1165 paco de lucia

2
entrevista Paco de Lucía Paco de Lucía 39 interviú UN DÍA, DE PRONTO TE DAS CUENTA DE QUE NUNCA LLEGARÁS A SER SUPERMAN” UN DÍA, DE PRONTO TE DAS CUENTA DE QUE NUNCA LLEGARÁS A SER SUPERMAN” JAVIER MENÉNDEZ FLORES FOTOS: PACO LLATA U sted es uno de los po- cos mitos que conti- núan en activo, cuando podría haberse retirado y vivir de las merecidas rentas. ¿Por qué razón sigue tocando? —Sí, podría estar viviendo de las rentas y tirado al solecito en una playa, que es lo que me gusta, pe- ro de pronto siento como una es- pecie de obligación para con mi cultura, con mi gente, con el mun- do del flamenco en general, que me hace seguir trabajando todavía con la misma ilusión que cuando empezaba. —Debe de resultarle frustrante seguir ahon- dando en su trabajo para tratar de abrir nuevas vías y que la gente no tenga en cuenta sus evoluciones y considere que ya ha dicho con su instrumen- to todo lo que tenía que decir. —Yo no trato de convencer a la gente de nada. Yo tengo mi propia pelea, mi camino, y sé lo que quiero y a dónde voy. Y mi meta, si es que la tengo, pues no soy yo hombre de metas, es tratar de seguir vivo, de seguir diciendo cosas, e intentar llevar la música a lo máximo que yo pueda dar de sí. La opinión de los otros, casi, casi, de verdad, no me importa. —Han transcurrido ocho años desde que sacase a la luz una obra con nuevas composicio- nes. Ahora lo hace con ‘Luzía’, un bello trabajo en honor a su difunta madre. ¿Qué noveda- des aporta este disco? —No te puedo decir, porque es un disco que está recién salido. Cuan- do una composición está tan cerca- na en el tiempo, no tengo perspecti- va de la misma. La tengo tan en el corazón que a veces es un proble- ma, y gordo. Me gustaría a veces ser otro para poder opinar acerca de lo que acabo de hacer. Pierdo por completo la objetividad. Por varias razones. En primer lugar, por la ne- cesidad de que sea muy bueno, que a veces te hace creértelo a ti mismo, y también porque, como convives Hablar de él es hacerlo ineludiblemente de la guitarra española llevada a los límites de la sublimidad, de las manos que con más rapidez –y con mayor sentimiento– han recorrido y recorren la longitud total de un mástil, de la última leyenda viva del flamenco. Francisco Sánchez Gómez, conocido en todo el mundo como Paco de Lucía (Algeciras, Cádiz, 1947), presentó, después de ocho años sin sacar un disco con composiciones nuevas, el álbum ‘Luzía’, un impresionante trabajo en el que se puede apreciar la plena madurez y maestría del ‘tocaor’ más universal de todos los tiempos. Hablar de él es hacerlo ineludiblemente de la guitarra española llevada a los límites de la sublimidad, de las manos que con más rapidez –y con mayor sentimiento– han recorrido y recorren la longitud total de un mástil, de la última leyenda viva del flamenco. Francisco Sánchez Gómez, conocido en todo el mundo como Paco de Lucía (Algeciras, Cádiz, 1947), presentó, después de ocho años sin sacar un disco con composiciones nuevas, el álbum ‘Luzía’, un impresionante trabajo en el que se puede apreciar la plena madurez y maestría del ‘tocaor’ más universal de todos los tiempos. 38 interviú 38-41 paco de lucia 20/8/98 18:43 Página 38

Upload: albertogayo

Post on 28-Jul-2015

628 views

Category:

Entertainment & Humor


13 download

TRANSCRIPT

Page 1: 1165 paco de lucia

entrevista

Paco de Lucía

Paco deLucía

39interviú

UN DÍA, DE PRONTO TE DAS CUENTADE QUE NUNCA LLEGARÁS A SER SUPERMAN”

UN DÍA, DE PRONTO TE DAS CUENTADE QUE NUNCA LLEGARÁS A SER SUPERMAN”

““

JAVIER MENÉNDEZ FLORES

FOTOS: PACO LLATA

Usted es uno de los po-cos mitos que conti-núan en activo, cuando

podría haberse retirado y vivirde las merecidas rentas. ¿Porqué razón sigue tocando? —Sí, podría estar viviendo de lasrentas y tirado al solecito en unaplaya, que es lo que me gusta, pe-ro de pronto siento como una es-pecie de obligación para con micultura, con mi gente, con el mun-do del flamenco en general, queme hace seguir trabajando todavíacon la misma ilusión que cuando

empezaba.—Debe de resultarle

frustrante seguir ahon-dando en su trabajopara tratar de abrirnuevas vías y que lagente no tenga en

cuenta sus evolucionesy considere que ya ha

dicho con su instrumen-to todo lo que tenía que

decir.—Yo no trato de convencer a

la gente de nada. Yo tengo mipropia pelea, mi camino, y sé lo

que quiero y a dónde voy. Y mimeta, si es que la tengo, pues nosoy yo hombre de metas, es tratar

de seguir vivo, de seguir diciendocosas, e intentar llevar la música alo máximo que yo pueda dar de sí.La opinión de los otros, casi, casi,de verdad, no me importa.—Han transcurrido ocho añosdesde que sacase a la luz unaobra con nuevas composicio-nes. Ahora lo hace con ‘Luzía’,un bello trabajo en honor a sudifunta madre. ¿Qué noveda-des aporta este disco?—No te puedo decir, porque es undisco que está recién salido. Cuan-do una composición está tan cerca-na en el tiempo, no tengo perspecti-va de la misma. La tengo tan en elcorazón que a veces es un proble-ma, y gordo. Me gustaría a vecesser otro para poder opinar acerca delo que acabo de hacer. Pierdo porcompleto la objetividad. Por variasrazones. En primer lugar, por la ne-cesidad de que sea muy bueno, quea veces te hace creértelo a ti mismo,y también porque, como convives

Hablar de él es hacerlo ineludiblemente de laguitarra española llevada a los límites de lasublimidad, de las manos que con másrapidez –y con mayor sentimiento– hanrecorrido y recorren la longitud total de unmástil, de la última leyenda viva del flamenco.Francisco Sánchez Gómez, conocido en todoel mundo como Paco de Lucía (Algeciras,Cádiz, 1947), presentó, después de ochoaños sin sacar un disco con composicionesnuevas, el álbum ‘Luzía’, un impresionantetrabajo en el que se puede apreciar la plenamadurez y maestría del ‘tocaor’ más universalde todos los tiempos.

Hablar de él es hacerlo ineludiblemente de laguitarra española llevada a los límites de lasublimidad, de las manos que con másrapidez –y con mayor sentimiento– hanrecorrido y recorren la longitud total de unmástil, de la última leyenda viva del flamenco.Francisco Sánchez Gómez, conocido en todoel mundo como Paco de Lucía (Algeciras,Cádiz, 1947), presentó, después de ochoaños sin sacar un disco con composicionesnuevas, el álbum ‘Luzía’, un impresionantetrabajo en el que se puede apreciar la plenamadurez y maestría del ‘tocaor’ más universalde todos los tiempos. ▲

38 interviú

38-41 paco de lucia 20/8/98 18:43 Página 38

Page 2: 1165 paco de lucia

40 interviú 41interviú

—La guitarra, que esmujer, le ama a ustedquizá mucho más de loque haya amado nunca aotro hombre. A pesar deeso, ¿le fue alguna vezinfiel?—Cada día. Cada díame pone los cuernos.Creo que estoy bien demanos, que estoybrillante, y de prontosalgo al escenario y meequivoco.—¿Cuánto tiemponecesitó su mujer paradejar de sentir celos de suguitarra?—Yo creo que lasmujeres siempre tienencelos de las guitarras.Cuando uno toca uninstrumento como yo lohago, es tanapasionado que lasmujeres se mosquean.Todas.—¿Con qué otroinstrumento le pondría loscuernos a la guitarra?—Con la voz.—¿Cuál de todas las notasde la escala musical es lamás triste?—Las notas están alservicio de la emoción.La tristeza o la alegríaestán dentro de ti, lasnotas son unaherramienta, como laspalabras.—¿Existe alguna

especialmente traidora?—Traidora... Noexactamente. Lasnotas, ya te digo, soncomo las palabras.Cuando las juntasdicen cosas, pero unasola no dice nada.—¿Existe algún sonidoque pueda salirde una guitarraque usteddesconozca?—Sí, claro;muchos,muchos.—¿Cómo seconsigue vivircon normalidadsabiendo que sees una leyenda?—Es muy fácil.Yo sé lo quesoy, con todosmis defectos,de qué piecojeo, lo queaún me quedapor aprender, ysé que soy unapersonanormal que hadedicadomuchas horasy muchos díasde su vida aaprender, eso es todo.—¿Qué es lo másimportante que le haenseñado la vida?—Respetar a la gente, irderecho, ser honesto.

No ‘guindarle’ a nadie.—¿Hay algo a lo que letenga miedo?—A la estupidez. A lafalta de coherencia.—¿Qué daría por volver apasar una tarde conCamarón?—Daría mucho, mucho.

—¿Qué es lo que buscaaún Paco de Lucía?—Creo que elreconocimiento, y quelo que haga llegue deverdad a la gente.

con esa música, pues ya no te sor-prende. Y la sorpresa es muy im-portante a la hora de dar un valor.Siento que es un disco en el queme he dejado sangre y muchas ho-ras de vida. Pero no más que conlos otros. Cada composición es unparto dolorosísimo. —Después de coquetear yalimentarse durante años de

otros muchos estilos,como el jazz, ha reto-mado sus raíces: elflamenco puro y duro.¿Es el retorno a losorígenes algo por loque, tarde o tempra-no, pasan todos losartistas? —Nunca perdí mis raíces,no es retomar. Yo nuncadejé de ser lo que soy.Quizá la vena flamenca síque esté algo más acusadaen este disco que en otros.Pero eso se debe a que és-te es un tipo de disco quesuelo hacer de vez encuando desde mis inicios.Experimento para apren-der y para crecer comomúsico, y cuando tengoconceptos e ideas nuevas,pues hago ese disco fla-menco en el que incorpo-rar las nuevas aportacio-nes a la idea base. Yo ten-go claro que lo que soy esun guitarrista de flamen-co, que lo que siempre hequerido ser es un guita-

rrista de flamenco, pero con cu-riosidad, con inquietud por saberqué es lo que hace otra gente, có-mo se toca en otros estilos, y, dealguna manera, trato de aprender,ya que nunca fui a la escuela a es-tudiar armonía ni música, miran-do a los otros. Pero sí, pienso que

todo artista acaba volviendo a losorígenes.—No obstante, hasta los pu-ristas parecen haberle respe-tado desde siempre sus es-carceos.—No siempre, no. En mis inicios,cuando comenzaba a hacer “tonte-rías”, como ellos decían, no eraaceptado. El tiempo es el que ha di-cho que sí. Lo que pasa es que haceya tanto de eso, que parece que heestado considerado desde siempre,y nada más lejos.—¿Este disco confirma su ple-na madurez como artista?—No sé muy bien dónde está lamadurez, si yo soy o estoy lo sufi-cientemente maduro. Pienso quetodavía hay años por delante.—¿Se podría definir ‘Luzía’ co-mo un disco más humilde quetodos los anteriores?—Posiblemente, sí. Quizá sea lahumildad que te dan los años, el sa-ber que ya no vas a llegar a ser ‘Su-perman’. Porque hay una edad enla que crees que puedes llegar aserlo, pero un día, de pronto, te dascuenta de que no, de que nunca lle-garás a ser ‘Superman’. Y no pasanada. Así son las cosas.—Después de este disco, enel que se ha puesto, segúnsus propias palabras, a prue-ba como ser humano y comoartista, ¿cuál será el siguien-te paso en su carrera? ¿Vol-verá a la experimentación?—A mí me gustaría seguir en lasraíces, hacer discos flamencos, na-da más que discos flamencos, perono sé todavía muy bien qué haré. —¿La experimentación tieneun límite o éste está en elser humano?—Es el ser humano quien lo tie-ne. Llega un día en que no da yamás de sí. El límite está hasta

donde llegue tu energía, tu capaci-dad y, sobre todo, tus ganas. Perosiempre queda en uno el afán deseguir creciendo, y esa es la luchacontra el tiempo, contra la falta deenergía y estímulo, de salud. Yo,si la salud me acompaña, seguirésiempre en esto. Quisiera morir-me con las botas puestas.—Por primera vez en su vidase ha atrevido a cantar enuno de sus discos, en unarondeña dedicada a quienfue su compañero e íntimoamigo, Camarón. ¿Le influyóa la hora de hacerlo el he-cho de que la canción estu-viese dedicada a él?—Justamente. Yo al principio nopensaba cantarla, porque a mísiempre me ha gustado cantar, perome da mucha vergüenza hacerlo,por la simple razón de que no sé, ytengo además un gran sentido delridículo. Puse mi voz como refe-rencia para que luego un cantaorprofesional la interpretara bien ybonita. Pero al escuchar mi voz, medi cuenta de que era mucho mássincera que la que cualquier otrapersona le hubiese puesto, que loharía mucho mejor que yo, perfec-to, que estaría muy bien cantada,pero que se alejaría del sentimientoque yo le podía transmitir. Era unacuestión de ser honesto y auténticoa la hora de hacerle un homenaje aalguien a quien yo quise tanto.—¿Vislumbra en el actualpanorama de cantaores a al-guien que pueda suceder aCamarón?—Sí. Hay gente que canta muybien, chavales que nacieron oyendoa Camarón y su técnica es equipa-rable a la suya. Técnicamente. Perono son él. Camarón fue un creador,rompió una manera de cantar e im-puso la propia, creando escuela. No

obstante, hay gente muy buena hoyen día, como Duquende, Potito yRemedios Amaya.—¿Y qué le parece eso delflamenco-fusión? ¿Le gustangrupos como Ketama?—Ketama es un grupo que me gus-ta mucho, sí, tienen buen gusto. Jo-semi, Antonio y demás son gentecon muy buen gusto, con gran sen-tido del ritmo y de la musicalidad...y detrás de lo que hacen existe unclaro deje flamenco, y flamenco delbueno. Lo que pasa es que son in-quietos, jóvenes, y están tratandode hacer otro tipo de música, deampliar los límites del flamenco.—¿Ha llegado a conocer aalgún guitarrista que le ha-ya hecho reflexionar y de-cir: “Aún me queda muchopor aprender”?—Continuamente. Hay mucho bi-charraco por ahí. Esos guitarristasde jazz que saben todas esas armo-nías, y que improvisan de aquellamanera. Sobre todo es gente quesabe mucha armonía, porque la hanaprendido yendo a la escuela, y co-nocen el sistema con el que se hacela música. A mí, que toco de oído,me cuesta adivinarlo horas y horas,con un esfuerzo enorme.—¿De cuál de sus anteriorestrabajos se siente usted mássatisfecho?—De ninguno. Siempre estoy tra-

tando de hacer ese disco con el quede pronto digan algo así como “to-có el cielo con las manos”.—¿Es cierto que no conservaninguno de sus discos?—Sí, es cierto. Sufro tanto cuandolos estoy haciendo, tantísimo, queluego no quiero ni verlos. Porqueademás estaría pendiente de ver eldefecto, de mejorarlos continua-mente, y me acabaría atormentando.— Como artista, ¿es supersti-cioso?—No. Pero hay un toque y un can-te en el flamenco, cuyo nombre noquiero pronunciar, por eso lo llamosiempre “El Innombrable”, que meda bastante miedo cuando alguienlo canta o lo toca. En Santiago deChile, a los dos segundos de ponerun disco en el que sonó “El Innom-brable”, surgió un terremoto. Te lojuro. Y dije, a grito pelado: “¡Quitaeso, coño, quítalo...!”. (Risas).—¿Cuántas horas al día le de-dica a la guitarra?—Cuando tengo que trabajar ocomponer, doce horas. El resto deltiempo no toco. No soy un guitarris-ta de estar estudiando todo el día.—¿Cuál ha sido el mayor pe-riodo que ha pasado sin to-car la guitarra?—Tres meses, quizá cuatro. Luegote cuesta bastante recuperar la for-ma, pero al mismo tiempo te lim-pia. Te purifica.

entrevista

así es

El guitarrista,que porprimera vezse ha atrevidoa cantar enun disco, sesienterepleto deenergíaspara seguirtocando.

“Sufro tanto cuando hago un disco que luego no quiero ni verlos”“Daría mucho por pasar una tarde con Camarón” “Trato de aprender

mirando a otros, ya que nunca fui a tomar clases de música”Paco de Lucía

Paco de Lucía

38-41 paco de lucia 20/8/98 18:43 Página 40