bodas de oro

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[22/6/2009] Carta para unas bodas de oro matrimoniales Porque hoy no es para vosotros un día de tensión. s un día !estivo y de emo"iones muy diversas. # de tantos y tantos re"uerdos. $nos ser%n en "olores muy vivos& otros qui'% en blan"o y ne(ro. Compart ir )ueridos ami(os*  +o os preo"up,is& que el re!ranero tiene di"ho que -no hay mal que "ien aos dure. n !in& perdonad la broma& pero es bueno "omen'ar "on unas risas. sí desterramos la tensión y el nerviosismo. Porque hoy no es para vosotros un día de tensión. s un día !estivo y de emo"iones muy diversas. # de tantos y tantos re"uerdos. $nos ser%n en "olores muy vivos& otros qui'% en blan"o y ne(ro. Pero el "aso es que hoy mir%is al "ielo y os sentís pro!undamente a(rade"idos por tanta di"ha. +o importan las nubes o las preo"upa"iones& porque vuestra lu'& vuestra !eli"idad& os na"e de dentro. 1+o es "ierto # no pod,is ni deb,is evitar sentir un espe"ial or(ullo. 3irad ahora a vuestro alrededor& a toda esta !amilia que os quiere. 4a (usto. # todo !ruto del amor. 4e la entre(a y de la llama. 4e la ternura y del traba5o. 4el "ario y de la pa"ien"ia. # de la sobrenatural miseri"ordia de 4ios. o do "omen'ó "on aquella primera mirada& de la que ya 5am%s hab,is podido pres"indir. Con aquella atra""ión que po"o a po"o !ue "iment%ndose en vuestro "ora'ón. # di(o "ora'ón& en sin(ular& porque vosotros sois un 7ni"o "ora'ón& una 7ni"a "omunión de vida& de amor. 8ois un verdadero mila(ro de !eli"idad. s de"ir& de !idelidad. $na lealtad puesta a prueba durante el horario de vuestros días. Porque aunque ahora no se quiera "reer el amor es sobre todo una "onstante lu"ha& y un desa!ío. Porque "uesta "eder de nuestro e(oísmo y entre(arnos en "ada momento& sin rodeos. l amor e:i(e es!uer'o. ;o otro es un parip,. Cin"uenta aos. Cin"uenta aos donde os hab,is ido enamorando "on la madure' que da el alma& la rutina y las trastadas de los hi5os. Cin"uenta aos que es "omo si a"abaran de "omen'ar& tan 5óvenes os sentís& tan llenos de determina"ión y (o'o. # os pare"e el tiempo "asi una !i""ión.  +o es posible& no es posible que tato mila(ro hay a su"edido. Pero ahí los ten,is& a vuestro lado& mir%ndoos sin pestaear& o apartando de los o5os al(una que otra l%(rima. s vuestra !amilia. s vuestra 7ni"a& "ierta y verdadera ale(ría. s lo que sembrasteis. <ueno& pues ya veis la pu5an'a y la !eli"idad de los !rutos.  +o todo ha sido "olor de rosa. =a habid o "ir"unstan"ias duras& avatares en los que  pare"ía que ya no podíais m%s. 1;o m%s !%"il >ebelarse "ontra 4ios y abandonar el "amino. 4e5arse llevar por la pere'a& o por el brillo !u(a' de una quimera. 4e "ualquiera& da i(ual. # rendirse a la tenta"ión de turno. Pero el amor es tena' si se

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[22/6/2009]

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Queridos amigos:

No os preocupis, que el refranero tiene dicho que no hay mal que cien aos dure. En fin, perdonad la broma, pero es bueno comenzar con unas risas. As desterramos la tensin y el nerviosismo.

Porque hoy no es para vosotros un da de tensin. Es un da festivo y de emociones muy diversas. Y de tantos y tantos recuerdos. Unos sern en colores muy vivos, otros quiz en blanco y negro.

Pero el caso es que hoy miris al cielo y os sents profundamente agradecidos por tanta dicha. No importan las nubes o las preocupaciones, porque vuestra luz, vuestra felicidad, os nace de dentro. No es cierto? Y no podis ni debis evitar sentir un especial orgullo.

Mirad ahora a vuestro alrededor, a toda esta familia que os quiere. Da gusto. Y todo fruto del amor. De la entrega y de la llama. De la ternura y del trabajo. Del cario y de la paciencia. Y de la sobrenatural misericordia de Dios.

Todo comenz con aquella primera mirada, de la que ya jams habis podido prescindir. Con aquella atraccin que poco a poco fue cimentndose en vuestro corazn. Y digo corazn, en singular, porque vosotros sois un nico corazn, una nica comunin de vida, de amor. Sois un verdadero milagro de felicidad. Es decir, de fidelidad. Una lealtad puesta a prueba durante el horario de vuestros das.

Porque -aunque ahora no se quiera creer- el amor es sobre todo una constante lucha, y un desafo. Porque cuesta ceder de nuestro egosmo y entregarnos en cada momento, sin rodeos. El amor exige esfuerzo. Lo otro es un parip.

Cincuenta aos. Cincuenta aos donde os habis ido enamorando con la madurez que da el alma, la rutina y las trastadas de los hijos. Cincuenta aos que es como si acabaran de comenzar, tan jvenes os sents, tan llenos de determinacin y gozo. Y os parece el tiempo casi una ficcin.

No es posible, no es posible que tato milagro haya sucedido. Pero ah los tenis, a vuestro lado, mirndoos sin pestaear, o apartando de los ojos alguna que otra lgrima. Es vuestra familia. Es vuestra nica, cierta y verdadera alegra. Es lo que sembrasteis. Bueno, pues ya veis la pujanza y la felicidad de los frutos.

No todo ha sido color de rosa. Ha habido circunstancias duras, avatares en los que pareca que ya no podais ms. Lo ms fcil? Rebelarse contra Dios y abandonar el camino. Dejarse llevar por la pereza, o por el brillo fugaz de una quimera. De cualquiera, da igual. Y rendirse a la tentacin de turno. Pero el amor es tenaz si se sustenta en la esperanza y en la sinceridad mutua.

Os habis apoyado el uno en el otro, a veces sin ganas, sin palabras casi. Quiz sin entender del todo el sentido de la contrariedad o de la renuncia. Sin embargo es sobre esas renuncias y esas contrariedades sobre las que se sustenta la realidad de este da. Y su maravilla.

El amor, el amor El amor es decir s de nuevo (para toda la vida), el amor es la apasionada santidad de los sentidos, el amor es pasar el aspirador por la alfombra, el amor es un beso furtivo, el amor es la plena confianza en tu mujer o en tu marido, el amor es pedir perdn cuando ms nos cuesta, el amor es rezar juntos las caricias. El amor es vuestra presencia aqu y vuestro ejemplo.

Cincuenta aos de rutina, puede pensar alguno. Bendita rutina! As, tan infinita. Para m la quisiera. Que Dios os bendiga. Y que aprendamos a querernos como os queris vosotros.

Publicado por Guillermo Urbizu

CELEBRACIN DEL MATRIMONIOHOMILAS PARA BODAS

1. Homila para novios y pblico con una cierta preparacin y vivencia cristiana

TEXTOS: Gnesis 1,26-28.31a.

A IMAGEN DE DIOSEl hombre y la mujer, dice la Palabra, fueron creados a imagen de Dios. Queridos hermanos, habis pensado alguna vez con detencin sobre esto? Fuimos hechos a imagen y semejanza de Dios... No encontris en esto una grandeza muchas veces olvidada? Somos imagen de este Dios que en los textos de la Biblia se nos presenta como Padre, que da la vida, que crea belleza, que perdona sin fin, que ama por amor... El Dios de Jesucristo no suele hacer definiciones tericas acerca del amor; ms bien acompaa al pueblo con gestos concretos, con hechos precisos y preciosos de amor, situados en un marco y en unas personas determinadas. Como hoy, que en este marco y en estas personas determinadas, N. y NN., Dios har el gesto de unir su amor para siempre. A este gesto lo llamamos sacramento porque es un signo concreto de la intervencin del Padre en la historia de estos dos jvenes. El sacramento del matrimonio no entra ya en las nuevas generaciones por definiciones abstractas, sino cuando la vida de la pareja es de verdad un signo, es decir, cuando el hombre y la mujer se van definiendo como personas autnticas, y ejercen la tarea tan humana y tan divina de dar vida, crear belleza, perdonar siempre, amar por amor. No podra ser que vivir a imagen de Dios y vivir como personas autnticas fuesen, al fin y al cabo, una misma cosa?

EN LA MEDIDA DE DIOSHermanos, Dios ha privilegiado la unin del hombre y la mujer para que reflejara, fuese imagen, del amor que El nos tiene. Por tanto, si hubiera que medir la dignidad del amor de los esposos cristianos, habra que hacerlo con la medida de Dios... que est fuera de toda medida humana, gracias a su Hijo Jesucristo. Ya lo deca San Agustn: "La medida del amor es amar sin medida". Jesucristo, la imagen ntida del Padre, es la medida que vosotros habis escogido para vuestro amor. Sed siempre conscientes de ello. Los anillos que dentro de poco os intercambiaris, os recordarn siempre que estis participando de la alianza que Dios ha establecido con su puebio, sellada con un amor que no tiene principio ni fin; como un anillo que por su forma circular no se puede decir dnde empieza ni dnde termina.

JESUCRISTO, GARANTIA DE FIDELIDADHemos de partir siempre de que las personas son dbiles, inclinadas con frecuencia a olvidar sus compromisos, y que nuestro mundo siempre quiere hacernos ver las cosas como no son... Yo os preguntara: quin os puede asegurar a vosotros dos que seris fieles? Que garanta tenis que este amor que hoy florece no se agostar dentro de algn tiempo? Queridos hermanos, no pensis que el sacramento acte como un seguro vlido para todo riesgo. No. Si Jesucristo es vuestra medida, pensad que El tiene que ser tambin vuestra nica seguridad. Y cual es esta seguridad? Pues bien, la nica garanta que nos ha enseado Jesucristo es esta: Que t, N. te digas: "Amar tanto a NN, procurar entenderla tanto, la perdonar tantas veces, me sacrificar tanto por ella, si es necessario padecer tanto por ella, que acabar por descubrir que realmente la amo" Y que t, NN., te repitas: "Amar tanto a M, procurar entenderlo tanto, lo perdonar tantas veces, me sacrificare tanto por l, si es preciso sufrir tanto por l, que no tendr ms remedio que descubrir que lo amo". Este, y no otro, es el estilo de Cristo y el estilo de sus seguidores. Esta es tambin vuestra nica seguridad. Un matrimonio as, es indisoluble, pero no porque lo diga una ley, sino porque el amor lo hace fuerte. Quienes os encuentren por la vida, muy queridos N. y NN., necesitan que seis un signo claro y limpio de aquel Amor que no pasa ni se destruye. Vamos ahora a celebrarlo. Ojal vuestro gesto de hoy nos anime a todos a empezar de nuevo cada da el sublime deber de ser personas. A imagen de Dios.

2. Homila para novios conocidos slo durante la preparacin del matrimonio

TEXTOS: Gnesis 2,18-24

1. Dios ofrece la relacin hombre-mujer El libro del Gnesis (que acabamos de escuchar) explica ingenuamente que la vida al hombre no le funciona bien si est limitada al dominio de la naturaleza y de los animales. Por esto, Dios ofrece al hombre una nueva relacin, poniendo a la mujer a su lado y haciendo que se entreguen de tal modo que "sean una sola carne". Y esta unin no es slo una unin momentnea, sino una atraccin profunda, que tiende a durar para siempre; que es necesario alimentar con amor constante y que lleva a los dos a una realizacin ms plena de su persona. Esta es, pues, la unin que N. y NN. quieren, al celebrar hoy su matrimonio.

2. El amor de la pareja viene de Dios mismo. Esta es tambin la gran propuesta de Dios creador. Vale la pena vivir el amor de la pareja: un amor generoso, sin limites ni reservas; un amor que trabaja por superar las dificultades y que llega a ser vocacin de plenitud. Vale la pena creer en el amor de la pareja, porque Dios que es el Amor la ha creado a imagen suya. Vale la pena amar al otro, porque el amor de los esposos cristianos no es un amor cualquiera, sino que es el mismo amor que Dios nos ha comunicado y que se comparte. Esta gran propuesta de Dios para la pareja es la que vosotros, N. y NN aceptis vivir al celebrar en la Iglesia vuestro matrimonio.

3. El deber de los esposos cristianos Los esposos cristianos sois los que habis de anunciar al mundo con vuestra manera de vivir que la propuesta de Dios no es slo una utopia irrealizable, sino que es la fuente de la verdadera felicidad. Vosotros, los esposos cristianos, sois la luz del mundo y tenis que procurar que la gente al ver vuestra manera de amaros glorifique al Padre del cielo. Los esposos cristianos habis de cuidar de que vuestros hijos cuando lleguen descubran, a travs de vosotros, la grandeza del Amor de Dios y se sientan acogidos y amados por El. * * * * * * NN. y N.: Felicidades por vuestro amor! Que toda vuestra vida sea una donacin generosa del uno hacia el otro! Que el amor y el servicio a los hermanos muestre claramente vuestra respuesta a la llamada que Dios os hace hoy.

3. Homila sencilla.

TEXTOS: Tobas 8,5-10

1. Una historia repetidaEsto que hacis hoy vosotros, vuestro compromiso de amaros y de hacer crecer siempre vuestro amor, es como continuar una historia repetida muchas veces antes que vosotros, y que se seguir repitiendo despus de vosotros: vosotros dos os conocisteis un da, os sentisteis atrados el uno hacia el otro, habis caminado juntos durante un tiempo y habis experimentado que juntos erais felices, y que tenais deseos de compartir esta felicidad y toda vuestra vida para siempre. Amigos, familiares, vuestros padres, mucha gente ha dado este mismo paso que vosotros, gente que conocis y que apreciis, y que hoy os acompaan con gozo. Pero mucho antes, hace muchos siglos, mucha ms gente ha hecho lo mismo. Por ejemplo, estos dos jvenes cuya historia hemos escuchado en la lectura que acabamos de hacer: Tobas y Sara. Una historia seguramente parecida a la vuestra: un muchacho y una muchacha que se encuentran, se atraen, se aman y hacen de su amor una unin estable, para siempre. Aunque, si queris, todava podemos ir ms atrs, mirando las pginas de la Biblia, al comienzo de todo: aquella conocida historia de Eva, formada de la costilla de Adn, y la exclamacin gozosa de Adn al sentirse atrado y unido a ella.

2. Una historia nicaEs una historia repetida, gozosa, llena de empuje y de fuerza, un signo de que la vida va adelante, un estimulo lleno de ilusin. Una historia repetida, pero a la vez una historia nica, propia de cada uno. Sera hermoso que ahora, por ejemplo, os adelantarais aqu vosotros dos y nos explicaseis el camino que habis recorrido hasta llegar a este momento: cmo os conocisteis, cmo habis vivido todo este tiempo, las ilusiones que tenis y tambin los temores... (no, no tengis miedo, que no os lo har hacer: os pondras demasiado nerviosos). Pero digo que seria bonito porque nos daramos cuenta de que vuestra historia es nica, como es nico y propio vuestro amor, diferente de todos los dems.

3. Saber estar el uno para el otroYo os deseo que la etapa nueva que hoy comenzis la sepis vivir siempre con la misma ilusin que hoy os llena el corazn. Para esto tendris que saber estar en todo momento el uno para el otro, que aprendis cada da a conoceros y a amaros un poco ms, que no os creis que todo funcionar bien por s solo. Y os deseo, igualmente, que hagis vuestras algunas de las afirmaciones que hacan Tobas y Sara en la lectura bblica. Por ejemplo, lo que deca Tobas, que no se casaba para satisfacer sus pasiones. Las pasiones pueden ser de muchas clases: querer tener siempre la razn, imponer el propio criterio sea como sea, no tener en cuenta los sentimientos del otro... (Y eso tanto puede pasar en la vida sexual como en el momento de programar las vacaciones como en la distribucin del trabajo en casa, como en...).

4. Saber tener a Dios presenteY sobre todo me gustarta que hicierais tambin vuestro ese espritu de fe con el que Tobas y Sara vivieron su casamiento. Vosotros lo habis querido celebrar aqu en la iglesia, delante de Dios. Tenedlo presente, a Dios, a lo largo de vuestra vida. Que El os acompae, os ayude, os anime siempre. Hacedlo conocer a los hijos que tengis. Y que toda vuestra vida est llena de su amor.Y dejadme acabar todava con el deseo y la oracin que haca Sara: que los dos juntos vivis felices hasta la vejez. Amn.

4. Homila para novios conocidos (amigos) en forma de felicitacin.

TEXTOS: Romanos 12,1-2.9-18

Queridos novios: En el marco de la celebracin litrgica de vuestro matrimonio, permitidme unas palabras de homila que ms que una reflexin hecha ya en la catequesis prematrimonial quieren ser una felicitacin en nombre de todos los aqu presentes.

La Palabra de Dios nos ha hablado del sentido que el mismo Seor da al amor y del pensamiento cristiano de este amor en la pareja humana. Y vosotros queris vivirlo.

Os habis encontrado y os habis amado. Ahora, despus de unos aos de crecer y madurar el amor, ha llegado el momento de darle una consistencia ms plena, de hacer un compromiso. El momento de dar vuestro si a la vida y al amor.

En el da de vuestro matrimonio, os deseamos, pues, que en vuestra vida matrimonial vivis en cristiano el amor que hoy os prometis, y que hagis viva y real en vosotros la Palabra de Dios que hemos proclamado, para que seis totalmente felices.

Que el amor vaya creciendo ms y ms cada da en vosotros! Que siempre sepis compartir la felicidad y abrir vuestros corazones a los dems! Esto os har todava ms felices.

Y ahora, delante de Dios, delante de la Iglesia, delante de la sociedad humana, delante de vuestros padres, familiares y amigos, celebrando el sacramento de vuestro matrimonio, daos mutuamente el consentimiento que os convertir en esposo y esposa. FELICIDADES Y POR MUCHOS AOS.

5. Homila para novios conocidos y pblico medio

TEXTOS: 1 Corintios 12,3113,8a.

1. La fiesta del amorAmigos: hoy celebramos una fiesta y una fiesta grande. N. y NN., que todos sabamos desde hace tiempo que se amaban, que no podan pasar el uno sin el otro, hoy quieren hacerlo claramente pblico delante de todos, lo quieren celebrar con esplendidez y por esto os han invitado a todos vosotros, a sus familiares y amigos, a esta fiesta, la fiesta de su amor. A veces, cuando uno hace el comentario de la Sagrada Escritura, se le hace difcil porque piensa: "Tal vez no me entendern". Hoy me parece que todos estamos de acuerdo, que coincidimos perfectamente: El amor es lo ms importante y deseamos a NN. y N. que el "amor no pase jams" de su vida.

2. Ser felizSan Pablo, con su estilo particular, nos lo deca: "Ya podra yo hablar las lenguas de los hombres y de los ngeles... ya podra tener una fe como para mover montaas... Si no tengo amor, no soy nada". Hay personas todos las conocemos que se creen que son felices porque nada les falta, han triunfado en la vida, se pueden relacionar con todo el mundo e ir por todas partes porque hablan idiomas. Hay tambin personas que ocupan un lugar de decisin en las empresas o en la Administracin y tienen a mucha gente a sus rdenes, prontos a satisfacer sus mnimos deseos. Pero si no aman, no pueden ser felices. Son desgraciados, aunque aparenten lo contrario. Tambin hay parejas que se haban casado totalmente enamoradas. Al menos lo pareca externamente. Qu les ha pasado? Sencillamente: que han dejado escapar el amor de su vida. Seguramente que un da, muy enamorados, se dijeron que se amaban; despus, a lo mejor, se lo diran rutinariamente, hasta que un da se olvidaron de ello o se cansaron.

3. El amor sale por todas partesTodo el mundo cree que sabe amar. El amor sale por todas partes: en cualquier novela o pelcula. En la televisin, en la radio, por la calle. En todo tiempo y en cualquier parte sale el amor como protagonista o como trasfondo. Pero esto que llaman amor es amor autntico o es slo una caricatura? La diferencia entre una foto autntica y una caricatura es que la foto da una Imagen perfecta y completa, mientras que la caricatura es la exageracin de los aspectos grotescos, que recuerda algo de ella, pero es una imagen deformada. Y el amor que nos venden estos medios de comunicacin no es una imagen fiel del amor, es slo una caricatura.

4. Qu se tiene que hacer para amarQu es el amor? Qu se tiene que hacer para amar? San Pablo, en este prrafo que hemos ledo y que tiene ms de 1900 aos, pero que an es totalmente vlido para nuestro tiempo y para vosotros dos, nos lo describe: "El amor es comprensivo, el amor es servicial y no tiene envidia; el amor no presume ni se engre, no es mal educado ni egosta, no se irrita, no lleva cuentas del mal, no se alegra de la injusticia, sino que goza con la verdad. Disculpa sin lmites, cree sin limites, espera sin limites, aguanta sin lmites". Qu quiere decir ser comprensivo, no llevar cuentas del mal, no irritarse? Que os tenis que aguantar porque no queda otro remedio, porque habis firmado unos papeles que dejarn constancia de que sois esposo y esposa? San Pablo no quiere decir esto. De ninguna de las maneras. San Pablo quiere decir que os tenis que respetar y amar tal como sois, como personas diferentes, con vuestro carcter propio, con vuestros respectivos defectos y cualidades, es decir, con vuestra diferente personalidad. Seguramente que durante el noviazgo habris discutido muchas veces, que hay muchos aspectos con los cuales no vais de acuerdo. Pues bien, esto el matrimonio no lo arregla: seguiris discutiendo y no estaris de acuerdo. Pero tenis que respetar vuestros puntos de vista. Que esta divergencia os enriquezca. Que veis las cosas no slo desde el punto de vista de cada uno sino tambin como las ve el otro. As tendris una visin ms completa y ms objetiva de cada punto.

Disculpar sin lmites, creer sin limites, esperar sin lmites, aguantar sin lmites, significa esto: teneros confianza total, deciros las cosas. Que lleguis a conoceros tanto que seis capaces de adivinaros los pensamientos y sentimientos para poderos hacer felices el uno al otro. Y esto lo tenis que hacer hoy, que sin duda ser fcil y hermoso hacerlo, pero tambin maana y la prxima semana y dentro de diez aos y de cincuenta y siempre. Si lo hacis os aseguro que seris felices, porque el amor no pasar nunca de vosotros ni de vuestra vida. Vosotros tenis la palabra.

6. Homila conteniendo una catequesis elemental sobre el sacramento del matrimonio. Para bodas de novios con poca formacin cristiana.

TEXTOS: 1 Corintios 12,3113,8

1. Existe ms de un modo de casarseLa celebracin del matrimonio es tan antigua como la misma humanidad. Desde siempre, la fundacin de un nuevo hogar ha sido un motivo de gozo y de fiesta para la sociedad dentro de la cual tena lugar este acontecimiento. Ha habido y hay tantos modos de casarse como modos de vida en sociedad, como culturas. Hoy mismo, lo sabis igual que yo, las personas que no consideran la dimensin religiosa de su vida, celebran el matrimonio "civilmente", como dicen. Matrimonio que es necesario respetar y apreciar en su justo valor.

Pero vosotros habis escogido la celebracin de vuestro matrimonio de una manera determinada. En el modo corriente de hablar se llama "matrimonio por la iglesia"; pero es evidente que la caracterstica "por la iglesia" no le viene por el lugar donde se celebra, sino por la manera como la Iglesia lo entiende. Los cristianos que "se casan por la iglesia" expresan que su manera de entender el matrimonio, y la vida matrimonial que seguir, est de acuerdo con la manera como la Iglesia los entiende.

2. Qu quiere decir "casarse por la Iglesia"Y de qu modo entiende la Iglesia el matrimonio y la vida matrimonial?Antes de nada, es necesario insistir que en su manera de entender el matrimonio y la vida matrimonial,. la Iglesia quiere integrar todo lo bueno que hay en el corazn del hombre, Es decir, no podra haber una buena boda "por la Iglesia" si, para empezar, el hombre y la mujer que se casan no fuesen un hombre bueno y una mujer buena (no simplemente un buen hombre y una buena mujer). Cul es pues, la caracterstica propia de la boda por la Iglesia? La Iglesia piensa que el matrimonio y la vida matrimonial toman por modelo e ideal de su amor conyugal la manera como los esposos se saben amados por Dios Padre viendo todo lo que Jesucristo ha hecho para amarlos. Los cristianos estamos convencidos que nadie nos ha amado tanto como Dios Padre y que su amor eterno e infinito ha tomado un rostro humano en la persona de Jess de Nazaret, que pas por el mundo haciendo el bien. Este es el modelo y el ideal de amor de los esposos cristianos.

3. El mensaje de las lecturasEn las lecturas que hemos proclamado aparece expresada de diferentes modos la forma como hemos sido amados por Dios. Jess, al despedirse de los discpulos pocas horas antes de la pasin les recomienda que perseveren (que duren) en su amor, como l mismo es perseverante en su amor hacia el Padre. Si lo hacen as, tendrn la misma alegria que l tiene. Estas palabras las habis de escuchar como dichas a vosotros mismos que os casis: si sois capaces de amaros el uno al otro de esta manera como sois amados por Jesucristo tendris el gozo ms profundo que jams pueda existir y que nada en el mundo os podr arrebatar. Pienso tambin que san Pablo, cuando escriba lo que hemos ledo en la primera lectura, tena presente (aunque no lo diga) la manera como hemos sido amados por Jess. Cuando dice: "El amor es comprensivo, el amor es servicial y no tiene envidia... Disculpa sin limites, cree sin lmites, espera sin lmites. El amor no pasa nunca", lo que hace es describirnos cmo hemos sido amados cmo somos amados por Jess. He aqu, pues, el modelo de nuestro amor.

4. El Sacramento del MatrimonioPero an hay algo ms en esto de "casarse por la Iglesia". Hemos conocido que Dios Padre nos ama porque hemos visto y palpado de qu modo Jess ha amado a los hombres. Los novios cristianos no solamente "se casan por la Iglesia" sino que lo que hacen es celebrar el Sacramento del Matrimonio. Y esto quiere decir que, el uno para el otro, y los dos ante los que los rodean, tienen que manifestar visiblemente, tangiblemente, el amor que Dios les tiene. Quiero decir: el amor invisible de Dios hacia los hombres se ha hecho visible en lo que Jess ha dicho y hecho. Ahora, en el matrimonio el amor de Jess tiene que hacerse visible a travs de los gestos de amor que os daris el uno al otro. El esposo conocer que Jess lo ama, por el amor que le demostrar su esposa; la esposa conocer que Jess la ama, por el amor que le demostrar su esposo. Y ms adelante, si es voluntad de Dios, los hijos conocern que Jess los ama por el amor que los padres se tendrn entre si y por el amor que los dos tendrn hacia ellos. Todo esto quiere decir "casarse por la Iglesia"; todo esto quiere decir "celebrar el Sacramento del Matrimonio". Esta es vuestra boda. Os felicitamos de todo corazn. Es un proyecto de vida grande y hermoso. El Seor no os faltar en su ayuda para que lo podis conducir a buen trmino. Vosotros procurad por vuestra parte serle fieles en todo.

7. Homila para pblico medio: el sentido cristiano del sacramento del matrimonio

TEXTOS: 1 Corintios 12,31 - 13,8a

Hermanos: acabamos de escuchar una de las pginas ms hermosas del Nuevo Testamento: el elogio del amor que hace san Pablo en su carta a los cristianos de Corinto. Seguramente, mientras la escuchabais, muchos habris pensado que este texto era muy adecuado para el acto que hoy nos congrega en torno a NN. y N. para celebrar la fiesta en que consagrarn definitivamente su amor. La pgina que se nos ha proclamado es un elogio del amor realmente atrayente: los novios la han elegido seguramente porque han visto en este texto algo que puede ser como el ideal de su nueva vida de casados: "El amor es comprensivo, el amor no presume ni se engre, no es egosta, espera sin lmites, aguanta sin lmites..." Pero me atrevo a decir que muchos de los que hoy estis aqu presentes, acompaando a los novios, no sois tal vez tan optimistas como ellos. Ser verdad que NN. {la novia) "disculpar sin limites"?, sabr N. (el novios ser siempre "servicial y no egosta"? Hoy que tenemos tanta aficin a hacer encuestas, sera muy interesante hacer una ahora entre los presentes para saber qu piensan del amor de estos novios. Seguramente algunos responderan que N. y NN. son ciertamente unos novios ejemplares, que sabrn amarse toda la vida, que ofrecen reales garantas de ser un matrimonio slido. Otros, tal vez no tan optimistas, pensis que hoy estos novios lo ven todo de color de rosa.. pero as que pase un poco de tiempo, ellos mismos experimentarn que el matrimonio no es tan fcil como hoy se lo imaginan, que la vida de casados tiene ms dificultades de lo que piensan, que no todo es tan bonito como ellos creen hoy. Si me preguntaseis a m lo que pienso del amor de estos novios... Pero por qu tengo que decirlo? Al fin y al cabo, yo tambin me puedo equivocar como los otros y, en realidad, si yo estoy hablando mientras vosotros escuchis en silencio, no es ni porque yo sea ms importante, ni ms sabio, ni porque tenga ms probabilidades de prever el futuro de los novios. Yo hablo ahora nicamente porque en este momento represento a Jesucristo, y ocupo entre vosotros, los discpulos, el lugar del Seor No me preguntis, pues, lo que pienso yo sobre el amor de estos novios. Exigidme, eso s, que os anuncie lo que dice Cristo sobre el amor, sobre aquel amor de los novios cristianos que es fortalecido por el sacramento del matrimonio. La lectura que hemos escuchado nos habla de un "amor que lo disculpa todo, que espera y aguanta sin lmites, que no es egosta, que no pasa nunca..." Este amor se realiza totalmente slo en el novio perfecto. Este novio perfecto es Jess. Porque Jess tuvo una novia, escogi una amada, celebro sus bodas con una esposa. La esposa de Jess es la Iglesia. La amada de Jess es la humanidad. Y Cristo, con esta esposa suya ha realizado el ideal del amor: "lo ha aguantado todo, lo ha disculpado todo, y su amor por ella no pasar nunca". Aqu, presidiendo vuestro pacto de amor, tenis la imagen de este novio perfecto: Jess clavado en la cruz por amor a ella, a su amada, a la humanidad que es su esposa. As am El, hasta la muerte, a su amada. Vuestra unin nupcial, N. y NN., no es simplemente un matrimonio como el de los dems,'sino que, como cristianos que sois, es tambin sacramento. Esto quiere decir que vuestro pequeo amor humano no os ofendis porque diga "pequeo amor", cuando vosotros pensis que es inmenso, porque todo lo que es humano es pequeo y dbil hoy ser como injertado en el amor nupcial de Cristo para su Esposa, la Iglesia, amor que, ste s, es "comprensivo, servicial, no se irrita, lo disculpa y lo aguanta todo". Es muy posible que muchos de vosotros pensis que la afirmacin de que el matrimonio de los cristianos est como insertado en el amor indefectible de Cristo por su Esposa y que participa de su fortaleza, es una hermosa alegora, una visin potica y sugerente, pero que la realidad es muy distinta, ya que tambin los que se casan por la Iglesia, aquellos cuyo matrimonio es sacramento, con frecuencia son tambin deficientes en el amor y que incluso llegan a separarse, como los otros. A esto os contestara muy sencillamente: los novios recibirn hoy como don, como gracia el amor nupcial de Jess, para fortalecer su amor humano; pero este don lo pueden echar a perder. Es un tesoro que ellos reciben en unos recipientes frgiles, que son sus propias personas humanas. Este don lo pueden pues, perder y estropear.Por eso precisamente quiero terminar dirigindome a vosotros, los amigos de los novios. En este momento os pedira que no engais a vuestros amigos. Los engaarais, sin duda, si, estando como estis en un lugar de oracin esto es la iglesia no rezaseis por ellos en este momento en que tanto lo necesitan. El Seor derramar hoy sobre ellos su gracia y confirmar su amor nupcial injertndolo en el amor nupcial de Jesucristo. Pero ellos tienen el peligro de desperdiciar este regalo de Dios. Oremos, pues, para que reciban el don de Dios santamente y para que lo hagan fructificar abundantemente durante toda su vida de esposos cristianos.

8. Homila para novios con preparacin y vivencia cristiana.

TEXTOS: 1 Juan 4,7-12

La lectura que acabamos de escuchar nos ayuda a descubrir algunas caractersticas del acto que estamos realizando. Es una celebracin. Celebracin quiere decir fiesta, gozo, alegra... y realmente el acto que estamos celebrando es expresin de gozo, alegra y fiesta. Dios est con vosotros. Vosotros, novios, os amis y por esto Dios est con vosotros. No hay gozo ms grande que ste. A medida que crezcis en vuestro amor tambin este Dios, que es Amor, al cual nadie ha contemplado jams, se har mucho ms presente en vosotros. A travs de la realidad de vuestro amor humano, Dios se hace presente en nuestro mundo. Sois signo, sacramento de Dios. Sois "misterio", esto es: a travs de vuestro amor se hace presente la accin salvadora de Dios. Es una accin de gracias. Es una consecuencia del hecho anterior. El gozo se transforma en gratitud. Es Dios quien os ha amado en primer lugar y le dais gracias porque os ha elegido para ser testigos y signos de Aquel que nunca nadie ha contemplado. Ojal seis lo que sois! Que todos los que contemplen vuestro amor puedan descubrir el amor de Dios. "Quien no ama desconoce totalmente a Dios, porque Dios es amor". Que a partir de la experiencia profunda de vuestro amor mutuo os elevis al conocimiento del amor de Dios. Es un compromiso. "Si Dios nos ha amado tanto, tambin nosotros tenemos que amarnos". El amor de Dios, manifestado en Jesucristo, tiene que ser el ideal de vuestra vida. Los esposos, sabiendo que su amor mutuo es y tiene que ser como decamos antes signo del amor de Dios a los hombres y del amor de Cristo a su Iglesia, tienen que descubrir, en este modelo que han de imitar, el prototipo que su amor conyugal debe realizar. Descubriendo en qu consiste el amor intentarn aplicarlo a su vida concreta de casados. Es tambin un compromiso de dar vida. "En esto se manifest el amor que Dios nos tiene: en que Dios envi al mundo a su Hijo nico para que vivamos por medio de l". Evidentemente que vuestro amor tiene que ser fecundo en los hijos, pero vuestra fecundidad no puede quedar ah. Habis de ser fecundos para vosotros mismos, ayudndoos mutuamente a llegar a ser cada vez ms personas, a serlo cada vez ms. Quien os mira desde fuera tendra que ver claro que vuestro amor se orienta hacia el ser y no hacia el tener ms. No sois un equipo de trabajo sino una comunidad de amor para llegar a ser una sola carne. Tambin vuestro amor tiene que dar vida a la sociedad, no puede quedar cerrado en las paredes del hogar; pensad que sois miembros de un pueblo que necesita de vuestra entrega. Finalmente sois miembros de la Iglesia que tambin necesita de vuestra participacin. Es un encuentro. Es un encuentro con Jess que os acompaar siempre en vuestra vida de casados. A travs de la plegaria y del esfuerzo tenis que hacer que su presencia acte siempre en vosotros, que os ayude da tras da a crecer en el amor, a superar las dificultades, a llegar a ser de verdad una sola carne.

9. Homila para novios con proyecto cristiano definido, y pblico vario.

TEXTOS: 1 Corintios 12,3113,8; Mateo 5,1-12

N y NN. nos han invitado a ser testigos de la fiesta de su amor. No es un amor cualquiera, sino un amor que para ellos procede de Dios. Un amor que tiene como marco dos historias de fe que se encuentran como proyecto, vivir con sencillez las Bienaventuranzas y como caractersticas las que nos ha proclamado la carta de Pablo de Tarso.Ellos saben que vivir este estilo, hoy, en nuestros ambientes, no es nada fcil; por esto nos piden que los ayudemos y nos invitan tambin a vivir este estilo. Permitidme explicar este deseo suyo con un ejemplo: este estilo de vida que nos proponen es parecido a una carrera de bicicletas. Solamente la pueden ganar, aquellos: que tienen un buen entrenador que les indica los momentos claves de la carrera, que actan serenamente, sin nervios, con una sana alimentacin y con la atencin puesta en lo que estn haciendo, que tienen sentido de equipo. No corren solos. Saben que cuando las fuerzas fallan o el cansancio se hace manifiesto, tendrn quien los anime, y si es necesario, los releve. NN. y N creen que su historia de amor la pueden conducir a buen trmino porque a semejanza del ejemplo: tienen un buen entrenador: Jess. El les da y nos da a todos nosotros un plan de carrera: las bienaventuranzas; tienen un estilo sereno y personalizados para llevar adelante este plan: vivir con sencillez la vida de cada da y hacer caso de las indicaciones de san Pablo: "El amor es comprensivo, el amor es servicial y no tiene envidia; el amor no presume ni se engre; no es mal educado ni egosta; no se irrita, no lleva cuentas del mal; no se alegra de la injusticia, sino que goza con la verdad. Disculpa sin lmites, cree sin lmites, espera sin Imites, aguanta sin Imites". tambin creen en una vida de equipo. Ya hace tiempo que la han iniciado y ahora la quieren llevar hasta las ltimas consecuencias. Vida de equipo no cerrada a ellos solos, sino abierta: a los futuros hijos que puedan venir, a la sociedad: familiares, amigos, vecinos, trabajo....a la Iglesia: saben que su historia de amor la comparten con una comunidad de seguidores de Jess, que, como ellos, hacen camino hacia la Casa del Padre. Ante este acontecimiento os invito a reflexionar y, a los creyentes, a dar gracias a Dios en la Eucarista.

10. Homila breve para una pareja joven.

TEXTOS: Mateo 5,13-16

Me parece que no corro el riesgo de equivocarme si os profetizo, N y NN., que hoy la palabra que ms escucharis (la palabra que probablemente ya ms habis escuchado) ser la palabra felicidades. Por eso permitid que os la diga tambin yo: Felicidades. Y que os la diga no slo en nombre mio, sino en nombre de la Iglesia: que hoy sea un da feliz para vosotros, un da que presagie un camino de humana y cristiana felicidad para vosotros, en esta nueva y tan importante, etapa de vuestra vida cayo inicio hoy celebris y celebramos. Pero inmediatamente quisiera aadir un ruego. Un ruego que os hago tambin no slo en nombre mo, sino me parece que no me equivoco en nombre de todos los que hoy os acompaan. Y dira ms: en nombre de aquellos que os acompaarn, ao tras ao, por este camino que hoy se inicia (de un ruego incluso si me permits decirlo en nombre quizs de quienes an no han nacido y pueden ser fruto de vuestro amor). El ruego es que seis fieles a lo que hemos escuchado en el evangelio. Es decir, que procuris ser sal y luz para los dems. Sencillamente, pero tambin generosamente.

AMAR ES COMPARTIRJess, en el evangelio, os ha dicho: "Vosotros sois la sal de la tierra... Vosotros sois la luz del mundo...". Os lo ha dicho a vosotros. N. y NN. porque El espera mucho de vosotros (como tambin nosotros esperamos de vosotros). Espera que seis sal que sazone y d vida a los dems; espera que seis luz que ilumine y d calor a los dems. Celebramos hoy el sacramento de vuestro amor, pero este vuestro amor no debe quedar encerrado en vosotros. Como cualquier riqueza, como cualquier belleza, como cualquier verdad, debe comunicarse, debe ayudar a los dems. Eso es lo que hoy os pedimos. Amar es compartir. En primer lugar evidentemente entre vosotros dos. Cada vez ms, en las alegras y en las dificultades. Cada vez ms, con ilusin pero tambin con esfuerzo, con tenacidad, para que vuestro amor no slo se conserve, sino que aumente con los aos. Sin perder nada de su fuerza joven y adquiriendo la solidez de la madurez. Amar es compartir. Tambin con los dems. Con vuestros familiares, con vuestros amigos, con todos aquellos que compartan vuestra vida ahora y en el futuro. Tambin, as lo esperamos y lo esperis, con vuestros hijos, deseados y queridos, como vosotros habis sido deseados y queridos por vuestros padres. Y quisiera deciros que as, compartiendo vuestro amor, vuestro amor crecer y se enriquecer. Ser sal y luz de vida.

DIOS COMPARTE VUESTRO AMORPermitid que termine estas palabras de felicitacin y tambin de ruego, aadiendo una cosa. Os he rogado que compartis con todos la riqueza de vuestro amor. Ahora debo aadir algo que puede y debe dar fuerza y esperanza y alegra a este vuestro compartir. Y es que es Dios, nuestro Padre, el Padre de todos, quien comparte vuestro amor. Es un don, una gracia suya. Un don y una gracia sal y luz que no os abandonar nunca, que siempre har camino con vosotros.Por eso decimos los cristianos que el amor entre marido y mujer es un sacramento un signo, una manifestacin, una revelacin del amor que Dios nuestro Padre nos tiene. Por eso terminaba el evangelio que hemos ledo diciendo que 'los hombres, viendo vuestras buenas obras viendo vuestro amor darn gloria a vuestro Padre que est en el cielo". N y NN., que as sea. As ser. Y que todos os acompaemos y en lo que a cada uno toque os ayudemos, en vuestro camino que Dios bendice y bendecir.

11. Homila para novios conocidos y pblico medio

TEXTOS: 1 Juan 4,7-12; Mateo 7,21.24-29

Hoy os habis reunidos en la iglesia con un gran sentido de fiesta. Una fiesta que habis previsto y preparado a conciencia desde hace tiempo. En primer lugar, vosotros, los novios, que sois los protagonistas de ella; tambin vuestros padres y otros familiares, adems de los amigos que habis querido que os acampaasen en esta solemne ocasin. Todos habis sido fieles a esta cita previamente sealada.

1. La fiesta del amor Vosotros, novios, ciertamente que no habis improvisado este momento. En un da concreto de vuestra vida, que sin duda recordis muy bien, empezasteis a conoceros y naci entre vosotros la semilla del amor que ha ido madurando cada da ms. Ha madurado tanto, que os habis visto capaces de arriesgaros a empezar un nuevo camino en vuestra vida, una nueva etapa en vuestra existencia. La reunin con motivo de una boda es siempre una fiesta del amor, una exaltacin del amor, lo ms bello y perdurable que Dios ha hecho brotar en el interior de las personas. Si sentimos en nuestro interior la capacidad de amar es porque Dios nos ha amado primero y nos ha llamado a parecernos a El siguiendo este camino de felicidad. "Si Dios nos am de esta manera, tambin nosotros debemos amarnos unos a otros". Esta es la conclusin a la que llega san Juan en la lectura que hemos escuchado.

2. La vida debe forjar todava ms vuestro amorLa comparacin de la casa edificada sobre roca o sobre arena, que nos ha presentado el evangelio, tiene una gran incidencia en la pareja que empieza un nuevo hogar con decisin de continuidad cara el futuro. Antes ha salido la palabra riesgo. Tomar la decisin de compartir en totalidad una vida es hacer una opcion bastante arriesgada. Esto no est precisamente reido con la fe cristiana. Al contrario. La fe, el seguimiento de Jesucristo, presenta siempre unas connotaciones de riesgo y de aventura, mucho mas si se le aade el empuje y la generosidad juveniles. Ser consciente de la dosis de riesgo que comporta vuestra decisin significa recordar que es preciso hacerla con realismo y tocando con los pies en el suelo. El fundamento de vuestra unin y de vuestros proyectos de futuro es el amor. Si el amor es pura ilusin y fantasa, si se ha configurado slo a partir de superficialidades y de fachada, ser un fundamento arenoso y movible y se hundir frente a cualquier contrariedad que se presente en la vida. Si el amor, en cambio, ha ido creciendo a travs de un mutuo conocimiento realista, a travs de reflexionar en qu sois iguales y en qu diferentes, intercambiando siempre vuestros hechos, vuestras reflexiones y actitudes, el fundamento ser la roca firme, capaz de resistir cualquier impetuosidad del viento. La vida compartida y de convivencia en el hogar tiene sus momentos dulces y sus momentos speros. Preguntadlo si no, a estos vuestros amigos que os acompaan y que llevan ya algunos aos casados. Si vuestro amor es fuerte, cualquier situacin buena o mala os servir para fortalecerlo todava ms y para ir madurndolo en este largo aprendizaje del conocimiento y de la convivencia. Empezad, pues, esta nueva etapa con ilusin y gozo, convencidos, por otra parte, que la vida tiene que forjar todava, en gran parte, vuestro amor.

3. No hagis solos el caminoTodos los que os acompaamos en este da tan vuestro, deseamos sinceramente que vuestro amor sea fuerte y perdurable. No hagis vuestro camino en solitario. Tened vuestro hogar abierto siempre para ayudar y para dejaros ayudar. Y todos los que acompais a los novios en su fiesta no dejis que hagan solos su camino. La amistad no es algo de un momento ni de un da. Es necesario que tenga continuidad y, en circunstancias concretas, vuestra presencia puede serles de gran ayuda. Si ellos toman hoy su compromiso delante de nosotros, tambin nosotros debemos sentir un poco esta responsabilidad.

4. El Seor est presente con su fuerzaVosotros habis querido dar una significacin cristiana a vuestra boda. Si Dios, nuestro Padre, ha iniciado en vosotros este amor os dar la fuerza necesaria para llevarlo a buen trmino. En El podis confiar plenamente. Su amor est visiblemente presente en esta fiesta de hoy a travs del sacramento y se har tambin presente durante toda vuestra vida.

12. Homila para novios y pblico no practicante. TEXTOS: Gnesis 1,26-28.31a; Mateo 19,3-6Da grande, da de gozo. Hoy todo es movimiento. Parece que todo sea diferente. Y vale la pena que sea as. Decir que uno es feliz y compartirlo es algo muy grande. Este es vuestro deseo, hoy, N. y NN. Hace poco nos encontramos, y compartimos juntos vuestras vivencias. Hablabais bien de los amigos y os sentais contentos de que compartiesen este da, junto con los familiares Tambin yo, sumndome a ello, si me lo permits, os dir dos palabras que hoy me han llamado la atencin. Porque son palabras de movimiento.

1. La palabra "hagamos"La he sacado de la primera lectura: "Hagamos al hombre a nuestra imagen". Dios quiere lo mejor para el hombre y la mujer. Por esto dice: "hagamos". Y entonces parece como si todas las palabras tuvieran vida: cre, bendijo, creced, dominad, vio. Como vosotros dos hoy. Hagamos. Todo es ilusin, proyectos. Algunos de ellos ya son realidad. Otros tienen que continuar hacindose y otros tienen que empezar todava. Hacedlo todo con ilusin. Como hoy. Cuando sea necesario el esfuerzo, no os desanimis. Si hoy os encontris aqu, es porque habis hecho mucho. Habeis vencido la rutina y el desnimo. Son la polilla del amor. Hay que luchar para que no destruyan el amor creado. La historia del mundo se ha construido porque hombres y mujeres han "hecho". Vuestra historia continuar construyndose. En vuestras manos est la herramienta: ser acogedores, comprensivos, dialogar y escuchar.

Hacedlo. Y se podr decir que habis construido un amor que bien vale la pena. Haris realidad las palabras del Gnesis: que Dios cre el hombre a su imagen, lo cre hombre y mujer. Y ojal que de vosotros se pueda decir que todo lo que habis hecho es verdaderamente bueno.

2. La otra palabra es "abandonar"Tambin lo dice el evangelio: "Por eso abandonar el hombre a su padre y a su madre, y se unir a su mujer". Tambin vosotros, por el paso de hoy, habis tenido que abandonar muchas cosas. Entre ellas, a los que os han enseado a amar y vosotros amis: vuestros padres. Padres, nadie os va a dejar solos. Al contrario, vuestro amor se ensancha. NN. y N., como mensajeros vuestros, porque es de vosotros de quienes han aprendido a amar y amarse, construyen una nueva familia. Poneos a su lado. Y todos nosotros, familiares y amigos, tengmoslos en nuestro pensamiento, rezando por ellos. Que se amen, que se realicen, y que su hogar sea abierto y acogedor.

13. Homila para ambiente vario, pero de una cierta cultura (aunque no necesariamente religiosa), y con la introduccin de un par de signos peculiares, que se mencionan en el texto.

Textos: Gnesis 2, 18-24; 1 Corintios 12, 31-13,8a; Mateo 19, 3-6

LECTURA POTICA DEL LIBRO DEL GNESISLa primera lectura hay que entenderla segn su gnero literario. No es un escrito cientfico, ni histrico, ni siquiera novelstico. Es un gran poema, una gran poesa, a travs de la cual se expresa la fe del pueblo de Israel. El pueblo de Israel cree que el hombre no es un ser solitario, sino que ha sido creado para ser un ser solidario. El pueblo de Israel cree que el hombre y la mujer san iguales, capaces de amarse, de compartir, de complementarse, capaces de ser un solo corazn y un solo espritu. Y ellos creen que ste es el proyecto de Dios sobre el hombre y el mundo. Un proyecto lleno de poesa, porque es un proyecto de ternura, de sentimiento, de capacidad de conmover, de posibilidad de crear En el acto de hoy, en esta boda, tambin se encuentra mucha poesa.Podramos escribir un poema de este acto y seria semejante al de la creacin. La imposicin de los anillos, que despus realizarn los novios, es un acto muy potico, porque es simblico. Es preciso que no perdis nunca el sentido potico de vuestro amor y de vuestra vida.Es preciso que nunca os falte la ternura, la sensibilidad, la imaginacin,Estis llamados a ser una sola carne y un solo espritu. Pero no os quedis en la periferia del amor, de la ternura.Haced como en la poesfa, como en lo simblico, que hay que ir ms a lo interior, descubrir todo su significado, todo lo que se encuentra detrs de las palabras. Buscad y cread una comunin profunda de vida, de sentimientos, de deseos. Jesus os ha dicho: "Lo que Dios ha unido, que no lo separe el hombre". Dejad que Dios una vuestros corazones, vuestros anhelos, vuestras vidas, de verdad.

LECTURA PROSAICA DE SAN PABLO Os ayuda a poner los pies en el suelo. Lo cual es, naturalmente, muy importante. Es la prosa de la vida! Es su monotona, pero tambin es su grandeza. El amor es comprensivo. Sabed aguantaros El amor no tiene envidia. Confiad siempre el uno en el otro. El amor no se enprie. No dejis nunca de dialogar, de compartir. No dejis entrar nunca en vosotros la polilla del recelo, de la desconfianza. El amor no es egosta. Sed cada uno el mejor amigo para el otro. Nada de encerrarse en uno mismo. Hundid barreras y paredes entre vosotros. El amor no lleva cuentas del mal. Perdonaros de corazn y siempre. El perdn es la fuente de la sabidura y del perdn. El amor goza con la verdad. Jugad siempre limpio. Y esforzaros siempre en comprenderos. El amor disculpa sin lmites. Sacrificaros el uno por el otro. Sin medida. El amor cree sin limites, espera sin lmites. Gastaos. Consumos. Daos completamente.Ya veis que todo esto es muy prosaico. Pero tambin es todo esto lo que os ayudar a vivir la vida con gozo, con ilusin, con esperanza, con discernimiento, que es igual que decir con sentido cristiano. Tambin es muy prosaico el acto de consentimiento, que haris ahora los novios. Pero sin embargo es magnfico, expresivo, y muy emotivo.

FIDELIDAD EN LA POESIA Y EN LA PROSA DE LA VIDAFidelidad cuando todo sea muy potico, cuando sintis la caricia de la ternura de la amistad, el gozo de la compaa mutua, la conciencia de que sois un signo del amor de Dios. Podramos expresar esta fidelidad con estas dos lmparas encendidas cada una de color diferente, porque vosotros sois diferentes pero que Iluminan, crean un clima, son signos de toda una misteriosa realidad.Fidelidad cuando os atenace la prosa de cada da, cuando las dificultades entorpezcan vuestro camino, cuando se rompa el suave velo de la convivencia. Podramos expresar esta fidelidad con este ramo de rosas, bonitas, tiernas, suaves pero que pueden pinchar. Fidelidad porque el Seor os dar su fuerza, su bendicin, su amor. Es lo que ahora, con sinceridad, pediris al celebrar el sacramento del Matrimonio.

14. Homila para pblico medio TEXTOS: 1 Corintios 13,4-8a; Mateo 19,3-6

1. El amor no pasa nuncaOs habis fijado, queridos novios, en esta frase del apstol San Pablo, "el amor no pasa nunca" que acabamos de escuchar? Es lo que vosotros, estoy seguro deseis para vosotros mismos. S, repito, "el amor vuestro amor no pAsa nunca". San Pablo lo dice del Amor de Dios, este amor manifestado en Jesucristo, el Hijo de Dios hecho hombre, que ha muerto y ha resucitado por todos, pero que a nosotros, los humanos, el hombre y la mujer que se unen en matrimonio, los cristianos, seguidores de Jesucristo, nos es posible realizar, porque El, el buen Dios, nos hace capaces de ello. S, "el amor no pasa nunca". Tambin es lo que hemos escuchado en las palabras de Jess en el evangelio segn san Mateo, cuando afirma que el hombre y la mujer sern una sola carne. Y esto que nos dice la palabra de Dios, es preciso recordarlo, lo valoramos muy mucho en la vida humana, cuando celebramos con gozo los aniversarios de hechos humanos, aos de vida, de amistad. As celebramos desde dcimos aniversarios a milenarios, de obras, instituciones y acontecimientos, el nacimiento y la muerte de personas amadas o ilustres. Por esto lo que la Iglesia llama "amor indisoluble" de los esposos, es algo que forma parte del talante de la persona humana y de la sociedad. Y an podemos decir ms, que segn la Palabra de Dios en la Biblia, la posibilidad de la fidelidad mutua entre los esposos, toda la vida, tiene sus orgenes al principio de la humanidad.

2. Las cualidades del amorSin embargo, esta fidelidad y amor pide de parte de los que se han unido en matrimonio que pongan los medios para hacerlo crecer. El apstol Pablo nos seala cmo tiene que ser el "amor que no pasa nunca": "es comprensivo, servicial, no tiene envidia, no presume ni se engre, disculpa sin lmites, cree sin lmites, espera sin lmites...". Debemos tenerlo muy en cuenta. De hecho, el camino que iniciis hoy indica este compromiso para hacerlo realidad. Qu gozo sienten los esposos que crecen da tras da en esta fidelidad! No pensis que con la promesa de fidelidad que os vais a hacer de inmediato tenis bastante. Es preciso que revisis constantemente los pasos que dais, tanto en los momentos favorables como en los adversos, en la salud y en la enfermedad, en la riqueza y en la pobreza. Con serenidad, con calma, mirad lo que pasa en vuestras relaciones y tambin con las otras personas. Dios est presente en aquellos que buscan sinceramente hacer su voluntad de bien, de verdad, de respeto, de construccin del matrimonio, de la familia, de la sociedad, de la Iglesia.

3. El amor nos abre a los demsQue vuestros hijos, que sern fruto de vuestro sincero amor, puedan recibir el inmejorable testimonio de vuestra palabra y ejemplo. Que los familiares y amigos, que estn aqu presentes, se encuentren acogidos por vuestra manera limpia de vida. Que vuestros compaeros de trabajo y los vecinos comprendan que vuestra unin les proporciona una ayuda en su vida. Que Dios, por Jesucristo y la fuerza de su Espritu, sea la fuente de amor de vuestro nuevo caminar unidos.

15. El autor llama a este texto: "Pre-homila popular y cuasi-laica para el matrimonio". Para pblico popular, ilusionadora y cordial. Las lecturas bblicas no se leen antes, sino que se proclaman en el interior del texto (y quizs convendra parafrasearlas para que se entiendan mejor).

TEXTOS: Efesios 5,2a.21-33; Mateo 19,3-6

Sed bienvenidos. En especial vosotros dos, N y NN. Con vuestro permiso os dir unas palabras; lo har ahora. No es hoy un da para muchas palabras. Ser, ms que nada, fijarnos en lo que estamos viviendo. Para vivirlo ms plenamente.

1. Una fiesta para una uninLo primero que vemos es que estamos celebrando una fiesta. Los vestidos, las caras, vosotros dos... todo lo indica. Pienso que puedo decir en nombre de todos que nuestra fiesta... es por vuestra fiesta. Si estamos contentos es porque hoy es un da de alegra para vosotros dos. Os queremos acompaar, solidarizarnos con vosotros. Y vosotros dos estis de fiesta, tenis junto a la seriedad del hecho una profunda alegra porque... os casis. Os amis y ahora, dentro de unos minutos, no muchos, celebraris vuestra unin para siempre, delante de todos; ante vuestros familiares y amigos, ante todos los hombres y ante Dios. Es de esperar que tengis algun hijo. Y quizs suceder que alguien de los aqu presentes, al verlo dir: "es igual que N. su padre"; y poco despus cuando otro llegue dir: "mira cmo se parece a su madre, NN.". Y ninguno de los dos mentir. Porque los nios tienen parecidos del padre y de la madre. Pues este hijo, con algo del padre y de la madre, es como la imagen de lo que ha de ser vuestra vida. Ahora de dos vidas queris hacer una. De alguna manera, seris una sola cosa. Si hasta ahora, tus alegras, tus trabajos los tenas que llevar t solo, N., ahora seris dos a vivirlo juntos Y para ti, NN., igual. El amor que os tenis os lleva a querer vivir juntos alegrias y penas, satisfacciones y trabajos. Toda la vida.

2. Un amor que crecerAnte esto os quiero decir una cosa: hay no es el da que os amaris ms. Ni esta semana. Ni este ao. Ahora, con la boda, no celebraremos una etapa final; al contrario, una etapa mvil, una meta volante... Cada vez me impresiona ms ver cmo se aman algunos matrimonios mayores que he conocido ltimamente. Cuando ves cmo viven el uno para el otro! {se puede partir del ejemplo de algn matrimonio en el que uno cuida del otro, enfermo ya para siempre, sin nada a cambio). Si sois fieles al amor que os tenis, si vais respondiendo a lo que la vida os vaya pidiendo, cada da os amaris de una manera ms total. Quizs sin tanto sentimiento, pero de verdad, profundamente. Esto es lo que dice una lectura que ahora escucharemos. Os podis llegar a amar, dice, de una manera que haga pensar en el amor que Jesucristo ha demostrado por los hombres. Un amor que da la vida.

Lectura: Efesios 5,21-33

De manera que t, N., al pensar en el futuro, no pienses solamente: "Ahora s que estar bien: mi casa, NN., me satisfacer, me cuidar..." sino que adems has de tener la preocupacin de decirte "Cmo lo tengo que hacer para que NN. sea feliz?, cmo lo tengo que hacer para vivir para ella? Para darle, en una palabra, mi vida". Y tu NN., igual (se puede repetir con las variantes ad hoc; por hoc, entindase sexo).

3. Una unin que durarMi felicitacin es que vivis as. Y seguramente que muchos de los presentes que llevan varios aos de matrimonio, os diran lo mismo y mejor que yo. El mal que mata el amor es el egosmo. Un ltimo consejo, ste personal, mo: deciros las cosas. Un resentimiento, cuando se calla, quema, va separando, es como una pared que va levantndose. Esperar el momento oportuno, pero contaros las cosas. Un tumor, cuando se abre, deja de causar enfermedad. Mirad de hacerlo con la calma que ayuda a no herirse, pero tened la valenta y la fortaleza de hacerlo: as, a travs de crisis, a travs de dolores, las races de vuestro amor se irn profundizando. No tengis miedo. Viviendo as lo que se os vaya presentando podis estar seguros y confiados: vuestra unin durar tanto como ahora deseis. Por siempre. Como Dios tambin la quiere. Mirad lo que dice Jesucristo en el evangelio de san Mateo.

Lectura: Mateo 19,3-6.

16. Homila breve para un pblico sencillo o quizs simplemente desconocido.

TEXTOS: Mateo 22,35-40

Hemos escuchado unas palabras importantes del Evangelio de Jesucristo. Le preguntan qu es lo ms importante y l responde: amar. Me parece que son palabras muy adecuadas para la fiesta que celebramos. N. y NN afirmarn seguidamente su sentido compromiso de vivir amndose, compartiendo su vida. Y la Iglesia de Jesucristo, en este da, les dice a ellosy nos dice a todos nosotrosque no hay nada ms importante en la vida del hombre que amar. Que la voluntad de Dios es que nos amemos. Pero no que nos amemos de cualquier manera. Hemos escuchado en el Evangelio que es necesario amar "con todo el corazn, con toda el alma con todo el pensamiento". Es decir, totalmente. No a medias, sino dndose del todo, en un intento de comunicacin, de comprensin, de expresin que nunca se contente con aquello que parece obligado o indispensable, sino que avance hacia un amor ms profundo, ms cordial. Que lleve a compartir, a ayudar. En una palabra, a dar vida y felicidad. Este es nuestro deseo y nuestra oracinque seguidamente expresaremospara vosotros dos. Vosotros, N. y NN., os comprometis con gozo y esperanza. Todos los que hoy os acompaan, familiares y amigos, se comprometen tambin a ayudaros en aquello que cada uno pueda. Que realmente vuestro amorfruto del camino que ya habis hecho juntos crezca cada vez ms, que supere las dificultades que podis encontrar, que d fruto. Esto esrepitonuestro deseo y nuestra plegaria. Porque de esta manera conseguiris la felicidad que Dios quiere para vosotros. Una felicidad que -nos ha dicho la palabra de Jesucristo- se concreta en saber amar totalmente. Y as quizs muchas veces sin daros cuenta Dios estar con vosotros, bendecir vuestro amor, os ayudar en las dificultades y compartir vuestras alegras.

17 Homila para pblico poco practicante

TEXTOS: Colosenses 3,12-17; Marcos 10,6-9

Queridos novios, hermanos y amigos: Acabamos de escuchar la palabra de Cristo que, hoy y entre nosotros, viene a iluminar y fortalecer una realidad humana, que siempre, cuando empieza, est llena de ilusiones y esperanzas.

UN PLAN DE SALVACION DE DIOS DESDE EL PRINCIPIOEn el Evangelio, Jess os ha dicho, amados novios, que esto que ahora realizis, el compromiso de vivir unidos y de fundar una familia es voluntad de Dios. Una voluntad manifestada en la primera pareja humana en la aurora de la creacin, en el principio de la humanidad. El Dios Creador que quiere salvar a todo el mundo, es decir, que quiere que todos sean felices por el cumplimiento de su voluntad, quiso que el hombre y la mujer fuesen distintos y que se unieran en una unidad indisoluble y admirable para formar una sola familia. Fijaos bien, no obstante, que en la ltima frase de Jess que hemos escuchado, ste afirma que es Dios mismo el que une al hombre y a la mujer. No es, por tanto, la del matrimonio una simple unin humana, la decisin de una pareja que no tiene otra trascendencia: no, Dios est all donde se produce esta unin, de tal forma que nadie, ninguna voluntad humana, podr separar aquello que Dios mismo ha unido. Hay, pues, en vuestra unin de ahora, amados N. y NN., una presencia de Dios, una fuerza de Dios que da solidez a vuestro consentimiento y a vuestra decisin de vivir juntos, de fundar un hogar, de perpetuar la humanidad y la historia. Jess, que vino a llevar a trmino la salvacin de la humanidad, record a todos, con sus palabras, la intencin de Dios al crear al hombre y la mujer. Jess ratifica y lleva a la perfeccin aquello que Dios hizo al principlo, aquello que Dios estableci con su voluntad al principio de la historia humana. Jess quiere que sus seguidores, los que nos llamamos cristianos, acepte ms esta voluntad creadora y salvadora de Dios en una realidad tan decisiva para el bien de la humanidad como es el matrimonio.

VIVIR EL MATRIMONIO COMO HIJOS DE DIOSPero Jess no viene a recordarnos slo una decisin de Dios ni una ley. Jess ha venido a salvar: ha venido a darnos una fuerza para que podamos vivir como hijos de Dios en todos los estamentos, en todas las situaciones de la vida. El es el que ha venido a ensearnos, en primer lugar, de que el amor es capaz de transformar nuestra vida. Bien sabemos que el matrimonio tiene que ver mucho con el amor, con el amor sacrificado, desinteresado, que nace de uno mismo para entregarse al otro. No hablo aqu de esto que con frecuencia se llama amor y no es ms que un egosmo escondido. En la primera lectura san Pablo nos ha enseado a vivir amando. Se ha dirigido especialmente a vosotros, en este gran da de vuestro amor, de vuestra donacin mutua y personal. El Apstol os ha amonestado con gran amabilidad y con palabras claras, fciles de entender. Pero no os ha escondido las dificultades que pueden nacer en el camino que hoy empezis. El os ha hablado acerca de unos sentimientos que a veces son difciles de tener y de demostrar, pero que ciertamente hacen que quien los tiene haga feliz al que convive con l. San Pablo os ha hablado de bondad, de humildad, de serenidad, de paciencia, de perdn. Os ha hablado de amor, ya que el amor "es el ceidor de la unidad consumada". No os faltarn momentos difciles, combates que tendris que sostener; pero si vivs amando, la paz de Cristo os mantendr unidos y reinar en vuestros corazones y en vuestro hogar. Mirad, pues, cun grande es el ideal del matrimonio cristiano que hoy aceptis, cuya gracia y fuerza salvadora os comunicis por el sacramento de vuestra donacin conyugal. Haced que, en tanto dependa de vosotros est siempre viva la fuerza que recibs de Dios que os une, que os une sobre todo por el amor que todo lo une y perfecciona. Viviris cristianamente vuestro matrimonio si hacis que la palabra de Cristo tenga permanencia en vosotros con toda su riqueza, si lo hacis todo, de palabra y de obra, en nombre de Jess. Si cristianamente habis querido unir hoy vuestras vidas, procurad que stas respondan siempre al nombre de cristianas que libremente y responsablemente habis asumido al celebrar como sacramento vuestro matrimonio. Esto sin duda os har felices, porque aceptar el plan de Dios en la vida del hombre y de la mujer es fuente inagotable de gozo. Y ste es precisamente el augurio, la felicitacin cordial que yo, en nombre de la Iglesia, os deseo de corazn: que vuestros jvenes corazones y el hogar que hoy empezis estn siempre llenos del amor verdadero que proviene de Dios, que Jesucristo nos ha enseado y que ha hecho penetrar en lo ms profundo de nuestro espritu.

18. Homila para ambiente popular. Intenta ayudar a descubrir el sentido del sacramento.

TEXTOS: Juan 2,1-11

Queridos amigos: Nos hemos reunido en esta celebracin festiva para compartir el gozo de este solemne acto en el cual queris decirnos a todos los que os acompaamos que os amis y que queris compartir vuestro amor toda la vida unidos en matrimonio. El amor ha nacido en vuestros corazones, os habis conocido, os amis y queris que este amor una total y definitivamente vuestras vidas. Vosotros, N. y NN., os habis manifestado creyentes y libremente queris dar el paso al matrimonio aqu en la Iglesia como cristianos para recibir la bendicin de Dios.

EL SEOR COMPARTE EL GOZO DE LOS NOVIOSEl evangelio que acabamos de escuchar os ayuda a comprender el sentido propio y profundo de lo que estis celebrando aqu en la Iglesia. Hemos escuchado cmo Jess en una ocasin estuvo presente en unas bodas compartiendo el gozo y la alegra de los novios y tambin cmo El, que era un invitado, al final los convid a todos y les dio un vino mucho mejor. (Ahora no es el momento de explicar los detalles de este milagro de Jess, pero s que os puede decir mucho el gesto de Jess dispuesto a ayudar cuando lo necesitaban). La palabra de Dios os dice hoy a vosotros que de la misma forma que Jesus comparti el gozo de aquellos novios de Cana de Galilea tambin hoy quiere compartir la alegra y la fiesta de vuestro amor. Jesucristo comparte todas vuestras ilusiones, esperanzas y alegras; todo el deseo de felicidad que tenis, las ansias de plenitud y relizacin de vuestras personas, el anhelo de empezar un nuevo hogar... Todo lo que sents, deseis y queris vivir, y en la medida que es sincero y autntico, es compartido y bendecido por el mismo Dios.

JESUCRISTO DA SU FUERZA EN EL SACRAMENTOY no solamente esto, sino que Jesucristo se compromete a daros su fuerza para que sea as, para que todo esto se vaya haciendo realidad durante toda vuestra vida. De la misma manera que Jess les dio el vino mejor, tambin a vosotros os quiere dar su gracia para que seis fieles a los compromisos que delante de El hoy vais a asumir. Por el sacramento del matrimonio os comprometis a vivir vuestro amor de una manera total y completa. Entregndoos el uno al otro. Os comprometis a vivir el amor de la misma forma que lo habis aprendido de Dios: un amor generoso, que busca siempre el bien y la felicidad de la persona amada, un amor capaz de sacrificio y perdn; por esto, de la misma forma Jesucristo se compromete a ayudaros, a daros su gracia, a fin de que vuestro amor sea capaz de superar todas las dificultades que podis encontrar en vuestro camino. En vuestro matrimonio no todo ser de color de rosa, no os faltarn dificultades, pero podis estar seguros que la ayuda de Dios no os faltar nunca y os dar fuerza para que vuestro amor pueda superar los momentos difciles que vengan: dificultades econmicas, enfermedades, momentos de incomprensin. La bendicin que recibiris ser signo de que nunca os faltar la fuerza del Seor para ser fieles al compromiso que hoy asums delante de El y de todos nosotros. * * * * * *Que Jesucristo os bendiga, que vuestro amor sea fecundo y podis recibir a los hijos como un don de Dios. Amadlos con el mismo amor con que vuestros padres os han amado, ayudadlos a crecer como personas y educadlos cristianamente: que ellos sean vuestro gozo y vuestra alegra.

Y que durante toda vuestra vida os podis sentir siempre acompaados por todos los que ahora estamos aqu compartiendo vuestra fiesta porque queremos tambin compartir siempre vuestra amistad.

19. Homila sencilla para pblico medio. Una llamada a convertir, por el amor, en valiosas todas las cosas, y a ver en ello el signo de la presencia de Dios.

TEXTOS: Juan 2 1-11

Apreciados N. y NN. Me parece muy apropiado el fragmento del evangelio que acabamos de leer, porque en l vemos a Jess actuando en el marco de una fiesta como la que vosotros hoy celebris: en una boda.

1. Llamados a convertir el agua en vinoEl texto nos ha presentado cmo de la colaboracin entre Jess y Mara surgi un hecho admirable, el primero de los signos obrados por el Seor. Y san Juan nos ha subrayado que la conversin del agua en vino fue motivo de alegra para los novios que vean cmo su fiesta corra el riesgo de "aguarse" por causa de un descuido, y para los invitados que as podan continuar alegres la fiesta. Y al mismo tiempo, hizo que creciera la fe en Jess de los discpulos que haban presenciado el hecho. Tambin vosotros estis llamados, ejerciendo cada uno su papel propio, a "convertir el agua en vino". Y os hablo ya me entendis con un lenguaje simblico. Cuando os digo que debis "convertir el agua en vino" no pretendo que entendis estas palabras al pie de la letra. Qu os quiero decir? Que de las cosas ms habituales y cotidianas, esas que valoramos tan poco esto es "el agua", vosotros debis hacer "vino", algo de valor, sabroso y que alegra a quien lo bebe. Vuestro amor, vuestra fidelidad en las penas y en las alegras... es lo que convertir lo vulgar y diario el "agua", en motivo de alegra para los dems, para aquellos a quienes trataris y os observarn. Y as a la vez en vuestro amor haris visible a Dios, Aquel a quien nadie ha visto pero a quien san Juan se atreve a definir como "el Amor". De esta manera siempre que vosotros actuis con amor seris motivo de que aumente la fe de los que os observen, de la misma manera que creci la fe en los discpulos que acompaaban a Jess y a su madre en las bodas de Can.

2. Todos los que estamos aqu: llamados al amorY todos los que hoy participamos de esta fiesta, aprovechemos la ocasin que N y NN. nos brindan para hacer que reviva en nosotros el nico mandamiento que recibimos del Seor: "Amaos unos a otros como yo os he amado". Ellos van a expresar ahora ante todos nosotros su compromiso de amor para siempre. Al escucharlo, pensemos si nosotros amamos de verdad. Sea cual sea nuestra condicin: pequeos o mayores, padres o hijos solteros o casados... Es indiferente. Nuestra vida slo tiene sentido, tan slo nos podemos llamar cristianos, si nos esforzamos en amar a los dems como Jess nos am. Que el ver y escuchar a estos jvenes que as lo quieren hacer, nos impulse a hacer como ellos.

20. Homila para pblico cristianamente preparado. Con Eucarista.

TEXTOS: Gnesis 1,26-28.31a; Salmo 148; 1 Corintios 2,3113,8; Juan 2,1-11

1. Sabemos que Dios es amor porque nosotros nos amamosHermanos y hermanas: En nuestras caras se nota que estamos contentos, y estamos contentos porque nos amamos. El amor da felicidad, y hoy queremos compartir nuestra alegra y nuestro gozo, con estos amigos nuestros que celebran el sacramento del matrimonio. Ellos se quieren y por eso han decidido amarse toda la vida, nosotros seremos testigos de ese compromiso, nosotros tambin les queremos. Y ese amor que ahora mismo sentimos y experimentamos, es como un trozo, un poco, del Amor de Dios. Dios es Amor, dice san Juan, y lo sabemos porque nos amamos. Hoy, nos hemos reunido para celebrar y dar gracias a Dios que es Amor, la fuente del Amor. Vosotros que os amis intensamente, y nosotros que nos queremos y os amamos.

2. Dios que es Amor, ha hecho todas las cosas buenasHay personas que piensan que Dios es un ser alejado, y poco amigo de los hombres. Tambin hay personas que ven las cosas y el mundo como malo. Y hemos escuchado en la lectura del libro del Gnesis, como el hombre y la mujer somos imagen y semejanza de Dios, y cmo Dios quiere que sean los seores de la creacin. Y el mismo Dios se admira, y era muy bueno! Nosotros deberamos saber descubrir, mientras caminamos por la vida todas esas cosas buenas que hay en nosotros y en los dems, que hay en toda la creacin. Y de ah, brotar de nuestro corazn una accin de gracias constante al Padre por su bondad escondida en todas las personas y cosas. Y nosotros en nombre de esa creacin, o de los hermanos o hermanas que se olvidan, alabarle, darle gracias al Seor.

3. Jess nos dice que Dios es nuestro PadreJess que es el Hijo de Dios nos ha hablado de su Padre y por eso nosotros le podemos conocer. Y nos ha dicho que ese Dios es Padre y Padre nuestro. Esta es la Buena Noticia que Jess nos da. Jesucristo para decirnos cunto nos quiere el Padre y cunto nos quiere El, ha sido capaz de dar la vida por nosotros. Ha muerto y ha resucitado y vive. Y ahora en esta Eucarista, en esta Misa, lo estamos celebrando. Y vosotros, queridos amigos que estis celebrando el matrimonio, de aqu en adelante, seris como unos signos, que con vuestro amor vais diciendo cunto Jess quiere a la Iglesia, que somos todos nosotros. Para decirlo ms sencillamente: como N. quiere a NN. y NN. quiere a N., as quiere Jesucristo a la Iglesia, a nosotros, a todas las personas. Y esto es el sacramento del matrimonio. Ah est la grandeza del matrimonio, y tambin la responsabilidad: decir con toda vuestra vida, y con todo vuestro amor, cunto os queris, y por tanto, cunto Jesucristo nos quiere.

4. El amor es el tesoro ms grande? Vivimos rodeados de mucho materialismo, y quizs ese cncer se nos ha podido pegar. Y entonces ciertamente que para nosotros el amor no ser el valor ms importante de nuestra vida. Pero para los cristianos, los seguidores de Jess, lo tiene que ser, porque para Jess lo es. En Jesucristo vemos el Amor del Padre, amor que es nico, exclusivo, para siempre, que comprende, que perdona, que olvida, que siempre da otra oportunidad, que no nos esclaviza, que nos ayuda a crecer como personas, que nos hace sentir vlidos para los dems y para nosotros mismos, amor dialogante y que se relaciona con nosotros. Solamente as podemos entender las palabras de san Pablo, que son ciertamente difciles y hasta utpicas. Pero posibles, con la fuerza de Jesucristo resucitado, presente en vuestra vida de aqu en adelante por el sacramento del matrimonio.

5. El compromiso de los padres, familiares y amigosPero en este camino gozoso, en esta responsabilidad, no estis solos. La presencia de vuestros padres, familiares, amigos, que os acompaan y la presencia de la comunidad cristiana, de la Iglesia, es tambin para nosotros un compromiso a examinarnos cmo vivimos nuestros compromisos matrimoniales y otros compromisos de servicio a Dios y a los hermanos. En estos momentos no podemos ser unos espectadores. Os acompaamos con nuestra presencia y con nuestra ilusin, y os queremos decir que vale la pena amarse y que es posible amar toda la vida, con la gracia de Dios. Es el compromiso que nosotros, padres, familiares, amigos, testigos, y yo mismo, adquirimos hoy con vosotros y que procuraremos cumplir.

6. La Eucarista es un banquete de bodasEn el Antiguo Testamento, en los Profetas y en el Cantar de los Cantares para indicar el amor de Dios hacia su pueblo, se hace con las palabras y los signos del amor humano. Y Jesucristo, en el Nuevo Testamento, en muchas ocasiones se presenta como el Esposo que invita al banquete de bodas. La Iglesia, nosotros somos la esposa, a la que el Esposo alimenta con su Palabra que se hace Pan-carne que da vida. Participemos con gozo en esta fiesta de bodas, que es signo, seal del amor de Cristo Esposo a su esposa la Iglesia, nosotros. Y la Palabra de Dios que hemos escuchado, nos iluminar en nuestro caminar, y la Eucarista en la que participaremos plenamente en la comunin, ser tambin la fuerza que haga realidad nuestro amor cada dia.

21. Homila para novios que se han preparado conscientemente y para pblico practicante. Con Eucarista.

TEXTOS: 1 Juan 4,7-12; Juan 2,1-11

Queridos novios y amigos que celebris esta fiesta de bodas: Al empezar mis palabras quiero expresaros el deseo de que aquello que hemos ledo hace poco, al final del Evangelio de Juan, sea una realidad en esta fiesta entraable que hoy nos ha reunido aqu. Si, hermanos: que el Seor empiece hoy a actuar como Salvador en el hogar que vosotros, novios, fundis, que Jess manifieste entre nosotros su gloria en el sacramento que celebramos, y que todos nosotros, creyentes en Cristo, fortalezcamos y aumentemos nuestra fe en El.

JESUS NOS DA SU VINOPodemos realmente afirmar que ahora se realiza nuevamente aquello que la narracin de las bodas de Cana nos ha presentado. Vosotros, que dentro de breves instantes seris nuevos esposos, habis convidado a vuestra boda a Jess mismo. Lo habis convidado para que bendiga vuestro amor, vuestra unin. Ante l queris prometeros amor para toda la vida. Deseis que la vida conyugal que hoy iniciis est de acuerdo con el plan salvador de Dios sobre el hombre y la mujer, ratificado por el mismo Jesucristo en su Evangelio. Consideris que vuestra unin no es solamente un contrato humano, sino que tiene una referencia a Jess, a la salvacin que El vino a darnos. Asums vuestro matrimonio como una realidad salvadora dentro de la Iglesia y lo queris vivir de acuerdo con el Evangelio del Seor. Os casis en el Seor, como afirmaban los primeros cristianos. Referid, pues, vuestra decisin de vivir en comunin de amor y de todos los bienes, a esta realidad suprema para todo cristiano, que es el Seor y su Iglesia. Jess, para comenzar sus signos, signos de la Nueva Alianza, busca el ambiente festivo y sugerente de unas bodas. El mismo se presenta como el Esposo que dar a su Esposa, la Iglesia, el vino nuevo y sobreabundante del Reino de Dios. En el Evangelio y en el Nuevo Testamento aparece esta comparacin tan bella que hace que vuestro matrimonio sea sacramento, es decir, una realidad significadora y portadora de la salvacin de Cristo. Vuestra unin es sacramental porque significa y hace presente aqu, en la tierra, este misterio altsimo de la unin de Cristo con la comunidad de los redimidos, de los creyentes, que es la Iglesia. Jess, para explicar el amor de Dios a los hombres, y para hacernos entender su donacin amorosa y fecunda a la humanidad nos propone la comparacin de la unin del esposa y la esposa. Esta, por tanto, cuando es asumida y vivida con fe, se convierte en significacin y en presencia del amor sin medida, sacrificado, generoso hasta el extremo, del Seor a su Esposa, la Iglesia. Esta donacin, Jess la realiz una vez por siempre en su muerte y resurreccin, que es la hora del Seor, anticipada ya en las bodas de Can segn la referencia del texto que hemos ledo. La donacin suprema del Seor a su Iglesia queda aqu de manifiesto en la donacin del vino.

DIOS, QUE ES AMOR, HA ENVIADO A SU HIJOQueridos novios: os acercis al Seor para que os d el vino de su sangre, de su vida, de su amor. Humildemente le aportis el amor que brota de un corazn joven y emprendedor para que l lo convierta en amor autntico que viene de Dios, del Dios que es amor, como antes nos deca san Juan en la primera lectura. Hoy s que entris vosotros en esta gran corriente de amor que tiene a Dios mismo como fuente, que se manifiesta en la persona, en la vida, en la salvacin de Jess, el Hijo de Dios; el amor que realmente ha recibido todo aqul que es hijo de Dios. Haced que, en esta celebracin, por los sacramentos del Matrimonio y de la Eucarista, vuestro amor entre plenamente en este misterio salvador que penetre en el amor de Dios y de su Hijo Jesucristo, porque slo en el amor del Padre que nos ha tenido y que ha resplandecido en su Hijo y Salvador nuestro, Jesucristo, encontraris la fuerza capaz de mantener por siempre el amor que os prometis; slo en este amor, que es ms fuerte que la misma muerte, encontraris el fuego que purificar de cualquier escoria el amor que habis de teneros mutuamente; slo este amor tiene la fuerza de transformar el agua de un amor egosta y rutinario en el vino siempre nuevo, alegre y generoso, del amor autntico que viene de Dios y que, por la unin en Jess, se extiende al prjimo. Que ste sea, amados novios, el amor que el Espritu Santo infunda hoy en vuestros corazones, como un vino nuevo que embriague vuestras vidas con la fuerza y la dulzura, la paz y la hermandad, el gozo y la paciencia que son el gran don de Dios, que ahora, como cordial y afectuosa "enhorabuena", imploramos y auguramos sobre vuestras personas que dentro de breves momentos sern, para nosotros y para todo el mundo, signos del amor de Cristo hacia todos los hombres.

22. Homila para novios con vivencia de fe y un deseo manifestado de seguir el compromiso que implica la vida cristiana

TEXTOS: 1 Juan 4 7-12; Juan 15,9-12

1. La fuerza del Amor, la fuerza de DiosAmigos: con gran gozo en la celebracin de vuestro matrimonio, acabamos de escuchar la palabra de Dios. Y ella, hoy y siempre es la que nos acompaa y da sentido a todo lo que vamos haciendo, en los momentos mas solemnes y en los ms simples de nuestra vida. Vosotros ahora y aqu, hacis una profesin solemne de vuestro amor y de vuestro compromiso, y lo hacis como cristianos, queris proclamar delante de la comunidad que reconocis que Aqul que os ha dado la vida y ha hecho nacer y crecer el amor en vuestros corazones es lo suficientemente fuerte para acompaaros siempre y para hacerse presente a travs de vuestro testimonio de fidelidad, entre todos los que comparten vuestra vida. Por esto en los textos que acabamos de escuchar encontramos el sentido exacto del acto que estamos celebrando: Dios se nos revela como el Amor, como el Amor que toma forma, cuerpo y entrega en la vida de un hombre como nosotros, que se entrega generoso para decirnos que Dios es un Padre bueno y que est dispuesto a rubricar esta fe hasta las ltimas consecuencias, y lo hace.

2. Vuestro amor, vivencia y seal del don de DiosPor este motivo, los cristianos, precisamente desde la fe en Jess, entendemos la entrega amorosa de Dios, entendemos todo acto de amor como smbolo de lo que Dios es y hace, y que por tanto, entendemos el amor de un hombre y de una mujer como vosotros, como un signo privilegiado del amor que Dios siente para todos los hombres para siempre. As pues, la fidelidad del amor de un matrimonio cristiano no es slo una conquista difcilmente conseguida, sino la vivencia agradecida de un don que Dios nos hace. Dejndole que comparta vuestro amor conseguiris que ste crezca siempre ms y ms y d sentido a vuestras vidas y a las que de los que os rodean. De este modo, la apertura de vuestro amor se podra concretar en los hijos que nazcan de vuestra unin, que veris como un fruto de plenitud y no como mengua de vuestra libertad. Plantendoos serenamente los hijos que queris tener, cmo y cundo, estaris contribuyendo desde vuestra madurez humana y cristiana a crear esta gran familia que es el proyecto definitivo de Dios.

3. Un esfuerzo acompaadoY todo esto que os acabo de decir no es un bello sueo irrealizable, sino que a travs de vuestra vida de cada da, del esfuerzo continuado de poner en comn lo que sois y lo que queris que siempre seris diferentes pero siempre podris tambin ir construyendo vuestro proyecto comn, a travs de vuestras propias limitaciones, de vuestros errores y de vuestros aciertos, de las circunstancias concretas de vuestra vida, el Seor se har presente y os ayudar a ser signo de su amor entre nosotros. Y os pido que le hagis un lugar en vuestra vida: os aseguro que no existe mejor compaero para el camino. Y esto no lo vais a hacer solos: que vuestro amor no os lleve a encerraros dentro de vosotros mismos; compartid con los otros vuestro gozo y vuestra esperanza que as, poco a poco, juntos, cada uno desde su lugar, iris abriendo paso a una sociedad ms justa, ms autnticamente fraterna, como El la quiere; en vuestras manos y en las nuestras estn su paz, su gracia y su fuerza que nunca nos faltarn. Os deseo mucha felicidad y buen camino.

23. Homila para novios conocidos y pblico medio

TEXTOS: Cantar 2,8-10.14.16a; 8,6-7a; Juan 15,12-16

1. Nos habis querido decir, sin miedo, que os amis muy intensamenteNos habis querido leer, en el da de vuestra boda, como primera lectura este poema de amor del Cantar de los Cantares. Un poema de amor lleno de ingenuidad, de ternura. Un poema de amor que expresa sentimientos llenos de entusiasmo, de enamoramiento, de deseo del uno por el otro como revelndonos sin miedo lo que os pasa por dentro a vosotros dos. "Mi amado es como una gacela, es como un cervatillo". "Levntate amada ma, hermosa mia, ven a mi". Tal vez vosotros no lo dirais con las mismas palabras que este poema que hemos ledo, pero en todo caso esto es lo mismo que os pasa a vosotros por dentro. Y vale la pena que nos lo hayis querido decir as, tan ingenuamente, tan sin miedo. Porque oros decir que os amis, y que os amis con esta ternura, y que queris ser totalmente el uno para el otro, y que eso os remueve las entraas, es algo que reconforta, que nos reconforta.

2. Es un anuncio gozoso en este mundo que ensea a desconfiar los unos de los otros Porque resulta que en este mundo nuestro, a menudo parece que se nos quiera convencer de que las personas hemos de tener miedo de las otras personas, y que hemos de estar a la defensiva los unos de los otros y que hemos de ver en el que tenemos al lado un posible enemigo, y que debemos procurar ser ms fuertes que el vecino, y que hemos de evitar expresar nuestros sentimientos porque nos podran tomar el pelo... En este mundo nuestro, con demasiada frecuencia nos quieren meter en la cabeza que hay que buscar slo el propio inters, y sacar todo el provecho posible de los dems, y no fiarse de nadie. En este mundo nuestro parece como si el manifestar demasiada ternura y expresar la alegra de amar sea casi hacer el ridculo. Vosotros, en cambio, habis querido escuchar y hacernos escuchar, en el da de vuestra boda, un texto que habla de amor entusiasmado, de sentimientos llenos de gozo del uno para el otro, de enamoramiento sin miedo. Os lo agradecemos. Y os agradecemos que, al casaros, queramos ser un signo de lo que proclamaba la lectura: un signo de amor libre y abierto, capaz de mirar hacia delante sin temor, como una invitacin a vivir las cosas con esperanza, con ilusin, con mpetu.

3. Seris un signo del amor Nosotros, los que os acompaamos en esta fiesta, estamos convencidos de que la nueva etapa que hoy iniciis, ser un signo de todo eso. Lo ser porque vuestro amor de hoy continuar creciendo siempre, durante toda vuestra vida. Y lo ser porque este amor vuestro no lo viviris cerrados en vosotros y en vuestra tranquilidad personal, sino que lo viviris con los ojos abiertos y el alma atenta a los que os rodean, a todo lo que pasa en nuestro mundo, para poner en todas partes un poco del amor y la esperanza que vosotros sents.

4. Jesucristo os acompaar para que dis frutoQue seis siempre muy felices, y que la fuerza de Jesucristo os acompae en vuestro camino. En el evangelio que hemos escuchado, Jess mismo os deca: "Os he elegido y os he destinado para que vayis y deis fruto, y vuestro fruto dure". El estar a vuestro lado y har que realmente dis fruto. Y este fruto ser precisamente lo que decamos antes: vuestra capacidad de amaros, y de hacer de vuestro amor un signo estimulante para todas las personas que estn a vuestro lado a lo largo de toda vuestra vida.

5. Un estmulo de amor para todos los que compartes esta fiestaY que a todos nosotros, a todos los que compartimos la alegra de esta fiesta, las palabras que acabamos de escuchar y el compromiso de amor al que ahora asistiremos nos impulsen tambin a creer que vale la pena vivir con el espritu abierto, con ganas de amar. Muy especialmente, que esta fiesta sea, para los que estis casados, un reforzamiento de vuestro amor, y para todos, un estmulo para poner amor en todo lugar donde se desarrolle nuestra vida. Porque al fin y al cabo, y digan lo que digan, el amor es lo nico que nos puede hacer felices.

24. Homila dirigida a creyentes no practicantes.

TEXTOS: Cantar 2,8-10.14.16a;8,6-7a; Juan 15,12-16

1. "Mi amado es para me y yo para l"Vivir para el otro, estar atento al otro, es amar. Este es el mensaje que hemos escuchado en la palabra de Dios, queridos novios y todos los asistentes a esta celebracin. Proponeos trabajar vuestro amor sin egosmo. Jess dice: "Nadie tiene amor ms grande que el que da la vida por sus amigos". Amar, pues, es dar, amar es dar la vida por la persona amada. Amar es escuchar al otro, hacerlo feliz, comprenderlo. Esto es muy hermoso, pero nada fcil. Es necesario encontrar tiempo para el dilogo, para comunicarse. El ritmo de nuestro mundo impide la comunicacin. Sera muy necesario que hicierais un esfuerzo para poder encontrar este tiempo tan necesario. El otro es ms importante que ver la televisin, el otro es ms importante que leer el peridico o una revista...

2. "El amor es fuerte como la muerte"Debis tener un gran concepto del amor. Si creis que el amor que ahora sents pudiera tener fin, tenis un concepto estrecho, pequeo, del amor. Pero vosotros os amis. Por esto habis venido aqu a celebrar vuestro matrimonio. As como tenis cuidado de una planta, de la misma manera debis estar atentos a vuestro amor y regarlo con afecto y delicadeza. Si tenemos cuidado del amor, no pasar. Si el amor de algunas parejas se rompe, es que algo ha fallado. Por tanto, no os acostumbris a estar uno al lado del otro, no os acostumbris a pensar que el otro no puede cambiar, no os acostumbris a aceptaros con resignacin con vuestros defectos. En una palabra, no os acostumbris a la rutina.

3. "Mi mandamiento es que os amis"Si hay amor de verdad, tiene que haber tambin crecimiento. Cuando uno ama y se siente amado, es feliz, no hay nada que lo desanime completamente ni hay ninguna dificultad que lo hunda. El amor es un fuego que no puede apagar ningn ocano. Es lo que hemos escuchado en la primera lectura. Cmo podris conseguir este amor indestructible? San Pablo nos lo explica en una carta que escribi a los primeros cristianos de Galacia. Nos dice que hemos de tener buenos sentimientos, "sentimientos de compasin, de bondad, de humildad, de serenidad, de paciencia..." Y saber perdonarse con generosidad. Todos estos sentimientos son fruto de un amor autntico que cada da debis alimentar con ms firmeza. Estos sentimientos os ayudarn a avanzar por el camino del amor. Sern un importante fundamento. Ahora quisiera concretaros cules deben ser los cimientos del edificio de vuestro amor. Me referir a tres: confianza, comprensin y fe en Jess.

Confianza entre vosotros, que tiene que ser total, absoluta y completa. Que os confiis mutuamente de tal modo que seis como un espejo en el cual podis contemplar el corazn del otro. Que no haya niebla de ninguna clase que esconda vuestro interior. Comprensin, que es tambin muy importante, pero que es a la vez muy difcil. Comprender es entender al otro, comprender es acertar por qu el otro piensa de esta manera, por qu reacciona de esta manera, por qu acta de esta manera. Fe en Jess. Dentro de poco os casaris, recibiris el sacramento del matrimonio. Jess os ama y quiere daros su don, su gracia. Jess os quiere ayudar. El quiere ser vuestro compaero de viaje por los caminos de vuestro amor y de vuestra vida. Pensadlo de verdad! Jess quiere ayudaros. Dejaros ayudar por El. Pedidle que sepis amaros como El nos ha amado, como El os ama.

25. No es exactamente una homila: el celebrante lee unas reflexiones escritas por los padres de los novios.

TEXTOS: Tobas 8,5-10; 1 Corintios 12,3113,8a; Juan 15,12-16

Una madre de familia, periodista ella, public no hace mucho en una revista cristiana un articulo titulado "sermn de bodas". Os leer el comienzo: "Asist no hace muchos das a una boda. Una boda seria, una boda que podramos calificar como litrgicamente bien hecha. El sacerdote que presida habl a los novios de la