aforismos miguel merino

7/24/2019 Aforismos Miguel Merino

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# La muerte, el inconveniente de haber vivido.

# El arte es la hiedra del poder.

# La ciencia nos obliga a estar de acuerdo.

# La identidad es la teora y el cuerpo la prctica.

# Todo parece, 1 no es.

# Qu es 1 solo?

# En el universo lo nico que est a solas es la inteligencia.

# Las infidelidades del amor propio.

# Los parasos siempre se pierden.

# La autocompasin tiene un no s qu de perverso desprecio.

# Un sabio cobarde es un necio.

# La esperanza es una herencia imaginaria.

# El azaroso destino.

# Yo creo media hora a la semana. Suelo fumar al mismo tiempo.

# Se desea a Dios porque es incierto.

# La fotografa captura con exactitud las apariencias.

# Cuanta mayor inteligencia tenga un ser vivo, mayor consciencia tendr de la muerte.

# La metfora es una frmula de palabras. La poesa es la ciencia del misterio.

# Moral es que el fuerte sea amable con el dbil y que el dbil odie al fuerte.

# Respirando obedezco.


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# Alegre prisionero de mi ilusin de libertad.

# La identidad es una inercia.

# El dolor no es opcin sino condicin; viene con el equipo.

# La inteligencia lo puede ser todo menos inofensiva.

# El pensamiento es una actividad beligerante contra todo lo cierto.

# Las ideas que esquivas te hacen la zancadilla.

# La sinceridad absoluta resulta siempre cualquier cosa menos edificante.

# Nada de cuanto es perpetrado para formar parte de la Cultura es arte.

# La caracterstica ms honrosa del arte: no servir.

# Qu es la literatura sino eccehomismo?

# Tengo cuerpo, luego existo.

# El indefenso ya slo puede atacar.

# Y si lo que entendemos por felicidad no puede ser ms que contra o frente a otro?

# La censura agudiza el ingenio.

# El poder es un hecho, y no un estado.

# El deseo es obligacin.

# La idea de que debe existir algo que no admita divisin ulterior (algo -tomo o in

divisible) es reducir el mundo a una negacin.

# Cuando uno escribe poesa cree en algo impronunciable.

# El amor o es generoso o es otra cosa.

# Si quieres alma, preprate a morir.


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# La belleza es la proyeccin de un deseo.

# El talento es una hiptesis cuya nica demostracin es la obra.

# Si el conocimiento requiere no saber an algo, no hay posible conocimiento de todo.

# La poesa que parece poesa es pura apariencia.

# Hacer con las ideas lo que Jorge Guilln con las rimas: desechar las primeras que te vengan.

# Tener esperanza ?en lo que sea? es una necesidad bsica.

# Un dios no es nada sin un mundo. Exactamente igual como no hay mundo sin ficcin, sin creencia, sin mentira.

# El optimista ?tanto o ms que el pesimista? tiene algo de fantico.

# El yo, esa minora dominante.

# Si no puedo explicarme por qu una cucaracha dribla el pulgar de mi pie, cmo explicar por qu un humano hace lo que hace?

# Un clsico es un autor sobre el que ya nadie te pregunta por qu lo lees.

# Cada uno de nuestros actos e ideas es la continuacin del Big Bang.

# Negar el sinsentido es huir de uno mismo.

# El escptico se cree que no cree nada.

# El amor a la Naturaleza es amor propio no correspondido.

# Dar profundidad es mirar desde ms de un punto de vista simultneamente. Nosotrostenemos dos ojos y mucha imaginacin

# Sin desinters, no hay sabidura que valga.

# Se puede amar el propio cuerpo y no temer la muerte? De eso se trata.


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# La libertad limitada no es libertad sino esclavitud ufana. O dicho en trminos positivos: identidad.

# Sin humor la inteligencia pierde toda la gracia.

# La herencia conceptual y sentimental, la visin de mundo en la que uno crece.

# La nostalgia es una enfermedad de la memoria.

# Cultivar el llamado buen gusto ?artstico, culinario, etc.? consiste en reducir progresivamente la amplia gama de cuanto resulta disfrutable.

# Lo que hace entraable al Universo es que resulte prescindible.

# Para el determinista consecuente el suicidio es un dramtico aspaviento.

# Lo que no puede ser ha sido ya tantas veces.

# Somos ficciones encarnadas.

# La salud sirve ante todo para trabajar.

# No es lo mismo un manantial que un pozo. Los dos dan agua, s, pero no es lo mismo.

# tica de ocasin.

# Despejar la ecuacin de las rosas y el invierno.

# Los dbiles se unen por miedo a los fuertes. Los fuertes luchan solos, y por esoson libres.

# Cada ser vivo es una insignificante maravilla.

# Porque t lo digas, cuando te salga de los huevos, t mismo... Tres botones de e cmo el lenguaje tiende a endiosarnos.


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# Somos el universo hablando.

# La ambicin no tiene escrpulos.

# El topo que saluda al avestruz.

# La palabra amor sirve tanto para expresar la motivacin del valiente como la delcobarde.

# Valorar a los pensadores en la medida en que no pueden ser utilizados ni por la fe ni por el poder.

# Todo paraso es artificial.

# En todo gnesis el hombre crea a su dios.

# La perfeccin tiene un garrafal defecto: no admite margen de mejora.

# No merecimos nacer. No merecemos morir.

# Si no te gusta lo que lees, el problema es tuyo.

# Cmo es posible ser decente y masticar?

# Somos ficciones encarnadas.

# La honestidad tiene algo de brutal.


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# La identidad es un actor que slo a veces sospecha que acta.

# Somos un triste hatajo de bestezuelas acorraladas. La jaura de perros de presason nuestras ideas.

# El otro es un espejo.

# Corazn que no siente, ojos que no ven.

# Si buscas calidad e intensidad, olvdate de la cantidad y la reciprocidad.

# La principal exigencia del mercado es que los individuos le obedezcan incondic

ionalmente, sin cuestionamientos, como a una divinidad.

# La mxima coherencia es absurdsima.

# El poder, que no nos engae el artculo determinado, no es un estado de cosas sinouna accin.

# De no haber sabido tan poco, Scrates no habra bebido la cicuta.

# Para llegar a una nueva verdad se requiere tanta valenta como inteligencia. Sinvalor no aumenta el conocimiento.

# El artista es ante todo un vividor.

# La esperanza es una necesidad bsica.

# La soledad en estado puro consiste en tener un nico e involuntario espectador:t mismo.


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# El triste se ha dejado de mentir.

# Si se albergan esperanzas resulta mucho ms llevadero despreciar el presente.

# Un desarreglo de los sentidos que ni el mismsimo Rimbaud: mucho comn y del ridculo y ninguno del humor.

# El sexo no es una eleccin. (A lo sumo, en el mejor de los casos, elegimos con quin compartirlo.)

# Recuerda la muerte, si no quieres olvidar la vida.

# La civilizacin monopoliza mejor la violencia.

# La inteligencia animal, por poca que sea, se autoengaa.

# Lo que confiere sentido a la vida inteligente es la mentira respecto a s misma.La ameba persevera sin autoengao.

# Me gustara equivocarme y ser feliz.

# Un espejismo llamado Progreso.

# Decir que estamos en el Universo es una falacia; ni estamos en sitio alguno nicomprendemos la totalidad. Pertenecemos a un misterio.

# Las palabras crean limitaciones, dice Krishnamurti. S. Y tambin obras maestras, etre otras cosas.

# Lnea directa al despeadero. Paracaidismo sobre un manto de lava. Entre la estalactita y la estalagmita.


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# El buen maestro ha sido discpulo rebelde.

# El mundo se ha salido de su rbita. Unos lo llaman aventura, otros deriva.

# Es de locos. Somos quienes nos creemos.

# El mejor libro de un escritor es siempre el que no se atreve a escribir.

# Todo est dicho ya, s; pero no as.

# El absurdo nos har libres.

# La soledad de los espejos en un ascensor.

# Quien se cree ser algo cree.

# Tener autoridad moral es el salvoconducto a la monstruosidad.

# Dios ha vuelto; slvese quien pueda!

# Erro que erro.

# Ser valiente consiste ante todo en no temer la derrota.

# Ser libre es no tener ya miedo.

# A m lo que me pasa es lo que al elefante. No s muy bien el qu, pero me pasa.

# Todo paraso es artificial.

# Debatirse sin remedio entre la alerta mxima permanente y la ms radical y definitiva enajenacin.

# Ignorancia fractal.? El universo, al igual que a nosotros mismos, no hay quienlo entienda.


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# El caos es un hecho y lo dems es fe.

# El hombre es la experiencia de la nada.

# Los prejuicios de la vista.

# Volvers y ya no sers t. Tiempo al tiempo.

# Se cree en algo o se acepta el caos.

# La verdad suele ser inverosmil.

# Consumo cuidado.

# Cunta autocensura eres capaz de infligirte?

# "Do I dare disturb the universe?", se pregunta y nos pregunta T. S. Eliot. Quinsoy yo para molestar al universo? Pues a m, que formo parte de l, bien que me tocalos huevos con la preguntita.

# Echar de menos la nada. Estar de ms.

# Alonso Quijano cae bien a todo el mundo menos a Don Quijote.

# Arrojarnos al mundo y quedarse como Dios.

# Slvese quien quiera!

# Bucate a ti mismo! Pero ojo con tus piraas.

# Cuenta el ahora. No haga cuentas con l. Tenlo en cuenta.

# Escribir dios con maysculas es darle crdito.

# Primero cabe la posibilidad y despus ya cabe todo.

# Hablamos de nuestros instintos como si fuesen de otro.

# Pocos mueren de golpe; la cosa viene de atrs.

# Godot no va a venir.


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# La misantropa le incluye a uno mismo. O todos o ninguno.

# Escribir porque se tiene algo que decir o escribir por decir algo.

# Cuantos ms defensores tiene una causa, ms avanzado su estado terminal.

# Nada merece la pena. Algrate!

# Este crucigrama sin preguntas no lo vamos a terminar nunca.

# El Universo, annimo.

# La vida es hermosa porque acaba.

# No busques ms: ests a tu espalda.

# La diferencia entre historia y ficcin es que la primera an se la creen algunos.

# Si tu sufrimiento no es fsico, piensas mal.

# A partir de hoy seguiremos como hasta hoy.

# Lo que callas lo dice todo.

# La irona oculta un vaco.

# La verdad es un saco roto.

# Disfruta cuanto puedas del camino: terminars llegando a ningn sitio!

# No te creas, crate!

# Todo es mejor que nada.

# La condicin humana depende.

# Lo inmoral lo s en primer lugar por m y en segundo por el prjimo.

# Estamos todos en el ajo, nos repetimos.


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# La vida es una urgencia que no tiene cura.

# Lo que no puede ser ya est ocurriendo.

# La roca de Ssifo es uno mismo.

# De perdidos, me ro.

# No temer la derrota es de valientes.

# Toda lgica es aplastante.

# Creyente, agnstico, ateo, s, muy bien, lo que t quieras, pero con no andar jodiendo al prjimo bastar.

# Tan ilusoria es la alegra como la tristeza, pero la primera es una quimera saludable y la segunda un vicio.

# La acotacin de nadas de una red da caza y compaa a sus capturas.

# No sufras, t tambin vas a morir.

# Somos un temible milagro.

# Que lleguen los extraterrestres y hagan justicia.

# La cordura me aprieta.

# La verdad no se encuentra bajo ningn concepto.

# La vida va por el mundo propinando golpes.

# Mentira, sal de la vida.

# Me muero, luego existo.

# Entre un feliz y un infeliz hay mucho margen.

# CEBOS VIVOS.

# Ser algo ms que estar.


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# El vrtigo de imaginar el nmero total de seres humanos que han vivido, viven y lleguen a vivir jams.

# Dios es todo lo que nos falta. Pero una carencia no justifica absolutamente nada; mucho menos a s misma.

# Librate a ti mismo.

# Lo peor que le puede ocurrir a un virus es saber que lo es.

# La descomunal indiferencia del Universo, por todos lados; y a este lado, nosotros.

# Lo que quieres es precisamente lo que tienes que dar.

# La ventaja de ser creyente es dar por hecho que alguien te hace caso.

# Democracia es el mejor ejemplo de lo peor que le puede ocurrir a una palabra.

# La verdad es esta farsa, oh hipcrita lector, mi semejante, mi hermano.

# Si la vida es un juego, yo quiero jugar limpio.

# Un defecto incorregible es la carencia de sentido del humor.

# Si quieres una buena teora, pasa a la prctica.

# A la vida no le mires el diente.

# No nos merecemos tanta autoestima.

# Ser uno mismo es una mentirijilla.



# La libertad involuntaria es lo mismo que la esclavitud inconsciente.

# Su mxima aspiracin es ser ms vendido.


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# El presente es siempre este punto de no retorno.

# Se puede ser tan bobo como para creerse en posesin de la verdad? No respondas; es una pregunta retrica. Por supuesto que s!

# Qu maravilla, qu inutilidad el universo!

# Lo que quieres es precisamente lo que tienes que dar.

# Hay que ser rematadamente imbcil para creerse tan listo.

# Yoooooo, yoooooo y yooooooo, valga la rebuznancia.

# La ventaja de ser creyente es dar por hecho que alguien te hace caso.

# Democracia es el mejor ejemplo de lo peor que le puede ocurrir a una palabra.

# Mrate el simio al espejo.

# La verdad es esta farsa, oh hipcrita lector, mi semejante, mi hermano.

# Si la vida es un juego, preferira jugar limpio.

# Un vicio incorregible es la carencia de sentido del humor.

# Si quieres una buena teora, pasa a la prctica.

# A la vida no le mires el diente.

# No nos merecemos tanta autoestima.

# Sera mejor que ms de uno no supiera escribir en absoluto. Que nos ensearan slo a eer bien.

# Ser uno mismo es una mentirijilla.




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# La libertad involuntaria, la esclavitud inconsciente.

# Su mxima aspiracin es ser ms vendido.

# El infierno es nosotros.

# Cuando ya no importa nada, todo recupera su exacto valor.

# Si me pongo en tu lugar no te veo.

# Si me pongo en tu lugar, te desplazo. O te ocupo. O te penetro.

# Ganarse la vida echndola a perder.

# Yo empec a escribir porque no meda dos metros.

# Todos somos este dragn de mil cabezas. A todos nos huele el aliento a chamusquina. Es monstruoso.

# Unos son pobres porque escriben y otros escriben porque son pobres.

# Hablemos correctamente. Seamos intempestivos!

# Somos muy libres de ser siervos.

# Btox cultural.

# Los pobres abonarn la tierra.

# No quiero el asco que me das.

# Me cont todas las fotos de su viaje. Se senta un viajero y un artista.

# Me mira, se acerca, me vuelve a mirar y dice: Te lo voy a contar todo. Y rompe a

llorar.

# Tras el barniz de las palabras no hay madera sino corcho.

# Si quieres ficcin, cuntate tu vida.# Cristo era un nio de pap.


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# Reculemos. Se requiere Aclaracin de los Derechos Humanos.

# Llamarle hijo de puta sera ofender a esas profesionales.

# Prueba a ver si la horma de tu zapato te cabe en otra parte.

# Que este pan sea un manjar y este agua nctar, proclamo solemne, antes de untar elpan con miel y de tragar mis vitaminas con el agua.

# El egosmo es camalenico.

# Ya nunca siempre todava.

# Arte verraco.

# Imposible ser libre y cobarde al mismo tiempo.

# Esto es lo que me acaba de espetar una mquina: "Please prove you're not a robot." Se lo he demostrado en el acto pulsando una serie de teclas.

# Mucho diseo pero poco ingenio.

# Si buscas la perfeccin, qutate de en medio.

# Yo soy esta ilusin ptica.

# En un mundo al revs, este estable desequilibrio sera un inestable equilibrio.

# Millones de euros por meter goles, triples o puetazos... Los gladiadores se jugaban la vida en cada funcin y eran esclavos.

# Las ideas me pican, a veces como una urticaria y a veces como vboras. O me rasco o me hago un torniquete.

# Estamos vendidos al mejor impostor.

# Imagina: Sentarte como un tiro.

# La ristra de noticias cotidianas que nos informa y uniforma a la vez.

# No es que t seas tu cuerpo: es que tu cuerpo te es.


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# Cuanto ms arriba trepe el mono, mejor exhibir su culo.

# La infame turba de raras aves que cree alumbrar el corral con sus cacareos y truncos vuelos. El catlogo de sus interjecciones.

# Todo es desfase. Nada permanece.

# Dale al mundo tu felicidad. Dale al mundo tu infelicidad. Sea lo que sea, dsela.

# Imagina: Devanarse los sesos.

# Neosocratismo: Yo slo s lo que he ledo en Wikipedia.

# La actualidad es una enfermedad de nuestros das.

# Que la cacareada libertad consiste en la esperanza de conseguir lo que an no tenemos.

# Antes pertenecamos a un lugar y ahora los lugares son pertenencias.

# La vida es adictiva y banal.

# Leer no es fcil.

# Iluso perdido: Ser extranjero potencia la ilusin de ser diferente. Yo llevo yadiez aos en ella.

# Tener por un tesoro oculto nuestro pequeo arsenal de secretos obvios.

# Hipernormal de baba, so mastuerzo.

# La realizacin profesional depende de una cifra.

# Flores carnvoras con hambre.

# Algo as como un aforo completo de pinginos aplaudiendo y piando a su manera.

# Cupido estaba tuerto, padeca de miopa aguda y sus saetas no eran teledirigidas.


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# Madurar es, entre otras cosas, empezar a reblandecerse.

# Ms triste e intil que un ala rota.

# Damas y caballeros, con todos ustedes no se puede.

# La vida es el cncer del universo.

# The Vampire State Building.

# Batallones de rosas en conserva.

# La verdad es lo que quieras.

# Es evidente que disimulamos.

# Te acompao en el sentimiento, porque a la mierda te vas a ir solito.

# Donde la soledad acaba, all comienza el mercado, dijo Niche. Y la palm solo y venido.

# No correccin poltica, incapaz odiador, sino poltica correcta.

# Cmo es posible que un ser que defeca a diario haya credo tanto tiempo no ser unabestia ms?

# Vida inteligente, decimos. Dejmoslo en ideas y apetitos.

# El presente perpetuo: el eterno retoo de lo idntico.

# Primero cabe la posibilidad y despus ya cabe todo.

# La dignidad del peligro, deca Borges, que se arruin los ojos en la biblioteca.

# La realidad es desagradable por definicin, generaliz Gil de Biedma cuando le vio as orejas al lobo de la edad.

# Tanto pensar para morirse uno.

# Ser es creerse algo.


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# La voluntad de poder nietzscheana entendida el delirio de grandeza realizable.

# El filo de lo posible: El presente es lo que est pasando y el futuro lo que seva presentando.

# Ser libre es un vulgar sucedneo de vivir libre.

# Vivir como si nada fuera (a morir) contigo.

# Y habla, bla, bla.

# Mujer fetal.

# Me hincho a rer y vuelo un segundo.

# Necesitar un resumen del Universo.

# Hombros y mujeras por igual.

# Tu yo no es del todo tuyo.

# Lo que sea que nos ha llevado desde el gruido al ripio consonante.

# El que est libre de pecado pierde el tiempo.

# La destruccin del mundo ha comenzado ya; aporta tu granito y cambia de canal.

# Encadenados: Yo te escucho, t me escuchas, l o ella nos escucha, nosotros nos escuchamos, vosotros nos escuchis y aqu no escucha ni Dios.

# Problemas del espaol: Ir a acabar de empezar a ponerse a hacerlo.

# Listillo perdido: Si ser, que no me entiendo del todo ni yo.

# Lo que ms me aburre del sexo es hablarlo.

# Volver. A pensar con el cuerpo.

# La peor muerte y el crimen absurdo perfecto: el suicidio involuntario.

# Sabemos que no sabemos. Y para de contar.


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# Chauvinismo planetario.

# Necedad ilustrada.

# Jugar en serio y trabajar en broma.

# El vil metal: Si no te gustan mis principios, ya vers al final.

# La tirana del espectador: Divirteme o muere. O mejor dicho: Divirteme y mueresomos un poco Nern.

# Lo real es sencillamente inconcebible.

# Inconforme y feliz.

# El hombre mide de acuerdo con lo que piensa desde s todas las cosas.

# S pero no: Es posible ser generoso con avaricia.

# No puedes ms que ser.

# Pasar el da no haciendo lo que quieres.

# Si usted puede hacer la guerra por la paz, le aseguro que hay quien puede forn

icar por castidad.

# Dime lo que piensas pero ojo!

# La idiotez de lo real, dice Rosset. La inconsciencia csmica. Tanto poder imbcil.

# Universo insatisfecho.

# Lo nico que tenemos es tiempo, y cada da menos.

# La alegra en el infierno.

# Sentirse como un griego entre romanos.

# El infinito es una humillacin.


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# La eternidad, esa debilidad humana.

# Cosmopaletos. Aldea global.

# Incurable: El temor cerebral.

# Amor fugit.

# Si quieres llegar lejos, todo es prdida.

# Malo es aquello que me aterroriza.

# Somos iguales en la mediocridad, no en la excelencia.

2012. 11

S; Weininger tena razn. Las mujeres viven erticamente y los hombres hacen incursion

s en el erotismo. Los hombres sublimamos ms nuestra animalidad. Las mujeres, en el fondo, son ms naturales. Tal vez sea eso lo que ms nos atraiga de ellas.

Otro aspecto de suma importancia es el brutal componente adictivo del sexo. Cuanto ms folla uno, ms quiere follar. Hay que mantener a raya a la bestia o de lo contrario la especie se apodera de uno y te echa la vida a perder. O mejor dicho, te la echa a perder de la peor de las maneras, puesto que toda vida es en esenciaprdida: presa de los instintos bsicos.

Pero las cosas slo quedan claras una vez que han sido hechas. Las palabras no ensean nada. Las palabras, en el mejor de los casos, dan cuenta de lo vivido.

* * * * *

Slo nuestro narcisismo intelectual poda llevarnos a afirmar que la naturaleza imita al arte; previo paso por la afirmacin contraria, igual de falaz y narcisa: el arte imita a la naturaleza.

Es la cultura (los humanos que la conforman), y no la naturaleza, la que imita al arte.

El arte, al hacernos primero mirar y despus ver el mundo y a nosotros mismos bajouna luz distinta, nos propone modos de ser. Pero lo que cambia primeramente noes el mundo sino nuestro modo de concebirlo; es decir: nosotros mismos. El mundo

, a efectos prcticos, no es ni ms ni menos que nuestra concepcin de la realidad.

El arte parasita o transforma la cultura en la que se gesta, tal y como la malahierba obstaculiza o imposibilita en sus inmediaciones el florecimiento de vidaproductiva, tal y como el rbol altera y reanima la tierra que lo sustenta.

La incidencia social del arte casi siempre se debe a una de sus ms claras caractersticas: su poder de seduccin. (No otra cosa ocurre con la propaganda o la publicidad, que carecen en cambio de los atributos positivos del arte, valga como ejemplo su inservilidad.)


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Al igual que en los dems mbitos humanos, el hombre en tanto que animal cultural sigue al hombre en tanto que animal creador. Muchos hombres, pues, siguen a algunos: en el mbito social, a los verdaderos detentadores del poder o a sus representantes, sean de la calaa que sean; y en el privado, a los artistas, independientemente de su ralea.

Todas las obras de arte, incluidas las que estn al servicio del statu quo, proponen modos de ser. A veces las propuestas son inauditas. Con el tiempo, algunas (en un tanto por ciento variable dependiente de factores tanto intrnsecos como extrnsecos a ella) se asientan, se colectivizan y terminan fosilizando como nuevos componentes culturales, hasta que con el tiempo son a su vez desbancadas por nuevas propuestas.

En principio esto no tiene nada de reprobable. El problema reside en la selecciny promocin de obras, de modelos, de realidades. El poder siempre apoya y pone a su servicio los discursos que le favorecen. El siglo XXI no es una excepcin. Perola caracterstica ms honrosa del arte sigue siendo no servir.

El arte se crea y se destruye a s mismo incesantemente, transformando, de paso, su entorno. Cuando deja de hacerlo, la actividad artstica degenera, anunciando conello el ocaso de la cultura a la que pertenece (y a la que en cierta mnima medida modela); pasando a servir a los fines de sta, y no a los suyos propios.

A saber: el cuestionamiento y la regeneracin permanentes de nuestra visin de mundo.

El topo que saluda al avestruz.?El pensador: primero avestruz y despus topo, y notodo lo contrario.

Slo s que s muy poco.?Slo soy lo suficientemente inteligente como para saber, a vecs y por momentos, que no soy tan inteligente como creo ser la mayor parte del tiempo.

Nmadas o sedentarios.? Dos modos de temer la muerte: el que camina, por tener quellegar; y el que habita un lugar, por tener que marcharse.

El planeta vallado.?Antes se era de un lugar; ahora el lugar es de alguien. Hemos dejado de ser terrcolas: la Tierra es nuestra.

Ejercicio dialctico.?Tesis: dependencia; anttesis: independencia; sntesis: interdependencia.

Las comillas elevadas a la categora de valores.?La gran moral ?es decir, la personal, no la comn y colectiva? colinda siempre con lo bello, con lo correctamente trazado, las matemticas, la verdad? El orden equiparado a el bien.

No hay ideas sino en las cosas.?Algo de conocimiento, y no mucha sabidura; poemas, y no tanta poesa; actos, y no accin; unas cuantas amantes, unos pocos seres queridos, y no tanto supuesto amor.

Bastardos.?Pobres hijos de patria.

Pensamiento y poesa.?El poema no como una emocin reflexionada sino como una reflexin emocionada. No se trata de pensar el sentimiento sino de sentir el pensamiento.


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El problema de la verdad.?La verdad es lo que est ocurriendo, nada ms. Ni lo que ocurri, ni lo que ocurrir, ni aquello que queremos que ocurra. Slo lo que est ocurrindo es estrictamente cierto. Todas las dems verdades son mentiras tiles, posicionamentos para vivir.

El sueo es vida.?Vivir soando, y no soar vivir.

La cruda realidad.?La cruda realidad es una imperiosa fantasa provocada por faltade imaginacin.

Lrica cuntica.?Empec a escribir porque no y he terminado escribiendo porque s. (La rayectoria de mi actitud hacia la vida ha sido, por cierto, exactamente la misma.) Es como si hubiera cambiado de carga electromagntica. Me pregunto cul ser el prxmo porque. Me temo que neutro.

Maximalismo o minimalismo.?Amar algo por amor a todo? O amarlo todo por amor a algo?

The struggle for technology.?El hombre, esa especie que ha dejado de adaptarse al medio porque empieza a adaptarse a la tcnica.

Mucho ruido y las mismas nueces.?Heidegger tiene varias lacras serias (profesoruniversitario, padre de familia, filonazi) y una sola virtud: hablar desde el abismo. Su vida y su obra no coinciden. Parece que el hombre lo nico que sinti fue a

ngustia, y que la pali a base de plomizos y confusos neologismos. A duras penas dice algo ms que Nietzsche, pero lo dice muchsimo peor. Y cuando digo decir, digo expresar.

Guio a Bcquer.?Dios mo, qu solos estamos los vivos!

Guio a Rubn Daro.? Ser potente es ser sincero.

Guio a Pablo Neruda.?Sucede que me canso de ser pobre.

Guio a Miguel Hernndez.?Cunto pensar, para morirse uno!

El que est libre de prejuicio que suba a la palestra.?A pesar de no haber interca

mbiado con algunos de mis vecinos ms de tres o cuatro palabras en toda mi vida ?opuede que precisamente por eso?, estoy convencido de dos cosas: a) son unos perfectos imbciles y b) ellos piensan exactamente lo mismo de m.

Malo es aquello que me aterroriza.? Llamar honestidad a la incapacidad, he ah unode los bastiones de nuestra moral.

Ley de la gravedad.? La vida ?el fenmeno vida, y nosotros como parte de l? ni merece ni desmerece la pena: la vida es inevitable.

Vagar encaminado.? El caso es tener objetivos, aunque no los haya. No ideas, sino talantes. No caminos, sino rumbos.

Kant y Schopenhauer.? Son precisamente su subjetividad, su sangre y nervio, sus entusiasmos e iracundias, lo que hace que la filosofa de Schopenhauer perdure y sealeda por alguien ms que los especialistas a sueldo. Y as seguir siendo cuando Kantno sea ms que un nombre propio. Schopenhauer habla desde s mismo; Kant, en cambio,resulta impersonal, asptico, robtico, enfermizamente cerebral y, lo que es peor,instintivamente anmico (aunque es cierto que tras la maraa estilstica de objetividad se puede escuchar los plidos latidos de su po y gazmoo corazn).

Anulacin del deseo e impotencia.? Desconfianza preventiva hacia todo aquel que jamsae en sus bajas pasiones. Dominar un deseo no denota la fuerza de uno, sino la de


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bilidad de su deseo.

El nuevo clero.? Lleva traje, maletn y corbata. Estos nuevos mandarines, faltara ms, tambin fomentan la ignorancia. Arrojados a esta nueva edad media, slo una minorade nosotros tiene acceso a la alta cultura; es decir: est a su altura. El analfabetismo actual es secundario: saber leer es un arma de doble filo. La inquisicin hoyda es el mercado, cuyos bastiones de apoyo son la mentira (publicidad) y el pavor que provoca (marginalidad, mileurismo) en las clases medias. Antes se impona el silencio y ahora este estruendo ambiental que silencia todolo que no sea ruido.

Como los cangrejos.? El presente es lo que est pasando; el futuro, lo que se ir presentando.

Analfabetismo secundario.? El proceso educativo estatal es de lo poco que continasiendo gratis en nuestras sociedades (pinsese tambin en ciertos peridicos, emisorde radio y canales de televisin). Ni siquiera el agua es tan barata. El inters enmodelar mano de obra cualificada, consumidores descerebrados y mansos ciudadanosde segunda es imperioso, cueste lo cueste. La educacin privada, en cambio, quedareservada para la clase dominante. Lo ltimo que hara tu jefe sera enviar a su hijoa la misma escuela a la que asiste el tuyo. El deterioro del proceso educativoestatal es un deseo de las clases pudientes: cuanto ms estpido permanezca el resto, ms fcil les resultar a los suyos mantener sus prerrogativas. Su ideal en este sentido sera el siguiente: un trabajador lo ms especializado, ignorante, consumista e

indolente posible.No suele fallar.? Dime cunto ganas y te dir cmo, qu y para qu escribes. No te jode

Las lneas areas de la mentira.? Las nicas verdades de un peridico suelen ser la feca y el precio, y no por mucho tiempo.

Cadenas elsticas.? Para que el esclavo se crea libre.

Odiar el presente.? El reaccionario sita la perfeccin en el pasado (el paraso perdido) y el revolucionario en el porvenir (la utopa); uno la data al comienzo del tiempo y el otro en sus postrimeras. El presente o es un fruto en descomposicin o est an demasiado verde, pero nunca jams en su punto. Ambos talantes desprecian a su m

odo la vida, aunque justifiquen su nostalgia o su esperanza alegando precisamente un amor excesivo a la vida: altruismo, humanismo, en fin, basura surtida.El reaccionario suele ser viejo y el revolucionario joven. Ambos culpan al m

undo ?irreversiblemente degenerado o, por desgracia, todava imperfecto? de su insatisfaccin, cuando en realidad ocurre todo lo contrario: es su personal insatisfaccin la que degenera o imperfecciona el mundo, tan inocente o culpable como quiera uno declararlo. Hambrientos de ideal e ilusin, no ven lo presente; ansiosos buscadores de trascendencia, son incapaces de cualquier inmanencia.

Aunque parezca tara exclusiva del revolucionario, tanto el uno como el otroson fervorosos creyentes del llamado progreso, sea en el sentido que sea: haciaatrs el nostlgico, hacia delante el esperanzado. Ambos son partidarios del aspaviento. No parecen querer entenderlo. Meneo, y no avance; convulsin, y no transformac

in: la historia no se dirige a parte alguna, no se desplaza, sencillamente se agita.Socialmente, la humanidad es algo as como un saco de lagartijas incapaz en su

totalidad de avanzar en sentido alguno, pero igualmente incapaz de quietud, y en el que el nico posible movimiento individual consiste pisarle la cabeza al reptil vecino, intentar trepar y trepar hasta ?en el mejor de los casos? lograr encaramarse a la cima de un pegote frentico, ciego y colectivo de semejantes que entonces parecen postrados a nuestros pies.

Reglas de estilo.? Minilocuencia, prosa epistolar y atesmo ?que no ignorancia? li


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terario.

Helarte por el arte.? Patente estetizacin de la poltica, por medio del kitsch y con fines propagandsticos, a la par que subrepticia politizacin de la esttica con fines igualmente propagandsticos. El arte (basura televisiva o El Quijote, Mozart oLos Beatles, Las Cuevas de Altamira o El Guernica), independientemente de sus creadores, a la postre casi siempre termina funcionando como mera publicidad (ms obvia o sofisticada, para el caso es igual) al servicio del poder. Los objetivos de esta propaganda poltica son los de siempre: represin sonriente o "shiny happy people", como cantan los R.E.M.; polica de paisano o autoridad interiorizada; hierros invisibles o esclavitud elstica; en fin, domesticacin no traumtica. La esttica, i en manos del poder poltico, va siempre indefectiblemente a parar en helarte porel arte. Siempre fue as y as sigue siendo. Virgilio perda el culo por el Csar; el ueblo adoraba a Virgilio. Una mezcla de mayordomo y bufn, el artista.

Hacerse de rogar.? El placer de poner pegas a los pensadores que me seducen.

Necrofilia.? Escribir sobre otro escritor consiste en su mayor parte en sealar sus aciertos y desaciertos con el fin de hacerle decir lo que de hecho estamos diciendo ?o queremos decir? nosotros. Coaccin, en caso de que el autor est an vivo.

Por eso el fillogo por antonomasia prefiere dedicarse a los autores muertos, ventrlocuo que utiliza a los clsicos como marionetas. La filologa como violacin de cdveres.

La confianza da asco.? Hay que saber guardar las distancias. sa es la clave de laamistad. El nico modo de que dos lneas no se distancien es que no se crucen. La amistad duradera es paralela.

Alegra y anemia.? La alegra es instinto, y el instinto jams atiende a motivos. Quien carece de alegra est, claramente, enfermo.

Trujamanes y taxidermistas.? La crtica literaria, esa labor de intrpretes e intermediarios, de representantes y asesores de imagen de los escritores, de peritos en la disecacin y clasificacin de lo que a menudo se les escapa.

Qu ha pasado?? Lo que an no se ha olvidado.

El peor defecto del crtico literario.? Corazn que no siente, ojos que no ven.A la altura de las circunstancias.? A veces, cuando estoy fuera de m, me comporto?o mejor dicho soy? un verdadero canalla. Slo entonces me parece estar a la altura de las circunstancias.

Aade sabidura y aumentar el folln.? A mayor entendimiento, mayor el malentendido.

Algo se mueve.? La idea de Voluntad de Schopenhauer como movimiento. El mundo es movimiento, el mundo se mueve.

Pretender anular la voluntad es tanto como soar con anular todo cambio. La quietud, el reposo? El desesperado y vano intento de creer no ser siendo.

Medias tintas.? El laureado trmino medio no siempre es lo ms deseable. Slo hay dosmodos de tolerar a otro: no conocerlo en absoluto o conocerlo ntimamente. Un enemigo siempre es alguien a quien conocemos a medias. Esta idea se puede aplicar a la mayora de las parejas. Al principio se aman desenfrenadamente, se aborrecen a mitad de camino y ?si es que llegan? al final setienen cario.

Ms valgo yo aqu y ahora que no s ni con quin ni cunto.? Resulta molesto imaginarselo, pero estarlo casi nunca lo es. En cambio, imaginarse en compaa tiende a resultar grato, cuando en realidad rara vez lo es.


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No nos duele tanto la soledad sino temerla. No es tanto la compaa lo que nos hace falta sino saber que podemos tenerla.

Bla bla bla.? Pronunciar la palabra 'vanidad' y, acto seguido, seguir hablando.

Prohibido el caso.? Quien crea firmemente tener algo importantsimo que decir a sus semejantes es precisamente quien debe permanecer callado a toda costa, no vayaa ser que cobre adeptos y la le por ensima vez.

La bestia indmita.?Tantas palabras altisonantes, tanto supuesto ahondamiento, y ni siquiera soy capaz de contener mis ms primarios accesos de ira. Todo pamplinas.Pura farsa. No hay modo humano de sofocar a la bestia.

Yo es otro.? Hablamos de nuestros instintos como si fuesen de otro, como si no nos pertenecieran, efectos que tienen lugar en nosotros de algo que creemos ajeno. Pero lo cierto es que no son efectos, sino causa; que no slo no son algo extraoa nosotros sino que son lo ms ntimo, lo ms nuestro.

El verdadero otro es la conciencia, ese desdoblamiento que nos permite distanciarnos de nuestro propio centro. Por eso, cuanto ms alejados de la animalidad, ms arraigados y escindidos vagan por el mundo los hombres. La conciencia es el gran generador de tormento. Slo sufren las criaturas que saben que lo son.

La dignidad del ignorado.? Cuando despreciamos a alguien, muy a menudo se debe a

que no ve lo que nosotros vemos, especialmente nuestras supuestas cualidades.Apaga y vmonos.? Que no se canse el universo! Que no cese! Que no abdique de una vepor todas y se desintegre, volviendo al punto incomprensible del que nunca debisurgir! Eso, eso es lo inconcebible! Por muy absurdo que parezca el hecho de planterselo!

La rebelin de las armas.? La inteligencia es para el hombre fruto de la necesidad, igual que para una tortuga lo es su caparazn. La diferencia entre una y otra cosa es que la inteligencia crece, olvidando su finalidad primitiva, hasta aplastarnos con su peso.

Explcate a ti mismo.? Lo verdaderamente difcil no es conocerse a uno mismo, sino s

aber por qu es uno como es.Para presas fciles.? Si quieres que alguien se interese por algo, dile que muy probablemente a l eso no le interesa.

No nos cabe en la cabeza.? No hay realidades sino concepciones. Y en caso de que hubiera alguna realidad, nosotros no podemos concebirla.

Cave hominem.? Nos pasa con el mundo lo que al perro que intenta morder el baln.

Ni ms ni menos.? Muchos escritores agrandan ?o al menos lo intentan? los temas que tratan. Si escriben sobre el amor, hacen de l la piedra angular de la civilizacin; si de la libertad, otro tanto de lo mismo; si de la moral, etc. (P. ej. Lope.

) Hay otros muchos que en vez de agrandar, empequeecen sus temas, casi siempre ridiculizndolos. stos, los satricos, son menos numerosos que los primeros. (P. ej. Quevedo.) Por ltimo hay una selecta minora de escritores que respetan las dimensiones desus temas. (P. ej. Cervantes.)

Casi y pico.? La mitad de lo que se dice es mentira y el resto no llega a ser del todo cierto.


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Lo importante es no participar.? Formar parte, da igual de qu, es el motor de labarbarie. Las grandes barbaridades se cometen en equipo.

Abuso intelectual.? El placer de descubrir las tretas que alguien que nos infravalora (o que simplemente no sabe mentir mejor) utiliza para intentar engaarnos.

La eterna adolescencia.? La vida consiste en adolecer. Slo lo inerte se basta a smismo, slo lo inorgnico es autosuficiente por completo. Vivir es querer. Algo. Loque sea. La diferencia entre unas vidas y otras reside en la quimera que persiguen y en cmo pretenden darle alcance. Cada cual da un nombre a su apetito.

Hasta los muertos giran una vez al ao alrededor del sol.? No hay nada eterno: todo lo existente se encuentra en movimiento, en cambio permanente. Lo eterno, en cambio, se define por su inmovilidad, por su inexistencia. Tal vez lo nico eterno sea el movimiento mismo, y no lo que se mueve, lo movido.

Lgrimas de letraherido?? Ganas de llorar al toparme con estas palabras de Wittgenstein: El milagro esttico es la existencia del mundo. Que exista lo que existe.

El gran ignorado.? El hombre es la nica criatura que sabe que existe el mundo y que no ignora que en el mundo no hay nada que sepa de l. La terrible angustia de saberse ignorado a escala csmica.

El peso del mundo o el Weltschmerz se debe a que el hombre sabe de la abismal

indiferencia de ste.Herclito.? Ningn presocrtico tan cercano como Herclito a la mordacidad, la capacidade desfascinacin, el arremeter contra todo pilar y la desesperada bsqueda personal de algunos hombres de nuestra era. Slo una lucidez descomunal pudo hacer que ungriego escribiera hace dos mil quinientos aos me investigu a m mismo o que afirmaque las cosas son justas o injustas para el hombre. Todo sucede segn discordia y necesidad, deca, y lo saba porque as ocurra en l. La necesidad hace a la salud agy buena; el hambre, a la saciedad; la fatiga, al reposo, repeta, y defina la guerra como la madre de todas las cosas, tal y como ha demostrado la civilizacin occidental que entonces naca. Nadie con su irreverencia entre aquellos protoeuropeos. Mal entendida por suscomentaristas fue la humorada que profiri ante las abundantes majaderas de sus co

ntemporneos respecto al tamao del astro rey: El tamao del sol es del ancho de un pihumano, se despach. Su honestidad y fortaleza quedan resumidas en estas palabras:este mundo, el mismo para todos, ninguno de los dioses ni de los hombres lo ha creado. Ya este efesio de claridad insultante ?apodado paradjicamente El Oscuro por la ceguera de su tiempo? supo que las opiniones son una enfermedad sagrada. Quizs por ello diera rienda suelta a las suyas. De sus compaeros de especie dej dicho ?en untono ms acorde con ciertos autores del siglo XX que con el Zeitgeist de su poca? que una vez que nacen quieren vivir y tener su muerte y dejar tras de s hijos que generen muertes. No fue menos corrosivo con los clsicos de su tiempo. Mucha erudiciensea comprensin; si no, se la habra enseado a Hesodo y a Pitgoras, se atrevi iar. Y no satisfecho con ello, calific a Pitgoras de iniciador de fraudes y plagiaDe Homero lleg a decir que era un mero astrlogo digno de ser expulsado de las com

iciones y azotado. Lo mismo pensaba de Arqumedes.Del ancestral respeto a los muertos se despach con estas palabras: Los cadveresdeberan ser arrojados al estircol. Todo esto sin entrar en sus pensamientos de mayor calado popular, algunos delos cuales (Todo se mueve y nada permanece y en el mismo ro no nos baamos dos veceso Cambiando se descansa) ya fueron repetidos hasta la extenuacin durante la Antigedd y an hoy siguen siendo pasto de nuevos poetas y de refraneros.

Los prejucios del cuerpo.? La viscosidad de estrechar una mano blanda y hmeda. Loque pienso de su dueo.


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El deseo no nos pertenece.? La idea de la libertad es puro instinto de conservacin; se trata de algo tan execrable o encomiable como el de procreacin, como el mrito que pueda tener el hecho de ser parido o el que un rayo parta un rbol en dos. No hay decisin ni intencin; no hay deseo. Todo es acto reflejo. El amor fati consiste en querer lo que no queremos, en amar lo que acontece.

El huevo sin gallina.? Me resulta ms difcil imaginar un universo con principio y final que uno sin ellos.

El Intelecto & Ca.-- No hay inteligencia sin conciencia. La primera nos hace verlo externo y la segunda lo interno; aqulla descubre la soledad y sta nos hace compaeros de nosotros mismos.

Vanidad de vanidades.-- La vanidad del hombre es polimorfa y polifactica, omnipresente e impepinable, ridcula y pattica.

El chauvinismo es vanidad a escala nacional y el humanismo a escala planetaria. La inteligencia est al servicio del instinto de conservacin.

La flaqueza del martillo.? Las propuestas de la filosofa son su punto dbil. La nicalabor de un pensador que no quiera caer en concesiones es la de derribo.

S pero no.? Es posible ser generoso con avaricia.

Un abismo de vida y muerte.? El vrtigo de imaginar el nmero de todos los seres humanos que han vivido, viven y lleguen a vivir jams.

La ingeniosa ferocidad humana.? La especie humana se propaga terca e insaciable,tal y como cualquier otra especie, s, slo que con unas armas mucho ms mortferas quel resto de las criaturas. Su conocida falta de misericordia, su mezquindad y estupidez no conocen lmites. Quiere contenerlo todo, alcanzarlo todo, y cuenta conlos medios para llegar a hacerlo. El problema es que su concepcin de ese todo crece a la par que su capacidad de destruccin. Un puado de hombres sabe hoy lo necesario para reducir a polvo csmico lo que sus antepasados tenan por universo hace quinientos aos. Baudelaire defini muy bien nuestra cualidad ms visible: La indestructble, eterna, universal e ingeniosa ferocidad humana.

La dignidad del mayordomo.? Amar la vida... S, pero por qu? No hay ni un solo motivo vlido. Tampoco lo necesitamos. Al fin y al cabo no somos ms que una forma ms de vida. El intelecto, como es sabido desde Schopenhauer, est al servicio del instinto. Cmo podra la mano rebelarse contra el cuerpo del que forma parte? Y desde cundosiervo tiene o necesita motivos vlidos para servir a su amo? Un siervo obedece sin razones.

Nuestro amor a la vida es una imposicin. Las justificaciones son piropos que nos regalamos a nosotros mismos para tenernos por partcipes de una supuesta eleccin. El amor fati nietzscheano es la constatacin de nuestra servidumbre. El hombre es el siervo ms capaz, sofisticado y eficiente de la naturaleza.

Putculo.? El trabajo y la moral que me interesan no buscan recompensas y no son i

mposiciones.Lo llevo de puto culo, lo s.

Depende.? El conjunto de las partes carece de propsito y las partes slo lo tienendentro del conjunto. Nada es en s. Todo depende.

Admiracin apenada.? Reledo El libro del desasosiego. Pena de Pessoa, un tmido enfermizo que no vivi ni un slo da en el mundo. En lugar de eso se mont el suyo. (Lo delos heternimos, realmente, a veces llega a tocarle a uno las narices.) Esta bora


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tiene un 75% de material desechable, pero el 25% restante (se lo atribuya a quien se lo atribuya) es sencillamente apotesico. Algunas pginas son tan impresionantes que justifican las treinta anteriores y las treinta posteriores. Por debajo dela literatura, el libro destila tragedia, locura y tristeza, una inteligencia con recovecos, autocrtica, dolor, mucho dolor, e inocencia. La vida de un pobre diablo que se pas la vida entera al borde de la catatonia, logrando controlarla y encauzarla. La vida de un perdido y un perdedor que jams perdi la fe en s mismo y que jams tuvo fe alguna en lo que haca.

Silencio tatuado.? La escritura es adictiva. Son pocos los que han conseguido cerrar de veras el pico: Rimbaud, estrafalariamente; Rulfo, con suma elegancia; Pavesse, colmo de la paradoja, teatral y aspaventero, avisando, registrndolo calculada y previamente en su diario.

Probablemente haya ejemplos mejores que no recuerdo o ignoro. Tambin estn los ejemplos puros, es decir, aquellos que no tuvieron que callarse porque nunca abrieron la boca, quin sabe si por estupidez, falta de necesidad, impericia o lucidez. Habr, probablemente, casos y casos. Ya no importan, claro. Nunca importaron. Alfin y al cabo lo nico que cuenta, lo que en realidad somos, no es ms que lo que hacemos (como dice no slo Sartre, aunque slo l intentara construir un sistema basndoe en ello). Y aunque la omisin tambin es de algn modo una forma de acto, en literatura el silencio slo suena cuando previamente se ha hecho ruido.

Otra cosa distinta es pretender expresar el silencio con el ruido, la inefica

cia de todas las palabras en lo que al dolor y al amor se refiere, el absurdo detodos nuestros desvelos, lo ficticio de nuestras ilusiones, lo efmero e irrisorio de toda posteridad. Hasta las piedras sern polvo. La literatura que ms me interesa es la que no olvida nunca ese silencio, ese vaco de fondo.

El destino no existe.? Las excusas tampoco. La mala suerte an menos. Somos lo quehacemos, lo que dejamos de hacer, lo que hacemos de y con nosotros mismos. Negar a estar alturas esto es cnico o estpido. Pero hay que recordar que dentro de unas reglas del juego. Y no me refiero slo a las reglas sociales (Sartre: Somos lo que hacemos con lo que han hecho de nosotros) sino tambin a las biolgicas. Para empezar no hemos nacido sino que nos han nacido, que we have been born. Adems somos mamferos y no vegetales, humanos y no perros, sanos y no tarados, lcidos y no imbciles. Yo no me he hecho a m mismo ni varn ni sano ni lcido; tampoco mis padres, aunque

es cierto que en lo segundo y tercero colaboraron con la naturaleza. Pero a partir de esos rasgos definitorios, lo dems es cosa ma: dnde estoy, cundo, cmo y por es decir: qu soy, qu me hago.

Pero hay ms. Somos autores de nuestra propia vida en el mismo sentido en que lo somos de una obra: el resultado no suele tener mucho que ver con lo que nosotros quisimos hacer de ella. Somos lo que nos hemos hecho y lo que estamos haciendo, pero no seremos lo que queramos hacernos. No s si me explico. Hablar de nosotros mismos como de una unidad consciente ?y que nos pertenece? es engaoso. Nuestraconciencia es parte de una unidad que se nos escapa y que no podemos aprehender. Nuestra conciencia est al servicio de nuestra totalidad, que la supera. Por esola conciencia casi siempre yerra; y cuando acierta, las ms de las veces, lo hacea posteriori. Somos una alfombra enrollada que antes de abrirse ya contiene en stodo lo que ser extendida, pero que hasta que no se abre no puede ser contemplada

? Ser es estar de paso, y no los pasos.

Narcisismo y belleza.? A pesar de los fros de hace unas semanas, el otoo parece resistirse a fenecer y disfrutamos de unos das frescos y soleados cubiertos de amarillos mates y de ocres secos. Adems est el cielo, cuya cpula a estas horas (falta un cuarto de hora para las once de la maana) ofrece una amplia gama de azules queoscilan desde los ms oscuros y marinos del cenit hasta los ms claros y propiamentecelestes del horizonte; y hacia el atardeder, las pocas nubes que lo surcan setien de una mezcla de rosa y naranja que lo invade todo y todo lo llena de una tristeza tranquila, intil y desgarradoramente hermosa.


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Morir esta belleza y moriremos nosotros tambin, nicos seres que consideramos bello el fenmeno visual provocado por la rotacin de un planeta y la luz de una estrella. Pero no importa, de verdad que no importa. La vida es bella porque pasa, lavida es estar de paso. Nada es hermoso si no acontece. Slo lo ftil y pasajero ?yesos son precisamente nuestros ms ntimos atributos? nos estremece. Somos narcisosy egotistas hasta en eso: slo nos conmueve aquello que nos recuerda nuestra propia condicin.

Maternidad y paternidad.? Ser padre debe de ser maravilloso, a la vez que terrible. Una gran aventura. Una hazaa o una chapuza. Un marrn. Un paquete. Un ancla. Otros dirn que les da alas, que les llena, lo cual no es de extraar a la vista delvaco interior generalizado. Con todo, yo ya no me atrevo a soltar airadamente quede ese agua no beber. Yo nunca querr tener un hijo en abstracto, pero otra cosa esquerer tenerlo con una mujer determinada. Cepos de la naturaleza, s. An no he cadopero si me lo llegan a poner a huevo hace unos meses vaya si caigo... De cabeza.

Tener un hijo por amor a una mujer. Ese es el anzuelo que muerde el hombre. Las mujeres tienen hijos por y para s mismas; en cambio nosotros lo hacemos por ellas. Un hijo pertenece por partida doble a su madre.

El caminante y sus rmoras.? En realidad, lo nico que hasta la fecha he conseguidoleer de Wittgenstein, con provecho y digestin completa, es la pequea seleccin de aforismos Cultura y valor, compuesta de fragmentos sacados de aqu y de all, diarios,cuadernos, papeles sueltos. Uno puede encontrar afirmaciones como que en arte e

s difcil decir algo que sea tan bueno como no decir nada; o que el humor no es unestado de nimo, sino una visin del mundo; o que racionalmente no es posible tenerira ni contra Hitler, mucho menos contra Dios. Ah Wittgenstein est a la altura delos mejores moralistas. Lo que pasa es que el tipo estaba tocado por un ramalazo de absoluto o de abismo chungo y le gustaban demasiado las matemticas, y a menudo se pone serio, se lo toma demasiado a pecho y desbarra. Y es entonces cuandose dedica a escribir tractati.

Con todo, creo que Witt era honrado en el sentido hondo de la palabra; es decir: nunca intent dar gato por liebre, no quiso quedarse con nadie. Pero, al fin yal cabo, era germnico y esa pesadez congnita en todo norteo, esa sustancial faltade gracia, deslustran su talento (aqu se salva Nietzsche y para de contar). Tal vez por eso, consciente de sus taras y atrado por aquello de lo que careca, admirara tanto la cultura inglesa.

Pero su verdadero problema son sus discpulos. Un discpulo es aquel que no sabedefinirse ms que subindose a la chepa de algn gran nombre, un papagayo que se jactade repetir lo que no entiende (y no lo entiende porque, en lugar de vivirlo l mismo, lo ha aprendido de la vivencia ajena); el problema es que las hordas de seguidores y farsantes saben (qu bien lo saben) que cuanto menos se les entienda ms redonda queda la tomadura de pelo. Pero en el fondo no engaan a nadie. Mucho menosa s mismos.

Quien consigue engaarse a s mismo es honrado. El que se equivoca convencido desu error logra que su error en cierto modo deje de serlo. En rigor el error slo es tal cuando es consciente. Todas nuestras vidas no son ms que eso, una sucesin deerrores, pero ms nos vale vivir sin darnos cuenta de ello. Tal vez tambin sea se el caso de Wittgenstein. Y de otros cerebros igualmente privilegiados. De Kant yHeidegger, por ejemplo. No digo que no dudaran nunca de s mismos, de sus obras, p

ero al fin y al cabo creyeron en lo que hacan, creyeron en hacer, y sacaron de s el material para hacerlo. Eso ya es digno de admiracin. Siguieron su camino, aunque a la postre no llevara a sitio alguno, como al fin y al cabo ocurre con todo verdadero camino, y lo recorrieron hasta el final y sin mirar atrs. Hicieron lo que tenan que hacer.

El propio Wittgenstein se pregunta en algn momento si la filosofa ha hecho algnprogreso. Y responde: Cuando alguien se rasca donde le pica, debe verse un progreso? Si no, no es un autntico rascarse o un autntico picor?

El problema, insisto, es que mientras a l le picaba el ncleo de su ser, a las legiones de chupatintas que lo vampirizan y tergiversan tal vez no pase de irrita


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rles un leve escozor cutneo.

Buscadores de Dios.? Todos lo somos en alguna medida. El problema actual es quela idea de la divinidad que ha reinado en el orbe durante los pasados dos mil aosest todava demasiado cerca como para poder echar mano de la palabra que la designa sin correr serios peligros. Pero, en realidad, cuando recurrimos al vocablo Dios ?o a cualquier supuesto sinnimo? no estamos ms que intentando dar nombre a lo inefable. Y lo inefable no es inefable en s, sino para el hombre, que depende de y es en gran medida lenguaje, esto es, lo que puede decir. As que la idea de Dios noes ni ms ni menos que el fruto ms hermoso de nuestra impotencia. Dios es lo que nos falta. Pero una carencia no justifica absolutamente nada.

Como el que no quiere la cosa.? La mayora de las palabras estn tan gastadas, tan pulidas y sobadas, que da vergenza hacer uso de ellas. Un buen escritor ms que elegir palabras lo que hace es esquivarlas. El asunto es tan primordial como ignorado. Lo ms difcil de este mundo es la sencillez, la carencia absoluta de quedonismo,la sobriedad; en fin: el clasicismo bien entendido. Se trata de escribir cansado, como de vuelta, sin dejarse atrapar por las palabras, sin darles ms importancia de la que tienen. En fin, escribir como el que no quiere la cosa.

La prerrogativa del guerrero.? Morir; no morirse.

Retrato de brocha gorda.? Simplificar es el modo ms fructfero de mentir.

Suposicin y pregunta.? Si el orden es el caos maquillado, qu hace de maquillaje?

Soledad & Conciencia.? La soledad es el campo de cultivo de nuestras obsesiones;en sociedad, terminan malogrndose.

La soledad consiste en no poder mitigar nuestra conciencia.

Honestidad brutal.? Slo la pasin es del todo cierta.

La buena fe.? La felicidad es una creencia.

Pensamiento a sueldo versus Poesa.? La filosofa pagada (me refiero a la institucionalizada, asalariada o subvencionada, la funcionarial, acadmica y profesoral) con

siste en pretender darle al lenguaje una ?nueva dimensin? que permita jugar sin peligro con las palabras, hacer castillos en el aire, ya sea con neovocablos creados ad hoc (aqu dasein se lleva la palma) o con los siempre cambiantes significados de los viejos trminos (qu quiso decir Platn cuando hablaba de ousa? Hay respues la carta).

Pero aunque todos jueguen a lo mismo, no todos juegan igual... Cada sistemade pensamiento se inventa e impone las reglas de su juego. La gama de posibilidades es amplia. Podemos, por ejemplo, tener un juego libre en cierta medida (algoas como pasear atado por el cuello a una correa) o uno con los pasos ya casi marcados (algo as como pisar en la huella).

Lo que s tienen en comn todas las posibles variantes de este nico motivo es determinante: su palabrera habla solamente de s misma, es esencialmente ensimismada,no ve ms all de sus propias narices. Es decir (y esto sonar a blasfemia lega a los

ctedros y aspirantes): esa metafilosofa, desde el momento en que se postra ante s misma y no contempla ms que su propio ombligo, slo puede ser subjetiva y narcisista.

La poesa, en cambio, adems de poder divagar sobre s misma, puede tambin hablar dl hombre de carne y hueso que la perpetra, y, por tanto, de lo dems, del mundo? Vctor Hugo lo dijo as: Cuando os hablo de m, os hablo de vosotros. El poeta alcanza a desentraar lo otro sin saber de antemano dnde va a ir a parar, cmo va a dar forma a qu. La obra de arte, el poema, no est ya en la mente del poeta sino muy difusamente, ms bien se aloja en la zona oscura de su conciencia; ylas ms de las veces el resultado de la actividad artstica es muy distinto de lo qu


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e el artista pudo llegar a creer, lo cual nunca hace que su valor artstico disminuya. El filsofo, sin embargo, pretende hacer otro tanto de lo mismo pero de un modototalmente consciente y previamente definido. La cuestin es si lo consigue. Schopenhauer dice que no. l mismo, que s fue un verdadero filsofo, afirm que sin intuicprevia no hay nada importante que razonar. La poesa es la facultad de hacer verdad; la filosofa, el tesn, el empeo, el ahnpor alcanzarla. Pero querer no es poder. La filosofa no tiene libertad de movimientos, est predestinada en su mtodo, tiene el camino marcado. La filosofa se sabe, se puede contar. La poesa no se manufactura, sino que se atraviesa, y no es transferible, no se puede ni ensear ni aprender. La mayora de los textos filosficos son un intento de poetizar bajo cnones positivistas de laboratorio, y mediante verborrea crptica e insufrible que slo engaa a los ingenuos, al hacerles pensar que esos mazacotes de palabras encierran algn hondo misterio o sentido. Para comprobar esto basta con leer cualquier revista filosfica publicada por cualquier universidad.

El ciudadano tipo.? Empujado por la necesidad, extenuado, asqueado por el trabajo (si dice que ama su trabajo remunerado entonces an peor) y dems obligaciones; hundido en un incesante ajetreo del que suele terminar siendo adicto; posedo por las pasiones ms rudas, a las cuales sirve; egosta en el sentido ms bajo; modelado porlas ideas imperantes pero convencido de haberse modelado a s mismo; partidario en el fondo de los tres pilares bsicos de todo Estado: patria, familia y religin (o

un sucedneo de ellas); ansioso por cumplir al pie de la letra los dictados del mercado, por consumir, lo que sea; sin un slo momento para la reflexin, para caer en la cuenta de lo que hace; etctera, etctera, etctera. En fin, una simple pieza quecumple su funcin de modo inconsciente y a las mil maravillas, en el engranaje deesta sociedad.

Etiquetado identitario.? Somos tmidos o extrovertidos, mezquinos o magnnimos respecto a los dems. Cuando no hay nadie ms que uno mismo, qu somos?, quines? Un hombresto o aquello respecto a los dems. Sin semejantes, no tendramos propiedades ni atributos. Si me llamo Miguel es para poder ser diferenciado de los dems; aislado,no me hace falta un nombre.

Nos definimos en compaa; en soledad, somos huecos inefables.Sin embargo, quien rehye la soledad, huye de su yo ms ntimo. Quien es incapaz de

encararse con su desnudez, no es ms que una amalgama de etiquetas procedentes desu vida civil.

Lo dijo Marx y tena razn.?Desde que el hombre es hombre, su convivencia se ha basado en la explotacin. l crey que un da dejara de ser as; ah yo no llego. Pero ya premisa es inevitable, que sean las mentes ms eminentes ?como quiso Platn? y no los bolsillos ms llenos, quienes exploten.

Pero nosotros, hombres del sentido histrico, proletarios que creemos no serlo,fervorosos del espritu industrial y convulsos consumidores de esos mismos productos que nos esclavizan en las fbricas y oficinas; nosotros, creyentes de la estulta progresin acelerada, del consumo a destajo de deseos prefabricados; nosotros,guioles engredos, fanfarrones cobardes, antihroes bravucones, mezquinos solidarios,superficiales cultos, frgiles, rabiosos, vacuos de espritu; nosotros que ansiamos

a toda costa el bienestar (s, todo se reduce a tener o no tener un coche con elevalunas elctrico) y que creemos adquirirlo pagando letras, pero que no componemosms que un cmulo de desequilibrados, de neurticos, de delirantes; nosotros, deca, tn incrdulos en tantos aspectos, tenemos ya estandarte en pos del cual cometer tropelas: ese vocablo sobado que es la democracia.

Mientras tanto, los que nos hacen seguir creyendo en esa bandera de la igualdad, por su parte, siguen marcando las verdaderas diferencias. Los empresarios ybanqueros estn de vuelta de los cuentos chinos que nos cuentan.

As las cosas, el dlar manda, el capital comanda la situacin planetaria, tiende sus redes de abstraccin hasta en el ltimo rincn de nuestras vidas, hasta introducirn


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os en la fbrica, digo en la Historia, tras limpiarnos de toda raigambre y convertirnos en cscaras de hombre: es decir, en Hombres con hache grande, en obreros (daigual que sea en la construccin o en la oficina) que ignoran serlo, lo cual evita muchos problemas a los gobiernos, la banca y las empresas, que son Trino y Uno. En compensacin a todos nuestros esfuerzos por hacer que la mquina siga funcionando, se ponen a nuestra disposicin numerosas catedrales mercantiles en las que pasamos las pocas horas libres que nuestras vidas de obreros inconscientes nos permiten, devolviendo all las divisas que se nos dan a cambio de productos innecesarios y de algo que llevarnos a la boca para poder continuar bien sanotes con la faena de cada da.

El ltimo hombre.?Leyendo As habl Zaratustra. El ltimo hombre del que hablaba Nietzshe es el vivo retrato del hombre occidental contemporneo. La tierra se ha vuelto pequea debido a los avances tecnolgicos. Todo se sabe ya,menos lo nico que verdaderamente importa saber. Todo es posible ya: hasta creer que somos capaces de inventar nuestra propia felicidad con mquinas. Pero la pequeezde la tierra, esa supuesta omnipotencia nuestra, tambin nos empequeece a nosotrosmismos, nos encierra y ciega. Los avanzados medios de transporte y de comunicacin empequeecen las distancias, nos lo ponen todo ilusoriamente al alcance de la mano con tan slo apretar un botn o pisar el acelerador. Pero lo ms cercano est cada dms lejos.

Quin se estremece a estas alturas con una puesta de sol? A quin le conmueve a esas alturas el sonido de la lluvia? El ltimo hombre alimenta su esculido espritu con

cine comercial, telenovelas y best sellers. Hoy, la poesa aburre; la prensa delcorazn hace su agosto.El ltimo hombre es el que ms vive, dice Nietzsche por boca de su Zaratustra. Rec

rdemos que las decadencias son lguidas, que los ocasos son lentos. El declive delltimo hombre proseguir hasta que ste sea consciente de su insensatez y delirio. Pero ay! Llega el tiempo del hombre ms despreciable, el incapaz ya de despreciarse as mismo.

Pero el veneno apacigua la angustia, no la deja salir a flote. Se trata del narctico de la permanente novedad, ese constante cambio de piel que a travs de la publicidad nos intoxica con sueos agradables, ilusiones y calor. As las cosas, el trabajo es un entretenimiento: el hombre no sabe qu hacer consio mismo los domingos por la tarde, necesita pasatiempos que le impidan meditar,encontrarse consigo mismo, descubrir su vacuidad, la angustia que le pudre por d

entro.Y quin quiere an gobernar y quin an obedecer? Al ltimo hombre dejar de prltica, dice Nietzsche. Desembocaremos en el esquema ningn pastor y un solo rebao. decir, no ser ya un hombre supuestamente ejemplar, justo, sabio y virtuoso (que tampoco ha sido nunca as, la verdad) el que gobierne al resto, sino que lo har un nico Estado, que es nadie, aunque se ponga una cara distinta cada cuatro aos.

Todos quieren lo mismo, todos son iguales. S, la manada de borregos en que nos hemos convertido gracias a nuestras avanzadas sociedades, que uniforman las conciencias, gustos e ideas, todo ello unido a un fuerte individualismo egosta, es nuestra envidiable trayectoria despus de un puado de milenios sobre la Tierra. Antesel hombre era un esclavo al aire libre y ahora es libre en celdas. Y lo peor de todo es que nosotros mismos lo hemos querido, nos hemos colocadoel yugo: Danos ese ltimo hombre, Zaratustra ?gritaban?, haz de nosotros esos ltimo

hombres! El superhombre te lo regalamos! [...] Pero Zaratustra se entristeci y dijo a su corazn: No me entienden: no soy yo la boca para estos odos. Esto es verdadera profeca, y no El Apocalipsis o las predicciones meteorolgicas.

Lo abstracto o lo concreto.?Odio a la Humanidad, pero amo profundamente a una docena de sus componentes.

Analfabetismo secundario.?El servicio militar hoy se hace en las universidades.Para comprobarlo no hay ms que echar un vistazo al estado mental de la mayora de l


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os licenciados.

El baile de mscaras.?El que no est loco finge: est loco.

La emocin ms pura.?Generalmente es ms sincero el odio que el amor.

El mal menor.?Gobernar es ser injusto lo mejor posible.

Y slo del amor queda el veneno.?Casi todo elogio proviene de un odio reprimido. Casi todo elogio es un insulto camuflado.

Rer en serio.?La verdadera grandeza humana consiste en poder tomarse completamente en serio la vida y a la vez ser capaz de rerse de ella.

El que busca nunca encuentra.?Es siempre ms honrada la pregunta que la respuesta.

Ni Dios??Dios es nuestra mejor creacin y nosotros la peor suya. Pero algo de realtiene que haber en todo esto.

Sobre la historia.?Nietzsche: El mestizo hombre europeo ?un plebeyo bastante feo,en conjunto? necesita desde luego un disfraz: necesita la ciencia histrica comoguardarropa de disfraces.

T.W. Adorno: No hay historia universal que gue desde el salvaje al humanitario;pero s de la honda a la superbomba.

Cioran: Decir: "prefiero tal rgimen a tal otro" es flotar en lo vago; sera ms excto afirmar: "prefiero tal polica a tal otra". Pues la historia, en efecto, se reduce a una clasificacin de policas; porque de qu trata el historiador sino de la cocepcin del gendarme que ha tenido el hombre a travs de los tiempos?

Y entonces qu??Supongo que toda forma de vida realmente inteligente tarde o temprano ser presa del debate entre la vanagloria de su actividad y la nica certeza: suinsignificancia.

Imposible decirlo sin comillas.?La belleza es la dosis justa de siniestralidad.

La revolucin intil.?La revolucin, ah, la deseada revolucin. Escucho esa palabra y, ueno, trago saliva y condesciendo. Pero no sin matizaciones. A las revoluciones

se las tiene por cambios radicales pero en realidad son cambios dentro de lo mismo. Las revoluciones revuelven, que no es poco, voltean, reordenan, pero conservando siempre los mismos ingredientes del potingue. Aunque nos pese, revolver noes resolver. Y en el caso de las revoluciones polticas, stas siempre conservan lofundamental de la poltica misma: la jerarqua de mando. De modo que no son tan radicales, despus de todo. Para darse cuenta slo hace falta mirar las cosas al trasluzde los acontecimientos pasados. Dar la vuelta a la tortilla es seguir con la misma tortilla dada la vuelta. Y no quiero decir con esto que yo abogue por la inmovilidad: como deca Lichtenberg, es evidente que no puedo decir que nos ir mejor con un cambio, pero s que para mejorar debe haber un cambio. Pero sin olvidar quela realizacin prctica de los ideales ha sido siempre bastante defectuosa; o ?comosaba Brecht, que no fue precisamente un parao? que los planes son una cosa y lo que el enemigo te deja hacer es otra. Creer en la actividad libertaria presupone

que somos dueos de nuestras acciones, que podemos prever y controlar sus consecuencias y sus defectos, y eso yo ya no me lo trago ni con miel. Como casi siempre,estoy de acuerdo con Cioran: En este mundo nada est en su sitio, empezando por elmundo mismo; no hay que asombrarse, pues, del espectculo de la injusticia humana.Ya es tarde para la fe en los ideales, para creer en un justiciero final de laHistoria. Yo, y mira que me gustara, no veo valores en los que colgar el peso desesperanzado de mi accin. Y s, con todo, que si a alguna tarea me adscribo es a larevolucionaria, a ponerlo todo patas arriba, aunque no sea ms que en un radio deaccin de unos metros. Pero carezco de proyectos que hagan verosmil esa idea. En resumen, no tengo fe. Ya he dicho que lo ms que puede hacerse es desordenar o reord


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enar las cosas, pero el orden siempre sigue ah. Lo ms que cabe esperar, y por lo que se puede activar uno, es por una revolucin intil. Un cambio total, s, aunque estabocado al fracaso, que nos distraiga y haga vivir ?mientras dura? un poco ms implicados en este delirio. Pero nunca, pase lo que pase, identificar la esperanzacon la verdad. El anhelo de revolucin es inevitable, surge como demanda de nuestra condicin dehombres, y no puede abolirse ni superarse, tan slo darle una forma ms digna y aceptable a ojos de nuestras maltrechas mentes. No se puede resolver desde fuera unconflicto que no est fuera de nosotros. Lo cual no quiere decir que no haya fuera muchas cosas que resolver. Los hombres somos miserables por necesidad, pero tendemos a creernos miserables por accidente, deca Leopardi.

Nihilismo y accin.?El otro da, en la facultad, no s a razn de qu, pronunci el susvo 'universal' en presencia de un pseudomarxista que no ha ledo a Marx (y que encaso de hacerlo vete a saber qu entendera) y por poco no me lincha. Intent explicarme, puntualizar, concretar, pero me arrebat indignado la palabra espetndome a vozen grito ?y sin transicin alguna entre ambos temas; no s qu conexin mental le hizo elacionar una cosa con otra? que mis poemas eran propios de un poeta mediocre ypequeoburgus; tras lo cual hil sus argumentos aadiendo que yo era un conservador, ufacha, un reaccionario, un conformista y no s qu sandeces ms. Y no queriendo ponerme a la altura de su capacidad discursiva, de su volumen de voz y de su mariguanismo histrico, decid darle la razn como a un tonto, que al fin y al cabo era lo quems le importaba. De ese altercado proceden las siguientes reflexiones, las cuales, despus de to

do, ese impetuoso rojeras (que ms que ensalzar su causa, lo que hace es desprestigiarla con su defensa; que ahora exhibe pines del Che Guevara, exabruptos aprendidos y un atuendo intencionadamente descuidado, pero que en menos de un lustro probablemente se habr olvidado de todo ello), en caso de decidirme a comunicrselas,muy probablemente no entendera. Los universales no existen como tales, sino encarnados en hombres concretos.Digamos, pues, que lo universal es lo concreto de cada uno, y lo ms concreto de cada uno es nuestra subjetividad. Y la nica forma de escapar de la subjetividad ms oes a travs de lo ms extremadamente subjetivo que existe: no la razn (aunque supuestamente sea objetiva), sino la percepcin, de la que procede la emocin, que es lo que permite alcanzar esos universales concretos que establecen puentes entre nosotros. Y no politizando. La poltica es todo lo contrario; la poltica nos echa encima un nico canon a modo de lpida, y s, tambin nos comunica, pero al aplastarnos a to

os con el mismo peso. Y hablo de cualquier poltica. La poltica ofrece ramilletes de supuestas soluciones, pero en realidad las soluciones no se reciben sino que se hacen, se roban si es preciso. Mayor apologa a la accin que sta no cabe. Pero ?yesto es lo importante? accin sin plantilla, sin esquema. Lo sospechoso de las soluciones, dice Ferlosio, es que se encuentran siempre que se quiere. Por eso haytantas, y tan nulas. El mismo Marx dej dicho que el hombre que traza un programa de futuro es reaccionario. Y es que ?y al final va estar en lo cierto El Antoito? se hace camino al andar.

La mayor subversin.?La utilidad de la poesa, si la tiene, ni es inmediata ella misma ni tampoco lo es su fin. La poesa es un fin en s ?como quera Kant del hombre?, yno un medio. Ha sido precisamente tratar de liberarse de lo til y lo necesario,lo que ha elevado en algunos aspectos al hombre. No es verdad que la poesa nacier

a como algo til, sino que los primeros cabecillas la utilizaron como un modo de aunar conciencias y de darles una textura compacta. Pero hoy da esa funcin se la han apropiado hace mucho otros medios de expresin. La poesa ya no es un instrumento,o al menos no excesivamente eficaz. Y eso en cierto sentido es una gran noticia.

La mayor virtud de un medium, de un intermediario o de un intrprete es pasar desapercibido. El instrumento es un medio. Una herramienta sirve para algo. Peroel verdadero poeta o pensador no quiere servir, para nada. La mayor subversin esser intil.


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Adiestramiento y doma.?Nuestra enseanza superior masiva debe de ser un error. Esahora cuando ms universitarios hay y tambin cuando ms estpidos somos.

Ancilla mediocrium.?Asisto como oyente a algunas clases impartidas en la Facultad de Filosofa y llego a la conclusin de que la mayora de sus profesores llegan al estudio de los grandes pensadores no por el deslumbramiento sino por las condiciones laborales.

Su primer encuentro con los problemas filosficos (es decir, las grandes preguntas) parece de segunda mano: se da estudiando, entre libros, mediante las obrasde otros. A los cuales ?basta con dos dedos de frente? pueden llegar a comprender, reproducir y discutir.

Si sobresalen en estas actividades, la universidad les ofrece la posibilidadde medrar.

Resultado: la filosofa se convierte en el medio que les permite ganarse la vida y mantener a una familia.

Qu cabe esperar de sus ideas?

Lazing Around.?La quietud como forma de conocimiento.

aforismos miguel merino

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