntéalportero:«¿Bellaco,aquiénhasintroducidoenmicasaenhorasemejante?».Elporteromerespondió:—¡Nadiequeyosepa,miseñor!Entré de nuevo en la casa sin decir palabra, y permanecí ahí, sentado, perdido en mis

pensamientos.

LunesdespuésdelasantafiestadelaResurreccióndeNuestroSeñor.

Nopuedodecidirme a huir. ¿Pasar elmar?Esto significa: adiós Inglaterra, adiós amisplanes,misesperanzasydesdeluegodiría¡adiósElizabeth!

Laadvertenciaerabuena.SéquelosRavenheadshantraídoladesgracia.¡Laprofanaciónde la tumba de Dunstant ha desencadenado el desastre!, dirán los católicos. ¿Causará miperdición?

¿Y cómo sería ello posible? ¡Tengamos coraje! ¡A quién se le ocurrirá decir que heconspiradoconbandidos,yo,elbarónJohnDeedeGladhill!

Loconfieso,fueunaimprudencia,unanecedadpormiparte.¡Yanotemas,Johnny!¡Estoysentadoenmirefugio,cultivolasletras,soyunhonorablegentilhombreyunsabio!

Nomedesembarazodemisdudas.¿Cuántasmonedascomporta todavíaelequipamientodelángel«Temor»?

¿Novaldríamásabandonarporuntiempoelpaís?¡Quemaldición,estardesprovistodemisúltimossubsidios!Sinembargo,simedirigiera

aGuilfordmeprestaría.¡Deacuerdo!Mañanaporlamañana…¿Por el amor de Dios y de todos los santos, qué sucede ahí fuera? ¿Qué significa ese

chischásdearmasdelantedelapuerta?¿NoeslavozdelcapitánPerkinsquedaórdenes,elcapitánPerkins,delapolicíadelObispoSangriento?

Aprieto losdientes:meobligoaescribirhastaelúltimominuto.Golpeanmipuertacon

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mazas.Lacalmavuelve,estapuertanoestanfácildehundir,yquiero,quiero,deboescribirhastaelfin.

Sigue una nota de la mano de mi primo John Roger mencionando que nuestroantepasadoDeefuearrestadoporelcapitánPerkins, talcomose infieredeldocumentooriginaladjunto,cuyostérminosson:

CartaoriginaldelcapitánPerkinsdelapolicíaepiscopalaSuSeñoríaelobispoBonnerenLondres,relativaaladenunciayalaentregaalasautoridadesdeJohnDee.

Fechailegible.Espara informaraVuestraSeñoría,quehemosdetenidoasirJohnDee,buscadopor la

policíaensucasadeDeestone.Lohemossorprendidoanteuntinteroabiertoyunaplumadeocahúmeda,inclinadosobreunmapageográfico.Peronohemosencontradoningúnescrito.

EltrasladoaLondreshatenidolugarporlanoche.Hepuestoeldetenidoenlaceldainteriorn.°37,queeslamássólidaylamásseguradela

Torre. Creo así haber prevenido toda posibilidad de contacto entre el prisionero y suscómplices, que son numerosos, influyentes y difíciles de desenmascarar. Pero por si acasodigoquesunúmerodecalabozoesel73enlugardel37,yaqueelpoderdeciertosamigosdelprisionerollegamuylejos.Tampocosepuedeconfiarabsolutamenteenelcarcelero,vistolacodiciadeestetipodegenteylacantidaddedineroquedistribuyenlosherejes.

LaconnivenciadeJohnDeeconlainfamebandadelosRavenheadsyaestáporasídecirloestablecidaylaspreguntasenelpotroacabaránpordesvelarbienprontoelresto.

ElObedienteservidordeV.S.GUYPERKINS,m.p.capitán.

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ELHOYODESANPATRICIO

Mientras terminabade leer estasúltimaspalabras en el diariode JohnDee,un estridente timbrazosonóenlapuertadelacalle.Abro.UnmuchachomedaunacartadepartedeLipotine.Nomegustaser interrumpidoenmi trabajo,ypuestodemalhumor, faltoaunacostumbrenacional: ¡olvido lapropina! ¿Cómo solucionarlo ahora? Son tan raras las ocasiones en que Lipotine me dirigecomunicadosatravésdeunmensajeroyéstenuncaeselmismo.Lipotinedebetenerentrelosjóvenesdelaciudadinnumerablesamigosserviciales.

Veamoslanota.Lipotinemeescribe:

1,°demayo.SanSocius.

MichelArangelovitchosagradeceporelmédico.Sesientealiviado.Apropósito, lohabíaolvidado:ospidequeorientéis con lamayorprecisiónel arcade

platasiguiendoelmeridianodellugar,demaneraquelaslíneasonduladasquecomponenelmotivochinocinceladoenlatapaleseanparalelas.

El por qué de esta precaución no sabría decírselo, puesMichel Arangelovitch ha sidopresadeunnuevoataquedehemolisisenelmomentoenelquemedabaestacomisiónparaustedyyanohepodidointerrogarlomás.

Pareceserquelaviejaarcadeplatadeseaversesituadaparalelamentealmeridianoyquees en esta posición donde se encuentra mejor. ¡Dadle tanto como podáis este placer! Estopuede pareceres un sueño absurdo, excusadle, pero cuando se ha, comoyo, pasado toda lavidaenintimidadconviejascosasdesusadas,seconoceunpocosushábitosyseadquiereesahabilidad que permite responder a las secretas plegarias de estos objetos hipocondríacos ymaniáticos.Nosotroslosrusossomossensiblesaestosmatices.

¿PensáisquenilaRusiaactualninuestraantiguaRusiahandadolugaramanifestacionestandelicadas?Ciertamente,esunhechonotorio:loshombresdesprecianlosvaloresdelalmaylesparecenaturalmaltratarlas.Perolasbellasyviejascosassonsensibles.

NoignoréisporlodemásquelasusodichabandadelíneasonduladasdeestilochinodelarcadeToularepresentaelviejosímbolotaoístadelIndefinido,inclusoenciertoscasosdelaeternidad.Notatotalmentepersonal.

VuestroservidorLIPOTINE.

Tirélacartaalapapelera.Hum,el«regalo»delagonizantebarónStroganoftomaantemisojosunaspectotemible.Meveo

forzado a ir a buscar mi brújula y determinar en detalle las exactas coordenadas del meridiano:naturalmentemi escritorio está al sesgo. ¡Este vigorosomueble, por venerable que sea, nunca hareivindicadonadanihallegadoaexigirsuorientaciónconformeelmeridiano,bajolapretensióndesubuenasalud!

¡Quésecretausurpacióncometemos respectoa todo loquenosvienedeOriente!Heorientado

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correctamente el arca de Toula. ¡Todavía hay locos —yo por ejemplo— para mantener que loshombressondueñosdesuvoluntad!¿Perocuáleselfrutodemisbuenasdisposiciones?Todoloquehaysobremiescritorio,mimismoescritorio,todalahabitación,incluyendoelordenfamiliarqueleespropio,todomesaltaalosojos,desdeahoratodoestáalsesgo.¡Estehonorablemeridianoparecedareltonoamisituación!Éloelarca.¡Todoseencuentrasituado,puestoyenganchadoalsesgo,alsesgoacausadeestecondenadoproductodeAsia!Paseomimiradadelescritorioa laventana,¿yquéveo?Dentroyfuera,todoestá«alsesgo».

Estonodurarámucho;eldesordenmeponenervioso.Oestaarcadesaparecedemimesa,o…¡PorelamordeDios!¡Nopuedotrastocartodamicasaenfuncióndeesteobjetoydesumeridiano!

Mesiento,mirofijamenteesteKobolddeToulaysuspiro:esesto—¡porelHoyodeSanPatricio!—ynootracosa:elarcaestá«enelorden»,está«orientado»;miescritorio,mihabitación,todamiexistencia, van al azar, no corresponden a una orientación deliberada, y ¡no lo sabía hasta hoymismo!¡Esunpensamientodesagradable!

Paraescaparalacrecienteobsesióndetenerque,comounestratega,pensarenlareorganizacióndetodosmismueblesapartirdelescritorioyorientarlosdeunamaneranueva,meprecipitoa lospapelesdeRoger.

Mevienealamanounahojadenotas,desualtivaescritura,tituladaarriba:

ElHoyodeSanPatricio.

¿Qué sucede en mi alma para que haya puesto en mis labios, en el momento preciso, estejuramentoquehastahoymismomeera totalmentedesconocido?Lo teníaen lapuntade la lengua.¡Sin que tuviera lamenor suposición de su origen! ¡Unmomento!Todo se esclarece de pronto—hojeodeprisahaciaatráselmanuscritoquetengoantemí—estosehallaeneldiariodeJohnDee:«¡John,yoteconjuroporelHoyodesanPatricio,vuelveenti!Hasdesermejor,hasderenacerenespíritu,siquieresconservarmiamistad»,gritaeljovenseñorasudobledelespejo,«¡porelHoyodesanPatricio,vuelveenti!».

Extraño.Muyextraño.¿AcasoserélaréplicadeJohnDee?¿Obiensoymipropioreflejoymecontemploamímismoalamparodeldescuido,delasuciedadydeunanubedehumo?¿Yaseviveenestadodeembriaguezcuando,cuandoseviveenunacasanoorientadasegúnelmeridiano?¡Yahoramepongoasoñaryadivagarenplenodía!¡Elolordemohodelmontóndedocumentosmesubealacabeza!

¿Qué hay en relación a esteHoyo de San Patricio?Atrapo en el legajo—con una especie deescalofrío—lahojaquemeinformará.Relataunaviejaleyenda:

ElsantoobispoPatricio,antesdeabandonarEscociaporIrlanda,escalóunamontañaparaayunaryrezar.Miróenlalejaníayvioqueelpaíshervíadeserpientesyreptilesvenenosos.Levantósuvarayamenazócontalpremuraaesalayaquedesaparecióbabeandoysilbando.Allí arriba llegaron las gentes del lugar para burlarse de él. Él habló para oídos sordos eimploróaDiosunsignoqueespantaseesoshombres,ygolpeóconsuvaralarocasobrelaqueestaban.Larocaseabrióformandounhoyoredondodelqueseescaparonfuegoyhumo.Y la sima se abrió hasta el corazón de la tierra, y los clamores de blasfemia, que son elHosannah de los Condenados, subieron y se esparcieron fuera del hoyo. Los habitantes se

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horrorizaron,puesvieronsinengaño,quesanPatriciohabíaabiertoelinfiernoparaellos.Y san Patricio habló: quien entra ahí, dice, no ha de buscar penitencia, ya no tiene

necesidaddenada.Seráconstituidodeoromacizoyfundirácomoglucosa,deunamañanaalaotra.Numerosossonlosqueentran,rarossonlosquevuelven.Pueselfuegodeldestinosublimaodevoraacadaunosegúnsunaturaleza.

ÉsteeselHoyodesanPatricio; todospuedensaber loquehayenelvientreyver siescapazdesufrirelbautismodelDiabloparaaccederalavidaeterna.Perotodavíahoycorreelrumorentreelpuebloqueelhoyopermanecesiempreabierto;sinembargo,sólolopuedeveruncandidatoerguidoydesignadoparaestaexperiencia,nacidoel1.°deMayo,deunabrujaodeunaputa.Ycuandoeldisconegrodelalunanuevapasasobrelaverticaldelhoyo,entoncessubenhaciaél las imprecaciones,arrancadasdelcorazónde la tierra,de loscondenados, lafervientesúplicadelmundoinfernalqueseinvierte;caensobreellugarcomounalluviafinaytanprontocomotocantierrasecambianenespectrosdegatosnegros.

***

¡Meridiano,merepito,bandaondulada!¡Símbolochinodelaeternidad!¡ElHoyodesanPatricio!¡LaadvertenciademiantepasadoJohnDeeasucompañerodelespejoenelcasodequequisieramantenersuamistad!Y«numerosossonloqueentranyraroslosquevuelven».¡Gatosnegrosfantasmas!Todoellodavueltasenmipensamientoaterrorizadoyengendraenmicabezauntorbellinoinsensatoderepresentacionesyaspectos.Sinembargo,unestadodeespíritumuyagudoydoloroso,parpadeaparaabrirsepasocomounrayodesoldetrásdeunanubegalopante.Perosientoqueparacondensaresteestadohastaelmomentode la fórmuladebotomarconcienciademiembotamientoysacudirlo.

***

Asípues,enelnombredeDios,estádecidido,mañana«orientaré»mihabitación«segúnelmeridiano»,yaquedebeserasí,yporfinencontrarélacalma.

¡Unbonitotrajínenperspectiva!¡CondenadaarcadeToula!

***

Vuelvo a mis hojas. Tengo ante mí un pequeño volumen encuadernado en tafilete verde. Laencuadernacióndatamásomenosde finalesdelXVII.Laescrituradel textodebe ser ladelmismoJohnDee; la formade las letras, lagrafía respondena ladeldiario.Elpequeñovolumenmuestraseñalesdefuegoyalgunaspáginasestáncompletamentedestruidas.

En la página de portada encuentro unaobservación redactada conminúsculos caracteres y porunamanoextraña.Bienconciso:

«AquemarcuandoIsaíslaNegraestéalacechodelalunamenguante.¡Paralasalvacióndetualma,quema!».

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Supongoqueundesconocidopropietariodelvolumenhadebidoseguiresteconsejoalpiedelaletra.Quizáhacontemplado«IsaíslaNegra»inclinadaenelbalcóndelalunamenguanteydegolpelo ha tirado tal cual en el fuego para desembarazarse de él. ¿Quién, quién puede haberlo retiradoantesdequesehayacarbonizadoenteramente?¿Quiénhasidoelquesehaquemadolosdedosconestafinalidad?

Ningúnsigno,ningunanotaloprecisa.LaadvertenciamismaseguroquenoesdelamanodeJohnDee.Debehaberlaescritounhereje

despuésdeunaexperienciafastidiosa.Los fragmentos legiblesdel tafileteverdeestánacompañadosdeestanotadeRoger:«Libro de

notasdeJohnDee,fechadodel1553,asípues,tresocuatroañosmástardequeelDiario».

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ELZAPATODEPLATADEBARTLETTGREEN

Esterelato,despuésdeinnumerablesdíasdetribulacionesestáredactadopormí,maestroJohnDee,queanteriormentemecondujecomounpobrefantocheyunmarmitóndemasiadocurioso,antemipropioespejoymipropiamemoria,ypudieraestasaludableadvertenciagrabarseenelespíritudetodoslosdemisangrequevendrándespuésdemí.Deberánllevarlacoronacalentadaalblanco,hoylo sé con más certeza que nunca. Con todo la corona les hará morder el polvo como yo lo hemordido, si se complacen en la frivolidad y la presunción, si no ven el enemigo que los acecharastreramente,horaahoraybuscacómodevorarlos.

CuantomásaltalaCoronamásferozlairrisióndelinfierno.

Sigueelrelatodeloquemehasucedido,porlagraciadeDiosaldíasiguientedelsantodíadePascuadefinalesdeabrilde1549:

Porlatardedeesedía,mientrasmisinquietudesymisdudassobremidestinollegabanasupuntomásálgido,elcapitánPerkinsyloshombresarmadosdelObispoSangriento,comocorrectamenteseha apodado a estemonstruo de forma humana que hacía estragos enLondres bajo los rasgos delobispo Bonner, se abrieron paso hasta mí y me detuvieron en nombre del rey, ¡en nombre deEduardo, el niño tísico!Mi amargo reír aumentóel enojode los esbirrosquemecondujeronconmalosmodos.

Conseguí,antesdelaestrepitosaentradadelcoco,hacerdesaparecerlashojasqueacabadellenarconmis reflexionesydisimularlasenel seguroescondrijode lamuralla,donde,por suerte,ya seencontraba al abrigo de las sospechas todo lo que, en esas horas tormentosas, podría habermetraicionado.Por suerte tambiénhabía tiradoya hacíamucho las bolas demarfil deMascee por laventana,loquedespuésnomefueunpequeñoconsuelo,cuando,eneltranscursodelanoche,oíalcapitánepiscopalPerkinspreguntarsepesadamenteporciertasbolasque teníaespecialconsignadebuscar.Lascosas,enloqueconciernealas«curiosidadesasiáticas»handebidopresentarsebajounaspectosingular,yesomemostróquenosepodíafiarplenamenteenelmaestrodelzar.

Lanocheerapesada;una rápida cabalgada junto aunaescoltamuy rudanospermitió llegar aWarwick al amanecer. Inútil describir las etapas del día en habitaciones enrejadas o torreones.Finalmente,alcaerlanocheenlavigiliadel1°demayo,llegamosaLondresyelcapitánPerkinsmepuso en una celda semisubterránea.Todas estas y otras precauciones, tomadas ami alrededor,mepermitierondarmecuentaqueseesforzabanenmantenermitrasladoenelmásabsolutosecreto,coneltemorconstantedeunaemboscadaintentadaparamiliberación.Mepreguntaba,enesetiempo,dequéladohabríapodidovenir.

Elcapitánenpersonameintrodujoenlamazmorra;ycuandoloscerrojosfueronechadosdesdeel exterior con un ruido herrumbroso, me encontré de pronto pasablemente embrutecido, en unsilencioyunaoscuridadprofunda,ymipasoatientasresbalóenunbarrofofo.

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Nunca hubiera podido imaginar que algunos minutos en una cárcel pudieran despertar en uncorazón humano un sentimiento de abandono tan total. Nunca en mi vida había oído ese débilzumbidodelasangreenlaorejaquemeinvadíaacadainstantecomolatumultuosaresacadeunmardesoledad.

Derepentemehelóelsonidodeunavozfirmeyburlonaqueparecíaveniramiencuentrodesdeelmuroinvisible,comounsaludodelahorribleoscuridad:

«¡Benditaseatullegada,maestroDee!¡Bienvenidoaloscuroreinodelosdiosesinfernales!¡Asítropiecesenelumbral,señordeGladhill!».

Unarisalacerantesiguióestediluviodesarcasmos,acompañadaafueraporelmurmullolejanode una tormenta que de repente estalló con tanta violencia como para ensordecer y engullir estasiniestrarisaensucrepitantealgazara.

Enelmismoinstante,unrayorasgólaoscuridadde lamazmorray loquevi,enel resplandorazufrado del fuego celeste,me traspasó como una aguja helada desde la coronilla hasta el huesosacro:noestabasóloenelcalabozo;enelmurodepiedratallada,enfrentedelapuertaporlacualhabíasidoechado,habíacolgadounhombre,cargadodepesadascadenas, losbrazosy laspiernasseparadasenlaposicióndelacruzdesanPatricio.

¿Estaba realmente colgado ahí? Le había visto el tiempo de una pulsación al resplandor delrelámpago.Yrápidamenteselohabíatragadolaoscuridad.¿Noeraunasimpleilusión?Enunabrirycerrar de ojos había visto llamear antemí esta terrorífica imagen, como si nunca hubiera tenidorealidadfuerademí,comosihubierasalidodemicerebroparatomarposesióndemialmasintenersustanciacorporal.¿Cómounhombrevivo,dislocadoporesteabominablesupliciodelacruz,podíateneresosimperturbablesyburlonespropósitos,risadeesereírsarcástico?Hubounsegundoasaltoderelámpagos;fuerontanseguidosyrápidosquesusondaspalpitantesiluminaronlabóvedaconunaluzfalsa.Verdaderamente,Diosjusto,unhombreestabaahícolgado,nohabíaduda:teníaelaspectodeungallo,el rostrocasicubiertodemechonesrojizos, labocaancha,porasídecirlo,sin labios,entreabriéndoseporencimadeunabarbarojayenzarzada,prestaadejarescaparunanuevarisa.Suexpresiónnomostrabaelmenor sufrimiento, apesardel supliciode los anillosqueapretaban susmanos y sus pies. Sólo pude balbucear estas palabras dirigidas a él: «¿Quién eres tú, ése, el delmuro?».Untruenomeinterrumpió.«Yahabríasdebidoreconocermeenlaoscuridad,jovenseñor»,merespondióunavozclarayburlona.«¡Quiénhaprestadodinero,sedice,reconoceaundeudorporelolor!».Elfríodelespantomecruzó.«¿Quieresdecirquetúeres…?».

«¡Pues claro! Soy Bartlett Green, cuervo de losmaestros cuervos, protector de los impíos deBrederock, este triunfador que ha hecho cerrar la boca almismoSanDunstan y que aquí cumpleahora las funciones del hospedero con insignia de frías cadenas y del buen fuego de leña paraviajeros perdidos a altas horas de la noche tales como tú, alto y poderoso protector de losReformadosporlacabezaylosmiembros».

Unarisasalvajequehizoestremecerelcuerpodelcrucificado,sinqueélexperimentara,loqueparecemilagroso,elmenordolor,concluyóeseespantosodiscurso.

«Entoncesestoyperdido»,balbuceéparamímismoymedesplomésobreunpequeñotaburetedemaderacarcomidaqueacababadeapercibir.

La tormenta había llegado al paroxismo de su violencia, ninguna conversación era posible en

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mediodeesecielodesencadenado,peronomehallabaenestadodepoderhablarmás.Veíaantemisojosmimuerteineludible,ynounamuertedulceyrápida,puesdebíasaberseabiertamentequeerayo quien movía los hilos de los Ravenheads. No conocía mucho de los métodos que el ObispoSangriento,sólo loquesecomentaba, juzgabanecesarios«paraprepararasusvíctimas,segúnsusdisposicionesalarrepentimiento,averelparaísodelejos».

Una loca angustia me cerraba la garganta. No era la aprehensión de una muerte rápida ycaballerosa,¡eraelindecibleycorrosivoterrordelasrepugnantesmanipulacionesdelverdugo,delproblemático potro, invisible, exhalando sus vapores de sangre! La angustia del sufrimiento queprecedealamuerteesloqueenredaalosseresenloshilosdelavidaterrestre:siestesufrimientofuerasuprimido,eltemordesapareceríaigualmentedeestemundo.

La tormentaestabaenplenoauge,peroyono laoía.Aveces,delmuroqueestaba frenteamísalía un grito, una risa ruidosa, tan cercana en la oscuridad, queme golpeaba en la oreja; no leprestabaatención.Mehabíaabandonadoamipánico,amisdementesesfuerzosparanopensarmásqueenmiliberación.

Norecéniunminuto.Cuando la tormenta, al cabo de una hora quizá, no lo sé bien, se calmaba, mis pensamientos

también tomaron un cauce más sereno, más ordenado, más lúcido. Una primera certidumbre fueconstatarqueestabaamerceddeBartlettGreen,admitiendoquetodavíanomehubieratraicionado.Misalvaciónmásinmediataestabasupeditadaasuspalabrasoasusilencio,ysóloaeso.

ResolvípuesconsiderarconunaprecavidatranquilidadlaposibilidaddeconduciraBartlettamispuntosdevista ydepersuadirlo aque se calle puestoqueyano tienenadaqueganarni nadaqueperder,yalmismotiempotemblabaalver laespantosacoyunturaenlaquemehallaba,alvermisproyectos,mis esperanzas ymi inteligencia derrumbarse unos sobre otros, bajo el empuje de unhorrorinsuperable.

BartlettGreenimprimióasugigantescocuerpounlentobalanceo,comosiquisieradanzarentrelosgrillosqueaprisionabansusarticulaciones.Estosbalanceossefueronhaciendomásymásfuertesy ligeros; se hubiera dicho, en la siniestra claridad de ese amanecer de mayo, que el bandidocrucificadodisfrutabadelmismoplacerquesisehallaraoscilandoenunahamacaentredosjóvenesabedules,estodespuésquesustendonesysushuesoscrujieranmásymejor,comosihubieransidosometidosalesfuerzodecienpotros.

Entoncessepusoacantaratodopulmón,sinembargosucantoseconvertíaenelclamordeungritoescocésadaptadoalasintencionesdesugroseroembrujo:

¡Hurra!¡QuetibioeselaireDespuésdeltiempodelamuda,enmayo!¡Hurra!¡Maullagatamía!¡Maullagatomío!Preparaosparaseguirelrastro¡Hurra!¡Hurra!¡EnelcéspedflorecelavioletaDespuésdeltiempodelamuda,enmayo!¡Hurra!

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ElañopasadoosescaldaronelvientreCuandoelgranconciertodegatos¡Hurra!¡Hurra!¡ElestorninocantaenlaramaDespuésdeltiempodelamuda,enmayo!¡Hurra!Enelmásaltomástil,balanceándonos,cantamos¡Oh,MadreIsaís!¡Hurra!

Nopuedodescribirelespantoaqueme lanzóestasalvajemelopeadel jefede losRavenheads.Sólopodíapensarseesto:susupliciohabíadesencadenadoenélunarepentinacrisisdelocura.Hoytodavía,alquererdescribirlaescena,misangresehiela.

Entonces los cierresde lapuerta fueronquitados congran ruidometálicoy entróunguardiánseguidodedosayudantes.Desataronal crucificadodelmuroy lodejaroncaer al suelocomounainmundicia.«Lasseispasadas, señorBartlett, seburlógroseramenteelguardián.Sabedapreciarelduraderoplacerquevuestrobalanceodelmuroosprocurarábienpronto.Quizáosseráconcedidoelpermisodedaroseseplacertodavíaunavezmás,conlaayudadeldiablo,luegoempezareisvuestroviajealcielo,comoElías,enuncarrodefuego.¡Miradunpocoquienosconduce,haciendoungrangancho,hastaelfondodelHoyodesanPatriciodedondenosevuelve!».

Con un gruñido de satisfacción Bartlett Creen se arrastró hacia un montón de paja y replicóvigorosamente:«Telodigoenverdad,David,especiedecarroñacelestedecabodevarasquetúeres:¡hoyestaríasconmigoenelparaíso,simeapetecieraeliradarunavueltaenél!¡Peronoloesperes,sucederádeotromodopara ti, según tuspobresconcepcionespapistas! ¡Dóndedeboconpremuracitarteparatubautismo,queridoniñodemicorazón!».

Via lasucia turbapersignarsedeespanto.Elguardiánreculó, llenodeun temorsupersticioso,hizoconlamanoelgestodelosirlandesesparaconjurarelmaldeojoychilló:«¡DesvíademítucondenadoOjoBlanco,primerNacidodelInfierno!SanDaviddeGales,queyaeramibuenpatrónyprotector en el tiempo en que estaba aún en pañales, me conoce. Devolverá, fríos a la tierra, tusmaléficosencantamientos».

Luego salió tropezando de la celda con sus acólitos, perseguido por la sonora risa deBartlettGreen.Detrásdeéldejóaguafrescayunahogazadepan.Hubounmomentodecalma.

Con la luz del día gris que se levantaba, vi el rostro demi compañero de cautiverio. Su ojoderecho,blancomezcladodeopalescencialechosa,relucíaenlaluzdelamañanacomosituvieraunamiradafijaydeunainsondablemaldad.Eralamiradadeunmuerto…Deunoque,alpasardelavidaalamuerte,havistoelhorror.Esteojoblancoestabaciego.

Aquí empieza una serie de hojas deterioradas por el fuego. El texto está totalmente confuso.Luegotodoelconjuntovuelveaserlegible.

«¿Agua? ¡Es malvasía!» bramó Bartlett; alzó el pesado cántaro, a pesar de susarticulacionesrotas,ybebiótantoquetemípormipequeñaparte,puesteníamuchased,«¡para

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milúcidoespírituestonoesmásqueunafiesta—huc—nosientoningúndolor—huc—nitemor!¡Dolorytemorsongemelos!Quieroconfiarteunacosa,maestroDee,quenotehanenseñadoenningunaescuelasuperior—huc—cuandoseadesembarazadodemicuerposóloserémáslibre—huc—ysoyinvulnerablealoquevosotrosllamáismuertehastamistreintaytres años cumplidos—huc— es decir, hoy. El 1.° demayo, cuando las brujas proceden alaquelarredelosgatos,mitiemposeacaba.¡Ohsimimadremehubieraguardadoensucalorunmesmás,nomeencontraríaenestemalmomentoyaúntendríatiempodevengarmedeesezarramplínobisposangriento!Alobispotu…»(Señalesdefuegoeneldocumento).

…despuésde loqueBartlettGreenmegolpeódebajodelcuello—mijubónhabíasidodesgarradoporlossoldadosyteníaelpechomediodescubierto—,metocólaclavículaymedijo:«Héloaquí,ésteeselmisteriosohuesecillodelquequierohablar.SelellamahipófisisdelCuervo.Segregalasalsecretadelavida.NosedescomponeenlaTierra.EsporloquelosJudíos han desatinado un poco en lo referente a la resurrección en el juicio final, hay quecomprenderlodeotramanera,losqueestamosiniciadosenelsecretodelalunanueva,hemosresucitadohacemuchotiempo.¿Ycómoloheaprendido,maestro?NomeparecequeestésmuyavanzadoenelGranArte,apesardetusnumerososconocimientoslatinosyuniversales.Te lo diré, maestro: porque este pequeño hueso luce en una luz que los otros no puedenver…»(Señalesdefuego).

…Como se comprenderá sin dificultad, el discurso de este salteador de caminos hizosubirenmíelfríodelhorror,demaneraqueencontrégrandificultadenarticularconunavozátona: «¿Así yo llevo un signo, yo también, que enmi vida no he supuesto?». «Sí, señor,respondió Bartlett con gran seriedad, tú estás marcado. Llevas la marca del signo de losGrandesVivientesInvisibles,enlacadenadeloscualesnadiepenetra,puesnadiedeentrelosquelacomponendesdeelprincipiohasidoabandonadonunca;ynadiemáspuededescubrirelaccesoantesdelfindelosDíasdelaSangre,tenpuesconfianza,hermanoDee,queaunquetúquizáprocedesdeotraPiedrayevolucionesenuncírculoadverso,notevenderénuncaalagentuza que husmea debajo de nosotros. ¡Nosotros somos, desde el origen, superiores algentío queve elExterior y se queda tibiopor la eternidadde las eternidades!» (Señales defuegoenelmanuscrito).

…Y loconfieso,al escucharestaspalabrasdeBartlett animadasporunaliento interiorquenocedía,empezaba,peroensecreto,aenrojecerdeangustiaanteesterudocompañero,quesetomabatanalaligeralaperspectivadevermultiplicadopordiezsusuplicio,quizámásallá de los límites del horror, para asegurarmi salvación al precio de ese silencio quemeprometía.

«Soy hijo de un sacerdote, prosiguióBartlett.Mimadre era una persona de calidad, laSeñoritaLendenzart,comoselallamaba,peropodríasuponersequesóloeraunapodo.¿Dedónde venía? ¿En qué se ha convertido? Es todavía unmisterio hoy paramí. Pero era unespécimendemujerhonorable,querespondíaalnombredeMaría,antesquelosméritosdemipadrelahubieranarrastradoalaperdición».(Señalesdefuegoenelmanuscrito).

…AquíexplotólaextrañarisadeBartlett,suextrañarisainsensible;despuésdeunapausacontinuó:«Mipadreeraelsacerdotemásfanático,másdespiadadoymáscobardealavezquehayajamásencontrado.Mehabíarecogidoporcompasióndemimiserableestado,yyodebíaexpiarlospecadosdemidesconocidopadre,decíaél,sinsospecharqueyosabíasecretamente

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queestepadreeraélmismo.Habíahechodemísucriadoysumonaguillo».«Muyprontomeordenóhacerpenitenciaymeobligóa estardurantehoras,noche tras

noche, en la iglesia, en roquete a pesar del riguroso frío, rezando sin descanso en losescalonesdepiedradelaltar,paraobtenerparami“padre”elperdóndesusfaltas.Ycuandome derrumbaba por la debilidad y el sueño, tomaba un látigo y golpeaba hasta hacermesangrar.UnespantosoodioinvadióentoncesmicorazóncontraElqueestabaahícolgadodelacruzporencimadelaltar,ydepronto, sinquemedieracuentadecomohabía sucedido,contralas letaníasquehabíaderecitar,quesegirabanenmicerebroysalíandemibocaalrevés. Giraba así los rezos, lo que me llenaba el alma de una cálida y desconocidavoluptuosidad.Durantemuchotiempomipadrenosediocuenta,puesyorefunfuñabaenvozbaja,hastaqueundíadescubrióelsecreto,aullódecóleraydetemordesersuspendidodesusfunciones, maldijo el nombre de mi madre, se persignó y corrió a buscar un hacha paramatarme.Peroyomeadelantéaély lepartí el cráneohasta lamandíbula,unode susojoscayó en la losa cerca de mí y me miró fijamente por debajo. Y supe que mis oracionesinvertidas sehabíanhundidohastael centrode la tierra, en lugarde subir, loquehacen, aldecirdelosJudíos,laslamentacionesdeloshombrespiadosos».

«Heolvidadodecirte,estimadohermanoJohnDee,queantesmipropioojoderechofuecegado una noche por un espantoso resplandor que vi de repente ante mí, es totalmenteposiblequefueseresultadodeunlatigazodemipadre,nolosé.Encualquiercasoabriéndolelacabezahabíajustificadoelprecepto:ojoporojoydientepordiente.¡Sí,amigo,esteOjoBlanco,quehorrorizatantoalachusma,lohealtamentemerecidoporlaoración!»(Señalesdefuegoenelmanuscrito).

«Teníacatorceañosreciéncumplidoscuandodejéamiseñorpadreconlacabezadivididaendos,enunmardesangredelantedelaltar;porunsinfíndecaminoshuiaEscocia,dondeentrécomoaprendizdeuncarnicero;creía,enefecto,queconseguiríasindificultadgolpearlosbueyesylosbecerrosenplenocerebro,conlamaza,despuésdehaberhendidocontantaprecisión la tonsurademipadre.Lejosdeconseguirlo, cadavezque levantabaelhacha, laescenadelaiglesiasedibujabaconfuerzaantemisojoshastarozarme,comosiacualquierprecio no hubiera de prostituir ese bello recuerdo al abatir los animales. Seguími caminohastahundirmeenelcorazóndelasmontañasdeEscocia,errandodepuebloenpueblo,millasy millas. Con una cornamusa robada tocaba para los habitantes cantos de trueno, que leshacíanponerlapieldegallinasinsaberporqué.Elporquéyolosabíamuybien:lesservíaeltexto de las letanías que por fuerza había devanado ante el altar y que, en estas ocasiones,siemprealrevésyelsentidodearribaabajo,volvíanaenloquecermicorazónconsuritmoimplacable. ¡También cuando andaba de noche por la landa soplaba la cornamusa! Enparticular,cuandolalunallenabrillaba,elplacermeembargabayeracomosilasmelodíasresbalaran bajando a lo largo de mi espinazo, como si esa oración del Revés ganararápidamentemispiesviajeros,parallegar,atravésdeellos,hastalasentrañasdelatierra.Unavez, amedianoche—justamente era el 1.° demayoy la fiesta de losDruidas, la luna llenaempezaba amenguar—unamano invisible que saliódel negro suelome tomó firmementeporelpie,demaneraquenopodíadarunpasomás.Quedéahícomofascinadoytambiénalinstantedejédetocar.Entoncesselevantóunvientoglacialquesalía,meparece,deunhoyoredondoenelsuelositomuycercademí; fuiparalizadode lacoronillaa losdedosde los

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pies,lopercibíigualmenteenlanuca,loquemehizovolver:entoncesvidepiedetrásmíoaalguien,sehubieradichoqueeraunpastor,puesteníaenlamanounlargobastónbifurcadoenformadeYmayúscula.Detrásdeélunrebañodecorderosnegros.Antesyonohabíavistonialrebañoniaél,puesdeberíadehaberpasadoasulado,pensabayo,conlosojoscerrados,mediodurmiendo,puesciertamentenoeraunaaparición,comosehubierapodidosuponer,sinounapersonadecarneyhuesocomotambiénsurebaño;minariz,alolereloloralanamojada que exhalaba el rebaño, también lo testificaba». (Señales de fuego). SeñalómiOjoBlancoydijo:«Porquetúeresllamado».(Señalesdefuego).

Unespantososecretomágicodebíadeestarexpuestoaquí,pueslamanodeunatercerapersona,enloaltodelapáginacarbonizada,haescritocontintaroja:

«¡Tú,quenotieneselcorazónsuficientementesólidopararesistir,noleasmás!¡Tú,quedudasdelafuerzadetualma,escoge:aquíresignaciónyreposo,allí,curiosidadyperdición!».

Sigueneneltafileteverdehojascasitotalmentedestruidas.Decitasaisladas,sepuedededucirqueelpastorhabíareveladoaBartlettmisteriosquedebíanrelacionarseconelcultodeunaoscuradiosadelaantigüedad,bajolainfluenciamágicadelaluna.EsteconjuntodeespantososritostodavíavivehoyenEscocia,enloscuentospopulares,conelnombrede«Taighearm».MáslejossecomprendequeBartlettGreen,hastasuencarcelamientoenlatorre,habíaguardadounacastidadabsoluta,loqueparecemuchomásmilagroso, pues un bandolero no acostumbra especialmente a destacar por suvirginidadsexual.¿Setratabadeunadeterminaciónodeunaaversióncongénitahacialamujer?Nadaen las escuetas citas del texto permiten saberlo. A partir de ahí, los desmanes del fuego vanatenuándoseysepuedeleerclaramenteloquesigue:

«SólocomprendíamediaslospropósitosdelpastorreferentesaldonquemeharíaundíaIsaíslaNegra—entonces,ciertamente,sóloeraun“Semi”iniciado—¡cómopodíaserqueunobjetomaterial surgiera delmundo invisible! Le pregunté cómo podría conocer que habíallegadoeltiempodeesaconcesión;medijo:“Oiráselgallocantar”.Nohabíaganadonada,losgalloscantancadamañanaenlospueblos.Novi tampocoel interésdeunpuntoquemeseñaló como importante: que ya no conocería ni el temor terrestre ni el dolor. Esto mepareciósecundario,puesteníalaconviccióndeyaserunatrevidobastanteendurecido.Perolosañosylamadurezllegan,oíelcantodelgallodelquemehabíaqueridohablar,esdecir,enmimismo.Hastaentoncesnosabíaquetododebecomenzarenlasangredeloshombresantesdeconcretizarseenelexteriorporunhechopositivo.DespuésherecibidoelpresentedeIsaís,el“zapatodeplata”;hastaentonces,eneltranscursodeunalargaespera,tuveextrañasvisiones, mi vida fue sembrada de fenómenos: palpamientos de invisibles dedos húmedos,gusto de amargo en la lengua, quemaduras en la coronilla, como si un fuego al rojo memoldearaunatonsuraenelcuerocabelludo,picazónypicadasenlasuperficiedelasmanosylospies,maullidoseneloídointerno.Signosescritosquenopodíaleer,peroqueseparecíana los de los judíos, aparecieron en mi piel como en una erupción para desaparecerinmediatamentedespués,consóloqueelsolbrillaraencima.Avecestambiénmeinvadíaunardientedeseodemujer,quemedevorabacomounfuegointerioryquemeparecíatantomás

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extraordinario, puestoque siemprehe tenidohorror por esasmujeresypor las porqueríasque saben tanbien intrigar en todaspartes con loshombres.Luego, cuandooí el cantodelgallosubirpormiespinadorsal,despuésdehabersidomojadohastaloshuesos,comoporunbautismo, por una lluvia helada, cuando no había ni una nube encimamío, volví, la nochedruídicadel1.°demayo,alalanda,larecorríenzigzagymeencontré,sinhaberlobuscado,anteelHoyo…»(Señalesdefuego.)

«Siguiendolasinstruccionesdelpastorhabíaarrastradotrasdemíelcarroquellevabaloscincuentagatosnegros.Encendíunfuegoycuandohube terminado las imprecacionesde laluna llena,mi sangre se puso a circular enmis venas cargada de un indescriptible frenesí,hastaelpuntoquemesalíaespumadelaboca.Toméelprimergato,loensartéyempecéel“Taighearm” girándolo lentamente para asarlo. Alrededor de media hora sus horriblesmaullidosmemartillearon las orejas, unamedia hora queme pareció durarmeses, de talmodo empezó a alargar el tiempo la intolerable empresa a la que obedecía. Me preguntéprimerocómopodríasoportaresejuegoespantosorepetidocincuentaveces,perosabíaqueme estaba prohibido aflojar antes del último gato y que debía vigilar severamente paraimpedircualquier interrupcióndelgrito.Sin tardanza losde lacajahabíancomprendidosuparteyrespondíanacoro.Deprontosentídespertarseenmílosespíritusdelademenciaquedormitanenelcerebrode todohombre,ymialmasearrancópor trozos.Yestosespíritus,lejosdepermanecer enmí, se escaparondemibocacomounalientoen lanocheheladaysubieronparaformarenlalunaunhalotornasolado.Laideapropiadel“Taighearm”era,mehabíadichoelpastor,extirpar todaslasraícesdelmiedoydeldolorqueseescondíanenelfondodemí,alhacermeprocederconelsupliciode losanimalessagradosde ladiosa, losgatos negros: el número de raíces se elevaba a cincuenta. A la inversa, suponiendo que elNazarenohayaquerido tomar sobreél todoel sufrimientode lascriaturas,haolvidado losanimales.Ycuandoeltemoryeldolor,exudadosdemisangre,hayanllegadoalmundodelasapariencias, el de la luna, de donde sacan su origen, entonces mi verdadero Yo quedarádesnudoylamuerteserávencidaparasiempreconsusconsecuencias,asaber,elolvidodel“¿Quiénsoyyo?”ylapérdidadetodaconciencia.“Mástarde,añadió,lasllamasdevorarántucuerpocomohandevoradoladelosgatos,pueshayquepagarloqueesdebidoalaleydelatierra,¿peroquéimporta?”.»

«El“Taighearm”haduradodosnochesmásundía.Heaprendidoapercibir,demanerapalpable, lanaturalezadel tiempo; todomialrededor,pormás lejosquemimiradapudieraextenderse,elmatorralestabadesecado,negrodeduelopor lahorriblecalamidad.Yaeneltranscurso de la primera noche mi Sentido interior empezaba a manifestarse; primero fuicapaz,enmediodelhorribleconciertodepánicoalquese libraban losgatosde lacaja,dedistinguirtodasycadaunadelasvoces.Lascuerdasdemialmavibrabandetráscomoenecohastaqueunaserompió,luegootrayotra.Miorejasehabíapasadoaldiapasóndelamúsicadelasesferasabismales;desdeentoncesséloquesignifica“Entender”.Noesnecesarioquetetapeslasorejas,hermanoDee:deahoraenadelanteniunapalabramássobrelosgatos.Ahorasededicanajugar,quizáenelcielo,“algatoyalratón”conlasalmasdeloscuras».

«Sí. Y la luna llena brillaba arriba, y el fuego estaba apagado.Mis rodillas temblaban,mientrasyooscilabacomounjunco.Debídepermaneceralgúntiempoasí,mientraslatierragiraba,puesvi a la lunavoltear aquíy allá en lo altoparahundirse finalmente en el cielo.

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Constatétambiénquemiotroojosehabíavueltociego,puesyanoencontrabalosbosquesylaslejanasmontañas,sólounamudaoscuridad.Nosécomosucedió,perodeprontovi,conmiOjoBlanco,quehastaentoncesestabamuerto,unmundoextraño:enelairevolabanunossingularespájarosazulesconrostrodehombresbarbudos,estrellasconlargaspatasdearañasurcandoelcielo,árbolesfósilescaminando,pecesprovistosdemanossecomunicabanconsignosmudos;habíamuchosotrosobjetosbizarros,elcontactodeloscualesmesorprendíayalavezmeparecíafamiliar,comosiyahubieraasistidoahíabajoalnacimientodetodoelRecuerdoysolamentelohubieraolvidado.“Antes”y“Después”habíancambiadodeaspectoparamí,pudieradecirsequeeltiempohabíasufridoenteramenteundesplazamientolateral…(Señales de fuego)…En la lejanía un humo negro se levantaba del suelo, llano como unaplancha,ensanchándosesiemprehastaformarenelcielountriángulodeprofundastinieblascon la punta hacia abajo; el triángulo estalló, una fisura carmesí la entreabrió de arriba aabajo:unmonstruosohusodabavueltasaunavelocidadfrenética…(Señalesdefuego)…vifinalmentelarepugnantemadreIsaíslaNegrahilarenlarueca,consusmilmanos,lacarnedeloshombres…porlafisuralasangrerezumabahaciaabajo…algunasgotas,saltandodelsuelo,mehisopearon,demaneraquetuveelcuerpomoteado,comounenfermoatacadodelapeste roja.Era elmisterioso bautismode la sangre… (Señales de fuego) gracias al cual elgritodelnombredelaGranMadrehadespertadoasuhijitaquehastaentoncesdormíaenmíelsueñodelasimienteyquesehamezcladoenmíparalavidaeternayyoatadoaellaparasiempre,enlaparticipacióndelaambivalenciadelser.Desdeentoncesnoheconocidoelcelodelhombre, lesoyinvulnerableparasiempre.¿Cómopodríalamaldicióntomaraquienhaencontradosupropiapartefemeninaylallevaenél?Mástarde,cuandorecobréelusodemisojosdehombre, unamano salióde lasprofundidadesdelhoyoen la landayme tendióunobjeto que lucía como la platamate. Sabía que no hacía falta cogerlo con los dedos de latierra, pero la hija de Isaís enmí alargó su bella pata de gato yme ofreció el zapato, “Elzapato de plata”, que desembaraza de todo temor a quien lo lleva. Luego me uní a unacompañíadesaltimbanquisencalidaddebailaríndelacuerdaflojaydedomador…Jaguares,leopardosypanterashuíanaunrincóndelajaulallenosdemiedocuandolesclavabamiOjoBlanco… (Señales de fuego)… Ignoraba igualmente todo el arte del funámbulo y no tuvenuncanecesidaddeaprenderloyaque,graciasal“zapatodeplata”,elcualmehabíaquitadotodotemor,caídasyvértigoseranimposibles,tantomáscuandomi“prometida”ocultareuníaen ella el peso demi cuerpo.Ya te veo, hermanoDee, te preguntas: ¿por qué esteBartlettGreen, a pesar de todo, no ha sido nada mejor que un saltimbanqui y que un bandolero?Quiero responderteya: "Noseréuna fuerza liberadahastadespuésdelbautismodelFuego,cuando haya padecido el “Taighearm”. Entonces me convertiré en el capitán de losRavenheadsinvisibles,yenelMásAllá,lestocaréalospapistasuncantoquelesharáresonardurantesiglossustímpanos.¡Seesforzaránenvanoendispararsusflechas,nopodránherirconeso!…¿Dudas,jovenmaestro,quetengaelZapatodeplata?¡Mira,hombredepocafe!"YBartlettapoyólapuntadesubocacontrasutalónizquierdoafindesacarlo,peroderepentesedetuvo,ensanchósusfosasnasalesamododeuncarnívoro,mostrósuspuntiagudosdientesyresopló.Entonces,conuntonoburlón:“¿Hueles,hermanoDee?¡Lapanteraviene!”.Yoretuvemialientoy tambiénamímeparecióolerenelaireelolorde lapantera.Al instanteoíunpasofuera,antelapuertadelcalabozo…».

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«Unminutodespuésquitabanlospesadoscerrojosdehierro».

AquíseinterrumpeelrelatoconsignadoeneltafileteverdedemiantepasadoJohnDee,yyomeabandonoaunameditaciónpensativa.

***

¡El olor de la pantera! Leí una vez, no sé donde, que las cosas viejas pueden contener unamaldición, un encantamiento, un sortilegio capaz de actuar sobre quien las llevaba a su casa y seocupabadeellas.

¿Quién sabe lo que se desencadena cuando se silba a un caniche polvoriento encontrado en eltranscursodeunpaseotardío?Seleacogeporcompasiónenunahabitacióncalienteyluegounbuendíaeldiabloapareceensunegropelaje.

¿Mesucederáamí,descendientedeJohnDee,loquesucedióanteriormentealdoctorFausto?¿Hepenetrado, por la emmohecida herencia de mi primo John Roger, en el aura de una iniciacióncompleta? ¿He atraído fuerzas, conjurado poderes que tácitamente residen en ese fárrago dereliquias,comogusanosquegestanenlamadera?

***

InterrumpolaredaccióndemiresumendelcuadernoverdedeJohnDeeparamencionarloqueacabadesuceder.Confiesohacerloaregañadientes.Unaextrañacuriosidad,unimpulsodeproseguir,adentrándome en la lectura del relato del encarcelamiento de mi antepasado, me posee. Ardo endeseos,comounlectordenovelasexcitado,deconocerlacontinuacióndeloseventosenlaprisiónde Bonner, el Obispo Sangriento, y de saber qué entendía Bartlett Green por esa singularexclamación:«¡Hueleapantera!».

Hablemosfrancamente:desdehacedíasnopuedodesembarazarmedelsentimientoquetodoesteasuntodelaherenciadeJohnRogerhaempezado«pormandato».Experimentohastaenlapuntademisdedoslanecesidaddenoproceder,enlaredaccióndeestasingularbiografíademiantepasadoinglés,nisegúnmifantasía,nisegúnmielección,sinodeobedecercomoel«Jano»o,siseprefieremiversión,el«Baphomet»demisueñomehaordenado:leoyescribodejándomeguiarporél.Nosabríadecircómoactúaesavoluntaddirectoranidequéemana.

Tomodenuevolapluma,animadoporunsingularestadodeánimo.DesdeelmomentoenquemedecidíarestablecerlapalabradeBartlettGreenydeJohnDeeenelcuadernomedioconsumido,apenassihatranscurridomediahora.Sinembargo,yanopdríadecirconexactitudsieneselapsodetiempoguardopresenteenmiespírituelrecuerdorealdepercepcionesverdaderas,osidebotenerlasporsimplesalucinaciones,porsombrasdeeventosfugitivosyficticiosquetraidoramentehubieraninvertidomiconcienciamediodespierta.Resumiendo:mihabitaciónolíaa«Pantera»,esinnegable;teníamásjustamente lavagasensacióndeunolorafiera,enmíhabía lavisióndeunajaulaenuncircoydegrandesgatosqueibanyveníansincesardetrásdelosbarrotesalineadoshastaelinfinito.

Sobresaltado.Golpeabanprecipitadamentelapuertademidespacho.Mi «¡Entre!» que era,menos amable, cualquier cosa—ya he hecho alusión ami horror a ser

molestadodeimprovistoenmitrabajo—fueseguidodelaaperturadelapuerta.Vielrostroansioso,espantadodemiviejaperobuenagobernanta, formadapormí,quemepresentabaporasídecirlo,

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excusas mudas; y al mismo tiempo, casi tocándola, me caía impetuosamente del cielo, comoproyectada,pudieradecirse,porunresorte,unadama,alta,muydelgada,vestidaconuntrajeoscuroytornasolado.

¿Cómo podría describir, sin forzar las palabras, la entrada de esta mujer, la cual daba laimpresión de una cierta esencia aristocrática pero demasiado segura en verdad para no habersevueltounreflejo?Surgióde lamaneramásromántica,pudieracreersequesalíademipapel.Peroapenas restablecido de mi primera impresión me digo: esta mujer me es totalmente extraña. Unamujer de mundo. Su porte no permite suponer ninguna duda al respecto. Inclinó su pálida bellacabeza,comosibuscaraalgunacosaanteella,caminaba,omásbiensedeslizabalevantandolafrenteuniformementehaciamí,sedetuvoalladodemiescritorio.Sumanopalpólosbordesdelamesa,talcomovehacerse a los ciegos expertos, para encontrar, con lapuntade losdedos, un lugardondeapoyarse.Luego esa fuertemano cerrada se posó calmadamente y todo el cuerpode la extranjerapareciórecibirapoyoyserenidad.

Muycerca,estabaelarcadeToula.Conesainimitablefacilidadquenoseaprende,dominólaembarazosa,omejordicho,laextraña

situación, pronunciando dos frases de excusa mientras sonreía, se le notaba un innegable acentoeslavo,yrápidamenteremitiómisdesordenadospensamientoshaciaunadirecciónprecisa,medianteestaspalabras:

—Brevemente,señor,hevenidoahacerosunasúplica.¿Melaconcederéis?Ante semejante demanda, formulada con una sonrisa por una mujer de una belleza tan

excepcional, que por una vez quiere descender de su natural altivez, un hombre bien nacido sólopodráencontrarunarespuesta:

—Consumogusto,siestáenmipoder…Debí responderalgunacosasemejante,puesuna rápidamiradadeunadulzura inexpresable,de

una complicidad casi cariñosa, se paseó sobre mí. Al mismo tiempo, una risa suave, indolente,extraordinariamenteagradable,coloreabaesaspalabrasquemeinterrumpieronconvivacidad:

—Os loagradezco.Nodebéis temerporundeseoextravagante.Mipeticiónesmuysimple.Suéxitosóloreposaenvuestrainmediatabuenavoluntad.

Ellatitubeabademaneracuriosa.Yomeapresuraba:—Enesecaso,siosentiendobien,señora…Percibiólalentitudconlaquemesalíanlaspalabrasyexclamó:—¡Simicartaestásobrevuestroescritorio!—Ysepusoareírconsurisabenéficaeinsinuadora.Seguíconlosojosladireccióndesumano,singularmenteestrecha,nopequeña,sinomoldeada

en una sustancia blanda y dura a la vez. Efectivamente, vi una carta, situada en el ángulo de miescritorio,juntoalarcadeilusionistarusodeLipotine;enningúnmomentopensécómopodíahaberllegadoahí.Latomé.

ASSIACHOTOKALOUGUINE

El nombre estaba grabado, coronado con una extravagante corona de príncipe.En elCáucaso,todavíahaynombresprincipalesyarmascircasianasquellevan,bajoladominacióntantodeRusiacomodeTurquía,el títulodepríncipe.Observabasinerrorposible,en los rasgosde ladama,ese

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acusadocortequeseacercatantoaltipoorientalcomoaltipogriego,recordandoloscánonesdelabellezaenPersia.

Luego me incliné ligeramente hacia mi visitante, que ahora estaba sentada con la espaldasuavementeapoyadaenelrespaldodelsillónalladodemiescritorio,mientrassusindolentesdedosacariciabandetiempoentiempoelarcadeToula.Lavigilaba,presadelarepentinainquietudquesusdedosnoladesplazaran,peronohizonada.

—Vuestrasúplicaesunaordenparamí,princesa.Sintransiciónrealzóunpocosutallaaltivaenelsillónyempezóahablar,nosindedicarmeaún

unavezesamiradadeorotornasolado,indescriptiblementecálida,electrizante:—SergeLipotinemeesunviejoconocido,quizáloignoráis.Élesquiencompusolacolecciónde

mipadreenIekaterinodar.Élesquienhadespertadoenmíelamorporlosobjetosantiguosbellosysingulares. Yo colecciono cosas de mi país natal, los tejidos, los hierros forjados, los…especialmentelasarmas.Yespecialmente,entrelasarmas,ciertasqueson,meatreveríaadecir,muypreciadasentrenosotros.Tieneentreotras…

Su voz, su acento extranjero, musical, maltrataba maravillosamente los sonidos alemanes,titubeabasinparar,rimabalaspalabrascomosifueramedianteunamecedora,ymeparecíasentirlapasaramisangre, luegorefluirporunaespeciede resacaapenasperceptible.Loquedecíanomeimportaba,almenoseneseinstante;perolacadenciadesuspalabrasengendrabaenmíunestadodeembriaguezligeraquesupedescubriralmomentoyalqueacusabayodehaberdado,unavezpasado,acasitodoloquesehabíadicho,hechoosólopensadoentrenosotros,elaspectodeunsueño.Aquílaprincesadiofinaladescripcióndesumanía,ysaltandoalmotivoprincipal,dijo:

—Lipotinemeenvíaausted.Séporélqueestáisenposesióndeunapiezamuyrara,muynobleymuy preciosa que pasa por ser muy antigua: una lanza, quiero decir el hierro de la lanza, de untrabajoúnico.Untempleexcelente,porloquesé.Estoyexactamenteinformada,Lipotinemehadadoladescripción.Quizálahabéisadquiridoporsumediación.Noimporta…(oponíaunasorprendenteresistencia a toda objeción que pudiera formular), no importa, deseo adquirir esa lanza. ¿Queréiscedérmela?¡Osloruego!

Farfulló,porasídecirlo,lasúltimaspalabras.Estabamuytiradahaciadelante,apuntodesaltar,pensé: y me asombré, hasta tuve una fugitiva sonrisa interior por esa desconcertante avidez delcoleccionistaquepuedeponersealacechoyrecogerseantesdelsaltodesdequeveosólohueleunapresacodiciada,comounapanteracazando.

—¿Unapantera!Otravezesapalabraquemehacíaestremecer,¡pantera!EnlavidadeJohnDee,BartlettGreenes

unbuenpersonajedenovela,meparece.¡Sussentenciassegrabanenlamemoria!Enprevisióndelmotivoqueahoraseabordaba,miprincesacircasianasebalanceabaenelborde

desusillón,yensubellorostrosemarcabanlasarrugas,deningúnmododisimuladas,delaespera,deunagratitudpresta,deunaaprehensiónnerviosaydeunamimosidadelocuente.

Apenas si estaba en estadode disimularmi sincera y triste decepción, así que decidí sonreír yrespondercontodoeldolorposible:

—Princesa,enverdadmevolvéisdesgraciado.Vuestrademandaes tanpequeñay laocasióndepodersatisfacereldeseodeunapersonadevuestrorangoytanencantadora,tanrara,queapenassitengofuerzasparadecepcionaros:noposeoelarmaquemehabéisdescritoyjamáslahevisto.

Contratodoloesperadolaprincesaestallóenunreírcándido,yconlaindulgentepacienciade

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unajovenmadreaquiensuadorablehijoacabadedecirpordescuidounamentira,seinclinótodavíaunpocomáshaciamí:

—Lipotine lo sabe. Yo lo sé: vos sois el feliz poseedor de esa lanza, que ardo en deseos deadquirir.Ibaisavendérmela.Osloagradezcodetodocorazón.

—¡Sientodesesperadamente,señora,tenerosquedecirqueLipotineseengaña!¡QueLipotinesehaequivocado!¡QueLipotine,deunamaneraodeotra,cometeunaequivocación,enunapalabra…

La princesa se levantó con un balanceado movimiento de todo su cuerpo. Vino hacia mí. Supaso… ¡ah, su paso! de pronto se proyecta en mi memoria. Su paso era silencioso, como si seondulara en lapuntade lospies, elástico, aveces casi fugitivo, sinun ruido, conunagracia…¡Adóndemearrastranmispensamientos!¡Estoyloco!

Laprincesarespondió:—Esposible.Naturalmente,Lipotinesehabráconfundido.Lalanzanoestáenvuestraposesión.

Notieneimportancia,perohabéisprometido…dármela.Sentícomoeldesesperomearrancabalospelos.Almismotiempomeesforzaba,mediantecada

fibrademiser,ennodisgustarestabellacriaturaqueestabaallídepieantemí,tensaporlaespera.Su extraordinarios ojos bordados de oro totalmente abiertos,me aprisionaban en el incomparableembrujodesusonrisa.Apenassiconseguíaretenermedetomarlaporlasmanosodedejarlecaerunalluviadebesosodelágrimasderabia,demirabiapornopodersatisfacerla.Febrilmentemerealcéen toda mi altura, la miré directamente a la cara con franqueza y poniendo en mi voz toda laentristecidaprobidaddelaqueeracapaz,ledije:

—Porúltimavez,princesa,oslorepito:nosoyelposeedordelalanza,odelhierrodelalanzaquebuscáis,nopuedoserlo,puesenmividahe tenido,esverdad,diversosgustosparticulares,hesucumbidoatalocualinclinacióndecoleccionista,peronuncaeneldominiodelasarmasodelaspartesde lasarmas,nideunamanerageneralen loshierros,dedondeydecualquiercarácterquesean…

Medetuve llenodeunespanto interiormientrasqueapesarmíosemesubían loscoloresa lacara por una falsa vergüenza, pues, antemí estamujer de alta cuna estaba de pie, sonriendo congracia, en absoluto irritada,y sumanoderecha sedeslizaba tocando sin cesar el arcadeTouladeLipotine,esteelocuenteespécimendetrabajometálicoquerevocabamisprotestasalrangodelamásgroseramentira,comosifueraaconferirasuplatayatrabajada,líneasmagnéticas.¿Cómoencontrardeprontounaexplicación?

Buscabalaspalabras.Laprincesa,consumanolevantada,meloimpidió:—Oscreodecorazón,señor,noosapenéis.Nohedeseadoforzarelsecretodevuestrosgustos

particulares.SeguramenteLipotineseequivoca.Tambiényopuedoequivocarme.Peroospidounavez más todavía con toda… la obstinación, con toda la… torpeza de una esperanza quizádemasiado…extravagante,estaarmadelaqueLipotinemeha…

Caíasuspies.Yamesentíadeunhumorunpocoteatral;mepareció,porunmomento,quenoteníaamidisposiciónningunaactitudmásfuertenialavezmástiernaparaexpresarmiimpaciencia,miembarazoymienojo.Reunímispensamientosparaunaarengaqueconcluiríafinalmenteenmivictoria. Abrí la boca y quise empezar: «Princesa», con una risa suave, dulce. Sí, debo escribir:fascinante,sedeslizóantemíhacialapuerta,sevolvióaúnunavezparadecir:

—Señor, veo cómo batalláis. Creedme, os comprendo y comparto vuestros sentimientos.

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¡Repensaos! ¡Resignaos a la decisión queme satisfará!Volveré otra vez. Puesme concederéismidemanda.Medaréiselhierrodelalanza.

—Yasehabíaeclipsado.

***

Ahora, la habitación está impregnada del ligero perfume característico de su presencia. Unperfumequemeesdesconocido:suave, fugaz…Unextractodeflores insólitas,ysinembargo:unhálito,entrelosotros,áspero,singularmenteexcitante,entodocaso,nosécómosalirdeél,entodocaso -salvaje- indeciblemente excitante-absurdo- voluptuoso-opresor-manipulador-esperanzas sinobjeto-unmalestary-untemor,sóloahoraloconfieso,quevaalfondodelser.¡Quévisita!

Hoy,losiento,noestoyenestadodeponermealtrabajo.MepropongoiracasadeLipotineenWerrengasse.

Debo anotar todavía dos pequeños hechos que en este preciso instante recuerdo: cuando laprincesaChotokalouguinehapenetradoenmidespacho,lapuertasehallabaenlaespesaoscuridaddelasoscurascortinasdoblesmediocorridasenlaventanadedetrásdelescritorio.¿Porquéahoraquiero imaginar que he visto, durante una fracción de segundo en el momento en que entraba,resplandecersusojosenlaoscuridadcomolosdeciertosanimalesquebrillanconelfulgordeunapiedrafosforescente?¡Sinembargo,séperfectamentequenoeselcaso!Yluego:laprincesallevabaunvestidodesedanegrarayadadeplata,mehaparecido;ensutexturasecreíaverfluirhilosyolasdelestallidodelmetalensordecido.Yaestoyensoñando,dejoerrarinvoluntariamentemivistasobreelarcadeToula.Estenegroincrustadodeplata…creoqueelvestidodamuchoquepensar.

***

Yacaíalatardecuandodejélacasa,parairalencuentrodeLipotineensutiendadeWerrengasse.Esfuerzo inútil.El establecimientoestabacerrado,viunpequeñocartelpuestoen la rejadehierroconlasiguientenota:«Deviaje».

Noestabaenabsolutosatisfecho.Alladounapuertadabaaccesoaunpatiointerior,dondepodíaverse detrás de la tienda el domicilio privado de Lipotine. Crucé el patio; la persiana de su tristeventana estaba cerrada, peromis reiterados golpes consiguieronqueunapuerta vecina se abriera;unamujermepreguntóloquequería.Meconfirmóqueelrusosehabíaidoesamismamañana.Nosabíacuandovolvería.

Había hecho alusión a un fallecimiento de algún barón ruso en la miseria y ahora que habíamuerto, Lipotine debía de arreglar sus asuntos.Creo que sabía suficiente para comprender que elbarónStroganofsehabíafumadosuúltimocigarrilloydespedido.EstastristescircunstanciashabíanobligadoaLipotineaabstenerse…¡Esmolesto!Lavistadeesepostigocerradoredoblabalafuerzayla urgencia demi deseo: el de poder hablar de la princesa con el viejo anticuario, obtener de élaclaraciones y si es posible un consejo referente a ese desventurado hierro de lanza.Me parecíaverosímil que Lipotine me hubiera confundido con otro comprador de esas curiosidades, o queteniendoelobjetoaúnensuposesión,seimaginó,confundidoporelhábito,habérmelovendido.Enambos casos quizá todavía sería posible conseguir ese hierro de lanza; y debo confesarlo, estabadispuestoapagarunasumadesproporcionadasiloencontrabaypodíacomprarlo,afindeofrecerloa la princesa Chotokalouguine. Me sorprendo de cómo giran mis pensamientos alrededor de la

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aventuradehoy.Tambiénsientoquemesucedealgunacosaquenopuedoelucidarcomoyoquisiera.¿PorquénoquierealejarsedemíelpensamientodequeLipotinenoestáenabsolutodeviaje,sinoque está tranquilamente sentado en su tienda, y que ha oído perfectamente las preguntas sobre esehierro de lanza que le hicementalmentemientras estaba de pie ante su ventana y que inclusomerespondió,aunqueyolohayaolvidadoahora?¿Oquizáfuifinalmenteasutienda,conversélargoytendidoconél,yyanosabríanadamás?Tambiénpodríavenirmealamenteunsucesoqueyohabríavividohace…haceunsiglo,suponiendoqueyahubieraestadoenestemundo…

Todavíaquierohacernotarqueparavolverheseguidolosviejosbaluartesdesdedondeseveunahermosavistasobrelosprados,lascolinasylasmontañascercanas.Elanochecereramuyagradableyelpaisajeamispiesseextendíalejosbajoelclarodeluna.Inclusohabíatalclaridadqueconmisojos buscabamaquinalmente el discode la lunaquedebía de esconderse en algunaparte entre lascimas majestuosas de los castaños. En ese mismo instante apareció, casi llena, difundiendo unaextrañaluminosidadverdosaenunhalorojo,entrelostroncosquesobrepasabanelmuro.Mientrascontemplabaconsorpresasuluzcargadadevaporesylaextrañacomparaciónmeatormentabacomouna herida sangrante—y esto, una vezmás todavía, desencadenó enmí un estado de alma que seformulóestapregunta:¿Todoestoesreal,osólosetratadeunmuyviejorecuerdo?—vielcrecientedelalunasubirbastantealtofueradelaperpendiculardelbaluarte.Yenesemismominutoserecortósobreeldisco reluciente laprecisa siluetadeunaesbeltamujer,queparecíavenir amiencuentro,haciaelbaluarte,enelcursodeunpaseovespertino.Creíveracercarsesuformatodavíamás,flotarentre los castaños, sí, flotar: es el término exacto… y esto despertó en mí la impresión que laprincesa,surgidadelalunamenguante,ensuvestidonegrotejidodeplata,veníahaciamí…

Luego,amedidaqueesaformadisminuía,tambiényosentídisminuirmiconocimiento,yquedéprosternadocontraelparapeto,comounestúpido,hastaelmomentoenque,habiendorecobradomissentidos,mediungolpeenlafrenteymeconsiderécandidatoalmanicomio.

Retomé, turbado, el camino de retorno. Al caminar me puse a canturrear las palabras de unaconfusamelodíaqueteníaenlacabeza,yqueintentabareconstruiralacadenciademipaso,sinsabernielporquénielcómo…

EnlanocherelucientedeplataEnlanocherelucientedeplataContémplameContémplameTúquefrecuentasmipensamientoTúquepermanecessiempreahíabajo…

Este insípidoritornelomehaperseguidohastaaquí,amihabitaciónyhe tenidodificultadesenexpulsar demí su lacerantemonotonía. ¿Pero por qué todo se resume tan singularmente en estaspalabras:

Enlalunamenguante?…Melostraen,pienso.Seagazapanenmícomo…comogatosnegros.Enresumidascuentas,haymuchospuntossingularmentesignificativosenloquemehasucedido.

¿Amenosquesóloseaelespectador?Todohaempezado,sinomeequivoco,desdequemeocupodelospapelesdemiprimoJohnRoger.

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Pero qué diablos tiene la lunamenguante…Un escalofríome recorre y sé, de pronto, porquéestasdospalabrasmevienenalalengua…¡LaadvertenciaañadidaeneldiariodeJohnDee,porunamanoextranjera!…¡Enelcuadernodetafileteverde!

Y sin embargo lo repito: ¿Qué relación podría haber entre la enigmática amonestación de unsupersticioso del siglo XVII contra los misterios del diablo escocés, en todo el horror de suiniciación, ymi paseo crepuscular con su pintoresca salida de la luna por encima del baluarte denuestrabuenayviejaciudad?¿Quéhedehacerdeello,yquémesucedeamí,quevivoenelsigloXX?

***

La noche de ayer todavía pesa en mis miembros. He dormido mal. Confusos sueños me hanatormentado.SuSeñoríamiabuelomehacíasaltarsobresusrodillasymerepetíaincansablementeenlaorejaunapalabradoble,queheolvidado,peroqueteníaalgunacosaquevercon«círculo»y«lanza».También volví a ver el «otro rostro» detrásmío;me daba una orden terminante de estaratento,casideberíadecirdepermaneceralerta.Peroyanopuedoacordarmedecuáleraelpeligrocontraelcualdebíadeprevenirme.Laprincesaapareciótambiénentrelasimágenesdeesossueños—¡naturalmente!— pero tampoco sé nada más de ese encuentro. ¡Además, es de locos hablar deencuentrosapropósitodevisionestandelirantes!

Sealoqueseatengolacabezapesadaymesientoparticularmentefelizdeencontrarmeanteunatareatanacaparadoraparadesembarazarmecompletamentedemispensamientosnocturnos.Conesadisposicióndeespíritu,esagradablecompulsarviejosmanuscritos.TantomásagradablecuantoqueeldiariodeJohnDee,másdeloquesepuedejuzgaraprimeravista,está,desdeelpuntoyaparteenel que ayerme detuve hasta el fin, en un estado pasable.Me pongo pues ami traducción y amitranscripción.

ElZapatoDePlataDeBartlettGreenEnnuestra celda,débilmente iluminadapor losprimeros rayosdel alba, entró, solo, un

hombredenegro,deunatallaunpocoporencimadelamedia,yapesardesucorpulencia,conun paso y unos gestos prodigiosamente ágiles. Percibí un fuerte olor que emanabadelmovimiento dado a su sotana por su rápida entrada, ciertamente un olor a carnicero. Estepastorde almasde rostro redondo,demejillas agradablemente florecidas—unconfortabletonel de vino de misa, se le hubiera podido suponer— tenía la mirada característica, fija,medioimperiosa,mediodesconfiada,deojosamarillos,sinningúnsignoparticularsobresusvestidosysinescolta,almenossiestabapresentepermaneciósiempreinvisible,era,losupedebuenasaprimeras,SuSeñoría sirBonner, elObispoSangrientodeLondresenpersona.BartlettGreenestabaagachado,mudo,delantemío.Susglobosocularesgiraronlentamente,calmadamente y siguiendo con atención cada movimiento del visitante. Mientras tanto yoobservabalosacontecimientos,todotemorhabíadesaparecidoextrañamenteenmí,yacordémiconductaconladelmartirizadojefedelosRavenheads,inmóvilenmiasiento,comosinohicieraelmenorcasodenuestrohuéspeddepasosilencioso.

Esteúltimosegiróbruscamente,caminóhaciaBartlett,leempujóligeramenteconelpie,ysintransición,rugióconunarudavozordenando:

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«¡Depie!».Apenas si Bartlett Green movió las pupilas. Su mirada se alzó sesgadamente hacia el

verdugodesucarneyrespondióconunavozcavernosa,quedejóenridículoel tonodesuinterlocutor:

«¡Demasiadopronto,ángel-trompetadeljuicio!Todavíanoeslahoradelaresurreccióndelosmuertos.

¡Ves,todavíaestamosvivos!».—«¡Lo constato con disgusto, monstruo del infierno!» escupió el obispo con una voz

extraordinariamentedulce,deunabenignidadsacerdotalquecontrasta singularmenteconelsentidodesuspalabras,asícomoconelrugidodepanterausadoantes.

YSuSeñoríaprosiguióconelmismotonodulzón:«Escucha. Bartlett, la insondable misericordia ha previsto entre sus decretos la

eventualidad de tu contricción y confesión. Haz una confesión general, y el principio deldescenso a los infiernos en la pez ardiente te será diferido, quizá evitado. Tu tiempo depenitenciaterrestrenopuedeserreducido».

Una risa, o más bien una especie de trueno medio retenido fue la única respuesta deBartlett.Vi una sacudida de cólera reprimida perturbar al obispohasta lomás hondo, peroguardóunsorprendentecontrolsobresímismo.Avanzóunpasohaciaelmiserablemontónde carne humano sacudido, sobre un montón de inmundicias, por una risa silenciosa, ycontinuó:

«¡Eh! veo,Batlett que eres debuena constitución.Labúsquedade la verdadmediante latorturasólohapodidodomarosunpoco,allídondeotrosyahabríansalidodesupielconsualma hedionda. Dios quiera que el estimable barbero, sí, el médico mismo, a quien lanecesidad os confía, sepa recomponeros… Mi clemencia, al igual que mi rigor, creefirmementequedentrodealgunashorassaldréisdeesteagujerocon—lavozdelobisposeconvertíaaquíenunronroneodelosmásíntimosydelosmásamables—vuestrocompañerodemiseriaydeinfortunioenestelugar,sirDee,vuestrofielamigo».

Eralaprimeravezqueelobispomealudía.Aloírahorapronunciarminombremedioungolpe de esos que te despiertan con sobresalto de un sueño cualquiera y te conducen a larealidad. En efecto, durante un momento, tuve la impresión de asistir a una muy lejanafantasmagoríaoaunagrotescacomediasinningunarelaciónconmipersonaymiexistencia.Ahorayaeraunhecho;porlapuntillatandulcecomohorribledelobispo,estabaimplicadoenelnúmerodelosactores.¡SiBartlettconfesabaquemeconocía,estabaperdido!

Pero cuando el horror repentino que desencadenó enmí la conciencia demi situaciónapenas si había tenido tiempo de expulsar la sangre demi corazón amis ardientes venas,Bartlett, con una flema y una imperturbabilidad indescriptibles, giró la cabeza ami lado yrefunfuñó:

«¿Ungentilhombrequecompartemilecho?Graciasporestehonor,hermanoobispo.Yocreíaquehabíasqueridodarmeporcompañeroalgúnsastre,afindequeaprendadevuestrabuenaescuelacómoelmiedolepuedesacarelalmaporloscalzones».

EsteinsultantediscursodeBartlett,taninesperado,mehiriódeimprovistoenmiorgullodeantaño,hastaelpuntodedarmeelimpulso—bienprontorefrenado—desaltar.Lacóleranormaly ladesconfianzamecompusieronunaexpresiónquedeningúnmodoescapóa los

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ojos observadores del obispo Bonner. Al instante comprendí la intención del valerosoBartlett; una confiadagranpaz llenómi corazón, demaneraquedecidí interpretar bienmipapelenlacomediayareplicar,entodacausa,tantoaBartlettcomoalobispo,delamaneramásadecuada.

Mientras tanto sir Bonner disimulaba su decepción de tener que esperar a otra ocasiónparasaltarsobresusdospresascomounapantera,detrásdeunronroneantebostezoque,dehecho,recordabaendemasíaelexpresivomalhumordeungrangato.

«¿Noquierespuesconoceraéste,nidevistanidenombre,buenmaestroBartlett?»dijoelobispo,zalamero,inaugurandounanuevamanera.

PeroBartlettGreensecontentócongruñir.«¡Quisierais que conociera al señorito, apenas salido de las mantillas, que me habéis

metidoenminicho,señorloco!¡Quisieravivirtodavíasuficientementeparaverconmisojosaltalespeciedejovenperrolloraduelosdeslizarseporlapuertadepezhirvientedevuestrocielo; pero no soy, como vos, amigo y hermano de leche de ningún vil gentilhombre,compadreBonner!».

«¡Lenguadevíbora,condenadacarnedecañón!»gritóelobispoporunavezespontáneo,pues su fuerza de contención había llegado al límite. Se oyó entonces ante la entrada delcalabozounsugestivochischásdearmas.«¡Lamaderaylapezsonfrusleríasparati,primernacidodeBelcebú!¡Hayqueconstruirteunahogueradeazufreparadarteunaperitivodelqueteesperaenlacasadetupadre!».

Elobispovociferaba,elrostroenrojecidoporunacóleracreciente,yrechinabadedientesmientrasquesuspalabrasseahogaban.PeroBartlettGreenreplicóconunestallidoderisa,empezó a balancearse cada vez con más fuerza de un lado a otro sobre sus dislocadosmiembros,espectáculoquemehelódeespanto.

«¡Teequivocas,hermanoBonner!cortópor lobajo. ¡Nosirveparamibelleza,comotúesperas, el azufre!Losbañosdeazufre sonbuenospara los franceses;noquierodecir conello que no tengas necesidad de una cura de esta especie de agua termal, ¡ja! ¡ja! escucha,pobreaprendiz,alládondedeberásacurrucarte, llegadotu tiempo,elolordelazufrepasaráporalmizcleyalientoembalsamadodePersia».

«Confiesa,demonioconcabezadecerdo,rugióelobispoBonner,queestegentilhombre,JohnDee,estuhermanoderapiñaydeasesinato,sino…».

«¿Sino?»repitióBartlettGreenconunecoburlón.«¡Rápido,lasesposas!»jadeóelobispo.Y los criados se precipitaron al interior de la celda con todos sus arreos. Este Bartlett

tullido alzó entonces su mano derecha con una risa silbante: hundió su pulgar entre suspoderosasmandíbulasydeunsologolpesemordiólafalangehastaverelhuesoyescupióalrostro del obispo con una segunda risa infernal, al punto la sangre y la baba regaron lasmejillasylasotanadelhorriblesacerdote.«¡Ahí!»,unaterriblerisaestallódespuésdelgolpe,yBartlettlanzócontraelobispo,conunalenguatanlocuaz,unatalcantidaddeinjuriasydeimprecaciones queme parece imposible reproducirlas aunquemimemoria fuese capaz derecordarlamáspequeñaparte.Resaltaba,deltotal,lamuyhorribleygarantizadapromesaderecibirlofraternalmente«ahíabajo»cuandoél,Bartlett,saliendodelasllamasdelahoguera,hubiera atrapado al vuelo la tierra del Más Allá, que él llamaba «Verde». No quería

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atormentarlenihacerlezarandearenlapezyelazufre,¡oh!no,queríatornarlebienpormalyenviarle—aélsuqueridohijo—pequeñasdiablesasdelamásolorosayoriginalmanera,elemperador del cual, además, bien podía ser francés. Así quería sazonarle cada hora de suestanciaenladulzuradelinfiernoyenlaamarguradelinfierno,puesenelMásAllá…

«EnelMásAllá,mi bebé, así hablóBartlett para concluir sumonstruosapredicción, tecorregirásconaullidosygemidos,ynosdedicaráslahediondezdetubarrizalanosotroslospríncipesdelaPiedraNegra,anosotrosloscoronadosconlaimpasibilidadcoronada».

Sería vano querer describir los espantosos pensamientos, el desencadenamiento de unajauría de pasiones o sólo las sombras de horror que, durante este diluvio de invectivas, seanimabanalolargodelrostrodelobispoBonner.Esterobustohombrepermanecíaahídepiecomosihubieraechadoraíces;detrássuyolainsolenciadelosverdugosylossoldadoshabíaquedadoreducidaalasdimensionesdelrincónmásoscurodondeseamontonaban,puescadaunodeellosteníauntemorsupersticiosoqueel«maldeojo»delOjoBlanconoleshirieraconunmaldelquehubierandesufrirtodasuvida.

FinalmentesirBonnersearrancódesuatontamientoylimpióconsumangadesedalasmanchasde lasqueestabacubierto.Luego,muycalmo,casidulce,peroconunaespeciedeardorcontenidoenlavoz,dijo:

«Nomeenseñasnadanuevosobreelvirtuosismodelespíritudelmal,delEnemigoydelMentiroso, aprendiz de brujo. Pero me incitas a acelerar las cosas, con el fin de que undemoniotanrealizadonorecibapormástiempolosrayosdelsolceleste».

«Dateprisa»,respondióBartlett,conuntonosecoybrusco:«lejosdeminariz,carroña,sonnecesariasfumigacionesparasanearelaireenelquetúhasrespirado».

Conmano soberana el obispo hizo un gesto y los esbirros se acercaron para tomar aBartlett. Pero se acurrucó para escapar a su asalto, se volvió sobre su larga espalda y lesmostrólaplantadesupiedesnudo:saltaron,conjuntamente,haciaatrás.

«¡Mirad! gritó, he aquí el zapato de plata que me ha dado la abuela Isaís. Después dellevarlotantotiempo,¿cómoeldoloryeltemorpodíanhaberhechomellaenmí?¡Yoescapoaesasminúsculasenfermedades!…».

Constatéconhorrorqueaesepielefaltabantodoslosdedos;elmuñóndesnudoparecíaungranzapatodemetal: la lepra resplandeciente lohabía raído.Batlett era semejanteaeseleprosodelaBibliadelcualestáescritoqueerablancocomolanievereluciente…

«¡Pesteylepra!»aullaronlossoldados;tiraronsuspicasylasesposasyseprecipitaronenlocahuidaporlapuertaabiertadelcalabozo.SirBonnersequedó,elrostropálidodehorroryderepulsión,dudandoentreelorgulloyeltemor,pueslalepraplateadaesreputadaentrelagenteavisadaylossabioscomounmaleminentementecontagioso.Reculólentamente,él,quehabíavenidoagustarelplacerdesaborearsobrenosotros,pobresprisioneros,susinstintosdepoder;pasoapasoreculóanteBarlettquesearrastrabapersiguiéndolo,rechazándoloconsupieleproso,vomitandosiempresussarcasmosyblasfemiasmásalládetodamedidacontraelpríncipedelaIglesia.SirBonner,labravuradelcualnoaumentaba,pusopuntofinalenlapuertadiciendoconunavozentrecortada,mientrasquesedeslizabafuera:

«Hoy mismo esta peste será quemada en fuego séptuple. Pero tú cómplice del últimocírculodel infierno—este insultosedirigíaamí—debesgustarelsaborde las llamasquenosliberarándeestemonstruo,paraexperimentarconaplicación,portimismo,quetodavía

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pueden purificar tu alma perdida. ¡Por gracia te liberaremos de la hoguera de los herejesinmediatamente!».

Éstas fueron las últimas bendiciones que recogí de la boca del Obispo Sangriento.Confieso que por un instante me precipitaron en un abismo, en todos los horrores de laangustia y en las representaciones más espantosas. En efecto, se dice de sir Bonner quesobresale en el arte de matar tres veces a sus víctimas: la primera vez por su sonrisa, lasegundaporsuspropósitos,laterceraporsuverdugo;estodebesercierto,puesestehombremehahechosufrirelmásterriblesuplicioantesqueelincreíblemilagrodemiliberaciónmehayaahorradolaterceramuertequesumanomedestinaba…

Apenasme quedé solo de nuevo con Bartlett, él rompió el silencio en el que se habíasumidonuestrocalabozoporloscloqueosdesurisa;casibonachón,searrastróhaciamí:

«Déjalo correr, hermanoDee. El espanto te descompone como si tuvieras unmillar depiojosydegarrapatas debajode lospelos, por loqueveo.Pero también es verdadquehehecholoquehepodidoparacortarporlosanocontodacomplicidadentretúyyo—bienveoquetehasdadocuenta—,tambiénesverdadquetúsaldrássanoysalvodeestaaventura,alomásmiasuncióntequemaráunpocolabarba.Esto,sopórtalocomohombre».

Incrédulo,levantémicansadacabezaenlaquezumbabadolorosamenteelecodetodoslostormentos,detodosloshorroresaloscualeshabíaasistido.Además,comoeshabitualcuandoelalmaestáagotadadebidoaunexcesodeemocionesydetribulaciones,meencontrabaconuna disposición casi indiferente y por así decirlo desprendida de toda preocupación;recordaba con satisfecha sonrisa el vil terror del obispo y sus secuaces cuando vieron el«zapatodeplata»delalepraenmicompañerodecondenaymeacerquéporunaespeciededesafío,haciaelhombremarcadoconesesigno.

Bartlettsediocuentaygruñósegúnsuextrañamanerahabitual,dedondeconcluíqueestesalvajecompañeroestabaconmocionadoporunsentimientoque,enunhombredecualquierotranaturaleza,sehabríapodidointerpretarcomountoquedeemociónhumana.

Abrochólentamentesucasacadecuerosobresuvelludopechoalquenocubríaningunacamisa,ysinmásmedijo:

«Avanzasinsegundasintenciones,hermanoDee;eldondemigraciosaDamaestal,quecadaunodebeganárseloporsuspropiosmedios.Nopuedotransmitírtelo,aunqueyobienloquisiera».

Todavía cloqueó una vez más con su risa medio reprimida, lo que me produjo unescalofrío.Perobienprontoprosiguió:

«Así pues, lo he hecho de la mejor manera para fastidiar al sacerdote el placer dedescubrirqueestábamosconfabulados;pero,queridomío,nohacíanadaporamorati;actuéasíporquedebíaenfuncióndealgoqueyoséyquenopuedeserdeotramanera.Puestúeresel joven príncipe real de este tiempo, señorDee; a ti te está prometida la corona del PaísVerde,laDamadelostresimperiosteespera».

Casimedesvanezco al oír esas palabras en la bocadel bandidoy salteador y apenas sipudemantenermisangrefría.Contodo,rápidamentesupuseloquehabíapodidosuceder,ycreí,nosinemoción,descubriruna relaciónentreBartlettesenacidovagabundo,esemagonegro,ylabrujadelalandadeUxbridge,inclusoconelmismoMascee.

Comosihubieraadivinadomipensamiento,Bartlettcontinuó:

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«Conozco perfectamente a la hermanaZeire deUxbridge, y también almaestre del zarmoscovita. ¡Ten cuidado! Es un alcahuete; pero tú, hermano, ¡debes reinar, con plenoconocimientoydeterminación!Lasbolasrojayblancaquetúhastiradoporlaventanadetucasa…».

Soltéunarisarebelde:«EstásbieninformadoBartlett,¿asíelllamadoMasceetrabajatambiénbajoelpendónde

lacabezadecuervo?».Bartlettrespondiótranquilamente:«Quediga:“Teequivocas”,oquediga:“Puedaser”,noganarásningunainteligenciacon

ello.Perovoyaenseñarte…»yelbandidomeexpusohoraporhora,minutoporminutomishechos y gestos durante la noche en que los esbirros del obispome habían arrestado;meindicóellugarylamaneraenqueseabríaelescondrijoenelquehabíametidotodotipodeescritossecretosconunagranprudenciaymúltiplesprecauciones,hastaelpuntodenoquererconfiarlos ni a mi diario. Riendo me rindió detallada cuenta de todos mis actos, tannaturalmente como si fuera yo mismo, o bien hubiera estado presente a mi lado; ningúnhombreenelmundoydeningunamanerahabríapodidomostrarsemejantedoblevista.

Yanosupedominarmisorpresanimi impresióndehorrordelantedelmartirizadojefeRavenhead,tansuperioralosdonesmásextraordinarios,alasprácticasyalospoderesquedominaba como jugando; lemiré a la cara sin decir palabra, luego balbuceé: «Tú que noconoceseldolor,que triunfas sobre losdoloresvisiblesdelcuerpo,que, según tuspropiaspalabras, tienes la poderosa ayuda de tu soberana y diosa, Isaís la Negra, a tu lado, tú,finalmente, que puedes ver incluso las cosasmás escondidas… ¿Cómo estás ahí. Yaciendomiserablemente, cargadodecadenas, con losmiembros rotosyapuntode serpresade lasllamas?¿Cómonoescapasdeestosmurosmedianteunaoperaciónmágica?».

En el intervalo,Bartlett había sacado de su pecho un pequeño saco de cuero que ahorateníaensumanolibreybalanceabaantemisojoscomounpéndulo.Riendomedijo:

«¿Noteheprevenido,hermanoDee,queenlostérminosdenuestraleymitiemposehacumplido? He ofrecido los gatos en oblación al fuego, debo a mi vez ser la víctimapropiciatoria del fuego, puesto que hoy cumplo mis treinta años. Hoy soy todavía estemiserableBartlettGreenaquiensepuedetorturar,desgarrar,quemar,ytehablocomoelhijodeunaputaydeunsacerdote;peromañana,seacabó:elhijodelhombreeselevadoalrangode prometido en la casa de la Gran Madre. Pues el tiempo de mi dominio ha llegado.¡HermanoDee,todosvendréisencompañíaafisgonearcómogobiernoenlavidaeterna!…Pero para que siempre recuerdes mis palabras, para que encuentres mi camino, recibe enherenciamitesoroterrestrey…».

Destrucciones intencionadas interrumpen aquí la continuidad del relato. Parece como si estadestrucciónseaimputablealapropiamanodeJohnDee.LanaturalezadelregalohechoporBartlettGreenalseñorDeedestacaclaramenteenlasprimerasfrasesdelacontinuacióndeldiarioqueyasehallaenbuenestado.

(Señalesdefuego)…demaneraque,hacialacuartahoradelatardetodoslospreparativosparaeldesarrollodelavenganzaimaginadaporelObispoSangrientoestabanterminados.

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VinieronallevarseaBartlettGreen;yyo,JohnDee,despuésdeunamediahorayaestabasentado solo en el calabozo; muchas veces tuve en mis manos el regalo poco visible deBartlettparaexaminarlo.Eraunpequeñotrozodecarbónpuro,negro,delgruesodeundedo,talladoenformadeoctaedrocasiregularynormalmentepulido.Segúnlasexplicacionesylapalabradesuantiguopropietario,contansólounpocodemagianegra,podréveraparecerenlas caras relucientes de esta especie de espejo ya sea la imagen de un evento actual que sedesarrollaenlalejanía,yasealarepresentacióndefuturasperipeciasdemidestino.Peronovinadasemejante;sindudaacausadelaturbacióndemiespíritu.ElmismoBartlettmehabíadichoqueeratotalmentecontrarioynefastoentalesexperiencias.

Finalmenteagucéeloídoyoíelruidodelcerrojodemicalabozo.RápidamenteretornéelmisteriosocarbónalabrigodelviejosacodecuerodeBartlettyésteenelforrodemicasaca.

Inmediatamente entró una escolta de soldados del obispo armados hasta los dientes ypensé,conunescalofríodehorror,quesetratabanadamenosquedeconducirmealamuertesinnitansiquierajuicioenelmáscortoespaciodetiempo.Sehabíadecididodeotramanera:debía,afindeprepararmejorydeablandarmialmaendurecida,serconducidomuycercadela hoguera para que mis cabellos se chamuscasen y viera arder a Bartlett Green. Es muyposible que Satanás haya empujado al obispo a forzar por este medio, aprovechando lossufrimientosdelcondenadoamuerteydelhorrorqueyomanifestaría,unaconfesiónsuyaomía referente a nuestra asociación, o de obligarnos de algunamanera a traicionarnos. Nopodríainsistirenestedramaquesehaimpresoenmimemoriaparatodalavida,dejandoenmialmaunamarcacomograbadaconhierrocandente.Sóloquierohacernotar,resumiendo,que el obispo Bonner recogió del espectáculo del suplicio de Bartlett Green, unos frutostotalmentedistintosdelosquehabíaimaginadoenlavoracidaddesurepugnantecuriosidad.

Hacia laquintahoraBartlettpusoelpieen lahoguera, tanalegrecomosise lehubieradichoquesubieraallechonupcial;porelcaprichodemiplumareencuentroenmiespíritususpropias palabras, le oí confiarme que hoy esperaba ser el prometido de su Gran-Madre,maneraunpocoirreverentedepresumirsuretornoalpaísdesualma,cercadeIsaíslaNegra.

Cuando hubo subido al patíbulo, gritó fuertemente al obispo riendo: «¡Cuídese, señorcura, cuando entone el canto del retorno, en proteger su cráneo calvo, puesto que quierohumedecerlo con una gota de pez y de azufre en llamas que os trabajará el cerebro hastavuestrocercanoviajealinfierno!».

Lahoguerahabía sidoconstruidaconunesmeroyun refinamientodeunacrueldad tanimpensable,comonunca jamásantessehabíavisto,yquieraDiosquenosevea jamásotraigualenestemundomiserable.Paraprecisar,sehabíaerigidosobreunhúmedomontóndemaderadepinoqueardíamuymal,unapértigaalaqueBartlettestabaatadomediantegrapasdehierro.Peroesteárboldelmartirioestabarodeadohastaarribademechasdeazufre,yunacoronadepezyazufremuyvoluminosahabíasidoenganchadaencimadelacabezadelpobrepecador.

Cuandoelverdugohuboprendidolamadera,unpocoentodaspartes,consuantorcha,lasmechasdeazufreseincendiarontodasalavezycondujeronlasoleaginosasllamashastalacoronaquecubríalacabezadelculpable,demaneraqueunalargalluviadeazufreydepezenllamasempezóacaergotaagotasobreél.

Pero, a despecho de este abominable espectáculo, se puede decir que para este

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sorprendente hombre, atado a su poste, se trataba sólo de un refrescante chaparrón deprimera, de un maná. No dejó en todo ese tiempo de mancillar al obispo con los másultrajantes y virulentos sarcasmos, de manera que el pontífice sentado en su trono deterciopeloestabamuchomásenlapicotaquesuvíctimaenlahoguera.Y,sihubierapodidoencontrarunpretextodecenteparaescabullirsedelpapeldeacusaciónpública,lavíctimadelacualconocíasusfaltasmássecretasynoseprivólomásmínimoenexponerlas,sirBonnerlohabría hecho con gran alegría, renunciando con gusto a alimentarse con esta ejecución.Parecíaheridoporuna inconcebible fascinación, incapazdehacerotracosaque temblarderabia y de vergüenza contenidas y dar, con la boca espumeante, orden tras orden a susservidoresdeacelerarportodoslosmediosunafaenaqueprimerohabíapensadoprolongarde la más horrible manera. Sin embargo, era extraordinario ver cómo ninguno de losproyectiles que finalmente fueron copiosamente lanzados a modo de granizo sobre elsupliciadolograronacallarle,eracomositodasupersonafueraindestructible,invulnerable.Finalmenteseamontonómaderasecayfagotesmezcladosconestopaenlahogueraafindehacer crecer el braseroyBartlett desapareció entre las llamasy el humo.Pero entonces sepuso a cantar con una atronadora voz de regocijo, como algunas horas antes en la prisióncuandosebalanceabaenelmuro,yconelcrepitardelamaderaresonó,lúgubreyradiantealavez,susalvajemelopea:

¡Hurra!Elchorlitocantaenlarama.Despuésdelamudademayo.¡Hurra!Nosotroscantamos,totalmentebalanceadoenloaltodelmástil.¡Hurra!¡MadreIsaís!¡Hurra!

Unsilenciodemuertehabíainvadidoellugardelsuplicio;elespantoyelhorrorsehabíanapoderadodelverdugoydelossoldados,delosjueces,delossacerdotesydelosseñoresquetemblaban de pies a cabeza. Era un espectáculo casi risible. Debía verse, sobre todo, a SuSeñoríaelobispoBonnersentadosobresutronosemejanteaunfantasmapálido,petrificado,las manos crispadas en los brazos de su sillón. Con sus huraños ojos fijos en las llamas.CuandoelúltimosonidodelaquejaexpiróenlabocadeBartlettGreenqueardía,vialobispotitubearmientraslanzabaungritodecondenado.¿Selevantóunaventoleradelahoguera?Lociertoesqueunchorrode llamas,parecidasa lenguasdeunamarillo rojizo, se levantódegolpe de la hoguera, revoloteó, se dispersó en chispas y se arremolinó, subiendooblicuamente en el cielo crepuscular hacia el trono episcopal, justo sobre la cabeza de SirBonner.Siunagotadeazufreinfernaltocóyardióenesacabeza,comolohabíaprofetizadoBartlett pocas horas antes, no sabría decirlo. Se habría podido creer a juzgar por la cararevulsivadelObispoSangriento,ysisugritoapenasfueperceptible,esquizáporqueelcaosdelamasadehombresquellenabalaempestadaplazaimpidióoírlo.

Deboañadir,paraserfielenmirelación,que,mientrasmellevabalamanoalafrenteparaborrarloshorroresdeesashoras,cuandorecuperémiscabales,unmechóndecabellosquehabíaardidoenmicabezacayóamispies…

Lanochesiguientealoshorriblessucesosdeesedíalapaséenmisolitariacárcel;sólo

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puedoconfiaramidiariounapequeñapartedelascircunstanciastanextraordinariasporlasqueestuvomarcada;loquequierodecires,pero,queesanochepermaneceráparamísiempreinolvidable, como todo lo que me ha sucedido en la prisión del Obispo Sangriento enLondres.

Durante el anochecer y la primera parte de la noche, no sólo esperaba un nuevointerrogatorio sino también la discusión en el tribunal del obispo Bonner. Mi confianzareferente a las palabras proféticas de Bartlett era mediocre, lo confieso, aunque hubieratomado una y otra vez su negro cristal para intentar descubrir, en las pulidas caras de eseinsignificante mineral, una imagen de mi futuro. Pronto la oscuridad había invadido elcalabozo,yadiferenciadelanocheprecedente,elguardiánnojuzgónecesario—oquizásetratabadeunaprohibiciónformal—traerunaluzamicelda.

Despuésdehabermeinstaladoparameditar,noséhastaquéhora,sobremidestinoyeldelbandido,aquiensuspirandoenvidiabaporhaberterminado,sealoquesea,contodaespeciedemales y cautiverio ulterior, me hundía hacia medianoche en la pesada somnolencia delagotamiento.

Meparecióentoncesquelapesadapuertademiinpaceseabríadeunamaneratotalmenteinexplicable y que Bartlett entraba sin ninguna ceremonia o preparativo particular, bienplantado,derecho,deestaturacasiimponente,muyalegreydesbordantedefacultades,loquemellenódelmásprofundoestupor, tantomásquemiconciencia,quepermanecíadespierta,nodejabadetenerencuentaniuninstanteelhechoquehabíasido,pocashorasantes,juzgadoy quemado. Rápidamente le hablé con un calmado tono y le preguntaba, en nombre de laTrinidad,sisereconocíaporunfantasmaoporBartlettGreenenpersona,aunquedespachadoaaquídemanerasorprendenteporotromundo.

Sobre ello,Bartlett, con su risa habitual, que le subía de lomás profundo de su pecho,respondióquenoeraningún fantasma, sinoelverdaderoBartlettGreen sanoy floreciente,queademásnoveníadeotromundo, sinodeéste, el actual,delqueenadelantehabitabaelrevés, pues nohay«MásAllá», sinoque en todas partes donde la vida se desplega, hayunmundo único que revistemuchos, sino innumerables aspectos ymedios de penetración, demaneraqueelsuyodiferíaevidentementeunpocodelmío.

Esto no sonmás que balbuceantes proposiciones muy por debajo de la claridad, de lasimplicidad de la evidencia que habría querido describir y que, en ese instante de lucidezsemiconsciente,meimaginabaposeer;puesmicomprensióndelarealidaddelaquehablabaBartlettsebañabaporasídecirloenlaluzdelsol,demaneraquelossecretosdelespacio,deltiempo,delaconstitucióndelser,aparecíandiáfanosyseofrecíanamiespíritu.Bartlettmeinculcó en esas horas un muy notable conocimiento de mí mismo y de mi futuro que heconservadopreciosamentehastaelúltimodetalle.

Ysiesanochetodavíapodíadudarlo,temerunailusión,sipodíacreermeeljuguetedeunsueñomentiroso,ahorayaestoytanplenamenteinstruidoporelcumplimientoextraordinarioyperfectamente irracionalde susprofecíasqueal contrario, estaría loco sihoyconcedieramenoscréditoa loquemehaanunciadoparaelmañana.Sólounpuntopermaneceparamíinsoluble: el motivo que empujaba a Bartlett Green a ocuparse de mis asuntos con esaconcienciayatomarmetotalmentebajosubenefactoradirección;pueshastaestedíajamáshamanifestadoningunaveleidaddeperjudicarmenitomadoairesdecorruptorinfernal;porotra

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parteyohabríasidounhombrecapazdechillarleunpotenteyenérgicovaderetroSatanás,paraqueseaengullidoporeseinfiernoalcualhabríapretendidoarrastrarme.

Desde la eternidad su vía no es la mía; y siempre tomo buena nota que no actúa parahacermebien,sinoparaajustarseaunprogramaqueseleha,porasídecirlo,indicadoconeldedo.

Instadopormispreguntas,medeclaró,esafamosanoche,quequedaríalibrealamañanadeldíasiguiente.

Y mientras que, totalmente incrédulo, dadas las circunstancias y la gratuidad de susafirmaciones, le hacía sufrir un estrecho interrogatorio, queriéndole demostrar la patenteabsurdidadylainverosimilituddeloquemeprometía,élcloqueóconsucaracterísticarisa,exactamentecomoenvida,ydijo:

«¡HermanoDee,eresunimbécil.Veselsoldecarayrechazaseltestimoniodetusojos!PeroyaquesóloeresunnovicioenelArte,untrozodemineralpuedetenerparatimásvalorque una palabra viva. Toma pues mi regalo cuando estés despierto y contempla lo que tuconciencianoescapazdeatraparalvuelo».

Indicaciones importantes, que yo no sé formular, concernientes a la conquista deGroenlandiaylaurgencia,inclusolaimperiosanecesidaddeestaempresaparaelconjuntodemi futuro destino, constituyeron lo esencial de su enseñanza.También debomencionar queBartlettGreen,enelcursodesusvisitasulteriores—ytodavíamevisitaamenudo—nohadejadodemostrarme,conunaconstanciayunafirmezasiempremayores,estavíaynootraparallegaramimetasuprema,alobjetodemisesfuerzosmásardientes;enprimerlugar,meafirmó, obtendré la corona deGroenlandia; ¡y ya empiezo a comprender la advertencia!…Luegomedesperté:lalunamenguantelucíaaltaenelcielodemaneraqueuncuadradodeluzdeunblancoazuladoseproyectabadesdelapequeñaventanahastamispies.Poseídoporuncreciente deseo saqué de su saco el cristal de carbón y lo puse en ese haz de luz lunar,presentandounadelascarasdelespejooscuroalaclaridaddelastro.Seprodujeronreflejosazulados,luegodeunnegrocasivioletaydurantelargorato,apartedeestaobservación,nopude descubrir nada. Pero de pronto subió a lo largo de mi cuerpo una singular calma,perceptible,yelcristalnegrodejódetemblarenmimano,puesmisdedossehabíantornadofirmesysegurosasícomoelrestodemipersona.

La luz de la luna sobre el cristal se cargó de iriscencias, luego se elevaron volutas deopalescencia lechosa,quesiempre ibandeslizándosehasta formar,en lacaradelespejo,uncontorno luminoso, una especie de imagen, primero minúscula, semejante a un juego degnomosalaclaridaddelaluna.Conrapidez,sinembargo,laimagenseextendíaenanchurayen profundidad, la visión escapó al espacio permaneciendo concreta, y yo me encontrabadentro.Yvi…»(Señalesdefuego).

Unavezmáseltextodeldiariohasidoaquídestruidocuidadosamente,peroelpasajesuprimidonoes largo.Segúnpuedo juzgar,miantepasado,consupropiamano,hahechodemaneraqueseailegible. Parece que le ha venido la idea, después de haberlo redactado, de no dejar su secreto enmanosdeunlectorinoportuno,puespodíaserpeligrosodespuésdesuaventuraenlaTorre.Hayunfragmentode carta insertado en este lugar. Sin duda algunami primoRoger lo ha sacadodeotraparteypuestoahíenelcursodesutrabajo,puesllevasinerrorposibleunanotadesuescritura.

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TodoloquequedadeundocumentorelativoalsecretodelaliberacióndeJohnDeedespuésdesuencarcelamientoenlaTorre.

Encuantoaldestinatariodeestacarta,elestadoactualdelfragmentonopermitedeterminarlo,loque tampoco tiene importancia, pues echando unamirada en la vida de JohnDee, a la luz de estefragmento,muestraquenuestrohéroedebesuliberaciónalaprincesaElizabeth.

Doyaquíelcontenidointegral:

«…siendociertoparamí(JohnDee)queosconfío,comoúnicohombreenlatierradignodeello,elsecretomássublimeyalavezmáspeligrosodemivida.Yaunquenotuvieraotromotivo, debo obrar así en todasmis empresas pasadas y futuras, para el honor y la gloriatemporaldenuestragraciosaSoberana,SuVirginalMajestadElizabeth,miGranreina.

Seré,pues,muybreve.Cuando laprincesa real tuvo conocimientodemidesesperada situación,hizo llamar—

conunabravurayunaprudenciaqueciertamentenohubierapodidoesperarseenunaniñadesuedad—anuestroamigocomúnLeicester;pidióque ledijera,palabradecaballero,hastadonde llegaban sus buenas disposiciones, su amor y su lealtad hacia mí. Cuando huboconstatadoqueestabadispuestoa todo, resueltoasacrificarseélmismosieranecesario,sepusoenacción,conuncorajeinaudito,paraasegurarmiliberación.Tambiénquisieraponersimplemente en evidencia, minimizando mi importancia y no sabiendo fundar mejor miadmiración,unhechoquebienpuedoatestiguar:saberqueeldespreciodelpeligro,sujuvenilpresunción, incluso su loca audacia, rasgos de su naturaleza que a veces se le han podidoreprochar,lehanempujadoahacerloqueparecíaimposibleyquesinembargo,eraelúnicomediodelograrmisalvación.

Sirviéndosedellavesverdaderasyfalsas—¡elcielosabequiénselashabíapuestoenlasmanos!—seintrodujodurantelanocheenlacancilleríadeEstadodelreyEduardo,elcual,justamenteenesaépoca,manteníaconelobispoBonnerunasbuenasrelacionesdeamistadytrabajo.

Encontró y abrió el cofrecillo que contenía el papel oficial con el anagrama del rey yredactó, imitando con osadía su escritura y rúbrica, la ordende liberarme inmediatamente;pusoelselloprivadodeEduardo,siempreguardadobajo llaveconcelosasprecauciones,yquehabía,porunprodigioinconcebible,descubierto.

Todofueejecutadoconunacircunspección,unaastucia,yalmismotiempounaaudaciatansorprendentesquenuncalamenordudapudolevantarsesobreeldocumento.Sí,elmismoreyEduardo,cuandomástardevioesteautógrafo,quedótantrastornadoporelescalofriantetestimoniodelamagiadeeseespécimendesuescritura—delquenoteníalamenoridea—quehapreferidocallarseyreconocerloporsuyo.Nospodemospreguntarsinodescubriólafalsificaciónysinoprefirióresignarsesindecirpalabra,paranoverseobligadoaconfesarquesemejanteactosehabíapodidoperpetrarcontantaimpudenciaypremeditacióndesdesuentorno inmediato. En resumen, a lamañana del día siguiente, al levantarse el sol. RobertDudley—más tardeduquedeLeicester—produjogranalborotoeneldespachodelobispoBonner y presentó la carta que le calificaba para sustraer inmediatamente al prisionero deltribunaleclesiásticoenlostérminosquedabalaorden.¡Ylacosaresultó!

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Nuncahepodidosaber,ninadie,loqueconteníaelpretendidoescritodelamanodelreyEduardo, ¡concebido y redactado por una infanta de dieciséis años! Sé que el ObispoSangriento,pálidoycontodoelcuerpotemblando,diolaordenasuguardiapersonal,antelapresenciadeDudley,quienrepresentabaalrey,dedevolvermelalibertad.Estodoloquemeatrevo a confiaros, mi muy querido amigo. Y comprenderéis a través de estas veladasconfidencias, que os confío dudando, el carácter de este “lazo eterno” del que ya os hehabladodiversasvecesreferenteanuestramuygraciosayserenísimareina…».

Aquíterminaelfragmentodelacarta.En el diario de John Dee, en el dorso de las frases tornadas ilegibles, figura solamente este

párrafo:

Esamismamañana,laprediccióndeBartlettsecumplióentodossuspuntos;fuisacadodemimolestaposturasintergiversacionesnidilación,yconducido,pormiamigodejuventudycompañero Leicester, de la Torre a un lugar seguro donde el obispo Bonner difícilmentepodíasuponermipresencia,aúnmenosirmeabuscar,enelcasoquelanaturalversatilidaddesupersonalehubierahecholamentarsuconducta.Hastaaquíllegaréconmiscomentarios,ynocometerélatemeridaddepretenderexplicarelfindelfinydarlasecundamrationemalasimpenetrables vías deDios. Sólo revelo que lamaravillosa y casi increíble audacia demissalvadores, su destreza, fue ayudada, además de una evidente asistencia divina, por laturbaciónqueseapoderódelalmadelobispoBonnerdespuésdelsupliciodeBartlettGreen.Paraprecisar,sédirectamentedesucapellán,pocoimportacómo,queesanocheelobisponohabíapegadoojo;queempezóapasearsealolargoyaloanchodesugabinetedurantehoras,dandomuestrasdelaconfusiónmástotal:quedespuéshabíacaídoenunaespeciededeliriomuyextrañoenelcursodelcualhabíamanifestadounespantoindescriptible.Enuntonocasisuplicantehabíamantenidoconunvisitante invisiblediscursos incomprensiblesy sostenidocontratodasuertedeimaginariosdemoniosunhorriblecombatedevariashoras:finalmentechillómuyfuertemente:«Reconozcoquenotengopodersobreti,reconozcoqueelfuegomedevora,¡elFuego!¡elFuego!»despuésdeelloelcapellán,quesehabíaprecipitadohaciaél,loencontró en el suelo, desvanecido. No insistiré sobre otros rumores que me han llegadoreferentes al presente caso. Lo que he sabido es tan abominable quemi alma y concienciatemeríanmorirdeespantosisolamenteintentasereunirmisfuerzasyponerlosobreelpapel.

AsíterminalarelacióndeJohnDeeconsagradaalZapatodeplatadeBartlettGreen.

***

Dos días de vida campestre y de vagar por la montaña me han rehecho. De repente resolvíabandonar mi escritorio y su orientación así como el meridiano, las reliquias comidas por losgusanosdelantepasadoDee,ymehearrancado,comosideunacárcelsetratara,delainfluenciademicasaydemitrabajo.

¿Noesplacentero,medecía,durantelaprimerahoraqueconmipasohacíasonarlosmatorralesdeloscontrafuertes,quesientalasexactassensacionesquedebióexperimentarJohnDeecuandose

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paseabaenelllanoescocés,despuésdehaberescapadodesuprisión?Ysonreíantelaideaquemepasabaporlacabeza:JohnDeedebíasentirelcorazóntanalegre,tan

exaltado, casi saltando de su pecho por el sentimiento de su nueva libertad, como yo,aproximadamentetrescientoscincuentaañosmástarde,cuandopisóelsuelodeunalandaanálogaalaquehoycorreteoenAlemaniadelSur.DebíaserenEscocia,másomenosenlaregióndeSidlawHills,delaqueheoídohablarmuyamenudoamiabuelo.Estaasociacióndeideasnotienenadadesorprendente,pues,ennuestrainfancia,esteabueloanglo-estirianonossubrayabamuyamenudolaafinidaddelcarácter,lasanalogíasqueexistíanentrelosaltosllanosescocesesylosqueanuncianlasregionesmontañosasdeAlemania.

Ymiensueñoseguíasucurso.Enmicasameveíaenclaustrado,peronocomoalguienqueseencierraparaescrutarelpasado,

no;yoestabaallí,sentadoenmimesa,envilo,semejanteaunapielvacía,aunalarvadeinsectoque,después del invierno y la metamorfosis, permanece pegada al lugar de su muerte, de dondealegrementeme escapé para transformarme en retozonamariposa acabada de nacer, y aprovecharallá arriba en los brezos rosas mi libertad totalmente nueva. Era tan fuerte la representaciónengendradaporesesentimientoqueexperimentabaunverdaderohorrorante la ideadevolvera lavida cotidiana demi casa. Se me ponía la carne de gallina imaginando la piel realmente vacía einstalada para siempre en mi mesa, y a la que debía reintegrarme, como un doble gris, parasumergirmedenuevoenmipasado.

Esascaprichosasfantasmagoríassedesvanecieronrápidamentecuandolleguéamicasa,puesenla escalera choqué con Lipotine que bajaba después de una visita infructuosa. No quise dejarlomarchar,sinoque,aunquelafatigadelviajemeabrumaba,locondujealpuntoamisapartamentos.Aquemarropa,consuhabitualvivacidad,sacióeldeseoquehabíaenmídehablarconélacercadelaprincesa,deStroganof,yparadecirlotodo,de…

Ciertamente,Lipotinemeacompañóypermaneciótodalatardecercademí.¡Una tarde memorable! O, para ser más exacto, una memorable conversación degenerada en

tarde, pues Lipotine estaba más hablador que de costumbre y daba libre curso a cierto humorchistoso, que a veces había notado, demodo queme aparecían en élmuchos rasgos nuevos o, almenos,diferentesdelosquemostrabadeordinario.

MehablódelamuertedelbarónStroganof,tanricoenresonanciasfilosóficas,ydesuspropiostráfagos, en tantoque ejecutor testamentario deunaherencia que consistía endoso tres piezas deropaquehabíanpermanecidocolgadasensuhabitacióncomo…larvasdemariposa.Meimpresionóver usar a Lipotine una imagen idéntica a la que no abandonó mi espíritu durante mis días deperegrinaciones.Ypensamientosrápidos,fugaces,hacíandesfilarenmísuprocesióndehormigas;mepreguntabasilaaventuradelamuertenosedirigeunpocoafranquearunapuertadandoaccesoala libertadmientras permanece donde estaba el capullo vacío—vestido del que se desembaraza—piel,queyaenelcursodenuestravida—comolohabíaaprendidoenmirecienteexperiencia—aveces abandonamos como una envoltura extranjera que nos inspira horror, el horror queexperimentaríaunmuertosifuerainvitadoavolveraentrarensucadáver…

Enelínterin,Lipotinehablabadeunasyotrascosas,consudescosidamaneraunpocoirónica,pero esperaba en vano que dirigiera por él mismo la conversación hacia la princesaChotokalouguine.Unararatimidezmeretuvomuchotiempoaincitarlesobreellopeseamideseo;finalmentelaimpacienciapudomás,ymientraspreparabaelté,lepreguntésinmásrodeoscualhabía

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sidosuintenciónalenviarmelaprincesaycómoselehabíaocurridodecirlequemehabíavendidounaantiguaarma.

—¿Yporquénooshabríavendidouna?—respondióLipotinecontodalaserenidad.Esetonomeirritó;repliqué,conmásvivacidaddelaquehubieradeseado:—¡Pero,Lipotine,debéissaber,sinembargo,simehabéisvendidoonoalgúnantiguohierrode

lanzapersaoDiossabededónde!Esmás:sabéisperfectamentequenuncano…Me interrumpió con, en el tono, una inalterable indiferencia: «No es necesario decir, noble

amigo,queoshevendidolalanza».Suspárpadossebajaron:susdedosamontonabanbriznasdetabacoparameterlasenlapuntadel

cigarrillo.Todoensuactitudexpresalaevidencia.Perocomencédenuevo:—¡Bromeáis,amigomío!Nuncaoshecompradounacosasemejante.¡Nuncahevistoenvuestra

casasealoqueseaqueseparezca!¡Osequivocáisdeunmodotalqueapenassipuedocomprenderlo!—¿Seguro? —respondió Lipotine indolentemente—. Entonces, es que os he vendido el arma

anteriormente.—¡Nunca! ¡Ni ahora ni antes! ¡Recobraos! ¡Antes! ¡Qué queréis decir! ¿Cuánto hace que nos

conocemosentotal?¡Seismeses!¡Ciertamentedebéis,paraunlapsodetiempotancorto,sercapazdereunirvuestrosrecuerdos!

Lipotinemedirigióporlobajounamiradaoblicuaydeclaró:—Cuandodije«anteriormente»,quisedecir:enunavidaanterior,enotraencarnación.—¿Quéqueréisdecir?¿Enuna…?—Enunaencarnaciónprecedente,—repitió claramente.Creídescubrirunmatizdeburla en su

voz;ylerepliquéenelmismotonoderechifla:—¡Ah!¡Seguramente!—Lipotineguardósilencio.Peroqueríasaberporquémehabíalanzadolaprincesaencima,yvolvíalacarga:—Tambiénosagradezcoelhabermepermitidoconocerunadamaque…Élmeneólacabeza.Yoproseguí:—Desgraciadamente la mistificación que habéis considerado necesaria me ha puesto en un

embarazo.Quisiera,enloqueestéenmipoder,ayudaralaprincesaChotokalouguineaprocurarseelarmaquedesea…

—¡Perosiestáenvuestraposesión!—aseguróLipotineconunahipócritaserenidad.—¡Lipotine,hoyhablarosesimposible!—¿Porqué,imposible?—¡Es para volverse loco! Mentís a una dama, le dais la falaciosa esperanza de hallar en mi

posesiónunarma…—Queyoosheprocurado.—¡Quéhombre!Mehabéisdichohaceuninstante…—Queeraenelcursodeunaencarnaciónprecedente. ¡Esopuedeser!—Lipotinepusocarade

volverasusreflexionesygruñó:—Puedesucederqueseinviertanlossiglos.Viquenohabíanadaquehacer esta tardeparahablar seriamente conel anticuario.Estaba, sin

decirlo,unpocoirritado.Peronecesitabasusconsejosyledije,enuntonodebromaunpocoseco:—¡Lástimaquenopuedaenviaralaprincesaalaencarnaciónprecedentedelpreciosoobjetoque

ellabuscacontantoardor!

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—¿Porquéno?—interrogóLipotine.—Porquelaprincesanoaprobaríaciertamentevuestraescapatoriatancómodacomofilosófica.—¡Nodigáiseso!(Lipotinesoltóunarisa).Laprincesaesrusa.—¿Yqué?—Rusia es joven.Muy joven aún, para lo que piensan algunos de vuestros compatriotas.Más

joven que todos nosotros. Pero Rusia también es vieja. Muy vieja. Nadie se sorprende de ello.Nosotrospodemosllorarcomoreciénnacidosycomputarlossigloscomolostresviejosdelabarbadeplataensuislaenmediodelmar.

Conocíaesteorgulloeslavo.Nopudereprimirunacentoburlón:—Yasé,losRusossonelpueblodeDiosenlatierra.YLipotineriéndoseburlonamente:—Quizá.Enefecto,estánalaenteradisposicióndeldiablo.Porlodemás,todoellonohacemás

queunmundo.Minecesidaddedejar en ridículo esta filosofía forjada abasede téyde cigarrillos, que es la

enfermedadnacionalrusa,seduplicó.Respondí:—¡Sabiduríadignadeunanticuario!Lascosasdelpasado,noimportadequéépocasean,cuando

caenennuestrasmanoshoyvivas,nosenseñan lanadadelespacioydel tiempo,quesóloestamossujetos…

Tenía la intención de contarle precipitadamente un cúmulo de banalidades semejantes,encadenadas sin ningún orden unas detrás de otras para cortarle sus alas de filósofo, pero meinterrumpiósonriendoyconunlevemovimientohaciaadelantedesucabezadepájaro:

—Puedeser,medijo,quelasantigüedadesmehayaninstruido.Porotraparte,lamásvenerableantigüedadqueyoconozco,soyyomismo.Enrealidadmellamo:Mascee.

Nohaypalabrasparadescribirelespantoenelquemesumergióestadeclaración.Poruninstanteme pareció que mi cabeza se transformaba en una masa nebulosa y flotante. Una agitación casiimposiblededominarmeposeíay sóloconseguí imponerami fisonomíaunabanal expresióndesorpresaycuriosidadmientraslepreguntaba:

—¿De dónde conocéis este nombre, Lipotine? ¡No podéis imaginaros hasta qué punto meinteresa!Enverdadestenombrenomeestotalmentedesconocido.

—¿Deverdad?—dijolacónicamenteLipotine.Surostrosemantuvoimpenetrable.—Si.Estenombreyquienlolleva,deboconfesarlo,mepreocupanmuchodesdehaceuncierto

tiempo…—¿Desdevuestramástiernainfancia?—seburló.—¡Sí,seguro!—meapresuréaresponder.Desdequetengoestos…estos…Di involuntariamente dos pasos hacia mi escritorio en el cual se hallaban escampados en

desorden los materiales de mi trabajo; Lipotine vio todo ello y no tuvo dificultad en sacar susconclusiones.Meinterrumpióconunaevidenteexpresióndesatisfacción:

—¿Queréisdecirdesdequetenéisenvuestraposesiónestosdocumentosynotassobrelavidadeun cierto JohnDee,Mago negro e Iluminado del tiempo de la reinaElizabeth?Es cierto,Masceetambiénhaconocidoaesepersonaje.

Sentícómolaimpacienciamedominaba.—¡Oídme ahora, Lipotine! —dije—, ya os habéis burlado bastante de mí por esta tarde. Os

transijolosotrosjeroglíficos,pongámoslosenlacuentadevuestrobuenhumor,pero¿cómohabéis

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llegado,cómohabéisdescubiertoestenombre:Mascee?—Pero,siyocreíahabérosloyaconfiado…dijoimpasibleeindolentementeLipotine.—Sí,unruso.El«maestrodelzar»,asílellamanenocasioneslosdocumentos.—¿Perovos?¿Quétenéisqueverconél?—Lipotineselevantó,encendióunnuevocigarrillo:—¡Chanza,querido!Seconocealmaestrodelzaren…nuestrocírculo.¿Quéhabríadeimposible

enqueunafamiliadeanticuarioscomolamíadesciendadeeseMascee?Peronaturalmentenoesmásqueunasuposición,mimuynobleamigo,¡unasimplesuposición!

Ytomósuabrigoysombrero.—Heaquíalgoenverdaddivertido,exclamé.El«maestrodelzar».¿Conocéisporlahistoriade

vuestropaís esta singular figura?Surge tambiéndeviejos textosydocumentos ingleses,yporasídecirlo,seintroduceenmivida…

Laspalabrasmeveníanalabocasinhacerloexpresamente.PeroLipotinemetendiólamanoderechamientrasconlaizquierdaasíaelpicaportedelapuerta:—Por así decirlo en vuestra vida, mi muy noble protector. Ciertamente, sois, en la espera,

simplemente inmortal. Pero él… (Lipotine dudó, guiñó el ojo yme apretó otra vez lamano). Él,digamosparamássimplicidad«yo»,sabedlo,yosoyeterno.Todacriaturaesinmortal,sóloquenolosabeoloolvidaycuandovienealmundoolodejaesporquenopuedesostenerqueposeelavidaeterna.Quizáotravezvolveremosahablardeello.Esperoquedurantemucho tiempo todavíanosmantendremoscodoacodo.Asíque,¡hastapronto!

Ybajólaescalera.Yo quedé ahí turbado y aturdido. Meneando la cabeza me esforzaba en reflexionar. ¿Estaba

Lipotine ebrio? Un cierto destello en su mirada me había hecho suponer varias veces que habíabebido.Peropropiamenteebrionuncalohabíavisto.Teníaelespírituunpocotrastornado,perolotienedesdeque loconozco. ¡Conundestinodedestierroy setentaaños,hayconquéperturbar lasenergíasdelalma!¡Comomínimoessingularquetambiénsepaalgosobreel«maestrodelzar»,yqueleesté,afindecuentas,emparentado,sitenemosencuentasuspalabras!

¡Megustaríaquemedijeraquésaberealmentedeestehombre!Pero¡maldición!Enelasuntodelaprincesanohedadoniunpaso.

Esperemos un día más favorable y disposiciones más sensatas. Lipotine habrá de facilitarmeesclarecimientos y una mejor respuesta. ¡Nome dejaré tratar más como a un burro! ¡Y ahora altrabajo!

***

Fielamiresolución,metolamanosinmirarenlohondodelcajónquecontieneelenvíodeJohnRoger, y saco un cuaderno encuadernado en cartón. Presumo, al abrirlo, que, según todas lasapariencias, debe formar parte de una serie de cuadernos semejantes, pues el relato empiezadirectamentesintítulo.Detiempoentiempo,seseñalaunafecha.Laescritura,aunquemuycambiadaconrelaciónaladelDiario,esincontestablementeladeJohnDee.

Empiezolatranscripción:

MemoriasdeJohnDee,esq,escritasduranteelperíododesumadurez.Enelañodegracia1578

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Hoy,díadelafiestadelaResurreccióndeNuestroSeñor,yoJohnDee,heabandonadodebuenamañanamicamaymehedeslizadosinruidofuerademihabitaciónparanoturbarelsueñodemimujerJane—mimujeractual,misegundamujer—ydeArthur,mimuyqueridohijo.

Algo me ha empujado a escaparme de nuestra alquería, en la dulzura plateada de estaprimaveraquesedespertaba,peronosabríadarlarazóndeestealgo,sinoqueestabaligadaaltrágicorecuerdodeestamismamañanadePascua,talcomohabíaempezadoparamíhaceveintiochoaños.

Tengo numerosos motivos para agradecer aquí, sinceramente y desde el fondo delcorazón, la suerte impenetrable, o para decirlo mejor, al Dios misericordioso, cuyaProvidenciamepermitehoy,amiscasicincuentaysieteaños,saborear,enposesióndetodasmisfacultadesfísicasyespirituales,ladulzuradelavida,ycontemplarcómoenelhorizonteselevantaelsolensumajestad.

Lamayor parte de los que antes queríanmi vida hanmuerto, y sir Bonner, el ObispoSangriento,tansóloesunobjetoderepulsiónparaelpueblocuandoseevocanlashistoriasdelpasado,ouncococonelquelasnodrizasamenazanalosniñosmalos.

¿Pero qué me ha sucedido? ¿Qué ha sido de la profecía y de los ardorosos deseosconcebidospormiespírituenlosdíasdemifogosajuventud…?Apenassipuedoimaginarelpasodelosañosconsucontenidodeproyectos,deilusionesydefuerzasprodigadas.

Removiendosemejantespensamientos,queporotraparteseimponíanenmídesdehacíatiempo,andabaporelbordedelpequeñocursodeaguaquedioundíasunombreanuestrotronco: el río Dee; o más modestamente el arroyo Dee, que mucho me recuerda, con sucómico fluir de prisa, el curso acelerado de todos nuestros asuntos humanos. Llegué, conestospensamientos,allugardondeelarroyoencierraconsumultiplicadoserpenteolacolinadeMortlake; luego sus aguas se expanden en la oquedad de una antigua cantera de arcilla,hastaformarunaespeciedeestanquecubiertodecañasquesedesposabaconlapendientedelribazo.AprimeravistaparecequeelDeeacabeahí sucursoysecomplazcaenesecharcodondesepierde.

Meparé,encontemplación,antelascañasdulcementeagitadasquecubríaneseparaísodelos sapos. No sé cuánto tiempo duró mi ensoñación. Reflexiones que no tenían nada deagradables se impusieron en mí y tomaron la forma de una pregunta lacerante que sentíadetrásdemifrente:¿noeraéseeldestinodeJohnDee,midestino,elquereflejabaelríoDee,como para poner el símbolo ante mis ojos? Una rápida carrera, y prematuramente, unaciénaga,unaaguaestancada,culebrasdeagua,sapos,ranas,juncos,yarriba,enlatibiezadelaluzdelsol,lasvueltasyrevueltasdeunalibéluladealastornasoladasysuntuosascomounapedrería:atrapadalvueloesta ilusoriamaravilla, tendréisen lamanounvilgusanodealasvidriosas.

Mientras así soñaba, mi mirada se cruzó con una gran larva gris oscura, que con elcrecientecalordelaprimaveralmañana,estabajustamenteapuntodedespuntarenunajovenytodavíahúmedalibélula.Bienpronto,elinsecto,tiritando,sedespegódesulechodecañasamarillentas, en el cual quedó abandonada la crisálida, espectral, casi lacerada por esecombatequeseasemejabaalaangustiadelamuerteyladelnacimiento.Loscálidosrayosdelsol secaron bien pronto sus frágiles alas. Después de varios intentos tomó impulso, se

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expandiócongracia,medianteuncontinuadoyfantásticofrotamientodesuspatastraseras,sepusoavibrarconardor,yconunúltimoesfuerzoelpequeñoyzumbadorelfoalzóelvuelo,resplandeciente, y se perdió un instante después, con un vuelo tembloroso entre las felicesprofundidadesdelaatmósfera.

Perolalarvamuertapermaneciórígidaenlascañasmarchitasqueflotabanenelcienodelestanque.

«Ésteeselsecretodelavida,pronunciéenvozalta.Asíelprincipioinmortalhacambiadounavezmásdepiel,asílatriunfantevoluntadsehaarrancado,unavezmás,desuprisiónparaseguirsuvocación».

Y me vi de pronto llevado hacia atrás en medio de una larga serie de imágenes quellenaban mi pasado; me vi en la Torre, agachado cerca de Bartlett Green; leyendo viejospapeles y cazando liebres en la montañosa guarida de Robert Dudley en Escocia; enGreenwichconfeccionandounhoróscopoparalajovenElizabeth,laferoz,lairreductible;enOfen, en Hungría, componiendo sentencias y elogios para el emperador Maximiliano;urdiendo, durante meses, secretos a voces con Nicolás Grudius, secretario oculto delemperador Carlos y con adeptos rosacruces más ocultos aún. Me vi en carne y hueso,enredadoenmilesymilesdeburlescasaventuras,milesymilesdedevoradorasangustiasquemereducíanaldesesperoymecegabanelespíritu:enfermoenNancy,cuandoerahuéspeddelduquedeLorraine;enRichmond,ardiendodedeseosamorosos,enundeliriodeproyectosydeesperanzasparaestacriaturaardienteyfríaalavez,prontaadecidirsecomoelrelámpagooaeternizarseensupuestasdudas,porella…porella…

Y me vi en la cabecera de la cama de mi primera mujer, de mi enemiga, la funestaEllionor,mientrasellasedebatíacontralamuerte;vicómolaabandonabaasuagoníaparacorrerenelparquedeMortlake,haciaella,haciaella,haciaElizabeth.

¡Larva! ¡Disfraz! ¡Fantasma!Yo soy todo eso; no soy nada de todo eso; soy el gusanogrisáceoquesecorrompeenlatierraentresusrabiosasgarras,tantoaquícomoallá,paradarnacimientoalOtro,alArcángel,alverdaderoJohnDee,elconquistadordeGroenlandia,elhacedordemundos,¡eljovenpríncipereal!

¡Unayotravezesegusanoretorciéndose,ynuncalaprometida!¡Ohjuventud!¡Ohfuego!¡Ohmireina!

Estepaseomatinal,eraelpaseocrepusculardeunviejohombredecincuentaysieteañosquealosveintisietehabíacreídopoderapoderarsedelacoronadeInglaterraysubiraltronodelNuevoMundo.

¿Yquéha sucedidoa lo largodeestos treinta largosaños,desdequeocupéenParís lasillamásapreciada,teniendopordiscípulosasabiosyporasiduosoyentesaunreydeFranciayaunduque?¿Enquétrampaeláguilasehacogidolasalas,cuandotendíahaciaelsol?¿Enquéredessehaenredado,demaneraquecompartesusuerteconlosmirlosylascodornices,lasuertedelasavesdecorral?¡Debeagradecertodavíaalcieloelnohaberacompañadoaloszorzalesfritosenlasartén!

EnlaserenidaddeestamañanadePascua,hevistopasartodamividaantemí:peronodelamaneraqueordinariamentesehabladelosrecuerdosdelpasado;no,mehevistoencarneyhueso«detrásdemí»habitandoelenvoltoriolarvariodecadaperiodo,yhesufridolatorturadevolveraentrarencadaunadeesasformascorporalesabandonadasdesdeelprincipiode

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mividaconscientehastahoy.Estavueltaatravésdel infiernodemiinanidadnohasidosinembargo inútil, ya que de repente he sentido la estupefacción de ver claro, como si un solcegadoriluminaseelsenderodemisvagabundeos.Yhejuzgadosaludablesacarprovechodela leccióndehoyycontar loquehevisto.Heaquí,pues, la recapitulaciónde loquemehasucedidodurantelosúltimosveintiochoaños.

Retrospectiva.

Roderick el Grande, de Gales, es mi bisabuelo y Hoel Dhat el Bueno, elogiado desdesiglosenlascancionespopulares,eslagloriadenuestraraza.Asímisangreesmásantiguaque la de las «dosRosas» de Inglaterra, y tan real como la de todos los príncipes quehanpodidosolicitareltrono.

Que los dominios del conde de Dee, al tiempo que su título, hayan sido dispersos,troceados y perdidos no quita nada a la gloria de nuestra sangre.Mi padre, RowlandDee,barón de Gladhill, hombre de costumbres liberales y de carácter feroz, sólo había sabidoconservar de la herencia ancestral la fortaleza de Deestone y una hacienda de pasableextensión, la rentade lacualbastabaapenaspara satisfacer susbrutalespasiones, al tiempoque su singular ambición: educarme, amí, su único hijo y el último de la vieja raza, paradotaranuestracasadeunanuevasangreydeunanuevagloria.

Queríarepararconmigolasfaltasdesupadreydesusancestros.También,enloquesetrataba demi futuro, hizo todo lo que estaba en sumano; sólome conocía someramente,éramos tan dispares de temperamento y carácter como el agua y el fuego, le debo laexpansióndemis tendenciasy la realizacióndemisdeseos,que le eranbienextraños.Estehombrequeexecrabaloslibrosyquenoteníasuficientessarcasmosparatodotipodeciencia,favoreció tanto como pudo mis dones intelectuales; un repentino orgullo le llevó aconcedermelaeducaciónmásescogidaquepudieradarseenInglaterraaunhombrericoydealto rango. En Londres y en Chelmesfordme puso entre las manos de los más eminentesmaestrosdelaépoca.

Completé mi instrucción en St-John’s College, en el círculo de los espíritus másdistinguidosyversados en las artes.Ycuando, a la edaddeveintitrés añosyno sinhonor,hube obtenido el título de bachiller de Cambridge, que no se puede comprar ni obtenerfraudulentamente, mi padre dio una fiesta en Deestone, y no temió tener que hipotecar unterciodesusbienesparapoderpagar lasdeudasverdaderamenterealesquehabíacontraídoparalaocasión.Pocodespuésmurió.

Mimadre,unamujertranquila,fina,melancólica,habíamuertoyahacíamucho;mevidepronto, con veinticuatro años, heredero único e independiente de unos dominios todavíaimponentesydeuntítulodebrillosecular.

Simásarribahesubrayadotannetamenteelcontrastedenuestrasdosnaturalezas,essóloparahacerresaltarelmilagrosucedidoenelalmadeunhombrealquesólolegustabanlasarmas, el juego, la caza, el vino y que pudo conceder suficiente valor a las siete artesliberales,aunque lasdespreciara,paraesperar—yesperardemi inclinaciónporellas—unincremento de la gloria de nuestra casa, suficientemente probada por la desgracia de lostiempos.Peronoquierodecirquenohayaheredadounabuenapartedelasalvaje,indomable

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ydesenfrenadanaturalezademipadre.Laspendenciasy labebida,ymuchosrasgosmenosconfesablesdemicarácter,yamehabíanpuesto,apenaspasadalaadolescencia,ensituacionesavecesmuyescabrosas,hastahacermecorrergravespeligros.Entreesasaventurasalasquemelanzabacon laexhuberanciade la juventudmásquecon laaudacia,mi relacióncon losRavensheadsnofuequizálamáspenosa,perodioamividaunaorientaciónfatal.

Sin preocuparme por el mañana, mi deliberada preferencia por la vida aventurera meincitó,desde lamuertedemipadre,aconfiar lacasay las tierrasami regidor,paraviajarcomounseñor,sobrepasandoconmuchomismodestasrentas.Lagranvida,lasuniversidades—y también, para decir verdad, la gran fama de conocimientos oficiales y ocultos queentoncesselesasociaba—mellevaronaLovainayaUtrecht,aLeydenyaParís.

ElgranmatemáticoCorneliusGemmaFrisius,eldignocontinuadordeEuclidesenelpaísdel Norte. El muy famoso Gerhardus Mercator, el primero entre los geógrafos y losastrónomosdemitiempo,fueronahímismaestros.Volvíamicasaconlareputacióndeunfísico y de un astrónomo al lado del cual nadie en Inglaterra podía compararse. ¡Y teníaveinticuatro años! No me sentía poco orgulloso, y mi orgullo, tanto el natural como elhereditario,encontrabanenestaconstataciónelalimentoquedeseaban.

ElreynoquisofijarseenmijuventudnienmisextravaganciasymenombróprofesordegriegoenelcolegiodelaSantaTrinidadenCambridge,alqueteníaunaaficiónyprotecciónparticular: ¿qué distinción habría halagadomásmi vanidad que la de enseñar en lamismacátedraqueanteriormentehabíapenadocomoescolar?

Maestro, entre jóvenes demi edad cuandonomayores,micollegium graeciae[5] habríasidomejorllamarlocollegiumBacchietVeneris[6].Yciertamentemepongoasonreírcuandoevocohoy esa representaciónde laPazdeAristófanes elViejo, el dios de la comedia; fuerepresentada por mis alumnos y compañeros y puesta en escena milagrosamente por mímismo.Construí,siguiendolasindicacionesdelpoeta,ungigantescocoleópterodeunaspectoterrible,enelinteriordelcualhabíadisimuladounmecanismotaningeniosoqueelanimalseelevódirectamentealosairesporencimadelacabezadelosespectadoresquegritabanpresosde un espanto supersticioso, y huyó zumbandohacia el cielo, acompañado de una algazaramaloliente,allevarsumensajeanteeltronodeJúpiter.

Valía la pena ver cómo los buenos profesores ymagistri[7], junto con los honorablesciudadanos y noblezas, levantaron la cabeza, y luego, de golpe, se precipitaron bajo susasientospresasdeterror,aflicciónyhorroranteeltenebrosoprodigiodelimpertinente,jovenymilvecesdemasiadohábilmagoJohnDee.

Eltumulto,lasrisas,losclamoresylosgritosdeesajornadahabríanpodidoinstruirme,sihubieseestadomásatentosobre loqueesestemundoenelquehenacidoyenelqueestoycondenadoavivir.Yaqueestemundo,asícomoelpuebloque ledasu ley, respondeaunadigresióndepetulancia,aunafarsainofensiva,porelodioferozylaseriedadmortaldesuvenganza.

Esamismanocheasaltaronmicasaparaapoderarsedelagentedeldiabloqueyoera,yarrastrarme ante su imbécil y demente tribunal. El decano y el superior de la facultadentonaron, semejantesanegrosbuitres, losanatemasque repetía lamultitudparadenunciareste «ultraje ante la faz de Dios» con unmechanicus[8] animado. Y sinmi amigo Dudley-Leicester,sinladignidadylainteligenciadelrectordelcolegio,quiénsabesidesdeesanoche

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esaturbasabiayprofana,enalgunashoras,nomehabríahechopasardelavidaalamuerteparasaciar,conlaúltimagotademisangre,susapetitosmalsanos.

PerohuíenunrápidocaballoypudeganarmicastillodeDeestone;deahí,crucéelmaryme fui a Lovaina, célebre por su universidad. Dejé detrás de mí un honorable cargo, unsalario nada despreciable, un nombre arrastrado y vuelto a arrastrar en el barro de lassuposiciones por los cuidados de esas almas justas y piadosas. En esa época poco meinquietaban el silbido de las calumnias, inoperantes, segúnme parecía, ya que amenazabanaquíyalláagentedeunrangomuyinferioralmío.Todavíanohabíaadquiridolacompletaexperienciadelmundo,queseresumeenesto:¡nohayningúnpersonajeporaltoqueseaniningún calumniador por pequeño y despreciable que sea su nacimiento, que no puedan serasociadosenunmomentodadoporlahostilidaddealguienmásgrande,paraprepararconlamásmalababadetodaslascriaturasunvenenoparalasangrenoble!

¡Ohvosotros, loshombresdemi casta, alpreciodequéamargurashe aprendidodesdeentoncesaconoceros!

EnLovainatuveelplacerdeestudiarlaquímicaylaalquimiaydesondearlanaturalezade las cosas, en la medida en que se puede aprender de un maestro. Después, siempre enLovaina, construí con grandes gastosmi propio laboratorio y anduve solo, pacientemente,siguiendo las huellas de los misterios naturales y divinos. Esto me valió adquirirconocimientosylucessobreloselementanaturae[9].

En este momento se me llamó magister liberarum artium[10]. Y como los simples yvenenosos rumoresquecorrían enmipaísnopodíanprendermeni incluso seguirmehastaaquí,bienprontomeganéuninmensoprestigioentreloseruditosylosnoeruditos;cuandoenotoño,toméposesióndelacátedradeastronomíaenLovaina,contabaentremisalumnosalosduquesdeMantuaydeMedinaceli,queveníanacaballoparaseguirmiscursos,undíaporsemana,desdeBruselasdondeelemperadorCarlosVteníasucampamento.DiversasvecessumismaMajestadmehonróconsupresenciaynopermitióquelascostumbres,elceremonialdel collegii[11] fuese modificado lo más mínimo por su causa. Sir William Pickering,honorable letrado gentilhombre demi país,MathiasHaco y Johanes Capito, danés, fueronigualmenteasiduosoyentesdemisconferencias.FueentoncescuandoaconsejéalemperadorCarlos que abandonase sin demora los Países Bajos, ya que sabía por ciertos infaliblesindicios,resultadodeunminuciosoestudio,queunaepidemiasepreparabaparaeseinvierno,queseríahúmedo,yyomesentíaobligadoamostrarlelealmenteesaamenaza.Elemperador,muy sorprendido, sepusoa reírynoquisodar crédito a lapredicción;másdeunode losseñoresdesuséquitoaprovecharonestabuenaocasiónparaintentar,mediantesusbromasyburlas,hacermeperderelvisiblefavordeSuMajestad:desdeyahacíatiempoloscelosyelfuror los roían.Pero el duquedeMedinaCoeli, conmuchas recomendaciones, le aconsejóquenotuvieraporbanalidadestaadvertencia.Enefecto,yohabíaexplicadoalduque,cuyasbuenasdisposicionesconocía,sobrequéinnegablespruebasfundabamisprevisiones.

Desde el inicio del año los síntomas de la epidemia se multiplicaron, de manera queCarlos V levantó su campamento de Bruselas y abandonó rápidamente el país, no sininvitarmeaseguirlo;otrosurgentesproyectosmeobligaronadeclinarestehonor,peromecompensóofreciéndomeunasumaprincipescayunacadenadeoroque,ademásdesuvalorcomometal,demostrabasumásquehalagadoraintención.

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Pocodespués, la«muertedelatos»sedeclaróenHolandaysedesencadenóconunatalviolencia que en dos meses se contabilizaron treinta mil muertos en la ciudad y susalrededores.

YomepusealabrigodelflagelotransportandomimoradaaParís.AllítuveporalumnosengeometríaeuclidianayenastronomíaaTurnebusyPetrusRemus,el filósofo,RançonyFernet, dos grandes médicos, el matemático Petrus Nonus. Bien pronto vino también aescucharmeelreyEnriqueIIquemehizoelhonor,comoelemperadorCarlosV,desentarseamis pies. Pormediación del duque deMontluc, seme propuso la plaza de rector de unaacademiaqueseríacreadaespecialmenteparamí,ounacátedradeprofesorenlauniversidaddeParís,conlasmejorespromesasparaelfuturo.Perotodoelloparamísóloeraunjuego,ypororgullolorechacériéndome.MinegraestrellamedevolvióaInglaterra.EnLovaina,enefecto,unfantasmagóricobrujoescocés—quizáeraelinquietantepastordeBartlettGreen—queNicolásGrudius,camarerosecretodelemperadorCarlos,habíasacadodenosédonde,mehabíaanunciadoformalmentequeestabadestinadoasubirenInglaterraalacimadeloshonores y del éxito. Estas palabras se hundieron en mi alma como si tuvieran un sentidomágico, reservado solamente paramí, aunque nome apareció claramente. Desde entoncesresuenanenmioídoyestimulanmilocaambición.VolvípuesamipaísymedejéarrastrarenlaterribleysangrientaconfrontaciónentrelospartidariosdelPapaylosdeLutero,eranlostiemposdelaReforma,yque,empezandoporlafamiliarealhastaacabarporelpueblomásbajo,levantabaunoscontraotros,hermanosyparientes.Yoabracélacausadelosreformadosy me imaginaba conquistar con gran lucha el amor y la mano de Elizabeth, que le erafavorable. He contado fielmente en otro diario íntimo cómo todo fracasó, y no es miintenciónvolversobreello.

***

Robert Dudley, conde de Leicester, el mejor amigo que he tenido en mi vida, volvió,despuésdemiliberación—deberíadecirmejor:despuésdemievasióndelatorredondeelobispo Bonner me tenía entre sus garras— más cortos los días de retiro que pasé en sucastillo escocés de Sidlaw Hills, contándome, diversas veces, las deliberaciones y lasperipecias de la misma. Y mis ávidos oídos nunca estaban satisfechos de oír describir lainfantil temeridad, y la decisión que la princesa Elizabeth había manifestado en esacircunstancia.Peroyosabíamás,muchomásde loqueDudleypodíasuponer.Sabía, sabía,con una desenfrenada alegría que me subía hasta hacerme un nudo en la garganta, que laprincesaElizabethhabíahechopormítantoomásdeloquehabríahechoporellamisma,¡yaquehabíabebidoelfiltrodeamorpreparadoapartirdemisustanciaporMasceeylabrujadeUxbridge!

Este pensamiento, junto a la certidumbrede que el filtro actuaba, de lo que la increíbleaudaciadesplegadaporlaprincesaenesteasuntomeparecíaunapruebaevidente,meexaltóenelmásaltogrado.Graciasalpodermágico,eraelmaestro:porlavirtuddeesebrebajemehabíadeslizadoenelalmayenlavoluntaddeLadyElizabeth,yanadanuncamedesalojaríade ahí, y en verdad, nada me ha desalojado hasta hoy, a pesar de los incomprensiblescontratiemposdemidestino.

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«¡Yo impongo!». Ésta había sido la divisa demi padre durante su vida, después que lahubiera recibido de su padre, como éste la había recibido del suyo;me parece que era tanviejacomolarazadelosDee.Y«Yoimpongo»fuetambiénelprincipiodemisaspiracionesydemivoluntaddesdemijuventud,elestímulodetodasmisempresas,detodosmiséxitos,tanto enmi vida de hombre de armas como enmi vida de sabio. «¡Yo impongo!» esto hahecho demí enmi juventud unmaestro y un consejero de emperadores y de reyes, ymeatrevoadecir,unodeloshombresmáscélebresporsusdonesnaturalesysucultura,demitiempoydemi país. «¡Yo impongo!» estomeha libradode las garras de la Inquisición, y«¡Yoimpongo?».

…¡Pobreloco!¿Quéhe«impuesto»duranteestostreintaaños?¿Enlosdiezañosdemimayorpodercomohombre?¿DóndeestálacoronadeEngelland?¿QuéhasidodeltronodeGroenlandiaydeesosEstadosdelOestequehoy llevanelnombredeunmarinerodeaguadulce,AméricoVespucci?

PasaréporencimadeloscincotristesañosqueunveleidosoeinsensatodestinotodavíareservabaalatísicaMaríadeInglaterraparapoderarrojaralaGranBretañaenunanuevayvanaconfusióny conceder a lospapistasunanefastaocasiónpara restablecer suheréticaysectariahegemonía.

ParamíestosañosrepresentaronunsabiofavordelaProvidenciaquepusounfrenoamispasiones, pues empleé este periodo de forzada inactividad estudiando y preparando con elmayorcuidadomisplanesdeConquistadeGroenlandia.Sabía,conuncalmadosentimientodetriunfo,quemihora,quenuestrahora,llegaría;lahoradelagloriosareinaylamía;yo,suesposodesignadoporlaprofecíayporeldestino.

Cuandovuelvoapensarenestaprofecía,meparecequedesdequenacíestabamezcladaenmisangre,quierodecirquedesdeentonceshastahoynadahacambiado:yalaíntimacertezademirealdestinoimpregnabamiinfancia;yquizáestacerteza,exageradapormisangre,sealacausadequenuncasemehayaocurridoexaminardemáscercalosfundamentos.

Todavíahoy,infinitasdesilusiones,fracasossinpaliativosnohanhechoperturbarlomásmínimo esta convicción, esta fe anclada en lo más profundo de mi alma, sea cual sea eltestimonioqueloshechosmemuestren.

¿Peroloshechosdantestimoniocontramí?Hoy vuelvo a sentir la necesidad de hacer como los comerciantes un recuento de mis

bienes, escribiendo con justicia las reivindicaciones de mi alma y de mi voluntad, y losresultadosdemividaen lashojasdelDebeydelHaberdel librodemidestino.Yaquehesentidolaterminanteordendeunavozinteriorquemeinvitabaaestablecerestebalancesindemora.

Soyincapazdeprecisar,yaseamediantedocumentos,yaseamedianterecuerdos,loquejustificaba la creencia, enraizada desdemimás tierna infancia como algo que caía por supropiopeso,enmipredestinaciónauntrono.¡YnopodíaserotroqueeltronodeInglaterra!merepetíaincansablemente,yalgoenmímeimpedíadudarlo.Comohacenlosgentilhombresvenidosamenosquerepresentanparasucasaunfinsingloria,mipadreRowland,amenudomehabíavanagloriado,conpomposos términos, el rangoyelprestigiodenuestra familia,insistiendoennuestroparentescoconlosGreenylosBoleyn;especialmentecuandounujierreal se aprestaba a tomar un jornal de tierra o un trozo de bosque. El recuerdo de esos

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humillantesincidentesquizáhacontribuidoaexaltar,porcontraste,missueñosdefuturo.Sin embargo, el primer testimonio, la primera predicción de mis proezas futuras se

remonta, si puedo decirlo, a la famosa noche después de la fiesta demi nominación en elgradodeMaestro,enlaqueborrachomecontempléenelcristaldemiespejo.Laspalabrasdeentonces,laspalabrasquefueronpronunciadaspormiimagenespectral,resuenantodavíahoyenmisoídos:ni la imagen,ni laspalabrasparecíanvenirdemí,puesmiaspecto reflejadodiferíademiaspectotangible,ylospropósitosqueoíanoemanabandemí,sinodemidobleyvibrabanenelespejo.Nohepodidodejarmeengañarniporlossentidosniporlamemoria,yaquemientraselespejomehablaba,desembriagadodegolpe,mehallabatotalmentelúcido,depiesacabeza.

Luego vino la extraña profecía de la bruja deUxbridge a LadyElizabeth.Más tarde laprincesamehizollegarunacopiasecreta,mediantenuestrocomúnamigoRobertDudley,enlacualhabíaañadidotrespalabrasquellevo,hoycomoentonces,enmicorazón:verificeturinacternis[12].Despuésel singularBartlettGreen,gran iniciado,actualmente tengo laplenaconvicción de ello, en terriblesmisterios que en la Alta Escocia tienen algunos adeptos odiscípulos,merevelóenlatorre,mediantepromesasyalusionesaúnmásclaras,undestinodelqueéleravaledorydelquelossignoseranpatentes.Mehabíasaludadocomoel«jovenpríncipe real», expresión que por otra parte me he inclinado a veces a interpretaralquímicamente. Además, a menudo me ha venido la idea de que debía comprender la«corona»quemeesdestinada,enunsentidoquenotienenadadeterrestre…

Ese inculto carnicero me abrió los ojos a la importancia de la nórdica Thule, deGroenlandia,queseextendíacomounpuenteabiertoalosterritoriosyalosinmensostesorosde lasIndias, lascualessólohabíansidodescubiertasypuestasbajoelcetroespañolporelaventureroColónyPizarroensumenorymenosinteresanteparte.Memostró,quebrada,lacoronadelmarOccidental,deInglaterraydeAméricadelNorte,undíaambaspartesseránreunidas:entonceselreyylareina,unidosporelmatrimonioreinaráneneltronodelasIslasydelasNuevasIndias.

Una vez más me asedió este pensamiento: ¿realmente hay que tomarlo en un sentidoterrestre?

Y fue él—no sólo en laTorre, sino después, cuando por dos veces seme apareció encarneyhuesoymehablócaraacara—quienconsolidóenmipechocomosifueraconunanuevagrapadehierro,ladivisadeRoderick:«¡Yoimpongo!».

Fue él, fue él quien en una de sus visitas me sacudió para obtener de mí el supremoesfuerzo—laúltimaviolencia—yqueporlaterriblepersuasióndesuelocuencia,luminosacomo una razón omnisciente y bienhechora como agua helada en un fuego ardiente, meincitó,mesedujoymedecidióaforzarahaceramireinaloqueantesunaturalezallenadedudasyenigmasparecíatenersiemprequediferir.

Unavezmástodavía:¿hayquetomartodoestoenelsentidoterrestre?Hablaré de ello cuando llegue elmomento, y continúo interesándome aún en esos años

muertosesperandodescubrir,alhacerlo,elescondidoviciodemiardienteesfuerzo.DespuésdelamuertedeMaríadeInglaterra,teníaentoncestreintaytresañoscumplidos,

meparecióquemitiempohabíallegado.Porotraparte,losplanesquehabíaelaboradoconelmayorcuidadopara laexpediciónmilitary laocupacióndeGroenlandia,asícomoparasu

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puestaenprácticaentantoquebaseycabezadepuentedeunametódicaconquistadeAméricadel Norte, estaban finalmente listos. No había descuidado el menor detalle que fuerasusceptibledeadelantarodeatrasar,yaseabajoelaspectogeográficoynáutico,yaseabajoelaspectomilitar,unaempresaconcebidaaunaescalatanvasta.Asípuesloteníatodoapuntoparaunainminenteentradaenaccióndelpoderíoinglés,unaacciónquecambiaríalafazdelmundo.

Además,lascosashabíantomadoelvientomásfavorable.Yaennoviembrede1558,mijovenreinamehabíahechopediratravésdelfielDudley,desdeentoncescondedeLeicester,ellevantamientodelhoróscopocorrespondientealdíadesucoronaciónenWestminster.Conrazón interpreté el requerimiento como un saludo, un gesto amigable y ardorosamentemepuseapediralosastrosyalamismavoluntaddivinaqueatestiguaranporsugloriacreciente,porlamía,consagradaporlaprofecía,ypornuestracomúnmisiónreal.

El horóscopo, cuya espléndida constelación anunciaba efectivamente un incomparableperíododeflorecimientoycosechaparaInglaterrayparalareinaElizabeth,mevalió,ademásdeunapreciableregalomonetario,calurososelogiosquemostrabanindiciosdealgoqueeramásqueunapolíticareal.Aceptéeldineroconrepugnancia,perolasdiversaspromesasdesufavor,llenasdemisterio,quemehacíallegarporelcanaldeLeicester,meconfirmabanenmimásfirmeesperanzadeverbienprontorealizarsetodosmissueños.

Sinembargo,¡nadaserealizó!La reina Elizabeth se puso a jugar conmigo y hasta hoy no ha habido un desenlace

plausibleaestejuego.Todoelloforzosamentemehacostadoserenidaddeespíritu,confianzaenDiosyenlaspotenciascelestes,tensióndemivoluntadydetodaminaturaleza,superioreinferior,ningunadescripciónpodríadarcuenta.Hedesperdiciadoenelloenergíascapacesdeedificarunmundoyluegodestruirlo.

Enprimerlugar,parecequeelhalagadortítulode«ReinaVirgen»quederepenteentodaspartesacariciabaeloídodeElizabethhastaelpuntoqueelbuentonoyanoquisootroparaSuMajestad,leplujoentalgradoquelasolaexpresiónledabavueltasenlacabeza,yresolvióconformarsealidealqueleproponía.Pordesgraciasuindomablecarácter,suindependenciay su orgullo natural la llevaron a otra cosa, así las fuertes exigencias de su temperamentocarnalbienprontoreclamaronlassatisfaccionesdelsexo,aunqueporvíasuntantosingulares,delasquelainversiónnoestabaexcluida.

Yunavez—pocoantesdenuestraprimeradiscusiónviolenta—aunqueesimposiblequehubiera habido desprecio, cuandome invitó aWindsor Castle, donde podríamos reunimosconmáslibertad,yodeclinélainvitaciónenunarranquedecólera,puesnomeresignabatansóloapasarunanocheconunadoncellaencelo;loqueyoquería,eraverlevantarseeldíadenuestracomúnyrealgloria.

Asípues,esposiblequeelrumorsegúnelcualmiamigoDudley,menosexigente,habríaaceptadoconalegríaloqueyomehabíanegadoamímismocomoloneguéalabienamadademideseointemporal,nocarezcadefundamento.SóloDiossabesimeheequivocado.

Loquehicemuchomástarde,empujadoporlasformalesadvertenciasdeBartlettGreen—elNoNacido,elNunca-Muerto.ElqueVayViene—terminóporatraersobremicabezaelrayodeunamaldición,quedesdeyahacíatiemporondabaamialrededorparaaniquilarme,yque tarde o temprano me habría golpeado; quizá me estaba reservada por un insondable

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decreto.Y si he resistido a ese rayo—aunque haya irremediablemente socavadomi fuerzavitalylapazdemialma—noquiereellodecirqueenotraépocaobajootraconjuncióndeastros,suviolencianomehabríaaniquilado.

Hoy,sinembargo,sólosoyelvestigiodemipoderíodeantaño;sólohoysé¡contraquélucho!

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LaconductacruelyequívocadeElizabethhaciamíhizoque—enmicóleradeverdíatrasdíafaltarasupromesadellamarmeaWindsorCastle,noparahorasdecharlaszalamerasoburlonas, sino para deliberaciones serias— abandonara una vez más Inglaterra y fuera aencontrarmeconelemperadorMaximilianoenHungría,con la intencióndesometeraesteosadoemperadormisplanesdeconquistaydecolonizacióndeAméricadelNorte.

Mientrasibadecamino,uncuriosoremordimientoseapoderódemí,meparecióquemeaprestabaatraicionarmimásíntimosecreto,elquemeatabaamireina,algomeadvirtióymehizoecharmeatrás,comosiuncordónumbilicalmeligasemágicamenteasunaturalezamaterna.

Me contenté con exponer al emperador algunas demis teorías sobre la astrología y laalquimia,aresultasdeloquefuirápidamenteligadoasuCortecomomatemáticoyastrólogoimperial.Sóloaestoselimitaronnuestrasrelaciones.

Al año siguiente (el cuarenta de mi vida) volví a Inglaterra e hice las paces con unaElizabethmásseductorayalavezmásrígidaquenuncaensufrialdadreal.FuisuhuéspedenGreenwich:díasdegraveemoción,puesporprimeravezprestóunadespiertaatenciónamiexposición y me agradeció muy sinceramente por el fruto de mis trabajos científicos.Meprometióconcalorsuproteccióncontralahostilidaddeespíritustimoratosymeintrodujoenlaconfidenciadesuspropiosplanes,deseosypreocupacionesmásíntimas.

A veces sememostraba tan pronto tierna como impetuosa; su apasionado corazón nodesmentíalasdiferenciasdelajuventudenloqueamíserefiere,peromedejabaentenderquenohabíaolvidadoelfiltrobebidoenlodelabruja.

Quedéestupefactoalconstatarqueellasabíamásdeloqueyoimaginaba.Peroalmismotiempoquemedeclaró,conuntonoextrañamentesolemne,quetodasuvidasehabíasentidomihermanamuchomásquemiamante,yquenuestracomunióndebíaapoyarseparaempezaren esta consanguineidad para un día culminar en la cima de la alianza de la sangre. Nocomprendímuchoynocomprendohoyel sentidoy la intencióndeesteazoradordiscurso,perofuiigualmenteimpresionadoporelhechodequeunpodersobrenaturalparecíahablaratravésdelareina.Quizánohayasabidocomprendersuintencióndemostrarmeunlímitequemi impetuosidad y tenacidad habrían terminado por hendir, a no ser por una categóricaoposición.Esextraordinarioquenuncahayaconseguidodesembarazarmede la ideadequealgunaotracosa—unpoder,unavozdesconocida—apuntasemediante los términosdeesediscursohaciaunsignificadoquequizánuncallegaréadesenredar.¿Quépuedequererdecir«enlacimadelaalianzadelasangre»?!Entonces,enGreenwichlibrécontraElizabeth,por

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primerayúnicavez,elcombateabiertoyleal,ennombredelamorydesureciprocidad,ennombredelderechonaturaldelhombresobresumujer.Elizabethseapartómásdistantequenunca.

Sí, después de esos días de la más profunda intimidad espiritual, una mañana, en lasilenciosahoraenlaquenospaseábamosporelparque,sevolviórepentinamentehaciamí,con el rostro cambiado.En sus ojos se leía la impenetrable y enigmática expresión de unaambigüedadcasiburlona;dijo:

«Mehastangrandementeexaltadoelderechoparaunhombredetenerunamujer,amigoDee,queestanochehereflexionadoseriamentesobreello,yhetomadolafrancaresolución,nosólodeallanarelcaminoantetusinstintosdemacho,sinoaúndeayudartearealizartusaspiraciones.Quiero reunir laLanza alAnilloyque figure en tus armas como símbolodematrimonio feliz.Séque tusnegocios enMortlakeno sonbrillantesyqueenGladhiHestáhipotecada hasta la última teja. Te falta pues, una mujer rica y que al mismo tiempo noofusque la altivez de un descendiente de Roderick. He decidido hacerte desposar con miarrebatadorayexquisitaamigadeinfancia,ladyEllionorHuntington.Yelloenelmásbreveespaciodetiempo.LadyHuntingtonconocemideseodesdeestamañana,ylaadhesiónquemetienenolepermitedudarenaceptarlo,yaves,JohnDee,quemepreocupopor ticomounahermana.»

Elespantosoescarniodeestediscurso—almenosasíloexperiméntemehirióenlasfibrasmásprofundasdemicorazón.ElizabethconocíasuficientementebienmissentimientoshaciaEllionor Huntington, esa vanidosa, altanera y chismosa mojigata que había dificultadomalvadamentelossueñosdenuestrainfanciaylasinclinacionesdenuestraadolescencia.¡Lareinasabíamuybienquéhacíacontramíycontraellamismaal imponer,ennombredesuomnipotenteMajestad, estematrimoniocon la enemigadenacimientodemis instintosydemis aspiraciones! Entonces fui presa de un ardiente odio contra cierta perversidad de lanaturalezademirealbienamada;meincliné,mudodetristezayconelorgulloherido,anteestaorgullosasoberanadelatierra,yabandonéelparquedeGreenwich.

¿Paraquéevocaraquí las luchas, lashumillacionesy las«sabias» recomendacionesquesiguieron? Robert Dudley medió y la reina consiguió sus fines. Desposé pues a EllionorHuntington y viví a su lado cuatro helados veranos y cinco devoradores inviernos devergüenzayderepulsión.Sudotemehizoricoylibredepreocupaciones,sunombremehizodenuevoserenvidiadoyhonradopor losdemicasta.Lareinasaboreósumalsanotriunfosabiéndome,amí,alelegidodesualma,entrelosfrígidosbrazosdeunamujeralaquenoamabaycuyosbesosnodejabanexcitarloscelosdelaMajestad«virgen».Entonces,anteelaltar,almismotiempoquejurabafidelidadamimujer,ennombredelacausaprimerademiamor insaciable, jurévengarmedeestabienamadaquesemofaba tancruelmentedemí, lareinaElizabeth.

FueBartlettGreenquienmeenseñóelmediodeperpetrarlavenganza.Pero previamente, Elizabeth, de nuevo encaprichada de mí, me introducía en las

preocupaciones más íntimas de su política privada. Me confió que la razón de Estado laobligabaapensarseriamenteensupropiomatrimonioymepidió,espiandomisreaccionesconlacruelsonrisadeunachupadoradesangre,misconsejosymimaneradeverenloquehacealhombreconelcualseríamásaptonegociaresteasunto.Finalmentedescubrióqueyo

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era elmás capacitado…para ir a buscarle unmarido; y para el colmodemi humillación,pusosobremisespaldasesteyugo.Deesosproyectosmatrimonialesnosaliónada.MimisióndiplomáticaterminócuandoElizabethcambiósuscombinacionespolíticasyyocaíenfermoenNancybajoeltechodeunpretendientedelamanodemireina.VolvíaInglaterraconmiorgulloquebradoylamuerteenelalma.

ElmismodíademitristeretornoaMortlake—eraaprincipiosdelbelloycálidootoñode 1571— supe por Ellionor, mi primera mujer, siempre a punto de husmear como unsabueso,quelareinaElizabeth,apesardeloavanzadodelaestación,habíahechoanunciarsullegadaaRichmond,loquecomomínimoerainhabitual.Ellionorencubriómalsusmalsanoscelosyseencerróensuhostilidadyensufrialdaddemármolapesardemilargaausenciaydelriesgodeperjudicarmiconvalecenciaapenascomenzada.

Efectivamente, en éstas, Elizabeth también llegó a Richmond con un séquito poconumerosoehizoprepararsusaposentoscomosihubieradepermanecermucho tiempo.DeRichmond aMortlakeCastle nohayni tan siquiera dos kilómetros; unpróximo encuentro,seguido de muchos otros era pues inevitable, a menos que la reina no expresaraexplícitamente el deseo de no verme. Bien al contrario, al día siguiente de su llegada aRichmond,merecibióconmuchoshonoresyamistad;además,mehabíaenviadoaNancysusdos médicos personales y su más fiel ayuda de campo, William Sydney, rogándoleexpresamentequemedieratodosloscuidadosimaginables.

Tambiénahímemanifestósupreocupaciónpormisalud;medejóentender,conpalabrasencubiertas y señales de favor cada día más evidentes y debido a las cuales me sentíaconfundido, su alegría y su alivio por haber reencontrado su libertad. Que vivamente sefelicitaba,másdeunavez,porhabersedesprendidodelascadenasdeunmatrimonioquenohabría podido extirpar su amor, ni de permitirle permanecer fiel a él. En una palabra: susalusionesacariciabanconreflejoscambianteselsecretodel lazo tejidoentrenosotrosen lomásprofundo,ymuchasvecesmeparecióqueestaincomprensibleamadaqueríadesdeñaryalavezjustificarlosvanosypedantescelosdeEllionorHuntington.Asídurantemásdeunmescaí subyugado, ciego, bajo la influencia de mi Dama; y en ninguna otra ocasión me haescuchado con la seriedad, la benevolencia y el interés con queme testimoniómientras leexponía mis planes más audaces para magnificar su persona y su reino. La idea de laexpediciónaGroenlandiaparecíaentusiasmarladenuevo,ytomómuyimportantesmedidasparaexaminarmispropuestasyponerlasenpráctica.

El almirantazgo expresó en diversos documentos que juzgaba perfectamente realizableslas disposiciones que yo había previsto y los proyectos que había establecido con tantocuidado; los consejeros militares, con entusiasmo, confirmaron este juicio. Semana trassemanalareinasemostrabamásardienteporcomenzaresagranempresa.Mecreíapróximoa la meta de mi vida; la boca de Elizabeth —una boca radiante de una sonrisa llena deseducciónmágica, una sonrisa que contenía todas las promesas—ya había pronunciado lapalabraquemehaciavirrey,conjurisdicciónsobretodoslosnuevoslugaressometidosalacoronadeInglaterra:yosería«ReydeltronodemásalládelmarOccidental».Yheahíqueenunanochesehundióelgrandiososueñodemivida,en lascircunstanciasmáscrueles,másdespiadadasymásamargasquenuncahayanabrumadouncorazónyunalmahumana.Lasocultasrazonesdeestacatástrofelasignoro.

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¡Ytodavíahoysiguesinserdesveladoelmisterioquevelaesteoscuroyterriblesecreto!Todoloqueséseresumeaesto:ElconsejodelaCorona,quecomprendíalosconsejerosmáscercanosdelareina,estaba

convocado para la noche: en particular debía tomar parte el lord cancillerWalsingham.Altérmino de la tarde, tuve una audiencia con mi soberana, para ultimar algunas cuestiones,aunquemásbienhablabaconellabajolosárbolesdelparqueotoñalcomoconlamejorymásseguraamiga.Enunmomento,mientrasnosponíamosdeacuerdoentodoslospuntosdemiproyecto,mecogiódelamanoymedijo,almismotiempoquesumajestuosayescrutadoramiradasesumergióenmisojos:

«¿Ytú,JohnDee,cuandoseasseñordeesasnuevasprovinciasysujetodemicorona,noperderásnuncadevistaelbienylafelicidaddemipersona?—AestaspalabrasmearrodilléasuspiesylejuréanteDios,aquieninvoquéportestigoyjuez,noteneryaotropensamiento,sinoeldehacerlolodoparaexaltarsupoderysusoberaníaenelnuevocontinenteindio».

Entoncespasóporsusojosunaextraña luminosidad.Melevantóconsurobustamanoymedijolentamente:

«Está bien, JohnDee.Veo que estás resuelto a consagrar toda tu vida, a consagrarte túmismoalserviciode…GranBretaña,sometiendonuevoscontinentesamipoder.LasIslasteagradecenestadecisión».

Conestaspalabrasheladaseimpenetrablesmedespidió.Porlanocheellordcanciller,hombreenvidiosoylimitado,consiguióconvencerlapara

aplazarlaempresaaunafechaindeterminada,paraprocedersiacasofueseconvenienteaunexamensuplementario…

DosdíasdespuésElizabethtransfiriósuCorteaLondres,sinhabersedespedidodemí.Mehundí.Nohaypalabrasparadescribirlaangustiademicorazón.Aquella noche, recibí la visita de Bartlett Green que se burló de mí con su risa tan

ardorosayruda:—¡Bravo, querido hermanoDee, he aquí pues cómodevuelves a tu futura esposa a sus

sueños preferidos después de haber tirado graciosamente de los cabellos de los virginalescelos de su Majestad! ¡Y te sorprendes de ser arañado por la gata que has acariciado acontrapelo!

¡LaspalabrasdeBartlettCreenmeabrieronlosojos;viyleíalibroabiertoenelalmadeElizabethycomprendíqueesaalmanohabíapodidotolerarvermeconsagrarmisgustos,miardorymicelosóloasupersonayasusgustos!Locodedesespero,deaflicciónydeterror,saltéfuerademicamayconjuréaBartlett,sialgoleatabaamiamistad,quemeaconsejaraloque debía hacer para reconquistar a esa gran dama herida. Y aquella noche Bartlett medesveló, bajo múltiples aspectos, el sorprendente poder de su conocimiento. Mediante elcarbón encantado que me había regalado cuando se preparaba a abandonar este lado delmundo,memostró, sin error posible, que teníapor adversarios a la reinaElizabethy lordWalsingham,élporqueteníaenlacabezasersuamanteyellaporelabsurdorencordemujerheridaensuorgullo.Entoncesfuipresadeunviolentoataquedecólera.Eldeseolargamenterechazadodevengarmedeltormentoquehabíasoportadoydelosengañosconlosquehabíasido burlado, barrió mis dudas y resolví instantáneamente seguir el consejo de Bartlett:sojuzgarla«hembra»Elizabethamivoluntadyamisangredemacho.

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Así, desde esa nochepreparé,mis represalias con todo el frenesí demi ansia furiosa yseguípuntoporpuntolasinstruccionesdeldescarnadoBartlettGreen.

No me atrevo sin embargo a describir los procesos de los ceremoniae[13] en los queprocedíparaponeramerceddemipoderelalmaylacarnedeElizabeth.Bartlettpermaneciócercademí,mientraselsudordeestaespantosanecesidadperlabatodoslosporosdemipiel;elcorazónyelcerebromehacíantantomalquepensé,másdeunavez,caerenunsíncope.Sólo puedodecir esto: hay seres cuya vista es tan terrorífica que hiela la sangre; pero hayquiénmecomprenderásidigoquetodavíaesmásterroríficasuvecindadinvisible.Entonceselespantososentimientodeserunciegoindefensollegaaloslímitesdelhorror.

Finalmente llegaronasu términolasevocaciones,paraacabar lascualesyhabíadebidoproceder fuera de la casa, desnudo, en un tiempo relativamente fresco y bajo la lunamenguante.Alfinal, levantéelcristaldecarbónnegroenelclarode luna,y,con todasmisfuerzasdevoluntadtensadasalextremo,concentrémimirada,eltiempodetresPater,ensusreverberantescaras.MientrastantoBartlettdesaparecióylareinaElizabethseacercócomosiflotase en el césped del parque con los ojos cerrados y con una prisa misteriosa. Viperfectamentequelasoberananosehallabaenestadodevigilianienestadodesueñonatural.Suaspectomásbienparecíaeldeunfantasma.Nuncaolvidaréloqueentoncesseprodujoenlo más hondo de mi pecho. No era ya el latido de mi corazón, no, era un grito salvaje,inarticuladoquesearrancabademispulsacionesyque,surgidodelosconfinesdelmundo,despertabaenlomásíntimodemímismoelecodeunlaberintotanespantosoqueelterrorerizóloscabellosdemicabeza.Peroreuniendotodomicoraje,toméaElizabethdelamanoylacondujeamihabitación tal comoBartlettme lohabíaordenado.Estamanoqueprimeroencontraba fría, se calentó al mismo tiempo que toda su persona como si al tocarlaprogresivamentehiciesepasarmisangreenlasuya.Alfinalmistiernascariciastrajeronasucerradorostrounagraciosasonrisadondeyocreídescubrirelíntimoacuerdoyelverdaderodeseo de su alma. No dudémás; con un impetuoso impulso, interiormente jubiloso demivictoria,contodosmissentidosmobilizadosparaesteacto,laposeí.

Yasífuecómoconquistéviolentamentelamujerquemeestabadestinada.

Siguen varias páginas en el diario de John Dee con signos muy extraños, confusos, casiimposible,además,dereproducir.Símbolosgráficosycálculos,seguramentecabalísticosmezcladosconcifrasyletras.Sinembargo,nosetienelatotalimpresióndequesetratedeunaescriturasecretautilizadaadredenitampocodeunafantasíaalacualestuvieraacostumbradalaplumadelautor.Yosupongo esos grafismos concernientes a las estratagemas evocatorias a las que se libró miantepasadoDeeparaconvertirseenelseñordeElizabeth.Unaespeciedehorrormeinvadió,comosiesas páginas emitieran sutiles radiaciones envenenadas, de manera que era incapaz de concentrarmucho tiempomi atención en ellas.Experimentaba cómo la demencia, aplastada y seca comounaviejaplantaqueseaprietaentre lashojasdeunherbario,reposabaentreesaspáginasdeldiariodeJohnDee;cómolademencia,semejanteaunfluidoimpalpable,mesubíaalacabezayamenazabamirazón. La locura ha garrapateado esas páginas con signos indescifrables, y las líneas, aúngarabateadas y titubeantes, se tornan inmediatamente después legibles y parecen confirmarlo.Emergen,diríayo, comoel rostrodealguienquehabría escapadopor lospelosde lamuerteporestrangulamiento.

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Antesdeseguirtraduciendo,quiero,paramiinformepersonalylaprecisióndemisrecuerdos,añadirdosnotas.

En primer lugar siempre he sentido la necesidad de controlarme para analizar. Gracias a esterasgodemicarácternohapodidoescapársemequecuantomásmeabsorboenlaherenciadeJohnRoger,menosseguroestoydemí.Avecesmeausentodemímismo.Leoamenudoconotrosojos.Piensomedianteunsistemadeórganosextraño:noesmicabezaquienpiensa, sino«algo»piensa,lejosdemíenelespacio,lejosdemicuerpoqueestásentadoenestahabitación.Entoncesllamoalcontrolparadesprendermedeesteestadodevértigoinconsistente,unvértigo«mental».

Luego:doycomounhechociertoqueJohnDeedespuésdesureclusiónenlaTorre,serefugióefectivamente enEscocia, que efectivamente encontró asilo en la región de SidlawHills.Doy porciertoque JohnDeehavivido, literalmente, lamismaexperienciade la crisálidaqueyo…¿Noseheredarásólolasangre?¿Tambiénseheredarálaexperiencia?Cierto,aparentementetodosepuedeexplicar invocandoel«azar».Seguro, seguro,peroyosiento lascosasdeotramanera.Sientoqueaquíhaypropiamentelocontrarioalazar.Sinembargo,loqueestoyapuntodevivir,esto…todavíanolosé…

Asípues,redoblemoslavigilanciayelcontrol.

ContinuacióndeldiariodeJohnDee.

DespuésElizabeth ha vuelto, ¿pero cómo saber hoy con certeza, al cabode tantos años, si eraella?¿Noeraunfantasma?Enaquellaépocamehabíachupadocomo…unvampiro.¿NoerapuesElizabeth?Tiemblodehorror.¿EraIsaíslaNegra?¿Unsúcubo?¡No!¡IsaíslaNegranotienenadaencomúnconmiElizabeth!Peroyo…Ysinembargo,Elizabethhavividoesashoras,sí:¡ellamisma!Lo que he hecho con la demonio, no importa que demonio sea, Elizabeth lo ha vivido por unincomprensibleprocedimientodemetamorfosis.DetodasmaneraseraElizabethquienvinohaciamíenelparque,lanochedelalunamenguante.¡EraellaypornadadelmundoIsaíslaNegra!

Enesanochedetentaciónnegra,heperdidolapiezamásvaliosademiherencia:mitalismán,elpuñal,elhierrodelanzadelantepasadoHoelDhat.Loperdíahíenelcéspeddurantelaevocaciónymeparecequetodavíalotenía,segúnlasinstruccionesdeBartlettGreen,cuandoelespectrovinoamíyyoletomélamano.¡Perodespuésyanolotenía!AsíhepagadoaIsaíslaNegraporloqueacontinuaciónherecibidodeella.

Meparecequehoylocomprendo:¡Isaíseslahembraentodamujer,ylametamorfosisdetodacriaturafemeninaen…Isaís!

PasadoestetiempoyanomefueposibleleerenelalmadeElizabeth.Semehabíaconvertidoenunaextraña,perolasentíamáscercaquenunca.¡Tancercanaylamásextraña,eraposibleimaginarsemejantetormentodesoledad!Tancerca,sinunión,esalgoqueseasemejamuchoalamuerte.LareinaElizabethqueeratodoamabilidadparaconmigo,mehasecadoelcorazónconsufríamirada.SuMajestadestabatanlejossobremícomoSirius.Unfríoinmenso,unfrío…sobrenaturalemanabadeellacuandomeencontrabaensuvecindad.YamenudomellamabaaWindsorCastle.Perocuandollegabasólomedecíabanalidades.Bastabaunadesusmiradasparamatarme,unavezmás.¡Ay,esteespantososilenciodesualmahacialamía!

Algúntiempodespués,pasandoporMortlake,golpeóconsufustaeltilodelportalón,cercadel

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cualmehallabaparasaludarla.Eltilolanguidecióysusramasempezaronamarchitarse.MástardeencontréalareinaenunamarismacercanadeWindsorCastle,dondecazabalagarza

conhalcón.Cerca demí brincabami fiel alano.Elizabethmehizo señas de acercarme, respondiócortésmenteamisaludoyacariciómiperro.Muriódurantelanoche…

Eltilomoríadesdeabajo.Lavistadeesebelloárbolmeoprimíaelcorazón;lohicetalar…Entodoelfinaldeotoñoyelinviernonovolvíaveramireina.Niunainvitación,niundetalle

haciamipersona.InclusoLeicesterseapartabademí.EstabasoloconEllionor,quesiempremehaodiado.Me sumergí en Euclides con una aplicación extrema. Sin embargo, el genial geómetra no ha

comprendido que las tres dimensiones: longitud, anchura, profundidad no dan una explicaciónexhaustiva de nuestro mundo. Desde hacía tiempo estaba sobre la pista de una teoría de cuatrodimensiones.Nuestrossentidosnoconstituyenlasfronterasdelmundo,comotampocolasdenuestrapropianaturaleza.

Las claras noches de invierno me permitieron algunas maravillosas observaciones del cieloestrellado. Lentamentemi corazón se afianzó enmi pecho, como la Polar en el inconmensurablecosmos.Había empezado un tratado titulado:De stella admiranda inCassiopeia. Casiopeia es unaestrellamuycuriosaquecambiadevolumenyde fulgordeunahoraaotra,ypuededebilitarseyvacilar como la luz en el alma de los hombres… Maravilla de esas fuerzas de paz que, de lasprofundidadesdelcielo,lluevensobrenosotros…

AmediadosdemarzolareinaElizabeth,deimprovisoymuymisteriosamente,mehizoanunciarporLeicestersuvisitaaMortlake.«¿Quépuedequerer?»mepreguntaba.Congranestuporeinclusoespantopormiparte,Dudley,venidodesuparte,meinterrogórepentinamenteysinpreámbulosobreunciertoglass[14]opiedramágicaqueestabaenmipoderyquelareinaveríaconplacer.Cogidoporsorpresa,mefueimposibleesconderlaverdadynegarlaexistenciadelapiedradeBartlett,graciasalacualyahabíallevadoabuenpuertotantasoperaciones.DelrestoDudleymeinformóconcuatropalabrasquelasoberanasabíaperfectamenteaquéatenersepueslehabíaencargadodedecirmequeella, unanochedelotoñopasado,mehabíavisto en sueños con lapiedra entremismanos.Aloírestas explicaciones mi corazón dejó de latir. Con gran esfuerzo recobré la serenidad y rogué aDudleyledijeraquemeencomendabaalabenevolenciayalagraciademisoberana,ytodoloqueconteníamicasa,todoloqueposeía,lepertenecía.

En el momento de despedirse—¡oh! ¡qué lejos queda ello ahora!—Dudley besó la mano deEllionor,mimujer;Ellionorlaretiróconunaprisacasiindecenteymeconfesóluego,muymolesta,queelcontactodelabocadelgentilhombreconsupiellehabíadadoladesagradableimpresióndeunsoplodemuerte.Yolareñíseveramenteporsuspalabras.LuegolasoberanavinoaWindsorCastle,acompañadaporDudleyyunséquitoacaballo.Golpeóconsufustaenmiventana,congranespantoparaEllionor,quesellevólamanoalcorazónycayóalsuelosinconocimiento.Lallevéasulechoysalídeprisa,sinmirarla,parasaludaralareina.EllamepreguntósinmuchocalorporladyEllionory al saber el inoportuno incidente a consecuencia de su llegada,me ordenó ir a ver amimujer;mientrastantoelladescansaríaenelparque.Misinsistentesruegosnoconsiguieronhacerlaentrarenlacasa.Volvípues,alahabitaciónconmimujer,ylaencontrémuriéndose.Conunindecibleespantoenelcorazón,huídepuntillasparaencontrarafueraamisoberanayllevarleelglass;peroEllionorestabaentrenosotros,aunquenosehubierapronunciadounasolapalabrareferenteaella.EntoncesviqueElizabethsabíaloquelesucedíaamimujer.Alcabodeunahorapartióacaballo.Alanochecer

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Ellionormurió.Unataquedeapoplejíahabíaterminadosuexistencia…Erael21demarzode1575.Antesydespuésdeestesiniestroeventolascosasibanbastantemalparamí,hoymedoymejorcuentade ello. Inútil insistir más, me limitaré a decir que doy gracias al cielo que hoy me permiterecapitular,conunespíritusano,esosdíasdeaberración.

Laintrusióndelosdemoniosennuestrafrágilvidasecifrasiempre,dehecho,enlamuertefísicao,peoraún,enlamuertedelespíritu;sóloescapamosaellaporlagracia…

Apartirdeesedía,lareinaElizabethyanovinoaMortlake.YanofuiinvitadoapresentarmeenlaCorte,yestabamuycontentoporello.Entoncesfuipresadeunaaversiónmásirreductiblequeelodio, ya que representaba elmayor alejamiento posible en una proximidad interior cada vezmásdetestable.

Paraterminar,resolvíhacerpormicuentaloqueanteriormentelasoberanahabíajuzgadobuenoinfligirme.Tresañosdespuésdemiviudez(teníacincuentaycuatro),desposéconunamujerquemeplacía,unamujerquenosabíanihabíavistonadadeElizabethnideLondres,delaCorteydelgranmundo, una hija de la naturaleza, cándida y sana: Jane Fromont, hija de un honesto granjero, eloscuronacimientodelacualerasiempreindignodeatraerunamiradadeSuMajestad.Enrevancha,tengounaencantadoramuchachadeveintitrésañosquesemehaentregadodetodocorazón.Hayunasingular certeza enmi sangre,un sentimiento infalible enmipecho,bienprontomedi cuentaquehabíadomadoa lareinayqueunacólera impotentesazonabadeamarguraesosdíasenqueestabalejos de mí. Esto doblaba mi voluptuosidad entre los brazos de mi joven mujer, y dejaba sufrirconscienteyvoluntariamentealaquemehabíahechopadecerunmartiriosinnombre.HastaeldíaenqueElizabethcayóenfermaenRichmond,conunafiebreardiente.Cuando losupe,mesentícomotraspasadoporunaespada,porunalanza,meprecipité,sinhabersidoinvitado,aRichmond,haciamisoberana.Nofuidespedidoybienprontoestabaensucabecera,laencontréengranpeligro.

Cuando estuve cerca de la cama, a un signo de la reina, todos los que estaban presentes,gentilhombresysirvientes,abandonaronlahabitaciónyyopermanecíunamediahorasoloconella;enmividaolvidaréesaconversación.

—Me has hecho mucho mal, amigo John, dijo ella levantándose. No tenías nada que ganarhaciendointervenirotravezentrenosotrosalabruja,lacualnoshavueltoextrañoselunoalotro,antesmedianteelfiltro,estavezporlossueños.

Concebíconestaspalabrasunaverdaderairritación,yaqueelafectonaturalysimpledemiJanemehabíacalmado,satisfechoyyaestabacansadodelambiguo juegode losdeseosy renunciasdeunareina lunática.Así,con todoel respetodebidoaSuMajestad, le respondí,en términosquemeparecieroninteligentesyviriles:«Loquesehabebidoaplenaconcienciaporpetulancianopodríaofender las leyes de la naturaleza, y aún menos las del espíritu divino. Según la naturaleza, unasubstanciaenemigadelcuerpoobienloarrastraalamuerte,omuere,porqueelcuerpoladestruyeyla expulsa. Pero, según las leyes del espíritu, nuestra voluntad es libre, así podemos, a nuestraconveniencia, asimilar o eliminar nuestros sueños. En conclusión, lo que se ha bebido sininconvenienteporelcuerpo,despuésdemucho tiemposehavolatilizado.En lo referenteal sueñoque ha venido al encuentro de nuestra libre voluntad, el alma, para su sana organización, lo haexcluido de la mejor manera para su equilibrio; pudiésemos pues esperar del cielo que VuestraMajestadsalgamásfuerteymáslibredeloscombatesquelahanprobado».

Midiscursoterminóenuntonomásosadoybrutaldelquelohabíaempezadoyquenohubieradeseado;laseverapalidez,laexpresióndelamiradaquelareinaapoyadaenlaalmohadafijabaen

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mí,meespantaron.Noera cólera, sinounaextrañeza,unaaltivagrandezaquemehelóde repentehasta lamédula,mientras su respuestame llegaba,y sabíaqueera la reina«enespíritu»quienmehablaba:

—HijodeRoderick,tehasalejadomuchodelarutaqueteestabaasignadaporeldestino.Pasastusnochesobservando,consagazinteligencia,lasestrellasdelcielo,peronosabesquelarutaparaalcanzarlascruzasuimagengrabadaenti,yseteocurrequelosdiosestesaludandesdeahíarriba,dioses hacia los que podrías subir si quisieras.Me has dedicado unamemoriamuy ingeniosa.DestellaadmirandainCasiopeia.¡Oh!¡JohnDee,temaravillasdetantascosasyentuyalargavidahasdejado escapar la ocasión de convertirte tú mismo en una maravilla del universo! Pero hasconjeturadoconrazónquelaadmirableCasiopeiaesunaestrelladoblequegirasobresímisma,enunaeternidadimpasible,felizresplandecienteyreplegándosesegúnlanaturalezadelamor.ContinuaestudiandotranquilamenteaCasiopeiacuando,quizásindilación,yohabréabandonadoestepequeñoreinodelasIslasparacontemplarlacoronaquebradaquemeesperaenelmásallá…

Caí de rodillas ante su lecho y sólo he guardado una semiconciencia de las palabras que acontinuaciónnosintercambiamos.

Pero laenfermedadde la reina tomóunasproporciones inesperadas; losmédicosyanocreíanpodersalvarsuvida.MarchéaHolanda,luegoaAlemania,parabuscaraloscélebresmédicosquehabíaconocidoenLovainayenParís:peronoencontréningunoensu residencia,demaneraque,desesperado, empecé a perseguirlos, usando para viajar noche y día caballos de posta, hastaFrancfort-sur-l’Oderdondemellególanoticiadelacuracióndemisoberana.

Yporterceravezvolvíamipatria,despuésdeesteagotadoreinútilviajealserviciodelareina.Encontréencasaamimujer Janemadredeunbebé,miqueridopequeñoArthur,quemehadadocuandoteníacincuentaycincoaños.

Desdeentoncestantolostemorescomolasalegrías,losdolorescomolasecretaefervescenciadeextravagantes esperanzas suscitadas por mis raros contactos con la reina Elizabeth y su Corte enLondres han pasado, así como todo pasa y mi vida, después de estos dos últimos años, fluyetranquila,enplenoaire,semejantealríoDee,describiendograciososmeandrosenunpaísamable,pero sin el poderoso impulso de la corriente que quiere alcanzar un lejano y rico horizonte deposibilidades.

LareinaElizabethharecibidoconunagraciosacondescendenciaunaúltimaadvertenciaquehearrancadoamipluma:comoconclusiónamisgrandiososplanesysinembargoelaboradoscontantocuidadoyprecisiónpara laexpedicióndeAméricadelNorte, lehededicadomiTabulageográficaAmericae[15].Unavezmásheintentadoponerderelievelasincalculablesposibilidadesyventajas,laocasiónúnicade la empresa.Sólohe cumplidoconmideber.Puestoque la reinaha escuchadoelconsejodeunenvidiosodecortasmiras,desdeluegomásquelosdesuamigo,esunafatídicahoraperdidaparaInglaterra,quenosepresentaránuncamás.¡Peroyopuedoesperarloquemehallevadomediosiglopreparar!DesdeahoraBurleigh tiene laorejade la soberana.Unaorejaqueaceptaeldictamen, un poco a la ligera, con los ojos encantados por la bellezamasculina. Burleigh nomeapreciamucho.Esperopocodesudiscernimientoynadadesuequidad.

PerotodavíahayotracircunstanciaquerefuerzamiindiferenciayquedesdeahorameprotegedeestarsujetoalasdecisionesdelconsejodelaCorona.Misreflexiones,conelcursodelosaños,mehan llevado a preguntarme si laGroenlandia terrestre,meta demis actos, constituía el verdaderoobjetodelaconquistaquemehasidoprofetizada.Tengodesdehacepocorazonesparadudarhaber

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interpretado correctamente el mensaje de mi espejo; tengo razones para desconfiar del satánicoBartlett Green, a pesar de su cualidadmanifiestamente sobrenatural y extralúcida. Lo que demásdiabólicohayenélesquehadicholaverdad,perodemaneraquesedebecomprendertodoalrevés.Estemundonoestodoelmundo,comoélmismomeloenseñóenlahoradesumuerte.Estemundocomporta un trasmundo, una pluralidad de dimensiones que el dominio donde se mueve nuestrocuerpo,quenuestroespacionocubre.¡Groenlandiatambiéntienesuréplica,comoyotengolamía…enelmásallá!¡Groenlandia!¿NoseráGruneland[16],latierraverde?¿MiGroenlandia,miAmérica,no están en elmás allá?Esta convicción, este pensamientomehabita desde que vi algomás.Y laadmonicióndeBartlettresonandoenmí,buscaraquíynadamásqueaquí,creerqueencontraréaquíynadamásqueaquíelsentidodelSer,mesirvemuchomásparamantenermiintuiciónenalertaynoes parami razón un argumento que poner en el tablero. En efecto he aprendido a desconfiar porprincipiodelarazón,aunquesetrataradeBartlettGreenenpersona.Bartlettnoesmiamigo,aunquesehayacomportadoconmigocomounsalvadoryconsejero.¡Quizáhasacadomicuerpodelatorreparaasesinarmi alma!Lodescubrí eldíaquemeayudóa conjurar a lademonio,que sedisfrazótomandoelastraldeElizabethparaclavarelgarfioenmí.Herecibidounmensajeinteriorquemedesolidarizadetodamivida, talcomolaveoenunespejoverde,yquemeinvitaadejarelespejocuyaprediccióneselorigendemisextravíos.

Meheconvertidoenotrohombrecompletamentedistintoaaquél,simplecrisálida,quecolgabamuertoenunaramadelárboldelavida.

Apartirdeesteañoyanosoyelfantochequeobedecíalasórdenesdelespejoverde.¡Soylibre!¡Libreparalametamorfosis,elvuelo,elreino,la«Reina»yla«Corona»!

***Aquí terminaelextrañocuadernodondeestánconsideradoslossucesosde lavidadeJohnDee

desdesuevasióndelatorredeLondreshastael1581;esteperíodocubrecasiveintiochoaños,hastasus cincuenta y siete años, la edad en la que la vida de un hombre normal se orienta hacia laserenidad,elrecogimientoyelretiro.

Unaprofundaagitacióninterior,unatensiónoscura,unaparticipaciónmayordelaqueesnaturalaestasingularexistencia,medice,amí,sudescendiente,que losverdaderosasaltos, las tormentasdeldestino,loscombatestitánicosempiezanaquí.Seacumulan,suben,vanasumergirlotodo…porelamordeDios,¿dequéespantosoypresaderepente?¿Soyyoquienescribe?¿MeheconvertidoenJohn Dee? ¿Es mi mano? ¿Y no la suya? ¿No la suya? Por Dios, ¿quién está sentado ahí? ¿Unespectro?¡Ahí,ahí,enmiescritorio!

***

Estoyagotado.Estanochenohepegadoojo.El tumultodelaexperiencia, lashorasquesehansucedido,horasdeundesesperadocombateparasalvarmirazón,semanifiestanahoratrasdemíenla pacífica luz de un paisaje en el que hubiera habido una gran tormenta, destructora y a la vezbenéfica.

Almenos,despuésdehaberescapado,soycapaz,enlamañanadeestenuevodía,deponerporescritoenelpapel,ensuaspectoexterior,laaventuraquevivíayerporlanoche.

Era alrededor de las siete de la tarde cuando terminé de traducir el cuaderno que contenía la«retrospectiva»deDee.Misúltimaspalabrasatestiguanqueeldesarrollodeestabiografíamehabía

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impresionadomásdeloqueyohubierajuzgadolegítimoparaunredactorindiferentequeresumelosantiguospapelesfamiliares.Sifueraunvisionariodiría:esteDeequellevoenmiscélulas,entantoque heredero de su sangre, ha resucitado de los muertos. ¿De los muertos? ¿Está muerto quientodavíaviveenlascélulasdeunhombredehoy…?Peronoquierointentarexplicaresteexcesodeparticipación.Hayalgo,estealgohatomadoposesióndemí.Basta.

Haidotanlejosque,dealgunamaneradifícildedescribir,hesentidonosóloqueparticipabadelinteriordelagitadodestinodeJohnDee,almismotiempoquemedianteelrecuerdo,yfinalmentedesuvidadesabiodesilusionado,retiradoaMortlakeentresumujeryunhijopequeño;nosóloveíalos alrededores de la casa—y sin embargo, no era con los ojos de carne—, las habitaciones, losmuebles;nosóloempezabaa reaccionaralunísonoconJohnDeeanteesosdiversosobjetos;sinoquetambiénempezabaapercibir,sí,veíaenelfuturograndesamenazasqueibanaabatirsesobremidesgraciado antepasado, aventurero más generoso que eficaz, y esta visión tenía un inquietante,doloroso,ysofocantepoder,comosisetratarademiineludibledestinopropioque,comounaespesaynegracortina,inundabadeoscuridad,antemisojosinteriores,unaespeciedepaisajemoralconlaimagendemímismo.

Debo guardarme de querer decir más, pues me parece que de nuevo confundiría mispensamientosylaspalabrasmenegaríansuservicio.Estetemorgeneraenmiangustia.

Tampocohablarémásdelindecibleescalofríoquehaceuninstantemeharecorrido,apartirdeahorameciñoalarelacióndeloshechosconsequedad.

MientrastranscribíalasúltimasfraseshesidogratificadoconunavisióncorporalsobreelfuturodeJohnDeeapartirdelafechaenqueseinterrumpióeldiario,desdeunaperspectivatanevidentecomosiyohubieravividoesefuturotodavíaengestaciónconelJohnDeequehabíadevivirlo.¡QuédigoconJohnDee!LohevistoentantoqueJohnDee,yomeheconvertidoenesteJohnDee,delcualnuncasupenisénadamásfueradeloquefiguraenmisrecensiones.

Eneseinstanteexperimentéunsentimientodehorrorindescriptible:eraJohnDee.Unindefiniblemalestar,una sensacióndetrásde lacabeza, comosimebrotaraun segundo rostro,unacabezadeJano…¡ElBaphomet!Ymientrasestabasentadoahí,helado,muerto,rígido,alacechodemímismoydesdeestametamorfosisenmí,asistí,comoenunespectáculo,alaproyecciónsensibledeldestinodeJohnDee.

Antemí,surgidodelaireentreelescritorioylaventana,estabaBartlettGreen,sucasacadecueromedioabiertadejandoversuanchopechocubiertodepelosrojos,supoderosacabezadecarnicerorodeadaporunabarbarojizaydesordenada,plantadasobreungruesocuello,terriblementecercanoyvivoensuamigable risa. Involuntariamentemefroté losojosunaprimeravez; luego,pasadoelprimermomento de espanto, una segunda vez, en plena lucidez del observador de sangre fría. Elhombrenosehabíamovido,yyosabíaqueeraBartlettGreen,ynootro.

Entoncesseprodujolacosamásinconcebible:yoyanofuiyo,sindejardeseryo;estabaalavezaquíyallá,presenteydistante,todoalavez.Era«yo»yeraotro,eraJohnDee,enelrecuerdoyenlaactualidad demi conciencia viva. No puedo hallar otras palabras para calificar este desajuste. Laexpresiónacertadapodríaserésta:elespacioyeltiempoestabandesplazadoscomounobjetoquesemiraguiñandounojo:sesgadamente,realyvirtualalavez.Enefecto,¿cuáldelosdosojoseselque«ve» la verdadera imagen? El mismo desajuste para el oído que para la vista: bien cerca, y sinembargo resonando en las profundidades de una lejanía secular yo oía la voz burlona deBartlettGreen.

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—¿Siempre animado en el camino, hermano Dee? Un muy largo camino, estimado. ¡Habríaspodidosimplificarlascosas!

«Yo»quisehablar.«Yo»quiseconjurarelespectromediantepalabras.Pero teníaunnudoen lagarganta,lalenguapegadaalpaladar,unmalestarpsíquicoymentalhabíainvadidomipersonaymiconciencia;enlugardelamía,unavoz«pensó»atravésdemíypronunció,pasandoporencimadelossiglosparagolpearconsuestallidoenmioídoexterior,palabrasqueyonuncahabíaconcebidoyquedecían:

—Y tú, Bartlett, todavía hoy cruzándote en mi camino, y no queriendo que alcance mi meta.¡Renuncia,ydéjamelavíalibrehaciamidobledelespejoverde!

Elfantasmadebarbaroja,omejor,enmiopiniónBartlettGreenmismo,memiróalacaraconsuojoblanco.Medirigióunasonrisaqueledioelaspectodeungrangatoapuntodebostezar:

—Aunquesondeeselespejoverdeoelcristaldecarbónnegro,essiemprelamuchachadelalunamenguante,quientesaluda.¡YasabeshermanoDee,labuenadamaqueseinteresatantoporlalanza!

Con el aliento cortado, fijé mi mirada en Bartlett. Un terrible torrente arremolinándose depensamientos,demaldiciones,dearrepentimientoydetentativasderesistenciareventó,sedeshizoyloahogótodoenlaúnicaevidenciaquedeprontogolpeabamiconcienciaqueapenasemergíadesuletárgicoestupor:

—¡Lipotine…!¡Elhierrodelanzadelaprincesa!¡Demítambiénserequierelalanza!Apartirdeahí,todosedesvaneció.Peroyocaíaenunaespeciedesueñodespiertodondetuvela

impresión de revivir pormis sentidosmedio receptivos esa noche lunar durante la cual JohnDeehabíaprocedidoalaevocacióndelsúcuboeneljardíndeMortlake.Loquehabíaleídoensudiarioadquirióunapresenciayunrelievesorprendentes;loqueseaparecióenelcristaldecarbón,comolaflotante silueta de Elizabeth, objeto de su evocación, era desde ahora para mis ojos la princesaChotokalouguine;yBartlettGreenqueestabaantemí,sedisipóenelmomentoenque,enmisueñotrenzado de reminiscencias, John Dee se divertía con el satanizado cuerpo astral de la reinaElizabeth…

***

He aquí todo lo que puedo decir de la impenetrable experiencia de ayer noche. Lo demás sonbrumasquesedeshilan.Sueñoesfumado.

¡Laherenciade JohnRogerha sido llamada a la vida!Yano estoy en condicionesde jugar elpapelde traductor indiferente.Participodeunamaneraodeotra, estoyatadoconesascosas, esospapeles, esos volúmenes, esos amuletos y ese arca deToula.Y sin embargo, ¡el arca deToula noproviene de la herencia! Me viene del difunto barón… ¡Me viene de Lipotine, descendiente deMascee!¡DelhombrequebuscaenmicasaelhierrodelanzaparalaprincesaChotokalouguine…!¡Todo,todoserecompone!¿Perocomo?¿Cadenasdeniebla,atadurasdehumoqueelvientoempujaporsobrelossiglosparaamarrarme,paraquitarmemilibertad?

¡Yomismoyavivo,asícomotodoloquemerodea,enel«meridiano»!Tengoabsolutanecesidaddereposoydereflexión.Ondasheladas,aberrantes,merecorren.Mirazónvacilaacadainstante.¡Espeligroso,esinsensato!Sipierdoelcontroldelasvisiones,entonces…

MeencolerizocuandopiensoenLipotineyensuherméticoycínicorostro;oenlaprincesa,esamaravillosa criatura… En efecto, estoy solo, reducido a mis solos recursos, sin ayuda ante…

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digámoslodeunavez:¡antequimerasnacidasdemiimaginación,antefantasmas!Tengoverdaderanecesidadderecuperarme.

***

Latarde.Hoynomedecidoa sumergir lamanoenel cajónpara sacarunnuevocuaderno.Porun lado

tengo la sensación de que mis nervios son todavía demasiado débiles, por el otro, la agradableperspectivadeunavisitamuysorprendentequemeanunciaparahoyelcorreodelmediodíayquemevuelveimpacienteyfebril.

Siempreesapasionanteencontrardenuevounamigodejuventud,antañodelosíntimosyluegodesaparecidodevuestrohorizonteduranteuntiempoequivalenteamediavida,yquetraeconél lapromesaderestituiroselpasadointactoporasídecirlo.¡Intacto!Naturalmenteesunerror:aligualqueyo,esteamigosehatransformado,nielunonielotronoshemosgarantizadonuestropasado.Unsemejante error engendra a menudo la decepción. Sólo queda la espera razonable en la que meabsorbopensandoquealatardeceriréalaestaciónabuscaraThéodoreGärtner,micompañerodeestudiosdetiemposanteriores,pertenecienteamimismomediosocial,espírituexuberanteyosado,marchóaChilede jovencomoquímicoyconsiguióaltoshonores,celebridadyriqueza.Sehabríaconvertidoenunverdadero«tíodeAmérica»,deseosodegastarsetranquilamenteensuviejopaíslafortunaquelehavalidosubrillantecarrera.

Estoyunpoco contrariadoya quehoyprecisamente, cuando espero esta visita,mi gobernanta,queestáalcorrientedetodasmiscostumbres,hademarcharadescansaralgunosdíasasuregión.Nopodría,sincometerunainjusticia,retenerlapormástiempo.¡Pues,viendolascosastalescomoson,ledeboestalicenciadesdehacemásdetresaños!Quesudelicadezaomiegoísmosealacausanoimporta,pero siemprealgúnobstáculo seha interpuesto;yéste sería,unavezmás, el turnodemiegoísmo. ¡No, nomeplace! Intentemosmás bien esta vez acomodarnos, con paciencia, siDios lopermite,yconelmayorespíritudeconcordia,alasustitutaquemehaprocuradoyanunciadoparamañana. ¡Siento curiosidad por ver cómo me entenderé con esa «mujer de médico» que ha desustituiralaviejagobernanta!

Una «dama» divorciada, según se dice sin recursos, obligada a buscar una colocación.¡Naturalmente no está divorciada a causa de sus sinrazones! ¡Un interior tranquilo! ¡Una fieladministradora!Ymuchomás.

Probablemente:«¡Provistodesuplomada,Lenchenseacercadepuntillas!»comocantaWilhelmBusch,¡atención

pues!Ríopensandoentodoloqueamenazaopodríaamenazaraunviejosolteróndemiespecie.Porotrapartenosellama«Lenchen»,sinoJohannaFromm.Además,esta«mujerdemédico»sólotieneveintitrésaños.Esnecesario,pues,mantenertodoslosfrentesyvigilaratentamentetodaslaspuertasquecierranlaciudadeladelviejomuchacho.¡Mientrasalmenoscocinebien!

***

HoynotocaréparanadalosdocumentosdeJohnRoger.Necesitoprimeroordenarenmiespírituloshechosylasimpresionesdeayernoche.

Parecequelamaníadetenerundiarioseaunadelastarashereditariasdelosquehanrecibidola

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sangrey lasarmasdeJohnDee.Siestocontinúa, tambiényodeberé redactarunprotocolodemisaventuras. Además, me siento imperiosamente empujado a penetrar, lo más rápido posible, en elcorazóndelmisterioqueplaneasobreestasingularexistencia,vueltadelanada,deJohnDee:yaque,estoy convencido, que es allá, se quiera o no, donde yace la llave: y no sólo la que explica lasvicisitudes y los enigmas que han marcado esa vida, sino, por extraño que parezca, la llave queexplicará precisamente por qué me hallo yo mismo implicado, enredado en la historia de miaventurero antepasado. Mi febril curiosidad querría apartar cualquier otro deseo, cualquier otropensamiento, para coger a tientas el primer cuaderno de susmemorias o, conmás ganas todavía,forzarelarcadeToula,enmiescritorio…¡Caprichodelirante,imputablealasuperexcitacióndelanochepasada!Noencuentrootromedioparacalmarlayrefrenarlaqueponerporescritoloquehasucedido,conelmáximodeobjetividadyorden.

Ayertarde,alasseisenpunto,estabaenlaestacióndelNorteyesperabaelrápidoquedebíatraera mi amigo el doctor Gärtner, anunciado por su telegrama. Me puse al acecho en el lugar másfavorable, cerca de la barrera de salida, a fin de no dejar escapar a ninguno de los viajeros queabandonaranlaestación.

El expreso fue exactoy controlé tranquilamente losque llegaban;mi amigoGärtnernoestabaentreellos.Esperéhastaqueelúltimoviajerohubopasado,esperéhastaelmomentoderealizarlasmaniobrasparaestacionareltrenenotravía.Finalmentemedirigímuydecepcionadohacialasalida.

Recordéentoncesquedeesamismadireccióneraesperadounsegundotren,aunquesuorigennoeradelextranjero.Dimediavuelta,rehíceelcaminoyretomémipuestodeobservación.

¡Trabajo inútil! Pensaba, no sin amargura, que la antigua puntualidad, la precisión de micompañerodeestudioseraunadelascualidadesqueeltranscursodelosañoslehabíahechoperder.Abandoné laestacióndelmalhumoryesperaba,alvolveracasa,encontrarquizáun telegramadeexcusa.

Habíaperdidocasiunahoraenesabarrera, erancasi las sieteyestabacayendoeldía cuando,cruzando por casualidad una callejuela lateral, que a decir verdad no me alejaba mucho de micamino,me topéconLipotine.El encuentrodelviejoanticuariomecogió tande sorpresaquemequedéclavadoahíyrespondíasusaludoconestapreguntatannecia:

—¿Quéhacéisporaquí?Lipotine,quesehabíadadoperfectacuentademiconfusión,pasódelaestupefacciónprimeraa

susarcásticasonrisaquetanamenudomeirritabaensucasa;luego,mirándolotodoasualrededor,dijo:

—¿Por aquí? ¿Qué tiene de extraordinario esta calle, noble amigo? Sí, tiene el mérito deconducirme del café a casa siguiendo una impecable dirección norte-sur.Y ya sabéis que la línearectacaracterizaaladistanciamáscortaentredospuntos.¡Perovos,mibenefactor,meparecequeoscomplacéisdando rodeos, yaqueno sé, amenosque la ensoñaciónoshaya extraviado, loquehapodidoconducirosaestacallejuela!

Lipotineterminóconunaardorosarisafútil,mientrasquesuspalabrasmeimpresionabanhastaelespanto.Lamiradaconquelemirédebiódeestardesprovistadeexpresiónydeinteligencia:

—Tenéistodalarazón,lerespondí,extraviadoporlaensoñación.Yo…volvíaamicasa.Lipotinefuenuevamentepresadesuburlonarisa:—¡Escurioso,cómounsoñadorpuedeperderseensuciudadnatal!Siqueréisvolveravuestra

casa, estimado, debéis tomar la próxima calle transversal a la izquierda, volver… pero si me lo

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permitísosacompañaréuntrozo.Irritado,hiceunmovimientoparasacudirmiirracionalembarazoyledijeamivez:—En efecto, parece, Lipotine, que me he dormido en la calle. ¡Os agradezco que me hayáis

despertado!Permitidmequeyoosacompañe.Lipotinepareciócontento,yhenosaquíandandojuntoshaciasumorada.Porsímismomecontó

en el caminoque la princesaChotokalouguine había preguntado recientemente pormí conmuchoardor,manifiestamenteleplacíamicompañía,asípuespodíarealizarunaconquistamuyhalagüeña.Objeté rápidamente aLipotine, con energía, queno eray en absolutopensaba ser un«Don Juan»,peroLipotinelevantólamanoenseñaldeprotestaysepusoareír.Luegoañadió,comodepasada,peronosinunaperceptibleintencióndefastidiarme:

—Ademásyanohahabladodelhierrodelanzatandeseado.Asíeslaprincesa.Encarnizadahoy,olvidadizamañana.Muyfemenino,¿noesverdadqueridoamigo?

Así, cuando Lipotine propuso venir a buscarme un próximo día, para hacer una visita a laprincesa—sabíaconcertezaqueestaríaencantadadeverme,esmás,esperabaestavisitadesdequeseintrodujoenmicasacontantodescaro—mepareciódeltodonormalnoomitirestecomportamientocortés y atrapar la ocasión de volver a ver a la princesa, quizá también de instruirme sobre losobjetosdearteantiguos.

En éstas llegamos cerca de la casa dondeLipotine tenía su pequeña tienda y detrás la pequeñahabitacióndondesealojaba.Quisedespedirmedeél,perorepentinamentemedijo:

—Estáisallado,ysucedequeayerrecibídeBucarestunpequeñolotedebellascosasantiguasquecomosabéis,detiempoentiempoyporcomplicadoscaminos,tengolaocasióndehacervenirdelosterritoriosbolcheviques.Desgraciadamentenoofrecenunconsiderableinterés,peropuedequequizáhayaalgúnobjetoalquedesearíaisecharunamirada.¿Tenéiseltiempodeponerunpieenmicasa?

Dudé un instante entre mi idea de encontrar en casa un telegrama de mi amigo Gärtner —prolongandomiausenciamearriesgabaafaltaraunanuevacita—ymimalhumorredobladoporsuinexactitud;más rápido de lo que yo hubiera querido, como si la lengua precediera a la decisiónprestaasurgir,ledigo:

—Tengotiempo.Ossigo.Lipotinesacódesubolsillounallaveantediluviana;lacerradurarechinóyentréporlapuertade

unalmacén,buscandodondeponerlospiesenlaoscuridad.Amenudohabíavenidoaplenodíaalaestrechaguaridadelviejoruso,queenloqueconciernea

labohemiayaldesorden,nodejabanadaquedesear:Estaespeciedecavadebíadeestarbienapestadaporunahumedadyunmohosecularesquelahabríanvueltoinhabitable,salvoparamedioeuropeospocoexigentes;enlacrisisdealojamientoquesiguióalaguerra,Lipotinelohabíatenidomalparaobtenerlayrefugiarse.

Hizosurgirunamiserablellamadesuencendedordebolsilloysepusoahurgarenunrincón.Lavagaluminosidadprovenientedelacallenobastabaamivistaparainventariareserastropolvorientoinundadodevaguedad.La llamadel encendedordegasolinadeLipotinevacilóy temblócomounfuegofatuoenunamarisma,deunmarrónoscuro,dedondesedestacabanlaslentejuelas,lasaristas,lasroturasdeobjetosmedioengullidos.Congranpena,finalmente,lamechadeunabujíaconsentíaenarder,iluminandotansóloprimerosuscontornosmásinmediatos,enestecaso,eltoscovaciadoen esteatita de un espantoso y obsceno ídolo, en el puño del cual estaba puesta. Lipotine estabainclinadohaciaelpábiloparaobservarsilapolvorientamechaseencendíabien,ysehubieradicho

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queseapresurabaacumpliranteelídolounritosecretodedevoción.Después,coneldébilparpadeodelabujía,terminóporencontrarunalámparadepetróleoquebienprontoresplandecióconunaluzrelativamente viva y confortable.Durante todo ese tiempo permanecí inmóvil, experimentando unsentimientodeopresión,ysoltéunsuspirodealivio.

—¡Graciasavos,elmisteriodel«Quelaluzsea»sedesarrollaporgradoscomoenlosorígenesde la creación! exclamé, girándome hacia Lipotine; ¡que tonto y vulgar, después de esta triple ycreciente manifestación del fuego sagrado, aparece el disparador, sin poesía, del conmutadoreléctricotanpreciadodenuestrotiempo!

Delrincóndondeestabaélapuntodeescudriñaralgo,mellegósuvozsecaycasigraznante:—¡Exacto, noble amigo! Quien pretende pasar de golpe de la benéfica oscuridad a la luz se

deterioralosojos.¡Estodavuestrahistoria,lavuestra,Europeos!Nopudeimpedirmedereiranteesenuevoejemplodevanidadasiática,quetransformasindudar

unalamentablenecesidaddetuguriodearrabalenunasuperioridaddeprincipe.Teníaganasdecebarla tanmanoseadayabsurdacontroversiadebendicionesomaldicionesde la industriaeléctrica,yaquesabíacómo talesdebatesprovocabanaLipotinea formularalguna reseñaextrañamente sagaz,aunque sarcástica; fue entonces cuandomimirada, que vagabundeaba, quedó fascinada por el oromate que relucía en el contorno de un viejomarco florentino, muy trabajado, que enmarcaba unespejooscurecidoymanchadoenmuchossitios.Avancéhaciaélyreconocíunnotabletrabajoporsuminuciosidadysudelicadeza,delsigloXVII.Elmarcomeentusiasmóysentí,almomento,elvivodeseodetenerelobjetoenmiposesión.

—Tenéisentrelasmanosunadelascosasquerecibíayer,dijoLipotine,queseacercó,perolamenosbuena.Ningúnvalor.

—¿Habláisdelespejo?Ciertamente,notieneningúnvalor.—Tambiénhablodelmarco.Surostrobañadoporlaclaridadverdosadelalámparaseanimabaconfulgoresamarillo-rojizos

desucigarrilloquechupabafuriosamente.—¿Elmarco?—Yodudaba.Lipotine lo teníapor falso. ¡Era sunegocio!Pero en seguida tuve

vergüenza de mi reacción mercantil ante ese pobre diablo. Él me observaba atentamente. ¿Habíanotado mi vergüenza? Es extraño: una especie de desilusión había pasado por su rostro. Unainquietudsedeslizóenmicorazón.Conuncienoairededesafíoterminémifrase:

—Enmiopinión,elmarcoesbueno.—¿Bueno? ¡Seguro! Pero es una copia. Ejecutada en San Petersburgo. Vendí el original al

príncipeYoussoupoffhaceaños.Incrédulo,paséelespejoentodoslossentidosbajolaluzdelalámpara.Conozcoperfectamente

la habilidad de las imitaciones petersburgonianas. En esto, los rusos rivalizan con los chinos. Sinembargo, ¡el marco del espejo era auténtico!… Entonces descubrí, de casualidad, grabadoprofundamenteenlaincisióndeunaespléndidavolutaelpunzónflorentinoenformadebulboapenasvisiblebajolapátina.MiinstintodeaficionadoydecazadormeimpidióviolentamentequehicierapartícipedemidescubrimientoaLipotine.Mecontentéenpermanecerenmisposicionesydedecirle,conlamejorformadelmundo:

—Elmarcoesdemasiadobuenoparaserlamejorcopia.Enmiopiniónesauténtico.Lipotineencogióloshombrosconhumor:—Siésteeraeloriginal,elpríncipeYoussoupoffhabríarecibidolacopia.Notieneimportancia,

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además, recibí el precio correspondiente al original; y en cuanto al príncipe, su casa y suscoleccioneshandesaparecidodelasuperficiedelatierra.Ladiferenciaquedapuesallanadaycadaunotieneloqueleesdebido.

—¿Yesteviejocristalquetienetodoelaspectodeseringlés?—pregunté.—Es, si queréis, auténtico. Es el cristal originario. Youssoupoff hizo poner un nuevo vidrio

venecianoyaquehabíacompradoelespejoparasuusopersonal.Ademáserasupersticiosoydecíaquedemasiadagentesehabíamiradoenestecristal.Ellopodíatraerdesgracia.

—¿Demaneraque…?—Demaneraquepodéis llevároslo,sielloosplace,muyestimadobenefactor.Novale lapena

hablardelprecio.—¿Ysiapesardetodoelmarcofueraauténtico?—Estápagado.Auténticoono.Permitidmeofrecerosestehomenajedemiviejopaís.Conocía la testarudez de los rusos. Fuera comodecía, auténtico o no, era necesario aceptar el

regalo,bajopenadecontrariarlo.Eramejorpermanecerenelveredicto«copia»,asínosevejaríaporsuerrorsisedabacuentadequesehabíaequivocado.

¡Heaquícómomeconvertíenelpropietariodeunmarcoflorentinoqueeraunaadmirableobramaestradelprimerperíodobarroco!

Había resuelto por mi parte compensar de la mejor manera a este munificiente donador,comprándolealgúnotroobjetoalmejorprecio.Peroloquememostrónopresentabaningúninterésparamí.Asíocurrelomásamenudo:laocasióndeponerenprácticaunabuenaintenciónseofrecemásraramentequeladeseguirunainclinaciónegoísta;yalcabodemediahoramevolví,unpococonfuso,llevándomeelregalodeLipotineysindejarlenadamásquemipromesademostrarlemiagradecimientolomásprontoposible,medianteunacompra.

***

Estaba en casa alrededor de las ocho; encontré encima de mi mesa una corta nota de migobernanta,diciendoquesureemplazantehabíavenidoalasseisylehabíapedidoquelepermitieradiferir hasta las ocho su entrada en funciones, pues todavía debía arreglar algunos asuntos.A lassiete,miviejamayordomahabíamarchado.AsípuessaquéprovechodeesteentreactoacompañandoaLipotineypodía contarquede aquí a algunosminutos, si la«señoraFromm» teníapalabra,mehallaríaprovistodeunnuevososténdoméstico.

Mortificado al constatar la falta de puntualidad de mi amigo Gärtner, decidí consolarmedesembalandoelregalodelruso,quetodavíateníabajoelbrazo.

Alaluzdeladespiadadabombillaeléctrica,elviejoespejonoperdíanadadesuperfectabelleza.Encuantoalcristalmismo,suprofundoverde,susreguerosdeópalo,leconferíanelencantodelagran antigüedad; y verdaderamente lucía más, en su marco, como una soñadora ágataimpecablementepulida—casi,enciertoslugares,comounagigantescaesmeralda—querecordabalasuperficieoscurecidadeunespejociego.

Extrañamenteseducidopor lapreciosabelleza, lacualporazarhabíarevestidounviejoespejooval, por el juego de las oxidaciones en la plata de su alinde, lo puse antemí yme abismé en elinsondablemisteriodesuprofundidadrecorridadereflejostornasolados.

Derepentemeparecióquenoestabaenmihabitación,sinoenlaestacióndelNorte,zarandeado

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porlamasadelosqueesperaban,enlabarrera,lallegadadelosviajerosdelrápido,enmediodelabaraúnda,eldoctorGärtnermesaludabaagitandosusombrero.Meabrícamino,nosinpena,parallegarhastamiamigoqueveníaamiencuentroriendo.Eltiempodeunabrirycerrardeojoscruzópormimenteestaidea:esextraordinarioquenolleveequipaje;hadebidodárseloalmozo,pensé,yolvidéinstantáneamenteeldetalle.

Nossaludamosefusivamente;apenassiesnecesario recordarquenonoshabíamosvistodesdehacedecenasdeaños.

Salidos de la estación, tomamos un coche y después de un corto trayecto, singularmentesilenciosoporunayotraparte,llegamosamicasa.Enseguida,enlaescalera,nospusimosahablardel pasado con animación y volubilidad, lo que me impide prestar atención a tantos detallesaccesorios:porejemploquiénhabíapagadoalcochero…Todoellociertamentesehabíaarregladoporsímismo,muydeprisa,yolvidadouninstantedespués.Luegomesorprendí,perofugitivamentey sin darle importancia, ya que creí notar enmi habitación algo que no era del todo habitual. Enprimerlugarmesorprendíalecharunaojeadaporlaventanayyanoverlacalledenuestraciudad,sinounvastopradoenelqueseperfilabanárbolesdesconocidos,yunhorizontetotalmenteinsólito.

¡Es curioso! pensé, sin insistir más —pues simultáneamente esa configuración se me hizofamiliar, normal,mientras quemi amigoGärtner desviabami atención por las preguntas vivas ycandentesquemehacía,obligándomearecordartalocualincidentedenuestravidadeestudiantes.

Cuandonoshubimos instaladoconfortablementeenmidespacho,me faltópocoparasaltardelsillóndealtorespaldo,emborradodeenormesalmohadones,enelquemehabíadejadocaeryqueciertamentenopertenecíanalmobiliariodelahabitación;porunladoestabaendesacuerdoconmiambiente familiar, y sin embargo, tenía la tranquilizadora impresión: ¡ya lo conocía! Esasobservaciones,esasreflexiones,esaspercepcionesmudasjugabanenmiespírituunjuegosingular;nodijeningunapalabraamiamigodeloquepasabaenmicorazón;apesardeello,afueratodosedesarrollabaconlamayornaturalidad,sinquenuestrodiálogoseinterrumpierauninstante.

Loscambiosquehabíanaparecidoamialrededornoafectabansóloalmobiliario, también lasventanas,laspuertas,lasparedes,teníanotroaspectoysuconstrucciónseimaginabamásespesa,suarquitectura más maciza que la que ofrecen nuestras casas modernas y en particular mi casa. Acambio, de lo que tenía una cotidiana necesidad no había sufrido ningún trastorno. Así la arañaeléctrica difundía la inmutable luz de sus seis lámparas sobre el conjunto de cosas que ahí seencontraban; la caja de puros, el cofre de cigarrillos, el té ruso humeante —que Lipotine meproporcionaba a un precio fabulosamente bajo— exhalando un vivificador aroma en la nube quedesarrollabasusvolutasporencimadenosotros.

FinalmentetuveporprimeravezlaclaraconcienciadedirigirmiatenciónamiamigoGärtner.Estabasentadodelantedemí,hundidoenunsillónsemejantealmío,teníaunpuroentrelosdedos,sonreía;duranteunapausadenuestrocoloquio—laprimera,mepareció,desdequenoshabíamosencontradoen la estación—bebió tranquilamente su té.El recuerdode todo loque sehabíadichohastaentoncesmeinvadiócomounamarea,yderepentetuveelsentimientodequeesaconversacióniba más lejos, tenía más importancia de lo que había creído en un principio. Habíamos habladomucho de nuestra juventud, de nuestros proyectos comunes, esbozos que no habían llegado a fin,vanasesperanzas,ocasionesperdidas, empresas abandonadas.De repentepesóen la atmósferaunatristeza queme hizo estremecer y considerar ami amigo como un extraño que se hallaba a grandistancia.Semeocurrióqueenestediálogosólosehablabademí.Para terminar, rápido,conuna

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precisióndeseada,lepregunté,desconfiadamente:—ExplícamequetehasucedidomientrashacíasdequímicoenChile.Conunmovimientodelcuello, segúnsumanerade siempre, levantó lacabezade la tazayme

miródelado,conunaexpresiónamigablementeinterrogativa:«¿Quésucede?¿Quétepreocupa?».Rechacé una timidez que se deslizaba enmi alma comouna nube empujada por el viento y le

descubrísinreticenciaslaturbaciónquemeagitabaenrealidaddesdehacíaalgunosminutos:«Queridoamigo,nopodríanegarlo:entrenosotrossucedealgocurioso—conseguridadnonos

hemos visto desde hace mucho tiempo—, algo que de pronto me ha golpeado. Creo encontrarmuchos rasgos en ti que existían antaño, creo por así decirlo reconocer esos rasgos en ti, y sinembargo,sinembargo,perdóname…¿EresverdaderamenteThéodoreGärtner?Yo…tengodetiunrecuerdodiferente:no,túnoereselThéodoreGärtnerqueconocíanteriormente;esto,esto,loveo,losientodistintamente…sinserme,apesardeello,menosfamiliar,menos…deberíadecir:menoscercano,menosatadoporlaamistad.

ThéodoreGärtnerseinclinótodavíaunpocomáshaciamíymedijoriendo:—¡Míramebienalacara,sinningúnrespetohumano,quizárecordarásquiensoy!Semehizounnudoenlagarganta.Peromedominéyexclaméconunarisaunpocoforzada:—Noteburlesdemísiteconfiesoquedesdetuentradaaquí,enmimorada—ydespuésdeechar

unamiradacasi temerosa alrededorde lahabitación— la atmósfera está impregnadadeunaciertaextrañeza.Paraprecisar,deberíadecirquelohabitual…lohabitualhasidosustituidoporloinsólito.Pero tú no puedes comprender naturalmente lo que quiero decir… Brevemente, tú también meparecesdeltodoconformeyalaveznodeltodoconformeamiviejoThéodoreGärtner,elgallardodeantaño.¡Naturalmente, túnotienesnadadecomúnconél,perdóname!Perotúnotienesnadadecomún tampoco con Théodore Gärtner el hombremaduro, con el químico Gärtner, con, si tú loquieres,elGärtnerprofesorenChile.

Miamigo,conungestopacífico,meinterrumpió:—¡Eneso,tienesperfectarazón,querido!ElGärtnerprofesorenChile,hacemucho,seahogóen

—miinterlocutorhizoconlamano,enunadirecciónquecreíinterpretarcorrectamente,unamplioyvagogesto—elOcéanoPacífico.

Sentíunapunzadaenelcorazón.¡Así,nomehabíaequivocado,pensé!Ydebíexaminarleconunojo comoquienmira una formavacía, pues estalló en carcajadas, sacudió la cabeza, visiblementedivertido,ymerespondió:

¡Dóndeestás,querido!Losfantasmas,creo,notienenporcostumbresatisfacerseconpurosyté,entreparéntesis,¡untéextraordinario!Pero—surostroysuvozretomaronlagravedaddeantes—ciertoquetuamigoGärtnerhamuerto.

—¿Y quién eres tú?—le pregunté amedia voz, peromuy calmado, puesto que la explicaciónaportadaalenigmademimalestarmehabíahechoelefectodeunabienaventurada liberación,unavezmás:¿quiénerestú?

Comoparamostrarmequeerabienrealyconcreto,el«Otro»tomóunpurodelacaja,locatóyoliócomplacientementeconcaradeconocedor,cortólapunta,encendióunacerilla,lavolvióentresusdedos,laacercóalextremodelpuroquesepusoaenrojecer,lanzólaprimerabocanadaconunavoluptuosidad de vividor tan natural que, si hubiese estadomás atormentado de lo que yo estaba,habría visto desvanecersemis últimas dudas sobre la realidad, digamos burguesa, demi huésped.

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Luegoseestiróensusillón,cruzólaspiernasyempezó:—HedichoqueThéodoreGärtnerestabamuerto.Bienpodríaspensarquesólohayenellouna

cuestión enfática, pero no inhabitual, de decir que se quiere, por algún motivo, romperdefinitivamente con su pasado para emprender una nueva vida. Supongamos que yo haya queridodeciresto.

Leinterrumpíconunaimpetuosidadquemesorprendióamímismo:—¡No,estonoesasí!¡Tuseríntimonohacambiadonuncaenlavida!¡Peroamisojoseresun

extraño,noeresThéodoreGärtner!¡Noereselbuscadordeotrasveces,apasionadoporlascienciasnaturales, enemigo jurado de todos los milagros, de todos los misterios! Que estaba presto adenunciar públicamente las supersticiones ociosas y las necedades sin esperanzas cuando uninterlocutor decía, ni que fuera una sola palabra, algo sobre la insondable vida de las cosas opretendíasostenerqueloinescrutableconstituíalaesenciadelanaturaleza.Perolamiradadequienestá sentado antemí se ata a la causa primera y ciertamente no la suelta. ¡Estamirada persigue lacausaprimeradelascosas,ylaspalabrasqueheoídotraicionantuamoralmisterio!Túnoloeres,noeresThéodoreGärtner,ysinembargoeresmiamigo,unmuyviejoamigo,aquiensimplementenosoycapazdellamarporsunombre.

—Si verdaderamente es eso lo que piensas, también me conviene, respondió mi huésped concalma.—Sumiradasehundióenlamíaconunaagudezaindescriptibleysentísubirenmílalentatorturadeunrecuerdoquetocabaaunlejanopasado,sumergidoenunprofundoolvido,delcualnohabría sabido decir si venía de un sueño de la noche pasada o si se integraba en el retorno a laconcienciadeunacadenadeeventosseculares.

SinembargoGärtnerproseguía,imperturbable:—Yaquetetomaslamolestiadevenirenmiayuda,apropósitodeesadudaquehayentiyquees

necesario esclarecer, puedo decirte categóricamente y pasando de largo las precauciones que deordinario se imponen, que somos viejos amigos. Es exacto. Solamente que el «doctor ThéodoreGärtner»,tuaquípresentecompañerodeestudios,tucompañeroenesosestudiososañosvueltostanpálidos,notienegrancosaqueverenello.Contododerechopodemosdecirqueélhamuerto.Conrazóntúconstatasqueyosoyotro.¿Quiénsoy?SoyGärtner.¿Hascambiadodeprofesión?

Éstafuelapreguntaidiotaquemevinoalamente,perosuperetenerlaatiempo.Élcontinuabasinquealparecerhubieranotadomiagitación:

—Miprofesióndejardineromehapuestoenrelaciónconlasrosas,conelcultivotransformadordelasrosas.Miarte,eselinjerto.Tuamigoeraunrenuevosano;túvesantetielarbustoinjertado.La salvaje sangre del renuevoyano lo es.El quemimadrepuso almundodesdehacemuchohanaufragadoenelocéanodelasmutaciones.Elrenuevo,elvestidoquemesirvedesoporte,debesunacimientoalamadredeotro,estudiabaquímicaysellamabaThéodoreGärtner;túlohasconocido,sualmatodavíanoadulta,hapasadoporlapruebadelatumba.

Unescalofríome recorrió.La serenapersonademihuésped respiraba tantoenigmacomosuspropósitos.Mislabios,comoporsímismos,formularonlapregunta:

—¿Yporquéestásahoraaquí?—Porqueeselmomento,—respondiómiinterlocutor,comosidijera:lacosacaeporsupropio

peso.Añadiósonriendo:—Meanunciodebuenaganacuandosetienenecesidaddemí.

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—¿Y,dije,sinpreocuparmedelencadenamientodemispalabrasconlassuyas,noeresyapuesniquímiconi…?

—Yo lo he sido siempre, incluso cuando tu amigo Théodore, pobre ignorante, miraba desdeabajo,condesdén,lossecretosdelArteReal.Soy,era,tanlejoscomomeremonteenmisrecuerdos,alquimista.

—¿Cómoesposible?¿Alquimista?—exclamé—,túqueanteriormente…—¿Yoqueanteriormente…?MeacordéentoncesqueThéodoreGärtnerestabamuerto.Peroelotroibaasuritmo:—Quizásrecuerdeshaberoídounavezquesiemprehahabidoimpostoresymaestros.Pensando

en los charlatanes y en los buscones de la edad media, te figuras la alquimia como un cesto decangrejos.Del irseporsucuenta, sinembargo,hasalido lacélebrequímicadenuestro tiempo,decuyas conquistas tu amigo Théodore se mostraba tan infantilmente orgulloso. Los bufones deloscurantismomedieval son desde entonces promovidos al rango de profesores de química ymuyestimados en nuestras universidades. Pero nosotros, los de la «Rosa de Oro», nunca nos hemosdedicadoadescomponerlamateriaporesemedio,aprorrogarlamuerte,amultiplicarlacodiciadeloro,esemalditoyugo.Seguimossiendoloqueéramos,artesanosdevidaeterna.

Una vezmásme sacudió, con una conmoción casi dolorosa, el contacto de un recuerdomuylejano,inalcanzable;peropornadadelmundohabríasidocapazdedecirporquéydedóndesurgía.Detuveunapreguntaymelimitéahacerconlacabezaunsignodeasentimiento.Mihuéspedlovio,unavezmáslaextrañasonrisailuminósurostro.Leoídecirme:

—¿Ytú?¿Quéhasidodetidurantetodoestetiempo?—unarápidamiradainspeccionómimesa—.Veoquetúeres…escribano.¡Ah!¡Sí!¿Transgredeselpreceptobíblico?Daslasperlasalpúblico.¿Hurgas en viejos documentos enmohecidos—cosa que siempre te ha gustado hacer— y piensasdivertir almundodeestaépocacon lasextravaganciasdeunextravagante siglopasado?Creoqueestemundoyestaépocanotienenmuchosentido,enelsentidodelavida.

Se calló y de nuevo sentí extenderse progresivamente sobre él y sobre mí el aliento de unaprofunda melancolía; reaccioné casi violentamente y quise sacudir esa pesadez hablando de mitrabajo en la herencia demi primo JohnRoger.Lohice con ardor, conuna creciente confianzayexperimenté una especie de bienestar al constatar la atención y la calma con que Gärtner meescuchaba.Amedidaqueprogresabamirelato,sereforzabalaimpresióndequeestabadispuestoaofrecermesuayuda,sideellateníanecesidad.Enverdad,suinterés,enprincipio,sóloeraexpresadoporlosocasionales«¡Ahsí!»salidosdesuboca;derepentepusosumiradaenmíymepreguntó,desopetón:

—¿Asíteparecequesemezclaatuoficiodecronista,atutrabajodereconstrucción,elpesodeunafatalidadqueteamenazaconprenderteenlareddelascosasmuertasdelpasado?

Arrastrado por un franco deseo de abrirle mi corazón le conté, empezando por el sueño deBaphomet, todo loquehabíavividoy soportadodesdehacíauna semana,desdequehabía tomadoposesióndellegadodeJohnRoger.Noleescondínada.

—¡Ojalánohubieravistonucaestasreliquias!—asíconcluímiconfesión—.Todavíasaborearíalapaz,ycongustohabríasacrificadoaestapaz—ruegoquemecreas—mivanidaddeautor.

Mihuéspedmeconsiderósonriendoatravésdelahumaredadesupuro;poruninstantetuvecasila impresióndeque su rostro empezaba a esfumarse, a desvanecerse enniebla antemisojos.Unarepentina angustia me puso el corazón en un puño, pensé que quería, por una razón u otra,

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abandonarme,yestepensamientomellenódeunterrortandolorosoquelevantéinvoluntariamentelamano.Élpareciónotarmigestoyleoíreír,diciendo,mientraslanubedehumosedisipaba:

—¡Graciaspor tufranqueza!¿Yaquerríashabertedesembarazadodemipresencia?Noolvides,no obstante, que no estaría aquí, cerca de ti, si tu primo JohnRoger hubiera guardado para él laherencia.

Yosalté:—¡Asípues,sabesmásdeJohnRoger!¡Sabescómohamuerto!—Cálmate,—fuelarespuesta—.Hamuertocomodebía.—¿HamuertoacausadeestamalditaherenciadeJohnDee?—Nodelamaneraquetúcrees.Ningunamaldiciónseataaella.—Este trabajo, este trabajo insensato, inútil, que ahora me cae encima, ¿por qué no lo ha

ejecutadoél?—¡Y tú lo has emprendido por tu gusto, amigo mío! ¡Eh! ¡«Persevera o quema», estaba bien

escritoycontodassusletras!…Todo,estehombresentadoantemíenelsillónlosabetodo.—Nohequemado,—dije.—¡Hashechobien!Habíaadivinadomipensamiento.—¿YporquéJohnRogernohaquemado?—preguntéenvozbaja.—Segúnparece,noeraelejecutordesignadodeltestamento.Meobstinéenmiterquedad:—¿Yporquénoloera?—Estámuerto.Meestremecí.Entreveíaahoralacausadeesamuerte:¡JohnRogerhabíaperecidoporculpade

IsaíslaNegra!El amigoGärtner apagó el puro en el cenicero e inclinó el busto encima demi escritorio. Su

mano se puso a jugar entre los papeles esparcidos o apilados, huroneó un poco en todas partes ysacó,comoporcasualidad,conungestoindiferente,unapáginaque,cosacuriosa,hastaentoncessemehabíaescapado;debíadehaberresbaladoentrelaprimerahojaylatapadelDiariodeDeeodealgúnotrovolumen.Meinclinéllenodeexcitación.

—¿Conoces esto?Todavía no, ¿no es verdad?—Me lo alargó después de haberlo examinado.Hicenoconlacabezayempecéaleer.IdentifiquélaescarpadaescriturademiprimoRoger:

¡Mispresentimientossehanrealizado!Desdequeheempezadoaocuparmedelalúgubreypolvorienta sucesión de mi ancestro John Dee, me siento esperado. Parece que no soy elprimero a quien «esto» sucede. Yo, John Gladhill, estoy implicado en la cadena que miantepasado ha forjado. Solamente por haberlo tocado, estoy verdaderamente atado a esascosas cargadas demaldición. ¡La herencia no estámuerta! «Ella» estaba ayer, por primeravez, cerca de mí. Es muy esbelta, muy bella, y sus vestidos exhalan, tenuemente, apenasperceptible,unolorsalvaje.Luego,misnerviossehantensadotantoquesupensamientomeobsesiona. Se hace llamar lady Sissy, ¡pero no puedo creer que sea su verdadero nombre!Pretendeserescocesayquieredemíunarmamisteriosa,unarmaqueyafigurabaenmiviejoblasóndelosDeedeGladhill.Yoleheaseguradoquenoposeoningunarmadeesegénero,y

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ella sencillamente se ha puesto a reír. Después, ya no he tenido una hora tranquila. Estoyobsesionadoporeldeseodeprocurara ladySissy (ocualquierotroqueseasunombre)elarmaquetantodesea,aunquedebacostarmelafelicidadylavida.¡Oh!¡Creosaberquienesenrealidad«LadySissy»!…

JOHNROGERGLADHILL

Lahojameresbalódelasmanosydandovueltascayóalsuelo.Miréamihuésped.Seencogiódehombros.

—¿ÉsteeselporquémiprimoRogerestámuerto?—pregunté.—Creo que se ha perdido al querer realizar la nueva tarea que la «Dama extranjera» le había

asignado, respondió aquél a quien yo no me atrevía ya a llamar Théodore Gärtner. Un oscurotorrentedepensamientossearrojósobremí:¿LadySissy?¿Quiénes?:LaprincesaChotokalouguine,¿quiénsino?¿Ylaprincesaes?IsaíslaNegra,¿quiénsino?¡LaIsaísdeBartlettGreen!Heaquí,hoyaldescubierto,eltrasmundodelimperiodelosdemoniosenelqueJohnDeeseextravió;ydespuésdeélesaalmaenpenaqueañadióenelDiariodeJohnDee la inscripcióndealguienqueaúlladeespanto;…ydespuésmiprimoRoger;…ydespuésdeél:Yo…¡quehesuplicadoaLipotineparaquehagatodoloimposibleparaqueyopuedasatisfacerelsingulardeseodelaprincesa!

Elamigosentadoantemíseirguiólentamenteensusillón.Surostromepareciómásluminoso,perosusiluetamásindecisaqueantes.Mientrashablabasuvozperdíaeltimbreespecíficodequienestáespacialmentepresente;murmuró:

—¡Tú eres el último depositario! Los rayos, emitidos por el verde espejo de lo que fue,convergentodoshacialacúspidedelacabeza.¡Conservaoquema!Peronomancilles.Laalquimiadelalmaestipulalametamorfosisolamuerte.Escogelibremente…

Uncrepitantetrueno,oquizásepodríahaberdichoungolpe,contodalaviolenciaposible,delaculatadeunfusilcontraunapuertadelespesordeunapulgada,mehizosobresaltar:estabasoloenmidespacho,sentadoanteelregalodeLipotine,elviejoespejoinglésqueinclusoyanoeraverde,ensumarco florentino; ya nada estaba modificado en mi decorado habitual, pero por segunda vezgolpearonalapuerta,ungolpemuytímido,quenorecordabaparanadaeltrueno.

Respondí:—«¡Entre!»;—lapuertaseabrióyunajovenmujer,medianamentetímida,sedetuvoenelvano

delapuerta.Sepresentó:—SoyFrauFromm.Me levanté confundido. Esta joven me plació de buenas a primeras. Le di la mano y miré

distraídamentemi reloj.FrauFrommdebió creer que este gesto, ademásdeunpocodescortés, serelacionabaconellayobservóconunadulcevoz:

—Heintentadopresentarmisexcusasestatarde;nopodíahacermecargodelservicioantesdelasochodelatarde.Esperohabermantenidomipalabra.

Enefecto.Mirelojmarcabalassieteycincuentaydos.Apenassihacíadiezminutosqueestabaencasa.

***

Todoestopasóayerpor la tarde tal como lohedescrito.Meparecequeprofundicémásen la

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indiscerniblerelaciónqueexiste,pocoimportacómo,entremispropiasexperienciasyeldestinodemiantepasadoJohnDee.Heaquíya,entremismanos,el«EspejoVerde»delquehablaensudiario.

¿Ydedóndemevieneesteespejoverde?Del trastero de Lipotine, queme lo ha ofrecido como un «homenaje, un presente de su viejo

país».¿Dequépaís?EldelzarrusoIvánelterrible.¡UnregalodelhijodeMascee,elmaestrodelzar!¿PeroquiéneraMascee?Nada más simple que consultar, con espíritu tranquilo y sangre fría, el diario de John Dee:

MasceeeraelmalgeniodelachusmainsurgentedelosRavensheads;quientransmitíalosmensajesylas órdenes nefastas del desalmado jefe, del violador de tumbas, del incendiarioBartlettGreen, elhijodeIsaís,eldestructor,elenemigohechodebronceinvulnerable,elsobornador,elhombredelabarbarojaylacasacadecueroqueyoviayerporprimeravezdetrásdemiescritorio.¡Asípuesestápresente, esteBartlettGreen, está ahí, el enemigode JohnDee, y desde ahorami enemigo! ¡Es élquiénsubrepticiamente,atravésdeLipotine,haencaminadoelespejoverdehastamismanos!

Perosabréguardarmedelasórdenesqueemite.SolamentequeesextraordinarioqueelprimeroensurgirhayasidomicamaradaThéodoreGärtner,venidosinembargo,comoamigoyconsejero,parasocorrerme.¿Debodudardeél?¿Porquétienenesteaspectotandesconcertantelascosas?

¡Oh!¡Quésoloyabandonadomeencuentroenestacrestadelaconciencia,enestaolaacerada,enla quememantengo y desde dondemimirada se sumerge, a ambos lados, en un abismo abierto,abismodelalocuraqueamenazaconengullirmealmenorpasoenfalso!Yasoypresadeunforzadodeseo de elucidar hasta el fondo el misterio de la herencia de Dee, para sustraerle ratificacionessiempremásnumerosasdemipropiodestino.Estapeligrosacuriosidad, lo siento,estáapuntodetransformarse en obsesión, demanera que ya no podré darmarcha atrás.Ya esmi destino.Ya notendréniunahoradepazhastalarealizacióndeesedestino;debomezclarelaguademividaenelcursodelviejolinaje,quesehadeslizado,diríamos,bajotierra,amiencuentro,quehasurgidobajomispiesyahoramereivindica…

Acontinuaciónhetomadomismedidas.Frau Fromm tiene la severa consigna de apartar ferozmente demí en los próximos días toda

molestia,todavisita.Noesperoamigos:unsolitariodemiespecienotiene.Encuantoalosotros…¿visitantes? ¡Oh! ¡Tengo la clara y aguda percepción que están todos agrupados ahí fuera en miumbral!Lesimpediréentrar.¡Diossealoado!Ahoraséloquéquierendemí.

He dado pues, minuciosas instrucciones al tiempo que una precisa descripción; ¡un señorLipotine, que tiene tal y cual señal, despedirlo! ¡Una dama que se anunciará bajo el nombre de«PrincesaChotokalouguine»,porejemplo…despedirla!

Detallecurioso:cuandohedescritoamitímidayespecialmentesonrojadamayordomalasiluetay lasmaneras de la princesa, la he visto ponerse a temblar, las ventanas de su bella nariz se hanestremecido,comosiyaolierarealmenteestavisita indeseable.Mehaasegurado,conuna inquietavivacidad,queseajustaríapuntoporpuntoamisdirectricesyquevelaríaconlamayorprontitud,lamayorprecisiónylamayorsagacidadparaquemieventualvisitantenollegueniamivestíbulo.

Sucelomehizolevantarlosojos,y,mientrasledabalasgraciasbrevemente,hemiradominuevagobernanta con un pocomás de interés y atención que antes.De tallamediana,más graciosa quefemenina,unaespeciedegravedadensusojosyensupersonaimpideencontrarleunairejuveniloinclusoinfantil.Sumiradaestáextrañamentegastada,velada,lejana.Sediríadeestamiradaquehuyeperpetuamentedelantede simisma,odelantedelUniversoque laenvuelve,yquehabitacontra su

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voluntad.Mientras me dedicaba a este examen, un confuso pensamiento cruzó mi mente: estaba solo,

desamparado;ayernocheestepensamientomehabíaagobiadodolorosamente,perosobretodoeraporque me sentía rodeado de seres y de influencias extrañas y maléficas, propulsadas por eldesencarnadoBartlettGreen.

Simplementedeteniendomipensamientoenélbastóparadarleunainquietanteproximidad.Asíformulémiperplejidad:¿éstaFrauFrommestambiénunadesusmáscaras?¿Seescondeun

fantasma en esta mujer, bajo las apariencias de una gobernanta, para deslizarse en mi vidaamenazada?

QuizásfijéenFrauFromm,siempreantemí,unamiradamáslargaymásescrutadoradeloqueeratolerableparasunaturalezainclinadaalrecogimiento,elcasoesqueunavivarojezpurpurósurostroy sin quepudiera impedirlo un temblor hizopresa en ella.Luegomemiró conun aire tanapuradoque tuvevergüenza, imaginando loquedebíapensardemí.Expulsémis locas ideasymeesforcé en disipar lo más rápido posible esa lamentable impresión pasándome la mano por loscabellos con una afectada distracción y pronunciando un par de frases fuera de lugar sobre lairregularidaddeltiempoylanecesidaddelrecogimiento;lerecomendéunavezmás,quesemostraracomprensivaymeevitaralasmolestiasdemalosencuentros.

Memiróbrevemente,yluego,conunavozsintimbre:—Sí,hevenidoparaeso.Esta respuesta me aturdió. Quise atar cabos. Con más vivacidad de la que hubiera querido le

preguntéamipesar:—¿Habéisaceptadointencionadamentelaplazademicasa?¿Sabéisalgodemí?Ellasacudiólacabeza.—No,nosénadadevos.Ytambiénesporcasualidadporloqueestoyaquí…Simplementesueño,

aveces…—¿Habéissoñado,aventuréyo,queencontrabaisesteempleo?Estascosassuceden.—No,noesesto.—¿Quéesentonces?—Tengolaordendeayudaros.—Sentímiedo:—¿Quéqueréisdecirconello?Memiróconunaspectotorturado:—Os ruegome perdonéis. Tengo propósitos absurdos. Sucede a veces que debo luchar contra

imágenes. Pero no tiene importancia. Debo cuidarme ahora de mi trabajo. Perdonadme, señor,haberosmolestado.

Sevolviórápidamenteysedirigióhacia lapuerta.Le tomélamano.Lapresiónquizáunpocorepentinademisdedosenvolviendolossuyosparecióespantarlamucho.Seestremeciócomobajolainfluenciadeunacorrienteeléctrica,luegopermanecióantemí,totalmentequieta,comoprivadadevoluntad, dejándome sumano; la expresión de su rostro semodificó extrañamente, sumirada seperdió de golpe en el vacío. No comprendí lo que pasaba, pero una extraordinaria sensaciónmepenetró:todoesto,hastaelmásmínimodetalle,yalohabíavividohace…¿hace?…Sinreflexionarenloquedecíaohacía,lacondujeconunaligerapresióndededoshastaunsillóncercademimesa.Siempreconsumanocogida,mevinieronaloslabios,demanerafortuita,estaspalabras:

—Todoshemosdelucharavecescontralasimágenes,FrauFromm.Decísquequeréisayudarme.

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Ayudémonospues,quizámutuamente.Fijaos,yo,porejemplo,luchodesdehacealgunosdíasconlaideadequeyo…yoseríapropiamentemiantepasado,unviejoinglésdequien…

Meinterrumpióconunpequeñogrito,memiró,clavósusojosenmí.—¿Qué os turba?—intervine. Sumirada que parecía atravesarmeme espantó un segundo;me

ardióinteriormentecomounallama.—TambiényofuiunavezaInglaterra.Estabacasadaconunviejoinglés…—¡Ah! ¡Sí!…—Mepuse a reír, sintiéndomealiviado,yno sabríadecir porqué;de repenteme

sorprendí,enmí,dequeestajovenmuchachayatuvieradosunionestrasdesí—¿es que antes de vuestro casamiento con el doctor Fromm ya os habíais casado una vez en

Inglaterra?Hizonoconlacabeza.—¿…obieneldoctorFrommera…?Perdonadmispreguntas,pero lo ignoro tododevuestra

vidapasada.Hizotodavíaunmuyvivogestonegativo:—EldoctorFrommhasidomuypocotiempomimarido.Fueunerror.Sumuertesiguiópoco

despuésdenuestraseparación.AdemáseldoctorFrommnoerainglésynuncahabíapuestolospiesenInglaterra.

—¿Yvuestroprimermarido?—El doctor Frommme tomó a los dieciocho años y habitaba conmis padres.Antes no había

estadocasada.—Nocomprendonada,queridaFrauFromm.—Tampocoyocomprendo,dijoella,conunaspectoatormentadoygirándosehaciamícomosi

buscaraayuda.Sólosédesde…desdeeldíaenquemeconvertíenlamujerdeldoctorFromm,queyo…pertenecíaaotro.

—A un viejo inglés, como decís. Bien. ¿Se trata de una relación de vuestra infancia? ¿De unencuentrodevuestraadolescencia?

Ellapronuncióun«sí»muycaluroso,perodeprontorecayóensuconfusión.—Nocomoloentendéis.Deotramanera.Congranesfuerzoseenderezóensusillón,me retiró sumanoque teníaapretadaen lamía,y

sentadaybienerguida, sepusoahablar,deprisa,conel tonomonótonoconquese recitan frasesaprendidasporelcorazón.Lasresumoenloesencial.

—Soylahijadeungranjeroestiriano.Hijaúnica.Hecrecidoencondicionesacomodadas.Luegomipadrehizomalosnegociosycaímosenlapobreza.Deniña,hehechomuchospequeñosviajes,peronuncamásalládelasfronterasaustríacas.AntesdecasarmefuiunasolavezaViena,mimayorviaje.

»Sinembargo,cuandoeraniña,amenudohesoñadoconunacasayunpaísquenuncahevistoenestadodevigilia.SiemprehesabidoqueeraunacasayunpaisajedeInglaterra.Dedóndetengoestacerteza o esta convicción, no lo sé. Sería normal atribuirlo todo a las divagaciones de unaimaginaciónpueril;diversasveceshedescritoelparajequehabíavistoensueñosaunodenuestroslejanos parientes que había realizado estancias en casa demi padre y de los amigos ingleses queteníamos,élmismoeramedioinglés,yasegurabacadavezquemisueñomemostrabaseguramentelasmontañasdeEscocia,ydetiempoentiempo,Richmond,yaqueesasregionesrespondíanmuydecercaamidescripción,sinnuncapresentarlosaspectosantiguosqueyopretendíaver.Tuveporotro

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ladounasingularconfirmación,siasísepuededecir.Otrodemissueñosinfantilesconcerníaaunaviejaytristeciudad;elsueñoeratanexacto,tanlimpio,queconeltiempomefueposiblepasearmeporlaciudadyconocermelascalles,lasplazasylascasasconlamayorseguridad;encontrabaalaprimera loquequeríasaber,demaneraque inclusonopodíadecirquesimplementehabíasoñado.Nuestroparientebritániconoconocíaestaciudadysosteníainclusoquenoexistíaenningunapartede Inglaterra, más bien debería ser alguna vieja ciudad del continente. Se extendía sobre las dosorillasdeunríodemedianaimportancia;unviejopuentedepiedra,flanqueadoenambosextremosportorresdedefensasobrelasoscuraspuertas,uníalasdospartesdelaciudad.Enunadesusorillas,donde se apretujaban las casas, se elevaba, entre verdes colinas, la gran y formidablemole de unfuerte castillo. Un día se me dijo: «Es Praga». Pero de los lugares que describía muchos ya noexistíanosehabíamodificado;sinembargo,loqueyoconocíatanbienseajustabaalatopografíadeun viejo plano.Hasta hoy nunca he ido aPraga y tengomiedo a esa ciudad. ¡Enmi vida quisieraponerlospiesenella!Cuandomipensamientosedetieneenella,unterrordesordenadomeinvadeyveoenespírituunhombrecuyoaspecto—noséporqué—mehielalasangreenlasvenas.Notieneorejas;selashancortado,ycicatricesderojasangrebordanloshoyosquetieneacadaladodelacabeza.Paramíescomoelmaldemoniodeestatemibleciudad.¡Estaciudad,tengolacerteza,seríamidesgraciaydestruiríamivida!

Estas últimas palabras de Frau Fromm reflejaban una repulsión tan viva que, espantado, lainterrumpí.Migesto ledevolvió la razón.Sus rasgossedistendieron,sepasó lamanopor lacaracomoparaborrarlavisión.

Enseguida,manifiestamentecalmada,continuó,confrasesdeshilvanadas:—Cuando quiero, también puedo encontrarme, en el estado de vigilia, en esta casa que existía

antes en Inglaterra. Puedo permanecer en ella horas y días si quiero; y cuanto más tiempopermanezcomáslascosasseesclarecen.Entoncesmeveo—¿esunaalucinación?—ahícasadaconun viejo señor. Cuando quiero puedo verlo de muy distintas maneras, sólo que todas mispercepcionesestánanegadasenunaluzverdosa.Comosimiraraenunviejoespejoverde…

Unavezmáslainterrumpíconungestobrusco.MimanotomóelmarcoflorentinodeLipotine,queseencontrabaenmimesa.PeroFrauFrommnopareciónotarlo.Prosiguió:

—Desdehacealgúntiempo,sientoqueunpeligroleamenaza.—¿Amenazaaquién?Surostrotomóesaexpresiónlejana;eneseinstantesehabríadichoalbordedelainconsciencia,

despuéslaangustiacambiósusrasgosymurmuró:—Mimarido.—¿Queréisdecir:eldoctorFromm?—lepreguntéexpresamente,acechandounareacción.—¡No!¡EldoctorFrommestámuerto!Hablodemiverdaderomarido.Elamodenuestracasaen

Inglaterra…—¿Todavíaviveahí?—No,vivióahíhacetiempo,muchotiempo.—¿Cuánto?—Nolosé.Muchotiempo.—¡FrauFromm!—Ellaexclamó:—¿Hedichonecedades?Sacudílacabezaincapazdearticularpalabra.

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Ellaañadiócomoparaexcusarse:—Cuando hablaba demis «estados»,mi padre llamaba a eso «decir necedades».No lo quería.

Juzgabaqueera«malsano».Luegotuvemiedodehablardeello.¡Ahora,desdeelprimerdía,estáisalcorrientedeloquemeconcierne!Sinduda,pensaréis:estamujerestáenfermaylohaescondido,haobtenidoestaplazaconengaño,y…¡ysinembargosientoqueestoydondedeboestar,quesoymuynecesariaaquí!

Se levantó febrilmente. Intenté calmarla sin resultado. Sólo pude tranquilizarla poco a pocoasegurándolequedeningunamaneralaconsiderabaenfermayquepodríaguardarsupuestocercademí todo el tiempo que durara la ausencia demi vieja gobernanta. Esto pareció tranquilizarla.Rióagradecidamente.

—Veréiscomomemostraréalaalturademitarea.¿Meespermitidovolveramitrabajo?—SólounapalabraFrauFromm:¿podéisdescribirme,aproximadamentealmenos,elaspectodel

viejoseñordelacasacercadeRichmond?¿Ysabéissunombre?Reflexionó.Suaspectotraicionabalasorpresa:—¿Su nombre? Lo ignoro. Nunca seme ha ocurrido que debiera tener un nombre particular.

Siemprelollamo«él».¿Yaquiénseparece?Separece…Osasemejamucho,señor.¡Muchohedesatisfacerantevos!

Saliórápidamentedelahabitación.EnesemomentonoteníaningunasganasderompermelacabezaenelnuevoenigmadeestaFrau

Fromm que me caía del cielo. No hay duda: es presa de lo que ha convenido en llamarse undesdoblamientodepersonalidad.Paraunmédico,sucasoseríabanal.Lodefiniríacomohisteriadepubertad. Representaciones oníricas fijadas. Alucinaciones dramatizadas. Intrusión de unapersonalidadextrañaenladelsujeto.Ensucasolapersonalidadextrañaseproyectaría,esevidente,enelsiglopasado.Todoellonotienenadadeextraordinario.

¿PeroRichmond?¿Ylasemejanzadelmaridovistoensueñosconmigo?…Losmédicosconocencasosanálogos. ¡Quées loque losmédicosnoconocen!Unenfermodeeste tiposeenganchaconpredilección a una persona de su alrededor que le inspira confianza. ¿Una persona de confianza?¿Soy efectivamente para ella una persona de confianza? lo soy seguramente, ¿no le he dicho:«Prestémonos ayuda mutuamente»? ¡Si solamente supiera que significa su frase: «Mucho he desatisfacer ante vos»! ¿Es ello un propósito de sonámbula histérica? Bien, esto prueba que heintroducidoenmihogarunapersonaquenosiempreestáensusanojuicio.Aunquemivozinteriormequieredecirtodolocontrario,peroyonolepermitohacerseoír,sinotodavíacorreríaelpeligrodeenredarmeode…perderme.Yloquehedehacerparaquemidestinotomeunsentido,nolosémuybien.Eldestinodelamayorpartedeloshombres«normales»noestámuylejos,seamosjustos,denotenerningúnsentido.

¡Pongámonos,pues,rápidoaltrabajo!

Tengoantemíunnuevopaquetemuybienatadoque,dócilalaordendemisueño,alaordendeBaphomet,hesacadodelcajónaciegas.

¿Quizáencontrarélallavedeestenuevoenigma?

***

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Ungranvolumenencuadernadoenpiel,bajomisojos,tieneportítulo:

Privatediary

Enlasegundapágina,delaescrituradeJohnDee:

Librodeabordodemiprimerviajehaciaeldescubrimientode laverídicayverdaderaGroenlandia,deltronoydelaeternacoronadeEngelland.

El20denoviembredelaño1582delnacimientodeNuestroSeñor.Desdeahoraestáperfectamenteclaro:misdudaseranlegítimas,fundadas,cuandosuponía

quelaGroenlandia,queyohabíapensadosometeralpoderíoterrestredelareinaElizabeth,sehallabafueradelplaneta.

Ese empedernido granuja, ese impostor de Bartlett Green, desde el primer día de lasrelaciones que, víctima de engañosas ilusiones, me he atado con los Ravensheads, me hatenido en sumano de lamaneramás infame;me ha embaucado con los subterfugiosmásdiabólicos,paraextraviarmefuerademicamino.Alamayorpartedeloshombressobrelatierra, lessucedequesonagobiadosportormentosdebidoaquenodisciernenquedebeserexhumado«másallá»ynoaquí.¡Nohancomprendidolamaldicióndelacaída!Nosabenqueelpasarporlatumbadelatierranodebesermásqueunaetapahaciauneventoenel«másallá».Sugiriéndomebuscarenlatierralosfrutosdemiambición,paraimpedirmedescubrirque la corona está «en el otro lado», Bartlett Green me asignó una vía de corrupciónespiritual.Y esta vía debía de estar sembrada de esfuerzos, de decepciones, de tristezas, deperfidiasquemehanencanecidoantesdetiempoymehanasqueadodelavida.

Tanextremopeligronosóloamenazólasalvacióndemialma,sinoqueBartletttambiénquisocerrarelpasoalavocacióndemilinaje,demirazaparaganarestacimaque,desdelafaltaoriginal,estáreservadaatodopecadorquevuelveasupadre.Suconsejodebuscarlavíaaquíabajo, tomandoel senderodelpoderyde la realeza terrestre, eraabsolutamente falso.HoyséconcertezaquedebobuscarmiGroenlandia,mifeudoymidiadema«alotrolado»,dondelaintactacoronadelsecretoyla«Reinavirgen»esperanasurey.

Hoy por tercera vez, he tenido, al alba, en la plena posesión de mis facultades, una«visión»quenotienenadadecomúnconunsueñoninadaqueseleparezca.Ignorabaantesqueexistieraunmododepercepciónquesesituaramásalládelavigiliaodelensueño,delprofundo sueño o de la obsesión, un quinto modo, el de lo indefinible: una aparición enimágenesdesucesosquenoconcerníanparanadaalatierra.EraabsolutamentediferentedeloqueanteriormentemehabíamostradoenlatorreelcristaldecarbóndeBartlettGreen.Era,hastadondeyopuedojuzgarlo,unaprofecíamediantesímbolos.

Viunacolinaverduzcaque identifiquéconGladhill, lacolinadenuestracasasolariega,altivayrisueña,comoenlafiguradelblasóndelosDee.Laespadadeplatanoestabaensucima.Comoenotrocampodelblasón,elárbolverdedominabasudulcependienteydeentresus raíces surgíaunmanantialquedabavidaaunalegrecurso.El espectáculome llenódegozoymeanimó,cruzandovaporosaslejanías,allegaraesacolinaparacalmarmisedenlaantiguafuentedemi raza.Losorprendenteesque losentía todo,absolutamente todo,comorealyalegóricoalmismotiempo.

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Mientrasquesubíalacolinareconocíderepente,conunaardorosaclaridadinterior,queyoeraeseárbolqueladominaba;quemimédulaespinalhabitabasutronco,porelcualyoqueríaescalarelcielo;queportodassusramasyramitas,queerancomomishilosnerviososymisvasos sanguíneos tornadosvisibles,meesparcíaen laatmósfera.Ysentía la savia, elflujo de la sangre y del gozo, palpitar ante mí en este árbol de venas y de nervios, y laconciencia de ser yo en él me llenaba de orgullo. Pero la fuente de plata bajo mis piesreflejabaparamílaindefinidasucesióndemishijos,comosisurgiesendelfuturoparaasistira la fiesta,próximae inclusoyaefectiva,deunaresurrecciónpara lavidaeterna.Cadaunotenía supropio rostro,pero todos semeparecían;yoera,mepareció,quienhabíadadoelselloanuestraraza,ante loquerespondídeellosparasiempredelantedelamuerteydeladestrucción.Estoencendióenmíunorgullosagrado.Luegomeacerquéalárbolydepronto,ensucimaenformadecorona,viunrostrodoble;unoparecíamasculino,elotrofemenino,ambascabezassoldadasunaaotrahaciendosólouna.Ysobreesacabezamellizaplaneaba,envueltaconunaluzdeoro,unacoronarematadaporuncristaldeunfulgorindescriptible.

ReconocírápidamenteenelrostrofemeninoeldemisoberanaElizabethyestuveapuntodegritardealegría,peroundolorinesperado,desgarradormeloimpidió.Bruscamente,vi,percibíqueelrostromasculinonoeraelmío,sinoeldeunhombremásjovencuyosrasgosrespiraban una frescura que los míos, desde mi cándida juventud de escolar, ya no habíatenido.Enmi tristeza, intentéanimarme, comosi estehijodel árbol fuerayomismo, enelpasadoperdidodelosañosdeinfancia,perobienprontohubedeconstatarquemeengañabaamímismo.Sinningunaduda,noeraamíaquiencorrespondíaestadoblecabeza,sinoaunomáslejano,unoquesaldrámástardedelmanantialamispies,unoinaccesibleparamíenestetiempodemivida.¡Otro!

Unrabiosodolormeabatiópensandoqueotrodemisangreydemiraza,otro,ynoyo,untardíodescendientehabíadeserelherederodelacoronayconsumarlauniónindisolubleconmiElizabeth.Enmicólerayaflicciónlevantélamanocontramí—yo,elárbol—comosifueraaabatirlo.Yheaquíquedesdelaprofundidaddemimédula,elárbolhabló:

«¡Insensato, ya no te conoces ni a ti mismo! ¿Qué es el tiempo? ¿Qué es el cambio?Aunqueseadespuésdeunsiglo,yosoy.¡Despuésdelacentésimatumba,yosoy!¡Despuésdelacentésimaresurrección!¿Quieresponerlamanoencimadelárboldelquetúnoeresmásqueunarama,deigualmodoquesóloeresunagotadeaguasalidadelafuentequefluyeatuspies?».

Entonces, trastornado,miré la corona del árbol de losDee, y vi que a su vez el ser dedoble cabezamovía los labios y oí, desde una altura y una distancia infinitas, un gritomellegóabajo,congranesfuerzo:

«¡Un hombre que persevera en su fe vivirá finalmente! ¡Crece hasta mí y seré tuyo!¡Realízateyvivirásdemivida,enmíelBaphomet!».

Caí de rodillas al pie del árbol, abracé el tronco con veneración y tales sollozos mesacudieronqueunacortinadellorosmeocultólaVisión;yanovimásquelalámparademihabitación y las primeras luces del alba que se filtraban entre las rendijas de los postigos.Luegooíaúnlavozdelárbol,comosiemanaradelfondodemí:

«¿Quieresllegaraserinmortal?¿Sabesqueestavíademetamorfosisexigemuchopasoporelfuegoyporelagua?Esnecesarioquelamateriaaguantemuchosufrimiento».

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Tresvecesya,envisiónmatinal,mehansidomostradoselsímboloyelsentido,ylavía.La vía para acceder al «yo» que triunfa sobre el tiempo y de la tumba es doble. Una esprecaria,aventurada,llenademigajasquelospájarosdelcielohabránquizáspicoteadoantesdemi retorno. Sin embargo, yo la tomaré, pues puede, si la fortuname sonríe, ayudarmepoderosamentearecordarme.¿Yquéeslainmortalidadsinounamemoria?

Asípues,optoporlavíamágicadelaescritura;consignarélaevolucióndemidestinoylas revelaciones que me llegarán referente a ello en este diario que he, cumpliendo ritosbenéficosyseguros,vueltoinvulnerablealosultrajesdeltiempoydelosespíritusmalignos.Amén.

Perotú,ellejano,túquevienesdespuésdemí,túqueleerásestelibroalfindelosdíasdelárbol: cuenta el tiempo que ha transcurrido desde que existes; considera que naciste de lafuentedeplata,queriegaelárbolyqueelárbolpare.Suembriaguezhabitaentuscostados;en tu carne se esfuerza el empujede sus ramas. ¡Así yo te conjuro, yo JohnDee, baróndeGladhill,mírate,despréndetedelasepulturadeltiempoyreconocequetúeresyo!…

Hayotravía,queesmideberemprenderduranteeltiempodemividacorporalymientrasestoy enMortlake, la de la Alquimia, por la que es posible obtener desde este tiempo, lainmortalidaddelcuerpoydelalma.

Noesdehoyquelaconozco,yaquemisinvestigacionesdurandesdehacecasitresaños;ytengograndesrazonesparaatribuirlagraciadeestavisiónmatinalreiteradatresvecesamiperseveranteesfuerzoydelacualseríaelresultadosensiblealmismotiempoqueelfrutoylarecompensa.Hacedosañoscaptéunfulgorquemehizoentreverlarealidaddelaalquimia;desdeentonces,Navidaddel1579,arregléaquíenMontlake,unlaboratorioprovistodetodolonecesario,tambiénhicevenirdeShrewsburyunasistentecapaz,queluegosehareveladocomoelcolaboradormásleal,íntegroydiligenteentodo,yalgototalmenteinesperado,muyversado en el arte secreto, rico en las más vastas y sorprendentes experiencias. Se llamaMasterGardener.Haencontradoelcaminodemicorazón,esunamigoquemerecetodamiconfianza,quetomafielmenteentodosmisintereses,niuninstantesudiligenciaysusbuenosconsejosmefaltan,debodecirloformalmenteaquí,expresándoleelagradecimientoqueleesdebido.Noobstante,muyamipesar,hevistoenestosúltimostiemposmultiplicarseenéllossíntomas de un orgullo y de una obstinación que no explican su alto saber y también laconfianzaque lehe testimoniado, demaneraqueha tomadoel hábitode contradecirme,dedarmesusopinionessinhabersidoinvitadoaello,deimponermeamonestacionesquenomeplacen. Espero que esto le pasará pronto, y que volverá a unamejor evaluación de lo quedebe, si no a su maestro benefactor, al menos a quien le da de comer el pan. Nuestrodesacuerdonosólosehallaenlaprácticayelmétodopertinentedelartealquímico,tambiéncreequedebeoponerseamicomercioconlosespíritusfavorablesdelotromundo,este«otrolado» con el que me ha sido dado congeniar desde hace algún tiempo de manera tanextraordinaria.Nosepuedetratar,comoéllopretende,deunaastuciadelinfiernonideunamistificacióndelosgeniosdelatierraydelaire,porlaclararazóndequesiempreempiezoytermino las ceremonias de evocación del mundo sobrenatural con una piadosa y fervienteoraciónaDiosyaJesucristo redentorde todacriatura.Lasvocesy losespíritusquesemerevelanenestascircunstanciasmanifiestanademásun tangran temordeDios, relacionandoinnegablementelatotalidaddesusactosydesudiscursoalnombredelaSantísimaTrinidad,

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que no puedo ni quiero creer a Gardener que los trata de diablos disfrazados. Tanto máscuandolasenseñanzasdadasporellossobrelamaneradeprepararlapiedradelossabiosylasaldevidavanencontradelosqueéldiceconocer.Creoque,creyendosaberlotodo,sehaheridoensuvanidad.Eslopropiodelainteligenciahumana:porbienintencionadoquesea,nopuedosoportarpormás tiemposercontradichoporél.Quierocreerquemiasistenteseequivocaesencialmentecuandoafirmaquesóloesinvulnerablealaperfidiasinlímitedeloshabitantesdelotromundoquienhapasadoportodaslasetapasdelmisteriosotrabajointerior,premonitoriodelrenacimientoenespíritu,asaber:elbautismomísticodelagua,delasangreydelfuego,laaparicióndeletrassobrelapiel,elgustodesalenlalengua,laaudicióndelcantodelgallo,yotrosfenómenosaún,comoeldeoírensucarnelosllorosdeunniño.Noquieredecircómohayquecomprenderlo,aseguraqueunvotoloataalsilencio.

Lociertoesquealterminarporpreguntarmesinoeraeljuguetedelasfuerzasdiabólicas,ayer,enausenciademiasistenteGardener,yhabiendodebidamenteevocadolosespíritusennombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, los he conminado a decirme si teníanconocimiento de un ciertoBartlettGreen y si era, aunque sólo fuera un poco, digno de suamistadydesucompañía.Primeroheoídoenelaireelsilbardeunaextraordinariarisaquemehadesconcertado,luegomehaparecidoquelosespíritusexpresabancongranestrépitosudisgustopormidescaro.Extrañasvocesmetálicassalíandelasparedesydelembaldosado,yme intimaban a evitar en lo sucesivo toda relación con ese emisario de Isaís laNegra.Unpoco más tarde, en presencia de mis viejos amigos, Harry Price y Edmond Talbot, losespíritus,paraprobarsuomnisciencia,hanreveladounsecretodelquesoyelúnicoposeedorydelquehastaahoraheexcluidoinclusoamimujerJane.Degolpe,misdudasreferentesaloshabitantesdelotromundosehandesvanecido,hanañadidoquepararomperel lazoquemeatabaaBartlettGreen,debíadeshacermeparasiempredelagemadecarbónqueenotrotiempomehabíadadoenlatorre.MehanprescritoenelnombredeDiosapartardemíestapiedra,oestecristal,y,ensignodearrepentimiento,restituirlaalfuegoconmipropiamano.

AsíheconseguidolamayorvictoriasobreGardener,quesehaquedadomudocuandoleherepetidolasórdenesquemehabíandadolosespíritus.Enmiinterioryapensabasepararmedeél.MefaltabarompercontodoloquepodíarecordarmeBartlettGreenoatarmeaél.Estamañanahesacadoelcarbóndesucajita,ybajolosojosdemiasistente,lohequemadoenelbraserodelhornoalquímico.

Ynohequedadopoco sorprendidoalver alpulidocarbón llamear claramente conunallama verde, sin desprender humo ni dejar la menor escoria o ceniza. Gardener asistía alespectáculosinpestañear,conelrostroimpasible.

Un día y una noche han pasado. Esta noche se me ha aparecido el rostro burlón ygesticulador de Bartlett Green: la mueca, pienso, quería esconder la cólera que debeexperimentar desde que he tirado al fuego su espejo de carbón. Después se ha disuelto enhumo verde que hamodificado los rasgos de su rostro hasta el punto que he creído verletomarotro,diferente,elrostrodeunhombredesconocido,conloscabellostanenganchadosalasmejillasquecasihetenidolaimpresiónquenoteníaorejas.Peroellodebeserproductodemi imaginación.Despuésdequehevueltoaverensueños,unavezmás,elárbolde losGladhill, he oído su voz que decía: «Activa ahora lo mejor que puedas el proceso de lasalvación,apresurando lamateria, lacocciónde lacualpermiteobtenerelelixirde lavida

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eterna».Quedéangustiado,casitristehastaelmomentodedespenar,yrepentinamentesentílanecesidaddepedirconsejoaGardener,desabersiporcasualidadcreíaqueunadesgraciameamenazaba. Dudé bien poco en volverme hacia el hombre del que implícitamente habíaresueltosepararme;noobstante,mipavorganóamiorgullo,loquenollegoacomprender.Medirigíhaciaellaboratorio.PeroenlugardeGardener,sóloencontréunacartaenlaque,en términos corteses pero secos, me notificaba su marcha para largo tiempo, si no para«siempre».

Cualnofuemiestupefaccióncuando,hacialasdiezdelamañanaentróenmihabitación,anunciadopormicriado,unextranjeroque,comovialinstante,teníalasorejascortadas.Lascicatricesalrededorde losconductosauditivosmostrabanqueesamutilaciónera recienteyprobablementecastigodeundelitocontralasleyesdelEstado.Séquedesgraciadamentemuyamenudoenestepaís, soncondenados inocentesaestaespeciedecastigos,porelloestabaresuelto a no hacer suposiciones contra este desconocido. Por otra parte sus rasgos nopresentabanningúnparecidoconeldelpersonajeconelcualhabíasoñadopor lanoche.Elextranjeroeramásgrandequeyo,demayorestaturaymásmaciza,loquedenotabaunorigenparticularmentedistinguido.Eradifícilevaluarsuedad,pueslargoscabellosyunaabundantebarba puntiaguda y muy desordenada escondían su rostro, casi desprovisto de mentón, defrentehuidiza,denarizprominente.Sinembargoparecíabastantejovenynolehacíamuchomásde treintaaños.Luegomeconfióquesólo teníaveintiocho. ¡Porconsiguiente,eramásjovenquemimujerJaneFromont!EstehombrepretendíanadamenosquehaberrecorridoyaInglaterraalolargoyaloancho,sincontarFrancia,losPaísesBajos,yrealizadotodotipode viajes. Su aspecto respondía a sus palabras: era el de un aventurero, y a juzgar por lasarrugasquemarcabansusrasgos,duramentetratadoporlasuerte.

Seacercóamíymedijoenvozbajaqueteníacosasimportantesqueconfiarme,quedeninguna manera soportaría ser molestado, por ello debía cerrar la puerta con llave desdedentro.Unavezlapuertabiencerrada,conmuchosmiramientos,sacódeunbolsilloocultodesuvestimenta interiorunviejo libroencuadernadoenpieldecerdo,escritoenpergaminoeiluminado conmucho cuidado. Lo abrió y memostró cierto pasaje. Antes de que hubierapodido leer la antigua y embrollada escritura, me preguntó con una temblorosa voz, unaextraña luminosidad en la mirada de sus penetrantes ojos de ratón, «si podía decirle,explicarlequeerauna“proyección”».Sólotenía,medicuentaporello,unaideaaproximadade la transmutación alquímica de los metales. Le respondí que poseía esta ciencia, por lodemás puramente química, y le expliqué el proceso de la proyección según las reglastradicionales.Escuchómuy atentamente y pareció encantado.Luegome puso el libro en lamano, inmediatamente constaté su valor casi inestimable, era un método para obtener lapiedra de los sabios y usarla en la verdadera preparación alquímica del cuerpo y en lafabricacióndelelixirdelainmortalidadenestemundoyenelotro.Quedéaturdido,incapazdeproferirunapalabra,incapaztambiéndedominarlasemocionesquedebíantraslucirenmirostro el espectáculo del febril arrebato, pues no dejé de observar cómo el extranjero nohabíadejadodemirarmefijamenteymiagitaciónnoselepudoescapar.Ademásnopensabaocultarleloquesea,cerréellibro:

—Unbuenlibro,ledije.¿Quéutilidadlepensáisdar?—Obtener el elixir y la piedra siguiendo el método indicado, —me respondió,

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esforzándoseenretenerelmiedoylacodiciaquerelucíaensusojos.—Paraelloesnecesarioqueprimeroalguienleaellibroylocomprenda,—lehicenotar.—¿Podéisvos,yqueréisdarvuestrapalabradegentilhombreyjurarsobreelcuerpoyla

sangredeCristo?Lerespondíque loharíacongusto;peronoeraseguro,añadí,que laoperación tuviera

éxito, ya que existían muchos libros conteniendo métodos análogos, que tratan de lapreparación del polvo alquímico blanco y rojo, y cuyas vanas recetas no habían hechoavanzareltrabajoniunpaso.

Ante estas palabras, la figura de mi visitante se alteró y casi se convulsionó bajo losefectosdelosantagónicossentimientosquesedesencadenabanensualma;ladesconfianzayel triunfo, la oscura duda y la suficiencia del orgullo se sucedían en su fisonomía con larapidez de un incontrolable torbellino mental. Bruscamente abriéndose la camisa sacó unsaquitodecueroquelecolgabadelcuello.Hurgóenél,metendióelbrazoy¡viensumanolasdosbolasdemarfildeMascee!Lasreconocínadamásverlasporquellevabanlossignosque yo había grabado sobre ellas antes de tirarlas por la ventana cuando los esbirros delobispoBonnerhabíanvenidoaarrestarmeparaencerrarmeenlatorredeLondres.Estavezconseguídominarmejormispensamientosymis sentimientosypreguntéalextranjeroconunadisimuladaindiferencia,porquésedabaesosairesmisteriososparaenseñarmelasbolasyparaquéservían.Sinunapalabradesenroscó labolablancaymemostró,enel interior,unpolvogranulosoygrisáceo.Mesobresalté,yaqueelcoloryelaspectomehabíanrecordadoen seguida la a menudo descritamateria transmutationis de los iniciados alquimistas. Micabezaerauntorbellinodetumultuosospensamientos.¿Cómopodíaserqueenladramáticanocheantesdemiarrestonohubieradescubiertoel secreto,quesaltabaamivista,deestasbolastansimplementeenroscadas?¿Cómopodíaserquehubierajugadohorasconellasyqueenlugardeabrirlas,hubiesegrabadotanpenosamenteunossignosenladurasuperficiedelmarfil,paraluegotirarlasporlaventanaenunaccesodeoscuroespanto?Quizáhacetreintaañoselsecretodelavidayahabíacaídoenmismanos,yyo,comounniño,habíatomadolapiedrapreciosaporunguijarro,rechazandoestúpidamenteeldondelcielo.¡Acambio,debíasoportar una vida de trabajo y de los más amargos desencantos a causa del malentendidosobre«Groenlandia»!

Como absorto en esas oscuras cogitaciones que mi visitante podía creer salidas de ladesconfianzayde laduda,clavé lamiradaen loshemisferiosde labolaabierta.Abrióconcircunspecciónlabolademarfilrojoyenlacavidadviresplandecerelpolvoreal,¡el«LeónRojo»!Nodudéunsolo instante,nopodíaequivocarme.Había leídomuyamenudo,en losmejores escritos de los antiguos iniciados, las descripciones de estas laminillas púrpuras,esquistosas, para engañarme sobre lanaturalezade la sustancia.Yel desencadenamientodemisimpetuosospensamientosamenazabaconengullirmedesdetodoslados.

Consentíconunsignomudo,mientrasqueelextranjero,convozronca,mepreguntaba:—¿Quépensáis,MaestroDee?Reunítodaslasfuerzasdemivoluntadtodavíadisponiblesyrespondíconlapregunta:—¿Dedóndevienenestasdosbolas?—Elextranjerodudó.Luegodijo,perplejo:—Primeroquierosabervuestraopiniónsobreellibroylasbolas.Yorespondí:

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—Dejandoclarodeentradaquesedebeexperimentarsuvalor.Siunoyotrasmantienensuspromesas,hayunnobletesoro.

Mivisitantegruñóalgoquequeríaparecerunaexpresióndealegría,luego:—Mefelicitoporvuestrafranqueza.Quierodecirquepuedofiarmedevos.Nosoisuno

de esos magos negros siempre al acecho de una nueva estafa para sustraer dinero a suprójimo. También es verdad que he venido a vos porque os tengo por un caballero y unhombredehonor.Aconsejadme,ayudadme,ycompartiréconvos.

Lerespondíqueteníarazónalfiarsedemí,quelaexperiencia,enmiopinión,merecíaserprobadaconellibroylasustanciacontenidaenlasdosbolas.Cuandohubimosestablecidolostérminosconvenidosparaun trabajoencomúnyunamutuaconfianza, levolvíapreguntarcómohabíanllegadolasdosbolasasuposesión.

Mecontólaextraordinariahistoriaquesigue:Ellibro,asícomolasbolas,provenían,decíasaberlodeunafuentesegura,delatumbade

sanDunstan.Cuando,hacemásdetreintaaños,labandadelosRavensheadsmandadaporuntalBartlettGreen,dedesgraciada fama,habíaviolado la tumba, el cuerpodelobispohabíasido encontrado intacto, como si hubiera sido enterrado la vigilia. Tenía entre sus manosjuntasellibro,ylasbolasestabanfijadas,unaensubocayotraensufrente.Losexpoliadoresherejes, amargamente decepcionados por no haber encontrado ningún tesoro cerca deldifunto,comoBartlettseimaginaba,habían,ensucólera, tiradoelcadáverdelobispoenelbraserodela iglesia.Encuantoalasbolasyal libro,comonosabíanquéhacer, lashabíanvendidoporunvilprecioaunruso.

—¡Ah!¡Ah!¡ElfamosoMascee!—pensé,ymuyinteresado,inquirí:—¿Yvos?¿Cómollegaronavuestraposesiónestosobjetos?—Un hombre de edad, antiguo agente secreto deBonner, elObispo Sangrientomuerto

locoyahacemuchosaños,teníaenLondresunaturbiacasadondeyohacíamisnecesidades,precisómihuéspedconuncínicoreír,fueelúltimoposeedorantesqueyo.Loshabíavistoensucasaybienprontodecidíquemepertenecerían,yaquedesdehacía tiemposabíaquesanDunstanerauneminenteadepto,expertoenalquimia.Tuvesuertedeencontrarelmomentojusto de obtenerlas, ya que esa misma noche el agente secreto fue… digamos que muriósúbitamente,corrigiórápidoelextranjero.Supedeunamuchachaquehabitabaestemallugaren que el viejo alcahuete, hacemucho, había recibido del Bonner sangriento lamisión debuscarellibroylasbolas.Lashabíadescubierto,perohabíadisimuladoparasuprovechosuhallazgo. Las bolas, a continuación, habrían desaparecido de una manera inexplicable, yhabríanvuelto,enellímitedeuntiempomuylejanoasusitio,bienmisteriosamente.

«¡Extraordinario!» pensé paramí; todavíame veía, en el recuerdo, a punto de tirar lasbolasporlaventana,antesdemiarresto.

«¿Yselashabéiscompradoalagentesecretoantesdesumuerte?—Insistí.—¡N…no!—Elextranjero sedoblegóantemimiradaydesvió la suya,pero rápidose

repusoydeclaró,másfuertedeloqueeranecesario—Melashadado.Tuvelaclarasensacióndequementíaynoestabalejosderechazarelnegocioconcluido

entrenosotros.¿Quizáhabíaasesinadoalviejoalcahueteparaapoderarsedel libroyde lasbolas?Mequedémuyperplejo,flotando,puesmicuriosavisiónnocturnadeunhombresin

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orejas,meparecióderepentecargadadeadvertencias.Peroprontometranquilicépensandoquemissuposicionesestabandesprovistasdefundamento;elextranjerohabíaalomásrobadoambosobjetosaalguien,queademás,seloshabíaprocuradodeshonestamente.Porotraparte,latentacióndeguardarmiparteenlapropiedaddeestospreciososobjetoseratangrandequenopuderesolvermeamostrarsimplementelapuertaamihuéspedcomoquizáhabríadebidohacerencalidaddegentilhombreydesabio.Alcontrario,mepersuadíqueundestinoquisoporelcieloconduciraestehombrebajomitecho,parahacermeparticipardelagraciadelapiedra de la inmortalidad. También me dije: incluso mis propias vías en mi juventud nosiemprehan sido sin reproche,no tengopuesahoraelderechodeerigirmeen juezdeestecompañero que se encuentra ante mí. Decidí, después de una breve deliberación, noescondermeamidestino,y,sobreponiéndomeamisreticencias,deseéalextranjero,quemedeclaró llamarse Edward Kelley, la bienvenida a mi casa; le tendí la mano y le prometíexaminar lealmente estos objetos que eran suyos, y experimentar su autenticidad y valor.Pequeño notario en Londres, Kelleyme contó que bien pronto se convirtió en boticario ycuranderoambulante,yporhaber falsificadodocumentos,eldirectorde laprisión lehabíacondenadoaquelecortaranlasorejasenpúblico.

¡Diosquieraquesuentradaenmicasaseaunpresagiodebendición!Leheconcedidohospitalidadcompleta,apesarde lasadvertenciasdemiqueridamujer

Jane,quedesdeelprimermomentohaexperimentadounaviolentaantipatíaporestehombredelasorejascortadas.

Algunosdíasdespuéshehechoconélenmi laboratorio laprimeraexperienciacon losdos polvos, los resultados han superado largamente nuestras expectativas: con unamódicaproyección, hemos obtenido de veinte onzas de plomo, casi diez de plata; con la mismacantidaddeestañonomuchomenosdediezonzasdeoropuro.LosojosderatóndeKelleycentelleabanfebrilmenteyyomeespantéviendohastaquépuntolacodiciapuedetransformara un hombre. Le dije que debíamos ser ahorradores del prodigioso polvo, pues el «LeónRojo»habíadisminuidomuchoensubola.SiaKelleyselehubieradejadohacer, lohabríatransformadotodoenoro.

Mepuseeldeber formalysagrado—loque lenotifiquécrudamente—denoutilizar lamenorpizcadelpreciosopolvoparaenriquecermeenelsentidoterrestre,sinodeceñirmealestudioexhaustivodesanDunstanparaarrancarleelsecretodelapiedradelosSabios.Unavezinstruidoenlasmodalidadesdelusodelatinturarojaenlaproyeccióndeuncuerpoderesurrección incorruptible, ya no me serviría a otros fines. De lo que la nariz del dichoEdwardKelleynodudóenalejarsediscretamente.

En realidadnohabía llegadoa liberarmedeesta ideaqueme roía:estos tesoroshabíansidomaladquiridos,ysobretodo,metorturabaelpensamientodeunamaldiciónocultaquequizápesabasobreestosobjetossustraídosalasepulturadeunadepto,ymáscuandoyonopodíaconcedermeelveredictode«noculpable»,despuésdehabersidoelinstigador—entrebastidores— de esta profanación perpetrada antaño por los Ravensheads. Al menos queríaatarme por un voto a no utilizar esta ganga más que para los fines más nobles. Una vezdescubiertoelsecretodelatransmutaciónalquímica,Kelleypodríairsetranquilamentedemilado y podría alegrarse el corazón vertiendo el «León Rojo» sobre los metales viles, yobteneroroymásoro,paramalgastarloconlasprostitutasenlascasasclandestinasyserrico

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comoelreyMidas.Ciertamenteyonoleenvidiarésusuerte,aspiraré,mediantelainestimablepiedra, a otrameta, y reservaré elmás pequeño átomo de polvo para destilar el principioinmortalyprolongarmiexistenciahastaeldíadelas«bodasquímicas»conmireina,enqueel realmente percibiré enmí alBaphomet, en el que sentiré sobremi cabeza el peso de lacoronadevida.¡Este«León»enlosucesivodebeconducirmeamiReina!

Hechocurioso,mi fielasistenteGardenermefaltacadadíaunpocomásdesdequeestevagabundohapuestoelpieenmicasaysesientaenmimesamañanaytarde,comiendocongranestrépitoyeructandocomouncerdo.¡MihonestoGardener!Mehubieragustadotantopedirlesuopiniónsobreeste intruso.¿Quiénsabesiafindecuentasnoesunemisario,sinsaberlo yo, del execrable Bartlett Green? ¡Si el don que me cae en suerte de la tumbaprofanadadelsantosevolverácontramícomountalismánmaléfico!¿SuprimerportadornoeraelinquietanteMascee,elinseparabledeBartlettGreen,estemisteriosoYendoyViniendodeldestino?

Apesardetodo,losescrúpulosseesfumanjuntoconlosdíasquehevistocorrerlargosymelancólicos.Desdeahoraveo losproblemasconuna luzmuchomásserena:niMasceeniKelley son losmensajerosdeBartlett, son,másbien los ciegos instrumentosde labenignaProvidencia que, a pesar de los embustes y las trampas delMaligno, deben de ayudarme acomprendermisalvación.

¡Si no, debería creerse posible que los dones de un santo se hallen en lasmanos de unréprobo! ¿A semejantes donespuede estar atadauna calamidad? ¿Lamaldicióndel piadosoobispoenelMásAllá,puedecaersobremí,sobreelpostulantehumildeycelosodelsecretodivino,yelservidorconsagradoalasvoluntadescelestes?No:yaheexpiadolasfaltasdeunajuventudpresuntuosa,yahepagado,yahesidocastigadoenmicarnepormisextravagancias.Hoy,yanosoymáselindignodestinatariodelospresentesdelMásAllácomoeracuandoel«Maestro del Zar» me ofreció por primera vez estas bolas misteriosas, que sirvieron dejugueteamismanosantesdeser tiradaspor laventana,paraquelasreconozcatreintaañosdespuésyacepteelotorgamientoendisposicionesmásseriasymásadecuadas.

ElfielGardenerciertamenteteníarazóncuandomeponíaenguardiacontraunaalquimiaquetuvieraporobjetolatransmutacióndelosmetalesdelatierra.Estaalquimianovasinlasusurpacionesdeloshabitantesdeunmundoinvisibleytenebroso—magianegra,magia«dela mano izquierda», decía— lo que efectivamente creo, ¡pero qué me importa! ¡No meinteresoenestejuego,nocorrodetrásdeloro,sinodetrásdelavidaeterna!

Que los espíritus esténmezclados ennuestros asuntos, no loniego,desde el día enqueKelleyhaentradoenmi casa, los signosextraordinarios e indefiniblesde supresencia sonperceptibles: golpes repetidos, que se paran en seco si se pica en la madera con compás,fuertes chasquidos y crepitaciones en las paredes y en los armarios, en las mesas y otrosmuebles, también un vaivén de paso demensajeros invisibles, de suspiros y demurmullosprecipitadosquecesancuandoselesprestaatención,sobretodohacialasdosdelanoche,yamenudoacompañadasderesonanciasqueseprolongan,sediríaqueeselvientoquepasaatravés de cuerdas tensadas. Amenudo, en medio de la noche he alzado la cabeza, y en elnombredeDiosydelaSantísimaTrinidad,heconjuradoaesascriaturasinvisiblesahablaryahacersaberloqueturbabaelreposodesutumba,amenosquenoseanenviadasenactodeservicio, encargadas de una misión del Más Allá, pero hasta ahora no he podido obtener

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ningunarespuesta.KelleysostienequeestosfenómenosestánligadosallibroyalasbolasdesanDunstan.Losespíritus,dice,intentanprotegerlapartedelsecretoquetodavíaignoramos,peroquebienprontoselesescapará.Mehaconfiadoquevocesyruidosleacompañandesdequeestáenposesióndeestosobjetos.

Este discursome espantó un poco, ya que volvía a suponer que el viejo agente secretoconvertido en alcahuete podíamuy bien haber sido asesinado por su causa. Igualmentemevinieron a la memoria las palabras de Gardener: era vano y peligroso librarse a laelaboraciónquímicadelapiedradelainmortalidad,siprimeronosehabíallegadohastaelfindelamisteriosavíadelrenacimientoenespíritu,alaque,entérminosvelados,laBibliahacealusión.Primerodebíaprofundizarestavíaycaminar;sinó,caeríadeunaaotrafosa,deunacalamidadaotra,comosituvieraporguíaunfuegofatuo.

Paratranquilizarme,hicellamaraKelleyylepedíquemeconfirmara,porlasalvacióndesualma,loquerecientementemehabíacontado:queunángelverde—nounsecuazdeldiablo—selehabíaaparecidoylehabíaprometidodescubrirnoselsecretodelapreparacióndelapiedra.Kelleyme juró, levantando lamano, que todo era verdad, absolutamente verdad.Elángel,dice,lehabíahechosaberquehabíallegadoeltiempoenqueyodebíaseriniciadoyadmitidoalconocimientodelsecretosupremo.

Kelleymeconfióluegolospreparativosquesedebíanhacerparapermitiralángelverde,siguiendolasleyesdelmundoinvisible,manifestarseanuestrossentidos.Ademásdeél,yo,ysobre todomimujerJane,quedebíasentarseal ladodeKelley,habíadeconvocaradosdemisamigos,paraunahoradadadeunanochedelunamenguanteenunahabitaciónquetengaunaventanaaloeste.

Asípues,enviérápidamenteunmensajeroamisdosviejosyprobadosamigos,TalbotyPrice, rogándoles que vinieran a mi casa para proceder a la evocación de los espíritus.Siguiendo las instrucciones deKelley que fijó la fecha, podía tener lugar, y tuvo lugar dehecho,alasdosdelanochedel21denoviembre,fiestadelaPresentacióndelaVirgenMaría.

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LAEVOCACIÓNDELÁNGELDELAVENTANADEOCCIDENTE

¡OhnochedelapresentacióndeMaría!¡Quéhuellaimborrablehasimpresoeneldiariodemialma!Ahoraseextiendendetrásdemíahogadas,olvidadas,comosinuncalashubieravivido,laslargaseinterminables horas de espera y de esperanza.He tenido parte de lasmaravillas, de las increíblesmaravillas del reino del Más Allá. Todavía no he vuelto de mi estupor, del pasmo que me haprovocadolaomnipotenciadelángeltresvecesbendito,tresvecesglorioso.DelfondodelcorazónhehechoenmiendaalhonorableKelleyporhaberpensadomaldeél,porhabervistolapajaensuojoynolavigaenelmío.EsuninstrumentodelaProvidencia,ahoralosé,yestaideametrastorna.

Los días queprecedieron a esta noche fuerondías de tortura.Unavez y otra debí enviar amigente aLondres para estimular a los artesanos a quienKelley había encomendado lamesa, y quedebían ejecutarla según sus instrucciones y alrededor de la cual debíamos sentarnos cinco: Jane,Talbot,Price, él yyo, para evocar al ángel.Debía estar hechade sándaloprecioso, de laurel ydeGreenhart, en forma de una estrella de cinco puntas. En medio debía disponerse una cavidaddibujando un pentágono regular, incrustando en las aristas signos cabalísticos, sellos y nombresesculpidosenmalaquitaytopaciooscuro.¡Cómomeavergüenzoenmiinteriorcuandorecuerdoalhombremezquino, lamentable,queera,preocupadopor las sumasquedevoraría la fabricacióndeestamesa!¡Hoymearrancaríalosojosyconellosadornaríalamesaaguisadepiedraspreciosassihicierafalta!

Larespuesta,cuandoloscriadosvolvíandeLondres,siempreera:¡mañana,pasadomañana!Lamesanuncaestabaapunto.Sehubierapodidodecirquelabrujeríasemezclaba,eltrabajoseatrasaba.Sincausasvisibleslosebanistascaíanrepentinamenteenfermosunotrasotro,einclusotresfueronsorprendidospor lamuerteenpleno trabajo,yunamuerte inexplicable,comosiel fantasmade lapesteloshubieraempestado.

Sindescansohemedidolashabitacionesycontadolosminutoshastaesadesagradablemañanadenoviembre,hastaeldíadelaPresentacióndeMaría.

PriceyTalbotdormíanapiernasuelta,sumergidosenunpesadosueñosinsueños.TambiénJanefuededifícildespertar,temblabadeunfríointerior,comosiunafiebrehubierahechopresaenelladurante su sueño. Sólo mis ojos no se habían querido cerrar. El calor, un calor insoportable mequemabalasvenas.

Yaantes,una inquietanteagitaciónsehabíaapoderadodeKelley.Comounanimaldespavoridoevitabaa todoelmundo; levi, alrededordel crepúsculo, errarenelparquey sobresaltarse, comosorprendido en el curso de una acción secreta, cuando unos pasos se acercaban. Todo el díapermaneció sentado en uno de los bancos de piedrameditando, aquí como allá, siempre con aireausente, o bien hablando fuerte e incluso chillando en una lengua desconocida, dirigiéndose a unauditorioqueparecíaveren laatmósferavacía.Cuando,porbrevesmomentos, salíade su trance,preguntabadeprisasiyatodoestabadispuesto;yolerespondíadesesperadamentequeno,entoncesseponíaaagobiarmeconreprochesqueinterrumpíaderepenteparareemprendersumonólogo.

Finalmentepocodespuésdelmediodía—enmiimpacienciaycomoconsecuenciademilargay

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ansiosaespera,nohabíapodidotragarniunbocado—vialolejosperfilarseenunaondulacióndelpaisaje, viniendo hacia nosotros, los carros del artesano londinense. En algunas horas lamesa sehabíavueltoamontar,pueshabíasidoimposible,vistassusdimensiones,hacerlapasarenteraporlaspuertas.Ocupaba su sitio en la habitación alta del castillo especialmente arreglada para ello. Tresventanasquemirabanaleste,alsuryalnorte,habíansidotapiadassegúnlasinstruccionesdeKelley,sólopermanecíaabiertalaventanadeloeste,asusbuenossesentapiesdelsuelo.Enlosmurosdelasala había hecho poner los manoseados retratos de mis antepasados, a los cuales añadí el dellegendarioHoelDhat,conlosrasgosquelehabíadadoungranmaestrodesconocido.Perosehubodequitardeahí,puesalverloKelleytuvounaccesodefuror.

En las hornacinas de lamuralla se habían puestomis altos candelabros de plata, provistos degrandesciriosenprevisióndelainminenteysolemneevocación.Comounactorqueseaprendesupapel, yo me había paseado a lo largo y a lo ancho del parque para clavarme en la cabeza lasfórmulas y las palabrasmágicas,misteriosas e incomprensibles, que se debían pronunciar para lallamadaalángel.Kelleymelashabíadadounamañana;estabantrazadasenuntrozodepergaminopor una mano a la que le faltaba el pulgar, que saliendo del aire le había, decía, dado.InvoluntariamentemipensamientovolvióalespantosoBartlettGreenmordiendosupulgarhastaelhuesoyescupiendoalacaradelobispoBonnerenlatorre.Elfríodelespantomeatenazó,peromedominé:¿nohabíaquemadoelcarbón,regalodelbandidoyrotoasímirelaciónconél?…

Despuésdeunlargoesfuerzo,laspalabrasdelaevocaciónterminaronporpasarmealasangre,hasta el punto que se formaban automáticamente en mis labios cuando abría la boca parapronunciarlas.

Todos,loscinco,estábamossentadossilenciosamenteenlagransala.Escuché,coneloídotensoyvigilantehastaeldolor,cómotocabaneltercercuartoantesdelasdosenelrelojdelaparroquia.Entoncessubimosalatorre.LamesadecincopuntasresplandeciócuandoKelley,titubeandocomounhombreborracho,encendióloscirios,unodespuésdeotro,conuntizón.Nossentamossegúnelorden prescrito en las cátedras de alto respaldo. Las dos puntas inferiores del Pentágono estabanorientadashaciaOccidente,esdecirhacialaventanaabiertapordondepenetrabaelairefríodeunaclaranochede luna.EnesaspuntasestabasentadosJaneyKelley.Yo tenía laespaldaaleste,ymimiradavagabundeabaalolejosenlascolinascubiertasdeárbolesyahogadasenunadurazonadesombra donde se extendían, con una blancura lechosa, las carreteras y los caminos. Amis ladosestabanPriceyTalbot,mudosytemblorososporlaespera.Losciriosvacilabanconstantementeenlahabitación,alsondelascorrientesdeaire,comositambiénhubiesenperdidosucalma.Laluna,quebrillabaenelcielo,estabaocultaamisojos;suimplacableluzgolpeabasolamentedearribaaabajolasblancaspiedrasdeldescansillodelaventana,bañándolasconsufulgorlíquido.Antemí,elcentrodemesapentagonalahuecadoenlamesa,seentreabría,evocandoeltenebrosoorificiodeunpozo…

Permanecimosinmóviles,comomuertos,ycadaunooyópalpitarsucorazón.Kelleyde repenteparecióhundirse enunprofundo sueño,pues su aliento, acompañadodeuna

especiede estertor, se hizoperceptible.Unos temblores cruzaron su cara, peroquizá sólo fueunaapariencia, debido a los danzantes reflejos de los cirios encendidos. Yo no sabía cuando debíacomenzarlaevocación,esperabaunaordendelabocadeKelley,yestaordennollegaba.Intentabapronunciarlasfórmulas,perocadavezmeparecíaquededosinvisiblesseposabanenmislabios…«¿Y si todo esto sólo era imaginación deKelley?»me preguntaba presa de la duda; entonces, derepente,mibocasepusoahablarsolaypronunciabalafórmularitualconunavoztanatronadoray

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cavernosaquemeparecióperteneceraunsertotalmenteextrañoamí.Repentinamente un frío de muerte se aposentó en la habitación, las llamas de los cirios se

inmovilizaron,golpeadasporunalientofúnebre.Sufulgornoeraelmismo:permanecíanderechaspero sin difundir claridad. Se las habría podido desprender de los cirios, me viene la idea dearrancarlas como espigas maduras… Los retratos de los antepasados de las paredes se habíantransformadoenabismosnegros,dandoaccesomásalláde lasmurallasa tenebrososantros,ymesentí, al ver desvanecerse esas imágenes, como separado de los seres que me habían queridoproteger.

Enestesilenciodenecrópolis,resonóunaclaravozinfantil:«MellamoMadiniysoyunapobreniña.Soylapenúltimadeloshijosdemimadreytodavíahay

unbebéencasa».Almismotiempoviflotarfuera,alairelibre,justodelantedelaventana,lasiluetadeunabonita

niñadesieteanueveaños;suscabellos,rizadosenlafrente,eranmuylargos,llevabaunvestidoconcola cuya seda se llenabade reflejos rojosyverdes, recordando las caras talladasde la piedradealexandrita,verdeduranteeldíayrojosangreporlanoche.Pormásencantadoraqueaprimeravistaparecieralaniña,dabaunahorribleimpresión.Flotabayoscilabadelantedelaventanacomounaverapaz,rígidaylisa,ysuscontornoscarecíandeprofundidadespacial;losrasgosdelacaraparecíanpintadosconunpincel:unfantasmaconsólodosdimensiones.«¿Eséstalaprometidaaparicióndelángel?»mepreguntaba,mientrasqueunaoscurayamargadecepción,quenoconsolabadeningunamanera la incomprensible y singular proyección de esta criatura, penetró en mí. En ese instante,Talbotseinclinóenmiorejaymurmuró,sofocado:

«Es mi hija pequeña, creo reconocerla.Murió casi inmediatamente después de su nacimiento.¿Losmuertoscrecendespuésdelóbito?».

Tan poco dolor y emoción había en la voz de mi amigo que le sentí presa de mi mismosentimientodehorror.¿Estefantochedelairenoeramásqueunaimagen,hundidaenlosplieguesdesuser,quesuconcienciahabríaobjetivadodealgunamanerayvueltovisible?Ésafuelaideaquemevinoalamente,perobienprontolaabandonéyaqueelfantasma,deungolpe,habíasidocubiertoporelfulgordeunverderojizoquerepentinamentesubiódelcentrodelamesa.Enunabrirycerrardeojos,comoungéisersurgiendodelsuelohastaunaalturaimpresionantefluyóunaformaqueteníaformadehombre sinnadadehumano.Se solidificóenunamasaesmeralda, transparente comoelberilio.Sesentíalaimplacabledurezadelmineral,unadurezamásevidente,másperceptibleparaelsentidointeriorqueladurezadecualquiermaterialterrestre.Losbrazosdestacarondelbloque,luegolacabezayelcuello.¡Ylasmanos!¡Lasmanos!Teníanalgoquenopodríadefinir.Duranteunlargomomento me fue imposible desviar la mirada, hasta que lentamente, muy lentamente, hecomprendido:elpulgardelamanoderechaestabaenelexterior,eraelpulgardelamanoizquierda.Nosédecirporquéestaconstataciónmeespantó,¿porquémehaespantado?Elserquesealzabaantemí, gigantesco, debidoa este aparentemente insignificantedetalle, tomabaun carácter extrañoque lo alejaba de toda especie de humanidad mucho más que su aspecto tan extraordinario einconcebible…La aparición, lamirada fija, sin un pestañeo, inmóvilmás allá de toda expresión.Algo de terrible, de paralizante, de asesino y sin embargo indeciblemente trastornante y sublimeemanabadeesamirada.Teníafríohastaen loshuesos.NopodíaveraJane,quedabaocultaporelángel,peroTalbotyPriceparecíancadáveres,tanpálidosysinvidaestabansusrostros.

Loslabiosdelángel,deunrojorubí,levantaronligeramentelascomisuras,conunasonrisaque

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noeradeestemundo.Asícomoelaspectobidimensionaldelaniñamehabíaparecidoimpensable,tambiénmetambaleabadevértigobajolaimpresióndevolumencorporal,muchomásconcretoquetodoloquesepresentaalosojoshumanos,dadoporesainmensafigura.¡Niunasombrasobresusropasparasugerirelrelieveyponerlaenunaperspectiva!¡Yapesardeello,acausadeelloquizá,meparecíasólohabervistosuperficiesenmividaterrestreynocuerpos,comparadoalaprestanciadeunpersonajedelmundotrascendente!

YanosésisurgiódemíodePricelapregunta:—¿Quiéneres?—Sinabrirloslabios,elángeldijo,conunavozfríaycortantequerepercutióen

ecoenmipecho:—SoyelmensajerodelaPuertadeOccidente.Talbotquisohacerunapregunta,sólopudobalbucear.Priceselevantó,queríainterrogar,también

él,sólopudobalbucear.Reunítodasmisenergías,quiselevantarmimiradaalacaradelángel,perodebíbajar losojos, sentí quemoriría sime forzaba a continuar.Con la cabezagacha, lepreguntétartamudeando:

—¡Tú,todopoderoso,túsabesaloqueaspiramialma!DameelsecretodelaPiedra.Alpreciodemicorazón,alpreciodemisangre,lametamorfosisdelhombreanimalenunRey,enunResucitado,enun Inmortal,aquíyenelmásallá…Estoes loquequiero. ¡Quierocomprenderel librodesanDunstanysusecreto!¡Hazdemíloque…deboser!

Transcurrióunlargotiempo,quesentícomounaeternidad.Unpesadosueñoqueríadoblegarme,peroresistícontodalafuerzademideseo.Entonces,entodalahabitación,comositodaslasparedesymuroslaspronunciasen,resonaronestaspalabras:

—¡HashechobiendebuscarenelOeste,enelreinoverde!Ellomeplace.¡PiensodartelaPiedra!—¿Cuándo?—grité,ardiendodeungozosalvaje,inexpresable.—¡Pasadomañana!—fuelarespuesta.—¡Pasadomañana!—exultaba—.¡Pasadomañana!—¿Sabesasíquiéneres?—preguntóelÁngel.—¿Yo?¡Yo…soyJohnDee!—¿Así, túeres…JohnDee?—repitió laaparición.Lavozdelángeleracortante,máscortante

quealprincipio.Tuvelasensaciónque…nomeatrevoapensarlo…comosi…no,noquieroquemiboca lodiga, tanto tiempocomo tengapoder sobreella;noquieroquemipluma loescriba, tantotiempocomopuedaimpedirlo.

—TúeressirJohnDee,elposeedordelhierrodelanzadeHoelDhat,¡ah!¡Teconozcobien!—Chanceóunapenetranteymaliciosavoz,quereconocícomoladelaniña-espectro,ahíafuera.

—¡Quientieneelhierrodelanzaeselvencedor!—Estaspalabrassalierondelabocadelángelverde—. Quien tiene el hierro de lanza es el predestinado, el elegido. A él están sometidos losguardianesde lascuatropuertas.SiguesiempreaKelley, tuhermano,élesmi instrumentoenestatierra,élteesasignadoporguía,élteharáfranquearlosabismosdelorgullo.Debesobedecerleenloque te diga y requiera de ti. ¡Lo que reclame elmás humilde de entre losmíos, dáselo! Entoncespuedoestarcercadeti,entiyalrededordetihastaelfindelostiempos.

—¡Te lo juro, ángel bendito! —grité, traspasado hasta la médula y temblando en todos mismiembros—.¡Levantolamanoparajurarlo,aunquedebadescenderalosabismos!

Descender…alosabismos,contestaronlosmuroseneco.Unsilenciodemuerteplaneó.Meparecióquemi juramentohabíacruzadoelespaciocósmico.

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Losciriossepusieronallamear,susllamasseinclinaronhorizontalmente,comoempujadasporunviento.

Unfríoqueembotómisdedosfluyódelángelhaciamí.Pregunté,loslabioscasicongelados:—¿Ohtú,bienaventurado,cuándovolveréaverte?¿Cómopuedovertecuandoestéslejosdemí?—Siemprepuedesvermeenelcristaldecarbón.¡Peronopuedohablarteporesemedio!—Lo he quemado, farfullé, yme arrepentí de haber destruido el cristal visionario, delante de

Gardener,mimalditoasistente,enmiviltemordeBartlettGreen.—¿Quieresquetelodevuelva…?JohnDee…HerederodeHoelDhat.—¡Dámelo,ohPoderoso,ohTú…!—leimploré.—¡Juntalasmanospararezar!Rezarsignifica:recibir,cuando…seha…¡aprendidoarezar!—Lo tengo, me dije loco de alegría. Junté los dedos. Un objeto se deslizó entre mis palmas,

separóunayotra…Abrílasmanos,tenía…¡elcarbón…!—¡Túlohasquemado!¡Asíperdiósuantiguavida!Apartirdeahoravivedetuvida,JohnDee;

¡acabaderenaceryresucitardelosmuertos!¡Lascosasasínopuedenmorir!¡Quedésobrecogidoanteeseobjeto,enelcolmodelaadmiración!¡Quésingularessonlasvías

delmundoinvisible!¡Elmismodevoradorfuegodelatierranoescapazdeaniquilar…!—Yo…te loagradezco…oh tú…¡te loagradezco!—farfullé.Laemociónme impedíahablar.

Laslágrimasahogabanmivoz.Luegolamareadelapasiónsubióamislabios:—¿Ylapiedra?¿Esqué…también…?«Pa… sadoma…ña…na…» apenas oí en unmurmullo, pues el ángel se había disuelto en un

soploligero.Laniñadedelantedelaventanahabíatomadoparamisojosladiafanidaddeunaimagenvistaa

travésdeunvidrioglauco.Sebalanceabaenelaire,inanimada,simpletrozodevelodeseda,luegoelpaisajelaabsorbió,hundidaenlosverdososmaticesdeunaespeciedenieblaqueseconfundíaconlosalrededores.

AsífuemiprimerencuentroconelÁngeldelaventanadeOccidente.¿Quécambiodesuertepodíaahoratorturarmeyagobiarme,amí,alprivilegiadoconunagracia

semejante?¡BenditaseaestanochedelaPresentacióndeMaría!

***

Mucho tiempo hemos permanecido sentados juntos, cambiando impresiones referentes alprodigiosoevento.Yotengoelmayortesorodelmundo,tengoelcarbóndeBartlett…no,no:tengoenmimanoelcarbóndelángel,quemeharecordadosincesarquehesidohonradoconunmilagro.Micorazónestáapuntodeestallarcuandopiensoenlapromesadelángel:¡pasadomañana!

***

Kelleyhaestadosumidoenunaprofundaensoñación,hasta lahoraenque lapurpúreaaurora,pudieradecirse sangrandopormilheridas, sehuboextendidoenel cielo.Luegoseha retiradoensilencio,arrastrandolospies,comounviejocansado,sinnitansiquieraecharnosunamirada.

¡Quéfalsoeseladagiopopular:«Guárdatedelosqueestánmarcados»!,constatabaalseguirconlosojosalhombredelasorejascortadas.ÉlesuninstrumentodelaProvidencia,y…yolehe,aél,ami hermano, tenido por un… ¡malhechor…! ¡Quiero ser humilde!—decidí—. ¡Humilde para ser

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dignodela…Piedra!Janemehahechoconocerhoyundetallesingular:elángel,queyocreíaledabalaespalda,pero,

paramigranestupor,ellatambiénlohabíavistocomoyo,conelrostroconstantementegiradohaciaella.Loquelehabíadicholohabíaoídoexactamentecomoyo.Priceseperdióenconjeturassobrelamanera cómohabía podido realizarse lamaravillosa restitucióndel carbón, cuáles eran sus leyes,escondidasanuestroconocimiento,yquélohabíanhechoposible.Destacóquelascosaseranmuydiferentesdeloquenuestrossentidos,trabadosenlavidacotidiana,nospermitíansuponer;quizánoexistía ningún objeto, sino tan sólo torbellinos de una fuerza desconocida. ¡No lo comprendí!Micorazóndesbordaba.

Talbotapenashablaba.¡Quizápensabaensuhijamuerta!

***

Hanpasadomesesymeses;losprotocolosqueredactodelassesionesdeevocaciónpocoapocohan llenado gruesos volúmenes. Al considerarlos, el desespero hace presa en mí. Esperanzas…esperanzas, fuego corrosivo de la espera de largos e interminables días. ¡Y sin embargo, no haycerteza,nohayrealización!¿Volveráacomenzarelviejosuplicio?¿Elcálizquesedebevaciarhastalaúltimagota?¿Meveréundíaobligadoaclamar:Diosmío,Diosmío,porquémehasabandonado?Sea,¿perotengoelderechoaesperar,después,queganaréelcuerpoderesurrección?

LaspromesasdeltemibleÁngelverdedelaventanadeOccidentenohancesado,¡perotampocoladudaqueroecomolacarcomalamadera!Encadasesiónquetengo,cuandollegalaépocadelalunamenguante,nochetrasnoche,tantoconmisamigoscomosóloconJaneyKelleyserepitenlasmiríficas promesas que dejan las incalculables riquezas y, sobre todo, el conocimiento y lautilizaciónsecretadelaPiedra,enunaperspectivasiempremáscercanaymássegura.Cuandolalunacrece,cuentolashorasylosminutoshastaeltiempoenquepodemosreemprendernuestrassesiones.Nadapuedeexpresarelhorrordeestaesperaquedesgasta,querobatodalaenergía.Eltiemposemeconvierte en un vampiro que absorbe la fuerza vital de mi sangre. El loco pensamiento de unosespantososseresinvisiblesqueengordanamisexpensassehundeenmicarne;envanolacombatorecitandooracionesenvozalta.Renuevomivotodenocodiciar jamásdinero,ysimultáneamente,meagarroalaardienteesperanzadeobtenerloconlargueza,yaqueenelactualestadodecosas,veodía a día fundirse lo que poseo como un trozo de hielo al sol. Se diría que el destino quieremostrarmequesoyincapazdepermanecerfielamivoto,queestaréobligado,sí,obligadoafaltarle.¿ElDiosTodopoderosohadadolicenciaaldiabloparahacerdemíunperjuro?OesteDios,enquiencreemosloshombres,enquienponemosnuestraesperanza,noseráélmismo…un…¡No,lejosdemíesepensamiento!¡Noloformularé,noloescribiré:miscabellosseponendepunta!

Y,desesiónensesión,lasevocacionessucedenalasevocaciones.Yoacumulopenasygastos,ynomedejodetenerporningunaconsideración,ni lade la saludyotrosdeberes,ni lade labuenafama y la fortuna; continuo evocando al benéfico, alÁngel insaciable, al infatigable conductor, aimplorarle,aponerasuspiesmisesperanzasylasangredemicorazón.Ellibrodemisprotocolosmehaceelefectodeunoráculoburlón,cuando,enlasnochesdeinsomnio,locompulsounayotravezconmisconsumidosojosbuscando las faltasquehepodidocometer,haciendo loposibleparaadivinar qué condiciones habré de cumplir la próxima vez para asegurarme los dones del Ángelverde incandescente, aunque deba costar a mi corazón su última gota de sangre. Cuando con los

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párpadosenrojecidos,elpulsodebilitadoylosmiembrosrotos,velo,rezo,buscohastaeldespuntardelalba,entoncesempiezoadudardeti,¡ohDiosmío!,yluego,alolargodetodoeldía,soyincapazdeescrutar,comodebería,ellibrodesanDunstan,yKelleymeagobiaconreproches,diciendoqueyoretrasolaobra,quepongoendudaelevento.

Sincesaralolargodelasnoches,sobremisdoloridasyheridasrodillas,mepostroanteti,Diosmío, reflexiono, me desgarro el pecho, con una profunda contricción, deshaciéndome en vanaspromesas de atizar mi fe, de afirmar mi coraje, de permanecer indefectible en mi fidelidad a tumensajero celeste, a tu Ángel verde. Sé bien que un hombre no debe esperar nada del mundoespiritual,mientrasnohaaprendidoaafrontaryafrustrarlastentacionesdelabandonodivinoydelespanto abisal, con la impasibilidad y la grandeza de alma deElias y deDaniel en el foso de losleones. ¿Yo pretendo llamar a mí al otro mundo y a sus mensajeros de fuego, yo el miserableprofano,cuandodudoytiembloadespechodelaaugustamanifestaciónconlaquemehancolmado?Entoncesempiezoaodiarlas,enlugardeamarlas,¡porelsimplepretextodequenomantienensuspromesas!¡ElÁngelyanomehablaquizás!¿DebovolveradescenderentreelinnumerablerebañodelosPigmeosciegos,ignorantes,idos,nodigoyadevivircosassemejantes,sinodecreerlas?¿Nohetenidocienveceslavisióndelángelentodosuradianteesplendor?Ensuinsondablegraciaysuamante favor ¿no me ha, desde el primer encuentro, revelado su perfecto conocimiento de losdolores, de las insaciables esperanzasdemi corazón, de losdeseosmás recónditos? ¿Ynomehaprometidosurealización?¡Soyunpobredébil!¿QuédesearmásdelosEternos?¿NosehanreunidoalrededordemítodoslossignosparaatestiguarqueelpoderdivinoyelmisteriodelmundodelMásAlláestánapuntodedesvelarseenmíydependerdemismanos,mientrasestasmanosnotiemblencomolasdeunviejoynodejenescapar,comoarena,elbienmásprecioso?¿NoempezamosynoterminamosnuestrassesionesconlamencióndelsacrificiodelSeñorydelaSantaCenayconunafervorosaoraciónalOrdenadordetodaslascosas,paraexpulsaralosespíritusperversos?¿Unaluz,sí, una luz sobrenatural no anuncia cada vez almensajero del fuego? ¿Lomás oculto no apareceduranteeldía?¿Kelley,en trance,nohabla lenguasdesconocidascomolosapóstolesdelSeñorenPentecostés?Sé, por haber procedido a un atentoy largo exameny llenode trampas, queEdwardKelley ignora el latín, y conmás razón el griego, el hebrero y el arameo, lenguas en las que seexpresacuandoelespíritutomaposesióndeél.Todossusdiscursostienenseñalesdelosmásnoblessecretosdelaperfección,yamenudoparecenhablar,atravésdesubocainconsciente,losgrandessabiosdelaAntigüedad:¡Platón,elreySalomón,Aristóteles,SócratesyPitágoras!

¿Cómomeatrevo,pues,glotóncomosoy,aconsumirmedeimpacienciaydejarmeabatir,porquelas operaciones necesarias para permitirnos oír y ver los espíritus, siguiendo las indicaciones deKelley, cuestan un precio tan alto y abren una profunda brecha enmismodestas finanzas? ¿Voy aescatimar,cuandoél,segúnlaordendelÁngelverde,seprocuraenLondresonerososingredientes,indispensablespara intentarobtener laPiedra, siendoque, cuantomásavanzamosen la lecturadellibro de sanDunstan,más oscuras y embrolladas son las recetas?Hay que añadir quemi casa deMortlakesehaconvenidopocoapocoenunaespeciedealbergueparabuennúmerodemisantiguoscompañeros,yaquelasjactanciasdeKelleytienenporresultadoquenuestrasbúsquedasyéxitosenla fabricación del oro sean el tema de las conversaciones. Ya no está enmis manos detener estafuerza, la dejo correr, cueste lo que cueste, y considero inminente mi ruina, como un pájarohipnotizadoporunaserpiente.Bienprontoyanosabrécómoasegurarlamanutencióndemimujerydemihijo.Mientrastanto,Kelley,cadadíamás,sedaalvinoyalafrancachela.Hedebidocederasu

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deseodetransformarenorounpocomásdelpolvorojo,yveoevaporarseconangustia,díaadía,lapreciosasustancia.¡Ahoraconsagrotodamiatenciónendescubrir,apoyándomeenlasindicaciones,desgraciadamentemuyoscuras,delÁngelverde,elsecretodellibrodesanDunstan,antesdequeel«Leónrojo»seagote!

En la espera, se ha extendido el rumor en el país, que en mi casa tienen lugar evocacionesmágicas,quesoyvidentedefantasmasyquehayalborotonocturno;esterumorhallegadohastalosoídos de la corte y de la reinaElizabeth.Mientras que allí, entre los grandes yElizabeth, todo lomaravillososólomotivaburlasalasquelossabiosnoprestanatención,aquí,entreelsupersticiosoyvulgarpopulachodelcampo,elresultadodemibúsquedaylosrumoresquesehanproducidoporsucausasemuestranmuchomáspeligrosa.Laviejasospechaquemeponíaenrelaciónconlamagianegraylasartesinfernaleshaencontradonuevoalimentoysevuelvecontramíconamenazadoresgruñidos.Antiguosenemigosprestanatención,lajauríaseencarnizaenmicontra:yo,aquienlavidahallenadodehonores,elfavoritodelareina,caídoendesgraciaperosiemprepeligroso,esepolíticoenvueltoeninfluenciasenigmáticas,alcorrientedelasintrigasdelacorte,enpocaspalabras:elviejoydisimuladomiedode losenvidiososyde losqueamenudohehumillado,agita las lenguascienvecesbífidasybuscamiperdición.

Mientrasaquí,detrásdenuestraspuertascerradas,suplicamosalcieloqueiluminenuestropobreentendimientoqueseextravía,ybuscamoslavíasecretaquepuedeelevaralhombreporencimadeélmismo y liberarlo de la maldición de la muerte y de la vida animal, fuera, ante los muros deMortlake,elinfiernopreparasustormentasytodoconspiraparamidestrucción.

Amenudo,Diosmío,misfuerzassetambalean,mifeenmivocaciónvacila…¿Habrédecreerloque Gardener, mi amigo queme ha abandonado lleno de ira, me dijo un día, respondiendo a unmentís:queyoqueríahacersalirelárbolantesdehaberenterradolasemillaenelsuelo?Sisupieradondebuscaralamigo,lollamaría,llenodearrepentimiento,ypondríamiviejaycansadacabezaensusrodillascomounniño…Peroparaestotambiénesdemasiadotarde.

LasfuerzasdeKelleycrecenamedidaqueyomedebilito.Hepuestoensusmanoslaconducciónde todos los asuntos. Jane consiente en silencio, desde hace mucho observa, con preocupación ycompasión,midesoladafigura.Sólosuvalormemantieneenpie.Esunadelicadacriaturaquesinestarsostenidaporningunafuerzafísicaparticular,mira,sinembargo,defrentealanecesidad,conunacalmadavalentía,poramoramí.Sóloveyquieremisalvación.Esunabuenacompañeraenelcamino de lamuerte lenta. Amenudomi pensamiento vuelve a un hecho curioso: cuantomás yolanguidezco,meagotoymeextenúo,másKelleyresplandece,nosóloenelplanodelasaludfísica,sinotambiéneneldesusinnegablespoderessobrenaturales.¡InclusoelÁngelverdedelaventanadeOccidenteylaniñaespectralqueleprecedesoncadavezmásinteligiblesysustanciales!LapalabradeJuanBautistaenlaBibliameobsesiona:«Esnecesarioqueélcrezcayqueyodisminuya».¿Estamisteriosa ley del mundo espiritual también está en curso entre los tenebrosos aborígenes delabismo?¡Siesasí,Diostengapiedaddemí!EntoncesKelleyseríaquien…quiencrezcayyo…YelÁngelverdesería…¡no!¡no!expulsoestaidea…

Sueños inquietos corroenmis nochesyyamis días se volatilizan envanas esperanzas, y ya elÁngelverdedespliegafastuosidadensusaparicionesenlassemanasdelunamenguante.Susvestidoscada vezmás ricos y suntuosos, aparece ante nuestros ojos cubierto de oro y de fina pedrería.Elesplendordesuaparienciaestalquesiunsimpletrozodesumantosobrevivieraasudesaparición,seríamosdesembarazadosdeporvidadelapreocupaciónporelpancotidiano.

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Últimanovedad,sufrenteestáadornadaconpiedrassemejantesagotasdesangre,deunrojoderubí, tan grandes que, penetrado por un escalofriante dolor, he creído ver ante mí la cabeza delSalvador,laceradaporlosdemonios,resplandecerconunfulgorsobrenatural.Ylasgotasdesudor,figuradasporlosmásbellosdiamantes,perlabansufrente,comohanperladolamíaenelcursodetantas noches pasadas. ¡OhDios, impídeme blasfemar! ¿Porqué una gota de esta sangre y de esteincomparablesudornohacaídoenelpisodemihabitación?

Espero…espero…espero…Eltiemposehaconvertidoparamíenloqueesparaunaesposaalahora del parto que no puede parir e implora su liberaciónmediante un grito incansable. Vivo deesperanza,peroestealimentominamicuerpo.Calmomisedconpromesasquemehacenmorirdesed.¡Cuándopodrédecir:yaestátodoconsumado!

Desdeahoranosconsagramosenteramentea lapreparaciónde la tinturadeoroynopasaunasesión sinqueel ángelnonosprometadesvelarnosaldía siguiente, luegoa lapróxima favorableconjuncióndeastros, el secretode laPiedra,yconferirnos la fórmulaquecoronará laobra.Perosiempreintervieneunanuevacondición,unanuevapreparación,unnuevotodoparaeltododemisfuerzasydemisbienes,unnuevosacrificio,unanuevacaída,todavíamásabajo,enelnegroabismodelaesperanzaydelaconfianza.LosrumoresmásextravaganteshanvueltoaempezaracorrerenelpueblosobretodoloquesetramaenMortlakedemaneraquelamejorsoluciónmehaparecidoladeinformar a la gente—bien omal intencionada—de la naturaleza exacta demis investigaciones yestudios. ¡Es mejor esto que dejar en libertad a la calumnia y encontrarse un día, de improviso,abandonadoa lacólera,alodioya laseddesangredelpopulacho!Asípues,ayerheacabadoporconsentiralcaprichodelordLeicester,deLondres,quemantieneparaconmigolasmismasbuenasdisposiciones que antaño, y le he invitado aMortlake, así como a diversos gentileshombres de lacorte,curiososdevernuestrosprodigios.

LordLeicesterysuséquito,elpríncipepolacoAlbertLaskihanllegadoasíalcastillo.Micasaymipatioestánllenosdehuéspedeshastaelúltimorincón.Encuantoa loquecuesta lahospitalidadofrecidaatanaltospersonajes,prefieronohablar.HasidonecesariounacopiosaextracciónalhurtodelatumbadesanDunstan,peroKelleysehapuestoareírsarcásticamenteyharefunfuñadoalgoenvoz baja: ¡desplumaré bien pronto a esos pájaros!Aprieto los dientes, pues adivino lo que cuece.¿Hay algo queme haya sido ahorrado enmi vida de incansable búsqueda de la verdad? ¿De québarro,dequévulgaridad,dequécastigoydequédelitoestevagabundodeboticarionohaenjuagadosusmanchasenmí?

He anotado enmis protocolos lo que ha pasado durante la sesión que he organizado para losgentileshombres llegadosdeLondres.Enmicasayenmialma, laconfusióncrecedíaadía.¿Quédecirsobreelnuevojuego«místico»instauradoentreKelleyyelfantasmaverdedelaniña?Yanosetratadelainmortalidad,de«Groenlandia»ydelareina,delacoronacióndelapersonalidadnidelosdonessobrenaturalesreservadosaloselegidos,tampocosetratadelamaneradeprepararlaSalylaEsencia; la ambición, la charlatanería superficial y mundana, la avidez de los de la corte y delintrigantepolacodanalassesionesuncarácterqueestotalmentelocontrarioalrecogimientoyalainteriorización.Resuenanconunconfusomurmullode las impetuosaspreguntasdeestoshombressobre el risible desarrollo de los planes que han hecho y de sus ambiciosos deseos, como si sesentaranenelantrodelabrujadeUxbridgeyquisieran,bebiendosuhorriblemixtura,hacersedecirlabuenaventuraalamaneradelosvidentesdeferia.YKelleyseponeentrance,comolasotrasvecesquehacíalaspreguntassobrelavidaeternaaPlatón,AristótelesySalomón,peroahorasoncriados,

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ylameculosquieneshablanporsuboca…¡Disgusto!…¡Disgustotrasdisgusto!…¡Ynitansiquieraséporqué!Despuésdecadaunadeesassesiones,melevanto,mojadohastalamédula,alpuntoquemispies

apenas sipueden llevarme.Kelley,alcontrario, saleconunaumentode fuerza,unamás triunfanteseguridad,unaconcienciade suvalor cadadíamásostentoso.Yanoes elhuéspeddemicasa,mialumno,mi«famulus»,yyoyasólosoysuaguántalotodo,elservidordesusdeseos,elesclavodesusexigenciasydesuspretensionesquenocesandeaumentar.

Yyaquelavergüenzadeningunaconfesiónmeesahorrada:esahoraél,Kelley,quienaseguratemporalmente los gastos del mantenimiento de la casa, haciendo pagar a mis huéspedes lascomunicacionesquelestransmiteenelnombredelÁngelverde,especialmentealpríncipeLaski,lasrentasdelcualparecenfabulosas.¡Asímifamiliayyovivimosdesdeahoradelaspropinasdeestecharlatán!Desdehacepocoyanoesunsecretoparamíqueenestas sesionesno retrocedeante lasupercheríaylailusión,sinoqueanuncia,contrahaciendosuvozysusgestos,loquelavanidadylainsaciable codicia de los locos que preguntan desean oír y lo que halaga su ambición sin límites.También me ha dado a entender, en términos insolentes y con una cínica risa, que tenía toda lalibertaddedejarme tomarmipropio lecho,si loprefería,a finde tratardignamenteamis ilustresinvitados.Peroademásdelahumillacióndeser,enciertamedida,elcómplicedeunladronzueloydeun camastrón, me torturaba esta horrible pregunta: ¿cómo la Providencia permite que unosmensajeros celestes como el Ángel verde y el fantasma pueril de la ventana deOccidente asistanimpasiblesaestamonstruosasupercheríaquetienelugarantesusojosyensupresencia?Yaquesemanifiestanenmediodeestasreunionesconcretos,tangiblesyvisiblesparatodoslosasistentes,¡ysehaproducidodocenasdeveces!…Ladesgraciahapenetradoenmí,destructoraymásrepentinaqueuna tempestad en el desierto, y abierto el abismo de la fatalidad que a cada instante amenaza conengullirme.SiKelleyesdesenmascarado,yocaeré conél, puesestoyencadenadoa él. ¿Quiénmecreeráinocente?¡Nolosoyniamispropiosojos!…

YasehacenapremianteslasinvitacionesquemellamanaLondres.AlareinaElizabeth,aquienhadespertado la curiosidad el polaco Laski con sus exuberantes relatos, le agradaría que yo no laprivasedeesteprodigioyquerríaverestapuertaabiertadelMásAllá.¡Enestacircunstanciavaenellomivida,ynunca toleraréqueKelley renueve susmistificacionesen supresencia! ¡Estás enellímite,JohnDee,ellímitedetuserroresydetusfaltassobreelsecretodelBaphomet!…

¡Oh! ¡Ojalá no hubiera escrito nunca mis sueños! ¡Qué cierto es el adagio de los antiguosiniciados:quienescribesussueños,oloscuenta,losengendraenlarealidad!¿Nohatomadocuerpoelhombredelasorejascortadasquehabíavistoensueños?¡Estádelantemío,sinmáscara,bajolassuciasaparienciasdemicomensalycompañerodecadenaKelley!Incansablementemepersigueelpensamiento de Bartlett Green y de Mascee, los dos destrozadores de cadáveres, violadores decriptas,losdosejecutoresdelavenganzaqueeldifuntoobispohafomentadoenelMásAllá.Meheconvertidoen lavíctimade la lúgubre fatalidadquemehanvalido lasbolasdemarfil,que sehancambiado en bolas de hierro atadas amis pies como las que arrastra unmalhechor toda su vida.DesdeLondres,elpolacoLaskimeruegapomposamente,ensunombreyenelde la reina, ira lacorte con Kelley, para proceder a una evocación solemne del Ángel verde, ¡porque tiene gota yhemosdeobtenerdelabocadelosinmortalesunremedioeficazparasupiedañadoporelborgoña!

¡Oh! ¡Las cosas toman el curso que había previsto, embrollo tras embrollo! ¡Catástrofe trascatástrofe!¡Deshonoryruina!…

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Porordendelareina,quenoaceptanegativas,somosllamadosaLondresenelmáscortoespaciodetiempo…¡Hemosencontradoenlacorlelaacogidamásfastuosa,peroaquéprecio,pormialma!

Elizabeth exigió que se hiciera la sesión al instante, no se produjo ninguna aparición sensible,perodosespíritushablaronpor laboca inconscientedeKelley,declararon llamarse JubandalaceyGalbahyprometieronalpolaco,ademásdeunaprontacuración,quellegaríaaserreydeTurquía.Elizabeth apenas si pudo reprimir un estallidode risa.Medi cuenta quehabía cedido al placer decomenzardenuevoconmigo,comoantaño,elhorriblejuegodelgatoyelratónyadivinabaconquégozosatánicodisfrutabavermenaufragarenelabismodelridículo.

¿Qué móvil la empujó a conducirse así? ¡Impenetrable Providencia! ¿Es esta la garantía y laconfirmacióndenuestramisteriosaunióndealma?¿YesahídondedesembocalavíadelBaphomet,conlacoronayelcristaldeeternoesplendor?…

PodríadetenerlotodosuplicandoamiviejoamigoLeicesterparaquearreglaraquelassesionesenLondres fuesensuspendidas, sino losespíritus terminarán,por lobajo,prometiendoaLaski ladominacióndelaGranBretañayelmundoentero.Porfortunasepresentaunaocasióndequitaralareinaeldiabólicoplacerdemiconfusión.Enunaconversaciónconellalaheconjuradoarenunciarasu curiosidad, a abstenerse de toda relación con los espíritus de Kelley, en tanto que yo no hayaidentificadosunaturalezaconseguridad.LehedichoqueelMásAllátambiénpodíaestarpobladodedesencarnados de todas las categorías y de fuegos fatuos capaces de disfrazarse con forma deángeles,demaneraquesuaugustamajestadcorríaelriesgodehallarseexpuestaalasmaldicionesdefantasmasrevoltosos.Anteello,lareina,despuésdehaberpermanecidounlargoratopensativa,meha preguntado si esperaba, en el futuro,mejores resultados conmis evocaciones de espíritus, queanteriormenteconmisplanesparalaconquistadeGroenlandia.

«Sí»respondíconfirmeza.Ymientrasqueellamesondeabaconunaprofundamirada,proseguí:«Sea cual seami actualmanera de vivir, siempre he sido un viajero en camino para descubrir lapatria de la realización, y lo seguiré siendo hasta que vea la luz. En cualquier lugar en el quedesembarque o naufrague, izaré el estandarte de último amor y me apoderaré de EngellandexactamentecomoGuillermoelConquistador,quepusolamanoensueloinglésylodeclarósuyo».

La reina secalló.No turbé su silencio.Perovique suorgullo la irritócontramíycomprendíperfectamenteporquéseatrincherabadetrásdelaironía,diciendo:

—Mientrastanto,MaestroDee,aprenderemos,paranuestrasatisfacción,cómovuestrocomerciocon el mundo superior no queda sin provecho material, ya que habéis obtenido de los seressupraterrestreslapiedradelossabiosylapreparacióndelanobletinturacapazdeproduciroro.

No me espantaron poco estas palabras, ya que había escondido todas mis investigacionesalquímicasynopodíaconcebircómoapesardeellohabíanllegadoaoídosdelareina.Peroprontolevanté una impávida cabeza al ver aquí una inesperada posibilidad de salir de mi inextricablesituación.ConfiépuesasuMajestad,conlamayorfranquezaquehastaahorahabíapenadoenvanoconelsecretodelatransmutacióndelosmetalesyquenohabíasacadootroprovechoqueeldeverfundirmipatrimonio.

Vi,porprimeravezescucharaElizabeth,comosiunsentimientohumanohubieseemocionadoasufríocorazónenloqueamírespecta.Mepreguntósinecesitabadinero.

Noquiseparecerasusojosunmendigoylerespondí,contodoelorgulloquemequedaba,quenoqueríarecurriralagraciademisoberanasipodíaahorrármelo,perorecordaríasuspalabrasenelcasodehallarmeenunanecesidadapremiante…

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Alfinsalimosdelaefervescenciadelaciudad;enlacalmadellaboratoriodeMortlake,hemosvueltoaltrabajo.

Unnuevodesastrenosehahechoesperarmuchotiempo:eneltranscursodeunexperimentoenelqueprocedía, todo el laboratorio ha saltadopor los aires.Milagrosamente, yohe salido indemne,perolosmurosdemicastilloacusanunaprofundafisurayelodiosupersticiosodelagentedelpaísestátanexcitadoporelaccidente,quedeboesperarunataqueencualquiermomento;mehanhechosaber, en efecto, que no tolerarán por mucho más tiempo mis diabólicas frecuentaciones en suterritorio.Elfinestácerca.

El Ángel verde todavía promete y promete —más formal y perentoriamente cada día— quetocamosla«realizaciónfinal».Perotodossentimosqueelsocorrollegademasiadotarde:eldíadelaruina,desdehacemuchovistoconterror,esinminente.

Porúltimavez,conKelley,hemostenidoconsejo.Hemosllegadoaladecisióndenosacrificaryamáspolvorojoparaasegurarnosunavidamezquinamedianteeloroobtenido,sinodeabandonarelpaístanrápidocomoseaposibleeiraBohemia.CercadelemperadorRodolfo,reputadoadeptodel arte real, y cerca de sus entusiastas y ricos nobles amigos, continuaremos el trabajo conposibilidades de éxito tanto más cuando habremos podido ofrecer al desconfiado Hasburgo elespectáculodeunatransmutacióndemetalesrealizadabajosusojos.Graciasalrestodepolvosquetodavía contienen las bolas de san Dunstan. También deberemos intentar en Praga dilucidar porúltimavez, según el libro del santo, lasmodalidades de la obtención de la piedra; de estamaneraveremos terminar nuestrasmiserias y abrirse la vía de nuestra felicidad y de nuestra paz.Que lasperspectivasofrecidasaunalquimistacoronadoconeléxitosonbiendiferentesenlacortedePragadeloquelosonenInglaterra,bajolosojosdeunaingratasoberana,nolodudouninstante.

Largamentehe sopesadoconmimujer Jane las razonesdedaronodar estepaso.Meparecíaduro,cierto,amiscasisesentaaños,expatriarmeunavezmás;peroelÁngelverdenosordenatancategóricayprometedoramentequehagamoslasmaletaseiralladodelemperadorRodolfo,quehepuestofina todaduda.Parececomosielmismocieloquisieraconfirmarelaciertodeestaorden,puestoqueayerrecibídePoloniaunacartadelpríncipeLaskiinvitándomeaaceptarsuhospitalidadjunto conmimujer yKelley, tanto tiempo comonos plazca.Naturalmente él cubre los gastos delviaje yme reserva además unas elevadas pagas anuales. La alegría causada por la carta no durómucho,alamañanasiguienteencontrébajomipuertauntrozodepapeldondesenosamenazabaconmasacrarnosatodoseincendiarlacasa.Yaessuficiente:notengoelderechodejugarconlavidadelosmíos.¿Reclamar laprotecciónde lasautoridades?Noconduciríaanada.Medejaríanplantado.Demasiado bien me doy cuenta que detrás del levantamiento de los campesinos se esconden lospoderososenemigospersonalesquemequierenmalybuscanperderme.¡Actuarépues!EldinerodeLaski no ha llegado. La situación es tan grave que he debido, mediante Leicester, volverme aElizabethparapedirleayuda.¡Desdeahoratodomeesindiferente!Apartedelorgullonotengograncosaqueperder,¡nomeconvertiréenelasesinodemimujerydemihijo!…

Delareinaherecibidohoy,porcorreoacaballo,cuarentatálerosacompañadosdeunacartaenrespuestaa lamíaen laque le señalo la insuficienteprotecciónqueseejerce sobrenuestracasayvida, me dice que su poder no va más allá que el de las autoridades competentes. Se sorprende,además,queelÁngelverdeaquienyomeatonoseamejorpatrónqueellamisma,simplesoberanadelatierra.Yotrasglacialesfrases.Asípueshemosdecididoprepararenelmayorsilencioyreduciralmínimo los equipajes que necesitamos para hacer nuestro viaje lomás barato posible. Todo lo

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demás,aquíaMortlakeyallá,eneloscurofuturo,lopongoenlasmanosdelSeñortodopoderoso…Hoy21deseptiembrede1583,hallegadoelmomentodepartir;conlasprimeraslucesdelalba

abandonaremos la casa con el mayor secreto; hemos alquilado un coche con la idea de llegar aGravesendporlanoche…

Sinirmáslejosayerporlanoche,ungrupodecampesinosymerodeadoresarmójaleodelantedelcastillo,enelpatiointeriorhantiradounaantorchaencendidaquemiviejoservidorhaapagadoconsuspies.Huyendoapenassihemosevitadounahordaenfurecida,ydebemosnuestrasalvaciónalanieblamatinal…

¡Diosmío,yaestáhecho!Comoloescriboaquíenmidiario,¡huyo!Detrásdemídejoelúltimobienquemequedabaenlatierra,quesellabaelnombredemirazaalsuelodeInglaterra:Mortlakeestá a merced de los ataques del populacho que van a desencadenarse, quizá antes de que hayaabandonadolainhospitalariaorillademipaísnatal.

¡Sí,yohabrévistoconmisojosempañadospor laedadel incendiodeMortlake!Negrasnubessuben sobre el horizonte detrás de las colinas, donde se levantami castillo. Negras nubes de unaespesahumaredaqueparecehabitadaehinchadaporponzoñososdemoniosquebailanelsabatenloslugares demi antigua paz. Losmalignos espíritus del pasado sacan las tripas delmal año. ¡Ojalápudiesensaciarse!¡Ojalápuedabastarleselholocaustoquealfinalselesofrece!¡Ojalápuedan,contoda su orgía y su comilona de entierro, olvidarme! Sólo una cosame duele profundamente: ¡miqueridaybuenabiblioteca!¡Mislibrosquemerobabanelcorazón!Losdemoniosdelavenganzanolossalvaránmásqueelpopulachoensunecedad.Hayobrascuyoejemplareraelúnicoenlatierra.Manifestaciónfervientedelamásprofundasabiduría,amorqueconsumelaenseñanzamásleal:veydisuélveteenlallamaquetehaengendrado.Eslástimahabersedirigidoaunbruto.

***

DesdehaceunahoraestoysentadoenmimesaytengoenmimanolaúltimahojadeldiariodeJohn Dee. He visto arder realmente el castillo de Mortlake. ¿Puede una imagen, sugerida por lalectura,vivirconunavidasemejante?

Diversas veces, obedeciendo a un impulso repentino, he querido hurgar en el cajón dondereposan los legajos de mi primo Roger. Cada vez mi brazo ha caído como paralizado y no meresuelvoatomarlosnuevosdocumentosquemeaportaríanmásampliasaclaraciones.

¿Nuevas aclaraciones? ¿Para qué? ¿Levantar nuevas nubes de polvo? ¿Exhumar el pasado?¿Cuandoparamísesitúanenelpresentemásluminoso?¡Enunaluzcegadoraque,porasídecirlo,me deslumbra! Esmejor que aproveche la singular, prodigiosa calma de esta hora que hay amialrededor. Es como si separado delmundo entero,me encontrara, no ya sentado enmi despacho,solo,sinoenalgúnlugardelvacíoespacial,fueradeltiempohumano…

Ya no hay ninguna duda: ¡John Dee, mi lejano abuelo, vive! Está presente, está ahí, en estahabitación, cerca demi sillón, cerca demí… ¡quizá enmí! Lo diré sin ambages: esmuy posibleque…¡queyoseaJohnDee!¡Quizásiemprelohesido!¡Siemprelohesidosinsaberlo!…¿Cómoesposible?¿Porquépreocuparme?¿Nobastaquelosientaconunacerteza,unaprecisiónincreíbles?Ademássepuedenencontrartodotipodeapoyos,argumentosyejemplosamitesisenlosmaestrosmásvariadosdelacienciacontemporánea,quienesdanreferencias,estudian,clasificanycondecorancon nombres sabios la experiencia que yo vivo. Se habla de escisión de la personalidad, de

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desdoblamientodelaconciencia,deesquizofrenia,defenómenosparapsicológicosdiversos,yquéséyo.Esbastanterisibleverocuparsedeestascosasaloslimitadosalienistasqueatribuyenalalocuraloquenonaceenlaestériltierradesuignorancia.

Estoyconvencidodemiperfectasaludmental.Asíquebastadeescrúpulosantemímismo,antelosausentespsiquiatras,queapartelosenvíoaldiablo,yanteesostoposhumanossietevecessabios.

Asípues:JohnDeenohamuertoabsolutamente,digamos,poramora laconcisión,queesunapersonalidad «del otro lado» que, en función de deseos y de objetivos claramente determinados,continúa actuando y tiende a realizarse. Es posible que elmisterioso vehículo de la sangre sea el«buenconductor»deestafuerzaviva,peroentodocasoesaccesoria.ConsideroqueloqueenJohnDeeesinmortal,circulaporestecanalcomolacorrienteeléctricaporunhilometálico.Precisamenteyoseríaentonceselextremodeestehilodecobre,yelpotencial«JohnDee»seacumularíaenélcontoda su conciencia desencarnada. ¡Peromaldito sea todo ello! ¡Mil explicaciones son posibles, sinembargoningunarivalizaconlatemibleclaridaddemiexperiencia!…Estamisióneslamía.¡MíaeslametaylacoronaylarealizacióndelBaphomet!¡Siyo…siyosoydigno!Siestoymaduro…¡Demí,elúltimo,dependeelcumplimientooelnaufragio,paralaeternidad!

Perciboen la coronilla el ardorde lapromesaalmismo tiempoqueelde lamaldición.Lo sétodo, estoy a punto. ¡He aprendidomucho, JohnDee, de los benditos e intangibles libros que hasescritoparapreservartusrecuerdos!¡Tecertifico,noblegeniodemisangre,queamiveztambiényomeacuerdo!¡Tucausaestáenbuenasmanos,John,ytúeres«Yo»porlibredecisión!

¡SeguramenteBartlettGreennoseesperabaencontrarmedespiertoamímismo!Hacepocosdíasestabadetrásdemimesa,creyendoyaconsumadalauniónmísticaentresuvíctimaJohnDeeyyo.¡Hascometidounanecedad,BartlettGreen!¡Hasqueridoelmal,yhastrabajadoparaelbien,comosucede siempre con vosotros, bajos demonios de lamano izquierda! ¡Solamente has avanzadomisueño, Bartlett Green, abierto los ojos, agudizado mi vista para que perciba claramente tuantediluvianoídolodeEscociayquesondeeelabismodelnegrocosmos!Ladiosadelosgatos,IsaíslaNegra,ladySissy,lanobleprincesaAssiaChotokalouguine.Laconozco.Conozcosusvíasatravésde lo intemporal,desde lahoraenquesehaamalgamadoalsúcubodemidesgraciadoantepasadohasta el día enque, sentada aquí cercademí,me implorabaunhierrode lanza.Erauna sugestiónmágicadesuparte,nolahecomprendidoporqueelsecretodesunaturalezameestabaoculto.Lareal«Elizabeth», lo femenino enmí, todavía sumergida en un lejano sueño, no la he podido destruir,porqueel futuromágiconopuede ser aniquiladomientrasnoes conjuradoenelpresente,pero sípodría devorar al masculino que actúa, encarnado, para impedir las futuras «Bodas Químicas».¡Todavía tenemos que decirnos un par de cosas, princesa Chotokalouguine! ¡Si no me equivocotenemoscuentaspendientes!…

El amigo Lipotine me ha revelado su identidad, en un momento en el que todavía no locomprendía.Sedecíadescendientedel«Maestrodelzar».Aunquedemaneravelada,hareconocidollamarseMascee.Bien,provisionalmentequierocreerqueesMascee.

¿YGärtner,miamigoahogado?Interrogaréelespejoverde,regalodeLipotine,queestáahíantemí, y sé que ThéodoreGärtner sonreirá en el espejo, que tomará un cigarro, cruzará las piernasvoluptuosamenteydirá:«¿Yanomereconoces,viejoJohn?¡Yo,tuamigoGardener,tuasistente,tuconsejero, desgraciadamente derrotado! ¡Pero no es desde hoy que nos conocemos! ¡De ahora enadelanteescucharásmejormisopiniones!».

Ya sólo faltaEdwardKelley, el charlatán de las orejas cortadas, el corruptor, elMédium.Este

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hombredeltiempodeJohnDeesehaconvertidoennuestrosigloenunembrollodemildemoniosqueproliferayprolifera,aunqueyanotenga«Yo».¡ElMédium!¡ElpuentequepermitecomunicarconelMásAlládeIsaíslaNegra!

Esperoconunvivo interés la entradade esteKelleyenmividay la reverencia con laquemegratificará. ¡Estoy presto para arrancarle de su rostro lamáscara del tiempo! ¡Me lo espero todo,Edward:quetedisfracesdeespectroalamodadelosespíritus,odeprofetapopular,odevagabundoquehoyencuentreenlacalle!

Falta:Elizabeth…Untemblormesacude,loconfieso,ysoyincapazdeescribirloquemicabezaintentainspirarme.Un velo de emoción me enturbia la vista. Cuanto más me esfuerzo en fijar mis ideas y

suposiciones,mássedesencaminancuandopiensoen«Elizabeth»…

***

Llegado a este punto de mis meditaciones, coloreadas tanto por la fe como por la duda, mesobresaltéaloírunafuertepalabreríaqueparecíaintercambiarsefuera,antelapuertadelvestíbuloyquegolpeabacadavezconmásfuerzamidespacho.

Luego reconocí las voces que se querellaban con tanta premura: los estallidos breves yautoritarios,cortantescomounhachaquecae,delaprincesaChotokalouguineylaentonaciónmásdulce, pero nomenos obstinada en sus objeciones, demi gobernanta, Frau Fromm, que intentabahacerrespetarmiconsigna.

Salté. ¡Laprincesaenmicasa! ¡Ella,que recientementemehabíahechodecirporLipotinequeesperaba que fuera a visitarla! ¡Que digo la princesa Chotokalouguine! ¡No, la Demonio de losespantososritosnocturnosdel«Taighearm»,elenemigooriginal,la«ladySissy»demiprimoJohnRoger,lasirenadela«lunamenguante»,volvíaalataque!

Unsalvajegozovibróentodasmisfibras,ardióenmí,violento:¡oscuramujer!¡Estoyenplenaforma!¡Estoyapunto!…

Diunparderápidospasoshacialapuerta,laabríygritéconunavozcargadadelosmáscortesesreproches:

—¡No,FrauFromm!¡Dejadentrar tranquilamentea laseñora,hecambiadodeopinión!¡Estarémuycontentoderecibirla!Leruego…

Atropellando a la estupefacta Frau Fromm, la princesa se precipitó hacia mí, jadeando ycambiando, no sin un esfuerzo perceptible, la irritación que había experimentado en un amable eimpacientesaludo:

—¡Simplementeestoysorprendida,queridoamigo,deverosexcluidotanseveramentedelmundoexterior!¿Aunqueseaporpenitenciaosantidad,nodebéis,encualquiercaso,hacerunaexcepciónparaunaamigaqueardeendeseosdeveros?

ConungestotranquilicéaFrauFromm,queseguíaapoyadacontralapareddelvestíbulo,conlosojosfijosyapenasrespirando—podríadecirsequeunfríointeriorlahabíahelado,puesviunrápidotembloragitarladepiesacabeza—ehiceentrara laprincesaenmidespacho.Mientrascerrabalapuerta,viamigobernanta levantar lasmanoshaciamíconunmovimiento repentino.Ledirigíunsignoconlacabezaymisonrisadebiódeconvencerlaquenoteníaporquépreocuparse.

Luego me senté ante la princesa Chotokalouguine. Se deshizo en afectuosos reproches que

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seguramenteyohabíamalinterpretadosuobstinacióndelaotravez,dequelahabíaevitado,faltandoasí ami promesa de ir a verla.Era difícil poder decir una palabra.Detuve sus zalamerías con ungestodelamano,dulceperodecidido.Duranteuninstanteelsilencioreinóenlahabitación.

«Olordepantera»constatésecretamenteunavezmás.Elperfumedelaprincesameexcitabalosnervios.Pasélamanoporlafrenteparaexpulsarunaligerasensacióndevértigo,luegoempecé:

—Muyilustreprincesa,vuestravisita,oslorepito,esextraordinariamentebienvenida.Nomiento,osaseguroquehoyhubieratenidoelhonordevisitarosenvuestracasasinohubieseisvenidovosmisma.

Me di el gusto de marcar una corta pausa y de observarla. Sólo constaté que la pretendidaprincesaseinclinabaconcoqueteríahaciamíparadarmelasgraciasymerespondíaconunasonrisamuda.Acausadeellosentídegolpelanecesidaddesorprenderla;meapresurépues,aproseguir:

—Precisamente debo deciros que en el intervalo, he conseguido explicarme los deseos que osconducenamí,hepenetradoclaramentevuestrosmotivos…

—¡Quecontentaestoy!—exclamóimpulsivamentelaprincesa,interrumpiéndome—,¡quéalegríatanextraordinariamedais!

Me esforcé pormantener un rostro impasible. Sin tener en cuenta la interrupción, clavé en surostrorealmenteiluminadocontodalaseduccióndesusonrisa,unafríamiradayledije,alacara:

—Osconozco.Hizounmovimientodecabeza,brusco,impaciente,casisorprendido.—OsllamáisprincesaChotokalouguine,continué,poseéisoposeíais,vieneaser lomismo,un

castilloenIekaterinodar.Denuevoungestodeimpaciencia.—¿Noposeéistambién,onohabéisposeído—digamosantaño—uncastilloenEscocia?¿Oen

algúnlugardeInglaterra?Laprincesa,sorprendida,sacudiólacabeza:—¿Cómoseoshaocurridoalgosemejante?MifamilianotienelamenorrelaciónconInglaterra.Leofrecíunasonrisaglacial:—¿Estábiensegura,lady…Sissy?Había tirado los dados e interiormente temblaba de emoción: ¿qué sucedería? Pero mi bella

interlocutora teníaundominiode símuy superior al quepudiera imaginar.Me lanzóuna sonrisa,visiblementedivertida,ymepreguntó:

—¡Quédivertido!¡MepareceréaunaInglesaconocidavuestra!Sinembargo,semedice—nosésiporcumplimiento—quemisrasgossondelmáspurotipocaucasiano.¿Tambiénseránlosdeunaescocesa?

—Es posible que las adulaciones de mi pobre primo Roger hayan explotado este tema, muygraciosa…—propiamentequisierahaberdicho«Muygraciosasoberanadelosgatosnegros»,peroen elmomento de pronunciar la frase, una prohibición paralizómi lengua y sólomequedé en elsentidocortésdelafórmula«muygraciosa»—pormipartemepermitoencontrarenlosrasgosdevuestrorostrouncaráctermenoscaucasianoymássatánico.Esperoqueellonoosofenda.

Laprincesacasicayódeespaldasdetantahilaridad,sudúctilvozmodulótodaunacadenciadeperladasrisas.Luegoseirguió,comocogidaporunacuriosidadrepentina,yseinclinóhaciamíparadecirme:

—Megustaríaencarecidamentesaber,amigomío,aquérespondenestoscaprichososcumplidos.

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—¿Cumplidos?—¡Sí,cierto!¡Sonelogiosescogidosconsumocuidado!¡Unainglesa,unalady!¡Unafisonomía

satánica!Heaquíinteresantesdetallesdelosquejamásmehabríacreídodigna.Estaescaramuzadepalabrasempezabaafastidiarme.Mesentíatensocomounacuerdaapuntode

romperse.Grité:—¡Yabasta, princesa! ¡O con cualquier otro nombrequedeseéis haceros llamar! ¡Princesa del

infierno,seaelquesea!Hedichoqueosconozco,¿oís?¡Queosconozco!¡IsaíslaNegradispone,paraengañar,delosvestidosynombresquequiere;peroyanotieneconquedisfrazpresentarse,amí,JohnDee!—deunsaltomepusedepie—¡Noimpedirálas«Bodasquímicas»!

Laprincesa,lentamente,sehabíalevantado.Yomeapoyabaenlamesadelantedeellaylamirabafijamentealacara.

Pero nada de lo que yo esperaba se produjo.Mi magnética mirada no llegó ni a expulsar eldemonio,niahacerleceder,niadisolverloenhumooproduciralgúnotroefecto.Nosucediónadasemejante, al contrario, la princesamemiró de arriba a abajo con unamirada inexpresablementealtiva,sindetrimentodeunaironíaapenasdisfrazadaydijodespuésdedudarlouninstante:

—No estoy enteramente familiarizada con los extraños procedimientos que se tiene porcostumbreusaraquíenrelaciónanosotros,losrefugiadosrusos;asípuesnoestoytotalmenteseguraquevuestrosrarospropósitostenganpororigenuntrastornoparamíinexplicabledevuestrasaludmental.Ennuestro país, donde amenudo las costumbres parecen ser groseras, no se recibe a unadamacuando…sehabebidodemasiado.

Fueunaduchadeaguafríaquemedejómudo.Elrostromequemaba.Almismotiempoyapesarmío,elhábitoinculcadodelacortesíaparaconelotrosexohizoquebalbuceara:

—Quisieraquemecomprendierais…—¡Lasmalasmanerassiempresondifícilesdecomprender,señor!Unalocaideamecruzólacabeza.Degolpemeinclinéymeapoderédelapequeñaperorobusta

manodelaprincesa,queseapoyabaenelescritorio.Laatrajehaciamí,percibiendoconmiapretónla complexión nerviosa de esta mano habituada a las riendas y al manejo de los accesorios dedeporte,ylallevéamislabioscomoparapedirperdón.Lamanoeraflexibleydeuncalornormal,exhalabaeseligeroperfumeincomprensiblementeanimalyexcitantequelaprincesausaba,peronopresentabaningúncarácterectoplásticoodemoníaco.Laprincesamelaretiró,dudóunsegundoylalevantóhaciamí,conungestomedioamenazante,medioserio:

—Másvaldríausarestamanoparamejorusoqueeldeabandonarlaallunáticoautordetanneciaslisonjas,—dijo,ysusojoslanzabanrayos.

Elligerogolpequemedioenlamejillaeratambiéndecarneyhueso,aunquedadoconlamayorelegancia.

Mesentídesilusionado,vacío.Habíapasadosinencontrarresistenciaatravésdelfantasmadeunenemigoimaginario.Unmemorabledespertarhabíaseguidoaestegolpeenelaire.Experimentabauna incertidumbre, una confusión en toda mi alma. Simultáneamente, se estremecía en mí algoindefinible,originadoporelcontactodemislabiosconlamanodelaprincesa.Elescalofríodeunaenigmática atracción. Una repentina angustia, la piel me picaba por haber ofendido una delicadanaturaleza,másnoblementeorganizadaquelamía.Deprontomehalléindeciblementeestúpido.Nopodía concebir lo que me había pasado por la cabeza, juzgaba mis supuestos del principioexagerados,sí,mórbidos.Nomecomprendía,enunapalabra,enmidesordendebíatenerunafigura

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tantragicómicaquelaprincesatuvounarisitaunpocoburlona,aunquenosinunmatizdecompasiónenlavoz.Meexaminódepiesacabezaydijo:

—Porloqueveo,soycastigadapormiinsistencia.¡Asípues,nonoseternicemosenreproches!¡Lacuentaestápagada,yenuncasosemejantelodecenteesabandonarelhotel!

Se dirigió, con unmovimiento rápido y preciso, a la puerta.Yo sacudími embotamiento paradecir:

—¡Oslosuplico,princesa!¡Noasí!¡Noosvayáisdisgustada,llevándoosestaopinióndemíydemismaneras!

—¿Vanidaddegalanteunpocoherido,queridoamigo?—Ellareíamientrasseguíayéndose—Yapasará.¡Queosvayabien!

Entonces,yanoaguantémás:—¡Sólounsegundo,princesa,paradecirosquesoyunpalurdo,uncalavera,unverdaderoloco!

Pero…ya lo veis, no soy ni un borracho, ni un patán…No sabéis lo queme ha sucedido en lasúltimashoras…enloqueestoyocupado,todoloquemicabezahadebidosoportar…

—Lohepensadoenseguida,respondiólaprincesaconunsincerointerés,desprovistoestavezdeironía, pareceque las ideasgeneralmente recibidas sobre lospoetas alemanesno seanni falsas niexageradas: ¡Se llenan la cabeza de cogitaciones extranjeras a este mundo y a menudo abstrusasfantasmagorías!¡Deberíaistomarelairemásamenudo,queridoamigo!¡Viajar!¡Distraeros!…

—Estoyobligadoaconstatarcondesespero,quetenéismilvecesrazón,princesa,dije—incapazahora de detener mi lengua— sería feliz de poder, quizá a través de Lipotine que ya me lo hapropuesto,enelprimermomentoquepueda,dirigirmispasoshaciadondeesperarétenerlaocasiónyelfavordevolverosaverydeobtenervuestroperdónpormiconductadehoy.

La princesa ya empuñaba el pomode la puerta. Se volvió,me echó una largamirada, pareciódudaruninstanteylanzóunprofundosuspirodivertidamentesimulado,perorecordandomuybienelbostezodeungrangato:

—En lo que amí concierne, está convenido.Y espero que os sentiréis obligado, para repararvuestroserrores,aunapequeñacompensación…

Todavíame hizo un irónico signo con la cabeza, y al instante siguiente, a pesar demi últimatentativapararetenerlasefue.Lapuertasecerróenmisnarices;cuandomerecobré,erademasiadotarde.Oíunclaxonenlacalle.

Abrílaventanaparaverelautomóvil.SiennuestrosdíaslosdiablosescocesesylatemiblediosadelosgatosdeBartlettGreenhacen

sus desplazamientos en pistonudas limusines Lincoln, es verdaderamente difícil de sustraerse a superversocomercio,anotaba,ironizandosobremímismo.Pensativo,cerrélaventanayalvolveralahabitaciónvidepieaFrauFromm,apoyándoseenlamesa,enellugarexactodondelaprincesasehallabaunminutoantes.Enunprincipiocasituvemiedoyaquedebídarunpasohaciaellaantesdereconocerla,tancambiadasmeparecieronsuexpresiónysuactitud.Permanecióahímuda,inmóvil,conlosrasgoscambiados,peroseguíaconlosojostodosmismovimientosyseesforzabaparaleerenmirostro.Sumiradadibujabaunaangustiaindecible.

Superé rápidamente el estuporquemehabíaprovocado su comportamiento,meacordédemiscontradictorias órdenes y sentí algo de vergüenza —sin saber en el fondo porqué— ante esaextraordinaria y simpáticamujer cuyapresenciamehaparecidohaber purificado el aire de…Mepasélamanoporlacara:unligeroolor,excitante,salvaje,elextraordinarioperfumedelaprincesa

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estabatodavíaadheridoamipiel.DiaFrauFrommunaexplicaciónquequeríaserdeuntonoalegre:—¿Ossorprendéis,queridaFrauFromm,demiversatilidad?Nolotengáisamal.Precisamente,

mitrabajo—esbocéunvagogestohacialamesaquefueseguidoatentamenteporFrauFromm—misreflexiones y la inspiración del momento han sido la causa que la visita de esa dama haya sidorepentinamentebienvenida.¿Mecomprendéis,noesverdad?

—Comprendoperfectamente.—Asípuesveisquenoesningunaextravaganciademiparte…—Yosóloveounacosa,quecorréisungravepeligro.—¿Pero, Frau Fromm —me puse a reír un poco desagradablemente impresionado por la

sequedaddemigobernantaquenocorrespondíaennadaamitonocordial—dedóndesacáisestassorprendentessuposiciones?

—Nosonsuposiciones,señor.Vaenello…¡Vaenellovuestravida!Un escalofrío me atravesó. ¿Frau Fromm se hallaba en uno de sus «estados»? ¿Veía con los

sentidosdeunasonámbula?Meacerqué.Losojosdelarubiamuchachameseguíanobstinadamenteysosteníanmimirada.¡Noeralafisonomíadealguienenmediotrance!Continué,enuntonoalegre:

—¡Quevais apensar,FrauFromm!Estadama,unaprincesaChotokalouguine, rusa caucasianaquehahuidodesupaísycomparteladeplorablesuertedetodoslosperseguidosyproscritosporlosbolcheviques,estadama,FrauFromm,estadsegura,notieneconmigoningunarelaciónque…que…

—…quetiendeaponerosasumerced,señor.—¿Cómo?—¡Porquenolaconocéis!—¿Yvosconocéisaestaprincesa?—¡Laconozco!—¡Vos…conocéisalaprincesaChotokalouguine!¡Algoquemeinteresaensumogrado!—Laconozco…peronoenpersona…—¿Pero?—Laconozco…delotrolado.Allídondetodoesverde,cuandoestoyahíabajo.Nocuandohay

claridadcomodecostumbre…—Nocomprendobien,FrauFromm.¿Quéesloqueesverdealotrolado?—Yo lo llamo la tierraverde.Muchasvecesestoyallí abajo.Cuandoestoyahíabajo, escomo

bajoelagua,mirespiraciónsedetiene.Estáamuchaprofundidaddebajodelagua,enelmar,ytodoestáinundadoenunaluzverde.

¡Latierraverde!…Oímipropiavozcomosimevinieradelejos,demuylejos.Estapalabraseapoderó demí con la violencia de una catarata.Quedé absorto y repetímuchas veces: «¡La tierraverde!».

—Nada bueno viene de ahí abajo, lo sé siempre que estoy ahí, —continuó Frau Fromm sincambiarlacasiindiferenteinflexióndevozysinembargoparticularmenteduraycasiamenazante,dondevibrabanunatimidezyunaangustiacontenidas.

Forcémiembotamientoparapreguntarle,comounmédicoquellevaconcuidadosuexamen:—¿Decidme, esta «tierra verde» que a menudo veis, que tiene que ver con la princesa

Chotokalouguine?—Ahíabajollevaotronombre.

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Mitensióneraintolerable.—¿Quénombre?…FrauFrommsedetuvo,memirósinparecerverme,dudó:—Yo…yoyanolosé.—¡Intentadrecordar!—casi…casigrité.Sentíqueestabasometidaamimandato,peroselimitabaasacudirlacabezaconunindecibleaire

desufrimiento…Cuandolaconexiónserestablezca,medecía,elnombresaldrá.SinembargoFrauFromm se callaba. Por primera vez se apartó de mí. La vi resistirse al mismo tiempo queinstintivamenteintentabaaproximarseamí.Yomeesforzabapordominarmiagitaciónyabandonarmipoder,pordesatardeellamivoluntad,afindehacerlavolverensímisma.

Tuvounas sacudidas.No comprendí lo que la empujaba a levantarse repentinamente y avanzarlentamente los pies. Luego se puso a andar, pasó lentamente antemí con un aire tan perdido, tantrastornadoporelesfuerzodelabúsquedaqueexpresaba,queunalientocalientemesubióalcorazóny sentí unas ganas locas de atraerla hacia mí, de consolarla, de llorar con ella, de abrazarla, deestrecharlacomoalapersonaquerida.Necesitétodamifuerzadevoluntadparanohacerloquemiimaginaciónyahabíarealizado.

FrauFrommpasóanteelsillónquetengocostumbredeocuparcuandotrabajoysedirigióhaciaelladoestrechodelamesa.Susmovimientosteníanalgoextrañamenteautomático,sumiradaeraladeuncadáver.Luego,cuandoabriólaboca,elsonidodesuvozmeparecióabsolutamenteextraño.Detodassuspalabrassóloentendíesto:

—¿Todavíaaquí?¡Vete,torturadordeanimales!¡Nomeladarás!Yyote…tesiento…veotupieldeserpientenegrayplata…notengomiedo,tengoelorden…yo…yo…

FrauFrommhabíallegadoamiescritorioporelladoizquierdo.Antesdequenitansólohubierapodido suponer su intención, susmanos tomaron repentinamente, con la brusquedad del gato quesalta,elarcadeToulanegroyplataquehabíarecibidodelbarónStroganoffporlosciudadanosdeLipotineyquehabíadebidoorientartanmeticulosamentesegúnelmeridiano.

—¡Porfin,yatetengoentremismanos,serpientenegrayplata!—silbóFrauFrommypalpó,conunvivoynerviosogestodesustemblorososdedos,lasincrustacionesquedecorabanlatapa.

Mi primer impulso fue saltar y quitarle el objeto de las manos. Sí, después de algún tiempoabrigabalaextrañaysupersticiosaconvicciónquesielarcanopermanecíaenladirecciónproscrita,turbaríadealgunamaneraelordendelmundo.Estapuerililusiónmeobnubilabaeneseinstanteconunaviolenciaperfectamenteinsensata.

—¡Nolatoquéis!¡Dejadlaensusitio!—creíagritar,perosólooísalirdemigargantaunroncosonidomedioahogado.Nopodíaarticularunasolapalabra.

Yheaquíquelosinquietosdedosdelajovensereuníanenunlugarprecisodelasuperficiedeplatapulida,sedesplazabancomoarañas,comoseresvivosyconscientesatraídosdegolpehaciaunpunto por el olor o la vista de una presa común. Se cabalgaban, se empujaban, palpabanobstinadamentealrededordeesepuntocondiligencia,y,derepente,el ligeroclicdeunresorte:elarcadeTouladescansaba,abierta,entrelasmanosdeFrauFromm.

Instantáneamente fui a ella. Ella estaba calmada, tenía el objeto expuesto en sus palmas,me lotendía conun aire que casi era de repugnancia o dedisgustopor unabestia de aspectohorrible opeligroso.Ensufisonomíaseleíaneltriunfo,laalegríayunaespeciedeéxtasisdifícildeanalizarqueactuóenmíamaneradeunamorqueseaproximasuplicanteytímido.

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Sinunapalabratoméelarca.Entoncespareciódespertarse.Porsurostropasaronelasombroyun ligero temor.Sabía lo tajantedemiordendequenada fuera tocadoocambiadode sitioenmimesa.Memirabaansiosaya lavezperplejayseguradesuvictoriaysentíqueenese instanteunapalabradecensuralahabríanalejadoparasiempredemíydemicasa.

Lamisteriosaoladecalorydeafectoquemehabíapenetradobruscamentehastaelfondodemímismo,me impidiópronunciar lapalabraquemeveníaa los labios.Todoello fuecuestióndeunsegundo.

LuegomimiradafuealarcadeToula.Vi,sobreunpequeñocojíndesaténverdecuidadosamentetrabajado, pero ajado y deshilachado por los años, reposar el Lapis sacer et praecipuusmanifestationisdeJohnDee,talcomolohabíarecibidodelÁngelverdedelaventanadeOccidenteenlosúltimosdíasdeMortlake:elcarbóntalladodeBartlettGreenquehabíatiradoalfuegoyquelehabíasidodevueltodelMásAlládeunamaneratanmilagrosa.

Micertezafuetotaldesdelaprimeramirada:elpiedeoroexactamentedescritoporJohnDee,elrefinadopulidodeldodecaedro, todocorrespondía.TeníaantemíelregalodeBartlettGreenydelÁngelverde.

Nomeatrevíadejarcaerlatapa,yaquelasuertequesehabíaofrecidounavezpodíaretirarse,comoparaconJohnDeecuandotiróporlaventanalasbolasrojasyblancas,elregalodelasuerte.

Nohedeperdermástiempo,medigo,laluzmeenvuelveysé,mientrasquemiantecesorJohnDeetanteabaaoscuras.

Alcéconcuidadoelmaravillosocristaldesulechocomidoporlosaños,concuidadoexaminabael enganche del pie, con la montura que mantenía al fragmento de carbón grueso, de un pulidoespléndido,refulgenteentodassuscarasregularesypuseestapequeñaobramaestraenmediodelamesa.

Entoncestuvolugarunenigmáticofenómeno:elcristaldecarbóntemblóensubaseysepusoaoscilar.Parecióqueelpedestal,provistodeunpivote,ledejaralibertaddebuscarsuspolos.Parecióorientarseysepusoporsímismoenelmeridiano.Luegosedetuvo.

FrauFrommyyohabíamosobservadoelespectáculoensilencio.Luegolealarguélamanoyledijesinreflexionar:

—¡Osloagradezco,amigamía…misocorro!Unrayodealegríailuminósurostro.Bruscamentesecolgóyabrazódemimano.Eneltiempodeunabrirycerrardeojos,unaclaraluzmeincendió.Dije,sinsaberloniquererlo

lomásmínimo:«¡Jane!…».Atrajecontramía larubiamuchachaypuseunbesoensufrente.Ellainclinólacabeza.Unsollozosubiódesupecho;balbuceóentrelágrimasalgoquenocomprendí,memiróconunairetrastornado,confundido,desamparado,horrorizado,ysinañadirunapalabra,huyódelahabitación.

***

Las pruebas, los signos se multiplican. ¿Por qué dudar todavía y buscar a tientas, cerrandodeliberadamentelosojosalaclaridadquemeenvuelve?¡Elpresentesehadesprendidodelpasado!El presente es la sumade todo el pasado enunmomentodadodel conocimiento, o no es nada.Ypuestoqueesteconocimiento—estamemoria—esposible,enlamedidaenqueelespíritulasuscita,elpresente,entreelflujodeltiempo,eseterno.Sutexturamóvilsepara,seextiendeenunvastotapiz

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que contemplo a mis pies. Puedo indicar con el dedo el lugar donde, en la trama, por un hilodeterminado,comienzalaejecucióndeundibujodeterminado.Ypuedoseguirestehilodeunnudoaotro,adelanteyatrás.Noserompe.Eseleternosoportedeldibujoydelsignificadodeldibujo,eselvalordeltapiz,quenotienenadaqueverconsuexistenciatemporal.

Ahoratengolosojosabiertosymereconozcoporunodeesosnudos:SoyJohnDee,baróndeGladhilldespertándoseal recuerdo, soyelqueda laúltimamanoaldibujoqueridoporeldestino.¡DebomezclarlaviejasangredeHoelDhatydelgranRoderickconlasangredeElizabeth,afindeterminarelmotivodeltapiz!Sóloquedaunapregunta:¿quevalenparamíesosvivoshilosdeotrascadenas que me envuelven o interfieren en mi existencia? ¿Se integran en el plano del tapiz opertenecenalamultiplicidadindefinidadelasotrasimágenesquepareelperpetuojuegodeBrama?

¡Frau Fromm—qué extraño y desde ahora impropiome parece este nombre— pertenece a latextura!¡Diréquehededicadotodoestetiempoadarmecuenta!EsJane, lasegundamujerdeJohnDee:¡mimujer!¡Elvértigometomaymevuelveatomar,vaciloenelabismalsecretodelserquevelafueradeltiempo!

Desdesuentradaensuvidaactual,Janeerraenlosconfinesdesuvidasoñada,muchomáscerca,máspreparadaalsueñoqueyo.¿Yo…yo?¿Nohesidollamadoporprimeravezcuando…miprimoRogersehadesplomado?¿RogertambiéneraJohnDee?¿JohnDeeestáentodaspartes?¿Sólosoyunamáscara?¿Uncachivache?¡Noimporta!Sóloloquevivoahora,enmiahora,cuenta,ynadamás.¡Perobastadepensamientos enmarañados! ¡Losojos abiertosy lasmanos firmes!Nocometeré tuerror,JohnDee.Tufin,primoRoger,noseráelmío.Loshabitantesdelplanetanomezumbarán,ymenostodavíalosInvisibles.QuieneslaprincesaChotokalouguinelosabréantesqueelsolocupeelmismolugarqueahoraocupa.

Sabrédistinguirentreelmensajeroquemetraeunacartayelquemesignificamidestino.¿NoesverdadamigoLipotine?

Hecontemplado largamenteelcristaldecarbónenvariasdesuscaras.Deboconfesar,paramidecepción,quenohevistomanifestarseningúnsíntomadehumo,niebla,nubeoformacomodeberíaserenunespejoocristalmágicoqueseprecie.Enmimano,elcarbónsiguesiendounbello,pulidoytrabajadocarbón,ynadamás.

Me estoy preguntando de golpe si Jane… quiero decir Frau Fromm no poseerá dones máseficacesparaarrancarlesusecreto.Lahellamadorepetidamente.Nolapudeencontrar.Sindudahasalido.Deberíatenerpacienciahastasuvuelta.

Apenasseapagaelecodemis reiteradas llamadaspor toda lacasacuandosuenael timbredelteléfono: ¡Lipotine! Me pregunta si puede venir a verme. Tiene muchas cosas interesantes paraenseñarme…Sí,estaréenmicasa…Bien.Cuelga…

Notuvemuchotiempoparareflexionarsobreestaprontayespectacularintervencióndelregidor«Destino»nideepilogarsobreloqueLipotineteníaquesometerme,puesyaestabaenmidespacho,llegadoconuna rapidezestupefacientesi tenemosencuenta ladistanciaqueseparabasudomiciliodelmío.

¡No! Había telefoneado de al lado, me dice. La idea le había venido de golpe, o más bien elimpulso,yeraporpuracasualidadquejustamentesehubierallevadoloquepodíainteresarme.

Lemiréconunatristezaunpocoescépticaylepregunté:—¿Setratadeunfantasmaodealgoreal?Vamos,decídmelosinrodeos,asípodremoscharlar

muchomásgentilmente.¡Nosabéisquéterribleinclinaciónsientoporlosfantasmas!

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Lipotineaceptólabromaconlamayornaturalidadyconunasonrisaenlosojoscontestó:—Estavezsoyauténtico,nobleamigo.¿Cómopodríasinoaportarossemejante…curiosidad?Hurgó en sus numerosos bolsillos yme tendió, sin transición, entre sus alargados dedos, una

pequeñabolademarfilrojo.Fueungolpe.Literalmentefueunadescarganerviosa,fulgurante.Medescendiódelanuca,porla

espalda,hastalapuntadelospies.—¡Las bolas de la tumba de san Dunstan! —balbuceé. Lipotine me dirigió una de su más

detestablesbromas:—Soñáis,nobleamigo.Pareceque lasbolas rojasosespanten.¿Habéiscogidounamonaenel

billarenvuestrajuventudosidoelobjetodeuntraqueteoenunclubindignodevos?Ydiciendoesto,devolviólabolaasubolsillo,comosinadahubierahabido.—¡Excusadme! —dije confundido— en las circunstancias actuales, hay circunstancias que…

Dadmeesabolaroja,efectivamentemeinteresa.Lipotine,quesehabíaacercadoalamesaconcuriosidad,pareciónohaberoído.Considerócon

granatenciónelcristaldecarbónmontadosobreoro.—¿Dedóndevieneesto?LeseñaléelarcadeToulaabierta:—Devos.—¡Ah!…¡Cumplidos!—¿Porqué?—¿ÉseerapueselcontenidodelúltimobiendeStroganof?¡Extraño!—¿Quéhaydeextraño?—insistíacechándole.Lipotinelevantólosojos.—¡Un trabajo exquisito! Un trabajo de Bohemia. ¡Casi que se le podría atribuir al maestro

Hradlik,elcélebreorfebredelacortedeRodolfodeHabsburgoenPraga!Unavezmásunrelámpagorayómialma:¿Praga?luegorepuse,nosinhumor:—Lipotine,sabéismuybienquevuestroespeluznantesaberenmateriadehistoriadelartenoes

loqueahorameinteresa.Esteobjetosignificamuchomásparamí.—Sí,sí.¡Vedsinembargoelexcelente,preciosotrabajodelabase!—¡Oíd,Lipotine!—estallé—.Decidmemejor,yaquelosabéistodo,cómodebocomportarmeen

relaciónaestacosaquehacaídoenmicasa.—¿Quéqueréishacer?—Yo…yonoveonada,confesélacónicamente.—¡Cierto!—dijoLipotineenuntonopesadoyfalso.—¡Estoy seguroquemecomprenderéis!—dije triunfante.Ahora tenía la impresiónde tener la

barajaenlamano.—¡Unaobradearte!—gruñóLipotine,mordiósuinevitablecigarrilloytirólacolillaencendida

enelcestodelospapeles,negligenciaquemeexaspera—¡unaobradearte!Yciertamenteuncristalmágico,unglass,comosediceenEscocia.

—¿PorquéjustamenteEscocia?—lepreguntécomounverdaderojuezdeinstrucción.—EsteobjetovieneseguramentedeInglaterra,—dijoperezosamente,ymeindicóconlauñauna

inscripción finamente grabada en caracteres gótico tardíos, en la base de la montura. Hasta esemomentosemehabíaescapado.Estabaeninglésydecía:

«Esta noble ymuyvaliosapiedra, cargadade fuerzas prodigiosas, provienede la herencia del

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altamenteiniciadomaestroentodalasabiduríaoculta,eldesafortunadoJohnDee,baróndeGladhill.Enelañodesumuerte,1607».

Asípues,eraunapruebamástestificandoqueelbienmáspreciosodeJohnDee,elqueteníaenmásestimaqueeldineroy todos los tesorosdelmundo,había finalmente reencontradosucaminopara llegar hastamí, el heredero elegido, el administrador de su destino. Este descubrimientomeeliminólaúltimadudasobrelaidentidadprofundadeLipotine.Lepuselamanosobrelaespalda:

—Y ahora, viejo traficante de secretos, decidme: ¿queme traéis? ¿Qué hay de esa bola roja?¿Queremosteñirelplomo?¿Queremoshaceroro?

Lipotine, girando haciamí su cabeza de zorro, respondió evasivamente, pero con el tonomáscalmadoyobjetivo:

—¿Yahabéishechounensayoconelcarbón?¿Nopodéisvernada,noesverdad?No quería escucharme. Estaba decidido, como la mayor parte del tiempo, en hacer sólo su

voluntad.Bien.Conocíaeserasgodesucarácter.Hayquedoblegarse,sinó,nosesacanadadeél.Asípues,lerespondítranquilamente:—No.Quizáshayaprocedidomal,peronohevistonada.—Nomesorprende.—Lipotineseencogiódehombros.—¿Ycómoprocederíaissiquisieraisleeralgoenelcarbón?—¿Yo?Yonotengoganasdeconvertirmeenmédium.—¿Unmédium?¿Ypensáisquenoesposibledeotramanera?—Lomássimpleesconvertirseenmédium,respondióLipotine.—¿Ycomosellegaasermédium?—DirigíosalaSchrenkNotzing[17].—Unamaliciosasonrisasedibujóensucara.—Hablando francamente, no tengo ganas ni tiempo de convertirme en médium, dije

devolviéndolesu ironía.¿Peronoacabáisdedecirmeque llegarasermédiumera lomássimple?¿Quéserálomenossimple?

—Perderlamaníadeconsultarelcristal.—Tenéis razón con vuestras paradojas, reconocí, pero me es difícil en estas circunstancias

dejarlo todo. Ciertas circunstancias me incitan precisamente a conjeturar que sobre las caras delcarbón dormitan las imágenes fijadas —para expresarnos en los términos de los ocultistas—digamossimplementeimágenesdelpasadoquequizánotienenparamíelmásmínimovalor…

—¡Entoncesdebéisaceptarunriesgo!—¿Porejemplo?—Por ejemplo la seguridad de que estaréis expuesto a las sorpresas de… digamos vuestra

imaginación. Las alucinacionesmediúmnicas generan amenudo una especie demorfinomanía delalma.Amenosque…

—¿Amenosque…?—Se«salga».—¿Quéqueréisdecir?—¡Sefranqueeelpaso!—¿Cómo?—¡Comoesto!Lipotine había puesto de repente de nuevo en sumano la bola roja y la hacía jugar entre sus

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dedos.—¡Dádmela!Yaoslahepedido.—¡Oh,no,nobleamigo,nopuedodeshacermedeestabola!Recuerdodegolpequenoesposible.Yocomenzabaaenfadarme:—Acabemos:¿todoesoporqué?Lipotinesepusoserio:—¡Perdonadme!Habíaolvidadoundetalleenrelaciónaella.Sientoqueosdebounaexplicación.

Estabolaeshueca.—Losé.—Contieneciertopolvo.—Losé.—¿Cómolosabéis?—dijoLipotineaturdido.—¡Bromeáis!Creoqueoslohedichounavez:conozcolosregalosdeM.Masceequeproceden

delatumbadesanDunstan.¡Dádmeladeunavez!Lipotinereculó:—¿QuémedecísdeMasceeyde sanDunstan?Nocomprendoni una sílaba. ¡Labolano tiene

nadaqueverconelhonorableMascee!Laherecibidoyomismocomoregaloyahacemuchosañosdeunmonjedecapucharoja,enlagrutaderocadeLingPaenlamontañaDpalbar.

—¿Queréisverdaderamenteabusardemicredulidad,Lipotine?—¡No,nuncahehabladocontantaseriedad!¡Nuncamepermitiríaservirosconquimeras!Heaquí

comosucedieronlascosas:variosañosantesdelestallidodelaguerraruso-japonesa,ibaenmisiónespecialporcuentadeunodemisricosmecenasalaChinadelNorte,enlafronterachino-tibetana.Se trataba de adquirir iconos de templo de un valor propiamente fantástico, viejas pinturas chinassobresedayotrascosasdeesetipo.Antesdepensarenlosnegocios,debíaentablarprimerosólidoslazos de amistad conmis clientes, entre otros con los singulares habitantes deDpal bar Slcyd.Lasecta se llama«Yang».Tienenel ritualmás extraordinario.Esmuydifícil enseñar referente a elloalgopreciso.Yomismo,aunqueversadoenlamagiadelExtremo-Oriente,apenassiheconseguidoentreverlo…Esagentepracticaextrañas iniciacionesentre lascualesestá la fascinaciónde labolaroja.Unasolavezmehaestadopermitidoasistiralaceremonia.Cómoloheconseguidonointeresaanuestropropósito.Losneófitoshacenquemarunpolvocontenidoenlasbolasdemarfilrojo.Todosedesarrollasiguiendosegúnmodosparticularesquenoesmiintencióndescribir.Encualquiercaso,la fumigación está dirigida personalmente por el superior del monasterio, y pone a los jóvenesmonjespostulantes enestadode realizar el«YangYin»odevivir enellosmismos las«bodasdelcírculocumplido».¿Quéentiendenellosporeso?Tambiénmehaquedadooscuro,ynohabloporganas.Pretendenobtenerporesta«extracción»fueradelcuerpoqueresultadelainhalacióndelhumorojo,lafacultaddecruzarellindedelamuerte,ydesposandosu«otramitad»femenina,casisiempreextraviada en la vida terrestre, adquirir inconcebibles poderes mágicos, como por ejemplo lainmortalidaddelapersona,ladetencióndelaruedadelosnacimientos,enunapalabraunaespeciederango divino, negado a los otrosmortalesmientras ignoren los secretos de las bolas azul y roja.Evidentemente,hayquesacardeestasupersticiónlasideasfundamentales,queaparecenenlaformade un estilizado símbolo en la enseña nacional de Corea: los principios masculino y femeninoíntimamente refundidos en el círculo del inmutable. Pero todo ello, noble protector, os esnaturalmentemuchomásfamiliarqueamí.

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Claramentedescubríunmatizdehipocresíaen lasúltimaspalabrasdeLipotine.Debe tenerunamuymezquinaopiniónenloreferenteamisconocimientosdemísticaextremo-oriental.Seequivoca.ElsímboloYin-Yangesobjeto,enelestedeAsia,de lamásaltaveneración.Está formadoporuncírculoquedivideendospartesuna líneasinuosa,engendrandoasídos figurasen formadeperasenlazadas, una roja, azul la otra. El signo geométrico de la unión del cielo y de la tierra, de losprincipiosmasculinoyfemenino.

Me limité a hacer un signo con la cabeza. Lipotine prosiguió: «La secta Yang profesa que elsentidoocultodel símbolo sería la consolidacióno fijaciónde lospoderesmagnéticosde losdosprincipios,sustituidaensudisipaciónconlaseparacióndelossexos.Concibenpues,algoanálogoaunmatrimoniohermafrodita…».

Esofueunnuevorelámpago.Creíqueibaaabrasarmeconsucegadoraclaridad.¡Yin-Yang,elBaphomet! ¡Una sola ymisma cosa!… ¡Una sola ymisma cosa! «¡Es el camino que conduce a lareina!»clamóenmíunavoztanfuertequecreíoírelgritoenmioídodecarne.

Rápidamente,unamaravillosapazdescendiósobremissentidosypensamientossuperexcitados.Lipotinemehabíaobservadoconatención,sinningunadudanotóelcambioquesehabíaoperado

enmí,viomiescalofríoymisonrisailuminadadecertidumbre,pueséltambiénsonrió.—Veoqueconocéislaantiguacreenciadelsecretodelandrógino,—dijodespuésdeuntiempode

espera—.Puesbien,segúnloquemeexplicaronantañoeneseclaustroasiático,elcontenidodeestabolaproduceennosotroslauniónconnuestrofemeninoontológico.

—¡Dádmela!—gritéimperiosamente.Lipotinesepusosolemne:—Debo repetiros quehace sólo un instante, por unhecho inconcebible, una circunstanciamuy

extrañaligadaalaconcesióndeestabolamehavenidoalamemoria.Hedebidoprometeralmonjequemelahadadoqueladestruiríasinoqueríausarlayomismo,peroenningúncasotransmitirlaaunatercerapersona,exceptosiexpresabaeldeseoformalparaello.

—¡Yoexpresoesedeseoformal!—exclamédegolpe.Lipotine,sinunpestañeo,prosiguióenunmismotono:

—Ya sabéis qué sucede con los estrafalarios regalos que un viajero recibe, como signo dehospitalidad,deesascomunidadesmediosalvajes.Enunviajetanlargocomoelquedebícumplir,seacumulandetalmaneraquerápidamenteseolvidaeldetalle.¡PodéisimaginaroselpococasoqueleheprestadoaestabolaofrecidaporlosmonjesYang!Estasespeciesdeperifollosselosmeteenelequipaje, se prosigue el viaje y yano se piensamás en ellos.En lo que amí concierne, nuncahetenidolamenorveleidaddeponermi«Yang»alladodemi«Yin»einvitaramifemeninoacerrarelcírculo.

SobreloqueLipotinehizounacínicarisotada,subrayadaconungestoindecenteylascivo.Hicecomoquiennohavistonadayrepuse,impaciente:—Oídme: reivindico esta bola. Con toda la gravedad, todo el poder de mi ser. ¡Así Dios me

ayude!—añadí,yquiselevantarlamanoahímismoenseñaldejuramento,peroLipotinemedetuvo:—Sí,enestacoyuntura,creéisnecesariojurar,debéisconformaros,aunquesóloseaporbuenos

modos,alritualdelosmonjes«Yang».¿Loqueréisasí?Asentí,mehizoponerlamanoderechaenelsueloydecir:«Lodeseoyasumolasconsecuencias,

demanera que tú estés al abrigo de toda represalia kármica…».Sonreí de lo queme pareció unacomediaunpocobestia,apesardeunaciertasensacióndesagradable.

—¡Ahora ya es otra cosa! —dijo Lipotine satisfecho—. Perdonadme por haber hecho tantas

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ceremonias,pero,entantoqueruso,yomismosoyunpocoasiáticoynoquisieramostrarmeimpíoparaconmisamigostibetanos.

Conesto,ysinmásdilación,mepasólabolaroja,vivamente.Busquéyencontréprontolarosca.¿ApesardetodonoeraunadelasbolasdeJohnDeeydelfarmacéuticoKelley?…Lasdosmitadesdelabolasesepararon.Unpolvodecolorrojogrisáceo,pocomásomenosdeltamañodeunanuez,llenabalacáscara.

Lipotineestabadepiecercademí.Memirabadeladoporencimadesuhombroymehablabaamediavoz.Extrañamentemonótona,neutraylejanasonabaestavozenmioreja:

—Sedebeprepararunacopadepiedrayunfuegopuro;elmejoresunallamadealcohol.Sedebevertirelalcoholenlacopaydespuésencenderlo.Luegoseespolvoreaporencimaelcontenidodelabolademarfil,sedejainflamarelpolvo.Sedebeesperarqueelalcoholsehayaconsumido.Sedebedejarsubirelhumodelpolvo.Unsuperiordebeestarpresenteparasostenerlacabezadelneófito…

Ya no oía el cuchicheo. Rápido, limpié, con tanto cuidado como prisa, la copa de ónice quehabitualmente me sirve de cenicero, vertí en ella el alcohol de la pequeña lámpara de sellar quesiempreestáencimademimesa, loencendíysacudíencimaelcontenidode labolaroja.Lipotineseguíaamilado,yonoleprestabaningunaatención.Bienprontoseconsumióelalcohol.Lentamenteelresiduoempezó,enlacopa,aenrojeceryahervir.Unanubedehumodeunazulverdososeelevóyondulócomodudandoporencimadelacopadeónice.

—Con todapropiedadesuna locuradesconsiderada,—oíy lavozdeLipotine resonabaenmiorejaconsutonomásirónico—,siemprela locaprecipitaciónquedesperdicialapreciosamateriasinsabersihayysecumplentodaslascondicionesnecesariasparaasegurareléxito.¿Quienosdice,nobleamigo,queunodelossuperioresrequeridosestépresenteparadirigirvuestrainiciación?Esuna suerte, una suerte que no osmerecéis, noble amigo, que un superior, por casualidad, se halleaquí,queyoseaporcasualidadunmonjeiniciadoDugpadelasectaYang…?

Yviacercarse,surgirdemuylejos,lapersonadeunLipotineenigmáticamentedesconocido,conunmantovioletaprovistodeuncuriosocuellode toga rojo,bienderecho;en lacabezaunbonetecónico,púrpura,enelcualcentelleaban,unossobreotros,seisparesdeojoshumanosdecristal.Ungozodiabólicoconvulsionabasurostrodeojosachinados.Quisegritaralgocomo«no»,perohabíaperdidoelusodemivoz.Lipotine,oelterriblemonjedesombrerorojo,oeldiabloenpersona,oloquesequiera,meatrapólanucaconunaimplacablefuerzahercúlea,ymemantuvoelrostrosobrelacopainspirandolosvaporesquesubíandelpolvorojo.Unolordulce-amargomesubióalanariz,unaindecibleycrecienteopresión,consacudidasmortalesdeunaviolenciayduracióntanterriblesyespantosas,quesentídesbordarseenmialmageneracionesenterasdehorroressepulcrales.Enestepuntocaíenlainconsciencia.

***

Deloseventosquehedebidovivir«enelotrolado»miespíritunohaguardado,porasídecirlo,ningunaseñal.Creoquedebodecir:¡GraciasaDios!Yaquelostrozosderecuerdos,desmenuzadospor la tormenta,que revoloteanahora aquíy allá en los espaciosdemialmadonde se inscribeelsueño,estántansaturadosdeunpersistentehorror,quemefelicitodenopoderlosdetallar.Recuerdo,perosóloesunrecuerdoconfuso,habervistoyrecorridounmundosemejantealquemedescribeFrauFromm,cuandohablabadelasverdesprofundidadessubmarinasdedestellosvidriosos,donde

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pretendehaberencontradoaIsaíslaNegra…Yotambiénheencontradoahíabajoelhorror.Llevadopor una frenética carrera huía delante, delante… delante de gatos, creo, gatos negros de faucesenrojecidas,deojosllameantes,¡Diosmío,cómosepuedendescribirsueñosolvidados!…

Y luego, en ese estupefaciente sálvese quien pueda, lleno de los terrores más impensados, sedebatía, sedesprendíaunaesperanzadesalvación:«¡Sipuedes llegaralárbol! ¡Sipuedes reunir laMadre, la Madre del círculo azul-rojo (o algo parecido)… te salvarás». Creo haber visto elBaphomet,altoylejanoporencimadelasmontañasdecristal,másalládeindescriptiblesciénagasycalamitososobstáculos.YanorecuerdocómohevistoalaMadreElizabethseñalarmeelárbol…alverlomialocadocorazónsecalmóysalídemiprosternación.Tuvelaimpresión,aldespertarme,dehabervividocienañosenlaprofundidadverde.

Cuandolevanté losojos,Lipotineestabasentadoantemí,clavándomesumiraday jugandoconlosvacíoshemisferiosdelapequeñabolademarfilrojo.Mehallabaenmidespacho,amialrededortodoestabatalycomolohabíadejadoantes…antes…

—Tresminutos,esbastante,—dijoLipotine taciturno,conel rostrodescompuesto.Devolvióelrelojasubolsillo.

Nuncaolvidarélaexpresióndeenigmáticadecepcióndesufisonomíamientrasmeinterrogaba:—¿Y verdaderamente el diablo no os ha atrapado? Ello denota una sólida constitución. Mi

enhorabuena. Si no me engaño, desde ahora podréis operar sobre ese condenado carbón con unciertoéxito.Está«cargado»,loheconstatadomientrastanto.

Loasaltéconpreguntassobreloquemehabíasucedido.Nodudéenhaberafrontadounadeesasfumigacionesquesiemprehanjugadotangranpapelenlaprácticadeunadeterminadamagia.Estabaenunestadodeembriaguezimputablealcannabis,alopiooalbeleño,quereconocíaporelligerodolordecabeza,porelligerohastíodelquetodavíamesentíaenvenenado.

Lipotineseguíaestandotaciturnoygruñón.Sedespidió,despuésdehabermedichoconunaprisabastanteinsolentealgunaspalabras:

—Yasabéisladirección,nobleamigo,idaDpalbarSkyd.ConvertíosenelsucesordelDharmaRajandeBhutan.Tenéistodaslascualidadesparaello.Seosrecibiráconlosbrazosabiertos.Habéissalidodelapruebamásdura.¡Misrespetos,Maestro!

Tomóprecipitadamentesusombreroyse fue…Oíuncortés intercambiodepalabras.Lipotinehabíaencontradoamigobernantaquevolvía.Luegolapuertadelvestíbulosecerró,unminutomástardeFrauFrommaparecíaenla lindedemidespacho,ensucaraseveíanlossignosdelamayoragitación.

—¡Nohabríadebidodejaros!Mereprocho…—Noosreprochéisnada,querida…—Lapalabramurióenmislabios.Lavirecular,temblorosa,

visiblementeasustada—¿Quéossucedequeridaamiga?—¡Elsignoestáenti!¡Elsigno!—tartamudeóconunavozqueseapagaba—.¡Oh,ahoratodo…

todo…seha…terminadoparamí!Apenassituvetiempodetomarlaenmisbrazos.Ellapusolossuyosalrededordemicuello.Me sentí profundamente asustado, y al mismo tiempo, irresistiblemente transportado por un

sentimientodeafinidad,depiedad,deoscuraculpabilidady tambiéndeobligación,enunapalabraporuntorbellinoafectivotanconfusocomoapasionado.

Enlugardeinteresarmeporsuestado,laabracécomoquien…comoquienabrazaalamujerdela queha estadoprivadodurante siglos.Los ojos cerrados, semiconscientementemedevolvíamis

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besos con un ardor, un arrebato, un frenesí que nunca hubiera esperado de estamujer calmada ytímida.

¿Esperado? ¿Señor Dios, qué voy a escribir? ¿Había esperado todo esto? ¡La voluntad, laintenciónnoestánenelloparanada!¡Era,es…eldestino,lafuerzacoaccionante,lafalta,laancestralnecesidad!

AhoraunoyotrosabemosqueJeanFromontyJohannaFromm…queyoyJohnDee…¿cómopodríadecirlo?…quesomosunnudodeltapizdelossiglos,unnudoquevuelvehastaqueeldestinoseaterminado.

Así pues yo soy el «Inglés» que Johanna «conocía» desde sus años de infancia, en losdesdoblamientosdeconciencia.Lossentimientosqueexperimento,enlomásprofundodemímismo,vibranalunísonocon lossentimientosdeJohanna.Elmilagrodeestaexperienciamehaapresadocontantafuerzaquenosabríadesearotraesposaquenoseaella, lamujercon laquecompartoeldestinoatravésdelossiglos.

He tenido con Johanna una larga, muy larga conversación cuando se ha recuperado de sudesvanecimiento.Johannaseobstinaenlaideaqueentrenosotrostodoesvano,desflorado,maldito,inclusodesdeelcomienzo;quesusesperanzassonvanasytodoelesfuerzosobrehumanodesuamory de su sacrificio, disipado porque la «otra» esmás fuerte.Ella podrá hostigar, contrarrestar a la«otra»,peronunca,nuncasuprimirlaovencerla.

Me ha hablado luego de lo que la había asustado tanto al entrar; una viva luz, de limpioscontornos, flotando encima demi cabeza; una luz del grosor del puño, que tenía la forma de uncristal,talladoenunpedazodediamante.

No he podido quitárselo de la cabeza. Rechaza toda explicación plausible y pretende conocerperfectamente,desdehacemucho,estesignoquehavistoeneltranscursodesus«estados».Anuncia,parece,elfindesudestino,laaniquilacióndesusesperanzas.Nodesistedelaidea.Sinrechazar,sinembargo,misbesosytiernaspalabras.Sediceyquieresermimujer…«Tumujerenvirtuddeunadignidadmás antigua que la que podría ser reivindicada por no importa quémujer que viva hoysobre la tierra».Peroenesto, inclusoenesto, lasientoseparadademí.Lanoblezadesupuroser,iluminadoporelamor,mehaprosternado,yhebesadosuspiescomolosdeunasanta,tanvieja,tanviejaytaneternamentejoven.HetenidolaimpresiónqueeraunsacerdotedeIsisarrodilladoeneltemploantesuimagen.

Entonces Johanna me ha rechazado, casi desesperada, se ha defendido de mi adoración,hurañamente,llorandoalágrimaviva,repitiendosinpararquetodo,todoeraporsuculpa,quesóloellahabíadeluchar,deimplorarlagracia,elperdón,expiarsupecado,queeralavíctimaexigida.Imposibleobtenerotraspalabras.

Mehedadocuentaqueestasemocioneserandemasiadofuertesparaella.Lahecalmadoconlaspalabrasmástranquilizadoras,yapesardesuresistencia,laheobligadoaacostarse.Sehadormidodulcemente con mis besos mientras me cogía de la mano. Ahora debe descansar con un sueñoprofundo.¿Enquéestadolaencontraréaldespertar?

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LAPRIMERAVISIÓN

A duras penas puedo seguir, pluma en mano, el flujo de los eventos y de las visiones que mesumergen.

Pidoayudaalassilenciosashorasdelanocheparaconfiarelrelatoalpapel.Después de haber llevado a Johanna—¿no debería escribir más bien, Jane?— a su lecho, he

vueltoamidespachoyheterminadoprimeromiprotocolo,segúnunacostumbrequeheadquiridorecientemente,consignándoleloquehapasadoconLipotine.

LuegohetomadoelLapissaceretpraecipuusmanifestationisdeJohnDee,ymeheabsorbidoenlapensativacontemplacióndelamonturaylainscripción.Pocoapocomimiradasehadeslizadodela montura de oro para atarse cada vez más intensamente a las caras del cristal de carbón deresplendoraceitoso.

Entoncessehaproducido—tantocomoesposiblejuzgaraposteriori—elmismofenómenoqueenel díadel espejo florentinodeLipotine, cuandohabía comenzadoa soñar intensamentequemehallabaenlaestacióndetrenes,dondeesperabaamiamigoGärtner.

Detodasmaneras,despuésdeuninstante,mehasidoimposibledesviarlamiradadelasnegrasyresplandecientescarasdel cristaldecarbón.Luegohevistoesto,omásbiennohevisto, sinoqueestaba«dentro»,enmediodeunalegióndecaballosalazaneshuyendoconestrépitoagalopetendidoenunterrenoonduladodeunverde tirandoanegro.Primeropensaba(lúcidayserenamente):¡Ah!¡Ah!¡ElmarverdedemiJohanna!Perodespuésdeunbrevemomento,percibíconmásdistinciónlosdetallesymeconvencíqueestahordadecaballossalvajespasabaentrombaporencimadebosquesycampos, alternados con un paisaje nocturno, como los feroces ejércitos de Wotan. Y de repentecomprendí:eran,mientrasdormíanensuscamas, lasalmasdemillonesydemillonesdehombresquebuscaban,privadosdemaestroydecaballero,amerceddesuoscuroinstinto,sinsaberellugar,una lejana patria desconocida, de la que sólo recordaban que la habían perdido y no la podíanencontrar.

¡Yomismoerauncaballeroencaballoblancocomolanieve,muchomásrealycorporalquelosotros,queloscaballosalazanes!

Semejantesaespumosasolasdeunmarembravecido,loslibrescorceles,jadeando,franquearona toda velocidad una cadena boscosa que serpenteaba a nuestros pies. En lontananza relucía lapequeñalíneaplateadadeunríodemúltiplesmeandros…

Unlargocircoseabre,cortadoapequeñasalturas.Lalocacabalgatasigueelcursodelrío.Enlalejaníaselevantaunaciudad.Yheaquíquelassiluetasdeloscaballosalgalopesedisuelvenantemisojos engrisesmanchasdeniebla…Yde repente cabalgobajo el claro sol deuna resplandecientemañanadeagosto.Cruzounlargopuentedepiedra,bordeadodealtasestatuasdesantosydereyes.Enlaorillafrenteamíseamontonaunrevoltijodehumildesyviejascasas,sediríaquedominanycomprimenalgunosfastuosospalacios,peroestosorgullososedificiossonasuvezaplastadosporlaenormecorazademurosqueselevantamuyporencimadeunaboscosacolina,masanegracosidadetorres,detejados,deatalayasydecúpulas:«¡ElHradschin!»mesoplaunavozinterior.

¿Estoy en Praga?… ¿Quién está en Praga? ¿Quién soy? ¿Qué pasa a mi alrededor? Me veocabalgandoabuenpasohacialaestatuadesanNepomucenoenlaotraorilla,apenasnotadoporlos

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ciudadanosy loscampesinosquecruzancomoyoelpuentedepiedradelMoldava.SéquehesidollamadoporelemperadorRodolfodeHabsburgoparaunaaudienciaenelBeldevere.Perotengouncompañeroamilado,montaunayegua,vaembozado,apesardelaazulmañanaydelsolardiente,enungabánquesinlugaradudaseslaropadeparadadesuguardarropía,yquesehapuestoparatenermáspresenciaa losojosdeSuMajestad.«Eleganciadevagabundo»,ésteesel juicioquemevienealamente.Yomismonomesorprendodellevarvestidosdecorteantiguo.¿Cómopodríaserdeotromodo?EstamosenlafiestadesanLorenzo,el10deagostodelaño1584delnacimientodeNuestro Señor. He retrocedido en el pasado a caballo, me digo, y ello me parece absolutamentenatural.

Elhombredelosojosderatón,delafrentehuidiza,delmentóndébilesEdwardKelley,quecongran dificultad he disuadido de descender en el albergue La última Linterna, como lo hacen lospoderososyriquísimosbaroneshacendadosyarchiduquescuandovienenalacorte.¡Éltienenuestrabolsacomúnysiemprecaeasuspies,comounverdaderomédicodeferia!Siempreterminallenandosu saco sin vergüenza, teniendo éxito allá donde otros preferiríamos tener la mano cortada,acostarnosdetrásdelaprimeraempalizadaymorirenelnombredeDios.Yasé:soyJohnDee,miantepasado. ¿Cómo podría, si no, conservar un recuerdo tan preciso de todo lo que nos sucediódespuésdenuestrahuidadeMortlakeydelapatria?VeonuestrofrágilveleroenlaManchabajolatormenta,veolamortalangustiademimujerJane,queconelrostrodescompuestoporelespanto,seacercaamíygime:«Debuenaganamuerocontigo,¡oh!¡debuenagana!¡Peronomedejesahogarsola,hundirmeenlaprofundidadverdededondeyanosevuelve!».YdespuésdellamentableviajeatravésdeHolanda,nuestrosaltosynochesenlaspocilgasmássórdidas,paraeconomizarelescasopecunio. El hambre, el frío, una lastimosa odisea con una mujer y un niño, y este mercachifleboticariollenodesubterfugios,sinlosjuegosdemanosdelcualnuncahabríamospodidollegar,atravésdelduro,precozyheladoinviernodel1583,alallanuradeAlemania.

Enseguida,conunfríomuyvivo,hemospasadoaPolonia.EnVarsovia,Kelley,conunpellizcodelpolvoblancodesanDunstandisueltoenunvasodevinodulce,consiguióentresdíascurardelaepilepsiaaungobernador,demaneraque,conlosbolsillosmagníficamentellenos,nosfueposibleproseguirnuestroviajehacialosdominiosdelpríncipeLaski.Éstenosrecibiócongrandeshonoresy nos concedió la hospitalidadmás fastuosa y amigable.Durante todo un año,Kelley se cebó, seenriquecióyseburló.Noparabadeprometeralvanidosopolaco,tomandosuvozdefantasma,lostronosdeEuropaalcompleto,hastaquepusefinaestetimoordenandoiraPraga.Asípues,habiendodisipadoKelleycasitodoloquehabíamos,omásexactamenteloquehabíaextorsionadoalpríncipe,abandonamos Cracovia para dirigirnos a Praga, donde las cartas de la reina Elizabeth merecomendabanaRodolfodeHabsburgo.Ahorahabitoconmimujer,mihijoyKelley,encasadelmuysabiodoctorThadäusHajek,médicopersonaldeSuMajestad,quenosofrecelahospitalidaddesuimportantecasadeAltstädterRing.

Hoypues, tiene lugar laprimeraaudiencia,paramí capital, concedidapor estepríncipede losadeptos,esteadeptoentrelascabezascoronadas,porelemperadorRodolfo.Sermisterioso,temible,odiado y venerado. Cerca demí, Kelley, pleno de seguridad, deja caracolear su yegua y está tanalegrecomosifueraaunodelosbanquetesdadoselañoanteriorenelpalaciodemaderadelpolacoLaski… Pero yo tengo el corazón singularmente repleto de presentimientos, y la sombra querepentinamente seproyecta sobre la resplandeciente fachadadel castillome significa las amenazasque deja gravitar la oscura naturaleza del emperador Rodolfo. Los cascos de nuestros caballos

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resuenanmientrasfranqueamoslabocaabiertadeunapuertafortificadaalextremodelpuente;lejos,detrásdenosotros,separadoporlasmurallas,seextiendeelmundopacíficodeloshombresalegresen sus negocios cotidianos. Aquí, por contraste, son calles sin alegría, silenciosas, que suben, decasas desagradables, aglutinadas. Los negros palacios del camino parecen guardar el amenazantesecreto que emana del Hradschin. Ahora se nos aparece la majestuosa rampa de acceso, que losaudacesarquitectosdelemperadorRodolfohancortadoapicoenlamismamontaña,ensanchandoala fuerza el estrechoyboscosovalle.Antenosotros seyerguen, con su arroganteverticalidad, lastorresdeunmonasterio:«ElStrahov»mesoplalavozinterior;elStrahov,queocultadetrásdesusmudasmurallasatantosmuertosvivos,golpeadosporelrayodelosterriblesdecretosquedispensanlosojosdelemperador.Endobleotriplehilera,lashabitacionesdelpersonalimperial,enlazadaslasunasconlasotrascomonidosdegolondrinasenlaroca,tomandocadaunaapoyoeneltechodelaprecedente.LosHasburgoquierenatodacostaestarrodeadosdesusguardiasdecorpsalemanes,nosefíannadadeesepuebloextranjeroquepululaahíabajo,enlaotraorilladelMoldava.Consumasacompacta, erizada de obras defensivas, elHradschin domina la ciudad.Cabalgamos lentamente, lacuestaesdura,desdeloaltodepequeñasventanas,miradasdesconfiadasnosescrutan.Yasontreslasvecesquehemossidoparadosdeimprevistoporlaguardiaeinterrogados,lacartadelaaudienciaconelemperadorexaminadayvueltaaexaminar.Trepamoslamagníficarampa,lejospordebajodenosotros,Praga…Mimiradaequivalealaqueunprisionerodedicaalalibertad.Aquí,enloalto,unainvisiblemanome atenaza la garganta; aquí, en lo alto, ¡la cima de lamontaña es una cárcel! Laciudad a nuestros pies se envuelve en vapores diáfanos. En el cielo azul-grisáceo de repenterevolotean palomas, se recrean en el aire tranquilo y se desvanecen detrás de las torres deTeynkirche…Sinunmurmullo…irreales…PeroyohetomadoelvuelodelaspalomassobrePragacomounpresagiofavorable.CercadenosotrossuenanlasdiezenelrelojdelaesbeltacatedraldeNiklas.Unsonidomásagudo,imperativo,leresponde,vienedelinteriordelrecintodelcastillo,eselqueanuncia lahora.Elmonarcaesun fanáticode lospéndulos,y tieneporcostumbreordenar sutiempoalsegundo.Desgraciadoelquesepresenteanteélconretraso.

Todavíaquinceminutos,pensé,ymeencontraréenpresenciadeRodolfo.Hemos alcanzado la cima y ya podemos dejar ir a nuestras monturas, pero a cada paso los

alabarderos nos detienen: el control se eterniza. Finalmente el puente de la «Fosa de losCiervos»vibra bajo los pies de nuestros caballos, y nosotros progresamos en el silencioso parque de estemonarcacongustosdeermitaño.

Entre venerables robles descubrimos, bajo sus tejados verde-gris, la ligera construcción delBeldevere,imitandoconmásomenosacierto,elfondodeunnavío.Saltamosdelcaballo.

Mimiradasefijóprimeroenlosbajorrelievesqueadornanloszócalosdegraciosascolumnasterminadasenarco.EnéstaestárepresentadoelcombatedeSansóncontraelleón,ydelante,HérculesahogandoelleóndeNemea.ÉsossonlossímbolosconlosqueelemperadorRodolfohamarcadolaentradadesuúltimorefugio,comosituvieranunaintenciónconminatoria.Esademásconocidoqueelleónessuanimalpreferido,yque,amododeperrofamiliar,hadomadountemibleleónbereber,conelquegustaasustarasusíntimos…Anuestroalrededortodoestádesiertoysilencioso.¿Nohaynadie aquí para recibirnos? En ese mismo instante un sonido cristalino nos responde: las diez ycuarto.

Ydeprontolapuertademaderaseabre.Unsirvientecanoso,sindecirpalabra,noshacesignosde entrar.Al punto, losmozos de cuadra están ahí para conducir nuestros caballos.Estamos en la

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larga y fría sala del Beldevere. Huele sofocantemente a alcanfor. La habitación es un gabinete dehistorianaturalatiborradodeobjetos.Vitrinasdecontenidosexóticos.Muñecosde tamañonatural,representando a salvajes en las posiciones y las funciones más increíbles; armas; animalesgigantescos;utensiliosdetodotipo,estandartesindiosychinos;piezascuriosasdelosdosmundos,todo ello a profusión. A un signo de nuestro guía, nos detuvimos ante una especie de horriblemaniquí demadera, enorme, cubierto de pelos, de cabeza amenazadora y diabólica.El descaro deKelleysehaescondidoen losplieguesmásprofundosdesugabán.Cuchicheaalgoreferentea losespíritusmalignos.Nopuedoimpedirmereíranteestecharlatánquenotienemiedodesuconciencia,yquepalidecedelantedeungoriladisecado.

Peroinmediatamentevinomiturnodetenermiedohastalaméduladeloshuesos.Unadelgadaynegrasiluetaespectralhagiradosilenciosamentelaesquinadelajauladelosmonosyselevantaantenosotros Unas manos amarillas arremangan un manto de paño negro y gastado, y juegannerviosamente conun armaque se adivina, sinduda, un cortopuñal.Todoello coronadoporunacabezadepájaroamarillenta,enlaquellameanlosamarillosojosdeláguila:¡elemperador!

Suboca,casidesdentada,setuerceligeramente.Sóloelpesadolabioinferiorsemantieneflácido,azuladoporencimadelduromentón.Sumiradadepájarodepresanosevalúa.Calla.

Mi genuflexión le parece llegar un segundo tarde. Pero luego, mientras permanecemos derodillasconlacabezainclinada,tieneungestodedesprecio.

—¡Tonterías! ¡Levantaos si tenéis algoenelvientre.Sinomarchaosynomehagáisperder eltiempo!

ÉstefueelsaludodelaugustoRodolfo.Empiezo mi discurso preparado desde hace tiempo con mucho cuidado. Apenas he llegado a

mencionar la graciosa recomendación de mi poderosa soberana, cuando el emperador meinterrumpeconimpaciencia:

—¡Mostradmede lo que sois capaces!Mis embajadores yame transmitenhasta la saciedad lassalutacionesdelospotentados.¿Afirmáisposeerlatintura?

—Másqueeso,Majestad.—¿Quémás?—soplóRodolfo—.¡Lapetulancianovaconmigo!—No es la fanfarronería, sino la inclinación lo que nos ha empujado a buscar refugio en la

sabiduríadelAltoAdepto…—Sépoco.¡Perosuficienteparadespistarvuestraeventualsuperchería!—Nobuscoventajas,Majestad,Buscolaverdad.—¿Laverdad?—Toseelemperador,conunamaliciosa risadevieja—.¿Soy tancretinocomo

Pilatosparapreguntarporlaverdad?Quierosaber:¿tenéislatintura?—Sí,Majestad.—¡Dádmela!Kelley se acercó.Lleva labolablancade la tumbade sanDunstan en su saquitode cuerobien

escondidoensucasaca.—¡QuierevuestraMajestadponernosaprueba!—Protestóllanamente.—¿Quiéneséste?¿Vuestroasistenteymédium?—Micolaboradoryamigo:elmaestroKelley,—respondí,sintiendogerminarenmíunasorda

irritación.—Charlatándeoficioporloqueveo,—silbóelmonarca.

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—¡QuevuestraMajestadmeconcedalagraciadeescucharme!—empecéunavezmás.Contra toda esperanza, Rodolfo hizo un signo. El sirviente gris trae una miserable silla de

campaña.Elemperadorsesientayconungestomeautorizaahablar.—VuestraMajestadpidelatinturadeloshacedoresdeoro.Nosotroslaposeemos,peroposeemos

y—Diosquieraqueseamosdignos—ambicionamosmás.—¿QuéhayqueseamásquelaPiedradelosSabios?—recalcóelemperadorhaciendochasquear

susdedos.—LaSabiduría,Majestad.—¿Noseréiscuras?—LuchamosparaaccederaladignidaddelosAdeptos,entreloscualessabemosquesehallael

emperadorRodolfo.—¿Conquiénlucháisparaesefin?—seburlóelemperador.—Conelángelquenosdirige.—¿Quétipodeángel?—Elángel…delapuertadeOccidente.LaespiritualizadamiradadeRodolfoseapagatrassuspárpadoscerrados:—¿Quéoshaprescritoelángel?—Laalquimiadelasdosnaturalezas:latransmutacióndelmortalenelinmortal,lavíadeElias.—¿Queréistambién,siguiendoeseantiguojudío,subiralcieloenuncarrodefuego?Algunoya

lohaintentadoantemí.Seharotoelcuello.—El ángel no nos enseña prestidigitación.Majestad. Nos enseña, para el cuerpo, el medio de

escapar a la destrucción de la tumba. Puedo ofrecer, a la mirada iniciada de Vuestra MajestadImperial,lapruebayeltestimonio.

—¿Yesoestodoloquepodéis?Elemperadorpareceamodorrarse.Kelleyseagita.—Podemosmás.Lapiedraqueposeemos«tiñe»noimportaquémetal…Elemperadorsaltó:—¡Laprueba!Kelleyexhibesusaquito:—Elomnipotentesoberanopuedeordenar.Estoypresto.—Tú me pareces un afamado aventurero. Pero comprendes las cosas mejor que él, dijo el

emperadorseñalándome.La humillación amenaza con ahogarme. ¡El emperadorRodolfo no es unAdepto! ¡Quiere ver

hacer oro! La manifestación del ángel, su testimonio, el secreto de la imputrescibilidad no leinteresanoleesobjetodeburla.¿Siguelavíadelamanoizquierda?…Derepente,grita:

—¡Quientransmutaantemíunmetalvulgarenmetalnoble,queyopuedacogerconlasmanos,puedehablarmedespuésdeángeles.NiDiosnielDiablovisitanalhacedordeproyecciones!

Siento esta frase como una punzada y no sé por qué. El emperador se ha levantado con unapresteza,unaenergíaquenodejasuponersuaparienciaenfermiza.Levantaelcuello.Sucabezadebuitre se vuelve a sacudidas en todas direcciones, en busca de una presa y hace un signo hacia lamuralla.

Repentinamente,delostapicesdelaparedseabreunapuertaantenosotros.Algunos instantes más tarde, estamos en el pequeño laboratorio del emperador Rodolfo. Está

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provistode todo lonecesario.Elcrisolesperacercadeunfuegodecarbónbienmantenido.Enuninstantetodoestálisto.

Elemperadorconmanoexpertacumplelasfuncionesdeasistente.Prohíbeconamenazasquesetoque sea lo que sea para ayudarle. Su desconfianza no tiene límites.Lasmedidas preventivas quetomareduciríanaldesesperoaunsimulador.Anteélesimposiblehacertrampas.Depronto,seoyeun ligero ruido de armas. Ante la puerta, huelo la muerte al acecho… La justicia de Rodolfo esexpeditivaconlosadeptosambulantesqueseatrevenapresentarleengañabobos…

Kelleypalidece,sumiradamepideayuda,tiemblacontodassusfuerzas.Oigoquesedice:¿ysiahoraelpolvofalla?…Espresodesusangustiasdebuscónambulante…

Elplomosefundeenelcrisol.Kelleydesenrosca labola.Elemperador lovigila,desconfiado.Ordenaqueselepongalabolaenlamano.Kelleyduda,recibeunpicotazodeláguila:

—¡Nosoyuncaco,mercanchifle!¡Dame!Rodolfoexamina, largayatentamente,elpolvogrisenlamitaddelabola.Lacabezadebuitre

tomauna expresión pensativa.Kelley indica la dosis.El emperador sigue sus instrucciones con ladestreza y la precisión de un asistente habituado a obedecer.Hapuesto sus condiciones y juega eljuego…

Ahora,elemperadortiñe.Laproyecciónyaestárealizadasiguiendolasreglasdelarte.Elmetalempiezaahervir.Elemperadorviertela«madre»enunbañodeaguafría.Consupropiamanosacaellingotealaluz:espuraplatacentelleante.

***

Elcálidosoldelmediodíabailaentreelfollajedelosárbolesdeljardínquecruzamosacaballo,alegres, casi exhuberantes, Kelley y yo. Kelley hace sonar la cadena de plata que el emperadorRodolfolehapuestoestamañanaenelcuellocomosignodefavor.Suspalabrashansido:«Plataporplata,oropororo,señorcharlatán.Lapróximavezquierolapruebadequevosotrosmismoshabéishecho el polvo y que podéis rehacerlo. La corona, acuérdate, está reservada a los Adeptos: ¡lascadenaspresagian…cadenas!».

Con ésta clara amenaza, hemos sido despedidos por esta vez de Beldevere, sin conocer a losesbirrosautoresdelruidodearmasquehabíamosoído.

***

LaventanadelaconfortablehabitaciónquehabitoconmimujerymihijoenlacasadeldoctorHajek,enAltstadterRing,dasobrelabellaygranplazadelMercado,limitandoaladerechaconelTeynkirche, a la izquierda con el pomposo Ayuntamiento de la arrogante burguesía de Praga. Seobservauncontinuovaivéndemensajerosimperiales.¿Vanvestidosdepañoyterciopelo?SignificaqueelamodelHradschinnecesitadinero.A títulodepréstamo,conunaselevadas tasasde interés.Lleganconarmasycorazas,hayqueentenderqueelemperadorpiensaenviarabuscareltesoroqueélsereserva,debuenaomalagana.SiemprehayhistoriasdedineroentreHabsburgoyBohemia.

Peroheaquíunextrañocortejo:unmensajerovestidodeseda,seguidoporundestacamentodehombresarmadosacaballo.¿QuéembarazopreparanalBurgomaestre?¿Cómoeseso?¿Porquénosedirigenalagranpuertadelayuntamiento?¡CruzanelRinghacialacasadeHajek!

ElconsejerosecretoCurtius,enviadodelemperador,estáantemí.Setratadedaralemperador

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las «pruebas», los testimonios delÁngel: los protocolos, el libro de la tumba de sanDunstan.Meniegocategóricamente.

—SuMajestadharechazadomiofrecimientodepruebas.Exigequeanteslemuestremistalentosdehacedordeoro.QuieredemílarecetaparafabricarlaPiedra.SuMajestadcomprenderáquenopuedoaccederasudeseosingarantíasprecisasyotroscompromisos.

—¡Elemperadorordena!—ésaeralarespuesta,formuladaenaltaeinteligiblevoz.—Losiento.Yotambiénpongomiscondiciones.—… ordena… incurre en el desfavor de SuMajestad.—Trajín de armas en el rellano de la

escalera.—DebohacerosnotarquesoydelaGranBretaña,baróndelacoronadeInglaterra.Lacartade

mireinaestáenlasmanosdelemperador.ElconsejerosecretoCurtiusechalastre.Fueralasespadasylasalabardassecallan.Siguentratosdeaflicción.¿Cuándoserépreso?—Cuando haya obtenido del emperador una segunda audiencia, que he solicitado diversas

veces…Tododependedesuresultado.Sólolapalabradelemperadorenpersonapuededecidirme.Elconsejerosecretoamenaza,negocia,suplica.Vaenellosureputación.Haprometidotraerlela

liebrecogidaporlasorejasyseencuentra,enlugardelaliebre,unloboquegruñe.¡EsunasuertequeelcobardeKelleyestéausente!El cortejomedio seda,medio hierro, gira la esquina delAyuntamiento, pasa delante del reloj,

célebreenelmundoenteroydesaparece.HeaquíqueKelleycruzaelRing,pareceunagarzaapuntodelanzarelvuelo,dalaimpresión

quecaminesobrezancos.Saledelascallejuelasdondeseencuentranlascasasdemalavida.Trepalaescalerabrincando,seprecipitahaciamí:

—¿Noshainvitadoelemperador?—¡ElemperadornoshahechotraerunacartadeinvitaciónparalaDaliborka!…amenosqueno

seaparalafosadelosCiervosdondesusososestándeseandocarnedeadepto.Kelleypalideció:—¿Traición?—Enabsoluto.Elemperadorsóloquiere…nuestrosdocumentos.—Kelleydiounpisotóncomo

unniñomaleducado:—¡Nunca!PrefierotragarmeellibrodesanDunstan,comohizoantañoelapóstolJuanenPatmos

conelApocalipsis.—¿Dóndeestamoseneldescifradodellibro,Kelley?—Elángelmehaprometidoquemecomunicarálallavepasadomañana.¡Pasado mañana!… ¡oh! ¡Este eterno pasado mañana que os corroe el cerebro y succiona la

médula!¡Pasadomañana!…

***

Meparecequeduermo.Ysinembargonoduermo.AndoporlasviejascallejuelasdePraga,rodeoelbaluartecubiertode

árbolesqueconducealpolvorín.Haylostonosdelotoñoenelfollaje.Ahoragiro,franqueandouna

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puerta,enelZeltnergasse.QuierobajarporAltstáderRinga lasinagogaAltnenyelayuntamientojudío. Quiero, no, debo ir a casa del «gran Rabino» Low, el taumaturgo. Lo he conocidorecientementegraciasamiamableanfitrióneldoctorHajek.Hemosintercambiadoalgunaspalabrassobrelosmisterios…

Mientrasproseguíamicaminoelaspectodelascallescambiaclaramente,bajoelefectodeunaespeciedenecesidad.Tengolaimpresióndesoñarysinembargo,seguramentenoesunsueño,esunestadocomparablealdeJohannaFrommquepuedepasearseporPragacuando…quiere.

¿JohannaFromm?¿Quién es? ¡Migobernanta, naturalmente! ¿Cómopuedohacerme semejantepregunta?JohannaFrommessinembargomimayordoma…Pero…¡yosoyJohnDee!…¡JohnDee,queahoravaavisitaralGranRabinoLow,amigodelemperadorRodolfo!

Ahoraestoyenladesnudahabitacióndeabajodelrabino,habloconél.Hayenlahabitaciónunasilladepajayunamesagroseramenteconstruida.En lapared,aunaciertaalturahayexcavadounpequeñonicho,dondeseapoyamásquesesienta,alamaneradelasmomiasenlascatacumbas.Noquita la mirada de la figura geométrica del «árbol cabalístico» dibujado con tiza en el muro deenfrente.Apenashalevantadolosojoscuandoheentrado.

Está encorvado.No sabría si imputarlo a la edad, que ha vuelto sus cabellos blancos como lanieve,oalapesadezdelbajotechodevigasennegrecidasporelhumo.Pareceunatallagigantesca.Sucabezadepájarodepresa,amarilla,surcadaentodoslossentidosdearrugasindescifrables,hacepensar en la del emperador, pero mucho más pequeña, y su perfil de halcón mucho más agudo.Enmarañadosmechonesdepelo,quenosabríadecirsisoncabellosobarba,caenporlasmejillasyelcuello,rodeaneserostrodeprofetaapenasmásgrandequeunpuño,dehundidospequeñosojos,fogosos,casialegres,bajograndesyenzarzadascejasblancas.Elcuerpo,desmesuradamentegrandeparasu impresionantedelgadez,estávestidoconuncaftándesedanegrabienconservadaydeunaescrupulosalimpieza.Susbrazosysuspiesseanimanconunmovimientoconstante,subrayandosuspalabras,almododelosOrientalesdeJerusalén.

Hablamosdelossufrimientosdelhombreignorante,relativamente,delossecretosdeDiosydesuvocaciónterrestre.

—Hayqueviolentaralcielo,—dijeyrecordéalrabinoelcombatedeJacobconelÁngel.—VuestroHonortienerazón.SefuerzaaDiosconlaoración.—¿Conquéintención,VuestroHonor?—¡ParaobtenerlaPiedra!ElRabinobalancealentamentelacabeza,comounagarzademarismaegipcia.—Laoraciónesalgoqueseaprende.—¿Quéqueréisdecirconello,rabino?—Vosoráis paraobtener laPiedra.LaPiedra esunabuena cosa.Lo esencial sigue siendoque

vuestraoracióngolpeelaorejadeDios.—¿Cómopuedeserdeotramanera?,—exclamé—.¿Acasoorosinfe?—¿Lafe?—repitióelrabinomoviendolacabeza—.¿Paraquésirvelafesinelconocimiento?—Vossoisjudío,rabino.Estaobservaciónsemeescapó.Élmelanzóunamiradachispeante:—Judío. Esto es hablar,VuestroHonor. ¿Por qué, entonces, interrogar a un judío sobre los…

misterios?…Orar,VuestroHonor,esentodaspartesunsoloarte.

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—¡Enesodecísciertamentelaverdad,rabino!Ymeinclino,lamentandomimalditoorgullodecristiano.

Elrabinoconunasonrisaenlosojos:—Vosotrossabéistirarconlaballestayelarcabuz.¡Esmaravillosoverosapuntarytocarvuestro

blanco!¡Propiamenteesunarte!¿Perosabéistambiénorar?¡Esunamaravillavercómoapuntáisycómo…acertáisraramente!

—¡Rabino!¡Unaoraciónnoesunabalaenunarmadefuego!—¿Porquéno,VuestroHonor?¡UnaoraciónesunaflechaenlaorejadeDios!Cuandolaflecha

acierta, la oración es escuchada. Toda oración escuchada, deberá serlo, ya que la oración esirresistible…cuandohaceblanco.

—¿Ycuandonohaceblanco?—Entoncescae,comounaflechaperdida.Amenudoseequivocadedirección,ovuelveatierra

comolafuerzadeOnán,amenosqueel«Otro»ysussecuacesnolainterceptenynolaconcedan…asumanera.

—¿Qué«Otro»?—pregunté,conelcorazónenunpuño.—Qué«Otro»,seburlaelrabino.ElquesiemprevelaentreloAltoyloBajo.ElÁngelMatetrón,

elSeñordelasmilcaras…Comprendoytiemblo:ysi…¿oroenfalso?Elrabinonomeprestaatención.Sumiradasepierdeenlalejanía.Continúa:—NosedebepedirlaPiedrasinosesabeloquesignifica.—LaPiedrasignificalaverdad,—objeté.—¿La verdad?—rió el rabino, exactamente como lo hizo el emperador. Espero oírle añadir:

¿SoyPilatos?Peroelaltoadeptonodicenada.—¿Quéotracosapuedesignificar?—insistíconelalmaincierta.—¡VuestroHonordebesaberqueelsecretosehalladentro,nofuera!…—¡Bien lo sé! La Piedra se la encuentra en sí, pero… se la prepara también en el exterior,

entoncesselallamaElixir.—Atención,hijomío,—murmuróel rabino,cambiandodegolpeel tono,ysuvozmepenetró

hastalomásprofundodelalma—…Atenciónsirezasparaobtener,sireivindicaslaPiedra.Atenciónalaflecha,alblanco,algolpe.¡TencuidadonorecibaslafalsaPiedra,lafalsaPiedraresultantedelfalsogolpe!Laoraciónpuedeconvertirseenalgoterrible.

—¿Estandifícilorarjusto?—Extremadamente difícil, Vuestro Honor. Tenéis razón, es extremadamente difícil golpear la

orejadeDios.—¿Quiénpuedeaprenderestaoraciónjusta?—Orar justo… sólo lo puede quien, desde su nacimiento ha sido ofrecido en sacrificio y ha

ofrecidoelsacrifico.Quiennosólosehacircuncidado,sinoquesabequeestácircuncidadoyconoceelnombrebajotodassuscaras.

—Debodeciros,rabino,quesoydemasiadoviejoyestoydemasiadoavanzadoenmibúsquedadelasabiduríauniversalparahacermecircuncidar.

LosojosdelAdeptoseencienden,ytomanunasonrienteeinsondableprofundidad:—¡VuestroHonornoquieredejarsecircuncidar!¡Esestomásbien!Elmanzanosalvajenoquiere

dejarsecortar.¿Quéaportará?Manzanasácidascomoelvinagredemadera.

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Hueloundoblesentidoenlaspalabrasdelrabino.Sientoqueconfusamentemeofreceunallave,sóloyopuedocogerla.Peromimalhumorcontralosarrogantespropósitosdeljudíosemellevaeneseinstante.

Replicoconsoberbia:—Mi oración no está desprovista de sabiduría y de ciencia. Puede ser que ponga la flecha al

revés,perounángelmemantieneelarcoydirigemigolpe.ElrabinoLowprestóatención:—¿Unángel?¿Quéclasedeángel?LedescriboelÁngeldelaventanadeOccidente.MeesfuerzoenrepresentarleesteÁngelverde

que nos aconseja y que finalmente nos ha prometido, para pasado mañana, la explicación de lafórmula.

Entonces bruscamente es presa de un loco acceso de risa. Sí, una risa que no sabría calificarmejor,yquesinembargonotienenadadehumano.Estarisahacepensarenellocobailedeunibisegipciocuandovea sualcanceunaserpientevenenosa.Entre susenzarzadoscabellosdeplataquerelucenyvolteandearribaaabajoensucabezadepájaro,elpequeñoypálidorostroseconvulsionayse repliegaenunsolopunto,enmediodelcualunagujeronegro ríe, ríe, ríe.Unúnicoy largodienteamarilloseagitahorrorosamenteenelabismotenebroso…Estáloco,pensé…¡Loco!

Lainquietud,una inquietudde laquenoconsigodesembarazarme,meempujaa laescaleradelcastillo.Desdeahorasemeconoceaquí,enelbarrioalemán,comoelalquimistainglésquesepaseaporlafortalezaysusalrededores.Enverdad,mispasossiempresonvigilados,nopuedoiryvenirami gusto. Necesito estas callejuelas tranquilas, este baluarte lleno de árboles. Necesito aislarme,alejarmedeKelley,elvampirodemialma…Mepierdoenlascallejuelas.MeencuentroanteunadelascasasqueseagarranalasmurallasdelHradschinymimiradasedirigealrelieveesculpidoenelportalojival:JesúsenelpozoconlaSamaritana.Encimadelángelestágrabadalainscripción:Deusest Spiritus. Deus est Spiritus. Dios es Espíritu. ¡Sí, es espíritu y no oro! Kelley quiere oro, elemperadorquiereoro,yo…¿yyo,noquierotambiénoro?…MimujerJanemehadadomipequeñoArthur que tenía en sus brazos diciéndome: «Como debo alimentar a tu hijo, he cogido el últimotálerode la bolsa».Yvi queyano llevaba en el cuello la joyaque antes siempre llevaba. Janehavendido, pieza a pieza, todo lo que poseía para ahorrarnos el encarcelamiento en la torre de losdeudores,lavergüenzaylaruina.

DeusestSpiritus.Herezadoconelespírituyconelcuerpo.¿HegolpeadolaorejadeDios?¿Elrabino tiene razón? ¿Está siempre sentado en el pozo de la vida para instruir a esta buscadora deagua,elalmacansada?Eloronochorrea,eloronovuela…Aturdido,preguntoaunamujerquesaledelacorte:

—¿Cómosellamaestacalle?Quierosabersunombre.Lamujerquehavistodondeseponemimirada,responde:—CalledelaFontanadeOro,señor,—ysiguesucamino.

***

ElemperadorRodolfo,enelBeldevere,seapoyaenunaaltavitrinaquecontienelareproducciónenceradeunhombredelospaísesboreales,vestidodepieles.Estetíteredeojosoblicuosyoleosostieneen susmanosexcesivamentepequeñasun triánguloyobjetos incomprensibles.«UnChamán»

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mesoplamivozinterior.Al ladodeRodolfo, unhombre con sotananegra se inclinapenosamente, convisibledesgana,

para tratar con la actitud debida ante Su Majestad. Un casquete rojo delataba al cardenal. Lo heidentificado al instante, el cardenal Malaspina, legado del Papa. Habla al emperador en un tonocalmadoydecidido,suslabiosapenassisemuevenmásquelasvalvasdelaspechinas.Pocoapocosuspalabrassemehacenperceptibles:

—VuestraMajestadsehallaasíexpuestoalainsanareprobacióndelpueblo,sediráqueprotegealosmagosnegrosyqueconcedelibreestanciaensuscatólicosEstados,sincontarconfavoresmásinsignes,aestaspersonassospechosas—ysospechosasconjusticia—decomplicidadconeldiablo.

Elemperadorarrojadesdesucabezadebuitre:—¡Charlatanería!Elinglésesunhacedordeoro,yhaceroro,amigomío,esdeldominiodelas

artes naturales. Vosotros, sacerdotes, no sojuzgaréis el espíritu del hombre que mediante lainterpretación de losmisterios profanos de la naturaleza, tiende, con una veneración tanto omásgrande,asondearlossantosmisteriosdeDios.

—…paraterminarcomprendiendoqueseresumenenlagracia—completaelcardenal.Losamarillosojosdelemperadorseapagarontotalmentebajolosperezosospárpados.Sóloel

gruesolabioinferiorvibraconunasecretaironía.Elcardenaldescubreunpocomáslascomisurasdedelgadaboca,segurodesusuperioridad:

—Seacualsealaopiniónquesetengasobreelartedehaceroro,estegentilhombreinglésysuaventurero compañero, han reconocido abiertamente que no buscan tanto el fabricar oro y plata,comoconquistarsobreelcuerpounpodermágicoyvencerlamuerteavoluntad.Tengosobreellomuyprecisasinformaciones.Apartirdelocual,ennombredenuestrosupremoSeñorJesucristoydesusantorepresentanteenlatierra,acusoaesteJohnDeeyasucompañerodeprácticasdemoníacas,demagianegraultrajandoaDios.Elbrazosecularnopuedeinhibirsedesuoficio.Seríaperjudicaralacristiandad,¡VuestraMajestadsabelomuchoqueestáenjuego!

Rodolfo,repiqueteandoconsusdedossobrelavitrina,refunfuña:—¿Debo entregar a todos los locos y paganos a las cárceles delVaticano y a las hogueras de

vuestramorgueeclesiástica?ElSantoPadremeconoce,sabequehijotancelosoydefensordelaFesoy,peronodebehacerdemíelesbirrodesusesbirrosquemeespíanpasoapaso.Sino,finalmentepuede que deba firmar, de mi propia mano, la sentencia de muerte de Rodolfo de Hasburgo,emperadordelSantoImperioRomano,pordelitodemagianegra.

—VuestraMajestaddefineporsímismaloslímitesdetodaslascosasterrestres.JuzgayrespondeanteDiosdeloquemereceRodolfodeHasburgo…

—¡Basta de impertinencias, sacerdote!—silba el emperador. El cardenal Malaspina se inclinaalejándose,comounaserpientepicadaporunáguila.Subocahaceunamuecaporsonrisa:

—Los servidoresdelSeñorhanaprendidodelMaestrode losmaestros anodejar salir de suslabiosmásquealabanzasaDios,inclusocuandolosapabullanagolpesyescupitajos.

—¡Y la traición en el corazón! —contesta el emperador. El cardenal se inclina profunda ylentamente:

—Entregamos,enlamedidadenuestrosmedios,lastinieblasalaluz,ladebilidadalaMajestad,elimpostoralavigilanciadeljustojuicio.JohnDeeysudiscípuloprocedenenlaherejíaenunadesus formas más monstruosas. Llevan los estigmas de la blasfemia, de la violación de sepulturasagrada,delcomercioconlosmásnotoriossecuacesdeldiablo.ElSantoPadredeRomalamentaría

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verseobligadoausurparlasfuncionesdelbrazosecularydehacerpúblico,anteelmundoentero,eldiscretoprocesodeesteJohnDee,endetrimentodelaautoridadimperialformajuris.

El emperador lanza al cardenal una encendidamirada de odio.Ya no se atreve a arriesgar unpicotazo.Eláguilahahechoerraralaserpiente.

***

Me hallo en una habitación detrás de nuestro apartamento en casa del doctor Hajek, lloro,abrazadoalcuellodeKelley.

¡ElÁngelhaayudado!¡ElÁngelseabendito!ElÁngelhaayudado…KelleytieneensusmanoslasdosbolasdesanDunstanabiertas.Denuevoestánambas llenashastaelbordede lospolvosrojoygris,concedidosporelÁngel

verdelanocheanterior,enunasesiónqueKelley,sinadvertirme,harealizadosoloconJane.Sí,entremis temblorosas manos tengo esta nueva riqueza, pero hay mucho más: ¡El Ángel verde hamantenido su palabra! ¡No ha eludido la oración que le he dirigido desde la fontana de oro!Misruegosnohanvueltoacaerentierra.MisoracioneshantocadolaorejadeDios.¡HantocadoenelcorazóndelÁngelverdedelaventanadeOccidente!…

¡Oh alegría! ¡Oh certeza!… ¡Mis esfuerzos no eran vanos, no había escogido el mal camino!¡Entremismanosreposalapruebadelaautenticidaddenuestraalianza!

¡Findelosmalesdelcuerpo!Ylosmalesdelalmaconlaconsumacióndeldeseoseatenúan.¿YelsecretodelapreparacióndelaPiedra?Amispreguntas,KelleyrespondequeelÁngelnolo

ha revelado; su regalo basta por ahora, justifica ampliamente nuestra confianza y fe. Lo demásvendrámástarde,segúnnuestrosméritos.¡Teneryorar!¡Diosdaráalossuyostodoloquelepidanytengannecesidad!

Janeestáanuestrolado,pálida,muda,conelniñoenbrazos.Lainterrogosobreelmodoenquehapasadoestabenditasesión.Ellaclavaenmísusojerosos

ojosdeagotamientoymeresponde:—Nopuedodecirnada.Nosénada.Era…horrible…—SorprendidomevuelvohaciaKelley:—¿QuélehasucedidoaJane?—ElÁngelsehaaparecidoenunintolerablebrasero,—respondióconuntonoreticente.—¡El Señor Dios en la zarza ardiendo! —pensé repentinamente y con un ardiente impulso

amoroso,atrajeamí,sindecirpalabra,amivalienteesposa.

***

Vagasimágenespasanantemí,nebulosas,recuerdosqueafloranenunestadomediosonámbulo.Granalgazara,banquetes,apretonesdemanos, intimidadcongrandesseñores,noblesdebrillantescadenasyespuelas,diplomáticosysabioscubiertosde terciopelosyseda.Desfilesen lasestrechascallejuelasdePraga.Kelley,alacabeza,esparcelocamentelaspiezas,quesacadeunabolsadeplataabierta, sobre la masa que se apretuja chillando. Somos el milagro, el escándalo, la aventura dePraga.Insensatosrumoresquenostienenporprotagonistasllegananuestrosoídos.Senostomaporingleses fabulosamente ricos que se divierten engañando a la corte y a los burgueses de Praga alhacerse pasar por Adeptos y Alquimistas. Y de todos los embustes que corren, éste es el menosnocivo,elmenosmalévolo.

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LargasyextenuantesdiscusionesconKelley,porlanochedespuésdelruidodelasfiestas.Kelley,hartodevinoydelacocinadelpaís,vacilaycaeagotadoensulecho.Incapazdesoportarpormástiempoelcotidianoespectáculodeestasdementesdilapidaciones,locojoporelcuellodesucamisaysacudoaesteborrachogritándole:

—¡Cerdo! ¡Bestia! ¡Falso abogado instruido en las alcantarillas de Londres! ¡Retorna a lacordura!¡Vuelveenti!¿Cuántotiempocreespoderseguirasí?¡Elpolvogrisyasehaacabado!¡Elrojo,reducidoalamitad!

—ElÁngelv…verdemedarábienprontounanuevara…ración,balbuceaelbellaco.Orgullo, lujuria, despilfarro imbécil de una prosperidad nunca conocida, grosera y estúpida

vanidad, insolencia de nuevo rico.Éstos son los pájaros nocturnos que el oro del ángel ha hecholevantar en la oscura alma de Kelley, el hombre de las orejas cortadas. Compañero aceptable entiempodepenuria,virtuosodelhambre,nuncafaltodelosrecursosmásosadosparapasaratravésdelamiseria,ahoraqueporsegundaveztienelaabundanciaylosuperfluo,esimposiblefrenarlo,retenerloensuborracheradisipadoraquesemultiplicaporeldesencadenamientodesusinstintosdedesenfreno.

Diosnoquierequeeloroseacomúnenlatierra.Puesestemundoesunapocilgaparaloscerdos.

***

No puedo detenerme, algo me empuja a bajar por las estrechas callejuelas del corazón de laciudad,haciaelMoldava,haciaelRabinoquesehaburladodemicreenciaenelángelconunarisadeloco,quemehaexpulsadodesucasaporesemovimientodesudienteamarillocuandosereíadelafervientesolemnidaddemife.

Me hallo ante una de esas viejas casuchas, altas como torres, que dan sobre el oscuro ghetto.Dudouninstanteelcaminoquetomar,cuandounavozdesdeunapuertadeojivamecuchichea:«¡Poraquí!¡Poraquíelcaminoqueosllevaalametadeseada!»yyodirijoelpasohaciaesegritoinvisible.

En un pasaje oscuro, de repente, me siento rodeado de hombres extranjeros. Me empujancuchicheandoporun túnel lateral, cruzounapuertadehierroymehallo enun largo corredordepenumbracuyocarcomidopisorevoloteapolvorientoanuestropaso.Estámezquinamenteiluminadopor largas antorchas puestas en las hendiduras del muro. La angustia hace presa en mí: ¿en quéacechanzahecaído?Medetengo:¿Quéquierendemí?Lassiluetasqueseapretujanamialrededorestánenmascaradasyarmadas.Sedistingueeljefe.

Levantasumáscara.Esunahonestacaradesoldado.Dice:«porordendelemperador».Doyunpasoatrás:«¿Detenido?¿Porqué?¡Oshagorecordarlasgarantíasquemedalacartade

lareinadeInglaterra!».Eloficialsacudelacabezayprecisa:—No se trata de deteneros, sir. El emperador desea veros y tiene razones para mantener en

secretovuestravisita.¡Seguidnos!Elcorredorsehundevisibleyprofundamenteenelsuelo.Laúltimaluzdeldíasedesvanece.El

suelodemaderadesaparecebajonuestrospiesyesreemplazadoporunbarroresbaladizo.Humedad,olor a moho, paredes apenas desbastadas. De pronto, ¡alto! Conciliábulo a media voz de miscompañeros.Mepreparoparaunamuertebrutal,imprevisible,espantosa.Desdehacetiempotengoel

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sentimientodequenoshallamosenel subterráneo secretoque segúndiceelpueblovade laviejaciudadalHradschinpasandopordebajodelMoldava.LosobrerosqueloexcavaronporordendelosHasburgoshabríansido,unavezterminadoeltrabajo,ahogadoshastaelúltimohombre,paraquenopudierantraicionarelsecretodesuentrada.

Derepenteunaantorchaarde,otrasseencienden,yconsufulgorveoqueprogresamosenunaespeciedegaleríademina.Detiempoentiempo,grandesvigasapuntaladassostieneneltechotalladoen la piedrabruta.Aveces se oyeun sordomurmullovenidodequién sabedóndepor encimadenuestras cabezas. Durante mucho, mucho tiempo andamos así, entre el insoportable olor de estepasadizo. Innumerables ratas desaparecen entre nuestras piernas. A cada paso despertamos algúnrepugnanteinsectoquepululaentreloscascotesylasrajasdelasparedes.Losmurciélagosaleteanysequemanconlasantorchasencendidas.

Finalmente, el camino vuelve a subir. A lo lejos se ve una vaga luminosidad azulada. Lasantorchasseapagan,Miojohabituadoalapenumbra,constataqueloshombresponenloquequedadesusantorchasenunosanillosdehierroclavadosaquíyalláenlapared.Después,otravezmaderabajonuestrospies.Lapendientede lagalería sehacemáspronunciada,cortadaenescalones.Diossabedóndeestamosycuándosaldremos.Peroyaencontramosluzdedía.Depronto:«¡Alto!».Doshombreslevantancongranesfuerzounatrampilladehierro.Trepamosyhenosaquíenunapobreyestrechacocina,hemossurgidodelhogarcomoquiensurgedeunpozo.Debeserunachozaoalgoparecido, con las dimensiones de una muñeca, así como la puerta por la cual penetramos en unpequeño vestíbulo que da a otra exigua habitación donde entro solo. Mis compañeros handesaparecidosilenciosamentedetrásdemí…

Antemí, en un voluminoso butacón que ocupa la casi totalidad de la pequeña habitación, estásentado el emperador Rodolfo, vestido exactamente como la primera vez que lo encontré en elBeldevere.

Asuladounaventanahacialacualsubenalhelíesdoradosporlacálidaluzdelsoldemediodía.Lahabitación tieneunaire intimista.Desdeelprimermomento invitaal sosiego,a laalegría, a laserenidaddelabandono.Casitengoganasdereíralvermeenestelugardondepuedeesperarseverunjilguerocantandoensujauladespuésdeesteviaje tantenebrosoyhorrorosoa travésdeeste túnelbajoelMoldava.

Elemperador, sinhablar,mehaceunsignocon lacabezae interrumpemigenuflexiónconungesto de su pálida mano. Me invita a sentarme ante él en un confortable butacón como el suyo.Obedezco.Silencioenlahabitación.Fuera,elmurmullodelosviejosárboles.Unaojeadaechadaalexteriormedesconciertacompletamente:estelugarmeestotalmentedesconocidoenPraga.¿Dóndeestoy?Más allá de las copas de los árboles que apenas llegan a la altura de la ventana se alzanescarpadasparedes.Porconsiguiente,noshallamosenunacasaquedominaunpequeñobarrancooen un pliegue montañoso… «La Fosa de los Ciervos», me sopla mi voz interior. El emperador,lentamente,seyergueenunbutacón.

—Oshehechovenir,MaestroDee,porquehetenidonoticiadequevuestrafabricacióndelorovaabuenpaso,amenosqueunoyotroseáistaimadosimpostores…

Mecallo,manifestandoconmisilencioquehagooídossordosalosinsultossalidosdelabocadeunhombrequenotieneporquépreocuparseendarmelarazón.

—Asípues,podéishaceroro.Bien.Desdehacemuchoquebuscogentedevuestraespecie.¿Quédeseáis?

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Mecalloymiroalemperadorsindesfallecer.—Enotraspalabras:¿Quéqueréis?—Mirespuestaes:—VuestraMajestadsabequeyo,JohnDee,baróndeGladhill,notengo,comoesosmercanchifles

ycharlatanespseudoalquimistas, laambiciónde llevarunavidade libertinajemedianteeloroqueproporcionala«tintura».DelAdeptoImperialquerríasabiduríayconsejo.Buscamoslapiedradelametamorfosis.

Rodolfo inclina la cabeza a un lado. En esta pose, se asemeja ciertamente a una vieja águila,inspirando un respeto mezclado por un sentimiento indefiniblemente cómico y melancólico, quecontempla con resignación el cielo del que está separado por las barras de hierro. «El Águilaprisionera»eselpensamientoqueinvoluntariamentemehavenido.

Finalmente,elemperadorresponde:—¡Herejía,sir!Elviáticodenuestrametamorfosis está en lasmanosdelvicariodeDiosen la

tierra,selellamaelSacramentodelPan.—Lafrasesuenamedioamenazante,medioirónica.—LaverdaderaPiedra,Majestad—tanto comomeatrevo apresumirlo—sólo tienede común

conlahostiaelser,tanpococomoéstadespuésdelaconsagración,materiadeestemundo.—¡Teología!—diceelemperador,enuntonocansino.—Alquimia.—EntonceslaPiedradebeserunmágicoinjectum[18]quetransmutanuestrasangre,—murmura

elemperadorpensativo.—¿Yporquéno,Majestad?¿Elaurumpotabile[19] seríaalgomásqueunbrebaje transmitidoa

nuestrasangre?—¡Estaríaisloco,sir,—interrumpeelemperadorconrudeza—,ytenedmuchocuidadoconesta

Piedra, que una vez obtenida por vuestras súplicas, no llegue a ser un día una pesada carga paravuestrocuerpo!

¿CómopuedeserqueestaspalabrasdelemperadordespiertenenmíelecodelasadvertenciasdelrabinoLowenloqueserefierealasoracionesqueyerransumeta?…Despuésdeunalargapausa,respondo:

—Quienesindignocomeybebesujuicio,diceelSeñor.—ElemperadorRodolfocomomovidoporunresorte,alzaelcuello.Tengolaimpresióndeoírledarunpicotazo:

—Osdoyunbuenconsejo,sir,hacedcomoyo,nobebáisnicomáisnadaqueantesnohayasidoprobadoporotro.Elmundoestállenodeengañosyvenenos.¿Séloqueunsacerdotemetiendeenelcáliz?¿ElcuerpodelSeñornopuede…quererqueyomevayaal cielo? ¡Nosería laprimeavez!Ángelverdeypastoresnegros,carnadadelinfiernoestodoello…¡Osprevengo,sir!

Tiemblo. Recuerdo que aquí y allá, en el transcurso de nuestro viaje hacia Praga, he oídorumores, también puedo traer al caso de las alusiones, de lasmuy prudentes alusiones del doctorHajek:elemperadornoestásiempreenplenousodesusfacultadesmentales…quizáestá…loco.

Unadesconfiadamiradaseponeoblicuamenteenmí:—Unavezmásosprevengo,sir.Siqueréistransmutaros,transmutarosrápido.Osloaconsejo.La

santa Inquisición se interesa vivamente por vuestrametamorfosis. Nos podemos preguntar si esteinterésestotalmentedevuestroagrado.Ysiyoestoyenlamedidadeprotegerosdelamisióndeestabienhechorainstitución…Debéissaberlo:soyunviejomuysolo.Notengomuchoquedecir…

Podríadecirsequeeláguilaquiereadormecerse.Mipechosesolivianta;elemperadorRodolfo,el hombre más poderoso de la tierra, el monarca ante quien tiemblan los reyes y los prelados,

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pretendequeesunhombredébil…¿Comedia?¿Maldad?Entresuscasicerradospárpadoselemperadorleemispensamientosenmirostro.Tose,irónico:—¡Convertíosenrey,sir!¡Entoncesconstataréisquelarealezaesunlargocalvario!Quiennose

haencontradoélmismo,quiennotienedoscabezascomoelÁguilademicasa,nodebealargarlasmanoshacialacorona,seadelatierra,sealadelainiciación.

El emperador se abisma él mismo en el colmo del cansancio. Un vértigo se apodera de missentidos.

¿Cómo es que este enigmático viejo, sentado antemí en su butacón, conocemis secretosmásíntimos? ¿Cómo puede dudarse…?Y pienso en la reina Elizabeth. ¿Nome ha conocido también,antaño,propósitosquenohabíanpodidogerminarensucerebro?¿Quéemanabandeotroreinoenelcual Elizabeth no tenía conciencia de haber echado el ancla? ¡Y ahora, el emperador Rodolfo!¡Tambiénél!¿Cuálesestaturbadoravirtudatadaalosquesesientanenuntrono?¿Sonlassombrasdeseressuperioresqueestáncoronados«alotrolado»?

Elemperadorseyergueunavezmásensusillón:—¿Asípues,dóndeestávuestroelixir?—CuandoVuestraMajestadloordene,selodaré.—Bien. Mañana a la misma hora, dice brevemente. No habléis con nadie de estas entrevistas

conmigo.Esporvuestrobien.Meinclinoensilencioydudo.¿Yasoydespedido?Parece.Elemperadorsehadormido.Medirijo

haciaunapuerta,laabroysaltohaciaatrásaterrorizado,unmonstruodecolorsienaselevantaenlalinde, abriendo una espantosa boca. ¿Un demonio del inframundo? Una segunda mirada, máscalmada,nodisminuyeennadamiespanto:unleóndebuenatalla,fijaenmísusverdesojosdegatomiopeyamenazante.Surasposalenguaserelame,dandotodoslossignosdeunvorazapetito.

Mientras que yo reculo paso a paso, el guardián de la linde avanza, con paso silencioso,negligenteycadavezmásimponente.Ahorasediríaquesepreparaparasaltarsobremicuello.Nomeatrevoagritar.Unmortalespantomeparaliza:¡noesunleón!Estediabólicorostrodecabellerarojiza… gesticula…muestra los dientes con una risa burlona. «¡Es el rostro de Bartlett Green!».Quierochillarperomivozseniegaaservirme.

Entoncesdelabocadelemperadorsaleunsonidoquechasqueacomounlátigo.Elmonstruogirala cabeza, se desliza hacia el sillón y se tumba ronroneando. El peso de su enorme cuerpo hacetemblar el parquet. ¡Y sólo es un león!Un gigantesco espécimen de león bereber de cabellera defuego.

Elemperadormehaceunsignoconlacabeza:—Vedquebienseosguarda.El«leónrojo»velaentodaspartesenellímitedelosmisterios.Es

lainfanciadelartequeseinicia.¡Id!

***

Un estruendo insoportable. Una encendida música de danza. Una sala inmensa. ¡Ah! sí… yarecuerdo: es la fiesta que damos, Kelley y yo, en la ciudad de Praga en el gran salón delAyuntamiento. Las voces y los pataleos, los vivas de los invitados medio borrachos consiguenvolvermeloco.Kelleyseacercaamilado,conunpotellenodecervezadeBohemia.Laexpresióndesu rostro es vulgar. Increíblemente vulgar. Las cicatrices de las cortadas orejas han enrojecido,

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asquean.—¡Hermanodemicorazón,—babeaelborracho—,he…hermanodemicorazón,dameelresto

delpo…polvorojo,yalo…toca,es…estamos…si…sin…sinblanca,hermanodemicorazón!Encolerizado,estalloalavezdeespantoydedisgusto.—¿Cómo? ¿Ya se ha disipado todo lo que hemos arrancado al Ángel a fuerza de orar y

sangrarnoslasrodillasdurantemeses?—¿Quémeimportantusrodillasensangrentadas,hermanodemicorazón?—gritaatodavozel

alegrebruto—¡Dameelpo…polvo,comprende,yestaremostranquiloshas…hastamañana!—¿Yluego?—¿Luego?Elgranburgravedelemperador,eseUrsinuscondeRosenberg,eseloco,quepre…

yapresta…Elfurormedevora,mecorroe.Doyunpuñetazoaciegas.Elpotedecervezacaeconestrépitoal

suelo y salpicamimejor túnica de espesa cerveza deVysehrad.Kelleymasculla un juramento. Elodio anuestro alrededor lanza sus lenguas envenenadas a travésde losvaporesde laorgía.Enelsalónlamúsicasuena:

Trescéntimos,tresmonedas.Tresbesosbastarán[20].

—¡Insolente!—gritaelcharlatán—.¡Elpol…polvo,tedigo!—¡Elpolvoestáprometidoalemperador!—Elemperador,yome…—¡Silencio,perro!—¡Baróndeladrones!¿Aquiénpertenecenlasbolasyellibro?—¿Quiénhadadovidaalasbolasyallibro?—YquediceelÁngel:¡Eh,trae!¿Vale?—¡Infame,lenguaviperina!—¡Mo…mojigato!—¡Fuerademivista,blasfemo,o…!Por detrás dos brazos me abrazan, impidiendo a mi desnuda espada golpear. Jane se lanza

llorandoamicuello.

***

…Poruninstantehevueltoaserelhombresentadoensumesa,fijoenelcristaldecarbón—uncortoyrápidoinstante—yaquecasi inmediatamentemesientodenuevoJohnDee,miantepasado.VagabundeoporlosbarriosmásviejosymásdeterioradosdelaPragamedieval,ynosédondemellevaránmispasos.Sientolanecesidaddehundirmeenelfangodeestamasaanónima,inconsciente,irresponsablequepasasusembrutecidosdíassatisfaciendosusturbiosinstintosysesientecolmadacuandotienelabarrigallenaylaslujuriasquecalmansucelo.

¿Cuál es el resultado de todosmis esfuerzos?Cansancio…Asqueo…Desespero…Lamiseriaaristocrática y la miseria plebeya son una misma miseria… El emperador no digiere de maneradiferente que el pocero… ¡Qué error el levantar los ojos hacia ahí arriba, hacia la residencia

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imperial, hacia el Hradschin, como si fuera el cielo! ¿Y qué nos viene del cielo? Niebla, lluvia,sempiternacloacadenievefundida.Desdehacehoraspateoenelviscosobarroquederramauncielogrisdeplomo…Asquerosadigestióndelcielo…¡asquerosa!Medoycuentaquesinproponérmelohe llegado alghetto. Hasta los réprobos y entre los réprobos. Sofocante hediondez de un puebloinexorablemente encerrado en algunas callejuelas, que procrea, pare y prolifera; que pone en sucementeriolosmuertosencimadelospodridosmuertos,amontonalosvivosalladodelosvivosensusoscurasmoradasconaspectodetorres,comosardinas…Yrezan,yesperan,ysearrastransobresus sangrantes rodillas, y esperan…esperan… siglo tras siglo…elÁngel, el cumplimiento de supromesa…

¿JohnDee,quéson tusoracionesy tuespera,quéson tu fey tuesperanzaen laspromesasdelÁngelverde, comparadas con la espera, la fe, las plegarias, la pacienciay las esperanzasde estosmiserablesHebreos?¿YDios,elDiosdeIsaac,ydeJacob,elDiosdeEliasydeDaniel,esundiosmenor,undiosmenoslealquesuservidordelaventanaoeste?…

UnardientedeseodevolveraveralgranrabinoLowydepreguntarlesobreeltemiblemisteriodelaesperadeDiosmeposee…

Sé,desdedondemevieneestacerteza,quemehalloencarneyhuesoenlahabitacióndeabajodelKabalistaRabinoLow.HemoshabladodelsacrificiodeAbraham,delineludiblesacrificioqueDiosexigeaquienquieretransformarlasangreensusangre…Ahíheoídooscurasymisteriosaspalabrasacercadeuncuchillodesacrificio,quesólovequientienelosojosabiertosalasrealidadesdelotromundo, invisibles al hombremortal, realidadesmás concretas ymás positivas que las cosas de latierra.El buscador ciego sólo puede llegar hasta ellas a través de los símbolos de las letras y lascifras. ¡Estas palabras enigmáticas, proferidas por la desdentada boca de este loco, seme hundenhasta la médula de los huesos!… ¿Loco?… ¡Igualmente loco que su amigo de ahí arriba en sucastillo, el imperial Rodolfo de Hasburgo!… El monarca y el Judío del Ghetto, hermanos en elsecreto.Diosesunoyotroenfrentedelasrisibleschácharasdelmundomanifestado…¿dóndeestáladiferencia?

Referentealaoración,elkabalistahaatraídomialmaalasuya.Lehesuplicadoquemelallevehastaelplanodeléxtasis.Seniega,dicequeseromperíasilohiciese.Esnecesarioquemialmaseenganche a su alma que ha trascendido los sufrimientos del mundo terrestre. ¡Oh! ¡Cómo estaspalabrasmehanrecordadoalzapatodeplatadeBartlettGreen!…LuegoelrabinoLowhatocadoelpequeño hueso demi clavícula, como… como antaño el salteador de caminos en la prisión de latorre…Yahoraveo…veoenlosojossinlágrimas,serenos,imperturbablesdelviejorabino,amimujerderodillasanteKelley,ennuestrahabitacióndelacasasobreelRing.Luchacontraélparamifelicidad, tal comoella la concibe,para eloroypara elÁngel…Kelleyquiere forzarmi cofreycogerel libroylasbolas,puestoquenotienelasllavesqueyosiempreguardo.QuiereabandonarPragabajolaproteccióndelanocheydelanieblaconsurobo,abandonándonosaladesgraciayalamiseria.Janeprotegeelcofreconsucuerpo.Discuteconelladrón.

Implora,nosabequéhacer.Yo…¡sonrío!Kelley pone diversas objeciones, alterna las groseras amenazas y las trapacerías, con la fría

exposicióndesusplanesylahipócritacomprensión.Ponecondiciones.Janedicesíatodo.Miradascadavezmásávidasacaricianamimujer.Alponersederodillasanteél,suchalsehadesgarradoalaalturadelpecho.Kelleydetienesumanoqueintentareparareldesorden.Lamiradearribaabajo,los

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ojosencendidos.Yo…sonrío.Kelley levanta a Jane. Su apretón de manos es picante, impúdico. Jane se aparta con débiles

reproches.Laangustiaquesientepormíhallegadoallímitedesucoraje.Yo…sonrío.Kelleysedejaconvencer.SeponeparasiemprealasórdenesdelÁngelverde.HacejuraraJane

queobedecerá—comoélmismo—hastalamuerteymásalládelamuerte, lasórdenesdelÁngel,seancualessean.Eslaúnicatabladesalvación,concluyeamenazante.Janejura.Laangustiapalidecesurostro,supalidezesladeuncadáver.

Yo… sonrío, pero un dolor sutil, agudo, como el que produciría un cuchillo de sacrificio,atraviesamiarteriavital,meparece,consuláminaacerada.Casiqueeselaguijóndelamuerte…

Luego, veo ante mí, como si flotase libremente en el aire, el viejo, viejo rostro surcado dearrugas,extrañoyminúsculorostrodeniñodelgranrabinoLow.Dice:«Isaac,elcuchillodeDiossehapuestoentugarganta,peroenunaespinosazarzasedebateelcorderoquehadesustituirte.Siundíallegasaaceptarunsacrificio,tenpiedadcomo“Él”,séclementecomoelDiosdemispadres».

Lastinieblassehandeslizadoantemí…Loquehevistoporlosojosdelalmadelrabinohasidorelegadoalrangodeunapercepciónvaga,derecuerdoqueseesfuma.Nomesientomuyafectadoporestemalsueño.

***

Boscosasmontañasse levantanantemí.Estoydepiesobreunespolónrocoso,vestidoconunaoscuraropadeviaje,cansado;tiembloenelalbadeunafríamañana.Elquedurantelanochemehaservido de guía, un carbonero o un leñador, no lo sé bien,me ha dejado…Debo trepar hasta ahíarriba, donde se destaca, por encima de una capa de niebla, el trazo gris de una muralla en lanegruzca espesura de un bosque invernal. Pronto se dibuja la doble muralla almenada de unafortaleza.Delante,encimadelaroca,unestrechoedificiosealarga:lacasadelguardia,laportería,y,detrás,unatorreenorme,rechoncha,macizasobrelaquedavueltasamododeunaenormeveletadehierronegro,eláguiladobledelosHabsburgos.Másarribatodavía,detrásdeunjardín,elenormecubodeunasegunda torreen lacual se levantanseispisosdeventanasgóticas, tanaltascomo lasojivasdeuncoro.Unatorremediofortaleza,mediocatedral,guardianadelascosassantas:KarluvTyn—elcastilloKarlTeyn—asíhallamadoelcarboneroalacámarafuertedondereposaeltesorodelSantoImperioRomano,venerablerefugioyamenazantecontroldelasjoyasdelimperio…

Desciendoelestrechosenderoempedrado.SéqueallíabajomeesperaelemperadorRodolfo.Meha llamado secretamente durante la noche, de manera misteriosa e imprevista, con intencionessupuestaseincreíblesmedidasdeprecaución…¡Unhombreinquietante!

El miedo a la traición, la desconfianza ante todos, el desprecio de los hombres y el odio almundo, han excluido esta vieja águila de todo amor, e incluso de su nobleza natural. ¡Queemperador…yquesingularAdepto!¿Elodioalmundoespueslasabiduría?¿Laaltainiciaciónsepagapuesconunpermanentetemoraserenvenenado?Ésossonlospensamientosquemepasanporla mente mientras me dirijo hacia la falla de la roca, por encima de la cual está tendido a unavertiginosaaltura,elpuentelevadizoquedaaccesoaKarlTeyn.

***

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Un resplandeciente salón de oro y piedras preciosas, la capilla de la Cruz en la «Ciudadela».Detrásdelaltar,losé,sehallalatapiadacriptaqueguardalasinsigniasdelImperio.

Ante mí, el emperador, con su habitual desgastado abrigo negro. En este lugar salta todavíamuchomásalosojoselcontrasteentreelpoderío,elrangodeestehombreysuexterior.

EntregoaRodolfolosprotocolosdondeseconsignannuestrasaccionesconelÁngelverdedesdelosprimerosdíasenMortlake.Cadaprotocoloestácertificadoporlosparticipantesenlassesiones.Elemperadorexaminasuperficialmentelasfirmas.LosnombresdeLeicester,delpríncipeLaski,delreyStéphanedePolonialehacenchocarconloefímero.

Impacientesegirahaciamí:—¿Yluego?Decid,sir.Niellugarnilahorasonpropiciosparaunalargaentrevista.Meespían.

Estacalañamepersiguehastaenlatumbademispadres.SacoelpocopolvorojodelÁngelqueheconseguidosustraeraKelleyyselapasoalemperador.

Susojosbrillan.«¡Auténtico!»gimesuabiertaviejaboca.ElvalordelArcanoquetieneensusmanosnohaescapadoalapenetrantemiradadelAdepto.Quizáporprimeravezensuvida.Unavidallenade desilusiones y de fraudes perpetrados con insolencia por los charlatanes que se esforzaban enengañaraunbuscadordevoradoydesesperado.

—¿Cómolohacéis?Lavozdelemperadortiembla.—Siguiendo las indicaciones del noble libro que proviene de la tumba de sanDunstan, como

VuestraMajestadyalosabedesdehacealgúntiempoporlaspalabrasdemiamigoKelley.—¡Dadmeellibro!—Ellibro,Majestad…Elpálidocuellodelemperadorsealarga,sucuellodebuitreegipcio.—¿Ellibro?¿Dóndeestá?—Ellibro.Nopuedo—almenosahora—ponerloenmanosdeVuestraMajestad…porlarazón,

primero,quenolollevoconmigo.NohabríaestadobienguardadoenelbolsillodeuncaminantequeseaventuraporlosbosquesdeBohemia.

—¿Dóndeestáellibro?—silbaelemperador.Calma,metomotiempoparareflexionar:—El libro, Majestad, todavía no hemos conseguido descifrarlo —el emperador se huele

engaño…— ¿cómo en estas condiciones podría convencer a Vuestra Majestad que el Ángel nosayuda?…Esclaro:nomeestápermitido,aúnno.Rodolforecibiráellibrocuando…cuandoseamoslosamosdelsecreto.

—¿Dóndeestáel libro?—preguntaRodolfoconunavozsilbante, interrumpiendoporsegundavezelalocadocursodemispensamientos.Unaamenazantellamailuminalamiradadelbuitre.¿Estoycercademiperdición?

Respondo:—Majestad, el libro está en lugar seguro. Pero necesito la presencia de Kelley para abrir la

cerraduraqueprotegeelpreciosodondesanDunstan.Yotengounallaveyélotra.Sonnecesariasdos llaves para abrir el cofre de hierro… Pero cuando incluso Kelley esté aquí, incluso cuandotengamoslasdosllavesyelcofre…Majestad,quegarantía…

—¡Vagabundo!¡Estafador!¡Carnedehorca!—vociferaelemperadorcomosidierapicotazos.Learguyocondignidad:

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—Ruego a Vuestra Majestad que me devuelva el polvo rojo que tiene entre sus manos.EvidentementeparaVuestraMajestadsólosetratadeunpolvosinvalor.¿Cómolosvagabundos,losestafadoresyloscarnesdehorcapodríanestarenposesióndeltresvecessantosecretodelaLapistransformationis?

Rodolfo,desconcertado,refunfuña.Yocontinúo:—NoquierotampocoveraVuestraMajestadescondersedetrásdesuinviolabilidadparaeludirla

venganzademihonorultrajado—elhonordeunbaróninglés—puesesaimpunidadnohonra.Mis atrevidas palabras obtienen el efecto deseado. El emperador cierramás estrechamente sus

dedossobrelacajaquecontieneelpolvorojo,duda,luegoexplota:—¿Deborepetirquenosoyunladrón?¿Cuándotendréellibroenlasmanos?Ganartiempo,memurmuramicorazón.Digoenvozalta:—Kelleysedisponíaamarchar,paraasuntosquenosinteresan,cuandoVuestraMajestadmeha

hechollamar.Asuvuelta,leconvenceréparaquemuestreaVuestraMajestadellibrodesanDunstan.—¿CuándovuelveeseKelley?—Enunasemana,Majestad.(¡Yaestádicho!).—Bien,endiezdíasapartirdehoy,presentaosencasademiintendenteelpríncipeRosenberg.

Tomaré mis disposiciones a continuación. ¡No esperéis escaparos! La Santa Iglesia ya os haexcomulgado.ElcardenalMalaspinatieneexcelentesojos.¡Hayolordehogueraenelaire,sirDee!Mi poder, desgraciadamente, no se extiendemás allá de las fronteras deBohemia.Y esta fronteradeberéisverladeespaldassinomemostráis,enlosplazosconvenidos,ellibrodesanDunstanynomeaportáistodaslasaclaracionesnecesariassobresucontenido.¿Quedaentendido?Bien…

Lacapillamedavueltas…¿Es el fin?De aquí a diezdías debopoder explicar el librode sanDunstanobienestamosperdidos,convictosdeimpostura,expulsados,abandonadosalosesbirrosdelaInquisición…DeaquíadiezdíasnecesitamoselsocorrodelÁngel.Deaquíadiezdíashedesaberlo que significan las oscuras instrucciones inscritas en el pergamino… ¡Si esas hojas no hubieransidonuncaarrancadasdelatranquilasepulturadelobispo!¡sinuncahubieranllegadoamivista!…¿Quién ha destrozado la tumba de san Dunstan? ¿Quién sino yo mismo al dar dinero a losRavensheadsyexcitarlesacometer todassus infamias?…Heaquíelcastigode la falta,heaquí laejecución del juicio. ¡Ayúdame ahora, sólo tú puedes ayudarme, salvarmi honor, el fruto demisesfuerzos,mivida:ÁngeldelSeñor,taumaturgodelaventanadeOccidente!

***

Una pobre lámpara ilumina débilmente la habitación. Después de días y noches de rumiar, deestudioydeespera,elsueñoamenazaconvencerme.Mishinchadosojos,aligualquemialma,ardendedeseosdereposo…

Kelleyhavuelto.Lehepresentadoelmartirioquemeheinfringidoparapenetrarelsentidodelpergamino de san Dunstan. Le he descrito la espantosa suerte que nos amenaza a todos si no secumplealpiedelaletralasexigenciasdelemperador.

Kelley,mediodormido,sehabíadejadocaerenelsillóndondeyome torturabaelcerebro.Surostro tieneelairedequiendiscurre.Susojosaveces relucenentresuspárpadosmediocerrados.Tengounescalofrío.¿Quépiensa,quémaquinaestehombre?¿Yquédebohacer?

La angustia me incomoda, con gran dificultad consigo impedir mi castañeteo de dientes, tan

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grandeeseldeliriode lasangreque tanprontomequemacomomehiela.Conunavozquesuenaroncayveladadigo:

—Ahora conoces, querido amigo, la exacta situación. Antes de tres días hemos de haberdescifrado,enelpergaminodesanDunstan,larecetaparaprepararlatinturayelSecretodelPolvo,sino,seremosconvictosdeserengañabobosdeferiaysufriremossusuerte.SeremosentregadosalaInquisiciónyquemadosenpocosdíascomo…como…—lapalabraquiereforzarlabarrerademisdientes—como…BartlettGreenenlaTorredeLondres.

—¡Puesdaellibroalemperador!LaindolenciadeKelleymefustigamáscruelmentequelamásmalvadaironía.—¡Sinembargonopuedodarleellibroquenosoycapaznideleernidedescifrar!AmiexclamaciónKelleylevantaunpocolacabeza.Sumiradasedeslizaenmíconlosairesde

unaserpientepitónalacecho.—¿Sialguienpuedesacarnosdeesta…estatrampaenlaquenoshaspuesto,estealguiensoyyo

mismo,noescierto?—Asientoconunsigno.—¿Cuálesentonceslarecompensadestinadaal…abogadofalsoquesirJohnDeehasacadodel

fangolondinense?—¡Edward! —grito—, ¿Edward, no somos amigos en la vida y en la muerte? ¿No lo he…

compartidotodocontigocomounverdaderohermano…másincluso,comounapartedemímismo?—Notodo—insinúaKelley.Unfríomehiela.—¿Quédeseasdemí?—¿Yode…ti,hermano?Nada,hermano…—¡Larecompensa!¡larecompensa!…¿Cuálesturecompensa,Edward?Kelleyseinclinahaciadelante:—LosdeseosdelÁngelson impenetrables…Yo,heaprendidoa temerelpoderdesuboca.Sé

por experienciaquéamenazaspesan sobrequienha juradoobedienciaynoobedece…no llamarémásalÁngel…

—¡Edward!—grito,presadeunaangustiaquenotienenadadehumano.—Yanolollamaré,John,amenosdeestarseguroquelaobedienciasiguealaorden,asícomoel

reflejodelmar sigueal rayode luzque salede lasnubes. ¿Quieres,hermanoJohnDee,obedecercomoyoobedecerélasfuturasórdenesdelÁngeldelaventanadeOccidente?

—¿Hequeridonuncaotracosa?—Meinquietointeriormente.Kelleymealargalamano:—Queseasegúntuvoluntad,¡Juraobediencia!Mi juramento llena la habitación como de un humo ondulante, como el murmullo de

innumerablesdemonios,comoelzumbidodealasverdes…sí,comounzumbidodealasdeÁngelverde…

***

El hombre que va y viene antemí, moviendo los hombros con una expresión de pesar, es elburgraveRosenberg.Entoncesmedoycuentadedondeestoy.La luzdecolorescrepuscularesquebañalahabitación,caedeunaaltavidrieradeldeambulatorio.Estamosdetrásdelaltarmayordelaiglesiadelaciudadela,Sankt-Veit.

OtrodeesosextrañoslugaresdeencuentroqueelemperadorRodolfoysusmandatariosgustan

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deinventarparaescaparalapresuntaorealvigilanciayalassolapadasdenunciasdelosespíasdelcardenal legado…Aquí, en lamajestadde la casadeDios, el confidentedel emperador secreealabrigodelasmiradas.

Por fin sedetiene cercademí, sumirada seriaybuena, intenta sondearmispensamientos.Medice:

—SirDee,tengoplenaconfianzaenvos.Noparecéisquereratraparalvueloniuncéntimo,comoa menudo hacen los vagabundos y otros compadres que no tienen nada que perder. Una rectaintenciónyelrealardordeconocerlossecretosdeDiosydelanaturalezaoshanconducidoaPraga,al orbe del emperador Rodolfo, lugar no siempre exento de peligro. Debo repetíroslo, lainmediacióndelemperadorRodolfonoesunlugardereposoparanadie;niinclusoparasusamigos,sir, os lo digo en confianza; todavíamenos para aquellos de sus amigos que comparten su granpasión,su…hum…suadeptado…Enunapalabra:¿quédebéisdecirmeenloconcernientealaordendelemperador?

Meinclinoconunsincerorespetoanteelburgrave:—El Ángel al que obedecemos no nos ha hecho la gracia, desdichadamente, de responder a

nuestras fervientes súplicas. Sigue mudo hasta este día. Pero hablará, cuando quiera… Nos darálicenciaparaactuar.

Mesorprendoamímismodelafacilidadconquevieneamislabioslamentiraalaquerecurroparasalvarme.

—¿Queréisquepersuadaami soberanodeque la entregaaSuMajestadde las fórmulasde latumbadesanDunstandependesólodelpermisode…devuestrollamado«Ángel»?Bien,¿peroquiénesfiadoranteElladequevuestroÁngelconcederáundíaestepermiso?Oslorecuerdounavezmás,sirDee:¡nosebromeaconelemperador!

—ElÁngelautorizará,conde,losé,Respondodeelloanteelemperador…¡Ganartiempo!Ganartiempo,heaquítodoloquemequeda.—¿Vuestrapalabradegentilhombre?—Mipalabradegentilhombre.—Deboaccederpuesaello,sir…VoyaponerlotodoenmarchaparaconvenceraSuMajestadde

que sea paciente con vos. ¡Va en ellomi propia salvación, sabedlo, sir! Pero no olvido la formalseguridadquevosyvuestroamigomehabéisdadodehacermepartícipedelaIniciaciónqueellibropromete.¿Tambiénenestotengovuestrapalabra?

—¡Latenéis,conde!—Veremosquésepuedehacer,¿Quiénestáahí?Rosenbergsegira.Detrásdeél,hasurgidounaformanegradelaoscuridaddeunadelascapillas

dispuestas alrededor del deambulatorio. Elmonje se agacha profundamente al deslizarse cerca denosotros.Elburgravesigueconlosojosalmonjeypalidece:

—¡Estas víboras, están en todas partes! ¿Cuándo se habrá esfumado este nido de traición? Elcardenallegadotendrámateriaparasusinformes…

***

EnelcampanariodelaTeynkirchedePraga,losdosgolpesdelasdosvibranamenazadoresenelairenocturno.Elcoléricozumbidodeloscilantemonstruodebroncehacetemblardearribaaabajo

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elarmazóndelatorreycruzalacasadeldoctorHajek,médicoimperial,dondehabitamos.Estamosanteunapesadatrampilla.Kelleygiralallave;sucaraestáinerteyvacía,comosiempre

sucedeenlashorasqueprecedenalaaparicióndelÁngel.Descendemosporunaescaleradehierroquenoterminanunca,conunaantorchaenlamano,en

unabismoterrorífico.Kelleydelante,luegoyoyfinalmenteJane,mimujer.Laescalerasehafijadoalas paredes de la rocamediante escarpias del grosor de un brazo, ya que el hoyo por el que noshundimos no es construido, es una falla en la piedra, un cráter quizá, ahuecado desde tiemposinmemorialesporelesfuerzodelashirvientesaguas,sobreelquesehaconstruidolacasadeldoctorHajek.Elaire, sinembargo,es seco,ynohúmedoysofocantecomoen lasgrutas.Unaatmósferamuerta, áridacomo ladeundesierto,hastaelpuntoquepronto la lengua semepegaalpaladarapesar del terrible frío que aumenta a medida que descendemos más abajo. Del fondo hasta elabovedadotechoseexhalaunsofocanteoloraplantassecasyadrogasextrañasqueelmédicotienecostumbredeguardarahí.Soypresadeunairritantetos.Unarocamateynegra,cortadaapicoylisa,constituyelasparedes.Nopuedoconjeturardóndenoshallamos,lamudatinieblaengullelosruidosal igualque laavara luzdenuestrasantorchas.Meparecehundirmeenelespaciosinfronterasdelcosmos.Cuandotocotierrafirme,labóvedadebeestaramásdetreintapiesporencimanuestro.Mehundo hasta casi los tobillos en un mullido, negro y ceniciento lecho, que vuela en cada uno denuestrospasos.

Rojizos,casiesquemáticosenlaespesaoscuridad,relucenaquíyalláloscontornosdelascosas:unalargamesa,barriles,sacosllenosdeplantas.Chocodefrenteconunobjetocolgadoqueresuena,unalámparadeloza.Sebalanceaalextremodeunacadenadehierroquesepierdeenlaalturaenunanocheimpenetrable.Kelleylaenciende;sudébilluzapenasnosiluminahastalacintura.

Pocoapocosedibujaantemíuncubodepiedragris.Avanzamose identificamosunparapetoformandouncuadrode la longituddeunhombre, enel interiordel cual se abreelorificiodeunpozo,omejordicho,deunabismo.El«HoyodeSanPatricio»mevienealacabeza.EldoctorHajekmehahabladodeestepozoydelasleyendasquecirculanrespectoaél.Suprofundidadnohapodidosernuncamedida,sediceen todaBohemiaquebajaverticalmentehastaelcentrode la tierra,aunlagoverdeycirculardondereside,enunaislasituadaenmedio,Gaéa,lamadredelasTinieblas.Lasantorchas que se dejan caer se apagan, como se ha demostrado tantas y tantas veces, ahogadas, apartirdehallarseaunapequeñaprofundidad,porlosgasesdeletéreosdelaoscuridad.

Mipietopaconunapiedradeltamañodeunpuño,larecojoylalanzóalabismo.Nosinclinamossobreelparapetoyescuchamos,escuchamos,escuchamos.Nielmenorruidoquenosindiquequelapiedrahatocadofondo.Sehaperdidoenelabismo,disueltaenlanadadeestanada.

DerepenteJaneseinclinatanrápidoytantoquelacojoporelbrazoylatiroatrás.—¿Quéhaces?El aire es tan inconcebiblemente seco que las palabras salidas de mi garganta son apenas

perceptibles…Janenoresponde.Surostroestádescompuesto…Mesientocercadeellaenunacajaalladodelamesacarcomida,tengosumanoqueestárígiday

fríademuerteenelcruelfríoquenosenvuelve.Presa de la extraña agitación que presagia en él la invisible proximidad del Ángel, Kelley ha

trepadosobreunmontóndesacosysehasentadoahíarribaconlaspiernascruzadas,elmentónylabarbaenpuntayhaciadelante,ylosglobosdelosojosvueltoshaciadentrotanbienquesóloseve

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relucir el blanco como un vidrio lechoso. Está tan alto que la luz de la lámpara, cuya llamapermanece inmóvil, como helada por un sortilegio, ilumina débilmente sus rasgos por debajo yproyectaensu frente,deabajoaarriba, lasombradesunarizqueformaunaespeciede triángulonegroalrevés.

Espero la moderación de su aliento para proceder a la evocación del Ángel, tal como heaprendidoahacerlodesdelosdíasdeMortlake.

Misojosestánfascinadosporlastinieblasquehayantemi.Tengolacertezaquelaapariciónseproducirá en el lugar donde se sitúa el parapeto del pozo. Acecho un fulgor de luz verde, perocontrariamente,podríadecirsequelaoscuridadsehacemásdensa,másespesa.Sí,másdensa,másespesa,nohayduda.Sejuntaenunamasadeunanegruratanincreíble,inconcebibleeinimaginable,quehabríade llamarse luz, en comparación a lamás absoluta ceguera.Laoscuridadquebaña eselugar de repenteme parece, por contraste, casi gris. Y lamasa negra toma los contornos de unaformafemeninaqueflotayvacilaencimadelpozoinsondable.Nopuedodecirquelaveo,nolaveoconmis ojos de carne, la veomediante un órgano sutil al que no conviene el término «ojo».Mipercepcióntomaunalimpieza,unaagudezacreciente,aunquesobresuobjetonocaeelmenorrayode luz. Veo esta forma conmás exactitud que todo lo que he visto sobre la tierra. Es una formafemenina,obscena,sinembargodalaimpresióndeunaextraña,salvajeydelirantebelleza.Sucabezaes la de una gigantesca gata.Más que un ser vivo es una obra de arte—un ídolo de inspiraciónpuramenteegipcia—unaestatuade ladiosaSechmet.Elhorrormeparaliza,yaqueelcerebromegrita: es la negra Isaís de Bartlett Green; pero este sentimiento de horror es neutralizado por laterriblefascinación,porlatrastornadorabellezadeestaimagen.Meparecequedeberíaprecipitarmehaciaesedemonio,tirarmedecabezaasuspieseneseabismosinfondo.Estoyposeídopor…por,notengopalabrasparacalificarestefrenesídeautodestrucción.Entoncesenalgúnlugardelacuevaseenciendeunfulgorverdosodelquenopuedoencontrarlafuente.Suluminosidadmateestáentodaspartesanuestroalrededor…Laformadelareina-gatasehadesvanecido.

ElalientodeKelleysehavueltolento,tranquilo,perceptible.Hallegadoelmomentoenquedebopronunciar la fórmulaevocatoriaquenoscomunicaron losespíritusyahaceaños,palabrasenunalenguabárbara,desconocidaparamí,peroqueestángrabadasenmícomoelPadreNuestro.Hacemuchotiempoqueseincorporaronamicarneyamisangre.¡OhDios,cuántotiempoya!

Quiero proferirlas, pero una angustia indecible me abruma. ¿Viene de Jane esta angustia? Sumanoseestremece,¡no, tiembla!Mesobrepongoamidebilidad,esnecesario.KelleyhadeclaradoestamañanaquealasdosdelanocheelÁngelnosdaráunaimportanteordeny…quenosdesvelaráelúltimosecreto,codiciadocontantoardor,deseadoconuncorazóntanardientedesdehacetantosaños…Abrolabocayquieroarticularlaprimerapalabradelconjuroyentoncesveolasiluetadelrabino Low alzarse a lo lejos,muy lejos, levanta sumano que tiene el cuchillo del sacrificio.Almismoinstanteladiosasurgeencimadelpozo,suapariciónnohaduradounabrirycerrardeojos.

Tiene en sumano izquierda un pequeño espejo femenino del tipo egipcio, y en la derecha unobjeto que parece de ónice y que podría ser la punta de una jabalina, el hierro de una lanza o unpuñal. Inmediatamente las dos formas son devoradas por una reluciente luz verde que emana deKelley y desciendehastamí.El brillomeobliga a cerrar los ojos.Meparece que los cierro parasiempre, para ya no ver jamás la luz de la tierra, pero aunque no experimento los horrores de laagonía, tengolaimpresióndeestarmuerto,yenlapazdemicorazónfinado,recitoenvozalta lafórmulaevocatoria.

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Cuando vuelvo a abrir los ojos,Kelley… ¡se ha evaporado!Sin embargo alguien está sentadosobrelapiladesacosylaspiernascruzadassonlasdeKelley—lasreconozcodentrodelaluzverdeporsusgroseroszapatosdenómada—peroelcuerpo,eltorsoyelrostrosehanmetamorfoseado.Metamorfosisenigmática, inconcebible.EselÁngelverdequienestáacurrucado,ahíarriba, sobresuspiernascruzadas…semejante…alaposiciónconquelosviejospersasrepresentabanaldiablo.Esmuchomáspequeñoquecomolohabíavistohastaahora,perotienelosamenazadores,augustosyterribles rasgos que conozco tan bien. El cuerpo se vuelve brillante y traslúcido semejante a unamonstruosaesmeralda,ylosoblicuosojosrelucencomovivaspiedrasdeluna;lasestrechasyfinascomisurasdeloslabiossemuestrancomounasonrisadeunabellezainmóvilyenigmática.

La mano que tengo se ha vuelto cadavérica. ¿Jane ha muerto? Estará muerta como yo estoymuerto,eselpensamientoquemeviene.Esperacomoyo,losé,losiento,unaterribleorden.

¿Cuálseráestaorden?Mepregunto.No,nomepregunto,yaséloqueserá,peroeste«yasé»deningunamanerapasapormicerebro…Yo…sonrío.

DelabocadelÁngelsalenpalabras…¿Lasentiendo?¿Lascomprendo?…Asídebeser,puesmisangresedetiene.ElcuchillodelsacrificioquehabíavistoenlamanodelrabinoLow,seclavaenmipecho,enmisentrañas,enmicorazón,enmishuesos,melaceralosnervios,lapiel,elcerebro.Enmi oreja una voz cuenta, se diría que es la del ayudante del verdugo, con fuerza y lentitud, unaespantosa lentitud,hastasetentaydos…¿Hesufridoduranteunsiglo la torturasinnombredeestarigidezdemuerte?¿Mehedespertadoentoncesparaoír lasespantosaspalabrasdelÁngel?Nosé.Sóloséunacosa:tengoenmimanolademimujer,y,mudo,¡ruegoparaqueestamujermuera!…Enmí,laspalabrasdelÁngelcontinúanardiendocomobrasas:

—Yaquehabéis juradoobediencia,quierofinalmenterevelaroselsecretodelossecretos,peroantesdebéisextirpardevosotros losúltimosvestigiosdehumanidadparaconvertirosen igualesalosdioses.Tú,JohnDee,colaboradorfiel,teordenoconduciraJanetúmujerallechonupcialdemiservidorEdwardKelley,afinquetambiénéllaposeaygocedeellacomounhombreterrestredeunamujerterrestre,demaneraqueseáishermanosdesangreyestéissoldadosjuntos,asícomoJaneparaformarunatriplicidadquepermaneceráeternamenteenelreinodelmundoverde.¡Séfeliz,JohnDee,yexulta!…

Sindescanso el terrible cuchillo se clava enmi almay enmi cuerpoe interiormente clamo laoración,elgritodesesperadoparaserliberadodelavidaydelaconciencia.

***

Despertadoporlacerantesdolores,meyergo.Estoysentado,deformaretorcidaenlasilladelantedemimesa,teniendotodavíaentremiscrispadosyentumecidosdedoselcristaldecarbóndeJohnDee. ¡Tambiénamímehacortadoenpequeños trozoselcuchillodel sacrificio! ¡Ensetentaydostrozos!Y esos dolores, insensatos dolores, parecidos a cortantes estrías luminosas que emiten susondas a través de los espacios infinitos, de los tiempos infinitos, también me hieren a mí, meatraviesan…Desdeañosluz,delejanaestrellaenlejanaestrella,meparece…

Eldiablosabesilosdoloresdemismiembrosmevienendelaincómodaposiciónenlaquemeencontraba cuandomedesperté de estemágicomedio sueño, o bien si hay que incriminarlos a latóxica y diabólica inhalación deLipotine. El caso es queme sentíamuymal cuando vacilantemelevantédemiasiento.Todavíavibroentodasmisfibrasporelextraordinarioeventoquedeboami

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inmersión,osiseprefierealazambullidademiyoenelmilagrosocristaldecarbón,aestesaltoenel pasado a través de la puerta de luz negra delLapis praecipuusmanifestationis, en el que habíavividocadaperipeciatantodeactorcomodeespectador…

Necesitotiempoparareadaptarmealpresente.Lacarnetodavíameescuececonagudosdolores.Yanotengoningunaduda,loquehevividoen«sueños»(¡palabrarisible!),loquehevividoenunamágicaretrospectiva,yalohevividootravezcuandoera…JohnDee,comprendiendolapielyloshuesos,comprendiendoelalmaylaconcienciapersonal.

Noquierodiferirmeenestascogitaciones,aunquemeasaltanapesarmíohastaenelsueño.Hoymelimitaréaanotarloquetengopormásimportantedeestasúltimashoras:

Quien somos, los hombres, no lo sabemos. Sólo nos presentamos a nosotrosmismos y a losobjetosdenuestraexperienciacomoun«embalaje»dado,queunespejoreflejaparanuestrosojosyparaquenosdivirtamosnombrandonuestrapersona.¡Oh!quépazcuandosóloconocemoselpaquetepor su etiqueta: expedido por: los padres; destinatario: la tumba; envío: del «desconocido» al«desconocido»;ademásdediversasindicacionespostalescomolasde«valordeclarado»o«muestrasinvalor»,segúnlaopiniónquetenemosdenuestrainanidad.

Brevemente: ¿nosotros, paquetes, qué sabemos de su contenido? Se transfigura, me parece, alagradodelafuentedepoderdedondeprocedesusustanciafluídica…¡losseressonmuydiferentesdelaspectoquelesdamosatravésnuestro!…¿LaprincesaChotokalouguine,porejemplo?¡Oh,si!Noes talcomoyo lahecreídoavecesenestosúltimosdías,en la locaexcitacióndemicerebro,ciertonoes…¡unespectro!Sí,esunamujerdecarneyhueso,comoyosoyunhombredecarneydesangre,hijodemispadres,como todos los seresvivos…Pero Isaís laNegraemite sus rayos,del«otro Kosmos», a través de esta intermediaria y la transforma en lo que era en el origen de suesencia.TodomortaltienesuDiosysudemonio,enelcualvive,semueve,es,segúnlapalabradelApóstol,deeternidadeneternidad…Enmí, JohnDeeestávivo.¿Qué importaquienesJohnDee?¿Quiénsoyyo?¡Éles,yosoy,quienhavistoalBaphometyquiendebeconquistareldoblerostro,ohundirse!

DeprontopiensoenJane…quierodecirJohannaFromm.¡Inclusoconlosnombressedivierteeldestino! …Pero también esto cae por su propio peso, nuestros nombres están verdaderamenteinscritosenellibrodelavida.

***

HeencontradoaJane—desdeahoraquierollamarlaasíenlugardeJohanna—despierta.Estabasentadaenlacamaysonreíaextrañamente,conlamiradatanperdidaqueninotómientrada.

Alverla tanbonitaentre lasalmohadas,micorazónsedilatóymi inclinaciónactualsemezclóconacentosdeunviejo,unviejotematraídoporunainspiración,paraformarunamelodíadondelasdosvocesseconjugabanyeratanmilagrosoquemedía,casiconterror,hastaquépuntolaJohannaFrommdehoyerasemejantealaJanequeuninstanteanteshabíadejadoenPraga,enlaPragadelemperadorRodolfo.

Mesentéalbordedesucamaylaabracé.Sólotuveestepensamiento:yo,elviejosolterón,erasinembargo el marido de Johanna, unido a mi mujer por el venerable e indisoluble lazo de unmatrimoniopredestinadoysagrado.

Sin embargo, no totalmente como yo lo hubiera querido. Con dulzura, se opuso a las más

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apremiantes manifestaciones de mi ternura. Su rostro era afectuoso, pero al mismo tiempo unagravedad parecía alejarmás ymás su sentimiento delmío. Con delicadeza y prudencia empecé apreguntarle, buscaba el camino de su alma, el punto sensible donde su pasión tenía su origen…¡Tiempoperdido!

—Jane,grité,yotambiénestoyaturdidoporelmilagrodeeste…esteretornorecíproco…—unligeroescalofríorecorriómiespinadorsal—,¡peroahorateabroelpresenteenelquevivo!¡Aceptaenmíloqueteestabadestinadoareencontrar!¡Vivamos!¡Olvidemos!Y…¡acordémonos!

—¡Yameacuerdo!Suslabiossonreíanligeramente.—¡Entonces,olvida!—Eso también lo hago, querido… Yo… olvido…—La angustia me cortaba el aliento hasta

sofocarme,comosifueraaexhalarmialmamoribunda:—¡Johanna!…¡Jane!…¡QuévíahaescogidolaProvidenciaparaunirnos!—Noeslavíadelaunión.¡Eslavíadelsacrificio,querido!Unheladopicormerecorríalapieldecráneo.¿ElalmadeJanehabíaacompañadoamiespíritu

ensuviajeporelpasado?Murmuré:—¡EslatraicióndelÁngelverde!—¡Oh!no,querido,eslaSabiduríadelgranrabinoLow.Ysonreía, poniendoenmíunamirada tanprofunda, tan cercana,que raudalesde lágrimasme

velaronlosojos.No sé cuánto tiempo he permaneció con mi cabeza sobre su tranquilo pecho, como un niño,

llorandohastaverterlaúltimalágrima,hastadescongestionarmisnerviostensoshastaromperse,enelsídeesaprofundapaz…

Terminéporcomprendersuspalabras,murmuradasmientrassumanoacariciabamicabeza:—¡Noes fácil extirparse, querido!Las raíces sangrany ellohacedaño.Peronodura siempre.

«En el otro lado», es otra cosa. Al menos así lo creo, querido. Te he amado mucho… en otrotiempo… Sí, poco importa cuando… El amor no quiere saber nada del tiempo. También es unapredestinación,noescierto…Sí,yatehetraicionado…tetraicionéantaño,¡oh,Dios!…

El espasmo de un terrible dolor, rápidamente dominado, agitó su cuerpo, pero ella prosiguió,recobrandoconunincreíblecorajeeldominiosobresímisma:

—…era precisamentemi destino. Pero no erami voluntad, querido, no erami voluntad.Era,comodiríamosennuestraépoca,uncambiodeagujasen lavíadel tren.Algo tan insignificante,ycuya existenciaypoderpasandesapercibidos, sin embargomodifican ladireccióndel rápidoy lodesvíaninexorableeirrevocablementehacialejanoslugares,ahíabajo,dedondenosepuedevolvera lapatria.Vesquerido,mi traicióndeantaño, fueuncambiodeagujas.El trende tudestino tehaarrastradoatodavelocidadaladerecha,elmíoalaizquierda.¿Cómodosvíasdivergentespodríanvolverseaencontrar?Tuvidaestáencarriladahaciala«otra»,lamíahacia…

—Mivíaencarriladahaciala«Otra»,exclamé—reía,estabaindignado.¡Eraelvencedor,ahora!— ¡Johanna, como puedes creer eso de mí! ¡Celosa pequeña Jane! ¿Crees que la princesa puedehacertesombra?

Johannaseirguióensusalmohadasymemirófijamentesincomprender:—¿Laprincesa?¿Dequéprincesahablas?¡Ah!¡sí,larusa!¡habíaolvidado…quetodavíavive!Después de su mirada se volvió pensativa, casi ausente. De repente, exclamó hablándose a sí

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misma:—¡Diosmío,todavíanohabíapensandoenella!Yseaferróamisdosbrazosconunhorrortanviolentoqueyomismomeespantéhastaelpunto

denopoderhacerniungesto.Nocomprendíaquequeríadecirniporquéteníatantomiedo.Leíunapreguntaensurostro:

—¿Porquéestemiedo,Johanna,querida…—¡Tambiénestodebosufrirlo!—murmuróparasí—.¡Oh,ahoraséloquesucederá!—¡Túnosabesabsolutamentenada!—exclamé,y temíquemi risanose interpretarade forma

trivial.Elladijo:—Querido,tuvíahacialareinatodavíanoestálibre.Yo…¡laliberaréparati!Unindefiniblemiedo—venidodenosédonde—medesgarró,poruninstante.Queríahablary

era incapaz.MirécalmadamenteaJane.Teníauna tristesonrisa.Porunmomentocreícomprenderoscuramenteysentíunaespeciedeparálisisenlosmiembros.

***

HedejadosolaaJanetalcomomelohapedido.De nuevo estoy sentado en mi mesa y prosiguiendomi redacción intento darme cuenta de lo

sucedido:¿Erancelos?¿Eljuegodeunamujerquesedefiendecontraunpeligropresentidooimaginario?Podría persuadirme de que la intención formulada por Jane de renunciar amí en favor de un

fantasma,deunarománticaquimera,denotaunasecretareticenciadesuvoluntad.¿Pues,dóndeestáesta «Otra», esta reina? ¿Quién me transportará la visión del Baphomet del mundo onírico a larealidad presente de este bendito año? ¿Y si todo ello define unamisión, unameta espiritual, unsímbolodelapenetracióndelavidaquehoyporhoynopuedocomprenderensutotalidad—aunquelovenere—yenelquelabellapresenciadeunamujeramadajugaríasupapel?Amo,amoaJane,esto ahora es incontestable.Esmi beneficio nacidode este extraño juegodel destino, es lo que laherenciademiprimoRogerhaintroducidoenmicasa,comounpreciosocargamentoarrojadoalacosta después de un naufragio. Janemehará olvidar el camino que conduce a la «reina» ome loallanaráenelMásAllá,mediantesudulzuraysussingularesfacultades.YasóloquedaríalaprincesaChotokalouguine.Cadavezqueasíbromeo,yqueanalizo, imbuidodemisuperioridadmasculina,surgeantemí,turbadoyserio,elrostrodeJane;esterostrocerrado,quepareceverunameta,unameta que ni tan sólo consigo suponer. Siento que estamujer sigue un plan preciso, determinado,comosisupieraalgoqueyonosé…comosiellafueralamadreyyonomuchomásque…suhijo.

***

¡Cuántossucesosarelatar!Deboresumir,pueseneltorbellinodemividaeltiempoquepasoenmiescritoriocasiequivaleatiempoperdido.

Anteayer, unbesode Jane interrumpiómi trabajo, unbesodadodepronto en la nucapor estadulcísimaamiga.

Hablabacomounaprudente,cautaeinteligenteesposa,quevuelveatomarladireccióndesucasadespués de una larga ausencia. Yo la chinché un poco por encima y se puso a reír cándida y

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confiadamente.Nomecansabadetenderlemisbrazos,debuscarsusmaternalescaricias.Derepente,deunamaneraimprevista,suclarorostroseendurecióconesaextrañaexpresióndegravedadqueyahabíaobservadodespuésdesusueño,ydijotranquilamente:

—Querido,esindispensablequevayasaveralaprincesa.—¿Quédices,Jane?—exclaméestupefacto—.¿Meenvíasacasadeesamujer?—¿Delacual,sinembargo,estoytancelosa,noesverdad,querido?Bajolarisadesubocapercibíaunatorturanteseriedad.Nolocomprendía.Menegabaahaceresavisita.¿Paraqué?¿parasatisfaceraquién?Jane—ya sólo la llamo «Jane», y cada vez es una profunda respiración, un flujo de energía

sacado de la fresca fuente del pasado— no desistía de su idea. Amontonaba argumento sobreargumento,pretextosobrepretexto.Pretextosabsurdoscomoeldelareparaciónalaprincesa.Ellamismadabagranimportancia,aunquenopodíadecirlo,almantenimientodelasrelacionesconésta.Finalmente,Janeinsinuóqueteníamiedo.Yestomediounlatigazo.¿Yo,miedo?¡Estono!ExistelaviejacuentadeJohnDee,ydemiprimoRogerquehayquesaldar,ydebesaldarsehastaelúltimocéntimo.Saltéyledeclaréqueibaahoramismo.

Entonces…sedesplomóamispies,seretorciólasmanosensilencioy…lloró.YendoacasadelaprincesaChotokalouguine,reflexionabasobrelassingularesalternanciasque

manifiestaJanecadavezmásamenudo.Cuando,alrodearlascosasdenuestropasadosesienteJaneFrommont,laantiguaesposadeJohnDee,supersonanoesmásquelahumilde,sumisayunpocolacrimosasirvienta;cuandoesFrauFrommquienhabla,emanadeellaunainexplicablefuerza,unadecisión,unafirmezayunabondadmaternalquemesubyugan.

Perdidoenestasreflexionesmeencontré,sindarmecuenta,antelasolitariavillaquelaprincesaChotokalouguinehabitaextramurosenlasprimeraspendientesdelamontaña.

Un vago sentimiento de opresión me invadió, mientras apretaba el timbre. Sin embargo, unarápidamiradaaljardíndedelantedelacasahabríadebidotranquilizarme,yaquelohubieratenidomalparadescubrir sea loqueseade inesperadoydesorprendente.Entre lascasasdeestacalidad,construidashacetreintaaños,éstaeraunadelasmásordinarias.Eralavilladetodoelmundo,coneljardincitodetodoelmundo,enlosaledañosdelaciudad.

Elmecanismodeaperturafuncionó.Entré.Yasemeesperababajoelopalinocristalqueprecedíaalapuertadeentrada.

De una u otramanera hay que acusar a la luz que sesgadamente cae de este glauco cristal, decolorear el rostroy lasmanosdel sirviente conun repugnante reflejo azuladoy lívido,medecía,rechazando la aprehensión que me causaba la vista de un hombre vestido con librea oscura.Innegablemente era del tipo mongol. ¡Casi que podría haberse dicho que carecía de ojos, de tancerradoscomoteníalospárpados!Preguntésilaprincesapodíarecibirme.Portodarespuestasóloobtuve una breve sacudida de cabeza, luego la parte superior del cuerpo se abatió, los brazos secruzaronsobreelpechoalmodooriental,todoellocomosialguieninvisibleestuvieradetrásdeestamarionetaprivadadevidaylamaniobraramediantehilos.

Entonces este guardián de palidez cadavérica desapareció detrás mío y me vi acogido en lapenumbra de un vestíbulo por otros dos criados que silenciosamentemepidieronmi abrigo ymisombrero y me expendieron, como un paquete postal, con celo, cuidado y mutismo: autómatasperfectos.«Paquetepostal»¡noestámal!Tuvelaimpresióndeconvertirmeenlavivienteréplicadelaimagenquerecientementehabíausadoenunescritoparadesignaralhombreterrestre.

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Enéstas,unode losdosdiabloskurdosabrió lapuertadedosbatientesyme introdujoconunsingulargestodemano.

«¿Esunhombredeverdad?».Ésteeselabsurdopensamientoquemevinoalpasaranteél.Quizáesteexangüe,terroso,momificado,oliendoatumba,sirvienteesun…¡lémur!Mereprochéestalocaidea, es normalque la princesa, deorigen asiático, tengaunviejopersonalmongol, de autómatasorientalesmontadosalaperfección.¡Caedesupropiopeso!Nohayqueverconojosnovelescosyfabularaventurasdondenohay.

Siempreme empujabanmás adelante. Sumergido enmis pensamientos crucé diversos salonescuyaincolorabanalidadnomehadejadoningúnrecuerdo.

Luegomeencontréderepenteenunahabitacióndondesenotababienlahuellaoriental,puestoqueofrecíaunaprofusióndetapicesasiáticosmásomenosvaliosos,diversosdivanesyacadapasosofocantespieles,demaneraquemásparecíaunatiendaquelahabitacióndeunavillaalemana«deserie».Noeraéste,sinembargoelcarácterespecialdelahabitación.

¿Eran lasarmasmanchadasdenegroque surgíanen todaspartesde losmontonesde telas?Seveía en seguida que ningún decorador las había puesto ahí para «quedar bien». Armas donde seenganchaba,visibleyperceptible,laherrumbredelasangreyeloloracredesuterribleuso,armasenlasquetodavíaresuenaellejanoecodelastraicionesnocturnas,delasdespiadadasmatanzasydelhorriblesupliciodelavíctima.

Éste era el insólito realismo de una imponente biblioteca que cubría enteramente uno de losmuros, llenode libros encuadernados encueroviejoypergamino, coronadaconalgunosbroncesnegros:¿cabezasdediosessemibárbaros,debajaépocaclásica,conelrostrodeunnegroobsidianaenelquerelucenfascinantesojosdeóniceoselenita,conunfulgorsatánicoycomoalacecho?

¿Dóndeestoy?…Enun rincón,exactamentedetrásmío,guardando lapuertapor laquehabíaentrado,habíauna

especiedealtardemármolnegro,lacadodeoromateyconaguas.Encimadelaltar,quenoexcedíaalmetrodealtura,laestatua,ensienitanegra,deunadiosadesnuda,enmiopinión,eraposiblementeuna imagenegipcia,en todocasogreco-póntica,deSechmetconcabezade león: Isis.El rostrodegatoteníaunavidaturbadora,unamalvadasonrisa.Elrealismoconelquefinayhábilmentehabíasidoejecutadalaformafemenina,rayabalaobscenidad.Comoatributodeladiosagato,enlamanoizquierda, tenía un espejo de mujer egipcia. La mano derecha, curvada para asir, estaba vacía.Primitivamentedebíadehabercontenidounsegundoatributo.

No tuve el placer de examinar con detalle esta extrañamente bella y artística obra, teniendo encuentasuprocedenciabárbaro-tracia,pueslaprincesasúbitamenteaparecióamilado,habíasurgido,sinruido,aejemplodesuslémureskurdos,dealgunapuertadisimuladaporlostapicesquecubríantodaslasparedes.

—¿ElEntendidoyapreparasucrítica?—arrullósuvozenmioreja.Mevolví.¡AssiaChotokalouguinesabevestirse!Llevabaunafaldacorta,alaúltimamoda,peroeraincapaz

deidentificareltejidoquepodíadarcontantaexactitudlaimpresióndeunbroncedereflejosnegros.Demasiadodeslucidoparalaseda,demasiadometálicoparaelpaño.Sealoquesea,vestidaconesatransparente piel llena de aguas, que indiscretamente revelaba, en cada uno de sus gestos, susimpecablesformasdediosamarmóreayalavezprodigiosamenteviva,parecíaelídologato.

—Unadelaspiezaspreferidasdemipadrecuandovivía,—murmuró—.Elpuntodepartidade

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sustrabajosytambiéndelosmíos.Hesidolaalumnadelpríncipeyledebomucho.Pronunciéalgunas frases laudativasyconvencionales sobre laestatua, la refinadaculturadesu

propietaria,sobreelfascinanteencantodeestaobradearte,yalmismotiemponopodíaapartarmimirada del sonriente rostro de la princesa. Además experimenté un indefinible sentimiento, unturbadoryconfusosemirrecuerdoquemeesforzaba,mientrashablaba,ensacaralaplenaconcienciay que, como sombra inasible, me rozaba para escondersemás ymás amis ojos como un humogrisáceo…Simplementesentíqueestedeseodeacordarmeestabarelacionadoconlasiniestraestatuaquecadavezmásobstinadamenteatrapabamidistraídamirada.Detodoloqueduranteeste tiempobalbuceéalaprincesa,cuyasonrisanosedesdibujó,yanosénada.

Mientrastantometomódelbrazodelamaneramáscordialdelmundoyseexplayóenreprochesmedioenojados,medioafectuososporlomuchoquehabíadiferidomivisita.Ningunaalusiónquetestimoniase rencor a propósito de la desagradable escena que el otro día hubo entre nosotros.Parecía haberla olvidado o no haberle dado nunca importancia, no más que a una divertidaescaramuza.Cortó en seco todasmis tentativasde excusarmepormi comportamientodel otrodíaconunrápidoyencantadorgesto:

—¡Porfinestáisaquí.Porfin,mibárbaroamigo,soismihuésped!Yesperoquenodejaréisestacasa antes de haberos hecho una honorable idea de las cualidades de mi modesta persona…Naturalmentetraéisloqueospedí.O…—Osepusoareírsubroma.

¡Loca! ¡Totalmente loca!—medigo—.¡Todavíasiguecon lacondenadacomediadelhierrodelanza!… ¿Hierro de lanza?… Giro bruscamente la cabeza y me fijo en la vacía mano derecha,curvadaparaasir,delaestatuanegraquehaysobreelaltardetrásmío.¡Ladiosagata!¿Esaellaaquienperteneceelemblemaquetanobstinadamentesemereclama?Intuiciones,confusosesfuerzosparacombinarfugacespremonicionesyhechosconcretosrevoloteabanenmí.Balbuceé:

—¿Qué tenía antes la estatua en lamano? Lo sabéis, naturalmente que lo sabéis y yo ardo dedeseosdesaberlodevos…

—¡Claroquelosé!—fuelarisueñarespuesta—.¿Tantoosinteresa?Paramíseráungozopoderservirosmediantemis pobres conocimientos arqueológicos. Sime lo permitís, voy a daros ahoramismounapequeñalecciónparticular.Asípues,hemedeprofesor,¿noescierto?Deprofesor…¡deprofesoralemán!

Laprincesadesgranó superlada risa, aplaudiendo imperceptiblementea lamaneraoriental.Enseguida un servidor calmuco, autómata ymudo, apareció en la puerta.Un signo, y el amarillentoespectrohabíadesaparecido,engullido,podríadecirse,porlacálidapenumbraqueportodaspartesdifundíanlostapices.

¡Estaextrañapenumbrairisada!Acababadedarmecuentaqueenestahabitación-tienda,nohabíaventananiotrafuenteluminosa.Notuvetiempodeaveriguardedondeveníaestadulceclaridadrojoyoro,conlostonosdelsolponiente.Mevinoalamenteelfugitivopensamientodequeunalámparaazuloscuradifundiendolaluzdeldía,comolaqueutilizanlosfotógrafos,debíadeestardisimuladaenalgunaparteyquesufulgorsemezclabaconeldedébilesbombillasamarillasyrojasparadaresaimpresióndecalidezcrepuscular.Apesardeello,notéquegradualmentelaluzsemodificabayquelos fulgores rojizos cambiaban a verdes profundos, hasta el momento en que me pareció que seestabilizabaenunperfectoylargamentebuscadoequilibrioentrelaprincesayyo…¡todoellosólopuedenserimaginaciones!

El sirviente de librea oscura y de altas botas impecablemente cepilladas donde se metían sus

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bombachos,volviósilenciosamente.Llevabaunafuentedeplataenlaquesehabíandispuestocopastambiéndeplataperonieladas[21].«Trabajopersa»,anoté.Conteníantodotipodeconfites.

Enunabrirycerrardeojos,elmongolhabíadesaparecido.Habíadejadolascopasenunamesitasituadaentreambos,ylaprincesameinvitabaaservirme.

Nosoyespecialmenteamantedelosdulces,ysilasreglasdelahospitalidadexigíanqueaceptaraalgo, hubiera preferido un cigarrillo.Un poco a regañadientes alargué lamano hacia esa viscosasubstancia oriental de gusto exageradamente dulce, mientras que sin otro preámbulo, la princesaempezaba:

—¿Por dónde debo empezar la lección, querido amigo? ¿Debo hablaros de la Isaís póntica?¡DebéissaberqueenesoslugaressellamaIsaísynoIsis!…¿Ossorprende?

—¡Isaís!Laexclamaciónsemeescapó,inclusocreohabergritadolapalabra.Mehelevantadodeunsalto

yhemiradofijamentealaprincesa,peroellapusodulcementesumanosobremicaderaymehizosentardenuevo.

—Ahorabien,deningunamanerasetratadeunaalteración,enelgriegovulgar,delnombredeIsis, y ello no tiene nada que ver con sabios descubrimientos, como vos parecéis creer. Lasmodificacionesdelnombrehandebidoira laparconloslugaresdecultoydelosadoradores.LaIsaísnegra,porejemplo,queveisahíabajo…

La princesa designaba la estatua. Yo me limité a una inclinación de cabeza y murmuré:«¡Excelente!»,interjecciónquelaprincesacreyóreferidaasuerudición,peroqueyodedicabaalosdulcesquemehabíapuestoasaborear.Tomé,sinserinvitadoaello,unsegundotrozodelacopaymelollevéalaboca.

Laprincesaseguíahablando:—IsaíslaNegratieneotra,digamosdiferente,significaciónculturalquelaIsisegipcia.Isis,como

todo el mundo sabe, es, en el bajo Mediterráneo, adorada y asimilada a Venus, la diosa Madre,protectora de todos los ciudadanos del mundo que aman los niños y se complacen en procrear.NuestraIsaíspónticasehaaparecidoasusamigos…

En este punto la luz de un recuerdo me deslumbre con tanta fuerza, que apenas si hallé laspalabrasparaexclamar:

—¡Seme ha aparecido en la caverna abovedada del doctorHajek enPraga cuando evocaba alÁngelverdeconJaneyKelley!Flotabaencimadelpozoinsondable,eralaproféticaimagendemisfuturossufrimientos,amargoanunciodeesteamortransmutadoenodioquemeconsumiríacontraKelley,demiodiocontralaquemehabíasidolamásquerida…

Laprincesaseinclinó:—¡Qué interesante! ¿Así la diosa del amor negro se os ha aparecido realmente? Entonces

comprenderéismuchomás fácilmente lo que os voy a enseñar referente a ella. En definitiva, ellaejercesuimperioconelotroEros,delcualnadiepuedepresentirlagrandezayelpoder,amenosquehayapasadopersonalmenteporlainiciacióndelodio.

Mi ávidamano se hundió de nuevo en la copa de plata. Sentía una irresistible hambre de esosdulcesquehabíantriunfadosobremirepugnancia.Entonces—¿eramiimaginaciónounfenómenoreal?— la luz de la habitación tomó de repente un extraño color verde. Me pareció que estabainmerso,deimprovisto,enelfondodeunlagoodeunmarsubterráneo,enunbarconaufragadoentiemposinmemorialesoenunaisladelfondodelocéano.Yalmismoinstante,porsegundavez,supe

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que las cosas se arreglan como se quiere, que se trata de una transverberación de Isaís la Negracaptandoelcuerpodeunamujerterrestre,hijadeunpríncipecaucasianohechadecarneyhueso.Estamujerque estádelantemío es Isaís laNegra, la adversariade JohnDee, la enemigamortal demiraza,ladestructoradelavíaquellevaalasobrehumanidad.Unaglacialsensacióndeodiomesubióporlacolumnavertebralhastalanuca.PenséenJane,miréalaPrincesa,yunafrenéticarepulsiónmeinvadió.

Laprincesadebiódarseperfectacuentadeloquepasabaenmí,puesmemiródirectamenteydijoamediavoz:

—Creo,amigomío,queseréisunalumnomodelo.Comprendéisrápido,esunplacerenseñaros.—¡Sí,yahecomprendido,ydeseoirme!—dijefríamente.—¡Quélástima!¡Habríapodidodarostantasexplicaciones,midignoamigo!…—Todoestáperfectamenteclaro.Estomebasta.Yo…¡osodio!—exploté.Laprincesasaltó:—¡Porfin!¡Unapalabradehombre!¡Entonceslavictoriaserácompleta!…Una incomprensible excitación, que apenas si podía dominar, hacía que me expresase con

dificultad.Yooíamivozquelaaversiónvolvíaronca:—Mi victoria, a pesar de todo, es haberos descubierto claramente. ¡Mirad ahí! —señalaba la

estatuadepiedradeladiosagata—¡Soisvos!¡Esvuestrorostrotalcomoesenrealidad!¡Esvuestrabellezaytodovuestrosecreto!Elespejoylalanzaquelefaltanenlasmanossonlosemblemasdevuestropoderaltamenteoriginal: lavanidady laseducción,ese frívolo juegoempezadomilveceshastalasaciedadconlosenvenenadosrasgosdeCupido.

Mientras que, en el extravío demi cólera, le lanzaba esas palabras ymuchas otras delmismogénero,laprincesa,cuyorostrodenotabalamayoratenciónymultiplicabalosasentimientosamispalabras, se había puesto al lado de la diosa-gata, y como para invitarme a la confrontaciónmásprecisa, tomaba con una flexible y viva gracia, la misma actitud de la estatua. Me arrullósonrientemente:

—No sois el primero, amigomío, en constatar una halagadora semejanza entre esta venerableobradearteyyo…—Perdítodorecato.

—¡Sí,seguro!¡Lasemejanzavahastalosdetallesmásvoluptuososdeestecuerpodegata,señora!Unarisaburlona,unaflexión,unareptaciónylaprincesasehallabadesnudaalladodelaestatua.

Sus espumeantes vestidos sobre la alfombra como si fuera brillante espuma, evocaban la antiguaconchadeAfrodita.

—¿Y bien, tiene razón mi alumno? ¿Se verifican sus conjeturas? ¿Deberé halagarme de nodecepcionarvuestraespera,odeberíaquizádecir,vuestrasesperanzas?Ved:conestamanoizquierdacojo ahora el espejo —con un vivo movimiento tomó un objeto oval que debía hallarse en unestuche, y me mostró un instante un antiguo espejo de bronce— del que por otra parte dais unainterpretacióncorrienteperosuperficial.Enlamanodeladiosanoesenabsolutoelatributodelavanidadfemenina,sino,sisoiscapazdecomprenderlo,unsímbolodelanadadelasmultiplicidadeshumanas, tanto la del alma como la del cuerpo, un símbolo del error que está en la base de todoinstintodereproducción.Yahoravedquesólomefalta,paracompletarelparecidoconlaestatua,elhierrodelanzaenlamanoderecha.¡Lalanzaquetanamenudooshepedido!…Osequivocaríaisdemuchofigurándoosqueeselatributodelpequeñoamorburgués.Loquelalanzainvisiblees,espero,dignoamigo,quehoymismopodréisexperimentarlovosmismo…

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Con suprema desenvoltura la princesa dio un paso. Su maravilloso cuerpo de claro bronce,armoniosamentefundido,cuyadurezavirginalparecíahaberrechazadotodacaricia,eraunaobradeartetodavíamásperfectaquelaIsaísdepiedra.Meparecióquedesdeelsuelosubíaunolorsalvajede sus vestidos, el perfume que ya conocía y que empezaba a hacer zozobrar mis sentidosexacerbados.Yanonecesitabaningúnotrosignoparasaberqueenlahabitaciónsedesarrollabaelcombatequepondríaapruebamifuerzayquedecidiríalaautenticidaddemivocaciónylatotalidaddemidestino.

Ligeramenteapoyadaenunestantedelabiblioteca,laprincesa,queteníaunagraciaespontánea,inimitable y de una inocencia animal, continuaba, con su calmada y milagrosamente dulce voz,hablando del viejo culto de la Isaís póntica tal como lo había practicado una secta secreta desacerdotesdeMithra.

—¡Jane!¡Jane!—gritabainteriormenteyhubieradeseadocerrarmisoídosalaoscuramelodíadeesavozqueproseguíasuconferencia.

LaimagendeJanemeparecióqueseesfumabaenunaluzverdosa,mientrasqueellamedirigíaunsignoconlacabezaacompañadodeunamelancólicasonrisa.Sefundióytemblóenlascorrientesdel aguaverde.Lavisiónhabíadesaparecido amisojos, y lamaravillosay carnal proximidaddeAssiaChotokalouguine,elflujolimpioymedidodesuspropósitos,denuevomehabíansubyugado.

Ahorahablabadelosmisteriosdeestecultosecreto,dedicadoaIsaíslaNegra,queobligabaalossacerdotes,despuésdeinconcebiblesorgíasdeinversiónmental,avestirsedemujeres,aacercarsealadiosaporlaizquierda,mediantesunaturalezafemeninayaofrecerleenholocaustolaconcienciadesunaturalezamasculina.Sólolosdébiles,losdegeneradosalosquelesestabaprohibidaunamásampliainiciación,unaprofundizacióndelestadodediscípulo,ofrecían,eneltranscursodeldelirioritual, su principiomasculino en su realidad corporal. Estos castrados permanecían para siempreconfinadosenlosatriosdeltemplo.Aveces,habiendorecobradomástardesusangrefría,ytocadospor la intuición de una realidad superior, reconocían con espanto el error de su frenéticaprecipitaciónysesuicidaban.Suslarvas,susespectros,ibanaengrosareternamentelamasadelosservileslémures,delosesclavosdelaSoberanadelMásAllá.

—¡Jane! ¡Jane! Empecé a llamarla en mi interior para mi ayuda, pues sentía desfallecer midominiointeriorcomosihubierasidounaparracargadadepesadosymadurosracimosyalaqueseponefuegoenlabasedelrodrigónquemesostiene…

Mi invocación fue vana.Me di cuenta que Jane estaba lejos, infinitamente lejos de mí. Quizásumergida en un profundo sueño se hallaba sin defensas, con cualquier lazo espiritual conmigocortado.

En ese instante fui presa del furor contramímismo. ¡Estropajoso! ¡Pazguato! ¿Para cuándo laemasculación? ¡Merecerías terminar como un coribante tracio! ¡Despiértate! ¡Agárrate a tu propiaenergía,a tupropiaconciencia! ¡Laconcienciadesí,es laapuestadeestecombatesatánico! ¡Es tuconciencialoquesetequiererobar!Sólolaconcienciadesímismotepuedesalvar,nounaoraciónalamadre—que es lamujer en otramanifestación de su naturaleza— sino te vestirán con ropa demujeryserássacerdotedeladiosagataoalgomásqueeso…

SeguíaoyendolacalmadavozdeAssiaChotokalouguine:—EsperohaberconseguidomostrarqueenelcultodeIsaíspónticaelpuntocardinalesponeral

sacerdote neófito en la prueba de su fuerza y la impasibilidad de su conciencia. ¿No es eso?EstamisteriosadoctrinasefundaenlagranideadequenoesenelignominiosoabandonodelErosala

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copulación animal en lo que consiste el misterio del Sexo, sino en la liberación del mundo, elaniquilamiento del demiurgo mediante el solo odio recíproco de los sexos. La atracción que elcomúnde loshombresestá inclinadoasentirparasussemejantesdelotropolosexualyquesehabautizado con el término «amor» para embellecerlo mediante una despreciable mentira, unarepugnante astucia del demiurgo para mantener eternamente al populacho en la naturaleza. Porconsecuencia el «amor» es vulgar, ya que el «amor» quita al hombre y a la mujer el principiosagradodelsímismoylanzaaunoyotroenlaimpotenciadeunauniónapartirdelacuallacriaturasólo puede soñar en renacer en estemundo inferior de donde viene y a donde siempre vuelve.Elamoresvil.¡Sóloesnobleelodio!…

Losojosdelaprincesamelanzabansusrelampagueantesdardosquehacíanexplotarmicorazóncomolachispaeléctricahaceexplotarladinamita.

¡Elodio!…ElodiocontraAssiaChotokalouguinemeasfixiaba.Estabadelantedemí,desnuda,puestaenpiedeunsalto,conunaligerayenigmáticasonrisaensuslabios,yparecíaespiarme.

Aduraspenasreprimíaelfurorquecrecíaenmipechoyreencontrabaelusodelapalabra.Sólopudemurmurar:«¡Elodio!¡Éstaeslarealidad,mujer!¡Quisierapodertedecircuantoteodio!».

—¡Elodio!—susurróconvoluptuosidad—.Elodio,esoesloqueestábien.¡Finalmente,amigomío,vasporelcaminorecto!¡Odiame!Perotodavíanototibiezaeneseflujo…

Unasonrisadedespreciocruzósurostroymevolvióloco.—¡Aquí!—grité.Mironcagargantaapenassimeobedecía.Unescalofríodeplacercorriósobre

laepidermislisayfinadeesagatahumanaqueestabaantemí.—¿Quéquiereshacerme,amigomío?—¡Estrangularte!Quieroestrangularte.¡Asesina,tigresa,diosainfernal!Jadeaba.Anillasygarfiosmeapretabanhorrorosamenteelpechoylagarganta.Sentíaquesino

abatíaahímismoaesacriatura,ladestruccióncaeríasobremí.—Empiezas a saborearme, amigo mío. Ya lo huelo.—Estas palabras pasaron a mí como un

soplo.Quisesaltarsobreellaperomedicuentaqueeraimposible.Mispiessehabíanenraizadoenel

suelo. ¡Debía ganar tiempo, pacificar mis nervios, reunir mis fuerzas! Entonces la princesa diosuavementeunpasohaciamí:

—Todavíano,amigomío…—¿Porquéno?Mifuriosogrito,mirugido,apenasperceptible,vibrabalocodecólerayde…deseo.—¡Nomeodias todavía losuficiente,amigomío!—mearrulló.Entoncesmihorrorymiodio

llegados al paroxismo se convirtieron, de repente, en unamiserable y lastimosa angustia quemeoprimíaenlomásprofundoygritédegolpeconlagargantayamáslibre:

—¿Quéquieresdemí,Isaís?La mujer me respondió, serena, atenuando el timbre de su voz con una inflexión dulcemente

persuasiva:—¡Borrartedellibrodelavida,amigomío!Miangustia,entonces,secambióenunnuevoataquede ironíayde insolencia,yesaseguridad

neutralizóenmíelfríoqueamenazabaconparalizarme.Unasarcásticarisamesacudió:—¿Amí?¡Yoteexterminaréati…atimujerenvanecidaconlasangredelosgatosasesinados!

Notedejaréreposarniunminuto,tehostigaré,noperderéturastro,pantera.¡Yaeresdelcazador!El

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odio, lapersecución,elgolpemortalyo te losdestinoallídonde tecercenaré,bestiadepresa,allídondetegolpearé.

Conunalargamiradavampiresca,laprincesamehizounsignodeasentimiento.

***

Perdíelconocimientoporelinstanteindeciblementecortodeunaeternidad…Cuandoalpreciodeuninconcebiblegastodeenergíasmearranquédeesepetrificanteestadode

letargia,laprincesaestabadepieentreelaltarylabiblioteca,vestidaynodesnuda,conlosbrazosligeramenteapoyadoseneldiván,yhacíaunindolentegestoendirecciónalapuertadedetrásmío.

Involuntariamentemegiré.Casialinstanteregistrédoscosas.Enlapuerta,vestidoconlalibreadelaprincesa,cadavéricoymudo,comotodosloslacayosde

estacasayconlamiradaapagadabajoloscasicerradospárpados,estabamiprimoJohnRoger.MeparecióqueelespantoencendíalosfuegosdeSanTelmoalrededordemicabeza.Oísalirde

mibocaungritomedioestrangulado.Busquéunapoyoparamispiespresasdevértigo.Unavezmásdirigí a la puerta mis desorbitados ojos, debía de haber sido víctima de una alucinación de missentidos sobreexcitados. El criado de pie en la puerta era en efecto un hombre alto y rubio—uneuropeociertamentequecontrastabaconesa inquietante servidumbreasiática—peroapartedeunligeroparecido,noeramiprimoJohnRoger.

Todavía bajo el espanto que me había causado el criado, por una especie de constataciónmaquinalnotéotrodetalle:laestatuanegradelaIsaísgreco-pónticateníaensucerradamanoderechaeltrozodeunalanzanielada…

Meacerquéunospasoshaciaelaltaryvi,sinerrorposible,queeltrozoroto,asícomolamismapuntadelalanza,estabaesculpidoensienitanegra.Exactamentelamismadelaestatua.Todoestabatalladoenunsolo trozo,demaneraqueesteatributonuncahabíafaltadoen lamanode ladiosa…Cuando me hube asegurado de que no había podido engañarme, me sentí como quien recibe, atraición,unpuñetazoenlanuca.¡Anteslaestatuanollevabanadaensumanoprestaaasir!¿Cómohabíallegadoesehierrodelanzaaesenegropuñodepiedra?

Notuvetiempodereflexionarmás.El criado había anunciado una visita que esperaba fuera y la princesa había dado orden de

introducirlo.EnmisoídosresonólasuavevozdeAssia:—¿Oshabéisvueltosilencioso,queridoamigo?¡Desdehaceunosminutosmiráisfijamentenosé

quéynoconcedéislamenorconsideraciónamisinterminablesydiligentesexposicionessobreloscultos locales de Tracia! Sigo hablando como buen profesor alemán con la vana esperanza deinteresaros con mis enseñanzas y vos os adormecéis en medio de la lección. ¿Es ello gentil porvuestraparte,amigomío?

—Yohe…¿yohe?…—¡Y cómo!Os habéis bien dormido, según parece, querido.Quiero intentar—la princesame

dirigiódenuevounadesusperladassonrisas—engañaramisusceptibilidadatribuyendolafaltanoami exposición sino a vuestro mediocre interés por el arte y la cultura greco-pónticas. Toda estasapienciahabrásidoderrochadaparanada…

—Dehecho, no sé, princesa, balbuceé, estoy confundido…Os ruegome perdonéis…pero no

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puedohabermeengañadodeunamaneratanincomprensible…laestatuadeIsaísconcabezadeleón,porejemplo…

—Elsudormeperlabalafrente.Debíusarelpañueloparasocorrerme.—¡Naturalmente, hace mucho calor aquí, exclamó la princesa espontáneamente, perdonadme,

querido amigo! ¡Amo tanto el calor! Pero quizá os será más agradable dar algunos pasos alencuentrodelvisitantequemeacabandeanunciar.Lipotinenosesperaenlaantecámara.Esperoquenoestéismolestoenquehayaconsentidorecibirlo,yaqueesunamigocomún.

¡LipotineL.Tuvelasensacióndereencontrarmecompletamenteydevolveratomarposesióndemisfacultades.

Nopuedoexpresarlodeotranimejormanera:¡Meparecíaemergerde…deeseabismodondereinaba la luzverdeque llenaba lahabitación!Laprincesa, sentada, saltóyabrióelbadajodeunadisimuladaventana.Elcálidosoldelatardehizobailarenlahabitaciónunhazdepolvodorado.

Contodasmisfuerzasrefrenabacomopodíaeltorbellinodedudas,depreguntasydereprochesque me hacía a mí mismo, al tiempo que acompañaba a la princesa en la antecámara donde yaesperabaLipotine.Vinorápidamentehacianosotrosconunsaludollenodevivacidad.

—¡Estoy desolado, comenzó, pormolestar el primer encuentro demi noble protectora con unvisitante que durante tanto tiempo ha esperado en vano! Pero estoy convencido de que quien haprobado una vez este insigne ambiente no dejará escapar la ocasión de volver. ¡Os felicito, miestimableamigo!

Siempre desconfiado, intentaba en vano captar, en una mirada o en un gesto, una secretacomplicidad,entreambos.Peroenlacrudaluzyenlabanalidaddelaantecámara,laprincesaestabaenconformidadconelpapeldeunagrandamaodelaamabledueñadelacasaquesaludaaunviejoamigo, incluso su ropa, a pesar de su corte perfecto y de su elegancia, ya no me parecía tanextraordinaria.Constatéqueestabacortadoenunbrocadodesedararaypreciosa.

LaprincesaacogióconunasonrisalaspalabrasdeLipotine:—Lipotine, temoquenuestrocomúnamigotengaunamala impresióndemícomoanfitrionay

dueña de la casa. Sabed simplemente esto: he tenido la audacia de darle una conferencia, ynaturalmente:sehadormido.

Lasrisasylasburlasdetodotipoanimaronnuestrodiálogo.Laprincesacontinuabasosteniendoque había faltado a los deberes fundamentales de la hospitalidad femenina. Había olvidado, sí,realmentehabíaolvidadohacerservirelcafé,yellosimplementeporquenohabíapodidoesperaraostentarsupocosaberante losojosdeunconocedordemicompetencia.Nuncadeberíadarseunaconferenciasinhaberreconfortadopreviamenteconunbuencordialaloyenteescogidoporvíctima.Mientrastantosemeenrojecíalacaradevergüenzaalpensarenloquehabíausadoeltiempo,eneldesenfrenodemisueño,duranteelcualmianfitrionamecreíadormido.

JustoeneseinstanteLipotinemeechóunamiradaalsesgo,yesamiradaparecíadecirmequeconun sólido y penetrante instinto de viejo anticuario, leía más o menos a descubierto en mispensamientos.Miconfusiónaumentó.Porsuerte,laprincesapareciónonotarnada,einterpretómiembarazocomounarepercusióndeesesueñodeembriaguez,elresponsabledelcualeraelcalordelahabitación.

Reprimiendo una sonrisa maliciosa, Lipotine me ayudó a salir de esa molesta situaciónpreguntandoalaprincesasiyamehabíahechopasarunarevistaexhaustivaasucoleccióndearmas,única en el mundo. La princesa, afectando un cómico desespero, le respondió con gemidos y

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estallidosderisaqueteníarazón,primeroporquenohabíaencontradoelmomentoyluegoporquenosehabíaatrevido…

Asísepresentabafinalmentelaocasiónderehacermiprestigiofuertementeherido.SostenidoporLipotine,implorabaelfavordeseradmitidoacontemplaresacoleccióndelaquehabíaoídodecircosasfabulosas.Medeclaraba,bromeando,prestoparaafrontarlamástemiblepruebadeatenciónenunaexposiciónrelacionada,además,enundominioenelquedesgraciadamenteera,porasídecirlo,un profano. La princesa se dejó doblegar y nos condujo a las habitaciones interiores. Llegamos,mientrasseguíamosbromeando,aunahabitación,situadaconcertezaenotraaladeledificio,quedemaneraimprevistasealargabaamododegalería.

Entrelasvitrinas,lasparedesresplandecíanliteralmenteconelfulgordelacerodeinnumerablesarmaduras.Semejantesainanimadosdespojosdehombres-insectos,estabanpuestasunasal ladodeotras como esperando sin esperanza, una repentina orden que las llamara a la vida. Por encima yentre las armaduras había cascos redondos y cascos puntiagudos, corazas adamascadas, arneseslabrados,cotasdemallasartísticamentedispuestas,lamayorparte,segúnhejuzgadoaprimeravista,deorigenasiáticooeuropeo-oriental.Eraelmássuntuosoconjuntoguerreroquejamáshayavisto,particularmentericoenarmastrabajadasenoroypiedraspreciosas,desdelafranciscamerovingiahastalosescudosypuñalessarracenosdelosmejoresarmerosárabes,sasánidasypónticos.Estabaextrañamenteimpresionadoporlafantásticasensacióndevidaquedaba,apesardesurigidez,estarelucienteycasiamenazantecolección,comosísetrataradeseresconsólolaaparienciademuertos,repartidosaquíyalláenlosbrillantesmuros.Perotodavíameparecíamásextrañoeinsólitoveriryvenirantemí,conligereza,alapersonaquecoleccionabaestoshomicidasobjetos,vestidaalaúltimamodaypasablementeextravagante.¡Unamujer,unacaprichosagrandama,apasionadagestoradeunasala llena de instrumentos llenos de tortura y de muerte! Tuve poco tiempo para analizar elsentimientodeesainclinaciónacoleccionarquehabíacompartidoconsupadremuerto.Sabía,congran habilidad, volver a captar la atención en nuevas y preciosas curiosidades, de las quenaturalmentenoheguardadoungranrecuerdo.Meparece,einclusoestoycierto,queestacolecciónno ha sido en absoluto reunida según los criterios habituales. El viejo príncipe había sentidomanifiesta y extraordinariamente un interés particularísimo por las piezas señaladas por unaprocedencia o un destino notables. Debía de haber sido empujado especialmente por un interéshistóricoyanecdótico,noexento,segúnpuedejuzgarse,deunciertogustodelaantigüedadydelaleyenda. Se podía ver el escudo deRoldan y el hacha deCarlomagno; en un almohadón de viejoterciopelorojoreposabalalanzadeLongino,elcenturióndelGólgota;habíaelpuñalencantadoconel que el emperador Sun Tiang Seng había marcado el límite que ningún mongol se atrevería afranqueardespués,demaneraquesussucesoreshicieronlevantarparasupropiagloriaymemorialagranmuralla China que esa fronteramágica hacía innecesaria…Ahí brillaba el terrible acero deDamasco con el que Abon Bekr había, con su propia mano, decapitado los setecientos judíos deKuraiza sin detenerse ni el tiempo de un suspiro en su sangriento trabajo. Hasta la saciedad, laprincesa seguíamostrándome las armasdegrandeshéroesde los tres continentes, encuyaspiezasfluíalasangreyelhorrordedescabelladasleyendas.

Bienprontotuvesuficiente.Mesentía,porasídecirlo,comoasfixiadoporlosmacabrosefluviosquedesprendíanesascosasmudasya lavez tanelocuentes.Lipotinepareciódarsecuenta, segiróhacialaprincesayledijobromeando:

¿No querréis, señora, confiarle también a vuestro paciente invitado, después de haberle hecho

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pasar revista a tantas cosasmaravillosas, el tormento secreto, el incurable punto doloroso de estacolección?¡Creo,princesa,queambosnoslohemosmerecido!

No comprendí lo queLipotine quería decir ymenos aún el diluvio de palabras que de ambosbarbotaronamediavozyenruso.Derepentelaprincesasegiróhaciamísonriendo:

—¡Perdonadme! Lipotineme hostiga a propósito de la lanza… esa lanza que creía en vuestraposesión… ¡ya sabéis!…En fin os debo una explicación, ¿no es cierto?Naturalmente comprendomuybienquelaesperéis.Espero,quecuandooshayaconfiadoel…comodiceLipotine,eltormentodelosChotokalouguine,quequizávos…quizá…

Experimenté de nuevo en la garganta la desagradable sensación de que lamistificación de eseenigmáticohierrodelanzaibaarecomenzar,yarecrudecerelequívocodelossucesosdeesatarde.Hiceunesfuerzosobremímismoydeclaréenlosmásbrevesysecostérminosquemefueposiblequeestabadispuestoaoírlasexplicaciones.

Laprincesamecondujocercadeunaaltavitrinaymemostróunestuchevacíodemasiadograndepara contener un puñal del largo de treinta y cinco centímetros. Comenzó a hablar con su vozcantarina:

—Yahabéisobservadoqueacadaunodelosobjetosdemicolecciónseañadeunanotaenruso,redactadacuidadosamentepormipadreyqueindicaelusoyeldestinodelobjetoencuestión.Vosnocomprendéiselruso,asípues,osdirésimplementequelasnotascontienen,digamos,laleyendadecada pieza. Las armas interesantes, sobre todo, viven más tiempo y por ello son más ricas enexperiencias.

Mipadrefuefascinadosobretodoporesteelementofatídicoyestaciencia,yyodeboreconocerqueheheredadodeélesta…estaardienteparticipaciónalaepopeyadeesascosas,siselasquierellamar«cosas».

Notáisunsitiovacío.Elobjetoquedeberíallenarloes…—¡Ah!—casituveunrepentinomiedoporhaberloadivinado—seosharobado.—N…no—laprincesadudaba—n…no,amíno.Paraserexactos,elobjetonohasidorobado.

Digamos:hasidoperdidoinexplicablemente.Nohablodeelloporgusto.Brevemente,estapiezaeraalosojosdemipadrelamáspreciosaylamásirremplazable.Siguesiendolomismoparamí.Faltaenlacoleccióndesdequetengousoderazón,elestuchevacíoyaocupabatodosmisprimerossueñosde la infancia.Apesardemis impetuosaspreguntasmipadrenuncamehabía revelado cómoestehierrodelanzaseextravió.Cadavezquelointerrogabasobreellopermanecíatristeydemalhumordurante días. La princesa se interrumpió bruscamente ymurmuró, con aire de ausencia, frases enruso entre las que creí percibir la palabra «Isaís»; luego continuó envoz alta: sólo unavez, pocoantesdenuestrahuidadeCrimea,algunassemanasantesdesumuerte,medijoundía:hijamía, túdeberásencontrar la joyaperdida,simisesfuerzosenesta tierranohansidovanos,hesacrificadoporestaarmatodoloqueunmortalescapazdesacrificar.¡Tú,hijamía,estáscasadaaestepuñal,aeste hierro de lanza, es con él con quien debes celebrar tus bodas! Podéis imaginaros, señor, laimpresiónquehandejadoenmílaspalabrasdemipadre.Lipotine,antiguoconfidentedelpríncipe,os confirmará que las alusiones del moribundo referentes a sus esfuerzos de toda una vida paravolveraestarenposesióndelarmaqueaquífaltaeranprofundamentetrastornadores.

Lipotineasintiódiversasvecesconlacabeza.Meparecióqueelrecuerdonoleeraagradable.Mientrastantolaprincesahabíasacadounmanojodellavesdeaceroazulado,tomabaunayabría

lavitrina.Sacóunviejoyamarillentopapelusadoquellevabaunanotaquemetradujo:«Númerode

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colección793b:puntade lanzadeunaaleaciónmetálicano identificadaperfectamente(¿Magnesiomáshierrometeórico,conunamezcladeoro?)ulteriormentetransformadoenláminadepuñalenunestiloquenoesdetodosatisfactorioyretrabajado.Empuñaduradelpuñal:trabajocarolingiotardío,probablementehispanomorisco,noposterioralaprimeramitaddelsigloX.Ricamenteincrustadodealejandrita oriental, de turquesa, de berilio y de tres céfiros persas. Heredado de PiotrChotokalouguine—mi abuelo— que lo había recibido como regalo de la emperatriz Catalina laGrande.ProvenientedeunacoleccióndecuriosidadesdeEuropaOccidentalquesuMajestadelZarIvánelTerriblehabríarecibidodelreydeInglaterraentonceseneltrono.Elpuñal,sedice,estabaenlacoleccióndesdeeltiempodelagranElizabeth,reinadeInglaterra.Latradiciónrelativaaelladice:

—Este precioso bronce adornaba antaño la invencible lanza del antiguo héroe y príncipe deGales,Hoel,llamado«Dhat»,esdecir«ElBueno».EsteHoelDhathabríaobtenidoestaarmaporvíasbienparticulares,conelsocorromágicodelosElfosBlancos,servidoresdeunacofradíainvisiblequedirigelosdestinosdelahumanidadyquellamanlos«jardineros».ParecequeelpríncipeHoelDhatprestóungranservicioaestosElfosBlancos,queenGalessetienenporpoderososespíritus.Enagradecimiento el rey de los Elfos Blancos le habría mostrado, triturando cierta piedra yamalgamándoleunadeterminadacantidaddesupropiasangre,aobrarunalanza.Pronunciandounafórmulasecretadeconsagraciónydeiniciación,lanuevaarmadebíasolidificarseenseguidaconelcolor de la hematita, y endurecersemás que el acero, e incluso que el diamantemás duro.Debíavolverasuposeedorinvencibleeinvulnerableparasiempre,ydignodelarealezasuprema.Yestonoeratodo,estalanzapermitíaasuposeedorescaparalamuerteporelvampirismoquevienedelamujer.EstatradiciónsehamantenidovivaatravésdelossiglosenlafamiliadeHoelDhat.Lalanzafuecelosamenteguardada,lasesperanzasalimentadasylaorgullosapretensióndelosdescendientesde Roderick siempre renovada. Pero uno de estos Dhat—o Dee como más tarde se llamaron—perdióelpuñalendeshonrosascircunstancias.OlvidólabendicióndelosElfosBlancosyseatóalmalsendero,creyendoobtenerarteramentelacoronadelaInglaterraterrestre,mediantediabólicasbodas.Almismo tiempoque el puñal perdió la fuerza, la herencia y la bendiciónde la sangre, elanatemase ligódesdeentoncesalhierrode lanza;sóloelúltimode ladesviadarazadeHoelDhatpuedeponerlefindevolviendoalpuñalelpoderylaesperanzaatávica.Yaque,mientraslalanzadeHoelDhatnosea lavadade lasangrequeunavez lamanchó,nohayesperanzaparaHoelDhatdeliberarsedeunacadenaquedesembocaenlanegradestrucción.

Aquí Lipotine interrumpió a la princesa y dijo rápidamente girándose hacia mí: «La leyendaañade que si un ruso llega a poseer la lanza, Rusia dominará un día elmundo y si es un Inglés,InglaterraseapoderarádelImperioruso.Peroestoespolítica,y¿quiéndeentrenosotros—concluyóconunaaparenteindiferencia—seinteresaporcuestionestanlejanas?».

Visiblemente, la princesa no había entendido sus palabras, devolvió la leyenda a su sitio ymedirigióuna fatigaday ausentemirada.Meparecióque susdientes rechinaban ligeramente antesdequeprosiguiera:

—Ahora,amigomío,comprenderéisquizáporquésigotantancercacualquierseñalquesusciteen mí la esperanza de reconquistar la lanza de Hoel Dhat, como la llama la leyenda de misantepasados.Enefecto,¡quéhaydemásexcitante,máselectrizanteymásexaltanteparaelentusiasmodeuncoleccionistaquetenerbienguardadoyencerradoensuvitrinaalgoqueparaotro,ahíafueraenelmundo,significaríatodalafelicidad,lavidaylaalegríaeternasipudieraconseguiresacosadelaqueyomeheapropiado,queyoposeo!

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Bajolosefectosdelgolpefuiincapazdedisimularamisinterlocutoreselimpetuosocombatedesentimientosypensamientoscontradictoriosqueselibrabaenmí,dedisimularlossobretodoporque,sealoqueseaquemesucedadesdeahora,yanosemesacarámás.MeparecíaquetodaslasvelasqueaúnqueríanrobarmeelsecretodeldestinodemiantepasadoJohnDee,demiprimoRogerymío,sedesgarraban.Ungozoyunsalvajeestadofebril,unavalienteaunquepeligrosaefervescenciadetodosmis pensamientos, hipótesis e intuiciones, empujaban las palabras a mi lengua. A duras penasconseguíamantener la fisonomía del huésped cortésmente interesado que afecta deleitarse con loscuentosmarchitosdesiglosprescritosysupersticiosos.Peroalmismotiemposentíespantopor laexpresión literalmente infernal de la cara de la princesa, cuando hablaba del sádico placer delcoleccionista que pretende hallar la mayor voluptuosidad en echar el cerrojo sobre un objeto,esterilizándoloysinesperanzadequepuedarealizarsudestinoenelmundo,sinoselepermitequepuedaobedecerasu inclinación, ladesalvar lavida,salvarelalma.Sí, lomáshorribleeraquealsaberloquelacosapodía,seañadíaunnuevosaboralgozodelcoleccionista,másquepropiamentecon la emasculación de las fuerzas creadoras del destino, el aborto de los potenciales y de laspromesasdeunricofuturo,lairremediableesterilizacióndelpodermágico,fecundoydemoníacodeengendrar.Elloconstituíaunadeliciaparalamentalidaddecoleccionistaquelaprincesaacababadeconfesarcínicamentecomosuya.

ParecequeAssiaChotokalouguinesediocuentadequehabíacometidounerror.Derepenteseinterrumpió,molesta,cerrólavitrinaynosacompañófueradelasaladelascoleccionesconalgunasfrasesbanales.ApenassiqueríaoírlaspalabrasqueledirigíaLipotinemedioenbroma:

—¿Quépensarádemínuestronobleamigo?Dehecho,queridaprincesa,yaosinforméunavez,mediantealusiones,quehabíadescubiertodealgunamaneraalguienqueteníaauténticoderechoalaherencia de lamuy respetable familia deHoelDhat, oDee. ¡Ahora se imaginará que he tenido eldeseodequitarleunaeventualreliquiaancestral,quedebíadevolverlecomolamonedamágicadelafábula!Soydeltodoinocente,nobleprotector,aunquelaprincipescafamiliadelosChotokalouguinemehaya asignadodesdehacemásde cuarenta años la gloriosamisiónde buscar en toda la tierrahabitadaydeprocurarmeacualquierpreciolapiezaperdidadelacolección.¡Sincontarqueyamisantepasados,eneltiempodeIvánelTerriblehanprestadoserviciodemodoanálogoalosancestrosde ladueñade la casa!Pero todo estonoquitanada,muyestimadoprotector, a la alta estimaquetengo por vuestra persona.Además, para terminar con las charlas, pues veo que nuestra graciosaanfitrionaestáunpococansadaporeltrabajoquesehatomadoenmostrarnossucolección;dejadmesólo, princesa, haceros notar brevemente quemi vieja nariz de anticuario, en lo que se refiere ahusmear,todavíanosehaequivocadonunca.Cuandohevueltoaver,despuésdeaños,elestuchequecontieneelpuñal,mehavenidoelseguropresentimientodequeestábamosmuycercadeencontrarelarma,hastaelpuntoquehedebidointerrumpiros—segiróhaciamí—.Debéissaber,nobleamigo,que una de mis extravagancias, una superstición de mi oficio, consiste en creer que por unamisteriosa transmisiónen la invisiblecadenademisantepasados—quesehanconsagrado todosadescubrircuriosidades,cosasantiguas,reliquiasportadorasdeantiguasbendicionesomaldiciones—tengolafacultaddehusmear,comounperrodecaza,cuandoelobjetodemibúsquedasehallaamialcanceenelespaciooeneltiempo.¿Voyyoalencuentrodelobjetodemibúsqueda,osonlascosassobrelasquemideseoejercesuatracción(ocualquieraqueseavuestrainterpretacióndelfenómeno)lasqueviajanhaciamí?Mees indiferente,yohusmeo,adivino,cuandoelcontactoestáapuntodeproducirse.Yyo,mimuyqueridaprincesa,yyo…queMasceeelMaestrodelZarmecastiguesino…

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yo…sientoelpuñal,elhierrodelanzadevuestrosPadres…delnoblelinajedevuestrosPadres,mispatronos,simepermitísexpresarmeasí…siento,husmeoenalgunaparte,muycerca…

Durante este discurso de Lipotine, que me pareció lleno de irónicas alusiones, y de unaambigüedadunpocopesadayquemediounsentimientodemalestarydeopresión,habíamossalidode lasalayvueltosa laantecámara.Eravisibleque laprincesadeseabadespedirnos,yomismo lodeseaba.Me puse el deber de expresarmi agradecimiento ymi intención de retirarme, cuando laprincesa, con una vivacidad inesperada, después de la brusquedad con la que había interrumpidonuestravisitaalasala-museo,selanzóenunaseriedeexcusasparasulunáticaactitud.Tambiénaellale había invadido una incomprensible fatiga acompañada de una somnolencia que su precedenteironíavolvíamuchomásincongruente.Atribuyóloquelehabíapasadoalpesadoolordealcanfor,inevitableen losmuseosraramenteaireados.Rechazó,casicon impaciencia,elconsejo,desentidocomún,deiradescansaryexclamó:

—¡Necesito aire fresco! Vosotros también, creo, más o menos. ¿Cómo va vuestro dolor decabeza,amigomío?Consólosaberdondeosplaceríair,miautoestarádispuestoalinstante…

Lipotinelainterrumpióaplaudiendoalegremente:—¿PorquéSuAlteza,yaquetieneunLincoln,nosubiráhastaelgeyser?—¿Elgeyser?¿Quégeyser?¿Aquí,enlavecindad?¿HabitamosIslandia?—preguntéestupefacto.Lipotineseechóareír:¿Nohabéisoídodecirquehaydíasenquefuentescalienteshansurgidodeimprovistodelsueloal

piedelamontaña?CercadelasruinasdeElsbethstein.Elpopulachosepersigna,yaqueveenelloelcumplimientodeunaantiguaprofecía.Elcontenidodelaprofecíaloignoro.Entodocaso,escuriosoqueestasfuentescalientessurjanenmediodelpatiodelcastillodeElsbethstein,dondeantaño,segúnsedice, el propietariodel castillo, un inglés llamadoElsbeth,habebidoel aguade la fuentede laeternajuventud.Unbuenpresagioparaelestablecimientotermalqueprontoseinstalaráahí.

EsasaclaracionesdadasporLipotineentonodebroma,suscitaronenmíunconfundidoecodediversasideas.Hubieraqueridopreguntarlequésabedeuna«Elizabethinglesa»yaqueyo,hijodelpaís, ignoraba que semejante leyenda se relacionara a las ruinas de Elsbethstein, pero todo sedesarrolló demasiado deprisa, además fui de nuevo presa de esa fatiga, de ese torpor quenormalmentesigueaundesfallecimiento,paranodecirauna«intoxicación».Elrápidointercambiode palabras entre Lipotine y la princesa se me escapó, y sólo cuando esta última me preguntóanimadamente si no me placería hacer una excursión vespertina en coche hasta las ruinas deElsbethstein,unabuenaocasiónparalibrarmedemidolordecabezaconunpocodeairepuro,novolvíatomarparteenlaconversación.

MiúnicarazónparadudareraelpensamientodeJane,alaquehabíaprometidovolveralrededordelahoraqueera.Alinstanteestepensamientoseapoderódemíconunsingularpoder.Derepentemepareciónecesarioanunciarclaramenteporprimeravezloquesalíanaturalmentedemirecienteexperienciaydelaconvicciónqueacababadeadquirir.Sinmirarmemucho,respondíderondón:

—Estainvitaciónaunpaseoalairelibre,encantadoraamiga,llegarealmenteensumomento,yaqueserásinningunadudaextraordinariamentebenéficoamisistemanerviosoquehadadomuestrasdeunaindisciplinaindecente.Tendréderecho,princesa,avuestraindulgencia,pormiindiscreción,siosruegoquemeexcuséisoquetambiéninvitéisaestepaseoami…prometida,quemeesperaaestahora…

No di tiempo a la ligera sorpresa de Lipotine y de la princesa para expresarse y proseguí

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rápidamente:—Yalaconocéisunoyotra,esFrauDoktorFromm,ladamaque…—¡Ah!¿vuestragobernanta?—exclamóLipotinesinceramentesorprendido.—Si,miamadellaves,siqueréis—confirméymesentíverdaderamentealiviado.Sinparecerlo

observaba a la princesa. Assia Chotokalouguine con una discreta sonrisa me tendió vivamente lamanocomoaunviejocamarada,ymedijoconuntoquedeironía:

—¡Quécontentaestoyamigomío!¿Asípues,unasimplecoma?¡GraciasaDios,noesunpuntofinal!

Nocomprendíentoncesquéqueríadecir,supuseunabromayrespondíriendo.Almomentosentíqueesarisaerafalsa,queimplicabaunacobarde traiciónaJane,peroprontomearrastró lavelozruedadelaspalabrasydelasdecisiones;laprincesacontinuó,convolubilidad:

—¡No hay nada más bello que poder participar algunas horas de solaz con gente feliz! Osagradezcoqueridoamigoestaproposición.Tendremosunencantadoratardecer.

La hora siguiente pasó con una rapidez casi inconcebible. Tomamos asiento en el auto cuyomotoryaronroneabaantelapuertadeljardín.

Al subir en el coche sentí una sacudida eléctrica, el chófer al volante era… John Roger…¡NaturalmentenoJohnRoger!¡Esimbécil!Quierodecir,elcriadodelaprincesaqueporsuestaturaysutipooccidentalmehabíaimpresionadotantoenmediodelaservidumbreasiática.¡Caíaporsupropiopesoquelaprincesanohubieraescogidodechóferauncalmuco!

Enmenostiempodelqueseusaparadecirlo,nosdeteníamosantemipuerta.MeparecióqueJaneme esperaba. Fui secretamente sorprendido de que no manifestara ninguna sorpresa, ningunareticenciacuandolehicesaberlaintencióndenuestrosamigosquenosesperabanparahacerjuntosuna excursión río arriba. La proposición incluso le agradó, se separó y se vistió con unasorprendenterapidez.

AsíempezóestamemorableexcursiónaElsbethstein.

***

Yaelencuentroentrelasdosmujeresenlacalle,cuandoJanesubióalcoche,habíadecepcionadoamispronósticos.Laprincesa,viva,amable,conuntoquedeironíaeneltimbredesuvoz,segúnsucostumbre. Jane no estaba en absoluto incómoda comome lo había temido un poco, en absolutosuperadaporlosúbitoyextraordinariodelasituación…alcontrario.Saludóalaprincesaconunacortés reserva y con los ojos brillando de gozo.Al dar las gracias a la propietaria del coche, sehubieradichomejorquesedoblegabaconcalmaaunaexigencia.

El primer detalle queme sorprendió, cuando nos hubimos instalado en el vasto y confortablecoche de lujo, fue la risa de la princesa con una cierta resonancia nerviosa que nunca antes habíanotado,tambiénlamaneracómoseenvolviólasespaldasconunchal,comosituvierafrío.

Luego mi atención se centró en el conductor y en el paso que adoptó una vez pasados lospopulososarrabales.Podríadecirsequenofueuntrayectoenautomóvil,sinounaespeciedevuelollano,dulce,silencioso,casisinsacudidasapesardelasirregularidadesdelfirmedeunacarreterasecundaria. Una mirada al cuadro de mandos me indicó ciento cuarenta kilómetros por hora. Laprincesanoparecíadarsecuenta,en todocasonomanifestóningún interésenreprenderalchófer,sentado al volante como si estuviera privado de vida.Me volví a Jane que, con una fría mirada,

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contemplabaelpaisaje.Sumanoreposabaenlamía,inmóvilysuave,tampocoparecíasorprenderselomásmínimodelalocavelocidaddenuestracarrera.

Pronto laagujamarcócientocincuentayoscilóhacia lamarca siguiente.Entoncesme invadióunaprofundaindiferenciarespectoalasimpresionesexterioresdeestepaseo:losagudossilbidosdelos árboles al lado de la carretera, la vertiginosa danza de diseminados peatones, carros yautomóvilesadelantadosconunpitidodebocina.

Pocoapocomehundíaenunamudareconstruccióndelashorasqueacababandepasar.Veíaalaaltivaprincesaconlosojosfijosenelespacioquedevorabanuestracarrera,parecíaunadivinidaddebronce,surostroteníalaexpresióndeunapanteraacechandopacientementeaunapresaapuntodeandar por los alrededores. Flexible, la epidermis lisa… desnuda. Por más que intento evitarlo,siempreveoantemíladesnudapredicadoradelcultosecretoyvoluptuosodelossacerdotesdeIsaís,laanunciadoradelplacereróticodelqueelexacerbadoeincandescenteodiodetentalasllaves…Denuevo siento la necesidad de apretar entremis dedos el cuello de esa demoníacamedio gata y desaborearconlosmúsculosdemismanoshomicidaslasorgíasdelodio,odio,odioydelacólera.Denuevolaangustiaseempollabaydeslizabaenmisvenasydirigíruegotrasruegoa…Janeenelmásallá,comosinoestuvierasentada,consumanoenlamía,cercademí,juntoamíenunautomóvilaalta velocidad, pero que se perdía en las alturas, lejana, como una diosamás allá de las estrellas,comounaMadreenuncieloinaccesible.

En ese instante tuve en todo el cuerpo un repentino estremecimiento de terror elemental. ¡Uncarroenfrentenuestro!¡Doscochesdelantenuestro!¡Ynosotrosllegamosentromba,justoencima,auna velocidad de ciento sesenta kilómetros! ¡No hay medio de frenar, la carretera es demasiadoestrecha!¡Aderechayaizquierdalabordeaelprecipicio!

El conductor sigue impasible al volante. ¿Se ha vuelto loco? Acelera hasta ciento ochentakilómetros.¿Pasarporlaizquierda?Imposible,tresvehículosnopasanalavez.¡Entonceselchófergiraligeramentehacialaderecha!«Correalabismo,sehavueltoloco»,medigo.Unsegundomásynosempalaremosenlostroncosdelosárbolesdelcarro.¡Mejorprecipitarsealabismo!¡Yaestamosen él! La mitad derecha de nuestro coche flota libre encima del abismo, en el que un espumosotorrentesaltaentre las rocas.Apenassi tenemosunsolometroal ladodelcarroparaquenuestrasruedasdela izquierdasiganrodando, la terroríficavelocidadmantieneelcocheverticalyellonossalvadelvuelco.

Lanzo una rápida mirada hacia atrás. El grupo de vehículos lejos, lejos detrás nuestro, ya esapenas visible hundido en una espesa polvareda blanca. Imperturbable al volante, «John Roger»,parecequesólohayasidounjuegodeniñosparaél.«Sóloeldiablopuedeconducirasí,medije,ouncadávervivo».Ydenuevo, silbando, rozamos los enormes arces como si quisiéramos segarlos…Lipotineríe.

—Unamaniobra con clase, ¿eh?Si esta fuerza centrífuga se hubiera dormido un solominuto,nosotros…

Lentamente,comosimeclavaranmilalfileres,lasangremevolvióacircularpormismiembrosparalizadosporelespanto.Meparecequerespondí,conlacaraunpococrispada:

—Casidemasiadoparamivulgaresqueleto.Elrostrodelaprincesameprestaunairónicaexpresión:—¿Tenéismiedo?Buscomispalabras.NomehapasadoinadvertidoqueAssiaChotokaslouguinedesdeelprincipio

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deltrayectohaobservadodiversasvecesaJane,sentadaasulado,conevidentepreocupación,sí,casicon angustia. Es un rasgo nuevo en ella paramí, que estimulami sagacidad, y respondo con unasonrisaigualmenteirónica:

—No,queyosepa.Sinomeengaño,elmiedo,entreamigos,deberíasercontagioso.Ysegúnpuedovertenéisalgunadificultadparadisimularvuestromalestar.La princesa se sobresaltó ligeramente. El ruido de nuestro paso por un túnel la dispensó de

responder.EnsulugarfueLipotinequiengritócontraelviento:—¡NuncahubierapensadoqueVuestrasSeñoríashabríandecombatirporlaprioridaddetemerla

muerte en lugar de tomarse como un agradable descanso el paso de estosminutos! ¡Además,meimportamuypocodonde termine el viaje!Enmi familia aparecer y desaparecer sin dramasde laescenadelavidaesunatradiciónhereditaria.

Uninstantedespués.Janedijocalmadamente:—¿Quiénsiguesuvía,cómopuedetemerla?Elterrorsólogolpeaaquiencontraríasudestino.La princesa se calló. Sobre su sonriente rostro se dibujaban fugitivas sombras, que yo supuse

reflejosdeunatormentainterior.Entoncesdaunligerogolpeenlaespaldadelconductor:—¿Porquéconducestanlentamente,Roger?Tuvelaimpresióndeserpinchado.¡ElchófersellamaRoger!¡Quédesconcertantecoincidencia!Elhombrealvolanteasienteconungolpedecabeza.Unrugidocasimusicalsurgedelmotor.La

agujamarca loscientoochentaunavezmás,ydespuésdeoscilarunpoco,sefijasobreesepunto.MiroaJane,quisieramorirensusbrazos.

Cómo hemos podido llegar sanos y salvos a las ruinas de Elsbethstein por un camino tanescarpado,abruptoyaccidentadoserásiempreparamíunenigma.Sólohayestaexplicación:hemosvolado.Elenormepoder,laincreíblesolidezdelcochehacíanposibleelmilagro.Entodocasonadieantesdenosotroshabíasubidohastaarribaenautomóvil.

Detrásdeungeyserqueselanzaaloaltodelcielo,apoyadossobresuspicosyazadas,brillantespor lahumedadquedesprendeelaguacalientesurgidadelsuelo,hayunosobrerosquenosmiranpasmadosyque seasemejanacriaturasdelHades.Andamos silenciosamenteentre lasparedesdelcastillobellamentecubiertasdeyedra.Sinembargoveounadisposición,unaintencióncasiracionaly querida por el jardinero en el crecimiento de los arbustos, entre los que se abren unas vistasseductoramente hechizantes sobre el fondo del valle. Un sorprendente y casi romántico contraste:¡esos macizos de flores diseminados por todas partes y dominados por estas murallas que sedesmoronan!Unopodríacreersequevagabaenunparqueencantado,enelcualderepentesalíananteelpaseanteestatuasdepiedrasincabezaobrazos,comidasporelmusgo,comosiunhadalashubierapuestoahíalazarparaespantarloogastarleunabroma.Enelfondodelvalle,comounahendidura,undesgarrónenlaroca,centellealaplateadaespumadeltorrente.

Unodenosotrospregunta:—¿Quiéncuidatanbienestedesordentanbelloytandesconcertante?Nadiesabíalarespuesta.—¿Nomehabéiscontadounaleyenda,Lipotine,relacionadaconelcastillodeElsbethstein?¿De

unacastellanallamadaElizabethquebebióelaguadelafuentedelaJuventud,oalgoparecido?—Podemospreguntaralosobrerosdelpatiodelcastillo,—sugierelaprincesaindolentemente.—¡Buenaidea!Volvemoslentamentealpatio.

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Lipotinesacasuestuchedemarfilylotiendeabiertoaunodelostrabajadores:—¿Aquiénpertenecenlasruinas?—Anadie.—¡Puesbiendebenserpropiedaddealguien!—Denadie.¡Preguntenalviejojardineroquehayahídentro!—rezongóunodeloshombresdel

grupo, y limpió su pala con una espátula de madera con tanto cuidado como si se tratara de uninstrumentoquirúrgico.Losotrosreíanintercambiándosemiradasdeinteligencia.

Unpícaromuchachomirabadeladoyconavidezelestuche.Lipotineselopresentócortésmenteyellopareciódecidirleadarnosinformes:

—Notienelacabezaensusitio,elviejo.Juegaaserelcastellano,peronadieletomaenserio.Notienelacabezaensusitio.Creoqueesjardinerooalgosemejante.Siempreestácavandoenlatierra.Es algo así comoun extranjeroyquizá tiene cien años.Esmuy,peromuyviejo.Mi abueloya loconocía.Nadiesabededóndees.Preguntadleaél.

Ahí se acabaron las confidencias del obrero. Los picos cayeron estrepitosamente y las palassacaronlatierrafueradelcanalmarcadoporelagua.Nopodíaesperarseotrapalabradeestabuenagente.

Andamos hacia la torre con Lipotine al frente. Una puerta medio podrida y cubierta deherrumbrosasherraduras,nosdabaelpaso.Cuando laabrimoschirríay rechinacomosi fueraunanimal que se espanta al sacársele de un profundo sueño. Una vacilante y carcomida escalera deroble,queantañodebiódeestaradornadaconricasesculturas,conducealpisosuperiorenmediodeunapenumbracruzadaporoblicuosrayos.

Cruzando,atravésdeunaespesapuertademaderamediocaída,unabovedadovestíbulo,Lipotineseintrodujoenunaespeciedecocinaconnosotrostrasél.

Yodiunpasoatrás.Ahí,sobreunarmazóndemaderaqueenotrostiempospodíahaberrepresentadounbutacón,a

juzgar por los trozos de cuero que cuelgan, yace,medio sentadomedio echado, el cadáver de unviejodecabellosblancos.Asulado,sobreundestrozadohogar,hayunjarroqueparececontenerunpocodelecheyunenmohecidomendrugodepan.

Derepente,elviejoqueyocreíamuertoabrelosojos,ynosclavasumirada.Enunprimerinstante,creoserobjetodeunaalucinación,yaque,vestidoconunosharaposque,

conunosbotonesblasonados,parecenlosrestosdeunalibreaodeununiformebordadoenoroensiglospasados,ysincontarconelamarillentorostrodemomia,todosuscitaenmílaimpresióndequeahíhayunmuertoolvidadoypodridodesdehacemuchotiempo.

—¿Nosespermitido,señorcastellano,subiralatorreafindeaprovecharunpocolavistaquedebehaberahíarriba?—preguntaLipotineconsangrefría.

Larespuesta,obtenidadespuésdehaberrepetidocortésmentelapregunta,essorprendente:—Hoy ya no es necesario. Nos hemos ocupado de todo. —Y diciéndolo, agacha la cabeza

diversasveces.Nospodríamospreguntarsiespordebilidadoparareforzarsunegación.—¿Quéyanoesnecesario?—lechillaLipotineenlaoreja.—Quesubanahíarribaparamirar.Hoyyanovendrá.Comprendemos,elviejoesperaaalguien.Seguramentepiensa,enelocasodesu intelecto,que

queremosayudarloavigilarlallegadadelhuéspedconelquesueña.Sindudaunmensajeroqueleacostumbraatraersumiserablepitanza.

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LaprincesasacasubolsoyponeconprestezaenlamanodeLipotineunamonedadeoro:—¡Dádselaaesepobrediablo!Concertezaestáloco.¡Vámonos!—Depronto,elviejonosmira

uno a uno con sus largos y abiertos ojos que pone, no en nuestra cara sino encima de nuestrascabezas.

—Bien—murmuró—,bien.Subid.QuizálaDamayaestáencamino.—¿QuéDama?Lipotinedaalviejoelregalodelaprincesa,peroésterechazaeldineroconunbruscogesto:—Eljardínestáconservadoynohacefaltasalario.LaDamaestarácontenta.¡Sisólonosehiciera

esperartanto!Cuandovengaelinviernoyanopodréregarlasflores.Esperodesde…desde…—Bien,¿desdecuándoesperáis,anciano?—¿An…ciano?¡Nosoyviejo!No,no,nosoyviejo.Laesperahacejoven.Soyjoven,comoveis.—¿Ydesdecuándoqueestáisaquí,mivaliente?—interrogaLipotine,sindejarsedesconcertar.—¿Cuánto tiempo… hace… que estoy aquí? ¿Cómo podría saberlo?… —El viejo sacude la

cabeza.—¡Puesalgúndíadebisteissubiraquí!¡Reflexionad!¿Ohabéisnacidoaquí?—Si,yohesubidoaquí.Hesubidoaquí,aDiosgracias.¿Perocuándo?Noesposiblemedirel

tiempo.—¿Nopodéisrecordarellugardóndeantesestabais?—¿Antes?Antes,noestabaenningunaparte.—Veamos,¿dóndehabéisnacido,sinohabéisnacidoaquí?—¿Nacido?Yonohenacido,hesidoahogado.Cuantomásincoherentesse tornanlasrespuestasdelviejo,másmeintrigan,ymásobstinaday

torturadoramentemeobsesionalacuriosidaddeverreveladoelmisterio,quizábanalalfinyalcabo,deestavidacaída.Laspalabrasdelobrero:«Siempreestácavandoenlatierra»vuelvenamimente.¿Acasoelviejo,alestarbuscandosiempreuntesoroentrelasruinashaperdidolarazón?

JaneyLipotinemanifiestan lamismacuriosidad.Sólo laprincesaparecedesinteresada,conunaltaneroairederechazo,nuevoparamíyextrañoensuhabitualfisonomía.Hahechodiversasvanastentativasparaquenosfuéramos.

Lipotine que visiblemente no se conforma de ninguna manera con la última respuesta deldemente, alza las cejas y se dispone a hacerle una nueva pregunta juiciosa, que haga avanzar laspesquisas, cuando el viejo, sin transición, empieza a hablar de símismo como si obedeciera a unimpulsocasiautomático.Podríapensarsequeunengranajedelamemoriasehabíadestrabadoensucerebro,queronroneahastaperderelaliento:

—Sí, sí, he emergidoa la superficiedel aguaverde.Sí, sí, emergidoa lavertical.Heviajado,viajadoyviajadohastaeldíaqueoíhablardelareinadeElsbethstein.Sí,sí,aquíhevenido,aDiosgracias.Soy jardinero, sí, sí.Entonceshecavado…hastaque…Dios sea loado.Ydesdeentonces,segúnmehasidoprescrito,mantengoparalareinaeljardínenorden.Afindequeseafelizcuandovenga, ¿comprenden? Es fácil de comprender, ¿no es verdad? Así pues, ya no hay nada de quésorprenderse,¿noescierto?

Asuspalabrasfuipresodeuninexplicableescalofrío.MaquinalmentemeapoderédelamanodeJane,comosisupresiónhubieradesostenerme,protegermeyafirmarme.LasardónicafisonomíadeLipotine se crispa, almenos así lo interpreto, en una expresiónde fanática y ciegavoluptuosidad,semejantealadelosquetorturanlosanimalesyalosinquisidores.Insiste:

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—Ensuma,¿noqueréisdecirnosdóndeestávuestrasoberana?Quizápodríamosdarosnoticiassuyas.

El viejo agita la cabeza con ardor, pero su cráneo cubierto de cabellos blancos oscila tanconfusamentedeunladoaotroquenosepuededesentrañarsisucabeceodenotaunavivanegaciónoun caluroso asentimiento.Su roncograznidopodría significar tanto un rechazo comounviolentoestallidoderisa.

—¿Misoberana?¿Quiénconocemisoberana?Quierodecir,vos,queridoamigo—segirahaciamíyluegohaciaJane—voslaconocéisyvos,jovenseñora,seguramentelaconocéismuybien,loveo.Si,loveoalmiraros.Vos,jovenseñora,vos…

Sepierdefarfullandopalabrasincomprensibles,mientrasquesumirada,conlaexpresióndeunhombrequesedebatedesesperadamenteintentandollamarunrecuerdo,intentapenetrarlosojosdeJaneconunaextraordinariaagudeza.

Éstadauninvoluntarioyvivopasohaciaellocoviejojardinero,oloquesea,yélrápidamenteseagarraasusvestidosconmanoinseguraysinllegaracogerotracosaqueelmantóndesobresusespaldas…Lo aprieta casi con fervor y se diría que la claridad que ilumina su conciencia queríareflejarseensusrasgosporuninstante.Peroestefulgorseapagóprontoysurostroyasóloexpresaunindescriptiblevacío.

Miroa Janey laveopenar interiormentecon todas sus fuerzaspara resucitarun recuerdoquedebedormitarensualma,peroparecequenoloconsigue.Creoqueinterrogaelpasado,puesensuvozresuenauntonodeincertidumbre:

—¿Aquiénllamáisvuestrasoberana,queridoamigo?Osequivocáisalpensarquelaconozco.Yavos,estoyseguradequeosveoporprimeravez.

Elviejotartamudeasindejardemoverlacabeza,comoparasímismo:—¡No, no, no, debe ser así! No me engaño. No, no, lo sé muy bien, a pesar de todo, joven

señora…—suvozsehacerápidayapremianteysumiradasefijaenelvacío,delantedelacaradeJaneaunquesinverla—.Apesardetodolosabéis:lareinaElizabeth,cuandotodoslacreíanmuerta,sehaidoacaballoparaverasuprometido.¡AsípueslareinaElizabethhabebidoaquídelaguadelaFuentedelaVida!Aquílaespero,como…semehadichohace…Lahevistomarcharacaballo,delOeste,dondeelaguaesverde,parairaesposarse.Undía,cuandolasaguasmugirán,surgirádelatierra. Emergerá del agua verde, como yo, como vos, joven señora, como… sí, sí, como todosnosotros.Voslosabéistanbiencomoyo:¡elenemigodelaDamaestáahí!Sí,sí,elrumorhallegadoamisoídos.Nosotros,losjardineros,descubrimostantascosas,ji,ji,cuandocavamos.Sí,sí,losé,laenemigaquiereimpedirlasbodasdelareinaElizabeth.Yesporestacausaporlaquedeboesperartanto tiempo, hasta que sea permitido trenzar la corona nupcial. Pero no tiene importancia, puedoesperar,soyjoventodavía.Vostambién,todavíasoisjoven,mujer,yconocéisnuestraenemiga,¡sí,vos!No,no,yo…nomeequivoco.¡Nomeequivoco,jovenseñora!

EstamelancólicaaventuraconelviejoydementejardinerodeElsbethsteinsetornabaincómoda.Ensusinextricablesdivagaciones,almenosparamisprevenidosoídos,percibíaunsentidosutilqueme inclinaba a relacionar con mi propia experiencia, con mis secretos, dado lo fantástico de lasituación.¡Peroquénoseve,quénosepercibe,aquíyallá,cuandoelcorazónestállenoyacechaconpasión, como una revelaciónmurmurada por la elocuencia y el ingenio de la naturaleza! Lomásprobablequelehasucedidoalpobredemente,esquelasleyendasqueenvuelvenElsbethsteinyquecirculanenelpueblo,oscurasyenredadasenuncaossemi-muerto,semi-vivo,lehapodido,quizá,

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realmenteponerelcerebroalrevés.De repente el viejo coge de un oscuro rincón de su chimenea un objeto que centellea con las

últimaslucesdelardientesolylotiendeaJane.LacabezadeLipotineselevantacomoladeunbuitre.Unaráfagadecalormesubealacabeza.

Entresusdedos,semejantesagarras,elviejoteníaunpuñaldeempuñaduralarga,unarmanoble,extremadamente trabajada, con una hoja estrecha y larga, peligrosamente afilada y de un extrañoblancoazulado—unmetaldesconocidoparamí—queaproximadamenteteníalaformadeunhierrodelanza.Laempuñaduraparecíaincrustadadeturquesapersa,peroveíamal,yaqueelviejoagitabasin cesar el puñal y de la luz diurna apenas si quedaba, en la cocina de la torre, un claroscurocrepuscular.

Eneseinstante—todavíanohabíapodidoverelarma—laprincesasevolvióempujadapornosesabequéinstintoysedeslizócercadenosotros.Hastaentoncessehabíamantenidoapartada,nerviosay para distraer su enojo trazaba signos, con la punta de su paraguas, en el polvoriento suelo deladrillos.Casihendióbrutalmentenuestrocírculoyseprecipitósobreelarma.Enesemomento,suavidezdecoleccionista,anulótodotipodemundología.

Peroelinsensato,rápidocomoelrelámpago,yahabíaretiradosubrazo.Delabocadelaprincesasalióungritoextraordinario.Sialgunavezheoídoalgosemejante,osi

debocompararloaalgoquehayaoído,sólopuedoasimilarloalrabiosoresoplidodeungatoquesepreparaparalalucha.Todosedesarrollótandeprisaquesehubieradichoqueeralafugazaparicióndeunaimagenirreal.Entoncesoídeciralviejoconvoztrémula:

—¡No,no,noesparavosvieja…viejaseñora!¡Tomadla,vos,lajoven!Elpuñalesparavos.Loguardoparavosdesdehacemuchotiempo.¡Sabíamuybienquevendríais!

Laprincesapareciónoentenderlaafrentaqueasusojosdebíaderepresentarelepíteto«vieja»,sitenemosencuentaqueapenasdebesermayorqueJane.Quizá lohizoexpresamente,en todocasoavanzóunavezmáslamano,y,deprisa,sinmedirsusefectos,ofrecióporelarmasumasysumascada vez más elevadas, de manera que este ciego furor adquisitivo y posesivo terminó pordivertirme.Nodudéniporunsegundoqueelpobreviejoguardiánnosedejaríadoblegar,aunqueapesarsuyo,puestoquesemejantesumadedinerodebíaequivalerleaunariquezarealmentefabulosa.Pero lo inesperadoseprodujo. ¡Loquehapodidopasar,nomelopuedoexplicar!Queunespírituextranjeroytemiblesehayaimpuestoenunalmaoscurecidaporeldesordendesuentendimiento,oqueelviejodementesehayavueltoincapazderealizarloquesignificalafortuna,nolosé,elcasoesque, levantando repentinamente los ojos sobre la princesa, una terrorífica expresión de odio quellegabahastalalocuratiñósusrasgos.Entoncesconunaestridenteyrotavozgritó:

—¡Noesparavos,vieja…señora!¡Noesparavos,paraunacagarrutadegato!Noesparaunacagarrutadegatoenelmundo.¡Tomadlo,jovenseñora!¡Rápido!¡Laviejaenemigaestáahí!Vedlacomo resopla, maúlla, bosteza. ¡Rápido, tomadla!… Aquí… Aquí… Aquí… ¡tomad el puñal!Guardadlobien.Sielenemigoloatrapa,todohaterminadoparalaDama,paralasbodas,paramí,eljardinerodesterradodelmundo.Loheguardadohastahoy.NuncahetraicionadoalaDama.Nuncahedichodondelaheencontrado.¡Yahora,iros,buenagente,iros!

Jane,podríadecirse,embrujadaporestasextrañaspalabras,habíacogidoelpuñalyconunhábilgesto,lohabíasustraídoalacodiciadelaprincesa,yenunabrirycerrardeojos,disimuladobajosusvestidos.Misojos captaronunveladodestellodepedernal que relucía en la hoja en formadehierrodelanzadelpuñal.Unrelámpagomecruzó:¡lahematitesdeHoelDhat!¡ElpuñaldeJohnDee!

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…Peronotuvetiempodeexpresarlo.Observabaalaprincesa.Habíavueltoaganareldominiodesímisma. ¡Ningún signo traicionaba los sentimientos que debían de agitarla!Una tigresa que quiereromperlosbarrotesdesujaula,asísonsuspasionesdesencadenadas,pensé.

En el curso de estos incidentes, Lipotine se había comportado de unamanera extremadamenteextraña.Alprincipiosimplementecurioso,luego,alavistadelpuñal,sehavueltocomoloco.

—¡Cometéis un grave error —había gritado al viejo jardinero—, es un error de idiotas nodárseloalaprincesa!¡Yaquenoesunpuñal!Esun…

Elviejonitansiquieraledirigióunamirada.Janetambiénsecondujodeunamaneratotalmenteincomprensibleparamí.Presumíquecaeríaen

su estado de sonambulismo, pero ningún signo que lo anunciase se manifestó en sus ojos. Alcontrario,sonrióalaprincesaconunaexpresióndeirresistibleamabilidad,hastaelpuntodetenderlelamanoydecirle.

—Estabagatelasóloserviráparaaumentarnuestraamistad¿noesciertoAssiaQhotokalouguine?¿En qué pensaba Jane? Pero, para mi sorpresa que todavía aumentó, la orgullosa rusa no

respondióaestaincongruentefamiliaridaddeJane,queconelmayorafecto,larodeóconsusbrazosy…laabrazó…Meestremecíylaadvertenciaquedeningunamanerapodíaexpresar,resonóenmí,silenciosamente:¡Jane,cuidadoconelpuñal!Esperabaquepercibiríamipensamiento,peroparamiespanto,dijoalaprincesa:«Naturalmente,osdaréelpuñalcuando…laexactaysolemneocasiónsepresente».

***

Elviejoensuesqueletodesillónnoquisoarticularunapalabramás.Hizocomosiestuvierasolocon su enmohecido trozo de pan y se lo puso a roer trabajosamente con sus encías desdentadas.Inclusoparecíayanosaberquetodavíaestábamosallí.¡Unimpresionanteloco!

Un poco taciturnos dejamos la torre con las últimas luces del sol poniente, cuyos rayos serefractabanenunextraordinarioarcoirisenlacolumnadevapordeungeyser.

Albajarporlaoscuraescalerademadera,tomélamanodeJaneylecuchicheé:—¿Tienesverdaderamentelaintencióndedarleelpuñalalaprincesa?Respondióvacilando,yalgoensuentonaciónmegolpeóextrañamente:—¿Porquéno,querido?¡Puestoquelodeseatanfuertemente!

***

Nospreparamosparabajarymevolvíunavezmás.Atravésdeunodelosportalesdelbastiónque le servíademarco semeofrecióun espectáculoquenuncaolvidaré: inundados enunmardellamas resplandecían, bajo la luz rojiza del ocaso y entre las masas pétreas de las ruinas deElsbethstein, los parterres, con una indecible y salvaje magnificiencia. El chorro de la fuente,vaporizadoengotas,empujadoporelviento, se lanzódeprontoporencimadel jardín,ycreíverdibujarse fantásticamente, revestida de plata fluida, la silueta de una princesa que se acercaba conpasomajestuoso.¿EralaDamadelcastillo?¿EralamíticareinaElizabethdelguardiándelatorre,deldemente«Jardinero»,quesedabaamissentidosinteriores?

Nosencontramossentadosenelautomóvil,ypasétodoeltiempodelapeligrosacarrerahaciaelvalleenunestadodepseudo-embotamiento.Todoscallaban.

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Depronto,oídeciralaprincesa:—¿Qué me diríais, querida Frau Fromm, de una próxima y cercana excursión a este mágico

lugar?—Janeasintióconunasonrisa:—¡No conozco nada, princesa, que pueda serme más agradable, y me atrevo a aceptar la

invitación!Pormiparte,estabafelizdeveralasdosmujeresrelacionarsetanbien.Laprincesahabíatomado

lamanodeJaneylaapretabacordialmente.Meparecíaqueesterecíprocogestodeamistadapartabademí una imprecisa ymaléfica premonición.Tranquilizado, con elLincolnmarchando sin ruido,contemplabaelresplandecientecielo.

Alláarriba,bajolabóvedaazulturquesa,relucíaladelgadahozdelalunamenguante.

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LASEGUNDAVISIÓN

ApenasentréencasaconJane,leroguéquemedejaraverelsingularpresentedellocojardinero.Examinéconelmayor cuidadoesta especiedepuñal.Aprimeravistaya supeque lahojay la

empuñaduranoteníanelmismoorigen.Lahojaera,visiblemente,unhierrodelanza,rotoalaalturadel collar desde hacía mucho tiempo. El metal, desconocido para mí, presentaba extrañasparticularidades.Teníaunaspectograso,muydiferentedelacero,unfulgormate,casidepedernalodel sílexgris azuladodeAndalucía. ¡Y luegoesa empuñadura incrustadadepiedraspreciosas!Nopodíahaberningunaduda:estecobre,consuligeraaleacióndeestaño,teníatodaslascaracterísticasde la metalurgia carolingia suroccidental o morisca primitiva. Cornalina, turquesa, y luego unosornamentalestorzales[22]defigurasconaspectodedragonesdedifícilinterpretación.Tresanillosdeengaste.Dosestabanvacíos, lapiedrahabíadebidocaer.Enel tercerounzafiro…Cadacabezadedragón,unapiedralacorona.Involuntariamentepenséenuncarbúnculo…

Medijeamímismo: ladescripciónquecontiene lavitrinade laprincesaseaplicaaestepuñalmejorqueaningúnotro.Nohaynadadesorprendenteenquehayamanifestadosemejanteexcitaciónalverlo.

Durantetodoestetiempo,Jane,depiedetrásdemí,mirabaporencimademihombro.—¿Querido,enquéteinteresatantoesteviejocortapapeles?—¿Cortapapeles?Alprincipionocomprendí,luegomepuseareírconfuerzadeestainconscienciafemeninaque

deprontotomabaporunabrecartasunaarmablancaquizámilenaria.—¿Porquéteburlasdemí,querido?—Bonitamía,teequivocasunpoco.Noesuncortapapeles,sinounpuñalmorisco.Janesacudiólacabeza.—¿Nomecrees,Jane?—¿Por qué no te creería? Sólo que me había pasado por la cabeza la idea de que era un

cortapapeles.—¿Perocomotehapodidoveniresaideatanextraña?—Sí,tienesrazón,es…esunaidea.Ymehavenido.—¿Quétehavenido?—¡Laideadequeesuncortapapeles!ylahecreídoalinstante.—ObservabaaJane,ellaclavaba

losojosenelpuñal.Unbruscoescalofríomerecorrió:—¿Conocesestepuñal…estecortapapeles?—Tanto como puedo conocer una cosa que he visto por primera vez esta tarde. Pero,

seguramentetútienesrazón.Cuandomiroesteobjeto…máslomiro…máslomiro…mástengo…laimpresión…dequeloconozco.

NopudesacarnadamásdeJane.Estabademasiadoagitadoparaarriesgarmeatenerunasesiónconella.Porotrapartenohubiera

sabidopordondecomenzar.Measaltabantantospensamientosypresentimientosque,paraestarsolo,lepedíquevolvieraasusdeberesdeamadecasa,yaqueteníaunaapremiantenecesidaddeescribir.Ladespedíconunbeso.

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Apenashabíasalidocuandomeprecipitéamimesa,hurguéyhojeéenlospapelesdeJohnDeeyenlamasademisdocumentosparahallarelpasajedondemiantepasadohabíapodidomencionarelpuñalhereditariodesulinaje.Noencontrénadasemejante.Alfinal,el tafileteverdemecayóenlamano,loabríalazaryleí:

«Yenesanegranochedetentaciónheperdidoloqueeramimásqueridaherencia,mitalismán,elpuñal,elhierrodelanzadelantepasadoHoelDhat.Loheperdidoahí,enelcéspeddelparque,enelmomento de la evocación. Sin embargo, lo tenía, me parece, según las instrucciones de BartlettGreen,cuandoelespectrollegócercademíyyoletomélamano…¡Peroluego,yanolotenía!

AsípueshepagadoaIsaíslaNegraelpreciodeloqueulteriormentedebíarecibirdeella…loquemeparecemuycaroparasuengaño».

Rumiaba enmímismo, ¿qué significa estegiro: «…másquerida»? ¡Imposible sacar elmenorindiciodel documento!Semeocurrióuna idea repentinay cogí rápidamente elmágico espejodecarbón.

Peromesucediócomolaprimeravezquehabíaintentadoleerensuscarasrelucientesynegras.Elcarbónentremismanoserauncarbónmuerto.

«¡Lipotineysupolvodefumigaciones!»pensé.Melevantéycasideinmediatoencontrélabolaroja,peroestabavacíayyasinningúnvalorparamí.

Alinstantevilacopadeóniceenlaquehabíaquemadoelpolvo.¿LahabíalimpiadoJane,ensupreocupaciónporelbuenorden? ¡No!Unaduracostraaúnpermanecíaadheridaen lacopa,eraeloscuroresiduode lapreparaciónmágica.Apartirdeese instante,unafuerzacasicoaccionantemedeterminó.

Ninguna intención racionalmehizo tomar lapequeña lámparayverter febrilmenteunpocodealcoholenlacopa.Seinflamó.Unfugitivopensamientomecruzóporlacabeza:quizácometounatontería,entodocasonomuygrande,quizáunasimpleparcelaenigniciónpara…

Lallamaseapagórápidamente.Unadébilrubicundezbajolaceniza.Delgadoshilosdehumoseelevaron.

Inmediatamenteinclinélacabezasobrelacopaeinspiréprofundamente.Elolorpenetróenmispulmonestodavíamásmordientequelaprimeravez.¡Repugnante!Nosepodíaresistir.¿Cómopodréultrapasardeliberadamenteysinayudalalindedelamuerteporasfixia?¿DebollamaraJane?¿Paraquemantengalacabezaporencimadelacopa,comoelLipotinedegorrorojodelaotravez,conmano de hierro, con firmeza, por si me ahogo? Aprieto los dientes y llamando a todas misenergías… «¡yo impongo!». «¡La divisa demis antepasadosme viene de repente a la cabeza! ¡LadivisadelosDee!

Despuésdelterribletraumatismodelescalofríodelamuerte,pensamientoslarvarioscirculanenmisangre,podríamosdecirqueseahoganenuncharco.¡Yoimpongo!Unsuicidioenunatina…esbuenoparalasmujereshistéricas,oídeciroleíunaveznosédonde…¡misrespetosparalasmujereshistéricas! Yo soy un hombre, y ¿no llegaré al confín de este escabroso horror? Diabólicamenteescabroso…¡ah!¡liberación!¡Ayuda!…Ahí…muylejos…elmonjedegorrorojo…ungigante…elmaestro de la iniciación… no se parece a Lipotine… levanta la mano… la mano izquierda… seacercapordetrásmío…conlarapidezdelrayonáufragoenelabismodelimperiodelosmuertos…

Cuando volví a la superficie, tambaleando de vértigo, con terribles dolores en la nuca ysintiéndome envenenado por todas partes, en la nauseabunda copa ya no había más que ligeras

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cenizas.Apenassieracapazdereunirmisdispersospensamientos,pero,conunaclaridadcadavezmás fulgurante, se reflejó enmivisión interior lametaquemehabíapropuesto.Deprisa toméelespejodecarbónymeabsorbíenél.Mesentíacalmo.Porsegundavezhabíafranqueadoelpasodelamuerte,peromediantemisúnicosmedios…

Luegomevisentadoenunautomóvilquecorríadeespaldas,lacarroceríadelanteyelradiador,elmotoryelcapódetrás,aunavelocidadfantasmagóricaalolargodenuestrorio.Amiizquierdayami derecha se hallaban Janey la princesaChotokalouguine, ambasmiraban a su frente y ni unapestaña,niunmúsculodesucarasemovía.

Pasamos,ennuestrovuelo,lasruinasdeElsbethstein…Lasfuentesdelavidamugen,medije.Porencimadeltejadodelcastillosubenunasligerasnubesdeunvaporblanco.Enloaltodelatorre,elviejo y loco jardinero nos hacía señales. Señalaba con ardor la dirección noroeste y luego seseñalabaasímismo,comosiquisieradecir:¡idprimeroahíabajo!¡Volveddespués…amí!

«¡Esestúpido!»memurmuróunavozinterior,elviejonosabequeherecuperadomiverdadero«Yo», sir John Dee. ¿Pero si es así, verifiqué bruscamente, cómo puede ser que la princesaChotokalouguineestésentadacercademí?Leechéunamirada.Cercademíestabasentada…ladiosade bronce negro de los adoradores pónticos de Isaís, queme sonreía, inclinada hacia mí, con elespejoy la lanzaydesnuda,desnuda,conunaactitudyunaexpresión tanenloquecedoras,queunaescalofriantecalenturaseapoderódemí.Denuevomedabavueltaseseobstinadopensamiento: ¡lalubricidaddelaprincesamepersigue!Enelnombredelcielo,¿estoyenelpuntodesabersiquieroosinoquiero?¿Nosoydueñodemissentidos?¿Quémeobligasiemprearecibirimaginariamentealaprincesabajounaspectoquenuncamehamostrado?Noquiero.Noquierocompartir la suertedeJohnRoger,midifuntoprimo…

La diosa, armando una trampa con la ofrenda de su deslumbradora juventud, me echó unaindescriptiblemirada.Lainaccesiblealturadeladivinidadylacegadorayacariciadorapromesadela mujer relucían en ella al mismo tiempo. Los pechos realzados un poco voluptuosamente. Unaalargadaelongacióndelosmiembros.Unodioinsondableenlaenigmáticafisonomía.Unbrillodedepravaciónenelentrecejo.Unhusmilloapantera…

El automóvil, desde hace tiempo, se ha abismado, silbando, en las aguas verdes. Pasamos congranestrépitoatravésdeunaguaesmeralda,enlaqueesimposiblesaberlaprofundidad,laalturaporencimadenosotros,dedistinguirelarribayelabajo.

Ahora,de lasaguasverdesyasóloquedaunpequeñolagocircularenelquemimiradasefijaintensamente.Siemprevaencogiéndose,comoelanillodondeseconcentralaluzalaentradadeuntúnel.Alrededor,laoscuridadmásopaca.

Después,experimentolasensacióndeemerger.Deemergerverticalmentedeunpozo,rodeadodeunpetrildelosasblancas,abiertoaunainsondableprofundidad.Enelbrocal tiemblala imagendebroncenegrodelaIsaíspóntica.Conunamalvadasonrisayconlarotapuntadesulanza,señalaelfondo. Ella blande el espejo mientras parece hundirse, y yo veo el lago verde, resplandeciente ycircular,reflejadoenelfondodelpozo.

—¿Esladiosaquienmehaconducidoaquí?¿Aquí?…¿Dóndeestoy?Todavíanohabíapensadolapreguntaqueyaestabadesgarradoporunlocoespanto:ahí,enfrente

mío,enlasemioscuridad…¡Jane,mimujer!Mecruzoconsuvacilantemirada.VavestidaconropadecorteinglésdeltiempodelareinaElizabethyséqueeslamujerdeJohnDee…JohnDee,esdecir,yo.Es el tenebroso pozo de la cueva, bajo la casa demi anfitrión enPraga, el doctorHajek, ella

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quiere…tirarseenelpozo.EslanochedelmandatodelÁngelVerde.Debía,conelcorazónrotoyfiel ami juramento, entregar amimujer y único amor, a EdwardKelley, que como hermano desangredebíaejercercomoyosusderechosdeesposo.

Ellanohaqueridosobreviviraestaignominia.No tengo tiempo de reflexionar.Mis rodillas flaquean, perome tiro hacia ella, quiero que la

desesperadavuelvaatrás,resbalo,grito,veolamiradaextraviada,muda,decidida,yamuertademibienamadadeshonrada…yasistopetrificadoalhorriblesalto.MiJanehaabandonadoestemundoyyanuncamásningunallamaborrarádemialmalavisióndeestapartida.

Mi corazón está roto en setenta y dos trozos, ésa es la idea que me viene a la mente. Mispensamientossoninertes,comolosdeunserespiritualmentemuerto.Elpozo¡elterribleabismodelpozo!Adivinoenél,yestasensaciónmeparaliza,elfulgorredondoyverdosodelespejodeIsaís…

Apesardemisvacilantesrodillas,subolaescaleradehierroparasalirdelacueva.Cadabarrotegruñe:«Solo…solo…solo…solo…».

Alguiensaca lacabezapor laoberturade la trampilla,unrostrodescompuesto,el rostrodeuncriminalenpotencia.ElrostrodeKelley,elhombredelasorejascortadas.

Poruninstantepiensoquese tirarásobremí,quemeprecipitaráhaciaabajo,quemeenviaráareunirmeconJaneenelpozo…Medaigual,inclusolodeseo.

No semueve.Me deja seguirmi peligrosa vía,me deja salir del abismo y pisar tierra firme.Retrocedeantemípasoapasocomosifueraunespectro.Enmíhamuertotododeseodevenganzacontraestelamentablecobardequetienetantomiedo.

Murmuraalgo,quehaqueridosalvarla…queelnerviosismodelasmujeresesestúpido…Ledigoconunavozsin timbre:«Hamuerto.Sehaofrecidoalabismoparaprepararmelavía.

Resucitaráaltercerdía,subiráalcieloysesentaráaladerechadeDios,dedondevendráajuzgaralosasesinosdeaquíydelMásAllá…».Entoncesentiendo las insensatasblasfemiasquemis labiosprofierenymecallo.

Dios, pensé cansinamente, no tendrá en cuenta las blasfemias de un alma devastada. Que sólopuedareposarenpaz…

Kelleysuspiraaliviado.Setranquiliza.Seacercaconaireconfidente,circunspectoymeloso:—Hermano,tusacrificionohasidoinútil.El…santoÁngelverde…ClavoenKelleymisardientesojos.Losojossonlosprimerosquemedianteeldolorrecuerdanla

vidaenmicuerpo…«¡ElÁngel!»quierogritar,mientrastanto,unalocaesperanzaprendeenmí:¿hadado la Piedra? Entonces… quizá… a Dios le es todo posible… Hay días en que se producenmilagros…¡LahijadeJairohasidollamadadelamuerte!…LapiedradeMetamorfosis,enlamanodequienhaobtenidolafeviva…puedeoperarunmilagro…¡Jane!¿EsellaacasomenosquelahijadeJairo?

Gritofuertemente:«¿TehadadolaPiedraelÁngel?».Kelleydiceapresuradamente.—No,laPiedratodavíano…—¿Lallavedellibro?—N…no,tampocolallave,perosípolvorojo.Oro.Unanuevaprovisióndeoro.Yhaprometido

muchomás…—Ungritodedolorseahogaenmipecho:—¿Tehavendidoamimujerporeloro,perro?…¡Falsario!¡Bestiahedionda!Kelleydioun saltoatrás.Veoamisapretadospuñoscaer sin fuerza.Yanadameobedece.Mis

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manos quieren matar, pero están paralizadas… No encuentro el imperativo que las obligue aobedecer.Unaamargarisamesacude:

—¡No te inquietes, hombre de las orejas cortadas, no temas nada!Nomataré el instrumento…¡quierointerrogaralÁngelverdecaraacara!…

Kelleyañaderápidamente:—Hermano,elÁngelverde,elmuySantolopuedetodo.Puede,siquiere,devolverme…no,no,a

ti,siasíloprefieres;puededevolvertela…ladesaparecida.Una fuerzaanimal llenamismiembros,me lanzoa ciegas, sinpensarlo.Mismanos se cierran

entornoalcuellodeKelley:—¡CondúcemealÁngelverde,criminal!¡Llévameaélcaraacarayteperdonolavida!Kelleycaederodillas.

***

Imágenes fustigadas, galopantes, que no quieren completarse. Imágenes delirantes que apenasintentofijarsedisipan,hanpasado.Luegotodosevuelvedenuevoclaro.

Kelley, vestido conun suntuoso ropaje adornadode caras pieles, se pavonea en los pomposossalonesdelpalaciodeRosenberg.PretendeserelmensajerodeDios,designadoporDiosparatraeralos hombres el secreto de la triple metamorfosis, aunque no a los profanos, sino a un pequeñonúmerodeelegidos.Desdeahoraelsecretodivinodebe teneren la tierraun templo indestructible.Rodolfo,elEmperadordelSacroImperioRomanoGermánicoyalgunosdesuspaladineshandeserloscaballerosTemplariosdelnuevoGrial.

RosenbergconduceaKelleyde lamanohacia elpeligrosamente superexcitadoemperadorqueesperaalprofetaenelmásrigurososecretodeunaretiradahabitacióndelpalaciodeRosenberg.

Debounirmealséquitodeceremonias.ElemperadorRodolfosólonosdejaentraralosdosyaRosenberg,queeselprimeroenarrodillarseanteélybañarlelasmanosconsuslágrimasdealegría:

—Majestad,elÁngelsehamanifestado,verdaderamentesehamanifestado,solloza.Elemperadorapenassiconsigueescondersugranemoción:—Si es asíRosenberg, todosdebemos adorarlo, yahemos esperado alSeñordurante todauna

vida…Luego,segirahacianosotrossombríayamenazadoramente:—Estáis aquí, tres, comoantañoaquellosReyesMagosque llevaronelmensajey losdonesal

Niño de la Salvación recién nacido, el que está de rodillas me trae el mensaje. Que sea bendito.Vosotrosdos,Magos,¿dóndeestánvuestrosdones?

Kelleydiounrápidopasohaciadelanteydoblególarodilla:—¡Héloaquí,elÁngelenvíaestepresenteaSuMajestadelemperadorRodolfo!Letiendeunacajadeoroquecontieneunacopiosacantidaddepolvodeproyección,unpocomás

deldobledelqueposeíamosalllegaraPraga.Elemperadortomatemblorosoelpreciosoregalo.Ladesilusiónsedibujaensusrasgos.—Esundonimportante.Peronoeseldondelaverdadalaqueaspiro.Cualquierapuedehacer

oroconesto…Girahaciamísuencendidamirada,demíesperaelverdaderoyliberadordondelosMagosde

Oriente.Un frío glacialme atraviesamientrasme arrodillo, puesto quemismanos ymi corazón

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estánvacíos…Entonces,denuevocercademí,Kelleyelevalavozysuencarecidadulzuraesalgoadmirable:

—Tenemos la orden de mostrar y de confiar a Su Majestad el emperador para que loexperimente,esteglassqueelÁngel,altoysanto,hasacadodeltesorodesusgraciasparaofrecerloasuservidorsirJohnDeeenlanochedelaprimeraevocación.Puestodainiciacióntienesuspasosysusgrados.

Nosédedondesale,perodeprontosientoelglass—elcristaldecarbónengastadodeorodeBartlettGreen—enmimano.Mudo,lopresentoalemperador.Lotomadeprisa,loexaminaydejacaersulabioinferior:«¿Quédebohacer?».

Kelley,derodillas,ponesufijamiradaenlabasedelafrentedelemperador,entrelosojos.Rodolfo,alno recibir respuesta,miraadisgustoen lasnegrasy reverberantescarasdecristal.

Kelleyclavabalasuyacadavezmásprofundamenteenlafrentedelemperador.Elsudordelesfuerzodeconcentraciónleperlalassienessinqueélsedécuenta.

Elemperadorestásentado,comoembrujadoysostieneelcristalentrelasdosmanos.Suspupilassedilatan.Suexpresiónesladeunvisionarioentrance…Derepente:estupor,estremecimientosdeinterés,cólera,violentosescalofríos,soploentrecortado,triunfo,orgullosaalegría,signomudoconlacabezadebuitreyfinalmente…¡unalágrima!

¡UnalágrimaenlosojosdeRodolfo!Todoello,enunarápidasucesión,sehareflejadoenelrostrodelemperador…Unatensióncasi

insosteniblenosoprimíaatodos.PorfinRodolfodijo:—Osdoylasgracias,mensajerosdelmundotrascendente.Enefecto,eldonespreciosoydebe

bastar al iniciado. Pues los que aquí llevan una corona no son todos emperadores ahí abajo.Queremos poner en ello todo nuestro celo.—La altiva cabeza se doblega. No puedo retenermislágrimasalverinclinarsehumildementeaSuMajestadanteelcorruptordelasorejascortadas.

***

Lamuchedumbre se empuja en la estrecha plaza «DelGranPrior» delante de la iglesia de losCaballerosdeMaltaenPraga.SediríaquetodoKleinseiteestápresente.Armasrelucientesydestellosde galones en los vestidos de los grandes señores que, desde lo alto de las abiertas ventanas delpalacio,asistenalespectáculo.

DelaiglesiadelosCaballerosdeMaltasaleunmajestuososéquito:Kelley,elegidoporordendelemperador,baróndeBohemiaynuevopaladíndelSantoImperio

romano,acabaderecibirdelantedelaltardelaantiguaiglesiacaballeresca,elgolpedeespadaylaunciónenlafrente.

Alséquito,queahorasevaalargando,leprecedentresheraldosvestidosdenegroyamarillo,dosllevanlargastrompetasyelotroelpergaminodelemperador.Encadaesquina,fanfarriaylecturadeldecretodefavorimperialconcedidoalnuevobaróndelimperio«Sir»EdwardKelleydeEngelland.

En los balcones y ventanas altas que dominan las nobles moradas hay rostros curiosos oimpenetrablesacausadelaarrogancia,oquereflejanunaburlonaironía,entrelosqueseobservandiscretosymedidosmovimientoscausadospormalévolasyburlonasobservacionesquenoseoyen.

Veotodoese torbellinodesdeunaventanadelpalacioNostiz.Turbadospensamientosacumulanen mi alma sus negras, húmedas e impenetrables nubes. En vano el noble personaje que me ha

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invitadojuntoconeldoctorHajeksedeshaceenelogiosporelorgulloquepuedosentirpormiviejanobleza,quemehacedespreciarlostítulospompososaunqueseanotorgadosportanaugustasmanos.Todomeesindiferente.MimujerJane,hamuerto,hanaufragadoenelabismoverde…

***

Una nueva y singular imagen: el gran rabino Low está, tal como gusta hacerlo, con su largocuerpoapoyadocontralamuralla,yconlasmanosalaespaldaenunapequeñahabitacióndelacalledelosAlquimistas.Delantesuyo,hundidoenunsillónestáelemperadorRodolfo.Alpiedelrabinoyacesomnolientoymansocomoungato,el leónbereberdelemperador;el rabinoy labestiasonbuenos amigos.Yo estoy sentado en la pequeña ventana delante de la que los árboles empiezan aperder las hojas, Mi mirada, vagabundeando, ve al fondo, a través de las desnudas zarzas, dosgigantescosososque,refunfuñando,levantansusvelludascabezasyabrensusrojasgargantas.

Bruscamente,elrabinoLowhasacadounamanodedetrásdesuespaldaylaconducefrenteaélmediante un oscilantemovimiento.Ha cogido elglass que el emperador le ha confiado y escrutalargamente sus caras de carbón cristalizado. Luego levanta la cabeza, tan alta que, bajo la blancabarba,lanuezsobresaleysubocaseredondeaensusilenciosarisa:

—¡Enunespejounosóloseveasímismo!Quienpuedever,veloquequiereverenelcarbón,delqueyahacetiempolavidapropiasehaconsumido.

Elemperadorsesobresalta.¡Queréisdecir,amigo,queelglassesunaimpostura!Yomismohe…Elviejojudíonosemueve

desumuralla.Contemplalastancercanasvigasysacudelacabeza:—¿Rodolfoesunaimpostura?RodolfoestátalladoporlaMajestadcomounglass.Carasduras

entodosualrededor,asípuedeverreflejarsetodoelpasadodelSantoImperioromano.Estonotienecorazón,nilaMajestadnielcarbón.

Algomeparteelalma.Miroalgranrabinoysientoenmigargantaelcuchillodelsacrificio.

***

YanohayningunapobrezaenlahospitalariacasadeldoctorHajek.Elororeluceportodoslados.Rosenberg,paraobtenerelfavordeasistiraunasesióndeKelleyenlaqueelÁngeldebeaparecer,envía regalo tras regalo de una loca suntuosidad, de un valor incalculable. El viejo príncipe estádispuestoasacrificarnosólosusbienes,sinosupobreviejavida,paralaManifestacióndelnuevotemplodela«LogiadelaventanadeOccidente».

Asípues,selehapermitidodescenderconnosotrosenlacuevadeldoctorHajek.Lalúgubresesióncomienza.Todoesnormal.SólofaltaJane.Casiquemesofocoporlaangustiadelaespera.Ahorahallegadoelmomento,ahoraelÁngel

debedarmecuentadelsacrificiohumanoqueleheofrecido.Rosenbergtiembladepiesacabeza.Estárezandoenvozbajaininterrumpidamente.Kelleyestáensusitio.Espresadeconvulsiones.Ya ha desaparecido. En su lugar se enciende el verde resplandor delÁngel. Lamajestad de la

apariciónaterraaRosenberg.Seoyensussollozos.—Hesidojuzgadodigno…he…sido…juzgadodigno…Los sollozos se cambian por vagidos. El viejo príncipe, prosternado en el polvo, tartamudea

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comounviejovueltoniño.ElÁngel gira haciamí su aceradamirada.Quiero hablarle, pero la lengua seme engancha al

paladar.Nopuedososteneresamirada.Tensotodasmisenergías, lasreúno,unavez,dosveces¡esvano!Lapétreamiradameparaliza…meparaliza…totalmente.

—¡Tuproximidadnomeesagradable,JohnDee!¡Tuindependencianoesacertada, turebelióncontra la prueba no es piadosa! ¿Cómo puede tener éxito la Gran Obra, operarse la salvación,mientraseldiscípulollevelaimpiedadensucorazón?¡LallaveylaPiedraparaquienobedece!¡Aquiénnoobedece,eldestierroylaespera!¡VeaesperarmeaMortlake,JohnDee!

***

¿Lossignosdelzodíacoenelcielo?¿Quéeseso?¿Unaruedaquegira?Sí,comprendo.Sonlosaños,losaños,losañosquepasan;eltiempo¡eltiempo!Luego,alrededor,lasdesiertasruinasdeunacasaincendiada.

Caminoentremurosennegrecidosenlosquecrujentapicesquecaendepodridos.Mipietropiezaconloquefueelumbraldeunatorre.Nosabríadeciraquéhabitaciónmeconducíaantescuandoerael feliz amo del castillo.No, no puedo decir que camino, sólome arrastro. Pruebomi cansancio,cansancio,cansancio.

Trepoporunaescalerademaderamedioquemada.Púasyclavosherrumbrososatrapanmiviejovestido ya desgarrado. Entro en una enmohecida cocina ¡el laboratorio donde antaño había hechooro!Ladrillospuestosverticalmenteformanelembaldosado.Enunaesquinaestáelhogar,cercadelcualhayunaescudillaenlaqueantesbebíanmisperros,quecontieneunadesagradable lecheyuntrozodepanseco.Lahabitaciónestáseparadadelaintemperieporunensamblajedevigas,yatravésde sus fisuras gime el frío viento del otoño. Es el castillo deMortlake.Ardió detrásmío cuandomarchéaPragahaciaelemperadorRodolfo,hacecincoaños.

El laboratorio es la habitación mejor conservada de todo el edificio. Sumariamente lo hearreglado conmismanos, demaneraqueme sirvedemorada, unamoradaque comparto con losmochuelosylosmurciélagos.

Meveo tan abandonadocomopuedeunhombre serlo.Blancos cabellosdenieve enmarañadoscaensobrelafrente,unaplateada,enzarzadaydescuidadabarbamesubehastalasorejasylanariz.Lacasa…destruida,tantoladepiedra,comoladecarneydeoro.YningunacoronadeEngelland,ningúntronodeGroenlandia,yningunareinasentándoseamilado,ningúncarbúnculoencimademicabeza.DeboaúnsentirmefelizporhaberpodidosalvaramihijoArthur,enEscocia,encasadelospadresdemidesaparecidaJane…HeobedecidoalÁngeldelaventanadeOcccidente.Obedecidoalallamada,a lasentencia…¿condenatoria?Tengofrío,aunquemiviejoamigoPricemeenvuelveenunamantaquemehatraído.Tengounfríoprofundo,elfríodelaedad.Unobstinadodoloratenazamicarcomidocuerpo,algomecorroe,seesfuerzaenobstruírmeloscanalesdelavida.

Priceseinclinasobremíyparaauscultarmeponesuorejasobremiespaldaencorvada.Tomasutranquilaexpresióndemédicoymurmura:

—Sano.Alientoregular.Humoresbienmezclados…uncorazóndebronce.Unarisaahogadamesacude:«¡Sí,uncorazóndecobre!».

***

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¡YlareinaElizabethhamuertoyahacemucho,peromuchotiempo!Laadorable,laanimosa,lacortante, la seductora, la real, la devastadora, la toda graciosa, y la inclemente, ha muerto…muerto…muerto desde ya hace tanto tiempo.Nome ha dejado ningúnmensaje, nome ha hechosaber donde debo buscarla. ¡Ningún signo de que me vea! Me siento en mi rincón cerca de lachimeneadeladrillosybajoeltejadodemadera,dedondedevezencuandocaenardientesmazosdenieve.Yoescarboenelpasado.

Price aparece en la escalera, el viejoPrice,mimédicoymiúltimoamigo.Hablo con él de lareinaElizabeth,siempredelareinaElizabeth.

***

Despuésdelargasdudasmeconfióunextrañosuceso.Élsehallabaenlacabeceradellechoenelmomento de su agonía. Ella no había dejado de llamarlo, de llamar al médico de cabecera deWindsor,que,díaspasados,lehabíadadotantosytanbuenosconsejosparasusalud.Erapresadeldelirio,delafiebre,decía.Durantelanochelavelésolo.Hablódesumarchahaciaotropaís.Unpaísmásalládelmardeabajo,dondeesperaríaalprometidodeporvida,ahí,dondeselevantaelcastillodelafuenteydelaguadelavidaeterna.Esahídondeahoraqueríaemigrar.Ahíqueríapermanecerenlapazdeunolorosojardínyesperaralprometido.Ahíloesperaríasininquietudyeltiemponolepareceríademasiadolargo.Ahínoenvejeceríaylamuertenolaalcanzaría.Puesahíestabalafuentedelaeternajuventud,ybeberíaelaguaquelamantendríajoven,tanjovencomonuncalohabíasidoenlosdíasdelreyEduardo.YahíseríalaReinadeljardíndelafelicidad,hastaqueeljardinerohagaunsignoalprometido,yentonceselprometidolasacarádelcastillomágicodondehabitaelamorquesabeesperarconpaciencia…talcomomelocontóPrice.

***

Estoysolo.Priceyanovieneaverme,nosésihacedíasosemanasquehamarchado.Estoysentado,conelrostrogiradohaciaelhogar,yconmistemblorosasmanos,atizolasbrasas

queseapagan.Losoblicuosrayosdelsolpenetranporlashendidurasdeltejado.¿Yanohaynieve?Meesindiferente.

Derepente,piensoenKelley.LoúnicoquesédeélesquehabríasufridoenPragaunfinhorrible.¿Quizásóloesunrumor?Meesindiferente.

¡Qué! ¿Un ruido en la carcomida escalera?Me giro lentamente y veo que sube fatigosamente,pasoapaso,unhombre.¡Respiraruidosamente!…¿Aquésedebequepienseconestaprecisiónenlaprofundacuevayensuescaleradehierro,delacasadeldoctorHajekenPraga?Así,exactamenteasí,me agarré una vez para salir del abismo, buscando los barrotes, con las rodillas temblorosas,mientrasqueJane…Arriba,alasalidadelabismomeesperabaKelley.

¡Kelley, unKelley real y carnal saca la cabezapor la trampilla demi cocina!Emerge, empujafuerasucabeza,sutorso,suspiernas,vacila…semantienedepieantemí,apoyadoenelcantodelapuerta…No,noestádepie.Loveomejor,flotaunpoco,quizáelespesordeunamano,porencimadelsuelo.Además,nopodríamantenersedepieyaquesuspiernasestánrotaspordiversossitios.

Loshuesoshan traspasadoaquíyallá, amodode sangrientaspicas, lospantalonesdepañodebrabantecubiertosdebarro.

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¡Apesardeello,elhombredelasorejascortadas,todavíavabienvestido!Perosusrasgosestándevastadosysuropajedegentilhombrelecaeatrozossobreelcuerpo.Elhombreestámuerto.Susapagadosojosmemiran fijamente.Susazules labios semueven sinpronunciarningún sonido.Micorazónlatetranquilamente.Nadamearrancadelprofundoreposodemissentidos.MiroaKelley…Luego…

Imágenesdandovueltasenelvientocomounanieveabigarradaquesecoagulaenbosques.LosbosquesdeBohemia.Porencimadelafronda,eltejadodeunatorrecoronadaconsunegraveleta,ladoble águila de losHabsburgo:KarlsTeyn.Arriba, en la torrededefensa, construida conpiedraslisasyoscuras,deaspectometálico,yquemiraalnoroeste,haylaventanarotadeunaprisión.Yenlavertiginosaparedcalcáreaseagarrayseaseunaformahumanaquedesciendehaciaelvallecomouna pequeña araña negra… el hilo en el cual pende es increíblemente débil… fatigosamente sedesenrollaladébilcuerdaatadaalacruzdelaventana…¡Desgraciadoelpobrequequieredescenderpor ella!Bien pronto se balancea al aire libre, puesto que elmuro está construido con una ligerainclinación hacia el interior. ¡El arquitecto de esta prisión eterna ha previsto con cuidado todaposibilidadde fuga! ¡No tienesningunaposibilidadde escapar, pobre arañahumanaquependes alextremo de tu débil hilo! Ahora el que cuelga en el vacío intenta apoyarse atrás, volviéndoselentamente. ¡Ah! El barrote de la ventana que se dobla ligeramente, la cuerda huye, una sacudidaapenasvisible.Elhuésped,lívido,enmiumbral,emiteungemidodeultratumba,comosirevivieradenuevo,unayotravez, eternamente, elmomentode su caída enelverdeprecipicioquedominaKarlsTeyn,lafortalezadeunemperadordedesconcertantescaprichos.

VeoaKelley,elfantasmadelumbraldemipuerta,quevanamenteseesfuerzaenhablarme.Yanotiene lengua, se ha corrompido en la tierra. Levanta la mano como para conjurarme. Siento quequiereadvertirme.¿Dequé?¿Quépodríaaúntemer?Esinútil,Kelleynopuede.Suspárpadosluchanyluegocaen.Lailusoriavidadelalarvaseapaga.Lentamenteelfantasmadesaparece.

EsveranoenlaviejacocinadeMortlake.¿Cuántosveranosllevodesdemivueltaalhogaracausademidestierro?Nosabríadecirlo…¡Sí,acausademidestierro!YaqueeldestierroqueelÁngelmehaimpuesto—empiezoareírmesecretamentedelasoscurasórdenesdeestaentidad—equivaleaunretorno. Ésta es la tierra… ¡oh! ¡Ojalá no la hubiera abandonado nunca!… la tierra que de susmaternalesentrañastransmitelasfuerzasparalasalvaciónamicuerpoagotado.Fuerzasdesalvaciónquequizátodavíapuedenmostrarmelavíademirealización.Aquímipiesigueelrastrodemireina,aquímialmacreerespirartodavíaeldisipadoalientodeunaantiguaesperanzadesupremafelicidad,enladulcebrisavespertinadeMortlake.Aquílatumbademividadevastada,perotambiénellugardemiresurrección, tantardíacomosequiera.Así,díatrasdía,sentadoantemifríohogar,espero.Nadameapremiaya,puestoqueElizabethha llegadoa«Groenlandia»yningúnasuntourgentedeestado, ninguna persecución insípida e insignificante del ridículo fantasma de la vanidad me laarrebatarámás.

¡Unruidoenlaescalera!Uncorreorealestáantemí.Echaasualrededorunasorprendidamiradaymesaludacontirantez.

—¿EstoyenelcastillodeMortlake?—Sí,amigomío.—¿YmehalloantesirJohnDee,baróndeGladhill?—¡Ciertamente,amigomío!Uncómicoespantosedibujóenelrostrodelcorreo.Elsimplesólopuedeimaginaraunbarón

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inglésvestidodeterciopelosyseda.Ysinembargo,noeselhábitoquienhacealgentilhombrenilosandrajoshacenalvillano.

Deprisa,elcorreomedaunpaquetesellado,reiterasusaludoconlagraciadeunamarionetaquenotienearticulaciones,segiraybajaporlavacilanteescaleraquellevaami«vestíbulo»abajo.

TengoenlasmanosunpaqueteselladoconlasarmasdelpríncipeRosenberg,burgravedePraga,la herencia del desgraciado Kelley se esparce ante mí. También hay un pequeño paquetecuidadosamenteatadoconbramanteyselladoconelsellodelemperador.

La dura cuerda amarilla y negra resistemis esfuerzos por romperla. ¿No tendré un cuchillo?Involuntariamente palpomi lado izquierdo: ¿dónde estámi cortapapeles?Me estremezco, el lugardondesiemprehellevadoelpuñal,eltrofeohereditariodelosDee,estávacío…Perorecuerdoquela proyección astral de Elizabeth me lo ha tomado de las manos en esa noche, donde, evocadasiguiendolasinstruccionesdeBartlettGreen,havenidoamíenelparquedeMortlake.Yluego,porjustificaciónporasídecirlo,meheacostumbradoallevarsiempreencimamíounacopiaexactadelajoyayquemeservíadecortapapeles…Antessiemprelollevabaparaabrirmiscartasenlugardelpuñal perdido.He debido perder el cortapapeles. ¡Así pues, también la copia ha desaparecido!Notieneimportancia.

Finalmenteconsigoromperlacuerdaconlaayudadeunviejoclavo,quealfinyalcaboofreceelmismo servicio que el hierro de lanza deHoelDhat.Tengo antemí el cristal de carbónque elemperadorRodolfomedevuelvesinunapalabra.

***

Trastornantes recuerdos secuelanen laensoñación:el alcaldeha subastado losúltimosmetroscuadrados de tierra alrededor de las ruinas de Mortlake. La nieve se precipita de nuevo por lashendidurasylasbrechasdemicocina.Loshelechosennegrecidosporelhielo,eltrébolyloscardosseadueñandemipalaciodemochuelos.

Price, el últimoamigo, viene cadavezmás raramentedeWindsor.También él sehavueltounviejoencorvadoyquisquilloso.Seacurrucaamiladodelantedelhogarypermanecemudodurantehoras.Cadavezqueviene,debodedicarmea losminuciosospreparativosparauna sesióncon losespíritus. Largas oraciones a las que el devoto Price, casi vuelto un niño, les concede la mayorimportancia. Ceremonias absurdas y complicadas durante las que se duerme,mientras que yomedeslizoenelpasado…ycuandovolvemosanosotros,hemosolvidadoloquequeríamos,yelfríodelatardecerinvadelahabitación.EntoncesPriceselevantatemblandoymurmura:

—¡LapróximavezseráJohn,lapróximavez!

***

EsperabaaPriceynohavenido,encambiosehadesencadenadounaformidabletormentaenelcielo.Aunquetodavíaestemprano,unaoscuridadcasitotalreinaenlahabitación,lastinieblasdelatormenta cubren el cielo.Mi chimenea, con su amarillento fulgor, anima fantásticas sombras. Lassalvas de truenos se suceden, separados por relámpagos, sobre Mortlake… Una agradableexasperación se apoderademicorazón: ¡puedo serheridoporun rayo! ¿Quémejordeseopodríatener?Imploroelgolpedegracia.

Ruego…demomentonomedoycuenta.¡Yo«le»ruego,alÁngeldelaventanadeOccidente!Y

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cuandoestaconstataciónafloraenmiconciencia,el furordeunacólera sin límitesexplotaenmí,másviolentaqueunrayo.MedoycuentaquedesdelaespantosasesiónenlacuevadeldoctorHajeken Praga, la entidad verde no se hamanifestado, no ha realizado nada, excepto elmilagro demiinconcebibleysobrehumanapaciencia. ¡Entonces, favorecidoporel resplandorde losrelámpagos,me parece ver, sobre el negro fondo del hollín de mi chimenea, el rostro de piedra del Ángelhaciendomuecas!

Hesaltado.Mevienena lamemoriaviejosconjuros,desdehacemuchoolvidados,queBartlettGreenmehabíatransmitidocuandosubióalahogueradelobispoBonner.Fórmulasparausarenunapremiantepeligrocuandoseaspiraa tener laayudadelotromundo,paraquiensehaofrecidoensacrificio,ytambién,¡fórmulasquepuedendarlamuerte!

¿Quésiyoheofrecidounsacrificioenmivida?¡Unsacrificiobastantesubstancial,creo!Ydemislabioscaen,automáticas,comomartillazos,laspalabrasenterradaseneltiempo.Nosiempremialma comprende el sentido, pero «del otro lado» las sílabas y las palabras son recogidas porinvisiblesorejasqueescuchan.LosdelMásAlláobedecenalosvocablosmuertos¡puestoqueesporloqueestámuertocomosesometealosmuertos!SobrelagroseracornisadelachimeneaaparecelapálidafazdeEdwardKelley.

Unsalvajesentimientode triunfo invademicorazón:¿tehecazadoviejocamarada?¿Asípues,querido,quieresinterrumpirunpoco,poramoramí,tuamorfoyfebrilsueñodefantasma?Ellomemolesta,peromeveoenlaobligacióndeservirmedeti,hermanodemicorazón…¿Durantecuántotiempohearengadoasíalfinadocharlatán?Losminutospasaninterminables.

FinalmentemedecidoymandoaKelleyennombredelasangrecambiada.Esentoncescuandoveomoverse por primera vez al fantasma, como si una pertinaz y fría corriente lo animase…EnnombredelasangreintercambiadaleexijolainmediataevocacióndelÁngelverde.

EnvanoelaterrorizadoKelleyse resiste,envano intentaescaparamiempresa, sonvanossusmudossubterfugiosparaincitarmealapacienciamientrasesperamoselmomentomásfavorable…Con la rabiosa energía de un verdugo que en la pasión de arrancar confesiones a la víctima seembriaga con el olor de la sangre, empiezo a enrollar la fórmula de Bartlett Green, la colocoalrededordelectoplasmadeKelleyhastacortarlesurespiracióndeespectro.Entonces,surostrosedisuelveconlamáshorribleytorturadaexpresiónyprogresivamentelacaradepiedradelaEntidadVerdelosustituye.

EracomosielÁngelhubieradevoradoaunKelleyvivoysindefensas.LaEntidadVerdepermanecesolaenlapenumbradelachimenea.Unavezmáspercibolamiradaquehipnotiza.Unavezmásmeesfuerzoenlucharcontodoslos

medios capaces de oponer la sangre demi corazón, como un baluarte, frente al frío externo queprontohabríaheladolasúltimasfibrasdemicarne.PeroperciboconestuporqueelfríoqueirradiadelÁngelparecenoproducirningúnefectosobremiviejaycurtidapiel…Concluyoqueyomismomeheenfriado.

Yoigounavozmelodiosa,desdehacemuchofamiliar,unavozquehacepensarenladeunalegreeinsensibleniño:

—¿Quéquieres?—¡Quieroquemantengaslapalabra!—¿Creesquemepreocupoporunapalabra?—¿LoquetienedevalorenlatierrasegúnlaleydeDios:lealtadporlealtad,palabraporpalabra,

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debetambiénvalermásallá,sino,¡elcieloyelinfiernosehundiríanenunsolocaos!—¡Asípues,meconminasamantenerlapalabra!—Teconminoamantenerpalabra.Después la tormenta se desencadena con una violencia in crescendo, pero el ensordecedor

estrépitodelosrelámpagosquesurcanelcieloalrededordelcastillo,losestallidos,laalgazaradeltrueno,sólovibranenmisorejascomounamortiguadoacompañameintodelassueltas,incisivasyclarasfrasesquepronunciaelÁngel:

—Siempretehequeridobien,hijomío.—Puesbien¡damelallaveylaPiedra!—EllibrodesanDunstansehaperdido.¿Paraquéteserviríalallave?—¡Sí,Kelleytuinstrumento,lohaperdido!Lallavesehavueltoinútil,asíquedebessaberdequé

tengonecesidad.—Losé,hijomío.¿Perocómoencontrarloquesehaperdidoparasiempre?—¡Porlafuerzadelquesabe!—Ellonoestáenmipoder.Tambiénnosotrosobedecemosalasresolucionesdeldestino.—¿Yquéestáescritoenlaresolucióndeldestino?—Loignoro,elmensajeestásellado.—Puesbien,¡ábrelo!—¡Congusto,hijomío!¿Dóndeestáelabrecartas?El relámpago del aniquilamiento, el trueno del conocimiento y del desespero caen sobre mí,

caigoderodillasanteelhogarcomosiéstefueraelaltardelSantodelosSantos.Imploroalrostrodepiedra.¡Iniciativaestúpida!¡Ysinembargo,sonríe!Unadulceybuenasonrisaanimayvivificasuverdosorostro.

—¿QuéhashechodelpuñaldeHoelDhat?—Loheperdido…—¡Yapesardeellomeconminasamantenermipalabra!—Denuevosubeenmilallamadeuna

insensatarevuelta,enmifurorrechinodedientesygrito:—¡Sí,teconminoamantenertupalabra!—¿Conquévalor?¿Conquéderecho?—¡Conelvalordelmártir,conelderechodelinmolado!—¿Yquéquieresdemí?—¡Larealizacióndediezañosdepromesas!—¿AspirasalaPiedra?—¡AspiroalaPiedra!—Entresdíaslatendrás.Hastaentonces,prepárateapartirparaunnuevoviaje.¡Eltiempodelas

pruebashaterminado!¡Eresllamado!Estoysoloenlastinieblas.Bajoelfulgordelosrelámpagos,veoelhoyodelachimeneanegroy

abierto.

***

Eldíaselevanta.Conpena,conunaincreíblepena,mearrastroentrelascalcinadasruinasdondehepuestoalabrigo lopocoquemequedade laopulenciade losDee.Miespaldaymismiembros

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estándoloridos.Cadavezquemeagacho,láminasalrojomeatraviesanlosriñones.Confeccionounbultoconmisropasenprevisióndelviajeprescrito…

DeprontollegaPrice.Observasilenciosamentemispreparativos.—¿Dóndevas?—Nolosé.QuizáaPraga.—¿Haestado,«Él»,aquí?¿Cercadeti?¿Tehadadolaorden?—Sí,haestadoaquí.Ha…dadolaorden.—Tengolaimpresióndeperderelconocimiento.

***

Relinchosdecaballos.Ruidosorodardeunaberlinadeviaje.Unextrañoconductorapareceenelumbraldemicocinaymemiraconaspectointerrogante.Este

hombremeesdesconocido.¡Noimporta!Intentolevantarmeynoloconsigo.SerádifícilirapiehastaPraga.Hagounsigno

alhombreintentándomehacercomprender:—Mañana…quizámañana,amigomío…Noestoyencondicionesdeviajar.Apenassipuedorecostarmeenlaliteradepajaquemesirvede

lecho.Además,losdoloresenmisriñonesson…mucho…muchomásfuertes.EsunasuertequePrice,queesmédico,estécercademí.Seinclinaymurmura:—ValorJohnny,pasará.Sóloeslacaducidaddelacriatura,oldBoy¿noescierto?¡Labilisenmal

estado,losriñonesenfermos!Eslacondenadapiedra.Lapiedra,amigomío.¡Eslapiedraqueestáentiloquetehacetantomal!

—¿Lapiedra?—hegemido,yrecaigoenmilecho.—¡Sí,Johnny,lapiedra!Muchossufrenterriblementeynosotroslosmédicos,notenemosningún

remediocuandonoesposibleoperar.Acompañandoalosagobiantesdolores,hacesdeluzbailanantemisojosinteriores:¡OhsabioJudíodePraga!¡GranRabinoLow!…Ungritodedolorsaledemicerradagarganta,

en tantoqueunangustiadosudormehielaelpecho. ¡Es lapiedra! ¡Abyecta irrisión!Podrádecirsequeelinfiernomeescupesuspullasalacara:«ElÁngeltehadadolaPiedrademuerteynolaPiedradevida.Yahacemuchotiempo.¿Ytúnotehasdadocuenta?».

Tengolaimpresióndequeelrabino,desdelacimadelostiempos,mellama:—¡Cuidado con la Piedra por la cual ruegas! ¡Cuidado que el disparo de tu oración no sea

interceptado!—¿Deseasalgunaotracosa?—oíaPricepreguntarme.

***

Solo, abrigado enmis harapos y en una capa tiñosa, estoy sentado enmi viejo sillón, ante elhogar. Recuerdo que he rogado a Price que girasemi asiento demanera quemi caramire haciaoriente…demaneraquepuedarecibiralpróximovisitante,seaquiensea,enlaposicióninversaalaquehaprevalecidoenmividatranscurrida,apoyadaenelOccidenteverde.

Asíesperoalamuerte…Pricemehaprometidoveniravermeporlatardeydulcificarmeelóbito.Espero.

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Pricenoviene.Hacehorasqueloespero,entrelosdesmayosdelsufrimientoylaesperanzadeunaliberación,

quemetraerálaaparicióndePrice.Lanochepasa…Price,elúltimohombre,tambiénseaparta.Hastaelúltimoinstantehesidoatrapadoenelnaufragiodetodaslaspromesas,tantolasdelos

mortalescomolasdelosinmortales.Ningunaayudaentodoloqueheconocido.Ningunamisericordiaenningunaparte.¡ElBuenDios

duerme plácida y cómodamente como el médico Price! ¡Ninguno de ellos tiene en el costado lapiedradelassietevecessetentapuntiagudasyaceradasespinas!¿Dóndeencontraríaelinfiernootrossupliciosparainfringírmelosyalimentarseconellos?¡Traicionado!¡Perdido!¡Abandonado!

Mimano,medioimpotente,palpaenlapiedradelfogónyencuentraunescalpeloqueelmédicohadejado…¿paraquémeabra lasvenas? ¡Bienaventuradacasualidad! ¡Benditoseas,amigoPrice!EstepequeñocuchillotienedesdeahoramásvalorparamíqueelestúpidohierrodelanzadeHoelDhat:mehacelibre…¡porfinlibre!

Echolacabezahaciaatrásymepresentoelcuello.Levantolahojahaciamicuello…Unprimerrayomatinalledaunreflejopúrpura,comosilacoagulantesaviademividayaloinvadiese.Peroheaquí que sobre la superficie del bisturí hacemuecas, con su ojo blanco, la larga cara de BartlettGreen.Acecha,saluda,señala.

—¡Corta.Cortalagarganta!Teayudará.TereuniráconJane,tuMujer,laquesesuicidó.Estoteatraeráhacianosotros,abajo,¡esoestábien!

Bartletttienerazón:¡quierollegarhastaJane!…¡Quétranquilapersuasiónhayenestecuchilloylaluzqueirradiaentrelahojayelcuello!¡Que es eso que por detrás se pone enmi espalda! ¡No, nomevuelvo, ni unamirada hacia el

oeste!Unardientesentimientodebienestarmeinvadedelacálidapresióndeunamanohumana.Nonecesitogirarme,antemíestáGardener,elasistenteolvidadoquemeabandonóantañoenel

calordeunadisputa. ¿Cómoha llegadoal castillo tande repente…yen elmismo instante enquequierovolvermedeespaldasaMortlakeCastleyaestemundomentiroso?

¡Queextrañovestidollevamibuenasistente!Unatúnicadelinoblancosobrelaque,alaalturadelcorazón,estábordadaunarosadeororojaqueresplandeceenelsolmatinal…¡Joven,muyjovenhapermanecidoelrostrodeGardener!Comosinohubieranpasadoesosveinteañosdesdequenosvimosporúltimavez.

Sonríe,sufisonomíaesladeunamigo,delhombrequedesafíaalavejez.Seacercaamí:—¿Estássolo,JohnDee?¿Dóndeestántusamigos?—Todalasordapenademipechofluyeen

lágrimas.Sóloconsigomurmurarconunavozátona,rotaporeldoloryeluso:—Mehanabandonado.—Tienesrazón,JohnDee,paraestardesanimadodelosmortales.Todoloqueesmortalesdoble,

yquiendudatardeotempranodebenaufragareneldesespero.—¡LosInmortalestambiénmehantraicionado!—Tienesrazón,JohnDee,elhombretambiéndebedudardelosInmortales.Ellossealimentande

lossacrificiosydelosrezosdeloshombresdelatierra,delosqueestánmásávidosqueloslobos.—¡EntoncesyanosédóndeestáDios!—Estosucedeatodoslosquebuscan.—¿Ylosquehanperdidolavía?

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—¡Lavíateencuentraatiynotúalavía!¡Todoshemosperdidoanteslavía,yaquenohemosdecaminar,sinohallarlajoya,JohnDee!

—¿Extraviado,solo,talcomotúmeves,cómonomoriréfueradelavíaperdida?.—¿Estássolo?—¡No,túestáscercademí!…—Yosoy…LasiluetadeGardenerseesfuma,sedisipa.—Asípues,¿tambiéntúeresunaimpostura?—digoenunestertor.Apenasperceptible,mellegaunavozmuylejanaamioreja:—¿Quiénmellamaimpostor?—¡Yo!—¿Quiénes«Yo»?—¡Yo!—¿Quiéneselquemefuerzaavolver?—Yo.DenuevoGardeneresvisibleantemí.Mesonríedefrente:—DesdeahorahasllamadoAlQueyanotedejarásolosidebesextraviarte,el«Yo»insondable.

¡Meditasobreloquenotieneformaparatumirada,sobreeltipoprimordialdetuconciencia!—¿Quiénsoy?—exclamégimiendo.—Tunombreestáinscritoenellibro,ohtúquenotienesnombre.Perohasperdidotuemblema,

descendientedeRoderick.¡Esporesoporloqueestássolo!—¿Miemblema…?—¡Este!…¡Gardenersacadesutúnicaelcortapapeles,elpuñalperdido,lajoyadelosDee,lalanzadeHoel

Dhat!—Esasí—seburlaelAsistentedelaboratorio,ysufríarisameparteelcorazón.—Esasí, JohnDee…Primero,nobilísimayvieja armadelAntepasado; luego joyahereditaria

guardada y venerada supersticiosamente por tu raza; después un vil cortapapeles para un muyrebajadodescendiente;finalmente,despreciadoalaligeraporsuuso,perdidoporunamanocriminale, ¡instrumento de lastimosas prácticas tenebrosas!… ¡culto de ídolos! ¿Comprendes qué quierodecir?Eltalismándeuntiemponoblehadescendidomuyabajoportufalta.¡Bajo,muybajotehashundido,JohnDee!

Elodioestallaenmí.Unodioparecidoaunflujodelavaincandescentemesubeporlagargantagritando:

—¡Dameelpuñal,impostor!Elasistenteevitamigestodeviolencia.—¡Dadme el puñal, ladrón, ladrón! ¡Último impostor, último enemigo sobre la tierra!

¡Enemigo…mortal!Mefaltalapalabra,pierdoelaliento.Percibolaexactavibracióndemisnerviosquesetensanyse

rompencomocuerdasusadas.Unaclaridadinteriormeinunda,eselfin.Unasuavesonrisamesaledeloslimbosdeldesmayoquemehaprovocadoelimpactoimpuesto

amitemblorosocuerpo:—¡ADiosgracias,JohnDee, túdesconfiarásdetodostusamigos,demíincluido!Alfin tehas

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reencontradoatimismo.¡Alfinveo,JohnDee,quesólotienesfeentimismo!¡Quequiereshastaelfinalloquetepertenece!

Caigohaciaatrás.Mesientoextrañamentevencido.Mialientosehacelentoyligero,balbuceo:—¡Devuélvememibien,amigo!—¡Toma!—diceGardener,ymedaelpuñal.Lotomodeprisa,como…comounmoribundotomaelsacramento.Atrapoelvacío.Gardener

estáantemí,elpuñal,ensumano,resplandecebajolaslucesmatinalescontantarealidadcomomiexangüe,pálidaytemblorosamanodeagonizante…peronopuedoagarrarelpuñal.Gardenerdicecondulzura:

—¡Ves,tupuñalnoesdeestemundo!—¿Cuándo…dónde…podré…tenerlo?—¡EnelMásAllá,silobuscas,sinoloolvidas!—¡Ayúdamepues,amigo,ano…ol…vidarlo!

***

Algogritaenmí:«NoquieromorircomomiantepasadoJohnDee»,yconunbruscoesfuerzomearranco,suboymeveoalinstanteenmidespacho.Vuelvoaserelqueeracuandoheempezadoainterrogaralcristaldecarbón.Todavíanoquierodejarlo.Quierosaberque lehasucedidoaJohnDeedespués.

YrápidamentesoytransportadounavezmásalaruinosacocinadeMortlake.PeroestavezsólosoyuntestimonioinvisibleynoJohnDee.

Veo a mi antepasado, o mejor dicho la envoltura carnal del que ochenta y cuatro años antesrecibióelnombrede JohnDee,baróndeGladhill.Está sentado, con la cabezaerecta, en su sillóncerca de la chimenea de ladrillos. La apagada mirada girada hacia Oriente, como si acechara aalguienquequizánovendráhastadentrodecienaños.Veolevantarseelpúrpuradelaaurorasobrelospodridosyenteramentehundidostejadosdeloqueantesfueunanoblemorada.Veolosprimerosrayosdelsolmatinaldeslizarseenunrostroquemáspareceesperarqueestarmuerto,ylabrisadelalbajugarconlosplateadoscabellosdelacabezaapoyadaenelrespaldo.Siento,presientoaunserenacecho.Siento,veoenlarotamiradadelviejo,unavidabientensaporlaespera,ymeparecequede repente el profundopecho se alza por un suspiro de liberación. ¿Quiénpuededecirmequemeengaño?

Perodeimprovistosepresentancuatropersonajesenelmiserablereducto.Creohaberlosvistosalirsimultáneamentedelamurallaydeloscuatropuntoscardinales.Dealta talla,másaltosdelonatural,noparecenseresdelatierra.Puedeserquesufantásticoaspectoseadebidoasusvestiduras.Llevan una túnica azul oscuro con una larga esclavina que envuelve el cuello y los hombros.Lascapuchas de la cogulla les cubren el rostro y la cabeza. Son enterradoresmedievales, cuya formaastralsobreviveauncomienzodedescomposición.

Llevanunraroataúdenformadecruzhechodeunmetalmate,zincoplomosegúncreo.Levantan almuerto de su asiento y lo depositan en el suelo. Le despliegan y le extienden los

brazosencruz.EntoncesGardeneraparecealacabezadelmuerto.Varevestidoconunatúnicablanca.Larosaresplandeceensupecho.Tieneensumanoextendida

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elpuñalde losDee,elhierrode lanzadeHoelDhat.Laextrañaarmacentelleaalsol.GardenerseinclinalentamenteencimadelmuertoyloponeenlaabiertamanodeJohnDee.Eltiempodeunabrirycerrardeojosmehaparecidoquelosamarillentosdedosdelcadáverseestremecíanyapretabanlaempuñadura.

En ese instante, surge del suelo la gigantesca silueta de Bartlett Green —¿cómo? No sabríadecirlo—,ríemostrandosuslargosdientesquerelucenentresurojizabarba.

El fantasma del jefe de losRavenheads contempla con gran placer los despojos de su antiguocompañerodecadena.

Tienelamiradadelcarniceroqueevalúaelpesodelacarnedelavíctimadegollada.Cada vez que su blanco y ciego ojo erra por la cabeza delmuerto, parpadea como si una luz

desagradablelodeslumbrara.Nosehadadocuentadelapresenciadeladeptovestidodeblanco.Sinpronunciarunsolosonido,comosucedeenlasconversacionesdelsueño,BartlettGreendice

alfinadoJohnDee,yyomismomesientotocadoporsuspalabras:—¿Yahaterminadolaespera,viejocompadre?¿Tanlococomoeres,hasdejadoatualmaque

espereytengapacienciahastasalirdelcuerpo?¿YaestásdispuestoparaelviajeaGroenlandia?¡Venpues!

Elmuertonosemueve.Consuzapatodeplata—lasescamasdelalepraparecenaúnmásespesas—BartlettGreengolpea rudamente las extendidasy juntaspiernasdel cadáver y la perplejidad sedibujaensurostro.

—¡Noteagazapesenlavetustacabañadetucadáver,ilustrevarón!¡Responde!¿Dóndeestás?—¡Aquíestoy!—respondelavozdeGardener.BartlettGreen se sobresalta.Alprincipiounpoco inclinado, seyerguebruscamente en toda su

corpulencia.Sediríaqueundesconfiadoalanoseyerguealoírunavozsospechosa,miraconelojomaloygruñe:

—¿Quiénhabla?—Yo.—Respondelavozdetrásdelcadáver.—¡Ésenoerestú,hermanoDee!—refunfuñaBartlett.Expulsadetuumbralesteguardiánquetú

nohaspuesto,puestúnolohaspuesto,hermanoDee,losé.—¿Quéquieresdealguienquenoves?—¡No quiero tener nada en común con los Invisibles! ¡Sigue tu camino y déjanos seguir el

nuestro!—Bien,¡Vetepues!—¡De pie! —grita Bartlett, y sacude al muerto, ¡en nombre de la Señora a la que servimos,

camarada! ¡De pie te digo, condenado cobarde!De nada sirve disimular lamuerte cuando se estámuerto,querido.Lanochehapasado,elsueñohaterminado.Elviajeestáprescrito.¡Enmarcha!

Con sus brazos de gorila, el gigantesco Bartlett quiere alzarlo del enlosado. No lo consigue.Jadeando,gritaenelvacío:

—¡Déjalo,espectroimbécil!¡Estonoesunjuego!—Gardenerpermaneceimpasiblealacabezadelcadáversinmoverundedo.

—Tómalo.Noteloimpido.ComounabestiaapocalípticaBartlettsearrojasobreelmuerto.Nopuedelevantarlo.—¡Demonio,canalla,quepesadoeres!¡Máspesadoqueelsagradoplomo!Tehasdadomásdolor

delquetehabíacreídocapazparaacumularesepesodepecado…Asípues,¡saldeahí!

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Perosediríaqueelcadáversehaenraizadoenelsuelo.—¡Erespesadoportuscrímenes,JohnDee!—gimoteaelhombrerojo.—¡Espesadoporlosméritosdelsufrimiento!—respondeeleco,delotroladodelamuerte.LacaradeBartlettGreenseponeverdederabia:—¡Impostorinvisible!Veteylolevantaréfácilmente.—Nosoyyo,contestalavoz,nosoyyo.Élmismosehadadoestepeso,y¿tútesorprendes?UnapérfidaexpresióndetriunfosedibujadeprontoeneldescoloridoojoblancodeBartlett.—¡Bienpues,permaneceahíhastaquetehayascorrompido,cobardecanalla!Entoncestúmismo

vendrás al jamón ahumado, ratoncillo. Lo guardamos en un lugar seguro, lo sabes, mi valienteratoncillo.¡Ven,venatomarlalanzadeHoelDhat,venatomarelpuñal,elcortapapeles,venatomartujuguete,pequeñoJohnDee!

—¡Tieneelhierrodelanza!—¿Dónde?…Sediríaqueelpuñalqueestáenlamanoderechadelmuertosehavueltorepentinamentevisible

alcarnicero.Seprecipitaencima,comounbuitre.Lamanodelmuertosemueveclaramente.Secontraealrededordelarmaylamantienefirme.Unencarnizadorugidodefurordelalanocontrasuvíctima…Eladeptodelatúnicablancasegiraamediasyofrecesupechoalsoldelevanteyunrayojuegay

sereflejaenelbordadodeorodelarosa.LaluzsedifundehastaelespectrodeBartlettGreen.Lasondasluminosaslobañanylodisuelven.

Ahorareaparecenloshombresenmascarados.Levantanalmuertoydulcementelodepositanenelataúdenformadecruz.ElAdeptohaceunsignoycomienzanaandarhaciaelcálidoresplandordelsol que invade la habitación. Su silueta se solidifica en un cristal traslúcido, hace un signo a losportadoresdelataúd—mudoséquitoquelevita—yatraviesanlaparedestedelapobrecocina.

Fuera,unjardín.Lasmurallasrelucenentrelavastasombradelosaltoscipresesydelasencinas.¿Es el parque deMortlake?Casi que podría creerlo al contemplar la desolación de las calcinadasruinasentrelosparterresplantadoscontodotipodearbustosdeflorydeplantasdeveranoenplenafloración;peroMortlakenuncahatenidoesasarrogantestorresyesosbaluartesdedefensa,queportodas partes montan guardia dentro de los bosquecillos… Y, a través de las almenas que sedesmenuzan,lamiradasepierdeenunprofundoyazulvallesubrayadoporlaplateadacintadeuncursodeagua.Enunparterreenmediodelasruinas,hayexcavadaunatumba.Ponenenellaelataúdenformadecruz.

Mientrasquelososcurosportadoresrellenanlafosa,elAdeptodelablancatúnicaseagachaaquíy allá y se libra a extraordinarios actos. Se diría que es un jardinero que cuida los arbustos y lasflores, que poda, injerta, cava y riega, con calma, imperturbablemente, como si ya hicieramuchotiempodelaceremoniadelainhumaciónqueseacababaderealizarasusespaldas.

Eltúmuloyaestáterminado.Lasformasdeazuloscurosevan.Gardener,elsingularayudantedelaboratorio,haerigido,medianteunrodrigónreciéncortado,unjoven,eleganteyvigorosorosal.

Es,medianteunaprofusiónderamas,unfuegodeartificiosderosasderojosangre.Unapreguntameatormenta, flotaenmis labios,cadavezmásnítida,másapremiante.Antesde

que mi boca haya formado las sílabas, el adepto medio gira la cabeza hacia mí. Reconozco aThéodoreGärtner,miamigoahogadoenelocéanoPacífico.

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***

Dejoelcristaldecarbónysientoun tremendodolordecabeza.Tengo lacertezadequeyanopodrévernadamásenelespejonegro.Enmísehaproducidounatransformacióndelaquenopuedodudar,sinembargomeesimposibledecirenquéconsisteexactamente.LomásaproximadoseríaqueheheredadodeJohnDee laasunciónde todosuser.Mehe fundidoconél.Él sehaapagadoyyoestoyensulugar.Élesyoyyosoyélparasiempre.

Abro una ventana; el frío hedor que exhalaba la copa de ónice era insoportable.Un hedor deputrefacción…

Apenashabíarefrescadounpocomissentidosyechadofuerademidespachoelrepugnanteolor,cuandollegóLipotine.

Alentrar,sunarizolisqueódiscretamente,comosehaceavecesparaidentificarunolor.Peronodijonada.

Luego, de repente, sus saludos fueron calurosos y apremiantes; su porte, generalmente lento ycircunspecto,parecíanerviosoyfebril.Reíaporestooaquellosinmotivo,decía«sí,sí»,yparecíatenerprisaporsentarse.Conunexageradolujodegestos,cruzólaspiernas,encendióuncigarrillo,yatacó:

—Naturalmentevengocomisionado.—¿Comisionadoporquién?—preguntéporunexcesodeeducación.Seinclinó:—Porlaprincesa,naturalmente,nobleamigo.Sinquererlo,meadecuéalcómicoceremonialconelquehabíaempezadolaconversaciónyque

sevislumbrabacomounanegociaciónentredosdiplomáticosdeteatro.—Sí,pormí…miprotectora.—¿Ybien?—Tengoelencargodecompraros, siesposible,esa…digamosesaarmaen formadeestilete.

¿Mepermitís?Alargó sus dedos hacia el puñal que descansaba ante él sobre mi escritorio y lo consideró

atentamente,concaradecrítico.—Endefinitiva, no esdifícil constatarque lamercancía esbastantevulgar ¡Vedque trabajode

aprendiz!¡Estáhechodepiezasytrozos!—Tambiényotengolaimpresióndequeestapieza,comoobjetoantiguo,notienemuchointerés

—concedí.Lipotineme interrumpió,casiasustado.Temíaquesepronunciaraunapalabraprematuramente.

Seacomodóensusillónydespuésdeunciertoesfuerzo,hallóeltonodebido.—Repitámoslo, podría despreciaros el objeto. ¿Porqué no he de seros franco? Vos no

coleccionáis este tipo de cosas y la princesa está enamorada de ella. Pensad simplemente que ellacree…ideaquenaturalmenteyonocomparto…cree…

—…queeslapiezaquefaltaenlacoleccióndesupadre,—terminéfríamente.—¡Habéisacertado!¡Habéisacertado!Lipotinesemeneóensusillónydioaentenderquesealegrabainmensamentepormiperspicacia.—¡Compartolaopinióndelaprincesa!—dije.

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Lipotineserecostó,conairesatisfecho,ensuasiento.—¿Sí?…Entoncestodoestábien…Pusocaradequienconsideraelasuntoconcluido.Sinperderunápicedemicalma,apostillé:—Esporesoporloqueelpuñalestanpreciosoamisojos.—Comprendo—interrumpió Lipotine, asistiendo con calor—. Siempre se deben explotar las

propiasposibilidades.¡Compartototalmentevuestraopiniónenestetipodecosas!Nomediporenteradodeéstamásqueofensivaobservación.—Deningunamaneradeseocerraruntrato.—Lipotineseagitóensuasiento:—Muy bien… No tengo la menor intención de pujar con vos. ¡Eh! Querer adivinar vuestro

pensamientosóloseríaunafaltadetactopormiparte.Naturalmente,esuncaprichodelaprincesayloscaprichosdeunabellamujersiempreofrecenunasbuenasperspectivas.Pensabaqueelsacrificiovalía la pena… Pensaba… en una palabra: estoy comisionado a ofrecer una muy largacompensación…osloruego,comprendedlobien¡estáclaroquelaprincesanoosofrecedinero!Ellase somete a vuestra decisión.Ya sabéis, noble amigo, en qué alta estima os tiene la princesa, ¡esamujerverdaderamentesuperioryatractiva!Osofrecerá,creo,acambiodeestecuriosoobjeto…delasatisfaccióndeunextravagantecapricho…infinitamentemás…

NuncahabíavistounLipotinetanlocuaz.Susansiososojos,continuamenteintentabanleerenmicaradispuestocomoestabaahábilmenteadaptarseacadanuevasituación.Alverestejuegonopudereprimirunapasajerasonrisa:

—Estaofertatanseductoradelaprincesaaquienhonrocontanaltaestima,es,desgraciadamente,vana,yaqueelpuñalnomepertenece.

—¿No…os…pertenece…?ElpasmodeLipotineeradelomáscómico.—Puesno,hasidodadoamiprometida.—¡Ah!sí…dijoLipotine.—Sí,asíes.Acrecentandolaprudencia,elmoscovitacomenzó:—Losregalostienentendenciaaseguirsiendoregalos.Casiquetengolaimpresióndequeya…

oqueconsóloexpresareldeseo,alinstante…Yatuvebastante,yfríamentedije:—Cierto.Elarmaesmíayseguirásiendomía,puesmeesmuypreciosa.—¿Sí?¿Porqué?EneltonodeLipotinehabíaunciertoairedeburla.—Estepuñaltieneparamíunvalorinestimable.—¡Pero,nobleamigo!,¿quésabéisdeestepuñal?—Vistoporfuera,seguramente,selepuededespreciar,perocuandoseinterrogaasurespectoal

cristaldecarbón…Lipotinequedótanazoradoysurostrotanpálido,quedenadahubieraservido,suponiendoque

asíloquisiera,intentardisimularsuturbación.Élmismosediocuenta,yaquecambiórápidamentedeactitudydevoz:

—¿Cómo es posible? ¡No podéis interrogar al cristal! Es necesario el polvo rojo.Desgraciadamente,estaveznoestáenmipoderelofrecéroslo.

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—¡Es inútil, amigo mío!—Corté—. Por suerte, había un pequeño resto ahí dentro. Señalé elcenicero.

—¿Yhabéis…sinayuda…?¡Esimposible!Lipotinehabíasaltadodesuasientoymemirabaconfijeza,atónito.Laangustiayelestuporse

mezclaban tan abiertamente en su rostro, que a mi vez me di el placer de dejar caer todas lasmáscaras.

—Puessí¡loheinhalado!Sinlaayudadelmonjedegorrorojonidelavuestra.—Quien,habiéndoseatrevidoytenidoéxito,estátodavíavivo—diceelestupefactoLipotine—,

havencidoalamuerte.—Quizá.En todocaso,conozcoahoraelvalor, lacualidad,elorigenyel futurodelpuñal.Al

menoscreopresentirlo.Digámoslodeunavezportodas:soytansupersticiosocomolaprincesaocomo…vos.

Lentamente.Lipotine,sevuelveasentaramilado.Aunquemuycalmado,untotalcambiosehabíaoperadoensupersona.Primerosacódesubocaelcigarrillomedioconsumidoqueapagóenlacopade ónice, vuelta a su función de cenicero; solemnemente encendió uno nuevo, para significar dealgunamaneraquesehacíaunborrónalpasadoyqueotrojuegohabíacomenzado.Duranteunlargomomentoaspiróensilencioelfragantehumodesutabacoruso.Noturbéparanadasuplacer,estabadecididoaesperar.Cuandosediócuenta,bajólospárpadosydijo:

—Bien.De acuerdo. La situación ha cambiado totalmente.Vos conocéis el puñal.Vos tenéis elpuñal.Voshabéisganadolaprimeramanga.

—No me enseñáis nada nuevo —respondí serenamente—. Quien, como yo lo he hecho, haaprendidoadesprenderlasignificacióndeltiempo,yaexaminarnoelexteriorsinoelinteriordelascosasqueseinscribenaél;quiendelaexperienciadelossueñossehaelevadoaladelosdestinos,ydeladelosdestinosalaomnipresenciadelarealidadvueltapuravisión,sabetambiénarticularenelprecisoinstantelosnombresqueconjuran,ylosdemoniosevocadosleobedecen.

—¿O…be…decen?—Lipotinehizoarrastrar las sílabas—¿Mepermitiréisdarosunconsejo?Los demonios evocados son los más peligrosos. Creed a un viejo, si, cierto, a un viejo yexperimentadoconocedordeestosmundosintermediosquedetanbuengradoseenganchanalas…antigüedades.Paradecirlofrancaybrevemente,ilustreprotector,sonefectivamenteevocados,yaquehabéis triunfado sobre la muerte, según puedo ver, y os reconozco con estupor el vencedor demuchas tentaciones, pero ello no quiere decir todavía que seáis elegido. El peor enemigo delvictoriosoeselorgullo.

—Osdoylasgracias,Lipotine,porestasrazonablespalabras.Paranoesconderosnada,oscreíadelladocontrario.

Lipotinelevantósuspesadospárpadosconsuindolenciahabitual:—Nosoydeningúnlado,estimadobenefactor,yaque…Diosmío…yosólosoyun…Mascee.

Sigoelpasoalmásfuerte.En los ingratos rasgos del viejo anticuario había una increíble y amenazadora expresión de

ironía,deescepticismoydeinfinitatristeza,sí,dedisgusto.—¿Ymeconsideráiselmásfuerte?—dijeconairetriunfante.—…Provisionalmenteosconsideroelmásfuerte.Demaneraqueestoyprestoaserviros.Yomirabajustodelantemíosinhacerunmovimiento.Derepenteterció:—¡Asípues,queréisdar elgolpedegracia a laprincesaChotokalouguine!Yacomprendéis en

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quésentidoloentiendo…¡Peronoesposible,nobleamigo!Supongamosqueellaseobsesioneconlaidea,¿noosobsesionaríaisvostambién?Ysinolosabéis,esmuchomásgrave.Nuestraamiga,además,esoriginariadeCólquidaysuabuelabienpodríallamarseMedea.

—OIsaís,—cortérealista.—Isaís es su madre espiritual, —respondió Lipotine, con tanta rapidez como indiferencia—.

Debéisdistinguircuidadosamenteambosaspectossiqueréisserunmaestro.—Estadseguro:¡seréunmaestro!—¡Noossobrevaloréis,nobleamigo!Desdequeelmundoesmundo,siempre loha llevado la

mujer.—¿Dóndeestáescrito?—Sinofueraasíelmundonoexistiríaenabsoluto.—¿Quémeimportaelmundo?¡Soyelseñordelalanza!—Quien rechaza conceder la lanzadesprecia lamitaddelmundo,y loquehaydemolesto ahí

dentro,nobleprotector,esquelamitaddelmundoequivaleasutotalidad,aprehendidaporunsemi-querer.

—¿Quésabéisdemiquerer?—Mucho,mucho,nobleamigo…Además,¿nohabéisvistolaIsaíspóntica?Bajolairónicaeinquisidoramiradadelruso,uncalormesubióporelcuerpo.Nomesentíacon

latallasuficientepararesistiraesamordienteironía.Desdeahorasabíaconunacertezaabsoluta,queLipotineleíaenmispensamientos.QuizátambiénleyóenmicerebromientrasestábamosencasadelaprincesaydurantelaexcursiónaElsbethstein.Enrojecícomounescolardescubiertoenfalta.

—¿No es cierto? —dijo Lipotine, con la benevolencia del médico. Volví la cabezavergonzosamente.

—Nadie puede escapar a ello, amigo mío, —prosiguió a media voz—, y nadie escapará tanfácilmente.Sóloconvieneesconderlosmisterios.Lamujer,realidadpresenteentodaspartes,arde,desnuda,ennuestrasangre;enel lugardondedebemoscombatirla, lomejoresdesvestirlahasta latotaldesnudez,enhechooenimaginación.Ningúnhéroehavenidotodavíaalmundoporotravía.

Intentésustraerme:—¡Sabéismucho,Lipotine!—Mucho.¡Sí!Mucho—respondióunavezmáscasiautomáticamente,casicomosidurmiese.Sentílanecesidad,pararesistiramicrecienteopresión,deoírelsonidodemipropiavoz.—Lipotine,creéisquedesprecioalaprincesaynoesexacto.Noladesprecioenabsoluto.Quiero

conocerla¿comprendéis?¡Conocerla!Ysiesnecesario,enelsentidocrudoeinexorabledeltérminobíblico,yaquequieroacabarconella.

—Noble benefactor, graznó Lipotinemientrasmordía su cigarrillo, minusvaloráis a la mujer.¡SobretodocuandotomalaaparienciadeunaCircasiana!Yo…yonoquerríaestarenvuestrapiel.

Selimpiódealgunabriznadetabacoquelehabíaquedadoenlacomisuradeloslabios,comosifueraChidher[23], el JudíoErrante, secandoen sus labios la espumade lavida.Depronto,dejó labridaasuelocuencia.

—Yvosmismo, sipodéismatarla, sóloconseguiréis conello trasladar la luchaaotrocampo,muchomáspeligrosoparavos,yaque tendréisunaperspectiva todavíamás restringidaque laquetenéis aquí, y podéis con más facilidad que aquí resbalar en el suelo que se desmenuza. Y quédesgraciasielpieosfallaenel«másallá».

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—¡Lipotine! —exclamé al límite de mi paciencia, pues sentía que mis nervios empezaban acansarse—;Lipotine, en nombre de la disposición de ayuda que vosmismomehabéis confesado:¿cuáleselverdaderocaminoquellevaalavictoria?

—Sólohayuncamino.DerepentemedicuentaquelavozdeLipotinehabíatomadodenuevoesecaráctermonocorde

queyadiversasvecesmehabíasorprendido.¿Ejercíasobreélunascendentereal?¿Seconformabapasivamenteamisórdenes?Sehabíavueltounmédium,quedebíaobedecermecomo…¿cómo?…¡Jane,unavez,tambiénhabíacerradoantemílosojosdeestamanera,ymehabíacontestado,cuando,animadoporunafuerzaincomprensible,habíaempezadoainterrogarla!Reunímienergíayfijéunafirmemiradaentrelascejasdelviejoruso:

—¿Cómoencontrarélavía?Yo…Lipotine,pálidoyderrumbadoensuasiento,respondió:—Lavía…unamujer…laprepara.Sólounamujervenceráa…nuestraseñoraIsaís,deentrelas

quele…son…lasmásqueridas.—Mehallabachasqueado:—¿Unamujer?—Unamujerquesehaapropiadodelos…méritosdelpuñal.Laoscuridaddesuspalabrasmecausabaunaespeciedevértigo.Huraño,conunamiradaincierta,

balbuceando algo incomprensible como un viejo enfermo, Lipotine volvía a la superficie de suconciencia.

Habíavueltoaseramodesímismocuandosonólacampanilladelaentrada;rápidamenteJaneaparecióenelmarcodelapuertayasuespaldasedibujólainmensasiluetademiprimoRoger…quierodecir,naturalmentedelchófer.Mesorprendídeverlapreparadayvestidaparasalir.Entróehizoentraracontinuaciónalinterminablepersonaje,quenostransmitióloscumplidosdelaprincesay su invitación, nos invitaba a todos al segundo proyectado paseo a Elsbethstein. El coche estabadelantedelapuertaylaprincesanosesperaba.

Janeseñalóprestamentequehabíaqueaceptarconagradecimientolaamabilidaddelaprincesayaprovecharestebellodía.¿Tengoalgunaobjeción?

Lainquietanteentradadelchófermehabíaproducidoenlosmiembrosunaespeciedeescalofríoglacial,confusospensamientos,informeseinasiblespresentimientosoprimíanmipecho.Nohabríasabido decir por qué, pero tomé de la mano a Jane y sólo llegué a responderle con lentitud ydificultad:

—Amenosquenoseatumássincerodeseo,Jane…—Meinterrumpióconunapretóndemano.Surostroeraextraordinariamenteradiante:

—¡Esmimayordeseo!Estafraseresonócomounpactoconcluidoentrenosotrossinquepuedacomprenderelsentido.Janecorrióalamesaytomóelcuriosopuñal.Lopusosindecirpalabraensubolso.Mirécomo

hacíaensilencio.Finalmentelapreguntaestallóenmislabios:—¿Paraquéesto,Jane?¿Quéquiereshacerconelarma?—¡Ofrecerloalaprincesa!Todoestáconsiderado.—¿Ala…alaprincesa?Ellasonriódemanerainfantil:—¡Nohagamosesperarmástiempoalaamablepropietariadelautomóvil!Lipotine permanecía mudo en su sillón y, perplejo, dejaba vagar en nosotros su mirada

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visiblementefatigada.Devezencuandoagachabalacabezasindecirnada,pudieradecirseabsortoenunaespeciedelúgubreestupor.

Nohablamosmuchomás.Tomamoslosabrigosylossombrerosyterminamoslospreparativospara salir en un estado de sorpresa que paralizaba tanto los movimientos del alma como los delcuerpo.

Asípues,descendimoslaescaleraprecedidosporelflexibleysilenciosochófer,grandecomounárbol.

Laprincesa,desdeelfondodelcochenoshizounsignodebienvenidaextrañamenteacompasado.Subimos.Meparecióquecadapelodemipielseerizaba,quecadacélulademicuerpomurmuraba:¡No

vayas!¡Novayas!Yheaquíquetodos,inertesmarionetascolocadasenelcoche,conelcorazónmuertoylaboca

inmóvil,estamosencaminoporlaexcursiónaElsbethstein.

***

Loquehevividoeneltranscursoenestepaseo,sehasolidificadoenmialmacomounpresenteestático.Laderasdeviñasdesciendenhastanuestroscostados.Antenosotros,ahíabajo,elríoformarecovecosquenosotrosdevoramosaunalocavelocidad,yqueseextiendeentrelosmeandroscomosi fuera una lisa alfombra de un suave color verde.Rápidamente desaparecen en el polvo y en lafugazluzlospueblosquenuestravertiginosacarreraparecequererhacervolaranuestroencuentro.

Lánguidos pensamientos semejantes a tules que se desgarran, inquietud que el torbellino de lavelocidad traeymuestracomohojasdeotoño, imperceptiblegritodealarmadelalma.Cansancio,estupidezdelentendimientoembrutecido.

El automóvil toma aliento en los contrafuertes de la ruina de Elsbethstein, se lanza a todavelocidad en una curva amenazando con lanzarnos al lecho del río y se detiene, rugiendo, ante elricamenteesculpidoportaldelamurallaexterior.

Descendemosypenetramos,dedosendos,enelpatiointerior.YovoydelanteconLipotine,lasdosmujeresnossiguenmáslentamente,demaneraqueladistanciacreceentreellasynosotros.MegiroyveoaJaneenanimadaconversaciónconlaprincesa,dequienoigolatancaracterísticaperladarisa.Verlashablandojuntasdemanerataninocenteysinlamenorsombradedisputa,metranquiliza.

Yanosevenadade loshumeantessurtidores,hansidocaptadosy recubiertospor repugnantesbarracasmetálicas.Aquíyallá,somnolientosobrerosocupadosenelpatio.Mostramos interésporeste espectáculo, perodescubro,profundamente escondida,unavoz interiorqueme soplaque esteaparenteinterésenmascaralareddeotracosa.Sí,algonoshaatraídoaquí,ycuyamanifestación,conlos nervios secretamente en tensión, esperamos. Podríamos decir quemudos, dirigíamos nuestrospasos hacia la torre movidos por un tácito acuerdo. La gruesa puerta, como la otra vez, estabasimplementeentornada.Meimaginoestaryaenella,meveotrepandolapodrida,empinadayoscuraescaleraqueconducealacocinadelviejoymediolocojardinero.Tambiénséporquequieroirahíarriba:quierointerrogaraeseespecialviejobuenhombre…PeroheaquíqueLipotineseparaymetomadelbrazo:

—¡Mirad,nobleamigo,ahíabajo!Podemosahorrarnosnuestravisita.NuestromaniáticoUgolinoacabadesalirdesutorre,elseñordelpuñalyanoshavisto.

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Enelmismoinstante,oigounligerogritodelaprincesaamisespaldas,nosgiramos.Nosgrita,conundivertidogritodedefensa:

—¡No,novayamosaveralviejoloco!Ella, con Jane, van hacia otro lado. Involuntariamente seguimos a las dos mujeres y las

alcanzamos.Janetienelamiradagraveylaprincesadiceriendo:—Noquierovolverloaver.Losenfermosmentalesmeimpresionan.Yestaveztampocoquerrá

ofrecermenadadesu…bateríadecocina.¿Noescierto?Estas palabras tienen un tono de broma, pero creo notarles, subyacentemente, un recelo de

vanidadheridaodecelosparaconJane.Elviejo jardinerosiguedelantede lapequeñapuertade la torreypareceobservarnosde lejos.

Levanta lamanocomohaciéndonosun signo.Laprincesa loveypor elgestode envolversemásestrechamente en su guardapolvo, se diría que quiere defenderse contra una sensación de frío.¡Reacciónincomprensibleconeltardíocalordelverano!

—¿Porquéhemosvueltoaestaantipáticaruina?¡Estosmurostienenunaspectohostil!—declaraamediavoz,comoparaellamisma.

—¡Soisvosquienasílohadeseado!—argüísinmalicia—.Eralaocasiónpropiciaparasaberporéldedondehasacadoelarma.—Casibruscamente,laprincesasegirahaciamí:

—¿Quénos importanlashabladuríasdeunviejo loco?Propongo,queridaJane,quedejemosaestos señores satisfacer su curiosidad y que nosotras vayamos a contemplar mientras tanto loscortadosdeestenidodeaparecidosdesdeunpuntodevistamásagradable.

Ydiciéndolo,laprincesapasasubrazobajoeldeJaneysedirigealasalidadelpatiodelcastillo.—¿Yaqueréisvolver?—preguntésorprendido;tambiénLipotineparecíaaturdido.Laprincesaasintióconvivacidad.Janevuelvelacabezaymedirigeunaextrañasonrisa:—Yaestábamoscitadasaquíarribayqueremosdarunavuelta juntas.Unavuelta,compréndelo,

terminasiempredondehacomenzado.Asípues,adi…Elvientosetragalaúltimapalabra.Enelcolmodelaturdimiento,Lipotineyyopermanecemosquietos,comoembrujados.Estecorto

lapsode tiempohabastadoparaque ambasmujeresnoshayan tomado tal ventajaqueyanooyennuestrasreprimendas.

Corremosensupersecución,perolaprincesayaestásentadaenelautomóvil.Janeseaprestaasubir.

Presadeunaincomprensibleyrepentinaangustia,grito:—¿DóndevasJane?Noshahechounsigno.¡Debemosinterrogarlo!Contodarapidezgritoestaspalabraspararetenerla,peronosécómohansurgidodemislabios.Por un instante. Jane parece dudar, gira la cabeza haciamí y dice algo que no comprendo. El

chófer,aunqueelcocheestétodavíaparado,daplenogas,elmotorruedaenelvacíoconunrugidodemonstruoprehistóricoheridodemuerte.Elinfernalruidohacequetodapalabraseavana.DespuéselcochearrancaconunimpulsotanbrutalqueJaneeslanzadahaciaatrás.Laprincesacierraconsupropiamanolapuerta.Unavezmásgritocontraelrugidodelmotor:

—¡Jane!¡Novayas!…Quéquieres…Estesalvajegritosubedelomásprofundodemicorazón.Perolamáquinayadesaparece,presa

delalocura.Laanchaespaldadelconductor,rectacomounclavo,esloúltimoquevi.Elpetardeodel tubodeescapedejaoíren la lejaníasusestampidosmientraselcochevence la

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pendientedelamontaña,comosifueraunaviónquedespega.MegirohaciaLipotineconunamudapreguntaen lamirada.Susesparrancadosojos siguenal

automóvil que desaparece. Su pálido rostro tiene una rigidez cadavérica: una pálida máscara,exhumada de una tumba de siglos pasados, clavada entre una gorra de cuero y un gabán deautomovilista.

Sinunapalabra,conunacuerdotácito,volvemosalpatiodelcastillo.Apenaslohemoscruzadocuandoelviejoyavienehacianosotrosconlamiradaida.

—¡Quieromostraros el jardín!—murmura, ymira a lo lejos por encima de nuestras cabezascomo si no nos viera en absoluto—… «Un viejo y bello jardín, y grande. ¡Mucho trabajo paracavarlo!»—Entresuslabiosqueseagitabansincesar,suspalabrassevolvíanincomprensibles.

Vadelantenuestroynosotrosleseguimos,naturalmente,todoensilencio.Nosconduceatravésdelasbrechasdelosmurosydeloscaminosderonda.Separadevezen

cuandodelantede talocualbosquecilloymurmurademanera ininteligible.Luego,enun fluirdevanaspalabras,nosenseñaenqueépocahaplantadolosárbolesodispuestolasplantasquesurgenantenosotros,magníficamentemantenidas,aunquerodeadasdemontonesdeescombrosydelienzosdemurosderrumbados,entrelosquesemuevenextraordinarioslagartos.Pocoimportaquedelantedeungrupodetejos,variasvecesseculares,nosconfieconmisterioqueloshaplantadoduranteunduro invierno, cuando eran jóvenes planteles que apenas sólo tenía undedodegrosor, y ha ido abuscarlos«ahíabajo,alotrolado»—ylomuestraconunvagosignoenelespacio—paraadornarlatumba.

—¿Quétumba?—preguntobruscamente.Después de un largo cabeceo termina por comprender la preguntamuchas veces repetida.Nos

haceunsignoynosacercamosalosrojizostroncosdelostejos.Entrelosimponentesárbolesselevantaunpequeñooteroquecoronauntemploredondoouna

columnamusgosa,comoseveenlosantiguosparqueshundidosenelsueño.Elverdetúmulonoestácoronadoporningúnmonumentodeestetipo,sinomásbienporunabóvedaderosasdeunintensoyprofundorojo,enplenafloración.Detrás,elgrisfulgordelbaluarteenruinas,yporundesgarrónenlapiedra,lamiradasepierdealolejosenlacampiña.Abajo,elrío,ensuvalledeplata.

¿Dóndehevistoestepaisaje?Y de repente experimento ese fenómeno que a menudo nos sucede a los hombres: tengo la

impresión de conocerlo todo desde hacemucho tiempo.Los árboles, las rosas, las brechas de lasmurallas,lavistasobreelríodeplata.Ellugarylahoramesonfamiliares,comosivolvieraaunlugarquedesdetiempoinmemorialeramicasa.Luegomepreguntésisetratabadeunrecuerdoodeunaimagenheráldica.Podríaserel lugarquehecontempladohacepocoenelcristaldecarbóndeDeeyquehetomadoporlasruinasdeMortlake.¿QuizánoeraMortlake,medigo,quizáseraesteedificio,quehevistoenunestadomediosonámbuloy,lohetomadoporelcastillopatronímicodemiantepasado?

Elviejojardineroapartalasramasdelasrosasynosmuestra,vestidoconmusgoyhelechos,unaexcavaciónenelsuelo.Tieneunainciertasonrisaymurmura:

—Heaquílatumba.Sí,sí,latumba.Ahídebajoreposadesdesiempreelcalmadorostrodeojosabiertos,elhombredelosbrazosextendidos.Lehetomadoelpuñalqueteníaenlamano.¡Sóloelpuñal,señores!Debéiscreerme.¡Sóloelpuñal!Yaquehedebidodárseloa labellay jovenseñoraqueconmigoescrutaelhorizonte,enesperadelasoberana.

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Deboapoyarmeenunodelostejosparanocaerme.QuisieradecirunapalabraaLipotine,peromilenguasedesentiendeysólopuedobalbucear:

—¿Elpuñal…¿Aquí?…¿Unatumba?De pronto el viejo me comprendemuy bien. Hace un viejo gesto de aprobación, una sonrisa

iluminasusdesoladosrasgos.Rápido,obedeciendoaunainspiraciónrepentina,leinterrogo:—Dinos,viejo,¿aquiénperteneceelcastillo?—Elviejoduda—:«¿ElcastillodeElsbethstein?¿A

quién?»—Recaeensupreocupación interiory lapalabraquese leíaensus labiosmuereantesdeconvertirseenunsoplointeligible.Menealacabezayhacesignoparaquelesigamos.

Sóloalgunospasosmásallá,seabreunapoterna,escondidabajolaespesuradelossaúcosquelaasedian,ybajounaprofusiónderosas.Enelfrontónabovedadoenarcodivisolaparteinferiordeunamuyantiguapiedratallada.Elviejomelaseñalaconinsistencia.Conlaayudadeunaramamediopodridaqueherecogido,apartolasfloridasramassuperioresydescubro,esculpidoenelfrontón,unblasónenmohecido.EsuntrabajodelsigloXVI.Tieneunacruztruncada,enelbrazodelaquecreceuna rama de rosa con tres flores: una el capullo, la segundamedio abierta, la tercera totalmenteabiertayresplandecienteconunpétaloyaapuntodecaer.

Pormucho tiempo contemplo, pensativo, estemisterioso blasón. El gris de la vieja puerta depiedra,elverdedescompuestodelmusgoqueloabraza,elsingularymelancólicoaspectodelaramadelrosalconsustresfloresescalonadasensucrecimiento,metraenunrecuerdo,unpresentimientotanfuertequenonotolaausenciademiscompañeros.Cadavezmásvivamenteseimponeenmíunaimagensoñada,queluchaporinvestirmiconciencia:¡lainhumacióndemiantepasadoJohnDeeenelmágicojardíndeladeptoGardener!Loscontornosdelaantiguavisióncoincidenmásymásconlascosasquemeenvuelven.

Todavíasoypresadeunamaravilladaduda,ymeesfuerzoadisiparelhechizodemifrenteydemialma,cuandoquedohorrorizadoporunaapariciónquesedirigerepentinamentehaciamí,muyrápida, saliendo de la oscuridad del porche. Es Jane, sin ninguna duda posible. Pero su paso essilencioso, flotante y —¿cómo explicarlo?— está toda mojada. Su ligera ropa de verano estáestrechamente enganchaday formapliegues sobre su cuerpo.Su fisonomíaes rígidaygrave, casiterrible,yatravésdesusrasgosleounaadvertencia,muda,peroelocuente.

«¡Eslaacciónadistanciadeunfinado!megritamivozinterior.Luegooigopalabrasqueparecensalirdemiboca:

—¡Yaestá…Ereslibre…!¡Ayúdate!…¡Séfuerte!…—Grito:«¡Jane!»—UnembotamientoseapoderademíyentoncesyanoesJane.Antemíestáuna

mujer demajestuosa estatura y lamirada que pone sobremí no tiene nada de terrestre.Lleva unacoronaenlacabezaysumiradameatraviesacomosivinieradelfondodelossiglos,meescudriñaraeintentarapercibirdetrásmíolainfinidaddemitiempoymitenacidadarealizarme…

—¡Asíquetúestás,ReinaySoberana,eneljardíndelAdepto!…—Mislabiossonincapacesdemurmurarnadamás.

Estoy delante de la maravillosa mujer con mis ojos indisolublemente unidos a sus ojos. Unaavalanchadepreguntas,denocionesydedecisionesrabiosaseimposiblesdecontar,atropellanmipersona de carne, la sobrepasan y penetrando en el mundo espiritual engendran un formidablemaélstrom en el más allá, y llaman a la devastación y a la subversión aquí abajo, aquí abajo…EntoncesmiorejadecarneoyedemaneradistintaelvolverdeLipotineydelviejojardineroloco.Ymisojosfísicosvenalviejopararseenseco,levantarlasmanosycaerderodillas.Enmidirección,

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derodillasyconelrostroiluminado,llorando,riendoysollozandolevantalosojoshacialaMujerRealybalbucea:

—¡Alabanzasygraciasati,Reina,porhabervenido!Entretusmanospongomifatigadacabeza,milargoservicio.¡Vedcómohesidofiel!

Elhadaseinclinaafectuosamentehaciaelviejo,peroélagachalacabezaysecalla.UnavezmáslafiguraRealsegirahaciamíycreooírunavozcuyosonidoevocaaunalejana

campana:—Eressaludado…Escogido…Esperadoconesperanza…¡Todavíanoprobado!YsediríaquesuvozseafinaysemezclaconeltimbreterrestredemiJane,comopararenovar

laangustiosaamonestación:«Ayúdatetúmismo…¡Séfuerte!…».De repente lavisiónpalideceenmediodeun tumultodeclamoresqueestallanmásalláde los

muros,fueradelrecintodelpatiodelcastillo.CorroyveoaLipotinequesincomprender tanprontomemiracomotanprontomiraalviejo

jardinero inerte.Algunaspalabrasmebastan. ¡Nohavistonada,nohapercibido loquehapasado!Sólopareceinquietarleelextrañocomportamientodelviejo.

Antesdequehayatenidotiempodetocarlo,unoshombressalendelpatioyvienenhacianosotrosgritando.Nosotrosnosprecipitamosasuencuentro.Laspalabrasgolpeanmiorejacomounaresaca,ydeprontomisojosvenabajo,enel río,enmediodeunahondanada,ahídonde lacarreteragirarepentinamenteysigueuntaludcortadoaplomoenlaroca,sepercibe,bajolabrillanteespumadelasaguasqueborbollan,elautomóvildelaprincesahechoañicos…

Lentamenteme doy cuenta de lo que significan los gritos de la gente: «¡Muertos los tres! ¡Elchófer ha lanzado sumáquina al aire! ¡En pleno vacío! ¡O ha perdido la razón, o el diablo lo havuelto ciego!…». ¡Jane, Jane… mi propio grito me despierta! Quiero llamar a Lipotine. Está derodillascercadelviejojardineroqueaúnyaceinanimadoenlayerba.Éllelevantalacabezayéstame mira con los ojos de quien se le ha retirado el alma. El cuerpo resbala de sus manos y sedesplomamediodelado.Elviejohamuerto.

Lipotine me mira como ausente. Yo no puedo hablar. Mudo, señalo el río por encima delparapeto.Echaunalargamiradaenelvalle,sepasalamanoporlafrenteydice:«¡Asípues,unavezmásahogadosenelaguaverde!Ríoabrupto.Estoycansado…Ahí,¿nooís?¡Mellaman!».

***

Unequipodesalvamentoenbarcassaca losmuertosdelríoy losconduceaunlugardondelaorilla es llana… Sólo las dos mujeres, el chófer ha sido arrastrado río abajo. Nunca se hanencontradoloscadáveresqueelaguaabraza,medicen,desciendensinemergerhastaellejanomar.Pienso con horror que podré ver la descompuesta máscara de muerto de mi primo John Rogermirarmefijamentedesdeelsenodelasolas…

Pero lomás horrible es queme pregunto: ¿ha sido un accidente?…es una pregunta lacerante.¿CómopuedeserqueelpuñaldeJaneestétanprofundamentehundidoenelpechodelaprincesa?¡Elcorazónhasidoheridoconungolpemortal!

Elhierrodelanza,asíquisieracreerlo,hasidoproyectadoalcorazónporlacaídadelvehículo…Durante mucho, pero mucho tiempo, contemplo, también yo casi semejante a un cadáver, los

despojosde lasdosmujeres.LacaradeJane,comosidurmieraun ligerosueño, respiracontento,

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unapazindecible.Latranquilabellezadesuformadifuntairradiacontanconmovedorafuerzaquemis lágrimas se secan, y querría invocarla: «SantoÁngel guardián demi vida, ruega pormí, demaneraquepuedasoportar…».

La princesa tiene un rasgo duro en la frente. Sus labios, severa y dolorosamente cerrados,parecenretenerungrito.Casisetienelaimpresióndequetodavíaviveyquepodríadespertarsedeunmomentoaotro.

Débilessombrasdebidasalbalanceodelosárbolesmovidosporelvientosedeslizansobresuspárpados,obien,¿loshaabiertoyvueltoacerrardeimprovistocomosisedieracuentadequepodíaverla?¡No,no,estámuerta!¡¡¡Tieneelpuñalclavadoenelcorazón!!!Después,amedidaquepasanlas horas, la tensión se relaja en los rasgos de lamuerta, y una expresión felina y repugnante ladesfigura.

Desde las exequias de las dosmujeres ya no he visto a Lipotine. Pero lo espero en cualquierinstante,yaquemehadichoaldespedirsedelantedelportaldelcementerio:

—¡Esahoracuandotodoempieza,nobleamigo!Ahoraseveráquiéneselamodelpuñal.Contadsóloconvosmismo;tantocomoseaposible.Mientrastantosigosiendovuestroobedienteservidoryvendré a informarme, en su momento, de lo que puedo hacer por vos. Los Dugpas rojos, entreparéntesis,handenunciadomicontrato…loquesignifica…

—¿Ybien?—hepreguntadodistraído,yaquemitristezaporhaberperdidoaJanemeahoga—.¿Ybien?

—Puesbien,significaeso…Lipotinenohaterminadosufrase.Simplementehahechoelsignodecortarseelcuello.Como… quería preguntarle, horrorizado, lo que entendía por ello… ha desaparecido en la

baraúndaquetomabaelasaltoeltranvíaregular.Desdeentoncespiensoamenudoenestaspalabrasygesto,perosiempremepregunto:¿erareal?

¿No lo he imaginado? Estos incidentes se adhieren en mi memoria con otros simultáneamentevividos…

***

¿CuántohacequeheenterradoaJaneyaAssiaChotokalouguineunaalladodelaotra?¿Cómosaberlo?Nohecontadolosdías,nilassemanas,nilosmeses,anoserqueseanaños.Hayundedodepolvo sobre todos los objetos y los papeles esparcidos ami alrededor; las ventanas se hanvueltoopacas,yasíesmuchomejor,yaquenoquierosabersiestoyenmiciudadnatal,osi,convertidoenmiantepasadoJohnDee,estoyatrapadocomounamoscaenlareddeuntiempoestático.Avecesmeviene un curioso pensamiento: ¿quizá ya estoy muerto desde hace tiempo, quizás ya reposo, sindarme cuenta, en la tumba cerca de las dos mujeres? ¿Quién me asegura que no es así? Cierto,alguienmemiraenelapagadoespejocolgadoenlaparedantemí.Alguienquepodríaseryo,conuna larga barba y mechones de cabellos en desorden. Pero ¿no puede ser que los muertos seimaginenque sevenenunespejo, que estánvivos? ¿Sabemos si, desde su lado, ellos tienena losvivospormuertos?No,notengoningunapruebadequeestérealmentevivo.Siquierotorturarmeelcerebro y remontarme al momento en que estaba ante la tumba de las dos mujeres, llego apersuadirme que, al mismo tiempo de volver a casa, he licenciado a mi personal y escrito a miantiguagobernanta devacacionesqueyano tenía necesidaddevolver, que le hacía cursar pormi

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banco una renta vitalicia. Puede ser que todo esto sólo lo sueñe, pero también puede ser que estémuerto,quemicasaestévacía.

Unacosaes segura: todosmis relojesestánparados:unoa lasnueveymedia,otroa lasdoce,otrosahorasquemesonindiferentes.Telasdearañaentodaspartes,entodas.¿Dedóndehanpodidovenirestosmilesdearañasenestecortolapsodetiempo…digamosunsiglo?o,¿sóloesunañoparaloshombresquevivenfuera?Noquierosaberlo,¿quéimporta?

Ydespués,¿dequéhevivido?Estepensamientomeagita.Quizá, sipudieraacordarme, tendríaunapruebadesiestabamuertoono.Reflexionoyrecuerdo,comoquienrecuerdaunsueño,haberdeambuladoamenudodurantelanoche,porlassilenciosascallejuelasdelaciudad,habermesentadoentascasycuchitrilessiniestros,tambiénhabermeencontradocongenteconocidayconamigosquemehanhablado.Peroyanosésiherespondidoniquéherespondido.Creoquehepasadoasuladosindecirpalabra,paranovolveralaconcienciayaldolordehaberperdidoaJane…Sí,sí,debeserasí.Hevividoaldíaenelreinodelosmuertos,enunsolitarioreinodelosmuertos.Peroestémuertoovivo,¿quéimporta?…

¿YsiLipotinetambiénestabamuerto?¿Peroporquépensarenello?Muertoovivoeslomismo.Decualquiermanera,esseguroyciertoquenohavenidoavermedesdeentonces.Sino,laúltima

imagenque tengodeél en lamemoriano sería ésta:Lipotine sepierdeentre lamasaenfrentedelcementerio después de haberme dicho brevemente algo que he olvidado, referente a los Dugpastibetanos;yhecho,además,elgestodecortarselagarganta.¿AmenosquetodoestonohayapasadoenElsbethstein?¿Quéimporta?QuizáshavueltoaAsiaysehatransformadodenuevoenelMasceedeJohnDee.Sí,tambiényo,porasídecirlo,hesalidodelmundo.Noséloqueestámáslejos:¡iraAsia o entrar en el país de los sueños dondemehallo!…Es posible que hoy sólomedespierte amedias, para encontrarmi interior tan descuidado como si hubiera soñado delante de una ventanaduranteunsiglo.

Unrepentinomalestarmeinvade,micasamedalaimpresióndeserunanuezroídaensuinterior,herida por un moho polvoriento en el que, como un gusano sin pensamiento, he vivido enhibernación.¿Porquéesterepentinomalestar?mepregunto,yunbruscorecuerdomemartiriza.¿Nohasonadounestridentesonidoalmismotiempo?¿Encasa?¡No,noencasa!¿Quiénpodríatocareltimbredeuna casa abandonada?El timbrazohadebido sonar enmisorejas.Leí unavez en algúnlado,queel sentidodeloídoeselprimeroendespertarseen sujetoqueyacíaenestadodemuerteaparenteyvuelvea lavida.Degolpemedoycuenta,yme lopuedoexpresaramímismo,queheesperado, esperado y esperado, durante no sé cuánto tiempo, el retorno de lamuerta Jane, Día ynochemehearrastradopormihabitacióndeunsitioaotro,yhe rogadoalcielode rodillasydepuntillasparaquememostraraunsigno,durantetantotiempo,queheperdidolanocióndelpasodeltiempo.

No hay ningún objeto que habiendo pertenecido a la amada no lo haya elevado al rango defetiche,alquenohayadirigidolassúplicasmás locasparaquemeayudeaforzaraJaneparaquevuelva aquí, para llamar a Jane de la tumba. Para que envíe a Jane para liberarme del hacha delverdugoquemeamenaza,quesincesarestásuspendidaencimamío.¡Oh,quévanohasidotodoello!Jane,nosehadejadover,nomehadejadopercibirsupresencia,amí,quesoysuesposodesdehacetressiglos.

Janenohavuelto,pero…¡AssiaChotokalouguine!Apartirdeahora,desdequehesalidodemiletargía, según parece, almenos de la letargía del olvido, lo sé de golpe:AssiaChotokalouguine

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siempreestáahí,estáahí…Al principio, sí, al principio ha venido por la puerta, y he comprendido rápido que era inútil

cerrársela. ¿Dónde el cerrojo de la tumba no protege, de qué utilidad podría ser la llave de unahabitación?

Cuandopiensoenmiestadodeánimocuandovenía,nopuedodisimulármelo,suvisitameera…¡agradable!Estafalta—ohtú,rostroeternoquemeobservasnocheydíamediantetudoblefaz,desdequetesueñobajoelesplendordelcarbúnculo,hastaelpuntoquelosojosmehacendañocuandomeatrevoaafrontartumirada—quieroreconocerlaantetiyantemímismo.Sóloinvocaréenmifavorun argumento.He creído queAssia Chotokalouguine era unmensajera enviada por Jane desde elreinodelosmuertos.Estabalosuficientementelococomoparacreerquemetraeríaunemensajedelamor,unmensajedelalma…

Assia viene cada día, lo sé, desde que mi memoria se ha despertado. Desde hace tiempo nonecesitalapuertaparaintroducirse:¡sencillamenteestáahí!

Lamayorpartedeltiemposesientaenlasillaantemimesay…¡oh!Dios,Diosmío,esinútilelquerercallarmelarealidadamímismo:havenidoysiemprevienevestidaconlamismaropanegrayplataqueevocamediantelosdibujosdeolasinalcanzableselsímbolochinodelaeternidaddelarcadeToula,esaobramaestradelaorfebreríarusa.

Contemplosincesaresta ropaybajomiconcupiscentemiradasehavueltovieja,muyvieja,ycadavezmástransparente,comosiquisieradisgregarse,estirilizarseconelardordemisojos.Nocesadereducirse,latramadelaropadelaprincesamuertacadavezestámásusada.Algúntiempodespués,caeylaprincesa,omásbienIsaíspónticaestásentadadesnudayresplandecientedebellezaenmisillón,antemí.

Durante este tiempo no he hecho otra cosa que alimentar mis ojos, durante horas, con lapolvorientadesintegracióndeestevestido.Es,almenos,deloquequieropersuadirme.¡Quizálohedeseado!¿Omementiríaamímismo?Esposible,yaquenohemoshabladodepasión.

En resumen, ¿hemos hablado juntos? ¡No! ¿Cómo habría podido hablar almismo tiempo queasistía en el transcurso de estas largas horas al progresivo descubrimiento de la desnudez de laprincesa?…

Ysinembargo,túeldoblerostroencimamío,túeltemibleguardiándemissueños,tú,Baphometdemialtura,sémitestimonioanteDios:¿hesidolujurioso,onoeramásbienunaetapadeestupor,de voluntad de lucha, de curiosidad odiosa? ¿He acechado a Jane, la santa? O al contrario, ¿hellamadoalamensajeradeIsaíslaNegra,lacómplicedeBartlettGreen,ladevastadoradeJohnRogerydemipropiasangre?

Cuantomás ardientes han sidomis llamadas a Jane,más rápida,más cierta,más floreciente ytriunfantehaaparecidoAssiaensubellezadeorooscuro.Havenido…siempreviene…

Lipotinemelohapredicho.¿Nomehadichoquelaguerraempezaba?Estoyresueltoyarmado,peronosécómohaempezadolabatalla.Suimponderablepreámbuloperteneceaunperíodoqueheolvidado.Nosécómosedesarrollaráelcombatenicómopuedeserganado.Temoelasaltoquedeboconducir, pues no quiero golpear en el vacío y por ello perder el equilibrio… Temo esta mudaparada,unofrentealotrodurantelosdíasydías,eltruequedemiradasydefluidosnerviosos…

Tengo miedo, un miedo indecible. Siento que a cada minuto que pasa la princesa puedevolvérsemevisible.

Unavezmáslaestridenciadeuntimbre…Escucho,noesenmioreja,comocreílaprimeravez

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quesonóeltimbre.Eseltimbredelrecibidor…ypeseaellodenuevosoypresademiespanto.Estesonidomelanzafuerademiasiento,aprietoelbotóneléctricoqueabrelapuerta,meprecipitoalaventana,miroabajoydosestúpidosgamberrosselargancorriendocalleabajo,sorprendidosensuniñería.¡Esunatontada!

Ysinembargomiespantonocede.La puerta de entrada ha quedado abierta,medigo, yme sientomal con la idea de que estoy a

merced del impertinentemundo, de que, de golpe, toda la demencia y la indiscreción de la calletienenaccesoamividayamisecretocelosamenteguardado.Quierobajaryencadenarlapuertaparasiempre,entoncesoigounpasoenlaescalera,unpasoconocido,rápido,ligero,elástico.¡Lipotineestá delantemío!Me saluda con un irónico guiño de sus párpados, que siempre cubren sus ojosmediocerrados.

Sólointercambiamosunoscuantoscumplidos,comosinoshubiéramosvistoayerporúltimavez.Hapermanecidoenelumbraldemidespachoyhueleelairealamaneradeunzorroqueencuentralaentradadesumadrigueravioladaporunahuellaextranjera.

Nodigonada,melimitoaobservarlo.Me da la impresión de que ha cambiado, aunque es difícil de describir en qué consiste este

cambio.Casipodríadecirsequenoesél,sinodealgunamanerasudoble,desprovistodesustancia,espectral,extrañamentemonocordeen todassusmanifestaciones.¿Quizáestamoslosdosmuertos?Ésteeselcuriosopensamientoquemeviene.¿Quiénsabecómolosmuertossefrecuentan?¿Quizá,sí,quizásusrelacionesnosondiferentesdelasdelosvivos?Llevaensucuellounpañuelorojoquehastaentoncesnuncalehabíavisto.

Mediosegirahaciamíymurmuraconextrañoardor:—Estoseacerca…—CasiqueyaescomosiestuviéramosenlacocinadeJohnDee.Laextrañavozsuenacomoundiscordantesilbidoatravésdeunacánuladeplataymecausafrío.

Casisediríaqueeselpenosodiscursodeunenfermodelaringeapuntodemorir.Lipotinerespondeconunasarcásticasatisfacción:—Estoseacerca…Noloentiendo.Nolocomprendo.Estoyprisionerodeunindescriptiblehorrorysinreflexionar,

sinsaberloquemispalabrasdicen,antesdeoiríasvibrarenlahabitacióncomosiemanasendeotro,grito:

—¿Soisunfantasma,Lipotine?Segirabruscamente,susojoscentelleanconunaluzverdosayresuella:—Vossoisunfantasma,nobleamigo,segúnpuedover.Yosiempreestoyconformeamirealidad.

Bajoeltérminode«fantasma»seentiendelomásamenudounmuertoquevuelveounapartedeunmuerto.Todoelqueviveen la tierra sóloesunoquevuelve,porelhechodesunacimiento, todovivo es así un fantasma. ¿No es cierto? La muerte no determina nada, nada esencial.¡Desgraciadamentesóloelnacimiento!Ésaesladesgracia.¿Ysihablásemosdealgomásimportantequelavidaolamuerte?

—Tenéisdañoenlagarganta,Lipotine,¿desdecuándo?—¡Ah! ¡Ah! Hum, es decir…—una horrible tos interrumpe sus palabras, luego, visiblemente

extenuado,continúa—esdecirpocacosa.¿OsacordáisdemisamigosdelTíbet?Bien,puesentoncestambiénsabéisloqueosdijeentonces.

Reiteraelinequívocogestodepasarselamanoporlagargantacomohabíahechoenlapuertadel

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cementerio.¡Elpañuelorojo!Unrelámpagocruzómimente.—¿Quiénoshacortadoelcuello?—balbuceé.—¿Quién sino el maestro carnicero rojo? ¡Una criatura sin miramientos, ciertamente! Me ha

querido ejecutar por orden de los dadores de pan a las innumerables ramificaciones. Pero haolvidadoenlaembriaguezdesuminúsculotino,quenuncahetenidosangreenlasvenas.Asípues,ha realizado un trabajo inútil, si no vano del todo. ¡Simplemente ha conseguido herirmi belleza!Pffffiii…—lasecarespiracióndeLipotinesilbaatravésdelacánulayvuelvelacontinuacióndesudiscurso incomprensible—. Excusad esta falsa nota en mi melodía —añade cuando el aliento levuelveyseinclinahaciamíconcortesía.

Soy incapazderesponder.Ademásmeparecequeveodetrásde lososcuroscristales,elpálidorostrodelaprincesaquenosespía.Elhorrormehielalanucaynoquierecederalacalma,alreposoqueconviolenciameesfuerzoenimponeramisnervios.RápidamenteruegoaLipotinesesienteenel sillón en el que estoy acostumbrado a ver sentada a la princesa, yme agarro secretamente a laridícula esperanza de que Assia, al encontrar su sitio ocupado, cesará sus visitas. Me pareceimposiblepodersoportarlavistadedosfantasmasalavez.Elúnicopensamientoquemetranquilizaunpocoesquenodeboestarmuerto,puessino,nopodríapercibircontantaprecisiónqueambosnoestán vivos… Pero Lipotine parece haber adivinado el curso de mis reflexiones, pues me dice aquemarropa:

—¿Realmentenopodéisdaroscuenta,nobleamigo,queunoyotrohemosprogresadohastaelpunto de no saber si estamos muertos o no? Nadie, en nuestra situación puede saberlo. ¡No hayninguna prueba!… ¿Que percibáis elmismomundo exterior que antes, es una prueba? ¡Puede serpuraimaginación!¿Cómosaber,porotraparte,siantes,nohabéisimaginadoigualmenteestemundoexterior?¿EstáisabsolutamentesegurodequevosyyonohemosmuertotambiénenelaccidentedeElsbethstein, y que vos sólo habéis imaginado que conducíais a vuestra prometida al cementerio?¿Podría ser,no?¿Sabemos loquehayalprincipiodeuna representación imaginaria?No,no, esta«supervivencia» es un poco diferente de la que dicen los que, en verdad, no saben nada, pero tanprontocomoselescontradice,sabenmás…

Enéstas,Lipotineenciendedeprisaunnuevocigarrillo.Mirosesgadamenteydeescondidasasucuelloparaver sino seescapaelhumoa travésdelpañuelo rojo…Entoncesempiezadenuevoagraznar:

—¡Adecirverdad,debéisestarcontentodemí,nobleamigo!¡Elmalquehesufrido,creoquelohe ganado a vuestro servicio!… Si no me engaño, el envenenado polvo de mis filantrópicostibetanos,oshaprestadounbuenservicio.Comomiembrodesucofradía,habríadebidooponerme.Asípues,queridoprotector,hemossidolosdosgratificadosconunaheridacondenadamentedifícildecerrar.Lavuestranoestáenelcuello,sinoenelcentronerviosodonderesideeldiosdelsueño.Laválvulayanocierrabien,demaneraqueyanosabéissiestáismuertoono.Noospreocupéis,nosóloesunaavería,tambiénesunasalidahacialalibertad.

Tambiényoheencendidouncigarrillo,esreconfortantesentirseeltabacoentreloslabioscuandosedebedominarlafiebredelhorror.Meoigopreguntar:

—Decídmelodefinitivamentesinrodeos,Lipotine,¿soyunfantasmaono?Agachalacabeza.Suspesadospárpadossecierran,porasídecirlo.Luegoyerguebruscamenteel

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busto:—Sóloquienposeelavidaeternanoesunfantasma.¿Poseéisvoslavidaeterna?No,sólotenéis,

como todos los hombres, una existencia indefinida, ¡es muy diferente!… Pero hacéis mal alinterrogarme sobre cosas que no podéis comprender antes de poseerlas. Ya que sólo se puedecomprender lo que ya se tiene. Nunca nadie se ha enriquecido preguntando. Vuestro objetivo enrealidadeseste:¡queréissabercómosehaceparatenercomercioconlosfantasmas!…

Echó una ojeada por encima de sus hombros hacia la ventana, e hizo el gesto de dibujar uncírculo.Elairepuestoenmovimiento levantóunanubeconelpolvoquecubría lospapelesdemiescritorio,altiempoqueunmuyantiguoypenetranteolor,quecondujoamisoídosuncacareodecornejasespantadas,unrenqueardevenerablesbúhosenunatorre.

—Sí,esverdad,Lipotine,dijeabriéndomederepente.Losabéisconcreces:tengocomercioconfantasmas…esdecir,veo…ahí…enelsillónenelqueestáisenestemomentosentado…cadadíaveounaforma…¡veoalaprincesa!…¡Vieneaverme!Estáahícuandoleplace…mepersigueconsusojos,consucuerpo,contodosuinevitableser.Meenvuelvecomohacenlosmilesdearañasdeesta habitación con las moscas. ¡Ayudadme, Lipotine, ayudadme! Ayudadme, que yo no… que yono…

Estaconfesión,cuyaexplosiónnohepodidoimpedir,semejanteaunaimprevisibleeinvoluntariarupturadeundique,mecausa talconmociónquemedesplomoal ladodeLipotine, implorandoalviejoanticuarioconmisojosempañadosdelágrimas,comosifueraunmisterioypoderosomagodecuento.

Lentamente,supárpadoizquierdoseabreysuspulmonesinspirantanprofundamenteelaire,quedenuevoleoigosilbarlacánula.Luego,mientraslasvolutasdelhumoenvuelvensurostroconsuneblina,mediceconvozbajayronca:

—Avuestroservicio,nobleamigo,yaque…—suinquietamiradasedeslizasobremí…—yaqueseguísestandoenposesióndelpuñal,supongo.

DeprisacojoelarcadeToulademimesaydoyjuegoalresortesecreto.—¡Ah, ah! refunfuña burlonamente Lipotine, ¡perfecto! Ya veo con qué cuidado guardáis los

legadosdeHoelDhat.Sealoquesea,osaconsejoescogerotrolugarparaestajoyadefamilia.¿Nose os ha ocurrido que existe una cierta… no digamos afinidad, digamos simplemente una ciertaanalogía entre esta arca y la ropa terrestre que vestía nuestra muy querida princesa? No esrecomendablemezclarlossímbolos,ellocreaunaconfusiónentrelasfuerzasquelossostienen.

Enundestellodesemiconciencia,sacoelpuñaldelarcacomosiasípudieraromperelembrujoquemetieneprisionerodesdehacedías,semanaso,¿años?PeroLipotine,conunamueca,mehaceperderinstantáneamenteelcorajedemataresefantasma.

—Sólo estamos en los rudimentos de la magia, mi querido benefactor, —se burla con sudificultosaysilbanterisa—.Todavíanosdetenemosenloexterioraunquelodescuidamos,comoelalquimista novato que se equipa de pies a cabeza pero no observa las condiciones atmosféricas;además,nose tratadeconquistar lacima—comoseesfuerzan losascetas—sinodesobrevolarelmundoy…lahumanidad.

Aquíabandonotodasmisdobleces,todainquietudydigoresueltamente:—Meayudaréis,Lipotine,losé.Sabed,pues,esto:hellamadoaJanecontodasmisfuerzas.¡Pero

noviene!¡Ensulugarvienelaprincesa!—En magia —cortó— sólo viene lo que tenemos más cerca. Y lo más cerca para nosotros

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siempreesloquepermaneceennosotros.Esporelloporloquehavenidolaprincesa.—¡Peroyonolaquiero!—¡Grancosa!Ellahueleloeróticoenvosyenvuestrallamada.—¡Apesardeello,Diossabequelaodio!—Excelentemedioparaalimentarla.—¡Leconsagrolaspeoresmaldicionesdelúltimocirculodelinfierno,elquelecorresponde!La

abomino,laestrangularía,lamataría,sipudiera,sisupieracómo…—Enesefuegoellasesienteamada.Nosinfundamentoporloqueparece.—¿Creéis,Lipotine,quepodríaamaralaprincesa?—Yalaodiáis.Unplanosuperiordemagnetismo.Odeinclinación,segúncomoloatestigüenlos

doctos.—¡Jane!—grité.—Un grito peligroso —me interrumpe Lipotine poniéndome en guardia—. La princesa lo

captará.¿Nosabéis,nobleamigo,quelaenergíavitaldeloeróticoenvossellamaJane?¡Unabellacorazadealgodónpólvoralaqueosponéis!Quizásosmantengacaliente,perotambiénesunpocopeligrosa.Puedeprendersederepente.

Albordedelsíncope,cojolamanodeLipotine:—¡Ayudadme,viejoamigo!¡Debéisayudarme!Lipotinemiraaviesamenteelpuñalqueentrenosotrosdescansasobrelamesaygruñedudando:

«Creoquehabrédehacerlo».Unindefiniblesentimientodedesconfianzatomacadafibrademicerebroyalargolamanohacia

el arma.La aprieto contramíyno la pierdodevista.Lipotinenoparecedarse lamenor cuentayenciendeunnuevocigarrillo.Desdesunubedehumoempiezaadecir:

—¿ConocéisalgodelamagiasexualdelTíbet?—Sí,unpoco.—Entonces sabéis quizá que es posible transformar la energía sexual del hombre en poder

mágico,medianteunadisciplinaasiáticallamada«VajroliTantra».—«¡VajroliTantra!»—murmurépensativo.Recuerdohaberleídounavezalgosobreelloenun

curiosolibraco.Nosénadapreciso,perointuyoquedebetratarsedeunprocesoqueponelospelosdepunta,enoposicióndirectaalasensibilidaddelhombre;deunsecretoque,nosinrazón,todoslosqueloconocenguardanestrictamente.

—¿Unritodeexpulsión?—arriesguéconaireausente.—¿Expulsarelsexo?¿Quéquedaríaentoncesdelhombre?¡Nilaformaexteriordeunsanto!¡No

sepuedeanularloselementos!Asípues,estotalmentevanoelquererexpulsaralaprincesa.—Lipotine,noes en laprincesa,vos lo sabéismuybien, enquienpienso tantasy tantasveces.

Es…Elespectrodelanticuariomerespondetemblando:—¿QueréisdecirquéeslaIsaíspóntica?¡Noestámal!Noestámal,nobleamigoybenefactor,¡Y

notanlejosdelfinal!—QuesetratedelaIsaíspónticaodelanegramadredeBartlettGreenhartadelasangredelos

gatos escoceses,meda igual.Tambiénunavez se presentó a quiendebía de ser suvíctima con elnombredeLadySissy.

—Sealoquesea,—tercióLipotineparadesviarlaconversación—,esoquesesientaantevos,en

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estesillónqueahoraocupamimodestapersona,esmásqueunfantasma,másqueunamujerviva,másqueunídoloveneradoantañoyahora,despuésdelossiglos,olvidado.Eslaseñoradelasangredelhombre,y¡quiénquierevencerladebehabersuperadolasangre!

Involuntariamentemellevolamanoalcuelloypercibo,netamente,elfebrileimpetuosobatirdemis arterias, como si cada golpe quisiera transmitirme unmensaje. ¿Quizás es el salvaje grito dealegríadeunaentidadextranjeraqueheincorporadoenmí?Entoncesclavomimiradaenelpañueloescarlatademiinterlocutor.Lipotineagachalacabezaconairecomprensivoyamigable.

—¿Habéissuperadolasangre?—murmuro.UnLipotinegris,viejísimo,caducoytosiendoarticulaconpena:—Habersuperadolasangre,nobleamigo,equivale,ocasi,adeslizarsepordebajodelasangre.

Haber superado la vida o no haber nunca vivido, decidme vos, ¿Dónde está, a fin de cuentas, ladiferencia?Nohayninguna.¿Noesverdad?…¡Ninguna!

Estaspalabrasresuenancomoungrito,comounapreguntasurgidadeunadesesperanzaapenasvelada, como una angustia que intenta cogerme con su senil y frío puño. Pero antes de que hayaconseguidodescortezaresainsólitapregunta,Lipotinesemesaloscabellos,seyergueensuasientoysusiniestrarisaemanadadelpañuelorojo,borrarápidamenteenmílaextrañaimpresión…seinclinahaciamiymesoplaconunajadeanteenergía:

—Dejadme deciros que en el reino de Isaís y deAssia Chotokalouguine, se está en elmismocentrodelavidadelasangre,fueradelacualnoexisteningunasalida,nomásaquíqueen«elotrolado», ni para el eminente Maestro John Roger, ni para vos, mi querido benefactor. Actuad enconsecuencia,osloruego.

—¿Ylaliberación?—exclamo,poniéndomedepie.—«Vajroli Tantra», —me responde tranquilamente mi huésped envuelto en el humo de su

cigarrillo.Medoycuentadequecadavezquepronunciaestenombredisimulaasísurostro.—¿Quées«VajroliTantra»?—preguntoabruptamente.—LosgnósticosdelaantigüedadlohanllamadoregresióndelcursodelJordán.Loqueporello

entienden podéis fácilmente adivinarlo. Pero sólo se refiere a la pasablemente obscena acciónexterior.Si no sois capazdedescubrir por vosmismoel secretoque esconde, sólo recibiréis unanuezvacía,amenosqueyonointenteencarrilaros…Laprácticaexterior,sineltrabajointerior,eselmóvildelamagiaroja,quesóloengendraunfuegoinextinguible.Lahumanidadnilosospecha,secontentacondivagardevezencuandosobrelamagiablancaylanegra.Yelsecretoprofundo…

De repente, casi enmedio de una frase, el discurso deLipotine se transforma en un aceleradoretorneloque,pronunciadosinacento,evocalasfórmulasdeoracióndeunlama.Tengolaimpresiónquenoesélquienhabladesdesupañuelo,sinounpersonajeinvisibleylejano:

—Separar lo que está atado. Reunirmediante el amor lo que está separado. El amor triunfa atravésdelodio.Elodiotriunfaatravésdelaimagen.Laimagentriunfaatravésdelconocimiento.Elconocimientotriunfaatravésdelno-conocimiento.AsíeslaPiedradelvacíoadamantino.

Laspalabrasdesfilanantemíynopuedoatraparlasnialvueloniretenerlas.PoruninstantemeparecequeelBaphometestáalaescuchaporencimamío.Merecojo,quieroacecharconél.Peromiorejasiguesiendosorda.

Cuandolevantolacabeza,desanimado,Lipotinehadesaparecidodemihabitación.¿Estabaenellarealmente?

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***

Acaba de transcurrir un «tiempo» que no hemedido. Sin dudarlo he dado cuerda a todosmisrelojesyahoraoigosuconcienzudotictac,aunquecadaunomarcaunahoradiferente,yaquenohequerido tocar las agujas. Me parece que verlos distribuir el tiempo cada uno a su manera estáconformeami extraordinario estadode ánimo.Paramí, losdías sólo sedistinguende lasnochesporquelaluzsucedealaoscuridad.Séquehedormidocuandomedespiertoenalgúnsillóndemicasa.Además,esposiblequesehagadenocheamialrededorytambiénqueuntristeyfríosolsefiltreatravésdelossucioscristalesdemisventanas,quelejosdedifundirlaluz,llamanmásbienainnumerablessombrasaunavidafantástica,dentrodemihabitación.

Elhechodeponerporescritomirecienteexperienciaconelespectro«Lipotine»noconstituye,losé,unapruebadequevivoo,comodicenloshombres,dequeestoymuerto.Apesardetodomeciñoaesteactoyquieroperseverarenél.Quizásóloimaginoqueescribo,cuandoenrealidadgraboenlaplacademimemoria.¿Dóndeestáladiferenciaenelfondo?

Lanociónde«realidad»semeescapa,perolade«Yo»todavíamás.Sí,mediantemisreflexiones,intentodefinirloquecaracterizabaese«Yo»antesqueLipotine,anunciadoporeltimbrazodeesosdosgamberretes,aparecieraamivista,sólopuedodecirqueeraelinconsciente.Ysinembargo,notengoestesentimiento.¡Apesardetodonoeralainconsciencia!Peronopuedoacordarmedeloquehapasado,deloquehevividoenesasdisposicionestanextraordinariascomoeranlasmías.¿Habíasucedido en el plano de la vida eterna? ¿Cómo habría podido entonces, volver de la Eternidad alIndefinido,siningunacriaturapuedepasardelunoalotrosobrevolandoelabismoquelossepara?¡QuizáJanehaaccedidoalaEternidaddemaneraqueyanooyemigrito!¡LallamoenelIndefinidoyensulugarvieneAsiaChotokalouguine!

Cualeramiestadodeánimo,mepreguntéderepente.Cadavezestoymássegurodehabersidoiniciado,porunsersituadomuyporencimade lacondiciónhumana,enunsaber,enarcanos,quequizásundíaemergeránamiclaraconciencia.¡Oh,sisólotuvieraunfielconsejero,comoantañolotuvo mi antepasado John Dee, de quien he heredado la esencia y la naturaleza, en la persona deGardener,su«Asistente»!

Lipotinenohavuelto.Nolamentosuausencia.Loqueteníaquetraerme,melohatraídotanlealcomodeslealmente.¡Uncuriosomensajerodelodesconocido!

He meditado largamente en lo que me ha aconsejado y creo sospechar un poco del sentidoprofundodel«VajroliTantra»,pero¿cómohallar lavíaparaponerloenpráctica?Meesfuerzoenmirarlodesde todos losángulosynoconsigoexpulsardemimentepalabrasdeLipotine sobre laimposibilidaddeescapardeldominiodelsexo.

Quieroseguirconsignandodíaadíaloseventos,perosinponerlesfecha.¿Dequélesirveaundifunto,aunespíritu,tenerunaefemérides?¡Quémeimportanlasconvencionesdelahumanidad,deahíafuera,ysucalendario!Meheconvertidoenelfantasmademipropiacasa.

Lacuriosidad,sindejardeladounextremocansancio,medevora.¿SonlossignosprecursoresdelavenidadeAssiaChotokalouguine?

***

Acabodevivirmiprimeranochedeconcienciaclara.

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¡No, no es por casualidad que una tan gran fatiga me abrume!Me ha permitido fortalecer lainquebrantabledecisióndeintentarelprimerataque.Queríavencerelsueño,quemerodeabaporahícerca, expulsando el veneno mediante el contraveneno. Por eso, he llamado a la princesaChotokalouguine,elcontraveneno,ynoaJane.

Aunquenohavenido, laesperaba.Nomehaobedecido.Sehaescudadodetrásdelvelodemissentidos.Detrásdelvelo,desdedondeperciboclaramentesuacechanza…

Despuésdetodo,asíestábien.Muybien.Enefectoestaaventuraconlaenemigamehaayudadoaconcentrar mucho más todas mis fuerzas en ella. Sentía, cada vez más, subir en mí el odio queaguzabala«miradadelDragón»,¡almenoslocreía!

Sinembargo,estanocheherecibidounaterriblelecciónque,doygraciasamibuenaestrella,mehallegadoenelmomentooportuno.¡Elodioquesobrepasasumeta,sedesvanece!

Solamente el odio me ha tenido despierto esta noche. Y este creciente odio ha bastado paraestimularmicapacidaddevigilia,delamismamaneraqueunadosisdobledevenenogalvanizauncuerpoamodorrado.Enunmomentodado,mehafaltadolafuerza.Miodio,queyanoaumentaba,haempezado a resbalar como arena entre mis dedos abiertos. Instantáneamente mi vigilia se hadescarriado en la cada vez más espesa y más cercana niebla de la delicuescencia mental y de laindescriptible dejadez, que es la hermana de las remisiones perezosas, de las dejaciones y de laslujuriasindiferenciadas.¿Assia,noestáamialrededor?¡Nolahevisto!

Antesdelalba,unsemi-deliriomehaempujadolocamentedehabitaciónenhabitación.Noqueríausarningunode lossecretos,de las técnicasdecontrolde lavoluntad.Miserableydesmoralizado,conelcorazóninquietoporlaangustia,meheabandonadoalaobtusaimpulsiónmecánicadelucharcontraelsueñoqueeneseinstanteintentabaponermesucaretaanestésica.Ycomonodebíavencermeantesdelasalidadelsol,paranoperderlaautoridadsobremicuerpo,corríadeaquíparaalláenunaincesanteagitación.Sóloasíheconseguidonocaerindefensoenlatrampadelaacechanteenemiga.

Cuando por fin la aurora coloreó los cristales de mi ventana, me hundí en medio de miconvulsiva fiebre ymedesperté, bien entrada la tarde, sobremi otomana, con el cuerpo roto y elalma acabada, por haber presumido demasiado demis fuerzas…He comprendido que también sepuedesucumbir,perderse,superandoloslímitesdelaresistencia.

Tengotresdíasparainculcarmeestalección.Melodiceunprofundosentimiento,vengadedondevenga.

Hecomenzadoeltrabajoydebollevarloasutérmino.ÉstassonlasdirectricesdeLipotine…¡Lipotine! Después de muchas horas, de repente, me sorprendo pensando en él y en sus

intenciones.¿Sehaconducidocomoamigoalaconsejarmeeindicarmecontantocelolosmétodostántricos???

***

¿Cuándo he escrito estas últimas palabras seguidas con tres puntos interrogativos? En dondeestoy,el tiempoyanotranscurre.Loshombresde la tierrasoleadaquizádirían:hace tresocuatrodías.Peromuybienpodríatratarsedeaños.

***

Eltiempoyanotieneningúnsentidoparamí,laescrituratampoco.Mebastaqueestareseñahaya

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preservadoelpasadoparadirigirlo sumetaenelpresenteeternodelBaphomet.Ahorabien,en laclaridaddelarealizaciónenlaquehabito,rememoroelrelatodelosúltimoserrores,delasúltimasperipeciasdemividaterrestre.

Laterceratardedespuésdeesedíaenelquemehabíadespertadosabiendoquenohabíavencido,estaba,porsegundavez,«presto».

¡Oh,cómomeaseguréquenomehabíavestidoconla«corazainfamedelodio»paraesperarlaenemiga!Llenodeunaorgullosaconfianzaenmímismo,meremitíamivoluntad,endurecidaporelVajroliTantra, ymebasé en el saber que imaginabahaber adquirido en estos últimos«tres días»,referente al sentido oculto de este velado método. No había conseguido reunirlo todoconceptualmente, pero creía haber llegado a captar lo esencial por el instinto y lo afectivo. MiesfuerzoconsistíaenpensarenlaprincesaAssiaChotokalouguinecontodaelalma,sí,inclusoconunaciertabondad.Nolallamabaconrudeza,lainvitabaaunaconfrontacióndigamosrazonable.

No vino. Velé. Una vez más intenté detectar, detrás del velo de mis sentidos, a esa acechantecorruptora.Tampocoestabaallí.Enlostresmundosreinabaunsilenciodulzón.

Me ejercité en la paciencia, pero bien pronto experimenté la impaciencia que amenazaba conarrastrarmealodio,yenesteterrenonodabalatalla.

Nopasónada.Sinembargo,¡sabíaqueestanocheintervendríaladecisión!Hacialasdosdelamañana,singularesimágeneseideasseacercaroncomounloboamicerebro,

y como si mi alma se hubiera vuelto un espejo de la más pura agua, vi el destino de AssiaChotokalouguineconunadolorosacompasión,yaquepasóbajoelaspectodeunalastimosavíctima.Antaño, anfitriona alegre e inclinada a la broma y a la inocente escaramuza, niña mimada en supalacio,transformada,derepente,enenigmáticamujerdespuésdelaconmociónnerviosadelahuidaescapandodelaszarpasdelaChecabolchevique,marginadaalaexistenciadelosexiliadosydelossinpatria.Undestinoentremuchosotros,escierto,peroundurodestinoporsuscambiosquevandela felicidad al horror.Y no obstante, unamujer profundamente animosa, indefectiblemente giradahacialavida,queundonoscuro—ferozherenciadelasangre—habíamudadoendeplorablevíctimadeunpoderdemoníacoyconsagradoaunfinhorribleyprematuro.¡Expiada;expiadaestabadesdehacíamuchoestaespeciedeculpabilidadhereditariaquehabríapodidopesarenella!Alopeor,medecía, había sido una pobre médium, una médium presa en la confusión de determinismos quenosotros, los justos, llamamos tan gustosamente, una vez hecho, «falta». Un poderoso y vastopensamientocruzómimente:¡liberarlamediantemifuerzadevoluntad,demivoluntadfortalecidapreviamente!EsedebeserelsentidodelmisteriosoVajroliMudra:acogerlaenmí,paracurarladetodoodio.Nolaodiaría,tampocolaamaría,asímeliberaríayliberaríaalmismotiempounapobrealma.

Apenashubonacidoesta ideaenmí,AssiaChotokalouguineyaestaba tumbadaami ladoymeobservaba,apoyándoseenlasalmohadasdemicamaconlosrasgosdelafelizyvirginalprincesadelosdiecisieteañosensucastillode Iekaterinodar.Yesta infantil inocenciaseagarróamícomosifuerasusalvador,y,cosamuyextraña,comodequienlahabíasalvadodesímisma,deestaAssiaquegemíabajoelyugodeIsaíspónticadelaqueera,alafuerza,lasacerdotisa.

¡Era curiosover cómoparecíaqueellano sediera cuentaqueera estaAssia!Comobuscandoayudacontraestaotra,seabandonótotalmentesobremipecho…Enelmismoinstanteelsúcubosereabsorbió. Mi cuerpo se sentía miserable, débil, vacío. Era como si hubiera participado en unainimaginableorgíadecoribantesquetantohabíapodidodurarunañocomounanoche,peronole

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prestaba atención ya que me sentía mecido por un concierto de arpas eolias. Unas palabras seabrieroncaminoysusuavevenenocorrióenmisangre.Cuando,depronto,alrestituirmelacancióndemiinfancia,unaestrofa,estremeciendotodomiser,yanomequisoabandonar.

EnlalunamenguanteEnlanocherelucientedeplataContémplameContémplameTúquefrecuentasmipensamientoTúquesiemprehabitasaquíabajo…

Lipotineapareciócuandomislabiosrepetíanaúninfatigablementeesterefrán.Surgióalospiesdemi cama, irguió su cuello comouna cigüeñaque tiene sed,me espió,me sonrióymehizounsigno.

Luego,medijoamediavoz(suspalabrasresonaronen lacánulacomoplomocayendoenunaláminadevidrioyelairesilbódemaneravisiblebajoelpañuelo):

—¡Ejem, respetable amigo, ejem! ¡Os habéis convertido en el más débil! Estoy desolado, miqueridobenefactor, sinceramentedesolado.Pero sólopuedo servir almás fuerte.Yaconocéis esterasgodemicarácter.Vuelvo,conpesar,alcampoadversario.Avisarosestodoloquepuedohacerpor vos. ¡Vos sabréis apreciar esta señal de lealtad! Según las concepciones corrientes, os veo«perdido».Noesmenosciertoqueosfelicitoporvuestravictoriacomo…¡ejem!…¡comocaballerosirviente!Permitidme,conesto,despedirmedevos,hayasuntosquemellaman.Heoídodecirenelcafé que un rico extranjero de Chile ha comprado las ruinas Elsbethstein. ¡Quizá todavía hayaenterradosotrosviejospuñales.ElhombredicellamarseDoctorThéodoreGärtner.Unnombre,porlodemás,quenuncahabíaoído.¡Asípues,nobleamigo—mediólamano—moriddecorosamente!

Eraincapazdelevantarme,incapazderespondercualquiercosa.Todavíaentendílaspalabrasdesu boca: «LosDugpas osmandan susmejores saludos», luego se inclinó ceremoniosamente y sedirigió hacia la puerta. Creo haber descubierto en sus ojos todo el irónico fulgor del triunfo delinfiernoquelaimaginacióndelhombreescapazdeconcebir.

NohevueltoavernuncamásaLipotine.

***

«¡Théodore Gärtner!». Fueron las primeras palabras que me arrancaron de mi embotamiento.¿Théodore Gärtner? ¡Si se había ahogado en el océano Pacífico! ¿O he perdido el conocimientocuandoLipotinemehapronunciadosunombre?…Presadelvértigoydeladebilidad,volvíacaersobre mi cama, y cuando por fin conseguí levantarme, con grandes penas y trabajo, estabaconvencidodehaberperdidolapartida,queestabaabocadoaunacatástrofesinpaliativosydeunaespecie tan desconocida como espantosa, considerando el fondo de mis aprehensiones. Por unsegundo,laestantiguademiprimoJohnRoger,flotóantemimiradainterior.

¡Conquéincreíblefacilidad,conquéridículaausenciadefuerzamehabíavencidolaastuciadeIsaíslaNegra!

Sería superfluo describir el abismo de envilecimiento, la cúspide del fastidio, la humillación

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infligidaalsentimientodemifuerzaviril,peortodavía, loenormedeminecedadtalcomolaveíaextenderse.

¿DebíallamaraJane?Asílosentía,micorazónmesuplicabaquelohiciese,peromedominéymecallé.No tengoelderechode turbarlaenel reinode lavidaeterna,yaqueeraposiblequemeoyera,medecía.Quizá lamolestaría conun sueño en el que ahí abajo se creería unida amí parasiempre,quizá,conmigrito,laatraeríaabajo,enelcampodeinfluenciadelatierra,dondeelamornopuedenadayelodiotodo.

Estabaestiradoeinmóvil,prosternadodenuevoenmicama,esperandolallegadadelanoche.Elsol,enmihabitación,mepareciómásbrillantequedecostumbreysoñé:sisólofueracomoJosuéquesupodetenerlo…

DenuevohacialasdosdelamañanaAssiayaciócercademíyeljuegodelanocheprecedenteserepitió exactamente. Una vez más, me mentí a mí mismo, era un salvador… ¡y análogamente lodemás!…

Apartirdeeseinstante,pertenecíalsúcubocontodoelardordemissentidos.Yladesesperadaluchademialmaydemirazóncontraelhechizanteespectrodemisenvenenadosapetitos,mehizoconocertodoslosmartirios,todoslostormentosdelosanacoretasydelossantosquehapadecidolaterrible prueba del fuego de la tentación, semejante a una interminable muerte por sed hasta susúltimasconsecuencias,enlasqueobienlacopavuelahechaañicos,obienDiosmismorompelascadenas. Dios ha permitido que las mías caigan en el último minuto. Relataré brevemente lascircunstanciasdelmilagro.Antesfueelinfierno.AssiaChotokalouguinevinobajotodassusformas,con todos sus encantos y todos los fascinantes poderes de su alma salvaje y tierna, con todas lasseduccionesdesubellezaterrestre,realydesnuda,cadavezmásdeslumbradora.

Assia Chotokalouguine estaba en todas partes. Con grandes esfuerzos hallé una fórmula paraconjurarla, entonces me dejó expresando la melancolía de una amante incomprendida, que sinreprobar nada, pide simplemente perdón por la tristeza de su mirada. Me costó indescriptiblespenalidadesendurecermicorazónyresistiresamiradaqueimplorabasuliberación…

Perorápidamentesehizovisibleentodoslosobjetosquepodíanreflejarlaluzamialrededor:enelbruñidodelosarmarios,enlasuperficiedelaguademivaso,enelfulgordeunahojadecuchillo,enloscristalesopalescentesdelaventana,enlatransparenciadeunagarrafa,enlosprismasdemiaraña, en la estufa de loza.Mi suplicio se había centuplicado, ya queAssia, de algunamanera, sehabíareplegadoenotroplanosensible,aunqueguardandounaardienteproximidad.Deigualmodoqueanteshabíaintentadodesterrarlapormivoluntad,ahoraestavoluntadsevolvíacontramíyteníahambre de ella. Estaba desgarrado por contradictorios deseos, uno quería desembarazarse, otroatraerlaasí…

Entonces,devoradoporlaconcupiscencia,meacerquéelverdeespejoflorentinodeLipotine,quehabía cubierto con un paño y sin mirarlo, ya que sórdidamente temía que Assia volviera a miencuentro, llena de vida, como con Théodore Gärtner, lo descubrí, y perdiendo todo el dominiosobresímismo,leclavémimirada.

Ahí estaba, podría decirse que vivía ahí, y me ofrecía sus desnudos senos, y sus ojos pedíangraciaconlasuavemiradadelavirgenceleste.Enelcolmodelespantopensé:¡ésteserámifin!

Reunímisúltimasfuerzas,ypresadeunacólerayundeliriosalvajes,diunpuñetazoalcristalqueserompióenmiltrozos.

Ysuimagenrepetidacentenaresdeveces,penetróenmisangreporlasheridas,meabrasó,me

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acribillócomosimehubierandadounbañodeortigas.Yenlascarasreverberantesdelcristalrotoque tapizabanelsuelo, refulgiendoamialrededor:Assia,Assia, laDesnuda, laVampira, laÁvida,multiplicada hasta el infinito.Y se desprendió de las imágenes comounabañista sale del agua, sedirigió hacia mí sonriente, viniendo de todos lados, convertida en el ejército convergente de lassirenasdecorrupción,impregnándomeconeldeliciosoalientodesusciencuerpos…

Elairedemialrededorseconfundióconelolordesupiel,yeraunolordesueño,elmássuave,elmásardiente,elmásprimaveralquerecuerdohabersentidoenmiexistencia.Unniñosabehastaquépuntolosoloresembriaganytranstornanenunsueñofeliz…

Yentonces,entoncesAssia-Isaísempezóaenvolvermeensuaura,ensucuerpoastral.Clavóenmí la mirada de fosforescente inocencia del reptil, que considera que matar es la función de suespecie…Penetróbajomipielpor lo sutilde sunaturaleza, alimentándosea travésdemí. ¡Dóndeencontrarsalvación,protección,resistencia!

Unavezmáscaíaenpicado,embrujadopor lamelodíaque,dedentroydefuera,solicitabamioído:

EnlalunamenguanteEnlanocherelucientedeplataContémplame…

Me digo: «Esmi canto demuerte…». De pronto, un repentino pensamientome arrancó de latumba, que los sabios llaman la linde del «octavomundo» y que significa la destrucción total, elpensamientodeacordarmequetodavíatengoelpuñaldemisantepasados,deHoelDhat…

¿Puede un pensamiento engendrar el fuego? ¿El fuego dormitaría alrededor de los hombresoculto,invisible,ysinembargo,entodaspartes?Unapalabrasecretaquizá,y…enunabrirycerrardeojospuededespertarseyengullirelmundoentero.

Como si la simple idea hubiera evocado el fuego, una llama surgió de repente ante mí,gigantesca, silbante, comounamasaqueexplota… toda lahabitación sehabía transformadoenunmar incandescente…Mehearrojadodentro. ¡Consólocruzar,deberíaardervivo!Cruzar ¡Quierotomaryguardarelpuñal!

¿Cómohe conseguidopasar esemurode fuego? ¡No lo sé, perohepasadoyhe llegado amidespacho!HearrancadoelpuñaldelarcadeToulayapretadolaempuñaduracomoantañoJohnDeeensumuerte.BartlettGreenhasurgidoantemíyhaqueridoarrebatármelo.Loheheridodeungolpeen pleno en su horrorosoOjoBlanco que lo ha hecho tambalearse y desaparecer…He bajado laescaleracruzandounmardechispasyunhumosofocante.Meheabalanzadosobrelapuertacerradaysehahundidoconuncrujido…

Elairefrescodelanochemehaacogido.Mibarbaymiscabellosestánabrasados,misvestidos,carbonizados,todavíaarden.

¿Dónde?¿Dóndeir?Oigo detrás mío cómo se hunden estrepitosamente las vigas, llameando por el fuego

sobrenatural, inextinguible, despertado por la magia… Huir, huir a toda costa. Tengo el puñalapretadoenunamano.Pocomeimportayasiestoyenlavidadeestemundooenladelotro,cuandouna visión, diríamos, se interpone enmi carrera hacia la libertad yme detiene.Es la dulcemujerReal;nohamuchoaparecidaenelparquevueltosalvajedeElsbethstein,yexulto.¡Elizabeth,lareina

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demisangre,laElizabethdeJohnDee,laqueespera,laarrebatadora,labendita!,yunavezmásmeprosternoasusrodillas,olvidandoelfuegodelosDugpasquemepersigue…

Entonces,comosiunsagazy lúcidopensamientonacieradelpuñalquemipuñoasíaysubierahastamicerebro,hesabidoaplenaconciencia,yconunarepentinasangrefría,queesunamáscara,un fuego fatuo, una simple imagen, suscitada por falsarios tenebrosos, una proyección ilusoriadestinadaaecharmeenlaperdición.

Conlosojoscerradosmeabalanzoatravésdelfantasma.Mesientoigualqueunanimalacosadoen feroz caza. De pronto, poseído, iluminado por una deslumbrante intuición, me grito: ¡aElsbethstein! Corro, —a pesar de que tropiezan, mis pies tienen alas— sostenido, protegido pormanosinvisibles,sinretrasarlaterriblecarrerademicuerpo,sinpreocuparmedeloslocoslatidosdemipulso,hastaquemehalloarriba,enlaplataformadelcastillo…

Detrásmío, el cielo es unamancha de sangre. Podría decirse que toda la ciudad arde bajo elabrasadoralientodelinfierno…

AsídebióhuirantañodeMortlakeJohnDee,dejandoquemarsupasado,contodassusdignidadesyvalores,contodossuserroresyméritos.

Peroyotengoloqueélhabíaperdido:¡elpuñal!Salvaciónparaél,paramiantepasadoJohnDee,resucitadoenmíyvuelto«Yo».

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ENELCASTILLODEELSBETHSTEIN

—¿Tieneselpuñal?—Sí.—Estábien.Théodore Gärtnerme alarga las dosmanos y yo las cojo, como un náufrago coge las de su

salvador.Enelmismoinstantesientopasardeélamíunavivificantecorrientedecalorybondad.Laangustiaquemeestrujaba,comounamomiaconsuvenda,serelajapocoapoco.

Veounsemblantesonrienteenlosmodosdemiamigo:—¿Asípues,hasvencidoaIsaíslaNegra?Lapregunta sale de su boca como si no le diera importancia, sin ningún signode alarma.Sin

embargosuenatanamenazadoraenmisoídoscomolatrompetadelJuicioyagacholacabeza.—No.—Entonces se presentará aquí, ya que siempre se halla en el lugar donde todavía puede

reivindicaralgúnderecho.—Lasvendasdelaangustiavuelvenaapretarse.—Loheintentadomásalládelasfuerzashumanas.—Conozcotuspruebas.—Mifuerzaestáalasúltimas.—¿VerdaderamentehascreídoqueobtendríaslametamorfosisconelArtenegro?—«¿VajroliTantra»?—exclamémirandofijamenteaThéodoreGärtner.—¡Los últimos saludos de losDugpas para destruirte! ¡Si supieras cuánta energía es necesaria

parapracticarelVajroliTantrasiniralaperdición!¡Sólolosasiáticossacanalgúnprovecho!Bastaque hayas resistido por dos veces a la absorción del veneno.Ya que esto lo has resistido por tuspropiosmedios,merecesserayudado.

—¡Ayúdame!ThéodoreGärtnersegiraymehaceseñaldeseguirle.Sólo es entonces cuando mis sentidos exteriores recomienzan progresivamente a percibir los

contornosdellugardondemehallo.Esunahabitaciónenunatorre.Enunángulo,unaimponentechimenea,ydelante,elgranhorno

alquímico.Alrededordetodalahabitaciónsehandispuestoanaquelessobrelosqueestáncolocados,limpiosyenbuenorden,lospertrechosylosinstrumentosdelosMaestrosdeesteArte.

¿EslacocinadeJohnDee?Lentamentemiconocimientoseesclarece:estoyenel«MásAllá»,enelreinoulteriordelascausas.Lahabitaciónpareceynoparecealavezunhabitáculoterrestre,deigualmodoquelacaradeunniñopareceynopareceladeunviejo.Preguntoconopresión:

—Decidme francamente, amigo, ¿estoy muerto?—Théodore Gärtner duda un instante, sonríesutilmenteyrespondeambiguamente:

—Alcontrario.DesdeahoraeresunViviente.Estáapuntodedejarlahabitaciónymeinvitaaacompañarloconungestodelamano.Sigosuspasos,y,mientrasaguantaelpicaporte,siento loquehaceun instantehesentidoen la

habitación, queme ha parecido conocerla desde hacemucho, tan familiar. Pero rápidamente otrasimpresionescambianelcursodemispensamientos.Cruzamoselpatiodelcastillo.Ningúnsignode

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degradación,porningún lado laesperada imagendeunconjuntode ruinas.Tampocoporningunaparte, aunque busque atentamente con mi mirada, veo señales de las fuentes calientes y de lamampostería que las captaba.Me extrañoynopuedo reprimir una interrogadoramiradahaciamiguía.Sonriente,agachalacabezaymeexplica:

—Elsbethstein es un muy antiguo lugar de posta del planeta. Aquí fluyen, desde los Eonesctónicos,lasfuentesdeldestinoterrestre.Lasquetúvisteundíasóloeranlossignosdenuestravueltaydelareivindicacióndeunantiguoderechoderesidencia.Lasaguascalientesqueloshombres,ensucodicia,creíanpodercaptar,estándenuevoselladas.Loquedesdeahorasucederáaquíseráparaellosinvisible.Tienenojosparanovernada.

Mirosorprendidoamialrededor.Altostejadoscompletanelcontornofamiliardelasmurallas,nohamuchodecapitadas,delcastillo.Bellaslinternascoronanlastorresylasatalayas.Ynadasehaconstruidodenuevoorestaurado, inclusoserespiraelairecalmo, intactoy lapátinanaturalde laedad.

—Ésteseráel lugardetusactividadessi…permanecemosjuntos,—mediceThéodoreGärtneresbozandoungesto,ysegira.

Apesardelaaparenteindiferenciadesuspalabras,unaopresión,semejanteaunanube,pasapormicorazón.

Luego,miamigomeconducealviejojardínqueseextiendeentreelcastilloyelrecintoexterior.Enlalejaníaveoelbelloríoylafértilysoleadacampiñacuyotranquiloreposopareceeterno.

Peroeljardínyesasvistasmerecuerdanalgoviolentamente,algoqueconozcodesdehacemucho.Fenómenoqueatodosnosesfamiliarcuandonosencontramosderepenteanteunpaisaje,unsucesocualquiera o un discurso que creemos, dolorosa y poderosamente, ya haberlo vivido una vez, yahaberloprobadounavezmásqueintensamente.

Degolpemeparo,tomolamanodeThéodoreGärtnerygrito:—¡EsMortlakeCastletalcomolohevistoenelcristaldecarbón,ysinembargonoesMortlake

Castle!YaqueestosóloresplandecesobreElsbethstein,encimade la ruinaquedominael ríoydequienesSeñor.YtútampocoeressóloThéodoreGärtner,sino…

Entonces,conunalegresonrisameponelamanoenlabocaymellevódentrodelacasa.Después me deja solo. ¿Cuánto tiempo? No sabría decirlo. Cuando evoco estos momentos de

serena soledad,me parece que, de unamanera incomprensible,mis piesme han conducido a unapatriaquesemehabíavueltoextranjeradesdetiemposinmemoriales.

Nadapuedodecirdelfluirdeltiempoeneltranscursodeestavisiónretrospectiva.Más tarde, he distinguido el día por la caricia del sol en el mágico desarrollo de nuestras

conversacionesy lanochepor lasgrandessombrasque losolorososciriosproyectaban,sobre lasaltasparedes,vacilandoenigmáticamente.

Éstedebesereltercerdíaquepasoaquíarriba,enElsbethstein.ThéodoreGärtnerinterrumpeunalarga conversación sobre temas amables, pero en conjunto, insignificantes.Como si no supiera loque dice, como si tratara de las cosasmás indiferentes y banales delmundo, de improvisto, hacenotar:

—Yaestiempodequeestésdispuesto.Tengomiedo.Unaangustiaimprecisaseapoderademí.—¿Quieresdecir…qué…?—balbuceéenplenaconfusión.—TresdíassemejantesaéstoshabríanbastadoaSansónparadejarcrecerasucabelleracortada.

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¡Mírate!¡Tufuerzatehavuelto!La largamirada absolutamente tranquila deThéodoreGärtnermeda una pazmaravillosa casi

simultáneamente.Dócil a su inducción, aunque sin comprenderlo, cierro los ojos para recogerme.ApenaslohehechoyveoelBaphometsobremí,ylaluzfríayblancadelcarbúnculomeinunda.

Asíestoycalmoyenconsonanciaconmidestino:QuemeconduzcaalavictoriaciertaoquemeapartedelavistadelosImperturbables.

Preguntoimpasible:—¿Quédebohacer?—¿Hacer?¡Debespoder!—¿Cómollegaraeste«poder»?—Nosellegaa«poder»mediantepreguntasoconocimientosdeldominiodondeseencuentrasu

destino.Haz,sinsaber.—¿Sinsaberprimeroquéhacer?Es…—Eslomásdifícil.ThéodoreGärtnerselevanta,medalamano…dice,comodistraído:—La luna semuestra en el horizonte.Coge el arma que has reconquistado.Baja al parque. Si

franqueaselmurodelrecintoyanovolverásaencontrarelcaminodeentradaynonosveremosmás.Peroesperoquelascosasnoacabaránasí.Ahoravete.Estodoloquehededecirte.

Segira,sinunamirada,yenseguidaescomosisehundieraenlaoscuridaddelahabitaciónysedesvanecieradetrásdelasvacilantesantorchas.Creooírcómosecierraunalejanapuerta.Despuésunsilenciodemuerteseestableceamialrededorypercibolosimpetuososlatidosdemicorazón.

Derepente, lalunaemergeporencimadeunodelostejadosdelcastilloysehacevisibleenlagranventana.

Mehallo en el jardín, el puño apretando el puñal deHoelDhat, aunque sin saber para quémeservirá.

Contemplo las estrellas. Flotan en el aire calmo, sin centellear y esta inalterable serenidad delespaciocósmicomepenetradenuevoconunaenergíaperceptible.Mimentesólosededicaaapartartodapregunta.

«LaMagiaesunHacersinSaber».Elsentidodelaspalabrasdemiamigomepenetraymecomunicaunagranpaz.¡Cómoseríaposibledecircuántotiempohepermanecidoenelcéspedbañadoporlaluminosidad

encantadoradel clarode luna!Lejosocerca, esdifícildediscernir, en lapenumbraesmeralda, selevantaunimponentebosquecillodeárbolesprietosenunaoscuramasa.

Deestebosquecillodeárbolessedestacarepentinamenteunamovedizaluminosidad.Podríadecirsequeesuntrozodenieblatransparentealqueelclarodelunaprestaunailusiónde

vidacambiante.Mimiradanopuededesprendersedelaaparición.Unaformaavanzaapasoligeroentrelosárboles,tanprontodubitativacomoagitada,¡sunostálgicaimagenyasehamanifestado,yahapasadoamialcanceunavezen lacálida luzdelmediodía!Eselpaso real, la indescriptible, lamisteriosamajestaddelaesperadaDamadeElsbethstein,¡laenigmáticareinaElizabeth!

Como atraído por un ardiente deseo, el hada se acerca. Instantáneamente he olvidado, perdidotodo recuerdodemis intencionesyde la finalidaddeminocturnaestanciaenelcéspeddel jardín.Con un grito de júbilo interior, cuya potencia tritura mi corazón sin que yo sea plenamente

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consciente,me apresuro, tan pronto apretando el paso como tropezando por la angustia de que lademasiadoarrebatadoraimagennodesaparezcaelacercarme,nosedisuelvaenlaniebla,probandosí,quesólosetratadeunaalucinacióndemissentidosynodeunaaparición.Semantiene.

Duda cuando dudo, se apresura cuando me apresuro. Finalmente, la Majestuosa, la Madre, laPredestinadamuchomás allá de la Sangre, laDiosa de JohnDee, delAntepasado, está antemí ysonríeconunasonrisaqueespromesaysaciedaddeldeseoinmemorial.

Ahora abro los brazos.Ahora sonriendo,me hace un signo invitándome a seguirla.Ahora sumano,bañadadeplata,estiraelpuñaldelamíaymisdedosquierenabrirseparaofrecerlecomoundonloquelepertenece.

Entonces,unaluminosidadquenovienedelclarodelunafulgurasobremí.EneldestelloséqueBaphometyelcarbúnculoquelocoronaestánahí;elcarbúnculonomedeslumbra,sinoqueviertesufulgor frío, agudo, sereno. En el mismo instante una sonrisa aflora en los rasgos de la Damamisteriosa, pero siento, en la consumidora e inexpresable delicia de esa sonrisa de promesasmilenarias,unaluchasordacontraelheladoesplendordelcarbúnculosobremí.Yanteesasonrisaincalificable,imperceptible,seguradesuvictoria,eneltiempodeungolpedealasdelosmensajerosangélicos,mi espíritu frenó en seco yme desperté demi estupor.Veo cómo el don de lamiradainmaterialmeesdado,puedoveradelanteyatrásenelespaciocomoelBaphometdedoscabezas.VeoantemílaMujer-Mundoytodalaperfidiadesumirada,ysurostroveladodesanta,loveopordetrás abiertode arriba a abajo, desde lanucahasta los tobillos, parecida auna fosahirviendodevíboras, sapos, ranas y repugnantes gusanos.Mientras que por delante el rostro está ataviado contodoelbuenolor,todalagracia,todalasublimidaddeladiosa,elhedordelaotracarayelindeleblesecretodelafatídicaputrefacción,golpeanmialmaconunhorrorsinnombre.

Entoncesmimano aprieta de nuevo el puñal, mi ojo ymi corazón vuelven a estar serenos yalegres.Digoamigablementealfantasma:

—Dejaestecampodeevocación,Isaís.¡NointentesengañarunasegundavezaldescendientedeHoel Dhat con las apariencias de la Dama elegida! Renuncia a este juego y que te baste habertriunfadounavezenelparquedeMortlake.¡Lafaltayahasidoexpiada!

Apenassihubepronunciadoestaspalabras,cuandouninopinadogolpedevientocruzasilbandoybramandoelcésped.Laluna,deungrisplomizo,seescondetraslasnubes.Casipodríadecirsequelaborrasca hace rodar hasta mí, a la altura de las rodillas, un rostro convulsionado, de feroces ytorcidosrasgos,quemelanzaenplenacaraunaespantosamiradadefuror;empujadaporelvientounabarbarojamebarrelapielyreconozcoaBartlettGreen,eseviejocamarada,elprimertentadordeJohnDee.

Un rabioso sabbat se desencadena.Con la velocidad del rayo Isaís laNegra asume forma trasforma,cadavezmásprovocativa,másdesnuda,másimpúdica,jugandosusúltimasbazas.Perocadavez más ineficaz, más lamentable y más pobre, revolcándose en la lastimosa pantomima de laprostituida.

Bienprontosehizolapazenlosaires,elsilenciosobremíylaslucesinmóvilesdelasestrellas.Pero cuandomiro ami alrededor veo que sólo estaba apenas a un paso de la puerta abierta en lamuralla,desdedondeelsenderorápidoyescarpadollevafuera,abajo,enelmundoextranjero.

Sóloentoncesmedoycuentadelocercaqueestabadelafronteraque,segúnTheodoroGärtner,separa eternamente el universo de Elsbethstein del universo de Isaís la Negra. Mientras creíamantenerme firme, la Demonio me ha arrastrado y es la gracia del Baphomet la que en última

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instanciamehabíatiradoatrásysalvado.¡Bienaventuradosoyporhabersidoconsideradodigno!TheodoroGärtnerestádenuevoantemí.Lellamohermano.Oigo cómo habla, y aunque en la efervescencia de mi júbilo muchas de sus palabras se me

escapan,comprendotodoloquediceyordena.Perciboantemícómoseresdeluzformanunacadenadeoro;unengarceseabreparaintroducirmeamí,elnuevoeslabón.Tambiénséquenosetratadeunrito simbólicocomosecumple,por reflejo,entre loshombresdel reinode las sombras terrestrescon el nombre de «Misterio». Es un evento efectivo, vivo y vivificante, en otromundo…«¡Serásacogido,llamado,elegido,JohnDee!»cantanlascalmaspulsacionesdemisangre…

—¡Extiendelosbrazos,Resucitado!Extiendolosbrazoshorizontalmente.Rápidamente,aderechae izquierda,unasmanosaprietan lasmías,ysiento, llenodealtogozo,

quelasólidacadenasecierra.Yalmismotiempoqueexperimentoesesentimientodegozo,percibola razón profunda en íntima certeza: quien pertenece a esta cadena es invulnerable, ningún golpepuedeherirlo,ningunadesgraciaoprimirlo, sinque los innumerables anillosde la cadena seveanafectados.Asíelgolpe, ladesgracia, todoelvenenode lascosasyde losdemoniossedivideyseanulabajoelefectodeunafuerzamultiplicadapormilydeunaprotecciónmilvecesexperimentada.

Todavíamecomplacíaenlostransportesdequienestáalabrigoyligadoparasiempre,todavíanodejabademaravillarme,detemblardegozo,cuandounavozdelasaladijo:

—¡Quítatelaropadeviaje!Obedecíalegremente.Comoyesca,misvestidosdecaminocaenyaquemadosporelincendiode

mi casa terrestre. Como yesca. Una sorpresa, una reflexión fugitiva: ¡sea cual sea la meta dondeconduceelcaminolosvestidoshancaído!Ycomoyesca,tambiéncayeronundíalosdelaprincesaChotokalouguine…

En ese instante un breve golpe, que diría asestado por unmartillo, golpeami frente.No hacedaño,alcontrario,esagradable,puestoquebienprontohacesluminosossurgendeminuca…hacesluminosassin finque llenanelcielodeestrellas…ycontemplareseocéano luminosodeastrosesfelicidad…

Adespecho,dudando,vuelvoamí.Vestidosblancosmeenvuelven.Unrayode luzquevienedeabajoatrapamimirada.Mi túnica

tambiénllevaalaalturadelcorazónlaresplandecienterosadeoro.ElamigoGardenerestácercademíy,alrededor,enlaaltasalasobrenaturalsepercibeunligero

murmullodeensalmos.Blancasyradiantesformasmeenvuelven,seacercancadavezmás.Elmurmullosehacecadavez

más distinguible, más rimado, más sonoro. Una ligera embriaguez impregna el lugar. Del cantoconfusosedistingueahoralasvocesyelcoro.

NosotrosquedesdelanocheDelostiempos,hacemosprosperar,OscurospotentadosQuenuncaduermen.ElActoquelibera.NosotrosquehemosforjadoHermano,lalanza

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ParaayudarteconlapazQueimponeunfulgor,Ennuestrosespacios,Lasimientehamadurado.NosotrosloseslabonesdelacadenaTedirigimoselnuevosaludo¡Ati,elliberadoVencedorestedía!QuiensedominaEscapaalacosa.¡QuienyanohadelucharEntraenlacadena!

Sueño.¡Cuántosamigosteacompañan,cuandoantesporlanochenosabíasdondebuscarrefugiocontralaangustia!

Porprimeraveztengoundeseodecomunicarme,veladoporunaligeramelancolía,delquemesientoprendidoalnopoderdesentrañarenquétierrapocoprofundaellasehaenraizado.

PeroGardenerhacogidomimanoymearrancadelosconfusospensamientosenlosquemehesumergido. Sin que me haya dado cuenta del camino que hemos tomado, nos encontramos en eljardín, ante la pequeña puerta que conduce al patio del castillo. El asistente se para y señala losparterres,queexhalanuncálidoperfume.

—Yosoyunjardinero.Esmivocación,aunquetúveasenmíalalquimistayalquímico.Éstasóloesunarosaentremuchasotrasquehesacadodeunmontóndeescombrosyhetrasplantadoentierralibre.

Cruzamoslapuertadelamurallayquedamosantelatorre.Miamigoprosigue:—Túsiemprehassidounexpertoenelartedehaceroro—yunasonrisabenevolentesedibujaen

sucaraapesardeunciertomatizdereprocheirónicoyafectuosoquemehacebajarlosojos—esporesoporloquetehasidoasignadocomotulugardetrabajo.Bienprontopodrásprepararteparaeltrabajoalquetualmaaspiradesdequeestásenelmundo.

Subimosalatorre…EslatorredeElsbethsteinysinembargonoloestotalmente.Lentamentemiespírituseacostumbraaestasinteraccioneseneljuegodelossímbolosydescubreunsentidomuchomásaltoentodaslascosasenestaesferadejúbilo,enestaverdaderapatria.

Laescaleradecaracolconduce,atravésdelargosescalonesdepórfidooscuroyreluciente,hastael ya familiar a mi memoria laboratorio alquímico. Me pregunto con sorpresa cómo estosmagníficos escalones de piedra han podido sustituir a la vieja escalera de madera oscura ycarcomida.Penetramosenlacocina,conunamajestuosabóvedaenlaquesepierdelamirada,ensusazuladasparedesestándispuestascircularmentelaschispeantes imágenesdelasestrellas.Elmismocielo nocturno está sobremí,mientras que abajo, hundido en el corazón de la tierra, se cuece elalimentodelaObra…

Elhornoestáenplenaincandescenciacreativa.Semeasemejaaunreflejodelmundo.Losilbantese resuelve en gotas, lo oscuro llamea, lo brillante se ensombrece, lo fuliginoso se ilumina, lasterriblesfuerzasdedestrucciónencadenadasconpenas,cerradasenelcrisoldehierroforjado,dejan

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verunaefervescenciainfernal.Lasabiduríadelathanorydelhornolastienencautivas.—Ésteestucampodetrabajo,afindequeproduzcassegúntudeseomuchooro,perodeloroque

eselsol.QuienmultiplicalaluzesunodelosmásinsignesentrelosHermanos.Tengo parte de una gran enseñanza. El Conocimiento a mi alrededor se cambia en sol

resplandeciente,cuyaradiaciónpulverizatodomisaberdepigmeo.Apesardeello,unínfimofuegofatuo,unapreguntamoribunda,unfantasmadepreguntacruzamicerebro:

—Dime, amigo, antes que renuncie para siempre a preguntar, ¿qué era, qué es elÁngel de laventanadeOccidente?

—¡Unecoynadamás!Conrazóndijodesíqueerainmortal,loerapuestoquenuncahavivido.Quiennohavividonuncanosabenadadelamuerte.Elsaber,elpoder,labendiciónylamaldiciónquehadistribuidohansalidodeti.Eralasumadelaspreguntas,delaciencia,ydelpodermágicoquepermanecíaescondidoen tiyquenosuponíasque fuera tuyo.Puestoquecadaunodevosotroshacontribuidoaestasuma,cadaunohaconsideradoconestuporal«Ángel»comounarevelación.EraelÁngelde laventanadelOeste,porqueelOesteeselpaísverdedelpasadomuerto.Haymuchosángeles similares en el reino de la gestación y en el de la descomposición. Mejor sería para lahumanidad que no viniera ningún ángel de esta especie. Para ti, detrás delÁngel de la ventana deOccidenteestabaBartlettGreen.Peroahorahaterminadopuestoqueyanopreguntas…

Gartner se gira hacia los utensilios: «Todo no es más que un vinculum, como han dicho losAntiguos.Unodelosnuestroshallamadoaeste«todo»,unametáfora.Estosaparatossóloparecenhacerhervir.Nosucedenadafueradelalborotodelosinstrumentos.Estegloboquevesaquíesunsimplevinculum,nadamás.CuandotuNo-Saberserátotal,¡tesentiráscapazdeservirtedetodasesascosasparaproduciroro!…Entoncesqueunode tusdedos toqueunpuntodeesabola terrestre,unhazdecorrientespropiciatoriasradiarádetudedoencadalugar:ylostorbellinosdelaaniquilaciónestallarán ahí abajo, como expulsados por un volcán espiritual mediante el frío de tu manotransfiguradora.¡Asípuesvigilabientufuego!PiensaqueloshombresimputaránasuDiosloquetúhagasyseformaranÁngelesdeOccidente.¡Todoslosque,sinserllamados,hanseguidolavía,hanacabadomuriendoconlaformadeun«Ángel»!

—¿Estoy encargado de todo eso? —balbuceé temblando de espanto mientras esperaba larespuesta.ElAdeptodijotranquilamente:

—Éstaeslagrandezadelhombreencadanacimientodehombrequehalugar,elnoquerernadayelpoderlotodo.Diosnuncahafaltadonimentidoasupalabra.

—¿Cómourdiréeldestinosinconocerydirigirlatrama?Éseeselúltimogritodemidescorazonamiento.¡Quéprofundamentehundidaestáenelcorazón

deloshombresestasimientedecobardía,ídoloycompañerainseparabledelorgullo!…Gardeneryanodijonada,mecondujodenuevoporlaescaleradepórfidoymeacompañóhasta

lapequeñapuertadelmuro.Meseñalóeljardínydesapareció…Unrelojdesolenlaresplandecienteblancamuralladelmediodíayunafuenteconelmelodioso

rumorquesurgedeuninfatigablechorrodeagua,sonlasdoscosasquemellamaronlaatención.Laluzdelsoldaenelclavoherrumbroso,muertoyclavadoenelmuroyproyectasuestrechasombra.Lasombraconstituyeeltiempo.

¡Lasombraconstituyeeltiempo!Ylaverbosidaddelafuenteacompañalasombradeltiempoconlatraviesaimportanciadesuchapoteo.Elchapoteodelaguaestodoel«Actuar»eneltiempodelasombra. Vínculo alrededor; vínculo son todas las cosas; vínculo el espacio y el tiempo en ellos

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mismos,dondesemuevenlasimágenesdelporvenir…Abismadoenmispensamientos,enelpaisajenuncaantescontemplado,mevuelvoymedirijoa

travésdelosmacizosdefloreshacialostejosquedansombraalatumbaabandonada.Unavezmáselsolembrujaconunaextrañaprofundidadenlatanlejanaproximidaddelosextremosdeljardín:Otravezcreoverdanzarahíabajoaunluminosoropaje.Eltemorylacodiciaestánlejosdemí,mientrasveotranquilizarse,dirigirseconlentitudhaciamí,unaformaradiante,deslizándoserápidamente—comolaimagendeunespejosigueloqueserefleja—pero¡estaimagennovienedeunespejo!Loqueavanzaahíabajo,loqueflota,esunserdeluz,sinnadaencomúnconlasombradelasimágenes.

Avanzo con paso firme, y regulando su paso con el mío, ella se acerca, la reina, ya no másdisimuladayprisioneradelosdoradosbarrotesdelafábula.Seacerca,estámuycerca,ysumiradafranca,inalterable,clara,cálidayserenaoperalauniónconlamía.VoyalencuentrodeElizabeth,escomo la carrera del cometa que viniendo de otra trayectoria, procede después de millares, demillonesdeañosquizá.¡Quépobressonestospensamientosqueseformulanenladimensióndelasombradeltiempoydelmurmullodelsurtidordeagua!

Percibo,conuncalordemeteoro,lainterferenciafinaldelastrayectoriasy…Elizabethestáantemí.Cerca.Ahora tan cerca que diríamos que los ojos se tocan. Tan cerca ahora que se ha vueltoinvisibleamisojossensorialesytambiéninvisiblealacabezadelBaphometqueporuninstantehabrillado sobre nosotros. Todas mis fibras, mis nervios y mis pensamientos saben que elentrecruzamiento, el desposorio de los dos cometas se ha consumado. Ya no busco nada, ya noencuentronada…Lareinaestáenmí.Yoestoyenlareina.Hijo,esposo,padredesdeelcomienzo.¡Lamujeryanoes!Yelhombreyanoes,cantaelcorodemisexultantespensamientos.

Ysinembargo,unúltimorincóndelincomparableysoleadopaisajedemialmaestáoscurecidoporunpequeñoyapenasperceptibledolor:¡Jane!¿Debollamarla?¿Osollamarla?Puedo,losé,yaqueunasorprendentefuerzagerminaconscientementeenmídesdequeElizabethmehabita.Yyaveoaunpálidoyqueridorostrodarsuformaalaoscuridaddemitristeza:«¡Jane!».

Entonces,antemí,elasistenteGardenermediceconunfríotonodereproche:—¿No has tenido suficiente con el martirio que el Ángel de la ventana de Occidente te ha

preparado?¡Yaningúnángelpuedeperjudicarte,peronotrastorneselequilibriodelanaturaleza!—Janeestá…¿Sabedemí?…¿Puedeverme?—Hermano, tú has pasado la linde de la iniciación del rostro vuelto hacia atrás ya que estás

predestinado,comotodoslosdeestacadena,asocorrerlahumanidad.EsporelloporloquehastaelfindelostiempospodrásverlaTierraymientrastantoatravésdetiseirradiarátodalaenergíaqueemanadelplanodelavidaeterna.Peroloqueeselplanodelavidaeterna,«losdelacadena»,nopodemosexperimentarlo,yaquedamoslaespaldaaeseabismoradiante,impenetrableygenerador.Janehafranqueadodefrentelalindedelaluzeterna.¿Sinosve?¿Quiénsabe?

—¿Esfeliz,ahíabajo?—¿Ahí abajo? ¡Ninguna denominación se aplica a este No-Ser por el que empleamos la

deplorableperífrasisde«Planodelavidaeterna»!¿Yfeliz?—Gardenermemiróriendo.—¿Mehasplanteadoseriamenteestapregunta?Sientovergüenzademímismo.—¿Siinclusonosotros,quesomosunpálidoreflejodelavidaeterna,nopodemosservistospor

los pobres seres humanos que erran ahí fuera en el círculo de la existencia indefinida, cómopodríamoscontemplaro sólopresentir loquees a lavez tancercanoy tan lejano, comoelpunto

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matemáticoque,escapándosealespacio,estácercaysinembargoincomprensiblemente lejosde lalínea,delasuperficieydelossólidostridimensionales:laEternidaddelincognoscibleDiosignoto?Janehatomadolavíafemeninadelsacrificio,quellevadondenopodemosniqueremosseguirla,yaqueenespíritutodossomosalquimistasyqueremosquedarnosaquíparaoperarlastransmutaciones.Perosiguiendolavíadelafemineidadhasalidodelserydelno-ser,altiempoquerenunciabaatodoloqueeraporamorati.¡SinohubierahabidoJane,túnoestaríasaquí!

—¿Loshombresya…nopodrán…verme?—dijeestupefacto.Gardenerrióconalegría.—¿Quieressaberloquepiensandeti?Novinoyaningunacuriosidada romper lacalmadeElsbethstein.Sinembargo,elamigo,casi

malicioso como un niño,me guiña el ojo sonriendo. Enmí pestañea también la última chispa deinterésporloserroresdelmundo:

—¿Ybien?ThéodoreGärtnerseagacha,recogedelbordedelcaminounanotadearcillaenmohecida:—¡Ten!¡Lee!—¿Leer?…Enunabrirycerrardeojoslaamarillentayhúmedatierradesumanosehaconvertidoen…un

trozo de periódico. El indescriptible espectro de un objeto perteneciente a una esferainconmensurablemente lejana. No sabría expresar hasta qué punto estamaterialización delmundoilusoriodeloshombresmeparecerisible,tristeychocantetodoalavez.

Gardenerhavueltoasusrosales,cortaloschupones[24].Yoleo:

LacasaembrujadadeldistritoXIX.

«Nuestrosrespetableslectorestendránciertamentemuyvivoelrecuerdodelincendiodela bella casa sita en el n.° 12 de Elizabeth-strasse que a principios de año fue presa de unincendio que la destruyó totalmente. Hecho extraño, ha sido imposible en todo momentoapagarel fuego.Losgeólogossugierenquepodíadebersea lapresenciadeunaespeciedellamavolcánica,hipótesiscorroboradaporlasactividadessísmicasdelmismoordenquehanpodidoobservarseenElsbethstein.Untrabajadorescocésquetrabajaconotrosjornaleroseneldescombrodelosescombros,afirmaqueensupaísseproducenfrecuentementefenómenosanálogos.EnIrlandayenEscociaselesimputaal«HoyodeSaint-Patrick».Elincendionohacedidoniunapulgadaanteelvalienteesfuerzodenuestrosbomberos.Haduradotodoeldíasin que pudiera apagarse. Ladrillos y piedras han enrojecido hasta el blanco y estánaglomeradasenunamasadeaspectodepiedrapómez.Todavíanohapodidoesclarecersesielpropietario habitaba la casa y se hallaba en ella en elmomento del siniestro.Almenos, elcobrador municipal de las contribuciones afirma haber llamado y golpeado vanamente lapuertadeentradaparapercibirlastasaspúblicasquedebíahacíatiempo.Lospilluelosdelacalle pretenden, al contrario, haber visto una vez el rostro del propietario detrás de loscristales.Desgraciadamente,hayquetemerqueeldesafortunado,seguramenteinmersoenlostrabajosliterariosdelosqueunaseriacríticadeartenopuededispensarseyalosquesedabasindescanso,sehayaapercibidodemasiadotardedelincendioyhayamuertovíctimadeunamuerte espantosa. Un detalle más viene a apoyar nuestra conjetura: la encuesta revela quenadiehastahoysehapresentadoareclamarlaelevadaprimadelsegurodelacasa.Señalemos

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depasadaqueelpropietariode ladichacasapasapornoserdel todonormalenelsentidoburgués de la palabra. Hasta aquí los hechos. ¡Nos parece particularmente deplorable queaprovechándosedelmisterioqueplaneasobreelcaso,laserpientedelasupersticiónlevantesuimpertinentecabeza!Nosólolostunantesque,desgraciadamente,rondanportodasparlesincluso en la noche, sino también personas respetables, de las que no se esperaría nadasemejante, afirman haber visto en el lugar del siniestro, y siempre en épocas de lunamenguante,afantasmasperfectamenteconstituidosquehandescrito.Quesetrate,suponiendoque se excluya la hipótesis de una ilusión de los sentidos, de un carnaval de máscarasorganizado para una malsana diversión, que no comprende o no quiere comprender lagravedad de los tiempos actuales, no cabe pensarlo, naturalmente, de la gente bien. Se nosinforma,díatrasdía,delaaparicióndeunaDamadesencarnada,delgada(¿habríaquealertaralapolicíadelasbuenascostumbres?),enropanegratejidadeplataquevagaaquíyalláyparecebuscaralgoenciertolugar.Elpropietariodeunacasavecina,—miembrodelpartidosocial—cristianoyporellomismoporencimadetodasospechadedelirioimaginativo,queresueltamentehaconsagradounaparticularatenciónaesta«almaenpena»ysehapuestoaseguirlaregularmenteparahacerlesaberhastaquépuntoeraincongruentevagarasíenplenanoche,conuna ropademasiadoajustadaynoconvenienteparaesahora—afirmaquecadavez la susodichasehaeclipsado,peroquealgunosminutosdespuéshasurgidoensu lugarunamujerdesnudacomolamanoquelehahechoproposiciones.¡Elórganocompetentedelanueva protección de las buenas costumbres tendrá con ello una ocasión inmediata paracumplir suoficio!Otrosobservadores sientenpreferenciaporun repugnante individuoconuna grosera casaca de cuero, con una hirsuta barba de fuego, que busca y escarba conhorriblesmaldicionesymuecasenelsuelocarbonizado.Endefinitiva—unavezinaugurada,laferiadequimerasdeestospocosquenuncasontodos,noconocelímites—parecequeesebribón penetra en último lugar en la habitación de la desvergonzada mujer desnuda (¡anosotros la policía de las buenas costumbres!) y le explica, reforzándolo con unamímicadesesperada,quesusesfuerzoshansidovanos.Teniendoencuentaquetodoellosucedeaunahoradelanocheenlaquelagentehonestaduerme,¡nossentimostentadosacreerquesetratade la visión clandestina de un film para pervertidos! (La Redacción). Después, una viejaseñorapretendehabervistorecientementeaunseñortodavíamásviejoconunpañuelorojoque la hamirado burlándose y haciéndole gestos notoriamente inmorales, le ha dicho quesentíaunvivointerésporlasantigüedades…Unacircunstanciaque,desgraciadamente,llevaráaguaalmolinodelasupersticiónpopularesque,aunquesóloseaporcasualidad,duranteelclaro de luna innumerables gatos corretean en el lugar del incendio. La cosa tampoco esdifícildeexplicar.Eselresultadodel impuestosobre losgatosnuevamenteconstituido,querelacionadoconlararezadeldinero,obligaatantasytantaspersonasdeambossexosadeciradiósasusfavoritos.Elúnicopuntosatisfactoriodeestahistoriaesque,comonostelegrafíanuestroenviadoespecial,loseminentespionerosenlahisteriaylosfenómenosderumiaduray aferentes, los señores doctoresRosenburg yGaliathWellenbusch, serán bien pronto, pornuestrainstigación,loshuéspedesdenuestraciudadparadevolveralinfestadodistritoXIX,asícomo a las cenizas de nuestro difunto conciudadano, que presumimos consumido por lasllamas de su casa, el barón Müller, que tenía el capricho de hacerse llamar «barón deGladhill»,unreposobienmerecido.

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»Notadelaredacción:Lahonorableprefecturadepolicíaponeenesteinstanteanuestradisposiciónunaminiaturademarfil,milagrosamenterespetadaporlasllamasyhalladaenunaarcadeToulacasireducidaenteramentealestadodemasafundidaquesehasacadodeentrelos escombros. No queremos privar a nuestros atentos lectores de esta imagen y lareproducimosaquí.RepresentaalMaestrosirJohnDee,quejugóunpapelconsiderableenlavida política del tiempo de la reina Elizabeth de Inglaterra. El desgraciado barón Müllerpodría haber sido un lejano descendiente. Un cierto e innegable aire familiar entre laminiatura y el difunto deja creer que su hipótesis, en relación a esta filiación, no deberíarechazarsetotalmente».

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GUSTAVMEYRINK (Viena,Austria, 1868 - Starnberg,Alemania, 1932). Tuvo una infancia y unaadolescencia conflictivas por ser hijo natural de unministro wurtemburgués. Se sabe que trabajóprimeroenunbancoyqueestuvoapuntodesuicidarsealos24años.Mientrasfrecuentaloscírculosesotéricos de Praga, Munich y Viena, publica sus escritos sobre estos temas en la revistaSimplizissimus.

Seinteresósiempreporlosfenómenosparanormalesy,enelDominicoBlanco(1921),escribió:«Seaproximalahoraenqueelespiritismovaacubrirlahumanidadcomounamareapestilente».

CorresponsaldeKafkayThomasMann,terminósusdíasalcorrerelaño1932,acusadodeherejía:sunombrefigurabaenlasprimeraslistasnegrasdelosnazis.

Toda la obra de Gustav Meyrink es una constante búsqueda de lucidez, de la elucidación de lososcurosvericuetosde la actividadocultasynegadadelhombre.Susnovelasmás importantes son,ademásdelascitadas,Elrostroverde(1916)yElángelenlaventanadeOccidente.SuobramaestraesElGolem(1915).

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Notas

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[1]Enlatíneneltexto:«piedrasagradasantificadayprincipiodelamanifestación».(N.delT.)<<

Page 245: El ángel de la ventana de occidente · Gustav Meyrink El ángel de la ventana de occidente ... izquierda, en un campo de plata, un árbol verde; ... hundía mi rostro en la almohada

[2]SuSeñoría.(N.delT.)<<

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[3]Enlatíneneltexto:maestroenartesliberales.(N.delT.)<<

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[4]Enlatíneneltexto:enresumen.(N.delT.)<<

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[5]Enlatíneneltexto:colegiogriego.(N.delT.)<<

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[6]Enlatíneneltexto:colegiodeBacoydeVenus.(N.delT.)<<

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[7]Enlatíneneltexto:maestros.(N.delT.)<<

Page 251: El ángel de la ventana de occidente · Gustav Meyrink El ángel de la ventana de occidente ... izquierda, en un campo de plata, un árbol verde; ... hundía mi rostro en la almohada

[8]Enlatíneneltexto:mecánico.(N.delT.)<<

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[9]Enlatíneneltexto:elementosdelanaturaleza.(N.delT.)<<

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[10]Enlatíneneltexto:maestrodelasArtesliberales.(N.delT.)<<

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[11]Enlatíneneltexto:colegio.(N.delT.)<<

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[12]Enlatíneneltexto:averificarenlaeternidad.(N.delT.)<<

Page 256: El ángel de la ventana de occidente · Gustav Meyrink El ángel de la ventana de occidente ... izquierda, en un campo de plata, un árbol verde; ... hundía mi rostro en la almohada

[13]Ceremonias<<

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[14]Vaso,cristal.<<

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[15]Enlatíneneltexto:TablageográficadeAmérica.(N.delT.)<<

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[16]Enalemáneneltexto:tierraverde.(N.delT.)<<

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[17]Documentaciónalemanasobrelosfenómenosmediúmnicosyparapsicológicos.(N.delT.)<<

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[18]Enlatíneneltexto,inyección.(N.delT.)<<

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[19]Enlatíneneltexto,oropotable.(N.delT.)<<

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[20]DreiHeller,dreiBatzen,dreiBusserenseindgung.<<

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[21]Laborenhuecosobremetalespreciosos,rellenaconunesmaltenegrohechodeplatayplomofundidosconazufre.<<

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[22]Cordoncillodelgadodeseda,hechodevariashebrastorcidas,empleadoparacoserybordar.<<

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[23]ChidherelVerdeeslarepresentacióndelhombreprimordialquenopuedemorir,enlanovelaElRostroVerde.<<

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[24]Brotesquelosrosalesproducenenlabasedelaplantayquecrecenhastaconvertirseentallos.<<