� ABRIL de �01� | www.podeR360.com

poR LuIs HeRnández mARtínez

Posgrados:la ética contraataca

Las escuelas de negocios preconizan un cambio de actitud en los empresarios: deben mejorar sus prácticas de gestión.

En octubre de 2001, la empresa Enron arrojó pérdidas cercanas a los 620 millo-nes de dólares para su tercer trimestre fiscal debido a deshonestas prácticas de negocio orquestadas desde su cúpula directiva. Entre los años 2000 y 2002,

la alta dirección de WorldCom maquilló sus estados financieros y provocó a sus accionistas un quebranto cercano a los 180,000 millones de dólares, mientras que alrededor de 20,000 trabajadores (y sus respectivas familias) quedaban sin una fuente de ingresos segura.

durante esa avalancha de escándalos empresariales, la centenaria firma de consulto-ría arthur andersen cayó en desgracia: un grupo importan-te de auditores de gran nivel quebrantó las normas éticas y

–con ello– acabó con el activo principal de una empresa de servicios en contabilidad y auditoría: la confianza.

así terminó un paradig-ma de negocios que durante años dirigió los propósitos de la alta dirección de las empresas y de las escuelas de negocio que formaban a sus ejecutivos de mayor potencial en el mundo, y que rezaba así: ética y negocios no se mezclan, pues ambos son de naturaleza distinta.

de hecho, a decir de los especialistas, la base ideo-

lógica de este cambio de paradigma tiene sus raíces en Strategic Management: A Stakeholder approach (1984), un libro escrito por r. Edward Freeman. su propuesta, para muchos estudiosos del tema, podría calificarse como el pilar filosófico o sustento teórico de lo que hoy conocemos como el nuevo modelo de negocio sustentable de alta competitividad.

Y es que “las compañías [y sus empleados] tienen un peso muy importante en las economías del planeta. Las organizaciones [directivos, gerentes, colaborado-res internos y externos] poseen una influencia muy fuerte tanto en los mercados como en el desarrollo de las naciones. Hoy es incuestionable que la empresa influye sobre las conductas y valores de sus cola-boradores; de la sociedad; de ahí la importancia de gestionarla adecuadamente”, expresó sobre la ética en los negocios –y por aquellos años a razón de los escándalos de Enron y WorlCom– Manuel arango arias, fundador y presidente honorario del Centro Mexicano para la Filantropía (Los 7 Pecados Capitales de las Empresas, Editorial Diana 2001).

Una nueva esperanzaPara rafael gómez Nava, recién nombrado director general del Instituto Panamericano de alta dirección de Empresa (IPadE), hace muy pocos años “hubo un replanteamiento sobre qué es la empresa y sobre cuál es la función o cuáles son sus deberes con respecto a la sociedad donde opera”.

sin renunciar a la generación de valor económi-co, aclara el entrevistado que dirige los esfuerzos de una organización de origen empresarial con 45 años de vida, “hoy el empresario que participa en nuestros programas tiene muy clara la importancia de

Valores de la alta direcciónLos dIrECtIVos dEL IPadE, EBC, EgadE y UP aseguran que sus institucio-nes desarrollan las competencias requeridas para las personas responsables de dirigir el destino de una organización. desde su punto de vista, las más importantes son: Liderazgo. trabajo en equipo. Comunicación. toma de decisiones. Capacidad diagnóstica. dirección estratégica prospectiva. Criterio y buen juicio. gestión del cambio y de la

incertidumbre. Emprendimiento. Visión global y holística del negocio. Ética, valores y responsabilidad social. Planeación estratégica sustentable. autoaprendizaje.

especIAL posgRAdos

www.podeR360.com | ABRIL de �01� 3

ILu

stRA

cIó

n /

nyt

ImAg

es

construir modelos de negocio innovadores donde se requiere de la generación de utilidades, por supuesto, pero también nuestro participante entiende que es fundamental crear empresas que reconozcan al factor humano como elemento crucial en la obtención de los resultados de la compañía”.

respecto al propósito actual de los posgrados en negocios y administración, específicamente, los directivos de instituciones de educación superior entrevistados por PodEr aseguran que el nuevo paradigma de los negocios concede mucho más peso y hace un énfasis mayor en la persona, por encima del capital o los recursos tecnológicos.

Mario alberto garcía Vázquez, director regional Norponiente de la Escuela Bancaria y Comercial (EBC), la institución de régimen privado más antigua de México (fundada hace 83 años por Manuel gómez

Morín al interior del Banco de México), dice que “el talento humano tiene un mayor peso al interior de las organizaciones, pero no tanto en lo individual, sino en la medida que la persona asume el rol y el compromiso de formar parte de un equipo que lucha y trabaja para la obtención de logros comunes sustentables. Hoy, el objetivo es regresar a las razones éticas por las cuáles fue creada la empresa como idea de desarrollo y prosperidad social”.

sin duda alguna, hoy las empresas requieren de gente de negocios que tenga muy clara la importancia de la ética empresarial. de ahí que ese conocimiento ya no deba formar parte del inventario poco promo-cionado de materias optativas o reducirse sólo a una cuantas sesiones dentro de módulos inconexos en los programas de estudio de maestrías y especialidades.

desde el punto de vista de Álvaro de garay arellano,

� ABRIL de �01� | www.podeR360.com

director general en la ciudad de México de EgadE Business school (escuela fundada en 1964) del tecnológico de Monterrey, la ética empresarial es un tema que tiene que estar ya en todos los posgrados, independiente de su especialidad.

de garay agrega que tanto los empresarios como los estudiantes de maestría tienen que comprender que el capi-talismo ya no es un modelo económico basado en la rivalidad libre y sin límites, salvaje. Hoy es un sistema de competencia sustentable y de cooperación.

“El movimiento de la sociedad civil obligó a las empresas a transformarse y a cambiar sus modelos de negocio, incluso tienen que reformular con urgencia sus prácticas laborales –dice–. ahí están las críticas y denuncias que la sociedad hace sobre las compañías que no cuidan la seguridad de sus instalaciones, el trato que dan a sus colaboradores, al medio ambiente o que no tienen sanas prácticas financieras y contables”, sostiene el directivo del EgadE.

Pedro salicrup río de la Loza, director de posgrados y extensión universitaria de la Escuela de Ciencias Económicas y Empresariales (fundada hace 35 años) de la Universidad Panamericana (UP), afirma por su parte que “hoy el director general ya no lo es todo”.

agrega: “La inteligencia creada y gene-ralizada por todos los miembros de una empresa es lo que hace fuerte a una organización. Hoy hablamos de capacida-des organizacionales para crear ventajas competitivas. Ésa es una característica clave del nuevo paradigma de los nego-cios. Por ello la innovación, la creatividad,

la efectividad organizacional y la lealtad de los clientes, entre otros elementos, son fundamentales para desarrollar mejores capacidades organizacionales al interior de las compañías que aspiran a ser competitivas”.

La práctica¿Y qué hacen las instituciones de educación superior mexicanas para que sus posgrados o programas formen a los egresados que el actual paradigma de los negocios exige en el mundo?

al menos en las escuelas consultadas, sin excepción, sucedió una reformulación de sus planes de estudio, crearon programas nuevos o reforzaron sus estrategias de vincula-ción con la empresa, con el propósito de perfeccionar las habilidades de su público objetivo.

Álvaro de garay comparte una de sus estrategias de renovación: “Hace tres años modificamos nuestros planes de estudio y creamos dos cursos obligatorios [Política Empresarial, Ética y Responsabilidad Social Corporativa; y Liderazgo para el Desarrollo Sustentable] para todos nuestros posgrados. Eso hará diferentes a nuestros estudiantes para que agreguen valor en sus organizaciones”.

¿El resultado? Los estudiantes de EgadE ya hablan y discuten las estra-tegias de negocio contrastadas con la luz de los aspectos éticos. En sus aulas ya no existe la percepción de que la ética es un materia aburrida o no necesaria para sus planes de crecimiento profesional.

Los estudiantes tienen que comprender que el capitalismo ya no es un modelo económico basado en la rivalidad libre y sin límites.

“Lo trascendente para los estudiantes de la nueva alta dirección no tiene que ser la búsqueda de más dinero, sino valer mucho más como personas.”

– mARIo gARcíA, dIRectoR RegIonAL de LA eBc.

“La empresa tiene que planear sus estrategias y resultados en mucho más largo plazo, con enfoque prospectivo y sustentable para atender los reclamos de la sociedad.”

–áLvARo de gARAy AReLLAno, dIRectoR geneRAL en LA egAde BusIness scHooL cIudAd de méxIco.

posgRAdosespecIAL

www.podeR360.com | ABRIL de �01� �

foto

s / L

uIs

ALo

nso

An

AyA

todos deben opinar, hablar y criticar las prácticas empresariales; incluso las que utilizan sus empleadores actuales en caso de ser contrarias al conocimiento propuesto en clase.

Y esa actitud participativa del estudiante al interior del aula de un programa de posgrados, expresa en su oficina Pedro salicrup, es un elemento fundamental en esta época si hablamos de que los alumnos también tienen la obligación de responder de manera adecuada al cambio de paradigma de los negocios. “En verdad, ellos buscan diferenciarse ante la nueva forma de aprender porque, por supuesto, ya no es la misma de hace 10 años”.

a decir del entrevistado, “hoy el conocimiento también proviene de los alumnos, y por eso tienen que ser más proactivos; llegar al salón de clase con actitud de aprender. ahora hablamos de desarrollar competencias, entendidas como el conjunto de cono-cimientos, habilidades y actitudes. Pero la escuela sólo modera los dos primeros. La actitud para adquirirlos es responsabilidad total del estudiante”.

En el nuevo paradigma de aprendizaje, enfatiza el entrevis-tado, el profesor es más un coach, un mentor, un mediador que se apoya en la mayéutica. “Es un cambio difícil, claro, porque el alumno espera una clase tradicional. Pero esa ya no existe. ahí la importancia de entender que la forma de aprender en aula ya es otra. Una que exige la utilización de las nuevas tecnologías y de que promovamos entre los estudiantes la investigación orientada a la innovación como elemento diferenciador”.

Por su parte, Mario alberto garcía menciona que “con la nueva Maestría en alta dirección, la EBC avanza sobre seguro para generar conocimiento pertinente” basado en un esquema de líderes-docentes por materia que, a través de congresos por asignatura, rescaten las mejores prácticas de enseñanza y aprendizaje significativo para beneficio de sus alumnos, ya sea que los futuros egresados estén en el aula o fuera de ella. “Nuestra maestría es la primera en ofrecer a los

estudiantes la posibilidad de combinar, en un mismo plan de estudios y trimestre, las materias presenciales con una carga académica virtual. también tenemos un programa muy fuerte de atracción, selección, desarrollo y retención del talento docente”, asegura.

En el nuevo paradigma de los negocios, enfatiza garcía, urge formar directivos de alto nivel. Emprendedores con una gran capa-cidad para resolver problemas; que posean una gran sensibilidad sobre los problemas sociales del país y del mundo, y que tengan una visión ética y valores sólidos que contribuyan a la construcción de una sociedad mejor.

al respecto, gómez Nava comparte “las cuatro grandes habi-lidades” que el IPadE busca perfeccionar en la alta dirección: la capacidad diagnóstica, la valorativa para construir una planeación estratégica basada en una visión prospectiva, la de tener una firmeza de criterio con apertura de mente –algo que siempre inculcó Carlos Llano Cifuentes como fundador de dicho instituto– y la capacidad de la comunicación directiva.

El entrevistado asegura que el método que utilizan al interior de sus aulas es activo, reflexivo, participativo y centrado en el perfeccionamiento de las habilidades directivas: “Por eso aquí les llamamos participantes, no estudiantes o alumnos. Por eso para nosotros, hablar de alta dirección es hablar del hombre de vértice

–dice el entrevistado–; es hablar del número uno de la organización y, ése, es nuestro público objetivo. Nos referimos a la persona que diagnostica, valora, proyecta, define y ejecuta el rumbo de una organización”.

¿Y cuáles son las principales funciones de la alta dirección con este nuevo paradigma de negocios? “asegurar que su modelo de empresa sea competitivo y propiciar que las tareas, respon-sabilidades y cultura internas de la organización estén alineadas en términos de la alta competitividad y sustentabilidad globales”, sintetiza gómez Nava.

“Lo que interesa es ayudar al hombre de vértice para que haga mejores contribuciones directivas que beneficien a sus empleados, a los resultados de la empresa y, por supuesto, a las sociedades donde opera.”

–RAfAeL gómez nAvA, dIRectoR geneRAL deL IpAde.

“Hoy hablamos de capacidades organizacionales para crear ventajas competitivas. Ésa es una característica clave del nuevo paradigma de los negocios.”

–pedRo sALIcRup Río de LA LozA, dIRectoR de posgRAdos y extensIón unIveRsItARIA

de LA escueLA de cIencIAs económIcAs y empResARIALes de LA up.