Constanza Labb

Profesora de Educacin General Bsica y Psicopedagoga, Colegio Hospitalario con Todo el Corazn, Santiago.

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En una casa con acceso propio y una entrada colorida que est en los terrenos del Hospital Calvo Mackenna de Santiago, casi un centenar de alumnos-pacientes asiste a clases mientras se someten a algn tratamiento mdico o son visitados en su lugar de hospitalizacin.

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De no haber balones de oxgeno o sillas de rueda, a primera vista las salas del Colegio Hospitalario con Todo el Corazn no son muy distintas a las de cualquier otra escuela chilena. Pero mirando bien, la diferencia est dada por sus estudiantes y profesores. Porque quienes van a clases son alumnos-pacientes: enfermos crnicos, en tratamiento oncolgico, oxgeno dependientes o hemodializados.Y quienes ensean, profesores con alta vocacin y compromiso con cada nio o joven. Pasillos atiborrados de papelgrafos con letras de cuentos, msica o ciencias, acogen diariamente a algo ms de setenta alumnos de entre 4 y 18 aos. Profesoras alegres suelen abrazarlos a medida que avanza la maana. Nada es para la foto. No importa qu da sea, la dinmica es la misma: nios que conversan, juegan y aprenden; profesores acogedores y comprometidos. Todo en un espacio donde la enfermedad y el estudio se entrecruzan. Y donde hablar de la vida y de la muerte son temas conmovedoramente naturales. Aqu, como en pocos otros sitios, queda claro que una escuela -no slo si se trata de una instancia intrahospitalaria- es un importante espacio de contencin. Nosotros tomamos a cada alumno como el nio o nia que es; alguien que en medio de su tratamiento, vive aqu un buen momento; que comparte con otros y recibe educacin personalizada, explica Constanza Labb, profesora de Educacin Bsica y psicopedagoga y una de las impulsoras del colegio. La tarea no es fcil y requiere temple: Hay que acoger con cario, pero no subestimar a nuestros nios porque estn enfermos, asegura Constanza, quien desde marzo de 2009 lidera la refundacin de este espacio educativo intrahospitalario y es parte del grupo de profesores que hoy sostiene el colegio. Hija del arquitecto Ernesto Labb y de la profesora Ximena Aqu la clave ha sido Pinto, Constanza creci en una familia de siete hermanos, donde lo social fue siempre prioridad. Por eso a nadie aprender que el amor extra cuando dej su trabajo en un colegio particular moviliza el conocipagado de Lo Barnechea para irse a la escuela-hospital del miento, que mueve la Calvo Mackenna. Pero la institucin que cerr a fines de inteligencia. 2008, estuvo a punto de dejar sin estudiar a un centenar de estudiantes. Consciente de ello, junto a tres profesores, decidieron armar un proyecto que se aprob en tiempo rcord. Unos meses despus, el 10 de junio de 2009, celebraron el reconocimiento oficial.

Ir al nioTres formas de atencin hacen posible la permanencia escolar de cada alumno-paciente: clases presenciales con matrcula en la escuela multigrado; atencin personal al interior del hospital en los distintos servicios y atencin de alta relativa, a travs de la entrega de materiales que los nios llevan a sus casas y devuelven la semana siguiente.

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Lo mejor de nuestros profesores

As, el colegio est prcticamente en todas las dependencias del hospital y va donde est el nio. Esto puede significar ser atendido en su pieza, en el policlnico o en alguna sala de espera. Muchos nios tienen miedo o rabia por lo que estn viviendo; otros agradecen la oportunidad de seguir estudiando. Pero todos tienen la puerta abierta. El contacto y derivacin se hace a travs del mdico tratante y de una asistente social. El resto lo da la fuerza de un equipo interdisciplinario de doce profesionales y tres voluntarios que vive una comn unin de dolores, fortaleza y cuidados. Juntos deben prever detalles que en una escuela comn no son tema. Por ejemplo, aprender a cambiar un baln de oxgeno o saber cundo es necesario partir corriendo al hospital que est al frente, en caso de mareo, y cundo no. A veces un nio viene toda la semana y de repente hay que ir a verlo al hospital para no perder el vnculo Pero sin duda, es la muerte lo que golpea ms fuerte: Entonces todos vivimos el duelo. Todos; nios y adultos. Y al otro da nos ponemos de pie. Constanza habla con naturalidad, como si fuera lo ms normal del mundo vivir en los bordes de la vida. Lo curioso es que al escucharla, uno no puede sino concluir que s, que el tema es natural y que en ese espacio, a diferencia de otros lugares, es imposible taparlo con nada. Reconoce que muchas veces se quiebra; que le duele ver llorar a un nio y que no puede evitar acordarse de sus propios hijos. Pero ha aprendido a recobrar fuerzas.

Acogida y recuperacinLa enfermedad de Carlita ha sido un golpe muy duro, comienza diciendo. Cecilia Aguilar, la mam de Carla Yavar Aguilar, de 12 aos, hoy alumna del Colegio Hospitalario Con todo el Corazn. Cecilia vena llegando de Mxico, donde vivi un tiempo con su hija cuando sta enferm. El diagnstico la golpe fuerte: mielitis transversa, una enfermedad asociada a la mdula sea, que produce distintos niveles de parlisis.Fueron 25 das en el hospital en verano, con neurlogos dndote esperanza pero con lenta mejora. Carla haba terminado quinto bsico en Mxico y corresponda matricularla en sexto. Hice el trmite en un colegio de Santiago pero me dijeron que no haba infraestructura, para atenderla. -Pens que iba a perder el ao y como ya haba divisado la escuela, me anim a preguntar y me acogieron con los brazos abiertos. La escuela le gust de entrada a Carla que hoy camina con la ayuda de la Teletn, terapias y talleres de pintura.Y tengo muy claro que si no hubiera sido por esta escuelita habra tardado ms en recuperarse

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Hace unos aos Constanza tuvo una pena fuerte cuando lo que significa estar muri Ivette, una alumna de su curso. Todos estbamos muy tristes. Como profesora tuve que ayudar a que viviramos el vivo, la mirada se te duelo sacando la pena y teniendo esperanza. Para eso, pusimos pone distinta. un cartel grande con su nombre y su foto y cada nio hizo una figura o una flor de distintos colores que colgamos alrededor. Luego, junto a otras profesoras, rezamos y cada uno le mand un mensaje. Lloramos y la despedimos en la misma sala. Y es que todas las experiencias dolorosas son tratadas como una especial instancia para aprender y encontrarse y como profesores debemos promover esto. -En ese sentido ste no es un trabajo cualquiera, sino una pega ruda, difcil, sin eufemismos. Pero al mismo tiempo es una tarea bendita. Para m como profesora es un privilegio estar donde estoy; siento que mi trabajo tiene sentido y que voy aprendiendo la importancia de cada avance, de que todo es un regalo.Y los regalos, simplemente hay que agradecerlos. Entonces, si ves desde el regalo que significa estar vivo, la mirada se te pone distinta.

Si ves desde el rega-

Estrategias de aprendizajeLa rutina escolar comienza a las nueve de la maana y acompaa a los alumnos hasta pasada la una de la tarde. Una serie de adecuaciones curriculares hacen posible el trabajo en salas multigrado. Despus de almuerzo las profesoras suben a los distintos servicios. All trabajan con los nios hospitalizados, premunidas de carpetas con material de distintos niveles y subsectores y una bien provista caja con lpices. En ambos casos la estrategia de trabajo es la misma. La pedagoga que usamos es la pedagoga del amor, y no otra, explica Constanza y advierte que lo dice as an a costa de lo clich que pueda sonar. -Estamos convencidos de que el amor es lo que de verdad te sana tanto fsica como emocionalmente. Lo que pasa es que hay que entender que el amor no es algo meloso, sino un sentimiento exigente. Aqu, nosotros no slo les expresamos cario, sino que les abrimos posibilidades.

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Lo mejor de nuestros profesores

Los profesores aportamos en la sanacin de nuestros nios a travs de la pedagoga, creando un vnculo afectivo y de confianza.

En la escuela leen y escriben mucho. Tambin pintan y cantan. Porque todo lo que sea expresar sentimientos tiene aqu un sentido doble: desarrolla habilidades de lenguaje y es un proceso sanador para verbalizar los dolores.

-Cuando un nio se enferma, se enferma todo su entorno, sus padres, sus hermanos. La contencin integral es una de nuestras obligaciones. La enfermedad afecta todo el sistema de una persona, es decir que una patologa es holstica y su sanacin tambin lo es. Los profesores aportamos en la sanacin de nuestros nios a travs de la pedagoga, entregando contenidos significativos con sensibilidad y contencin, creando un vnculo afectivo y de confianza. Si el nio confa, entonces crece y aprende.

Aire frescoPoesa, msica y materiales concretos son la base de cmo se entiende en esta escuela el acercamiento amoroso que empapa todo el quehacer educativo. Tambin salidas culturales cada vez que podemos a museos, centros culturales y otros lugares donde, adems de pasar un buen momento, es posible ampliar sus posibilidades de crecer. Es que como equipo nunca pueden perder de vista que adems de estar enfermos, muchos de sus alumnos estn desprotegidos socialmente. Por eso hay que ayudar para salir adelante lo ms plena y dignamente posible.

Nosotros no slo les expresamos cario, sino que les abrimos posibilidades.

-Aqu he visto cmo los nios se enamoran de aprender y entonces uno no puede quedarse atrs. Por eso aqu yo acto, me disfrazo, hago juegos, canto, bailo y sobre todo nos remos mucho juntos. La clave ha sido aprender que el amor moviliza el conocimiento, que mueve la inteligencia. Por eso nuestros nios, aunque estn enfermos logran buenos aprendizajes, porque se da una mezcla pedaggica muy fuerte entre exigir lo mejor de cada uno y contener. Nuestro colegio es como una ventana que se abre para que entre aire fresco, en la vida de cada uno de los nios, a travs del aprendizaje escolar.

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Mdicamente hablandoPara una ptima adhesin a los tratamientos mdicos, es importante que los nios y nias sigan con sus rutinas habituales y por eso, en los centros peditricos de todo el mundo se han desarrollado iniciativas que permiten continuar con las prcticas escolares, seala el doctor Osvaldo Artaza . -En el hospital Luis Calvo Mackenna, hace tiempo que contamos con una escuela hospitalaria, que ha sido de vital ayuda para nuestros nios en rgimen ambulatorio y de internacin. El ao 2008 tuvimos que cambiar el sostenedor de esa escuela y vivimos la angustia de que cerrara. Afortunadamente sus profesores se hicieron responsables de su continuidad. Lo hicieron con un tremendo coraje, debiendo partir prcticamente de cero, conseguir recursos, lidiar con los trmites y funcionar por varios meses sin retribucin econmica. Es por eso, que la escuela del Hospital Calvo Mackenna no poda tener otro nombre que Con todo el corazn. Hoy no slo atienden a quienes asisten al hospital en carcter ambulatorio en tratamiento para el cncer, fases previas o posteriores de trasplantes y otros problemas mdicos, sino a los nios que estn internados. Y da a da esta escuela hace una tremenda contribucin a hacer del hospital un sitio ms clido, amigable y amoroso.

MariposasPero vale la pena someterlos al estudio cuando su situacin de salud es crtica? Constanza no duda en decir que s.Y sus razones son contundentes. Convencida de que ir a la escuela es ante todo una experiencia gratificante y que al aprender es posible pasarlo bien, subraya la importancia de que el tiempo que los nios estn aqu debe ser maravilloso. -Este tiempo est hecho para que sientan que vuelven a hacer cosas normalmente como nios; que pueden aprender. Les quede o no tiempo deben vivirlo como nios y asistir a una escuela es parte de ese proceso. Entonces si uno de ellos se va a ir pronto, lo que tratamos es que se vaya lleno de amor. Y que todos sepamos que su tarea en la tierra la ha podido cumplir. Mirado desde fuera no parece fcil, le digo. Mirado desde dentro, tampoco, me dice. Pero basta darle una vuelta al tema para darnos cuenta que todos venimos al mundo a cumplir una tarea y cuando est lista, partimos. -Afortunadamente la mayora de los nios se recupera. Y cuando eso ocurre es una fiesta que nos preocupamos de celebrar y luego hacemos de puente con su futuro colegio, para que el tiempo que pas con nosotros siga dando frutos.

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