Soluciones, suspensiones o jarabes

Son las formas más utilizadas en niños por su fácil administración, las dosis son pequeñas y el sabor suele ser dulce. El medicamento (principio activo) está disuelto o suspendido en un líquido con gran cantidad de azúcar para asegurar su conservación. En el caso de las suspensiones se aconseja agitarlas antes de usarlas.

Suspensiones extemporáneas Son aquellos jarabes que tenemos

que reconstituir en el momento de utilizarlos. El resultado es una suspensión ligeramente azucarada estable durante el período de tiempo del tratamiento. El envase debe indicar el tiempo y modo de conservación una vez reconstituido. La elaboración ha de hacerse con la cantidad de agua mineral o corriente hervida (añadir cuando esté a temperatura ambiente) necesaria para llegar al enrase del envase (nunca se llena todo el envase). Es importante agitar la suspensión antes de usarla.

Gotas, ampollas y bebibles

Son soluciones presentadas en envases de un solo uso (ampollas bebibles), o en cantidades pequeñas (gotas) debido a la poca cantidad necesaria en cada toma, que se podrá establecer directamente en nº de gotas o en mililitros.

Sobres

Contienen polvos o gránulos para

preparar una solución o suspensión que

se ingiere al momento. Contienen

menos azúcar que los jarabes por que

no requieren conservación una vez

disueltos.

Comprimidos y cápsulas

No se suelen administrar a niños por que las dosis no están adecuadas a ellos y no saben tragarlos.a) Comprimidos: el principio activo está textualmente comprimido (ej. Aspirinas), y a su vez puede o no estar recubierto por azúcar (grageas) u otras sustancias que faciliten su acción (comprimidos recubiertos).

b) Comprimidos efervescentes: se ingieren una vez

disueltos en agua, el

efecto se consigue

más rápido que con un comprimido

normal.

c) Cápsulas: son

unidades de polvos o gránulos

encapsulados para

protegerlos hasta el

lugar del aparato digestivo donde se

deben disolver.

Supositorios

Se suelen usar en los niños, sobretodo si vomitan, caso en el que los jarabes serán inefectivos. Con ellos se puede buscar un efecto local (laxantes) o llevar disueltos diferentes principios activos con alguna acción específica (antitérmicos, etc.). Se deben conservar en sitio fresco ya que se derriten fácilmente.

Microenemas

Son preparados líquidos para

administrar vía rectal

como si fueran

supositorios. En el

enema pueden ir

disueltos diferentes

principios activos.

Son las formas inyectables. Requieren utillaje y personal cualificado para su administración pero a veces es necesario ya que los efectos son casi inmediatos. A su vez pueden ser subcutáneas, intramusculares o intravenosas. Requieren condiciones de esterilidad.

Son los colirios y pomadas oftálmicas. Requieren condiciones de esterilidad, por eso los colirios se deben manipular con precaución para que no se contaminen. Las presentaciones unidosistienen la ventaja de mantener la esterilización, ya que cada vez se usa una unidad completa. Como norma general, una vez abiertos, son efectivos durante un mes.

Normalmente se busca con ellas un efecto local en la zona donde se administra, pudiendo llevar diferentes componentes y medicamentos.Según la consistencia se pueden dividir en:

Pastas

Son las más espesas, conteniendo gran

cantidad de compuestos sólidos

(polvos) en su fórmula que le dan esa

consistencia.

Pomadas

Su consistencia es más ligera que las

pastas.

Cremas y emulsiones

Son las más líquidas,

manteniendo de

todos modos un aspecto semisólido.

Las cremas aportan el vehículo por el que el medicamento va a penetrar en la piel, cuanto más graso sea, más fácil será la penetración y el medicamento más efectivo. Se puede establecer una escala de efectividad siendo de mayor a menor: ungüentos, pomadas, geles, cremas y lociones.Normalmente los vendajes sobre la piel una vez aplicada la crema potencian la acción de la misma (no siempre es recomendable); se debe consultar con el pediatra si es conveniente el vendaje.

Estas formas son usuales en tratamientos antiasmáticos, donde se busca un efecto local en los pulmones para aliviar los síntomas de manera rápida y evitar efectos secundarios.El modo de aplicación es peculiar y además depende del tipo de dispositivo. Los más usuales son:

Inhaladores en aerosol

Este tipo de inhaladores es el más conocido: son pequeños y manejables. El envase que lleva el fármaco mezclado con un gas a presión está metido en un cartucho de plástico duro en forma de L, y al apretar el pulsador, sale por la boquilla el gas a presión mezclado con el medicamento. Es muy importante sincronizar el proceso de inhalación con el de pulsación, por que si no el medicamento no pasa a los pulmones sino al estómago y el tratamiento pierde eficacia.

Inhaladores de polvo seco

Son dispositivos que contienen el medicamento en forma de polvo seco, en los que no es necesaria la coordinación de la pulsación y la inhalación, ya que la salida del producto sólo se efectúa cuando se inspira. La facilidad de su empleo permite su uso en niños, aunque no en lactantes. Existen dos sistemas principalmente: Turbuhaler(de forma cilíndrica) y Accuhaler (en forma de disco). Este tipo de dispositivos tienen un indicador que nos indica las dosis restantes.

Nebulizadores

Son aparatos que producen un aerosol del fármaco utilizando un chorro de gas. El aerosol se inhala a través de una mascarilla o una boquilla respirando tranquilamente. No se suelen utilizar de forma habitual por que son caros y abultan mucho, pero pueden ser útiles en niños muy pequeños.