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Clase 23--¡Perdido! Clase 23--¡Perdido! I. Parábola de la oveja perdida. II. Parábola de la moneda perdida. III.Parábola del hijo pródigo.

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Clase 23--¡Perdido!Clase 23--¡Perdido!

I. Parábola de la oveja perdida.

II. Parábola de la moneda perdida.

III. Parábola del hijo pródigo.

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VII. La parábola de la oveja perdida

Lectura:

Lc. 15:1-7

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V. 2_ La acusación

Este a los pecadores recibe

Y con ellos come.

Quizás significa que Jesús era el anfitrión, que los había invitado.

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Una serie de elogios:

El anfitrión dice que los invitados traen honor a la casa.

Los invitados piden que Dios bendiga al anfitrión, o dicen que ellos también reciben honor al estar con el anfitrión.

¿¡Estos traían honor!?

La defensa de Jesús: Las tres parábolas que siguen.

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¿Quiénes eran las ovejas extraviadas?

Los pecadores

Pero, ¿Quiénes son?

¿Quién era el pastor?

Los líderes religiosos (Ez. 34:1-6)

Y Cristo (Dios — Ez. 34:7-16).

El pastor perdió a las ovejas — era su responsabilidad, fue por su negligencia.

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A. ¿Qué hombre de vosotros, teniendo 100 ovejas… B. Si pierde una de ellas. C. No dejas las 99 en el desierto.

1. Y va tras la que se perdió. 2. Hasta encontrarla, y cuando la encuentra.3. La pone sobre sus hombros gozoso. 4. Y al llegar a casa reúne a sus 4’. amigos y vecinos.3’. Diciéndoles, Gozaos conmigo. 2’. Porque he encontrado mi oveja. 1’. Que se había perdido.

C’. Por 99 justos que no necesitan arrepentimiento. B’. Por un pecador que se arrepiente.A’. Os digo que habrá más gozo en el cielo.

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Hay dos momentos de regocijo: Cuando el pastor la encuentra.

Se dice que una oveja perdida se acuesta y rehúsa moverse.

El pastor tiene que levantarla y llevarla, pero aun así regocija.

El trabajo no termina con encontrar la oveja, sino luego de restaurarla — pero hay gozo en el trabajo.

Cuando llega a casa, tanto por la oveja como para su propia seguridad.

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En esa cultura una familia muchas veces tenía 5-15 ovejas.

Un grupo de 100 ovejas quizás indica que se juntaron las ovejas de varias familias, o bien era una familia extendida, cuidadas por un solo pastor, miembro de la familia.

Por eso llama a todos y se regocijan.

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¿Dónde deja el pastor a las otras 99 ovejas?

¿Qué dice de la una?

¿Qué dice esto de las prioridades del pastor?

Alison y el subte.

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Regocijo de todos — está en el centro de la historia.

¿Por qué hay más regocijo por el perdido?

¿Cómo festejan? ¡¿Matando a una oveja para

festejar?! ¡No! Pero a veces cuando traemos a

alguien otra vez a la iglesia casi lo matamos.

¿Qué dice esto de los alejados en la iglesia?

¿Hasta qué punto los buscamos?

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Noten la posible conexión con la historia de evaluar el costo primero.

Por un lado, Cristo parece advertirles a los oyentes:

Que será difícil el camino, y no deben empezar sin un

compromiso previo. Por el otro, Cristo les asegura que

en este camino, por más que sean imperfectos y se pierdan, él estará cuidando y buscándolos para que no permanezcan perdidos.

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I.I. Parábola de la moneda Parábola de la moneda perdidaperdida

Lectura:

Lc. 15:8-10

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• ¿Qué mujer que tiene 10 dracmas …

A. Si pierde una de ellas

B. No enciende una lámpara, y barre, y

busca hasta encontrarla

C. Y reúne a sus amigas y vecinos,

diciendo, Gozaos conmigo

B’. Porque he encontrado la dracma

A’. Que había perdido

• Os digo que hay gozo delante de los ángeles de Dios por un pecador que se arrepiente

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• ¿Qué mujer que tiene 10 dracmas …

A. Si pierde una de ellas

B. No enciende una lámpara, y barre, y

busca hasta encontrarla

C. Y reúne a sus amigas y vecinos,

diciendo, Gozaos conmigo

B’. Porque he encontrado la dracma

A’. Que había perdido

• Os digo que hay gozo delante de los ángeles de Dios por un pecador que se arrepiente

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Posesión, no de un ser viviente.

Quizás parte de la dote de la novia.

Quizás fuera una pieza de un collar.

La idea es de poseer el juego completo.

Regocijo “en la presencia de” los ángeles.

– ¿Quién regocija?

– Dios.

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II.II. Parábola del hijo Parábola del hijo pródigopródigo

Lectura:

Lc. 15:11-32

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1. Se pierde un hijo (v. 12).

2. Bienes malgastados (v.13).

3. Todo perdido (v.14).

4. El gran pecado (v. 15).

5. Rechazo total (v. 16).

6. Un cambio de idea (v. 17).

6’. Arrepentimiento inicial (vv. 18-19).

5’. Aceptación total (v. 20).

4’. El gran arrepentimiento (v. 21).

3’. Todo recuperado y restaurado (v. 22).

2’. Bienes usados para festejo gozoso (v. 23).

1’. Se encuentra un hijo (v. 24).

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1. Se pierde un hijo (v. 12).

2. Bienes malgastados (v.13).

3. Todo perdido (v.14).

4. El gran pecado (v. 15).

5. Rechazo total (v. 16).

6. Un cambio de idea (v. 17).

6’. Arrepentimiento inicial (vv. 18-19).

5’. Aceptación total (v. 20).

4’. El gran arrepentimiento (v. 21).

3’. Todo recuperado y restaurado (v. 22).

2’. Bienes usados para festejo gozoso (v. 23).

1’. Se encuentra un hijo (v. 24).

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No hay ninguna ley entre los árabes o judíos que le permita a un hijo heredar algo mientras esté vivo su padre.

Aun si se hiciera el testamento final, el hijo no puede gastar, ni vender nada hasta la muerte del padre.

El pedido del hijo menor, es como decirle al padre que espera que se muera.

Lo asombros es que el padre cede

Generalmente disciplinaría al hijo.

Permite esta elección tonta.

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Es probable que el hijo menor haya enfurecido al pueblo y arruinado las relaciones con todos al intentar vender la propiedad.

Era algo muy serio para los judíos perder su propiedad en manos de los gentiles.

En la ceremonia del qesasah, la comunidad y la familia se juntan y quiebran una jarra, y testifican que se ha quebrado la relación con esta persona por sus acciones.

Si recuperaba el dinero, decían que había vuelto a su heredad.

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El hijo mayor debería:

Protestar el pedido del hijo menor.

Intentar solucionar el problema entre el hijo menor y el padre.

No hace ninguna de las dos cosas, lo que significa que la relación entre él y su padre no está bien.

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El hijo menor, después de gastar todo, se “pega” a un ciudadano (gentil) de esa tierra (¿Decápolis?).

Tiene que trabajar alimentando cerdos.

Básicamente había perdido todo: Familia, comunidad, dinero, amigos, auto-respeto, y además, su religión.

Comía algarrobas, de una planta silvestre.

Tenían un sabor amargo, y no lo nutrían.

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Se volvió a sí. Muestra un cambio de idea, pero no

arrepentimiento completo todavía.

Llegó a su límite.

Un jornalero Era hombre libre.

Que vivía en su propio hogar.

Se mantenía con sus propios ingresos.

Mantiene su auto-estima e independencia.

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Quizás algún día pueda cumplir con su padre y pagar su deuda — ¿salvación por obras?

Si el hijo menor fuera un jornalero libre…

No tendría que depender del hermano mayor.

Ni reconciliarse con él, aunque vivieran en la misma casa.

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El arrepentimiento empezó con el hombre, según los rabís — Mal. 3:7

El hombre demuestra su arrepentimiento:

Haciendo reparaciones

Pagando sus deudas.

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El padre sabe que era posible que su hijo hubiera muerto.

Pero si su hijo volvía, el pueblo lo iba a odiar y maltratar desde el momento que pisara la calle central del pueblo.

Cristo, le da a la historia un final, que los fariseos condenadores, no esperaban

El padre actúa de tal forma que previene ese maltrato y empieza a restaurar y reestablecer la vida de su hijo menor.

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El padre corre al encuentro de su hijo.

En esa cultura los ancianos con dignidad nunca corrían.

Con este gesto del padre el hijo menor entra el pueblo bajo su protección El padre lo besa, como señal de perdón y reconciliación.

El hijo pronuncia parte de lo que había pensado decirle a su padre, pero omite la parte de ser un siervo.

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Decide aceptar el perdón, a pesar de las desventajas:

Vivir con su hermano

Recibir de la propiedad de él.

No poder ganar su sueldo.

Así el arrepentimiento verdadero es tragarse el orgullo y aceptar que cualquier relación con el padre será por la gracia de él.

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El padre le da su mejor túnica, asegurando una recepción positiva del pueblo.

Y al mandar a sus siervos a vestirlo, les indica cómo ellos deberían tratar a su hijo.

El anillo, representa la autoridad del padre para sellar decisiones.

Las sandalias, indican que es hombre libre de la casa.

Matar el becerro señala que todo el pueblo está invitado, por la cantidad.

El gozo se comparte con todos.

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El camino del hijo mayor es igual al de pródigo

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1. Viene (Vv. 25-26)

2. Tu hermano ha llegado bien ¡fiesta! (V. 27)

3. El padre viene a reconciliar (V. 28)

4. Queja 1—Cómo me tratas (V. 29)

4’. Queja 2—Cómo le tratas (V. 30)

3’. El padre intenta reconciliar (V. 31)

2’. Tu hermano ha llegado bien. ¡fiesta! (V. 32)

1’. ????????

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El hijo mayor, cuando vuelve de trabajar en el campo, reacciona con sospecha al escuchar la música.

Al llegar a la casa interroga a un joven (siervo), quizás para ver cómo fueron las circunstancias del regreso de su hermano.

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Decide no entrar a la casa para no asumir su papel como anfitrión:

Servir a otros.

Abrazar a su hermano.

Participar en el gozo de tener a su hermano de vuelta.

Al no hacer esto humilla a su padre y a los invitados, y muestra una brecha casi como la que existía entre el padre y el hijo menor al principio de la historia.

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El padre tiene el derecho de echarlo de la casa (Vasti en Ester).

Pero, por segunda vez, sale de la casa con amor, para humillarse él, en vez de humillar a su hijo.

Uno espera que la intervención del padre tenga el mismo resultado en el mayor, pero no.

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El hijo mayor no usa ningún título para su padre.

Hay una doble queja de su parte, y asume la actitud de un esclavo, no la de un hijo.

Parece estar interesado en un sueldo, no en la relación.

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Le dice a su padre que nunca le desobedeció, pero acaba de insultarlo en público.

El hijo pródigo quiso irse de la casa y era rebelde cuando no estaba en ella.

El hijo mayor era rebelde en su corazón estando en casa, y ahora no quiere ni entrar.

Al negar la relación con su hermano, niega también niega la relación con su padre.

Se ha expulsado a si mismo de la familia--¿la qesasah?

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El padre, otra vez, tiene el derecho de exigirle el mayor que entre la casa.

Pero como quiere un hijo, y no un esclavo ignora todo los insultos que recibe.

El gozo presente en este punto en las historias de la oveja y de la moneda perdidad, está ausente en esta otra parábola del hijo pródigo.

¿Será que el mayor quiere que su padre muera?

¿Será que está muerto el mayor por su rebeldía?

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El capítulo empieza con una queja por comer con pecadores.

Termina con una invitación a arrepentirse y a entrar.

¿Qué harán los fariseos y los otros oyentes?